VENTANAL 50

Y aquí estamos, a un mes de comenzar la ‘selectividad’
(si se puede llamar así). Parece que fue ayer cuando, tras las
polémicas que caracterizan a nuestra generación en el tema
excursiones, cogimos un bus con destino Portugal. Portugal...
nadie se imaginó que nos iba a enamorar tanto: noches en las
terrazas de Oporto, Lisboa y sus tranvías, y baños en la piscina
del hotel que ni la lluvia de abril pudo detener; y ya sabéis que
“al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver”, pero
la excepción hace la regla y, si es con vosotros, Lisboa mil y una
vez más no sería suficiente.
Tras un verano que todos hubiésemos deseado hacer interminable,
llegó septiembre, y con él, la cruda realidad. Generaciones
anteriores ya nos venían advirtiendo de lo que nos esperaba;
pero, queridos futuros alumnos de 2º, seguramente no os
DESPEDIDA por Juan Pedro Mencía González y
María Rebolleda Díez
Las despedidas nunca fueron fáciles y esta no es una excepción.
Nuestras vidas se separan siguiendo caminos con destinos
diferentes esperando que algún día se vuelvan a juntar,
porque no es sencillo decir adiós a aquellos con los que llevamos
quince años.
“No es sencillo decir adiós a aquellos
con los que llevamos quince años.”
Y es que ya lo define por sí solo el tópico de tempus fugit,
el tiempo huye y no nos enteramos. No nos damos cuenta de
lo que tenemos hasta que llega el final. Hoy decimos adiós al
lugar que nos ha visto crecer. Y no solo esto, el colegio nos ha
inculcado valores de humildad, respeto, solidaridad… todos
ellos bajo la máxima de “en todo amar y servir”, como diría
San Ignacio.
Y qué rápido pasa el tiempo. Todo el año pensando en el
día de la graduación y hoy es ese día. Quién iba a decir que
después de tantos años y tantas horas con vosotros iba a resultar
tan difícil despedirnos. Ahora toca parar y bajarse del tren,
porque como dijo Shakespeare “sabemos lo que somos, pero
no lo que podemos llegar a ser”. Es hora de que cada uno tome
su camino, rumbos separados que debemos emprender solos,
pero sabiendo que podemos contar con vosotros. Solo ahora
que nos decimos adiós somos capaces de comprender lo duro
que puede llegar a resultar este momento. Hemos terminado
creáis nada hasta que se os venga encima.
Y es que el problema de este discurso viene con 2º de
Bachillerato, no sabes muy bien qué decir de un curso que se
pasa como si fuesen tres días; Poco más que estudiar (sólo
un poco), unas convivencias más que fugaces, clases, clases,
clases, y todo esto compensado con pensar durante diez
meses en tus planes a partir del 15 de junio. Incontables son
las veces que he oído: “lo único que me anima a estudiar es
Mallorca”; pues bien, muchas gracias Mallorca por tus ánimos,
pero ahora os invito a miraros entre vosotros y a pensar
en las horas que nos quedan juntos, que si el destino quiere,
seguramente sean muchas, pues por eso mismo se define
nuestra generación.
una de las etapas más
importantes de nuestras
vidas, pero los finales
tienen que llegar para
que puedan venir nuevos
comienzos.
Esto no es un adiós,
es un “gracias”. Gracias
a nuestros profesores
por enseñarnos que todo
esfuerzo tiene su recompensa.
Sin olvidarnos de
aquellos que estuvieron
presentes pero ya no están.
La alegría de Silvia, la compasión de Chespi y la bondad
de César, cuya última promoción de alumnos nunca le olvidará.
Debemos reconocer también la paciencia de nuestros padres,
que con su cariño han sabido llevarnos por el buen camino,
aguantando nuestros más y nuestros menos hasta hacer de nosotros
lo que somos ahora.
Para concluir, una última consigna. Si miramos las noticias,
es fácil percibir cómo el mundo que soñábamos con tres años
es muy diferente al de ahora. Estamos solos ante un nuevo
reto, como si cada uno de nosotros nos sintiéramos como
aquel caminante sobre el mar de nubes, retratado por el gran
Friedrich. El mundo nos necesita. Necesita buenos médicos,
abogados, ingenieros… Pero principalmente necesita buenas
personas. No abandonéis vuestros ideales para perseguir
vuestros sueños. Podéis mirar con nostalgia el pasado, recordad
que somos el futuro.
EN NOMBRE DE LAS FAMILIAS, HABLÓ EL MA-
TRIMONIO RIERA CHAMORRO
Buenas tardes, a todos y todas:
Quiero en primer lugar agradecer al colegio la oportunidad
que nos brinda para dirigirnos a nuestros hijos e hijas en este
día tan especial, que supone el cierre de toda una etapa, sin
lugar a duda una de las más importantes en sus vidas porque
en ella se han ido formando como personas.
Hace 15 años, tuvimos que tomar como padres y madres,
una decisión transcendental en la vida de nuestros hijos: elegir
el colegio donde queríamos que estudiaran sus primeros
años. Era una tarea difícil porque queríamos lo mejor, éramos
conscientes de que esa etapa marcaría su vida futura. No sólo
buscábamos un centro que académicamente estuviera muy
preparado; nuestra prioridad era garantizar que la formación
que recibieran se diera desde unos valores cristianos donde lo
prioritario fuese su formación como personas, una educación
intelectual, moral y física. Hoy, mirándoles, estamos seguros de
que acertamos con la elección, tenemos ante nosotros a unos
jóvenes muy preparados para enfrentar nuevos retos. Desde
aquí, nuestro agradecimiento a toda la comunidad educativa, a
todos y cada uno de los que les han cuidado y educado; esta
impronta les acompañará siempre.
22 En este trimestre
En aquellos primeros
momentos, muchos de
nosotros estábamos estrenándonos
como padres.
¡Cuánto hemos aprendido!.
Muchas son las experiencias
que nos han permitido
crecer juntos.
En la etapa de Infantil,
fueron cursos donde os
conocisteis y os hicisteis
una piña, vuestros primeros
amigos y amigas,
muchos de ellos hoy aquí
presentes.
Primaria supuso cambio, pasasteis a estar en tres aulas, a
partir de aquí cada dos años se producía una nueva distribución
de alumnos, aquello en un primer momento parecía traumático,
el grupo se dividía, la incertidumbre daba paso a veces
al desconsuelo porque no había habido suerte, te quedabas sin
tus amigos... Con el paso de los años, esta experiencia fue muy
enriquecedora, aprendisteis a manejar los contratiempos, a dar
oportunidades a otros, a acoger a los demás. De tal manera
que ahora sois un maravilloso grupo de amigos y amigas, rico