Corresponsables 23 - Jesuitas del Perú

editorial
No basta con recordar
Hace unas semanas se celebró un año de la entrega del Informe
Final de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación. Podría ser
fácil repetir en esta columna el número de muertos producto del
conflicto armado, enumerar las zonas afectadas, recordar que
hasta ahora no se han realizado acciones concretas para poner
en práctica al menos las recomendaciones más urgentes y necesarias
que dio tal Informe. No basta con eso, no basta decir algo
que la gran mayoría de peruanos quizá ya ha escuchado, como
quien oye la misma canción todos los días en el auto camino al
trabajo. Y eso, muchas veces, cansa.
Han pasado 365 días desde que ese Informe nos hizo redescubrir
el Perú. Sin embargo, al amanecer del 29 de agosto del 2004 sólo
seguimos viendo oscuridad, confusión, indiferencia, desprecio,
racismo y más racismo. Parece que los peruanos seguimos siendo
los mismos de la década de los ochentas que sólo reaccionamos
cuando estalla una bomba al costado de la casa. Da la impresión
que estamos esperando a que se repita la violencia para actuar.
Es hora que no sólo reaccionemos sino que aprendamos a hacerlo.
Y eso indudablemente pasa por sensibilizarnos. Introducir
realmente en nuestro imaginario colectivo ese sentimiento que
nos hará entender, con la herida en el cuerpo, todo lo que sufrieron
aquellas personas que, por ser humildes y sencillas, se
convirtieron en víctimas inocentes.
La RAI, en coherencia con la misión asumida en nuestro III Encuentro
Nacional 2004 de ser sujeto apostólico de espiritualidad
ignaciana con una presencia creíble y esperanzadora como
ciudadanos cristianos, está desarrollando diversas acciones
orientadas a la concreción de nuestro compromiso de impulsar
procesos de reconciliación y ejercicio de ciudadanía de pleno
derecho. Entre las cuales cabe destacar su articulación con el
Movimiento Ciudadano Para que no se repita a fin de expresar
al Estado y a la sociedad civil en su conjunto que aquí estamos,
trabajando por mantener viva la memoria y activo nuestro deseo
de transformación y humanización social en nuestro país.
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Edición:
Compañía de Jesús. Provincia del Perú
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Consejo Editorial:
Linda Egúsquiza
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Javier Uriarte, sj.
Kurth Mendoza Gutiérrez
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Desde esta columna valoramos el enorme e incansable esfuerzo
del Movimiento Para que no se repita por seguir rescatando las
tareas que nos dejó la Comisión de la Verdad. No obstante, para
la gran mayoría de peruanos no ha pasado nada. Los pocos
que hemos acogido el interés por la CVR seguimos siendo los
mismos que vimos cómo Salomón Lerner, el ilustre Presidente
de la CVR, entregó en manos del Presidente Alejandro Toledo la
verdad de nuestra historia. Quizá el gran error de la Comisión fue
no haber llevado a los peruanos más allá de la simple línea de la
información. Faltó una estrategia real de comunicación para que
esa verdad no sólo sea escuchada, leída o vista, sino asumida
en nuestras vidas como tal.
A pesar de todo ello, el Perú no está derrotado. Parafraseando
a Jorge Basadre, el Perú es más grande que sus verdades,
sólo que primero tenemos que aceptarlas y luego empezar a
crecer juntos. La tarea nos sigue comprometiendo como RAI
a seguir extendiendo nuestras redes para no seguir coreando
lo que ya sabemos, sino hacer el mayor esfuerzo y obligar al
Estado y órganos competentes a no dejar que la historia siga
pasando sin que nos detengamos, pensemos y corrijamos
los errores.
El Consejo Editorial

Vigilia de Pentecostés
Los miembros de la RAI se dieron cita el sábado 29 de mayo en el Colegio
Chalet de Chorrillos para compartir una vigilia con ocasión del inicio del tiempo
de Pentecostés. Estuvo presente el Padre Gastón Garatea, ex comisionado de
la Comisión de la Verdad y Reconciliación. Asistieron delegaciones de la CVXs
de San Pedro, Desamparados, Fátima, Siempre, y otros grupos. Los asistentes
caminaron con velas encendidas hacia la Casa de la Memoria, lugar donde se
encuentra la muestra fotográfica de la Comisión de la Verdad «Yuyanapac: Para
recordar». “Corresponsables” recogió algunos testimonios de los asistentes
a esta velada de esperanza.
“Entré en la iglesia y sentí que me encontraba en un ambiente que me
causaba mucha admiración por estar rodeado de personas que trabajaban
por difundir la defensa del ser humano en todas sus dimensiones. Gente
que hace posible que la labor realizada por la Comisión de la Verdad y
Reconciliación no pase al olvido y sus recomendaciones sean asimiladas
con conciencia por todos los peruanos.
Al margen de mis discrepancias o coincidencias, lo que tenía claro
era que le daba gracias a Cristo por haberme mostrado su presencia a
través de nuestra historia. Sentía cuán generoso había sido conmigo.
De pronto comprendí que siempre todo acontece a favor de lo que Dios
ama. Él nos ama sin moralismos, sin exigencias y sin juzgarnos. Asumí
la importancia de salvaguardar la vida sin permitir que ninguna forma
de violencia la dañe.”
Elvis Guerrero
Alumno de la Pontificia Universidad Católica del Perú.
“Tuve el gozo de participar desde la organización del evento, pero fue
mayor mi emoción al comprobar la acción del Espíritu que impulsaba a
los miembros del equipo a entregar lo mejor de cada uno, a las diversas
instituciones que nos apoyaron para llevarlo a cabo; pero, sobre todo, a la
cantidad de personas que se congregaron con el solo deseo de sentir con
la Iglesia y con el país. Significó algo especial orar por nuestras hermanas
y hermanos que han sufrido las consecuencias de la violencia política y
comprometernos en una tarea común de reconstitución del tejido social
desde el ejercicio de la reparación real, concreta, como expresión de
justicia. El orar en la capilla del Chalet de Chorrillos, el caminar con
estos sentimientos, los cantos y las invocaciones no eran otra cosa que
la visibilidad de la acción del Espíritu del Señor: cada uno era un ser
único, venía de una realidad y de un trabajo institucional diverso; sin
embargo, todos hablábamos el mismo idioma, el de la búsqueda de
caminos de reconciliación, el de la unidad en la diversidad, el de crecer
como cuerpo apostólico. Iniciamos una peregrinación en Pentecostés
que debe prolongarse hasta que se oigan todas las voces.”
Ana María Campos. Equipo Nacional RAI
“La Vigilia significó una experiencia de caminar en busca del otro, del que
está en silencio, del que es presencia y al que debo mucho. Me impactó
estar cerca de tanta historia, que es al mismo tiempo mi historia, pero que
necesito reconocer desde el Corazón”.
Anamaría Cáceres, rscj, RAI LIMA.
“Esta noche, previa a la celebración de la venida del Espíritu Santo con
todos sus dones, nos ha servido para reflexionar acerca de nuestra presencia
como ciudadanos y cristianos en la vida de nuestro país, especialmente
en el momento histórico que ha sido la presentación del Informe de la
Comisión de la Verdad y Reconciliación.
Nuestra participación recién empieza. Tratemos de ser transmisores
de esperanza y justicia con nuestra vida coherente, y sobre todo
pidiéndole al Señor que nos ayude a iniciar en nosotros el cambio
que deseamos para nuestro país.”
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La Enfermería Jesuita del Perú
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Desde la época de los «primeros compañeros»,
cuidar la salud de cada jesuita siempre ha sido importante
para la Compañía. A pesar de que Ignacio,
después de su conversión, maltrataba su salud con
grandes penitencias, luego fue comprendiendo
el valor del cuidado de la salud personal para la
eficacia apostólica de todo jesuita. La Enfermería
Jesuita del Perú es una muestra de la continuidad
histórica de ello.
Historia
La Enfermería fue creada
en 1990, siendo Provincial
el P. Adolfo Franco.
Para trabajar el proyecto
se nombró una comisión conformada
por los PP. Juan Julio
Wicht, Alfredo del Risco, y los
Hnos. Diego Diaz y Sixto Coronel.
Desde ese tiempo se pensó
en un proyecto de provincia para
prestar servicios de salud tanto a
los jesuitas que se encuentran en
actividad como a los que están
retirados o jubilados. Con el
tiempo esa idea se ha mantenido
pues la cobertura no sólo es para
los que están imposibilitados
de su trabajo apostólico, sino
también para aquellos que pasajeramente
lo necesitan.
Se decidió que se ubicara en la
Comunidad de Nuestra Señora
de Fátima, en Miraflores, para que
los enfermos se sientan acompañados
por otros compañeros en
actividad apostólica. Al mismo
tiempo, por ser un lugar céntrico
y de fácil acceso para las visitas
de jesuitas y familiares.
De 1990 a 1997, el P. Alfredo
del Risco ocupó el cargo de Prefecto
de Salud y responsable de
la Enfermería. En palabras del
Hno. Sixto Coronel, quien hoy
ocupa ese cargo: “Fue Alfredo
quien impulsó y dinamizó la
construcción de la Enfermería y
el cuidado de la salud de muchos
jesuitas.”
Infraestructura
En los primeros doce años, la
Enfermería funcionó con catorce
habitaciones. Al aumentar
la demanda de atenciones
médicas, hace dos años, se
hizo una ampliación a nueve
cuartos más. La mayoría de las
habitaciones han sido ocupadas
permanentemente por sacerdotes
y hermanos mayores. Esta
última construcción se ejecutó
cuando el P. Ernesto Cavassa era
aún Provincial del Perú.
En la actualidad, la Enfermería
cuenta con una sala de procedimientos
médicos (tópico), un
consultorio dental, un botiquín,
un comedor para todos los
pacientes, una sala de descanso
y entretenimiento, y una
lavandería.
Encabezados por el Hno. Sixto
Coronel, el personal está conformado
por: Jessica García,
Rafael Morales y Richard Ferrer
(Licenciados en Enfermería);
Dalguer Oyola, Renzo Saavedra,
Antonio Rojas, César Vélez
y Neiser Cabrera (auxiliares).
Asimismo, se cuenta con la
colaboración de los Doctores
José Manco (médico clínico),
José Mejía (patólogo clínico),
Joel Cuadrado (dentista);
también figuran una tecnóloga
en rehabilitación, Srta. Marlene
Samaniego, y la Sra. Nely

López de Canales que ayuda
en diversas tareas. La Sra. Esperanza
Ormeño y los jóvenes
Luis Sedano y Ronald Cabrera
se encargan del mantenimiento
de las instalaciones.
El cuidado espiritual
Además de la atención médica
que reciben los enfermos,
ellos aún mantienen su rutina
como jesuitas. Luego del aseo
matinal, todos van a la misa
que se realiza en la Capilla de
la Enfermería a las 7:30 am.
Después del desayuno, se pasa
al acompañamiento en sus limitaciones
y dependencias. Por
la tarde, después del almuerzo
y descanso, se tiene la oración
comunitaria y el rezo del rosario
como fortalecimiento de
los Ejercicios Espirituales en la
vida diaria.
El Hno. Sixto Coronel
sj. responde sobre
su labor como responsable
del cuidado de la salud en la
Provincia.
¿Cuál es el fin de la Enfermería en la Compañía
de Jesús?
Nuestras Constituciones y Normas Complementarias
nos invitan a cuidar con evangélica
solicitud a nuestros enfermos y ancianos que
esperan de nosotros cariño y acogida. Ellos
continúan siendo fecundos y nos animan
mediante el ejemplo de su filial y confiada
entrega a Dios, a pesar de sus enfermedades o
limitaciones físicas.
¿Cuáles son las dificultades que se le presentan
a Ud. al administrar un lugar que, por
decirlo de algún modo, es etapa final para
algunos jesuitas o paso previo al encuentro
con el Padre?
No es nada fácil atender a personas con enfermedades.
La persona enferma necesita de
muchas cosas: cercanía, tiempo, etc. Como
comprenderás, asistir a los propios compañeros
jesuitas en su última etapa de la vida, como tú
dices, me llena el espíritu; pero también tengo
sentimientos encontrados porque siempre
es una pérdida para la Compañía, aunque es
una ganancia para Dios Padre. Tengo grandes
recuerdos de los que partieron de este mundo.
Hno. Sixto Coronel
sj, Prefecto
de la Salud de la
Provincia.
Mucho que agradecer a los que aún me apoyan
para poder seguir cumpliendo esta misión.
¿Cuáles son los retos o desafíos que se le presentan
ahora?
La atención de enfermería holística o tratamiento
generalizado teniendo en cuenta la interacción
entre varias afecciones. Tener un buen personal
de salud capacitado en gerontología y especializado
en geriatría. Por otro lado, mantener un
respeto total a los pacientes como religiosos, me
refiero a valores, sentimientos, etc. Trabajar por
la mayor participación en el desarrollo de la vida
comunitaria y, por último, dar mayor atención
a los problemas según la solicitud del paciente
adulto mayor jesuita.
5

“El Perú es un país que no q
Ha transcurrido un año desde que la Comisión
de la Verdad y la Reconciliación
entregó su Informe Final al Estado
peruano y a la sociedad. El P. Gastón
Garatea, ex comisionado, habla
en esta entrevista sobre el panorama
actual de las consecuencias
del Informe. La reconciliación aparece
difusa en el futuro, afirma el
sacerdote.
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uie-reconciliarse”
Entrevista: Manuel Alomía Desmé
Después de emitirse el Informe Final de la Comisión de la Verdad
hubo respuestas distintas tanto del gobierno como de la sociedad.
¿Qué opinión te merece el panorama actual?
La sociedad ha respondido de diversas maneras. La clase alta o
la clase con poder no ha cambiado la postura que tuvo durante el
conflicto armado. Le dio y continúa dándole la espalda al país, no
quiere saber nada de la CVR. También tenemos a la clase media
itinerante, sociedad provinciana, que sí se preocupa por lo que hizo
la CVR. Y está la popular, que fue la más afectada por el fenómeno
del terrorismo. Esta clase valora todo este esfuerzo y ha
participado trabajando en la Comisión, y sienten que esto puede
ser un primer medio de reparación. Después tienes al gobierno y al
Estado que han mostrado algunos gestos. Creo que esto es un largo
proceso y el Estado peruano va a dar los primeros frutos en tres o
cuatro años.
Te has referido a diferentes sectores sociales. ¿Qué formas de
proceder plantearías ante un público tan diverso para transmitir
lo que pasó?
Es necesario mostrarle pedagógicamente a la gente qué fue lo que
pasó. Hacerles ver cómo ese conflicto no fue de reivindicación social,
sino un conflicto armado político, una lucha por el poder.
Se respira todavía un ambiente de falta de aceptación y
desconfianza frente al Informe. ¿Qué caminos nos tocaría
recorrer ahora?
Yo creo que el Perú es un país que no quiere reconciliarse porque
reconciliarse significa que has pecado y tienes que volver
a recomponer y hacer nuevos pactos de convivencia. Y nuestro
país no lo está haciendo aún.
Un país como el nuestro tiene unas grietas terribles. Existen
divisiones entre los peruanos. No tenemos la misma raza, lengua,
costumbres. El Perú es un país que se desprecia. Los cinco
distritos que gobiernan el Perú son: La Molina, Miraflores, San
Isidro, San Borja y Surco. Villa el Salvador no domina nada.
Tú sientes que las cosas importan para unos y para otros no. La
gente se molesta porque para ir a la playa hay que pasar por unos
barrios que molestan. Quieres salir a la carretera del sur y tienes
que pasar por la curva, casas feas, horribles. En este contexto
hay cosas que no se quieren ver. En verdad, la mayoría del Perú
es así, pobre, humilde, sencilla, compañera.
ha salido a visitar casas en los lugares pobres y alejados como
Huancavelica o Ayacucho es mínimo.
¿Como ciudadanos de qué manera nos toca hacer gestos de
reparación frente a la CVR?
Yo creo que más que gestos de reparación hay que hacer gestos de
solidaridad. Si bien la Comisión de la Verdad ya no existe, el Informe
sí existe, sigue hablando, sigue molestando. Hay que ser solidarios
con lo que dice porque al final nos estamos acercando a esa gente
que necesita de nosotros, que necesita que forcemos al Estado y a la
sociedad civil para que se hagan las reparaciones necesarias.
¿A los organismos de Iglesia, cómo les tocaría hacer estas reparaciones?
Desde la Iglesia, la mejor manera de reparar es acercarse y hablar con
las personas. Eso es lo que la gente necesita más, que se le hable, que
se le tome en serio, que no se le utilice. Acabemos con los personajes
de Iglesia que ordenan a la gente lo que hay que hacer.
¿Qué desafíos nos quedan por enfrentar, espacios que aprovechar,
tareas concretas por hacer?
Mientras haya gente viva habrá esperanza. La experiencia de una
guerra como la de sendero es una experiencia ascendente. Tenemos
secuelas espantosas que los medios de comunicación no han tomado
en serio, una de ellas son las pandillas. Los grupos de pandilleros no
surgen de casualidad. Ellos llevan una protesta dentro porque han
sufrido la guerra, y han perdido a su padre y a su madre.
Me parece provechoso que algunas parroquias comiencen a tomar
esto en serio. También hay muchas ONGs que están trabajando en
el tema. Es necesario que coordinemos y no que cada uno vaya
por su lado.
Ahora que no existe CVR formalmente, ¿cuál es la instancia de
coordinación para los peruanos?
Es el movimiento “Para que no se repita”. Es una institución seria
de profesionales cultos que está haciendo un enorme esfuerzo por
seguir rescatando la labor y la problemática que nos develó la Comisión
de la Verdad.
La no aceptación del Informe de la CVR es la no aceptación de la
realidad, y en parte eso tiene algo de razón porque estás hablando
de algo que no conoces y no sabes. El porcentaje de gente que
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A UN AÑO DEL
Imágenes del 1º Aniversario del Informe de la CVR, Organizado por el Movimiento «Para que no se repita», 27 de agosto del 2004.
Por Pilar Romaní
La problemática que nos
reveló el Informe Final
de la Comisión de la
Verdad sobre lo acontecido en
nuestro país durante los veinte
años de violencia, nos hizo darnos
cuenta cuán de espaldas habíamos
vivido al sufrimiento de
tantos hermanos inocentes que
fueron víctimas de ese terror.
Como ciudadanos cristianos
tenemos el compromiso de
difundir el Informe; sensibilizarnos
con lo que nos dice,
buscando medios para apoyar
las recomendaciones y reparaciones.
Pero junto con ello es
necesario trabajar para hacer
que sea puesto en la agenda
pública, pues lamentablemente
a pesar del tiempo transcurrido
se ha hecho muy poco desde
el gobierno a todos los niveles
(central, regional, municipal,
local).
En este sentido, el movimiento
ciudadano “Para que no se
repita” es una organización que
desde hace un año viene articulando
a diversas redes (como
la RAI), instituciones (como la
CVX) y personas de la sociedad
civil en el empeño común de
asumir los retos abiertos por la
CVR y trabajar para resolver
las situaciones que originaron
o facilitaron el conflicto armado
interno.
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Sé que aún somos minoría, por
eso es necesario seguir contagiando
a otros hermanos y
hermanas como Red Apostólica
Ignaciana a unir esfuerzos en
esta urgente tarea. Tengo mucha
esperanza que poco a poco, con
la ayuda de nuestro Dios de la
vida, lo conseguiremos. Siento
que el trabajo compartido con
“Para que no se repita” es un
camino abierto para la RAI, que
nos permitirá crecer en nuestra

INFORME DE LA
Momentos de una caminata que
aún no termina
Por Jairo Rivas
6:45 p.m. La policía no aparece, pero igual empezamos la caminata tomando la avenida Wilson ante
la sorpresa de los transeúntes y los reclamos de los conductores. Varios corremos de un lado a otros
coordinando el desplazamiento. Nos sentimos confiados: es nuestra marcha, estamos expresando con
nuestra presencia que seguimos buscando la verdad y la justicia, que no permitiremos el olvido ni la
impunidad.
7:15 p.m. Llegamos al Paseo de los Héroes Navales, frente al Palacio de Justicia. Hay mucha gente
reunida. Nos empezamos a reconocer en medio del gentío no sólo con los conocidos, sino también
con otros que llegan con sus carteles, sus lemas, su música, sus silencios, sus sueños. Estamos
allí y nos hemos multiplicado. Pienso en todos los lugares del país donde, simultáneamente, hay
gente caminando y concentrándose con el mismo sentimiento que ahora se desborda en este rincón
de la capital.
7:30 p.m. Empieza el acto cívico-cultural. La noche se anima, el frío retrocede ante la profusión de
estilos musicales intercalados por lecturas de extractos del Informe de la CVR y de las demandas que
como colectivo estamos planteando al Estado.
Doy una mirada general y calculo entre 4,000 y 5,000 personas. Es un número importante, pero apenas
la mitad de lo que se esperaba. Un compañero de la Defensoría me dice: «Nos falta trabajar mucho
aún». Pienso entonces que la caminata apenas ha empezado, y que debemos continuarla todos aquellos
que, con fe, estamos “buscando una patria” (Heb. 11, 14) donde reine la justicia y en la que nadie se
sienta excluido.
9

“ M e n i e g o
que estemos en un callejón
Entrevista: Kurth Mendoza
10
La opinión pública del país y diversos
analistas manifiestan que la situación política
y social es muy delicada. Casos de corrupción
en medio de una economía aparentemente en
recuperación, pero que aún no se refleja en los hogares
peruanos, empañan las esperanzas de los peruanos.
“Corresponsables” buscó la opinión de una de las Congregaciones
Religiosas que conforman la RAI. Margarita
Escudero Pino, Madre Provincial de las Esclavas del
Sagrado Corazón de Jesús, da un diagnóstico y ensaya
algunos canales de solución para la crisis actual.
¿Cómo ve la actual situación
política que atraviesa
el país?
No quiero caer en el tópico que
dicen todos, pero es una situación
muy crítica, desorientada,
confusa. Es un momento muy
serio donde debemos informarnos
muchísimo y tomar posición
con respecto al presente.
Entonces la ciudadanía tiene
que tomar iniciativas ahora…
Sí, no esperar a que se llamen
a las elecciones. Tenemos que
tomar acciones ahora.
¿Qué tipo de acciones?
Lo primero es formar redes,
como lo hace la Red Apostólica
Ignaciana, entrar en todos
los campos; hay que seguir
trabajando, por ejemplo con
relación al tema de la CVR a
través del Movimiento “Para
que no se repita”.
Por algún camino el Perú saldrá
de los problemas y para lograrlo
hay que formarnos. No esperar
a escuchar qué me dice tal o
cual candidato. La ciudadanía
debe tomar ahora un rol más
protagónico.
¿Qué caminos de solución
existen a la crisis?
Uno de los principales es el diálogo,
visto como la definición de
cada ciudadano, luego debemos
crear nexos. Me niego a creer
que estemos en un callejón sin
salida. No podemos darles a los
jóvenes la idea que el Perú es un
país acabado. Se necesita una
limpieza de actitudes porque
hemos tenido y tenemos mucha
oscuridad, mucha corrupción.
¿Qué se puede hacer desde
la RAI?
Creo que desde la RAI se está
haciendo mucho. Una de las
acciones más importantes es
tratar de impulsar las recomendaciones
de la Comisión
de la Verdad. Otro camino
puede ser tomar conciencia de
la realidad que vivimos y fijar
posturas. Informarnos a través
de encuentros, cursos, talleres
de formación ética. Se puede
decir que nuestro grupo es pequeño,
pero cada vez somos más
y queremos ser la semilla para
un crecimiento mayor. También
es urgente la comunicación.
Tratamos de estar cada vez más
conectados, pero aún falta muchísimo
para que nadie en algún
lugar apartado esté al margen de
lo que hacemos.

a
sin sali-
La prensa a diario emite una
serie de denuncias sobre la corrupción
del régimen actual.
¿Ese clima contribuye a generar
más inestabilidad?
Considero que eso hasta cierto
punto distrae la atención de los
problemas esenciales. Sabemos
que hay corrupción y equivocaciones,
pero a veces la prensa
tiene una actuación casi hasta
folklórica. Es cierto, hay que
denunciar las cosas, pero no
todo el tiempo y además no sólo
quedarnos ahí sino proponer
soluciones. Tomarnos el trabajo
de pensar en el futuro.
¿Qué le espera al Perú en un
corto plazo?
Nos espera a los peruanos unos
meses de definiciones, de darnos
cuenta que tenemos que
comprometernos en los asuntos
de la política. Si no es así
nos comerán los desafíos de
la globalización externa y la
corrupción interna. Creo que el
Perú debe definirse y eso parte
de cada ciudadano.
¿Qué le diría a una persona
que dice que el país está en el
abismo?
Le diría que mientras haya vida
siempre habrá esperanza. Siempre
digo que el Perú tiene muchas
cosas buenas, pero lo mejor es
su gente. Cuando pensamos en
lo que hemos sido capaces de
hacer en la antigüedad, ahí tienes
el Cuzco y tantas cosas maravillosas,
pues somos los mismos,
un poquito mezcladitos con otras
razas pero con lo mejor de cada
una. Tenemos que convencernos
que la esencia del peruano es su
capacidad de lucha, un peruano
siempre tiene esperanza y algo
más rico que es la solidaridad.
Por Margarita Escudero
Encuentro Nacional
de Familia ACI
FACI está formada por todos los grupos laicales que comparten la misión de las Esclavas del
Sagrado Corazón de Jesús, viven su espiritualidad desde su vocación laical y forman desde el año
2000 una Familia junto con las Religiosas Esclavas.
Del 1 al 4 de agosto se tuvo, en Chota (Cajamarca), el III Encuentro Nacional de esta Familia (el
primero se realizó en Lima y el segundo en Arequipa). Este evento se realiza cada dos años y asisten
representantes de todos los grupos de los diversos lugares donde está establecida la Congregación
de Esclavas del S.C. Esta vez nos reunimos más de 140 personas.
El tema elegido fue “Santa Rafaela María y la Espiritualidad Ignaciana”. Se puso énfasis en
el discernimiento. Fueron tres las ponencias: el discernimiento-generalidades, Rafaela María,
persona que discierne, y las reglas de discernimiento. El último día fue sobre el laico ACI y su
espiritualidad. Los tres testimonios de profesores de los colegios de Piura y Arequipa animaron
a todos en su caminar.
Tanto los trabajos en grupo, como las ponencias, oraciones, Eucaristías y adoraciones fueron
momentos de integración, formación y fraternidad.
Fue un desafío ir hasta Chota, era lejos, caminos difíciles, transporte muy caro, pero todo lo fuimos
enfrentando con “grande ánimo y liberalidad” y el resultado ha sido tan satisfactorio. Nos hemos
integrado más, vamos profundizando nuestro compromiso laical dentro de la realidad de nuestro
país y nos sentimos responsables de nuestra Iglesia y nuestro Perú.
Esperamos encontrarnos algunos en el Taller de la RAI en octubre y la cita para nuestro IV Encuentro
Nacional es Piura. ¡Piura 2006! era nuestro grito de despedida.
11

ock
jesuita
Por Kurth Mendoza
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En la Casa del Juniorado
(Breña - Lima), residencia
donde los estudiantes jesuitas
continúan su formación posterior
al Noviciado, cada viernes se
oyen ruidos de batería, guitarras
eléctricas, teclados y voces que
cantan. Contrariamente a lo que se
podría pensar, por ser estudiantes
que se preparan para ser sacerdotes,
los seis jóvenes que cada semana
ensayan desde hace más de
un año conforman la banda jesuita
de rock “Solos y a pie”.
La banda
En el año 2003, César Butrón
y Paulo Valencia, entonces filósofo
y junior, son invitados a
tocar en la Pascua Central de Fe
y Alegría. Luego de acompañar
la jornada, conversan sobre la
posibilidad de formar una pequeña
agrupación musical. Sin
embargo, la idea no se concretó
hasta poco después cuando se
ponen en contacto con Ricardo
Marrou (“Richi”) y David Samaniego,
que ese año llegaron
del Noviciado. Ellos, que tenían
afinidad con la música, concretamente
con la guitarra, pronto
deciden ponerse a ensayar con
César y Paulo, y de esta manera
empieza a nacer la banda.
Poco tiempo después de la
entrega del Informe Final de
la Comisión de la Verdad y la
Reconciliación (setiembre del
2003), el Colegio San Francisco
Javier de Breña organiza un
concierto de rock con diferentes
bandas de la zona. Una de
las personas que organizaba
el evento les avisó sobre la
posibilidad de que toquen allí.
Lo único que se les pedía eran
un nombre como grupo. Luego
de varias discusiones y sin
determinarse de modo especial
por alguna de las posibilidades,
eligieron llamarse “Solos y a
pie”, parafraseando el nombre
del libro que escribió el español
José Ignacio Tellechea “Ignacio
de Loyola, solo y a pie”. En
ese concierto la banda dedicó
la última sección del concierto
a presentar el Informe de la
CVR a partir de la canciones e
imágenes.
A partir de ese momento empiezan
a tener algunas presentaciones
en jornadas y eventos
internos de la Compañía de
Jesús, entre ellos, misas, vigilias
y jornadas. Pero se puede
decir que la presentación en la
Clausura del Congreso Nacional
de Fe y Alegría del 2003 con

alumnos de 3ro, 4to y 5to año de
secundaria “fue muy importante
porque allí caímos en la cuenta
del sentido que le estábamos
dando al grupo. Algo más dirigido
a los jóvenes”, nos cuenta
César Butrón.
Al final del 2003 se integra al
grupo Rafael Fernández Tapia,
más conocido como “Rafa”.
Poco tiempo después (marzo
del 2004) llega del Ecuador Luis
Fernando Peralvo, el “Fercho”,
y se une también al grupo. El
último en incorporarse, hace
apenas unas semanas, es Gary
Mostajo, estudiante de la Provincia
Boliviana que estudia
en nuestro país. Hasta hoy, el
grupo se conforma de la siguiente
manera: Paulo, batería;
Richi y Gary, guitarras, Fercho,
bajo; Rafa, coros y percusión;
y César, voz, guitarra rítmica
y teclado. Lo ideal sería, nos
dice César, que con el tiempo
vayan integrándose nuevos
compañeros que reemplacen a
cualquiera que tenga que dejar
la banda por responsabilidades
más importantes dentro de la
Compañía de Jesús.
Últimamente, el grupo observó
que habían algunas tareas extra
musicales que demandaban un
poco más de tiempo. Deyvi
Astudillo, estudiante del Filosofado
y de comunicaciones de
la Universidad Católica, entró
a ocuparse de las labores de
producción de la banda.
La música
“Si bien nosotros tenemos cierta
influencia de rock subte y un
poco de punk, tratamos de hacer
música variada y con ello, de alguna
manera, seguimos también
la tradición jesuítica. La música
siempre ha estado presente en la
Compañía. A lo largo de nuestra
formación, una de las cosas que
nos enseñan es cómo ser más
sensibles ante el mundo de hoy,
para saber cómo comunicar
nuestra experiencia de Dios a los
demás, con énfasis en los jóvenes.
Esto es arte para nosotros.
Hacer música también es una
forma de ser jesuita. Recordemos
sólo a Doménico Zipoli, un
hermano jesuita italiano, al que
admiro mucho, que compuso
música para las reducciones del
Paraguay, allí donde entregó su
vida Antonio Ruiz de Montoya”,
afirma César sobre el estilo de la
banda y la tradición musical de
los jesuitas.
“Solos y a pie” actualmente
tiene un repertorio de cuatro
canciones propias: “Cómo
olvidarte”, “Más paz” y “Hay
tiempo para todo”, compuestas
por César; y “Libertad”,
por Richi. Sin embargo, tocan
covers de algunas canciones
de: Cristóbal Fones, jesuita
chileno que también se dedica
a la música, Leuzemia, El TRI
de México, José Luis Perales,
Ataque 77, Kevin Johansen,
entre otros.
El grupo no se define específicamente
como una banda
de rock cristiano, sino como
“un grupo de cristianos que
toca rock”. La idea no es tocar
canciones con una intención
catequética explícita, sino tocar
temas que tengan sentido, canciones
que posean un mensaje
a favor de los valores y la vida.
“La idea no sólo es llegar a los
jóvenes católicos, sino llegar a
gente que tiene distintos tipos de
visión religiosa, pero que apuestan
igual por la vida y buscan
un sentido para ella junto a los
demás. Como el P. Pedro Gassó
me dijo algún tiempo atrás, antes
de su muerte, “ustedes tienen
que trabajar mucho por la juventud”.
La música es una gran
forma de seguir su mensaje”,
comenta César.
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Misa de la
Motivados por la delicada
situación política y social que
atraviesa el país durante los
últimos meses, los miembros
de la RAI Lima organizaron
una Misa en la Capilla de la
Virgen de la O, en el Claustro
de la Iglesia de San Pedro.
La Eucaristía fue presidida
por el P. Provincial Carlos
Rodríguez Arana, S.J., y
concelebrada por los PP. José
Luis Fernández- Castañeda,
S.J., Párroco de San Pedro,
y Santiago Vallebuona, S.J.,
acompañante espiritual de
la RAI.
Antes de la homilía, los participantes
se reunieron en
grupos y discutieron acerca
RAI
de cómo aportar desde la fe y espiritualidad ignaciana a la superación
de la crisis en que se encuentra inmerso nuestro país.
A su turno, el P. Provincial refirió que ante la crisis moral de
nuestras autoridades hemos dejado de creer en los políticos. Sin
embargo, dio palabras de aliento desde la identidad ignaciana.
“Tenemos que aportar esperanza ante los problemas, el Perú no
se merece lo que estamos viviendo. Construiremos patria cuando
hagamos las cosas bien”, puntualizó.
Conversatorio
de Marginalidad
En el marco de la Semana Ignaciana 2004 se realizó,
en el Salón de la Parroquia de Fátima, el Conversatorio
“Marginalidad y Exclusión”, donde participaron
como ponentes Rocío Silva Santisteban (Crítica
literaria y periodista), Gisele Velarde (Filósofa) y
Rafael Fernández Hart sj. (Teólogo y Filósofo), y
el P. Vicente Santuc sj. de moderador.
La Semana Ignaciana es un evento donde se da a conocer la
Compañía de Jesús a través de personajes representativos de
su historia. Este año se recuerda la figura de San Pedro Claver,
jesuita quien dedicó su vida al servicio de los esclavos en América
en el S. XVII.
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Cuadernos de Espiritualidad
20 años de Vía crucis
No 107: Los laicos… ¿Los tomamos en serio?
Artículos de Franklin Ibáñez, Pilar Romaní, Jairo
Rivas, Carmen de los Ríos, Alberto Simons sj. y
Javier Uriarte sj.
Próximo número 108
La vida religiosa… ¿Cambio de sentido?
Artículos de Franklin Ibáñez, Javier Uriarte sj.,
Rafael Velazco sj. y Brigida Weiler.
Atendemos suscripciones
Adquiéralos en el Centro de
Espiritualidad Ignaciana
Jr. Fulgencio Valdez No
780-Breña
Telf: 4337337
e-mail: ceisj@terra.com.
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e-mail: ceisj@terra.com.pe
Curso Taller Aprendiendo a
Vivir 2004
Se está desarrollando en el Salón de la Parroquia de Fátima
el Curso Taller Aprendiendo a Vivir 2004 – Relaciones
cercanas y Madurez Humana. Este curso, organizado por el
Instituto de Fe y Cultura de la Universidad Antonio Ruiz de
Montoya, explora, en varias sesiones, los temas de la pareja,
la familia, la amistad, la relación con los otros con miras a
lograr un crecimiento personal y comunitario. Participan
como expositores: Belén Romá, Luisa Broggi de Orbegoso,
Roxana Rosales, Gonzalo Gamio, Ricardo Antoncich sj. y
Manuel Díaz Mateos sj.
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Ignaciana, se realiza con el generoso aporte de las
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y las actividades de la gran familia ignaciana de
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