11.07.2015 Views

Del Duelo a la Catarsis - Publicatuslibros.com

Del Duelo a la Catarsis - Publicatuslibros.com

Del Duelo a la Catarsis - Publicatuslibros.com

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Eduardo Perezchica<strong>Del</strong> <strong>Duelo</strong> a <strong>la</strong> <strong>Catarsis</strong>Dicen que los sueños se olvidan al poco rato de salirIVde ellos. Pero éste no, lo recordaba vívidamente, <strong>com</strong>o si aún Perdí el trabajo. Se trata de recorte de personal –eso dicenno saliera de él. Por un momento mantuve el miedo de cerrar siempre–. Creo que sería bueno tomarme una o dos semanaslos ojos, no fuera a ser que ya no pudiera abrirlos.de vacaciones, después buscaré otro.A diferencia de aquel lugar que describí una nocheHe estado muy tenso, mi vida se había convertido ende insomnio <strong>com</strong>o una habitación, lo que estoy describiendouna rutina que no me llevaba a nada, más que al día siguiente.ahora, acabo de sentirlo en carne propia, sin exageraciones.Con todo lo bizarro e imposible que pueda parecer, no mientoGeneralmente era lo mismo: despertar a mediodía, dos horasen detalles. Aunque en un sueño, todo esto sucedió, lo sentí, para ejercitar el ocio y una hora más para alistarme antes de ir apude vivirlo y sobrevivirlo, por alguna extraña razón que podría trabajar. Y ahí sólo se trataba de ver pasar nueve horas hasta elconsiderar <strong>com</strong>o un presagio, pero que prefiero ver <strong>com</strong>o una momento de salir, a medianoche. Frecuentemente me dormíacircunstancia más de no saber qué sucede.<strong>com</strong>o a <strong>la</strong>s tres o cuatro de <strong>la</strong> madrugada, al principio usaba eseRespiro paz por un instante. Respiro realidad y me tiempo para ver televisión, pero fácilmente me harté de el<strong>la</strong>.despierta, o me adormece, según se vea. Me queda <strong>la</strong> sensación Entonces empecé a <strong>com</strong>prar libros que, al principio, sólo leíade que soy yo y el silencio.para matar el tiempo.Silencio que poco a poco se esfuma, dando paso a <strong>la</strong>De hecho, ya sabía que me iban a despedir, por el finmúsica de fondo de algún programa en <strong>la</strong> televisión que siguede mi contrato –divino neoliberalismo–. Por eso <strong>com</strong>pré unaencendida. Tomo el control y <strong>la</strong> apago. Momentáneamente seme espanta el sueño.buena cantidad de libros que supuestamente leeré en estos díasLa confusión me hace sentir que algo, o mucho me para mantenerme ocupado. A veces leer me incita a escribir,falta aún por saber. Pareciera que todo se reafirma: “...siento un se ha vuelto un diálogo, el cobijo de mis ideas y necesidades.vacío en mi existencia, algo está mal y no sé cómo superarlo”.He sentido un poco de consuelo, de distracción, me ha dadoLa razón por <strong>la</strong> que escribo todo esto, es entre otras, porque tiempo de pensar algunas cosas.dicen que cuando uno tiene una pesadil<strong>la</strong> y no se <strong>la</strong> <strong>com</strong>enta a Era tal <strong>la</strong> rutina en que me encontraba que casi todonadie es posible que se vuelva realidad. ¡No quiero eso! aunque mi tiempo lo pasaba en mi cuarto. Hasta hace unas noches,tal vez ya es tarde; cuando desperté tuve <strong>la</strong> sensación de que antier o el lunes, que empecé a salir al traspatio, ese que sóloesto ya lo había vivido. Dejà Vuh.sirve de tendedero, para poder cambiar por unos momentos el15

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!