Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Y, sin más miramientos, bajó del roble y a empujón<br />
limpio puso en fila a amigos y enemigos y los clasificó como<br />
le dio la gana: Blanca Pimentón, que era grande como una<br />
adolescente, tenía derecho al primer puesto porque ella sola<br />
levantaba la mesa de su profesor con libros y todo. Detrás<br />
colocó a Vicente Limón, capitán del equipo de fútbol y<br />
sobrino del alcalde, un chico muy poderoso.<br />
—Yo soy más fuerte que Vicente Limón. Le echo un<br />
pulso y veréis… —protestó Gabriel Vinagre.<br />
Inmediatamente a Vinagre le cayó una colleja bien dada<br />
de Eduardo Picante.<br />
—Podríamos votar, no tienes por qué decidirlo tú solo<br />
—comentó Cristina Laurel.<br />
—Ni votaciones ni pamplinas —gritó Picante—, tengo<br />
once años y mando aquí. Además, tú no te quejes, Cristina,<br />
que te he puesto más o menos en la mitad de la fila.<br />
—Ya. Ni fu ni fa… —suspiró Cristina decepcionada.<br />
Violeta Colorante, la hermana de la dueña del Bar<br />
Dulzón, estaba satisfecha con los resultados. No eran para<br />
dar alegres saltos de acróbata, pero sí podía sentir alivio:<br />
había quedado en un honroso séptimo puesto.<br />
36