Rocktopía-Mx-Número-8-Octubre-Noviembre-Diciembre-2016

Revista Rocktopía Mx
Noviembre - En concierto
Revista Rocktopía Mx
UN TELONERO MUY ESTELAR: RIVAL SONS
LA BANDA MÁS GRANDE EN LA HISTORIA DEL HEAVY METAL
LE DIJO ADIÓS A MÉXICO
Llamado a escena para Rival Sons, banda estadounidense formada en 2008, integrada por Jay
Buchanan (vocalista/harmónica), Scott Holiday (guitarrista), Mike Miley (baterista) y Dave
Beste (bajista), más el músico que los acompaña en sus giras Todd Ögren-Brooks (tecladista)/percusiones).
A esta agrupación la conocí y la escuché por primera vez justo cuando se anunció que le
abriría el concierto en México a Black Sabbath, desde entonces me gustó bastante; ya en el toquín
me encontraba emocionado y preparado (familiarizado con varias de sus canciones) para presenciar
en vivo este acto, pocas personas compartían mi situación pues lo que prevalecía en el entorno era
la incertidumbre respecto a la calidad musical de los invitados. Los teloneros dieron un inicio electrizante,
literalmente, pues “Electric Man” fue la rola que abrió el recital, -Dotada de Riffs,
alta calidad vocal y un ritmo contagioso ¡Gran canción, es una joya rockera!-. A lo largo
de toda la actuación del conjunto de Hard Rock, prevalecieron los empujones pesados, los brincos,
algunos gritos eufóricos y en general una buena vibra y apreciación por este grupo. Una presentación
corta, 8 rolas interpretadas, de entre las cuales destacaron “Pressure and Time”, “Torture”, y
“Keep On Swinging”. Así, la banda sorprendió a un público que en su mayoría no esperaba gran cosa
pero que terminó aplaudiendo la técnica y la clase rockera de estos estadounidenses.
Si Black Sabbath eligió a los
Rival Sons para acompañarla en
su gira mundial del adiós (incluidas
fechas como Download
Festival en Reino Unido y Hell-
Fest en Francia (ambos festivales
son auténticos hitos de la
escena rockera/metalera global))
eso es una de las mejores
cartas de presentación posibles.
Sin duda, este año catapultó a
Rival Sons a las grandes esferas
del Rock Internacional. Y
es que, esta banda trae en la
sangre un Rock de otras épocas,
con esa esencia clásica y de
purismo; irónicamente, por momentos, el vocalista Jay Buchanan le da un parecido físicamente a
Ozzy Osbourne, en las juventudes de éste último, aunque en general, la agrupación, más que evocar
el sonido de Black Sabbath, remite a un gigante del Hard Rock: Led Zeppelin. Ya habrá tiempo
para compartirles más contenido acerca de Rival Sons en nuestra revista, por ahora basta con establecer
que en su primer examen ante el público mexicano, estos rockeros aprobaron con mención
honorífica, sorprendiendo y satisfaciendo a una audiencia que se quedó con ganas de conocer más a
fondo la música del grupo. A los integrantes de Rival Sons también se les notó emocionados y agradecidos
con la respuesta de los fans nacionales, seguramente el año 2017 nos traerá de vuelta a
este conjunto que rescata las bases del Rock en su concepción más natural.
Foto: Rick Horn
Pasadas las 21:30 horas llegó el momento tan anhelado, era turno de conectarnos con una de las
agrupaciones más grandes de todos los tiempos en el Rock N’ Roll. El público se estremecía, los
gritos “¡Sabbath, Sabbath, Sabbath!” y “Oe oe oe oee, Sabbath, Sabbath” ya eran incontenibles;
de pronto, en las pantallas gigantes se proyectó una figura demoniaca que estalló para dejar al descubierto
el clásico logotipo de Black Sabbath, adornado con llamas por doquier, como una enorme
bola de fuego. Fue entonces que uno a uno aparecieron en el escenario los integrantes del grupo:
Geezer Butler (bajista), Ozzy Osbourne (cantante), Tony Iommi (guitarrista) y el agregado
para esta gira del adiós Tommy Clufetos (baterista); ya sobre el escenario Ozzy gritó “¡Mexico!”
eso bastó para desatar la locura total en los fans: más gritos, empujones y un ambiente pletórico
eran lo que se vibraba.
La primera canción de la noche fue la homónima “Black Sabbath”, considerada como la pionera
en el género Heavy Metal; una apertura ideal. En vivo fue maravillosa; tenebrosamente lúgubre,
pesada y explosiva; Tony Iommi hizo sonar prodigiosamente los primeros Riffs de guitarra, las
notas brotantes del bajo guiado por Geezer Butler oscurecieron el ambiente, entonces apareció
la inconfundible voz de Ozzy Osbourne el príncipe de las tinieblas, todo complementado con
un acompañamiento sobresaliente por parte de Tomy Clufetos en la batería; parecía como si estuviéramos
escuchando el legendario álbum BLACK SABBATH (1970), ESTA BANDA SUENA
EN VIVO COMO LO QUE ES: UNA DE LAS MEJORES DE TODOS LOS TIEMPOS. La parte
final de la rola, misma en la que aparecen los Riffs más pesados y agresivos, permeó en todo el
público, empezamos a brincar y se armaron algunos Mosh Pits; Ozzy cerró gritando “We Love You
Mexico!” (“¡Te Amamos México!”), palabras que nos estremecieron, un inicio de concierto ÉPICO.
Turno para “Fairies Wear Boots”, la cual, sin ser de las más populares, me atrevo a señalar es una
de las mejores creaciones en la trayectoria de Sabbath, llena de Riffs y poseedora de una letra
mágica e irónica; fue una de las mejores de la noche. Sobresaliente ejecución que nos incitó al
headbanging, mismo que se mantendría casi durante todo el recital -La rola genera la sensación
de estar rebotando en la oscuridad de la noche ¡Esto es Black Sabbath, esto es Heavy Metal
en su más pura esencia!-.
Foto: Gabriel Lemus Granados
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