flora y vegetación acuáticas de las lagunas y humedales de la ...

L. Medina (2003). Flora y vegetación acuáticas de Guadalajara3.9 POBLACIÓNTradicionalmente se ha considerado a las tierras de Guadalajara uno de los territorios másdespoblados de España, con uno de los índices actuales de densidad de población más bajos(INE, 1996).El despoblamiento de las zonas rurales, en especial las de montaña en las que las condiciones devida son más duras, es un fenómeno común en casi todo el territorio ibérico durante la segundamitad del siglo XX y parece ligada a los procesos de desarrollo socioeconómico que se producenen España en las décadas de 1920 y 1960. Este despoblamiento ha tenido unos claros efectossobre los medios rurales en dos aspectos principales. Por un lado el abandono de los usostradicionales junto la generalización del uso de combustibles fósiles en estos medios hafavorecido de forma importante la recuperación de grandes masas arbustivas y arbóreas(BLANCO & al., 1997; MMA, 2002). Por otro se ha perdido casi totalmente una cultura basadaen el conocimiento ancestral del medio natural y del manejo de los recursos naturales, que haestado en vigencia durante siglos.Los movimientos poblaciones también tienen su reflejo sobre los medios húmedos, ya que el usoque de ellos se ha realizado de forma tradicional ha dependido siempre de las necesidadesproductivas locales. Quizá el más importante efecto en la zona que nos ocupa haya sido elcambio en el tamaño de la cabaña ganadera y su manejo extensivo, que ha obligado a laconstrucción de nuevos humedales artificiales a la vez que ha aumentado o disminuido la presiónsobre algunos de los naturales con el aumento o disminución de los rebaños, sobre todo losovinos.El despoblamientoLa tendencia general de la evolución de la población en la provincia sigue un procesodescendente desde 1940 que no se empieza a recuperar hasta la década de los 80 (tabla 11). Ladisminución neta del índice de población entre 1900 y 1981 es del 28,5 %, lo que significa quemientras que la población nacional se ha duplicado, la provincial ha perdido una cuarta parte.En el periodo de 1900 a 1950 se constata un ligero aumento de la población general sin valoresmuy altos (1,54 %) debida al aumento de los núcleos de Guadalajara, Molina y Cifuentes-Brihuega, aunque por municipios el descenso es notable, sobre todo en aquellos situados enzonas altas o de las sierras del norte de la provincia (ZÁRATE & VÁZQUEZ, 1986).Desde 1950 a 1981 la tendencia general es una despoblación fuerte de casi todos los municipios(con un valor neto del 30,4 %) salvo aquellos del entorno de la capital, Cifuentes, Alcolea yMolina de Aragón. Los valores más abundantes de pérdida de población por municipios seencuentran en el rango de 40 al 60 %, y en el caso de algunos del Alto Tajo y la Alcarria superanel 60 %. A partir de los años 70 se inicia una cierta recuperación debida al establecimiento de losnúcleos económicos e industriales mencionados (ZÁRATE & VÁZQUEZ, 1986).El censo provincial del año 2001 muestra una recuperación que no alcanza a los valores de iniciodel siglo XX y que se concentra en las zonas de mayor importancia económica del corredorindustrial del Henares y áreas de Briguega y Molina de Aragón.38