Revista P.T.J. Cuerpo Especial

Hacinamiento en Subdelegaciones
Al hablar sobre el tema del hacinamiento en algunas
dependencias de la institución, alega que para
nadie es un secreto que la situación existe. “Este es
un tema muy complicado, ya que conseguir un cupo
en un penal es muy difícil. Sin embargo, ¿Qué estamos
implementando? Estableciendo los enlaces
con los representantes de los centros penitenciarios,
a los fines que nos brinden la
colaboración para el descongestionamiento
de los mismos.
Tenemos que hacerle entender al poder
judicial y al Ministerio de Asuntos Penitenciarios
que nosotros no contamos con
sitios de reclusión adecuados, que más
bien, estamos causándole un daño a ese
privado de libertad, al no contar con una
estructura que brinde la seguridad requerida.
Dichas oficinas se han convertido en
sitios de reclusión preventivos que solo están
a la espera que la Fiscalía presente al
individuo ante un tribunal penal.
¿Qué sucede? que debido a la cantidad
de privados existentes en los centros
penitenciarios, se giran instrucciones que
aquellos privados de libertad que no se le
hayan girado la audiencia preliminar, deben
permanecer en estos sitios,- delegaciones
o subdelegaciones-, dado que es más fácil
su traslado, ya sea al Palacio de Justicia o Circuito
Judicial, que desde un centro penitenciario.
¿Adónde se quiere llegar?
El Dr. Calderaro es enfático en señalar lo siguiente:
“No puedo comprometerme a lograr descongestionar
totalmente estas oficinas, porque no depende
de mí, sin embargo, haremos nuestro mayor esfuerzo
para que estos funcionarios de enlace nos
colaboren al máximo. Son muchos los riesgos que
tienen que enfrentar nuestros funcionarios, pero hacen
el mejor esfuerzo para que esto funcione.
Es por ello, que haremos todo lo posible, y no
quedarse con simplemente enviar comunicaciones,
hay que hacer acto de presencia, reunirse con el
funcionario de enlace, llevarlo a la
subdelegación para que pueda visualizar
las condiciones existentes, de manera
que colabore y cumpla con sus funciones.
En este punto relata una de sus experiencias
cuando tuvo la oportunidad de ser consultor jurídico
de la Policía Bolivariana del estado Miranda. “Me
acuerdo que el Director para ese momento, me encomendó
los calabozos. Lo primero que hice fue hacer
acto de presencia en los mismos, para conocer
cuáles eran sus condiciones, quienes estaban allí,
si eran funcionarios, hampa común, en fin levantamos
un estudio para conocer la población. Luego
hicimos un enlace con la presidenta del Circuito Judicial
Penal de la entidad regional, quien nos colaboró
de tal manera, que cuando entregué el cargo,
solo contaba con dos detenidos.
Con esto, aclara que esta problemática se convierte
en una de sus metas, siendo a su juicio una
de las más difíciles, ya que reitera que la solución
del problema no solo depende de la institución ni de
su persona, sino de otras instancias. Por otro lado,
al referirse a los cambios que pretende generar en la
Asesoría Jurídica, señaló que necesita de la colaboración
y el apoyo del personal que posee la experiencia,
ya que cuenta con funcionarios con más de treinta
años de servicio que tienen mucho que enseñar.
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