<strong>Derribando</strong> <strong>estereotipos</strong>23Y la propuesta: derribar los modos estereotipadosen que <strong>desde</strong> la escuela (no solamente, es obvio) seintenta sobreponer a <strong>una</strong>s identidades sobre otras.Avancemos con el tema de los <strong>estereotipos</strong>, quenos parece muy importante para la crítica intercultural.Por ejemplo, podríamos revisar cómo las“otras culturas” entran a la escuela, cómo en las experienciasde educación intercultural bilingüe (<strong>una</strong>perspectiva casi opuesta a la que nosotros sostenemos)se tratan de modo estereotipado las costumbresy tradiciones. Bueno, ya sabemos que son muylindas las leyendas de los “indios”, pero la historia esla HISTORIA, aunque sea leída en “indio”.Representar por estereotipo es un modo de conocerque funciona rápido y sencillo, y para ello realizaconjuntamente las siguientes operaciones: a) elige dela totalidad algún rasgo y lo convierte en representativode ese todo (por ejemplo el Cabildo en lugar de laRevolución) operando por reducción; b) a la vez lo haceexaltando de algún modo ese rasgo como esencial oimprescindible para comprender la Revolución, operandopor escencialización; y c) tratando de instalarde <strong>una</strong> vez y para siempre esta imagen como si fuerainamovible (el Cabildo) operando por fijación. Así,reducción, escencialización y fijación son recursos quesirven a un efecto mayor; la cosa de que se trate, eneste caso la Revolución, se vuelve algo natural: el actoinaugural, el bautismo de la nacionalidad argentina.¿Qué queremos decir con esto? Que todo esfuerzopor descolocar y derribar <strong>estereotipos</strong> tiene queenfrentarse con lo que se diría la “fuerza de las cosas”.O sea, lo que es esencial y natural, indiscutible e inopinable:la fecha y acontecimientos de la fundaciónde la nación, que por si no lo sabían (a veces sólo seconoce de nuestra patria a Maradona, ¡qué ironía!)nace el 25 de mayo de 1810. Y resulta imposible proponerotra imagen para entender qué es la nación:por ejemplo, el del 25 de mayo de 1879, cuando se celebrala conquista del mal llamado desierto y se iniciael último tramo de la campaña genocida contralos pueblos originarios. Campaña militar y simbólicaque conforma en gran medida el carácter nacional,esa identidad férrea que nos hizo creer duranteun siglo que en Argentina no había “indios”.Fotografía: Marianela Núñez.Recomendaciones “no estereotipadas”para el trabajo educativo¿Cómo elaborar propuestas que puedan abrir ydisputar los sentidos (<strong>estereotipos</strong>-cronotopos preponderantes)y que convoquen a la reflexión? Esmás, ¿cómo producir un ritual (un acto escolar lo es)que no sea <strong>una</strong> rutina sino <strong>una</strong> propuesta concientede que produce aquello de lo que habla o exhibe?Ensayaremos alg<strong>una</strong>s dimensiones que podrían tenerconcreción didáctica.<strong>Los</strong> <strong>estereotipos</strong> que en el acto interpelan a laidentidad nacional funcionan como organizadoresde imágenes ancladas a momentos y lugares.Podríamos llamarlos cronotopos: esa imagen en eselugar en ese tiempo. Cronotopos-<strong>estereotipos</strong> queprocuran simplificar y escencializar lo que es complejo,disputado, inseguro y fluido. Porque aquelloque tenemos en común no es lo que viene del pasadocomo si fuera la sangre argentina, sino el filtradoideológico fabricado a sangre y fuego no sólo contralos “españoles” sino también contra los indios, y contraotras identidades y sujetos que fueron doblegadosen pos de erigir al gaucho y al tango como cronotoposverdaderos de la esencia nacional. Aunquetodo esto llevó tiempo y esfuerzo, si bien no tantocomo lo que lleva realizar un acto escolar, se podría
24 septiembre – diciembre 2009Fotografía: Carlos Blanco.decir que las identidades preponderantes se han impuestoa través de un acto escolar perpetuo.Efectivamente, los símbolos for export de laArgentina tales como el tango o el gaucho debieronser domesticados por las clases dominantes ya que,mientras que el primero surgía en las casas de citas yera bailado por los propios hombres con <strong>una</strong> sensualidadhomosexual, el segundo —el gaucho— venía deser aquello que había que vencer, <strong>una</strong> raza impura,indolente e incapaz para el trabajo. Pero la NaciónArgentina, que se proyectaba al mercado mundialcomo el granero del mundo finalmente optó por fabricarun tango despojado o suavizado de las connotacioneshomosexuales y eróticas explícitas y por erigirun gaucho corregido de su vagancia para levantarlocomo modelo de laboriosidad del campo argentino.Lo que proponemos es <strong>una</strong> didáctica del acto quese base en el tratamiento de estos procesos de domesticaciónmediante los cuales lo negado se vuelvecelebrado ocultando con ello los mecanismos de ladominación material y cultural. Es de suponer queen todos nuestros países se han generado <strong>estereotipos</strong>a costa de la exclusión, ocultamiento, censuray también de la celebración vacía de contenido. Sehace necesario promover <strong>una</strong> visión de la identidadque sea plural y diversa, y que por lo mismo sea desafiantede los <strong>estereotipos</strong> de la monoculturalidad.De eso se trata cuando nos colocamos en el suelofértil de la interculturalidad crítica. No es que lasculturas o las pertenencias estén simplemente en relación<strong>una</strong>s con otras, o que cada cultura o modo deser cumpla <strong>una</strong> función en un todo armónico. Se tratade interrogar las fuerzas históricas de las disidenciasculturales y hacerlas entrar al ritual no como uncollage sino como <strong>una</strong> tensión política desafiantede las identidades nacionales conformadas por losEstados latinoamericanos a fines del siglo XIX y principiosdel siglo XX. Éstos serían los lugares y los momentosque habría que conformar como verdaderoscronotopos de la nacionalidad. En la Argentina, estocoincide con el genocidio militar sobre los pueblosoriginarios, que como lo hemos dicho fue llamada“campaña del desierto”.Esto sería, entonces, <strong>una</strong> didáctica interculturalcrítica, a saber: generar nuevas imágenes y otroscronotopos, porque siendo esencial a la constitucióndel Estado republicano exterminar a los indígenas yapoderarse de los territorios que ocupaban: ¿qué eslo que habrá que celebrar? Y no proponemos un actoescolar sobre la muerte, sino, por ejemplo para el 12de octubre, acerca de la vigencia y la proyección delos pueblos originarios. Dicho sea de paso, esa vigenciay esa proyección da lugar a nuevos y desafiantescronotopos para poner en escena en el acto escolar.