Estrategias_de_aprendizaje
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PROCESOS COGNOSCITIVOS COMPLEJOS 271<br />
Des<strong>de</strong> luego, no tenemos que ser metacognoscitivos todo el tiempo.<br />
Algunas acciones se vuelven rutinarias. La metacognición es más útil<br />
cuando las tareas son difíciles, aunque no <strong>de</strong>masiado. La planeación, verificación<br />
y evaluación podrían ser útiles. E incluso cuando planeamos,<br />
verificamos y evaluamos, estos procesos no necesariamente son conscientes,<br />
especialmente en los adultos. Quizá los utilicemos <strong>de</strong> forma automática,<br />
sin darnos cuenta <strong>de</strong> nuestros esfuerzos (Perner, 2000). Los<br />
expertos en un campo pue<strong>de</strong>n planear, verificar y evaluar en un segundo<br />
plano, pues tendrían dificulta<strong>de</strong>s para <strong>de</strong>scribir su conocimiento y sus habilida<strong>de</strong>s<br />
metacognoscitivas (Pressley y Harris, 2006; Re<strong>de</strong>r, 1996).<br />
Fuentes <strong>de</strong> las diferencias individuales<br />
en la metacognición<br />
Algunas diferencias en las habilida<strong>de</strong>s metacognoscitivas son el resultado<br />
<strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo. Por ejemplo, es posible que los niños pequeños no estén<br />
conscientes <strong>de</strong>l propósito <strong>de</strong> una lección; quizá piensen que lo importante<br />
es terminarla. También es probable que no sepan evaluar la dificultad<br />
<strong>de</strong> una tarea (podrían pensar que es lo mismo leer por diversión que<br />
leer un libro <strong>de</strong> ciencias (Gredler, 2009). Conforme los niños crecen, se<br />
vuelven más capaces <strong>de</strong> ejercitar el control ejecutivo sobre las estrategias.<br />
Por ejemplo, son más capaces <strong>de</strong> <strong>de</strong>terminar si han entendido las instrucciones<br />
(Markman, 1977, 1979) o si estudiaron lo suficiente para recordar<br />
un conjunto <strong>de</strong> elementos (Flavell, Friedrichs y Hoyt, 1970). Las habilida<strong>de</strong>s metacognoscitivas empiezan<br />
a <strong>de</strong>sarrollarse entre los cinco y los siete años <strong>de</strong> edad, y mejoran a lo largo <strong>de</strong> la etapa escolar<br />
(Flavell, Green y Flavell, 1995; Garner, 1990). En su trabajo con niños <strong>de</strong> primero y segundo grados,<br />
Nancy Perry encontró que plantear dos preguntas a sus alumnos los ayudaba a volverse más<br />
metacognoscitivos. Las preguntas eran “¿qué aprendiste sobre ti como lector/escritor hoy?” y “¿qué<br />
aprendiste que puedas hacer una y otra vez?”. Cuando los maestros formularon estas preguntas con<br />
regularidad durante la clase, incluso los alumnos más pequeños <strong>de</strong>mostraron niveles bastante complejos<br />
<strong>de</strong> entendimiento y acción metacognoscitivos (Perry et al., 2000).<br />
No todas las diferencias en las habilida<strong>de</strong>s metacognoscitivas están relacionadas con la edad o la<br />
maduración. Algunas diferencias individuales en las habilida<strong>de</strong>s metacognoscitivas probablemente se<br />
originen por diferencias biológicas o por variaciones en las experiencias <strong>de</strong> <strong>aprendizaje</strong>. Los estudiantes<br />
varían mucho en su capacidad para aten<strong>de</strong>r <strong>de</strong> manera selectiva a la información <strong>de</strong> su entorno. De hecho,<br />
muchos alumnos diagnosticados con problemas <strong>de</strong> <strong>aprendizaje</strong> en realidad sufren trastornos <strong>de</strong><br />
atención (Hallahan y Kauffman, 2006), en particular con tareas que requieren mucho tiempo (Pelham,<br />
1981). El trabajo para mejorar las habilida<strong>de</strong>s metacognoscitivas podría ser especialmente importante en<br />
el caso <strong>de</strong> los estudiantes que tienen problemas frecuentes en la escuela (Shunk, 2008; Swanson, 1990).<br />
Tal vez recuer<strong>de</strong> que la metacognición incluye conocimientos acerca <strong>de</strong>l valor <strong>de</strong> utilizar estrategias<br />
para apren<strong>de</strong>r. En la siguiente sección exploraremos las estrategias <strong>de</strong> <strong>aprendizaje</strong>.<br />
METACOGNICIÓN La metacognición implica elegir la mejor forma<br />
<strong>de</strong> realizar una tarea <strong>de</strong> <strong>aprendizaje</strong>. Los estudiantes con buenas habilida<strong>de</strong>s<br />
metacognoscitivas establecen metas, organizan sus activida<strong>de</strong>s,<br />
eligen entre varios métodos <strong>de</strong> <strong>aprendizaje</strong> y cambian las<br />
estrategias en caso necesario.<br />
ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE<br />
La mayoría <strong>de</strong> los profesores dirían que <strong>de</strong>sean que sus alumnos “aprendan a apren<strong>de</strong>r”. Años <strong>de</strong> investigaciones<br />
indican que el uso <strong>de</strong> buenas estrategias <strong>de</strong> <strong>aprendizaje</strong> ayuda a los estudiantes a apren<strong>de</strong>r y que<br />
tales estrategias podrían enseñarse (Hamman, Berthelot, Saia y Crowley, 2000; Pressley y Harris, 2006).<br />
Pero, ¿a usted le enseñaron “cómo apren<strong>de</strong>r”? Rara vez se enseñan <strong>de</strong> manera directa tanto estrategias <strong>de</strong><br />
<strong>aprendizaje</strong> po<strong>de</strong>rosas y complejas como habilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> estudio antes <strong>de</strong>l bachillerato o <strong>de</strong> la universidad,<br />
<strong>de</strong> manera que los estudiantes tienen escasa práctica con estas estrategias. En contraste, por lo general los<br />
estudiantes <strong>de</strong>scubren el <strong>aprendizaje</strong> por repetición y por memorización por su cuenta, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una edad<br />
temprana, por lo que llegan con una amplia práctica en esas estrategias. Y, por <strong>de</strong>sgracia, algunos profesores<br />
consi<strong>de</strong>ran que memorizar es apren<strong>de</strong>r (Hofer y Pintrich, 1997; Woolfolk Hoy y Murphy, 2001). Tal<br />
vez esto explique por qué muchos alumnos se obstinan con el uso <strong>de</strong> tarjetas y la memorización, pues no<br />
saben qué más hacer para apren<strong>de</strong>r (Willoughby, Porter, Belsito y Yearsley, 1999).<br />
Como vimos en el capítulo 7, la forma en que algo se apren<strong>de</strong> en primera instancia afecta su evocación<br />
y qué tan apropiadamente se podría aplicar el conocimiento más a<strong>de</strong>lante. Primero, los estudiantes<br />
<strong>de</strong>ben participar cognoscitivamente para apren<strong>de</strong>r, es <strong>de</strong>cir, <strong>de</strong>ben enfocar su atención en los aspectos<br />
pertinentes o importantes <strong>de</strong>l material. Segundo, <strong>de</strong>ben invertir esfuerzo, hacer conexiones, elaborar, traducir,<br />
organizar y reorganizar para pensar y procesar con profundidad, ya que a mayor práctica y procesamiento,<br />
más sólido será el <strong>aprendizaje</strong>. Finalmente, los estudiantes <strong>de</strong>ben regular y verificar su propio<br />
MyEducationLab<br />
Vaya a la sección <strong>de</strong> Activida<strong>de</strong>s<br />
y aplicaciones en el<br />
capítulo 8 <strong>de</strong> MyEducationLab y realice<br />
la actividad 1. Mientras observa y<br />
lleva a cabo las activida<strong>de</strong>s correspondientes,<br />
examine la <strong>de</strong>mostración<br />
<strong>de</strong> las habilida<strong>de</strong>s metacognoscitivas<br />
a través <strong>de</strong>l trabajo <strong>de</strong>l alumno.