Odontologia.Preventiva
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Odontología<br />
preventiva
Odontología<br />
preventiva<br />
Dra. Bertha Yoshiko Higashida Hirose<br />
Médico Cirujano<br />
Profesora de Educación para la Salud<br />
UNAM<br />
segunda edición<br />
MÉXICO • BOGOTÁ • BUENOS AIRES • CARACAS • GUATEMALA • LISBOA<br />
MADRID • NUEVA YORK • SAN JUAN • SANTIAGO<br />
AUCKLAND • LONDRES • MILÁN • MONTREAL • NUEVA DELHI<br />
SAN FRANCISCO • SINGAPUR • ST. LOUIS • SIDNEY • TORONTO
Director editorial: Javier de León Fraga<br />
Editor sponsor: Gabriel Romero Hernández<br />
Supervisora de edición: Norma Leticia García Carbajal<br />
Supervisor de producción: José Luis González Huerta<br />
Diseño de portada: Victor Ortiz<br />
NOTA<br />
La medicina es una ciencia en constante desarrollo. Conforme surjan nuevos conocimientos, se requerirán<br />
cambios de la terapéutica. El (los) autor(es) y los editores se han esforzado para que los cuadros de dosificación<br />
medicamentosa sean precisos y acordes con lo establecido en la fecha de publicación. Sin embargo, ante los<br />
posibles errores humanos y cambios en la medicina, ni los editores ni cualquier otra persona que haya participado<br />
en la preparación de la obra garantizan que la información contenida en ella sea precisa o completa, tampoco son<br />
responsables de errores u omisiones, ni de los resultados que con dicha información se obtengan. Convendría<br />
recurrir a otras fuentes de datos, por ejemplo, y de manera particular, habrá que consultar la hoja informativa<br />
que se adjunta con cada medicamento, para tener certeza de que la información de esta obra es precisa y no se<br />
han introducido cambios en la dosis recomendada o en las contraindicaciones para su administración. Esto es<br />
de particular importancia con respecto a fármacos nuevos o de uso no frecuente. También deberá consultarse a<br />
los laboratorios para recabar información sobre los valores normales.<br />
Odontología preventiva<br />
Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra,<br />
por cualquier medio, sin autorización escrita del editor.<br />
DERECHOS RESERVADOS © 2009 respecto a la segunda edición por,<br />
McGRAW-HILL INTERAMERICANA EDITORES, S.A. de C.V.<br />
A subsidiary of The McGraw-Hill Companies, Inc.<br />
prolongación Paseo de la Reforma 1015, Torre A, Piso 17, Col. Desarrollo Santa Fe,<br />
Delegación Álvaro Obregón<br />
C.P. 01376, México, D.F.<br />
Miembro de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, Reg. Núm. 736<br />
ISBN 13: 978-970-10-6927-1<br />
1234567890 048765432109<br />
Impreso en México<br />
printed in Mexico
A la memoria de mis padres<br />
A mi hijo y su familia<br />
A Jorge
Contenido<br />
Capítulo 1 Odontología preventiva . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1<br />
Capítulo 2 Asepsia y antisepsia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5<br />
Capítulo 3 Proceso salud-enfermedad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27<br />
Capítulo 4 Historia natural de la enfermedad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33<br />
Capítulo 5 Introducción a la inmunología . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 45<br />
Capítulo 6 Placa dentobacteriana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 63<br />
Capítulo 7 Ecología, demografía y salud . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 85<br />
Capítulo 8 Caries dental . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 121<br />
Capítulo 9 Medidas preventivas en odontología . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 145<br />
Capítulo 10 Introducción al método científico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 203<br />
Capítulo 11 Epidemiología . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 211<br />
Capítulo 12 Bioestadística . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 235<br />
Capítulo 13 Historia clínica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 251<br />
anexo. Norma Oficial Mexicana NOM-013-SSA2-1994 para la Prevención<br />
y el Control de Enfermedades Bucales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 273<br />
índice alfabético . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 293
Prólogo<br />
De acuerdo con los datos de la Organización Mundial<br />
de la Salud (OMS), México se encuentra entre los<br />
países con alto rango de frecuencia de enfermedades<br />
bucales. Éstas se hallan entre las cinco de mayor demanda<br />
de atención en los servicios de salud.<br />
en muchas ocasiones los individuos acuden al<br />
odontólogo cuando la enfermedad está avanzada, lo<br />
cual implica molestias, pérdida de tiempo, ausentismo<br />
en la escuela o en el trabajo, e incluso se eleva el<br />
costo de la atención bucal.<br />
La mayoría de las enfermedades bucales pueden<br />
ser controladas con actividades preventivas primarias<br />
y secundarias (diagnóstico temprano y tratamiento<br />
oportuno), por lo que la odontología debe hacer énfasis<br />
en la prevención integral.<br />
En la actualidad, el autocuidado de la salud ha cobrado<br />
gran importancia, de ahí que se deba insistir en<br />
el fomento de hábitos, valores y actitudes favorables a<br />
la salud.<br />
entre los valores que se deben inculcar están el amor a<br />
la vida, al propio cuerpo y a la salud, por lo que la odontología<br />
preventiva debe resaltar la importancia de la salud<br />
bucal como parte de la salud integral del individuo.<br />
en esta obra me he permitido proporcionar algunas<br />
bases, no sólo para cumplir con los objetivos<br />
y contenidos de un programa, sino para brindar al<br />
alumno una visión más completa del proceso saludenfermedad<br />
en el ser humano, al considerarlo como<br />
una unidad biopsicosocial que forma parte de una familia<br />
y una comunidad.
Odontología<br />
preventiva
Capítulo 1<br />
Odontología preventiva 1<br />
Odontología<br />
preventiva<br />
Antecedentes históricos<br />
de la odontología<br />
La palabra odontología proviene de los términos odontos<br />
(diente) y logos (tratado o estudio), por lo cual etimológicamente<br />
significa tratado o estudio de los dientes.<br />
Sin embargo, la odontología es ciencia y arte a la<br />
vez: por una parte, requiere de fundamentos teóricos y<br />
concepciones científicas acertadas y comprobadas; por<br />
otra, exige habili dad y manejo de técnicas y procedimientos<br />
para ejecutar ideas relacionadas no sólo con<br />
los dien tes, sino con todas las estructuras de la boca.<br />
La revisión de la historia de la odontología revela<br />
ya entre los egipcios la existencia de mé dicos cuyas<br />
prácticas curativas de los dientes se enfocaban al tratamiento<br />
de caries, enferme dades periodontales, abscesos<br />
periapicales y abrasiones intensas.<br />
En Babilonia, el Códice de Hammurabi menciona<br />
sanciones para el médico que causara la pérdida de<br />
un diente, lo cual hace suponer que los dientes eran<br />
órganos muy valorados.<br />
Los dientes entre los hebreos simbolizaban fuerza<br />
y belleza. En libros como el Talmud se mencionan aspectos<br />
preventivos, por ejemplo, “el abuso del vinagre<br />
debe evitarse, pues es tan dañino a los dientes como<br />
el humo a los ojos”, y al igual que en el “Corpus Hipocraticus”<br />
grie go, se recomendaba al máximo evitar<br />
la extrac ción de los dientes. Por su parte, los romanos<br />
aconsejaron el uso de un polvo llamado “nitrium” para<br />
pulir los dientes, así como de un palillo de dientes entre<br />
un platillo y otro; ade más, remplazaban los dientes<br />
perdidos con piezas dentales de ternera o carnero o<br />
con próte sis removibles en lámina de oro.<br />
La medicina y la odontología alcanzaron un gran<br />
adelanto en la primera escuela médica fun dada en el<br />
siglo x: la Escuela de Salerno. Se utili zaban instrumentos<br />
para tratar los abscesos, así como para la limpieza<br />
dental. Albucasis reco mendó realizar el aseo de los<br />
dientes con la cor teza de un árbol que tenía propiedades<br />
astrin gentes.<br />
En México, durante la época prehispánica se concedía<br />
gran importancia a una dentadura completa y se<br />
obturaban las cavidades con pol vo de dientes. Asimismo,<br />
se han encontrado muchos vestigios de dientes<br />
adornados con incrustaciones y tallados.<br />
Según los datos relativos a la prevención, la limpieza<br />
de la “toba” o sarro dental ya se reali zaba en el siglo<br />
xvi.<br />
En Inglaterra, en el siglo xvii, el barbero cirujano<br />
Charles Allen escribió el primer libro que menciona<br />
reglas para la pre servación de los dientes.<br />
El “Florilegio medicinal”, escrito por fray Juan de<br />
Esteyneffer, menciona tratamientos, pero la práctica<br />
odontológica permanecía alejada de los avances<br />
científicos y técnicos que existían en otras partes del<br />
mundo. El odontólogo era consi derado charlatán y<br />
sacamuelas. Fue hasta el si glo xix cuando se regularizó<br />
la actividad del barbero cirujano, la cual debía<br />
registrarse en el “Protomedicado”; sin embargo, muy<br />
pocos re unían los requisitos.<br />
En esa época las caries se trataban con áci dos, álcalis<br />
o calor directo y se obturaban con materiales<br />
de poca duración; también se ven día el “agua para<br />
blanquear y fortificar la den tadura”, así como el “elíxir<br />
odontológico” para el dolor de dientes y encías, contra<br />
el sarro y para prevenir el escorbuto.
2 Capítulo 1<br />
Los primeros odontólogos surgieron en la se gunda<br />
mitad del siglo xix y empezaron a reali zar publicaciones;<br />
así, en 1894, Mariano N. Ruiz escribió La dentadura<br />
natural y artificial, manera de conservarla y repararla.<br />
En el siglo xx se elaboró el plan de estudios para<br />
la enseñanza de la odontología con pro pósitos curativos.<br />
En 1916, la Facultad Odon tológica contempló ya<br />
la enseñanza de la higie ne, aunque de manera secundaria.<br />
Por fin, hacia 1960, se valoró la importancia de la<br />
prevención y la salud pública. En la Se cretaría de Salubridad<br />
y Asistencia de México, durante la administración<br />
del doctor José Álvarez Amézquita, se creó<br />
la Dirección de Odon tología cuyos objetivos fueron:<br />
impulsar el desarrollo de procedimientos preventivos<br />
en los diferentes departamentos dentales correspondientes<br />
a los centros de salud del país; divulgar, sobre<br />
todo en el ámbito escolar, los principios higiénicos<br />
para fomentar la salud dental, y es tudiar la viabilidad<br />
de la fluoración del agua potable o la sal de consumo.<br />
En los últimos años, la enseñanza de la odon tología<br />
se ha modificado. Así, se concede impor tancia a la<br />
promoción de la salud y a la prevención de las enfermedades;<br />
por ello, en el primer año de la licencia tura el<br />
estudiante está obligado a llevar un curso de odontología<br />
preventiva y sa lud bucal. Este tipo de cursos<br />
tiene como obje tivo lograr que el futuro odontólogo<br />
valore la importancia de la prevención para disminuir<br />
la frecuencia de enfermedades bucales en los aspectos<br />
individual y colectivo, y de ese modo identificar dicha<br />
prevención como parte esen cial de la salud.<br />
Definición<br />
La odontología preventiva es actitudes, aspecto que<br />
comprende el cambio en la escala de valores, cuyo<br />
valor más alto es el mantenimiento de la salud bucal.<br />
Se puede definir como la suma to tal de esfuerzos por<br />
promover, mantener y res taurar la salud del individuo<br />
mediante la pro moción, el mantenimiento y la restitución<br />
de la salud bucal.<br />
Por lo general, las personas acuden a con sulta<br />
odontológica cuando padecen caries avan zada o sus<br />
complicaciones, y muchas veces lo hacen cuando ya es<br />
imposible conservar los dientes. Por ello, la tendencia<br />
actual de la odon tología es la prevención.<br />
Entre las razones que tienen las personas para evitar al<br />
odontólogo se encuentran:<br />
•<br />
•<br />
•<br />
•<br />
•<br />
•<br />
Negligencia personal.<br />
El tratamiento dental se percibe como costoso.<br />
Pesimismo e ignorancia respecto de la enfermedad<br />
y el tratamiento dental.<br />
Duda sobre los motivos y reacciones del odontólogo<br />
acerca del paciente.<br />
Miedo y ansiedad de naturaleza consciente e inconsciente.<br />
Retroalimentación negativa o declaraciones intranquilizadoras<br />
sobre la odontología recibidas de<br />
amigos o fa miliares.<br />
Pérdida de la confianza en el odontólogo debido a:<br />
Tratamiento previo ineficaz o mal efectuado.<br />
Trabajo anterior de corta durabilidad.<br />
Tratamientos y extracciones innecesarias o dudosas.<br />
Cobro elevado de honorarios por un tratamiento<br />
ine ficaz.<br />
Experiencias previas dolorosas.<br />
Conductas negativas del odontólogo (por ejemplo,<br />
regaño por una deficiente higiene oral).<br />
•<br />
La filosofía de la odontología preventiva incluye:<br />
1. Considerar al paciente como unidad y no como<br />
un conjunto de dientes enfermos.<br />
2. Si el paciente tiene una boca sana, tratar de conservar<br />
la salud.<br />
3. Diagnosticar y tratar lesiones lo más pronto posible.<br />
4. Rehabilitar al paciente.<br />
5. Dar educación para la salud del individuo, la familia<br />
y la comunidad.<br />
Importancia de la odontología<br />
preventiva y niveles<br />
de prevención<br />
Se consideran problemas de salud pública en el mundo<br />
los siguientes:<br />
1. Caries dental.<br />
2. Enfermedad periodontal.<br />
3. Anomalías dentofaciales.
Odontología preventiva 3<br />
4. Maloclusiones.<br />
5. Cáncer bucal.<br />
6. Malformaciones de tejidos dentales.<br />
7. Traumatismos maxilofaciales.<br />
8. Fluorosis dental.<br />
De ese modo, resulta que la caries dental y la enfermedad<br />
periodontal son las enferme dades más frecuentes<br />
en la población, por lo cual existen muchas<br />
personas con caries sin obturar y desdentadas. También<br />
son comunes el cáncer bucal y las maloclusiones.<br />
Lo más importante de estos padecimientos es que<br />
pudieron evitarse.<br />
Un programa de odontología preventiva debe realizarse<br />
en dos niveles: el hogar y el con sultorio.<br />
Las medidas a seguir en el hogar incluyen:<br />
1. Práctica de una higiene bucal correcta, uso de dentífricos<br />
y, cuando se requiera, enjua gues con flúor.<br />
2. Dieta adecuada.<br />
3. Tratamiento de cualquier enfermedad potencialmente<br />
perjudicial para las estructuras de la boca.<br />
4. Acudir a las citas con el odontólogo.<br />
El odontólogo debe considerar al paciente como<br />
una unidad biopsicosocial, es decir, como un ser humano<br />
completo, y por ello debe pre guntar a ese paciente<br />
qué espera del odontólogo y cuáles son sus conocimientos<br />
y sus temores. Asimismo, el programa en<br />
el consultorio debe con templar:<br />
1. Control de placa dentobacteriana.<br />
2. Aplicación de diferentes métodos preventi vos,<br />
entre ellos uso de fluoruro en distintos medios.<br />
3. Instrucción al paciente acerca de dietas y alimentación.<br />
4. Aplicación de pruebas para valorar activi dad de<br />
caries.<br />
5. Uso de selladores en fosetas y fisuras.<br />
6. Educación y enseñanza para el paciente.<br />
7. Seguimiento o control con una frecuencia definida.<br />
Uno de los objetivos primordiales de un pro grama<br />
de odontología preventiva consiste en ayudar al paciente<br />
a mejorar los hábitos que contribuyen al mantenimiento<br />
de la salud bucal. Por tanto, es necesario<br />
enseñarle a re conocer la existencia de estados indeseables<br />
en su boca, a comprender cómo se producen y<br />
a controlarlos.<br />
Respecto al aprendizaje, Bloom estableció seis niveles:<br />
conocimiento, comprensión, aplicación, análisis,<br />
síntesis y evaluación. Por desgracia, la mayoría de las<br />
personas tiene conocimientos y comprende, por ejemplo,<br />
que son necesarios el cepillado y el uso del hilo<br />
dental; muchas demuestran cómo se hace (nivel de<br />
aplicación), pero no lo practican; tampoco ana lizan,<br />
sintetizan ni evalúan estas actividades.<br />
Para que una persona pueda aprender debe tener<br />
motivación, que se puede definir como el conocimiento<br />
y la voluntad interiores para actuar, es decir,<br />
un impulso interior que impele a una persona a satisfacer<br />
una necesidad.<br />
El odontólogo tiene que reconocer el esfuer zo de los<br />
sujetos que tienen una boca sana. También debe estar<br />
consciente de que las personas tienen necesidades, entre<br />
ellas: fisioló gicas, de seguridad, de reconocimiento<br />
social, de autoestima y de autorrealización (fig. 1-1).<br />
Abraham Maslow veía al organismo como un todo<br />
orga nizado e integrado y no sólo como una colección<br />
de órganos y funciones separadas. Se refería a las necesidades<br />
como las fuerzas internas de una perso na<br />
que llevan a la acción. Consideraba que una per sona<br />
realiza acciones para satisfacer estas necesidades,<br />
las cuales pueden ser:<br />
De autorrealización<br />
De autoestima<br />
De reconocimiento social<br />
De seguridad<br />
Fisiológicas<br />
Figura 1-1. Necesidades del individuo se gún Maslow.
4 Capítulo 1<br />
1. Fisiológicas o de supervivencia, es decir, aquellas<br />
que son vitales, como comer, beber agua, tener la<br />
temperatura adecuada, el sueño, etc.<br />
2. De seguridad, por ejemplo, tener tranquilidad,<br />
vivienda, trabajo, etc.<br />
3. De reconocimiento social, que incluyen la necesidad<br />
de amor y pertenencia social.<br />
4. De autoestima, que incluye un sentimiento de valor<br />
personal, logros, dignidad, confianza, destreza,<br />
competencia, prestigio y nivel social.<br />
5. De autorrealización, es decir, tendencia positiva<br />
hacia al desarrollo, conocimientos, alcanzar la<br />
cima en el campo de desempeño, etc.<br />
El individuo satisface por sí solo las necesi dades<br />
fisiológicas, como el hambre y la sed, en tre otras, y<br />
de manera similar trata de cumplir con sus requerimientos<br />
de seguridad, como vi vienda, trabajo, etc.<br />
El odontólogo puede desempeñar una función muy<br />
esencial en la motivación del paciente para satisfacer<br />
necesi dades sociales, como pertenecer a un grupo, ser<br />
aceptado y reconocido, lograr autoestima y dig nidad:<br />
una boca sana, un aliento fresco y una sonrisa agradable<br />
son importantes para alcan zar aceptación social y<br />
mejorar la autoestima.<br />
Problemas de salud bucal<br />
en América e importancia<br />
de la prevención<br />
En 1990, la Organización Mundial de la Salud informó<br />
que sólo una de cada 10 personas tiene la totalidad<br />
de sus dientes sanos y obturados. La caries dental<br />
constituye una enfermedad de carácter universal, manifiesta<br />
su ataque desde el primer año de vida, afecta<br />
más o me nos al 91% de la población mayor de cinco<br />
años de edad y es más frecuente entre las personas de<br />
cinco a 14 años de edad.<br />
Las enfermedades periodontales ocurren con frecuencia<br />
en personas de mayor edad; sin embargo,<br />
junto con la caries constituyen problemas graves de<br />
salud, no sólo por su ca rácter mutilador, sino por las<br />
complicaciones sistémicas generadas.<br />
Es imposible resolver esos problemas con la mera<br />
atención odontológica curativa, ya sea a través de instituciones<br />
de salud públicas o privadas. La situación<br />
es más grave si se ana liza la baja cantidad de recursos<br />
humanos en focada a brindar atención.<br />
Distribución de la caries<br />
a nivel mundial<br />
Según datos de la OMS, la caries es la enfermedad más<br />
frecuen te. Con base en el índice CAOD a los 12 años<br />
de edad, los dientes cariados + ausentes + obturados<br />
de un total de sujetos examinados tenía como objetivo<br />
llegar a índices menores de 2.<br />
En Europa, casi todos los países tienen índices menores<br />
de 2. En países de América, Estados Unidos tiene<br />
un índice de 1.4 y Canadá de 3.4.<br />
En cambio, en México el índice es de 4.5 a 6 y predominan<br />
los dientes cariados sin obturar.<br />
En Centroamérica y Sudamérica se tiene un índice<br />
de 5 y más, con excepción de Argentina y Cuba.<br />
En África, este índice varía entre los diferentes países,<br />
desde menos de 1.5 hasta 4.<br />
Esto mismo se observa en Asia, donde hay países<br />
que tienen un índice entre 3.5 y 5, hasta otros que tienen<br />
de 0.9 a 1.8.<br />
En Australia el índice es de 1.2.
Capítulo 2<br />
Asepsia y antisepsia 5<br />
Asepsia<br />
y antisepsia<br />
Conceptos<br />
El odontólogo debe proteger a sus pacientes de las<br />
infecciones, pero también corre el peligro de que<br />
las personas estén enfermas o sean portadoras, es decir,<br />
que alberguen en su organis mo algún agente patógeno<br />
(capaz de producir enfermedad) sin tener manifestaciones<br />
clínicas. Por ello, la manera más segura de<br />
evitar ries gos es considerar a todos los pacientes como<br />
contaminantes potenciales.<br />
La transmisión de la infección puede llevar se a<br />
cabo:<br />
1. De paciente a odontólogo.<br />
2. De odontólogo a paciente.<br />
3. De paciente a paciente.<br />
Por otra parte, el odontólogo, como miembro de<br />
un equipo de salud, no debe negar atención a pacientes<br />
con enfermedades infecciosas, como infección por<br />
hepatitis B o por virus de inmunodeficiencia humana<br />
(VIH). Por ello, debe cono cer muy bien las medidas<br />
de asepsia y antisepsia. En este sentido, es necesario<br />
revisar los siguientes conceptos: infección, asepsia,<br />
antisepsia y con taminación cruzada.<br />
Infección es la entrada y desarrollo o mul tiplicación<br />
de un agente patógeno biológico en el organismo de<br />
una persona o un animal, y el afectado puede tener<br />
manifesta ciones clínicas (enfermedad infecciosa) o<br />
carecer de ellas. La in fección no manifiesta sólo puede<br />
identificarse por métodos de laboratorio o pruebas específicas,<br />
por lo cual se le conoce también como infección<br />
asintomática, inaparente u oculta. La presencia de<br />
agentes infecciosos vivos en la superficie del cuerpo,<br />
en prendas de vestir o artículos sucios no constituye<br />
infección sino contaminación.<br />
Asepsia es el estado libre de infección; cons tituye el<br />
método de prevenir infecciones mediante la destrucción<br />
o evitación de agentes patógenos, principalmente<br />
por medios físicos. El material aséptico no posee<br />
microorganismos vivos ni sus formas de resistencia y<br />
permite tra bajar con asepsia.<br />
Antisepsia es el conjunto de procedimientos o métodos<br />
que disminuyen o destruyen micro organismos<br />
en tejidos vivos. Al utilizar produc tos bacteriostáticos<br />
o germicidas en las perso nas se realiza antisepsia.<br />
En el ámbito odontológico, los principales tipos<br />
de exposición a microorganismos patóge nos o potencialmente<br />
patógenos son:<br />
1. Accidente percutáneo con objetos cortantes o<br />
punzantes contaminados.<br />
2. Salpicadura de productos biológicos conta minados<br />
hacia la mucosa conjuntival.<br />
3. Aerosolización y posterior inhalación de productos<br />
biológicos contaminados.<br />
4. Exposición de piel lesionada a productos biológicos<br />
contaminados.<br />
5. Contaminación del campo operatorio como consecuencia<br />
de accidente percutáneo o le siones cutáneas<br />
exudativas o vesiculares del odontólogo.<br />
Lo anterior obliga a conocer el concepto de contaminación<br />
cruzada, que consiste en el paso de un<br />
agente infeccioso de una persona a otra a través de<br />
un objeto, instrumento o material contaminado. Para<br />
prevenirla es indispensable:
6 Capítulo 2<br />
1. Reducir el campo de contaminación. Para disminuir<br />
la dispersión de aerosoles, gotas y salpicaduras<br />
debe colocarse al paciente en posición correcta<br />
y, en caso necesario, utilizar succión y un dique<br />
de hule. El campo de contaminación también disminuye<br />
si se evi ta el contacto con objetos, como<br />
teléfonos o agendas, durante los procedimientos<br />
opera torios. Si es imprescindible utilizar dichos<br />
objetos deben colocarse otros guantes.<br />
2. Lavarse las manos.<br />
3. Utilizar instrumental y material desechable siempre<br />
que sea posible.<br />
4. Manejar de manera adecuada y cuidadosa todo<br />
el material e instrumental punzocortante.<br />
5. Realizar los procedimientos de limpieza, desinfección<br />
y esterilización adecuados a las ca racterísticas<br />
del equipo e instrumental conta minado.<br />
Esterilización y desinfección<br />
La esterilización es el proceso usado para des truir toda<br />
forma de vida microbiana, por ejem plo, virus, bacterias,<br />
hongos y esporas en cual quier parte u objeto.<br />
La desinfección consiste en eliminar las for mas vegetativas<br />
de los microorganismos pató genos en todos<br />
los ambientes, materias o par tes en que sean nocivas y<br />
en diversos niveles de actividad biocida. Los desinfectantes<br />
de nivel biocida bajo, como los compuestos de<br />
amonio cuaternario, son sustancias que sólo destruyen<br />
formas vegetativas de ciertos microorganismos<br />
ambientales o superficiales comunes, pero no tienen<br />
efecto en virus o microorganismos resis tentes, como<br />
el virus de la hepatitis B o las micobacterias. Los desinfectantes<br />
de nivel biocida intermedio (p. ej., los compuestos<br />
clorados, yodóforos y fenoles) tienen mayor<br />
poder por que inactivan a los microorganismos mencionados.<br />
Por último, los antisépticos de nivel biocida<br />
alto inactivan a todos los microor ganismos y a las esporas<br />
bacterianas; un ejem plo de ellos es el glutaraldehído<br />
al 2% durante seis a 10 h.<br />
Antes de establecer qué objetos deben este rilizarse<br />
y cuáles deben desinfectarse es indis pensable tener en<br />
cuenta la siguiente clasificación:<br />
1. Objetos críticos. Es el instrumental que penetra<br />
tejidos blandos o duros de la boca, por ejemplo:<br />
explorador, espejo, bisturí, fresas, fór ceps y, en<br />
general, instrumental quirúrgico. Requieren de<br />
esterilización.<br />
2. Objetos semicríticos. Son los que tocan pero no<br />
penetran tejidos blandos o duros, por ejemplo,<br />
el condensador de amalgama y la pieza de mano.<br />
Es preferible esterilizarlos pero pueden someterse<br />
a desinfección de nivel alto.<br />
3. Objetos no críticos. Son las manijas de la lámpara,<br />
aparato de rayos X, mesa de trabajo, etc.<br />
Puede aplicarse en ellos la desinfección de nivel<br />
intermedio.<br />
Cuadro 2-1. Temperaturas y tiempos mínimos recomendados para la esterilización por calor de instrumentos y materiales<br />
Método según materiales<br />
Grados<br />
centígrados kg/cm 2 Minutos<br />
Hornos de calor seco, aire estático: instrumental no envuelto 170 – 60<br />
Hornos de calor seco, flujo forzado: instrumental no envuelto 200 – 6<br />
Vapor de agua a presión: instrumental no envuelto 134 2 3<br />
115 1 15<br />
Vapor de agua a presión, autoclave: instrumental envuelto 134 2 12<br />
115 1 30<br />
Vapor de agua a presión, autoclave: campos quirúrgicos, gasas 121 1 30<br />
Vapor de agua a presión, autoclave: desechos biológicos 121 1 90<br />
Vapor de químico a presión, quemiclave: instrumentos envueltos 132 1.5 20<br />
Fuente: SSA. Norma Oficial Mexicana NOM-013-SSA2, para la prevención y control de enfermedades bucales. México: SSA, 1994.
Asepsia y antisepsia 7<br />
Procedimientos de esterilización<br />
Éstos incluyen vapor a presión (autoclave), ca lor seco,<br />
gas de óxido de etileno, vapor quími co y soluciones<br />
químicas. De ellos, los más recomendables son el vapor<br />
a presión y el calor seco (cuadro 2-1), pero es muy<br />
importante la var con cuidado el instrumental para<br />
eliminar restos de sangre, saliva, moco, tejido y otros.<br />
El lavado puede realizarse con agua y jabón detergente<br />
y la ayuda de un cepillo, o mediante un limpiador<br />
ultrasónico; este último tie ne la ventaja de despegar<br />
residuos de los sitios inalcanzables para el cepillo.<br />
El personal res ponsable de limpiar y descontaminar el<br />
instrumental debe utilizar guantes gruesos de hule.<br />
Justo después de lavar los instrumentos, es indispensable<br />
secarlos para evitar su oxidación y corrosión.<br />
Lo mismo debe hacerse en caso de esterilizar con<br />
solución química, para no alte rar la dilución de ésta.<br />
Las recomendaciones a seguir para prepa rar el instrumental<br />
de esterilización son las si guientes:<br />
1. En lo posible, limitar el tamaño y la densidad<br />
del paquete, así como su cubierta protectora<br />
para asegurar la penetración uniforme del vapor<br />
(fig. 2-1).<br />
2. Colocar la carga separada de manera que presente<br />
la menor resistencia posible al paso del vapor<br />
a través de ella.<br />
3. Utilizar siempre “papel testigo” adhesivo o biológico<br />
que compruebe que el material ha sido<br />
esterilizado.<br />
4. Los objetos cortantes o con posibilidades de<br />
romperse se envuelven previamente en una toalla<br />
de papel.<br />
5. Para facilitar el manejo posterior pueden en volverse<br />
juntos varios instrumentos, por ejemplo:<br />
A. Instrumental básico para examen inicial: espejo,<br />
explorador, excavador, pinzas para algodón,<br />
sonda periodontal, torundas, gasas y<br />
abatelenguas.<br />
B. Instrumental básico para alisado radicular y<br />
raspado gingival: raspadores y curetas.<br />
C. Instrumental básico para pulido: ángulo para<br />
profilaxis, copa de caucho, cepillo oclusal y<br />
vasito de vidrio.<br />
2<br />
1<br />
3 4 5<br />
Figura 2-1. Manera de envolver un paquete para efectuar esterilización.
8 Capítulo 2<br />
Vapor a presión<br />
En la esterilización eficaz se utiliza calor a altas temperaturas<br />
en forma de vapor saturado bajo presión.<br />
El método físico más aceptable para esterilizar instrumentos<br />
es la autoclave, que pro porciona 775.72<br />
mmHg (15 libras) de presión a nivel del mar, y por<br />
lo general se usa a 121°C durante 30 min, aunque el<br />
tiempo puede disminuirse con temperaturas más altas.<br />
Sus ventajas son: ciclo de corta duración, buena<br />
penetración y amplio margen de los materiales factibles<br />
de procesar sin afectarlos.<br />
Para esterilizar en la autoclave es recomen dable<br />
envolver el equipo con tela de algodón, papel estraza,<br />
bolsas de nailon o celofán.<br />
Calor seco<br />
El calor seco es menos efectivo que la autocla ve, pero<br />
es más económico. Tiene la ventaja de ser eficaz y seguro<br />
para esterilizar instrumen tos de metal y espejos,<br />
no daña superficies cor tantes y no es corrosivo; sin<br />
embargo, el ciclo para esterilizar es largo, tiene menos<br />
penetra ción y puede alterar el color. Durante el procedimiento<br />
es necesario utilizar una envoltura de papel<br />
estraza o celofán, pero no tela de algo dón porque se<br />
quema; el hule y el plás tico tampoco deben emplearse<br />
porque se destruyen.<br />
La vigilancia de la esterilización es muy im portante.<br />
Los indicadores son indispensables en cada ciclo de<br />
esterilización, porque la eficacia de los aparatos puede<br />
disminuir en cualquier momento. El cambio de color<br />
en esos indicado res por lo general señala que se<br />
alcanzaron las condiciones para esterilizar, pero no<br />
garantiza la esterilización del contenido. Por tanto, se<br />
re comienda verificar más o menos cada semana la eficacia<br />
de la esterilización mediante tiras de esporas; al<br />
germinar, éstas producen ácidos y el pH se mide con<br />
un papel indicador.<br />
Gas de óxido de etileno<br />
Se usa para esterilizar grandes cantidades de material<br />
e instrumental. Las desventajas son que el ciclo de esterilización<br />
requiere de cuatro a cinco h, el equipo es<br />
costoso, el plástico y el caucho retienen el gas, y éste<br />
produce irrita ción en ojos y nariz.<br />
Vapor químico<br />
Se puede generar de la mezcla de alcoholes, cetonas,<br />
formaldehído y agua hirviendo a una presión de<br />
1034.3 a 1034.87 mmHg (20 a 25 libras) durante 20 a<br />
30 min.<br />
Soluciones químicas<br />
La única eficaz es el glutaraldehído al 2% por 10 min.<br />
Procedimientos de desinfección<br />
La desinfección por lo general se refiere al uso de productos<br />
químicos líquidos que actúan a tem peratura<br />
ambiente en instrumentos o superficies.<br />
De acuerdo con la Food and Drug Administration<br />
(FDA), los desinfectantes son sustancias químicas con<br />
capacidad para destruir en 10 a 15 min los gérmenes<br />
depositados en un material inerte o vivo, abarcando<br />
en la destruc ción todas las formas vegetativas de bacterias,<br />
hongos y virus (excepto el de la hepatitis B) y<br />
alterando lo menos posible el sustrato donde residen.<br />
Algunas sustancias actúan como desinfectan tes y<br />
al mismo tiempo como esterilizantes; un ejemplo de<br />
ello es el glutaraldehído, cuya actividad depende de su<br />
concentración y el tiempo utilizado. La eficacia de un<br />
desinfectante de pende de varios factores:<br />
1. Concentración y naturaleza de los microorganismos<br />
contaminantes.<br />
2. Concentración del desinfectante.<br />
3. Tiempo de exposición.<br />
4. Cantidad de residuos orgánicos acumulados.<br />
A diferencia del antiséptico, el desinfectante no<br />
se utiliza en tejidos vivos. De acuerdo con Molinari,<br />
Campbell y York, el desinfectante ideal tiene las siguientes<br />
propiedades:<br />
1. Posee amplio espectro antimicrobiano.<br />
2. Tiene rapidez de acción letal sobre formas vegetativas<br />
y esporas de bacterias, hongos, protozoarios<br />
y virus.<br />
3. No se altera por factores físicos.<br />
4. Conserva su eficacia ante la presencia de materia<br />
orgánica (sangre, saliva, heces, etc.).<br />
5. Es compatible con jabones, detergentes y otros<br />
productos químicos.
Asepsia y antisepsia 9<br />
6. Carece de toxicidad.<br />
7. Es compatible con la superficie, es decir, no corroe<br />
instrumentos ni otras superficies me tálicas.<br />
No daña ropa, hule, plástico u otros materiales.<br />
8. Es fácil de usar.<br />
9. Es inodoro.<br />
10. No es costoso.<br />
Los desinfectantes afectan la pared celular, los elementos<br />
del citoplasma, sobre todo las enzimas y el<br />
material nuclear. Entre los acepta dos por la Asociación<br />
Dental Americana (ADA) se encuentran el yodóforo,<br />
los agentes clorados y los glutaraldehídos, los<br />
cuales tienen venta jas y desventajas.<br />
El yodóforo (yodopolivinilpirrolidona) es de amplio<br />
espectro; es decir, destruye bacterias, Mycobacterium<br />
tuberculosis, virus hidrofílicos y lipofílicos. Asimismo,<br />
ejerce su acción a los cinco o 10 min, es barato y eficaz y<br />
actúa aun cuan do haya residuos biológicos. Sin embargo,<br />
no es esterilizante, es inestable a temperaturas al tas, debe<br />
prepararse a diario, puede modi ficar el color de algunas<br />
superficies y se inacti va con el agua dura y el alcohol.<br />
Los agentes clorados tienen acción antimicro biana<br />
rápida y amplio espectro, pues destru yen bacterias, virus<br />
y Mycobacterium tuberculosis; también son baratos<br />
y eficaces en solución diluida. Sin embargo, destruyen<br />
esporas sólo en concentraciones elevadas, no pueden<br />
utili zarse de nuevo, deben prepararse diariamente,<br />
disminuyen su actividad ante la presencia de materia<br />
orgánica, tienen olor desagradable y persistente, irritan<br />
la piel y los ojos, corroen los metales y degradan el<br />
hule y el plástico.<br />
Por último, los glutaraldehídos son muy efi caces<br />
para destruir microorganismos, tienen amplio espectro<br />
antimicrobiano, eliminan espo ras a temperatura<br />
ambiente después de seis a 10 h, casi nunca son corrosivos<br />
y penetran en sangre, pus y restos orgánicos;<br />
asimismo, son de efecto prolongado y útiles para desinfectar<br />
o esterilizar el hule y el plástico. Pero, por otra<br />
parte, no son antisépticos, no desinfectan superficies,<br />
irritan con intensidad los tejidos, pue den producir<br />
alergia, alteran el color de algu nos metales, no pueden<br />
verificarse de manera biológica, su uso en ocasiones<br />
posteriores está en función de la cantidad de restos<br />
orgánicos y su actividad corrosiva depende de la dilución<br />
a la cual se utilicen.<br />
Los agentes químicos para desinfección y esterilización<br />
se presentan en el cuadro 2-2.<br />
Precauciones universales<br />
La boca es una cavidad donde abundan micro organismos,<br />
ya sea en sangre, saliva o en placa dentobacteriana.<br />
Esos microorganismos pueden infectar a través<br />
de heridas microscópicas y contaminar instrumentos<br />
estériles, equipo den tal y demás superficies.<br />
La contaminación es la presencia de un agente infeccioso<br />
en la superficie del cuerpo; también en ves-<br />
Cuadro 2-2. Agentes químicos para desinfección y esterilización, o ambos<br />
Nombre comercial Clasificación química Desinfectante Esterilizante Vida media<br />
Blanqueador casero Hipoclorito de sodio Diluido 1:5 a 1:100, 10 a 30 min — 1 día<br />
Yodine Yodóforo (yodopolivinilpirrolidona) Diluido 1:213, 10 a 30 min — ?<br />
Sporicidin<br />
Glutaraldehído al 2% alcalino con<br />
Diluido 1:16, 10 min Sin diluir 15 días<br />
amortiguador fenólico<br />
Glutarex Glutaraldehído al 2% neutral Sin diluir, 10 min 6 h, 45 min ?<br />
Gafidex<br />
Glutaraldehído al 2% con bicarbonato Sin diluir, 10 min Sin diluir, 10 h ?<br />
de sodio<br />
Cidex 7 Glutaraldehído al 2% alcalino Sin diluir, 90 min Sin diluir, 10 h ?<br />
Los compuestos de amonio cuaternario, como el cloruro de benzalconio, no son aceptados como desinfectantes de alta capacidad o<br />
potencia de alto nivel por la Asociación Dental Americana desde 1978.
10 Capítulo 2<br />
tidos, ropa de cama, juguetes, instrumentos quirúrgicos,<br />
apósitos u otros objetos inanimados o sustancias,<br />
incluso en el agua y los alimentos.<br />
A diferencia de la contaminación, la polución denota<br />
la presencia de sustancias nocivas pero no siempre<br />
infecciosas en el ser humano.<br />
Desde 1980 se reconoció la importancia de la<br />
transmisión del virus de la hepatitis B en el ámbito<br />
odontológico y posteriormente el sín drome de inmunodeficiencia<br />
adquirida (sida). Por ello, la Asociación<br />
Dental Americana y otras organizaciones odontológicas<br />
se dedicaron a divulgar las precauciones universales<br />
enuncia das por los Centers for Disease Control<br />
(CDC) con el propósito de evitar la transmisión cruzada<br />
de cualquier tipo de microorganismos entre los pacientes<br />
y los profesionales de la salud.<br />
Las precauciones universales se basan en los siguientes<br />
puntos:<br />
1. Lavado y cuidado de las manos.<br />
2. Barreras protectoras.<br />
3. Uso de instrumental cortante o punzante.<br />
4. Limpieza, desinfección y esterilización del material<br />
recuperable.<br />
5. Aseo de superficies contaminadas.<br />
6. Recolección de residuos contaminados.<br />
7. Recolección y esterilización de ropa contaminada.<br />
8. Vacunación contra la hepatitis B.<br />
Lavado y cuidado de las manos<br />
La piel de las manos alberga una flora habitual (p. ej.,<br />
Staphylococcus epidermidis, micrococos y difteroides)<br />
independientemente de la flora que hay en el ambiente;<br />
además, aunque se la ven las manos, debajo de la<br />
porción libre de las uñas puede acumularse sangre.<br />
Por esas razo nes, es necesario mantener las uñas<br />
cortas y uti lizar guantes, para proteger la piel de las<br />
sustancias químicas como desinfectan tes, soluciones<br />
para revelar radiografías y otros materiales dentales.<br />
Al empezar el día de trabajo es indispensa ble quitarse<br />
las alhajas y revisar que la piel esté libre de abrasiones<br />
y heridas. A continuación, se lavan las manos<br />
hasta los antebrazos con al gún jabón germicida (cuadro<br />
2-3) y un cepillo o esponja estériles durante 20<br />
Cuadro 2-3. Jabones antisépticos<br />
Nombre comercial<br />
Clasificación química<br />
Hibiscrub Gluconato de clorhexidina al 2%<br />
Yodine J<br />
Jabón neutro, yodopovidona<br />
Antibenzil<br />
Jabón neutro, cloruro de benzalconio<br />
min. La piel lavada se enjuaga con agua durante 10<br />
min y se seca con toallas limpias de papel. Este procedimiento<br />
de lavado y enjuague debe efectuar se antes<br />
de atender a pacientes no quirúrgicos.<br />
En caso de prepararse para realizar alguna ci rugía,<br />
las uñas deben limpiarse con un palillo de puntas<br />
redondeadas. El cepillado para la var las manos debe<br />
durar 7 min y, al igual que el enjuague, debe empezar<br />
por los dedos y descender hasta los antebrazos. Durante<br />
el lavado y el enjuague, es indispensable co locar los<br />
dedos en posición más elevada que los codos y cuidar<br />
que el agua escurra hacia estos últimos y nunca hacia<br />
los dedos. En este caso, el secado se realiza con toallas<br />
estériles. Asimis mo, antes de tocar al paciente debe<br />
evitarse to car objetos o superficies contaminados.<br />
Barreras protectoras<br />
Las técnicas de barrera son elementos y procedimientos<br />
utilizados para evitar la exposición del individuo<br />
a microorganismos patógenos, y se refieren al<br />
uso de guantes, batas o uniformes, gorras, máscaras,<br />
pantallas de acrílico, cubrebocas y lentes, dique de<br />
hule y todas las cubier tas de superficies que protegen<br />
del ambiente.<br />
Guantes<br />
La sífilis, la hepatitis B y el herpes simple son enfermedades<br />
que presentan mayor riesgo de transmisión por<br />
el contacto de piel erosio nada con mucosa, saliva o<br />
sangre infectados. El síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida se con tagia con sangre, por lo cual antes de<br />
atender a cualquier paciente deben utilizarse guantes.<br />
Los guantes, ya sea estériles o no estériles, se eligen<br />
según el tipo de atención que se va a brindar.<br />
Por ejemplo, para exploración y actividades no quirúrgicas<br />
se recomiendan guantes de látex no estériles,
Asepsia y antisepsia 11<br />
pero pueden usarse de vinil cuando hay necesidad de<br />
explorar y no se cuenta con guan tes de látex; cuando<br />
estos últimos ocasionan irri tación también conviene<br />
utilizar de vinil, o bien de algodón entre la piel y los<br />
de látex.<br />
Para el manejo de pacientes con riesgo alto se recomienda<br />
colocarse simultáneamente dos pares de<br />
guantes estériles y, en caso de que se rompan, hay que<br />
lavarse las manos y sustituir los guantes por otros dos<br />
pares. Durante el la vado de material e instrumental es<br />
indispensa ble utilizar guantes gruesos de látex o caucho<br />
no desechables.<br />
Después de quitarse los guantes, se deben lavar de<br />
nuevo las manos y usar un nue vo par con el siguiente<br />
paciente.<br />
Por último, los guantes son de gran utilidad, pero<br />
tienen limitaciones, pues no protegen de instrumentos<br />
punzantes ni cortantes. Por ello, si se perforan o<br />
cortan deben cambiarse de in mediato, además de seguir<br />
las medidas que se mencionan más adelante.<br />
estafilococos, estrep tococos, difteroides, neumococos,<br />
Mycobacterium tuberculosis, virus de la influenza,<br />
virus de la hepatitis, virus del herpes y Neisseria; con<br />
excepción de los estafilococos, esos microorganismos<br />
no se encuentran en la atmósfera en con diciones normales,<br />
por lo cual el odontólogo debe protegerse ojos,<br />
boca y nariz (fig. 2-2).<br />
Las máscaras pueden ser de fibra sintética y deben<br />
filtrar 95% de las partículas de 3.4 mμ; asimismo,<br />
han de mantener inalterable el efec to de filtrado por<br />
lo menos durante 30 min cuando se forman aeroso-<br />
Ropa (batas o uniformes)<br />
El personal odontológico debe utilizar batas o uniformes<br />
protectores para evitar la contami nación de la<br />
piel y la ropa de calle.<br />
Durante la cirugía es recomendable que los pacientes<br />
usen ropa desechable y estéril. Si se trata de<br />
un procedimiento más sencillo, la ropa estéril sólo se<br />
cambia (no se desecha) con cada paciente. Después de<br />
su uso, la ropa debe colocarse en una bolsa de plástico<br />
para sacarla del consultorio.<br />
Gorras<br />
El uso de gorra desechable es necesario duran te procedimientos<br />
en que existe riesgo de sal picaduras de<br />
sangre u otros líquidos orgánicos.<br />
Máscaras, cubrebocas, pantallas<br />
de acrílico y lentes<br />
Al utilizar una turbina de alta velocidad, las partículas<br />
de agua, saliva, sangre y otras se ato mizan y se expelen<br />
por la boca. De ese modo, a 60 cm de la boca del<br />
paciente se han encontra do microorganismos como<br />
Figura 2-2. Uso de bata, gorra, guantes y lentes para evitar<br />
la exposición del individuo a microorganismos<br />
patógenos.
12 Capítulo 2<br />
les muy contaminados, como al utilizar instrumental<br />
rotatorio de alta velocidad. Dejan de actuar como<br />
barrera cuan do su superficie exterior se impregna de<br />
micro organismos, por lo cual es preciso cambiarlas<br />
con cada paciente.<br />
Los cubrebocas pueden ser de tela o de mate rial menos<br />
poroso, y por consiguiente son me nos permeables<br />
al aerosol. Deben cambiarse por lo menos cada hora.<br />
Por otra parte, los ojos deben protegerse no sólo de<br />
microorganismos, sino también de sus tancias químicas<br />
como los desinfectantes y ma terial de restauración<br />
e incluso del daño físico. Para ello, se utilizan gafas<br />
protectoras y es me jor si tienen protecciones laterales<br />
como los goggles (fig. 2-3).<br />
La división sanitaria de la Occupational Safety and<br />
Health Administration (OSHA) acordó en 1987 que<br />
A<br />
B<br />
C<br />
Figura 2-3. Barreras protectoras que sirven para evitar la exposición del individuo a microorganismos patógenos.<br />
A, cubrebocas; B, lentes protectores; C, goggles.
Asepsia y antisepsia 13<br />
las gafas protectoras fueran lo bastante confortables<br />
para no tener que ajustarlas varias veces, y durante las<br />
técnicas operatorias se reco mienda usar gafas pantalla<br />
que cubran toda la cara. Las gafas deben elaborarse<br />
con materia les que permitan el lavado y desinfección<br />
con glutaraldehído al 2% o por la acción del calor.<br />
Dique de hule<br />
El uso de dique de hule es esencial para reducir al<br />
máximo la posibilidad de contaminación del campo<br />
operatorio.<br />
Uso de instrumental cortante<br />
o punzante<br />
Todo material punzocortante, como las agujas y las<br />
hojas de bisturí, es infeccioso en potencia. Por ello se<br />
requiere manejarlo con sumo cui dado para reducir al<br />
mínimo la posibilidad de punciones accidentales.<br />
Las jeringas estériles y las agujas desechables tienen<br />
que ser nuevas para cada paciente. Cuan do es necesario<br />
inyectar a un mismo paciente varias veces, la jeringa<br />
y la aguja se dejan sin protector en un campo estéril,<br />
pero la última se cubre con una gasa; asimismo, es necesario<br />
cui dar de no dejarlas en el campo de trabajo.<br />
No debe intentarse colocar el protector de manera directa;<br />
si se desea hacerlo, puede ponerse en la charola<br />
e introducir la jeringa con lentitud y de modo paralelo<br />
al protector, o bien sostener el protector con pinzas.<br />
El sistema más seguro es la jeringa con aguja integral<br />
desechable. Así se evita todo riesgo porque la<br />
jeringa tiene incorporada una aguja con un capuchón<br />
no extraíble que se desliza.<br />
Las agujas desechables de las jeringas deben guardarse<br />
posteriormente en recipientes especia les rígidos<br />
de cristal, metal o cartón grueso, colo cados en el sitio<br />
más cercano a donde se utilicen.<br />
Limpieza, desinfección y esterilización<br />
del material recuperable<br />
Equipamientos dentales<br />
El equipo y mobiliario dental más recomenda ble es el<br />
que ofrece el mayor número de super ficies lisas y tiene<br />
mandos integrados en el pe dal del equipo para evitar<br />
la manipulación manual y posible contaminación<br />
con productos biológicos de la boca del paciente. Si<br />
no se cuenta con un equipo como el mencionado, las<br />
áreas que se pueden contaminar se deben cubrir con<br />
láminas protectoras de papel aluminio, plás tico, papel<br />
plastificado o cualquier otro material que garantice<br />
sellado e impermeabilidad.<br />
Los Centers for Disease Control, la Asocia ción Dental<br />
Americana y la Occupational Safety and Health Administration<br />
recomiendan cubrir las zonas con mayor<br />
riesgo de contaminación y además limpiarlas con una<br />
tela humedecida por un agente limpiador vehiculizado<br />
en una solu ción acuosa para facilitar la disolución<br />
de resi duos orgánicos. También aconsejan rociar después<br />
las superficies con algún desinfectante y dejarlo<br />
actuar durante 10 min.<br />
En México se recomienda limpiar y desin fectar las<br />
áreas de trabajo al finalizar las activi dades diarias. La<br />
limpieza debe hacerse con una toalla absorbente para<br />
eliminar restos de saliva y sangre, y luego con germicidas<br />
como yodóforos, fenoles sintéticos o compuestos clorados.<br />
Estos últimos se aplican en aerosol, con excep ción<br />
del hipoclorito de sodio. Después de aplicar desinfectante<br />
para limpiar, es necesario secar el exceso, rociarlo de<br />
nuevo y a continuación dejarlo actuar por 10 min.<br />
Un método eficaz consiste en aplicar, con una toalla<br />
de papel, una solución de hipoclorito de sodio (blanqueador<br />
casero) preparada al día. Las concentraciones<br />
recomendables de dicha so lución dependen de la cantidad<br />
de material or gánico a eliminar y pueden ser de<br />
500 ppm (dilu ción de 1:100, es decir, 10 ml de blanqueador<br />
en 1 L de agua) y hasta de 5 000 ppm (dilución<br />
de 1:10, o sea, 100 ml de blanqueador en 1 L de agua).<br />
Las superficies aparentemente no contami nadas<br />
también deben descontaminarse y des infectarse con<br />
solución de hipoclorito de sodio (1:100). Pero como<br />
esta sustancia es corrosiva, no se recomienda usarla<br />
en superficies metálicas.<br />
Durante la limpieza y desinfección es preciso utilizar<br />
guantes gruesos, cubreboca y lentes, así como ropa<br />
especial. Las cubiertas usadas también pueden cambiarse<br />
al atender a otro paciente.<br />
Conducciones internas<br />
La Asociación Dental Americana recomienda que el<br />
agua que se utilice en los tratamientos dentales no
14 Capítulo 2<br />
quirúrgicos debe tener menos de 200 UFC/ml de bacterias<br />
no coliformes.<br />
La unidad de agua puede contaminarse por dos<br />
motivos:<br />
1. Aspiración de productos orgánicos contaminados a<br />
través de la turbina y jeringa de agua-aire. Esto<br />
puede resolverse con la adición de una vál vula<br />
antirreflujo, así como por esterilización de la<br />
turbina y la jeringa de agua-aire an tes de usarlas<br />
con cada paciente.<br />
2. El agua remanente favorece la colonización bacteriana.<br />
Para evitar esta situación, al iniciar la<br />
jornada es forzoso aplicar desinfectantes clorados<br />
y clorhexidina de 0.5 a 1 ppm, y además<br />
expulsar agua durante 3 min a través de las jeringas.<br />
También conviene dejar correr el agua<br />
durante 30 s después de tratar a cada paciente,<br />
con la fi nalidad de eliminar cualquier material<br />
que pudiera haber sido aspirado.<br />
Jeringas de agua o aire y cavitrón<br />
Se prefieren las puntas de jeringas para agua o aire<br />
desechables. El cuerpo de esas puntas debe cubrirse<br />
con hojas protectoras, las cuales tienen que cambiarse<br />
al finalizar la acción terapéutica.<br />
Las jeringas de aire o agua y la pieza de mano deben<br />
desinfectarse o, cuando así lo considere el fabricante,<br />
esterilizarse por alguno de los mé todos disponibles.<br />
Es posible esterilizarlas por inmersión con glutaraldehído<br />
al 2% por 6 h y 45 minutos.<br />
Aparatos radiológicos<br />
La cuba, el cono y los mandos del equipo ra diológico<br />
se cubren con láminas u hojas de pro tección.<br />
Fresas e instrumental manual<br />
La Asociación Dental Americana (1992) y los Centers<br />
for Disease Control (1989) recomiendan esterilizar<br />
todo el instrumental que penetre en tejidos bucales y<br />
toque hueso. La esterilización por calor es necesaria<br />
para el instrumental que sólo hace contacto con la<br />
mucosa bucal y la desinfección química para el instrumental<br />
que se deteriora por la acción del calor. En<br />
el cuadro 2-4 se presenta una guía de métodos de esterilización<br />
y desinfección de instrumentos y ma terial<br />
usados en odontología.<br />
Antes de proceder a la esterilización es for zoso seguir<br />
varios pasos:<br />
1. Prelavado. Disminuye la carga microbiana y por<br />
consiguiente reduce el riesgo de conta gio en la<br />
limpieza manual. El instrumental contaminado<br />
se sumerge durante 10 min en jabón desinfectante.<br />
El glutaraldehído al 2% en solución acuosa<br />
es de gran utilidad. También es recomendable el<br />
ultrasonido durante seis a 10 min para eliminar<br />
los re siduos orgánicos hasta en las fresas de<br />
tungs teno con varias hojas de corte, las cuales<br />
son difíciles de limpiar.<br />
2. Limpieza manual. La Asociación Dental Americana,<br />
los Centers for Disease Control y la Food<br />
and Drug Administration resaltan la importancia<br />
de la limpieza manual con agua y un cepillo<br />
grueso y consistente para frotar. El personal<br />
tiene que protegerse con ropa adecuada, gafas y<br />
guantes.<br />
3. Secado y empaquetado. El material metálico del<br />
instrumental requiere de secado perfecto para<br />
evitar la acción corrosiva de la humedad. Una<br />
vez seco, es necesario empaque tarlo en bolsas o<br />
disponerlo en bandejas aireadas.<br />
4. Esterilización. El material ya esterilizado debe<br />
conservarse en una zona cerrada y limpia.<br />
Instrumental rotatorio<br />
Las piezas de mano deben recubrirse con papel aluminio<br />
y desinfectarse con alguna solución química. En<br />
algunos países se utilizan:<br />
1. Decident. Consta de dos esponjas impregna das<br />
en una mezcla de derivados del fenol. La pieza<br />
de mano se coloca entre las espon jas durante 10<br />
min y luego se enjuaga.<br />
2. Sistema STS (Sporicidin Turbonet Système). Consiste<br />
en un recipiente relleno de partícu las rígidas<br />
e impregnadas con un líquido desinfectante<br />
denominado Sporocidin, el cual se elabora con<br />
fenol y glutaraldehído. Las piezas de mano se<br />
introducen en el recipien te y se realizan movimientos<br />
verticales y de rotación durante 30 s.
Asepsia y antisepsia 15<br />
Cuadro 2-4. Guía de métodos de esterilización y desinfección de instrumentos y material usado en odontología, o ambos<br />
Autoclave Calor seco Agentes químicos<br />
Instrumental de acero inoxidable (Al)<br />
Pinzas de curación 1 1 2<br />
Exploradores 1 1 2<br />
Cucharillas 1 1 2<br />
Jeringas Carpulle 1 1 2<br />
Condensadores de amalgama 1 1 2<br />
Portaamalgama 1 1 2<br />
Banda y portamatriz 1 1 2<br />
Pinza portagrapa 1 1 2<br />
Grapas 1 1 2<br />
Arco para dique de hule 1 1 2<br />
Curetas de profilaxis 1 1 2<br />
Sondas periodontales 1 1 2<br />
Losetas de vidrio 1 1 2<br />
Espejos 2 1 3<br />
Fresa (carburo y diamante) 3 1 3<br />
Puntas de cavitrón 3 3 1<br />
Copas de hule* – – –<br />
Instrumental de cirugía<br />
Fórceps 1 1 2<br />
Pinzas hemostáticas 1 1 2<br />
Alveolótomo 1 1 2<br />
Pinzas de disección 1 1 2<br />
Lima para hueso 1 1 2<br />
Gubias 1 1 2<br />
Elevadores 1 1 2<br />
Legra 1 1 2<br />
Mango de bisturí 1 1 2<br />
Agujas y material de sutura* – – –<br />
Portaagujas 1 1 2<br />
Separadores 1 1 2<br />
Fresas quirúrgicas 1 1 2<br />
Tijeras 3 1 2<br />
Hojas de bisturí* – – –<br />
Instrumental de prótesis<br />
Cucharillas de aluminio, cromo, plateadas 1 1 2<br />
Piedras de diamante 2 1 2<br />
Piedras de pulido 1 2 3<br />
Piedras agudas y cortantes 2 2 3<br />
Discos de pulido 2 3 2<br />
Instrumental de ortodoncia<br />
Pinzas de acero inoxidable 1 2 3<br />
Bandas de ortodoncia 1 2 3<br />
Retractor de labios (de plástico) 3 3 1<br />
Fijador de lengua (de plástico) 3 3 1<br />
Aplicador de bandas (de plástico) 3 3 1<br />
Pinzas de acero inoxidable con partes de plástico 3 3 1<br />
Instrumental de endodoncia<br />
Instrumentos de acero inoxidable: 1 2 3<br />
Limas 1 2 3<br />
Ensanchadores 1 2 3<br />
Fresas 1 2 3<br />
Brocas 1 2 3<br />
Puntas de papel* – – –<br />
Obturadores 1 2 3<br />
Léntulo 1 2 3<br />
Tiranervios 1 2 3<br />
1 = recomendable; 2 = adecuado; 3 = ineficaz.<br />
* Material desechable.
16 Capítulo 2<br />
3. Terminator. Es un aparato articulado sobre el<br />
brazo de la unidad dental y expulsa una so lución<br />
antiséptica por pulverización a presión. Ejerce su<br />
efecto en uno a tres minutos.<br />
Prótesis, modelos e impresiones dentales<br />
Los materiales y estructuras ya utilizados en la boca<br />
se consideran fuente potencial de conta minación cruzada;<br />
por tanto, es imprescindible lavarlos, esterilizarlos<br />
o desinfectarlos con cui dado antes de manejarlos,<br />
ajustarlos o enviar los al laboratorio dental. Esos artículos<br />
también requieren limpieza y esterilización o<br />
desinfec ción luego de ser devueltos por el laboratorio<br />
dental y antes de ser colocados en la boca del paciente.<br />
Conviene consultar al fabrican te en relación con la<br />
estabilidad del producto al procedimiento de esterilización<br />
y desinfección de alta potencia (cuadro 2-5).<br />
Manejo de muestras de laboratorio<br />
Biopsias<br />
Todos los tejidos deben considerarse potencialmente<br />
infectantes y por ello se recomienda evitar salpicaduras.<br />
La muestra de tejido se coloca en un frasco con<br />
boca ancha, el cual debe eti quetarse con la fecha de<br />
obtención y los datos del paciente. El tejido de personas<br />
con alguna enfermedad infecciosa (hepatitis,<br />
tuberculosis, sida, etc.) se guarda en una bolsa de<br />
plástico cerrada y se identifica por fuera con la leyenda<br />
“infeccioso en potencia” para alertar a quienes lo<br />
manejen.<br />
Antes de procesar los tejidos, es indispensa ble fijarlos<br />
con formol al 10% durante 24 h. La relación tejido<br />
y formalina debe ser de un volumen de tejido por 10<br />
volúmenes de formalina como mínimo. Las muestras<br />
de pacientes infecciosos requieren al menos 72 h de<br />
fijación, y la relación es de un volumen de teji do por<br />
20 volúmenes de formalina.<br />
Citología exfoliativa<br />
Se usa como auxiliar en el diagnóstico de cán cer, infecciones<br />
por hongos (Candida albicans) y virus (herpes),<br />
entre otras afecciones.<br />
La muestra debe fijarse de inmediato al co locarse<br />
en un frasco con alcohol absoluto antes de enviarla al<br />
laboratorio. Si proviene de un paciente con infección,<br />
entonces se evitará el uso de aerosoles para fijarlas<br />
porque de lo contrario se corre el riesgo de contagio<br />
por salpicaduras.<br />
Igual que las biopsias, las muestras tam bién se rotulan<br />
y envían al laboratorio en una bolsa de plástico;<br />
si corresponden a un pacien te con alguna enfermedad<br />
transmisible también es necesario anotar la leyenda<br />
Cuadro 2-5. Desinfección de material e instrumental para prótesis y laboratorio dental<br />
Materiales Agentes químicos Tiempo<br />
Impresiones*<br />
Silicones Yodóforos o hipoclorito de sodio diluido (inmersión) 10 min<br />
Polisulfuros Yodóforos o hipoclorito de sodio diluido (inmersión) 10 min<br />
Alginatos** Yodóforos o hipoclorito de sodio diluido (aerosol) 1 minuto<br />
Prótesis***<br />
Fija (metal/porcelana) Glutaraldehído al 2%, yodóforos 10 min<br />
Removible (acrílico/porcelana) Yodóforos, hipoclorito de sodio 10 min<br />
Removible (metal/acrílico) Yodóforos 10 min<br />
* Lavar con agua antes y después de desinfectar.<br />
** Rociar la solución y guardar por un minuto en la bolsa de plástico.<br />
*** La prótesis debe lavarse con agua y desinfectarse antes de entregarla al paciente y enviarla al laboratorio, o ambas conductas.<br />
Nota: los compuestos clorados no se recomiendan para metal; el glutaraldehído no se recomienda para el acrílico. Material para prótesis,<br />
articuladores, reglas, espátulas, taza de hule y rollos de cera, lavar y desinfectar con agentes químicos.
Asepsia y antisepsia 17<br />
“infeccioso en potencia”, seguida del diagnóstico probable.<br />
Limpieza de superficies contaminadas<br />
Véase apartado anterior.<br />
Recolección de residuos<br />
contaminados<br />
Todos los materiales contaminados con sangre, saliva<br />
o líquidos corporales se depositan en bolsas de plástico<br />
dobles y perfectamente sella das para desecharlas<br />
posteriormente; por ejem plo, guantes, cubrebocas<br />
desechables, gasas, algodones e hilo (fig. 2-4). Si estos<br />
materiales provienen de pacientes con infección, se<br />
etique tan con su leyenda respectiva y al final se incineran.<br />
Figura 2-4. Se observa el símbolo de “material<br />
potencialmente infeccioso” que debe aparecer<br />
en los botes y bolsas de basura cuando<br />
contienen residuos contaminados con sangre,<br />
saliva o líquidos corporales.<br />
Los instrumentos punzocortantes deben de positarse<br />
en contenedores rígidos y es recomen dable esterilizarlos<br />
o desinfectarlos antes de desecharlos.<br />
Recolección y esterilización<br />
de ropa contaminada<br />
Luego de usar la ropa, se recoge y guar da en bolsas de<br />
plástico dobles, a las cuales se les coloca la etiqueta<br />
respectiva; asimismo, an tes de llevarla a la lavandería<br />
se esteriliza en la autoclave.<br />
Vacunación contra la hepatitis B<br />
y recomendaciones finales<br />
Las recomendaciones finales son las siguientes:<br />
1. Vacunación del personal odontológico contra la<br />
hepatitis B; algunos autores también acon sejan<br />
aplicar inmunización contra la rubéo la, el sarampión,<br />
la parotiditis y el tétanos.<br />
2. Se considera infeccioso en potencia a todo paciente,<br />
por lo cual es necesario adoptar los procedimientos<br />
de control de infección en todos los<br />
sujetos.<br />
3. Elaborar una historia clínica del paciente, con<br />
énfasis en los antecedentes de enfermedades<br />
transmisibles, transfusiones y prácticas de alto<br />
riesgo (p. ej., promiscuidad sexual y uso de jeringas<br />
ya usadas).<br />
4. Utilizar de preferencia instrumental y mate rial<br />
desechable.<br />
5. No desinfectar cuando sea posible esterilizar.<br />
6. Antes de esterilizar o desinfectar, eliminar los restos<br />
de partículas orgánicas de los instru mentos.<br />
7. Si el personal odontológico sufre inoculación<br />
accidental, contaminación de mucosas o contaminación<br />
de piel lacerada con material infeccioso<br />
en potencia, es necesario llevar a cabo<br />
las siguientes acciones:<br />
A. En caso de contaminación de mucosas (p. ej.,<br />
salpicadura de ojos o boca), lavar esas áreas<br />
con abundante agua. Cuando ocurra inoculación<br />
accidental o contaminación de piel lacerada,<br />
el área infectada se lava con abundante<br />
agua y jabón; de ser necesario, se usa algún
18 Capítulo 2<br />
antiséptico para la piel y se promueve el sangrado<br />
venoso haciendo presión con los dedos<br />
entre el sitio afectado y el corazón. Se recomienda<br />
considerar la posibilidad de infecciones<br />
por virus de inmunodeficiencia humana,<br />
hepatitis B y sífilis, entre otras.<br />
B. Valorar al paciente de manera clínica y epidemiológica.<br />
C. Ante el peligro de infección por virus de inmunodeficiencia<br />
humana, realizar de inmediato<br />
un estudio de laboratorio para valorar en ese<br />
momento si se encuentra o no infectado por el<br />
virus. Este estudio debe repetirse a las seis semanas<br />
y a los tres, seis y 12 meses posteriores<br />
al accidente. Si el estudio inicial es negativo,<br />
pero alguno de los posteriores es positivo, se<br />
considera que ha ocurrido transmisión por el<br />
accidente.<br />
D. Mientras se encuentre en observación, la persona<br />
que sufrió el accidente debe tomar medidas<br />
preventivas para evitar con taminar a otros;<br />
por ejemplo, utilizar preservativo o condón<br />
durante el acto sexual; evitar com partir objetos<br />
potencialmente contamina dos con sangre,<br />
como el cepillo de dientes y el rastrillo para<br />
rasurar, y abstenerse de donar sangre o tejidos.<br />
Además, es muy importante reforzar las medidas<br />
de segu ridad en el trabajo con el fin de<br />
evitar nue vos accidentes.<br />
Infecciones importantes<br />
en odontología<br />
El odontólogo está expuesto a adquirir las en fermedades<br />
infecciosas y parasitarias de sus pacientes. Sería<br />
imposible describir todas esas enfermedades, por lo<br />
cual aquí sólo se inclu yen las más importantes (cuadro<br />
2-6).<br />
Resfriado común<br />
Es una enfermedad aguda producida por virus, entre<br />
muchos de ellos están: virus de la influenza, coronavirus,<br />
rinovirus, ecovirus y adenovirus. El periodo de<br />
incubación de esos agentes infec ciosos es breve, por lo<br />
regular de uno a cinco días; la infección se manifiesta<br />
por fiebre, cefalalgia (dolor de cabeza), mialgia (dolor<br />
muscu lar), coriza (catarro), dolor de faringe y tos.<br />
Sinusitis aguda o crónica<br />
El resfriado común complicado con infección bacteriana<br />
puede producir sinusitis. Esta es la infección de<br />
los senos paranasales y es ocasio nada por neumococos,<br />
Haemophilus influenzae y microorganismos anaerobios,<br />
entre otros agen tes causales. La persona con<br />
sinusitis padece dolor en el seno paranasal afectado.<br />
Faringitis aguda<br />
Se produce por virus, estreptococos, estafiloco cos o<br />
incluso gonococos. La persona afectada puede experimentar<br />
dolor y enrojecimiento de la faringe.<br />
Neumonía<br />
La neumonía neumocócica se caracteriza por fie bre,<br />
escalofrío, dolor torácico, disnea (dificultad para<br />
respirar) y tos con expectoración “herrum brosa”. Se<br />
produce por Streptococcus pneumoniae o Mycoplasma<br />
pneumoniae. Asimismo, en los úl timos años ha<br />
cobrado importancia la neumo nía por el protozoario<br />
Pneumocystis carinii, ya que se presenta como infección<br />
oportunista del síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida, en cuyo caso puede evolucionar con fiebre<br />
o sin ella y con tos seca.<br />
La neumonía también puede desarrollarse debido<br />
a otros microorganismos, entre ellos: Chlamydia trachomatis;<br />
Chlamydia pneumoniae; adenovirus; virus<br />
de la parainfluenza, y aque llos que afectan el tracto<br />
respiratorio Staphylococcus aureus, Klebsiella pneumoniae,<br />
Haemophilus influenzae, Streptococcus pyogenes y<br />
Neisseria meningitidis.<br />
Tuberculosis<br />
Es una infección crónica por Mycobacterium tuberculosis.<br />
Tiene gran importancia como causa de incapacidad<br />
y acompaña en muchas ocasio nes al síndrome<br />
de inmunodeficiencia adquiri da. Cuando afecta el<br />
sistema respiratorio se caracteriza por fiebre, fatiga y<br />
pérdida de peso; en grados avanzados hay tos, dolor<br />
torácico y hemoptisis (expectoración con sangre).
Asepsia y antisepsia 19<br />
Cuadro 2-6. Infecciones importantes en odontología<br />
Microorganismos Hábitat Transmisión Enfermedad potencial<br />
Bacterias<br />
Bordetella pertussis Nasofaringe Secreciones nasofaríngeas Tos ferina<br />
Estreptococos y estafilococos Nasofaringe Secreciones nasofaríngeas Endocarditis<br />
Corynebacterium diphtheriae Nasofaringe Secreciones nasofaríngeas Difteria<br />
Escherichia coli Boca Sangre, exudado de la lesión Neumonía, bacteriemia<br />
Klebsiella pneumoniae Tracto respiratorio Secreciones respiratorias Infecciones, neumonía<br />
Haemophilus influenzae Boca y nasofaringe Sangre y secreciones nasofaríngeas Neumonía, meningitis<br />
Mycobacterium tuberculosis Tracto respiratorio Secreciones respiratorias Tuberculosis<br />
Mycoplasma pneumoniae Faringe Secreciones faríngeas Infecciones, neumonía<br />
Neisseria meningitidis Boca, nasofaringe Sangre, secreciones nasofaríngeas Meningitis<br />
Neisseria gonorrhoeae Boca, nasofaringe Sangre, exudado de las lesiones<br />
Lesiones orales, conjuntivitis<br />
nasofaríngeas<br />
Staphylococcus aureus Boca, piel, nasofaringe Secreciones del exudado Abscesos, septicemia, endocarditis<br />
Estreptococo del grupo A<br />
Streptococcus pyogenes<br />
Nasofaringe<br />
Secreciones nasofaríngeas<br />
Sangre<br />
Neumonía, tonsilitis, angina<br />
estreptocócica, escarlatina, fiebre<br />
reumática, otitis media, meningitis,<br />
glomerulonefritis y mastoiditis<br />
Actinomyces israeli Encía Exudado crevicular Abscesos<br />
Chlamydia trachomatis Sistema reproductor Secreciones Conjuntivitis, neumonía<br />
Espiroquetas<br />
Treponema pallidum Sangre, mucosa oral Exudado de las lesiones Sífilis<br />
Virus<br />
Coxsackie Mucosa orofaríngea Ingestión Infecciones en manos y boca, faringitis<br />
vesicular<br />
Citomegalovirus Glándulas salivales Saliva, sangre Infección vírica citomegálica<br />
Epstein-Barr Glándula parótida Saliva, sangre Mononucleosis infecciosa<br />
Hepatitis A Hígado, tracto gastrointestinal Ingestión Hepatitis<br />
Hepatitis B Hígado Sangre, saliva Hepatitis, carcinoma hepatocelular<br />
Hepatitis C Hígado Sangre Hepatitis, carcinoma<br />
Hepatitis delta Hígado Sangre Hepatitis<br />
Hepatitis E Hígado, tracto gastrointestinal Ingestión Hepatitis<br />
Herpesvirus 1 y 2<br />
VIH<br />
Nasofaringe<br />
Linfocitos T 4<br />
Exudado de la lesión, saliva<br />
Sangre, semen, fluidos vaginales,<br />
perinatal<br />
Lesiones orales, conjuntivitis<br />
Síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida (sida)<br />
Sarampión<br />
Sarampión (morbilivirus) Nasofaringe Secreciones nasofaríngeas, contacto<br />
con las lesiones<br />
Parotiditis (paramixovirus) Glándula parotídea Saliva, ingestión Parotiditis<br />
Varicela-zoster Nasofaringe Secreciones nasofaríngeas, exudado de Varicela<br />
las lesiones<br />
Rubéola (rubivirus) Nasofaringe Secreciones nasofaríngeas Rubéola<br />
Influenza A y B Nasofaringe Secreciones nasofaríngeas Resfriado común<br />
Hongos<br />
Candida albicans Boca, piel Secreciones nasofaríngeas Candidiasis<br />
Protozoarios<br />
Pneumocystis carinii Boca, tracto respiratorio Secreciones nasofaríngeas Neumonía
20 Capítulo 2<br />
Varicela<br />
Es una infección por el virus del herpes huma no (alfa-<br />
3) o virus de varicela-zoster. Se ca racteriza por fiebre<br />
moderada y exantema (erupción) en la piel de tipo<br />
maculopapular al principio y vesi cular durante tres o<br />
cuatro días, que deja costras granulosas. Las lesiones<br />
son más abundantes en las partes cubiertas del cuerpo<br />
y ocasionan mucho prurito (comezón). También hay<br />
lesio nes en lengua y mucosa bucal (oral).<br />
Sarampión<br />
Enfermedad vírica en extremo transmisible. Sus manifestaciones<br />
iniciales son fiebre, conjuntivi tis, coriza,<br />
tos y manchas de Koplik en la cavidad bucal. Entre el<br />
tercero y séptimo días aparece la erupción característica<br />
(manchas rojas pardas), al principio en la cara y<br />
después de manera genera lizada; esta fase dura cuatro a<br />
siete días y des pués se presenta descamación de la piel.<br />
El padecimiento puede evolucionar con com plicaciones<br />
como otitis media (infección del oído medio),<br />
neumonía, diarrea, encefalitis y erupción hemorrágica,<br />
sobre todo en niños con des nutrición, en quienes<br />
también puede producir incluso ceguera e infecciones<br />
agregadas en la piel, deshidratación y muerte.<br />
Parotiditis infecciosa<br />
Esta enfermedad se produce por el virus de la parotiditis<br />
infecciosa, miembro del género Paramyxovirus,<br />
y sus manifestaciones son: fie bre y aumento de volumen,<br />
y dolor en una o más glándulas salivales, aunque<br />
con más fre cuencia en la glándula parotídea.<br />
El padecimiento posterior a la pubertad pue de dañar<br />
testículos (20 a 30%) y ovarios (5%). En otros casos<br />
afecta al sistema nervioso central cuando ocasiona meningitis<br />
aséptica. También puede generar sordera, neuritis,<br />
pancreatitis, artritis, miositis, nefritis, tiroiditis y<br />
pericardi tis. Sin embargo, es de letalidad muy baja.<br />
Infecciones por citomegalovirus<br />
Por lo general, la infección por citomegalovi rus<br />
(CMV) evoluciona sin síntomas aunque en algunos<br />
pacientes se manifiesta como mononucleosis infecciosa.<br />
En personas con disminución de la respuesta<br />
inmunitaria puede relacionarse con infecciones generalizadas,<br />
nefritis, neumonitis y hepatitis.<br />
Herpes<br />
El herpes simple se produce por el virus del herpes humano<br />
tipo 1, el cual se transmite por medio de la saliva. El<br />
padecimiento se caracte riza por fiebre, malestar general<br />
y lesiones vesi culares en la orofaringe. En ocasiones<br />
afecta ojos (queratoconjuntivitis), sistema nervioso central<br />
(meningoencefalitis) o amígdalas (tonsilas) y faringe<br />
(faringoamigdalitis). La afección en los labios suele<br />
originar herpes labial, el cual se manifiesta por vesículas<br />
en una base eritematosa que por lo común se conocen<br />
como “fue gos”. Los odontólogos infectados por el virus<br />
pueden desarrollar panadizos herpéticos.<br />
El virus del herpes humano tipo 2 casi siempre se<br />
transmite por contacto sexual y ocasiona her pes genital.<br />
En mujeres afecta el cuello del úte ro y la vulva (pudendo<br />
femenino), y también puede dañar la piel del perineo,<br />
los muslos y los glúteos; asimismo, favorece el desarrollo<br />
de cáncer del cuello uterino, sobre todo en combi nación<br />
con el virus del papiloma, y es tan in feccioso que el producto<br />
infectado durante el parto puede sufrir infección<br />
visceral disemina da, encefalitis y morir. En varones, las<br />
lesiones aparecen en el glande o en el prepucio. En ambos<br />
sexos puede afectar el ano y el recto.<br />
Infección gonocócica<br />
(blenorragia o gonorrea)<br />
Es una enfermedad de transmisión sexual pro ducida<br />
por Neisseria gonorrhoeae o gonococo. Entre los dos<br />
y siete días posteriores al contagio, los varones experimentan<br />
secreción purulenta de la uretra y disuria<br />
(dificultad para orinar); las mujeres pueden tener secreción<br />
vaginal pu rulenta o indicios de inflamación<br />
en la pelvis. Asimismo, la infección se manifiesta en la<br />
con juntiva ocular, la faringe, el ano y el recto.<br />
Más adelante, algunos pacientes desarrollan artritis,<br />
endocarditis y meningitis; otros pade cen eritema<br />
(enrojecimiento) y edema (aumento de volumen por<br />
retención de líquido) en la mucosa bucal; algu nos más<br />
tienen pústulas en el área de las amíg dalas (área tonsilar).<br />
También hay personas que presentan ulceraciones
Asepsia y antisepsia 21<br />
en los labios, edema y seudomembranas; en el peor de<br />
los casos, las personas infectadas no tienen manifestaciones<br />
pero pueden transmitir la enfermedad.<br />
Rubéola<br />
Es una enfermedad producida por el virus de la<br />
rubéola (familia Togaviridae, género Rubivirus). Se<br />
manifiesta por erupción maculopapular, la cual es<br />
precedida en ocasiones por fie bre, cefalea, malestar,<br />
coriza, conjuntivitis, así como linfadenopatía retroauricular,<br />
occipital y cervical posterior. La infección durante<br />
el pri mer trimestre del embarazo puede conducir<br />
al aborto o generar malformaciones congénitas en<br />
el producto, las cuales traen como consecuen cia sordera,<br />
cataratas, microftalmía, glaucoma, microcefalia,<br />
meningoencefalitis, alteraciones cardiacas (persistencia<br />
del conducto arterioso o de los septos [tabiques]<br />
interauricular [interatrial] e interventricular), ictericia<br />
u osteopatía.<br />
Faringitis por virus Coxsackie<br />
(herpangina)<br />
La faringitis vesiculosa es una enfermedad pro ducida<br />
por virus Coxsackie del grupo A, tipos 1 a 6, 8, 10 y<br />
22. Se manifiesta por fiebre e inflamación de la faringe;<br />
asimismo, aparecen lesio nes papulovesiculosas y<br />
grisáceas sobre una base eritematosa, las cuales miden<br />
de 1 a 2 mm y poco a poco se transforman en úlceras.<br />
Estas lesiones se localizan en los pilares anteriores del<br />
velo del paladar o arcos palatoglosos, el paladar blando,<br />
la úvula y las tonsilas (amígdalas).<br />
La estomatitis vesiculosa con exantema es cau sada<br />
por virus Coxsackie del tipo 16 y se manifiesta por<br />
lesiones más difusas en las superfi cies bucales de los<br />
carrillos y las encías y a los lados de la lengua.<br />
La faringitis linfonodular se debe al virus Coxsackie<br />
tipo 10 y se caracteriza por lesiones no dulares firmes,<br />
prominentes, de color blanquecino o amarillento y rodeadas<br />
por una zona eritematosa de 3 a 6 mm.<br />
Infecciones por Chlamydiae<br />
Las clamidias son bacterias intracelulares y pue den<br />
ocasionar tracoma, infecciones genitales, conjuntivitis<br />
y neumonía, así como linfogranuloma venéreo.<br />
Es una infección de transmi sión sexual. En caso de<br />
transmisión por contacto sexual, se manifiesta en el<br />
varón como uretritis con ardor al orinar y en la mujer<br />
como cervicitis (inflamación del cuello uterino) y secreción<br />
mucopurulenta; sin embargo, en ambos sexos<br />
puede evolucionar sin síntomas.<br />
El contagio de la infección por “sexo oral” puede<br />
manifestarse por pequeñas pústulas en las tonsilas<br />
(amígdalas).<br />
Tricomoniasis<br />
Esta enfermedad es causada por el protozoario Trichomonas<br />
vaginalis y afecta los sistemas re productor<br />
y urinario. En la mujer se manifiesta por vaginitis, a<br />
menudo con pequeñas lesiones hemorrágicas puntiformes<br />
y secreción acuosa, espumosa, amarillenta y<br />
de olor fétido; sin em bargo, también puede evolucionar<br />
sin síntomas. En el varón por lo general cursa sin<br />
síntomas; pero puede haber uretritis, o sea, malestar<br />
al orinar, secreción blanquecina a través de la ure tra,<br />
comezón en el glande y erección dolorosa.<br />
La infección transmitida por “sexo oral” se manifiesta<br />
en la faringe por inflamación de la mucosa y<br />
punteado rojizo.<br />
Candidiasis (moniliasis)<br />
El agente causal de la candidiasis es el hongo Candida<br />
albicans que se transmite por contacto con secreciones<br />
o excreciones de boca, piel y vagina o por las heces<br />
de enfermos o portado res y durante el parto.<br />
La candidiasis se limita por lo regular a las capas<br />
superficiales de la piel o las mucosas. Sus manifestaciones<br />
clínicas son: aftas en la boca, intertrigo, vulvovaginitis<br />
y onicomicosis (afec ción en las uñas, las<br />
cuales adquieren aspecto blanquecino como de yeso).<br />
La infección de las mucosas se conoce co múnmente<br />
como “algodoncillo” y se caracteri za por la aparición<br />
de placas blanquecinas y blandas en una superficie<br />
enrojecida.<br />
La infección en la vagina se manifiesta por secreción<br />
vaginal de aspecto blanquecino claro con algunos<br />
puntos blancos, semejante al que so “cottagge”, así<br />
como por inflamación, come zón y sensación de ardor
22 Capítulo 2<br />
en la región pudenda. En el varón se caracteriza por<br />
inflamación del glande y puede producir uretritis.<br />
A veces se forman úlceras o seudomembranas en<br />
el tracto gastrointestinal o en la vejiga. La candidiasis<br />
puede dañar riñón, bazo, pul món, hígado, endocardio,<br />
ojo, meninges y cere bro en las personas con diabetes<br />
mellitus o con inmunodeficiencia, o en pacientes que<br />
reciben tratamiento con antibióticos de amplio espectro,<br />
corticosteroides o quimioterapia.<br />
Mononucleosis infecciosa<br />
El virus de Epstein-Barr, un virus herpético 4 (gamma),<br />
infecta a los linfocitos B y ocasiona mononucleosis<br />
infecciosa. Esta enfermedad se caracteriza por<br />
fiebre y dolor e inflamación de la orofaringe, así como<br />
por linfadenopatía, en es pecial de la cadena cervical<br />
posterior. Puede afectar el funcionamiento del hígado<br />
y también originar esplenomegalia.<br />
Hepatitis víricas<br />
Hepatitis A<br />
Ésta es ocasionada por el virus de la hepatitis A (VHA),<br />
un picornavirus. Por lo general, se transmite por vía<br />
fecal-oral, es decir, al ingerir agua y alimentos contaminados<br />
con el virus que se elimina a través de la materia<br />
fecal; sin em bargo, hay informes de pacientes contagiados<br />
por transfusión de sangre, aunque son muy raros.<br />
La enfermedad tiene un comienzo repenti no. Se<br />
manifiesta por fiebre, malestar general, anorexia, náusea<br />
y molestias abdominales, y días después aparece<br />
ictericia.<br />
Hepatitis B<br />
Es de gran importancia para el odontólogo porque el<br />
agente causal, el virus de la hepatitis B (VHB), puede<br />
transportarse por medio de la sangre, la saliva, el<br />
semen y los líquidos vagi nales. De ese modo, el padecimiento<br />
se conta gia por exposición percutánea (intravenosa,<br />
intramuscular, subcutánea o intradérmica)<br />
y a través de las mucosas, como en accidentes por pinchazo<br />
de agujas, independientemente de las vías perinatal<br />
(de madre a hijo) y sexual. La in fección puede<br />
diseminarse por contaminación de lesiones cutáneas<br />
o por exposición de muco sas a sangre infecciosa.<br />
El comienzo de la hepatitis vírica B es insi dioso<br />
con anorexia, molestias abdominales vagas, náusea y<br />
vómito; en ocasiones hay artralgias y erupciones, las<br />
cuales a menudo cul minan en ictericia. La fiebre, si se<br />
presenta, pue de ser leve.<br />
Hay personas que poseen anticuerpos con tra este<br />
virus y no tienen manifestaciones de la enfermedad.<br />
Por otra parte, el virus de la hepatitis B se relaciona<br />
con el carcinoma hepatocelular y la cirrosis hepática.<br />
Hepatitis C<br />
El virus de la hepatitis C es el agente causal de la hepatitis<br />
vírica C o hepatitis no-A no-B transmitida por vía<br />
parenteral. La en fermedad se propaga por exposición<br />
percutánea a sangre y hemoderivados contaminados,<br />
por lo cual las agujas y las jeringas contaminadas<br />
constituyen vehículos de transmisión. Asimis mo, la<br />
hepatitis se caracteriza por comienzo insidioso con<br />
anorexia, molestias abdominales vagas, náusea y vómito;<br />
el desarrollo de icteri cia es menos frecuente que<br />
en la hepatitis B.<br />
Hepatitis D<br />
La hepatitis delta o hepatitis vírica D es ocasiona da por<br />
el virus de la hepatitis delta. Indepen dientemente de<br />
la vía sexual, se transmite por la exposición a sangre y<br />
líquidos serosos cor porales, agujas, jeringas y hemoderivados<br />
con taminados como el factor antihemofílico.<br />
Tiene comienzo repentino con manifestaciones<br />
si milares a las de la hepatitis B.<br />
Hepatitis E<br />
Se denomina también hepatitis vírica no-A no-B de<br />
transmisión entérica porque se transmi te por vía fecal-oral.<br />
Es similar a la hepatitis A.<br />
Sífilis<br />
Es una enfermedad crónica producida por una espiroqueta,<br />
Treponema pallidum. Sus manifes taciones<br />
clínicas son: lesión primaria (complejo primario);<br />
erupción secundaria que afecta la piel y las mucosas;<br />
largos periodos de latencia, y lesiones tardías en piel,<br />
huesos, vísceras y sis temas nervioso central y angiológico<br />
o circula torio.
Asepsia y antisepsia 23<br />
La lesión primaria implica la aparición de un chancro,<br />
que consiste en una pequeña elevación rojiza de la<br />
piel en el sitio donde ocurrió el contagio, el cual se ulcera<br />
tiempo después, no produce dolor y adquiere una<br />
base dura (chancro duro). Días más tarde se inflaman<br />
los ganglios linfáticos (linfonodos) cercanos. El chancro<br />
duro rara vez aparece en los labios, aunque es posible<br />
hallar lo en la lengua y las tonsilas (amígdalas). Más<br />
adelante pueden presentarse ulceraciones en la mucosa<br />
bucal, con linfadenopatía cervical; en la lengua puede<br />
observarse una úlcera con in duración, y crecimiento de<br />
las papilas o des plazamiento de la úvula y el arco palatogloso<br />
o pilar anterior del velo del paladar.<br />
El complejo primario desaparece solo aproximadamente<br />
a las cuatro semanas. Sin embar go, entre<br />
seis y ocho semanas posteriores al bro te de la primera<br />
lesión, aparece la erupción secundaria generalizada<br />
de tipo maculopapulosa y simétrica. Esta erupción se<br />
acompaña de sín tomas generales como fiebre, cefalea,<br />
malestar general, pérdida de peso y dolor en articulaciones<br />
y músculos.<br />
En la etapa tardía, después de dos a tres años de<br />
evolución, la sífilis puede manifestarse por lesiones<br />
llamadas gomas y nódulos. Los gomas semejan tumores<br />
y son indoloros, pero poco a poco reblandecen y se<br />
abren para dejar salir un material espeso. Aparecen en<br />
el cráneo, la fren te, la lengua y las extremidades; cuando<br />
sur gen en el paladar o en el tabique nasal pueden<br />
destruir los huesos. Los nódulos son lesiones pardas<br />
rojizas poco prominentes.<br />
Por último, la sífilis congénita tardía puede manifestarse<br />
en la edad escolar con gomas, y entonces es<br />
posible que los huesos de la pierna se deformen (la<br />
tibia adopta la forma de sable). Asimismo, puede haber<br />
pérdida de la visión, sordera y malformaciones en<br />
los dientes de la segunda dentición: los bordes de los<br />
incisivos tienen forma de media luna (dientes de Hutchinson)<br />
o sierra.<br />
Síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida (sida)<br />
Es un trastorno grave y mortal que se iden tificó en<br />
1981 como un síndrome definido e in dependiente. La<br />
sigla significa: s, síndrome; i, inmuno; d, deficiencia;<br />
a, adquirida.<br />
El agente causal de este padecimiento es el virus<br />
de la inmunodeficiencia humana, un retrovirus del<br />
cual se han identificado dos tipos: tipo 1 (VIH-1) y<br />
tipo 2 (VIH-2). Igual que la sífilis y la hepatitis B, los<br />
mecanismos de trans misión son: contacto sexual, intercambio<br />
de flui dos corporales por compartir agujas<br />
y jeringas contaminadas con el virus, transfusión de<br />
san gre infectada o sus componentes y por vía perinatal<br />
a través de la placenta o la lactancia. El riesgo de<br />
infectarse por punción accidental es muy bajo entre el<br />
personal de salud (menos de 1%).<br />
Infección por virus de inmunodeficiencia<br />
humana y síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida<br />
La infección por el virus de la inmunodeficien cia humana<br />
debe diferenciarse del síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida. Entre seis y 12 se manas posteriores<br />
a la transmisión del virus, la persona infectada<br />
presenta anticuerpos contra el mismo; por ello, se le<br />
considera infectada e infectan te sin importar los posibles<br />
caminos de la enfermedad.<br />
1. Infección aguda. El paciente puede presentar síntomas<br />
parecidos a los de la mononucleosis infecciosa:<br />
fiebre, inflamación de los gan glios linfáticos<br />
(linfonodos), fatiga, cefalea, anorexia y dolor<br />
faríngeo en algunos casos.<br />
2. Infección asintomática. El individuo no tiene manifestaciones<br />
pese a estar infectado.<br />
3. Linfadenopatía generalizada persistente. Durante<br />
más de tres meses, los ganglios linfáticos (linfonodos)<br />
crecen más de 1 cm en dos o más sitios,<br />
excepto en las regiones inguinales.<br />
4. Síndrome de inmunodeficiencia adquirida. Puede<br />
tener diferentes manifestaciones:<br />
A. Síndrome de desgaste por virus de inmunodeficiencia<br />
humana. Antes se llamaba complejo<br />
relacionado con el síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida, y se carac teriza por<br />
fiebre, diarrea y pérdida de peso involuntario<br />
durante más de un mes.<br />
B. Infección oportunista o neoplasia que indica<br />
inmunodeficiencia celular sin alguna circunstancia<br />
que la explique. Entre los padecimien-
24 Capítulo 2<br />
tos llamados indicadores del síndrome de<br />
inmunodeficiencia adquirida se encuentran:<br />
candidiasis esofágica, retinitis por citomegalovirus,<br />
micobacteriosis (como la tuberculosis),<br />
sarcoma de Kaposi, neumonía intersticial<br />
linfoidea, neumonía por Pneumocystis carinii<br />
y toxoplasmosis cerebral.<br />
C. Enfermedad neurológica por virus de la inmunodeficiencia<br />
humana. Puede manifestarse<br />
por deterioro de la memoria, embotamiento,<br />
demencia, falta de coordi nación de movimientos<br />
o alteraciones de la sensibilidad.<br />
Manifestaciones bucales de la infección<br />
por el virus de la inmunodeficiencia humana<br />
En la actualidad se conocen más de 40 altera ciones<br />
en la boca y en la región submandibular (submaxilar)<br />
relacionadas con la infección por virus de la inmunodeficiencia<br />
humana. Las alte raciones más frecuentes<br />
son: candidiasis bucal, leucoplasia vellosa, enfermedad<br />
periodontal vinculada con el virus de la inmunodeficiencia<br />
humana tipo 1, sarcoma de Kaposi bucal y<br />
linfoma no Hodgkin.<br />
Candidiasis bucal<br />
La candidiasis bucal adquiere diferentes for mas:<br />
1. Candidiasis eritematosa. Se manifiesta por manchas<br />
rojas homogéneas o de apariencia puntiforme<br />
en la mucosa bucal, principal mente en el<br />
paladar y el dorso de la lengua. La lengua puede<br />
adquirir una apariencia lisa con áreas sin papilas.<br />
La eritematosa es la candidiasis más frecuente<br />
y suele ser la ma nifestación más temprana de<br />
la infección.<br />
2. Candidiasis seudomembranosa. Es más común<br />
cuando ya existe el síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida. Se caracteriza por depó sitos<br />
con aspecto cremoso de color blanco-amarillento<br />
en cualquier parte de la mucosa bucal, que se<br />
despegan con el raspado y de jan una superficie<br />
eritematosa o sangrante.<br />
3. Candidiasis hiperplásica. Se observa como una<br />
placa blanca que no se desprende con el ras pado;<br />
en pacientes seropositivos se localiza de manera<br />
bilateral en la mucosa yugal, en tanto que en los<br />
pacientes seronegativos aparece en el área retrocomisural.<br />
4. Queilitis angular. Este término incluye lesio nes<br />
generalmente bilaterales a la altura del ángulo<br />
de la boca y comisuras; las lesiones son de color<br />
rojo brillante y se acompañan de fisuras y ulceraciones<br />
a menudo dolorosas.<br />
Leucoplasia vellosa<br />
Por lo general, la leucoplasia vellosa se presen ta en los<br />
bordes laterales de la lengua, y en 70% de los casos<br />
con distribución bilateral, en forma de placas blancas<br />
que no se desprenden con el raspado, cuya apariencia<br />
es corrugada con plie gues finos, aunque puede ser lisa<br />
y homogé nea. Asimismo, hay informes de personas<br />
con leucoplasia vellosa en el paladar blando, el piso<br />
de la boca, la región tonsilar (región amigdalina), las<br />
áreas retromolares y la mucosa faríngea.<br />
Enfermedades periodontales relacionadas<br />
con el virus de la inmunodeficiencia humana tipo 1<br />
Las características de las periodontopatías relacionadas<br />
con el virus de inmunodeficiencia humana tipo<br />
1 son:<br />
1. Gingivitis. Se presenta como una banda de color<br />
rojo brillante a lo largo de la encía mar ginal que<br />
puede acompañarse de eritema difuso o puntiforme<br />
de la encía insertada y alveolar. Si bien<br />
muestra tendencia al san grado, no existe ulceración,<br />
ni bolsas perio dontales y tampoco pérdida<br />
de la unión periodontal.<br />
2. Periodontitis. Se caracteriza por pérdida de tejidos<br />
blandos y de unión periodontal, así como<br />
por destrucción ósea. El dolor suele ser intenso y<br />
hay hemorragia espontánea pero no existen bolsas<br />
periodontales profundas.<br />
3. Gingivitis ulceronecrosante. El padecimiento puede<br />
ser local o generalizado y se manifiesta por<br />
ulceración, necrosis o destrucción de las papilas<br />
interdentales cubiertas por una mem brana de<br />
fibrina gris amarillenta. Puede oca sionar dolor,<br />
hemorragia gingival y halitosis.
Asepsia y antisepsia 25<br />
Sarcoma de Kaposi bucal<br />
Las lesiones bucales son solitarias o múltiples con apariencia<br />
de mácula, pápula o nódu lo, con ulceración o<br />
sin ella. Asimismo, son de color rojo azulado, violáceo<br />
o pardo. Pueden ser únicas o estar relacionadas con<br />
lesiones extrabucales. Con frecuencia se encuentran<br />
en el paladar, a la altura del primer molar superior;<br />
pero también pueden aparecer en encía, lengua y mucosa<br />
bucal. Eventualmente, afecta las glán dulas salivales<br />
mayores.<br />
Linfoma no Hodgkin<br />
Puede presentarse como una masa exofítica pedunculada<br />
o como aumento de volumen firme, asintomático<br />
y rojo púrpura o del mis mo color de la mucosa bucal.<br />
La lesión puede ulcerarse y crece con gran rapidez. Se<br />
encuen tra principalmente en el paladar o el proceso<br />
alveolar, pero también en encía, lengua y glán dulas<br />
salivales mayores.<br />
Tos ferina<br />
Esta enfermedad es producida por Bordetella pertussis<br />
y Bordetella parapertussis. La fase catarral es de<br />
comienzo insidioso, con tos irritante que en el transcurso<br />
de una a dos semanas se vuelve paroxística. Los<br />
paroxismos se caracterizan por accesos repetidos y<br />
violentos de tos, sin ins piración intermedia seguidos<br />
de un estridor respiratorio de tono alto característico;<br />
con frecuencia los paroxismos culminan con la expulsión<br />
de mucosidades claras y adherentes, a menudo<br />
seguidas de vómito.<br />
Endocarditis<br />
Cuando la persona padece alguna cardiopatía congénita<br />
o tiene afectada alguna valva (válvula) del corazón,<br />
puede sufrir endocarditis, “principalmente por<br />
estafilococos y estreptococos (en especial S. viridans).<br />
Esta enfermedad se caracteriza por febrícula y malestar;<br />
la piel adquiere un color “terroso” y aparecen<br />
petequias en el interior de las mejillas, las palmas de<br />
las manos, debajo de las uñas y en el interior del ojo<br />
(fondo del ojo).<br />
Meningitis<br />
Es una enfermedad causada por diversos agentes causales,<br />
como virus Coxsackie, virus ECHO, Haemophilus<br />
influenzae, Neisseria meningitidis, Streptococcus<br />
pneumoniae, entre otros. Se manifiesta por fiebre,<br />
dolor de cabeza, náusea, vómito y rigidez de la nuca;<br />
puede haber erupción en la piel, delirio, coma y estado<br />
de choque (shock).<br />
Efectos sistémicos<br />
de la enfermedad bucal<br />
El odontólogo está obligado a conocer las posi bles<br />
consecuencias sistémicas de los focos de infección<br />
existentes en la cavidad bucal.<br />
Los microorganismos pueden diseminarse en el<br />
organismo y ocasionar infección focal. A su vez, ésta<br />
puede generarse por diferentes vías:<br />
1. Contigüidad. Existen barreras anatómicas lo cales<br />
de huesos, músculos y fascia; pero las infecciones<br />
de origen dental pueden exten derse a los<br />
tejidos vecinos de menor resis tencia y producir<br />
celulitis facial (infección de la tela subcutánea o tejido<br />
celular subcutá neo), angina de Ludwig, tromboflebitis<br />
yu gular supurada, erosión de la arteria<br />
caróti da, trombosis séptica del seno cavernoso,<br />
sinusitis maxilar y osteomielitis mandibular.<br />
2. Aspiración. Las personas con enfermedad periodontal<br />
en estado de inconsciencia pue den aspirar<br />
su propia saliva y desarrollar neumonía o<br />
absceso pulmonar.<br />
3. Torrente circulatorio. Los microorganismos pueden<br />
pasar al torrente circulatorio a partir de:<br />
A. Focos de infección pulpar. Son consecuencia de<br />
caries o fractura dental.<br />
B. Focos de infección periapical. En muchas ocasiones<br />
son causados por caries que evolu cionó<br />
con necrosis pulpar aguda.<br />
C. Focos de infección por enfermedades periodontales.<br />
Por lo general se relacionan con procedimientos<br />
odontológicos.<br />
D. Focos de infección por procedimientos odontológicos.<br />
Debido a la rotura de capilares y<br />
creación de presiones positiva y negativa, algu-
26 Capítulo 2<br />
nas prácticas odontológicas pueden ocasionar<br />
bacteriemia transitoria. Dichas prácticas pueden<br />
ser: el cepillado dental de alguna zona con<br />
proceso infeccioso, la administración de anestésico<br />
local, reali zación de un procedimiento<br />
terapéutico del periodonto o extracción dental<br />
en pre sencia de enfermedad periodontal.<br />
Los mecanismos por los cuales puede dise minarse<br />
una infección son:<br />
1. Difusión sistémica de los microorganismos. Así sucede<br />
cuando los pacientes padecen endo carditis<br />
o alguna valvulopatía. En este último caso puede<br />
formarse un trombo fibrinoplaquetario que facilita<br />
la adherencia de bacte rias, principalmente Streptococcus<br />
mutans, Streptococcus immitis, Streptococcus<br />
bovis y esta filococos. Por ello, la American Heart<br />
Association (AHA) recomienda la administración<br />
de antibióticos 30 a 60 min antes del trata miento<br />
odontológico y dos días después del mismo.<br />
2. Difusión sistémica de toxinas. Bacterias como<br />
Clostridium tetani producen una toxina que invade<br />
el sistema nervioso.<br />
3. Mecanismo inmunopatológico. Algunas enfermedades,<br />
como la fiebre reumática, incluyen un<br />
proceso autoinmunitario, con el antece dente de<br />
que los anticuerpos producidos con tra antígenos<br />
bacterianos pueden generar una reacción cruzada<br />
con tejidos del hués ped. Asimismo, existen<br />
factores del huésped, como la afección preexistente<br />
y el estado inmunitario, que favorecen la<br />
diseminación sistémica de los microorganismos;<br />
por ejem plo, antecedentes de enfermedades<br />
cardiovasculares, diabetes, cirrosis, neoplasias,<br />
te rapéutica inmunosupresora y síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida, entre otros.
Capítulo 3<br />
Proceso salud-enfermedad 27<br />
Proceso<br />
salud-enfermedad<br />
Evolución histórica del concepto<br />
salud-enfermedad<br />
El ser humano, a través de su proceso histórico, se ha<br />
afanado en descubrir y comprender lo que acontece en<br />
él mismo y a su alrededor. Sus ra zonamientos y conceptos<br />
son un reflejo del mo mento histórico en que<br />
vive, es decir, el modo de producción predominante,<br />
el ambiente intelectual y el medio geográfico. Por esa<br />
razón, sus interpretaciones han originado explicaciones<br />
mágicas, filosóficas y científicas.<br />
La enfermedad siempre se ha vinculado de manera<br />
muy estrecha con el ser humano, por lo cual las sociedades<br />
han buscado explicarla.<br />
Concepto mágico<br />
La sociedad primitiva elaboró un concepto mágico. El<br />
ser humano no comprendía los fe nómenos naturales,<br />
como el viento, las tormen tas y los terremotos, entre<br />
otros; por ello, co menzó a explicarlos como manifestaciones<br />
de agentes sobrenaturales, espíritus malignos<br />
o dioses malévolos productores de la enferme dad.<br />
El comunismo primitivo predominaba, por lo que<br />
el ser humano tenía un vínculo tan estre cho con su<br />
grupo que sus necesidades y pade cimientos se consideraban<br />
comunes; entonces, cualquier enfermedad<br />
que afectaba a uno re percutía en los demás.<br />
Surgieron los brujos, los curanderos y los yerberos.<br />
Éstos guardaban con celo sus secretos profesionales y<br />
sólo los transmitían de padres a hijos. Por lo general<br />
vivían aparta dos del grupo y bajo una estricta disciplina.<br />
Su terapéutica se basaba en el uso de amuletos,<br />
hierbas, exorcismos y encantamientos debido a que<br />
necesitaban agradar o ahuyentar a los es píritus malignos.<br />
Concepto naturista<br />
El cambio del comunismo primitivo al modo de producción<br />
esclavista determinó la existencia de modificaciones<br />
en el concepto enfermedad. Las explicaciones<br />
para la enfermedad empeza ron a basarse en<br />
la observación y la lógica; esto es, los seres humanos<br />
sentían la necesidad de ver al mundo tal y como era,<br />
es decir, de forma natural.<br />
Los griegos y los romanos estaban divididos en dos<br />
clases sociales: esclavos que ejercían el trabajo manual,<br />
y esclavistas que a costa del tra bajo de los primeros<br />
se dedicaban a la labor in telectual y al fomento de<br />
la filosofía, las artes y la medicina.<br />
La conservación de la salud despertó gran interés.<br />
La salud se concebía como la belleza física, la fortaleza<br />
y el desarrollo equilibrado; en cambio, la enfermedad<br />
representaba la infe rioridad y la imperfección. Según<br />
la concepción de la época, el cuerpo humano se componía<br />
de cuatro sustancias primordiales (fuego, aire,<br />
agua y tierra) y la salud se debía al equilibrio entre<br />
ellas.<br />
Los esclavistas se preocupaban por la enfer medad<br />
o la muerte de los esclavos. Los médi cos pensaban que<br />
los orígenes de la enferme dad respondían a causas naturales.<br />
Hipócrates fue el primero en buscar las le yes que<br />
regían las reacciones del organismo frente a las fuerzas<br />
de la naturaleza. Recalcó que la enfermedad era
28 Capítulo 3<br />
un fenómeno natural, deri vado de causas externas<br />
como el frío, el sol o los vientos cambiantes. También<br />
experimen tó los hechos y anotó el resultado de<br />
estudiar los en estado normal y de enfermedad. La<br />
base de sus conocimientos fue la observación direc ta<br />
del paciente y buscó la relación entre el ori gen de la<br />
enfermedad con el pronóstico y el curso de la misma.<br />
Decía:<br />
...no hay que hacer nada en forma temeraria; a<br />
veces es preciso reposar o quedarse sin hacer nada.<br />
Así, en caso de no hacerle bien al enfer mo, tampoco<br />
se le hace un mal.<br />
De ese modo, se consideraba que cuanto más cerca<br />
estuvieran las personas de la natura leza, tenían menos<br />
posibilidades de enfermar se y que la enfermedad debía<br />
curarse por sí sola.<br />
Las prescripciones, por tanto, se referían a dietas,<br />
baños calientes, leche de cabra, vinos añejos y cosas<br />
por el estilo, aunque también se mandaban vomitivos,<br />
purgantes y sangrías.<br />
Concepción religiosa<br />
Durante la Edad Media se desarrolló el concepto religioso<br />
de la salud y la enfermedad. Al existir un modo<br />
de producción feudal, el clero dio origen a ideas religiosas<br />
que contrastaban con las formas de conocimiento<br />
racional recientemen te adquiridas. La existencia<br />
del ser humano, su papel dentro de la sociedad y<br />
todos los aconte cimientos en él y su alrededor eran<br />
reflejo de la voluntad divina.<br />
Así pues, la enfermedad se consideró mani festación<br />
de la ira de dios ante el ser humano pecador, o bien<br />
una gracia especial que dios mandaba a sus hijos.<br />
Los sacerdotes ocuparon el lugar del médi co, por<br />
lo cual la terapéutica se basaba en ple garias, ayunos,<br />
sacrificios, confesiones y obten ción de reliquias. Se<br />
prohibieron las prácticas quirúrgicas para evitar el<br />
derramamiento de sangre. Sin embargo, se aisló a enfermos<br />
como los leprosos para evitar la transmisión<br />
de la enfermedad.<br />
Concepción racional<br />
El desarrollo del capitalismo rompió con las ideas religiosas<br />
acerca de la enfermedad. La división del trabajo<br />
se volvió importante y el ser humano tuvo que dedicarse<br />
a determina das fases de la producción. Paracelso<br />
retomó la idea de que la enfermedad era algo natural;<br />
pensó que la vida se sostenía por fuerzas pro pias del<br />
organismo y que la enfermedad se de bía a la alteración<br />
de las funciones normales del organismo.<br />
A partir del capitalismo, el racionalismo co bró<br />
nueva fuerza. Este fenómeno se reflejó en la ciencia.<br />
La experimentación se agregó a las investigaciones<br />
llevadas a cabo mediante la ló gica y la observación.<br />
Se introdujo el método científico basado en la comprobación<br />
y experimentación de hipótesis y el ser humano<br />
se fue imponiendo sobre la naturaleza. Se habló<br />
del factor causal de la enfermedad y surgieron dos corrientes:<br />
la ontológica y la fisiológica.<br />
El concepto ontológico de enfermedad postula:<br />
...la existencia de entidades patológicas bien definidas,<br />
reconocibles por la existencia de sig nos y síntomas<br />
característicos que obedecen a una etiología<br />
(causa) determinada y que po seen una historia<br />
natural propia...<br />
Lo anterior quiere decir que el organismo se ve<br />
afectado por un parásito nocivo, el cual oca siona síntomas<br />
y signos de la enfermedad. La clasificación y<br />
descripción de las enfermedades adquirió mucha importancia.<br />
Por otra parte, los principales exponentes del concepto<br />
fisiológico fueron Virchow, Bernard y Cannon.<br />
Ellos definieron la salud y la enfermedad de la siguiente<br />
manera:<br />
Es por la actividad normal de elementos orgá nicos<br />
que la vida se manifiesta a sí misma en la salud. Es<br />
por las manifestaciones anormales de los mismos<br />
elementos que se caracteriza la enfermedad.<br />
Lo anterior significa que el individuo goza ría de<br />
salud mientras mantuviera una constan cia en su medio<br />
interno, y el trastorno de dicha constancia traería<br />
consigo enfermedad.<br />
El desarrollo de la tecnología para la salud fue<br />
impulsado por el auge del capitalismo in dustrial después<br />
de la Segunda Guerra Mun dial y fue dirigido de<br />
acuerdo con las necesida des del proceso productivo.<br />
Conforme avanzó el capitalismo, la necesidad de aumentar<br />
la pro ductividad mundial orientó la medicina
Proceso salud-enfermedad 29<br />
hacia la investigación de la fisiología, así como de la<br />
eficiencia corporal y la rápida recuperación de la fuerza<br />
de trabajo. En consecuencia, las accio nes médicas<br />
adoptaron un enfoque predomi nantemente individual<br />
y se ubicaron en hospi tales, institutos de investigación<br />
y laboratorios.<br />
Las principales teorías de esa época, acerca del<br />
proceso salud-enfermedad, fueron las concep ciones<br />
unicausal y multicausal.<br />
Según la concepción unicausal del proceso sa ludenfermedad,<br />
a toda reacción correspondía una causa<br />
única (p. ej., un microorganismo pro ducía una enfermedad<br />
y en otros casos desequi librio interno), pero<br />
no explicó porqué un agente patógeno no siempre<br />
produce enferme dad. Así, este concepto descifró parcialmente<br />
las causas de la enfermedad. Su importancia<br />
se fundamenta en que desarrolló la microbiología<br />
en la segunda mitad del siglo xix y principios del siglo<br />
xx; entre sus representantes se encuen tran Pasteur y<br />
Koch. Además, permitió la investigación de medidas<br />
de control y fármacos que revolucionaron el tratamiento<br />
individual.<br />
El modelo multicausal consideró que la enfermedad<br />
era ocasionada por la influencia simul tánea<br />
de varios factores pertenecientes al agen te, al huésped<br />
(hospedero) y al ambiente con sus aspectos económico,<br />
social y cultural. Sus representantes, en la segunda<br />
mitad del siglo xx, fueron Leavell y Clark, entre otros.<br />
Esta concepción dio origen al concepto de salud de la<br />
Organización Mundial de la Salud (OMS).<br />
El modelo epidemiológico agregó el concepto “red<br />
de causalidad” al modelo multicausal. Mac Mahon y<br />
Pugh consideraron que los fenóme nos no se deben a<br />
un eslabonamiento lineal de factores, sino que tienen<br />
vinculaciones múlti ples entre ellos; además, contribuyeron<br />
al de sarrollo de principios y técnicas con<br />
validez científica que permiten identificar factores de<br />
riesgo en poblaciones humanas.<br />
Concepción sanitarista<br />
Es una concepción ecologista porque conside ra la interacción<br />
del huésped (hospedero), el agente y el ambiente<br />
pero en un contexto tridi mensional, y de ese<br />
modo descubre las relacio nes de los factores causales<br />
entre sí y sobre el efecto.<br />
Según esta concepción, los problemas de sa lud son<br />
sanitarios, por lo cual se proponen acti vidades colectivas<br />
para solucionarlos.<br />
Concepción biológica-social-histórica<br />
Propone una integración entre las ciencias so ciales y<br />
naturales, las cuales permiten concebir el proceso salud-enfermedad<br />
como un proceso histórico y social<br />
que se manifiesta en socieda des y clases concretas de<br />
acuerdo con las con diciones materiales de vida.<br />
Esta concepción se apoya en la relevancia del ambiente<br />
y el modo de vida, así como en los señalamientos<br />
de Hipócrates y la Escuela de Salerno. Se conformó<br />
en los siglos xviii y xix gracias a Johan Peter<br />
Frank y Rudolf Virchow, quienes preconizaron que las<br />
enfermedades, en particular la tuberculosis, se distribuyen<br />
de acuerdo con la clase social. Asimismo, esta<br />
co rriente ubica los fenómenos de la salud en toda su<br />
amplitud hasta llegar a sus relaciones últi mas con la<br />
sociedad en su conjunto.<br />
Conceptos de salud-enfermedad<br />
Definición de salud de la<br />
Organización Mundial de la Salud<br />
En julio de 1946 se fundó la Organización Mun dial de<br />
la Salud como organismo de las Nacio nes Unidas especializado<br />
en los aspectos relacionados con la salud.<br />
En su Declaración de Principios estableció que:<br />
...el goce del más alto grado de salud que se puede<br />
lograr es uno de los derechos fundamen tales de<br />
cada ser humano, sin distinción de raza, religión,<br />
credo político o constitución eco nómica y social y<br />
que la salud depende de la cooperación entre los<br />
individuos y las nacio nes...<br />
La Organización Mundial de la Salud defi nió la salud<br />
como:<br />
...el estado de completo bienestar físico, men tal y<br />
social y no sólo como la ausencia de en fermedad o<br />
invalidez...
30 Capítulo 3<br />
Otras definiciones de salud<br />
Hernán San Martín consideró la salud como un estado<br />
fisiológico variable de equilibrio y adap tación al ambiente<br />
por parte de todas las posibilidades humanas.<br />
Según su concepción, la salud es una noción relativa<br />
que se apoya en criterios objetivos y subjetivos (adaptación<br />
bioló gica, mental y social) y aparece como estado<br />
de tolerancia y compensación físico, psicológico,<br />
mental y social; cualquier estado distinto a éste es percibido<br />
por el individuo y su grupo como la manifestación<br />
de un proceso patológico (de enfermedad).<br />
Milton Terris, del New York Medical College, también<br />
señaló los aspectos subjetivo y ob jetivo de la salud.<br />
El primero lo interpretó como “sentirse bien” y el<br />
segundo lo relacionó con “la capacidad para la función”.<br />
Por ello, descri bió la salud como:<br />
...un estado de completo bienestar físico, men tal y<br />
social y de capacidad para la función y no sólo la<br />
ausencia de enfermedad (en cual quier grado) o de<br />
invalidez...<br />
René Dubós propuso una definición eco lógica:<br />
“...la salud es la adaptación al medio y la capacidad de<br />
funcionar en las mejores condiciones en este medio...”<br />
El término bienestar puede considerarse equivalente<br />
a adaptación dinámica. El ser humano se siente<br />
bien cuando está adaptado al medio físi co, biológico<br />
y social. Sin embargo, se encuen tra en un medio<br />
dinámico, por lo cual acepta lo favorable y rechaza<br />
lo desfavorable. La perso na normal se encuentra en<br />
lucha y ajuste por mantener un equilibrio; esa lucha<br />
puede ser para contrarrestar condiciones desfavorables<br />
del medio o para modificarlo. Así pues, el estado<br />
normal del individuo es la situación que le per mite tener<br />
el máximo equilibrio en su composi ción, estructura<br />
y función. Esa lucha también se refiere a la salud<br />
mental y se manifiesta cuan do el ser humano tiene un<br />
rendimiento óptimo en relación consigo mismo y con<br />
el grupo so cial. También se expresa de manera correcta<br />
y creadora; es decir, la lucha frente a los conflic tos<br />
es una búsqueda por resolverlos que siem pre continúa<br />
ante la presencia de nuevos pro blemas.<br />
En el área social, el ser humano debe convi vir<br />
con sus semejantes y formar parte de una sociedad.<br />
Puede contribuir a mantener la estruc tura en que se<br />
desenvuelve o modificarla de acuerdo con sus necesidades<br />
y aspiraciones, así como con las de su grupo o<br />
comunidad; por ejemplo, la obtención de un trabajo<br />
adecuado para adquirir alimentos, ropa, vivienda con<br />
ser vicios sanitarios, educación y recreación.<br />
Estas concepciones son muy difíciles de al canzar<br />
en todas las sociedades, sobre todo en los países subdesarrollados.<br />
Por ello, algunas naciones del Tercer<br />
Mundo, sobre todo las afri canas, han propuesto la<br />
“definición estratégica de salud”, según la cual:<br />
...el mejor estado de salud de la población de un<br />
país corresponde al mejor estado de equili brio entre<br />
los riesgos que afectan la salud de cada individuo y<br />
de cada población, y los me dios existentes en la colectividad<br />
para contro lar estos riesgos, teniendo en<br />
cuenta la coope ración activa de la población...<br />
Definición de enfermedad<br />
La enfermedad es cualquier estado que perturba el<br />
funcionamiento físico o mental de una per sona y<br />
afecta su bienestar. En otras palabras, es la pérdida del<br />
equilibrio dinámico que mantie ne la composición, la<br />
estructura y la función del organismo.<br />
Proceso salud-enfermedad<br />
Salud y enfermedad no son opuestos sino dife rentes<br />
grados de adaptación. El individuo en estado de completo<br />
bienestar físico, mental y social se encuentra en<br />
equilibrio con su ambien te; pero éste no es estático,<br />
por lo cual ese indi viduo debe funcionar de manera<br />
adecuada para poner en juego mecanismos de ajuste<br />
que le permitan adaptarse, rechazar lo desfavorable o<br />
modificar dicho ambiente.<br />
El sujeto sano está expuesto a enfermarse en cualquier<br />
momento. Al principio, cuando el padecimiento<br />
evoluciona en algunas células o tejidos, aquél puede sentirse<br />
bien o no presen tar signos ni síntomas. Cuando la<br />
enfermedad avanza a un nivel subclínico, sólo se detecta<br />
por medio de estudios especiales, y únicamente cuando<br />
hay signos y síntomas, cuando es obvio el desequi librio<br />
con el ambiente, se hace el diagnóstico. Por ejemplo, la<br />
prueba de Papanicolaou permi te detectar el cáncer cervicouterino<br />
aun cuan do la paciente se sienta bien.
Proceso salud-enfermedad 31<br />
Por lo anterior, la salud y la enfermedad son los extremos<br />
de un mismo proceso dinámico de adaptación<br />
física, mental y social ante las influencias del ambiente<br />
físico, biológico, psico lógico y sociocultural.<br />
Salud pública<br />
Existen tres concepciones:<br />
1. Estado de salud de una colectividad. La salud pública<br />
busca conocer el nivel de salud de la población<br />
con el fin de identificar los princi pales<br />
problemas que rebasan el nivel indivi dual y que<br />
requieren de acciones colectivas para su solución.<br />
2. Gestión administrativa mediante la cual se trata de<br />
mejorar la salud. Es decir, el Estado debe proteger<br />
la salud. Por ejemplo, según el Pro grama<br />
Nacional de Salud 1984-1988 (Méxi co), los servicios<br />
de salud pública se orien tan básicamente<br />
hacia la prevención y el control de padecimientos<br />
transmisibles y no transmisibles; la vigilancia<br />
e investigación epidemiológicas; la educación<br />
para la salud, la nutrición y la planificación familiar;<br />
el con trol sanitario; el saneamiento básico<br />
y la pre vención, y el mejoramiento de la calidad<br />
del ambiente. Para lograr estos objetivos es<br />
ne cesario contar con la participación activa de<br />
cada integrante de la colectividad.<br />
3. Grupo de conocimientos para mejorar la salud de<br />
las colectividades humanas. Como ciencia, la<br />
salud pública tiene un campo específico de acción,<br />
desarrolla y aplica conocimientos téc nicos<br />
y científicos especiales, se apoya y sus tenta en<br />
una filosofía, ofrece la posibilidad de generar investigaciones<br />
en su campo y también permite el<br />
entrenamiento intelectual riguroso.<br />
La salud pública, de acuerdo con Winslow, “es la<br />
ciencia y el arte de prevenir la enferme dad, prolongar<br />
la vida y promover la salud y la eficiencia física y mental<br />
mediante el esfuerzo organizado de la comunidad,<br />
para lograr...”<br />
1. El saneamiento del medio.<br />
2. El control de las enfermedades transmisibles.<br />
3. La educación de los individuos en higiene personal.<br />
4. La organización de los servicios médicos y de<br />
enfermería para el diagnóstico oportuno y el<br />
tratamiento preventivo de las enferme dades.<br />
5. El desarrollo de los mecanismos sociales que<br />
aseguren al individuo y a la comunidad ni vel de<br />
vida adecuado para la conservación de la salud.<br />
Cada ciudadano debe recibir esos beneficios para<br />
estar en condiciones de gozar su derecho a la salud y a<br />
la longevidad, y ésta es una bús queda necesaria.<br />
La salud pública se considera ciencia y arte porque<br />
requiere de fundamentos teóricos y con cepciones científicas<br />
aceptadas y comprobadas, pero también necesita<br />
habilidad y capacidad para la aplicación de técnicas<br />
y procedimientos que permitan realizar las ideas.<br />
Algunos autores consideran conveniente in cluir<br />
la rehabilitación al hablar de salud públi ca, ya que las<br />
funciones de ésta son:<br />
1. Protección de la salud.<br />
2. Fomento de la salud.<br />
3. Restauración de la salud.<br />
4. Funciones técnicas generales y de servicios auxiliares.<br />
Por su parte, Hanlon agrupó las actividades de la<br />
salud pública en siete categorías:<br />
1. De realización colectiva.<br />
2. Dirigidas a prevenir la enfermedad, la incapacidad<br />
y la muerte prematura.<br />
3. Relacionadas con la provisión de la atención médica.<br />
4. Relacionadas con la recolección y el análisis de<br />
estadísticas vitales.<br />
5. Educación sanitaria del público, ya sea indi vidual<br />
o colectiva.<br />
6. Planeación y evaluación de los programas de salud.<br />
7. Investigación, ya sea científica, técnica o administrativa.<br />
Las actividades comunitarias en las que el médico<br />
no interviene personalmente son:<br />
1. Control sanitario de alimentos y bebidas.<br />
2. Control de insectos, roedores y otros vecto res.<br />
3. Control de la contaminación de la atmósfe ra, el<br />
suelo y el agua, así como prevención de los peligros<br />
de radiaciones y ruido.
32 Capítulo 3<br />
En las actividades para sanear el ambiente intervienen,<br />
entre otros, ingenieros sanitarios, ingenieros<br />
industriales, químicos, técnicos en saneamiento, antropólogos<br />
y educadores. Mu chas personas ajenas a la<br />
medicina también son necesarias para abastecer agua<br />
potable y dre naje, controlar la calidad de los alimentos<br />
y be bidas, así como combatir insectos, roedores y<br />
otros vectores.<br />
Otras actividades, en cambio, requieren la participación<br />
del personal médico, odonto lógico y paramédico<br />
(que trabaja al lado del médico u odontólogo) y,<br />
por tanto, de la medicina preventiva, la cual es parte<br />
de la salud pública. Entre esas actividades se encuentran:<br />
control de padecimientos transmisibles y no<br />
transmisibles; educación higiénica; organización de<br />
servicios médicos y de enfermería, y diagnóstico oportuno<br />
y tratamiento de enfermedades.<br />
La salud pública, según los señalamientos de la<br />
Organización Mundial de la Salud, compren de actividades<br />
cuyo fin es proteger, fomentar y reparar la<br />
salud y que son en primer término de responsabilidad<br />
colectiva; el médico necesaria mente intervendrá<br />
y participará en dichas acti vidades, pero no todas son<br />
su responsabilidad.<br />
Salud bucal<br />
La salud bucodental o la salud bucal es el esta do psicosocial<br />
y biológico de un individuo y su grupo que<br />
les permite lograr:<br />
1. La mayor permanencia posible de los dien tes y<br />
funcionamiento eficaz de las estructu ras de soporte<br />
y tejido de los mismos.<br />
2. Funcionamiento eficaz de la cavidad bucal, de<br />
cara y cuello, y de las interrelaciones de éstos con<br />
el complejo orgánico individual.<br />
3. Calidad estética dental y bucal según las pautas<br />
culturales del grupo.<br />
4. Motivación y capacidad para elegir el con sumo<br />
de alimentos y la expresión oral como actividades<br />
básicas para la vida y la interac ción social.<br />
Con la definición anterior puede pensarse que<br />
muy pocas personas tienen salud bucal. Por ello, una<br />
propuesta más práctica es la siguiente:<br />
Salud bucal es la resultante de la interacción de<br />
todos los factores económicos, sociales, bio lógicos<br />
y culturales que propician una permanencia más<br />
prolongada de los órganos denta les en el individuo<br />
y que además se sustente en una actitud de prevención,<br />
nutrición, higiene y armonía fisiológica<br />
que permita la mejor función con los órganos involucrados<br />
en la digestión...<br />
Por último, no debe olvidarse el sentimiento de<br />
aceptación regido por las pautas culturales del grupo<br />
social de pertenencia, ya que esto marca la percepción<br />
estética como una varia ble a considerar en el significado<br />
de salud.
Capítulo 4<br />
Historia natural de la enfermedad 33<br />
Historia natural<br />
de la enfermedad<br />
Definición<br />
La historia natural de la enfermedad es la relación ordenada<br />
de acontecimientos derivados de la interrelación<br />
del ser humano que lo llevan del es tado de salud<br />
al de enfermedad, la cual se resuel ve por diferentes<br />
alternativas: regreso a la salud, cronicidad, agravamiento,<br />
secuelas invalidantes o la muerte. En otras<br />
palabras, es la evolución de la enfermedad cuando no<br />
se interfiere en ella; por ejemplo, cuando no se proporciona<br />
tratamiento.<br />
Tríada ecológica<br />
Muchas personas se exponen a algún virus (p. ej., al<br />
de la gripe) y se preguntan por qué no enferman. Para<br />
comprender esta situación es indispensable revisar la<br />
tríada ecológica forma da por huésped, agente causal<br />
y ambiente.<br />
Huésped (hospedero)<br />
Es cualquier ser vivo que en circunstancias naturales<br />
permite la subsistencia o alojamiento de un agente causal<br />
de enfermedad. Algunas de sus características son<br />
determinantes para ello: estructura genética, raza, edad,<br />
sexo, integridad anatomofuncional, grado de inmunidad,<br />
esta do nutricio, estado psicológico y hábitos.<br />
Estructura genética<br />
El huésped puede tener alteraciones o modifi caciones<br />
genéticas y padecer ciertas afecciones hereditarias,<br />
como la hemofilia y el daltonismo, o trastornos con<br />
tendencia a repetirse en una familia, como hipertensión<br />
arterial y ciertos ti pos de cáncer. La hipoplasia<br />
dominante del esmalte está ligada al cromoso ma X.<br />
Raza<br />
La mayoría de los africanos de raza negra tiene resistencia<br />
natural a la infección por Plasmodium vivax,<br />
agente causal del paludismo. Esto se relaciona con la<br />
ausencia del factor Duffy en sus eritrocitos.<br />
Edad<br />
El padecimiento de ciertas enfermedades se re laciona<br />
con la edad del huésped. Al nacer, el niño es resistente<br />
a enfermedades como el sa rampión y la difteria cuando<br />
su madre ha esta do protegida contra tales padecimientos<br />
o los ha tenido. La caries es más frecuente<br />
en niños y jóvenes; en cambio, las enfermedades periodontales<br />
son más comunes en personas mayores.<br />
Sexo<br />
Ciertas afecciones son más frecuentes entre las personas<br />
de determinado sexo. Por ejemplo, la fiebre<br />
reumática y las alteraciones de la ve sícula biliar son<br />
más comunes entre las muje res; en cambio, la histoplasmosis<br />
y la coccidioidomicosis ocurren más en los<br />
varones.<br />
Integridad anatomofuncional<br />
Determinados padecimientos aparecen duran te el<br />
desarrollo evolutivo del huésped y pue den alterar su<br />
integridad. Por ejemplo, el em brión sufre malforma-
34 Capítulo 4<br />
ciones cuando la madre es infectada por el virus de<br />
la rubéola en los primeros meses del embarazo; las<br />
radiaciones ionizantes y algunos fármacos pueden generar<br />
malformaciones congénitas en el producto si la<br />
madre se expone a ellos en los primeros meses del embarazo.<br />
Muchas maloclusiones se presentan durante el<br />
crecimiento y el desa rrollo.<br />
Nivel de inmunidad<br />
La inmunidad es la seguridad o protección del huésped<br />
hacia una enfermedad o veneno, por lo cual<br />
determina la aparición o ausencia de afección en el<br />
individuo. Algunas enfermeda des dejan inmunidad<br />
después de padecerlas, como el sarampión. Las personas<br />
con síndro me de inmunodeficiencia adquirida<br />
(sida) son más susceptibles de contagiarse, por ejemplo,<br />
de tuberculosis. Las enfermedades periodontales<br />
se relacionan con la inmunidad.<br />
Estado nutricio<br />
La nutrición deficiente constituye en sí una enfermedad,<br />
y la carencia de vitaminas origina avitaminosis,<br />
independientemente de que una mala nutrición<br />
(antes llamada malnutrición) favorece la ocurrencia<br />
de otros trastornos, en tre ellos infecciones, obesidad,<br />
diabetes mellitus e hipertensión arterial.<br />
Estado psicológico<br />
La tensión emocional puede propiciar la apari ción de<br />
gastritis, úlcera péptica, colitis e inclu so amenorrea<br />
(falta de menstruación), entre otras.<br />
Hábitos<br />
La falta de higiene personal y el hacinamiento proporcionan<br />
condiciones favorables a los pa decimientos<br />
infecciosos. Los fumadores están más expuestos a<br />
tener enfermedades respirato rias, periodontales y<br />
cáncer oral; las personas que acostumbran comer en<br />
sitios poco higiénicos son susceptibles a pade cer enfermedades<br />
parasitarias, fiebre tifoidea o infecciones<br />
gastrointestinales.<br />
Agente causal<br />
Consiste en todo poder, principio o sustancia capaz<br />
de actuar en el organismo y cuya presencia o au sencia<br />
da comienzo a una enfermedad. De acuerdo con<br />
Gordon, los agentes causales pue den ser biológicos,<br />
físicos y químicos.<br />
Agentes biológicos<br />
Los agentes biológicos son bacterias, virus, hon gos,<br />
parásitos, sus toxinas, o todos ellos, los cuales po seen<br />
ciertas características a considerar, como patogenicidad,<br />
virulencia y poder antigénico.<br />
La patogenicidad es la capacidad del agente biológico<br />
para producir enfermedad en un huésped susceptible;<br />
depende de su poder para colonizar al huésped,<br />
multiplicarse y alterar su fisiología.<br />
La virulencia es el grado de patogenicidad del agente<br />
infeccioso, así como la capacidad para invadir y lesionar<br />
los tejidos del huésped, por lo cual hay agentes<br />
más virulentos que otros.<br />
El poder antigénico es la capacidad de los agen tes<br />
biológicos para producir en el huésped la respuesta<br />
inmunitaria.<br />
Bacterias<br />
Las bacterias forman un grupo heterogéneo de microorganismos.<br />
Las más pequeñas miden entre 0.2 y 2 μ<br />
de diámetro y pertenecen al rei no de los protistas inferiores<br />
(Procaryotae), que se distinguen de las plantas<br />
verdaderas y de los animales porque tienen una organización<br />
muy simple.<br />
Por otra parte, las bacterias tienen una en voltura<br />
constituida por varias capas o cubier tas; esto es, cápsula,<br />
glicocálix, pared celular y mem brana citoplásmica.<br />
De éstas, las dos últimas son esenciales; en cambio, las<br />
dos primeras pueden estar presentes o no (elementos<br />
facultativos). El glicocálix es esencial para la adherencia<br />
de las bacterias a superficies lisas no descamativas,<br />
como dientes, huesos, válvulas cardiacas o ma teriales<br />
inertes, como las prótesis; además, ac túa como mecanismo<br />
de defensa al impedir que contacten con ellas<br />
fagocitos, anticuerpos, enzimas, biodetergentes y antibióticos.
Historia natural de la enfermedad 35<br />
En el interior de las bacterias hay una zona granular<br />
(citoplasma) y otra fibrilar. El nucleoi de carece de<br />
membrana nuclear que lo separe del citoplasma, no<br />
hay nucléolo y está consti tuido por un solo cromosoma.<br />
Las bacterias pueden invadir directamente los tejidos<br />
o segregar toxinas que se dirigen de manera directa<br />
a la sangre y de allí a diversas partes del organismo.<br />
Algunas de ellas producen elementos de resistencia,<br />
denominados es poras, cuando se encuentran en circunstancias<br />
adversas.<br />
Las esporas son estructuras refringentes y redondeadas<br />
u ovaladas que pueden hallarse dentro de<br />
la bacteria (endosporas) o fuera de ella (exosporas).<br />
Además, tienen muy poca agua, su cubierta es muy<br />
dura y pueden per manecer viables durante años sin<br />
presentar ac tividad metabólica, por lo cual son resistentes<br />
a radiaciones, agentes químicos y deshidratación.<br />
En condiciones ambientales favorables (agua y<br />
sustancias nutricias), producen enzimas que destruyen<br />
sus cubiertas y así permiten la pene tración del<br />
agua y los nutrimentos, con lo cual se transforman de<br />
nuevo en células vegetativas.<br />
Por otro lado, el estudio de las bacterias ha permitido<br />
clasificarlas por sus características, ya sea<br />
morfológicas, de cultivo, bioquímicas, etc. Así, por su<br />
respuesta a la tinción de Gram, la cual se basa en la<br />
estructura de su pared celular, se pueden dividir en:<br />
1. Grampositivas. Retienen el complejo cristal violeta-yodo<br />
a pesar de la decoloración con alcohol<br />
acetona y permanecen de color azul.<br />
2. Gramnegativas. Se decoloran con el alcohol y<br />
pueden colorearse después, por ejemplo de rojo<br />
mediante la safranina.<br />
Con base en el mecanismo de movimiento y las características<br />
de la pared celular, las bacterias se clasifican<br />
en:<br />
1. Mixobacterias. No son patógenas para el ser humano,<br />
tienen forma de bastón, paredes delgadas<br />
y flexibles, y se desplazan por sí solas a lo largo<br />
de superficies sólidas.<br />
2. Espiroquetas (algunos autores las incluyen en un<br />
grupo aparte). Se observan mediante el microscopio<br />
de campo oscuro, inmunofluorescencia o<br />
tinciones de plata. Tienen forma de espiral en<br />
los tres planos del espacio, po seen pared delgada<br />
y flexible, y se desplazan por movimientos ondulantes<br />
alre dedor de su eje mayor. Son agentes<br />
causales de enfermedades como la sífilis (Treponema<br />
pallidum), la fiebre recurrente (Borrelia<br />
recurrentis) y las leptospirosis (Leptospira). Por<br />
lo general, Leptospira afecta a animales y de manera<br />
ocasional al ser humano. Los treponemas<br />
orales son anaerobios estrictos y pueden dividirse<br />
en dos grupos: a) los que necesitan sue ro<br />
(Treponema denticola, Treponema vincentii, Treponema<br />
scoliodontium, Treponema orale y Treponema<br />
macrodentium), y b) los que necesitan<br />
de ácidos grasos de cadena corta (Treponema<br />
pectinovorum y Treponema socranskii). Fundamentalmente<br />
se encuentran en el surco gingi val<br />
donde hay condiciones de anaerobiosis, y junto<br />
con las fusobacterias y otras bacterias pueden<br />
causar ulceraciones en las encías, la cavidad oral<br />
y la faringe.<br />
3. Eubacterias. Tienen paredes celulares rígidas,<br />
gruesas, inmóviles o con flagelos. Incluyen:<br />
A. Formas miceliales. Tienen crecimiento micelial,<br />
es decir, crecen a partir de fila mentos arborescentes;<br />
entre ellas están las micobacterias<br />
(Mycobacterium tuberculosis y Mycobacterium<br />
leprae). Éstas son acidoalcoholresistentes; tienen<br />
alto conte nido lipídico en su pared celular,<br />
por lo cual se colorean con la tinción de<br />
Zielh-Neelsen y la de Kinyoun.<br />
B. Formas unicelulares simples. Incluyen los parásitos<br />
unicelulares obligados, como:<br />
a. Género Rickettsia. Hasta hace algunos años<br />
se les consideraba en un grupo aparte porque<br />
son más pequeñas que las bacterias, y<br />
como los virus crecen en el interior de una<br />
célula viva sólo pueden cultivarse en tejidos<br />
vivos. Sin embargo, tienen las características<br />
es tructurales de las bacterias, aunque<br />
no pueden atravesar los filtros finos.<br />
Por lo general, viven en los artrópodos sin<br />
producirles alteraciones; por ejemplo, Rickettsia<br />
prowazekii, la cual produce el tifus<br />
epidémico transmitido por la picadura del<br />
piojo.
36 Capítulo 4<br />
b. Género Chlamydiae. También se desarrollan<br />
dentro de las células, por lo que se<br />
les consideró virus durante un tiem po, pero<br />
su estructura es similar a la de las bacterias,<br />
aunque carecen de algu nos mecanismos<br />
que les impiden pro ducir la energía necesaria<br />
para su me tabolismo. Son agentes<br />
causales de la psitacosis (Chlamydia psittaci),<br />
la cual es una enfermedad de los pájaros<br />
que puede transmitirse al ser humano.<br />
Algunos tipos de Chlamydia trachomatis<br />
producen linfogranuloma venéreo; otros,<br />
infecciones genitales.<br />
c. Bacterias de vida libre. Pueden ser esfé ricas<br />
(cocos), en forma de bastones (ba cilos) y<br />
en forma de espiral (espirilos). Algunos<br />
cocos grampositivos, que pro ducen infecciones<br />
en diversas partes del organismo,<br />
son los estreptococos (tienden a agruparse<br />
formando cade nas), y los estafilococos<br />
(tienden a agru parse en racimos); también<br />
se incluyen los neumococos, los cuales<br />
producen neumonía (Streptococcus pneumoniae)<br />
y son diplococos porque se acomodan<br />
por pares. Entre los cocos gramnegativos<br />
se encuentra Neisseria gonorrhoeae,<br />
un diplococo que produce infecciones gonocócicas<br />
(blenorragia o gonorrea).<br />
Los bacilos varían en longitud y se agrupan<br />
en empalizada, letra china, X y V (corinebacterias)<br />
o cadenas (Bacillus anthracis).<br />
Algunos grampositivos que producen<br />
las toxinas más activas son Corynebacterium<br />
diphtheriae (difteria), Clostridium<br />
tetani (tétanos) y Clostridium botulinum<br />
(botulismo). Entre los gramnegativos<br />
están: Haemophilus ducreyi (chancro<br />
blando), Bordetella pertussis (tos ferina),<br />
Salmonella typhi (tifoidea), Salmonella paratyphi<br />
(paratifoidea), Shigella dysenteriae<br />
(disentería bacilar) y Vibrio cholerae (cólera),<br />
entre otros.<br />
Las bacterias en espiral son formas bacilares<br />
con una o varias curvaturas en un<br />
solo plano del espacio, y se denominan vibrios<br />
y espirilos.<br />
4. Micoplasmas. Son microorganismos sin pared<br />
celular típica, por lo cual requieren esteroles y<br />
ácidos grasos para su crecimiento. Sus estructuras<br />
celulares son primitivas y sólo tie nen membrana,<br />
ribosomas y núcleo procariótico. Tal vez<br />
son la forma de vida más simple capaz de ser<br />
independiente, como Mycoplasma pneumoniae,<br />
que produce neumonía.<br />
Otra clasificación de las bacterias se fundamenta<br />
en los requerimientos y sensibilidad al oxí geno:<br />
1. Anaerobias estrictas. Crecen sólo en ausencia de<br />
oxígeno, ya que éste las inhibe o mata. Entre ellas<br />
destacan por su importancia las de los géneros:<br />
Clostridium, Porphyromonas, Prevotella, Bacteroides,<br />
Mitsuokella, Leptotrichia, Fusobacterium, Selenomonas,<br />
Bifidobacterium, Eubacterium, Veillonella<br />
y Peptostreptococcus.<br />
2. Anaerobias moderadas. Son capaces de crecer en<br />
presencia de 2 a 8% de oxígeno y sobrevi ven con<br />
el oxígeno atmosférico durante 60 a 90 minutos.<br />
3. Anaerobias aerotolerantes. Pueden tolerar el oxígeno<br />
aunque no lo pueden utilizar metabólicamente.<br />
4. Anaerobias facultativas. No precisan de oxíge no<br />
para su desarrollo, pero pueden usarlo metabólicamente<br />
si está presente. Entre las de interés<br />
odontológico destacan las corres pondientes a<br />
los géneros Gemella, Actinomyces, Lactobacillus,<br />
Propionibacterium, Actinobacillus, Eikenella, Capnocytophaga<br />
y Campilobacter.<br />
5. Microaerófilas. Requieren oxígeno pero en concentraciones<br />
inferiores a las normales.<br />
6. Aerobias estrictas. Necesitan oxígeno como<br />
aceptor final obligado de electrones en la ca dena<br />
respiratoria.<br />
Unas bacterias colonizan al cuerpo humano sano<br />
y constituyen la microbiota o flora normal; asimismo,<br />
se mantienen en equilibrio con los mecanismos de defensa<br />
del huésped (p. ej., Staphylococcus epidermidis y<br />
especies de Corynebacterium).<br />
Otras sintetizan vitaminas K y B 12<br />
, folato, piridoxina,<br />
biotina y riboflavina. También hay otras más que<br />
defienden al organismo, como los lactobacilos de la<br />
vagina.
Historia natural de la enfermedad 37<br />
Por último, en el ámbito odontológico, Streptococcus<br />
viridans es importante porque tiene su hábitat<br />
en la cavidad bucal y se relaciona con la formación<br />
de placa dentobacteriana, caries, gin givitis, periodontitis<br />
y otras alteraciones. Este género puede dividirse<br />
en grupos:<br />
1. Grupo mutans. Streptococcus: mutans, rattus,<br />
cricetus, sobrinus, ferus, downei y macacae.<br />
2. Grupo oralis. Streptococcus: sanguis, gordonii, parasanguis,<br />
crista, oralis, mitis y pneumoniae.<br />
3. Grupo milleri. Streptococcus: anginosus, intermedius,<br />
constellatus.<br />
4. Grupo salivarius. Streptococcus: salivarius y vestibularis.<br />
Virus<br />
Son los agentes más pequeños y sólo se obser van con<br />
detalle mediante el microscopio elec trónico; atraviesan<br />
los filtros de porcelana y no se desarrollan en medios<br />
artificiales de cultivo, de manera que para multiplicarse<br />
necesitan estar dentro de una célula porque<br />
son incapa ces de producir energía y de sintetizar sus<br />
com ponentes. Asimismo, los virus contienen una molécula<br />
de ácido nucleico, ya sea ácido desoxirribonucleico<br />
(DNA) o ácido ribonucleico (RNA), pero nunca<br />
las dos a la vez. Esa molé cula se encuentra rodeada<br />
por una capa de pro teínas denominada cápside. Cada<br />
subunidad de la cápside se llama capsómero. El conjunto<br />
del ácido nucleico y la cápside se conoce como<br />
nucleocápside, y puede ser de forma helicoidal, icosaédrica<br />
o compleja.<br />
Al pasar a través de la membrana nuclear o citoplásmica<br />
de la célula infectada, muchos vi rus adquieren<br />
una envoltura exterior lipoproteínica.<br />
Dicha envoltura puede tener proyecciones exteriores<br />
o espículas donde se encuentran las proteínas de<br />
fijación que se unirán a los recep tores específicos<br />
de la célula sensible a la infec ción.<br />
Una vez replicados, los virus desnudos (sin envoltura)<br />
son liberados cuando la célula infec tada sufre<br />
lisis (destrucción). Los virus con envoltura salen mediante<br />
gemación o exocitosis por una zona de la membrana<br />
citoplásmica o nuclear.<br />
Los virus pueden infectar organismos uni celulares<br />
como micoplasmas, bacterias y orga nismos pluricelulares.<br />
Se clasifican de acuerdo con diversos factores,<br />
entre ellos tipo de ácido nucleico, tamaño y<br />
formas, sensibilidad a los agentes físicos y químicos<br />
(propiedad o disposi ción natural o adquirida para sufrir<br />
modifica ciones), modo de transmisión y tejidos<br />
afecta dos. Sin embargo, hasta la fecha existen géneros<br />
sin clasificar.<br />
Las enfermedades que producen, entre muchas<br />
otras, son resfriado común, encefalitis, fie bre amarilla,<br />
hepatitis infecciosa, influenza, parotiditis, poliomielitis,<br />
rabia, rubéola, saram pión, herpes, varicela y<br />
síndrome de inmunodeficiencia adquirida.<br />
Hongos<br />
Los hongos pertenecen al reino de los protistas superiores,<br />
que comparten la estructura eucariótica con las<br />
plantas verdaderas y los anima les, es decir, tienen un<br />
núcleo verdadero. Algu nos autores los incluyen en el<br />
reino Fungi.<br />
Son microorganismos no fotosintéticos que por lo<br />
general crecen como una masa de fila mentos (hifas)<br />
ramificados y entrelazados, co nocida como micelio.<br />
No deben confundirse con las bacterias miceliales<br />
porque éstas son procarióticas. Producen lesiones en<br />
la piel (mi cosis), como Trichophyton mentagrophytes,<br />
que ocasiona la tiña del cuerpo, o lesiones profundas<br />
en el organismo como Histoplasma capsulatum que<br />
origina histoplasmosis. Ciertos hongos pro ductores<br />
de toxinas causan envenenamiento al ingerirse. Los<br />
de interés odontológico son los que ocasionan ulceraciones<br />
en la mucosa bu cal, como especies de Candida;<br />
Histoplasma capsulatum; Paracoccidioides brasiliensis;<br />
Blastomyces dermatitidis y Coccidioides immitis.<br />
Parásitos<br />
Las bacterias, los virus y los hongos son parási tos de<br />
un huésped porque viven a expensas de él y pueden<br />
perjudicarlo; pero por sus características específicas,<br />
en el grupo de los parásitos sólo se incluyen protozoarios<br />
y helmintos.<br />
Los protozoarios son eucariotas y poseen uno o<br />
varios núcleos. Están envueltos por una uni dad de<br />
membrana a través de la cual pasan los nutrimentos.<br />
Su citoplasma tiene mitocondrias, aparato de Golgi,<br />
lisosomas, retículo endoplásmico liso y rugoso, y en
38 Capítulo 4<br />
ocasiones gránulos de secreción. Respiran, digieren<br />
alimentos, gene ran energía, crecen y se reproducen,<br />
ya sea de manera asexual o sexual. Pueden clasificar se<br />
en cuatro grupos:<br />
1. Mastigophora. Incluye a los parásitos con uno<br />
o más flagelos; por ejemplo, Giardia lamblia<br />
o intestinalis que afecta al intestino delgado, y<br />
Trichomonas vaginalis que afecta al tracto genitourinario.<br />
Con frecuencia se ha encontrado Trichomonas<br />
tenax en la cavidad bucal, aun que no<br />
es patógena para el ser humano.<br />
2. Sarcodina. Está representada por el género Entamoeba,<br />
de las cuales Entamoeba histolytica ocasiona<br />
amebiasis. En la cavidad bucal se ha encontrado<br />
con frecuencia Entamoeba gingivalis.<br />
3. Sporozoa. Se caracteriza por tener su ciclo de<br />
vida en dos huéspedes. Por ejemplo, Plasmodium<br />
vivax, Plasmodium malariae, Plasmodium<br />
falciparum y Plasmodium ovale, que producen<br />
el paludismo y necesitan al mosquito Anopheles<br />
para su transmisión.<br />
4. Ciliophora o Ciliata. Incluye protozoarios ciliados,<br />
como Balantidium coli que afecta al colon<br />
y ocasiona disentería balantidiana.<br />
Los helmintos son parásitos pluricelulares que se<br />
conocen también como gusanos planos porque no<br />
tienen cavidad corporal o celoma. Los que son largos<br />
como cinta se denominan cestodos (Taenia solium y<br />
Taenia saginata) y los de cuerpo corto y plano, parecido<br />
al de una hoja, se llaman trematodos (Fasciola<br />
hepatica).<br />
Los nematelmintos son gusanos redondos, con cavidad<br />
corporal, sin segmentos y con sexos se parados<br />
(como Ascaris lumbricoides, Trichinella spiralis, Ancylostoma<br />
duodenale y Onchocerca volvulus).<br />
Agentes físicos<br />
Cambios de temperatura<br />
El ser humano sólo es capaz de vivir en un estrecho<br />
margen de temperatura; el tipo, gravedad, duración y<br />
área expuesta condicio nan el grado de intensidad de<br />
las lesiones por calor o por frío extremos. Las estructuras<br />
más afectadas durante los cambios de temperatura<br />
son la piel y el sistema angiológico o circulato rio,<br />
que regulados por el sistema nervioso controlan la<br />
temperatura corporal.<br />
El calor excesivo puede ocasionar:<br />
1. Agotamiento por calor. Se manifiesta por debilidad<br />
y cansancio debido a los cambios en el<br />
volumen sanguíneo o disminución ligera en el líquido<br />
extracelular.<br />
2. Golpe de calor o insolación. Se manifiesta por<br />
aumento rápido de la temperatura, que pue de<br />
dañar órganos por la falta de sudación.<br />
Por otra parte, el frío intenso y prolonga do puede<br />
causar daños locales (como sucede cuando hay grietas,<br />
escaras y congelación), pér dida de órganos (como<br />
los dedos) o incluso da ños generalizados (coma hipotérmico<br />
y muerte).<br />
Presión de gases o líquidos<br />
Las modificaciones de presión atmosférica pue den<br />
llevar al individuo a sufrir lesiones, como durante el<br />
buceo o el vuelo a grandes alturas. El conjunto de lesiones<br />
por diferencia de pre sión mayor a 50 mmHg<br />
entre el medio y los te jidos se conoce como barotrauma,<br />
el cual se caracteriza por daños en oídos y senos<br />
paranasales y hemorragia en los ojos, etc.; asimismo,<br />
un aumento de presión en el aire propicia paso de nitrógeno<br />
atmosférico a la sangre y puede ocurrir narcosis,<br />
con lo cual disminuye la coor dinación y a veces<br />
se presentan alucinaciones.<br />
El oxígeno es indispensable para la vida del ser<br />
humano, pero si se inhala oxígeno a mayor presión,<br />
algunas personas pueden tener convulsiones, coma o<br />
daño pulmonar. Así también, el exceso de bióxido de<br />
carbono puede producir debilidad, mareo e inconsciencia.<br />
Las personas sometidas a una presión alta y luego a<br />
descompresión rápida pueden sufrir embo lia gaseosa<br />
o enfermedad por descompresión.<br />
Por otra parte, en lugares de gran altitud se corre<br />
el riesgo de sufrir el llamado “mal de montaña” debido<br />
a disminución de oxígeno en los tejidos. El mal<br />
de montaña se caracteriza por somnolencia, astenia<br />
(debilidad), dolor de cabe za y fatiga, entre otras alteraciones.
Historia natural de la enfermedad 39<br />
Efecto mecánico de objetos o instrumentos<br />
El choque violento de un objeto contra un teji do puede<br />
producir lesión de éste sin pérdida de continuidad<br />
en la piel (contusión), o bien causar heridas de muchos<br />
tipos: abrasiones o escoriaciones (raspaduras),<br />
laceraciones o des garros, incisiones (objeto cortante),<br />
penetracio nes (objeto punzante) y lesiones por proyectil<br />
de arma de fuego. También puede originar daños<br />
en los huesos (fracturas) o en las articula ciones<br />
(esguinces y luxaciones). Asimismo, ocu rre estrangulación<br />
por ligadura y asfixia por obstrucción del tracto<br />
respiratorio.<br />
Electricidad<br />
La lesión por electricidad sólo ocurre cuando alguna<br />
parte del cuerpo completa el circuito entre dos conductores;<br />
es decir, el organismo aislado puede soportar<br />
incluso descargas de alta tensión.<br />
La peligrosidad de las lesiones depende de factores<br />
como intensidad, tensión o voltaje, fre cuencia y tipo<br />
de corriente, tiempo de contacto con la corriente, tipo<br />
de contacto y resistencia del organismo. De éstos, la<br />
intensidad resulta peligrosa a partir de 0.01 amperios,<br />
ya que pue de ocasionar quemaduras, contracciones<br />
mus culares y paro cardiaco o respiratorio, o ambos; a<br />
partir de 0.10 amperios es mortal. Asimismo, a mayor<br />
voltaje, aumenta el riesgo y a 500 voltios sobreviene la<br />
muerte. La misma intensidad es más dañina en la corriente<br />
alterna que en la continua; pero sucede lo contrario<br />
en frecuen cias mayores a los 20 000 ciclos por<br />
segundo. Por último, la electricidad es más peligrosa<br />
cuanto mayor tiempo de contacto haya, igual que<br />
cuando exista agua de por medio, porque dis minuye<br />
la resistencia del organismo.<br />
Radiaciones<br />
La radiación es la emisión, transmisión y ab sorción de<br />
cierto tipo de energía, y de acuerdo con sus características<br />
puede ser electromagné tica o ionizante.<br />
La radiación electromagnética o no ionizante se<br />
compone de rayos infrarrojos, ultravioleta, lá ser y de<br />
microondas. Los rayos infrarrojos pueden producir<br />
quemaduras.<br />
La radiación ionizante es más peligrosa que la electromagnética<br />
porque ioniza las estructuras moleculares<br />
o atómicas en las células; así, puede dis minuir la<br />
cantidad de eritrocitos y plaquetas, y producir náusea,<br />
vómito, diarrea, esterilidad, daño genético, cáncer e<br />
incluso la muerte.<br />
Agentes químicos<br />
Los agentes químicos, de acuerdo con su esta do físico,<br />
son:<br />
1. Sólidos como el polvo y el humo.<br />
2. Líquidos en forma de neblinas y rocíos.<br />
3. Gases y vapores.<br />
Actúan directo en órganos o tejidos y modifican su<br />
estructura y función. Así lo hacen alcoholes, metales y<br />
sus sales, insecticidas, venenos de plantas y animales,<br />
entre otros.<br />
Los fármacos pueden causar reacciones ad versas<br />
como alergia, además de que tienen efec tos indeseables.<br />
Por ejemplo, el ácido acetilsalicílico (aspirina)<br />
irrita la mucosa del estómago y puede originar gastritis<br />
y úlcera péptica; los compuestos anticancerosos<br />
causan náusea, vómito, pérdida de cabello, etcétera.<br />
Nutrimentos<br />
Los investigadores A. Lilienfeld y D. Lilienfeld consideran<br />
que la deficiencia de alguna vitami na resulta<br />
en hipovitaminosis o avitaminosis. La falta de yodo<br />
en el organismo genera bocio; la alimentación inadecuada<br />
puede causar desnutrición u obesidad. Por lo<br />
contrario, la dieta rica en sa carosa y con ingestiones<br />
frecuentes favorece la placa dentobacteriana y por<br />
consiguiente ocasiona caries y enfermeda des periodontales.<br />
Ambiente<br />
Es la totalidad de factores físicos, químicos, bióticos y<br />
socioculturales que rodean a un indivi duo o grupo. Es<br />
dinámico porque se encuentra en continuo cambio y<br />
con constantes interac ciones entre sus componentes.<br />
El ambiente natural está constituido por fac tores<br />
geográficos, meteorológicos, geológicos y biológicos<br />
sumamente relacionados entre sí.
40 Capítulo 4<br />
La exposición prolongada a los rayos solares ocasiona<br />
quemaduras y favorece la aparición de cáncer<br />
de la piel. La atmósfera húmeda proporciona condiciones<br />
propicias para las infecciones respiratorias, y<br />
el aire muy seco reseca piel y mucosas. El viento, es<br />
decir, el aire en movimiento, ayuda a regularizar la<br />
humedad, la presión y la temperatura de la atmósfera,<br />
pero puede arras trar sustancias perjudiciales para<br />
la salud. Si el agua de consumo tiene exceso de flúor<br />
ocasiona fluorosis.<br />
La combinación de los factores físicos del am biente<br />
constituye el clima, el cual puede propiciar el desarrollo<br />
de especies perjudiciales como los mosquitos<br />
transmisores de enfermedades.<br />
El ambiente biológico está constituido por la flora y<br />
la fauna, las cuales proporcionan alimen to y compañía<br />
al ser humano. Sin embargo, en estado de contaminación<br />
originan enfermedad.<br />
Los factores sociales del ambiente, como la pobreza,<br />
la vivienda inadecuada, la falta de empleo, la<br />
ignorancia y la contaminación ambiental, propician<br />
la aparición de enfermeda des. Las neurosis y el estrés<br />
son más frecuentes en zonas densamente pobladas.<br />
Periodos de la historia natural<br />
de la enfermedad<br />
De acuerdo con Leavell y Clark, existen dos periodos<br />
de la historia natural de la enferme dad: prepatogénico<br />
y patogénico.<br />
Periodo prepatogénico<br />
En este periodo interactúan el huésped, el agen te y el<br />
ambiente como factores potencialmente productores<br />
de enfermedad. El huésped se encuentra sano, pero<br />
en determinado momento alguno de los elementos de<br />
la tríada rompe el equilibrio del sistema ecológico y<br />
se produce el estado de enfermedad. La pérdida del<br />
equi librio rara vez comienza con un estímulo único<br />
desencadenante; en la mayoría de los casos hay cambios<br />
en el agente causal, el huésped y el ambiente, lo<br />
cual se denomina multicausalidad (fig. 4-1).<br />
Periodo prepatogénico Periodo patogénico Resultado<br />
Interacción<br />
de:<br />
Muerte<br />
Agente<br />
causal de<br />
enfermedad<br />
Huésped<br />
humano<br />
Horizonte<br />
clínico<br />
Enfermedad<br />
discernible<br />
tempranamente<br />
Enfermedad<br />
avanzada<br />
Convalecencia<br />
Estado crónico,<br />
incapacidad<br />
Factores ambientales<br />
que estimulan la<br />
aparición de enfermedad<br />
Patogénesis<br />
temprana<br />
Recuperación<br />
Figura 4-1. Historia natural de la enfermedad. Fuente: Leavel HR, Clark EG. Preventive medicine for the doctor in his<br />
community. An epidemiological approach. New York: McGraw-Hill, 1965.
Historia natural de la enfermedad 41<br />
Periodo patogénico<br />
Este proceso evolutivo de la enfermedad abar ca, en<br />
principio, la interacción inicial de los estí mulos que<br />
generan alteración; luego, las res puestas o reacciones<br />
del huésped, demostradas por cambios bioquímicos,<br />
anatómicos y fisioló gicos que llevan a la recuperación<br />
del equili brio o conducen al estado crónico en donde<br />
es necesaria una nueva homeostasis; la apari ción de<br />
secuelas como la invalidez y, en el peor de los casos,<br />
la muerte.<br />
Los diferentes caminos de una misma enfer medad<br />
dependen de la capacidad del huésped para reaccionar<br />
ante los estímulos.<br />
En el periodo patogénico hay un primer lap so de<br />
patogénesis temprana. Durante ésta, se producen<br />
cambios en los distintos niveles de organización (molécula,<br />
célula, tejido, órgano y sistema) que pueden<br />
manifestarse en diferen tes niveles (bioquímico, fisiológico<br />
o anatómi co); pero el individuo no percibe esos<br />
cambios porque se encuentran debajo del horizonte<br />
clí nico. Al momento en que la enfermedad cruza el<br />
horizonte clínico, las manifestaciones son percibidas<br />
por el huésped u otra persona y apa recen los signos,<br />
los síntomas, o ambos, de la enfermedad (discernible<br />
en etapa temprana). Los signos son fenómenos objetivos<br />
de la enfermedad, es decir, el médico los reconoce<br />
o los induce; en cambio, los síntomas son manifestaciones<br />
de alteración orgánica o funcional apreciables<br />
por el paciente (p. ej., el dolor).<br />
En el área de infectología, ese momento sir ve para<br />
determinar el periodo de incubación. Este es el tiempo<br />
que transcurre entre la exposición a un agente infeccioso<br />
y la aparición del primer signo o síntoma de enfermedad.<br />
La intensidad de los signos y síntomas no tie ne relación<br />
con la gravedad de una enferme dad; por ejemplo,<br />
una enfermedad grave pue de manifestarse por<br />
signos y síntomas leves en los niños con desnutrición.<br />
Al avanzar la enfer medad se puede encontrar el daño,<br />
que depen de del tejido u órgano afectado. Posteriormente,<br />
si las características del huésped y el ambiente<br />
son favorables, el individuo entra en estado de convalecencia<br />
y se recupera. Por lo contrario, cuando las<br />
características del huésped y el am biente son desfavorables,<br />
la enfermedad pue de evolucionar a un estado<br />
crónico y dar lugar a incapacidad (falta de capacidad o<br />
po tencia, sobre todo para el trabajo), es decir a limitaciones<br />
funcionales. La incapacidad del in dividuo para<br />
reintegrarse a sus labores habi tuales constituye invalidez;<br />
ésta consiste en limitación del desarrollo integral<br />
de las actividades hu manas individuales, familiares y<br />
sociales, como consecuencia de daños irreversibles.<br />
Por últi mo, cuando el individuo cesa en su lucha por<br />
restablecer el equilibrio, sobreviene la muerte.<br />
Con base en lo anterior, una enfermedad puede<br />
evolucionar por distintos caminos:<br />
1. Recuperación de la salud antes de que la enfermedad<br />
se manifieste en el horizonte clí nico.<br />
Muchas personas tienen anticuerpos contra determinado<br />
agente causal y nunca presentaron<br />
manifestaciones de cierto pade cimiento, por<br />
ejemplo, la rubéola.<br />
2. Recuperación después de que la enfermedad cruzó<br />
el horizonte clínico. Así sucede en la mayoría<br />
de los enfermos de resfriado común (gripe).<br />
3. Evolución a la cronicidad, como sucede en infecciones<br />
no tratadas del sistema urinario.<br />
4. Desarrollo de secuelas, como en personas que<br />
padecen poliomielitis.<br />
5. Recaídas.<br />
6. Enfermedad como desencadenante o predisponente<br />
de otra entidad patológica. Puede suceder,<br />
por ejemplo, que un niño enferme de tuberculosis<br />
después de haber padecido sarampión.<br />
7. Muerte del individuo.<br />
Niveles de prevención<br />
La prevención implica cualquier medida que reduzca<br />
la probabilidad de aparición de una afección o enfermedad,<br />
o bien que interrumpa o aminore su progresión.<br />
Esto significa que siempre puede hacerse algo.<br />
Los tres niveles básicos de prevención son: primaria,<br />
secunda ria y terciaria (cuadro 4-1).<br />
Prevención primaria<br />
Se lleva a cabo durante el periodo prepatogénico y tiene<br />
el propósito de mantener y promo ver la salud, así<br />
como de evitar la aparición de la enfermedad. Incluye<br />
la promoción de la sa lud y la protección específica.
42 Capítulo 4<br />
Cuadro 4-1. Niveles de prevención en la historia de la enfermedad<br />
Periodo prepatogénico<br />
Periodo patogénico<br />
Prevención primaria Prevención secundaria Prevención terciaria<br />
Promoción de la salud<br />
Protección específica<br />
Diagnóstico<br />
y tratamiento tempranos<br />
Limitación<br />
de la incapacidad<br />
Rehabilitación<br />
Educación sanitaria<br />
Buenos niveles estándar de<br />
alimentación ajustados a las<br />
diferentes fases de desarrollo<br />
Atención al desarrollo de la<br />
personalidad<br />
Provisión de condicio nes<br />
adecuadas en casa, de<br />
recreación y de trabajo<br />
Genética<br />
Exámenes periódicos selectivos<br />
Uso de inmuniza ciones<br />
específicas<br />
Atención a la higiene<br />
personal<br />
Uso de saneamien to<br />
ambiental<br />
Protección contra riesgos<br />
ocupacionales<br />
Protección contra<br />
accidentes<br />
Uso de nutrimentos<br />
específicos<br />
Protección contra<br />
carcinógenos<br />
Medidas para encontrar<br />
casos individuales y de<br />
masa<br />
Exámenes selectivos<br />
Encuestas de selección de<br />
casos<br />
Objetivos:<br />
Curar y prevenir la<br />
enfermedad<br />
Prevenir la propaga ción de<br />
enfermeda des transmisibles<br />
Prevenir complicacio nes y<br />
secuelas<br />
Acortar el periodo de<br />
incapacidad<br />
Adecuado tratamiento<br />
para detener la<br />
enfermedad y prevenir<br />
futuras complicacio nes<br />
y secuelas<br />
Provisión de facilidades<br />
con el fin de limitar<br />
incapacidad y prevenir<br />
la muerte<br />
Provisión de facilida des<br />
hospitalarias y comunitarias<br />
para adiestramiento y<br />
educación, con el fin de usar<br />
al máximo las capacidades<br />
remanentes<br />
Educación del público y de<br />
la industria para emplear al<br />
rehabilitado<br />
Usar el trabajo como terapia<br />
en los hospitales<br />
Ubicación selectiva<br />
Promoción de la salud<br />
La promoción de la salud abarca:<br />
1. Educación para la salud.<br />
2. Buenos niveles de alimentación, ajustados a las<br />
diferentes fases de desarrollo.<br />
3. Atención al desarrollo de la personalidad (higiene<br />
mental).<br />
4. Provisión de condiciones adecuadas de casa, recreación<br />
y condiciones de trabajo.<br />
5. Educación sexual y para el matrimonio.<br />
6. Consejo genético.<br />
7. Exámenes selectivos periódicos.<br />
El primer aspecto es fundamental: educación para<br />
la salud. La Organización Mundial de la Salud la definió<br />
como:<br />
...el conocimiento e interés por todas aquellas experiencias<br />
del individuo, el grupo o la co munidad<br />
que influyen en las creencias, acti tudes y conducta<br />
respecto de la salud, así como a los procesos y esfuerzos<br />
para producir cam bios a fin de lograr un nivel<br />
óptimo en ella...<br />
Por su parte, Green señaló:<br />
La educación para la salud es cualquier combinación<br />
de experiencias para facilitar adaptaciones<br />
voluntarias del comportamiento y que<br />
conducen a la salud.<br />
En México, la Secretaría de Salud opinó:<br />
La educación para la salud tiene como propó sito final<br />
la participación activa y consciente de los individuos<br />
en beneficio de su salud, la de su familia y<br />
la de su comunidad, funda mentada en el desarrollo<br />
de valores, actitudes, conocimientos y conductas
Historia natural de la enfermedad 43<br />
Otros autores aportan nociones importantes respecto<br />
de la educación para la salud. Entre ellas se encuentran:<br />
1. Un medio para mejorar la salud individual y colectiva.<br />
Entendiéndose ésta como un sistema de<br />
vida que a través del control del ambiente y del<br />
uso adecuado de los recursos, asegure a todos la<br />
salud individual.<br />
2. El desarrollo de un sentido de responsabili dad<br />
del individuo hacia su propia salud.<br />
3. Una fase de los programas de instituciones de<br />
salud pública.<br />
La educación para la salud se debe dar en dos niveles:<br />
quienes carecen de los conocimien tos adecuados<br />
para mantenerla y promoverla, y quienes cuentan con<br />
los conocimientos pero no los practican. Así, la educación<br />
para la sa lud debe empezar con el fomento de<br />
hábitos (educación informal) desde que el niño nace y<br />
debe continuar en la escuela (educación formal).<br />
Protección específica<br />
Estas medidas protegen contra alguna enferme dad en<br />
especial:<br />
1. Uso de inmunizaciones específicas. Si se desea<br />
prevenir la hepatitis B, el individuo debe vacunarse<br />
contra ese padecimiento. Para protegerse<br />
contra el tétanos, el niño recibe la va cuna DPT<br />
(triple, porque protege contra dif teria, tos ferina<br />
y tétanos) o la pentavalente (que protege además<br />
contra in fecciones por Haemophilus influenzae b<br />
y hepatitis B), y después de los seis años de edad<br />
se inmuniza con toxoide tetánico; pero si se sufre<br />
una herida sospe chosa y no se está vacunado,<br />
debe recibir antitoxina tetánica para tener protección<br />
in mediata aunque de corta duración.<br />
2. Atención a la higiene personal. Incluye aspec tos<br />
como aseo de la piel, uso de ropa y zapatos adecuados,<br />
postura, sueño, e higiene de boca y órganos<br />
de los sentidos, entre otros.<br />
3. Saneamiento ambiental.<br />
4. Protección contra riesgos ocupacionales.<br />
5. Uso de nutrimentos específicos.<br />
6. Protección contra accidentes.<br />
7. Protección contra carcinógenos.<br />
8. Protección contra alergenos.<br />
Prevención secundaria<br />
Se aplica cuando la prevención primaria fraca só, es<br />
decir, cuando el individuo enferma, e in cluye:<br />
1. Diagnóstico temprano y tratamiento oportuno.<br />
Tiene como objetivos detener el proceso de enfermedad<br />
para que no avance, prevenir la difusión<br />
de enfermedades transmisibles, así como las<br />
complicaciones y secuelas, y acor tar el periodo<br />
de incapacidad. Consiste en:<br />
A. Medidas para encontrar casos individua les y<br />
de masa.<br />
B. Exámenes selectivos.<br />
C. Encuestas de selección de casos.<br />
2. Limitación de la incapacidad:<br />
A. Es necesario proporcionar tratamiento adecuado<br />
para detener la enfermedad y pre venir<br />
futuras complicaciones y secuelas.<br />
B. Provisión de facilidades con el fin de limi tar la<br />
incapacidad y prevenir la muerte.<br />
Prevención terciaria<br />
La prevención terciaria consiste en la rehabili tación e<br />
incluye:<br />
1. Provisión de facilidades hospitalarias y comunitarias<br />
para adiestrar y educar con el fin de usar al<br />
máximo las capacidades rema nentes.<br />
2. Educación del público y la industria para emplear<br />
al rehabilitado.<br />
3. Proporcionar trabajo como terapia en los hospitales.<br />
4. Ubicación selectiva.<br />
Niveles de aplicación<br />
de los métodos preventivos<br />
Primer nivel:<br />
acción gubernamental amplia<br />
Determinados problemas de salud, como las enfermedades<br />
nutricias (de la nutrición) y la tuberculosis,<br />
requieren de programas guberna mentales encaminados<br />
a mejorar las condicio nes de vida de la población.<br />
Constituyen una acción de prevención inespecífica en
44 Capítulo 4<br />
Grado de dificultad relativo<br />
+ + + + + + + + + + + + + + +<br />
Tipo de acción exigida<br />
Bipersonal<br />
Individual<br />
5o.<br />
Individuo<br />
4o.<br />
Paciente<br />
y auxiliar<br />
profesional<br />
3o.<br />
Paciente-profesional<br />
Colectiva<br />
2o.<br />
Acción gubernamental restringida<br />
1o.<br />
Acción gubernamental amplia<br />
Figura 4-2. Niveles de aplicación de los métodos preventivos.<br />
la promo ción de la salud, la cual exige acción política<br />
y social muy compleja (fig. 4-2).<br />
Segundo nivel:<br />
acción gubernamental restringida<br />
Ciertos métodos de prevención (p. ej., la fluoración<br />
del agua, la yodación y fluora ción de la sal) hacen necesaria<br />
una acción gubernamental más restringida y<br />
limitada a una o dos secretarías de Estado.<br />
Tercer nivel: paciente y profesional<br />
La puesta en marcha de métodos para preven ción<br />
secundaria y terciaria necesitan de la con currencia<br />
de una acción bilateral que relacione al paciente y al<br />
profesional egresado de la uni versidad. Dicha relación<br />
presupone la existen cia de una voluntad individual,<br />
un deseo y un requerimiento de servicios profesionales<br />
por parte del paciente; asimismo, implica factores<br />
económicos, educativos y culturales. Tiene el inconveniente<br />
de alto costo.<br />
Cuarto nivel: paciente y auxiliar<br />
o subprofesional<br />
Este nivel es una simplificación del anterior y presupone<br />
también una acción bilateral del paciente con una<br />
persona cuyo grado de estudios sea inferior al universitario.<br />
Este personal auxi liar puede realizar determinados<br />
trabajos bajo la supervisión de profesionales;<br />
por ejemplo, las aplicaciones tópicas de fluoruros en<br />
programas escolares amplios, lo cual sería imposible<br />
de lle var a cabo por un solo odontólogo. Esta participación<br />
permite ampliar los horizontes de tra bajo y reducir<br />
los costos per capita.<br />
Quinto nivel: acción individual<br />
La aplicación de muchos métodos preventivos depende<br />
de decisiones individuales. La propia persona interesada<br />
en su salud aplica dichos métodos, para lo cual<br />
necesita un sentido desa rrollado de responsabilidad y<br />
de cooperación. En la mayoría de los casos, esos aspectos<br />
son difíciles de lograr.
Capítulo 5<br />
Introducción<br />
a la inmunología<br />
Introducción a la inmunología 45<br />
Antecedentes históricos<br />
La viruela, producida por el virus del mismo nombre,<br />
afectó a personas de todo el mundo. En China se manifestó<br />
como endemia y en el Oriente ya la conocían<br />
desde los tiempos más remotos. Los musulmanes la<br />
transmitieron en África septentrional. En el siglo vii<br />
hubo gra ves epidemias de viruela en Europa; asimismo,<br />
con el descubrimiento de América, esa enfermedad<br />
causó estragos entre la población indí gena.<br />
El último caso de infección natural de virue la se<br />
presentó en octubre de 1977. Dos años des pués, la<br />
Organización Mundial de la Salud (OMS) certificó<br />
la erradicación mundial de esa enfermedad y así lo<br />
confirmó la Asamblea Mundial de la Salud en mayo<br />
de 1980. La erra dicación se logró gracias a la inmunización.<br />
Las primeras ideas acerca de la inmunidad surgieron<br />
al observar que había personas que sufrían ciertas<br />
enfermedades y después de re cuperar la salud no volvían<br />
a padecerlas.<br />
Los turcos protegían a las esclavas mediante la<br />
inoculación de pus de viruela. Por ello, a prin cipios<br />
del siglo xviii, Mary Wortley Montague, esposa del<br />
embajador inglés ante el imperio otomano, aplicó ese<br />
sistema de inmunización en sus hijas e introdujo la<br />
idea en Europa; pero dicho sistema ocasionó muertes,<br />
por lo que se prohibió.<br />
Años después, el doctor Eduardo Jenner es cuchó<br />
entre los campesinos que la viruela de la vaca era una<br />
enfermedad leve y protegía de la viruela humana a los<br />
ordeñadores. Entonces, hizo anotaciones e historias<br />
clínicas de pacien tes con viruela humana, e investigó<br />
posibles antecedentes de viruela vacuna. Así se<br />
conven ció de la inmunización por viruela de la vaca<br />
y anunció su descubrimiento en Londres, pero no le<br />
creyeron. En 1796 obtuvo una vacuna del brazo de<br />
una moza de establo que había adqui rido la viruela<br />
de una vaca; luego inoculó la vacuna a James Phipp,<br />
de ocho años de edad, y el niño no enfermó de viruela<br />
(fig. 5-1). Poste riormente, realizó otras inoculaciones<br />
con los mismos resultados, por lo cual publicó su famoso<br />
tratado Investigación sobre la causa y efectos de la<br />
viruela vacuna, y así surgió el principio de inmunidad.<br />
En 1804, Francisco Xavier Balmis in trodujo en América<br />
la vacuna contra la viruela.<br />
En la segunda mitad del siglo xix, Louis Pasteur<br />
estudió la prevención del cólera en las gallinas mediante<br />
vacunas elaboradas a partir de cultivos artificiales,<br />
y más tarde ela boró una vacuna contra el carbunco<br />
o ántrax que afectaba al ganado. Más adelante,<br />
preparó la vacuna antirrábica para los perros; luego, el<br />
seis de julio de 1885, inyectó por primera vez a un ser<br />
humano (un niño) que había sido mordido por un perro<br />
rabioso y con ello logró impedir el desarrollo de la<br />
enfermedad.<br />
Otros científicos también hicieron aportacio nes<br />
importantes, entre ellos: Emil Adolph von Behring,<br />
descubridor del suero antidiftérico; Metchnikoff, el<br />
cual enunció la teoría relativa a la fagocitosis; Emilio<br />
Roux, descubridor de la toxi na diftérica; Calmette,<br />
quien descubrió el suero contra la tifoidea y, junto con<br />
Guérin, realizó ex perimentos con la vacuna antituberculosa.<br />
Más adelante se hicieron estudios inmunológicos<br />
no relacionados con enfermedades infecciosas, como
46 Capítulo 5<br />
Figura 5-1. Eduardo Jenner inocula al niño James Phipp con vacuna antivariolosa.<br />
los de grupos sanguíneos; en la actualidad, éstos han<br />
adquirido gran importancia en los fenómenos de rechazo<br />
a los tras plantes de tejidos y órganos.<br />
En odontología, las bases de la inmunología se<br />
aplican en implantología, y para aclarar la causa de<br />
caries, periodontopatías, lesiones bu cales y neoplasias;<br />
también se busca encauzar medidas preventivas<br />
o adecuar el tratamiento de esas enfermedades.<br />
Mecanismos de defensa<br />
e inmunidad<br />
Al ponerse en contacto con un microorganis mo, el<br />
huésped puede o no desarrollar una in fección porque<br />
pone en juego mecanismos de resistencia inespecíficos<br />
y mecanismos de defen sa específicos (inmunidad).<br />
Mecanismos de resistencia<br />
inespecífica<br />
Éstos actúan contra gran cantidad de agentes causales<br />
biológicos, de manera que sólo unos cuantos de dichos<br />
agentes producen enferme dad. Por ejemplo, la piel intacta<br />
constituye una barrera mecánica, pues impide la<br />
entrada de muchos microorganismos mediante la descamación<br />
constante de sus células, la deseca ción y la<br />
secreción de las glándulas sudoríferas (sudoríparas) y<br />
sebáceas; asimismo, se ha obser vado que contiene ácidos<br />
grasos que eliminan bacterias y algunos hongos.<br />
Se ha observado que después de la pubertad aumenta<br />
el contenido de ácidos grasos que impiden el desarrollo<br />
de algunos hongos, como los productores de la tiña<br />
de la cabeza.<br />
La mucosa del tracto respiratorio está tapi zada por<br />
un epitelio con moco que atrapa bac terias, hongos y<br />
virus; también tiene cilios o pestañas vibrátiles que<br />
llevan el moco hacia la faringe, donde es deglutido.<br />
En el sistema digestivo, el jugo gástrico des truye<br />
muchos agentes patógenos gracias al áci do clorhídrico<br />
y sus enzimas. La mucosa intestinal impide el paso<br />
de microorganismos hacia el medio interno; también<br />
secreta enzimas proteolíticas y tiene macrófagos que<br />
inactivan a los microorganismos. El uso de antibióticos<br />
de amplio espectro, como la tetraciclina, puede<br />
destruir la flora normal y favorecer el desarro llo de
Introducción a la inmunología 47<br />
Candida albicans. La saliva es muy importante, por lo<br />
que se es tudiará en el siguiente capítulo.<br />
La vagina contiene lactobacilos normales (bacterias<br />
que fermentan los hidratos de carbo no y producen<br />
ácidos, principalmente el ácido láctico) que impiden<br />
el desarrollo de ciertos microorganismos. Como<br />
consecuencia de la actividad hormonal, el epitelio de<br />
la vagina se vuelve más resistente a las infecciones<br />
después de la pubertad; por lo mismo, esa resistencia<br />
disminuye después de la menopausia.<br />
Algunas secreciones, como las lágrimas, con tienen<br />
una enzima (lisozima), la cual destruye bacterias.<br />
Antes de mencionar las funciones de defen sa, conviene<br />
revisar la importancia de al gunas células, como<br />
los leucocitos, las células plasmáticas (plasmocitos),<br />
los mastocitos y los macrófagos (macrofagocitos).<br />
Leucocitos<br />
Consisten en células que se forman en el tejido hematopoyético,<br />
el cual durante la vida fetal se encuentra<br />
en saco vitelino, hígado, bazo, timo, linfonodos (ganglios<br />
linfáticos) y médula ósea. En el adulto, los leucocitos<br />
se forman en el tejido mieloide de la médula ósea<br />
(leucocitos granulo sos) y el tejido linfoide del timo,<br />
folículos linfoides, tonsilas (amígdalas), ganglios linfáticos<br />
(linfonodos) y bazo (leucocitos no granulosos);<br />
aunque todos tienen su origen común en células<br />
madre pluripotenciales.<br />
Propiedades<br />
Las propiedades de los leucocitos son:<br />
1. Diapédesis. Pueden desplazarse por los poros de<br />
los vasos sanguíneos, a través del tejido conectivo<br />
(conjuntivo) y el tejido epitelial.<br />
2. Movimiento ameboideo. Se desplazan de ma nera<br />
similar a las amebas: mediante la emi sión de<br />
prolongaciones citoplásmicas.<br />
3. Quimiotaxis. Los leucocitos pueden acercar se o<br />
alejarse ante la presencia de determina das sustancias<br />
químicas.<br />
4. Fagocitosis. Las partículas extrañas o microorganismos<br />
entran en la célula por invagi nación<br />
de la membrana celular, que se forma de manera<br />
que dichas partículas o microor ganismos quedan<br />
rodeados por una capa de membrana y forman<br />
una estructura llama da fagosoma, la cual después<br />
se fusiona con el lisosoma primario; éste contiene<br />
enzimas que degradan las macromoléculas (fig.<br />
5-2). De ese modo, los leucocitos limpian también<br />
los desechos celulares resultantes de la reacción<br />
inflamatoria consecutiva a una infección o<br />
traumatismo; en los pulmones ingieren par tículas<br />
provenientes del exterior, en el bazo destruyen las<br />
células sanguíneas viejas y en los linfonodos (ganglios<br />
linfáticos) procesan a los antígenos ingeridos<br />
para presentarlos a los linfocitos.<br />
Clasificación<br />
Los leucocitos pueden ser granulosos o no granulosos.<br />
Los granulosos son:<br />
1. Neutrófilos (50 a 70%). Permanecen más o menos<br />
10 horas en el torrente sanguíneo y después<br />
pasan al tejido conectivo (conjunti vo). Miden<br />
de 12 a 15 mμ de diámetro y po seen un núcleo<br />
compuesto de dos a cinco lóbulos conectados<br />
entre sí por hebras de cromatina. Contienen<br />
proteínas con actividad bactericida y desarrollan<br />
una función clave en la reacción inflamatoria<br />
aguda. Tienen muy desarrollada la fagocitosis y<br />
aumentan cuando hay infecciones agudas.<br />
2. Eosinófilos (1 a 4%). Miden de 12 a 17 mμ de<br />
diámetro, y su núcleo es bilobulado. Los gránulos<br />
de su citoplasma se tiñen intensa mente con<br />
eosina y otros colorantes ácidos, y contienen histamina,<br />
heparina y enzimas. Aumentan cuando<br />
existe alergia e infestación por parásitos.<br />
3. Basófilos (0.5%). Miden de 10 a 12 mμ de diámetro;<br />
su núcleo es irregular y voluminoso, y sus<br />
gránulos son basófilos, por lo cual se tiñen de<br />
azul oscuro. Intervienen en la alergia.<br />
Los leucocitos no granulosos son linfocitos (20 a<br />
50%) y monocitos (2 a 8%).<br />
Los linfocitos son de tipos T y B; ambos se ori ginan<br />
en la médula ósea pero maduran por vías diferentes.<br />
Los linfocitos T se dirigen al timo. Allí se diferencian<br />
y quedan programados para re conocer y responder a<br />
un antígeno específico. Miden entre 9 y 12 mμ, y tienen<br />
núcleo grande, redondeado u ovoide y citoplasma
48 Capítulo 5<br />
Aparato de Golgi<br />
Retículo<br />
endoplásmico<br />
Lisosoma<br />
primario<br />
Ingestión<br />
Fagosoma<br />
Vacuola<br />
de<br />
fusión<br />
Vacuola<br />
de digestión<br />
Lisosoma secundario<br />
Corpúsculo<br />
residual<br />
Defecación<br />
celular<br />
Figura 5-2. Fagocitosis. Véase el texto.<br />
escaso. La mayoría de los linfocitos sanguíneos son<br />
peque ños y tienen vida prolongada.<br />
Los linfocitos B continúan su desarrollo en el tejido<br />
linfático y actúan como precursores de células plasmáticas<br />
(plasmocitos), principales productoras de anticuerpos.<br />
Tienen vida más corta que los linfocitos T.<br />
Algunos no se diferencian porque constituyen las células<br />
de memoria o anamnésicas B, las cuales permanecen<br />
durante largo tiempo en los órganos linfáticos.<br />
Los monocitos miden de 12 a 15 mμ de diá metro<br />
y presentan un núcleo ovalado, reniforme (en forma<br />
de riñón) o de herradura; su citoplas ma es abundante;<br />
tienen muy desarrollada la fagocitosis y dan origen a<br />
los macrófagos (macrofagocitos).<br />
Células plasmáticas (plasmocitos)<br />
Pertenecen al tejido conectivo (conjuntivo) laxo. Se<br />
localizan en las membranas epiteliales hú medas de<br />
los sistemas respiratorio y digestivo, así como en linfonodos<br />
(ganglios linfáticos) y el bazo. Tienen forma<br />
ovoide y su núcleo es es férico y excéntrico. Su cromatina<br />
se distribuye en la periferia, semejando los números<br />
de un disco de teléfono, por lo cual se distinguen<br />
con facilidad. Asimismo, secretan inmunoglobulinas.<br />
Células cebadas o mastocitos<br />
Son esféricas y poseen gránulos que contienen heparina<br />
e histamina. La heparina actúa como anticoagulante,<br />
y la histamina produce dilata ción de los vasos<br />
capilares sanguíneos y con tracción del músculo liso.<br />
Macrófagos (macrofagocitos)<br />
Pertenecen al tejido conectivo (conjuntivo) laxo y<br />
miden alrededor de 12 mμ de diámetro. Tie nen una<br />
membrana irregular, con proyecciones a manera de<br />
seudópodos. Se forman en la mé dula ósea, luego pasan<br />
al torrente circulatorio como monocitos y emigran<br />
hacia los tejidos donde terminan su desarrollo<br />
al transformarse en macrófagos (macrofagocitos). Su<br />
función consiste en fagocitar bacterias, células muertas<br />
y cuerpos extraños, por lo cual tienen vacuolas con<br />
enzimas proteolíticas. Su núcleo tiene forma de frijol.<br />
Inflamación<br />
Este término proviene del latín inflamatio, el cual significa<br />
incendio. Ante agentes causales físi cos (calor,<br />
traumatismo, radiaciones, etc.), bio lógicos (bacterias,<br />
hongos, virus, etc.) o quími cos (ácidos y álcalis), el or-
Introducción a la inmunología 49<br />
ganismo reacciona para neutralizarlos y después para<br />
restablecer el daño.<br />
Los signos clásicos de la inflamación se de ben a<br />
modificaciones en los tejidos y se recono cen como<br />
rubor (enrojecimiento), calor, tumor y dolor.<br />
Un ejemplo muy frecuente de inflamación se observa<br />
cuando una persona se clava una asti lla contaminada<br />
con bacterias y no recibe trata miento inmediato<br />
y adecuado.<br />
Al principio hay una respuesta vascular: las células<br />
cebadas o mastocitos del tejido conecti vo (conjuntivo)<br />
liberan histamina, la cual pro duce vasodilatación<br />
de las arteriolas con lo que aumenta el flujo de sangre<br />
en los capilares; de ese modo, se presentan calor y<br />
rubor en el sitio afectado. Por otra parte, aumenta la<br />
permeabi lidad vascular y, en consecuencia, el plasma<br />
escapa entre las células o por el tejido dañado y da<br />
lugar a la formación de un exudado que se acumula<br />
en el espacio intersticial; así se produce el tumor. Además,<br />
el exceso de líquido presio na las terminaciones<br />
nerviosas y origina dolor.<br />
Posteriormente hay una respuesta celular: los neutrófilos<br />
se adhieren a la túnica endotelial de los vasos<br />
sanguíneos, atraviesan sus pa redes por medio de diapédesis<br />
y se dirigen a las zonas invadidas para fagocitar<br />
bacterias.<br />
Algunas bacterias tienen la propiedad de atraer a<br />
neutrófilos. Pero estos últimos también son atraídos<br />
en los sitios donde se ha combina do un anticuerpo<br />
con el antígeno del agente patógeno, porque fijan y activan<br />
al complemento. Éste a su vez es un conjunto de<br />
proteínas plasmáticas que se activan y combinan con<br />
el antígeno y el anticuerpo.<br />
Las opsoninas del plasma facilitan la fagoci tosis por<br />
neutrófilos. Por su parte, los monocitos también emigran<br />
y colaboran con los neutrófilos en la fagocitosis<br />
de bacterias; después se transforman en macrófagos<br />
(macrofagocitos), obtienen un pro medio de vida mayor<br />
y también fagocitan desperdicios celulares. El pus<br />
formado en una he rida infectada contiene neutrófilos<br />
muertos y productos de la destrucción del tejido afectado.<br />
En conclusión, los leucocitos llegan al tejido afectado<br />
en el siguiente orden: al principio pre dominan<br />
los neutrófilos (inflamación aguda) (fig. 5-3); conforme<br />
avanza el tiempo, los monocitos superan a los neu-<br />
Astilla sucia<br />
Bacterias<br />
Neutrófilos<br />
Fagocitosis<br />
Capilar<br />
dilatado<br />
Vénulas<br />
A<br />
Migración<br />
B<br />
Figura 5-3. Inflamación aguda. Véase el texto.
50 Capítulo 5<br />
trófilos, y por último llegan los linfocitos, los cuales<br />
tienen funciones inmunitarias (inflamación crónica).<br />
Una vez combatida la infección, se forman fibroblastos<br />
que restauran los tejidos afectados y se forman<br />
nuevos vasos capilares.<br />
Mecanismos de defensa específicos<br />
(inmunidad)<br />
Los mecanismos de defensa específicos se ba san en<br />
la inmunidad. Ésta es la capacidad de los organismos<br />
vivos para resistir una enferme dad infecciosa o un<br />
trastorno producido por la mordedura o picadura de<br />
algunos animales. Asimismo, puede ser relativa cuando<br />
el indivi duo se expone a una dosis excesiva del<br />
agente patógeno o cuando éste es demasiado virulento<br />
o tóxico.<br />
La situación contraria a la inmunidad es la susceptibilidad.<br />
Toda persona o animal es suscep tible cuando<br />
no ha desarrollado inmunidad frente a un agente<br />
patógeno determinado o sus toxinas; por ello, se expone<br />
a contraer la enfer medad si entra en contacto<br />
con dicho agente o veneno.<br />
Los mecanismos de respuesta inmunitaria se producen<br />
como reacción a un estímulo defini do denominado<br />
antígeno (Ag), el cual induce la reacción de<br />
ciertos tejidos capaces de producir principalmente<br />
sustancias específicas llamadas anticuerpos (Ac).<br />
Por lo anterior, el antígeno (Ag) es toda sus tancia<br />
extraña que, al introducirse en el orga nismo, estimula<br />
la respuesta inmunitaria (humoral o celular). Incluye<br />
una serie de fenó menos al cabo de los cuales se producen<br />
anti cuerpos o células que actúan por contacto<br />
o li beran compuestos en el sitio donde se efectúa la<br />
reacción.<br />
Las sustancias con capacidad para actuar como<br />
antígeno deben ser macromoléculas y lle gar por alguno<br />
de los líquidos corporales hasta las células que<br />
responden de manera inmunitaria; la mayoría son<br />
proteínas o complejos de proteínas-lipopolisacáridos<br />
con alto peso mo lecular. Otra característica de<br />
esas sustancias es que deben ser extrañas al organismo,<br />
es decir, tener estructura molecular diferente a<br />
las mo léculas producidas por el cuerpo; por ello, los<br />
antígenos pueden ser las macromoléculas libe radas<br />
por microorganismos, y a veces también el polen, el<br />
polvo y los compuestos químicos de alimentos y medicamentos,<br />
entre otros.<br />
Algunos compuestos químicos de bajo peso molecular<br />
pueden originar la formación de an ticuerpos<br />
cuando se combinan con una proteí na, y reciben el<br />
nombre de haptenos.<br />
El anticuerpo es la sustancia que produ ce el organismo<br />
como respuesta a la introduc ción de un antígeno<br />
y reacciona con éste.<br />
Una molécula de anticuerpo tiene forma de Y, y está<br />
formada por cuatro cadenas de polipéptidos, a las cuales<br />
se encuentra unido un pequeño número de grupos<br />
de oligosacáridos; asimismo, hay dos cadenas pesadas<br />
idénticas entre sí y dos cadenas ligeras, unidas por<br />
puen tes disulfuro. Las cadenas pesadas tienen ma yor<br />
número de aminoácidos que las ligeras. Como es posible<br />
observar en la figura 5-4, el trazo vertical de la Y corresponde<br />
a las cadenas pesadas; en cambio, las ramas<br />
corresponden al resto de la cadena pesada respectiva,<br />
así como a la cadena ligera adyacente. En el extremo<br />
su perior de cada rama de la Y hay un sitio de reconocimiento<br />
de antígenos, y por tanto allí la secuencia de<br />
aminoácidos es variable; por lo contrario, ésta es constante<br />
en las regiones cer canas al centro de la Y.<br />
Complejo antígeno-anticuerpo (Ag-Ac)<br />
Si la molécula de antígeno es pequeña y sólo contiene<br />
un lugar donde se combine un anti cuerpo, se llama<br />
monovalente o univalente. Sin embargo, dos moléculas<br />
de antígeno pueden combinarse con un solo anticuerpo<br />
(uno en cada extremo de la Y).<br />
El antígeno muy grande, con muchos grupos determinantes,<br />
se une a varios anticuerpos, con lo cual<br />
forma un gran complejo insoluble que se precipita<br />
(fig. 5-5).<br />
La unión de un antígeno con un anticuerpo forma<br />
un complejo antígeno-anticuerpo, el cual atrae a los<br />
neutrófilos. Éstos a su vez fijan y activan al complemento<br />
(grupo de unas 20 proteínas plasmáticas), el<br />
cual se combina con el complejo antígeno-anticuerpo<br />
en una secuen cia ordenada que puede ocasionar:<br />
1. Lisis mediada por el complemento; es decir, destrucción<br />
y muerte de las células extrañas.<br />
2. De no eliminarse las células extrañas, se for man<br />
y liberan sustancias a partir del com plemento
Introducción a la inmunología 51<br />
Sitios de fijación del antígeno<br />
I<br />
I<br />
L<br />
Cadena ligera<br />
Cadena ligera<br />
CHO<br />
CHO<br />
Cadena<br />
pesada<br />
H<br />
H<br />
Cadena<br />
pesada<br />
Figura 5-4. Estructura de un anticuerpo.<br />
(como las opsoninas que facilitan la fagocitosis<br />
a los neutrófilos).<br />
3. En algunos casos, la acción de las hidrolasas de<br />
los neutrófilos destruye bacterias, y ade más aumenta<br />
la reacción inflamatoria. El complemento<br />
no interviene en caso de infec ción viral.<br />
Características de la respuesta inmunitaria<br />
Las características de la respuesta inmunitaria son:<br />
1. Especificidad. La inmunidad actúa en contra de<br />
alguna enfermedad; por ejemplo, una per sona<br />
no padece sarampión cuando posee an ticuerpos<br />
Figura 5-5. Complejo formado por un anticuerpo con una<br />
bisagra flexible y un antígeno multivalente.<br />
Anticuerpo<br />
Antígeno
52 Capítulo 5<br />
Concentración de anticuerpos<br />
128<br />
64<br />
32<br />
16<br />
8<br />
contra ese padecimiento, pero sí puede enfermar<br />
de varicela, tuberculosis, pa rotiditis u otras más.<br />
2. Heterogeneidad. Diferentes tipos de células se<br />
activan cuando un microorganismo penetra en<br />
el cuerpo.<br />
3. Memoria. La administración de un antígeno por<br />
primera vez origina la respuesta prima ria, y antes<br />
de la formación de anticuerpos transcurre<br />
cierto tiempo, por lo general se manas. La administración<br />
del mismo antíge no por segunda vez<br />
estimula la respuesta secundaria; ésta consiste<br />
en un aumento rá pido y mayor de anticuerpos y<br />
persiste durante mayor tiempo (fig. 5-6).<br />
4. Reconocimiento de lo no propio. En circunstan cias<br />
normales, las células del organismo re conocen lo<br />
extraño.<br />
Formas de inmunidad<br />
Existen dos formas de inmunidad: humoral y celular.<br />
Inmunidad humoral<br />
Es mediada por anticuerpos (véase antes).<br />
Inmunidad celular<br />
Primaria<br />
Secundaria<br />
0 2 4 6 8<br />
Semanas<br />
Figura 5-6. Respuestas primaria y secundaria en la<br />
formación de anticuerpos después de dosis<br />
sucesivas de antígeno.<br />
Ésta depende básicamente de los linfocitos T, así<br />
como de los linfocitos B. Los linfocitos T tie nen receptores<br />
formados por dos cadenas de polipéptidos y<br />
cadenas laterales de oligosacáridos. Dichos receptores<br />
reconocen a los antígenos siempre y cuando les sean<br />
“presentados” en la superficie de una célula accesoria,<br />
ya sea macrófago u otra célula. Los tipos de linfocitos<br />
T son los siguientes:<br />
1. Reguladores. Incluyen los linfocitos T4 y T8. Los<br />
T4 también se conocen como inductores o cooperadores<br />
porque desencadenan la respuesta de<br />
inmunidad después de que los macrófagos “presentan”<br />
al antígeno. A su vez, estos macrófagos<br />
producen interleucina 1 y este factor fomenta la<br />
proliferación de los linfo citos T4 y activa a los<br />
linfocitos B. Cuando debe concluir la respuesta<br />
inmunitaria, los linfocitos T4 activan a los linfocitos<br />
T8 o T supresores para que supriman la<br />
respuesta de los linfocitos T y B.<br />
2. Células T citotóxicas. Son células asesinas que<br />
destruyen bacterias, hongos y células infec tadas<br />
por virus. Cuando reconocen la super ficie de<br />
una célula blanco, a la que van a des truir, establecen<br />
contacto con ella y originan la respuesta<br />
inmunitaria mediada por célu las. De esta manera,<br />
intervienen en el recha zo de órganos o tejidos<br />
trasplantados.<br />
3. Células T de memoria. Reconocen a los antíge nos.<br />
4. Células T amplificadoras. Intensifican las actividades<br />
de los linfocitos B y T.<br />
5. Células T DH<br />
o de sensibilidad tardía. Protegen contra<br />
infecciones crónicas, como la tubercu losis.<br />
Cuando se activan, secretan linfocinas:<br />
A. Interleucina 2 o factor de crecimiento de células<br />
T.<br />
B. Factores que facilitan o suprimen respuestas.<br />
C. Factor inhibidor de la migración de macrófagos.<br />
Impide a los macrófagos alejarse del<br />
antígeno.<br />
D. Factor de activación de macrófagos.<br />
E. Factor mitógeno. Induce la proliferación de<br />
linfocitos.<br />
F. Interferón. Inhibe la replicación viral.<br />
Por otra parte, los linfocitos B tienen zonas en su<br />
superficie que les permiten reconocer al antígeno para<br />
el cual están programados. Por ello, cuando se encuentran<br />
con el antígeno se acti van y originan la clonación<br />
(reproducción de células iguales) y diferenciación en
Introducción a la inmunología 53<br />
Cuadro 5-1. Las cinco clases de inmunoglobulina en seres humanos<br />
Clase<br />
Estructura<br />
Concentración en suero<br />
de adulto medio (mg/ml) Características Funciones protectoras<br />
IgM<br />
1.0 Aumenta la fagocitosis; se inicia la<br />
reacción del complemento<br />
Engulle y destruye agentes<br />
extraños; conduce a la lisis<br />
(destrucción de microorganismos<br />
extraños)<br />
Pentámera<br />
IgG<br />
Monómera<br />
12.0 Atraviesa la placenta; estimula la<br />
ingestión por fagocitos, inicia la<br />
reacción de comple mento<br />
Protege al feto y al recién nacido;<br />
engulle y destruye microorganismos<br />
extraños; lleva a la lisis de<br />
organismos extraños<br />
IgA<br />
1.8 Presente en las secreciones<br />
(lágrimas, saliva, líquidos<br />
intestinales, leche)<br />
Protección “exterior” de los tejidos<br />
corporales<br />
Dímera con<br />
porción secretora<br />
IgD<br />
0.03 Se encuentra en la superficie de<br />
los linfocitos B<br />
Estimula a las células B a producir<br />
anticuerpos específicos<br />
Monómera<br />
IgE<br />
0.0003 Hace que los mastocitos liberen<br />
histamina<br />
Inhibe la penetración de parásitos<br />
(?); lleva a la lisis de los parásitos<br />
Monómera<br />
células plas máticas que producen anticuerpos. Algunas<br />
células no se diferencian porque constituyen las<br />
células de memoria B o anamnésicas B, las cua les permanecen<br />
durante largo tiempo en el or ganismo.<br />
Por último, los anticuerpos o inmunoglobulinas<br />
pueden ser de varias clases (cuadro 5-1):<br />
1. Inmunoglobulina G (IgG). Es la principal cla se de<br />
anticuerpos que se produce como re sultado de la<br />
inmunización prolongada y constituye 75% de<br />
las inmunoglobulinas con tenidas en el plasma.<br />
Es la única inmunoglobulina transmitida por la<br />
madre al producto durante el embarazo. Asimismo,<br />
actúa como opsonina; es decir, se adhiere a<br />
las proteínas extrañas y de ese modo se ingiere<br />
con mayor facilidad por las células fagocíticas<br />
como los monocitos, los neutrófilos y los macrófagos.
54 Capítulo 5<br />
2. Inmunoglobulina M (IgM). Su peso molecular es<br />
160 000 y constituye 6% del total de anti cuerpos.<br />
Está formada por cinco unidades de inmunoglobulina<br />
G unidas en forma de ani llo por enlaces<br />
de bisulfuro y es la primera inmunoglobulina<br />
que se produce en una res puesta de anticuerpos.<br />
También es más efi caz que la inmunoglobulina<br />
G en la fijación del complemento y en las respuestas<br />
citotóxicas dependientes de anticuerpos;<br />
pero es menos eficaz para neutralizar macromoléculas<br />
funcionales. Asimismo, está muy relacionada<br />
con los linfocitos B.<br />
3. Inmunoglobulina A (IgA). Su peso molecular es<br />
160 000, y constituye 10 a 15% del total de las<br />
inmunoglobulinas. Es característica de secreciones<br />
corporales externas, como de los sistemas<br />
respiratorio, digestivo, urinario y reproductor;<br />
se encuentra en las lágrimas, la saliva, el moco<br />
y la leche. Es sintetizada por las células plasmáticas<br />
y se produce después de la respuesta de la<br />
inmunoglobulina M.<br />
4. Inmunoglobulina D (IgD). Tiene un peso molecular<br />
de 185 000. Constituye 1% del total de las<br />
inmunoglobulinas y su importancia es secundaria.<br />
Al igual que la inmunoglobuli na M, se encuentra<br />
en la superficie de los lin focitos B, donde<br />
establece sitios de reconocimiento de antígenos.<br />
5. Inmunoglobulina E (IgE). Tiene peso molecular<br />
de 200 000 y sus concentraciones en la san gre<br />
son muy bajas (de 0.002 a 0.0003%). Actúa como<br />
mediadora de la reacción de hipersensibilidad<br />
inmediata: en las reacciones de alergia, se une a<br />
los receptores de células que actúan como alergenos.<br />
Es sintetizada por las células plasmáticas<br />
e induce la liberación de histamina por los mastocitos.<br />
Aumenta en las reacciones alérgicas (urticaria,<br />
rinitis y asma), así como en personas con<br />
parásitos intesti nales.<br />
Mecanismos para obtener<br />
inmunidad<br />
Inmunidad natural<br />
La inmunidad natural es la resistencia a la infec ción<br />
que no depende de algún contacto previo, espontáneo<br />
o experimental con el agente infec cioso o sus anticuerpos,<br />
sino de factores genéti cos. Asimismo, puede<br />
ser de especie, de raza o grupo, o individual.<br />
Inmunidad de especie<br />
Los animales de sangre fría (p. ej., peces, ranas y tortugas)<br />
no son susceptibles a las infeccio nes características<br />
de los animales de sangre caliente. Al parecer, la temperatura<br />
corporal es importante para contar con esa<br />
resistencia, pues las aves tienen una temperatura más<br />
alta que el ser humano y son resistentes a enfermedades,<br />
como la peste y el carbunco. Pasteur demostró que<br />
una gallina puede adquirir el carbunco si se reduce su<br />
temperatura corporal. Otros ejem plos de inmunidad<br />
de especie son los siguientes: los bacilos de la tuberculosis<br />
en peces no infectan al ser humano, y los bacilos<br />
de la tuberculosis huma na no infectan a los peces; las<br />
aves padecen una enfermedad semejante a la tuberculosis<br />
pero los bacilos que la producen no infectan a los<br />
seres humanos; el ser humano no es susceptible a te ner<br />
enfermedades como el cólera de las gallinas.<br />
No obstante lo anterior, sí es posible la trans misión<br />
al ser humano de algunas enfermedades comunes en<br />
los animales, entre ellas: ántrax o carbunco (ganado<br />
vacuno, oveja, caballo), muermo (caballo), peste (roedor),<br />
brucelosis (cabra, ganado vacuno, cerdo), encefalitis<br />
(caballos), leptospirosis (rata, perro), tuberculosis<br />
bovina (ganado vacuno), tularemia (conejo),<br />
ra bia (perro).<br />
Por otra parte, el ser humano desarrolla al gunos<br />
padecimientos que no se presentan en los animales de<br />
manera natural; por ejemplo, sífilis, blenorragia o gonorrea,<br />
saram pión, fiebre tifoidea, influenza, parotiditis<br />
y poliomielitis. Los animales más susceptibles a las<br />
enfermedades humanas son los más cercanos al ser<br />
humano en la escala de la evo lución (como monos,<br />
antropoides y chimpancés).<br />
Inmunidad de raza y de grupo<br />
Las personas de raza negra tienen más posibili dades<br />
de desarrollar coccidioidomicosis que aquéllas de<br />
raza blanca; pero son más resisten tes al paludismo<br />
producido por Plasmodium vivax cuando los eritrocitos<br />
carecen del antígeno Duffy de superficie, el cual<br />
actúa como recep tor del parásito.
Introducción a la inmunología 55<br />
Los habitantes de una región forman un gru po con<br />
ciertas características inmunitarias ade cuadas a las<br />
enfermedades que padecen habitualmente; esta inmunidad<br />
es propia de determinada región, pero es independiente<br />
de la raza. Las enfermedades transmisibles<br />
por lo general son de frecuencia constante en cada región<br />
o grupo social, y esto se debe a que el ser humano<br />
tiende a mantener un equilibrio con los agentes patógenos<br />
circundantes.<br />
Inmunidad individual<br />
La capacidad del individuo para resistir enfer medades<br />
infecciosas comunes es variable. Esta resistencia natural<br />
varía en un mismo sujeto de una época a otra.<br />
La susceptibilidad a ciertos padecimientos puede aumentar<br />
en presencia de algunos factores, entre ellos<br />
fatiga, exceso de trabajo, angustia, exposición prolongada<br />
al frío y a la humedad, alcoholismo y ciertas enfermedades<br />
preexistentes (diabetes, sarampión, tuberculosis<br />
y síndrome de inmunodeficiencia adquirida<br />
[sida]). También la ingestión defi ciente de proteínas<br />
y de ciertas vitaminas dismi nuye la resistencia inespecífica<br />
y la capacidad para sintetizar anticuerpos; sin<br />
embargo, la in gestión en exceso no aumenta la resistencia<br />
a las infecciones. Otro factor por considerar es<br />
la edad, pues la susceptibilidad es mayor para personas<br />
en edades extremas de la vida.<br />
Muchas personas se automedican con la idea equivocada<br />
de que los antibióticos previenen cualquier<br />
tipo de infección; pero no saben que éstos no estimulan<br />
el mecanismo defensivo del individuo porque sólo<br />
tienen acción antibacte riana.<br />
Inmunidad adquirida<br />
La inmunidad adquirida es la resistencia a la infección<br />
originada por un ataque espontáneo de enfermedad<br />
infecciosa, una infección expe rimental, la vacunación<br />
o la introducción de anticuerpos. Puede ser activa o<br />
pasiva, y en ambos casos natural o artificial.<br />
Activa natural<br />
La inmunidad adquirida activa es la habilidad o condición<br />
adquirida por los tejidos para pro ducir anticuerpos<br />
específicos a partir de con tactos con microorganismos<br />
o sus toxinas. Se observa después de padecer<br />
enfermedades como la tos ferina, el sarampión y la<br />
parotiditis.<br />
Algunos individuos albergan o diseminan agentes<br />
causales de enfermedad sin presentar manifestaciones<br />
clínicas de ella, y se denomi nan portadores sanos. En<br />
estos casos, el agente causal penetra en los tejidos y<br />
estimula el desa rrollo de anticuerpos específicos sin<br />
producir síntoma alguno; por ejemplo, el portador de<br />
ti foidea elimina cantidades variables de Salmonella<br />
typhi en la materia fecal aunque no tenga ni haya tenido<br />
síntomas de la enfermedad.<br />
La exposición prolongada a microorganis mos, en<br />
cantidades insuficientes para ocasionar infección, produce<br />
inmunidad latente; esta protección se adquiere<br />
de manera natural. Los tejidos del organismo tienen<br />
la propiedad de desarrollar anticuerpos contra enfermedades<br />
específicas predominantes en una comunidad<br />
(p. ej., la difteria y la rubéola). Las probabilida des<br />
de contagio aumentan cuando se ha logra do eliminar<br />
una enfermedad: menos personas adquieren inmunidad<br />
latente, y por tanto au menta el número de individuos<br />
susceptibles.<br />
Activa artificial<br />
La inmunidad adquirida puede desarrollarse de manera<br />
artificial por inmunización activa, es decir, por<br />
la aplicación de vacunas. Se introducen antígenos en<br />
el organismo por vía oral o parenteral, y pueden ser<br />
gérmenes vivos atenuados o toxoides; estos últimos<br />
son toxinas bacterianas tratadas para destruir su poder<br />
pa tógeno, pero sin afectar su poder antigénico. La<br />
inmunidad adquirida activa artificial garanti za una<br />
protección duradera siempre y cuando se complete.<br />
Pasiva natural<br />
La inmunidad adquirida pasiva natural se de sarrolla<br />
cuando el producto recibe anticuerpos por la placenta<br />
de la madre durante el embara zo, y a través del calostro<br />
al iniciarse la lactancia.<br />
Pasiva artificial<br />
La inmunidad adquirida pasiva artificial se lo gra por<br />
la introducción de un suero que contiene anticuerpos
56 Capítulo 5<br />
contra determinada enfermedad. Su duración es breve,<br />
pero se re comienda cuando el individuo ha estado<br />
expuesto a un agente causal para el cual necesita protección<br />
inmediata. Es posible desarrollar este tipo de<br />
inmunidad con antitoxinas y gammaglobulina.<br />
Las antitoxinas son proteínas defensivas, las cuales<br />
por lo regular existen en el organismo o se desarrollan<br />
en él como resultado de la intro ducción de un veneno<br />
y actúan como neutra lizante de este último.<br />
Las antitoxinas de varias enfermedades de rivan del<br />
suero sanguíneo de los animales en los que se ha inducido<br />
la enfermedad. Sin em bargo, dicho suero contiene<br />
una proteína extra ña al ser humano que puede<br />
sensibilizarlo y ocasionarle reacciones alérgicas, por<br />
lo cual es preferible inmunizar de manera activa;<br />
por ejemplo, es mejor vacunar contra la difteria y el<br />
tétanos en vez de aplicar antitoxinas.<br />
La gammaglobulina es una proteína del suero humano<br />
separada por electroforesis y se utili za para proteger<br />
de las enfermedades virales a las personas que<br />
no han sido vacunadas.<br />
Mecanismos de defensa<br />
de la cavidad bucal<br />
La cavidad bucal cuenta con un mecanismo de defensa<br />
muy importante: la saliva (cap. 6). Por lo regular, en el<br />
tejido gingival hay leucocitos, sobre todo neutrófilos;<br />
pero cuando se inflama, aumentan las inmunoglobulinas<br />
y también pre dominan los macrófagos, los linfocitos<br />
y los fibroblastos que ayudan a la producción de<br />
co lágena. En un plano más profundo se encuen tran<br />
células plasmáticas.<br />
Los padecimientos relacionados con el mal funcionamiento<br />
del sistema inmunitario son, en tre otros: lupus<br />
eritematoso, esclerodermatosis, artritis reumatoide<br />
y síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida).<br />
Éstos tienen repercusiones en la cavidad bucal, y por<br />
tanto son de gran importancia para el odontólogo.<br />
Principales productos<br />
para inmunizar<br />
Las vacunas del esquema mínimo de vacunación son<br />
cuatro: antipoliomielítica, DPT, antisarampionosa y<br />
antituberculosa.<br />
En México, al llevar al recién nacido al registro civil,<br />
se entrega a los padres la Cartilla Nacional de Vacunación<br />
con el esquema básico (fig. 5-7).<br />
Vacuna antipoliomielítica<br />
La vacuna oral trivalente tipo Sabin es una mez cla de<br />
cepas vivas atenuadas correspondientes al virus de la<br />
poliomielitis en sus tres tipos: I (Brunhilde), II (Lansing)<br />
y III (León). Dichas ce pas se cultivan en tejidos<br />
celulares y se atenúan luego de muchos traspasos en<br />
cultivo de tejidos. La vacuna produce difusión de virus<br />
vivos en el ambiente, por lo cual puede ser de utilidad<br />
en personas no vacunadas. Se administra por vía<br />
oral y la dosis debe adecuarse a las es pecificaciones<br />
del producto. En México, por lo general se indican<br />
dos gotas. Aunque es necesa rio administrar la vacuna<br />
al nacer, el esquema incluye tres dosis (a los dos,<br />
cuatro y seis meses de edad), así como la vacunación<br />
de menores de cinco años en los Días Naciona les de<br />
Vacunación.<br />
Vacuna DPT (difteria, tos ferina<br />
y tétanos)<br />
Protege contra la difteria, la tos ferina y el téta nos.<br />
Contiene toxoides de Corynebacterium diphtheriae<br />
y Clostridium tetani, y microorganismos muertos de<br />
Bordetella pertussis. También tiene hidróxido o fosfato<br />
de aluminio como adyuvan te. Se administra por vía<br />
intramuscular, en el muslo o en la región glútea, en<br />
tres dosis de 0.5 ml a la edad de dos, cuatro y seis meses.<br />
Es necesario aplicar otra dosis un año después de<br />
terminar el esquema de vacunación primario, y cada<br />
dos años siempre y cuando el niño sea menor de seis<br />
años.<br />
La vacuna produce reacciones generales (fie bre y<br />
malestar), así como dolor, calor y enroje cimiento en<br />
el sitio de aplicación.<br />
Vacuna antisarampionosa<br />
Contiene virus vivos del sarampión muy ate nuados y<br />
protege contra la enfermedad del mis mo nombre. Se<br />
administra por vía subcutánea en dosis de 0.5 ml a<br />
los nueve meses. La indica ción para volver a vacunar<br />
varía en los diferen tes países; sin embargo, se ha ob-
Introducción a la inmunología 57<br />
CARTILLA NACIONAL DE VACUNACIÓN<br />
DATOS GENERALES DEL NIÑO(A)<br />
CURP<br />
SEXO<br />
Nombre<br />
Domicilio<br />
Fecha de nacimiento<br />
Lugar de nacimiento<br />
Primer apellido<br />
Calle y número<br />
Año<br />
Segundo apellido<br />
Nombre<br />
Colonia Ciudad Estado<br />
Mes<br />
Día<br />
Fecha de registro<br />
Lugar de registro<br />
Ciudad o población<br />
Municipio<br />
Estado<br />
Año<br />
Mes<br />
Día<br />
Ciudad o población Municipio Estado<br />
ESQUEMA BÁSICO DE VACUNACIÓN<br />
VACUNA<br />
ENFERMEDAD QUE<br />
PREVIENE<br />
DOSIS<br />
EDAD<br />
FECHA DE<br />
VACUNACIÓN<br />
BCG<br />
TUBERCULOSIS<br />
Única<br />
Al nacer<br />
Preliminar<br />
Al nacer<br />
Primera<br />
2 meses<br />
SABIN<br />
POLIOMIELITIS<br />
Segunda<br />
4 meses<br />
Tercera<br />
6 meses<br />
Adicionales<br />
PENTAVALENTES<br />
DPT + HB + Hib<br />
DPT<br />
TRIPLE<br />
VIRAL<br />
SR<br />
ANTISARAMPIÓN<br />
DIFTERIA, TOS FERINA,<br />
TÉTANOS, HEPATITIS B,<br />
INFECCIONES GRAVES<br />
POR H. influenzae b<br />
DIFTERIA,<br />
TOS FERINA,<br />
TÉTANOS<br />
SARAMPIÓN,<br />
RUBÉOLA,<br />
PAROTIDITIS<br />
SARAMPIÓN<br />
Primera<br />
Segunda<br />
Tercera<br />
Refuerzo 1<br />
Refuerzo 2<br />
Primera<br />
Segunda<br />
Adicionales<br />
2 meses<br />
4 meses<br />
6 meses<br />
2 años<br />
4 años<br />
1 año<br />
6 años<br />
TD<br />
TÉTANOS, DIFTERIA<br />
Refuerzo<br />
12 años<br />
OTRAS<br />
VACUNAS<br />
Figura 5-7. Esquema básico de vacunación.
58 Capítulo 5<br />
servado la con veniencia de aplicar otra dosis antes de<br />
que el niño ingrese a la escuela de educación básica.<br />
En México, se repite la dosis a los seis años de edad y<br />
en sujetos menores de esta edad duran te las Semanas<br />
Nacionales de Vacunación. En Estados Unidos se vacuna<br />
una vez más según la situación epidemiológica.<br />
Vacuna antituberculosa<br />
Se utiliza la vacuna BCG (bacilo de Calmette-Guérin)<br />
liofilizada. Consiste en una suspensión de bacilos<br />
vivos y atenuados de Mycobacterium tu berculosis bovino.<br />
Se aplica por vía intradérmica en el cuadrante<br />
superoexterno de la región deltoidea derecha a una<br />
dosis de 0.05 ml para el recién nacido y de 0.1 ml para<br />
mayores de esa edad. Se recomienda aplicar la vacuna<br />
has ta los 14 años. Si se vacunó al niño antes del año de<br />
edad es necesario volver a hacerlo en la edad escolar.<br />
Hasta aquí se han descrito las vacunas del es quema<br />
básico de vacunación, pero existen otras que deben<br />
aplicarse, como la vacuna antirrubéola, contra la parotiditis<br />
infecciosa, tétanos, infeccio nes por neumococos<br />
y contra virus de las hepati tis B y A. Asimismo,<br />
es importante aplicar la va cuna contra Haemophilus<br />
influenzae B, contra enteritis por rotavirus, varicela y<br />
el virus del papiloma humano (VPH).<br />
Vacuna antirrubéola<br />
Contiene virus vivo atenuado de la rubéola y se proporciona<br />
a partir del año de edad, en do sis única de<br />
0.5 ml por vía subcutánea o intramuscular. En caso<br />
de no haberla administrado al año de edad, es necesario<br />
hacerlo en niños que ingresan a la escuela de<br />
educación básica, en mujeres prepúberes (de 11 a 14<br />
años) o en aquéllas en edad fértil sin antecedentes de<br />
ru béola. Las pacientes no deben embarazarse dentro<br />
de los tres meses posteriores a la aplicación.<br />
Vacuna contra la parotiditis infecciosa<br />
Se prepara a partir de virus atenuados de la parotiditis<br />
infecciosa y se administra desde el año de edad. La<br />
dosis es única y se aplican 0.5 ml por vía subcutánea.<br />
Vacuna anti Haemophilus influenzae B<br />
Contiene oligosacáridos de Haemophilus influen zae<br />
tipo B. Se administra en dosis de 0.5 ml por vía intramuscular,<br />
de preferencia en el músculo vasto lateral.<br />
El esquema de vacunación, según la edad, es el<br />
siguiente:<br />
1. De 2 a 11 meses: tres dosis, una cada dos meses y<br />
un refuerzo a los 18 meses de edad.<br />
2. De uno a cuatro años: dos dosis, una cada dos<br />
meses y un refuerzo a los cinco años de edad.<br />
Toxoide tetánico<br />
Se recomienda en personas expuestas al téta nos, las<br />
cuales incluyen a mujeres con seis a siete meses de<br />
embarazo, para prevenir el té tanos neonatal. Se administra<br />
en dos dosis de 0.5 ml por vía intramuscular,<br />
con intervalo de seis a ocho semanas y un refuerzo<br />
cada cinco o 10 años.<br />
Vacuna antineumocócica<br />
Contiene polisacáridos neumocócicos purifica dos de<br />
Streptococcus pneumoniae. Se recomien da para prevenir<br />
infecciones neumocócicas del tracto respiratorio,<br />
sobre todo en personas mayores de 60 años de edad,<br />
así como en adultos con enfermedades cardiovasculares<br />
y pulmona res crónicas, infectados por el virus de<br />
la inmunodeficiencia humana (VIH) y niños mayores<br />
de dos años con enfermedad crónica y riesgo de infección<br />
neumocócica. Se administra por vía subcutánea<br />
o intramuscular en una sola dosis de 0.5 ml. La prescripción<br />
de refuerzos es res ponsabilidad del médico.<br />
Vacuna antihepatitis B<br />
Se indica en el personal de instituciones de sa lud, pacientes<br />
que reciban transfusiones o hemoderivados,<br />
consumidores de drogas o fár macos intravenosos, viajeros<br />
de zonas endémi cas, contactos de pacientes con<br />
hepatitis B y re cién nacidos de madres portadoras.<br />
Se administra en tres dosis de 0.5 ml por vía intramuscular<br />
en la región deltoidea, pero en recién<br />
nacidos se aplica en la región anterolateral del muslo.<br />
La dosis en niños mayores de 10 años y adultos es de<br />
1.0 ml.
Introducción a la inmunología 59<br />
La primera dosis puede aplicarse cualquier día y se<br />
considera 0; la segunda, 30 días más tarde, y la tercera<br />
a los 180 días después de la primera. Para protección<br />
rápida se debe seguir el esquema acortado de 0, 30 y<br />
60 días, con un refuerzo 12 meses después de la primera<br />
dosis.<br />
Vacuna antihepatitis A<br />
Contiene virus de la hepatitis A. Los gru pos más expuestos<br />
a desarrollar la enfermedad son personas que<br />
consumen alimentos conta minados por materia fecal,<br />
niños de guarderías, personas que viven en hacinamiento,<br />
personal de salud, militares y viajeros de lugares<br />
con alta morbilidad.<br />
La vacuna se administra en tres dosis: una después<br />
del año de edad; otra un mes más tar de; la última seis<br />
meses a un año después de la primera dosis. Se revacuna<br />
a los 10 años.<br />
La dosis para menores de 15 años es de 0.5 ml y<br />
para adultos es de 1.0 ml. En ambos casos se suministra<br />
por vía intramuscular en la región deltoidea, pero<br />
en lactantes también puede apli carse en la región anterolateral<br />
del muslo (vease también cuadro 5-2).<br />
Alergia e hipersensibilidad<br />
El sistema inmunitario protege al organismo, pero<br />
puede haber respuestas adversas, como alergia e hipersensibilidad.<br />
En ambos casos, el individuo se expuso<br />
con anterioridad al antígeno llamado alergeno,<br />
el cual puede ser polen, células de animales, polvos<br />
caseros, esporas de mohos, alimentos y medicamentos,<br />
entre mu chos otros.<br />
La reacción adversa más leve es la aparición de<br />
ronchas y la más grave es la anafilaxia (véase más adelante).<br />
En estas circunstancias, las cé lulas cebadas del<br />
tejido conectivo (conjuntivo) liberan histamina, así<br />
como otros mediadores, entre ellos:<br />
1. Factores quimiotácticos eosinofílicos de la anafilaxia<br />
(ECF-A, eosinophil chemotactic factors of<br />
anaphilaxis). Atraen eosinófilos y neutrófilos.<br />
2. Factor quimiotáctico neutrófilo (NCF, neutrophil<br />
chemotactic factor). Atrae neutrófilos.<br />
3. Algunas hidrolasas lisosómicas.<br />
4. Otras enzimas.<br />
Otros mediadores son la sustancia de reacción retrasada<br />
de la anafilaxia (SRS-A), la cual tiene efectos<br />
similares a la histamina pero de acción retrasada; el<br />
factor activador de plaquetas (PAF) capaz de ocasionar<br />
agregación plaquetaria, y varias prostaglandinas.<br />
La hipersensibilidad es la respuesta de inmu nidad<br />
anormal, exagerada o inapropiada que produce lesiones<br />
en los tejidos. Los individuos con hipersensibilidad<br />
tienen antecedentes de contacto con el antígeno<br />
respectivo que actuó como sensibilizante.<br />
Hipersensibilidad tipo I o inmediata<br />
Ésta aparece a los pocos minutos del contacto con el<br />
antígeno. También se conoce como alergeno y puede<br />
ser muy diverso, como polen, pelo de animales, veneno<br />
de abeja, fármacos y pro teínas del huevo, etc.<br />
Cuadro 5-2. Otras vacunas y sus dosis<br />
Tipo de vacuna<br />
Vacuna contra enteritis por rotavirus<br />
Vacuna contra la varicela<br />
Vacuna contra el virus del papiloma humano<br />
Comentarios y dosis<br />
En México se usa la vacuna pentavalente Rotatek, elabora da con los tipos G1, G2, G3, Q4 y P1. Se administra<br />
por vía oral a partir de los dos meses de edad.<br />
La vacuna de virus atenuados se aplica en una sola dosis subcutánea de 0.5 ml a partir de los 12 a 18 meses.<br />
Aunque se han relacionado con cáncer cervicouteri no los tipos de VPH 16, 18, 31, 33 y 35, los más comunes<br />
son 6, 11, 16 y 18. Se recomienda para niños y adoles centes de nueve a 26 años, aunque se puede aplicar en<br />
perso nas mayores. Se administra por vía intramuscular en la región deltoidea o en la zona anterolateral y<br />
superior del muslo en tres dosis de 0.5 ml. La segunda dosis se aplica dos meses después de la primera y la<br />
tercera seis meses después de la primera dosis.
60 Capítulo 5<br />
Depende principalmente de anticuerpos tipo inmunoglobulina<br />
E, los cuales se encuentran en la superficie<br />
de los mastocitos y pueden unirse a alergenos;<br />
de hacerlo, se liberan mediadores como histamina, serotonina,<br />
sustancia de reac ción lenta de la anafilaxia<br />
(SRS-A), prostaglandina y tromboxano, los cuales<br />
producen inflamación. Al afectarse los mastocitos,<br />
pueden presentar se tres tipos de efectos:<br />
1. Quimiotáctico. Es la atracción hacia el foco de<br />
activación de mastocitos, eosinófilos, monocitos<br />
y neutrófilos. Los eosinófilos liberan sustancias<br />
que inducen la liberación de his tamina por mastocitos<br />
y basófilos, y así aumentan los fenómenos<br />
inflamatorios.<br />
2. Activación inflamatoria. Se manifiesta por vasodilatación,<br />
edema y formación de microtrombos.<br />
3. Espasmógeno. Se manifiesta por contracción del<br />
músculo liso de bronquios, así como por aumento<br />
de la secreción de moco.<br />
Las posibles manifestaciones de este tipo de hipersensibilidad<br />
son:<br />
1. Anafilaxia. Se presenta en personas que reci ben<br />
sustancias como fármacos y venenos de insectos,<br />
a los cuales se sensibilizaron con anterioridad.<br />
Se caracteriza por edema en laringe y glotis, así<br />
como por broncoconstricción y, por tanto, cuadro<br />
asmatiforme. Tam bién puede experimentarse<br />
prurito y eritema generalizados, trastornos<br />
gastrointestinales y colapso vascular.<br />
2. La inhalación de polvos (p. ej., polen, polvo con<br />
ácaros, plumas y pelos de animales) pue de ocasionar<br />
rinitis, conjuntivitis, sinusitis y cuadros<br />
asmatiformes.<br />
3. Las urticarias y las dermatitis alérgicas se presentan<br />
al consumir alimentos como fre sa, chocolate,<br />
pescado, moluscos y mariscos.<br />
Hipersensibilidad tipo II o citotóxica<br />
El daño producido por la hipersensibilidad cito tóxica<br />
se debe a la unión de anticuerpos tipo inmunoglobulinas<br />
G o M con antígenos situados en las superficies<br />
celulares. Esto conduce a des trucción de las células<br />
diana o blanco, las cuales poseen determinantes o<br />
haptenos específicos, entre ellos eritrocitos, plaquetas,<br />
neutrófilos y linfocitos. Por otra parte, los antígenos<br />
pueden ser:<br />
1. Microorganismos.<br />
2. Antígenos previos cuya penetración ocurrió por<br />
transfusiones, fármacos o embarazo.<br />
3. Autoinmunitarios. Se denominan así cuan do<br />
aparecen en las células de algunos tejidos determinantes<br />
antigénicos. Por ello, el orga nismo no<br />
reconoce como propias a esas cé lulas y pone en<br />
marcha mecanismos para eli minarlas.<br />
En este tipo de hipersensibilidad es impor tante el<br />
complemento, es decir, el sistema de proteínas séricas<br />
capaz de generar fenómenos de opsonización, activación<br />
celular y lisis (destrucción) de células blanco.<br />
Como respuesta, las células pue den desarrollar actividad<br />
citotóxica (linfocitos citolíticos y plaquetas),<br />
o fagocitaria (neutrófi los, macrófagos, mastocitos y<br />
eosinófilos). Así se observa clínicamente en infecciones<br />
por Mycoplasma y también en personas sensibles<br />
a fármacos (p. ej., penicilina, quinina, sulfonamidas o<br />
metildopa), quienes presentan hipersen sibilidad contra<br />
plaquetas y eritrocitos.<br />
Las plaquetas se afectan en la púrpura trombocitopénica<br />
autoalérgica; los eritrocitos se da ñan en las<br />
reacciones de transfusión, la enfer medad hemolítica<br />
del recién nacido y anemias hemolíticas autoinmunitarias.<br />
Asimismo, cuan do existen autoanticuerpos, se<br />
generan reaccio nes contra los leucocitos.<br />
La hipersensibilidad también se presenta en rechazos<br />
de injertos y enfermedades autoinmu nitarias<br />
como la miastenia grave. En estos ca sos la reacción<br />
ocurre frente a los receptores de acetilcolina localizados<br />
en la superficie de las membranas musculares.<br />
Hipersensibilidad tipo III<br />
o por complejos inmunitarios<br />
Se caracteriza por la formación de complejos inmunitarios<br />
resultantes de la unión de antíge nos solubles con<br />
anticuerpos tipo inmunoglobulina G, que se depositan
Introducción a la inmunología 61<br />
en los vasos sanguí neos y membranas basales. En este<br />
sentido, las inmunoglobulinas G son las más importantes,<br />
pero también pueden participar las M y las E.<br />
En condiciones normales, la unión de antí genos<br />
solubles y anticuerpos forma complejos inmunitarios.<br />
Éstos se eliminan por medio del sistema reticuloendotelial<br />
de hígado, bazo y pulmón, pero cuando aumenta<br />
la permeabili dad vascular, se depositan en los<br />
tejidos y entonces el complemento, los mastocitos,<br />
los basófilos y las plaquetas liberan aminas vasoactivas<br />
que producen daño tisular.<br />
Los cuadros clínicos más frecuentes de hipersensibilidad<br />
tipo III son la enfermedad de los granjeros<br />
y la enfermedad de los cuidadores de palomas. Los<br />
complejos inmunitarios oca sionan neumonitis y alveolitis.<br />
El exceso de antígenos solubles y el depósito de<br />
complejos inmunitarios circulantes en de terminadas<br />
zonas se observa en caso de glomerulonefritis posestreptocócica,<br />
endocarditis bacteriana, paludismo, tripanosomiasis<br />
africana, dengue, fiebres hemorrágicas<br />
y hepatitis.<br />
Hipersensibilidad tipo IV o celular<br />
Este tipo de hipersensibilidad también se cali fica como<br />
retardada, porque a diferencia de las anteriores aparece<br />
casi 12 horas después del contacto con el antígeno.<br />
Además, los linfocitos T activados, y no los anticuerpos,<br />
son los productores de la respuesta y el daño tisular.<br />
Así es posible observarlo en casos de dermati tis<br />
por contacto, reacciones a la tuberculina y enfermedades<br />
infecciosas como tuberculosis, leishmaniasis,<br />
esquistosomiasis, infecciones micóticas profundas y<br />
periodontitis relaciona das con placa dentobacteriana.<br />
Inmunodeficiencias<br />
Las personas con inmunodeficiencia tienen dis minución<br />
de la respuesta inmunitaria.<br />
Las inmunodeficiencias primarias se presentan cuando<br />
el organismo no produce los anticuer pos necesarios<br />
ni el complemento o cuando se afecta la función<br />
fagocítica. Las inmunodeficiencias secundarias son<br />
consecuencia de enferme dades, como en el caso del<br />
síndrome de inmunodeficiencia adquirida.
Capítulo 6<br />
Placa<br />
dentobacteriana<br />
Placa dentobacteriana 63<br />
Placa dentobacteriana<br />
y conceptos relacionados<br />
La placa dentobacteriana es una masa blanda, tenaz<br />
y adherente de colonias bacterianas en la superficie<br />
de los dientes, la encía, la lengua y otras superficies<br />
bucales (incluso las prótesis). Se forma cuando existen<br />
condiciones adecuadas para las bacterias, como<br />
el estancamiento de alimentos, disponibilidad de nutrimentos,<br />
problemas de inflamación o de in munidad<br />
del individuo, por falta de higiene bucal ade cuada, y<br />
es muy importante en la etiología de la caries dental,<br />
la enfermedad periodontal y la forma ción del tártaro<br />
(fig. 6-1). También es posible definirla como una<br />
película transparente e incolora adherente al diente,<br />
compuesta por bacterias diversas y células descamadas<br />
dentro de una matriz de mucoproteínas y mucopolisacáridos.<br />
Al igual que la película (véase más adelante, Película<br />
adquirida) que la originó, la placa dentobacteriana<br />
es translúcida y por ello poco visible a menos que haya<br />
depósitos de minera les o hemoglobina procedentes<br />
de la ruptura de capilares gingivales. Si es delgada, se<br />
visua liza por medio de un colorante que la pigmente o<br />
con uno fluorescente que se ilumina con luz ultravioleta.<br />
A diferencia de la película, la placa se puede eliminar<br />
con cepillado vigoroso.<br />
Para comprender el mecanismo de la placa dentobacteriana<br />
es necesario conocer antes la función de la<br />
saliva y las características de la película adquirida y<br />
la materia alba.<br />
A B C<br />
D E F<br />
Figura 6-1. Esquema de la colonización bacteriana en<br />
la placa supragingival. A, Formación de<br />
la película adquiri da. B y C, Colonización<br />
primaria. D, Colonización secun daria. E, Placa<br />
madura. F, Mineralización. Fuente: Liébana<br />
JU. Microbiología oral. México: McGraw-Hill<br />
Interamericana Editores, 1997.
64 Capítulo 6<br />
Saliva<br />
La saliva es un líquido orgánico producido por las<br />
glándulas salivales, entre ellas dos parotídeas (parótidas),<br />
dos submaxilares (submandibulares) y dos<br />
sublinguales, así como otras menores distribui das de<br />
manera aislada a lo largo de la mucosa bucal.<br />
La procedencia glandular de la saliva, determina<br />
sus ca racterísticas:<br />
La parotídea (parótida) elabora una secreción serosa<br />
con electrólitos; la submandibular (submaxilar)<br />
produ ce secreciones serosa y mucosa, y en la sublingual<br />
predomi na la secreción mucosa.<br />
Las glándulas salivales menores (palatina, lingual,<br />
de las mejillas y labial, que desembocan en muchos<br />
luga res de la membrana mucosa que recubre la boca<br />
producen principalmente moco.<br />
La composición de la saliva varía, dependiendo de<br />
si es estimulada o sin estímulo (en reposo). Durante<br />
el día, sin estímulo, la glándula submandibular (submaxilar)<br />
produce 0.26 ml por minuto, la sublin gual<br />
0.2 ml por minuto y la parotídea (parótida) 0.11 ml<br />
por minuto.<br />
La secreción aumenta a media tarde; en cambio, es<br />
muy escasa durante el sueño.<br />
Con estimulación moderada aumenta la secreción<br />
de las glándulas submandibular (submaxilar) y parotídea<br />
(pa rótida); pero esta última tiene un flujo mayor<br />
con la es timulación completa.<br />
Si la secreción total es menor de 0.7 ml por minuto,<br />
existe xerostomía.<br />
La estimulación puede ser mecánica (al masticar),<br />
gustatoria (al estimularse las papilas gustativas) o psicológica<br />
(al imaginar un alimento favorito). Disminuye<br />
con el miedo, destrucción irreversible de las glándulas<br />
sali vales, por ejemplo, cuando hay radiación de cabeza<br />
y cuello para tratar tumores de la glándula tiroidea<br />
(tiroides), síndrome de Sjögren, o con determinados<br />
fármacos, como los neurolépticos, antidepresivos tricíclicos<br />
y antihipertensores.<br />
En general, la mezcla salival contiene 98% de agua<br />
y 3 a 8 g/L de sólidos; 20% de estos últimos se encuentran<br />
en suspensión y 80% disueltos (cuadro 6-1). Los<br />
sólidos en suspensión se componen de células de descamación<br />
del epitelio, bacterias, leucocitos y levaduras,<br />
entre otros.<br />
La secreción de saliva responde a estímulos del sistema<br />
nervioso autónomo. La estimulación simpática<br />
origina volúmenes menores de una secreción viscosa,<br />
con lo cual proporciona la sensación de resequedad<br />
bucal (por ejemplo, ante situaciones de estrés). La estimulación<br />
parasimpática origina secreción acuosa y<br />
abundante.<br />
Las funciones de la saliva son, entre otras, las siguientes:<br />
1. Proporcionar un medio protector para los dientes<br />
y la mucosa bucal:<br />
Cuadro 6-1. Valores medios de la composición de la saliva (mg/100 ml)<br />
Mixta Parotídea Submandibular (submaxilares)<br />
Reposo Estimulada Reposo Estimulada Reposo Estimulada<br />
Proteínas 220 280 100 200 50 76<br />
Aminoácidos − 4 − 0.4 − 0.3<br />
Glucosa 1 − 1 0.2 0.6 0.2<br />
Amoniaco − 0.02 0.9 0.3 0.9 0.08<br />
Sodio 15 60 3 80 6 60<br />
Potasio 80 80 120 100 60 60<br />
Fosfato 16 12 28 9 15 7<br />
Calcio 5 6 5 6 6 8<br />
Urea 20 13 26 13 11 20<br />
Fuente: Liébana JU. Microbiología oral. México: McGraw-Hill Interamericana Editores, 1997.
Placa dentobacteriana 65<br />
A. Enjuaga la boca al arrastrar consigo partículas<br />
de alimentos y desechos celulares. Este efecto<br />
físico depende de su contenido de agua y de<br />
la velocidad de flujo de la saliva. La disminución<br />
del flujo salival favorece la retención de<br />
los alimentos en la boca; además, disminuye<br />
el efecto neutralizador, por lo que desciende el<br />
pH de la placa favoreciendo la desmineralización<br />
de las superficies dentarias.<br />
B. Contiene inmunoglobulinas A, G y M, las<br />
cuales protegen la boca contra la flora microbiana<br />
y la invasión de la mucosa.<br />
C. El moco de la saliva mantiene la flora bacteriana<br />
de la boca en condiciones constantes,<br />
al transportar las sustancias antibacterianas a<br />
las zonas donde se requiere neutralizar a los<br />
agentes patógenos.<br />
D. Las glucoproteínas se relacionan con la adhesión<br />
de algunas bacterias.<br />
E. Amortigua la acidez natural de la boca. Contiene<br />
sialina o factor de incremento del pH,<br />
que reduce el tiem po necesario para que el pH<br />
alcance valores normales, y estaterina, que estabiliza<br />
el calcio y el fosfato.<br />
Los amortiguadores salivales mantienen el<br />
pH de la saliva entre 5.6 y 6.2, pero si hay estimulación<br />
po tente pueden incrementarlo a 7 u<br />
8; esto se debe a un aumento en la concentración<br />
de bicarbonato. El fosfa to y las proteínas<br />
son amortiguadores importantes en la placa<br />
dentobacteriana.<br />
F. Protege contra la disolución del fosfato de<br />
calcio en los tejidos duros (esmalte, así como<br />
dentina y cemen to expuestos) por medio de<br />
los amortiguadores saliva les y la conservación<br />
de una concentración saturada de iones de<br />
calcio y fosfato.<br />
G. Contiene antibacterianos específicos (bacteriostáticos,<br />
bactericidas y aglutinantes), los<br />
cuales actúan como mecanismos de defensa.<br />
Por ejemplo, las opsoninas vuelven susceptibles<br />
a las bacterias al romper los enlaces entre<br />
N-acetilmurámico y N-acetilglucosamina<br />
de las paredes celulares y los leucocitos.<br />
La cantidad de estos últimos varía de 100 a<br />
1 000 000 por mililitro en bocas sanas y puede<br />
llegar hasta 11 000 000 por mili litro en bocas<br />
con problemas inflamatorios.<br />
H. Contiene proteínas bacteriostáticas o bactericidas:<br />
li sozima, lactoferrina, peroxidasa salival<br />
e inmunoglobu linas.<br />
La actividad de la lisozima disminuye con<br />
el Fe o el Cu, pero la lactoferrina se combina<br />
con estos dos elementos para proteger la acción<br />
de la lisozima.<br />
La lactoferrina une iones Fe 3+ suprimiendo<br />
este elemento esencial para algunas bacterias<br />
orales.<br />
La peroxidasa salival reacciona con el tiocianato<br />
salival (producto del metabolismo<br />
de la placa dentobacteriana) para formar el<br />
hipocianito, el cual inhibe la capacidad de las<br />
bacterias para utilizar la glucosa. La lactoperidasa<br />
se adsorbe a la hidroxiapatita como un<br />
componente de la película adquirida y puede<br />
influir en las características de la pobla ción<br />
microbiana; hace que la unión del tiocianato y<br />
el peróxido de hidrógeno produzca sustancias<br />
tóxi cas para muchas bacterias.<br />
En cuanto a las inmunoglobulinas, la<br />
disminu ción de IgA aumenta la frecuencia de<br />
caries.<br />
2. Lubrica y humedece la mucosa bucal y los labios. Esta<br />
humidificación es continua, debido a la evaporación<br />
y deglución de la saliva. La lubricación se<br />
lleva a cabo por medio de glucoproteínas de alto<br />
peso molecular denomi nadas mucinas, de las<br />
cuales depende la vis cosidad de la saliva porque<br />
son capaces de unir moléculas de agua con sus<br />
grupos hidroxilo.<br />
3. Digestiva:<br />
A. Humedece los alimentos ingeridos para darles<br />
consistencia semisólida y facilitar su deglución.<br />
B. Contiene enzimas muy importantes: amilasa<br />
alfa, la cual hidroliza a las dextrinas, disminuye<br />
la viscosidad de los geles de almidón<br />
y ayuda a eliminar desechos de hidratos de<br />
carbono de los dientes; amilasa beta, que desdobla<br />
a las moléculas; aliesterasas, las cuales<br />
hidrolizan los ésteres de ácidos grasos; lipasas,<br />
que desdoblan a los glicéridos de los ácidos
66 Capítulo 6<br />
grasos; por último, enzimas de transfe rencia<br />
como la catalasa, la peroxidasa y la hexocinasa,<br />
que catalizan reacciones en las cuales se<br />
transfiere un grupo químico de un compuesto<br />
a otro.<br />
4. Activa el sentido del gusto. Las sustancias sápidas<br />
de los alimentos necesitan disolverse en algún<br />
líqui do, como la saliva o el agua, para poder estimular<br />
a los calículos gustatorios (botones gustativos)<br />
que se en cuentran en las papilas de la superficie<br />
dorsal de la lengua y la parte anterior del<br />
paladar blando (velo del paladar), lo que hace<br />
que el comer sea placentero. En muchos casos,<br />
ayuda a la detección de sustan cias perjudiciales.<br />
5. Facilita el habla, al disminuir la fricción entre la<br />
lengua y el resto de los tejidos blandos.<br />
Película adquirida<br />
El esmalte del diente de reciente erupción se encuentra<br />
cubierto por una delgada capa proteínica denominada<br />
lámina basal o cutícula del esmalte, la cual es<br />
producto final de la actividad generadora del ameloblasto<br />
y desaparece con rapidez para así permitir el<br />
contacto directo del diente con el medio bucal.<br />
Poco tiempo después, se forma una nueva cubierta,<br />
la película adquirida.<br />
Ésta se adhiere con firmeza a la superficie dental,<br />
tiene menos de 1 μ de espesor y se compone de<br />
proteínas salivales (principalmen te, glucoproteínas y<br />
fosfoproteínas), enzimas e inmunoglobulinas que se<br />
desnaturalizan pos teriormente.<br />
La composición de la película adquirida varía en<br />
cada individuo. Sin embargo, las cargas eléc tricas<br />
de sus moléculas orgánicas son distintas a las de los<br />
cristales minerales de la hidroxiapatita adamantina, y<br />
ello favorece su fuerte fija ción en grietas, fisuras y superficie<br />
del esmalte. Se forma también sobre superficies<br />
artificia les, como las restauraciones y prótesis.<br />
La película adquirida no se elimina con el cepillado.<br />
Sólo desaparece con algún abrasivo fuerte, pero<br />
vuelve a formarse de inmediato al contacto con la saliva:<br />
a los 90 minutos ya están integradas sus primeras<br />
capas, y a las tres o cuatro horas como máximo está<br />
completa. Su aspecto es claro y translúcido, aunque<br />
puede pigmentarse con el consumo de tabaco o en sitios<br />
donde abundan polvos de cobre, níquel, cadmio<br />
o hierro. Suele considerarse una estruc tura simple; sin<br />
embargo, Meckel la divide en tres capas:<br />
1. Película subsuperficial. Es una red de fibrillas que<br />
se introduce y adhiere a las irregulari dades microscópicas<br />
del esmalte. Mide 2 a 3 mμ de espesor.<br />
2. Película superficial. Es una capa de material<br />
amorfo y mide 0.02 a 5 mμ de espesor.<br />
3. Película suprasuperficial o manchada. Aquí se encuentran<br />
en ocasiones algunos microorga nismos<br />
y productos terminales de su meta bolismo.<br />
A la película adquirida se le han atribuido funciones<br />
tanto protectoras como perjudiciales, que incluyen:<br />
1. Retrasar la desmineralización del esmalte al actuar<br />
como barrera para la difusión de los ácidos<br />
desde la placa dentobacteriana hacia la superficie<br />
adamantina.<br />
2. Retrasar la difusión de los iones calcio y fos fato<br />
desde el área de desmineralización y de ese modo<br />
intensificar el proceso de remineralización.<br />
3. Actuar como matriz inicial a la cual se le adhieren<br />
las bacterias bucales para iniciar la formación<br />
de la placa dentobacteriana (fig. 6-2).<br />
Materia alba<br />
Es una estructura compuesta por masas micro bianas,<br />
residuos de alimentos, células epiteliales descamadas y<br />
leucocitos. Pero tiene una característica muy especial:<br />
está ligeramente adheri da a los dientes, por lo cual es<br />
posible eliminarla incluso con una jeringa de agua. Es<br />
distinta a la placa dentobacteriana.<br />
Tipos de placa dentobacteriana<br />
Según su localización, la placa dentobacteriana puede<br />
ser supragingival, subgingival, de fosas y fisuras,<br />
proximal y radicular.
Placa dentobacteriana 67<br />
Microorganismos<br />
bucales<br />
Adherencia<br />
dextrán a célula Adherencia<br />
Adherencia<br />
célula a célula<br />
proteína a célula<br />
Adhesivos<br />
extracelulares<br />
(dextranas)<br />
Microorganismos<br />
bucales<br />
Proteínas salivales<br />
Adherencia<br />
dextrán a película Adherencia<br />
Adherencia<br />
célula a película<br />
proteínas a película<br />
Placa<br />
Película<br />
Esmalte<br />
Figura 6-2. Interacciones de adherencia que actúan en la formación de la placa. (Modificada de Schachtele CS. Recent<br />
developments in the microbiology of dental plaque formation. Northwest Dent, 1972;51:108.)<br />
Placa dentobacteriana supragingival<br />
La placa dentobacteriana supragingival se ex tiende<br />
desde el margen libre de la encía hasta la corona del<br />
diente. Su composición varía de un individuo a otro,<br />
de un diente a otro e inclu so en un mismo diente. Pero<br />
en general está constituida por microorganismos y<br />
matriz or gánica intercelular.<br />
Microorganismos<br />
En 1 g de placa húmeda es posible encontrar hasta<br />
200 000 millones de microorganismos, cuyo género<br />
depende del sitio donde se loca licen. Por ejemplo, en<br />
el surco gingival y la superficie radicular predominan<br />
las formas fi lamentosas, sobre todo especies de<br />
Actinomyces; en cambio, en la superficie coronaria<br />
predomi nan estreptococos y bacterias filamentosas<br />
grampositivas.<br />
La formación de la placa dentobacteriana supragingival<br />
se inicia con la colonización pri maria, es decir,<br />
con la adherencia de microor ganismos aerobios<br />
grampositivos en colonias aisladas o domos (fig. 6-1).<br />
Esta colonización es selectiva; al parecer, la película<br />
adquirida tiene receptores para las bacterias (fig.<br />
6-3).
68 Capítulo 6<br />
PA<br />
Diente<br />
Glucoproteínas<br />
salivales<br />
Figura 6-3. Interacciones entre los receptores de la película adquirida (PA) y las adhesinas de las bacterias. Diversas<br />
glucoproteínas de la saliva también pueden unirse a las adhesinas bacterianas y bloquear la adherencia de las<br />
bacterias al diente. Fuente: Gibbons y van Houte. Bacterial adherence and the formation of dental plaques. En:<br />
Bachey. Receptors and recognition, bacterial adherence. Serie 6. Vol 6. Landa Chapman & Hall, 1980.<br />
El primer colonizador es Streptococcus sanguis, y<br />
después Actinomyces viscosus y otros es treptococos.<br />
Estas bacterias se unen a la pelícu la adquirida mediante<br />
enlaces débiles. Luego se agregan estreptococos<br />
de las especies mitis, gordonii y crista, así como otras<br />
bacterias (Rothia dentocariosa, especies de Neisseria y<br />
Corynebacterium matruchotii).<br />
Este tipo de placa dentobacteriana tiene metabolismo<br />
aerobio. Las bacterias anaerobias facultativas<br />
se adaptan, con excepción de las especies de<br />
Veillonella, las cuales sobreviven a partir del lactato<br />
elaborado por otros microor ganismos y poseen mecanismos<br />
de resistencia al oxígeno (superóxido dismutasa).<br />
Las espe cies de Prevotella, Porphyromonas y<br />
Fusobacterium conforman el 0.02% de la colonia bacteriana<br />
y son microorganismos anaerobios estrictos.<br />
En el transcurso de las primeras 48 horas las colo nias<br />
crecen y confluyen, es decir, se unen unas con otras.<br />
Por medio del microscopio electróni co, es posible observar<br />
al principio imágenes en granos de maíz porque<br />
predominan los co cos. Más tarde, se observan las<br />
típicas mazorcas con formas filamentosas recubiertas<br />
de cocos.<br />
En la fase de colonización primaria, algunas placas<br />
dentobacterianas supragingivales no son cariogénicas,<br />
tienen pocos Streptococcus mutans y pocos lactobacilos<br />
porque poseen poco poder de adhesión.<br />
La colonización secundaria comienza entre los tres<br />
a cinco días posteriores. Algunas bacte rias aumentan<br />
en número, otras disminuyen y otras más se agregan.<br />
Como hay competencia por el consumo de oxígeno,<br />
las más aerobias van siendo sustituidas por anaerobias<br />
y anae robias facultativas.<br />
Mediante el microscopio electrónico es posible<br />
observar un aumento de formas baci lares, sobre todo<br />
de especies de Actinomyces. La agregación de bacilos<br />
sobre bacilos da lugar a las acumulaciones pilosas.<br />
Los microorganismos aerobios se distribuyen en<br />
las capas externas y los anaerobios en las más profundas.<br />
Los estreptococos todavía son los más abundantes<br />
y se localizan en cualquier lu gar.<br />
La velocidad de crecimiento de la placa dentobacteriana<br />
supragingival es rápida duran te la primera<br />
semana y disminuye en las dos siguientes mientras alcanza<br />
su maduración. A partir de este momento, puede<br />
aumentar o dis minuir de acuerdo con los hábitos
Placa dentobacteriana 69<br />
2.0<br />
(46)*<br />
Estreptococos<br />
(36)*<br />
Veillonella<br />
Actinomyces<br />
(23)<br />
Figura 6-4. Proporciones relativas de<br />
micro organismos elegidos en<br />
una placa en de sarrollo. *Los<br />
números entre paréntesis<br />
indican el porcentaje de dichos<br />
microor ganismos en la placa, el<br />
primero y noveno días. Fuente:<br />
Ritz HL. Microbial population<br />
shifts in developing human<br />
dental plaque. Arch Oral Biol,<br />
1967;12:1561.<br />
Porcentaje de microorganismos totales viables (logaritmos)<br />
1.0<br />
0<br />
–1.0<br />
(9.1)<br />
(6.2)<br />
(3)<br />
(1.5)<br />
(0.18)<br />
Fusobacterium<br />
(12)<br />
(8.6)<br />
Corynebacterium<br />
Nocardia<br />
Neisseria<br />
(1.8)<br />
(0.90)<br />
(0.10)<br />
Aerobios<br />
(0.02)<br />
Facultativos microaerófilos<br />
Anaerobios<br />
–2.0<br />
1 3 5 7 9<br />
Edad de la placa (días)<br />
de higiene bucal, la dieta y el flujo salival. Cuando las<br />
ca pas más profundas ya no tienen oxígeno ni nutrimentos,<br />
los productos de desecho se acu mulan y van<br />
muriendo los microorganismos.<br />
En la figura 6-4 se presenta la curva evoluti va de<br />
los microorganismos de la placa supra gingival, y el<br />
cuadro 6-2 es una lista parcial de microorganismos<br />
residentes y transeúntes (de paso) de la placa supragingival<br />
madura.<br />
Matriz orgánica intercelular<br />
Constituye más o menos 30% de la placa dentobacteriana.<br />
Está formada por glucoproteínas, proteínas,<br />
hidratos de carbono, compues tos inorgánicos y agua<br />
provenientes de la dieta, la saliva y las bacterias (cuadro<br />
6-3); estos elementos se encuentran entre las colonias<br />
de bacterias y entre las células, así como entre las<br />
células y la superficie del diente.<br />
Los compuestos inorgánicos varían depen diendo<br />
de la edad, el contenido mineral del agua, la composición<br />
del esmalte y los alimen tos ingeridos; pero en términos<br />
generales inclu yen sodio, potasio, calcio, fosfato<br />
inorgánico, magnesio, hierro, flúor y agua (70 a 80%).<br />
Los hidratos de carbono provienen sobre todo de<br />
la dieta y las glucoproteínas salivales, aunque hay intracelulares,<br />
extracelulares y cap sulares. Pueden ser<br />
glucanos (polímeros de glu cosa), fructanos (polímeros<br />
de la fructosa) y heteroglucanos. Al parecer, los<br />
polisacáridos protegen a los microorganismos de influencias<br />
nocivas y eliminan de las superficies dentales<br />
las sustancias neutralizadoras de ácidos.<br />
Para que los hidratos de carbono de la dieta sean<br />
asimilados por las bacterias, requieren de enzi mas
70 Capítulo 6<br />
Cuadro 6-2. Lista parcial de microorganismos residentes<br />
y transeúntes (de paso) de la placa<br />
supragingival madura<br />
1. Cocos _∼ 50%<br />
Grampositivos anaerobios facultativos _∼ 37%<br />
Estreptococos orales<br />
Especies de enterococos<br />
Especies de micrococos<br />
Especies de estafilococos<br />
Grampositivos anaerobios estrictos _∼ 0.1%<br />
Especies de peptostreptococos<br />
Peptococcus niger<br />
Gramnegativos aerobios _∼ 1.8%<br />
Especies de Neisseria<br />
Gramnegativos anaerobios _∼ 12%<br />
Especies de Veillonella<br />
2. Bacilos _∼ 48%<br />
Grampositivos anaerobios facultativos _∼ 40%<br />
Especies de Actinomyces<br />
Especies de Lactobacillus<br />
Especies de Propionibacterium<br />
Corynebacterium matruchotii<br />
Grampositivos aerobios _∼ 0.1 %<br />
Rothia dentocariosa<br />
Grampositivos anaerobios _∼ 0.9%<br />
Especies de Eubacterium<br />
Especies de Bifidobacterium<br />
Gramnegativos anaerobios facultativos _∼ 3%<br />
Especies de Haemophilus<br />
Especies de Campylobacter<br />
Especies de Capnocytophaga<br />
Actinobacillus actinomycetemcomitans<br />
Eikenella corrodens<br />
Cardiobacterium hominis<br />
Gramnegativos anaerobios estrictos _∼ 3%<br />
Especies de Porphyromonas<br />
Especies de Prevotella<br />
Especies de Fusobacterium<br />
Especies de Bacteroides<br />
Leptotrichia buccalis<br />
Especies de Selenomas<br />
3. Espiroquetas _∼ 1%<br />
Treponemas orales<br />
4. Otros microorganismos _∼ 0.05%<br />
Especies de Mycoplasma<br />
Especies de Candida<br />
Trichomonas tenax<br />
Entamoeba gingivalis<br />
Fuente: Liébana JU. Microbiología oral. México: McGraw-Hill<br />
Interamericana Editores, 1997.<br />
Cuadro 6-3. Algunas características diferenciales en la<br />
composición de la matriz celular de la placa<br />
supragingival y el líquido gingival<br />
Concentraciones (mM/L)<br />
Matriz celular Líquido gingival<br />
Sodio 35.1 ± 9.0 88.8 ± 31.8<br />
Potasio 61.5 ± 13.5 17.4 ± 9.0<br />
Calcio 6.5 ± 2.1 4.9 ± 1.8<br />
Magnesio 3.7 ± 1.1 0.4 ± 0.3<br />
Fosfato inorgánico 14.2 ± 3.1 1.3 ± 0.9<br />
Glucosa 13.9 ± 2.3 1.6 ± 0.7<br />
pH 6.54 ± 0.26 8.2 ± 0.14<br />
Proteína (g%) 1.49 ± 0.06 6.83 ± 1.26<br />
Fluoruro 2 ± 0.7 ---<br />
Valores medios ± desviación estándar.<br />
Fuente: Liébana JU. Microbiología oral. México: McGraw-Hill<br />
Interamericana Editores, 1997.<br />
1. Cuando las glucoproteínas son atacadas por bacterias,<br />
se separan residuos terminales de ácido<br />
siálico, se vuelven menos solubles y se depositan<br />
con facilidad alrededor de los mi croorganismos.<br />
2. Se obtienen materiales de reserva factibles de ser<br />
degradados y movilizados en cual quier momento.<br />
3. Los polisacáridos extracelulares, en especial<br />
los glucanos insolubles, facilitan la adhesión, la<br />
agregación y la coagregación intermicro biana en<br />
el esmalte.<br />
4. Al formarse el tártaro dental, los hidratos de carbono<br />
dificultan el acceso a la saliva y la salida de<br />
productos tóxicos.<br />
5. Los ácidos producidos reducen el pH y de ese<br />
modo facilitan la desmineralización del esmalte.<br />
Asimismo, las proteínas procedentes de la saliva y<br />
la dieta proporcionan nitrógeno y ami noácidos esenciales<br />
para la vida microbiana; a su vez, el amoniaco<br />
resultante es perjudicial para el huésped.<br />
Placa dentobacteriana subgingival<br />
como la amilasa alfa de la saliva, las oxidorreductasas<br />
y las deshidrogenasas. Las enzimas bacterianas (dextranasas,<br />
fructanasas, neuraminidasas, glucosidasas,<br />
glucógeno fosforilasas, entre otras) tienen una función<br />
fundamental. Las consecuencias del metabolismo<br />
de los hidratos de carbono son:<br />
La placa dentobacteriana subgingival (fig. 6-5) se localiza<br />
a partir del margen gingival en di rección apical.<br />
Su formación se favorece cuan do el pH del surco es<br />
más alcalino que el de la saliva y el líquido gingival<br />
tiene mayor canti dad de sales. Hay poca matriz intercelular,<br />
sal vo en las zonas adheridas al diente, por lo
Placa dentobacteriana 71<br />
Placa supragingival<br />
en la unión dentogingival<br />
Placa subgingival flotante<br />
Esmalte<br />
Cemento<br />
Placa subgingival adherida al epitelio<br />
Placa subgingival<br />
adherida al diente<br />
Figura 6-5. Estructura de la placa subgingival. Fuente: Liébana JU. Microbiología oral. México: McGraw-Hill<br />
Interamericana Editores, 1997.<br />
cual las fuentes nutricias son endógenas (líquido gingival<br />
o interbacteriano).<br />
Los microorganismos existentes dependen de la<br />
profundidad a la que se encuentren, por ejemplo, cerca<br />
del margen dentogingival pre dominan los microorganismos<br />
grampositivos: Streptococcus sanguis, Streptococcus<br />
mitis, Strep tococcus gordonii, Streptococcus oralis,<br />
Actinomyces viscosus, Actinomyces naeslundii, Rothia<br />
dentocariosa y Corynebacterium matruchotii. En la porción<br />
apical el potencial de oxidorreducción es más bajo,<br />
lo cual permite el desarrollo de los siguientes microorganismos:<br />
anaerobios facul tativos como las especies de<br />
Actinomyces; baci los gramnegativos anaerobios como<br />
Eikenella corrodens o especies de Haemophilus, y bacterias<br />
anaerobias estrictas, entre ellas especies de Eubacterium,<br />
Bifidobacterium y Veillonella.<br />
La mineralización se facilita porque las pro pias sales<br />
precipitadas sirven de núcleo, y Corynebacterium<br />
matruchotii también puede calcificar.<br />
La placa dentobacteriana, además de adhe rirse al<br />
diente, puede afectar el epitelio o ser flotante:<br />
1. Placa dentobacteriana del epitelio. Las bacterias<br />
en el epitelio tienen capacidad adhesiva a te jidos<br />
blandos: Actinobacillus actinomycetemcomitans,<br />
Porphyromonas gingivalis, Prevotella melaninogenica<br />
y especies de Capnocytophaga, Selenomonas<br />
y Fusobacterium. No se conocen bien los
72 Capítulo 6<br />
mecanismos por los cuales los mi croorganismos<br />
atraviesan el epitelio y las teo rías respectivas son<br />
diversas, como: aprovecha miento de perforaciones<br />
o interrupciones de la lámina basal epitelial;<br />
ulceraciones en las paredes de las bolsas<br />
periodontales; capaci dad invasora de las toxinas;<br />
movimientos migratorios de los leucocitos, o<br />
producción de enzimas como colagenasas, fibrinolisinas<br />
y hialuronidasa, entre otras.<br />
La acción de los microorganismos se debe a las<br />
exotoxinas, y sus elementos estructura les. Entre<br />
las exotoxinas se encuentran las epiteliotoxinas<br />
que favorecen el avance de los mi croorganismos;<br />
las leucotaxinas, como la que elabora Actinomyces<br />
actinomycetemcomitans, afectan a los leucocitos<br />
polimorfonucleares que tienen acción defensiva<br />
en el surco gin gival.<br />
Entre los elementos estructurales, son importantes<br />
las bacterias gramnegativas del surco<br />
gingival.<br />
2. Placa dentobacteriana flotante. Contiene baci los<br />
gramnegativos anaerobios facultativos y anaerobios<br />
estrictos: Eikenella corrodens, Actinobacillus<br />
actinomycetemcomitans, Leptotrichia buccalis y especies<br />
de Capnocytophaga, Campylobacter, Porphiromonas,<br />
Prevotella, Fusobacte rium y Selenomonas.<br />
En las zonas más pro fundas hay treponemas.<br />
Placa dentobacteriana<br />
de fosas y fisuras<br />
Ésta se forma en fosetas y fisuras, apenas tiene matriz<br />
extracelular y contiene abundantes res tos de alimentos.<br />
En ella abundan los cocos grampositivos, sobre<br />
todo Streptococcus sanguis y Streptococcus salivarius;<br />
también se desarrollan lactobacilos, Corynebacterium<br />
matruchotii, especies de Veillonella y Streptococcus<br />
mutans, el cual puede constituir el 40% de la colonización<br />
bac teriana cuando hay caries activa.<br />
Placa dentobacteriana proximal<br />
La placa dentobacteriana proximal está situa da en los<br />
espacios interproximales en dirección apical. Aquí<br />
predominan Actinomyces viscosus y Actinomyces naeslundii.<br />
Pero también se detectan Streptococcus sanguis,<br />
Actinomyces israelii, especies de Veillonella y algunos<br />
bacilos gramnegativos anaerobios estrictos como las<br />
especies de Selenomonas, Porphyromonas, Prevotella y<br />
Fusobacterium. En las caries activas abundan Streptococcus<br />
mutans y especies de Lactobacillus.<br />
Placa dentobacteriana radicular<br />
Ésta se desarrolla cuando el cemento radicular se expone<br />
al microambiente bucal, ya sea por retracción<br />
gingival en edad avanzada o por en fermedades del periodonto.<br />
También se forma en áreas interproximales<br />
y a lo largo de la unión cemento-esmalte.<br />
Los microorganismos importantes en la for mación<br />
de esta placa dentobacteriana son Streptococcus sanguis,<br />
Actinomyces viscosus y especies de Capnocytophaga,<br />
independientemente de que esta placa se mineraliza<br />
con facilidad.<br />
Metabolismo de la placa<br />
dentobacteriana<br />
La principal fuente de energía de la placa dentobacteriana<br />
son los alimentos con alto con tenido de hidratos<br />
de carbono.<br />
Las bacterias degradan las sustancias orgá nicas y<br />
las reducen a metabolitos, y de ese modo producen<br />
energía. Por otra parte, desarrollan funciones de síntesis,<br />
en las cuales se generan moléculas complejas y<br />
se consume energía.<br />
Los hidratos de carbono de alto peso molecu lar,<br />
como los polisacáridos, no pueden difun dirse con facilidad<br />
a través de la placa dento bacteriana. En cambio, los<br />
disacáridos, como la sacarosa (glucosa y fructosa) y la<br />
lactosa (glu cosa y maltosa), se metabolizan con rapidez<br />
y así dan lugar a la formación de ácidos. La pro ducción<br />
de ácido láctico aumenta mucho en las siguientes circunstancias:<br />
predominio de bac terias cariogénicas,<br />
buen aporte de glucosa y baja tensión de oxígeno.<br />
Streptococcus mutans produce polisacáridos extracelulares<br />
que se sintetizan fuera de la célula. Cuando<br />
faltan azúcares, utiliza polisacáridos de la matriz de<br />
la placa dentobacteria na. Pero cuando hay exceso de<br />
azúcares, los transforma en polisacáridos intracelulares,<br />
los cuales constituyen una reserva de energía para<br />
que la célula cubra sus necesidades metabólicas y siga<br />
produciendo ácido; esto explica la disminución del<br />
pH en personas que se en cuentran en ayunas.
Placa dentobacteriana 73<br />
Otras bacterias utilizan proteínas como fuen te de<br />
energía y generan bases que aumentan el pH, aunque<br />
pueden propiciar la precipitación de calcio y fosfato<br />
como tártaro dental.<br />
La placa dentobacteriana adquiere mayor volumen<br />
y se forma más rápido en las superficies poco pulidas o<br />
en maloclusión, así como entre los dientes apiñados.<br />
Dieta y formación de placa<br />
dentobacteriana<br />
La formación de la placa dentobacteriana tiene una<br />
estrecha relación con el tipo de dieta. Al parecer, las<br />
dietas exentas de hidratos de car bono producen una<br />
placa dentobacteriana del gada y sin estructura. Pero si<br />
se ingiere sacarosa, dicha placa se vuelve gelatinosa y<br />
con mucha matriz de polisacáridos extracelulares, y en<br />
caso de que existan estreptococos, que son los agen tes<br />
causales del aumento rápido de estos poli sacáridos:<br />
1. Ocasionan aumento rápido de polisacáridos extracelulares.<br />
2. Propician la adherencia de la placa en super ficies<br />
lisas.<br />
3. Ayudan a retener los productos de la fermentación<br />
ácida en la superficie del diente.<br />
4. Auxilian en la protección de los productos ácidos<br />
de la acción amortiguadora de la sali va.<br />
El desdoblamiento de la sacarosa en glucosa y fructosa<br />
da lugar a liberación de gran canti dad de energía<br />
que se utiliza para formar polisacáridos extracelulares.<br />
Consecuencias de la placa<br />
dentobacteriana<br />
El pH de la placa es neutro o ligeramente ácido en<br />
ayunas, pero al exponerse a los azúcares dis minuye<br />
y se recupera entre los 30 y 60 minutos posteriores<br />
(fig. 6-6). Como es posible observar en la curva de<br />
8.0<br />
Enjuague con glucosa<br />
pH<br />
7.0<br />
6.0<br />
Caries inactivas<br />
Libres de caries<br />
Actividad leve<br />
Actividad moderada<br />
Actividad alta<br />
5.0<br />
4.0<br />
0 10 20 30 40 50 60<br />
Minutos después del enjuague con glucosa<br />
Figura 6-6. Respuesta del pH de la placa al enjuague con glucosa al 10% en relación con la actividad de caries individual.<br />
La curva obser vada es la curva de Stephan (véase el texto). Fuen te: Stephan RM. Intra-oral hydrogenion<br />
concentration associated with dental ca ries activity. J Dent Res, 1944;23:257.
74 Capítulo 6<br />
Stephan, la respuesta varía de acuerdo con las características<br />
individuales:<br />
1. En personas con poca susceptibilidad a la caries,<br />
el pH de reposo se encuentra entre 6.5 y 7.0; después<br />
de enjuagarse la boca con glucosa, el pH de<br />
reposo disminuye hasta 5 y más adelante se recupera.<br />
2. En personas con susceptibilidad elevada a la caries,<br />
el pH disminuye hasta menos de 5 y tarda<br />
más tiempo en recuperarse.<br />
El decremento del pH posterior a la inges tión de<br />
azúcares (como la sacarosa) se debe a la producción<br />
de ácidos bacterianos, sobre todo láctico. Asimismo,<br />
produce desmineralización del esmalte con disolución<br />
de la hidroxiapatita como consecuencia de la difusión<br />
de iones hi drógeno. La cifra de riesgo se denomina<br />
pH crítico y varía entre 5.2 y 5.5; sin embargo,<br />
pue de cambiar según la concentración de iones cal cio<br />
y fosfato en el medio, la capacidad amor tiguadora de<br />
la saliva y el líquido de la placa dentobacteriana.<br />
La cariogenicidad de la placa dentobacte riana depende<br />
del tipo de bacterias que la con forman. Por<br />
ejemplo, Streptococcus mutans y el lactobacilo originan<br />
gran reducción del pH y crecen mejor en presencia<br />
de ácido (son acidógenos y acidúricos), lo cual no<br />
sucede con otras bacterias.<br />
La mineralización de la placa dentobacteria na da<br />
lugar a una masa dura y resistente llama da cálculo o<br />
tártaro dental. La formación de éste se favorece con el<br />
aumento en la concentración de calcio y fósforo; en<br />
cambio, la disminución de esos elementos lleva a desarrollar<br />
caries.<br />
El predominio de bacteroides intermedios, fusobacterias,<br />
veillonellas, treponemas y actinobacilos<br />
posibilita la afección de los tejidos periodontales, y<br />
en consecuencia el desarrollo de gingivitis e incluso<br />
la pérdida dental.<br />
Cálculo, sarro o tártaro dental<br />
El término “cálculo” proviene del latín calculus, que<br />
significa cristal de roca o piedra. El término “tárta ro”<br />
se refiere a un sedimento o incrustación acumula do en<br />
las paredes de un barril o tonel. Éstos, al igual que el<br />
de “sarro”, se manejan indistin tamente y se refieren al<br />
depósito calcificado en dien tes y otras estructuras sólidas.<br />
Se favorece con el tabaquismo y enfermedades<br />
sistémicas, como el asma y la fibrosis quística. Se genera<br />
cuando la saliva tie ne concentraciones saturadas de<br />
iones calcio y fosfa to. Según su localización, puede ser:<br />
1. Supragingival. Se encuentra en las coronas clínicas<br />
de los dientes.<br />
2. Subgingival. Se forma en el margen gingival, el<br />
surco y la bolsa periodontal.<br />
Clínicamente, el tártaro supragingival se identifica<br />
como una masa calcificada unida al esmalte. Su<br />
color varía del blanco al amarillo hasta pardo oscuro,<br />
porque puede pigmentarse con el tabaco o algunos<br />
alimentos. Con frecuencia se localiza en la superficie<br />
vestibular de los primeros molares superiores y en las<br />
su perficies linguales de los incisivos y caninos inferiores;<br />
estos sitios coinciden con la desem bocadura<br />
de los conductos secretores de las glándulas parotídea<br />
(parótida), sublingual y submaxilar (submandibular),<br />
respectivamente.<br />
El tártaro subgingival quizá no se descubra mediante<br />
la observación simple, pero puede detectarse<br />
al separar el margen gingival o con el sondeo. En las<br />
radiografías, se observa como una calcificación que va<br />
unida al diente.<br />
Composición y estructura<br />
El sarro o tártaro dental se compone de sales inorgánicas<br />
(70 a 80%). Los elementos princi pales son el calcio<br />
y el fósforo, aunque también incluye magnesio, carbonatos,<br />
sodio, zinc, man ganeso, cobre y flúor. En sus<br />
formas cristalinas contiene hidroxiapatita, whitlockita<br />
(cristales hexagonales de fosfato de calcio), cristales<br />
de magnesio, fosfato octacálcico y brushita.<br />
La composición del sarro dental cambia con el paso<br />
del tiempo porque los fosfatos de calcio más ácidos se<br />
transforman en hidroxiapatita y whitlockita. La porción<br />
orgánica está constitui da por restos de microorganismos,<br />
células epi teliales descamadas, leucocitos,<br />
mucina, colesterol y fosfolípidos.<br />
Al microscopio es posible obser var la estructura<br />
del tártaro en capas con dife rentes grados de calcificación<br />
y entre dichas capas puede haber líneas de reposo<br />
(fig. 6-7).<br />
En cortes finos, se visualizan numerosos cris tales<br />
inorgánicos en forma de pequeñas agujas, con una
Placa dentobacteriana 75<br />
Figura 6-7. Acreción de sarro sobre esmalte. La matriz orgánica ha sido eliminada con hipoclorito de sodio. Ancho del<br />
campo, 200 mμ. Fuente: Jones SJ. The tooth surface in periodontal disease. Dent Pract, 1972;22:462.<br />
longitud de 5 hasta 100 micras, que según la difracción<br />
electrónica corresponden a la apatita. Otros cristales<br />
tienen aspectos de es camas o de varillas largas.<br />
La orientación de los cristales puede ser aleatoria o<br />
predominante en algún sentido.<br />
El material mineralizado muestra contornos de<br />
microorganismos calcificados.<br />
Por último, la superficie del tártaro dental está cubierta<br />
por una capa de placa dentobac teriana no mineralizada.<br />
Formación<br />
La calcificación gradual de la placa dentobac teriana<br />
permite el desarrollo del tártaro dental. La primera<br />
evidencia de calcificación se obser va a los pocos días,<br />
aunque la formación de un depósito de composición<br />
cristalina requiere meses e incluso años.<br />
El tártaro es difícil de eliminar, ya que se ad hiere<br />
con firmeza a la superficie dental, tal vez porque la película<br />
adquirida por debajo de la pla ca dentobacteriana<br />
también se calcifica y de ese modo los cristales del<br />
tártaro se ponen en con tacto íntimo con los cristales<br />
del esmalte, cemen to o dentina y luego penetran en la<br />
superficie.<br />
Teorías de la mineralización<br />
Los científicos han estudiado durante varios años porqué<br />
los fosfatos de calcio se precipitan como tártaro<br />
dental. De ese modo, han elabo rado varias hipótesis:<br />
1. Anhídrido carbónico. La tensión de CO 2<br />
para la<br />
saliva recién secretada de los conductos salivales<br />
es más o menos de 60 mmHg, y para la saliva<br />
existente en la cavidad bucal es alrededor de 29<br />
mmHg; por ello, el CO 2<br />
de la saliva se escapa<br />
y origina incremento del pH, lo cual a su vez<br />
disminuye la capacidad para contener calcio y<br />
fosfatos en forma ionizada y conduce a la precipitación.<br />
Los pequeños cristales ya formados<br />
sirven de depósito para otros. Esta teoría explica<br />
la presencia de tár taro dental en los sitios cercanos<br />
a la desem bocadura de los conductos de
76 Capítulo 6<br />
las glándulas salivales; pero no aclara cómo se<br />
forma el tártaro subgingival, el cual quizá derive<br />
de las sales del exudado gingival.<br />
2. Aumento del pH de la saliva o de la placa dentobacteriana.<br />
Esto también puede explicarse por<br />
otros mecanismos, como la producción de amoniaco.<br />
Se ha observado que las personas con formación<br />
rápida de tártaro también se cretan saliva<br />
con mayor cantidad de urea. La descomposición<br />
de la urea produce amonia co y éste puede aumentar<br />
el pH de la placa dentobacteriana.<br />
3. Al parecer, las enzimas proteolíticas de la pla ca<br />
dentobacteriana producen aminas, urea y amoniaco.<br />
4. La formación de tártaro dental se relaciona de<br />
manera muy estrecha con la pirofosfatasa. Por<br />
ello, se piensa que el pirofosfato de la saliva y<br />
la placa dentobacteriana mantienen saturada la<br />
concentración de iones calcio y fosfato.<br />
Relación del tártaro dental<br />
con la enfermedad periodontal<br />
Al parecer, el tártaro dental actúa como sitio de retención<br />
para la placa dentobacteriana y ace lera la formación<br />
de ésta al dificultar la eficacia de la higiene bucal.<br />
Además, el tejido calcifica do puede contener productos<br />
tóxicos para los tejidos blandos y obstaculiza la<br />
microcirculación y eliminación de desechos.<br />
Enfermedades periodontales<br />
Las enfermedades periodontales han adquirido gran<br />
importancia porque afectan a un alto porcentaje de la<br />
población y constituyen la primera causa de pérdida<br />
dental.<br />
Consisten en una serie de padecimientos que afectan<br />
al periodonto, es decir, una de las estructuras de<br />
soporte de los dientes: ce mento radicular, ligamento<br />
periodontal, hueso alveolar y encía.<br />
Se deben a infecciones endógenas mixtas que<br />
comprenden a varias especies bacterianas y resultan<br />
del ataque por bacterias que normalmente colonizan<br />
la placa dentobacteriana. Dicho ataque provoca<br />
respuestas inmunes del huésped que causan inflamación<br />
y pueden llevar a la destrucción de los tejidos periodontales.<br />
En condiciones normales, la encía se distingue por<br />
su color rosado, consistencia firme y el festoneado del<br />
margen gingi val. Asimismo, la papila dental es firme,<br />
no sangra al sondear la suavemente y ocupa todo<br />
el espacio disponible bajo el área de contacto de los<br />
dientes vecinos. Sus mecanismos de defensa contra<br />
los microorganismos son:<br />
•<br />
•<br />
•<br />
•<br />
Circulación del fluido crevicular hacia el exterior.<br />
Destrucción de microorganismos en el surco gingival<br />
por medio de neutrófilos y monocitos/macrofagocitos<br />
(macrófagos).<br />
Descamación para desprender los microorganismos<br />
fijados en la superficie celular del epitelio de<br />
unión.<br />
Destrucción de ciertos microorganismos mediante<br />
anticuer pos, el sistema de activación del complemento,<br />
o ambas cosas.<br />
Restricción del crecimiento masivo de los microorganismos<br />
por medio de la microflora normal o<br />
nativa.<br />
•<br />
El periodonto puede afectarse por factores externos,<br />
entre los cuales se encuentra la placa dentobacteriana<br />
debida a falta de higiene bucal y enfermedades<br />
periodontales debidas a otras causas.<br />
Los microorganismos periodontopatógenos actúan<br />
por uno o más de los siguientes mecanismos:<br />
1. Invasión tisular. Por ejemplo, las espiroquetas,<br />
Actinobacillus actinomycetemcomitans y micoplasmas.<br />
2. Producción de toxinas. Algunos microorganismos<br />
producen sus tancias como amoniaco, indol,<br />
sulfuro de hidrógeno y ácido butírico, las cuales<br />
alteran las funciones celulares. Actinobacillus actinomycetemcomitans<br />
sintetiza una leucotoxina<br />
des tructora de neutrófilos y monocitos. Otros<br />
microorganismos pa ralizan la fagocitosis mediante<br />
toxinas.<br />
3. Producción de sustancias que alteran la respuesta<br />
inmunitaria del huésped. Actinobacillus actinomycetemcomitans<br />
activa linfocitos T supresores y<br />
destruye monocitos. Otros microorganismos se<br />
recubren con elementos del huésped en la bolsa.
Placa dentobacteriana 77<br />
Al gunas bacterias pueden neutralizar o degradar<br />
anticuerpos (Porphyromonas gingivalis).<br />
4. Modificación de su estructura antigénica. De esta<br />
manera permiten la continuidad de la infección<br />
aunque el huésped tenga una respues ta inmunitaria<br />
adecuada.<br />
5. El tipo de bacterias en el sitio afectado varía con<br />
el paso del tiempo. Por ello, se producen ciclos<br />
constantes de res puesta inmunitaria, los cuales<br />
con el tiempo dañan a los teji dos implicados.<br />
6. Producción de enzimas bacterianas. Por ejemplo,<br />
Bacteroides melaninogenicus produce enzimas<br />
proteolíticas. Algunas bacterias del surco gingival<br />
pueden hidrolizar la sustancia intercelular<br />
del tejido epitelial y del tejido conectivo (conjuntivo).<br />
Ciertas bacterias en las bolsas periodontales<br />
producen proteasas que pueden degradar<br />
la inmunoglobulina A (IgA), además de otras<br />
inmunoglobulinas y factores de complemento;<br />
esto facilita la penetración de sustan cias potencialmente<br />
tóxicas, enzimas líticas y antígenos<br />
li berados por toda la flora microbiana subgingival.<br />
Las bacterias de diferentes especies son capaces<br />
de reconocerse y adherirse entre sí; a esto se le llama<br />
coagregación y se basa en la interacción específica de<br />
una adhesina proteica de una bacteria y un receptor<br />
carbohidratado o proteico respec tivo sobre la superficie<br />
de otra. Las adhesinas pueden anclarse a la pared<br />
celular o a la membrana plasmática, en tanto que los<br />
receptores por lo general son polisacáridos de la pared<br />
celular que tienen unidades receptivas de sacáridos<br />
específicos para cada cepa.<br />
Se ha encontrado que las bacterias en la biopelícula<br />
(placa dentobacteriana) se agrupan formando complejos.<br />
Además, éstos se relacionan con la secuencia<br />
de colonización en la placa dento bacteriana:<br />
Colonizadores tempranos<br />
Complejo azul<br />
Complejo morado<br />
Complejo verde<br />
varias especies de Actinomyces<br />
Veillonella parvula<br />
Actinomyces odontolyticus<br />
Eikenella corrodens<br />
Capnocytophaga gingivalis<br />
Capnocytophaga sputigena<br />
Complejo amarillo<br />
Colonizadores tardíos<br />
Complejo naranja<br />
Complejo rojo<br />
Factores del huésped<br />
Capnocytophaga ochracea<br />
Capnocytophaga concisus<br />
Actinobacillus<br />
actinomycetemcomitans<br />
(serotipo a)<br />
Streptococcus mitis<br />
Streptococcus oralis<br />
Streptococcus sanguis<br />
Streptococcus gordonii<br />
Streptococcus intermedius<br />
Campylobacter gracilis<br />
Campylobacter rectus<br />
Campylobacter showae<br />
Eubacterium nodatum<br />
(subespecie nucleatum)<br />
Fusobacterium nucleatum<br />
(subespecie polymorphum)<br />
Prevotella intermedia<br />
Peptostreptococcus micros<br />
Prevotella nigrescens<br />
Streptococcus constelatus<br />
Porphyromonas gingivalis<br />
Tannerella forsythensis<br />
(Bacteroides forsythus)<br />
Treponema denticola<br />
Por otra parte, el huésped pone en juego mecanismos<br />
de defen sa. Los vasos del margen gingival se dilatan.<br />
A continuación au menta la permeabilidad vascular,<br />
hay exudado gingival y migración de leucocitos polimorfonucleares<br />
hacia el surco gingival. Estos leucocitos<br />
reconocen el sitio invadido por microorganis mos<br />
y atraviesan la pared de los vasos sanguíneos y migran<br />
a través de los tejidos para fagocitar a los microorganismos.<br />
El exudado gingival contiene factores de complemento<br />
y an ticuerpos específicos. La activación del<br />
complemento se inicia cuando anticuerpos específicos<br />
de las clases IgG o IgM reaccio nan con las bacterias.<br />
Las inmunoglobulinas A, G y M neutralizan a las<br />
endotoxinas liberadas por las bacterias y de ese modo<br />
evi tan daños tisulares.
78 Capítulo 6<br />
Un factor externo que favorece las enfermedades<br />
periodontales es el tabaquismo. Localmente produce<br />
sustancias citotóxicas y vasoconstricción, pero también<br />
tiene efectos sistémicos: inhi be la función de los neutrófilos<br />
de la sangre periférica y oral; disminuye la producción<br />
de células T y anticuerpos, en particu lar de IgG,<br />
y reduce la concentración de minerales en el hueso. La<br />
inflamación del tejido gingival evita la diseminación de<br />
los microorganismos, pero esta reacción puede dañar a<br />
las células y a las estructuras del tejido conectivo (conjuntivo)<br />
circunvecino e incluso al hueso alveolar.<br />
Hay otras enfermedades relacionadas con los cambios<br />
hormo nales, como la pubertad, el ciclo menstrual<br />
y el embarazo, en tre otras.<br />
Las discrasias sanguíneas también se relacionan<br />
con enfermedades periodontales; por ejemplo, la<br />
leucemia monocítica aguda puede acompañarse de<br />
aumento de volumen de la encía, la cual pierde su<br />
puntilleo normal y adquiere aspecto esponjoso. En<br />
ocasiones aparecen seudobolsas muy profundas y hay<br />
aumento de movilidad de los dientes. Los linfonodos<br />
(ganglios linfáticos) aumentan de volumen.<br />
Las personas con neutropenia cíclica experimentan<br />
disminu ción súbita de la cantidad de neutrófilos<br />
circulantes con intervalos de tres semanas; muestran<br />
zonas hiperémicas delimitadas y gingivitis subaguda,<br />
ulceraciones en la encía marginal, o ambos casos.<br />
Los medicamentos como los anticonceptivos orales,<br />
nifedipina, ciclosporinas y difenilhidantoínas favorecen<br />
el agrandamiento gingival.<br />
Si el huésped tiene mala nutrición, en especial deficiencia<br />
de ácido ascórbico, puede padecer una enfermedad<br />
gingival.<br />
En cuanto a las infecciones, hay periodontitis que<br />
no están asociadas a la placa dentobacteriana, sino<br />
que son producidas por microorganismos como Neisseria<br />
gonorrhoeae, Treponema pallidum, estreptococos,<br />
virus del herpes, hongos como Candida albicans<br />
e Histoplasma capsulatum, y virus del papiloma humano,<br />
entre otros.<br />
Los defectos en los dientes, como surcos palatinos<br />
y prolongaciones del esmalte, reacciones alérgicas y<br />
traumatismos, también pueden favorecer el desarrollo<br />
de enfermedades periodontales.<br />
En cuanto al ambiente, las intoxicaciones pueden<br />
afectar al periodonto; por ejemplo, la contaminación<br />
por plomo entre trabajadores dedicados a minería,<br />
fundición, metaliza do al plomo, temple de acero en<br />
baño de plomo, acumula dores, soldadura, cerámica,<br />
alfarería y vidrio, la producción de supercarburantes y<br />
los insecticidas, entre otros. El plomo puede penetrar<br />
al organismo principalmente por el tracto respiratorio<br />
y ocasiona saturnismo: la persona afectada padece astenia<br />
(debilidad), cefalea (dolor de cabeza), anorexia<br />
(falta de apetito), dolor gástrico, estreñimiento y dolores<br />
osteomusculares en los miembros, acompañados<br />
de calambres. En tre los signos clínicos se encuentran<br />
palidez cutánea (faz “café con leche”) y ribete gingival<br />
de Burton, el cual se manifiesta como una banda negra<br />
azulada de más o menos 2 mm de ancho en la encía<br />
marginal, y anemia. El cólico saturnino es clásico<br />
y se acompaña de vómito y estreñimiento.<br />
Clasificación de las enfermedades<br />
periodontales<br />
Hace años, las enfermedades periodontales se clasificaban<br />
en:<br />
• Gingivitis. Presencia de inflamación gingival sin<br />
pérdida del tejido conectivo (conjuntivo).<br />
• Periodontitis. Inflamación gingival asociada a la<br />
presencia de bolsas periodontales y pérdida de<br />
hueso al veolar.<br />
• Periodontosis. Máxima inflamación gingival y pérdida<br />
rápida del hueso alveolar.<br />
Esta clasificación se basó en las observaciones de<br />
los pa cientes: inicialmente se presenta la gingivitis,<br />
con signos de inflamación aguda, dilatación vascular,<br />
aumento del espacio in tercelular y abundantes leucocitos<br />
polimorfonucleares y linfocitos T; más adelante<br />
aumentan los linfocitos B y los plasmocitos (células<br />
plasmáticas) que se diferencian y producen inmunoglobulinas<br />
(anticuerpos).<br />
Al progresar a periodontitis se destruyen las fibras<br />
periodontales y se presenta un infiltrado inflamatorio<br />
que contiene linfocitos, macrofagocitos (macrófagos),<br />
leucocitos polimorfonucleares y plasmocitos (células<br />
plasmáticas) (fig. 6-8).<br />
En pacientes con enfermedades periodontales<br />
graves se ha encontrado alteración de los neutrófilos<br />
(neutropenia) y de la quimiotaxis, entre otras.
Placa dentobacteriana 79<br />
Tártaro<br />
Bolsa periodontal<br />
Infiltrado inflamatorio<br />
Lisis de fibras colágenas<br />
Inserción epitelial<br />
Resorción de la cresta<br />
alveolar<br />
Figura 6-8. Se observa el periodonto en la enfermedad periodontal inflamatoria. Nótese el infiltrado inflama torio, la lisis<br />
de las fibras colágenas, la resorción ósea y la migración de la adherencia epitelial (formación de bolsa).<br />
Los macrofagocitos (macrófagos) pueden perpetuar<br />
la inflamación y destrucción del tejido a través<br />
de las citocinas. Entre las más importantes en la periodontitis<br />
se hallan:<br />
• La interleucina 1 (IL-1). Activa a los osteoclastos,<br />
así como la producción de colagenasas y prostaglandina<br />
E, estimula la resorción ósea, activa las<br />
metaloproteasas (MMP), que están implicadas en<br />
la degradación de componentes de la matriz extracelular,<br />
e inhibe la síntesis de colágena causando<br />
destruc ción del hueso.<br />
• El factor de necrosis tumoral (TNF). Junto con la interleucina<br />
1 (IL-1) produce destrucción del hueso<br />
y del tejido conectivo (conjuntivo) en respuesta a la<br />
presencia de bacterias.<br />
Hay polimorfismos genéticos que influyen en la<br />
expresión de IL-1 y TNF.<br />
En 1986, la American Academy of Periodontology<br />
(AAP) los clasificó de la siguiente manera:<br />
1. Periodontitis juvenil.<br />
a) Periodontitis prepuberal.<br />
b) Periodontitis juvenil localizada.<br />
c) Periodontitis juvenil generalizada.<br />
2. Periodontitis del adulto.<br />
3. Gingivoperiodontitis ulceronecrosante.<br />
4. Periodontitis refractaria.<br />
En 1989 se cambiaron como sigue:<br />
1. Periodontitis del adulto.<br />
2. Periodontitis de inicio temprano.<br />
a) Periodontitis prepuberal.<br />
Ñ Generalizada.<br />
Ñ Localizada.<br />
b) Periodontitis juvenil.<br />
Ñ<br />
Generalizada.<br />
Ñ<br />
Localizada.<br />
c) De progreso rápido.<br />
3. Periodontitis asociada a enfermedades sistémicas.<br />
4. Periodontitis ulceronecrosante.<br />
5. Periodontitis refractaria.<br />
Gingivitis<br />
1. Ulceronecrosante aguda.<br />
2. Influida por hormonas esteroides.<br />
3. Hiperplasia gingival influida por medicamentos.<br />
4. Asociada a enfermedades sistémicas.<br />
5. Otras (trastornos sanguíneos, deficiencias nutricias,<br />
tumores, genéticas, respiración bucal, infecciones).<br />
La periodontitis del adulto es de evolución lenta y<br />
continua. Algunas bacterias asociadas son: Porphyro-
80 Capítulo 6<br />
monas gingivalis, Tannerella forsythensis y Treponema<br />
denticola.<br />
La periodontitis prepuberal es rara e inicia con<br />
la erupción de los dientes primarios. Su forma generalizada<br />
se caracteriza por inflamación gingival<br />
intensa, pérdida rápida de hueso, movili dad y pérdida<br />
de los dientes; hay defectos de los leucocitos polimorfonucleares<br />
y mononucleares. La forma localizada<br />
afecta sólo algunos de los dientes primarios y es<br />
menos agresiva.<br />
La periodontitis juvenil generalizada ocurre entre<br />
los 12 y 30 años de edad y se caracteriza por destrucción<br />
periodontal rápida y notable alrededor de<br />
la mayoría de los dientes; se acompaña de trastorno<br />
quimiotáctico de los neutrófilos y predominan Porphyromonas<br />
gingivalis y Eikenella corrodens.<br />
La periodontitis juvenil localizada inicia alrededor<br />
de la pubertad y se caracteriza por defectos graves del<br />
hueso en la zona de los primeros molares permanentes<br />
y en ocasiones en los incisivos. No se relaciona con<br />
la cantidad de placa dentobacteriana, que puede ser<br />
escasa; afecta con más frecuencia al sexo femenino<br />
y la raza negra. Puede tener base genética, heredada<br />
como característica dominante ligada al cromosoma<br />
X o como característica autosómica recesiva. Los neutrófilos<br />
tienen deprimida la fagocitosis. Predomina<br />
Actinobacillus actinomycetemcomitans.<br />
La periodontitis de progreso rápido ocurre entre<br />
los 20 y los 30 años de edad. Hay inflamación gingival<br />
intensa y pérdida rápida de inserción y del soporte del<br />
hueso alveolar. El 60% de las personas afectadas tiene<br />
suprimida la respuesta quimiotáctica de los neutrófilos.<br />
Predo minan Porphyromonas gingivalis, Prevotella<br />
intermedia, Eikenella corrodens, Eubacterium brachy,<br />
Eubacterium nodatum, Eubacterium timidum y Campylobacter<br />
rectus.<br />
Periodontitis asociada a enfermedades sistémicas<br />
Puede asociarse a diabetes mellitus, síndrome de<br />
Down, síndrome de Papillon Lefèvre, síndrome<br />
de Chédiak-Higashi y sida, entre otras.<br />
La diabetes mellitus es una enfermedad muy frecuente<br />
y pue de favorecer el desarrollo de enfermedad<br />
periodontal debido a alteraciones en el metabolismo<br />
de la glucosa. Es una enfermedad crónica hereditaria<br />
con carácter recesivo. Por lo general se manifiesta en<br />
la edad adulta (diabetes tipo 2), aunque la dia betes juvenil<br />
(tipo 1) se presenta en niños y jóvenes.<br />
El Comité de Expertos en diabetes mellitus y otras<br />
catego rías de intolerancia a la glucosa (1985), perteneciente<br />
a la Organización Mundial de la Salud (OMS),<br />
formuló la siguiente clasificación:<br />
1. Clases clínicas.<br />
A. Diabetes mellitus.<br />
a) Diabetes insulinodependiente (tipo 1).<br />
b) Diabetes no insulinodependiente (tipo 2).<br />
alfa: con obesidad.<br />
beta: sin obesidad.<br />
c) Diabetes relacionada con mala nutrición.<br />
d) Otros tipos de diabetes en ciertos estados y<br />
síndromes.<br />
B. Disminución de la tolerancia a la glucosa.<br />
C. Diabetes mellitus del embarazo.<br />
2. Clases de riesgo estadístico:<br />
Se refieren a los individuos con tolerancia normal<br />
a la glucosa pero considerablemente predispuestos<br />
a la diabetes; por ejemplo, personas con<br />
antecedentes de hiperglicemia.<br />
En la diabetes, al parecer el páncreas no produce<br />
la canti dad necesaria de insulina para regular el metabolismo<br />
de los hidratos de carbono, básicamente de<br />
la glucosa, o el organis mo no la metaboliza en forma<br />
adecuada. Ésta, a su vez, no puede pasar a la célula,<br />
por lo cual aumenta su concentración en la sangre y se<br />
elimina por la orina junto con grandes cantidades de<br />
agua. Por tanto, se experimenta mucha sed, y ante la<br />
carencia de glucosa, las células empiezan a utilizar grasas<br />
y proteínas; así, el individuo va perdiendo peso.<br />
La falta de tratamiento de esta enfermedad permite<br />
la aparición de neuropatía, microangiopatía y arterioesclerosis,<br />
las cuales pueden repercutir de manera<br />
negativa en el riñon, el corazón y los ojos; también<br />
disminuye la capacidad para responder a infecciones.<br />
Los pacientes diabéticos pueden desarrollar enfermedades<br />
periodontales porque disminuye la actividad<br />
quimiotáctica y fagocitaria en los leucocitos polimorfonucleares.<br />
Se ha observado gingivitis en el embarazo: la encía<br />
margi nal y las papilas aumentan de volumen, enrojecen<br />
y sangran con facilidad.
Placa dentobacteriana 81<br />
Periodontitis ulcerativa necrosante (PUN)<br />
En esta en fermedad hay factores predisponentes,<br />
como la infección por el virus de la inmunodeficiencia<br />
adquirida (VIH), desnu trición, higiene oral deficiente,<br />
estrés, sueño inadecuado, tabaquismo e ingestión<br />
de alcohol.<br />
La enfermedad es aguda, con úlceras gingivales,<br />
sangrado, do lor y destrucción de los tejidos periodontales.<br />
Predominan especies de Treponema, Selenomonas,<br />
Fusobacterium y Prevotella intermedia.<br />
La periodontitis refractaria se caracteriza porque<br />
no desaparece con el tratamiento.<br />
La gingivitis ulceronecrosante aguda (GUNA)<br />
tiene inicio rápido, se manifiesta por la aparición de<br />
úlceras cubiertas con residuos blanco-amarillentos o<br />
grisáceos, dolorosas al tacto y de fácil sangrado.<br />
Tomando en consideración que la gingivitis no<br />
siempre evoluciona a periodontitis, que hay enfermedades<br />
periodontales no asociadas a grandes cantidades<br />
de placa y que las enfermedades periodontales<br />
tienen etiología multifactorial muy amplia, en 1999<br />
el International Workshop for a Classification of Periodontal<br />
Diseases and Conditions elaboró la siguiente<br />
clasificación:<br />
I. Enfermedades gingivales.<br />
A. Enfermedades gingivales inducidas por placa<br />
dentobacteriana.<br />
1. Gingivitis asociada sólo a placa dentobacteriana.<br />
a. sin otros factores locales<br />
b. con factores locales contribuyentes<br />
(véase sección VIII, parte A)<br />
2. Enfermedades gingivales modificadas<br />
por factores sistémicos.<br />
a. asociadas al sistema endocrino<br />
i. gingivitis asociada a la pubertad<br />
ii. gingivitis asociada al ciclo menstrual<br />
iii. asociadas al embarazo<br />
• gingivitis<br />
• granuloma piógeno<br />
iv. gingivitis asociada a diabetes mellitus<br />
b. asociadas a discrasias sanguíneas<br />
i. con leucemia<br />
ii. otras<br />
3. Enfermedades gingivales causadas por<br />
medicamentos.<br />
a. influida por drogas<br />
i. por agrandamiento gingival<br />
ii. por drogas<br />
• asociadas a los anticonceptivos<br />
orales<br />
• otras<br />
4. Enfermedades gingivales provocadas por<br />
mala nutrición<br />
a. gingivitis por deficiencia de ácido ascórbico<br />
b. otras<br />
B. Lesiones gingivales no asociadas a placa.<br />
1. Enfermedades gingivales de origen bacteriano<br />
específico.<br />
a. por Neisseria gonorrhoeae<br />
b. por Treponema pallidum<br />
c. por especies de estreptococo<br />
d. otras<br />
2. Enfermedades gingivales de origen viral.<br />
a. por herpes virus<br />
gingivoestomatitis herpética primaria<br />
herpes oral recurrente<br />
infecciones por varicela zoster<br />
b. otras<br />
3. Enfermedades gingivales de origen micótico.<br />
a. por especies de Candida<br />
candidiasis gingival generalizada<br />
eritema gingival lineal<br />
histoplasmosis<br />
otras<br />
4. Lesiones gingivales de origen genético.<br />
a. fibromatosis gingival hereditaria<br />
b. otras<br />
5. Manifestaciones gingivales de condiciones<br />
sistémicas.<br />
a. trastornos mucocutáneos<br />
liquen plano<br />
penfigoide
82 Capítulo 6<br />
pénfigo vulgar<br />
eritema multiforme<br />
lupus eritematoso<br />
por drogas<br />
otros<br />
b. reacciones alérgicas<br />
i) materiales de restauraciones dentales<br />
níquel<br />
mercurio<br />
acrílico<br />
otros<br />
ii) reacciones atribuidas a:<br />
dentífricos<br />
enjuagues bucales<br />
aditivos de goma de mascar<br />
aditivos de alimentos<br />
iii) otros<br />
6. Lesiones traumáticas.<br />
a. lesión química<br />
b. lesión física<br />
c. lesión térmica<br />
7. Reacciones a cuerpos extraños.<br />
8. No especificada.<br />
II. Periodontitis crónica.<br />
A. Localizada.<br />
B. Generalizada.<br />
III. Periodontitis agresiva.<br />
A. Localizada (LAP).<br />
B. Generalizada (GAP).<br />
IV. Periodontitis como manifestación de enfermedades<br />
sistémicas.<br />
A. Asociada a trastornos hematológicos.<br />
1. Neutropenia adquirida.<br />
2. Leucemias.<br />
3. Otros.<br />
B. Asociada a trastornos genéticos.<br />
1. Neutropenia cíclica y familiar.<br />
2. Síndrome de Down.<br />
3. Síndrome de deficiencia de adhesión leucocitaria.<br />
4. Síndrome de Papillon-Lefèvre.<br />
5. Síndrome de Chédiak-Higashi.<br />
6. Síndromes de histiocitosis.<br />
7. Enfermedad de almacenaje de glucógeno.<br />
8. Agranulocitosis genética infantil.<br />
9. Síndrome de Cohen.<br />
10. Síndrome de Ehlers-Danlos (tipos IV y<br />
VIII).<br />
11. Hipofosfatasia.<br />
12. Otros.<br />
C. No especificados.<br />
V. Enfermedades periodontales necrosantes.<br />
A. Gingivitis ulcerativa necrosante (GUN).<br />
B. Periodontitis ulcerativa necrosante (PUN).<br />
VI. Abscesos del periodonto.<br />
A. Absceso gingival.<br />
B. Absceso periodontal.<br />
C. Absceso pericoronal.<br />
VII. Periodontitis asociada a lesiones endodónticas.<br />
A. Lesiones combinadas endodóncico-periodontales.<br />
VIII. Condiciones del desarrollo o deformidades adquiridas.<br />
A. Periodontitis y enfermedades gingivales debidas<br />
a fac tores que favorecen la formación<br />
de placa.<br />
1. Factores anatómicos del diente.<br />
2. Restauraciones dentales.<br />
3. Fracturas.<br />
4. Resorción cervical y fractura del cemento.<br />
B. Deformaciones mucogingivales y alrededor<br />
de los dientes.<br />
1. Recesión gingival.<br />
a. en las superficies<br />
b. interproximal<br />
2. Falta de encía queratinizada.<br />
3. Disminución de la profundidad del vestíbulo.<br />
4. Inserción aberrante del frenillo.<br />
5. Exceso de dimensiones gingivales.<br />
a. seudobolsas<br />
b. margen gingival inconsistente<br />
c. sonrisa gingival<br />
d. agrandamiento gingival<br />
6. Coloración anormal.<br />
C. Deformidades mucogingivales y condiciones<br />
sobre el reborde edéntulo.<br />
1. Deficiencia del reborde en sentido vertical<br />
u horizontal.
Placa dentobacteriana 83<br />
2. Falta del tejido gingival queratinizado.<br />
3. Agrandamiento del tejido blando gingival.<br />
4. Inserción aberrante del frenillo.<br />
5. Disminución de la profundidad del vestíbulo.<br />
6. Coloración anormal.<br />
D. Trauma oclusal.<br />
1. Primario.<br />
2. Secundario.<br />
Esta clasificación incluye las respuestas inflamatorias<br />
e inmunológicas del huésped.<br />
Pigmentaciones dentales frecuentes<br />
Las manchas o pigmentaciones dentales se re lacionan<br />
con depósitos incrustados que, de no ser eliminados,<br />
pueden constituir un factor etiológico de caries y problemas<br />
gingivales. Algu nas manchas aparecen por<br />
falta de higiene bucal adecuada; por ello, el paciente<br />
debe aprender a realizar un buen cepillado, utilizando<br />
dentífri co con abrasivo ligero y fluoruro.<br />
Según la adherencia, las manchas se clasifi can en:<br />
1. Adheridas directamente a las superficies de los<br />
dientes.<br />
2. Contenidas en el sarro dental y depósitos blandos.<br />
3. Incorporadas en la estructura dental.<br />
De acuerdo con el origen, las pigmentacio nes pueden<br />
ser:<br />
1. Endógenas. Se forman dentro del diente; por<br />
ejemplo, las coloraciones anormales de la dentina<br />
se aprecian a través del esmalte.<br />
2. Exógenas. Se originan fuera del diente. Éstas a su<br />
vez pueden ser:<br />
A. Extrínsecas. Los factores predisponentes de<br />
este tipo de pigmentaciones son la aspereza<br />
del esmalte, la composición de la saliva, el flujo<br />
salival y la higiene bucal inadecuada, entre<br />
otros. La persona afec tada o el odontólogo<br />
pueden eliminarlas.<br />
B. Intrínsecas. A pesar de tener origen exógeno,<br />
se incorporan a la estructura dental y ni el<br />
paciente ni el odontólogo pueden eliminarlas<br />
mediante el pulido o el raspado.<br />
Otra clasificación se orienta hacia la preven ción e<br />
incluye:<br />
1. Pigmentaciones hereditarias. Dependen de los<br />
genes.<br />
2. Pigmentaciones congénitas. La herencia es normal,<br />
pero a veces la mujer embarazada o el niño<br />
en desarrollo reciben algún medica mento, como<br />
tetraciclinas o fluoruros (yatrogenia), que les<br />
produce manchas:<br />
A. Durante el desarrollo o la maduración.<br />
B. Relacionadas con ingestión de fármacos.<br />
3. Pigmentaciones ambientales.<br />
A. Dentición permanente en desarrollo.<br />
B. Eventos normales.<br />
a. Envejecimiento.<br />
b. Líneas de fractura.<br />
c. Atrición.<br />
d. Abrasión.<br />
e. Erosión.<br />
C. Incursiones patológicas.<br />
a. Caries.<br />
b. Cambios pulpares.<br />
D. Manchas.<br />
a. Alimentos.<br />
b. Fármacos.<br />
c. Bacterianas pigmentarias.<br />
d. Metales.<br />
e. Yatrogénicas.<br />
Las manchas o pigmentaciones más frecuen tes son:<br />
Mancha verde<br />
Es más frecuente entre los niños. Aparece cerca de la<br />
encía en zonas cervicales de las caras la biales de los<br />
dientes maxilares anteriores, y se relaciona con la cutícula<br />
dental primaria. Tiene forma de media luna; su<br />
color varía del verde claro al verde oscuro. Está compuesta<br />
por elementos inorgánicos y bacterias cromógenas.<br />
Por lo general se relaciona con higiene bucal<br />
inade cuada e irregularidades superficiales.<br />
Mancha en forma de línea negra<br />
Se presenta en personas de cualquier edad. Se observa<br />
como una banda delgada y continua a lo largo del<br />
margen gingival de las superficies lingual y bucal. Se
84 Capítulo 6<br />
debe a la acumulación de compuestos de hierro (sulfuro<br />
férrico) en la sali va o líquido gingival, que se incrustan<br />
en la pla ca dentobacteriana y las bacterias de<br />
ésta.<br />
Mancha naranja<br />
Es poco frecuente y por lo general aparece en niños<br />
como una línea delgada en el tercio cer vical de los incisivos.<br />
Se atribuye a bacterias cromógenas y se relaciona<br />
con higiene bucal deficiente.<br />
Mancha de tabaco<br />
Se presenta en personas que fuman o mastican tabaco.<br />
Es de color pardo claro a pardo oscuro e incluso<br />
negro. Cubre el tercio cervical o la mitad de la superficie<br />
en la mayor parte de los dien tes. Se localiza sobre<br />
todo en las caras linguales de los dientes, así como en<br />
fisuras, fosetas y otras irregularidades del esmalte. La<br />
aparición de las manchas se relaciona de manera directa<br />
con la cantidad de tabaco consumido. Si estas<br />
manchas son muy densas, pueden penetrar en el esmalte<br />
y tornarse intrínsecas.<br />
Manchas de alimentos<br />
Se relacionan con el consumo de determinados alimentos,<br />
entre ellos té, café, bebidas de cola, moras,<br />
especias y caramelos pigmentados. Tie nen la misma<br />
distribución que las manchas de tabaco y su color varía<br />
de pardo claro a oscuro.<br />
Manchas metálicas<br />
Estas manchas se observan entre los trabajadores industriales.<br />
El color de pende del metal ingerido; por<br />
ejemplo, se torna verde o azul verde cuando se ingiere<br />
cobre o bronce y pardo en el consumo excesivo de<br />
hierro.<br />
Manchas por fármacos<br />
Se deben a uso prolongado de antibióticos o de sustancias<br />
contra la placa dentobacteriana. El fluoruro<br />
de estaño puede producir también manchas, igual que<br />
sustancias con actividad antiplaca.<br />
Manchas patológicas<br />
Algunas manchas se presentan alrededor de restauraciones<br />
defectuosas e indican caries.
Capítulo 7<br />
Ecología, demografía y salud 85<br />
Ecología,<br />
demografía y salud<br />
Ecología<br />
La ecología es la ciencia que estudia la relación entre<br />
los seres vivos y su ambiente.<br />
Niveles de organización ecológica<br />
Las categorías crecientes de complejidad en la organización<br />
de los seres vivos se denominan niveles de organización<br />
ecológica y son químicos o moleculares, célula,<br />
tejido, órgano, sistema, in dividuo, población, comunidad,<br />
ecosistema y biosfera. La ecología estudia todos esos<br />
nive les, aunque hace hincapié en los últimos cua tro.<br />
Población<br />
La población es un grupo de individuos de la misma<br />
especie (seres humanos, animales, plan tas, microorganismos).<br />
Por ejemplo, la pobla ción humana es el<br />
número de personas que vi ven en un lugar y tiempo<br />
determinados.<br />
El lugar y el entorno (vivo o no vivo) donde vive la<br />
población se denomina hábitat. En éste no se especifica<br />
la función que cumple dicha población.<br />
El nicho ecológico es el lugar definido por una especie<br />
en el medio donde ella vive, por sus comportamientos<br />
alimentarios, reproductivos y territoriales,<br />
entre otros factores. Dos especies no pueden vivir en<br />
un solo nicho ecológico, pero una sola especie puede<br />
ocupar diferentes nichos.<br />
Comunidad<br />
El conjunto de poblaciones de un área determi nada<br />
constituye la comunidad. Asimismo, los organismos<br />
(p. ej., planta, animal o microorganismo) que se encuentran<br />
más o menos asociados en un área o hábitat<br />
determinado con forman la comunidad biótica. Cada<br />
especie de organismo integrante de una comunidad<br />
es in fluido en su existencia y actividad no sólo por el<br />
medio inanimado físico y químico, sino tam bién por<br />
otras especies de la comunidad.<br />
La interacción entre las diferentes especies de una<br />
comunidad se llama simbiosis, ya sea positiva o negativa.<br />
Ecosistema<br />
El ecosistema es la unidad funcional básica de interacción<br />
de los organismos vivos entre sí y de éstos con el<br />
ambiente, en un espacio deter minado y en cierto periodo<br />
de tiempo. En él se integran elementos vivientes<br />
(bióticos) y no vivientes (abióticos), los cuales actúan<br />
en forma recípro ca en ciclos para mantener la estabilidad<br />
del sistema (p. ej., un estanque, una ciudad, un<br />
virus dentro de una célula, un bosque, una la guna,<br />
un desierto y una selva).<br />
La parte viva del ecosistema, es decir, el con junto<br />
de seres vivos, se denomina biocenosis y el medio inorgánico<br />
que le sirve de sustrato se lla ma biotopo.<br />
Los factores físicos de un ecosistema son luz solar,<br />
temperatura, atmósfera, agua, suelo y fuego. Los<br />
factores biológicos son las cadenas de vida o cadenas<br />
alimentarias por donde circula la energía.<br />
La cadena alimentaria es el paso de la energía por<br />
diversos organismos, y obedece a las leyes de la termodinámica<br />
o de la conservación de la energía:
86 Capítulo 7<br />
1. Primera ley de la termodinámica. La energía no se<br />
crea ni se destruye, sólo se transforma de una variedad<br />
a otra; asimismo, disminuye la cantidad<br />
útil, parte se degrada en calor y parte se disipa.<br />
De esa manera, en la fotosín tesis se usa 3% de<br />
la energía luminosa total que llega a la Tierra.<br />
Cuando un animal in giere una planta (o cuando<br />
una bacteria la descompone), las sustancias orgánicas<br />
se oxidan y se libera la misma cantidad<br />
de ener gía utilizada para sintetizar la primera<br />
sustancia.<br />
2. Segunda ley de la termodinámica. Parte de la<br />
energía liberada durante la oxidación de sustancias<br />
orgánicas aparece en forma de calor. Si<br />
el animal mencionado en el punto ante rior es<br />
devorado por otro, se produce un nuevo decremento<br />
de energía útil y el segun do animal oxida<br />
las sustancias del primero para liberar energía<br />
que le permite sinteti zar sus propios constituyentes<br />
celulares.<br />
Los organismos involucrados en la cadena alimentaria<br />
son de dos tipos:<br />
1. Autótrofos. Capaces de sintetizar su pro pio alimento<br />
y sólo necesitan agua, CO 2<br />
, sales inorgánicas<br />
y una fuente de energía, y pueden ser de<br />
dos clases:<br />
A. Fotosintéticos. Obtienen energía de la luz solar<br />
para sintetizar moléculas orgánicas. Aquí se<br />
incluyen bacterias púrpura y plantas verdes.<br />
Las bacterias púrpura poseen pigmentos que<br />
les permiten aprovechar la energía de la luz y<br />
“fijar el bióxido de carbono (CO 2<br />
) como carbohidrato”;<br />
pero en esta reacción no se produce<br />
O 2<br />
y por ello usan ácido sulfúrico o hidrógeno<br />
en lugar de moléculas de agua utilizadas<br />
en la fotosíntesis por las plantas verdes.<br />
B. Quimiosintéticos. Algunas bacterias obtie nen<br />
energía por medio de la oxidación de sustancias<br />
inorgánicas. Por ejemplo, las bacterias del<br />
nitrito (nitrosomonas) oxidan el amoniaco<br />
para formar nitritos.<br />
2. Organismos heterótrofos. Son incapaces de sintetizar<br />
sus propios alimentos a partir de materiales<br />
inorgánicos, por lo cual necesitan vivir a<br />
expensas de los autótrofos o de mate ria orgánica.<br />
Todos los animales (y entre ellos el ser humano),<br />
los hongos y la mayoría de las bacterias son heterótrofos.<br />
La nutrición heterotrófica puede ser de<br />
tres tipos:<br />
A. Nutrición holozoica. El alimento se obtiene en<br />
forma de partículas sólidas que deben comerse,<br />
desdoblarse y absorberse. Así ocurre con<br />
casi todos los animales: los herbívoros comen<br />
plantas y obtienen compo nentes energéticos<br />
del contenido de las células vegetales; los carnívoros<br />
consiguen nutrimentos de organismos<br />
animales, y los omnívoros obtienen nutrimentos<br />
de animales y vegetales.<br />
B. Nutrición saprófita. Los organismos con este<br />
tipo de nutrición son incapaces de ob tener<br />
nutrimentos por procesos autótrofos e ingerir<br />
alimentos sólidos. Absorben sustancias<br />
nutritivas de manera directa o a través de su<br />
membrana celular, y sólo pue den desarrollarse<br />
en cuerpos de animales o vegetales en descomposición.<br />
Los orga nismos con este tipo<br />
de nutrición son, en tre otros, las levaduras,<br />
los mohos y casi todas las bacterias. Las levaduras<br />
obtie nen energía sólo a partir de sales<br />
inorgánicas, oxígeno y alguna clase de azúcar,<br />
y así sintetizan todas las demás sustancias necesarias<br />
para la vida (proteínas, grasas, ácidos<br />
nucleicos, vitaminas, etc.); en un medio con<br />
abundancia de oxígeno oxidan la glucosa hasta<br />
CO 2<br />
y agua, pero en el medio con escasez de<br />
oxígeno fermentan la glucosa formando CO 2<br />
y alcohol.<br />
C. Parasitismo. El parásito vive sobre el cuerpo<br />
o dentro del cuerpo de una planta o animal<br />
(huésped) y así obtiene alimento. Algunos parásitos<br />
ingieren, y digieren par tículas sólidas o<br />
absorben moléculas or gánicas a través de sus<br />
paredes celulares a partir de líquidos o tejidos<br />
del huésped. Otros causan enfermedades<br />
conocidas y destruyen células del huésped o<br />
produ cen sustancias tóxicas para dicho huésped.<br />
El total de organismos autótrofos y heterótro fos recibe<br />
el nombre de biomasa.<br />
La cadena más simple está constituida por dos eslabones:<br />
plantas verdes que efectúan fo tosíntesis (pro-
Ecología, demografía y salud 87<br />
ductores) y microorganismos que obtienen nutrimentos<br />
a partir de estas plantas o por desdoblamiento o<br />
descomposición que sufren al morir (consumidores).<br />
Otras cadenas más complejas incluyen cua tro:<br />
1. Primer eslabón. Sustancias abióticas o inertes necesarias<br />
para los seres vivos; por ejemplo, gases,<br />
compuestos y minerales.<br />
2. Segundo eslabón. Plantas autótrofas (productores),<br />
las cuales transforman la energía so lar en<br />
energía química.<br />
3. Tercer eslabón. Animales herbívoros (consumidores<br />
primarios) y animales carnívoros (consumidores<br />
secundarios).<br />
4. Cuarto eslabón. Microorganismos de la descomposición<br />
(heterótrofos). Éstos descompo nen<br />
animales y vegetales muertos en sustan cias básicas<br />
inorgánicas, las cuales van a constituir de<br />
nuevo el primer eslabón. Tam bién se denominan<br />
microconsumidores.<br />
Por otra parte, un organismo heterótrofo rara vez<br />
recurre a un solo alimento y casi siempre consume<br />
autótrofos y heterótrofos al mismo tiempo; así genera<br />
tramas alimentarias. Por ejem plo, el ser humano:<br />
Plantas microscópicas → zooplancton herbívoro<br />
(autótrofo y heterótrofo) → zooplancton carnívoro<br />
(celenterados) → pez pequeño → pez grande →<br />
aves y mamíferos → microorganismos de<br />
la descomposición.<br />
En cada etapa sucesiva de las cadenas ali mentarias,<br />
el número y la masa de los organis mos se limitan<br />
por la cantidad de energía dis ponible, pues en cada<br />
transformación parte de la energía se convierte en calor<br />
y las etapas se reducen de manera progresiva. Por<br />
ejemplo, los vegetales necesitan más de 1 g de sales<br />
minera les, agua y CO 2<br />
para producir 1 g de materia<br />
vegetal: 1 g de materia vegetal no es suficiente para<br />
producir 1 g de materia animal, y así sucesivamente<br />
en cada eslabón o nivel trófico. Esta relación se denomina<br />
pirámide alimentaria; la base de dicha pirámide<br />
está constituida por organismos autótrofos y el vértice<br />
por microor ganismos de la descomposición.<br />
Biosfera<br />
Los ecosistemas se asientan en la capa de la Tie rra<br />
(suelo, aire y agua), es decir, en la biosfera.<br />
Ecosistema bucal<br />
La boca es una cavidad natural que constituye un<br />
ecosistema abierto con interacción di námica. Este ecosistema<br />
varía de persona a per sona e incluso en el<br />
mismo individuo durante el día, pues los nutrimentos<br />
y microorganismos son introducidos y retirados en<br />
muchas ocasio nes. Para su estudio es necesario considerar:<br />
características del huésped (hospedero) y los<br />
microorganismos, así como factores fisicoquímicos.<br />
Características del huésped<br />
(hospedero)<br />
Los factores del individuo que limitan la multiplicación,<br />
el establecimiento y la penetración de microorganismos<br />
son:<br />
1. Integridad de la mucosa. La mucosa bucal ín tegra<br />
actúa como barrera mecánica que impide la penetración<br />
de los microorganis mos. En su superficie<br />
se encuentran además la fibronectina y el moco, los<br />
cuales tienen un antiadhesivo sobre las bacterias.<br />
2. Descamación de las células epiteliales. Este factor<br />
mecánico limita la acumulación de microorganismos,<br />
aunque no actúa en la placa<br />
dentobacteriana.<br />
3. Masticación y deglución. Arrastran a los microorganismos<br />
hacia la faringe.<br />
4. Tejido linfoide. Es de gran importancia. La mucosa<br />
lingual, el piso de la boca, las encías y la pulpa<br />
de los dientes tienen numerosos capilares linfáticos,<br />
los cuales drenan en los ganglios linfáticos<br />
(linfonodos), submaxilares (submandibulares),<br />
retrofaríngeos y cervica les profundos. El tejido<br />
linfoide también se encuentra en las encías y las<br />
glándulas sali vales mayores (parotídea o parótida,<br />
submandibular o submaxilar y sub lingual) y<br />
menores (bajo la mucosa bucal). Secreta IgA y<br />
en menor cantidad IgG e IgM.<br />
5. La saliva y el flujo salival (cap. 5). La saliva lava<br />
todas las superficies de la boca, pasa por muchos<br />
puntos de próspera vida microbia na; antes de<br />
dejar la boca arrastra consigo muchos microorganismos,<br />
además de des truirlos.<br />
6. Líquido gingival. Contiene inmunoglobulinas G<br />
y M y neutrófilos.
88 Capítulo 7<br />
7. Por otra parte, unas bacterias se retienen porque<br />
encuentran refugio en fosetas y fisu ras o entre los<br />
dientes. De ese modo, la acu mulación de microorganismos<br />
se favorece por irregularidades en<br />
los dientes, entre ellas: malposición, obturaciones<br />
mal detalladas o con bordes sobresalientes,<br />
algunos tipos de dentaduras parciales y tártaro o<br />
sarro dental.<br />
8. Los hábitos dietéticos y la higiene bucal son de<br />
gran importancia (caps. 5, 7 y 8).<br />
Características<br />
de los microorganismos<br />
No todos los microorganismos se encuentran en toda<br />
la superficie bucal. Por ejemplo, Streptococcus mutans<br />
y S. sanguis se localizan en las superficies duras como<br />
la corona dental; en cambio, Streptococcus salivarius<br />
se desarrolla principalmente en el dorso de la lengua,<br />
pero no en los dientes.<br />
Se han llegado a aislar hasta 200 especies dis tintas<br />
en la cavidad bucal de una misma perso na; muchas de<br />
ellas son transitorias y alrede dor de 20 son residentes<br />
o autóctonas:<br />
1. Cocos grampositivos. Los más frecuentes son<br />
Streptococcus viridans, mutans, sanguis, salivarius,<br />
oralis y mitis.<br />
2. Cocos gramnegativos. Hay aerobios (destacan los<br />
del género Neisseria) y anaerobios (géne ro Veillonella).<br />
3. Bacilos grampositivos. Predominan especies de<br />
Actinomyces, Lactobacillus, Bifidobacterium, Corynebacterium<br />
matruchotii, Rothia dentocariosa y<br />
difteroides.<br />
4. Bacilos gramnegativos. Los más frecuentes pertenecen<br />
a los géneros Prevotella, Porphyromonas,<br />
Fusobacterium, Capnocytophaga, Actinobacillus,<br />
Eikenella, Campylobacter y Haemophilus.<br />
5. Otros microorganismos. Se encuentran tam bién<br />
espiroquetas comensales, especies de Mycoplasma,<br />
hongos como Candida albicans y algunos<br />
protozoarios (Trichomonas tenax y Entamoeba<br />
gingivalis).<br />
El conjunto de microorganismos que coloni zan el<br />
cuerpo humano sano se denomina micro biota normal.<br />
Esos microorganismos provienen del ambiente y empiezan<br />
a colonizar al indivi duo desde el momento en<br />
que nace; por ello, la colonización inicial depende del<br />
tipo de parto, las condiciones del ambiente hospitalario<br />
y el tipo de alimentación. Al cabo de unas semanas,<br />
las especies de la microbiota en el recién naci do<br />
son similares a las del adulto.<br />
La microbiota transeúnte se encuentra libre en<br />
la superficie epitelial y se elimina con más facilidad,<br />
aunque puede multiplicarse. La mi crobiota normal<br />
ayuda al huésped (hospedero) a protegerse de ciertos<br />
microorganismos pató genos; pero por otra parte puede<br />
constituir un reservorio de infección, como en el<br />
síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida) en<br />
que algunas infecciones provienen de la microbiota<br />
normal. Asimismo, algunos antibióticos elimi nan<br />
bacterias sensibles, pero en ocasiones pro pician el desarrollo<br />
de otros microorganismos; por ejemplo, los<br />
de amplio espectro como la tetraciclina favorecen el<br />
desarrollo de Candida albicans.<br />
Otros microorganismos viven en forma libre y se<br />
alimentan de materia en descomposición (saprófitos).<br />
La microbiota de los nichos ecológicos de la cavidad<br />
bucal, en términos generales, es la si guiente:<br />
1. Mucosa. Básicamente existen cocos grampo sitivos,<br />
anaerobios facultativos (se multiplican tanto<br />
en ausencia como en presencia de oxígeno) y<br />
en especial Streptococcus viridans.<br />
2. Labios. Por estar formados por piel y mucosa,<br />
contienen microbiota cutánea (Staphylococcus<br />
epidermidis y especies de Micrococcus) y Streptococcus<br />
viridans provenientes de la saliva y dorso<br />
de la lengua (cuando se humedecen).<br />
3. Mejillas y paladar duro. Predominan Streptococcus<br />
viridans, principalmente Streptococcus<br />
mitis. En menor proporción se encuentran los<br />
estreptococos sanguis y salivarius y microorganismos<br />
de la saliva.<br />
4. Paladar blando. Hay Streptococcus viridans y microorganismos<br />
del tracto respiratorio (es pecies<br />
de Haemophilus, Corynebacterium y Neisseria,<br />
así como Streptococcus pyogenes).<br />
5. Lengua. Alrededor de 45% de los microorganismos<br />
son cocos grampositivos y anae robios<br />
facultativos, entre los cuales destaca Streptococ-
Ecología, demografía y salud 89<br />
cus salivarius. Le siguen en propor ción los cocos<br />
gramnegativos anaerobios es trictos (16%) con<br />
predominio de las especies de Veillonella, y los<br />
bacilos grampositivos anaerobios facultativos<br />
(12%) como las espe cies de Actinomyces.<br />
6. Surco gingival sano. Predominan los cocos grampositivos<br />
anaerobios facultativos (50%), sobre<br />
todo Streptococcus sanguis, mitis, oralis y gordonii,<br />
y los bacilos grampositivos anae robios facultativos<br />
(18%) como las especies de Actinomyces.<br />
7. Saliva. Carece de microbiota propia, aunque<br />
se encuentran cocos grampositivos anaero bios<br />
facultativos (44%), cocos gramnegativos anaerobios<br />
como las especies de Veillonella (15%) y<br />
bacilos anaerobios facultativos gram positivos<br />
como las especies de Actinomyces (15%).<br />
8. Encía y superficies dentales. Hay mucha varia ción,<br />
de acuerdo con el tipo de placa dento bacteriana<br />
existente.<br />
La sustitución de unos microorganismos por otros<br />
recibe el nombre de sucesión, ya sea alogénica o autogénica.<br />
La sucesión alogénica se presenta por cambios del<br />
hábitat debido a factores microbianos. El producto<br />
en el útero se encuentra en condicio nes estériles;<br />
pero al pasar por el canal del parto y ponerse en contacto<br />
con el aire y la leche, empieza a experimentar<br />
colonización bucal, básicamente por estafilococos,<br />
enterobacterias, neisserias, levaduras y Streptococcus<br />
viridans, en particular las especies mitis y salivarius.<br />
Asimis mo, hay pocos anaerobios estrictos (especies<br />
de Veillonella, Peptostreptococcus y Fusobacterium) y<br />
anaerobios facultativos (especies de Actinomyces, así<br />
como Actinobacillus actinomycetemcomitans y Eikenella<br />
corrodens) que mantienen una rela ción simbiótica<br />
con los microorganismos aero bios. Al hacer erupción<br />
los dientes, aparecen superficies lisas, fosas, fisuras y<br />
surco gingival, con lo que se inicia la colonización por<br />
Streptococcus sanguis y más adelante por Streptococcus<br />
mutans; aumentan los anaerobios estrictos principalmente<br />
al nivel del surco gingival, así como los<br />
anaerobios facultativos. En los adul tos, el desarrollo<br />
de microorganismos depende de los hábitos alimentarios,<br />
la higiene bucal, los cambios hormonales, la<br />
administración de me dicamentos y el uso de prótesis<br />
y materiales de restauración.<br />
La sucesión autogénica es la sustitución de la microbiota<br />
por modificaciones en el hábitat debido a<br />
microorganismos, como sucede en la placa dentobacteriana<br />
supragingival. Los fac tores que regulan la microbiota<br />
oral son:<br />
1. Fisicoquímicos. Incluyen humedad, pH, temperatura<br />
y potencial de oxidorreducción (véase<br />
más adelante en este mismo capítulo la descripción<br />
de estos elementos).<br />
2. Adhesión. Este fenómeno permite la coloni zación<br />
de los microorganismos en el hués ped. Se lleva a<br />
cabo por medio de moléculas superficiales llamadas<br />
adhesinas.<br />
3. Agregación y coagregación. Son mecanismos de las<br />
bacterias para adherirse entre sí y formar colonias<br />
o acumulaciones bacterianas que fortalecen<br />
la colonización por adhesión. Unas bacterias no<br />
pueden adherirse de manera directa a los tejidos,<br />
pero lo hacen por coagregación con otras que<br />
tienen capacidad de adhesión (cuadro 7-1).<br />
4. Factores nutricios. Los microorganismos asi milan<br />
sustancias simples a partir de las cuales sintetizan<br />
sus componentes, aunque algunos requieren<br />
sustancias prefabricadas, como vi taminas y<br />
aminoácidos, entre otros. La dis tribución de los<br />
microorganismos depende de sus fuentes de nutrimentos,<br />
las cuales pueden ser:<br />
A. Endógenas. Los nutrimentos se obtienen de<br />
tejidos y secreciones del huésped, como la<br />
saliva, el líquido gingival y las células de los<br />
tejidos conectivo (conjuntivo) y epitelial. El<br />
líquido gingival se origina en los capilares<br />
sanguíneos cercanos al epitelio de unión; contiene<br />
albúmina, glucoproteínas, lipoproteínas,<br />
hemina, globulina alfa-2, sodio, potasio,<br />
calcio, magnesio, fosfatos inorgánicos y otros<br />
compuestos.<br />
B. Interbacterianas. Los nutrimentos son otros<br />
microorganismos. Este tipo de fuente nu tricia<br />
es la más importante y a su vez pue de ser:<br />
a. Degradativa. Los nutrimentos son de gradados<br />
por exoenzimas microbianas. Por<br />
ejemplo, los estreptococos producen glucosidasas<br />
y neuraminidasas, las cua les<br />
disocian a los hidratos de carbono. Las<br />
bacterias que sintetizan polisacáridos in-
90 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-1. Algunos ejemplos de coagregación entre bacterias orales<br />
Grampositivos<br />
Streptococcus sanguis y/o<br />
Streptococcus mitis y Streptococcus gordonii<br />
Grampositivos<br />
Especies de Streptococcus o<br />
Especies de Actinomyces o<br />
Corynebacterium matruchotii<br />
Gramnegativos<br />
Prevotella melaninogenica<br />
Gramnegativos<br />
Prevotella gingivalis<br />
Con<br />
Con<br />
Con<br />
Con<br />
Grampositivos<br />
Actinomyces viscosus<br />
Actinomyces naeslundli<br />
Actinomyces odontolyticus<br />
Corynebacterium matruchotii<br />
Propionibacterium acnes<br />
Rothia dentocariosa<br />
Gramnegativos<br />
Especies de Porphyromonas<br />
Especies de Prevotella<br />
Especies de Capnocytophaga<br />
Especies de Fusobacterium nucleatum<br />
Eikenella corrodens<br />
Especies de Veillonella<br />
Gramnegativos<br />
Especies de Fusobacterium nucleatum<br />
Espiroquetas<br />
Treponema denticola<br />
Fuente: Liébana JU. Microbiología oral. México: McGraw-Hill Interamericana Editores, 1997.<br />
tracelulares actúan cuando falta el aporte<br />
exógeno de hidratos de carbono.<br />
b. Excretora. Los nutrimentos provienen<br />
de bacterias que excretan al exterior sustancias<br />
que ya no pudieron asimi lar, las<br />
cuales son aprovechadas por otros microorganismos.<br />
Por ejemplo, las especies de<br />
Prevotella, Porphyromonas, Bacteroides<br />
y Fusobacterium excretan ácidos grasos<br />
de cadena corta, necesarios para el desarrollo<br />
de Treponemas. La degradación<br />
de aminoácidos produce amoniaco, el cual<br />
constituye una fuente nitrogena da para<br />
Streptococcus mutans. El CO 2<br />
estimula el<br />
crecimiento de Capnocytophaga, Eikenella<br />
corrodens y Actinobacillus actinomycetemcomitans,<br />
entre otros. Asi mismo, Streptococcus<br />
mutans requiere de ácido paraaminobenzoico,<br />
el cual es excretado por<br />
Streptococcus sanguis; las especies de Prevotella<br />
y Porphyromonas necesitan vitamina<br />
K, la cual es sumi nistrada por especies<br />
de Veillonella, en tre otros ejemplos (fig.<br />
7-1).<br />
C. Exógena. Los componentes de la dieta se eliminan<br />
con rapidez por medio de la musculatura<br />
bucal y el efecto de lavado de la saliva.<br />
Pero la ingestión frecuente, el consumo de<br />
alimentos con gran capacidad de adhesión,<br />
el uso de materiales de ortodoncia o la falta<br />
de higiene adecuada constituyen una fuente<br />
exógena de nutrimentos para los microorganismos.<br />
En par ticular los hidratos de carbono<br />
son muy im portantes, porque las bacterias los<br />
acumu lan con facilidad en forma de polisacáridos<br />
intracelulares; además, su degradación<br />
pro duce ácidos que permiten el desarrollo de<br />
microorganismos resistentes e impide el crecimiento<br />
de microorganismos sensibles a pH<br />
bajo. Existen zonas poco accesibles a los alimentos,<br />
como el surco gingival.<br />
5. Factores protectores del huésped (hospedero) y antagónicos.<br />
Respecto de los factores antagó nicos<br />
interbacterianos, las bacterias pueden tener interacciones<br />
perjudiciales como la competencia por<br />
sustratos nutricionales: al gunas bacterias compiten<br />
por los nutrimen tos y otras están adaptadas a sobrevivir<br />
en bajas concentraciones de nutrimentos,<br />
lo cual les proporciona una ventaja ecológica. Otro<br />
factor antagónico es la producción de desechos<br />
metabólicos que dañan a otras bacterias, como sucede<br />
cuando algunas excretan amoniaco.
Ecología, demografía y salud 91<br />
Streptococcus<br />
PABA<br />
Streptococcus<br />
mutans<br />
Capnocytophaga<br />
Actinomyces<br />
E. corrodens<br />
Leptotrichia<br />
A. actinomycetemcomitans<br />
Lactobacillus<br />
CO 2<br />
Fusobacterium<br />
NH 4<br />
+<br />
Eubacterium<br />
Bacteroides<br />
Lactato<br />
Formato<br />
Peptococcus<br />
Peptostreptococcus<br />
Prevotella<br />
Veillonella<br />
H 2<br />
Porphyromonas<br />
Acetato<br />
Menadiona<br />
Pirofosfato de tiamina<br />
Putrescina<br />
Isobutírico<br />
Eubacterium alactolyticum<br />
Peptostreptococcus indolicus<br />
Treponomas bucales<br />
Caproato<br />
Staphylococcus<br />
Campylobacter<br />
Bacteroides melaninogenicus<br />
P. gingivalis<br />
P. intermedia<br />
DPN<br />
Haemophilus<br />
Protohemo<br />
Figura 7-1. Múltiples interrelaciones nutricias entre los microorganismos a nivel oral. DPN: Factor V; PABA: ácido<br />
paraaminobenzoico. Fuente: Liébana JU. Microbiología oral. México: McGraw-Hill Interamericana Editores,<br />
1997.
92 Capítulo 7<br />
Factores fisicoquímicos<br />
Humedad<br />
La humedad es indispensable para el desarro llo de las<br />
bacterias, pues el agua les permite rea lizar sus funciones<br />
de nutrición (intercambio de nutrimentos, reacciones<br />
metabólicas y elimina ción de sustancias de<br />
desecho). Abunda en la saliva.<br />
pH de la cavidad bucal<br />
El pH varía entre 6.5 y 7.5 y es óptimo para el desarrollo<br />
de microorganismos. Las bebidas o alimentos dulces lo<br />
disminuyen; en cambio, las proteínas lo aumentan. La<br />
saliva es muy importante como amortiguadora, pues<br />
contiene bicarbonatos, fosfatos y proteínas.<br />
Temperatura bucal<br />
Es próxima a los 37°C, pero varía de acuerdo con la<br />
temperatura de las bebidas y alimentos ingeridos; sin<br />
embargo, muchos microorganis mos resisten estos<br />
cambios.<br />
Potencial de oxidorreducción<br />
Es variable debido a la morfología de las estruc turas<br />
bucales. Así, hay menor penetración de oxígeno en las<br />
criptas de la lengua, los surcos gingivales, las fisuras<br />
y las áreas proximales de los dientes; esto favorece el<br />
desarrollo de mi croorganismos anaerobios e impide<br />
el desarrollo de microorganismos aerobios.<br />
ECOLOGÍA Y SALUD<br />
El sistema ecológico del ser humano es diferen te al<br />
de los animales porque su ambiente inclu ye factores<br />
socioculturales además de los físicos, químicos y biológicos.<br />
Ningún ser vivo, animal o vegetal vive ais lado del<br />
ambiente circundante. Existe interrelación permanente<br />
de influencias mutuas que se aplican sobre animales<br />
y vegetales, y entre éstos y los factores no vivientes del<br />
entorno.<br />
El ser humano también pertenece al reino animal.<br />
Desde su aparición en la Tierra, su exis tencia como<br />
especie es resultado de un esfuer zo constante por<br />
adaptarse a las variaciones de un ambiente algunas<br />
veces favorable y otras veces desfavorable.<br />
El ambiente interno del ser humano está constituido<br />
por todos los líquidos orgánicos que bañan sus<br />
células y por el intrincado mecanis mo de tejidos, órganos<br />
y conexiones vasculares y nerviosas.<br />
Los líquidos intracelulares, tisulares, la linfa y la<br />
sangre constituyen el sustrato del medio interno, a<br />
través del cual se realiza el intercam bio metabólico<br />
entre el organismo y el medio externo.<br />
La sangre es el tejido que tiene el mayor con tacto<br />
con el ambiente externo y a través de su circulación<br />
actúa como medio de transporte y comunicación entre<br />
los dos ambientes. Su com posición es constante,<br />
como resultado de la adaptación dinámica a las condiciones<br />
cambian tes del ambiente externo.<br />
En todo este conjunto de adaptaciones fisio lógicas<br />
debe incluirse también la adaptación psicológica y el<br />
desarrollo adecuado de la personalidad, pues la mente<br />
y el soma mantienen una relación muy estrecha. De<br />
ese modo, al hacer referencia a la salud es indispensable<br />
pen sar simultáneamente en dos aspectos de la<br />
acti vidad vital: la fisiología y la psicología.<br />
Falta considerar el aspecto social. El ser hu mano<br />
no vive solo o aislado; la vida social es tan auténtica<br />
como la vida individual y también tiene sus propias<br />
características.<br />
La vida social está condicionada por el ins tinto<br />
gregario del ser humano, es decir, la ten dencia a vivir<br />
en grupos para defenderse de las contingencias y<br />
sobrevivir. Algunos animales con instintos gregarios<br />
también viven en gru pos. El sentido gregario del ser<br />
humano se basa en la cultura acumulada y aprovechada<br />
de ge neración en generación.<br />
Con bastante frecuencia, se confunden los términos<br />
“cultura” y “educación”. Sin embar go, la cultura<br />
es el modo de vida de un grupo de individuos; por<br />
consiguiente, incluye todo lo que inventan, aprenden<br />
y transmiten a sus hijos y, en parte, a los nuevos integrantes<br />
de la comunidad. Es decir, engloba artes,<br />
ciencias, religión, filosofía, sistemas tecnológicos,<br />
prác ticas políticas, actitudes, valores y hábitos.
Ecología, demografía y salud 93<br />
En el largo proceso de su evolución, el ser humano<br />
ha llegado a depender del aporte y la ayuda de<br />
los demás miembros del grupo, los cuales al actuar<br />
de manera organizada consti tuyen la piedra angular<br />
de todas las socieda des humanas: la estructura social.<br />
La herencia cultural permite transmitir la organización<br />
de generación en generación y de una sociedad a<br />
otra.<br />
Los defectos de la organización social huma na condicionan<br />
muchos problemas de salud. Las diferencias<br />
económicas y culturales entre los grupos sociales originan<br />
la patología social; al mismo tiempo, las contradicciones<br />
cultura les en la sociedad producen conflictos<br />
psicológicos y trastornos mentales. La sociedad y<br />
la conducta del ser humano mantienen una rela ción<br />
recíproca, y los estados de salud y enfermedad no escapan<br />
a esa influencia.<br />
Por otro lado, el ser humano utiliza energías interna<br />
y externa. La interna le permite mante ner el<br />
funcionamiento de su organismo y la obtiene de los<br />
alimentos. La externa le ayuda a mantener el funcionamiento<br />
de la infraestructura, como el teléfono, los<br />
transportes, la indus tria, la iluminación, la calefacción,<br />
etcétera.<br />
Inicialmente, la modificación rápida del am biente<br />
por medio de la cultura le produjo bene ficios; pero en<br />
la actualidad ha roto el equilibrio de los ecosistemas.<br />
El proceso salud-enfermedad es un continuo, y en<br />
sus extremos se encuentran el éxito (sa lud) y el fracaso<br />
(enfermedad) de la adaptación a un ambiente<br />
dinámico con elementos físicos, químicos, biológicos<br />
y socioculturales.<br />
El ser humano tiene una herencia biológica; desde<br />
que se unen el óvulo y el espermatozoi de, el huevo o<br />
cigoto ya tiene determinadas características biológicas<br />
y determinado temperamento, que es la predisposición<br />
a reaccionar de una manera que tiene el individuo.<br />
Mientras el producto crece y se desarrolla dentro<br />
del útero, sólo se relaciona con la madre a través de su<br />
medio interno constituido por los líquidos orgánicos<br />
que bañan sus célu las, fluidos intracelulares, de los tejidos,<br />
la linfa y la sangre.<br />
Los riesgos y los peligros del ambiente ex terno son<br />
climáticos (temperatura, humedad, altitud y vientos),<br />
geográficos (atmósfera, agua, sol, sismos, inundaciones,<br />
maremotos y erup ciones volcánicas), biológicos<br />
(flora y fauna nocivas) y culturales.<br />
El ser humano, como resultado de la evolu ción<br />
cultural, ha aumentado su población de manera excesiva,<br />
ha consumido con celeridad sus recursos y ha<br />
contaminado el ambiente.<br />
El crecimiento demográfico ocurre por el desequilibrio<br />
entre la fecundidad alta, principal mente de los<br />
grupos subdesarrollados y el descenso de la mortalidad<br />
debido a los avances científicos. Por ello, en muchas<br />
comunidades hay insuficiencia de alimentos y en<br />
consecuen cia, desnutrición.<br />
Por una parte se abandonan las zonas rurales con<br />
la consecuente disminución de la produc tividad agrícola.<br />
Por la otra, la urbanización lleva al aumento de<br />
densidad de población en las grandes ciudades. De<br />
ese modo se pro duce un rápido cambio social y se eleva<br />
el cos to de la infraestructura, la cual significa todo<br />
lo creado por el ser humano para resolver necesi dades<br />
primarias: agricultura, sanidad, industria y medios de<br />
comunicación.<br />
Al aumentar el tránsito, se pierde tiempo pa ra desplazarse,<br />
se incrementan los accidentes en la vía pública,<br />
disminuyen las áreas verdes y se hace menos ejercicio,<br />
lo que favorece el desarrollo de padecimientos como la<br />
obesidad y por consiguiente hipertensión arterial, ateroesclerosis,<br />
diabetes y enfermedades del corazón.<br />
La urbanización intensa también trae consigo problemas<br />
de empleo y escasez de vivienda, de servicios<br />
de saneamiento, abastecimiento de agua potable, sistemas<br />
para eliminación ade cuada de basura y desechos.<br />
La carencia de este último servicio propicia el<br />
desarrollo de insec tos y roedores que transmiten enfermedades.<br />
Muchas personas son incapaces de adaptar se a la<br />
urbanización rápida y ello trae como con secuencia<br />
angustia, ansiedad y estrés. Además, las desigualdades<br />
aumentan en los aspectos económico y educacional.<br />
El ambiente de trabajo puede ocasionar en fermedades<br />
profesionales y accidentes de traba jo y aparte contribuir<br />
a la contaminación ambien tal. Ésta es cualquier<br />
modificación desfavorable provocada por la actividad<br />
humana y ejerce un efecto perjudicial o molesto en<br />
los seres vivos y las instalaciones, ya que aumenta la<br />
frecuencia de enfermedades del tracto respiratorio, el
94 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-2. Efectos de la contaminación atmosférica en la salud<br />
Agente contaminante o fuente<br />
de contaminación<br />
Óxido de azufre<br />
Óxidos de azufre y partículas en suspensión<br />
procedentes de fuentes de combustión<br />
Partículas en suspensión (sin especificación)<br />
Oxidantes<br />
Ozono<br />
Monóxido de carbono<br />
Bióxido de nitrógeno<br />
Plomo<br />
Sulfuro de hidrógeno<br />
Mercaptanos<br />
Asbestos<br />
Plaguicidas<br />
Compuestos odoríferos<br />
Berilio<br />
Microorganismos suspendidos en el aire<br />
Efectos comprobados (EC) y efectos posibles (EP)<br />
Agravamiento del asma y la bronquitis crónica (EC)<br />
Daño de la función pulmonar (EC)<br />
Irritación sensorial (EC)<br />
Aumento a corto plazo de la mortalidad (EC)<br />
Aumento a corto plazo de la morbilidad (EC)<br />
Agravamiento de la bronquitis y las enfermedades cardiovasculares (EC)<br />
Papel contribuyente en la causa de bronquitis crónica y enfisema (EC)<br />
Papel contribuyente en la enfermedad respiratoria en los niños (EC)<br />
Papel contribuyente en la causa del cáncer de pulmón (EC)<br />
Aumento de la frecuencia de enfermedad respiratoria crónica (EC)<br />
Agravamiento del asma y la bronquitis (EC)<br />
Daño a la función pulmonar en pacientes con bronquitis y enfisema (EC)<br />
Irritación ocular y respiratoria y disminución del rendimiento de atletas estudiantiles (EC)<br />
Probabilidad incrementada de accidentes en vehículos de motor (EC)<br />
Daño en la función pulmonar (EC)<br />
Envejecimiento de la peroxidación de los lípidos y de algunos otros procesos relacionados (EC)<br />
Disminución de la tolerancia al ejercicio en pacientes con enfermedad cardiovascular (EC)<br />
Aumento de la mortalidad general y mortalidad por enfermedad isquémi ca del corazón (EC)<br />
Daño en la función del sistema nervioso central (EC)<br />
Factor causal en la arterioresclerosis (EC)<br />
Factor causal del enfisema pulmonar (EC)<br />
Daño a algunos mecanismos de defensa del pulmón, como las células cebadas y los macrófagos, función<br />
pulmonar alterada (EC)<br />
Almacenamiento incrementado en tejidos y líquidos corporales (EC)<br />
Daño en la síntesis de hemoglobina y porfirina (EC)<br />
Incremento de la morbilidad tras la exposición aguda (EC)<br />
Causa de irritación sensorial (EC)<br />
Dolor de cabeza, náusea y afecciones de los senos paranasales (EC)<br />
Producción de calcificaciones pleurales (EC)<br />
Neoplasia maligna, del tipo del mesotelioma y asbestosis (EC)<br />
Factor contribuyente en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y en el cáncer de pulmón (EC)<br />
Intoxicación aguda fatal (EC)<br />
Enfermedad aguda (EC)<br />
Daño en la actividad de la colinesterasa (EC)<br />
Dolor de cabeza y afecciones de los senos paranasales (EC)<br />
Beriliosis con daño pulmonar (EC)<br />
Infecciones de transmisión aérea (EC)<br />
Fuente: US Department of Health. Education and Welfare, Statistics Needed for Determining Effects of the Environment on Health, Vital<br />
and Health Statistics. Ser 4, No. 20. USDHEW, Publication No. (HRA)77-4457, Washington, D.C. 1977.<br />
sis tema nervioso, la piel, la vista y el oído; asimis mo, favorece<br />
el desarrollo de algunos tipos de cáncer e incluso<br />
puede causar la muerte (cua dros 7-2 a 7-5).<br />
El ser humano ha consumido los recursos de la tierra<br />
de manera acelerada e irracional, y así ha alterado<br />
el equilibrio de los ecosistemas. Por ejemplo, la caza y<br />
la pesca intensa han dado lugar a la extinción de especies;<br />
el pastoreo y la tala excesiva de bosques han<br />
favorecido las inundaciones en época de lluvias con<br />
todas sus consecuencias.
Ecología, demografía y salud 95<br />
Cuadro 7-3. Efectos sobre la salud comprobados y posibles en relación con la contaminación del agua y los alimentos<br />
Agente contaminante o fuente<br />
de contaminación<br />
Efectos comprobados (EC) y efectos posibles (EP)<br />
Bacterias<br />
Epidemias y endemias de infecciones gastrointestinales (cólera, shigelosis, salmonelosis, leptospirosis, fiebre<br />
tifoidea, etc.) (EC)<br />
Interacción secundaria con desnutrición y con nitratos en el agua (EC)<br />
Virus<br />
Hepatitis epidémica y otras infecciones virales (EC)<br />
Trastornos inflamatorios de los ojos y la piel relacionados con la natación (EP)<br />
Parásitos<br />
Amebiasis, esquistosomiasis, hidatidosis y otras infecciones parasitarias (EC)<br />
Metales<br />
Intoxicación por plomo (EC)<br />
Intoxicación por mercurio (a través de las cadenas alimentarias) (EC)<br />
Intoxicación por cadmio (a través de las cadenas alimentarias) (EC)<br />
Intoxicación por arsénico (EC)<br />
Intoxicación por cromo (EC)<br />
Nefropatía epidémica (EP)<br />
Enfermedad del pie negro (EP)<br />
Nitratos<br />
Methemoglobinemia (con interacciones bacterianas) (EC)<br />
Sulfatos o fosfatos, o ambos<br />
Hipermotilidad gastrointestinal (EC)<br />
Fluoruros<br />
Fluorosis dental<br />
Fuente: US Department of Health. Education and Welfare, Statistics Needed for Determining the Effects of the Environment on Health,<br />
Vital and Health Statistics, Ser 4, No. 20, USDHEW, Publication No. (HRA)77-1457, Washington, D.C. 1977, y López A et al. La salud ambiental<br />
en México. México: Universo Veintiuno, 1987.<br />
DEMOGRAFÍA<br />
La demografía es la ciencia que estudia caracterís ticas,<br />
composición, comportamiento y perspec tivas de la<br />
población en cuanto a tecnología, disponibilidad y<br />
uso de recursos naturales, pro ducción de alimentos,<br />
ocupación, contaminación ambiental y otros.<br />
La población humana es el número de perso nas que<br />
viven en un lugar y tiempo determinado. Al estudiarla,<br />
es necesario considerar com posición y distribución<br />
por edad, sexo, raza, ocupación, educación y estrato<br />
socioeconómico, entre otros datos.<br />
Por otra parte, la población humana se divi de en<br />
urbana y rural. Las definiciones de población urbana,<br />
adoptadas en diversos países, se basan en los siguientes<br />
puntos:<br />
1. Dimensiones determinadas de población.<br />
2. Presencia de centros administrativos de pequeñas<br />
circunscripciones consideradas urba nas.<br />
Cuadro 7-4. Efectos sobre la salud, comprobados y posibles, en relación con la contaminación del suelo<br />
Agente contaminante o fuente<br />
de contaminación<br />
Efectos comprobados (EC) y efectos posibles (EP)<br />
Excreta humana<br />
Esquistosomiasis, teniasis, anquilostomiasis y otras infecciones (EC)<br />
Drenaje<br />
Tifoidea, peste, leptospirosis y otras enfermedades infecciosas (EC)<br />
Desechos industriales<br />
Almacenamiento y efectos derivados de metales tóxicos y otras sustancias a través de las cadenas<br />
alimentarias (EC)<br />
Plaguicidas, plomo y arseniatos<br />
Almacenamiento incrementado de metales pesados en fumadores de tabaco que ha sido cultivado en<br />
áreas bajo tratamiento (EC)<br />
Fuente: US Department of Health, Education and Welfare, Statistics Needed for Determining the Effects of the Environment on Health, Vital<br />
and Health Statistics, Ser 4, No. 20 USDHEW. Publication No. (HRA)77-1456, Washington, D.C. 1977, y López A, et al. La salud ambiental en<br />
México. México: Universo Veintiuno, 1987.
96 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-5. Efectos de las radiaciones sobre la salud<br />
Agente contaminante o fuente de contaminación<br />
Luz solar<br />
Rayos X (uso diagnóstico)<br />
Radiación terapéutica<br />
Uso industrial de la radiación y extracción de minerales<br />
radiactivos<br />
Energía nuclear y plantas de reprocesamiento<br />
Microondas<br />
Efectos comprobados (EC) y efectos posibles (EP)<br />
Muerte por exposición aguda (EC)<br />
Morbilidad ocasionada por quemaduras (EC)<br />
Cáncer de piel (EC)<br />
Interacción con medicamentos en individuos susceptibles (EC)<br />
Aumento de la incidencia de melanoma maligno (EP)<br />
Cáncer de piel y otros cambios de la piel (EC)<br />
Factor contribuyente para la leucemia (EP)<br />
Alteraciones de la fertilidad (EP)<br />
Cáncer de piel (EC)<br />
Frecuencia incrementada de leucemia (EC)<br />
Aumento de la frecuencia de otros tipos de cáncer (EP)<br />
Aceleramiento del envejecimiento (EC)<br />
Mutagénesis (EP)<br />
Muertes accidentales (EC)<br />
Mortalidad relacionada con radiación<br />
Nefritis por uranio (EC)<br />
Potenciación del riesgo de cáncer pulmonar en mineros con riesgos altos (EC)<br />
Incrementos de mortalidad y morbilidad generales en las comunidades adyacentes (EP)<br />
Aumento de la incidencia de cáncer (EC)<br />
Desastres radiactivos en la comunidad (EP)<br />
Alteraciones del material genético humano (EP)<br />
Daño tisular (EP)<br />
Fuente: US Department of Health, Education and Welfare, Statistics Needed for Determining the Effects of the Environment on Health, Vital<br />
and Health Statistics, Ser 4, No. 20, USDHEW. Publication No. (HRA)77-1457, Washington, D.C. 1977, y López A, et al. La salud ambiental en<br />
México. México: Universo Veintiuno, 1987.<br />
3. Existencia de pequeñas divisiones administrativas,<br />
número de habitantes y porcentaje de<br />
población que desarrolla una actividad agrícola.<br />
Censo<br />
Los datos de la población se recaban por medio del<br />
Censo General de Población y Vivienda reali zado cada<br />
10 años. Para obtener información, el empadronador<br />
entrevista al jefe de cada fa milia o a los integrantes de<br />
la familia mayores de 12 años de edad.<br />
Los datos registrados en el censo de pobla ción son<br />
los siguientes: estado o entidad fede rativa, municipio<br />
o delegación, clave del área geoestadística básica, localidad,<br />
número de manzana, nombre del jefe de empadronadores,<br />
nombre del empadronador y dirección<br />
de la vivienda.<br />
La información del censo es útil para cono cer los<br />
siguientes aspectos: localidad, estructu ra por sexo y<br />
edad, migración, lengua indíge na, religión, características<br />
educativas, estado civil, fecundidad y mortalidad,<br />
características económicas y vivienda.<br />
Localidad<br />
El censo permite distinguir las localidades ru rales y<br />
urbanas con base en el número de habi tantes, y así<br />
analizar sus características socioeconómicas y demográficas.<br />
Estructura por sexo y edad<br />
Es una característica demográfica fundamental, pues<br />
influye en los procesos sociales y eco nómicos. La
Ecología, demografía y salud 97<br />
composición de una población por sexo y edad es resultado<br />
de las tendencias de la fecundidad, la mortalidad<br />
y la migración.<br />
Migración<br />
Los datos relativos a intensidad, origen y di rección de<br />
la migración, y al número de emi grantes e inmigrantes,<br />
son fundamentales para estudiar la movilidad y la<br />
distribución regio nales, así como para diseñar estrategias<br />
enca minadas a redistribuir los asentamientos<br />
humanos y planificar el desarrollo y crecimiento de<br />
las distintas regiones del país.<br />
Lengua indígena<br />
Esta información permite estimar el grado de integración<br />
de cada etnia.<br />
Religión<br />
Es una característica sociocultural importante por su<br />
influencia en algunos procesos de la di námica sociodemográfica.<br />
Características educativas<br />
Las características educativas proporcionan in formación<br />
necesaria para evaluar los avances en materia<br />
educativa y su relación con el plan de desarrollo económico.<br />
También permiten estimar el promedio de escolaridad<br />
de la po blación y evaluar las características<br />
del merca do de trabajo en función de la correspondencia<br />
entre la ocupación y el grado de instrucción<br />
al canzado, la sustitución de carreras profesiona les<br />
por estudios terminales, la demanda poten cial de empleos,<br />
etcétera.<br />
Estado civil<br />
Los datos relativos al estado civil permiten co nocer el<br />
fenómeno de la nupcialidad. Aunque el Registro Civil<br />
sólo consigna las uniones y separaciones legales, el<br />
censo registra infor mación de uniones y desuniones<br />
reales (legales y consensuales).<br />
Fecundidad y mortalidad<br />
La fecundidad y la mortalidad son elementos básicos<br />
para explicar el crecimiento natural de la población.<br />
Características económicas<br />
En el ser humano, los modos y los medios de satisfacer<br />
sus necesidades se relacionan íntima mente con el<br />
trabajo y la organización social. La composición de la<br />
fuerza de trabajo mantie ne una estrecha relación con<br />
el desarrollo eco nómico de un país.<br />
Vivienda<br />
La población requiere de una vivienda que le proporcione<br />
protección del ambiente y condi ciones de higiene<br />
y comodidad suficientes para el adecuado desarrollo<br />
familiar.<br />
La vivienda es el recinto con paredes, techos y acceso<br />
independiente que brinda a sus habitan tes el espacio<br />
para preparar alimentos, comer, dormir y protegerse<br />
del ambiente. También se considera así a cualquier recinto<br />
utilizado como alojamiento en el momento del<br />
censo, aunque no haya sido construido con ese fin (faros,<br />
escuelas, bodegas, tiendas, fábricas o talleres). El<br />
término no se aplica al local construido para habitación<br />
pero destinado a otros usos en el momento del censo.<br />
La vivienda colectiva se destina para aloja miento<br />
habitual de personas sujetas a subordi nación administrativa<br />
y obligadas a cumplir normas de convivencia<br />
por estar relacionadas con algún objetivo público<br />
o algún interés per sonal común, ya sea salud, disciplina,<br />
orden, enseñanza, religión, trabajo, alojamiento o<br />
asis tencia social. Se clasifica en:<br />
1. Hotel, motel, albergue, posada, mesón.<br />
2. Pensión, casa de huéspedes, casa de asis tencia.<br />
3. Hospital, sanatorio, clínica, casa de salud.<br />
4. Orfanato, hospicio, asilo, casa cuna, casa ho gar.<br />
5. Internado escolar, residencia estudiantil.<br />
6. Residencia médica.<br />
7. Convento, monasterio, seminario, congre gación<br />
religiosa.<br />
8. Cárcel, prisión, reclusorio, reformatorio, consejo<br />
tutelar, centro de rehabilitación pa ra infractores,<br />
correccional, penitenciaría, colonia penal.<br />
9. Campamento de trabajo, barraca de traba jadores,<br />
plataforma petrolera.<br />
10. Cuartel, campamento, guarnición, base, destacamento<br />
de policía militar o naval.<br />
11. Otro.
98 Capítulo 7<br />
Las viviendas particulares se clasifican en: casa sola;<br />
departamento en edificio, casa en vecin dad o cuarto<br />
de azotea; vivienda móvil y refugio. Entre ellas, la<br />
vivienda móvil se construye para ser transportada o<br />
adaptada a un vehícu lo y en el momento del censo se<br />
encuentra ha bitada; por ejemplo, vagón de ferrocarril,<br />
bar co, carro casa, remolque, carpa, trailer o tienda de<br />
campaña.<br />
Características de la vivienda<br />
Los datos importantes de la vivienda para con formar<br />
el censo incluyen:<br />
1. Paredes. Es importante conocer el material predominante<br />
en paredes: lámina de cartón, carrizo,<br />
bambú o palma, embarro o baja reque, madera,<br />
lámina de asbesto o metáli ca, adobe, tabique,<br />
ladrillo, bloc, piedra o cemento.<br />
2. Techos. Es indispensable especificar el mate rial<br />
predominante en techos: lámina de car tón, palma,<br />
tejamanil o madera, lámina de asbesto o metálica,<br />
teja, losa de concreto, ta bique o ladrillo.<br />
3. Pisos. Se necesita anotar si predomina la tie rra, el<br />
cemento, la madera, el mosaico u otros recubrimientos.<br />
4. Número de cuartos. El cuarto es el espacio de<br />
la vivienda cerrado o separado por pa redes fijas<br />
y destinado para alojar personas, por lo que<br />
el baño no se considera cuarto de vivienda. Es<br />
necesario indicar cuántos cuartos se usan para<br />
dormir y cuántos cuar tos tiene la vivienda, sin<br />
contar pasillos ni baños.<br />
5. Cocina. Se especifica si se cuenta con un es pacio<br />
exclusivo para cocinar o si el dormi torio también<br />
funciona como cocina.<br />
6. Excusado. Se señala si la vivienda cuenta con excusado<br />
y si éste tiene conexión de agua.<br />
7. Servicio de agua entubada:<br />
A. Dentro de la vivienda.<br />
B. Fuera de la vivienda, pero dentro de la propiedad.<br />
C. De llave pública o hidrante.<br />
D. Ninguno.<br />
8. Drenaje:<br />
A. Conectado al drenaje de la calle.<br />
B. Conectado a fosa séptica.<br />
C. Desagüe al suelo, río o lago.<br />
D. Ninguno.<br />
9. Electricidad. Se anota si se cuenta con servi cio de<br />
luz eléctrica o se carece de él.<br />
10. Combustible. Se señala cuál es el combusti ble<br />
más utilizado para cocinar alimentos: leña o carbón,<br />
petróleo, gas o electricidad.<br />
11. Tenencia. Se anota el tipo de posesión de la vivienda:<br />
propia, rentada o en otra situación.<br />
Ocupantes de la vivienda<br />
Este apartado es continuación del anterior. Incluye las<br />
siguientes tareas para el empadro nador: especificar el<br />
número de habitantes ha bituales de la vivienda censada;<br />
investigar si hay familias o grupos de personas que<br />
cocinan o compran la comida aparte y anotar el número<br />
de ellas, y también listar a los ocupantes de la vivienda<br />
empezando con el jefe de familia. A continuación,<br />
es necesario anotar los datos de cada persona:<br />
1. Parentesco con el jefe de la familia.<br />
2. Sexo.<br />
3. Edad. Es necesario preguntar a personas mayores<br />
de 12 años:<br />
A. Número de hijos nacidos vivos y núme ro de<br />
hijos vivos en la fecha del censo.<br />
B. Estado civil.<br />
C. Actividad principal de la semana ante rior:<br />
trabajó; tenía trabajo pero no trabajó; buscó<br />
trabajo; es estudiante; se dedi ca a quehaceres<br />
del hogar; está jubilada o pensionada; está<br />
incapacitada permanentemente para trabajar<br />
o no trabajó por otras razones. Si la persona<br />
cuenta con trabajo, aunque no haya laborado,<br />
debe investigarse:<br />
a. Oficio, o cargo en el trabajo principal.<br />
b. Tareas o funciones en el trabajo.<br />
c. Situación en el trabajo: empleado u obrero,<br />
jornalero o peón, trabajador por cuenta<br />
propia, patrón o empresa rio o empleado<br />
sin pago en el negocio o predio familiar.<br />
d. Número de horas trabajadas la sema na anterior.<br />
e. Actividad económica.<br />
f. Ingresos.<br />
4. Lugar de nacimiento.
Ecología, demografía y salud 99<br />
5. Lugar de residencia hace cinco años.<br />
6. Lenguas habladas: dialecto, español o am bos.<br />
7. Religión.<br />
8. Alfabetismo: si sabe leer y escribir un reca do.<br />
9. Asistencia a la escuela.<br />
10. Escolaridad. Se indica el número de años estudiados<br />
en cada nivel escolar: preescolar; primaria;<br />
estudios técnicos o comer ciales con primaria terminada;<br />
estudios técnicos o comerciales con secundaria<br />
ter minada; bachillerato; normal básica;<br />
profe sional (nombre de la carrera) y posgrado.<br />
Demografía y salud<br />
Para elaborar un diagnóstico de salud es impor tante<br />
anotar las siguientes características: super ficie del<br />
área, pirámide poblacional, población rural y urbana,<br />
concentración de la población, distribución de la<br />
población rural y urbana, mo vimientos migratorios,<br />
crecimiento de la población (mortalidad, morbilidad,<br />
esperanza o ex pectativa de vida, fecundidad), y<br />
característi cas socioeconómicas y educacionales.<br />
Superficie<br />
México tiene una superficie de 1 967 183 km 2 . Se gún<br />
datos del censo de 2000, es una de las 11 na ciones más<br />
pobladas del mundo con 97 483 412 habitantes. En<br />
2005, el INEGI informó 103 263 388 habitantes. La<br />
distribución poblacional por enti dad federativa se<br />
muestra en el cuadro 7-6.<br />
Cuadro 7-6. Número de habitantes por entidad federativa en los Estados Unidos Mexicanos (2000-2005)<br />
Entidad federativa Núm. de habitantes (2000) Núm. de habitantes (2005)<br />
Aguascalientes 944 285 1 065 416<br />
Baja California 2 487 367 2 844 469<br />
Baja California Sur 424 041 512 170<br />
Campeche 690 689 754 730<br />
Coahuila 2 298 070 2 495 200<br />
Colima 542 627 567 996<br />
Chiapas 3 920 892 4 293 459<br />
Chihuahua 3 052 907 3 241 444<br />
Distrito Federal 8 605 239 8 720 916<br />
Durango 1 448 661 1 509 117<br />
Guanajuato 4 663 032 4 893 812<br />
Guerrero 3 079 649 3 115 202<br />
Hidalgo 2 235 591 2 345 514<br />
Jalisco 6 322 002 6 752 113<br />
México 13 096 686 14 007 495<br />
Michoacán 3 985 667 3 966 073<br />
Morelos 1 555 296 1 612 899<br />
Nayarit 920 185 949 684<br />
Nuevo León 3 834 141 4 199 292<br />
Oaxaca 3 438 765 3 506 821<br />
Puebla 5 076 686 5 383 133<br />
Querétaro 1 404 306 1 598 139<br />
Quintana Roo 874 963 1 135 309<br />
San Luis Potosí 2 299 360 2 410 414<br />
Sinaloa 2 536 844 2 608 442<br />
Sonora 2 216 969 2 394 861<br />
Tabasco 1 891 829 1 989 969<br />
Tamaulipas 2 753 222 3 024 238<br />
Tlaxcala 962 646 1 068 207<br />
Veracruz 6 908 975 7 110 214<br />
Yucatán 1 658 210 1 818 948<br />
Zacatecas 1 353 610 1 367 692<br />
Total 97 483 412 103 263 388<br />
Fuente: INEGI. Censo General de Población y Vivienda. México, INEGI, 2000. INEGI, Agenda estadística, México, 2006.
100 Capítulo 7<br />
Pirámide poblacional<br />
Permite conocer la distribución de los ha bitantes por<br />
edad y sexo (cuadro 7-7). La pirámide tiene diferentes<br />
formas según el grado de desarrollo del país; por<br />
ejemplo, la base es muy ancha para países subdesarrollados<br />
y en vías de desarrollo, pues en éstos se registran<br />
tasas de natalidad altas.<br />
La pirámide poblacional de México se ha modificado<br />
con el paso de los años porque el país ha experimentado<br />
descenso gradual en la proporción de niños<br />
y jóvenes, y aumento pro gresivo de personas adultas y<br />
en edad avanza da, lo cual se debe a disminución en<br />
las tasas de natalidad y mortalidad (figs. 7-2 y 7-3). El<br />
análisis de esta pirámide permite cuantificar las repercusiones<br />
en los ecosistemas con base en la composición<br />
de los grupos de edad, los patro nes de consumo,<br />
las formas de vida, los usos de la vivienda y los hogares<br />
de personas solas. También es posible cuantificar<br />
la demanda de empleos, atención escolar, servicios de<br />
salud y alimentación y asistencia social.<br />
Población urbana y rural<br />
Las poblaciones se distinguen, entre otros fac tores,<br />
por el número de habitantes: rural (me nos de 2 499<br />
habitantes) y urbana (más de 2 500 habitantes).<br />
Se puede clasificar también en: rural (de 1 a 2 499<br />
habitantes), semiurbana (de 2 500 a 14 999 habitantes)<br />
y urbana (más de 15 000 habitan tes) (cuadros 7-8 a<br />
7-11).<br />
Concentración de la población<br />
En 2000 se registraron 97 483 412 habitantes en México<br />
cuya superficie es de 1 967 183 km 2 . Según estos<br />
datos, la densidad de población es de 50 habitantes por<br />
kilómetro cuadrado en el ámbito nacional. En 2005 se<br />
registraron 103 263 388 habitantes y una densidad de<br />
53 habitantes por km 2 . Pero esas cifras muestran variaciones<br />
por entidad federativa (cuadro 7-12), ya que<br />
44.5% de la población se concentra en 13% del territorio<br />
nacional, es decir, las regiones del centro y occidente.<br />
La región del centro abarca: Esta do de México,<br />
Distrito Federal, Morelos, Tlax cala, Hidalgo y Puebla;<br />
la región occidente in cluye Jalisco, Nayarit, Colima y<br />
Michoacán. En estas áreas las zonas con aglomeraciones<br />
son tres:<br />
1. Zona metropolitana de la ciudad de México. Hay<br />
15 047 685 habitantes y la densidad de población<br />
es de 3 266.2 hab/km 2 (fig. 7-4).<br />
2. Zona metropolitana de Guadalajara. Hay 2 987 194<br />
habitantes y la densidad de pobla ción es de 1 334.1<br />
hab/km 2 (fig. 7-5).<br />
Cuadro 7-7. Población por grupo de edad y sexo de los Estados Unidos Mexicanos (2000-2005)<br />
2000 (porcentaje) 2005 (porcentaje)<br />
Edad<br />
Varones Mujeres Varones Mujeres<br />
65 y más 2.26 2.00 2.6 3.1<br />
60 a 64 1.07 1.18 1.2 1.4<br />
55 a 59 1.26 1.35 1.5 1.6<br />
50 a 54 1.66 1.77 2.0 2.1<br />
45 a 49 2.00 2.16 2.4 2.6<br />
40 a 44 2.55 2.76 2.9 3.1<br />
35 a 39 3.10 3.41 3.4 3.7<br />
30 a 34 3.47 3.35 3.7 4.2<br />
25 a 29 3.96 4.40 3.8 4.3<br />
20 a 24 4.41 4.2 4.0 4.7<br />
15 a 19 5.03 5.21 5.0 5.1<br />
10 a 14 5.57 5.43 5.5 5.4<br />
5 a 9 5.82 5.3 5.68 5.1<br />
0 a 4 5.17 5.36 5.1 5.0<br />
Fuente: INEGI. Censo General de Población y Vivienda. México, INEGI, 2000. INEGI, Agenda estadística, México, 2006.
Ecología, demografía y salud 101<br />
85 y más años<br />
80 a 84 años<br />
75 a 79 años<br />
70 a 74 años<br />
65 a 69 años<br />
60 a 64 años<br />
55 a 59 años<br />
50 a 54 años<br />
45 a 49 años<br />
40 a 44 años<br />
35 a 39 años<br />
30 a 34 años<br />
25 a 29 años<br />
20 a 24 años<br />
15 a 19 años<br />
10 a 14 años<br />
5 a 9 años<br />
0 a 4 años<br />
85 y más años<br />
80 a 84 años<br />
75 a 79 años<br />
70 a 74 años<br />
65 a 69 años<br />
60 a 64 años<br />
55 a 59 años<br />
50 a 54 años<br />
45 a 49 años<br />
40 a 44 años<br />
35 a 39 años<br />
30 a 34 años<br />
25 a 29 años<br />
20 a 24 años<br />
15 a 19 años<br />
10 a 14 años<br />
5 a 9 años<br />
0 a 4 años<br />
85 y más años<br />
80 a 84 años<br />
75 a 79 años<br />
70 a 74 años<br />
65 a 69 años<br />
60 a 64 años<br />
55 a 59 años<br />
50 a 54 años<br />
45 a 49 años<br />
40 a 44 años<br />
35 a 39 años<br />
30 a 34 años<br />
25 a 29 años<br />
20 a 24 años<br />
15 a 19 años<br />
10 a 14 años<br />
5 a 9 años<br />
0 a 4 años<br />
1990<br />
0.2 0.3<br />
0.2 0.3<br />
Hombres<br />
0.3<br />
0.5<br />
0.7<br />
1.0<br />
1.1<br />
1.4<br />
1.8<br />
2.1<br />
2.7<br />
3.2<br />
0.4<br />
0.5<br />
0.8<br />
1.0<br />
1.2<br />
1.5<br />
1.9<br />
2.2<br />
2.9<br />
3.5<br />
Mujeres<br />
3.8<br />
4.6<br />
5.9<br />
6.5<br />
6.6<br />
6.4<br />
4.2<br />
5.1<br />
6.1<br />
6.4<br />
6.5<br />
6.2<br />
2000<br />
0.2 0.3<br />
0.2 0.3<br />
Hombres<br />
0.4<br />
0.6<br />
0.8<br />
1.1<br />
1.3<br />
1.7<br />
2.1<br />
2.6<br />
3.2<br />
3.5<br />
4.1<br />
0.5<br />
0.7<br />
0.9<br />
1.2<br />
1.4<br />
1.8<br />
2.2<br />
2.8<br />
3.5<br />
3.9<br />
4.5<br />
Mujeres<br />
4.5<br />
5.1<br />
6.7<br />
6.0<br />
5.7<br />
5.0<br />
5.3<br />
5.6<br />
5.8<br />
5.5<br />
Hombres<br />
2010<br />
0.3 0.3<br />
0.4 0.4<br />
0.7<br />
1.6<br />
1.4<br />
1.9<br />
2.4<br />
2.8<br />
3.3<br />
3.6<br />
3.8<br />
4.0<br />
4.1<br />
0.6<br />
0.9<br />
1.1<br />
1.5<br />
1.9<br />
2.5<br />
2.9<br />
3.4<br />
3.8<br />
4.1<br />
4.4<br />
Mujeres<br />
4.2<br />
3.9<br />
3.9<br />
3.9<br />
3.8<br />
4.6<br />
4.9<br />
4.7<br />
4.3<br />
4.1<br />
Figura 7-2. Pirámide poblacional por grupo de edad y sexo. Estados Unidos Mexicanos, 1990, 2000 y 2010.
102 Capítulo 7<br />
Tasa por cada<br />
1000 habitantes<br />
60<br />
50<br />
NATALIDAD, MORTALIDAD GENERAL<br />
Y CRECIMIENTO NATURAL<br />
1900-2005<br />
NATALIDAD<br />
AÑO<br />
1900<br />
1910<br />
1922<br />
1930<br />
1940<br />
1950<br />
1960<br />
1970<br />
1975<br />
1980<br />
1990<br />
2000<br />
2005<br />
NATALIDAD<br />
36.6<br />
32.0<br />
31.4<br />
49.4<br />
44.3<br />
45.5<br />
44.6<br />
42.1<br />
40.4<br />
33.2<br />
29.7<br />
21.7<br />
14.1<br />
MORTALIDAD<br />
GENERAL<br />
33.7<br />
33.4<br />
25.3<br />
26.6<br />
23.2<br />
16.2<br />
11.2<br />
9.6<br />
7.2<br />
5.4<br />
5.2<br />
4.4<br />
4.8<br />
CRECIMIENTO<br />
NATURAL<br />
2.8<br />
-<br />
6.1<br />
22.8<br />
21.1<br />
29.3<br />
33.4<br />
32.5<br />
33.2<br />
27.8<br />
24.5<br />
17.3<br />
11.1<br />
40<br />
CRECIMIENTO NATURAL<br />
30<br />
20<br />
MORTALIDAD GENERAL<br />
10<br />
0<br />
1900 1910 1920 1930 1940 1950 1960 1970 1980 1990 2000 2005<br />
Fuente: Anuarios Estadísticos, SPP (1900-1960).<br />
Agenda Estadística 1976, SPP (1970-1974).<br />
Compendio de Estadísticas Vitales de México, 1975, SSA<br />
Agenda Estadística, 1956, 1993, y 2006 INEGI.<br />
AÑOS<br />
Figura 7-3. Natalidad, mortalidad general y crecimiento natural (1900 a 2005) en los Estados Unidos Mexicanos.
Ecología, demografía y salud 103<br />
Cuadro 7-8. Distribución de localidades por entidad federativa en los Estados Unidos Mexicanos (1990)<br />
Entidad federativa Núm. de localidades Rurales Suburbanas Urbanas<br />
Aguascalientes 1 357 1 341 12 4<br />
Baja California 1 910 1 878 27 5<br />
Baja California Sur 2 308 2 296 9 3<br />
Campeche 1 950 1 925 21 4<br />
Coahuila 3 649 3 605 26 18<br />
Colima 948 930 13 5<br />
Chiapas 16 422 16 302 107 13<br />
Chihuahua 10 761 10 716 35 10<br />
Distrito Federal 282 253 14 15<br />
Durango 5 508 5 466 37 5<br />
Guanajuato 6 617 6 518 73 26<br />
Guerrero 6 008 5 902 92 14<br />
Hidalgo 3 868 3 786 70 12<br />
Jalisco 8 731 8 572 131 28<br />
México 4 014 3 714 259 41<br />
Michoacán 7 716 7 556 138 22<br />
Morelos 721 644 67 10<br />
Nayarit 1 908 1 836 38 7<br />
Nuevo León 5 123 5 084 26 13<br />
Oaxaca 7 210 7 076 122 12<br />
Puebla 4 930 4 716 195 19<br />
Querétaro 1 471 1 434 33 4<br />
Quintana Roo 1 303 1 285 15 3<br />
San Luis Potosí 5 299 5 246 45 8<br />
Sinaloa 5 247 5 162 75 10<br />
Sonora 6 165 6 112 39 14<br />
Tabasco 2 475 2 415 51 9<br />
Tamaulipas 6 803 6 759 31 13<br />
Tlaxcala 794 727 59 8<br />
Veracruz 17 390 17 150 198 42<br />
Yucatán 3 150 3 074 65 11<br />
Zacatecas 4 564 4 509 47 8<br />
Total 156 602 154 016 2 170 416<br />
Fuente: INEGI. XI Censo General de Población y Vivienda. México: INEGI, 1990.<br />
Cuadro 7-9. Tamaño de la localidad y número de<br />
habitantes en los Estados Unidos Mexicanos<br />
(1990)<br />
Tamaño de la localidad<br />
(núm. de habitantes)<br />
Población<br />
1 a 99 2 190 339<br />
100 a 499 7 760 320<br />
500 a 999 5 922 495<br />
1 000 a 1 999 5 779 036<br />
2 000 a 2 499 1 637 734<br />
2 500 a 4 999 4 647 566<br />
5 000 a 9 999 4 226 294<br />
10 000 a 14 999 2 410 451<br />
15 000 a 19 999 1 675 566<br />
20 000 a 49 999 5 075 188<br />
50 000 a 99 999 3 854 850<br />
100 000 a 499 999 18 233 313<br />
500 000 a 999 999 8 878 127<br />
1 000 000 y más 8 958 366<br />
Rural 23 289 924 (28.67%)<br />
Suburbana 11 284 311 (13.89%)<br />
Urbana 46 675 410 (57.44%)<br />
Total 81 249 645<br />
Fuente: INEGI. XI Censo General de Población y Vivienda. México:<br />
INEGI, 1990.<br />
3. Zona metropolitana de Monterrey. Cuenta con<br />
2 603 709 habitantes y su densidad es de 648.9<br />
hab/km 2 (fig. 7-6).<br />
El grado de concentración de las actividades económicas<br />
repercute en el ambiente: en la zona metropolitana<br />
de la ciudad de México, los índi ces de contaminación<br />
sobrepasan las normas internacionales, y<br />
además corre peligro la dis ponibilidad de agua.<br />
El norte de los Estados Unidos Mexicanos, sin<br />
contar Tijuana y la zona metropolitana de Monterrey,<br />
registra densidad baja de población. Sin embargo, los<br />
ecosistemas se han alterado debido a las características<br />
de las actividades económicas; por ejemplo, la ganadería<br />
extensi va ha ocasionado procesos de erosión.<br />
La zona sur de la República cuenta con gran riqueza<br />
de recursos naturales, como el agua; pero la infraestructura<br />
económica es insuficiente para garantizar<br />
el desarrollo sostenido.
104 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-10. Jerarquía de ciudades 1 por tamaño de población en los Estados Unidos Mexicanos (1990)<br />
Ciudades según rango de población 2<br />
Pequeñas Medianas Grandes<br />
50 000 a<br />
99 999 100 000 a 249 999<br />
250 000 a<br />
499 999<br />
500 000 a<br />
749 999<br />
750 000 a<br />
999 999<br />
1 000 000<br />
y más<br />
Piedras Negras<br />
San Martín<br />
Texmelucan<br />
Río Bravo<br />
Manzanillo<br />
Puebla 3<br />
Tepatitlán<br />
Hidalgo del Parral<br />
San Cristóbal de<br />
las Casas<br />
Ciudad Guzmán<br />
Matehuala<br />
Juchitán<br />
Salina Cruz<br />
Tepic<br />
Monclova 3<br />
Tapachula<br />
Nuevo Laredo<br />
La Piedad 3<br />
Uruapan<br />
Victoria<br />
Salamanca<br />
Pachuca 3<br />
Zacatecas<br />
Zamora 3<br />
Ciudad del Carmen<br />
Cancún<br />
Campeche<br />
Ciudad Valles<br />
Guaymas<br />
San Juan del Río<br />
Navojoa<br />
Guanajuato<br />
Tuxpan<br />
El Mante<br />
Silao<br />
Cuauhtémoc<br />
Acámbaro<br />
Puerto Vallarta<br />
Tulancingo 3<br />
San Luis Río Colorado<br />
Tecomán 3<br />
Morelia<br />
Saltillo-Ramos<br />
Arizpe 3<br />
Veracruz 3<br />
Hermosillo<br />
Villahermo sa 3<br />
Durango<br />
Irapuato<br />
Tlaxcala 3<br />
Oaxaca 3<br />
Mazatlán<br />
Cajeme<br />
Celaya<br />
Jalapa 3<br />
Tijuana<br />
Mérida 3<br />
Tampico 3<br />
San Luis Potosí 3<br />
Mexicali<br />
Culiacán<br />
Acapulco<br />
Ahome 3<br />
Querétaro 3<br />
Aguascalientes 3<br />
Cuernavaca 3<br />
Coatzacoalcos 3<br />
Chihuahua<br />
Orizaba 3 León 3<br />
Toluca 3<br />
Ciudad Juárez<br />
Torreón-Gómez<br />
Palacios 3 Ciudad de México 3<br />
Guadalajara 3<br />
Monterrey 3<br />
Puebla 3<br />
Ciudad Acuña<br />
Sahuayo<br />
Cuautla 3<br />
Chetumal<br />
La Paz<br />
Fresnillo<br />
Tehuacán<br />
Colima 3<br />
Chilpancingo<br />
Lázaro Cárdenas<br />
Valle de Santiago<br />
San Juan Bautista T.<br />
Nogales<br />
Zitácuaro<br />
Lagos de Moreno<br />
Atlixco<br />
Delicias<br />
Ocotlán 3<br />
Iguala<br />
Apatzingán<br />
Matamoros<br />
Tuxtla Gutiérrez<br />
Reynosa<br />
Poza Rica 3<br />
Ensenada<br />
Cárdenas 3<br />
1<br />
Delimitación preliminar con base en: 1) municipios con localidades de 50 000 y más habitantes en 1990, y 2) criterio de conurbación<br />
municipal.<br />
2<br />
El orden en que se presentan las ciudades en cada intervalo está de acuerdo con su tamaño, listadas de mayor a menor.<br />
3<br />
Zona metropolitana.<br />
Fuente: INEGI. XI Censo General de Población y Vivienda, 1990. INEGI: México, 1991.<br />
Cuadro 7-11. Clasificación de las entidades federativas por grado de urbanización 1 en los Estados Unidos Mexicanos (1990)<br />
Nivel<br />
Nacional 1 2 3 4 5 6 7<br />
Valor del<br />
57.45 23.10 38.87 46.8 54.41 69.53 80.97 95.22<br />
indicador<br />
Aportación de 100.00 11.56 26.60 6.33 8.05 29.04 4.47 13.95<br />
población<br />
Entidades 32 Chiapas<br />
Hidalgo<br />
Oaxaca<br />
Zacatecas<br />
Campeche<br />
Durango<br />
Querétaro<br />
Sinaloa<br />
Guanajuato<br />
Morelia<br />
Yucatán<br />
Baja California<br />
Coahuila<br />
Distrito<br />
Federal<br />
Nuevo León<br />
Guerrero<br />
Michoacán<br />
Nayarit<br />
Puebla<br />
San Luis Potosí<br />
Tabasco<br />
Tlaxcala<br />
Veracruz<br />
1<br />
Población que vive en localidades de 15 000 y más habitantes entre población total estatal.<br />
Fuente: INEGI. Niveles de bienestar de México. México: INEGI, 1993.<br />
Aguascalientes<br />
Baja California Sur<br />
Colima<br />
Chihuahua<br />
Jalisco<br />
México<br />
Quintana Roo<br />
Sonora<br />
Tamaulipas
Ecología, demografía y salud 105<br />
Cuadro 7-12. Densidad de población por kilómetro<br />
cuadrado, según entidad federativa en los<br />
Estados Unidos Mexicanos (2000)<br />
Entidad federativa<br />
Densidad<br />
de población/km 2<br />
Aguascalientes 179<br />
Baja California 35<br />
Baja California Sur 6<br />
Campeche 12<br />
Coahuila 15<br />
Colima 99<br />
Chiapas 53<br />
Chihuahua 12<br />
Distrito Federal 5 643<br />
Durango 12<br />
Guanajuato 150<br />
Guerrero 48<br />
Hidalgo 108<br />
Jalisco 80<br />
México 611<br />
Michoacán 68<br />
Morelos 314<br />
Nayarit 34<br />
Nuevo León 59<br />
Oaxaca 37<br />
Puebla 149<br />
Querétaro 116<br />
Quintana Roo 22<br />
San Luis Potosí 36<br />
Sinaloa 43<br />
Sonora 12<br />
Tabasco 77<br />
Tamaulipas 35<br />
Tlaxcala 238<br />
Veracruz 96<br />
Yucatán 38<br />
Zacatecas 18<br />
Fuente: INEGI. XII Censo General de Población y Vivienda. México:<br />
INEGI, 2000.<br />
Delegaciones<br />
Azcapotzalco<br />
Coyoacán<br />
Cuajimalpa<br />
G. A. Madero<br />
Iztacalco<br />
Iztapalapa<br />
M. Contreras, La<br />
Milpa Alta<br />
Álvaro Obregón<br />
Tláhuac<br />
Tlalpan<br />
Xochimilco<br />
Benito Juárez<br />
Cuauhtémoc<br />
M. Hidalgo<br />
V. Carranza<br />
Nivel<br />
4<br />
3 a 4<br />
1<br />
4<br />
5<br />
3 a 4<br />
2<br />
1<br />
2<br />
1 a 2<br />
1<br />
1<br />
4<br />
4 a 5<br />
1<br />
4<br />
Municipios<br />
Acolman<br />
Atenco<br />
Atizapán de Z.<br />
Coacalco<br />
Cuautitlán I.<br />
Cuautitlán<br />
Chalco<br />
Chicoloapan<br />
Chimalhuacán<br />
Ecatepec<br />
Huixquilucan<br />
Ixtapaluca<br />
Jaltenco<br />
Melchor O.<br />
Naucalpan<br />
Nextlalpan<br />
Nezahualcóyotl<br />
Nicolás Romero<br />
La Paz<br />
Tecámac<br />
Teoloyucan<br />
Tepotzotlán<br />
Texcoco<br />
Tlalnepantla<br />
Tultepec<br />
Tultitlán<br />
Zumpango<br />
Nivel<br />
1<br />
1<br />
2<br />
2<br />
2<br />
1<br />
1<br />
1<br />
3<br />
3<br />
1<br />
1<br />
1<br />
1<br />
2<br />
1<br />
5<br />
1<br />
2<br />
1<br />
1<br />
1<br />
2<br />
3<br />
1<br />
2<br />
1<br />
Figura 7-4. Zona metropolitana de la ciudad de México<br />
(ZMCM). Densidad de población por<br />
delegación y municipio en 1990. Fuente: INEGI.<br />
XI Censo General de Población y Vivienda<br />
(1990). Resultados definitivos. Tabulador<br />
básico. México: INEGI, 1992.
106 Capítulo 7<br />
039<br />
098<br />
101<br />
120<br />
070<br />
097<br />
051<br />
Guadalajara<br />
Tlaquepaque<br />
Tonalá<br />
Zapopan<br />
El Salto<br />
Tlajomulco de Zúñiga<br />
Juanacatlán<br />
120<br />
039<br />
Nivel<br />
1<br />
2<br />
Habitantes<br />
107 a 922<br />
1 254 a 1 409<br />
101<br />
098<br />
070<br />
097 051<br />
Límite metropolitano<br />
Límite municipal<br />
3 8 782<br />
Figura 7-5. Zona metropolitana de Guadalajara (ZMG): densidad de población por municipio (1990). Fuente: INEGI. XI<br />
Censo General de Población y Vivienda (1990). Resultados definitivos. Tabulador básico. México: INEGI, 1992.<br />
018<br />
021<br />
046<br />
006<br />
026<br />
039<br />
006<br />
019<br />
021<br />
026<br />
046<br />
048<br />
031<br />
049<br />
018<br />
Monterrey<br />
Apodaca<br />
San Pedro G. García<br />
General Escobedo<br />
Guadalupe<br />
S. Nicolás de los Garza<br />
Santa Catarina<br />
Juárez<br />
Santiago<br />
García<br />
048<br />
019 039<br />
049<br />
031<br />
Nivel Habitantes<br />
1 15 a 632<br />
Límite estatal<br />
2 1 629 a 2 369<br />
Límite metropolitano<br />
3 3 540 a 5 030<br />
Límite municipal<br />
Figura 7-6. Zona metropolitana de Monterrey (ZMM): densidad de población por municipio (1990). Fuente: INEGI. XI<br />
Censo General de Población y Vivienda (1990). Resultados definitivos. Tabulador básico. México: INEGI, 1992.
Ecología, demografía y salud 107<br />
Distribución de la población rural y urbana<br />
En el cuadro 7-13 se muestra la distribución de la población<br />
rural, semiurbana y urbana en diver sos años.<br />
Movimientos migratorios<br />
En el cuadro 7-14 se muestran las cifras de población<br />
de cinco y más años por entidad federativa según condición<br />
de migración.<br />
Educación<br />
La tasa de alfabetización en 2005 fue de 95, pero varía<br />
desde 97.1 en el Distrito Federal hasta 78.6 en Chiapas.<br />
En el cuadro 7-15 se presentan los principales indicadores<br />
educativos.<br />
Crecimiento de la población<br />
Las ciudades con más crecimiento en los últi mos años<br />
son: la ciudad de México; Guadalajara, Jalisco; Monterrey,<br />
Nuevo León; Puebla, Puebla; León, Guanajuato;<br />
Toluca, Estado de México; Ciudad Juárez, Chihuahua;<br />
Torreón, Coahuila; Tijuana, Baja California; Mérida,<br />
Yu catán; Tampico, Tamaulipas, y San Luis Potosí, San<br />
Luis Potosí (figs. 7-7 y 7-8).<br />
Para estudiar el crecimiento o decremento de la<br />
población es importante revisar las ta sas de natalidad<br />
y mortalidad, así como la expectativa de vida y la fecundidad.<br />
La tasa es una cifra relativa que se obtiene por la<br />
siguiente fórmula:<br />
Número de veces que ocurre el evento<br />
o fenómeno en un tiempo<br />
específico × 10, 100, 1 000 o 10 000<br />
Tasa = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯<br />
Número de individuos que pueden<br />
o no estar expuestos al riesgo<br />
de ese evento en el mismo lapso<br />
Cuadro 7-13. Evolución de la población urbana, semiurbana y rural (1910-2000) (miles de habitantes)<br />
Localidades<br />
Urbana Semiurbana Rural Total<br />
Población 1910 1 783 1 251 12 126 15 160<br />
Población 1930 2 892 1 342 12 319 16 553<br />
Tasa de crecimiento<br />
2.47 0.36 0.08 0.45<br />
1910-1930<br />
Población 1950 7 209 2 014 16 556 25 779<br />
Tasa de crecimiento<br />
4.55 2.02 1.47 2.23<br />
1930-1950<br />
Población 1970 22 004 3 969 23 077 49 050<br />
Tasa de crecimiento<br />
5.68 3.45 1.69 3.23<br />
1950-1970<br />
Población 1990 46 675 11 289 23 290 81 249<br />
Tasa de crecimiento<br />
3.74 5.19 0.05 263<br />
1970-1990<br />
Población 1995 59 633 12 870 24 155 91 158<br />
Tasa de crecimiento<br />
2.78 1.63 0.65 206<br />
1990-1995<br />
Población 2000 59 381 13 329 24 651 97 361<br />
Tasa de crecimiento<br />
1995-2000<br />
1.95 1.75 0.48 1.60<br />
Fuente: Unikel L. et al. El Desarrollo Urbano de México. Diagnóstico e implicaciones futuras, México, 1976.<br />
INEGI, XI Censo General de Población y Vivienda 1990, México, 1992.<br />
INEGI, Conteo de Población y Vivienda 1995.<br />
INEGI, XII Censo General de Población y Vivienda 2000, resultados preliminares, México, 2000.
108 Capítulo 7<br />
Tasa de natalidad<br />
La tasa de natalidad se mide por lo general en un año<br />
y se obtiene de la siguiente manera:<br />
Número de nacidos<br />
vivos<br />
Tasa de natalidad = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ 1 000<br />
Población total<br />
Tasas de mortalidad<br />
Las tasas de mortalidad pueden ser de tipo general,<br />
infantil, perinatal, neonatal, por edades o ma terna:<br />
Defunciones de<br />
nacidos vivos<br />
Mortalidad general = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ 1 000<br />
Población en ese<br />
lugar a mediados<br />
de año<br />
Defunciones: menores<br />
de 1 año en un área<br />
dada y durante 1 año<br />
Mortalidad infantil = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ 1 000<br />
Nacidos vivos<br />
durante un año<br />
en el mismo lugar<br />
Muertes fetales<br />
(28 semanas de<br />
gestación o más) y<br />
defunciones de niños<br />
menores de siete días<br />
de edad en un área<br />
dada en un año<br />
Mortalidad perinatal = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ 1 000<br />
Nacidos vivos en<br />
un año, en el mismo<br />
lugar<br />
Cuadro 7-14. Población de cinco y más años por entidad federativa según condición de migración (2000) (año censal, 2005)<br />
Entidad federativa Total No migrante estatal (%) Migrante estatal (%) Migrante internacional (%)<br />
Total 90 266 425 96.5 2.7 0.3<br />
Aguascalientes 931 261 95.0 3.9 0.6<br />
Baja California 2 367 783 90.9 7.2 1.0<br />
Baja California Sur 438 867 89.2 9.4 0.4<br />
Campeche 672 785 95.3 4.0 0.2<br />
Coahuila 2 204 428 97.3 2.1 0.2<br />
Colima 496 811 93.3 5.5 0.8<br />
Chiapas 3 677 979 98.8 0.7 0.1<br />
Chihuahua 2 763 019 96.3 2.4 0.5<br />
Distrito Federal 7 794 967 96.5 2.4 0.3<br />
Durango 1 328 692 97.1 2.0 0.5<br />
Guanajuato 4 306 794 97.8 1.5 0.4<br />
Guerrero 2 721 161 98.1 1.2 0.2<br />
Hidalgo 2 079 041 95.7 3.6 0.3<br />
Jalisco 5 870 402 96.8 1.9 0.6<br />
México 12 014 536 95.9 3.5 0.1<br />
Michoacán 3 495 742 97.2 1.7 0.6<br />
Morelos 1 394 228 95.2 4.1 0.3<br />
Nayarit 841 638 94.3 4.4 0.8<br />
Nuevo León 3 720 379 96.3 2.6 0.2<br />
Oaxaca 3 103 694 97.5 1.7 0.3<br />
Puebla 4 688 913 97.4 2.1 0.2<br />
Querétaro 1 391 170 94. 3 5.0 0.4<br />
Quintana Roo 890 989 87.6 11.3 0.6<br />
San Luis Potosí 2 133 345 97.3 1.9 0.4<br />
Sinaloa 2 283 728 97.1 2.3 0.3<br />
Sonora 2 099 973 96.7 2.4 0.3<br />
Tabasco 1 761 863 98.2 1.3 0.1<br />
Tamaulipas 2 644 808 94.7 4.3 0.3<br />
Tlaxcala 941 733 96. 5 3.0 0.1<br />
Veracruz 6 370 647 97.6 1.9 0.2<br />
Yucatán 1 617 102 97. 2 2.1 0.2<br />
Zacatecas 1 212 947 97.0 1.8 0.8<br />
Fuente: INEGI, II Conteo de Población y Vivienda, México, 2005.
Ecología, demografía y salud 109<br />
Defunciones de<br />
menores de 28 días<br />
de edad en un área<br />
dada en un año<br />
Mortalidad neonatal = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ 1 000<br />
Nacidos vivos en<br />
un año en el mismo<br />
lugar<br />
Defunciones de<br />
un grupo con<br />
edad determina da<br />
en un año<br />
Mortalidad por edades = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯ ⎯ 1 000<br />
Población de esa<br />
edad a medio año<br />
Estados Unidos<br />
Mexicanos 2.0<br />
Quintana Roo<br />
Baja California<br />
Baja California Sur<br />
Estado de México<br />
Nuevo León<br />
Jalisco<br />
Querétaro<br />
Chiapas<br />
Aguascalientes<br />
Puebla<br />
Colima<br />
Tlaxcala<br />
Tabasco<br />
Sinaloa<br />
Campeche<br />
Oaxaca<br />
Nayarit<br />
Morelos<br />
Michoacán<br />
Guanajuato<br />
Tamaulipas<br />
San Luis Potosí<br />
Guerrero<br />
Durango<br />
Coahuila<br />
Hidalgo<br />
Veracruz<br />
Zacatecas<br />
Chihuahua<br />
Sonora<br />
Yucatán<br />
Distrito Federal<br />
0.2<br />
2.9<br />
2.8<br />
2.7<br />
2.7<br />
2.7<br />
2.6<br />
2.6<br />
2.5<br />
2.4<br />
2.4<br />
2.4<br />
2.3<br />
2.2<br />
2.0<br />
1.9<br />
1.8<br />
1.7<br />
1.6<br />
1.6<br />
1.3<br />
1.3<br />
1.2<br />
1.1<br />
1.0<br />
1.0<br />
0.9<br />
0.8<br />
3.4<br />
4.0<br />
5.5<br />
6.2<br />
0 1 2 3 4 5 6 7<br />
Tasa porcentual<br />
Figura 7-7. Tasa de crecimiento anual por entidad federativa en los Estados Unidos Mexicanos (1990 a 1992). Fuente:<br />
INEGI. XI Censo General de Población y Vivienda (1990). México: INEGI, 1991, e INEGI. Encuesta Nacional de la<br />
Dinámica Demográfica (1992). México: INEGI, 1994.
110 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-15. Principales indicadores educativos (ciclos escolares 1990/1991 y 2005/2006)<br />
Indicadores 1990/1991 2005/2006<br />
Grado promedio de escolaridad (población de 15 y más años) 6.5 8.2<br />
Tasa de terminación<br />
Preescolar 39.5 70.4<br />
Primaria 85.5 99.2<br />
Secundaria 57.5 74.4<br />
Media superior 26.4 41.1<br />
Profesional técnica 6.5 5.8<br />
Licenciatura 12.6 21.8<br />
Fuente: SEP, Sistema para el análisis de la estadística educativa.<br />
Defunciones por causa<br />
de la maternidad en un<br />
área, en un año<br />
Mortalidad materna = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Nacidos vivos en un<br />
año en el mismo lugar<br />
En el mundo nacen cuatro personas cada se gundo.<br />
Las proyecciones de las Naciones Uni das indican que,<br />
de mantenerse esta tendencia, la población mundial<br />
en el año 2015 será de 7 830 millones de personas.<br />
México se encuentra entre los países más poblados del<br />
mundo a pesar de que su tasa de crecimiento natural<br />
haya descendido a 1.1.<br />
En 2005, la mortalidad general disminuyó a 4.8<br />
por cada 1 000 habitantes debido a la am pliación de<br />
la infraestructura sanitaria y los sis temas de salud y<br />
asistencia social. Al mejorar las campañas de vacunación<br />
y de atención a la salud maternoinfantil, han<br />
Miles de<br />
habitantes<br />
16 000<br />
14 000<br />
12 000<br />
10 000<br />
8 000<br />
6 000<br />
4 000<br />
x<br />
x<br />
x<br />
x<br />
x<br />
x x x<br />
x<br />
x<br />
x<br />
x<br />
TPCA<br />
9.0<br />
8.0<br />
7.0<br />
6.0<br />
5.0<br />
4.0<br />
3.0<br />
2.0<br />
2 000<br />
1.0<br />
0<br />
Ciudad<br />
de<br />
México<br />
Guada-Montelajararrey,<br />
Jal. N. L.<br />
0.0<br />
Puebla, León, Toluca, Ciudad Torreón, Tijuana,<br />
Yuc. pico, Luis<br />
Mérida, Tam-<br />
San<br />
Pue. Gto. Méx. Juárez, Coah.<br />
Chih. Gómez B. C. Tamps. Potosí,<br />
Palacio, Dgo.<br />
S. L. P.<br />
1950 1970 1990 x 50 a 70 70 a 90<br />
Figura 7-8. Crecimiento de las 12 ciudades principales de los Es tados Unidos Mexicanos (1950 a 1970 y 1970 a 1990). TCPA:<br />
tasa de crecimiento promedio anual. Fuente: Unikel L. El desa rrollo urbano de México. Méxi co: El Colegio<br />
de México, 1976; Negrete ME, Salazar H. Zonas metropolitanas en México (1980). Estudios demográficos<br />
y urbanos. Vol 1. Núm. 1. Méxi co: El Colegio de México, 1986, e INEGI. XI Censo General de Población y<br />
Vivienda 1990. México: INEGI, 1992.
Ecología, demografía y salud 111<br />
disminuido las de funciones de niños menores de un<br />
año a 13.8 por cada 1 000 nacidos vivos.<br />
En México, las causas de mortalidad han va riado<br />
con el paso del tiempo y de acuerdo con el grado de<br />
desarrollo del país (cuadros 7-16 a 7-20).<br />
Como se puede observar, hay causas de mor talidad<br />
de países desarrollados, como las en fermedades del<br />
corazón, los accidentes y los tumores malignos, las<br />
cuales se relacionan con aumento de la esperanza de<br />
vida, la industria lización y el urbanismo. Los accidentes<br />
por ve hículos automotores han adquirido gran importancia<br />
como causa de muerte.<br />
Las enfermedades transmisibles como cau sa de<br />
muerte han disminuido; sin embargo, el síndrome de<br />
inmunodeficiencia adquirida (sida) día con día afecta<br />
a más personas, sobre todo varones y personas de 25 a<br />
44 años de edad.<br />
Morbilidad<br />
La morbilidad se refiere a las enfermedades que afectan<br />
a las personas. La tasa de morbilidad es importante<br />
para determinar el perfil de salud de una comunidad<br />
y se obtiene de la siguiente manera:<br />
Cuadro 7-16. Evolución de algunas causas de defunción en los Estados Unidos Mexicanos, 1922-2000<br />
Causas 1922 1930 1940 1950 1960 1970 1984 1993 1999-2000<br />
Accidentes 4 311 5 342 10 138 11 994 14 486 25 780 60 903 37 024 35 472<br />
Bocio 13 14 45 40 32 48 240 234 −<br />
Bronquitis 7 946 9 167 13 127 9 561 10 562 14 361 6 282 9 882 6 942<br />
Brucelosis − 15 194 228 161 52 22 20 16<br />
Cirrosis hepática 1 139 3 431 4 860 12 978 7 678 11 182 16 515 20 490 27 856<br />
Diabetes mellitus 368 444 819 1 228 2 787 7 486 19 418 29 581 49 954<br />
Difteria 1 082 889 1 070 538 438 158 18 3 0<br />
Enfermedades<br />
3 730 4 809 4 116 3 176 6 999 12 107 17 177 21 571 25 731<br />
cerebrovasculares<br />
Enfermedades del<br />
4 677 6 559 10 666 18 506 24 166 32 744 51 328 64 636 70 510<br />
corazón<br />
Fiebre tifoidea 4 792 3 954 5 367 3 967 2 627 2 837 948 298 126<br />
Gastroenteritis y colitis 50 170 76 141 96 485 72 386 60 098 70 397 33 538 24 851 4 902<br />
Gripe e influenza 7 254 3 964 4 937 4 190 7 395 11 582 1 030 243 11 390<br />
Hipertensión arterial − − − 575 2 001 2 832 4 095 11 618 9 371<br />
Homicidios 5 071 12 811 13 175 12 403 11 158 8 440 12 473 16 044 10 285<br />
Lepra 130 154 195 117 65 32 31 33 0<br />
Mortalidad perinatal 11 269 11 569 19 798 25 256 47 081 25 222 23 398 20 954 18 202<br />
Neumonías 43 168 58 162 70 022 65 781 49 329 72 094 26 319 18 365 13 893<br />
Paludismo 25 035 27 243 23 917 22 996 7 064 33 50 − 1<br />
Poliomielitis − 38 91 134 221 27 5 60 − 0<br />
Rabia 31 34 23 43 78 84 57 16 7<br />
Sarampión 2 164 15 341 17 928 7 687 6 096 11 891 350 20 0<br />
Sífilis 1 438 1 867 3 771 1 072 678 167 107 33 13<br />
Sida − − − − − − − 3 164 4 324<br />
Suicidios 158 118 207 259 668 554 940 2 359 3 811<br />
Tétanos 1 594 2 348 2 351 2 127 2 617 1 816 525 139 82<br />
Tifus 669 894 609 723 140 25 63 22 0<br />
Tos ferina 14 383 18 585 8 336 11 888 4 741 3 458 797 67 9<br />
Tuberculosis. Sistema<br />
9 800 10 186 9 420 9 229 8 243 8 628 6 910 4 253 3 229<br />
respiratorio<br />
Tumores malignos 2 058 2 413 4 553 7 432 12 516 18 415 33 459 44 951 56 201<br />
Viruela 11 966 17 405 1 341 153 − − − − −<br />
Fuente: Dirección General de Estadística, Informática y Evaluación, SS.<br />
Dirección General de Estadística, SPP. Dirección General de Epidemiología, SSA.
112 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-17. Principales causas de mortalidad general en los Estados Unidos Mexicanos (2002)<br />
Núm.<br />
de<br />
orden Defunciones<br />
1 Enfermedades<br />
del corazón<br />
(74 325)<br />
2 Tumores malignos<br />
(58 599)<br />
3 Diabetes<br />
mellitus<br />
(54 925)<br />
4 Accidentes<br />
(35 639)<br />
5 Enfermedades<br />
del hígado<br />
(28 449)<br />
Mortalidad<br />
infantil<br />
Afecciones<br />
originadas en el<br />
periodo perinatal<br />
(18 582)<br />
Malformaciones<br />
congénitas,<br />
deformidades<br />
y anomalías<br />
cromosómicas<br />
(9 204)<br />
Influenza y neumonía<br />
(2 369)<br />
Accidentes<br />
(1 658)<br />
Infecciones<br />
intestinales<br />
(1 495)<br />
Edad preescolar<br />
(1 a 4 años)<br />
Accidentes<br />
(1 685)<br />
Malformaciones<br />
congénitas,<br />
deformidades<br />
y anomalías<br />
cromosómicas<br />
(856)<br />
Enfermedades<br />
infecciosas intestinales<br />
(665)<br />
Influenza y<br />
neumonía (544)<br />
Tumores malignos<br />
(418)<br />
Edad escolar<br />
(5 a 14 años) 15 a 24 años 25 a 34 años 35 a 44 años 45 a 64 años<br />
Accidentes<br />
Accidentes<br />
Accidentes<br />
Accidentes<br />
Diabetes mellitus<br />
(2 301)<br />
(6 110)<br />
(5 737)<br />
(4 561)<br />
(19 174)<br />
Tumores malignos<br />
(1 065)<br />
Malformaciones<br />
congénitas,<br />
deformaciones<br />
y anomalías<br />
cromosómicas<br />
(467)<br />
Parálisis cerebral<br />
y otros síndromes<br />
paralíticos<br />
(291)<br />
Agresiones<br />
(2 367)<br />
Tumores malignos<br />
(1 360)<br />
Lesiones<br />
autoinfligidas<br />
intencionalmente<br />
(1 184)<br />
Agresiones (233) Enfermedades<br />
del corazón<br />
(531)<br />
Agresiones<br />
(2 667)<br />
Tumores malignos<br />
(2 093)<br />
Enfermedad<br />
por virus de la<br />
inmunodeficiencia<br />
humana<br />
(1 456)<br />
Enfermedades<br />
del hígado (953)<br />
Enfermedad<br />
alcohólica y otras<br />
enfermedades<br />
crónicas del<br />
hígado (4 250)<br />
Tumores malignos<br />
(4 124)<br />
Enfermedades<br />
del corazón<br />
(2 517)<br />
Diabetes mellitus<br />
(1 981)<br />
Tumores malignos<br />
(18 993)<br />
Enfermedades<br />
del corazón<br />
(14 719)<br />
Enfermedad<br />
alcohólica y<br />
otras crónicas<br />
del hígado<br />
(12 889)<br />
Accidentes<br />
(6 483)<br />
65 años y<br />
mayores<br />
Enfermedades<br />
del corazón<br />
(54 719)<br />
Diabetes<br />
mellitus<br />
(32 757)<br />
Tumores<br />
malignos<br />
(31 366)<br />
Enfermedades<br />
cerebrovasculares<br />
(20 065)<br />
Enfermedad<br />
pulmonar<br />
obstructiva<br />
crónica<br />
(10 557)
Ecología, demografía y salud 113<br />
6 Enfermedades<br />
cerebrovasculares<br />
(26 583)<br />
Infecciones<br />
respiratorias<br />
agudas (975)<br />
Desnutrición y<br />
otras deficiencias<br />
nutricias (369)<br />
Insuficiencia<br />
renal (182)<br />
Embarazo, parto<br />
y puerperio<br />
(452)<br />
Enfermedades<br />
del corazón<br />
(1 098)<br />
7 Ciertas afecciones<br />
originadas<br />
en el periodo<br />
perinatal<br />
(18 582)<br />
8 Enfermedades<br />
pulmonares<br />
obstructivas<br />
crónicas<br />
(12 016)<br />
9 Influenza y<br />
neumonía<br />
(11 706)<br />
10 Agresiones<br />
(10 088)<br />
Desnutrición y<br />
otras deficiencias<br />
nutricias (832)<br />
Infecciones<br />
respiratorias<br />
agudas (173)<br />
Influenza y<br />
neumonía (174)<br />
Septicemia (586) Septicemia (169) Lesiones<br />
autoinfligidas<br />
intencionalmente<br />
(167)<br />
Enfermedades<br />
del corazón<br />
(230)<br />
Enfermedades<br />
cerebrovasculares<br />
(110)<br />
Parálisis cerebral<br />
y otros síndromes<br />
paralíticos<br />
(129)<br />
Desnutrición<br />
(140)<br />
Agresiones (114) Enfermedades<br />
del corazón<br />
(140)<br />
Insuficiencia<br />
renal (398)<br />
Enfermedad por<br />
virus de la inmunodeficiencia<br />
humana (396)<br />
Malformaciones<br />
congénitas,<br />
deformaciones<br />
y anomalías<br />
cromosómicas<br />
(361)<br />
Lesiones<br />
autoinfligidas<br />
intencionalmente<br />
(983)<br />
Diabetes mellitus<br />
(630)<br />
Embarazo, parto<br />
y puerperio<br />
(518)<br />
Epilepsia (243) Insuficiencia<br />
renal (382)<br />
Fuente: INEGI. Dirección General de Estadística. Dirección de Estadísticas Demográficas y Sociales.<br />
Agresiones<br />
(1 935)<br />
Enfermedad<br />
por virus de la<br />
inmunodeficiencia<br />
humana<br />
(1 390)<br />
Enfermedades<br />
cerebrovasculares<br />
(830)<br />
Lesiones<br />
autoinfligidas<br />
intencionalmente<br />
(597)<br />
Síndrome de<br />
dependencia del<br />
alcohol (588)<br />
Enfermedades<br />
cerebrovasculares<br />
(4 799)<br />
Insuficiencia<br />
renal (1 874)<br />
Agresiones<br />
(1 280)<br />
Síndrome de<br />
dependencia del<br />
alcohol (1 280)<br />
Enfermedades<br />
pulmonares<br />
obstructivas<br />
crónicas (1 239)<br />
Enfermedad alcohólica<br />
y otras<br />
enfermedades<br />
crónicas del<br />
hígado (9 268)<br />
Accidentes<br />
(6 671)<br />
Influenza y<br />
neumonía<br />
(6 499)<br />
Desnutrición y<br />
otras deficiencias<br />
nutricias<br />
(6 393)<br />
Bronquitis crónica,<br />
enfisema<br />
y asma (5 589)
114 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-18. Mortalidad por grupos de edad* (1900-2000)<br />
Grupos de edad 1900 1921 1930 1940 1950 1960 1970 1982 1991 2000<br />
Menores de 1 año 284.7 223.1 131.6 125.7 96.2 74.2 68.5 37.0 20.9 13.8<br />
1 a 4 años 71.1 48.7 55.4 48.2 27.8 14.5 11.6 2.6 1.8 0.8<br />
5 a 14 años 9.8 5.3 9.0 6.1 3.5 2.1 1.6 0.6 0.5 3.2<br />
15 a 44 años 17.3 12.0 11.5 10.2 6.3 4.2 3.5 2.8 1.9 1.5<br />
45 a 64 años 31.7 29.9 27.0 25.0 18.0 14.2 13.5 10.5 9.0 7.8<br />
65 años y más 122.0 116.3 95.1 101.2 80.0 66.8 62.9 55.8 51.9 45.7<br />
Todas las edades 33.7 25.3 26.6 23.2 16.2 11.2 9.9 5.6 5.0 4.48<br />
* Tasa por 1 000 habitantes, excepto en menores de un año, que es por 1 000 nacidos vivos registrados.<br />
Fuente: DGE/SPP.<br />
INEGI: Información Estadística Sector Salud y Seguridad Social, Cuadernos núm. 5, 1986; núm. 15, 1999, y núm. 19, 2002.<br />
Agenda Estadística INEGI, 1993, 1999 y 2003.<br />
Número de enfermedades en un área<br />
dada en un año<br />
⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Población en dicho lugar a mediados<br />
del año<br />
Dependiendo de la enfermedad, pueden ob tenerse<br />
tasas específicas. La prevalencia de las enfermedades<br />
es el número de enfermos de una afección × existentes<br />
en una fecha dada y en un área determinada. La prevalencia<br />
de las enfermedades se conoce mediante la<br />
siguiente fórmula:<br />
Número de enfermos de una<br />
afección × existentes en<br />
una fecha dada y en un área<br />
determinada<br />
Prevalencia = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 100, 1 000,<br />
Cálculo de la población 10 000, 100 000<br />
para la misma fecha en<br />
la misma área<br />
Como no todas las enfermedades conducen a la muerte,<br />
hay que distinguir la tasa de letalidad:<br />
Número de defunciones por una<br />
enfermedad en una zona dada, en un año<br />
⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 100<br />
Número de afectados por la misma enfermedad,<br />
en la misma zona durante un año<br />
Con base en los datos previos es posible observar<br />
que la caries dental tiene alta prevalencia pero letalidad<br />
muy baja. En cambio, el cáncer es de letalidad<br />
más alta, en función de múltiples características, por<br />
ejemplo: tipo, ex tensión, grado de avance en el momento<br />
del diagnóstico y tratamiento.<br />
Esperanza o expectativa de vida<br />
Es el promedio de años de vida esperado para una<br />
persona al cumplir cierta edad, o bien la probabilidad<br />
de vivir tomando en cuenta los riesgos de morir según<br />
la población en que se nace y vive. En 2005, aumentó a<br />
75 años (72 para varones y 77 para mujeres).<br />
Cuadro 7-19. Distribución porcentual de defunciones (1990-2000)<br />
Grupos de edad 1900 1922 1930 1940 1950 1960 1970 1983 1991 2000<br />
Menores de 1 año 31.1 27.7 24.4 24.0 27.0 29.6 30.1 18.9 13.9 8.8<br />
1 a 4 años 19.0 19.9 25.1 24.4 21.0 16.7 14.5 5.3 3.4 1.6<br />
5 a 14 años 7.8 5.2 8.1 7.0 5.7 5.1 4.8 3.0 2.4 1.6<br />
15 a 44 años 23.3 22.0 20.1 19.5 16.8 15.1 14.1 17.8 17.7 16.0<br />
45 a 64 años 10.4 13.2 11.5 12.0 12.8 13.6 13.2 18.0 19.7 21.8<br />
65 años y más 8.3 12.0 10.5 13.0 16.5 18.8 23.3 35.0 42.7 49.6<br />
Todas las edades 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0<br />
Fuente: Dirección General de Estadísticas SPP.<br />
INEGI, Agenda Estadística, 1993, 2000 y 2003.
Ecología, demografía y salud 115<br />
Cuadro 7-20. Mortalidad materna en los Estados Unidos<br />
Mexicanos (1922 a 1993)<br />
Tasa por 1 000<br />
Año Número de defunciones nacidos vivos registrados<br />
1922 4 898 10.8<br />
1930 4 632 5.4<br />
1940 4 692 5.4<br />
1950 3 235 2.8<br />
1960 3 102 1.9<br />
1970 3 050 1.4<br />
1982 2 102 0.8<br />
1993 1 268 0.4<br />
2005 1 270 0.5<br />
Fuente: DGE/SPP. INEGI. Dirección General de Estadística, SPP;<br />
Dirección General de Epidemiología, SS. México, s/f.<br />
La vida media se obtiene con base en la espe ranza<br />
de vida y se refiere a la edad que por tér mino medio<br />
alcanza la mitad de la población. La vida media al nacer<br />
corresponde a la expec tativa de vida al nacer.<br />
Fecundidad<br />
La fecundidad se refiere al número de nacidos vivos<br />
en un año dividido entre el número de mujeres de<br />
15 a 49 años y multiplicado por 1000 (fig. 7-9). En<br />
México, el valor correspondiente a la fecundidad ha<br />
disminuido a 2.5 como consecuencia del uso creciente<br />
de métodos anticon ceptivos, sobre todo en las zonas<br />
urbanas. Las mujeres con escasa instrucción usan me-<br />
Nacional<br />
Zacatecas<br />
Nayarit<br />
Durango<br />
Guerrero<br />
Guanajuato<br />
Tlaxcala<br />
Hidalgo<br />
Oaxaca<br />
San Luis Potosí<br />
Michoacán<br />
Querétaro<br />
Puebla<br />
Aguascalientes<br />
Sinaloa<br />
Jalisco<br />
Chiapas<br />
Colima<br />
Veracruz<br />
Tabasco<br />
Morelos<br />
Chihuahua<br />
Sonora<br />
Coahuila<br />
Campeche<br />
Yucatán<br />
Tamaulipas<br />
Estado de México<br />
Baja California Sur<br />
Baja California<br />
Nuevo León<br />
Quintana Roo<br />
Distrito Federal<br />
2.0<br />
3.1<br />
2.9<br />
2.9<br />
2.8<br />
2.8<br />
2.8<br />
2.8<br />
2.8<br />
2.8<br />
2.8<br />
2.7<br />
2.7<br />
2.7<br />
2.7<br />
2.7<br />
2.7<br />
2.6<br />
2.6<br />
2.6<br />
2.5<br />
2.5<br />
2.5<br />
2.5<br />
2.5<br />
2.5<br />
2.4<br />
2.4<br />
2.4<br />
2.3<br />
2.3<br />
2.3<br />
0.0 0.5 1.0 1.5 2.0 2.5 3.0 3.5<br />
Promedio<br />
Figura 7-9. Promedio de hijos naci dos vivos por mujer según enti dad federativa (1990). Fuente: INEGI. Perfil<br />
sociodemográfico. XI Censo General de Población y Vivienda (1990). México: INEGI, 1992.
116 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-21. Distribución por entidades federativas de los Estados Unidos Mexicanos de la población femenina de 12<br />
años y más con hijos nacidos vivos (1990)<br />
Entidad federativa<br />
Población<br />
femenina<br />
Con hijos<br />
nacidos vivos<br />
Número<br />
de hijos<br />
Promedio<br />
Aguascalientes 252 808 136 762 686 245 2.7<br />
Baja California 587 007 350 508 1 361 253 2.3<br />
Baja California Sur 109 011 66 158 264 186 2.4<br />
Campeche 178 149 107 517 452 957 2.5<br />
Coahuila 709 753 418 342 1 788 700 2.5<br />
Colima 150 642 87 274 398 969 2.6<br />
Chiapas 1 024 769 612 364 2 770 097 2.7<br />
Chihuahua 875 020 531 771 2 187 803 2.5<br />
Distrito Federal 3 299 211 1 894 816 6 687 554 2.0<br />
Durango 469 091 276 916 1 368 146 2.9<br />
Guanajuato 1 384 034 741 133 3 917 597 2.8<br />
Guerrero 879 819 522 725 2 453 594 2.8<br />
Hidalgo 645 302 392 183 1 803 349 2.8<br />
Jalisco 1 906 373 1 033 075 5 078 844 2.7<br />
Estado de México 3 483 956 2 021 571 8 270 609 2.4<br />
Michoacán 1 236 736 665 786 3 473 418 2.8<br />
Morelos 434 928 259 988 1 084 580 2.5<br />
Nayarit 282 641 167 113 810 499 2.9<br />
Nuevo León 1 141 947 642 127 2 635 908 2.3<br />
Oaxaca 1 026 085 625 201 2 873 499 2.8<br />
Puebla 1 435 664 839 318 3 927 194 2.7<br />
Querétaro 356 977 198 313 950 301 2.7<br />
Quintana Roo 154 600 93 222 363 248 2.3<br />
San Luis Potosí 686 421 393 926 1 941 120 2.8<br />
Sinaloa 768 378 447 256 2 064 703 2.7<br />
Sonora 646 437 385 078 1 604 386 2.5<br />
Tabasco 497 602 287 847 1 288 578 2.6<br />
Tamaulipas 823 031 481 298 1 977 195 2.4<br />
Tlaxcala 263 704 155 349 726 689 2.8<br />
Veracruz 2 191 999 1 324 817 5 621 189 2.6<br />
Yucatán 484 354 287 786 1 230 090 2.5<br />
Zacatecas 443 216 242 965 1 384 183 3.1<br />
Total 28 829 665 16 690 505 73 446 683 2.5<br />
Fuente: INEGI. XI Censo General de Población y Vivienda, México: INEGI, 1990.<br />
Cuadro 7-22. Distribución por grupos de edad de la población femenina de 12 años y más con hijos nacidos vivos en los<br />
Estados Unidos Mexicanos (1990)<br />
Edad (años)<br />
Población femenina<br />
de 12 años y más<br />
Con hijos<br />
nacidos vivos<br />
Número<br />
de hijos<br />
Promedio<br />
12 a 14 3 143 755 12 720 19 547<br />
15 a 19 4 904 511 511 642 699 601 0.1<br />
20 a 24 4 091 035 1 940 964 3 726 878 0.9<br />
25 a 29 3 353 917 2 493 173 6 718 199 2.0<br />
30 a 34 2 808 883 2 408 117 8 476 803 3.0<br />
35 a 39 2 368 551 2 112 339 9 286 784 3.9<br />
40 a 44 1 792 757 1 613 643 8 436 620 4.7<br />
45 a 49 1 519 287 1 370 262 8 301 241 5.5<br />
50 a 54 1 231 916 1 102 706 7 217 622 5.9<br />
55 a 59 975 620 871 178 5 960 797 6.1<br />
60 a 64 841 400 735 483 4 928 691 5.9<br />
65 a 69 616 010 534 346 3 563 236 5.8<br />
70 a 74 432 996 365 243 2 308 999 5.3<br />
75 y más 749 027 618 689 3 801 665 5.1<br />
Total 28 829 665 16 690 505 73 446 683 2.5<br />
Fuente: INEGI. XI Censo General de Población y Vivienda, México: INEGI, 1990.
Ecología, demografía y salud 117<br />
Cuadro 7-23. Población de 14 años y más por condición de actividad según sexo (ler. trimestre de 2006)<br />
Concepto Total Varones Mujeres<br />
Población de 14 años y más 75 488 742 35 318 210 40 170 532<br />
Población económicamente activa 43 914 704 27 691 705 16 222 809<br />
Ocupada 42 366 317 26 737 780 15 628 537<br />
Desocupada 1 548 387 954 015 594 372<br />
Población no económicamente activa 31 574 038 7 626 415 23 947 623<br />
Estudiantes 8 638 015 3 996 784 4 641 231<br />
Quehaceres domésticos 20 256 246 1 981 665 18 274 581<br />
Servicios gratuitos a su comunidad 32 649 16 656 15 993<br />
Ninguna de las anteriores 2 647 128 1 631 310 1 015 818<br />
Fuente: INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo.<br />
nos los métodos anticonceptivos, por lo cual procrean<br />
mayor número de hijos.<br />
El varón tiene una función importante en la planificación<br />
familiar, ya que la participación responsable<br />
de la pareja es necesaria para el uso de métodos anticonceptivos,<br />
así como la atención y crianza de los<br />
hijos.<br />
La educación de la mujer repercute en la familia,<br />
pues aumenta la posibilidad de que los hijos sean libremente<br />
deseados y reciban mejor educación, salud<br />
y bienestar general.<br />
En los cuadros 7-21 y 7-22 se muestran datos relativos<br />
a la población femenina mayor de 12 años y el<br />
número de hijos nacidos vivos, por grupo de edad y<br />
entidad federativa.<br />
Características socioeconómicas y educacionales<br />
Las actividades económicas influyen en el am biente y<br />
dependen de éste (recursos naturales).<br />
Los recursos provenientes del ambiente y los servicios<br />
(p. ej., insumos intermedios, capital, energía y<br />
trabajo humano) se transforman en bienes, por una<br />
parte, y en perjuicios para la so ciedad también derivados<br />
del ambiente.<br />
En 1940, México aún era un país predominantemente<br />
rural y exportador de productos primarios,<br />
pero en la actualidad se ha transformado en<br />
forma notable. La población económica mente activa<br />
incluye personas desde los 12 años de edad que en la<br />
semana del censo estaban ocupadas o desocupadas.<br />
Para uniformar los datos del XI Censo General de<br />
Población y Vivienda 1990, la población económicamente<br />
inactiva incluyó personas de 12 años y más que<br />
durante la se mana del censo (del 5 al 11 de marzo<br />
de 1990) no realizaron actividad económica ni buscaron<br />
trabajo; entre ellos se encontraron es tudiantes,<br />
personas dedicadas al hogar, jubila dos o pensionados,<br />
incapacitados permanente mente para trabajar, y otros<br />
más.<br />
Cuadro 7-24. Población ocupada sector de actividad eco nómica según sexo (ler. trimestre de 2006)<br />
Sector de actividad Total Varones Mujeres<br />
Total 42 366 317 28 737 780 15 628 537<br />
Primario a 6 078 042 5 307 102 707 940<br />
Secundario b 10 859 577 7 985 671 2 873 906<br />
Terciario c 25 070 276 13 134 821 11 935 455<br />
No especificado 358 422 247 186 111 236<br />
a<br />
Comprende agricultura, ganadería, silvicultura, caza y pesca.<br />
b<br />
Comprende industria de extracción y de la electricidad, indus tria manufacturera y construcción.<br />
c<br />
Comprende comercio, restaurantes y servicios de alojamiento, transportes, comunicaciones, correo y almacenamiento, servicios profesionales, financieros<br />
y corporativos, servicios sociales, servicios diversos, así como gobierno y organismos inter nacionales.<br />
Fuente: INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo.
118 Capítulo 7<br />
Cuadro 7-25. Población ocupada por nivel de ingreso según sexo (ler. trimestre de 2006)<br />
Nivel de ingreso Total Varones Mujeres<br />
Total 42 366 317 26 737 780 15 628 537<br />
Menos de 1 hasta 2 salarios mínimos 9 088 380 5 200 354 3 888 026<br />
2 a 3 salarios mínimos 9 444 554 6 406 876 3 037 678<br />
3 a 5 salarios mínimos 7 367 092 5 257 783 2 109 309<br />
Más de 5 salarios mínimos 4 718 070 3 405 606 1 312 464<br />
No recibe ingresos a 3 629 904 2 000 848 1 629 056<br />
No especificado 2 307 575 1 560 994 746 581<br />
a<br />
Incluye a la población que recibe únicamente ingreso no monetario (autoconsumo).<br />
Fuente: INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo.<br />
Cuadro 7-26. Tasa de participación económica femenina<br />
jerar quizada por entidad federativa (ler.<br />
trimestre de 2006)<br />
Entidad federativa<br />
Tasa<br />
Colima 48.1<br />
Quintana Roo 47.9<br />
Distrito Federal 47.1<br />
Jalisco 45.5<br />
Sinaloa 44.7<br />
Nayarit 44.3<br />
Nuevo León 43.5<br />
Oaxaca 43.2<br />
Yucatán 43.1<br />
Tamaulipas 42.7<br />
Campeche 42.7<br />
Querétaro 42.6<br />
Puebla 42.6<br />
Baja California Sur 42.0<br />
Morelos 41.4<br />
Baja California 40.9<br />
México 40.6<br />
Estados Unidos Mexicanos 40.4<br />
Sonora 40.2<br />
Tlaxcala 39.6<br />
San Luis Potosí 39.5<br />
Coahuila 39.3<br />
Hidalgo 39.2<br />
Aguascalientes 39.0<br />
Michoacán 38.2<br />
Guanajuato 38.1<br />
Guerrero 38.0<br />
Chihuahua 36.7<br />
Zacatecas 33.5<br />
Veracruz 33.2<br />
Durango 32.2<br />
Tabasco 31.5<br />
Chiapas 28.5<br />
Nota. Porcentaje que representa la población femenina<br />
económicamente activa respecto del total de mujeres de 14 años<br />
de edad y más.<br />
Fuente: INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo.<br />
Cuadro 7-27. Personal ocupado por entidad federativa (2004)<br />
Entidad federativa<br />
Cantidad<br />
Estados Unidos Mexicanos 23 197 214<br />
Aguascalientes 290 996<br />
Baja California 675 542<br />
Baja California Sur 134 427<br />
Campeche 204 050<br />
Coahuila 692 600<br />
Colima 137 920<br />
Chiapas 615 970<br />
Chihuahua 867 934<br />
Distrito Federal 3 779 560<br />
Durango 353 087<br />
Guanajuato 1 003 639<br />
Guerrero 650 777<br />
Hidalgo 437 586<br />
Jalisco 1 623 039<br />
México 2 094 389<br />
Michoacán 738 340<br />
Morelos 343 638<br />
Nayarit 206 014<br />
Nuevo León 1 213 641<br />
Oaxaca 586 234<br />
Puebla 959 872<br />
Querétaro 374 470<br />
Quintana Roo 298 839<br />
San Luis Potosí 511 379<br />
Sinaloa 556 961<br />
Sonora 595 941<br />
Tabasco 397 937<br />
Tamaulipas 757 989<br />
Tlaxcala 196 272<br />
Veracruz 1 199 867<br />
Yucatán 453 117<br />
Zacatecas 245 187<br />
Fuente: INEGI, Censos económicos, 2004.
Ecología, demografía y salud 119<br />
Cuadro 7-28. Personal ocupado remunerado por gran división de actividad económica, 1990, 2003 y 2004<br />
(promedio anual de ocupaciones remuneradas)<br />
Gran división de actividad económica 1990 2003 2004<br />
Total 25 957 661 31 706 086 32 179 565<br />
Agropecuaria, silvicultura y pesca 6 230 307 6 394 984 6 547 140<br />
Minería 178 871 127 422 129 993<br />
Industria manufacturera 3 275 202 3 531 030 3 505 8l8<br />
Construcción 2 528 703 3 869 795 4 053 630<br />
Electricidad, gas y agua 142 252 195 609 191 504<br />
Comercio, restaurantes y hoteles 4 505 159 6 115 625 6 247 397<br />
Transporte, almacenaje y comunicaciones 1 438 371 1 901 860 1 953 793<br />
Servicios financieros, seguros, actividades<br />
511 118 615 028 626 799<br />
inmobiliarias y de alquiler<br />
Servicios comunales, socia les y personales 7 142 678 8 954 733 8 923 491<br />
Fuente: INEGI, SCNM, Cuentas de bienes y servicios 1988-1999 y 1999-2004. Tomo 1.<br />
En los cuadros 7-23 a 7-28 se presenta la información<br />
general por sexo, edad, entidad federativa,<br />
empleo e ingresos económicos.<br />
En cuanto a los profesionales, los varones superaron<br />
en número a las mujeres. La diferencia es todavía<br />
mayor en cargos de funcionarios y directivos.<br />
En relación a ingresos, el predominio corresponde<br />
a las personas que recibían uno a menos de 3.5 salarios<br />
mínimos. También es considerable el número de<br />
quienes obtienen salarios menores o incluso ningún<br />
ingreso. Las estimaciones de la Comi sión Económica<br />
para América Latina y el Cari be (CEPAL) y del<br />
Instituto Nacional de Estadís tica, Geografía e Informática<br />
(INEGI) señalan que México se encuentra en<br />
situación interme dia de pobreza según los ingresos<br />
percibidos en relación con la canasta básica. En 1992,<br />
13.6 millones de personas vivían en extrema pobre za<br />
(8.7%) y muchas de ellas se encuentran en Chiapas,<br />
Oaxaca y Guerrero.<br />
Objetivos de la política de población<br />
El objetivo fundamental de la política de po blación es<br />
contribuir a elevar el bienestar y la calidad de vida del<br />
individuo y la familia. Para ello, se busca promover,<br />
en su esfera de compe tencia, la participación justa y<br />
equitativa de las generaciones actuales y futuras en los<br />
beneficios del desarrollo económico y social; también<br />
se persigue fomentar la construcción de bases fir mes<br />
para el desarrollo sostenido y sustentable. El logro de<br />
esos propósitos requiere la parti cipación de los sectores<br />
público, privado y social, así como la colaboración<br />
directa de las dependencias gubernamentales cuyas<br />
activida des tienen mayor efecto en los fenómenos demográficos<br />
y en las condiciones socioeconómi cas de<br />
la población.<br />
El mayor desafío de los programas de po blación en<br />
el mundo es contribuir a mitigar la pobreza y mejorar<br />
las condiciones de vida de los individuos y sus familias.<br />
Los grandes retos son:<br />
1. Estabilizar a la población, lo cual significa reducir<br />
la velocidad de crecimiento poblacional y<br />
lograr los valores más bajos de fecundidad.<br />
2. Promover la igualdad de géneros al garanti zar el<br />
mejoramiento de la condición social de la mujer.<br />
3. Impulsar el desarrollo sustentable que armo nice<br />
la evolución de los fenómenos demográ ficos con<br />
el crecimiento económico, la equi dad social y la<br />
protección del ambiente.
Capítulo 8<br />
Caries dental 121<br />
Caries dental<br />
Introducción<br />
La caries dental es una de las enfermedades más antiguas<br />
de la humanidad. Constituye una de las causas<br />
principales de pérdida dental, y ade más puede predisponer<br />
a otras enfermedades. Según la Clasificación<br />
Internacional de Enfer medades y Adaptación a<br />
la Odontoestomatología (CIE-AO), se clasifica con el<br />
número 521.0 dentro de las enfermedades de los tejidos<br />
den tales duros.<br />
Importancia<br />
La caries dental es importante por las siguien tes razones:<br />
1. Es una de las enfermedades crónicas que más<br />
afecta a la humanidad.<br />
2. Su tratamiento es costoso e implica pérdida de<br />
tiempo.<br />
3. En grados avanzados produce dolor muy intenso.<br />
4. Los dientes sanos son indispensables para una<br />
correcta masticación y, por consiguiente, para<br />
la buena digestión. La caries puede dificul tar<br />
la masticación.<br />
5. La pérdida de los dientes puede afectar la fonación.<br />
6. Altera la sonrisa y la morfología del rostro, pues<br />
la cara adquiere la facies típica de los ancianos<br />
desdentados.<br />
7. Puede originar procesos sistémicos, como la endocarditis<br />
bacteriana subaguda.<br />
Definiciones<br />
El término “caries” proviene del latín y significa descomponerse<br />
o echarse a perder, y caries dental se refiere<br />
a la destrucción progresiva y localizada de los<br />
dientes. Entre diversas definicio nes, se presentan aquí<br />
algunas como la del Sis tema de Universidad Abierta<br />
(SUA), de la UNAM:<br />
Proceso infeccioso, continuo, lento e irreversi ble que<br />
mediante un mecanismo quimicobiológico desintegra<br />
los tejidos del diente.<br />
Para Williams y Elliot, la caries es:<br />
...una enfermedad de origen bacteriano que es principalmente<br />
una afección de los tejidos den tales duros<br />
y cuya etiología es multifactorial.<br />
Katz dice:<br />
...es una enfermedad caracterizada por una se rie de<br />
complejas reacciones químicas y microbiológicas que<br />
traen como resultado la destruc ción final del diente<br />
si el proceso avanza sin restricción.<br />
López Jordi la define como:<br />
...un proceso biológico, dinámico, de desmineralización-remineralización<br />
debido a que en sus primeros<br />
estadios la progresión de la enferme dad se puede<br />
controlar e incluso hacerla re versible.<br />
Por otro lado, Piedrola y colaboradores defi nen la<br />
caries como:<br />
...una enfermedad de evolución crónica y etio logía<br />
multifactorial (gérmenes, dieta, factores constitu-
122 Capítulo 8<br />
cionales), que afecta tejidos calcificados de los dientes<br />
y se inicia tras la erupción den tal, provocando, por<br />
medio de los ácidos pro cedentes de las fermentaciones<br />
bacterianas de los hidratos de carbono, una<br />
disolución locali zada de las estructuras inorgánicas<br />
en determinada superficie dental, que evoluciona<br />
hasta lograr finalmente la desintegración de<br />
la matriz orgánica, la formación de una cavi dad y<br />
pérdida de la pieza, pudiendo ocasionar trastornos<br />
locales, generales y patología focal.<br />
Por último, la definición de caries dental de la Organización<br />
Mundial de la Salud (OMS):<br />
...toda cavidad en una pieza dental, cuya exis tencia<br />
pueda diagnosticarse mediante exa men visual y táctil<br />
practicado con espejo y son da fina.<br />
En este concepto se excluyen las primeras fases microscópicas,<br />
así como las fases que pue den diagnosticarse<br />
por medio de radiografías aunque no de manera<br />
táctil ni visual.<br />
Teorías de producción<br />
de la caries dental<br />
Se han propuesto varias teorías para explicar el mecanismo<br />
de la caries dental. Todas ellas se enfocan<br />
en las propiedades físicas y químicas del esmalte y la<br />
dentina.<br />
Desde los tiempos de Babilonia hasta el si glo xviii,<br />
la caries se atribuyó a gusanos que habitaban en la<br />
pulpa de los dientes para “po der chupar la sangre y<br />
roer el hueso”. Según Galeno, la caries se debía a las<br />
condiciones anor males de los humores del cuerpo que<br />
alteraban la estructura interna de los dientes.<br />
En 1778, Hunter señaló como causa de la ca ries a<br />
la inflamación de la pulpa del diente por el consumo<br />
excesivo o inadecuado de alimen tos. Después, Parmy<br />
(1819) advirtió el inicio de la enfermedad en los sitios<br />
del esmalte donde había retención de alimentos.<br />
Más tarde, Robertson (1835) sugirió que los restos de<br />
alimentos adheridos a los dientes se fermentaban, y<br />
luego Magitot (1867) demostró que la fermentación<br />
de los azúcares disolvía las estructuras dentales.<br />
Erdl (1843), Ficinus (1847) y Leber y Rottenstein<br />
(1867) fueron los primeros en relacionar a los microorganismos<br />
con la formación de ácidos, aunque Underwood<br />
y Miller formularon su teoría en 1881.<br />
Teoría quimioparasitaria<br />
Esta teoría se enunció a fines del siglo xix, y Miller se<br />
ocupó de comprobarla. De acuerdo con ella, la caries<br />
dental es un proceso quimioparasitario; es decir, es<br />
causada por los ácidos que producen los microorganismos<br />
acidógenos (productores del ácido de la boca<br />
al degradar los alimentos, en especial los hidratos de<br />
car bono). Esto hace que disminuya el pH de la pla ca<br />
dentobacteriana, lo que aumenta la proliferación de<br />
microorganismos y la activi dad acidógena; después se<br />
descalcifica la molécula del esmalte y se forman cavidades.<br />
De ese modo se explicaba el origen de la caries,<br />
y en el proceso se distinguían dos etapas:<br />
1. Descalcificación de los tejidos.<br />
2. Disolución del residuo descalcificado y los ácidos<br />
producidos por microorganismos.<br />
Los microorganismos de la boca que pueden estimular<br />
fermentación ácida toman parte en la primera<br />
etapa; en cambio, los de acción peptonizante o digestiva<br />
sobre sustancias albumi nosas intervienen en la<br />
segunda etapa. Esto se fundamenta en los aspectos<br />
siguientes:<br />
1. El pH es ácido en la superficie del esmalte durante<br />
el inicio de la caries.<br />
2. Hay un complejo de bacterias en el sitio don de<br />
inicia la caries.<br />
3. Hay relación directa entre la caries y las dietas<br />
ricas en hidratos de carbono, princi palmente el<br />
azúcar, que se desintegra con facilidad.<br />
Aunque la teoría de Miller es la base en la que se<br />
apoya, el conocimiento de la causa de la ca ries tiene<br />
algunas deficiencias:<br />
1. No explica la propensión de la caries en al gunos<br />
sitios específicos.<br />
2. Considera que los microorganismos involucrados<br />
son muchos y muy variados.<br />
3. No aclara el fenómeno de la caries detenida.<br />
4. Apoya la idea de influencias sistémicas en el<br />
diente.
Caries dental 123<br />
Más tarde, Fosdik y Hutchinson sostuvieron que<br />
para el inicio y el progreso de una lesión de caries era<br />
necesaria la fermentación de azúcares en el tártaro<br />
dental, así como la producción de ácido láctico y otros<br />
ácidos débiles. Enton ces, la caries se atribuyó a cambios<br />
en las pro piedades físicas y químicas del esmalte<br />
y a la naturaleza semipermeable de éste.<br />
La migración de sustancias por la estructura del<br />
diente se realiza a través de las vainas de barras y la<br />
sustancia interbarra formada por cristales de apatita<br />
con relativamente poca ma teria orgánica. Durante la<br />
migración iónica de la saliva hacia el esmalte, los cristales<br />
de apatita reaccionan con iones de la sustancia<br />
que se di funde o que los capta.<br />
Los cristales afectados se vuelven más o me nos<br />
estables y más o menos solubles según el tipo de ion<br />
implicado en la reacción. La cap tación de iones calcio<br />
y fosfato tiende a obstruir los caminos de difusión; la<br />
sustitución de iones hidroxilo por iones fluoruro en<br />
los cristales de apatita forma un compuesto más estable<br />
y me nos soluble.<br />
Por otra parte, la captación de iones hidró geno por<br />
parte de sustancias difusoras ácidas, con la formación<br />
de agua y fosfatos solubles, destruye la membrana del<br />
esmalte:<br />
Ca 10<br />
(PO 4<br />
) 6<br />
(OH) 2<br />
+ 8H + → 10Ca 2 + 6HPO 2– 4<br />
+ 2H 2<br />
O ←<br />
Por último, los estudios con microscopio electrónico<br />
de caries adamantina muestran por lo menos cuatro<br />
capas diferentes originadas por la descalcificación<br />
ácida:<br />
1. Capa relativamente intacta en la superficie formada<br />
por mineral de solubilidad ácida baja, resultado<br />
de fluoruro en los cristales y la precipitación<br />
de sales liberadas por solubilización en la<br />
profundidad de la lesión.<br />
2. Capa parcialmente desmineralizada bajo la superficie<br />
del esmalte. Se compone de residuos minerales,<br />
los cuales han perdido, por disolución,<br />
la mayor parte de sus fracciones so lubles.<br />
3. Zona de reacción. Aquí los componentes más solubles<br />
se eliminaron activamente por di solución.<br />
4. Esmalte sano de poca permeabilidad a distancia de<br />
la lesión. Esta capa resiste de manera tem poral el<br />
proceso de desmineralización.<br />
Teoría proteolítica<br />
Gottlieb y colaboradores afirmaron que el pro ceso<br />
carioso se inicia por actividad de la pla ca dentobacteriana,<br />
pero a diferencia de lo anterior, los microorganismos<br />
causales son proteolíticos, es decir, causan lisis<br />
o desintegración de proteínas.<br />
De acuerdo con esta teoría, la caries empie za en las<br />
laminillas del esmalte o vainas de pris mas sin calcificar<br />
que carecen de cutícula protectora en la superficie,<br />
y después se extiende a lo largo de esos defectos<br />
estructurales confor me las enzimas liberadas por microorganismos<br />
destruyen las proteínas. Con el tiempo,<br />
se pre senta la invasión bacteriana acidógena que<br />
des integra la porción mineral.<br />
La teoría proteolítica se comprobó mediante cortes<br />
histológicos en los cuales se muestra cómo las zonas<br />
donde predominan las proteí nas son el camino para el<br />
avance de la caries. Pero no explica ciertas características<br />
clínicas, como la localización de la enfermedad<br />
en luga res específicos del diente ni la relación con los<br />
hábitos de alimentación.<br />
Teoría de la proteólisis-quelación<br />
Schatz y colaboradores ampliaron la teoría proteolítica<br />
al agregar la quelación para explicar la destrucción del<br />
diente. Su causa se atribuye a dos reacciones interrelacionadas<br />
y simultá neas: la destrucción microbiana de<br />
los compo nentes orgánicos del esmalte y la pérdida<br />
de apatita por disolución.<br />
Los productos de descomposición de la ma teria<br />
orgánica del esmalte son quelantes. La quelación es<br />
un fenómeno químico por el cual una molécula puede<br />
captar el calcio de otra molécula, lo cual produce<br />
desequilibrio elec trostático y desintegración. La molécula<br />
que capta calcio se denomina quelato, y tanto<br />
aminas como péptidos, polifosfatos, hidratos de carbono<br />
de los ali mentos, saliva y material del tártaro o<br />
sarro dental pueden fun cionar como tal.<br />
Esta teoría tampoco explica la relación entre la dieta<br />
y la caries.<br />
Teoría endógena<br />
La teoría endógena de Csernyei sostiene que la caries<br />
es resultado de un trastorno bioquímico que comien-
124 Capítulo 8<br />
za en la pulpa y se manifiesta clínicamente en el esmalte<br />
y la dentina. Según este autor, se alteran el metabolismo<br />
del flúor y el del magnesio de los dientes.<br />
Al afectarse el equi librio fisiológico entre activadores<br />
de la fosfatasa (magnesio) e inhibidores de la misma<br />
(flúor), la fosfatasa de la pulpa estimula la formación<br />
de ácido fosfórico y éste a su vez disuelve los tejidos<br />
calcificados.<br />
Teoría del glucógeno<br />
La teoría del glucógeno o de Egyedi sostiene que la<br />
susceptibilidad a la caries se relaciona con alta ingestión<br />
de hidratos de carbono durante el desarrollo del<br />
diente, de lo que resulta un depósito excesivo de glucógeno<br />
y glucoproteínas en la estructura del diente.<br />
Estas dos sus tancias quedan inmovilizadas en la apatita<br />
del esmalte y la dentina durante la maduración de<br />
la matriz y con ello aumenta la susceptibilidad de los<br />
dientes al ataque bacteriano después de la erupción.<br />
Los ácidos del tártaro dental convierten el glucógeno<br />
y las glucoproteínas en glucosa y glucosamina,<br />
respectivamente. La caries comienza cuando las bacterias<br />
del sarro invaden los tramos orgánicos del esmalte<br />
y degradan la glucosa y la glucosamina en ácidos<br />
desmineralizantes.<br />
La teoría del glucógeno ha sido muy critica da porque<br />
tiene poco fundamento.<br />
Teoría organotrópica de Leimgruber<br />
Esta teoría sostiene que la caries no es la destruc ción<br />
local de los tejidos dentales, sino un com plejo de tejidos<br />
duros, blandos y saliva.<br />
Según esta teoría, los tejidos duros actúan como<br />
membrana entre la sangre y la sali va. La dirección del<br />
intercambio entre ambas sustancias depende de las<br />
propiedades bioquí micas y biofísicas de los medios,<br />
así como de la función activa o pasiva de la membrana.<br />
La saliva es el factor de equilibrio biodinámico, en<br />
el cual el mineral y la matriz del esmalte y la dentina<br />
están unidos por enlaces de valencia homopolares.<br />
Los agentes capaces de destruir esos enlaces también<br />
rompen el equilibrio y ocasionan la destrucción de<br />
los tejidos. Los fundamentos de esta teoría son muy<br />
es casos.<br />
Teoría biofísica<br />
Neumann y Di Salvo se basaron en la respues ta de<br />
proteínas fibrosas frente al esfuerzo de compresión, y<br />
así desarrollaron la teoría de la carga para la inmunidad<br />
a la caries. De ese modo, postularon que las altas<br />
cargas de la masticación producen un efecto esclerosante<br />
sobre los dientes debido a pérdida continua del<br />
contenido de agua de ellos, combinada con una modificación<br />
en las cadenas de polipéptidos y el empaquetamiento<br />
de los pequeños cris tales fibrilares. Estos<br />
cambios ocasionados por la compresión masticatoria<br />
modifican la resis tencia del diente ante los agentes<br />
destructivos. Pese a lo anterior, esta teoría no se ha<br />
com probado.<br />
Conclusión<br />
La teoría de mayor aceptación hasta la fecha es la de<br />
Miller. Sin embargo, las teorías proteolítica y de la<br />
proteólisis-quelación también son im portantes en relación<br />
con el inicio y avance de la enfermedad.<br />
Elementos participantes<br />
en el proceso carioso<br />
La caries es un proceso multifactorial (fig. 8-1), por lo<br />
cual es necesario tomar en cuenta la ac ción simultánea<br />
de varios factores: el sustrato oral, los microorganismos,<br />
la susceptibilidad del huésped y el tiempo.<br />
Sustrato oral<br />
La cantidad acostumbrada de comida y líqui dos ingeridos<br />
al día por una persona, es decir, la dieta, puede<br />
favorecer o no la caries, ya que los alimentos pueden<br />
reaccionar con la superfi cie del esmalte o servir como<br />
sustrato para que los microorganismos cariogénicos<br />
formen pla ca bacteriana o ácidos.<br />
Los hidratos de carbono son precursores de polímeros<br />
extracelulares bacterianos adhesivos y al parecer<br />
son importantes en la acumulación de ciertos<br />
microorganismos en la superficie de los dientes.<br />
La formación de ácidos es resultado del metabolismo<br />
bacteriano de los hidratos de car bono fermentables;<br />
sin embargo, deben consi derarse los siguientes<br />
factores:
Caries dental 125<br />
Diente<br />
Enzimas<br />
proteolíticas<br />
Ácidos<br />
Saliva<br />
Huésped<br />
(hospedero)<br />
Agente<br />
Microbiota<br />
Caries<br />
Colonización<br />
Crecimiento<br />
Multiplicación<br />
Sustrato<br />
Tiempo<br />
Dieta<br />
Energía<br />
Nutrición<br />
Figura 8-1. Interacción de los factores que intervienen en la caries. Esquema de Keyes modificado. Fuente: Liébana JU.<br />
Microbiología oral. México: McGraw-Hill Interamericana Editores, 1997.<br />
1. Características físicas de los alimentos, sobre todo<br />
adhesividad. Los alimentos pegajosos se mantienen<br />
en contacto con los dientes durante mayor<br />
tiempo y por ello son más cariogénicos. Los líquidos<br />
tienen adhe rencia mínima a los dientes, y<br />
en consecuen cia poseen menor actividad cariogénica.<br />
2. La composición química de los alimentos puede favorecer<br />
la caries. Por ejemplo, algunos ali mentos<br />
contienen sacarosa y ésta es en particular cariogénica<br />
por su alta energía de hidrólisis que las<br />
bacterias pueden utilizar para sintetizar glucanos<br />
insolubles.<br />
3. Tiempo de ingestión. La ingestión de alimen tos<br />
con hidratos de carbono durante las co midas<br />
implica una cariogenicidad menor que la ingestión<br />
de esos alimentos entre comidas.<br />
4. Frecuencia de ingestión. El consumo frecuente de<br />
un alimento cariogénico implica mayor riesgo<br />
que el consumo esporádico.<br />
El pH de la placa dentobacteriana posterior a la<br />
ingestión de alimentos es muy importante para la formación<br />
de caries, y por ello depen de del pH individual<br />
de los alimentos, el contenido de azúcar de éstos y el<br />
flujo promedio de saliva. En la lista siguiente se anota el<br />
prome dio de caries que generan algunos alimentos:<br />
Cereales de maíz, rosetas de maíz, cacahua tes: 0.<br />
Galletas de soda: 0.3.<br />
Espinacas: 0.6.<br />
Pan de trigo quebrado: 1.3.<br />
Papas fritas: 1.6.<br />
Pan de trigo entero: 2.0.<br />
Zanahorias: 2.1.
126 Capítulo 8<br />
Almidón: 3.3.<br />
Pan blanco y mantequilla de cacahuate: 5.2.<br />
Galletas Graham: 8.7.<br />
Pan blanco y jalea de frambuesa: 10.2.<br />
Higos: 10.3.<br />
Goma de mascar: 14.0.<br />
Caramelos: 18.0.<br />
Glucosa: 30.6.<br />
Pasas: 30.9.<br />
Sacarosa: 62.1.<br />
Microorganismos<br />
Streptococcus mutans es el microorganismo de mayor<br />
potencial cariogénico, aunque también son importantes<br />
S. salivarius, S. milleri, S. sanguis, S. mitis, S. intermedious,<br />
Lactobacillus acidophilus, L. casei, Actinomyces<br />
viscosus y A. naeslundii, en tre otros. Según el tipo de<br />
caries, los microor ganismos patógenos que predominan<br />
son:<br />
Hendiduras y fisuras:<br />
Streptococcus mutans<br />
Streptococcus sanguis<br />
Otros estreptococos<br />
Streptococcus mitis<br />
Streptococcus sanguis<br />
Streptococcus milleri<br />
Streptococcus saliva rius<br />
Especies de Lactobacillus<br />
Especies de Actinomyces<br />
Superficies proximales:<br />
Streptococcus mutans<br />
Especies de Actinomy ces<br />
Lactobacillus casei<br />
Actinomyces odontolyticus<br />
Superficie lisa:<br />
Streptococcus mutans<br />
Streptococcus salivarius<br />
Superficie de la raíz:<br />
Actinomyces viscosus<br />
Actinomyces naeslundii<br />
Otros bastoncillos fila mentosos<br />
Streptococcus mutans<br />
Streptococcus sanguis<br />
Streptococcus salivarius<br />
Capnocytophaga<br />
Caries de dentina profunda:<br />
Especies de Lacto bacillus<br />
Actinomyces naes lundii<br />
Actinomyces visco sus<br />
Otros bastoncillos filamentosos<br />
Streptococcus mu tans<br />
De los microorganismos mencionados, algu nos<br />
tienen gran importancia, por lo que se des criben a<br />
continuación.<br />
Streptococcus mutans<br />
Algunas cepas de Streptococcus mutans son más virulentas<br />
que otras, pero su presencia en to dos los tipos<br />
de caries es significativa. Coloni zan en particular las<br />
fisuras de los dientes y las superficies interproximales.<br />
La producción de polisacáridos a partir de la sacarosa<br />
es fundamental para la colonización y mantenimiento<br />
de este microorganismo en el diente. Por otra<br />
parte, Streptococcus mutans pue de sintetizar polisacáridos<br />
intracelulares y ello le permite obtener energía<br />
y conservar la producción de ácido láctico durante<br />
largos periodos. También produce dextranasas y fructanasas.<br />
Estas enzimas metabolizan los polisacáridos<br />
extracelulares, lo cual favorece la producción de ácido,<br />
independientemente de que constituyen un sustrato<br />
durante los periodos en que disminuye el aporte<br />
exógeno.<br />
Streptococcus mutans es un microorganismo acidógeno<br />
porque produce ácido láctico, el cual interviene<br />
en la desmineralización del diente; es acidófilo porque<br />
puede sobrevivir y desarro llarse en un pH bajo, y también<br />
es acidúrico porque es capaz de seguir generando<br />
ácido con un pH bajo. Una característica más es que<br />
cuan do ha estado sometido a un pH bajo, alcanza con<br />
rapidez el pH crítico de 4.5, necesario para iniciar la<br />
desmineralización.<br />
Especies de Lactobacillus<br />
El lactobacilo (Lactobacillus acidophilus) es un gran<br />
productor de ácido láctico, igual que Streptococcus<br />
mutans.<br />
Algunas cepas de lactobacilos sintetizan polisacáridos<br />
extracelulares e intracelulares a partir de la sa-
Caries dental 127<br />
carosa. Sin embargo, tienen poca afinidad por la superficie<br />
del diente; en conse cuencia, no inician caries<br />
en superficies lisas pero tienen gran actividad en la<br />
dentina.<br />
Especies de Actinomyces<br />
Las especies de Actinomyces, sobre todo A. viscosus,<br />
predominan en la placa dentobacteria na de la raíz. Actinomyces<br />
viscosus, además de ser acidógeno, presenta<br />
fimbrias que facilitan la adhesión y la coagregación;<br />
también puede ge nerar polisacáridos intracelulares<br />
y extracelulares a partir de sacarosa y tiene actividad<br />
proteolítica moderada.<br />
Capnocitophaga<br />
Esta especie es proteolítica, por lo cual coloni za los<br />
túbulos dentinarios y es de gran impor tancia en la formación<br />
de caries radicular.<br />
Veillonella<br />
Es una bacteria anticariogénica porque convier te el<br />
ácido láctico en ácidos orgánicos más dé biles.<br />
Susceptibilidad del huésped<br />
(hospedero)<br />
Se ha observado que en un mismo individuo, ciertos<br />
dientes se afectan y otros no lo hacen, y que al gunas<br />
caras de los dientes son más susceptibles a la caries<br />
que otras, aun en el mismo diente.<br />
Características de los dientes<br />
Las zonas de retención en la superficie oclusal dificultan<br />
la limpieza y favorecen la acumula ción de bacterias.<br />
Las fisuras profundas o con defectos morfológicos<br />
aumentan la susceptibi lidad.<br />
La edad es un factor importante, pues el dien te es<br />
más susceptible a la caries mientras no al cance la maduración<br />
poseruptiva. Entre los preescolares es más<br />
frecuente la caries de surcos y fisuras debido a las sinuosidades<br />
de las caras oclusales y a la inmadurez del<br />
esmalte.<br />
Con el paso del tiempo, por la motricidad inmadura<br />
del niño, el cepillado puede dificul tarse en los<br />
dientes posteriores de la arcada y así el diente más<br />
afectado es el segundo molar. Con el paso del tiempo,<br />
los espacios se cierran y entonces aumenta la frecuencia<br />
de caries proximales. Como la papila es cóncava<br />
y más ancha, favorece el estancamiento de partículas<br />
alimentarias.<br />
La frecuencia de la caries se reduce por exposición<br />
del huésped al flúor y a los selladores de fosetas y fisuras.<br />
Otros factores<br />
En la formación de caries influyen otros factores, que<br />
son: disposición de los dientes en la arcada, algunas<br />
formas de maloclusión, pro ximidad de los conductos<br />
salivales, textura superficial y aparatos fijos o removibles<br />
que dificultan la limpieza y favorecen la acumulación<br />
de placa dentobacteriana.<br />
El efecto de los ácidos en el esmalte depende también<br />
de la capacidad de la saliva para re mover el sustrato.<br />
La saliva realiza autolimpieza porque ayuda a<br />
eliminar los restos de alimentos y microorganismos<br />
que no están ad heridos a las superficies de la boca.<br />
La dismi nución considerable de la secreción salival<br />
exa cerba las caries. Por otra parte, la saliva tiene gran<br />
capacidad de amortiguación, pues ayuda a neutralizar<br />
los ácidos producidos en la placa dentobacteriana; su<br />
alto contenido de calcio y fosfato ayuda a mantener la<br />
estructura del dien te, así como a la remineralización<br />
de lesiones incipientes por caries.<br />
El tiempo<br />
La interacción de los factores mencionados re quiere<br />
de tiempo para que se produzca la ca ries.<br />
Naturaleza del proceso carioso<br />
Desmineralización del diente<br />
Al comenzar la desmineralización, el esmalte ya no<br />
es el material sólido y amorfo que experi menta disolución<br />
irreversible, sino una matriz de difusión que<br />
se compone de cristales rodea dos por una matriz<br />
de agua, proteínas y lípidos que equivale a 10 a 15%<br />
del volumen del es malte; asimismo, posee conductos<br />
relativamen te grandes por los cuales pasan en ambas
128 Capítulo 8<br />
di recciones ácidos, minerales, fluoruro y otras sustancias.<br />
Los ácidos producidos por la placa dentobac teriana<br />
se difunden hacia el esmalte por los con ductos mencionados<br />
para comenzar la desmineralización bajo la<br />
capa superficial. Al mismo tiempo se presenta la remineralización.<br />
Los dos fenómenos ocurren de manera<br />
simultánea y dinámica. Primero se disuelven los minerales<br />
más insolubles, y en consecuencia se forman<br />
cristales más grandes y más resistentes a la disolución.<br />
Este proceso es continuo en casi todas las superficies<br />
proximales mientras haya iones calcio y fosfato disponibles<br />
a partir de la saliva. Incluso la concentración<br />
muy reducida de iones fluoruro en el sistema acelera<br />
la mineralización y disminuye el índice de desmineralización.<br />
Mientras la capa superficial permanezca in tacta, es<br />
posible la remineralización del esmal te afectado. Dicha<br />
remineralización se ha demostrado mediante recuperación<br />
parcial de la dureza del esmalte, aumento<br />
de la opacidad a los rayos X por parte del cuerpo de la<br />
lesión y por estudios con luz polarizada; sin embargo,<br />
llega el momento en que ya no se lleva a cabo.<br />
En las lesiones tempranas, a la altura de la zona<br />
translúcida, se pierden carbonatos.<br />
Proteólisis<br />
Véase antes Teoría proteolítica, en este capítulo.<br />
Invasión microbiana<br />
La caries dental se produce por bacterias acidógenas<br />
y acidúricas residentes en la placa dentobacteriana. La<br />
virulencia de esas bacterias se relaciona, en parte, con<br />
su capacidad para sintetizar distintos tipos de polisacáridos<br />
intracelulares y extracelulares.<br />
Factores de riesgo<br />
Éstos pueden ser locales y generales.<br />
Factores locales<br />
Composición química del esmalte<br />
Las diferentes proporciones de los componentes del esmalte<br />
determinan la resistencia mayor o menor del<br />
esmalte, y por consiguiente la veloci dad menor o mayor<br />
en el avance de la caries.<br />
Cuando los dientes hacen erupción, el esmal te aún<br />
no ha terminado de mineralizarse, y por tanto hay mayor<br />
predisposición a la caries. En estas condiciones, el<br />
diente permite un inter cambio iónico en el cual desprende<br />
algunos minerales hacia la saliva y viceversa.<br />
Conforme ocurre la mineralización del dien te, la<br />
solubilidad del esmalte disminuye y, por consiguiente,<br />
hay susceptibilidad a la caries.<br />
Disposición de los prismas<br />
El esmalte puede presentar anormalidades en su constitución,<br />
entre ellas penachos, agujas o hipoplasias, las<br />
cuales permiten un doble me canismo para la formación<br />
de caries. La dispo sición irregular de la materia<br />
orgánica propicia la acción de causas desencadenantes.<br />
Por otra parte, la vaina, la sustancia inter prismática,<br />
así como la sustancia orgánica que une a los cristales<br />
de apatita son de naturaleza proteínica y en la cariogénesis<br />
(formación de la caries) ocurre un fenómeno<br />
proteolítico desa rrollado por bacterias específicas.<br />
Malformaciones anatómicas<br />
La caries puede desarrollarse en cualquier parte de las<br />
superficies del diente, pero es mayor en aquéllas donde<br />
los surcos y fosetas son demasiado profundos porque<br />
se favorece la re tención y acumulación de la placa<br />
bacteriana y restos de alimentos. Por ejemplo, los primeros<br />
molares inferiores del adulto son más susceptibles<br />
a la caries por las siguientes razones: ha cen erupción<br />
a edad muy temprana, tienen fosetas y fisuras<br />
muy profundas, y están más alejados de los conductos<br />
salivales en compa ración con los superiores.<br />
Abrasión<br />
El desgaste afecta las superficies proximales y las oclusales.<br />
El desgaste proximal excesivo propicia el ini cio de<br />
la caries porque favorece la acumulación de sustancias<br />
que hacen posible la fermentación bacteriana en<br />
el área de contacto interproximal. Por otra parte, la<br />
abrasión expone las capas más profundas del esmalte
Caries dental 129<br />
y dichas capas son me nos resistentes que las superficiales.<br />
El desgaste oclusal disminuye la frecuencia de la<br />
caries porque alisa el diente y elimina las fi suras del<br />
esmalte. La dentina expuesta resulta protegida debido<br />
a que la superficie queda al tamente pulida.<br />
Malposición dental<br />
Cuando se presenta esta situación, los espacios interdentales<br />
que facilitan la limpieza espontá nea desaparecen<br />
y los puntos de contacto pue den estar<br />
desplazados, con lo cual se favorece la retención de<br />
los residuos de alimentos.<br />
Obturaciones mal adaptadas<br />
Las reconstrucciones mal adaptadas y los dientes que<br />
han hecho erupción parcial también favorecen el inicio<br />
de caries.<br />
Higiene bucal deficiente<br />
La higiene defectuosa o ausente propicia la ca ries.<br />
Composición de la saliva<br />
La saliva con pH bajo, sin sustancias antibacterianas<br />
y de poco volumen, menor de 0.5 ml/min, favorece el<br />
inicio de la caries (véase antes Placa dentobacteriana).<br />
Factores generales<br />
Cada individuo es una unidad biopsicosocial; por<br />
esto, es necesario tomar en consideración los siguientes<br />
factores generales o sistémicos: nutrición, herencia<br />
biológica, funcionamiento endocrino, estrés, enfermedades<br />
intercurrentes y aspectos socioeconómicos<br />
y culturales.<br />
Nutrición<br />
Dada su importancia, se analiza más adelante (véase<br />
Dieta y caries, en este mismo capítulo).<br />
Herencia biológica<br />
Existen numerosas enfermedades hereditarias, pero<br />
en esta obra sólo se mencionan algunas malformaciones<br />
y defectos de los dientes producidas por transmisión<br />
genética.<br />
Amelogénesis imperfecta<br />
La amelogénesis imperfecta puede presentarse en forma<br />
de hipoplasia, hipomineralización del esmalte o<br />
ambas. En la hipoplasia hay deficiencia en la cantidad<br />
de esmalte; en cambio, en la hipomineralización, el<br />
grosor del esmalte es normal.<br />
En algunas personas, los ameloblastos for man un<br />
mosaico genético, por lo que se produ cen algunos<br />
esmaltes normales y otros hipoplásicos; por esta razón,<br />
el diente puede mostrar depresiones profundas<br />
o estrías verticales su perficiales e incluso un esmalte<br />
delgado y aca nalado con baja mineralización.<br />
La hipoplasia dominante del esmalte ligada a X ocurre<br />
por un gen localizado en el cromosoma X: el varón<br />
afectado transmite la enfermedad a las hijas pero no<br />
a los hijos varones, porque és tos sólo reciben un cromosoma<br />
Y por parte del padre. En cambio, las mujeres<br />
afectadas here dan la enfermedad a 50% de sus<br />
descendien tes, sin importar el sexo (fig. 8-2).<br />
Clínicamente, los varones muestran un es malte<br />
homogéneo delgado, liso, de color pardo amarillento<br />
y sin la estructura prismática usual. Las mujeres presentan<br />
bandas verticales de es malte en grosor normal,<br />
alternadas con estrías de esmalte muy delgado de anchura<br />
variable.<br />
La hipoplasia del esmalte autosómica dominante origina<br />
un esmalte delgado, el cual puede ser cristalino y<br />
sin estructura en vez de prismáti co. Una forma menos<br />
grave incluye depresio nes profundas al azar encima<br />
de la superficie total del esmalte, y éste tiene estructura<br />
y grosor normales (fig. 8-3).<br />
La hipomineralización del esmalte, con hipopla sia o<br />
sin ella, varía en gravedad. En algunos casos el esmalte<br />
es muy resistente y en otros se descama con facilidad.<br />
Su aspecto varía desde calizo con tinción moderada<br />
hasta un es malte tipo queso, de color pardo oscuro y<br />
fácil de romper, y contiene mayor proporción de material<br />
orgánico que el esmalte normal.<br />
Dentinogénesis imperfecta<br />
El esmalte tiene estructura normal pero es muy delgado,<br />
lo cual da al diente un aspecto transparente y
130 Capítulo 8<br />
Padre<br />
afectado<br />
Gametos<br />
paternos<br />
Hijas<br />
afectadas<br />
Hijos no<br />
afectados<br />
X H<br />
X H X<br />
X H Y<br />
Y<br />
XY<br />
Madre<br />
afectada<br />
Gametos<br />
maternos<br />
Progenie<br />
afectada<br />
(ambos<br />
sexos)<br />
Progenie<br />
no afectada<br />
(ambos<br />
sexos)<br />
X H<br />
X H X<br />
+<br />
X H Y<br />
X H X<br />
X XX + XY<br />
Figura 8-2. Transmisión de la hipoplasia dominante del esmalte ligada al cromoso ma X.<br />
opalescente, de color gris, azul o pardo y se desprende<br />
con facilidad de la den tina, la cual con frecuencia está<br />
expuesta y pigmentada de color pardo oscuro. Esta<br />
enfer medad se transmite con carácter autosómico dominante.<br />
Funcionamiento endocrino<br />
Las glándulas paratiroideas (paratiroides) regulan el<br />
metabo lismo del calcio y el fósforo. La hormona paratiroidea<br />
actúa de la siguiente manera:<br />
Figura 8-3. Hipoplasia del esmalte con depresio nes profundas pero con estructura y mineralización normales.
Caries dental 131<br />
1. Las glándulas paratiroideas (paratiroides) producen<br />
más hormona cuando los fenómenos que<br />
compo nen el metabolismo mineral (absorción,<br />
al macenamiento, utilización, liberación y excreción)<br />
reducen la concentración sérica de calcio<br />
o aumentan la concentración de fósforo.<br />
2. Al disminuir los fosfatos inorgánicos en el suero<br />
y aumentar la actividad de la glándula paratiroidea<br />
(paratiroides), hay mayor demanda de cal cio<br />
en suero para mantener la relación entre calcio y<br />
fósforo lo más cerca de lo normal.<br />
3. Cuando la dieta ingerida satisface la deman da de<br />
calcio, el depósito de éste en los teji dos se conserva.<br />
Los niños con hipoparatiroidismo pueden tener<br />
dentición defectuosa, lo cual incluye canaladuras en<br />
el esmalte y mayor número de caries.<br />
Estrés<br />
Hace unos 30 años aún había diferentes palabras para<br />
denominar la serie de reacciones que tiene el organismo<br />
ante situaciones de apre mio, hasta que Hans Selye<br />
estudió los proble mas de tensión y les llamó “estrés” o<br />
síndrome general de adaptación.<br />
El estrés disminuye la resistencia a las infec ciones y<br />
la secreción de saliva.<br />
Enfermedades intercurrentes<br />
El tratamiento de enfermedades intercurrentes disminuye<br />
el flujo salival cuando aquél incluye los siguientes<br />
medicamentos: anticolinérgicos (trastornos gastrointestinales);<br />
sedantes; antihistamínicos (afecciones<br />
alérgicas); neurolépticos (alteraciones neurológicas);<br />
antihipertensores y diuréticos.<br />
La radioterapia aumenta el riesgo de caries en el<br />
paciente.<br />
Factores socioeconómicos<br />
Éstos se refieren a la calidad de vida (vivienda, estabilidad<br />
laboral, ingresos, cobertura asistencial), la cual<br />
se relaciona con el desarrollo de caries en cada persona.<br />
Factores culturales<br />
La higiene bucal se vincula con la escolaridad, los hábitos,<br />
las creencias y costumbres e inclu so con experiencias<br />
odontológicas previas.<br />
Mecanismo de acción<br />
de la caries dental<br />
Caries de esmalte<br />
La primera evidencia clínica de la caries de es malte es<br />
la formación de una “mancha blanca”, que se distingue<br />
del esmalte sano al secarse la superficie.<br />
La mancha blanca se debe a un efecto óptico producido<br />
por aumento de la dispersión de la luz dentro<br />
del esmalte, ocasionado por incremento de la porosidad;<br />
ésta, a su vez, origina da por disolución de una<br />
parte del esmalte que realizan los ácidos difundidos<br />
en su interior a partir de la placa dentobacteriana<br />
adhe rida a su superficie.<br />
En estudios de cortes delgados, la primera alteración<br />
identificada es la zona translúcida, la cual tiene<br />
birrefringencia negativa un poco ma yor que la del<br />
esmalte normal. Su porosidad es de 1% y la pérdida<br />
mineral varía entre 1 y 1.5%. Se observa que los poros<br />
son más pequeños conforme se profundiza en la<br />
lesión (fig. 8-4).<br />
Después se observa la zona oscura, consecuen cia<br />
del fenómeno de remineralización; su poro sidad es<br />
de 2 a 4% y la pérdida mineral es de 5 a 8%. Aparece<br />
en 50% de los casos, y se ob servan poros grandes y<br />
microporos como con secuencia de la reprecipitación<br />
mineral desde la zona translúcida.<br />
La siguiente zona es el cuerpo de la lesión, el cual<br />
tiene mayor pérdida de mineral (18 a 50%), pues<br />
constituye el segundo sitio de desmineralización. Su<br />
porosidad es de 25% y se observan grandes poros.<br />
Por último, se encuentra la zona superficial. Es la<br />
segunda zona con remineralización. Aquí la porosidad<br />
y la pérdida mineral son de 5%, y hay poros pequeños<br />
y algunos grandes como en el esmalte sano.<br />
Esta zona permanece intacta hasta después de que se<br />
afecta la dentina.<br />
La pérdida de minerales se inicia en la subsuperficie,<br />
aunque el ácido que ocasiona la diso lución pasa a
132 Capítulo 8<br />
Zona oscura<br />
Zona translúcida<br />
Zona superficial<br />
Cuerpo de la lesión<br />
A<br />
B<br />
Figura 8-4. Zonas de lesiones de caries tempranas en corte longitudinal del esmalte entre polarizaciones cruzadas. La<br />
dirección de los prismas del esmalte está a 45 grados con respecto a la dirección del plano de polarización de<br />
la luz incidente. Una placa roja sensible de primer orden se inserta con su dirección más rápida paralela a los<br />
prismas del esmalte para intensificar el contraste entre las partes con birrefringencia positiva y negativa. A,<br />
inmersión en quinolina cuyo índice de refracción (1.63) está muy cerca del esmalte (1.62). B, en agua (índice<br />
de refracción, 1.33).<br />
través de la superficie. Durante esta etapa la superficie<br />
del esmalte se encuentra in tacta, pero es posible detectar<br />
la lesión mediante radiografía.<br />
La lesión de mancha blanca es reversible hasta<br />
cierto grado por mineralización, la cual puede lograrse<br />
con buena higiene bu cal, dieta no cariogénica, microambiente<br />
neu tro, y con flúor y minerales.<br />
Si avanza la desmineralización, aparece una rugosidad<br />
superficial. Cuando la pérdida mi neral es de 30 a<br />
50%, se produce desmorona miento, que permite a las<br />
bacterias tener acceso directo al esmalte más profundo.<br />
En fosetas y fisuras, la enfermedad se inicia como<br />
manchas blancas enfrentadas en las pa redes de la fisura,<br />
a la altura de la mitad más profunda.<br />
Al aumentar el volumen de las lesiones, con vergen<br />
en el fondo de la fisura.<br />
En relación con los elementos estructurales del esmalte,<br />
la desmineralización progresa a lo largo y en<br />
dirección radial de los prismas y las estrías de Retzius,<br />
los cuales son pronuncia dos casi siempre en los bordes<br />
cervicales de las lesiones interproximales. Dicha<br />
desminerali zación llega hasta la unión entre esmalte<br />
y dentina.<br />
La lesión es indolora e inodora y casi siem pre es<br />
extensa y poco profunda.<br />
Caries de dentina<br />
Al llegar al límite amelodentinario, el proceso carioso<br />
se difunde en dirección lateral, formán dose una base<br />
amplia.<br />
La dentina es un tejido poco calcificado y por ello<br />
el proceso evoluciona con mayor rapidez, avanzando<br />
a través de los túbulos dentinarios, los cuales se infiltran<br />
de bacterias y se dilatan a expensas de la matriz<br />
adyacente.<br />
Las bacterias acidógenas y las produc toras de enzimas<br />
proteolíticas e hidrolíticas desmineralizan la
Caries dental 133<br />
dentina y posteriormente di gieren la matriz colágena;<br />
en consecuencia, la dentina se reblandece, se decolora<br />
y forma una masa.<br />
Al hacer un corte longitudinal de un diente con caries<br />
en dentina, se identifican tres zonas desde afuera<br />
hacia adentro:<br />
1. Zona de reblandecimiento o necrótica. Está formada<br />
por residuos alimentarios y dentina reblandecida,<br />
se desprende fácilmente con el excavador<br />
y tiene coloración parda.<br />
2. Zona de invasión destructiva. La dentina aún<br />
conserva su estructura, pero los túbulos dentinarios<br />
tienen ligera dilatación, ensan chamiento<br />
e invasión de microorganismos. Esta zona también<br />
es de color pardo, pero es un poco más clara<br />
que la zona de reblande cimiento.<br />
3. Zona de defensa o esclerótica. La coloración es<br />
nula o casi nula. Las fibras de Thomes se han<br />
retraído dentro de los túbulos como reacción<br />
defensiva de la pulpa; en su lugar, se colo can nódulos<br />
de neodentina, los cuales obtu ran la luz de<br />
los túbulos para tratar de impe dir el avance de la<br />
caries. Así se forma la zona de defensa.<br />
Por otro lado, Fusayama identifica cuatro zo nas de<br />
dentina: desorganizada y necrótica, in fectada, desmineralizada<br />
y esclerosada.<br />
Las zonas de dentina desorganizada y necrótica e infectada<br />
son insensibles, no remineralizables y presentan<br />
pérdida de la estructura colágena. La zona desmineralizada<br />
es potencialmente reminera lizable. Y por<br />
último, la zona esclerosada tiene crista les en la luz de<br />
los túbulos, no está infectada y mantiene su estructura<br />
colágena (fig. 8-5).<br />
Un síntoma clásico de la caries de dentina es el dolor<br />
ocasionado por los cambios de temperatura. Las<br />
bebidas frías, los alimentos calien tes y la ingestión de<br />
azúcares o cítricos pueden ocasionar dolor, que desaparece<br />
cuando cesa el estímulo.<br />
Caries de pulpa<br />
La caries llega a la pulpa y la inflama, pero ésta conserva<br />
su vitalidad. El síntoma principal es el dolor espontáneo<br />
o inducido.<br />
El dolor espontáneo se caracteriza porque no se<br />
produce por alguna causa externa, sino por la conges-<br />
Dentina sana<br />
Capa externa<br />
Infectada<br />
No remineralizada<br />
Necrótica<br />
Insensible<br />
Capa interna<br />
No infectada<br />
Remineralizada<br />
Vital<br />
Sensible<br />
(dureza Knoop)<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Superficie<br />
Capa<br />
opaca<br />
Capa<br />
translúcida<br />
Capa<br />
subtranslúcida<br />
1 000 μ 2 000 μ 3 000 μ<br />
Pared pulpar<br />
Cristales en la luz<br />
del túbulo<br />
Bacterias<br />
Proceso odontoblástico<br />
Figura 8-5. Capas de la caries dentinaria.
134 Capítulo 8<br />
tión de la pulpa que presiona los nervios pulpares, los<br />
cuales quedan comprimidos contra la pared de la cámara<br />
pulpar. Este dolor aumenta durante las noches,<br />
porque al mante ner la cabeza en posición horizontal<br />
hay ma yor afluencia de sangre.<br />
El dolor inducido ocurre por exposición del diente<br />
a agentes físicos, químicos o mecánicos. A diferencia<br />
del dolor por caries de segundo grado, el dolor inducido<br />
persiste al eliminar el estímulo.<br />
Necrosis pulpar<br />
La necrosis pulpar se caracteriza por destruc ción total<br />
de la pulpa. En consecuencia, no hay dolor espontáneo<br />
ni inducido del diente, pero sí duele por las complicaciones<br />
de la caries que incluyen desde monoartritis<br />
apical hasta osteo mielitis.<br />
La monoartritis apical se acompaña de dolor a la<br />
percusión del diente, sensación de alarga miento y<br />
movilidad anormal de la pieza. La infección puede<br />
diseminarse al resto del orga nismo a través del torrente<br />
sanguíneo, indepen dientemente de que exista<br />
en las estructuras de soporte del diente a niveles local<br />
y general (oí dos, ojos, nariz), y afección sistémica en<br />
perso nas susceptibles a endocarditis bacteriana.<br />
Clasificaciones de caries dental<br />
Clasificación de Greene Vardiman<br />
Black (según la localización)<br />
Clase I<br />
Aquí se incluyen las caries que se encuentran en fosetas<br />
y fisuras de premolares y molares, cíngulos de los<br />
dientes anteriores y en cualquier anomalía estructural<br />
de los dientes.<br />
Clase II<br />
Las caries de clase II se localizan en las caras proximales<br />
de todos los dientes posteriores (molares y premolares).<br />
Clase III<br />
Son las caries en las caras proximales de todos los<br />
dientes anteriores sin abarcar el ángulo in cisal.<br />
Clase IV<br />
Las caries de clase IV se encuentran en las ca ras proximales<br />
de todos los dientes anteriores y abarcan el ángulo<br />
incisal.<br />
Clase V<br />
Estas caries se localizan en el tercio gingival de los<br />
dientes anteriores y posteriores, sólo en sus caras linguales<br />
y bucales.<br />
Clasificación por número<br />
de caras afectadas en los dientes<br />
Las caries pueden ser de tres tipos: simples, cuando<br />
afectan una sola superficie del diente; compuestas, si<br />
abarcan dos superficies del dien te, y complejas cuando<br />
dañan tres o más super ficies.<br />
Clasificación por el tejido afectado<br />
Las caries, según el tejido afectado, se clasifi can de la<br />
siguiente manera:<br />
1. De primer grado: esmalte.<br />
2. De segundo grado: esmalte y dentina.<br />
3. De tercer grado: esmalte, dentina y pulpa.<br />
4. De cuarto grado: necrosis pulpar.<br />
Clasificación por el grado de evolución<br />
Caries activas o agudas<br />
Las caries activas se caracterizan por ser proce sos destructivos,<br />
rápidos y de corta evolución, con afección<br />
pulpar; son más frecuentes en niños y adolescentes,<br />
quizá por la ausencia de esclerosis dentinaria.<br />
La abertura a través del esmalte es relativa mente<br />
pequeña y tiene bordes cretáceos; pero el proceso se<br />
extiende a la unión amelodentinaria en dirección pulpar,<br />
con amplia desmineralización de la dentina.<br />
Caries crónicas<br />
Son de evolución lenta, por lo que el órgano dentinopulpar<br />
tiene tiempo de protegerse por aposición dentinaria<br />
y esclerosis tubular.
Caries dental 135<br />
El esmalte no presenta pérdida de sustancia, puede<br />
adquirir pigmentación pardusca, y ade más estabilizarse<br />
por remineralización salival.<br />
Cuando la caries afecta la dentina, la cavi dad es<br />
poco profunda, con abertura mayor que en la caries<br />
aguda, un mínimo de dentina desmineralizada y poco<br />
esmalte socavado, lo cual facilita el acceso al flujo salival<br />
y la eliminación de restos alimentarios.<br />
Caries cicatrizadas<br />
La cavidad correspondiente a las caries cicatri zadas es<br />
muy abierta; a diferencia de las cavi dades de las caries<br />
descritas antes, presenta superficie desgastada (cara<br />
oclusal) y lisa, con dureza aumentada y pigmentación<br />
pardusca. Asimismo, hay esclerosis dentinaria en la<br />
superficie y dentina reparadora en la profundidad.<br />
Clasificación por causa dominante<br />
Caries por biberón<br />
Son lesiones de rápida evolución y se presen tan en niños<br />
muy pequeños que utilizan el biberón o el chupón<br />
para dormir, ya sea con leche, agua endulzada, jugos<br />
de frutas u otros líqui dos azucarados.<br />
Las lesiones de caries se localizan principal mente a<br />
nivel de los incisivos superiores infan tiles (deciduos o<br />
temporales); le siguen en fre cuencia las lesiones de los<br />
caninos y primeros molares superiores. En cambio,<br />
los incisivos inferiores casi no se afectan porque están<br />
protegidos por estructuras blandas.<br />
Las caries por biberón inician poco después de la<br />
erupción de los dientes, a nivel de las ca ras vestibulares,<br />
y evolucionan alrededor del diente debido a que<br />
el niño deja de succionar mientras duerme y al mismo<br />
tiempo el líquido se estanca en la cavidad bucal, el<br />
flujo salival disminuye y los músculos prácticamente<br />
no tie nen actividad. Todos esos factores permiten el<br />
contacto directo entre el sustrato, la placa dentobacteriana<br />
y los dientes durante varias horas. En caso de no<br />
tratarse, la consecuencia final es la fractura de la corona<br />
que a su vez trae consi go dificultad en la masticación,<br />
dificultad en la fonación, problemas estéticos y,<br />
por consiguien te, conflictos psicológicos.<br />
Caries irrestricta o rampante<br />
Massler definió la caries irrestricta como un cuadro de<br />
aparición súbita y avance rápido que afecta casi todos<br />
los dientes, incluso a las superficies consideradas inmunes.<br />
Puede afectar a niños, adolescentes y adultos.<br />
La velocidad de avance de la caries se rela ciona con<br />
la etapa de maduración de los dien tes. Por ejemplo, la<br />
caries evoluciona con más rapidez y es más destructiva<br />
cuando las lesiones comienzan en los molares primarios<br />
alrededor de los 2.5 a 3 años, en los primeros<br />
molares permanentes a los siete años, y en los premolares<br />
y segundos molares permanentes entre los 11 y<br />
13 años. Al darse poco tiempo para la formación de<br />
dentina secundaria, con frecuencia se com promete la<br />
integridad de la pulpa en los dien tes afectados.<br />
Las lesiones son blandas y de color entre amarillo<br />
y pardo.<br />
Caries recidivante, secundaria o recurrente<br />
Consiste en aumento de la actividad cariosa entre los<br />
límites de una restauración y el tejido sano circundante.<br />
Puede deberse a tratamiento erróneo, mala selección<br />
del material de restau ración o falta de medidas<br />
de higiene bucal o ambas, en combinación con dieta<br />
cariogénica.<br />
Policaries<br />
Los niños pueden padecer policaries por falta de higiene<br />
bucal. La enfermedad es más común en caso de<br />
fallas en la maduración del esmalte, discapacidad, respiración<br />
bucal o ingestión fre cuente de alimentos con<br />
sacarosa, o ambas cosas. La evolución de estas caries<br />
es rápida.<br />
Caries sorpresa del primer molar permanente<br />
Las causas de este tipo de caries son alteración de la<br />
per meabilidad del esmalte y la dentina, bajo po tencial<br />
de defensa dentinaria e higiene bucal inadecuada. La<br />
lesión es benigna, casi siempre indolora y penetrable<br />
por medio de explorador. El esmalte se ve conservado<br />
y con caries de sur co. La dentina tiene aspecto gris<br />
amarillento, blanda y esponjosa. Esta pérdida de sustancia<br />
puede detectarse mediante examen radiológico<br />
ordinario.
136 Capítulo 8<br />
Caries radicular<br />
Cuando se retrae la encía por aumento de la edad o<br />
por lesiones periodontales, el cemento radicular queda<br />
en contacto con el medio bucal. Si se forma placa<br />
dentobacteriana, la caries se desarrolla y avanza con<br />
mayor rapidez.<br />
Dieta y caries<br />
Estudios de la relación<br />
entre dieta y caries<br />
Como ya se mencionó, la dieta tiene una fun ción destacada<br />
en el desarrollo de la placa dentobacteriana.<br />
Graf y Mühlemann, en 1966, descubrieron que al<br />
ingerir manzana, deja un ácido li bre durante las dos<br />
horas posteriores, por lo cual no se recomienda en las<br />
noches; sin embargo, el principal riesgo es la sacarosa.<br />
Numerosos estudios demuestran la relación existente<br />
entre dieta y caries:<br />
1. Los esquimales, cuya dieta consistía básica mente<br />
en pescado, carne y grasas, tenían baja incidencia<br />
de caries; pero cuando introdu jeron hidratos<br />
de carbono en su dieta, la incidencia de esta afección<br />
aumentó entre ellos.<br />
2. Durante la Segunda Guerra Mundial, la es casez<br />
de azúcar redujo la incidencia de ca ries.<br />
3. Las personas con deficiencia de fructosa-1-fosfato<br />
aldolasa no pueden ingerir fructosa ni sacarosa<br />
(glucosa más fructosa) y tienen baja incidencia<br />
de caries.<br />
4. Los chupones rellenos de miel aumentan la frecuencia<br />
de caries entre los lactantes.<br />
5. De acuerdo con el grado de desarrollo de cada<br />
comunidad, la incidencia de caries aumenta al<br />
incrementarse el consumo de azúcar.<br />
Se han realizado estudios en animales que llevaron<br />
a los siguientes hallazgos:<br />
1. Las ratas alimentadas por intubación gástri ca no<br />
generan caries a pesar de tener flora cariogénica.<br />
2. Los animales sin caries desarrollan lesiones de<br />
caries cuando se someten a dieta y flora cariogénicas.<br />
3. Los estreptococos cariogénicos no forman colonias<br />
en las superficies lisas de los dientes ni inducen<br />
caries en ausencia de hidra tos de carbono<br />
en la dieta (principalmente sacarosa).<br />
4. Cuanto más frecuente sea el consumo, hay más<br />
formación de caries.<br />
5. Los polisacáridos, como sorbitol, manitol y xilitol,<br />
no originan caries.<br />
6. Los azúcares naturales de alimentos, como miel,<br />
plátano, pasas, uvas e higos son muy cariogénicos.<br />
Otros estudios importantes y muy conocidos son<br />
los de Vipeholm y de Turku.<br />
Durante cinco años, Vipeholm estudió en Suecia<br />
a una población de 436 enfermos men tales adultos,<br />
con bajo aporte de fluoruro e hi giene bucal deficiente.<br />
El objetivo del estudio fue investigar la relación entre<br />
consumo de azú car y actividad cariogénica. Los individuos<br />
se distribuyeron de manera voluntaria en los<br />
si guientes grupos:<br />
1. Grupo control. Ingestión baja en azúcar y sólo<br />
durante las comidas.<br />
2. Grupo de la sacarosa. Dieta rica en bebidas azucaradas<br />
durante las comidas.<br />
3. Grupo del pan. Consumo de azúcar bajo o normal,<br />
pero restringido a la ingestión de pan azucarado<br />
durante las comidas.<br />
4. Grupo del caramelo. Veintidós bom bones pegajosos<br />
en dos raciones durante el consumo de las<br />
comidas (fase II) o en cuatro raciones entre las comidas<br />
(fase III).<br />
5. Grupo de ocho chiclosos. Ocho chiclosos en<br />
dos raciones durante el consumo de las comi -<br />
das (fase II) o en cuatro raciones entre las comidas<br />
(fase III).<br />
6. Grupo de 24 chiclosos. Consumo de 24 chiclosos,<br />
ingeridos a voluntad propia durante el<br />
día; la ingestión de azúcar constituyó el doble de<br />
lo habitual.<br />
7. Grupo del chocolate. Chocolate con leche cuatro<br />
veces al día durante las comidas.<br />
Los resultados se presentan en la figura 8-6.<br />
Por otro lado, durante dos años Turku estu dió en<br />
Finlandia a 127 adultos divididos en tres grupos (fig.<br />
8-7):
Caries dental 137<br />
CAO-D por persona<br />
Grupo<br />
de 24 chiclosos<br />
(mujeres)<br />
Grupo<br />
de 24 chiclosos<br />
(varones)<br />
8<br />
6<br />
CAO-S<br />
Sacarosa<br />
20<br />
Grupo de chocolate<br />
18<br />
16<br />
14<br />
Grupo de pan<br />
(varones)<br />
Grupo de<br />
caramelos<br />
Grupo de<br />
sacarosa<br />
Grupo de ocho<br />
chiclosos<br />
Grupo<br />
control<br />
Grupo de pan<br />
(mujeres)<br />
4<br />
2<br />
Fructosa<br />
Xilitol<br />
0 6 12 18 24 meses<br />
Figura 8-7. Estudio de Turku. CAO-S = Ataque de caries<br />
en la dentición permanente, pero la unidad<br />
de medida es la superficie dental. Adaptación<br />
del ICAO(D) en que la unidad de medida es la<br />
superficie dental y no el diente.<br />
12<br />
FI FII FIII<br />
1946 1948 1950<br />
Azúcar consumida en las comidas<br />
Azúcar consumida tanto en las comidas<br />
como entre comidas<br />
Figura 8-6. Estudio de Vipeholm relacionado con la dieta<br />
y caries dental. CAO(D) = Ataque de caries<br />
en la denti ción permanente. C = Dientes con<br />
caries. A = Dientes ausentes por causa de<br />
caries. O = Dientes obturados. (D) = Diente.<br />
1. Con dieta de sacarosa.<br />
2. Con dieta de fructosa.<br />
3. Con dieta de xilitol (alcohol de azúcar no fermentable).<br />
El grupo que ingirió sacarosa tuvo mayor número<br />
de caries, seguido por el de fructosa. La frecuencia de<br />
caries en el grupo de xilitol fue muy baja.<br />
Otra investigación importante es la que rea lizó<br />
Harris en Hopewood House (Australia). Durante 10<br />
años, ese autor estudió a niños de un internado que<br />
tenían dieta baja en hidratos de carbono refinados. A<br />
pesar de su higiene oral deficiente, casi no tenían caries.<br />
Al salir del internado y cambiar su alimentación<br />
por una dieta cariogénica, desarrollaron caries con<br />
rapidez.<br />
Factores de la dieta relacionados<br />
con la formación de placa<br />
dentobacteriana y caries<br />
Contenido y capacidad cariogénica<br />
de los hidratos de carbono<br />
Los hidratos de carbono de cadena corta y ab sorción<br />
rápida, como los monosacáridos y di sacáridos, son
138 Capítulo 8<br />
Cuadro 8-1. Capacidad cariogénica de los hidratos de carbono<br />
Metabolismo bacteriano (Streptococcus mutans)<br />
Hidratos de carbono<br />
Forma química<br />
Proceso metabólico Producto metabólico final Cariogenicidad<br />
Glucosa Hexosa Glucólisis anaeróbica Ácido láctico +<br />
Fructosa Hexosa Glucólisis anaeróbica Ácido láctico +<br />
Almidón<br />
Polímero de la glucosa<br />
(unión C 1-4)<br />
+<br />
Celulosa<br />
Sacarosa<br />
+ = baja; ++++ = muy alta.<br />
Polímero de la glucosa<br />
(unión B 1-4)<br />
Disacárido de glucosa más<br />
fructosa (unión 1-2)<br />
Descomposición por amilasa<br />
↓<br />
Glucosa<br />
Glucosa<br />
↓<br />
Ácido láctico<br />
Ninguno Ninguno –<br />
0<br />
Glucólisis. Síntesis<br />
de polisacáridos<br />
extracelulares. Síntesis<br />
de polisacáridos<br />
intracelulares<br />
Ácido láctico<br />
+<br />
Glucano extracelular<br />
o<br />
Fructano extracelular<br />
+<br />
Amilopectina intracelular<br />
++++<br />
más cariogénicos. La incidencia de caries aumenta a<br />
medida que se ingiere más cantidad de hidratos de<br />
carbono.<br />
La cariogenicidad de la sacarosa (azúcar co mún) es<br />
mayor (cuadro 8-1).<br />
Consistencia<br />
El azúcar es más perjudicial cuanto más pegajoso y<br />
adherente sea a los dientes. Los líqui dos azucarados<br />
producen menos caries que los azúcares sólidos; un<br />
chicloso es más peligroso que un refresco.<br />
Las partículas gruesas de azúcar son menos cariogénicas<br />
que las pulverizadas.<br />
Frecuencia de consumo<br />
Después de ingerir azúcares disminuye el pH de la<br />
placa dentobacteriana, pero se normaliza en los 30<br />
minutos siguientes. Por ello, el consu mo frecuente de<br />
azúcares produce un pH áci do constante.<br />
Ingestión durante las comidas o entre ellas<br />
Durante la comida aumenta la secreción sali val y<br />
ésta amortigua la acidez. Por tanto, es más peligroso<br />
consumir azúcares entre las comidas que durante<br />
ellas.<br />
Factores protectores<br />
Los componentes de algunos alimentos inhiben la caries,<br />
por lo que se denominan factores pro tectores o cariostáticos.<br />
Entre ellos se encuentran diversos fosfatos;<br />
fluoruro; calcio, fósforo, mag nesio, estroncio y litio;<br />
grasas y ácidos grasos, y proteínas.<br />
El tiempo de depuración o “aclaramiento” de los hidratos<br />
de carbono se define como el tiem po requerido<br />
para eliminarlos por debajo de 0.1%. Los alimentos se<br />
mastican y luego se eli minan por efecto de enjuague<br />
de la saliva y por acción de los músculos masticadores,<br />
len gua, labios y mejillas.<br />
La secreción salival abundante y la mastica ción vigorosa<br />
aceleran la neutralización de los ácidos en la placa.<br />
El cepillado después de las comidas o la in ducción<br />
de flujo salival rápido por estímulo mecánico o gustatorio<br />
al comer alimentos ásperos o muy olorosos<br />
al final de las comidas, como el queso, apresuran el<br />
aclaramiento.<br />
En los cuadros 8-2 y 8-3 se presentan algu nas<br />
orientaciones dietéticas.
Caries dental 139<br />
Cuadro 8-2. Orientaciones dietéticas en relación<br />
con la caries dental<br />
Cariogenicidad de alimentos más frecuentes<br />
Alimento<br />
Porcentaje de cariogenicidad<br />
Maní (cacahuate) 0.0 a 2.3<br />
Lechuga 0.0 a 9.3<br />
Espinaca 0.6 a 4.6<br />
Papas fritas 1.6 a 6.7<br />
Pan blanco con manteca 4.2 a 22.1<br />
Uvas 24.1 a 42.4<br />
Bananas 21.0 a 73.7<br />
Jugo de naranja 26.1 a 43.5<br />
Caramelos 16.0 a 50.4<br />
Goma de mascar 14.0 a 27.2<br />
Solución al 10% de dextrosa 41.3 a 41.5<br />
Sacarosa 51.9 a 62.1<br />
Alimentos seguros para consumir entre comidas<br />
Leche<br />
Quesos<br />
Vegetales frescos<br />
Pizza<br />
Tostadas<br />
Café o té o mate sin azúcar<br />
Huevos<br />
Emparedados de jamón,<br />
Nueces, almendras<br />
huevo, atún, salmón, queso,<br />
Bebidas dietéticas<br />
carne, salchichas<br />
Jugo de tomates<br />
Galletitas de agua<br />
Alimentos aceptables que deben consumirse con moderación:<br />
Jugos de frutas no azucaradas<br />
Frutas frescas<br />
Papas fritas<br />
Dulzura relativa de edulcorantes<br />
Sustancia<br />
Dulzura relativa<br />
Sacarosa 1.0<br />
Glucosa 0.70<br />
Fructosa 1.70<br />
Azúcar invertida 1.20<br />
Sorbitol 0.54<br />
Manitol 0.57<br />
Xilitol 1.0<br />
Ciclamatos 30.0 a 80.0<br />
Dihidrochalona 100.0<br />
Aspartamos 180.0 a 200.0<br />
Sacarina 200.0 a 700.0<br />
Historia natural de la caries<br />
dental (Leavell y Clarck)<br />
Periodo prepatogénico<br />
Factores del huésped<br />
Edad. Al parecer, la susceptibilidad a la caries es<br />
igual para todos, pero es mayor antes de los 20 años y<br />
principalmente durante la infancia. Después, empieza<br />
a disminuir.<br />
Sexo. Los dientes aparecen primero en las mujeres,<br />
lo cual puede condicionar mayor ex posición al riesgo.<br />
La apari ción de hipoplasia del esmalte li gada al cromosoma<br />
X depende del sexo del progenitor.<br />
Raza. En países donde se han realizado estu dios,<br />
como en Estados Unidos, se observaron diferencias<br />
raciales dentro de la misma área de una comunidad,<br />
las cuales puedan relacio narse con aspectos socioculturales.<br />
La inciden cia de caries resulta más baja en<br />
personas de raza negra y china.<br />
Estructuras genética e histológica, y composición<br />
química del diente. Algunos factores genéticos y nutricios<br />
actúan durante el desarrollo del dien te. Así sucede,<br />
por ejemplo, cuando hay hipo plasia o hipomineralización<br />
del esmalte, o am bas.<br />
Integridad anatomofuncional. La caries es más frecuente<br />
en surcos y fosetas profundos, y en dientes más<br />
alejados de los conductos saliva les. El desgaste proximal<br />
excesivo y la malposición dental propician la caries;<br />
lo mismo hace cualquier enfermedad sistémica<br />
que afecte el metabolismo del diente.<br />
Ciertas características de la saliva, como consistencia<br />
física, viscosidad y cantidad, entre otras, se<br />
relacionan con la aparición de caries. En animales de<br />
laboratorio se ha demostrado que la extirpación de las<br />
glándulas salivales aumenta el número de caries.<br />
Nivel de inmunidad. Se relaciona en sentido inversamente<br />
proporcional con la aparición de la enfermedad.<br />
Estado nutricio. La vitamina D es esencial para absorber<br />
el calcio y el fósforo de los alimentos. La carencia<br />
de estos elementos en el organismo conduce a<br />
descalcificación.<br />
Aspecto psicológico. La tensión emocional disminuye<br />
la cantidad de saliva y puede reducir la resistencia<br />
a las infecciones.<br />
Hábitos. Los hábitos por lo general se rela cionan<br />
con el nivel cultural y los que propician la caries son:<br />
dieta rica en sacarosa, ingestión de golosinas entre comidas<br />
y falta de higiene bucal.<br />
El aporte de flúor en el agua de consumo, la sal y<br />
otros alimentos aumenta la resistencia a la caries.<br />
Factores del agente<br />
Se ha observado que cuando las ratas libres de gérmenes<br />
patógenos se someten a dietas cariogénicas no<br />
desarrollan caries, lo cual significa que los microor-
140 Capítulo 8<br />
Cuadro 8-3. Asesoramiento dietético para racionar la ingestión de hidratos de carbono<br />
Nivel de riesgo cariogénico individual Actividad preventiva Objetivo<br />
Sano Asesoramiento dietético Llevar la frecuencia a menos de cuatro momentos de consumo diario<br />
Alto riesgo o alta actividad Asesoramiento dietético Llevar la frecuencia a menos de cuatro momentos de consumo diario<br />
Usar los hidratos de carbono en preparaciones menos cariogénicas:<br />
utilizar los menos adhesivos<br />
Realizar el consumo sólo en las comidas principales<br />
Reducir la cantidad (recuerde que a igual frecuencia, mayor<br />
cantidad significa mayor riesgo)<br />
Indicación de sustituyentes edulcorantes Reducir frecuencia y cantidad<br />
ganismos son indispensables para la evolución del<br />
padecimiento.<br />
Todavía se desconocen muchos de los microorganismos<br />
causantes de la caries, pero se sabe que los estreptococos<br />
(sobre todo Streptococcus mutans) y Lactobacillus<br />
acidophilus tienen estrecha relación con el<br />
desarrollo de la placa dentobacteriana.<br />
Las bacterias producen ácidos al actuar en los hidratos<br />
de carbono, aparte de que son acidúricas.<br />
Los restos de alimentos que se acumulan en la superficie<br />
dental y los espacios interdentales permiten el<br />
crecimiento y la multiplicación de las bacterias.<br />
Factores del ambiente<br />
En los países sin luz solar todo el año, al pare cer el<br />
promedio de horas de luz solar se rela ciona con la frecuencia<br />
de caries.<br />
El tipo de agua de consumo y la calidad del suelo<br />
influyen en la incidencia mayor o menor de caries,<br />
dependiendo de la cantidad de flúor que contengan.<br />
Cuando se vive en un lugar muy caluroso y el agua tiene<br />
flúor en concentracio nes adecuadas para un sitio<br />
frío, hay posibili dades de padecer incluso fluorosis;<br />
pero si hace falta flúor en el agua y los alimentos, se<br />
desa rrolla más caries.<br />
El desarrollo agrícola e industrial se vincula con las<br />
condiciones socioeconómicas de la co munidad, las cuales<br />
a su vez influyen en el ni vel de vida y, por consiguiente,<br />
también se re lacionan con la aparición de caries.<br />
Periodo patogénico<br />
El rompimiento del equilibrio entre los factores de la<br />
tríada ecológica (agente, huésped y ambien te) determina<br />
el paso hacia el periodo patogénico:<br />
1. Enfermedad potencial. El estímulo comienza a<br />
actuar en el diente susceptible, pero no hay lesiones.<br />
2. Estado o periodo de latencia. En esta etapa se presentan<br />
las primeras alteraciones bioquí micas en<br />
los tejidos calcificados de los dien tes. Pueden<br />
aparecer lesiones tempranas, pero son tan pequeñas<br />
que escapan a la de tección clínica.<br />
3. Lesiones tempranas reconocibles. Al cruzar el<br />
horizonte clínico, pueden reconocerse lesio nes<br />
tempranas de caries en el esmalte o la dentina, o<br />
en ambos.<br />
4. Lesiones de caries moderadamente avanzada con<br />
pulpitis. El avance de la enfermedad condu ce a<br />
inflamación de la pulpa.<br />
5. Secuelas de caries avanzada. Cuando la enfermedad<br />
continúa, su evolución puede llegar a<br />
producir necrosis pulpar, abscesos periapicales,<br />
granuloma, quistes, osteomielitis y fís tulas crónicas.<br />
La infección puede convertirse en un foco<br />
de infección y dise minarse a otros órganos.<br />
Niveles de prevención<br />
Éstos comprenden los siguientes (cuadro 8-4):<br />
1. Promoción de la salud. Aquí se incluyen los siguientes<br />
aspectos:<br />
A. Educación acerca de la higiene bucal. Es importante<br />
proporcionar esta educación en escuelas,<br />
consultorios, clínicas y hogares. Asimismo, los<br />
hábitos deben formarse desde temprana edad,<br />
sobre todo el cepi llado de los dientes y la visita<br />
periódica al odontólogo.
Caries dental 141<br />
Cuadro 8-4. Historia natural y niveles de prevención de la caries dental<br />
Factores probables que originan la caries dental<br />
Factores del agente<br />
Microorganismos (Lactobacillus acidophilus)<br />
Agentes químicos, fluoruros<br />
Residuos de alimentos<br />
Deficiencia de vitamina D<br />
Agentes físicos, fuerza<br />
Restos de hidratos de carbono<br />
Factores del ambiente<br />
Localización geográfica (claridad del sol, altitud,<br />
latitud, precipitación de agua)<br />
Suministro de agua, calidad del suelo<br />
Desarrollo económico, agrícola e industrial<br />
Social (religión, cultura)<br />
Factores del huésped:<br />
Edad, raza, sexo, país de origen<br />
Influencias genéticas, de desarrollo y de la dieta<br />
sobre la composición y estructura<br />
del diente, fisuras, etcétera<br />
Patrones de dieta, elección del cepillado<br />
Estado de las glándulas salivales, calidad<br />
de secreción salival<br />
Función endocrina<br />
Eficacia en la eliminación de restos de alimentos<br />
La interacción entre estos factores produce el inicio<br />
del estímulo<br />
Horizonte clínico<br />
Curso o evolución natural de la caries dental<br />
Secuelas de caries avanzada:<br />
necrosis de la pulpa, abscesos<br />
periapicales, granuloma,<br />
quistes, osteomielitis y fístulas<br />
crónicas<br />
Destrucción completa o pérdida<br />
de los dientes<br />
Lesiones de caries<br />
moderadamente<br />
avanzadas con pulpitis<br />
Reconocimiento de la reacción:<br />
lesiones tempranas de caries en<br />
el esmalte, la dentina, o en<br />
ambos<br />
Estado latente:<br />
lesiones bioquímicas o lesiones<br />
tempranas lo suficientemente<br />
pequeñas para escapar a la<br />
detección; interacción preeruptiva<br />
Enfermedad potencial, susceptibilidad<br />
a la caries sin lesiones<br />
Interacción entre<br />
el estímulo y el huésped –––– Reacción del huésped<br />
Estado óptimo, alta resistencia a la caries debida<br />
a factores genéticos, de desarrollo o de dieta,<br />
además de buena higiene<br />
Periodo prepatogénico<br />
Periodo patogénico o de evolución<br />
Promoción de la salud<br />
Educación en buena higiene<br />
de la boca<br />
Estándar correcto de<br />
alimentación<br />
Dieta planeada<br />
Exámenes periódicos<br />
selectivos<br />
Protección<br />
específica<br />
Higiene correcta de la<br />
boca<br />
Fluoruración de los<br />
abastecimientos<br />
públicos de agua<br />
Aplicación tópica de<br />
fluoruros<br />
Evitar alimentos que<br />
produzcan lesiones,<br />
principalmente entre<br />
comidas<br />
Cepillado de los dientes<br />
después de comer<br />
Tratamiento de las<br />
lesiones incipientes<br />
Tratamiento de áreas<br />
altamente susceptibles<br />
pero no complicadas<br />
en personas susceptibles<br />
Aplicar odontología<br />
preventiva<br />
Diagnostico ´<br />
temprano y<br />
tratamiento<br />
oportuno<br />
Examen periódico de<br />
la boca con rayos X<br />
Tratamiento temprano<br />
de todas las lesiones<br />
Extensión de la<br />
terapéutica en la<br />
vecindad de las<br />
lesiones para<br />
prevenir lesiones<br />
secundarias<br />
Atención a las<br />
malformaciones y<br />
defectos del<br />
desarrollo<br />
Exámenes obligatorios<br />
de los escolares<br />
Limitación de la<br />
incapacidad<br />
Tapar la pulpa<br />
Tratamiento de la raíz y<br />
del conducto radicular<br />
Restauraciones<br />
Extracciones<br />
Protección contra la<br />
formación de abscesos<br />
Rehabilitación<br />
Remplazar los<br />
dientes perdidos<br />
Prótesis fija,<br />
removible y total<br />
para restaurar la<br />
armonía y la<br />
función de la<br />
dentadura<br />
Prevención primaria Prevención secundaria Prevención terciaria
142 Capítulo 8<br />
B. Alimentación adecuada. Es indispensable insistir<br />
en la importancia de ésta con aporte correcto<br />
de calcio, fósforo y vitamina D.<br />
C. Dieta planeada.<br />
D. Exámenes periódicos selectivos. Deben efectuarse<br />
en escolares y mujeres emba razadas, que<br />
constituyen grupos altamen te susceptibles.<br />
Estos temas se estudian por separado en<br />
otras partes del libro.<br />
2. Protección específica. Abarca los siguientes requerimientos:<br />
A. Buena higiene de la boca.<br />
B. Fluoruración de los abastecimientos públicos<br />
de agua, la sal u otros alimentos.<br />
C. Aplicación tópica de fluoruro.<br />
D. Excluir alimentos altamente cariogénicos de<br />
la dieta, sobre todo entre comidas.<br />
E. Cepillado de los dientes después de inge rir alimentos.<br />
F. Tratamiento de lesiones incipientes.<br />
G. Tratamiento de áreas altamente suscepti bles,<br />
pero no complicadas, con selladores.<br />
H. Odontología preventiva.<br />
3. Diagnóstico y tratamiento oportuno. Esto inclu ye:<br />
A. Examen periódico de la boca. Los rayos X<br />
pueden ayudar a la detección temprana de la<br />
caries.<br />
B. El tratamiento inmediato es muy impor tante,<br />
pero es necesario tener cuidado de abarcar la<br />
vecindad de las lesiones para prevenir lesiones<br />
secundarias.<br />
C. Atención a los defectos del desarrollo.<br />
D. Exámenes obligatorios a los escolares.<br />
4. Limitación de la incapacidad. Para evitar da ños<br />
irreversibles, es conveniente:<br />
A. Tapar la pulpa.<br />
B. Tratar la raíz y el canal.<br />
C. Restaurar.<br />
D. Extraer el diente en caso necesario.<br />
E. Protección contra la formación de absce sos.<br />
5. Rehabilitación. El remplazamiento de las estructuras<br />
perdidas puede hacerse mediante<br />
puentes y dentaduras postizas para restau rar la<br />
armonía y la función de la dentadura.<br />
Pruebas para detectar<br />
el riesgo de caries<br />
Recuento de Lactobacillus en saliva<br />
El método clásico para detectar Lactobacillus en saliva<br />
consistía en la inoculación de saliva en ca jas de Petri<br />
con agar de Rogosa-Mitchell-Wisemann.<br />
En la actualidad se usa el sistema Dentocult LB ® ,<br />
que consta de una lengüeta de plástico re cubierta de<br />
medio selectivo, conectada a un ta pón de rosca que<br />
cierra un tubo transparente. La saliva se inocula e<br />
incuba, y a continuación se compara la densidad de<br />
crecimiento de co lonias de Lactobacillus con los siguientes<br />
datos:<br />
1. Menos de 1 000 ufc/ml: recuento (riesgo) bajo.<br />
2. De 1 000 a 10 000 ufc/ml: recuento (riesgo) medio.<br />
3. Más de 10 000 ufc/ml: recuento (riesgo) alto.<br />
Los resultados se interpretan en unidades formadoras<br />
de colonia por mililitro de saliva (ufc/ml).<br />
Recuento de Streptococcus mutans<br />
en saliva<br />
Actualmente, el recuento de Streptococcus mu tans en<br />
saliva se realiza con el sistema Dentocult SM ® en tira.<br />
Para ello se requiere de un vial de cristal con un medio<br />
de cultivo selectivo líqui do y de una tira de soporte, la<br />
cual recibe trata miento en uno de sus extremos para<br />
hacerla adherente. Antes de utilizar la tira de soporte,<br />
se introduce en el vial un disco de bacitracina para eliminar<br />
las bacterias que no sean Streptococcus mutans.<br />
Luego la tira se impregna con saliva y se introduce en<br />
el medio, se incuba y después se interpreta: 0 a 1, riesgo<br />
bajo; 2, ries go medio, y 3 riesgo alto. También es<br />
posible determinar el riesgo por medio de unidades<br />
formadoras de colonias por mililitro: cuándo son menos<br />
de 100 000 ufc/ml significa riesgo bajo, y más de<br />
100 000 ufc/ml representa riesgo alto.
Caries dental 143<br />
Prueba de Snyder<br />
Esta prueba se basa en definir la capacidad de las bacterias<br />
de la saliva para producir ácido, por lo que la<br />
muestra de saliva se cultiva en un medio con agar rico<br />
en glucosa y un indicador de pH a una temperatura de<br />
45°C. Los microorganismos de la saliva metabolizan<br />
la glucosa y producen ácido, lo cual hace disminuir el<br />
pH y modi fica el color original del medio.<br />
La prueba de Alban es una modificación simplificada<br />
de la anterior. Asimismo, hay siste mas en tira<br />
que miden la capacidad amortigua dora de la saliva.
Capítulo 9<br />
Medidas preventivas en odontología 145<br />
Medidas preventivas<br />
en odontología<br />
Higiene bucodental<br />
La placa dentobacteriana constituye un factor causal<br />
importante de las dos enfermedades den tales más frecuentes:<br />
caries y periodontopatías. Por eso es fundamental<br />
eliminarla mediante los siguientes métodos:<br />
1. Cepillado de dientes, encías y lengua.<br />
2. Uso de medios auxiliares: hilo dental, cepi llos<br />
interdentales, palillos, estimulador interdental e<br />
irrigador bucal.<br />
3. Pasta dental o dentífrico.<br />
4. Clorhexidina.<br />
5. Aceites esenciales.<br />
Cepillado<br />
El cepillado permite lograr el control mecánico de la<br />
placa dentobacteriana y tiene como obje tivos:<br />
1. Eliminar y evitar la formación de placa dentobacteriana.<br />
2. Limpiar los dientes que tengan restos de alimentos.<br />
3. Estimular los tejidos gingivales.<br />
4. Aportar fluoruros al medio bucal por medio de<br />
la pasta dental.<br />
El cepillo dental tiene tres partes: mango, ca beza<br />
y cerdas. La cabeza es el segmento donde se fijan las<br />
cerdas agrupadas en penachos, y se une al mango por<br />
medio del talón. Las cerdas son de nailon, miden 10<br />
a 12 mm de largo y sus partes libres o puntas tienen<br />
diferente gra do de redondez, aunque se expanden con<br />
el uso.<br />
De acuerdo con el tamaño, los cepillos son grandes,<br />
medianos o chicos. Por su perfil, pue den ser planos,<br />
cóncavos y convexos. Y según la dureza de las<br />
cerdas se clasifican en suaves, medianos y duros; todas<br />
las cerdas se elaboran con fibra de la misma calidad,<br />
por lo cual su dureza está en función del diámetro:<br />
Blando: cerdas con diámetro entre 0.007 y 0.009<br />
de pulgada.<br />
Mediano: cerdas con diámetro entre 0.010 y 0.012<br />
de pulgada.<br />
Duro: cerdas con diámetro entre 0.013 y 0.014<br />
de pulgada.<br />
Los cepillos para niños tienen cerdas que oscilan<br />
entre 0.005 de pulg y más cortos.<br />
Las cerdas pueden desplegarse, moverse lentamente,<br />
golpear de lado, batir o vibrar, con lo que permiten<br />
realizar masaje horizontal, barrido vertical, así como<br />
movimiento rotatorio y vibratorio.<br />
Ninguna evidencia científica apoya un dise ño de<br />
cepillo más adecuado; por ello, la elec ción de éste depende<br />
de las características de la boca.<br />
Por lo general, es preferible el cepillo de mango recto,<br />
cabeza pequeña y recta, fibras sin téticas y puntas<br />
redondeadas para evitar las le siones gingivales, y de<br />
cerdas blandas o media nas para tener mayor acceso<br />
a todas las partes del diente. Se cree que los penachos<br />
separados son más eficaces que aquellos muy juntos.<br />
Hay cepillos para surcos o creviculares, los cuales<br />
sólo constan de dos filas de penachos; pero no se les<br />
ha encontrado eficacia distinta en relación con los demás.<br />
También existen ce pillos eléctricos con cabeza<br />
pequeña y removible que realizan los movimientos<br />
básicos, ya sea solos o combinados:
146 Capítulo 9<br />
1. Recíproco, horizontal de adelante hacia atrás.<br />
2. Vertical hacia arriba y abajo.<br />
3. Vibratorio.<br />
Otros efectúan sólo el movimiento rotatorio y tienen<br />
la ventaja de que limpian la encía y las superficies<br />
interproximales. Ante la presión excesiva durante el<br />
cepillado, dejan de funcio nar y de ese modo la evitan.<br />
Su eficacia es simi lar a la del cepillo común y corriente,<br />
pero son de utilidad para los niños pequeños y las<br />
personas con poca destre za manual o discapacitadas.<br />
Para ser eficaz, el cepillo debe estar seco an tes de<br />
usarse; esto significa que no debe mojar se antes<br />
de utilizarlo. Además, es necesario re mplazarlo cada<br />
mes a tres meses, en cuanto las cerdas se deformen o<br />
se fracturen.<br />
Las personas con dentadura parcial removi ble y<br />
aparatos de ortodoncia removibles deben utilizar dos<br />
cepillos: uno para los dientes natu rales y otro para<br />
bandas, brackets y otras partes de metal.<br />
Las técnicas de cepillado son diversas: al gunas<br />
reciben el nombre de su creador y otras del tipo de<br />
movimiento que realizan. Además, pueden combinarse,<br />
pues lo importante es ce pillar todas las áreas de la<br />
boca, entre ellas len gua y paladar.<br />
Técnica circular o rotacional<br />
Para mayor eficacia del cepillado, el dedo pul gar se<br />
apoya en la superficie del mango y cerca de la cabeza<br />
del cepillo (fig. 9-1); las cerdas del cepillo se colocan<br />
en dirección apical con sus costados apoyados contra<br />
la encía. Así, el cepi llo se gira con lentitud, como si<br />
se barriera con una escoba. De ese modo, las cerdas<br />
Figura 9-1. Manera de sostener el cepillo en la técnica<br />
circu lar o rotacional.<br />
A<br />
Figura 9-2. Técnica circular o rotacional. A, Se colocan las<br />
cerdas en dirección apical sobre la en cía. B,<br />
Se desplazan las cerdas con movimiento de<br />
barrido sobre los dientes desde la encía has ta<br />
la superficie oclusal o incisal.<br />
pasan por la encía, siguen por la corona (en ese momento<br />
forman un ángulo recto con la superficie del<br />
esmalte) y se dirigen hacia la superficie oclusal, pero<br />
es necesario cuidar que pasen por los espacios interproximales<br />
(figs. 9-2 y 9-3).<br />
En las superficies linguales de los dientes anteriores,<br />
el cepillo debe tomarse de manera vertical (fig.<br />
9-4). Las superficies oclusales se cepillan con un movimiento<br />
de vaivén hacia atrás y hacia adelante o con<br />
golpeteo (fig. 9-5).<br />
Si cada arcada se divide en seis zonas (dos posteriores,<br />
dos medias y dos anteriores) (fig. 9-6) y cada una<br />
de éstas tiene dos caras (lingual y vestibular o labial).<br />
Las zonas a cepillar son 24, y se recomienda realizar<br />
ocho a 12 cepilladas por zona, lo cual hace un total de<br />
192 a 288 cepilladas.<br />
Técnica de Bass<br />
Esta técnica es de gran utilidad para pacientes con<br />
inflamación gingival y surcos periodontales profundos.<br />
El cepillo se sujeta como si fuera un lápiz, y se<br />
coloca del tal manera que sus cerdas apunten hacia<br />
arriba en la maxila (maxilar su perior) y hacia abajo en<br />
la mandíbula (maxilar inferior) formando un ángulo<br />
de 45 grados en relación con el eje longitudinal de los<br />
dientes para que las cerdas penetren con suavidad en<br />
el surco gingival (fig. 9-7). Asimismo, se pre siona con<br />
delicadeza en el surco mientras se realizan pequeños<br />
movimientos vibratorios horizontales sin despegar el<br />
B
Medidas preventivas en odontología 147<br />
A<br />
B<br />
Figura 9-3. A, Colocación co rrecta del cepillo. B, Colo cación incorrecta. Las pun tas del cepillo comprimen contra los<br />
dientes pero no pasan por los espacios interproximales.<br />
cepillo durante 10 a 15 segundos por área. Si al cabo<br />
de esos mo vimientos el cepillo se desliza en dirección<br />
oclusal para limpiar las caras (vestibulares o lingua les)<br />
de los dientes, se denomina método de Bass modificado.<br />
El ruido por frotamiento de las cer das indica<br />
presión excesiva de la vibración o movimientos desmesurados.<br />
El mango del cepillo se mantiene horizontal durante<br />
el aseo de las caras vestibulares de to dos los dientes<br />
y las caras linguales de los premolares y molares; pero<br />
se sostiene en sentido vertical durante el cepillado de<br />
las caras lin guales de los incisivos superiores e inferiores.<br />
Las caras oclusales se cepillan haciendo presión<br />
en surcos y fisuras y con movimientos cortos anteroposteriores.<br />
Técnica de Charters<br />
El cepillado con esta técnica es de utilidad para limpiar<br />
las áreas interproximales. Las cerdas del cepillo se<br />
colocan en el borde gingival forman do un ángulo de<br />
45 grados y apuntando hacia la superficie oclusal. De<br />
ese modo, se realizan movimientos vibratorios en los<br />
espacios interproximales (fig. 9-8).<br />
Figura 9-4. En la limpieza de las áreas anteriores linguales,<br />
el cepillo debe tomarse de manera vertical.
148 Capítulo 9<br />
A<br />
Figura 9-5. Método de golpeteo para el cepi llado oclusal.<br />
Al cepillar las superficies oclusales, se pre sionan<br />
las cerdas en surcos y fisuras y se activa el cepillo con<br />
movimientos de rotación sin cam biar la posición de la<br />
punta de las cerdas.<br />
El cepillo se coloca de manera vertical durante el<br />
aseo de la cara lingual de los dientes anteriores.<br />
B<br />
C<br />
Figura 9-6. División de la arcada en seis zonas de cepillado.<br />
Cada zona se cepilla por completo antes<br />
de pasar a la siguiente.<br />
Figura 9-7. A, B, C. Movimientos del cepillo en la técnica<br />
de Bass.
Medidas preventivas en odontología 149<br />
Figura 9-8. Técnica de Charters.<br />
La técnica de Charters se utiliza también al rededor<br />
de aparatos ortodónticos y cuando está desapareciendo<br />
el tejido interproximal, pero no se recomienda<br />
cuando están presentes las pa pilas.<br />
45°<br />
Técnica de Stillman<br />
Las cerdas del cepillo se inclinan en un ángulo de 45<br />
grados dirigidas hacia el ápice del diente; al hacerlo<br />
debe cuidarse que una parte de ellas descanse en la encía<br />
y otra en el diente. De ese modo, se hace una presión<br />
ligera y se realizan movimientos vibratorios (fig. 9-9).<br />
Técnica horizontal<br />
Las cerdas del cepillo se colocan perpendiculares a<br />
la corona y el cepillo se mueve hacia adelante y hacia<br />
atrás. Esta técnica es útil en la primera dentición por<br />
las características anatómicas de los dientes; sin embargo,<br />
la presión excesiva y los dentífricos abrasivos<br />
pueden ocasionar retracción gingival y dañar la unión<br />
amelocementaria.<br />
Figura 9-9. Método de cepillado de Stillman (véase el<br />
texto).
150 Capítulo 9<br />
Cepillado de la lengua<br />
El cepillado de la lengua y el paladar permite disminuir<br />
los restos de alimentos, la placa bac teriana y el<br />
número de microorganismos.<br />
La técnica correcta para cepillar la lengua consiste<br />
en colocar el cepillo de lado y tan atrás como sea posible,<br />
sin inducir náusea, y con las cerdas apuntando<br />
hacia la faringe. Se gira el mango y se hace un barrido<br />
hacia adelante, y el movimiento se repite seis a<br />
ocho veces en cada área. El uso de dentífrico permite<br />
obtener mejores resultados.<br />
Frecuencia y duración del cepillado<br />
La frecuencia del cepillado depende del estado gingival,<br />
la susceptibilidad a la caries y la minu ciosidad<br />
del aseo.<br />
Los adultos que no son susceptibles a la ca ries y sin<br />
afección gingival pueden cepillarse y utilizar el hilo<br />
dental una vez al día, después de la cena.<br />
Los adultos con afección gingival y sin susceptibilidad<br />
a la caries pueden utilizar el cepi llo y el<br />
hilo dental dos veces al día.<br />
Los jóvenes y las personas con propensión a la caries<br />
dental deben cepillarse entre los 10 minutos posteriores<br />
a cada comida y antes de dormir.<br />
La duración del cepillado debe ser de tres minutos<br />
como mínimo.<br />
La dentadura completa o parcial debe cepillarse<br />
minuciosamente, retirarse durante la noche y sumergirla<br />
en una solución de blanqueador doméstico y<br />
agua.<br />
Las aplicaciones ortodónticas fijas requieren un<br />
cepillo ortodóntico. En pacientes con bandas completas<br />
se recomiendan las técnicas de Charters y de<br />
Stillman.<br />
Si las personas no se cepillan de manera mi nuciosa,<br />
deben hacerlo después de cada comi da y antes de dormir.<br />
El cepillado nocturno es muy importante porque<br />
durante el sueño dis minuye la secreción salival.<br />
Algunos colorantes vegetales son útiles para comprobar<br />
si el cepillado fue correcto. Entre los más usados<br />
se encuentran los indicadores dicro máticos. Éstos<br />
tiñen de azul la placa bacteriana antigua (con más de<br />
48 horas de formación) y de rosado la placa bacteriana<br />
reciente (de me nos de 48 horas), y de ese modo<br />
es posible dife renciarlas. La solución se aplica con un<br />
hisopo de algodón sobre las superficies dentales y los<br />
márgenes de las encías, y luego se enjuaga.<br />
También hay comprimidos que se disuelven en la<br />
saliva durante 20 segundos y se distribu yen con la lengua<br />
por las superficies dentales, espacios interdentales<br />
y encías.<br />
La higiene bucal previa a la erupción de los dientes<br />
es muy importante, así que los rodetes deben<br />
limpiarse con suavidad. Carvalho y colaboradores<br />
(1989) investigaron la velocidad de formación de placa<br />
dentobacteriana y caries en las superficies oclusales<br />
de molares en erupción. De acuerdo con sus hallazgos,<br />
los dientes con erupción parcial acumulan placa<br />
dentobacteria na cinco a 10 veces más que los dientes<br />
que ya com pletaron ese proceso. Por tanto, el control<br />
debe iniciarse desde que erupcionan los rodetes en el<br />
niño. En niños menores de un año, la higiene bucal se<br />
realiza con un paño suave hu medecido con agua.<br />
Medios auxiliares de la higiene bucal<br />
Hilo dental<br />
El cepillado de los dientes es insuficiente para limpiar<br />
los espacios interproximales, por lo cual es necesario<br />
utilizar hilo dental después del mismo.<br />
El hilo dental es un hilo especial de seda for mado<br />
por varios filamentos, los cuales se sepa ran al entrar<br />
en contacto con la superficie del diente. Tiene diversas<br />
presentaciones, entre ellas hilo, cinta, con cera o<br />
sin cera, con flúor y con sabor a menta. Su indicación<br />
depende de las características de cada persona;<br />
por ejem plo, si existe contacto muy estrecho entre los<br />
dientes es preferible usar el hilo; pero si el espacio es<br />
mayor, resulta conveniente utilizar la cinta o el hilo de<br />
tipo “floss”, el cual posee una zona central distendible<br />
con varias fi brillas.<br />
Para usar el hilo dental, se extraen del rollo más o<br />
menos 60 cm y este fragmento se enrolla alrededor del<br />
dedo medio de una mano, pero se deja suficiente hilo<br />
para sostenerlo de mane ra firme con el dedo medio<br />
de la otra mano. Conforme se va utilizando, el hilo se<br />
desenro lla de un dedo y se enrolla en el otro con el fin<br />
de usar un segmento nuevo en cada espacio interdental<br />
(fig. 9-10). También es necesario dejar entre ambas
Medidas preventivas en odontología 151<br />
A<br />
B<br />
manos un tramo de 7 a 8 cm de hilo y mantenerlo<br />
tenso para controlar los movimientos.<br />
El hilo se introduce con suavidad entre los dientes<br />
y se desliza hasta el surco gingival. En se guida se<br />
rodea el diente y se desliza hacia la cara oclusal con<br />
movimientos de sierra o de vaivén en sentido vestibulolingual<br />
(figs. 9-11 y 9-12). A continuación se mueve<br />
encima de la papila interden tal con mucho cuidado, y<br />
luego se pasa al si guiente espacio con otra fracción del<br />
hilo. Es importante mantener tenso el hilo entre los<br />
dedos. En los dientes superiores el hilo se guía con<br />
los dos pulgares, o con un pulgar y el índice (fig. 9-13) y<br />
en los dientes inferiores con los dos índices.<br />
Si la persona tiene dificultad para manejar el hilo<br />
dental, puede ayudarse con un portahilo dental, que<br />
es una especie de yugo con un espacio de ¾ a una pulgada<br />
entre sus ramas, para que allí se coloque el hilo.<br />
Existen muchos modelos, incluso eléctricos, con un<br />
filamento rotatorio para que separe y remueva la placa<br />
mediante acción centrífuga.<br />
El pasador de hilo dental consiste en un asa de<br />
plástico, en la cual se inserta el hilo dental. Se utiliza<br />
para llevar el hilo por partes muy apretadas para su<br />
inserción entre la superficie proximal y la encía de los<br />
pilares de implantes de las prótesis fijas, debajo de<br />
los puentes, alrededor de las aplicaciones ortodónticas<br />
y debajo de las férulas, pero se debe tener cuidado<br />
para no lastimar los tejidos gingivales. Cuando los<br />
C<br />
Figura 9-10. Preparación del hilo dental. A, Se sacan del<br />
rollo aproximadamente 60 cm de hilo. B, Éste<br />
se enrolla alrededor de los dedos medios.<br />
C, Entre los dedos se dejan unos 7 u 8 cm de<br />
hilo.<br />
Figura 9-11. Se introduce el hilo a través del es pacio<br />
interproximal, aplicándolo contra una de las<br />
caras proximales.
152 Capítulo 9<br />
A<br />
Figura 9-12. El hilo se pasa alrededor de la cara proximal.<br />
espacios interdentales son muy amplios y las papilas<br />
están retraídas, se puede usar un pasador de hilo dental<br />
con hilaza.<br />
Estimulador interdental<br />
Es una punta flexible de hule o plástico adherida al extremo<br />
libre del mango del cepillo. Se utiliza sólo para<br />
eliminar residuos del espa cio interdental cuando éste<br />
se encuentra muy abierto y la papila se ha reducido<br />
(fig. 9-14).<br />
Cepillo interdental<br />
Es un cepillo muy pequeño de forma cónica o cilíndrica<br />
con sus fibras dispues tas en espiral. Se utiliza para<br />
limpiar los espacios interdentales amplios, alrededor<br />
de las bifurcaciones, bandas ortodónticas y aplicaciones<br />
protésicas fijas, siempre y cuando los espacios lo<br />
permitan. Si se perdió la papila, se prefiere en vez del<br />
hilo dental (fig. 9-15).<br />
Palillos<br />
Hay palillos de madera para limpiar los espa cios interproximales,<br />
pero sólo se utilizan cuan do dichos<br />
espacios son amplios y es necesario tener cuidado de<br />
no lesionar la papila gingival. Hay un limpiador interdental<br />
de puntas romas que constituye un auxiliar de<br />
gran utilidad para la higiene dental (fig. 9-16).<br />
B<br />
C<br />
Figura 9-13. Manera de dirigir el hilo dental. Para los<br />
dientes superiores, el hilo se dirige con los<br />
dos dedos pulgares (A), aunque al gunos<br />
pacientes encuentran más fácil usar el pulgar<br />
del lado vestibular y el índice por el lingual<br />
(B). Para los dientes inferiores, el hilo se guía<br />
con los dos dedos índice (C).
Medidas preventivas en odontología 153<br />
Figura 9-14. Estimulador interdental.<br />
Irrigador bucal<br />
Los irrigadores bucales son aparatos que se co nectan<br />
directo a la llave del agua o tie nen un motor para generar<br />
un chorro de agua pulsátil, el cual se dirige de<br />
manera perpendi cular hacia el eje mayor del diente.<br />
Así es posi ble lavar y dar masaje al margen de la encía,<br />
y también eliminar residuos de alimentos.<br />
Algunos autores afirman que el irrigador no elimina<br />
la matriz pegajosa de la placa dentobacteriana,<br />
pero reduce el potencial patógeno; otros, en cambio,<br />
no lo consideran de utilidad (fig. 9-17). Actualmente,<br />
el irrigador “water pik” ya no está en la lista de recomendaciones<br />
de la Asociación Dental Americana<br />
(ADA, Consejo de Materiales y Dispositivos Dentales,<br />
1974).<br />
Dentífrico o pasta dental<br />
El dentífrico es una sustancia que se utiliza en el cepillo<br />
dental para limpiar las caras accesi bles de los<br />
dientes.<br />
A<br />
B<br />
Figura 9-15. A y B, Cepillo interdental.<br />
Figura 9-16. Limpiador interdental.
154 Capítulo 9<br />
El cepillo dental tiene la función más impor tante<br />
en la eliminación de la placa bacteriana, pero el dentífrico<br />
contribuye a ello mediante sustancias tensoactivas,<br />
espumígenos, bac tericidas y abrasivos. Además,<br />
el dentífrico brin da sensación de limpieza a través de<br />
las sus tancias saporíferas, como la menta, al grado<br />
de que muchas personas no se cepillan los dientes<br />
cuando carecen de pasta dental.<br />
Algunos dentífricos contienen sustancias desensibilizadoras,<br />
las cuales disminuyen la hipersensibilidad<br />
de la dentina en personas con este problema.<br />
Otro componente importante es el fluoruro, que<br />
puede ser de sodio o estaño, o monofluorofosfato de<br />
sodio (MFP); pero independientemente del tipo adicionado,<br />
todos contienen la misma cantidad del ion,<br />
es decir, 0.1% o 1 000 partes por millón (ppm). Se recomienda<br />
usar poca cantidad de dentífrico para evitar<br />
la ingestión excesiva de fluoruro en caso de consumo<br />
accidental.<br />
El Instituto Nacional del Consumidor (1998) realizó<br />
una investigación acerca de dentífricos y dio a<br />
conocer los componentes de éstos (cua dro 9-1). Las<br />
pruebas de calidad incluyeron in formación de etiquetado,<br />
y verificación de con tenido y composición (análisis<br />
fisicoquímicos). Según los resultados, en general<br />
las pastas denta les cumplieron con el contenido neto<br />
declarado.<br />
Hay dentífricos que contienen triclosán, un antibacteriano<br />
de amplio espectro eficaz para combatir<br />
las bacterias bucales, en especial las que se localizan<br />
en superficies lisas y fisuras, según Nabi y colaboradores<br />
en 1987, y Hawley y colaboradores en 1993.<br />
Figura 9-17. Irrigador bucal.<br />
Clorhexidina<br />
Es uno de los agentes químicos más efica ces para<br />
combatir la placa dentobacteriana. Se une a las bacterias<br />
de dicha placa, al esmalte del diente y a la película<br />
adquirida, alterando el citoplasma bacteriano.<br />
Su ventaja, en relación con otros antisépticos, consiste<br />
en fijarse a la mucosa oral debido a su fuerte carga<br />
positiva y liberarse poco a poco en el transcurso de<br />
las si guientes ocho a 12 horas; esta propiedad se denomina<br />
sustantividad.<br />
El digluconato de clorhexidina en solución alcohólica<br />
al 0.12% se utiliza cada 12 horas en co lutorio o enjuagatorio<br />
durante 30 a 60 segundos, inmediatamente<br />
después de la limpieza bucal.<br />
El paciente debe saber que no ha de deglutir la solución<br />
ni consumir líquidos o alimentos du rante los<br />
30 minutos siguientes para lograr su máxima eficacia.<br />
Los efectos secundarios de la solución men cionada<br />
son: irritación de mucosas, incluso con descamación;<br />
cambios en el sentido del gusto y tinción de dientes,<br />
restauraciones y lengua, sobre todo en per sonas fumadoras<br />
o que ingieren té, café, vino tinto o todos ellos.<br />
Por tanto, sólo debe indicarse a pacientes con enfermedad<br />
periodontal, irradia dos en cara o cuello, con<br />
tratamiento ortodóntico, con antecedentes recientes<br />
de tratamiento quirúrgico bucal o incapacitados para<br />
seguir una higiene bucal adecuada. Como se inactiva<br />
con la mayoría de los tensoactivos de los dentífricos,<br />
no debe utilizarse antes del cepillado dental.<br />
Aceites esenciales<br />
Mentol, timol (aceite de tomillo), eucaliptol, eugenol<br />
(aceite de clavo) y salicilato de metilo se denominan aceites<br />
esenciales; vienen disueltos en alcohol y son antibacterianos.<br />
Se recomiendan en enjuagues bucales dos veces al
Medidas preventivas en odontología 155<br />
Cuadro 9-1. Pastas dentales y enjuagues bucales<br />
A. PASTAS DENTALES CON FLUORURO Y PROPIEDADES ANTIBACTERIANAS<br />
Marca/origen<br />
Colgate Total<br />
(México)<br />
Colgate Total<br />
Fresh Stripe<br />
(México)<br />
Crest Complete<br />
(Alemania)<br />
Contenido neto<br />
Declarado Verificado<br />
Información<br />
al<br />
consumidor<br />
Pruebas de<br />
desgaste<br />
Presencia<br />
de flúor Consistencia<br />
Calidad<br />
sanitaria<br />
Eficacia<br />
antibacteriana<br />
Precio ($)<br />
por<br />
100 ml<br />
Evaluación<br />
global de<br />
la calidad Observaciones<br />
150 ml 166.67 ml Completa Negativa Positiva 15.90 100c Contiene triclosán como<br />
antibacteriano que<br />
previene la formación de<br />
placa bacteriana; además<br />
contiene fluoruro de sodio<br />
como agente anticaries y<br />
sílice como pulidor<br />
100 ml 113.83 ml Completa Negativa Positiva 15.90 100c Contiene triclosán como<br />
125 ml 138 ml Completa (además,<br />
incluye leyenda<br />
precautoria en la<br />
etiqueta)<br />
antibacteriano que<br />
previene la formación de<br />
placa bacteriana; además<br />
contiene fluoruro de sodio<br />
como agente anticaries y<br />
sílice como pulidor<br />
Negativa Positiva 21.50 90 Contiene triclosán como<br />
antibacteriano que<br />
previene la formación de<br />
placa bacteriana, fluoruro<br />
de sodio como agente<br />
anticaries, sílice como<br />
pulidor y pirofosfato como<br />
agente antisarro<br />
La calificación se demeritó por<br />
presentar desviación en la<br />
especificación estableci da<br />
en la norma del parámetro<br />
de consisten cia, por tener<br />
menos fluidez, lo cual<br />
puede dificultar el manejo<br />
del producto en uso<br />
100c = evaluación con comentarios a la ausencia de leyenda precautoria en la etiqueta. (Continúa)
156 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-1. Pastas dentales y enjuagues bucales (continuación)<br />
B. PASTAS DENTALES CON FLUORURO Y ACCIÓN BLANQUEADORA<br />
Marca/origen<br />
Plus + White<br />
(Estados Unidos)<br />
Colgate peróxido y<br />
bicarbonato de<br />
sodio press-pack<br />
(México)<br />
Colgate Sensation<br />
Whitening<br />
(México)<br />
Contenido neto Información<br />
al<br />
Declarado Verificado consumidor<br />
Pruebas de<br />
desgaste<br />
Presencia de<br />
flúor Consistencia<br />
Calidad<br />
sanitaria<br />
Precio ($)<br />
por<br />
100 ml<br />
Evaluación<br />
global de la<br />
calidad Observaciones<br />
180 g 185 g Completa Negativa Positiva 21.66* 100 Su fórmula contiene monofluoruro<br />
fosfato de sodio (MFP) como agente<br />
anticaries, sílice y bióxido de titanio,<br />
lo que le da propiedad pulidora y<br />
blanqueadora<br />
115 ml 122.4 ml Completa Negativa Positiva 20.17*** 100c Su fórmula contiene fluoruro de sodio<br />
como agente anticaries, además de<br />
bicarbonato de sodio y peróxido de<br />
hidrógeno, lo que le da propiedad<br />
blanqueadora<br />
100 ml 105.2 ml Completa * * Positiva 15.90 ** Su fórmula contiene MFP y una mezcla<br />
de pulidores a base de óxido de<br />
aluminio, pirofosfato y sílice, lo cual<br />
remueve manchas y sarro<br />
* En este caso es por 100 gramos.<br />
** Debido a que el producto dañó la superficie de prueba (vidrio) que exige la norma, y no fue posible verificarlo en una superficie dental real, se recomienda consultar al<br />
dentista antes de usarlo.<br />
*** El precio incluye el dosificador.<br />
100c = evaluación con comentario a la ausencia de leyenda precautoria en la etiqueta.<br />
C. PASTA DENTAL SÓLO CON EFECTO LIMPIADOR Y PULIDOR<br />
Marca/origen<br />
Briden<br />
(México)<br />
Contenido neto<br />
Declarado Verificado<br />
Información<br />
al<br />
consumidor<br />
Pruebas<br />
de<br />
desgaste Consistencia<br />
Calidad<br />
sanitaria<br />
Precio ($)<br />
por<br />
100 ml<br />
Evaluación<br />
global de<br />
la calidad Observaciones<br />
100 ml 111.8 ml Incompleta Negativa 8.50 95c Su fórmula contiene un agente<br />
limpiador y un pulidor (fosfato<br />
dicálcico). Su calificación se<br />
demeritó porque el producto no<br />
ostenta en la etiqueta el registro<br />
ante la Secretaría de Salud<br />
95c = evaluación con comentario a la ausencia de leyenda precautoria en la etiqueta.
Medidas preventivas en odontología 157<br />
D. PASTAS DENTALES CON FLUORURO<br />
Marca/origen<br />
Crest Freska-Rica<br />
(México)<br />
Crest Ultra<br />
Fresca Gel<br />
(México)<br />
Natural White<br />
(Estados Unidos)<br />
Aqua Fresh<br />
triple acción<br />
(Estados Unidos)<br />
Nueva Colgate<br />
Gel Frescura<br />
y protección<br />
anticaries<br />
(México)<br />
Colgate Junior<br />
(México)<br />
Colgate Sistema<br />
de doble<br />
fluoruro<br />
(México)<br />
Contenido neto Información<br />
al<br />
Declarado Verificado consumidor<br />
Pruebas<br />
de<br />
desgaste<br />
Presencia<br />
de<br />
flúor Consistencia<br />
Calidad<br />
sanitaria<br />
Precio<br />
($) por<br />
100 ml<br />
Evaluación<br />
global de<br />
la calidad Observaciones<br />
100 ml 111.9 ml Completa Negativa Positiva 7.66 100 Contiene fluoruro de sodio como agente<br />
anticaries y sílice como pulidor<br />
150 ml 183.4 ml Completa Negativa Positiva 9.10 100 Contiene fluoruro de sodio como agente<br />
anticaries, sílice como pulidor<br />
100 ml 98.02 ml Completa Negativa Positiva 32.00 100 Contiene fluoruro de sodio como agente<br />
anticaries, sílice y dióxido de titanio como<br />
blanqueador<br />
76.5 g 75.9 g Completa Negativa Positiva 21.18* 100c Contiene MFP como agente anticaries,<br />
carbonato de calcio y sílice como pulidores, y<br />
bióxido de titanio como blanqueador<br />
100 ml 114.8 ml Completa Negativa Positiva 7.50 100c Contiene fluoruro de sodio como agente<br />
anticaries, y mezcla de pulidores,<br />
blanqueadores y agente antisarro (sílice,<br />
bióxido de titanio y pirofosfatos)<br />
100 ml 117.8 ml Completa Negativa Positiva 10.50 100c Contiene fluoruro de sodio como agente<br />
anticaries y sílice como pulidor<br />
125 ml 122.1 ml Completa Negativa Positiva 7.12 100c Contiene fluoruro de sodio y MFP como agentes<br />
anticaries, y calcio como remineralizador<br />
Freska-ra (México) 150 ml 151.4 ml Completa Negativa Positiva 7.00 100c Contiene fluoruro de sodio y MFP como agentes<br />
anticaries, y sílice como pulidor<br />
Colgate<br />
Bicarbonato de<br />
sodio (México)<br />
Tropical Degil<br />
(México)<br />
Selección Gigante<br />
(México)<br />
100 ml 112.9 ml Completa Negativa Positiva 12.00 100c Contiene fluoruro de sodio como agente anticaries,<br />
además de bicarbonato de sodio para pulir<br />
suavemente y equilibrar la acidez de la saliva<br />
100 ml 109.8 ml Completa Negativa Positiva 6.30 100c Contiene MFP como agente anticaries, además<br />
de carbonato de calcio como pulidor<br />
135 g 127.5 g Completa Negativa Positiva 4.63* 85 Contiene fluoruro como agente anticaries,<br />
y mezcla de pulidores y blanqueadores<br />
(carbonato de calcio, sílice y bióxido de<br />
titanio). Su calificación fue demeritada por no<br />
cumplir con el contenido neto declarado<br />
* En este caso el precio es por 100 g. (Continúa)
158 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-1. Pastas dentales y enjuagues bucales (continuación)<br />
E. PASTAS DENTALES PARA DIENTES SENSIBLES<br />
Marca/origen<br />
Natural-White<br />
(Estados Unidos)<br />
Sensodyne<br />
fórmula original<br />
(Estados Unidos)<br />
Sensodyne con<br />
fl u o r u r o<br />
(Estados Unidos)<br />
Sensodyne con<br />
fluoruro y<br />
bicarbonato<br />
(Estados Unidos)<br />
Sensodyne<br />
(antisarro)<br />
(Estados Unidos)<br />
Oral B<br />
(Canadá)<br />
Aqua Fresh<br />
Sensitive<br />
(Estados Unidos)<br />
Contenido neto Información<br />
al<br />
Declarado Verificado consumidor<br />
Pruebas<br />
de<br />
desgaste<br />
Presencia<br />
de<br />
fl ú o r<br />
Ingrediente<br />
desensibilizante<br />
Consistencia<br />
Calidad<br />
sanitaria<br />
Precio ($)<br />
por<br />
100 ml<br />
Evaluación<br />
global de<br />
la calidad Observaciones<br />
100 ml 106.6 ml Completa Negativa Positiva Positivo 37.00* 100 Contiene nitrato de potasio como agente<br />
desensibilizante y monofluoruro fosfato<br />
de sodio como agente anticaries,<br />
además de la mezcla de pulidor y<br />
blanqueador (sílice y bióxido de titanio)<br />
113 g 113.7 g Completa Negativa Negativa Positivo 36.72 100 Contiene cloruro de estroncio como agente<br />
desensibilizante, sílice como pulidor y<br />
bióxido de titanio como blanqueador<br />
113 g 114 g Completa Negativa Positiva Positivo 36.72 100 Contiene nitrato de potasio como agente<br />
desensibilizante y fluoruro de sodio<br />
como agente anticaries y sílice como<br />
pulidor<br />
113 g 116.3 g Completa Negativa Positiva Positivo 36.72 100 Contiene nitrato de potasio como agente<br />
desensibilizante, fluoruro de sodio como<br />
agente anticaries y bicarbonato de sodio<br />
para pulir suavemente y equilibrar la<br />
acidez de la saliva<br />
113 g 114.2 g Completa ** Positiva Positivo 36.72 ** Contiene nitrato de potasio como agente<br />
desensibilizante, fluoruro de sodio como<br />
agente anticaries, mezcla de pulidores<br />
y blanqueadores (sílice, bicarbonato de<br />
sodio y bióxido de titanio), además de<br />
agente antisarro (pirofosfato)<br />
131 g 132.2 g Completa Negativa Positiva Positivo 25.03 100c Contiene nitrato de potasio como agente<br />
desensibilizante y fluoruro de sodio<br />
como agente anticaries, sílice y bióxido<br />
de titanio como pulidor y blan queador,<br />
respectivamente<br />
120 g 123.0 g Completa Negativa Positiva Positivo 23.25 100c Contiene nitrato de potasio como agente<br />
desensibilizante y fluoruro de sodio<br />
como agente anticaries, sílice como<br />
pulidor y bióxido de titanio como<br />
blanqueador<br />
* En este caso el precio es por 100 ml.<br />
** Debido a que el producto dañó la superficie de prueba (vidrio) que exige la norma, y no fue posible verificarlo en una superficie dental real, se recomienda consultar al<br />
dentista antes de usarlo.<br />
100c = Evaluación con comentario a la ausencia de leyenda precautoria en la etiqueta.
Medidas preventivas en odontología 159<br />
F. PASTAS DENTALES ANTISARRO<br />
Marca/origen<br />
Crest Antisarro<br />
Ultramenta<br />
(México)<br />
Crest Antisarro<br />
Menta Fresca Gel<br />
(México)<br />
Natural-White<br />
(Estados Unidos)<br />
Marca Libre<br />
Antisarro Aurrerá<br />
(Estados Unidos)<br />
Contenido neto<br />
Declarado Verificado<br />
Información<br />
al<br />
consumidor<br />
Pruebas<br />
de<br />
desgaste<br />
Presencia<br />
de<br />
flúor Consistencia<br />
Calidad<br />
sanitaria<br />
Precio<br />
($) por<br />
100 ml<br />
Evaluación<br />
global de<br />
la calidad Observaciones<br />
100 ml 109.1 ml Completa Negativa Positiva 13.20 100 El producto contiene pirofosfato como<br />
agente antisarro, sílice como pulidor y<br />
fluoruro de sodio como anticaries<br />
100 ml 110.0 ml Completa Negativa Positiva 13.20 100 El producto contiene pirofosfato como<br />
agente antisarro, sílice como pulidor y<br />
fluoruro de sodio como anticaries<br />
100 ml 114.75 ml Completa Negativa Positiva 32.00 100 El producto contiene pirofosfato como<br />
agente antisarro, fluoruro de sodio como<br />
anticaries, además de otros agentes<br />
pulidores y blanqueadores como sílice y<br />
bióxido de titanio<br />
181 g 181.8 g Completa Negativa Positiva 6.05* 95 Contiene sílice como pulidor, pirofosfatos<br />
como agente antisarro, fluoruro de sodio<br />
como anticaries y bióxido de titanio<br />
como blanqueador. Presenta desviación<br />
en la especificación establecida en la<br />
norma para el parámetro de consistencia<br />
por tener menos fluidez, lo cual puede<br />
dificultar el manejo del producto en uso<br />
* En este caso el precio es por 100 g. (Continúa)
160 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-1. Pastas dentales y enjuagues bucales (continuación)<br />
G. ENJUAGUES BUCALES<br />
Marca/origen<br />
Colgate Plax<br />
(México)<br />
Reach Junior<br />
(Canadá)<br />
Listerine<br />
(México)<br />
Oral B<br />
(México)<br />
Reach<br />
(Canadá)<br />
Astringosol<br />
(México)<br />
Contenido neto Información<br />
al<br />
Declarado Verificado consumidor<br />
Presencia<br />
de<br />
flúor<br />
Calidad<br />
sanitaria<br />
Eficacia<br />
antibacteriana<br />
Precio<br />
($) por<br />
100 ml<br />
Evaluación<br />
global de<br />
la calidad Observaciones<br />
500 ml 515 ml Completa Positiva 5.98 100 Contiene triclosán como excelente antibacteriano y<br />
fluoruro de sodio como agente anticaries. El producto<br />
debe usarse antes del cepillado para remover la placa<br />
354 ml 380 ml * Positiva 9.85 100 El producto contiene fluoruro de sodio como agente<br />
anticaries y cloruro de cetilpiridinio como excelen te<br />
antibacteriano<br />
500 ml 515 ml Completa Negativa 5.50 100 El producto tiene eficacia antibacteriana excelente dada<br />
por la mezcla a base de timol, eucalipto, salicilato de<br />
metilo y mentol<br />
500 ml 505 ml Completa Positiva 8.38 100 El producto contiene fluoruro de sodio como agente<br />
354 ml 390 ml *<br />
Induce a error<br />
anticaries y cloruro de cetilpiridinio como excelen te<br />
antibacteriano<br />
Positiva 9.85 * El producto contiene fluoruro de sodio como agente<br />
anticaries y cloruro de cetilpiridinio como excelen te<br />
antibacteriano<br />
340 ml 345 ml Incompleta Negativa 5.76 90 La etiqueta del producto no muestra su denominación;<br />
tampoco indica si debe usarse antes o después del<br />
cepillado; su fórmula contiene salicilato de metilo, con<br />
eficacia antibacteriana buena<br />
* La etiqueta del producto ostenta hasta 71% menos caries, lo cual no se ha demostrado, por lo que no cuenta con la autorización de la Secretaría de Salud para publicarlo.<br />
Se recomienda consultar al dentista antes de usarlo.<br />
Excelente Bueno Regular Deficiente<br />
Fuente: Revista del Consumidor. México. Sept. Núm. 259, 1998.
Medidas preventivas en odontología 161<br />
día durante 30 segundos para disminuir la placa y la<br />
intensidad de la gingivitis, aunque no llegan a la profundidad<br />
de las bolsas periodontales.<br />
Uso de auxiliares en la higiene<br />
bucal popular en México<br />
Las personas que no utilizan cepillo dental re curren<br />
a un trozo de tela o hierbas fibrosas para limpiar los<br />
dientes. Algunas acostumbran apli car como dentífrico<br />
el carbón de tortilla, el pan quemado, la sal y el<br />
bicarbonato; como enjuague, el agua con sal y el bicarbonato.<br />
Estas costumbres se transmiten desde la<br />
época prehispánica.<br />
En el Código de la Cruz Badiano se menciona también<br />
el uso de ceniza blanca y miel blanca frotadas con<br />
lienzo, o de sal y chile o nocheztli con Geranium carolinianunm<br />
o tlatlauhcapatli.<br />
El doctor Antonio Zimbrón Levy y la docto ra<br />
Mirella Feingold Steiner encontraron en dos estados<br />
mexicanos lo si guiente:<br />
1. En Yucatán se utilizan como dentífricos la hoja<br />
tostada de nicotiniana rústica (cutz) y la corteza<br />
de chacmulkak en polvo.<br />
2. En Tepozotlán, Morelos, se utilizan como dentífricos<br />
la raíz de Helipsis longipcs (chilcuán),<br />
la hoja de Irigeron affinia (peritrechilmécatl), la<br />
hoja de Nicotiniana clauca (tabaquillo), el tallo<br />
de Opuntia ficus indica (grano de nopal, nopalli-tenochtli)<br />
y la corteza de Sedum den droidea<br />
(siempreviva). Y para pulir la dentadura se recurre<br />
a la corteza de Spondias purpurea (ciruela<br />
atoyaxócotl).<br />
Nutrición<br />
El ser humano de la prehistoria vivía en un am biente<br />
adverso. La flora, la fauna y el clima le impusieron un<br />
tipo de alimentación: hojas, raíces y tallos. Cuando<br />
surgió la caza, empezó a sustentarse también con carne<br />
de animales. Sin embargo, el alimento adquirió carácter<br />
social hasta que surgieron las primeras sociedades.<br />
En la actualidad, la alimentación constituye sólo una<br />
parte de la nutrición, la cual es un fe nómeno global.<br />
El Instituto Nacional de la Nutrición (INN) de<br />
México define la nutrición como:<br />
...el conjunto de fenómenos involucrados en la obtención<br />
por el organismo, y en la asimila ción y<br />
transformación metabólica por las células, de las<br />
sustancias energéticas, estructu rales y catalíticas<br />
necesarias para la vida...<br />
La nutrición es en esencia un proceso celular continuo<br />
determinado por factores genéticos y ambientales.<br />
La suma e interacción de la nutrición correspondiente<br />
a los distintos tejidos constituye la “nutrición<br />
del individuo”; al integrar la nutrición de los individuos<br />
es po sible formular el concepto de “nutrición de<br />
una comunidad o de un país”.<br />
La alimentación depende de la dieta y ésta se integra<br />
con platillos, derivados industriales y ali mentos, los<br />
cuales a su vez deben combinarse de manera adecuada.<br />
Los platillos y derivados industriales se componen de<br />
alimentos, pero también de procesos y condimentos. Por<br />
último, los alimentos contienen nutrimentos (fig. 9-18).<br />
Nutrimento<br />
Definiciones<br />
La unidad de la nutrición es el nutrimento. El Instituto<br />
Nacional de la Nutrición recomienda utilizar este término<br />
en vez de “nutriente” y lo define como:<br />
Nutrición<br />
Alimentación<br />
Dieta<br />
Platillos y derivados industriales<br />
Alimentos<br />
Nutrimentos<br />
Figura 9-18. Esquema de nutrición.
162 Capítulo 9<br />
…toda sustancia que desempeña un papel metabólico<br />
y que por lo regular está presente en la dieta.<br />
Bourges señala los siguientes aspectos acer ca de los<br />
nutrimentos:<br />
1. Todos los nutrimentos son importantes.<br />
2. La cantidad de cada nutrimento requerida por el<br />
organismo es muy variable.<br />
3. La velocidad con que un nutrimento se utili za en<br />
el organismo varía de un individuo a otro. El nutrimento<br />
más importante es el oxí geno y después<br />
el agua.<br />
4. Todos los alimentos contienen todos los nutrimentos.<br />
5. El organismo necesita una cantidad óptima de<br />
nutrimentos indispensables. Si recibe me nos,<br />
experimenta un cuadro de deficiencia; pero si<br />
recibe más de lo necesario sufre obe sidad o intoxicación,<br />
sobre todo si se trata de los que se<br />
acumulan en el organismo, como la vitamina A.<br />
Clasificaciones de los nutrimentos<br />
Las clasificaciones de los nutrimentos son diversas. El<br />
Instituto Nacional de la Nutrición agrupa los nutrimentos<br />
en dispensables e indispensables (cuadro 9-2).<br />
Los indispensables son aquellos que el organismo no<br />
puede sintetizar; en cambio, los dispensables se sintetizan<br />
en el organismo a partir de los indispensables.<br />
Otra clasificación distingue seis grupos quí micos:<br />
1) hidratos de carbono; 2) lípidos; 3) pro teínas; 4) vitaminas;<br />
5) nutrimentos inorgánicos (antes llamados<br />
“minerales”), y 6) agua y oxíge no. Estos grupos, de<br />
acuerdo con la función bási ca que ejercen en el organismo,<br />
se dividen en:<br />
1. Energéticos. Los hidratos de carbono y los lí pidos<br />
son energéticos porque producen ener gía al experimentar<br />
degradación oxidativa. La energía, a<br />
su vez, se transforma con el fin de generar trabajo<br />
(p. ej., el del crecimiento, el de mantenimiento,<br />
el de transportación y de concentración de<br />
sustancias), así como para la realización de actividades<br />
físicas e in telectuales. En combinaciones<br />
especiales, las proteínas también pueden participar<br />
en la producción de energía.<br />
2. Plásticos o estructurales. Las proteínas, el agua<br />
y los nutrimentos inorgánicos, antes llama dos<br />
“minerales”, son nutrimentos plásticos porque<br />
participan en la reparación de los te jidos y el<br />
crecimiento corporal.<br />
3. Reguladores o catalíticos. Las vitaminas, junto<br />
con las proteínas, el agua y los nutrimentos inorgánicos<br />
constituyen nutrimentos reguladores, ya<br />
que desempeñan un papel muy im portante en la<br />
regulación de los procesos metabólicos.<br />
Hidratos de carbono<br />
Los hidratos de carbono constituyen la principal<br />
fuente de energía de la dieta y proporcionan 4 kcal/g.<br />
Se componen de carbono, hidrógeno y oxígeno, los<br />
cuales forman un grupo sacárido. De acuerdo con el<br />
número de sacáridos, pueden ser monosacáridos, disacáridos<br />
o polisacáridos.<br />
Los monosacáridos son los más sencillos. Los hidratos<br />
de carbono necesitan reducirse a mo nosacáridos<br />
para su utilización y absorción. Los más importantes<br />
son la glucosa y la fructosa, que abundan en frutas, así<br />
como la miel y la galactosa en la leche. La glucosa es el<br />
monosacárido básico del organismo.<br />
Los disacáridos están formados por dos monosacáridos<br />
y entre ellos se encuentran saca rosa,<br />
lactosa y maltosa. La sacarosa posee una molécula<br />
de glucosa y otra de fructosa y abunda en la caña de<br />
azúcar. La lactosa está formada por una molécula<br />
de glucosa y otra de galactosa y se encuentra en la<br />
leche. Finalmen te, la maltosa tiene dos de glucosa y<br />
resulta de la hidrólisis del almidón.<br />
Los polisacáridos están formados por muchas moléculas<br />
de monosacáridos. Los más impor tantes son<br />
almidón, glucógeno y celulosa.<br />
El almidón se compone de amilosa (cadenas rectas<br />
de glucosa) y amilopectina (cadenas ra mificadas de<br />
glucosa). Se encuentra en los cereales como maíz, trigo<br />
y arroz, y en las legu minosas como frijol, garbanzo,<br />
lenteja, soya y haba; también en los alimentos ricos en<br />
féculas, como la papa y el plátano.<br />
El glucógeno es la forma química en que el organismo<br />
almacena los hidratos de carbono en el hígado<br />
y los músculos. El glucógeno del híga do se transforma<br />
en glucosa cuando disminuye la concentración de<br />
glucosa en la sangre.
Medidas preventivas en odontología 163<br />
Cuadro 9-2. Clasificación de nutrimentos en dispensables e indispensables<br />
Glucosa<br />
Fructosa<br />
Galactosa<br />
Ribosa<br />
Desoxirribosa<br />
Manosa<br />
Dispensables<br />
13 a 14 ácidos grasos saturados y<br />
monoinsaturados<br />
Colesterol<br />
Glicina<br />
Alanina<br />
Serina<br />
Ácido glutámico<br />
Glutamina<br />
Prolina<br />
Ácido aspártico<br />
Asparagina<br />
Tirosina 2<br />
Cisteína 2<br />
Arginina<br />
Histidina 3<br />
Indispensables<br />
Hidratos de carbono<br />
Lípidos 1<br />
Ácido linoleico<br />
Ácido linolénico<br />
Aminoácidos<br />
Valina<br />
Leucina<br />
Isoleucina<br />
Triptófano<br />
Fenilalanina<br />
Metionina<br />
Treonina<br />
Lisina<br />
Dispensables<br />
Indispensables<br />
Vitaminas<br />
Vitamina A 4<br />
Tocoferoles (vitamina E)<br />
Vitamina D<br />
Menadiona (vitamina K)<br />
Niacina 5 Ácido ascórbico (vitamina C)<br />
Tiamina (vitamina B 1<br />
)<br />
Riboflavina (vitamina B 2<br />
)<br />
Piridoxina (vitamina B 6<br />
)<br />
Niacina<br />
Biotina<br />
Ácido fólico<br />
Ácido pantoténico<br />
Carnitina<br />
Inositol<br />
Colina<br />
Bioflavonoides<br />
Vitaminoides<br />
Nutrimentos inorgánicos<br />
Oxígeno<br />
Manganeso<br />
Agua<br />
Cobalto<br />
Calcio<br />
Azufre<br />
Fósforo<br />
Cobre<br />
Sodio<br />
Selenio<br />
Potasio<br />
Molibdeno<br />
Cloro (Níquel) 6<br />
Magnesio<br />
(Silicio)<br />
Hierro<br />
(Vanadio)<br />
Yodo<br />
(Arsénico)<br />
Flúor<br />
(Cadmio)<br />
Zinc<br />
(Cromo)<br />
1<br />
El ácido araquidónico figura en muchas listas como ácido graso indispensable, pero hoy en día se sabe que puede sintetizarse a partir del<br />
ácido linoleico.<br />
2<br />
La tirosina y la cisteína son dispensables siempre y cuando la fenilalanina y la metionina, respectivamente, se ingieran en cantidad<br />
suficiente; de otra forma son indispensables.<br />
3<br />
La histidina es indispensable en los organismos en crecimiento.<br />
4<br />
La vitamina A (retinol) es dispensable sólo si se ingiere suficiente cantidad de carotenos.<br />
5<br />
La niacina se sintetiza siempre y cuando se ingieran cantidades suficientes de triptófano.<br />
6<br />
El paréntesis en algunos elementos inorgánicos indica que aún no se comprueba plenamente que sean nutrimentos para el ser humano.<br />
Fuente: Cuadernos de Nutrición, vol. 11, núm. 6 (s/f).<br />
La celulosa se compone de moléculas de glu cosa<br />
unidas por enlaces beta. Esto le impide ser hidrolizada<br />
por las enzimas digestivas, pero es importante porque<br />
proporciona volumen al bolo fecal y así facilita su eliminación.<br />
Junto con la hemicelulosa y la pectina, las<br />
cuales también son hidratos de carbono, constituye la<br />
“fibra”. Asimismo, es abundante en verduras, frutas y<br />
cereales.<br />
Lípidos o grasas<br />
Los lípidos constituyen la fuente más concentra da de<br />
energía porque proporcionan 9 kcal/g. También sirven<br />
como reserva de energía, son precursores de hormonas,<br />
forman parte de diversas membranas e intervienen<br />
en el trans porte, almacenamiento y función de<br />
las vitami nas liposolubles.
164 Capítulo 9<br />
Los más sencillos son las grasas neutras. És tas se<br />
componen de una molécula de glicerol unida por sus<br />
grupos OH con ácidos grasos que así forman triglicéridos.<br />
Los aceites y las grasas contienen ácidos gra sos, ya<br />
sea saturados o insaturados. Los lípidos saturados carecen<br />
de dobles ligaduras en sus cadenas de carbono<br />
y se encuentran en canti dades abundantes en aceite<br />
de coco, man tequilla, manteca de cerdo, chicharrón,<br />
chorizo, crema, chocolates y casi todos los quesos.<br />
Los lípidos insaturados o no saturados tienen dos o<br />
más dobles ligaduras en sus enlaces, siem pre después<br />
del carbono 20. Se encuentran en el aceite de lino, la<br />
margarina no elaborada a partir de coco, el aceite de<br />
cacahuate y el agua cate.<br />
Los ácidos grasos poliinsaturados tienen varias dobles<br />
ligaduras y algunos no pueden sinte tizarse en el<br />
organismo. Abundan en los acei tes de maíz, girasol,<br />
cártamo, soya, algodón e hígado de bacalao, así como<br />
en la mayoría de pescados y alimentos de origen vegetal,<br />
excep to el coco.<br />
Los ácidos grasos indispensables (antes llama dos<br />
esenciales) para el organismo son el ácido linoleico y<br />
el ácido linolénico. Algunos autores también incluyen<br />
en este grupo al ácido araquidónico, pero éste puede<br />
sintetizarse a partir del ácido linoleico.<br />
Los triglicéridos que contienen nitrógeno y fosfato<br />
se llaman fosfolípidos y se sintetizan en el organismo.<br />
Por último, los esteroles no se derivan de los ácidos<br />
grasos, pero se consideran lípidos; por ejemplo, el colesterol,<br />
la vitamina D y los ácidos biliares. El colesterol<br />
abunda en vísce ras, yema de huevo, mantequilla,<br />
crema y mariscos (camarón, ostión, cangrejo, etc.) y<br />
es el único esterol que se absorbe en cantidades apreciables<br />
en el intestino. Aumenta cuando se ingieren<br />
lípidos saturados, pero en condiciones normales es<br />
necesario; es precursor de hormo nas esteroideas entre<br />
las cuales se encuentran las sexuales e interviene en la<br />
biosíntesis de la vitamina D y los ácidos biliares.<br />
Proteínas<br />
Las proteínas son polímeros de aminoácidos unidos<br />
por enlaces peptídicos. Contienen car bono, hidrógeno,<br />
oxígeno, nitrógeno, azufre y fósforo, y proporcionan<br />
4 kcal/g.<br />
De los 20 aminoácidos que se encuentran comúnmente<br />
en los alimentos, nueve son indis pensables en<br />
la dieta de los niños: lisina, metionina, valina, leucina,<br />
isoleucina, triptófano, fenilalanina, treonina e<br />
histidina. Algunos autores incluyen también la arginina.<br />
Esos aminoácidos pueden sintetizarse en el hígado,<br />
pero no en cantidad suficiente para cubrir los<br />
requerimien tos del organismo; por esa razón se consideran<br />
indispensables y antes se llamaban esenciales.<br />
La falta de alguno de ellos interrumpe la sínte sis de<br />
proteínas en el organismo.<br />
Según su contenido de aminoácidos indis pensables,<br />
las proteínas pueden ser completas, parcialmente<br />
incompletas o incompletas.<br />
Las proteínas completas tienen la cantidad su ficiente<br />
de aminoácidos para promover el cre cimiento, mantener<br />
las funciones orgánicas y reparar los tejidos. Se<br />
encuentran en carnes, huevo y leche y sus derivados.<br />
Las proteínas parcialmente incompletas carecen de<br />
uno o más de los aminoácidos indispensa bles en cantidad<br />
suficiente, y por ello pueden mantener la vida<br />
pero no promueven el creci miento normal. Se encuentran<br />
en las legumino sas (frijol, garbanzo, lenteja,<br />
soya, haba, etc.) y los cereales. La combinación de leguminosas<br />
con cereales (p. ej., arroz con frijol o soya,<br />
maíz con frijol) aumenta el valor nutritivo.<br />
Las proteínas incompletas no pueden formar o remplazar<br />
tejidos; por ejemplo, la gelatina.<br />
Vitaminas<br />
Son compuestos orgánicos que realizan funcio nes catalíticas<br />
en el organismo al actuar como coenzimas o<br />
en el control de ciertas reacciones. La mayor parte es<br />
indispensable en la alimentación. Asimismo, se clasifican<br />
en liposolubles e hidrosolubles.<br />
Las vitaminas liposolubles son solubles en gra sas,<br />
por lo cual requieren de lípidos para su absorción, y<br />
son A, D, E y K. Las hidrosolubles se disuelven en agua<br />
y son tiamina (B 1<br />
), riboflavina (B 2<br />
), niacina, piridoxina<br />
(B 6<br />
), ácido pantoténico, ácido fólico, cianocobalamina<br />
(B 12<br />
) o co balamina, biotina y ácido ascórbico<br />
(C). En el cuadro 9-3 se presentan sus principales<br />
carac terísticas.<br />
En términos generales, las vitaminas son indispensables<br />
para el metabolismo de hidratos de carbono,
Medidas preventivas en odontología 165<br />
lípidos y proteínas, así como para producir energía y<br />
sintetizar enzimas, hormo nas y otros compuestos orgánicos.<br />
Nutrimentos inorgánicos<br />
Como ya se mencionó, se reco mienda utilizar el término<br />
nutrimento inorgánico en vez de “mineral”.<br />
Los nutrimentos inorgánicos forman parte de diversas<br />
estructuras corporales y participan en el metabolismo<br />
al activar, regular, transmitir y controlar<br />
reacciones enzimáticas e impulsos eléctricos que mantienen<br />
la homeostasis (cua dro 9-4). De acuerdo con<br />
la cantidad en que se encuentren en el organismo, se<br />
clasifican de la siguiente manera:<br />
1. Mayores (cuando existen en grandes cantida des):<br />
calcio, magnesio, sodio, potasio, fósfo ro, azufre y<br />
cloro.<br />
2. Elementos ápice (por encontrarse en pequeñas<br />
cantidades): yodo, hierro, cobre, mangane so, cobalto,<br />
zinc, molibdeno y flúor.<br />
3. Función desconocida: aluminio, boro, selenio,<br />
cadmio, cromo y vanadio.<br />
Agua y oxígeno<br />
Todos los seres vivos, así como los alimentos, se componen<br />
esencialmente de agua; por ejem plo, la masa<br />
corporal de un individuo adulto contiene 70% de agua.<br />
El agua es importante para la célula porque proporciona<br />
el medio adecuado para los diversos procesos celulares<br />
e influye en la estructura de las macromoléculas<br />
del organismo (hidratos de carbono y proteí nas, entre<br />
otras). Además, desempeña un pa pel importante en la<br />
regulación de la tempera tura corporal.<br />
El oxígeno es una molécula indispensable para los<br />
organismos aerobios, al funcionar co mo receptor de<br />
electrones en la cadena respiratoria.<br />
Alimentos<br />
Los nutrimentos, con excepción del agua, no se encuentran<br />
aislados en el ambiente; por ello el ser humano,<br />
como organismo heterótrofo, debe alimentarse<br />
de otras especies. Así pues, el tér mino alimento se refiere<br />
a órganos, tejidos o se creciones de especies que<br />
contienen cantidades apreciables de nutrimentos biodisponibles<br />
y cuyo consumo en cantidades y formas<br />
habitua les es inocuo, de amplia disponibilidad y costo<br />
razonable, así como atractivo a los sentidos y aceptado<br />
por alguna cultura.<br />
Características del alimento<br />
Las particularidades del alimento de acuerdo con sus<br />
funciones son las siguientes:<br />
1. Como vehículo de nutrimentos. Todo alimento es<br />
nutritivo y todos son importantes, por lo cual no<br />
existen alimentos de alto valor nutritivo:<br />
A. Biodisponibilidad. El alimento contiene nutrimentos<br />
biodisponibles en concentraciones<br />
que requieren atención. La biodis ponibilidad<br />
se refiere al grado en que los nutrimentos pueden<br />
liberarse y absor berse en el sistema digestivo;<br />
por ejemplo, la celulosa tiene biodisponibilidad<br />
de cero aunque contenga moléculas<br />
de glucosa (cuya biodisponibilidad es de 100)<br />
porque éstas no pueden utilizarse.<br />
B. Inocuidad. El alimento no debe causar daño.<br />
Algunas personas tienen alterado el metabolismo,<br />
como al padecer fenilcetonuria, y la fenilalanina<br />
les resulta nociva; otras son alérgicas<br />
a determinadas sustancias, como el gluten.<br />
Hay peces y hongos que por ser venenosos<br />
no pueden considerarse alimentos. Asimismo,<br />
otros alimentos como la yuca contienen<br />
glucósidos cianógenos que liberan ácido cianhídrico,<br />
el cual es venenoso; pero con el cocimiento,<br />
el ácido cianhídrico se eva pora y la<br />
yuca se vuelve inocua. La ino cuidad, por tanto,<br />
tiene que ver con las cantidades ingeridas<br />
habitualmente y las formas de consumo.<br />
C. Accesibilidad. La producción del alimento debe<br />
ser suficiente para satisfacer las ne cesidades<br />
de la población.<br />
D. Atractivo a los sentidos. Por ejemplo, la co cina<br />
mexicana acentúa lo picante; la anglo sajona,<br />
lo dulce; otras, lo salado. Algunas personas<br />
prefieren alimentos ácidos. El gusto por lo<br />
amargo es aprendido.<br />
E. Aprobado por la cultura. Por ejemplo, en México<br />
el maíz es importante y el sorgo se destina a
166 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-3. Función, fuentes dietéticas, recomendaciones, deficiencias y toxicidad de las vitaminas<br />
Nombre del nutrimento Principales funciones Fuentes principales Recomendación diaria Deficiencias Toxicidad<br />
Vitamina A*<br />
Retinol<br />
Retinal<br />
Carotenos<br />
Interviene en:<br />
El mantenimiento de los tejidos epiteliales<br />
Funciones de crecimiento, reproducción y<br />
visión (como rodopsina)<br />
Porción grasa de la leche<br />
y derivados<br />
Hígado<br />
Huevo<br />
Tejidos animales<br />
Frutas y verduras<br />
Tiamina o vitamina B 1<br />
Metabolismo de los hidratos de carbono Hígado<br />
Cereales con cascarilla<br />
Leguminosas<br />
Verduras de hojas verdes<br />
Riboflavina o vitamina B 2<br />
Respiración celular Leche<br />
Vitamina B 6<br />
Piridoxina<br />
Piridoxal<br />
Piridoxamina<br />
Vitamina B 12<br />
Cobalamina<br />
Vitamina C<br />
Ácido ascórbico<br />
Ácido dehidroascórbico<br />
Vitamina D**<br />
Calciferol<br />
Ergocalciferol (D 2<br />
)<br />
Colecalciferol (D 4<br />
)<br />
Verduras de hojas verdes<br />
Hígado<br />
Pescado<br />
Huevo<br />
Metabolismo de los aminoácidos Hígado<br />
Plátano<br />
Aguacate<br />
Oleaginosas<br />
Leguminosas<br />
Leche y derivados<br />
Tejidos animales<br />
Metabolismo de los aminoácidos Hígado<br />
Antioxidante<br />
Síntesis de colágena<br />
Absorción de hierro<br />
Se requiere para la absorción de calcio y<br />
fósforo<br />
Indirectamente interviene en la mineralización<br />
de huesos y dientes<br />
Riñón<br />
Carnes magras<br />
Sintetizada por la flora<br />
intestinal<br />
Niños 500 μg Eq 1<br />
Adolescentes<br />
1 000 μg Eq<br />
Adultos<br />
1 000 μg Eq<br />
Embarazadas<br />
1 500 μg Eq<br />
Nictalopía (ceguera<br />
nocturna)<br />
Xeroftalmía<br />
Queratomalacia<br />
Xerosis<br />
Retraso del crecimiento<br />
0.6 mg por cada<br />
Beriberi (neuritis, carditis,<br />
1 000 kcal ingeridas 1 muerte)<br />
0.6 mg por cada<br />
Queilitis<br />
1 000 kcal ingeridas 1 Queilosis<br />
Glositis<br />
Niños 0.5 a 2.1 mg 2<br />
Adolescentes 1.4 a 2.0 mg<br />
Adultos 2 mg<br />
Embarazadas y 2.5 mg<br />
lactantes<br />
Niños 1 a 5 μg 2<br />
Adolescentes 5 μg<br />
Adultos 5 a 6 μg<br />
Embarazadas y 8 μg<br />
lactantes<br />
Frutas y verduras frescas Niños 35 a 40 mg 1<br />
Adolescentes 40 mg<br />
Adultos 50 mg<br />
Embarazadas y<br />
lactantes<br />
D 4<br />
se produce en la<br />
piel por exposi ción<br />
al sol<br />
D 2<br />
en dieta y en poca<br />
cantidad (yema de<br />
huevo y pescado)<br />
Depresión<br />
Dermatitis seborreica<br />
Irritabilidad<br />
Glositis<br />
Irritabilidad<br />
Fatiga<br />
Insomnio<br />
Puede ser<br />
teratógena<br />
Limitada<br />
No es tóxica en<br />
las cantidades<br />
acostumbradas<br />
Poco frecuente<br />
Puede ser<br />
teratógena<br />
Anemia perniciosa No es tóxica en<br />
las cantidades<br />
acostumbradas<br />
Escorbuto<br />
Hemorragias<br />
Mala cicatrización<br />
Muerte<br />
Niños 400 UI Raquitismo (niños)<br />
Osteomalacia (adultos)<br />
Cálculos urinarios<br />
Gastritis<br />
Calcificación de<br />
tejidos blandos
Medidas preventivas en odontología 167<br />
Vitamina E***<br />
Tocoferoles<br />
Tocoles<br />
Tocotrieno<br />
Vitamina K<br />
Filoquinona (K 1<br />
)<br />
Menaquiona (K 2<br />
)<br />
Menadiona (K 3<br />
)<br />
Antioxidante<br />
Otras funciones no aclaradas<br />
Síntesis de protrombina (factor de la<br />
coagulación de la sangre)<br />
Ácido pantoténico Metabolismo de los hidratos de carbono<br />
y síntesis de ácidos grasos<br />
Granos enteros ricos<br />
en aceites (maíz,<br />
cártamo, ajonjolí,<br />
etc.)<br />
Hojas verdes (espina ca,<br />
acelga, pápalo, etc.)<br />
Sintetizada por la flora<br />
intestinal<br />
En la mayoría de los<br />
alimentos<br />
Síntetizado por la flora<br />
intestinal<br />
Biotina Reacciones de carboxilación Huevo<br />
Hígado<br />
Riñones<br />
Sintetizada por la flora<br />
intestinal<br />
Folatos<br />
Ácido fólico<br />
Ácido tetrahidrofólico<br />
Niacina****<br />
Ácido nicotínico<br />
Nicotinamida<br />
Niacinamida<br />
Síntesis de ácidos nucleicos y hemoglobina Verduras de hojas<br />
verdes<br />
Hígado<br />
Respiración celular Hígado<br />
Huevo<br />
Leche<br />
Leguminosas<br />
Carnes<br />
Maíz nixtamalizado<br />
Niños 5 a 15 UI 2<br />
Adolescentes 20 UI<br />
Adultos 20 a 30 UI<br />
Embarazadas y 30 UI<br />
lactantes<br />
Anemia hemolítica del<br />
recién nacido prematuro<br />
No determinada Trastornos de la<br />
coagulación<br />
Hipertensión<br />
arterial<br />
Escasamente tóxica<br />
No determinada No se ha informado No se ha informado<br />
Niños 35 a 50 μg 2<br />
Adolescentes 65 μg<br />
Adultos 85 μg<br />
Embarazadas y 120 μg<br />
lactantes<br />
Niños 0.5 a 1 mg 2<br />
Adolescentes 0.4 mg<br />
Adultos 0.4 mg<br />
Embarazadas y 0.5 a 0.8 mg<br />
lactantes<br />
Es poco frecuente en el ser<br />
humano<br />
Anemia megaloblástica<br />
Glositis<br />
9 mg Eq por cada 1 000 kcal ingeridas 1 Pelagra (dermatitis, diarrea,<br />
demencia, muerte)<br />
No se ha informado<br />
No definida<br />
Hipotensión<br />
* 1 μg Eq, equivale a 1 mg de retinol o 8 mg de carotenos o 3.3 UI de actividad de retinol.<br />
** 1 UI de vitamina D equivale a 0.025 μg.<br />
*** 1 UI de vitamina E equivale a 1 mg de alfa-tocoferol.<br />
**** 1 μg Eq, equivale a 1 mg de niacina o 60 mg de triptófano.<br />
1<br />
Fuente: Bourges H, Chávez A, Arroyo P. Recomendaciones de nutrimentos para la población mexicana. Publicación L-11. División de Nutrición. México: Instituto Nacional<br />
de la Nutrición, 1970.<br />
2<br />
Fuente: Recommended Dietary Allowances (RDA).<br />
Fuente: Cuadernos de Nutrición, Vol. 11, Núm. 6, 1988.
168 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-4. Función, fuentes principales, recomendaciones, deficiencia y toxicidad de algunos nutrimentos inorgánicos<br />
Nutrimento<br />
inorgánico Principales funciones Fuentes principales Recomendaciones diarias Deficiencias Toxicidad<br />
Calcio Constituyente de huesos y dientes<br />
Coagulación de la sangre<br />
Actividad enzimática<br />
Transmisión de impulsos nerviosos<br />
Contracción muscular<br />
Secreción de hormonas<br />
Sostén y funcionamiento de membranas<br />
celulares<br />
Capacidad de adhesión de unas<br />
células con otras<br />
Tortilla de maíz<br />
Charales<br />
Sardinas<br />
Quesos<br />
Leche<br />
Berro<br />
Epazote<br />
Hoja de chaya<br />
Verdolaga<br />
Niños 400 a 600 mg 1<br />
Adolescentes 700 mg<br />
Adultos 500 mg<br />
Embarazadas y 1 000 mg<br />
lactantes<br />
Tetania<br />
Raquitismo<br />
Osteomalacia<br />
Calcificación de tejidos<br />
blandos<br />
Zinc Forma parte de varias metaloenzimas<br />
Interviene en el metabolismo de<br />
hidratos de carbono y aminoácidos<br />
Vísceras<br />
Pescados<br />
Huevos<br />
Cereales<br />
Niños 8 mg 2<br />
Adolescentes 10 a 15 mg<br />
Adultos<br />
varones 25 mg<br />
mujeres 15 mg<br />
Embarazadas 20 mg<br />
Lactantes 25 mg<br />
Retraso del crecimiento<br />
Anemia<br />
Hipogonadismo<br />
Hiperpigmentación<br />
Susceptibilidad a infecciones<br />
Poco frecuente<br />
Cloro Equilibrio acidobásico<br />
Forma parte del jugo gástrico. Actúa<br />
como electrólito<br />
Activador de algunas enzimas<br />
Contenido por supuesto en<br />
casi todos los alimentos<br />
No se conoce deficien cia dietética Convulsiones<br />
Flúor Parte integral de huesos y dientes<br />
Hace más lisa la superficie de los<br />
dientes y les proporciona más<br />
resistencia contra las caries<br />
El agua (dependiendo del<br />
sitio de origen)<br />
Prácticamente todos los<br />
alimentos<br />
Mariscos<br />
Hojas de té<br />
Niños<br />
< 1 año 1.0 mg 2<br />
> 1 año 0.5 a 2.5 mg<br />
Adolescentes 1.5 a 2.5 mg<br />
Adultos 1.5 a 4.0 mg<br />
Mayor susceptibilidad a las caries Manchas en los dientes<br />
Dosis superiores a 5 g de<br />
fluoruro de sodio son<br />
letales<br />
Fosfatos Enlaces de alta energía<br />
Parte de numerosas coenzimas y<br />
de la forma activa de algunas<br />
vitaminas hidrosolubles y de los<br />
ácidos nucleicos<br />
En la mayoría de los<br />
alimentos (cuidando<br />
que existan fuentes de<br />
calcio para asegurar la<br />
absorción)<br />
Debilidad<br />
Anorexia<br />
Fragilidad ósea<br />
No se ha informado
Medidas preventivas en odontología 169<br />
Hierro Interviene en la respiración celular<br />
Forma parte de la hemoglobi na, la<br />
mioglobina, de los citocromos y de<br />
varias enzimas<br />
Magnesio Síntesis proteínica<br />
Transmisión neuromuscular<br />
Biosíntesis de aminoácidos<br />
Oxígeno Interviene como receptor de<br />
electrones para generar energía<br />
(trifosfato de adenosina, ATP)<br />
Potasio Equilibrio electrolítico<br />
Regulación de la presión osmótica<br />
Transporte de nutrimentos<br />
Sodio Presión osmótica<br />
Contracción muscular<br />
Conducción nerviosa<br />
Absorción activa<br />
Yodo Precursor de las hormonas<br />
triyodotironina y tiroxina<br />
Moronga<br />
Hígado<br />
Carne magra<br />
Yema de huevo<br />
Leguminosas<br />
Cereales<br />
Oleaginosas (“pepitas” o<br />
semillas de calabaza)<br />
Pescados<br />
Mariscos<br />
Habas<br />
Frijoles<br />
Maíz<br />
Avena<br />
Niños 10 a 15 mg 1<br />
Adolescentes 18 mg<br />
Adultos<br />
varones 10 mg<br />
mujeres 18 mg<br />
Embarazadas y<br />
lactantes 25 mg<br />
Niños 80 mg 2<br />
Adolescentes 350 mg<br />
Embarazadas y 450 mg<br />
lactantes<br />
Anemia ferropriva<br />
Retraso del crecimiento<br />
Susceptibilidad a infecciones<br />
Prematurez<br />
Disminución de la respuesta motriz<br />
Alteraciones del ritmo cardiaco<br />
Convulsiones<br />
Aire Asfixia Ceguera<br />
Carnes<br />
Vísceras<br />
Naranja<br />
Plátano<br />
Mandarina<br />
Casi todos los alimentos<br />
naturales<br />
Sal adicionada a los<br />
siguientes alimentos:<br />
frituras, carnes y verduras<br />
procesa das, encurtidos,<br />
embutidos, quesos, pan<br />
Productos del mar<br />
Sal yodatada<br />
Algas<br />
Niños 800 mg 2<br />
Adultos 900 a 2 700 mg<br />
Niños 115 a 350 mg 2<br />
Adolescentes 600 a 1 800 mg<br />
Adultos 1 100 a 3 300 mg<br />
Adolescentes 40 a 50 mg 2<br />
Adultos 300 a 400 mg<br />
Embarazadas 350 mg<br />
y lactantes 450 mg<br />
No se conoce deficien cia dietética<br />
La pérdida excesiva produce deshidratación<br />
No se conoce deficien cia dietética<br />
Cuando hay pérdida excesiva se<br />
produce deshidratación<br />
Bocio Bocio<br />
Depósito de hierro en tejidos<br />
(hemocromatosis)<br />
Parálisis del músculo<br />
esquelético<br />
Deshidratación, acidosis y<br />
choque<br />
A largo plazo, hipertensión<br />
1<br />
Fuente: Bourges H, Chávez A, Arroyo P. Recomendaciones de nutrimentos para la población mexicana. Publicación L-11. División de Nutrición. México: Instituto Nacional<br />
de la Nutrición, 1970.<br />
2<br />
Fuente: Recommended Dietary Allowances (RDA).<br />
Fuente: Cuadernos de Nutrición, Vol. 11, Núm. 6, 1988.
170 Capítulo 9<br />
los animales; en cambio, en África, el sorgo es<br />
básico para la dieta.<br />
2. Como satisfactor de una necesidad, es decir, para<br />
su primir el hambre.<br />
3. Como estímulo psicológico y emocional. En condiciones<br />
normales, comer es un placer. La aceptación<br />
o rechazo de determinados ali mentos se<br />
relaciona con experiencias previas.<br />
4. Como integrador social. Con los alimentos se<br />
transmiten valores sociales, culturales y re ligiosos,<br />
además de que comer con otras personas es<br />
placentero.<br />
Grupos de alimentos<br />
Las clasificaciones de los alimentos son diver sas, por<br />
lo cual sólo se mencionan algunas. Por un lado, la<br />
Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización<br />
de las Naciones Uni das para la Agricultura<br />
y la Alimentación (FAO) clasificaron los alimentos<br />
en varios grupos (cua dro 9-5). Por otro lado, el Departamento<br />
de Agricultura de Estados Unidos dividió<br />
los ali mentos en cinco grupos y los representó<br />
en una pirámide: en la base y con mayor proporción<br />
ubicó los cereales; en un segundo nivel, frutas y verduras;<br />
más arriba, carnes, huevo y legumi nosas; en el<br />
cuarto grupo, leche y sus derivados; por último, en la<br />
punta de la pirámide, aceites, grasas y azúcares, los<br />
cuales deben consumirse en una proporción mucho<br />
menor.<br />
En México, las clasificaciones han variado (cuadro<br />
9-6). En 1966 se concedió mucha im portancia a las<br />
proteínas, principalmente de origen animal, pero en<br />
1974 los cereales y legumi nosas fueron objeto de gran<br />
interés.<br />
Las modificaciones continuaron y se consideró que<br />
los cereales y sus derivados eran la base de la alimentación<br />
(40%) al proporcionar energía y proteína, lípidos,<br />
vita minas (E, B 1<br />
y B 6<br />
), hierro, fósforo y fibras. El<br />
consumo de azúcares (2%) y aceites (8%) debe ser mínimo<br />
(cuadro 9-7). Las frutas y verduras (30 a 32%)<br />
brindan algunas vitaminas, nutrimentos inorgánicos<br />
y fibras. Las leguminosas (fri jol, haba, lenteja, garbanzo)<br />
aportan proteínas, hidratos de carbono y fibra. Por<br />
último, los ali mentos de origen animal son fuente de<br />
proteína (20%).<br />
Cuadro 9-5. Clasificación de los alimentos según la<br />
Organización Mundial de la Salud (OMS)<br />
y la Organización de las Naciones Unidas<br />
para la Agricultura y la Alimentación (FAO)<br />
Grupo<br />
Alimentos de origen vegetal<br />
1 Cereales y sus derivados<br />
2 Tubérculos, raíces y frutos feculentos<br />
3 Semillas secas de leguminosas<br />
4 Frutas secas y semillas<br />
5 Hortalizas<br />
6 Frutas<br />
7 Azúcares y jarabes<br />
8 Carnes y volatería (aves)<br />
9 Huevos<br />
10 Pescados y mariscos<br />
11 Leche y productos lácteos<br />
Otros alimentos<br />
12 Aceites y grasas<br />
13 Bebidas<br />
De acuerdo con los porcentajes anteriores, 60 a<br />
70% de la energía total proviene de los sacáridos, de<br />
los cuales no más de 10% debe ser de azúcares refinados;<br />
entre 20 y 25% se obtiene a partir de triglicéridos,<br />
en los cuales los ácidos grasos saturados no deben<br />
representar más de un tercio de los lípidos totales;<br />
no habrá más de 5% en forma de grasas, aceites o azúcares<br />
refinados y no se consumirán más de 300 mg<br />
diarios de colesterol. Las proteínas deben apor tar entre<br />
10 y 15% de la energía total de la dieta (fig. 9-19).<br />
Recientemente se diseñó el “plato del bien comer”,<br />
que se divide en tres porciones:<br />
1. Frutas y verduras (muchas).<br />
2. Cereales (suficientes).<br />
3. Leguminosas (combinadas) y alimentos de origen<br />
animal.<br />
Al parecer excluye grasas y azúcares, pero éstos son<br />
componentes naturales de la mayoría de los alimentos<br />
de los tres grupos anteriores o se agregan al preparar<br />
platillos y productos industrializados.<br />
Los alimentos de una dieta normal deben satisfacer<br />
funciones importantes, entre ellas asegurar el creci-
Medidas preventivas en odontología 171<br />
Cuadro 9-6. Evolución de la agrupación de alimentos<br />
en México<br />
Fuente Año Clasificación de alimentos<br />
INN 1966 Leche y queso<br />
Carnes y huevo<br />
Frutas y verduras<br />
Cereales y “granos” (leguminosas)<br />
INN 1974 Alimentos animales: dos raciones diarias<br />
Frutas y verduras: tres raciones diarias<br />
Cereales y leguminosas: cuatro raciones<br />
por día<br />
SAM/INN 1986 Aportadores de energía<br />
Fuentes primarias (cereales y raíces)<br />
Fuentes secundarias (azúcar y lípidos)<br />
Aportadores de proteína<br />
Leguminosas, oleaginosas, carnes, leche<br />
y huevo<br />
Aportadores de “minerales” y vitaminas<br />
Frutas y verduras<br />
CONAL 1988 Cereales y tubérculos<br />
Leguminosas y alimentos de origen<br />
animal<br />
Frutas y verduras<br />
INN 2006 Plato del bien comer<br />
INN = Instituto Nacional de la Nutrición.<br />
CONAL = Consejo Nacional de Alimentación.<br />
miento normal, mantener las funciones corporales en<br />
condiciones óptimas, renovar los tejidos deteriorados<br />
y proveer la energía necesaria para realizar las actividades<br />
cotidianas. Sin embargo, su consumo tiene tres<br />
objetivos principales:<br />
1. Suprimir la sensación de hambre.<br />
2. Gratificar a la persona.<br />
3. Constituir un medio de socialización.<br />
Requerimientos energéticos<br />
La cantidad de energía necesaria para el indi viduo se<br />
obtiene sumando las necesidades vi tales de energía, la<br />
cantidad de energía desti nada a la termogénesis alimentaria<br />
y el gasto energético por actividad física.<br />
Las necesidades vitales de energía o gasto ener gético<br />
basal (GEB) constituyen el requerimiento mínimo del<br />
organismo para realizar las funcio nes vitales de sostén<br />
(respiratoria, angiológica o circulatoria, endocrina,<br />
renal, hepática, del sistema nervioso central, de la<br />
temperatura cor poral, inmunitaria, etc.) y, en su caso,<br />
de creci miento, embarazo y lactancia (cuadro 9-8). Se<br />
VERDURAS<br />
Y<br />
MUCHAS<br />
FRUTAS<br />
POCOS<br />
ORIGEN ANIMAL<br />
SUFICIENTES<br />
DE<br />
CEREALES<br />
COMBINA<br />
LEGUMINOSAS<br />
Y ALIMENTOS<br />
Figura 9-19. Plato del bien comer. Fuente: INN, 2006.
172 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-7. Ejemplos de los principales alimentos clasificados en grupos<br />
Semillas maduras de cereales + tubérculos +<br />
derivados (40%) + azúcares (2%) + aceites<br />
y grasas (8%)<br />
Maíz: tortilla, tamal, pozole, atole<br />
Trigo: pan blanco y dulce, pastas para sopa,<br />
galletas, etcétera<br />
Arroz<br />
Avena<br />
Cebada<br />
Centeno<br />
+<br />
Papa<br />
Camote<br />
Yuca<br />
+<br />
Azúcar<br />
Miel<br />
Piloncillo<br />
+<br />
Aceites vegetales<br />
Mantequilla<br />
Manteca<br />
Crema<br />
Margarina<br />
Semillas maduras de leguminosas<br />
y oleaginosas + tejidos animales +<br />
leche + huevos (20%) Tejidos vegetales frescos (30%)<br />
Frijol<br />
Haba<br />
Garbanzo<br />
Lenteja<br />
Alverjón<br />
Alubia<br />
Ayocote<br />
Cacahuate<br />
Ajonjolí<br />
Nuez<br />
Piñón<br />
Soya<br />
+<br />
Tejidos animales: res, carnero, conejo, chivo, puerco,<br />
pescado, marisco<br />
+<br />
Leche de vaca<br />
Otras leches<br />
Quesos<br />
Yogur<br />
+<br />
Huevo de gallina y otras aves<br />
Raíces: zanahoria, jícama, rábano, etcétera<br />
Tallos: apio, nopal, romeritos<br />
Hojas: acelga, berros, espinaca, verdolaga, quelite<br />
Flores: flor de calabaza, colorín, alcachofa, coliflor,<br />
brócoli<br />
Frutos: coco, ciruela, chayote, chabacano, chile,<br />
chirimoya, guayaba, jitomate, limón, naranja,<br />
mamey, tejocote, tomate, zapote, etcétera<br />
Fuente: Comisión Nacional de Alimentación (s/f).<br />
miden en condiciones basales, después de dor mir entre<br />
10 y 12 horas.<br />
Termogénesis alimentaria se refiere al au mento del<br />
gasto energético en las siguientes tres a cuatro horas<br />
posteriores a la ingestión de alimentos, y depende de<br />
la composición de los nutrimentos contenidos en los<br />
alimentos. Si se ingieren hidratos de carbono o triglicéridos,<br />
el aumento es de 3 a 4%, y si se trata de<br />
proteínas, es de 15%; en términos generales, se calcula<br />
10%.<br />
El gasto energético por actividad física puede observarse<br />
en el cuadro 9-9.<br />
El Comité de Expertos de la Organización de las<br />
Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación/Organización<br />
Mundial de la Sa lud y la Organización<br />
de las Naciones Unidas (ONU) expresó el<br />
gasto energético por activi dad en múltiplos del gasto<br />
energético basal, y clasificó las actividades en ocupacionales<br />
y re creativas o discrecionales. Las actividades<br />
discrecionales pueden ser:<br />
1. Tareas opcionales del hogar: 1.4 veces el gasto<br />
energético basal.<br />
2. Actividades sociales deseables: tres veces el gasto<br />
energético basal.<br />
3. Actividades de acondicionamiento físico: cinco<br />
veces el gasto energético basal.<br />
En nutriología se utilizan dos unidades para hacer<br />
referencia al contenido energético de los alimentos:<br />
la caloría y la kilocaloría. La caloría es la cantidad de<br />
calor necesaria para elevar en un grado centígrado la<br />
temperatura de 1 g de agua destilada que se encuentra<br />
entre 14.5 y 15.5 grados centígrados. La kilocaloría<br />
equivale a 1 000 calorías.<br />
Platillos y derivados industriales<br />
La mayoría de los alimentos no se ingieren solos o<br />
en estado natural, pues se someten a procedimientos<br />
culinarios, se mezclan con otros alimentos y se les<br />
agregan condimentos con el propósito de elaborar
Medidas preventivas en odontología 173<br />
Cuadro 9-8. Necesidades de energía por superficie<br />
corporal (m 2 ) y tiempo (hora) según el sexo<br />
Varones<br />
Mujeres<br />
Años kcal/m 2 /h Años kcal/m 2 /h<br />
6<br />
7<br />
8<br />
8.5<br />
9<br />
9.5<br />
10<br />
10.5<br />
11<br />
12<br />
13 a 15<br />
16<br />
16.5<br />
17<br />
17.5<br />
18<br />
18.5<br />
19<br />
19.5<br />
20 a 21<br />
22 a 23<br />
24 a 27<br />
28 a 29<br />
30 a 34<br />
35 a 39<br />
40 a 44<br />
45 a 49<br />
50 a 54<br />
55 a 59<br />
60 a 64<br />
65 a 69<br />
53.00<br />
52.45<br />
51.78<br />
51.20<br />
50.54<br />
49.42<br />
48.50<br />
47.71<br />
47.18<br />
46.75<br />
46.35<br />
45.72<br />
45.30<br />
44.80<br />
44.03<br />
43.25<br />
42.70<br />
42.32<br />
42.00<br />
41.43<br />
40.82<br />
40.24<br />
39.81<br />
39.34<br />
38.68<br />
38.00<br />
37.37<br />
36.73<br />
36.10<br />
35.48<br />
34.80<br />
6<br />
6.5<br />
7<br />
7.5<br />
8<br />
8.5<br />
9 a 10<br />
11<br />
11.5<br />
12<br />
12.5<br />
13<br />
13.5<br />
14<br />
14.5<br />
15<br />
15.5<br />
16<br />
16.5<br />
17<br />
17.5<br />
18 a 19<br />
20 a 24<br />
25 a 44<br />
45 a 49<br />
50 a 54<br />
55 a 59<br />
60 a 64<br />
65 a 69<br />
50.62<br />
50.23<br />
49.12<br />
47.84<br />
47.00<br />
46.50<br />
45.90<br />
45.26<br />
44.80<br />
44.28<br />
43.58<br />
42.90<br />
42.10<br />
41.45<br />
40.74<br />
40.10<br />
39.40<br />
38.85<br />
38.30<br />
37.82<br />
37.40<br />
36.74<br />
36.18<br />
35.70<br />
34.94<br />
33.96<br />
33.18<br />
32.61<br />
32.30<br />
Fuente: Pike R, Brown M. Nutrition, an integrated approach. 3rd<br />
ed. EUA, John Wiley & Sons, 1984.<br />
platillos. Éstos pueden ser sencillos como la tortilla, el<br />
pan blanco y el arroz hervido, o complicados, como el<br />
mole y los pas teles.<br />
Un platillo bien presentado también recrea los órganos<br />
de los sentidos y favorece el con tacto social.<br />
Los alimentos industrializados son muy varia dos e<br />
incluyen desde aceites, harinas, tortilla y pan hasta los<br />
más elaborados como quesos, aderezos, azúcar, jugos,<br />
embutidos y mermela das, entre muchos otros.<br />
La tecnología alimentaria tiene como funcio nes:<br />
1. Mejorar las propiedades sensoriales de los alimentos.<br />
2. Conservar los alimentos.<br />
Cuadro 9-9. Gasto energético de varones y mujeres al<br />
realizar diferentes actividades*<br />
Actividad Varones Mujeres<br />
Dormir 1.0 1.0<br />
Reposar 1.2 1.2<br />
Permanecer sentado, quieto 1.2 1.2<br />
Permanecer de pie, quieto 1.4 1.5<br />
Lavar ropa 2.2 3.0<br />
Caminar<br />
de paseo 2.5 2.4<br />
despacio 2.8 3.0<br />
a paso normal 3.2 3.4<br />
con una carga de 10 kg 3.5 4.0<br />
cuesta arriba a paso normal 5.7 4.6<br />
cuesta abajo a paso normal 3.1 3.0<br />
Realizar actividades sentado<br />
archivar, arreglar papeles 1.4 s/d<br />
afilar un machete 2.2 4.3<br />
coser ropa s/d 1.4<br />
Efectuar tareas del hogar<br />
cocinar 1.8 1.8<br />
hacer tortillas s/d 2.1<br />
mover los frijoles s/d 1.5<br />
pelar camote s/d 1.4<br />
limpiar (ligero) 2.7 2.7<br />
limpiar (pulir, asear ventanas) 3.7 3.7<br />
lavar trastes s/d 1.7<br />
cuidar niños s/d 2.2<br />
Trabajar en oficina<br />
sentado 1.3 1.7<br />
de pie y moviéndose 1.6 s/d<br />
Trabajar en la industria ligera**<br />
impresor 2.0 s/d<br />
sastre o costurero 2.5 s/d<br />
zapatero 2.6 s/d<br />
mecánico automotriz 3.6 s/d<br />
carpintero 3.5 s/d<br />
electricista 3.1 2.0<br />
trabajador de la industria mecánica 3.1 2.7<br />
trabajador de la industria química 3.5 2.9<br />
trabajador de la industria mueblera s/d 3.3<br />
trabajador de una lavandería s/d 3.4<br />
trabajador en un laboratorio 2.0 s/d<br />
panadero s/d 2.5<br />
chofer de camión 1.4 s/d<br />
Trabajar en la industria de la<br />
construcción**<br />
peón 5.2 s/d<br />
albañil (colocar tabiques) 3.3 s/d<br />
ebanista 3.2 s/d<br />
decorador y pintor 2.8 s/d<br />
Efectuar labores agrícolas**<br />
manejar tractor 2.1 s/d<br />
hacinar 6.8 s/d<br />
limpiar la tierra s/d 3.8<br />
desyerbar s/d 4.6<br />
cortar el pasto con machete 4.7 2.9<br />
alimentar animales 3.6 5.0<br />
recoger café s/d 1.5<br />
(Continúa)
174 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-9. Gasto energético de varones y mujeres al<br />
realizar diferentes actividades* (continuación)<br />
Actividad Varones Mujeres<br />
Trabajar en la minería<br />
trabajar con pico 6.0 s/d<br />
palear 5.7 s/d<br />
Actividades recreativas<br />
sedentarias (juegos de mesa) 2.2 2.1<br />
ligeras (billar, boliche, golf) 2.2 a 4.4 2.1 a 4.2<br />
moderadas (bailar, nadar) 4.4 a 6.6 4.2 a 6.3<br />
pesadas (fútbol, atletismo) 6.6+ 6.3+<br />
* Expresado en términos de gasto energético basal (GEB) multiplicado<br />
por una constante metabólica del gasto de la actividad. La<br />
constante metabólica se obtiene al dividir el gasto energético por<br />
actividad entre el GEB de un sujeto dado. Por ejemplo: si el GEB de<br />
un individuo es de 1.08 kcal/min (4.51 kg/min) y el gasto energético<br />
por actividad es de 3.24 kcal/min (13.55 kg/min), la constante<br />
metabólica será el resultado de dividir 3.24 entre 1.08, lo cual da<br />
una cifra de 3.0 (o bien, 13.55/4.51 = 3.0). Para obtener el gasto, se<br />
multiplica el GEB (kcal/min) por la constante metabólica.<br />
** Estos valores se utilizan sólo como valores promedio aproximados<br />
para el tiempo de actividad real en las tareas correspondientes<br />
(p. ej., cuatro horas) y no para el día laboral completo<br />
(p. ej., ocho horas).<br />
s/d = sin descripción.<br />
Fuente: Report of a Joint. FAO/WHO/UNU Expert Consultation<br />
(s/f).<br />
3. Eliminar o reducir las propiedades indesea bles<br />
de los alimentos.<br />
4. Facilitar el consumo de alimentos al adelan tar<br />
uno o más pasos de su preparación.<br />
5. Modificar la composición de los alimentos.<br />
6. Satisfacer las demandas alimentarias de la población.<br />
Por otro lado, desde hace varios años se ha bla del<br />
producto chatarra. Este término se adop tó para denominar<br />
aquellos comestibles cuyo precio es desproporcionado<br />
en relación con su aporte de nutrimentos. Su<br />
consumo frecuente deteriora el presupuesto familiar y<br />
puede des plazar la ingestión de los alimentos básicos.<br />
Dieta<br />
El término dieta proviene del griego díaita, el cual significa<br />
forma de vida. Muchas personas con funden la<br />
dieta con el régimen para bajar de peso o para tratar<br />
determinadas enfermedades, como la diabetes y la hipertensión<br />
arterial; en estos últimos casos se trata de<br />
dietas especiales.<br />
La dieta es el conjunto de alimentos y plati llos que<br />
se consumen cada día; por tanto, cons tituye la unidad<br />
de la alimentación.<br />
Todo ser humano tiene su dieta porque come alimentos<br />
y platillos día a día; sin embargo, es necesario<br />
aprender a tener una dieta correcta o recomendable<br />
para conservar la salud. La die ta recomendable debe<br />
ser satisfactoria en los factores biológico, psicológico<br />
y social.<br />
Factor biológico<br />
En éste, la dieta tiene que ser suficiente, com pleta,<br />
equilibrada, inocua y adecuada.<br />
Dieta suficiente<br />
La dieta tiene que ser suficiente en cantidad y calidad.<br />
Es decir, debe quitar el hambre y proporcionar la<br />
energía necesaria para realizar las actividades diarias.<br />
Asimismo, debe permitir el crecimiento corporal en<br />
los niños y mantener el peso de los adultos en los límites<br />
aconseja bles. La cantidad de calorías depende de la<br />
ac tividad física del individuo.<br />
Dieta completa<br />
Es aquella que debe contener todos los nutri mentos.<br />
Dieta equilibrada<br />
Es la que posee la proporción de nutrimentos recomendables.<br />
Dieta inocua<br />
La inocuidad de la dieta implica seleccionar productos<br />
en buen estado y seguir reglas de higiene. Los alimentos<br />
deben prepararse con las manos limpias y utensilios<br />
bien lavados, y es necesario desinfectar aquellos<br />
que se ingieren crudos como las frutas y las verduras,<br />
ya que a menudo se riegan con aguas negras y un ejemplo<br />
de ello son las fresas. Los vegetales se lavan hoja<br />
por hoja bajo el chorro de agua de la llave y después<br />
se dejan en un recipiente con agua potable y algunas<br />
gotas de yodo como ger micida.<br />
Las raíces, como la zanahoria y el rábano, se limpian<br />
también con escobeta o cepillo. Las cás caras se<br />
lavan con jabón.
Medidas preventivas en odontología 175<br />
Por otro lado, la refrigeración ayuda a con servar<br />
los alimentos pues disminuye la acción de los microorganismos<br />
que producen la fer mentación y la putrefacción;<br />
pero como no los destruye, es necesario<br />
consumir rápidamente dichos alimentos al sacarlos<br />
del refrigerador. La congelación tampoco destruye<br />
los microorga nismos; por ello, si un alimento se descongela<br />
debe consumirse de inmediato y no volverlo a<br />
congelar.<br />
El enlatado y el envasado conservan los ali mentos;<br />
pero si estos procedimientos no son adecuados, existe<br />
el peligro de adquirir una enfermedad llamada botulismo.<br />
Las carnes de res, cerdo y pollo pueden con tener<br />
parásitos, por lo cual es indispensable cocerlas bien.<br />
Muchos pescados y mariscos pue den estar contaminados,<br />
por lo que también deben consumirse cocidos.<br />
Por otra parte, la leche no pasteurizada y el agua deben<br />
some terse a ebullición. Y el huevo debe ingerirse<br />
co cido.<br />
La buena digestión requiere el consumo de los<br />
alimentos en horarios fijos, así como de mas ticación<br />
adecuada.<br />
Los alimentos se contaminan por diferentes causas:<br />
1. Factores físicos. Por ejemplo, el viento o el pol vo,<br />
los cuales transportan agentes patógenos.<br />
2. Factores químicos. Incluyen detergentes, insecticidas<br />
y fertilizantes, y desechos industria les.<br />
3. Factores biológicos. Son bacterias, virus, hon gos<br />
y parásitos. También incluyen la fauna nociva<br />
(moscas, ratas y cucarachas) origina da por falta<br />
de higiene en los locales donde se distribuyen y<br />
almacenan los alimentos.<br />
El ser humano es un factor muy importante en la<br />
contaminación de los alimentos y esto puede deberse<br />
a falta de precaución e higie ne en el momento de prepararlos;<br />
por ejemplo, tener las manos sucias, toser,<br />
estornudar o soplar sobre los alimentos; usar recipientes<br />
mal lavados o con restos de comida, etc. Por tanto,<br />
es indispensable llevar a la práctica las siguien tes recomendaciones:<br />
1. Lavarse las manos antes de manipular o in gerir<br />
alimentos, así como después de ir al baño y cambiar<br />
pañales.<br />
2. Durante el manejo de alimentos, no saludar de<br />
mano ni contar dinero, toser, estornudar o soplar<br />
en dichos alimentos.<br />
3. Al preparar la comida es necesario tener las manos<br />
limpias y sin aparentes lesiones que puedan<br />
contaminarla; no usar reloj, anillos ni pulseras;<br />
tener las uñas de las manos bien recortadas;<br />
mantener el cabello recogido, cubierto y limpio.<br />
En comercios e institucio nes también es imprescindible<br />
utilizar uni forme reglamentario y limpio,<br />
y tener com probante de salud.<br />
4. Las instalaciones donde se preparan alimen tos<br />
deben contar con diversos servicios, en tre ellos:<br />
casilleros o percheros para uso del personal;<br />
agua corriente; limpieza; bodega especial para<br />
almacenar los productos; bo tes de basura apropiados<br />
para desechos or gánicos e inorgánicos;<br />
ventilación; iluminación; control de fauna nociva;<br />
sanitarios en buenas condiciones de aseo y<br />
conservación, y protección de los alimentos (vitrinas,<br />
tapaderas, etc.) contra el polvo, los insectos<br />
y los roedores.<br />
Dieta adecuada<br />
La adecuación también se denomina congruen cia<br />
integral, pues la dieta debe ser adecuada a las características<br />
y circunstancias del indivi duo, y para ello<br />
es necesario considerar edad, sexo, tamaño corporal,<br />
actividad, estado de salud, cultura, estrato socioeconómico,<br />
lugar donde se vive y época del año.<br />
Factor psicológico<br />
La dieta constituye un elemento gratificador y placentero<br />
al suprimir el hambre, y el niño des de su nacimiento<br />
establece una relación afecti va con los demás.<br />
Pero es necesaria la diversi dad, pues hasta el platillo<br />
más sabroso hastía si se consume en cada comida y<br />
todos los días. El hastío a su vez reduce la ingestión y<br />
puede ha cerla insuficiente. Al variar la dieta, es más<br />
fá cil consumir todos los nutrimentos.<br />
Por otra parte, las preocupaciones y los dis gustos<br />
en el momento de tomar los alimentos pueden inhibir<br />
el apetito y los procesos digestivos.
176 Capítulo 9<br />
Factor social<br />
La dieta se comparte con los demás, y por con siguiente<br />
debe ajustarse a las costumbres; si se consumen los<br />
alimentos de la estación, también resulta más económica.<br />
En los cuadros 9-10 y 9-11 se presentan las características<br />
de los alimentos más utilizados en la dieta.<br />
Alimentación<br />
Es el conjunto de fenómenos involucrados en la obtención,<br />
por el organismo, de las sustan cias energéticas,<br />
estructurales y catalíticas necesarias para la vida.<br />
Tomando en cuenta los requisitos de la dieta recomendable,<br />
la buena alimentación incluye al menos<br />
un alimento de cada grupo en cada comida y varía, lo<br />
más posible, en los usados dentro de cada grupo, así<br />
como la forma de preparar los; de ese modo se garantiza<br />
una dieta com pleta, equilibrada y variada. Otro<br />
aspecto im portante consiste en destinar a la preparación<br />
de la comida el tiempo, el interés y la imaginación<br />
necesarios para que sea agradable.<br />
Otra regla a seguir para lograr una buena alimentación<br />
es procurar suficiencia, inocui dad y adecuación.<br />
Carácter integral de la nutrición<br />
La buena nutrición requiere la participación de todo<br />
el organismo, pues como ya se mencio nó, es un proceso<br />
continuo fundamentalmente celular.<br />
La nutrición constituye un fenómeno integral y por<br />
ello incluye la alimentación, la digestión, el transporte<br />
y la distribución de los nutrimen tos por la sangre, así<br />
como la utilización de los mismos por las células. Para<br />
el metabolismo de los nutrimentos se requiere de oxígeno.<br />
Por último, es necesario eliminar los desechos a<br />
tra vés de los sistemas digestivo, urinario, respira torio<br />
y la piel.<br />
Cuadro 9-10. Contenido aproximado de los principales nutrimentos que se encuentran en las raciones<br />
de algunos alimentos de la dieta cotidiana<br />
Grupos Ración (g) Calorías Proteínas (g) Grasas (g) Vitamina A (μg) Vitamina C (μg)<br />
Alimentos de origen animal:<br />
Carne magra<br />
Pescado<br />
Huevo (1 pieza)<br />
Queso<br />
Leche (ml)<br />
Vegetales y frutas:<br />
Vegetales de hojas verdes<br />
Jitomate (1 pieza)<br />
Zanahoria<br />
Papa y camote<br />
Plátano (1 pieza)<br />
Manzana y durazno<br />
Naranja (1 pieza)<br />
Cereales y leguminosas:<br />
Arroz<br />
Pastas<br />
Tortilla (2 piezas)<br />
Pan “bolillo” (1 pieza)<br />
Pan blanco (2 piezas) (rebanada)<br />
Frijoles (1 plato)<br />
Garbanzo, lentejas, habas (1 plato)<br />
Soya (1 plato)<br />
100<br />
100<br />
50<br />
30<br />
200<br />
75<br />
100<br />
75<br />
75<br />
100<br />
100<br />
150<br />
30<br />
30<br />
60<br />
40<br />
50<br />
30<br />
30<br />
30<br />
113<br />
124<br />
74<br />
98<br />
116<br />
18<br />
11<br />
33<br />
67<br />
86<br />
56<br />
75<br />
110<br />
103<br />
136<br />
118<br />
144<br />
100<br />
106<br />
119<br />
Fuente: Instituto Nacional de la Nutrición. Valor nutritivo de los alimentos. Tablas de uso práctico. 5a. ed. Publicación de la División de<br />
Nutrición L-1 2. México: INN, 1971, y de INCAP/ICNND. Tabla de composición de alimentos para uso en América Latina. 2a. ed. México:<br />
Interamericana, 1964.<br />
21<br />
20<br />
6<br />
7<br />
7<br />
2<br />
0.6<br />
0.3<br />
1<br />
1<br />
0.6<br />
1<br />
2<br />
3<br />
4<br />
4<br />
5<br />
6<br />
7<br />
10<br />
2<br />
4<br />
5<br />
7<br />
7<br />
0.4<br />
0.1<br />
0.2<br />
0.2<br />
0.3<br />
0.3<br />
0.2<br />
0.3<br />
0.1<br />
1<br />
0.1<br />
1.5<br />
0.5<br />
1<br />
5<br />
0<br />
10<br />
62<br />
88<br />
56<br />
260<br />
507<br />
498<br />
30<br />
63<br />
13<br />
–<br />
0<br />
1<br />
1<br />
0<br />
0<br />
0<br />
2<br />
3<br />
0<br />
0<br />
0<br />
0<br />
2<br />
24<br />
17<br />
14<br />
14<br />
12<br />
14<br />
63<br />
0<br />
0<br />
–<br />
0<br />
0<br />
0<br />
0.3<br />
2
Medidas preventivas en odontología 177<br />
Cuadro 9-11. Valor nutritivo de los alimentos por raciones<br />
Nombre de la preparación Cantidad<br />
Energía<br />
(kcal)<br />
Proteínas<br />
(g)<br />
Grasas<br />
(g)<br />
Hidratos de<br />
carbono (g)<br />
Calcio<br />
(mg)<br />
Hierro<br />
(mg)<br />
Tiamina<br />
(mg)<br />
Riboflavina<br />
(mg)<br />
Niacina<br />
(mg)<br />
Ascórbico<br />
(mg)<br />
Con leche:<br />
Avena 1 ración 211 8.6 7.3 33.0 235 1.1 0.17 0.21 0.3 2 56<br />
Arroz 1 ración 200 6.4 5.1 32.2 170 0.7 0.10 0.15 0.3 0 42<br />
Atole 1 ración 210 7.1 6.8 29.6 227 0.7 0.10 0.20 0.2 2 56<br />
Café y azúcar 1 taza 174 7.0 6.8 22.0 226 0.6 0.10 0.20 0.2 2 56<br />
Chocolate 1 ración 266 7.8 10.2 22.0 235 1.1 0.11 0.22 0.3 2 57<br />
Huevo (“polla”) 1 ración 238 11.0 10.0 26.4 196 1.8 0.14 0.33 0.1 1 104<br />
Huevo (flan) 1 ración 220 8.1 7.5 30.9 182 1.1 0.10 0.25 0.1 1 73<br />
Leche fresca 1 vaso 116 6.8 6.8 7.0 226 0.6 0.10 0.20 0.2 2 56<br />
Con huevo:<br />
Huevos fritos 1 ración 288 11.9 25.3 2.9 57 2.6 0.14 0.39 0.1 0 133<br />
Huevos con frijoles 1 ración 218 8.9 15.5 11.0 64 2.1 0.16 0.21 0.3 0 66<br />
Huevos con jamón 1 ración 242 9.8 21.7 1.5 31 1.9 0.23 0.23 0.9 0 66<br />
Huevos con jitomate y papas 1 ración 273 12.6 20.3 9.5 82 3.7 0.18 0.40 0.8 6 316<br />
Huevo (crudo) 1 pieza 74 5.6 4.9 1.3 27 1.2 0.07 0.18 0.0 0 63<br />
Con carne:<br />
Carne asada (bistec) 1 ración 113 21.4 2.4 0.0 16 4.0 0.07 0.20 2.9 0 0<br />
Carne frita (bistec) 1 ración 157 21.4 7.4 0.0 16 4.0 0.07 0.20 2.9 0 0<br />
Carne guisada (res con hueso) 1 ración 177 19.1 7.0 8.7 44 4.3 0.10 0.19 3.3 14 223<br />
Pescado frito con ensalada 1 ración 191 17.0 1 1.1 5.9 37 0.2 0.14 0.11 5.5 7 211<br />
Pescado guisado 1 ración 130 16.6 6.0 2.2 48 0.2 0.14 0.13 5.5 11 339<br />
Hígado encebollado 1 ración 238 23.2 14.0 4.6 17 3.2 0.23 2.76 8.7 10 145<br />
Puchero (carne con verduras) 1 ración 165 23.4 2.6 11.1 45 6.9 0.12 0.24 3.4 14 101<br />
Jamón (semigrasoso) 1 rebanada 76 3.9 6.5 0.2 2 0.5 0.16 0.04 0.9 0 0<br />
Con verduras:<br />
Ensalada con aceite 1 ración 38 0.6 3.0 2.4 32 0.3 0.05 0.02 0.4 8 231<br />
Ensalada mixta 1 ración 78 1.5 3.0 11.8 25 2.2 0.05 0.02 0.7 14 125<br />
Espinacas guisadas 1 ración 62 2.2 5.2 2.5 64 2.8 0.08 0.05 0.6 31 378<br />
Sopa de verduras 1 ración 60 0.5 5.0 2.9 35 2.5 0.02 0.02 0.5 17 230<br />
Sopa de papa 1 ración 85 0.9 0.5 9.0 26 2.4 0.05 0.02 1.0 17 131<br />
Sopa de crema de verduras 1 ración 152 5.6 9.4 11.9 183 1.1 0.08 0.16 0.4 11 396<br />
Verduras con crema 1 ración 165 2.9 10.0 14.3 41 2.0 0.07 0.02 0.8 19 247<br />
Verduras con mantequilla 1 ración 128 1.5 8.4 12.6 23 3.0 0.04 0.03 0.7 15 217<br />
Ensalada de jitomate 1 ración 37 0.6 3.1 2.3 41 0.3 0.04 0.03 0.5 11 335<br />
Puré de papa 1 ración 112 2.6 6.0 12.3 65 1.7 0.06 0.06 0.7 9 56<br />
Plátano frito 1 ración 246 0.6 20.1 18.5 7 0.7 0.04 0.02 0.3 7 41<br />
Camote con miel 1 ración 156 0.6 0.2 39.0 24 1.4 0.05 0.01 0.3 13 47<br />
Cebolla picada 1 cucharada 5 0.2 0.0 1.4 5 0.1 0.00 0.00 0.0 2 0<br />
Retinol<br />
(μEq)<br />
(Continúa)
178 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-11. Valor nutritivo de los alimentos por raciones (continuación)<br />
Nombre de la preparación Cantidad<br />
Energía<br />
(kcal)<br />
Proteínas<br />
(g)<br />
Grasas<br />
(g)<br />
Hidratos de<br />
carbono (g)<br />
Calcio<br />
(mg)<br />
Hierro<br />
(mg)<br />
Tiamina<br />
(mg)<br />
Riboflavina<br />
(mg)<br />
Niacina<br />
(mg)<br />
Ascórbico<br />
(mg)<br />
Con fruta:<br />
Fruta en almíbar 1 ración 142 0.3 0.5 36.3 7 0.8 0.02 0.01 0.2 11 3<br />
Coctel de frutas 1 ración 92 0.8 0.2 24.2 18 1.0 0.04 0.02 0.2 17 32<br />
Fresas con crema 1 ración 162 1.5 10.2 15.1 61 3.0 0.01 0.02 0.4 52 113<br />
Plátano (mediano) 1 pieza 88 1.4 0.3 22.4 12 1.8 0.09 0.05 0.5 13 64<br />
Plátano con crema 1 ración 227 1.7 11.0 32.6 35 1.0 0.00 0.03 0.0 14 173<br />
Plátano al horno 1 ración 138 0.0 1.0 31.0 10 0.0 0.00 0.00 0.0 10 78<br />
Manzana al horno 1 ración 132 0.5 5.2 21.7 15 0.8 0.02 0.02 0.2 11 55<br />
Jugo de frutas (naranja) 1 vaso 74 1.0 0.6 19.0 22 1.4 0.10 0.04 0.4 106 80<br />
Naranja dulce (mediana) 1 pieza 38 0.9 0.1 9.4 45 0.9 0.08 0.04 0.3 63 12<br />
Agua de frutas 1 vaso 89 0.3 0.0 23.1 15 0.3 0.02 0.01 0.1 23 4<br />
Con cereales:<br />
Arroz guisado 1 ración 158 2.1 5.3 24.5 19 0.4 0.07 0.01 0.7 4 132<br />
Arroz con queso 1 ración 231 5.3 12.0 24.7 113 0.6 0.07 0.10 0.7 4 233<br />
Arroz con chícharos 1 ración 180 3.6 5.3 28.4 11 0.8 0.11 0.01 0.9 11 9<br />
Sopa de pasta 1 ración 82 1.0 5.0 8.1 17 0.3 0.02 0.01 0.3 4 111<br />
Macarrones y pastas 1 ración 235 4.6 13.7 22.9 77 0.8 0.04 0.09 0.5 4 282<br />
Sopa de tortilla 1 ración 245 3.2 14.1 24.5 115 1.3 0.12 0.07 0.6 5 192<br />
Hojuelas de maíz con leche 1 ración 258 7.7 5.2 45.7 172 0.8 0.07 0.18 0.6 1 42<br />
Pan de caja (chico) 1 rebanada 57 1.8 0.5 11.0 20 5.7 0.09 0.05 0.7 0 0<br />
Pan de caja (grande) 1 rebanada 71 2.2 0.7 13.8 25 7.1 0.12 0.06 0.8 0 0<br />
Pan dulce (mediano) 1 pieza 288 6.8 8.7 45.6 26 0.9 0.19 0.06 0.7 0 0<br />
Bolillo (mediano) 1 pieza 134 3.2 4.1 21.3 12 0.5 0.09 0.03 0.4 0 0<br />
Bolillo (grande, hogaza) 1 pieza 219 6.3 0.2 46.6 29 2.6 0.19 0.03 0.7 0 0<br />
Retinol<br />
(μeq)
Medidas preventivas en odontología 179<br />
Galletas Marías 1 pieza 20 0.5 0.5 3.3 1 0.1 0.01 0.00 0.0 0 0<br />
Galletas saladas 1 pieza 22 0.4 0.7 3.5 2 0.0 0.01 0.01 0.0 0 0<br />
Harina de arroz 1 cucharada 36 0.7 0.1 8.0 1 0.1 0.01 0.00 0.2 0 0<br />
Harina de maíz (refinada) 1 cucharada 36 0.1 0.0 8.6 1 0.3 0.00 0.00 0.0 0 0<br />
Tortilla (chica) 1 pieza 34 0.9 0.2 7.1 16 0.4 0.02 0.01 0.1 0 0<br />
Tortilla (mediana) 1 pieza 78 2.1 0.5 16.5 38 0.9 0.05 0.02 0.3 0 0<br />
Tortilla (grande) 1 pieza 90 2.4 0.6 19.1 43 1.0 0.07 0.03 0.4 0 0<br />
Con leguminosas:<br />
Frijoles guisados 1 ración 146 6.0 5.5 18.7 69 1.6 0.18 0.04 0.5 0 0<br />
Frijoles refritos 1 ración 190 6.0 10.5 18.7 69 1.6 0.18 0.04 0.5 0 0<br />
Garbanzos guisados 1 ración 153 5.8 6.7 17.9 45 2.6 0.21 0.05 0.6 4 134<br />
Garbanzo en dulce 1 ración 191 7.0 3.2 34.6 105 1.9 0.17 0.10 0.4 1 22<br />
Lentejas con frutas 1 ración 109 6.3 0.4 21.5 26 1.7 0.19 0.04 0.6 6 15<br />
Otros alimentos:<br />
Aceite 1 cucharada 133 0.0 15.0 0.0 0 0.0 0.00 0.00 0.0 0 0<br />
Azúcar 1 cucharada 58 0.0 0.0 14.9 0 0.0 0.00 0.00 0.0 0 0<br />
Crema de leche (20%) 1 cucharada 31 0.4 3.0 0.6 15 0.0 0.00 0.02 0.0 0 30<br />
Crema de leche (40%) 1 cucharada 51 0.3 5.5 0.3 12 0.0 0.00 0.02 0.0 0 54<br />
Mayonesa 1 cucharada 106 0.2 11.7 0.4 3 0.1 0.00 0.00 0.0 0 1<br />
Mantequilla 1 cucharada 111 0.2 12.6 0.1 3 0.0 0.00 0.00 0.0 0 126<br />
Margarina 1 cucharada 108 0.1 12.2 0.1 0 0.0 0.00 0.00 0.0 0 99<br />
Mermelada (promedio) 1 cucharada 42 0.1 0.0 10.6 2 0.0 0.00 0.00 0.0 0 0<br />
Miel de abeja 1 cucharada 46 0.0 0.0 11.7 3 0.0 0.00 0.00 0.0 0 0<br />
Queso fresco de vaca 1 ración 58 6.0 2.8 2.0 274 0.1 0.01 0.10 0.0 0 28<br />
Queso rallado (añejo) 1 cucharada 20 1.4 1.5 2.0 43 0.1 0.00 0.04 0.0 0 32<br />
Refresco chico 1 botella 89 0.0 0.0 23.1 0 0.0 0.00 0.00 0.0 0 0<br />
Refresco mediano 1 botella 167 0.0 0.0 43.1 0 0.0 0.00 0.00 0.0 0 0<br />
Fuente: Instituto Nacional de la Nutrición (México), 1987.
180 Capítulo 9<br />
Las transformaciones químicas de los nutri mentos,<br />
después de su absorción por el intesti no, se denominan<br />
metabolismo y se regulan por el sistema endocrino.<br />
La utilización de los nu trimentos incluye actividades<br />
de síntesis o ana bolismo y de degradación o<br />
catabolismo.<br />
La nutrición también depende de las carac terísticas<br />
genéticas, el ejercicio físico, así como del ambiente (físico,<br />
psicológico y sociocultural).<br />
La nutrición del individuo empieza desde la etapa<br />
prenatal. Por ello, la mujer requiere de una dieta<br />
correcta o recomendable y en el em barazo necesita<br />
aporte adicional de calcio, hie rro, zinc y ácido fólico.<br />
Después del nacimiento, la alimentación con leche<br />
materna es fundamental porque contiene anticuerpos,<br />
además de las siguientes razones: es más fácil de<br />
digerir; está libre de contami nantes, ya que no se manipula;<br />
está siempre fresca, a la temperatura adecuada<br />
y lista para administrarse; es económica porque no<br />
debe comprarse; no es necesario comprar uten silios<br />
para su administración; no requiere preparación ni<br />
hervir agua o adicionarle azú car o miel, y proporciona<br />
los nutrimentos nece sarios durante los primeros<br />
meses. La lactancia ayuda a la madre a tener mayor<br />
acercamiento con su hijo, y la estimulación del pezón<br />
por el niño favorece las contracciones del útero materno<br />
y su recuperación. El aseo de la madre antes de<br />
alimentar al niño es muy importante.<br />
Posteriormente, llega el momento de intro ducir<br />
alimentos diferentes a la leche materna en la dieta<br />
del niño y esto se denomina ablactación. La edad de<br />
la ablactación ha variado con el paso del tiempo. En<br />
la actualidad, para ello se considera necesaria la maduración<br />
del niño en varios sistemas, pues es indispensable<br />
que realice movimientos con la lengua para<br />
llevar los alimentos hacia la faringe y luego deglutirlos;<br />
asimismo, se requiere el desarrollo del riñón para<br />
eliminar de manera adecuada los productos del metabolismo<br />
de proteínas distintas a las de la leche. La<br />
amilasa pancreática, fundamental para hidrolizar los<br />
almidones de los cereales, apare ce hasta el cuarto mes<br />
de vida.<br />
Por otra parte, antes del sexto mes de vida algunas<br />
sustancias antigénicas pasan por la mucosa intestinal<br />
sin ser hidrolizadas (p. ej., las proteínas del huevo y el<br />
trigo), lo cual produce alergia más tarde.<br />
La Academia Mexicana de Pediatría (AMP) recomienda<br />
la ablactación entre los cuatro y seis meses de<br />
edad, de acuerdo con el grado de desarrollo del niño.<br />
Los jugos de frutas deben in troducirse en la dieta después<br />
del décimo mes. Lo mismo se aplica en el caso<br />
del huevo, las fresas, el chocolate y los jitomates.<br />
Las reglas para la ablactación son las siguientes:<br />
1. Nunca introducir en la dieta dos alimentos nuevos<br />
a la vez.<br />
2. No forzar al niño a aceptar los alimentos.<br />
3. Tener paciencia hasta lograr que el niño se acostumbre<br />
a la consistencia de los alimen tos.<br />
4. No agregar sal a los alimentos preparados en casa.<br />
5. Restringir el aporte de azúcares y almidones<br />
cuando los niños o sus padres sean obesos.<br />
6. No mezclar cereales, huevo o algún otro alimento<br />
en la leche del biberón.<br />
7. Agregar cítricos y huevo en la alimentación alrededor<br />
del año de edad si existen antece dentes de<br />
alergia en la familia.<br />
8. Reducir la ingestión de leche conforme se introducen<br />
los alimentos semisólidos y sólidos en la<br />
alimentación.<br />
9. Incrementar poco a poco la cantidad de alimento,<br />
empezando con una cucharada cafe tera.<br />
Cuando el niño tiene dientes, debe aprender a masticar<br />
de manera correcta; de ese modo, el bocado tiene<br />
que pasar por toda la cavidad bucal y humedecerse en<br />
lo posible con la saliva. La deglución se realiza hasta<br />
que el alimento está hecho papilla y ya no tiene partículas<br />
triturables.<br />
Los cuadros 9-12 y 9-13 presentan los valo res normales<br />
de peso y talla.<br />
Factores socioculturales<br />
La disponibilidad de alimentos depende de la producción,<br />
la importación y la exportación. A su vez,<br />
la producción se relaciona con el tipo de suelo, clima,<br />
cantidad de agua, topografía y avance tecnológico. El<br />
cultivo con procedimien tos rudimentarios o el uso de<br />
semillas de mala calidad da por resultado una producción<br />
defi ciente, además de que aumenta su costo.<br />
La distribución de los alimentos depende de los<br />
medios de transporte y las posibili dades de conser-
Medidas preventivas en odontología 181<br />
Cuadro 9-12. Antropometría infantil: peso y talla<br />
Niños<br />
Talla normal<br />
Niñas<br />
Talla normal<br />
Valores normales de peso (g)<br />
promedio<br />
Valores normales de peso (g)<br />
promedio<br />
Edad<br />
Inferior Medio Superior (cm)<br />
Inferior Medio Superior<br />
(cm)<br />
Al nacer 2 900 3 250 3 600 50.0 2 750 3 100 3 450 49.5<br />
1 mes 3 935 4 390 4 845 54.3 3 690 4 070 4 450 53.2<br />
2 meses 4 710 5 240 5 770 57.9 4 400 4 850 5 295 56.7<br />
3 meses 5 475 6 075 6 675 61.1 5 110 5 615 6 120 59.7<br />
4 meses 6 080 6 725 7 370 63.6 5 675 6 225 6 775 62.1<br />
5 meses 6 800 7 285 7 970 65.9 3 265 6 880 7 455 64.4<br />
6 meses 7 080 7 800 8 520 67.9 6 765 7 490 8 035 66.3<br />
7 meses 7 500 8 235 8 970 69.3 7 150 7 820 8 490 67.9<br />
8 meses 7 935 8 690 9 445 70.8 7 570 8 275 8 980 69.5<br />
9 meses 8 300 9 070 9 840 72.0 7 950 8 680 9 410 70.9<br />
10 meses 8 640 9 430 10 220 73.3 8 275 9 025 9 775 72.1<br />
11 meses 8 950 9 760 10 570 74.5 8 585 9 350 10 115 73.4<br />
1 año 9 255 10 080 10 905 75.6 8 886 9 630 10 475 74.6<br />
2 años 11 615 12 625 13 635 87.2 11 385 12 360 13 335 86.0<br />
3 años 13 470 14 720 15 970 95.0 13 345 14 520 15 695 94.3<br />
4 años 15 235 18 705 18 175 101.5 14 790 16 690 17 540 101.4<br />
5 años 16 980 18 700 20 420 107.6 16 850 18 700 20 535 107.6<br />
6 años 18 715 20 840 22 965 113.7 18 665 20 830 22 995 113.6<br />
7 años 20 795 23 420 26 045 119.5 20 740 23 330 25 920 119.5<br />
8 años 22 925 26 110 28 295 125.5 22 810 25 980 28 150 125.0<br />
9 años 25 475 28 250 33 926 130.4 25 340 29 055 32 770 130.1<br />
10 años 28 080 32 460 36 840 135.5 28 125 32 780 37 435 135.9<br />
11 años 31 205 36 160 41 115 140.6 32 500 38 425 44 345 142.8<br />
12 años 35 050 40 660 46 270 146.0 37 950 45 020 52 090 149.5<br />
13 años 39 880 46 200 52 550 152.5 42 495 49 780 56 905 154.9<br />
Fuente: Ramos G. Somatometría médica. Arch Invest Med IMSS 6(supl 1) (s/año).<br />
vación, los hábitos alimentarios, el costo y el poder<br />
adquisitivo.<br />
Por otro lado, el bajo grado de escolaridad hace que<br />
las personas desconozcan cómo de ben alimentarse.<br />
Entre esas personas son más frecuentes los matrimonios<br />
en edades tempra nas y los espacios intergenésicos<br />
cortos (es de cir, el lapso entre un embarazo y el siguiente),<br />
lo cual restringe el cuidado y la alimentación<br />
adecuados. Los hijos numerosos en muchas oca siones<br />
no se cuidan de manera adecuada y por ello pueden<br />
experimentar falta de apetito.<br />
La mala nutrición conduce ya sea a desnu trición o<br />
a obesidad. La desnutrición propicia las infecciones; a<br />
su vez, éstas dan lugar a los trastornos diarreicos, y los<br />
parasitarios interfieren con la utilización de los nutrimentos.<br />
El saneamiento deficiente también repercute<br />
en la desnutrición. Por último, la obesidad favorece<br />
enfermedades como la hipertensión arterial y el infarto<br />
de miocardio.<br />
Alimentación y salud oral<br />
La alimentación es vital en el crecimiento y desarrollo<br />
de las estructuras orales y su conservación.<br />
Antes de la erupción dental, la alimentación puede<br />
influir en la maduración y composición química del<br />
esmalte, así como en la morfología y tamaño de los<br />
dientes.<br />
Por otra parte, los trastornos orales pueden hacer<br />
que la persona evite la ingestión de alimentos que requieran<br />
masticación, como frutas, vegetales y carnes,<br />
lo que conlleva a mala nutrición.
182 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-13. Peso adecuado para adultos<br />
Varones (peso en kg con ropa)<br />
Mujeres (peso en kg con ropa)<br />
Conformación<br />
Conformación<br />
Estatura (m)<br />
Estrecha Mediana Ancha Estatura (m)<br />
Estrecha Mediana Ancha<br />
1.575 50.8 a 54.4 53.5 a 58.5 57.2 a 63.9 1.473 41.7 a 44.5 43.5 a 48.5 47.2 a 53.9<br />
1.600 52.2 a 55.8 54.9 a 60.3 58.5 a 65.3 1.498 42.6 a 45.8 44.5 a 49.9 48.1 a 55.3<br />
1.628 53.5 a 57.2 56.2 a 61.7 59.9 a 67.1 1.524 43.5 a 47.1 45.8 a 51.3 49.4 a 56.7<br />
1.651 54.9 a 58.5 57.6 a 63.0 61.2 a 68.9 1.549 44.9 a 48.5 47.2 a 52.6 50.8 a 58.1<br />
1.676 56.2 a 60.3 58.9 a 64.9 62.6 a 70.8 1.575 46.3 a 49.9 48.5 a 53.9 52.2 a 59.4<br />
1.702 58.1 a 62.1 60.8 a 66.7 64.4 a 73.0 1.600 47.6 a 51.3 49.9 a 55.3 53.5 a 60.8<br />
1.727 59.9 a 63.9 62.6 a 68.9 66.7 a 75.3 1.626 48.9 a 52.6 51.3 a 57.2 54.9 a 62.6<br />
1.753 61.7 a 65.8 64.4 a 70.8 68.5 a 77.1 1.651 50.3 a 53.9 52.6 a 58.9 56.7 a 64.4<br />
1.778 63.5 a 68.0 66.2 a 72.6 70.3 a 78.9 1.676 51.7 a 55.8 54.4 a 61.2 58.5 a 66.2<br />
1.803 65.3 a 69.9 68.0 a 74.8 72.1 a 81.2 1.702 53.5 a 57.6 56.2 a 63.0 60.3 a 68.0<br />
1.829 67.1 a 71.7 69.9 a 77.1 74.4 a 83.5 1.727 55.3 a 59.4 58.1 a 64.9 62.1 a 69.9<br />
1.854 68.9 a 73.5 71.7 a 79.4 76.2 a 85.7 1.753 57.1 a 61.2 59.9 a 66.7 63.9 a 71.7<br />
1.880 70.8 a 75.7 73.5 a 81.6 78.5 a 88.0 1.778 58.9 a 63.5 61.7 a 68.5 65.8 a 73.9<br />
1.905 72.6 a 77.6 75.7 a 83.9 80.7 a 90.3 1.803 60.8 a 65.3 63.5 a 70.3 67.6 a 76.2<br />
1.931 74.4 a 79.4 78.0 a 86.2 82.6 a 92.5 1.829 62.6 a 67.1 65.3 a 72.1 69.4 a 78.5<br />
Fuente: Instituto Nacional de la Nutrición (s/f).<br />
La deficiencia de proteínas retarda la renovación<br />
del epitelio basal de la encía y disminuye la respuesta<br />
inmunitaria.<br />
Calcio, vitamina D y fósforo son básicos para el<br />
desarrollo y conservación de los dientes y el hueso alveolar,<br />
por lo que su deficiencia origina hipomineralización<br />
de los dientes en desarrollo y posible retardo<br />
de los patrones de erupción.<br />
El hierro sirve como cofactor con el ácido ascórbico<br />
para síntesis de la colágena, así como el cobre.<br />
El zinc regula la inflamación. Su deficiencia inhibe<br />
la formación de colágena y disminuye la inmunidad<br />
mediada por células.<br />
La vitamina A es fundamental para el desarrollo e<br />
inte gridad de los tejidos y la respuesta de inmunidad;<br />
sin embargo, su exceso produce xerostomía, pérdida<br />
de la queratinización y tumefacción gingivales.<br />
La vitamina C es importante para la síntesis de la<br />
co lágena y las funciones de defensa e inmunidad; su<br />
deficien cia produce sangrado espontáneo, aflojamiento<br />
y pérdida de los dientes porque se degrada la colágena<br />
que forma las fi bras del ligamento periodontal.<br />
La deficiencia del complejo B produce queilosis<br />
(grietas en las comisuras de la boca), inflamación,<br />
sensación de quema dura, enrojecimiento, dolor y tumefacción<br />
de la lengua.<br />
Los azúcares, principalmente la sacarosa, son muy<br />
peligrosos; uno de los productos intermedios del metabolismo<br />
de la saca rosa es el glucano, que permite<br />
la adherencia de S. mutans a las superficies lisas del<br />
esmalte. La miel, compuesta por fructosa, glucosa y<br />
sucrosa, es igual de cariogénica que la sacarosa.<br />
Si los almidones cocidos (cereales, galletas, papas<br />
fritas, etc.) se retienen en los espacios interproximales<br />
son muy perjudiciales porque son acidógenos.<br />
Flúor y fluoruros<br />
Conceptos generales<br />
La palabra flúor proviene del latín fluere que significa<br />
fluir. El flúor es un elemento químico perteneciente<br />
al grupo VII de la tabla periódica y está constituido<br />
por halógenos, cuya caracte rística es ser no metales en
Medidas preventivas en odontología 183<br />
extremo activos. En estado puro, aislado en el laboratorio,<br />
es un gas de color amarillo claro, bastante tóxico<br />
y de olor irritante. Su número atómico es 9 y su peso<br />
ató mico 19 (18.9984 uma) (cuadro 9-14).<br />
Los no metales pueden ganar o ceder elec trones,<br />
pero el flúor sólo los acepta y nunca los cede. En su<br />
nivel energético exterior consta de siete electrones (S 2<br />
y p 5 ) (cuadros 9-15 y 9-16). Su energía de ionización<br />
(eV) es la siguiente:<br />
1. Primer electrón: 17.42.<br />
2. Segundo electrón: 34.98.<br />
3. Tercer electrón: 62.646.<br />
4. Cuarto electrón: 87.23.<br />
5. Quinto electrón: 114.214.<br />
La fórmula molecular del flúor es F 2<br />
; el radio del<br />
átomo es de 0.72 Å y el radio del ion (F ~ ) es de 1.36 Å.<br />
Su configuración electrónica es (fig. 9-20):<br />
9 F : l s<br />
2<br />
2 S<br />
2<br />
2p x<br />
2<br />
2p y<br />
2<br />
2p z<br />
1<br />
El flúor tiene una electronegatividad de 4.0 (cuadro<br />
9-17). Es un elemento demasiado acti vo como<br />
aceptor de electrones y casi no existe como elemento<br />
libre (es el más electronegativo) porque reacciona con<br />
todos los elementos, ex cepto con los metales nobles<br />
(platino y oro) y algunos gases nobles. En la naturaleza<br />
repre senta alrededor de 0.0227% de los elementos<br />
que constituyen la corteza terrestre y por lo ge neral se<br />
encuentra en forma de fluorita, fluoruro de calcio o<br />
espatoflúor. En la atmósfera existe en pequeñas cantidades;<br />
sin embargo, abun da en algunas industrias,<br />
como en la fundición de aluminio, la fabricación de<br />
ladrillos y en la explotación minera de rocas de fosfato.<br />
Su con centración en el agua es variable, dependiendo<br />
de las diversas regiones geográficas.<br />
El fluoruro puede entrar en la atmósfera por acción<br />
volcánica o como resultado de procesos industriales.<br />
Retorna a la tierra al depositarse como polvo, lluvia,<br />
nieve, etc. Ingresa en la hidrosfera por filtración desde<br />
los suelos y mi nerales hacia el agua subterránea.<br />
A partir del suelo, el agua o el aire, se incorpora a la<br />
vegetación y desde ahí puede entrar en la cadena alimentaria.<br />
Por regla general, las aguas superficiales con tienen<br />
bajos porcentajes de fluoruros; en cam bio, el agua subterránea<br />
puede adquirir concen traciones más altas.<br />
Usos del flúor<br />
Los primeros informes relativos a la utilización del<br />
flúor datan de 1529: el minerólogo alemán Georgius<br />
Agricola describió el espatoflúor en su obra De re<br />
metallica y lo llamó flúor lapis o piedra fluida porque<br />
se licuaba y fluía con mu cha facilidad. Más tarde, en<br />
el siglo xviii, el tallador de cristal, Hainrich Schwan<br />
Lhardt, observó que por la acción del ácido sulfúrico<br />
sobre el espatoflúor se obtenía un líquido que opacaba<br />
el vidrio.<br />
Sin embargo, el primero en estudiar el va por de<br />
la fluorita acidificado fue Karl Wilhelm Scheele, en<br />
1771. Posteriormente, en 1886, Moissan obtuvo por<br />
primera vez el flúor, me diante electrólisis del fluoruro<br />
potásico y del áci do fluorhídrico; para ello, utilizó un<br />
aparato de platino.<br />
Durante la Segunda Guerra Mundial se uti lizó en<br />
forma de hexafluoruro de uranio (UF 6<br />
) para la construcción<br />
de una bomba atómica. Como elemento se<br />
usa para fabricar gases refri gerantes (freón) y teflón.<br />
Finalmente, el uso del flúor para la preven ción<br />
de la caries ha cobrado gran importancia en todo el<br />
mundo por su eficacia, seguridad y economía.<br />
Antecedentes del efecto del flúor en los dientes<br />
En 1888, Kuhns realizó la primera observación sobre<br />
el efecto del flúor en el esmalte dental al in formar de<br />
un defecto en el esmalte de los miembros de una familia<br />
que residía en Durango, México. En 1892, Sir James<br />
Crichton atribuyó el aumento de caries a la refinación<br />
de la hari na porque con ello se eliminaba el flúor.<br />
Con el paso del tiempo, hubo más informes relativos<br />
a defectos del esmalte; entre ellos se encuentra el<br />
de Vicenze Guerini y Omero Tempestini, en Italia.<br />
En 1901, J.M. Eager informó acerca de dete rioro<br />
dental entre los emigrantes de Nápoles que se dirigían<br />
hacia Estados Unidos; el barrio de origen de esas<br />
personas era Chiaie, por lo cual denominó “dientes de<br />
Chiaie” al deterioro encontrado y señaló como causa<br />
de ello el agua de consumo.<br />
Por otra parte, Frederick McKay notó la exis tencia<br />
de esmalte veteado pero más duro y a la vez menos<br />
caries entre habitantes de Colorado Springs, Estados<br />
Unidos. Al buscar la causa jun to con Green Verdiman
184 Capítulo 9<br />
H<br />
Hidrógeno<br />
1.0079<br />
1<br />
Li<br />
Litio<br />
6.939<br />
Na<br />
Sodio<br />
22.9877<br />
K<br />
Potasio<br />
39.098<br />
Rb<br />
Rubidio<br />
85.47<br />
Cs<br />
Cesio<br />
132.9054<br />
Fr<br />
Francio<br />
(223)<br />
3<br />
11<br />
19<br />
87<br />
55<br />
37<br />
Be<br />
Berilio<br />
9.0122<br />
Mg<br />
Magnesio<br />
24.305<br />
Ca<br />
Calcio<br />
40.08<br />
Sr<br />
Estroncio<br />
87.62<br />
Ba<br />
Bario<br />
137.34<br />
Ra<br />
Radio<br />
226.0254<br />
4<br />
12<br />
20<br />
88<br />
56<br />
38<br />
Sc<br />
Escandio<br />
44.9559<br />
Y<br />
Itrio<br />
88.9059<br />
Véase<br />
Lantánidos<br />
21<br />
89-103<br />
57-71<br />
39<br />
Ti<br />
Titanio<br />
47.90<br />
Zr<br />
Circonio<br />
91.22<br />
Hf<br />
Hafnio<br />
178.49<br />
Rf-Ku<br />
(Ruterfordio<br />
Kurchatovio)<br />
(251)<br />
22<br />
104<br />
72<br />
40<br />
V<br />
Vanadio<br />
50.942<br />
Nb<br />
Niobio<br />
92.9064<br />
Ta<br />
Tantalio<br />
180.9479<br />
Ha<br />
Hanio<br />
(262)<br />
23<br />
105<br />
73<br />
41<br />
Cr<br />
Cromo<br />
51.996<br />
Mo<br />
Molibdeno<br />
95.94<br />
W<br />
Wolframio<br />
Tungsteno<br />
183.85<br />
(263)<br />
24<br />
106<br />
74<br />
42<br />
Mn<br />
Manganeso<br />
54.9380<br />
Tc<br />
Tecnecio<br />
(97)<br />
Re<br />
Renio<br />
186.207<br />
25<br />
75<br />
43<br />
Fe<br />
Hierro<br />
55.847<br />
Ru<br />
Rutenio<br />
101.07<br />
Os<br />
Osmio<br />
190.2<br />
26<br />
76<br />
44<br />
Co<br />
Cobalto<br />
58.9332<br />
Rh<br />
Rodio<br />
102.9055<br />
Ir<br />
Iridio<br />
192.22<br />
27<br />
77<br />
45<br />
Ni<br />
Níquel<br />
58.70<br />
Pd<br />
Paladio<br />
106.4<br />
Pt<br />
Platino<br />
195.09<br />
28<br />
78<br />
46<br />
Cu<br />
Cobre<br />
63.546<br />
Ag<br />
Plata<br />
107.870<br />
Au<br />
Oro<br />
196.967<br />
29<br />
79<br />
47<br />
Zn<br />
Zinc<br />
65.37<br />
Cd<br />
Cadmio<br />
112.40<br />
Hg<br />
Mercurio<br />
200.59<br />
30<br />
80<br />
48<br />
B<br />
Boro<br />
10.81<br />
Al<br />
Aluminio<br />
26.98154<br />
Ga<br />
Galio<br />
69.72<br />
In<br />
Indio<br />
114.82<br />
Tl<br />
Talio<br />
204.37<br />
5<br />
13<br />
31<br />
81<br />
49<br />
C<br />
Carbono<br />
12.011<br />
Si<br />
Silicio<br />
28.086<br />
Ge<br />
Germanio<br />
72.59<br />
Sn<br />
Estaño<br />
118.69<br />
Pb<br />
Plomo<br />
207.19<br />
6<br />
14<br />
32<br />
82<br />
50<br />
N<br />
Nitrógeno<br />
14.0067<br />
P<br />
Fósforo<br />
30.9738<br />
As<br />
Arsénico<br />
74.9216<br />
Sb<br />
Antimonio<br />
121.75<br />
Bi<br />
Bismuto<br />
208.9804<br />
7<br />
15<br />
33<br />
83<br />
51<br />
O<br />
Oxígeno<br />
15.9994<br />
S<br />
Azufre<br />
32.06<br />
Se<br />
Selenio<br />
78.96<br />
Te<br />
Telurio<br />
127.60<br />
Po<br />
Polonio<br />
(209)<br />
8<br />
16<br />
34<br />
84<br />
52<br />
F<br />
Flúor<br />
18.998403<br />
Cl<br />
Cloro<br />
35.453<br />
Br<br />
Bromo<br />
79.904<br />
I<br />
Yodo<br />
126.9044<br />
At<br />
Astatinio<br />
(210)<br />
9<br />
17<br />
35<br />
85<br />
53<br />
He<br />
Helio<br />
4.00260<br />
2<br />
Ne<br />
Neón<br />
26.179<br />
Ar<br />
Argón<br />
39.948<br />
Kr<br />
Kriptón<br />
83.80<br />
Xe<br />
Xenón<br />
131.30<br />
Rn<br />
Radón<br />
(222)<br />
10<br />
18<br />
36<br />
86<br />
54<br />
Véase<br />
Actínidos<br />
Número atómico<br />
Símbolo<br />
Nombre<br />
Peso atómico<br />
H<br />
Hidrógeno<br />
1.0079<br />
1<br />
Lantánidos<br />
Actínidos<br />
La<br />
Lantano<br />
138.9055<br />
Ac<br />
Actinio<br />
(227)<br />
89<br />
57<br />
Ce<br />
Cerio<br />
140.12<br />
Th<br />
Torio<br />
232.0381<br />
90<br />
58<br />
Pr<br />
Praseodimio<br />
140.9077<br />
Pa<br />
Protactinio<br />
231.0359<br />
91<br />
59<br />
Nd<br />
Neodimio<br />
144.24<br />
U<br />
Uranio<br />
238.029<br />
92<br />
60<br />
Pm<br />
Prometeo<br />
(145)<br />
Np<br />
Neptunio<br />
237.0482<br />
93<br />
61<br />
Sm<br />
Samario<br />
150.4<br />
Pu<br />
Plutonio<br />
(244)<br />
94<br />
62<br />
Eu<br />
Europio<br />
151.96<br />
Am<br />
Americio<br />
(243)<br />
95<br />
63<br />
Gd<br />
Gadolinio<br />
157.25<br />
Cm<br />
Curio<br />
(247)<br />
96<br />
64<br />
Tb<br />
Terbio<br />
158.9254<br />
Bk<br />
Berkelio<br />
(247)<br />
97<br />
65<br />
Dy<br />
Disprosio<br />
162.50<br />
Cf<br />
Californio<br />
(251)<br />
98<br />
66<br />
Ho<br />
Holmio<br />
164.9304<br />
Es<br />
Einstenio<br />
(254)<br />
99<br />
67<br />
Er<br />
Erbio<br />
167.26<br />
Fm<br />
Fermio<br />
(257)<br />
100<br />
68<br />
Tm<br />
Tulio<br />
168.9342<br />
Md<br />
Mendelevio<br />
(258)<br />
101<br />
69<br />
Yb<br />
Iterbio<br />
173.04<br />
No<br />
Nobelio<br />
(255)<br />
102<br />
70<br />
Lu<br />
Lutecio<br />
174.97<br />
Lr<br />
Lawrencio<br />
(260)<br />
103<br />
71<br />
Cuadro 9-14. Tabla periódica de los elementos
Medidas preventivas en odontología 185<br />
2<br />
He<br />
24.6<br />
4<br />
Be<br />
9.3<br />
12<br />
Mg<br />
7.6<br />
20<br />
Ca<br />
6.1<br />
38<br />
Sr<br />
5.7<br />
56<br />
Ba<br />
5.2<br />
88<br />
Ra<br />
5.3<br />
1<br />
H<br />
13.6<br />
3<br />
Li<br />
6.4<br />
11<br />
Na<br />
5.1<br />
19<br />
K<br />
4.3<br />
37<br />
Rb<br />
4.2<br />
55<br />
Cs<br />
3.9<br />
87<br />
Fr<br />
--<br />
10<br />
Ne<br />
21.6<br />
18<br />
Ar<br />
15.8<br />
36<br />
Kr<br />
14.0<br />
54<br />
Xe<br />
12.1<br />
86<br />
Rn<br />
10.7<br />
9<br />
F<br />
17.4<br />
17<br />
Cl<br />
13.0<br />
35<br />
Br<br />
11.8<br />
53<br />
I<br />
10.4<br />
85<br />
At<br />
--<br />
8<br />
O<br />
13.6<br />
16<br />
S<br />
10.4<br />
34<br />
Se<br />
9.8<br />
52<br />
Te<br />
9.0<br />
84<br />
Po<br />
--<br />
7<br />
N<br />
14.5<br />
15<br />
P<br />
11.0<br />
33<br />
As<br />
10<br />
51<br />
Sb<br />
8.6<br />
83<br />
Bi<br />
8<br />
6<br />
C<br />
11.3<br />
14<br />
Si<br />
8.1<br />
32<br />
Ge<br />
8.1<br />
50<br />
Sn<br />
7.3<br />
82<br />
Pb<br />
7.4<br />
5<br />
B<br />
8.3<br />
13<br />
Al<br />
6.0<br />
31<br />
Ga<br />
6.0<br />
49<br />
In<br />
5.8<br />
81<br />
Ti<br />
6.1<br />
30<br />
Zn<br />
9.4<br />
48<br />
Cd<br />
9.0<br />
80<br />
Hg<br />
10.4<br />
29<br />
Cu<br />
7.7<br />
47<br />
Ag<br />
7.6<br />
79<br />
Au<br />
9.2<br />
28<br />
Ni<br />
7.6<br />
46<br />
Pd<br />
8.3<br />
78<br />
Pt<br />
9.0<br />
27<br />
Co<br />
7.9<br />
45<br />
Rh<br />
7.7<br />
77<br />
Ir<br />
9.2<br />
26<br />
Fe<br />
7.9<br />
44<br />
Ru<br />
7.5<br />
76<br />
Os<br />
8.7<br />
25<br />
Mn<br />
7.4<br />
43<br />
Te<br />
--<br />
75<br />
Re<br />
7.9<br />
24<br />
Cr<br />
6.8<br />
42<br />
Mo<br />
7.2<br />
74<br />
W<br />
8.0<br />
23<br />
V<br />
6.7<br />
41<br />
Nb<br />
6.8<br />
73<br />
Ta<br />
6<br />
22<br />
Ti<br />
6.8<br />
40<br />
Zr<br />
7.0<br />
72<br />
Hf<br />
5.5<br />
21<br />
Sc<br />
6.6<br />
39<br />
Y<br />
6.6<br />
71<br />
Lu<br />
5.0<br />
70<br />
Yb<br />
6.2<br />
69<br />
Tm<br />
--<br />
68<br />
Er<br />
--<br />
67<br />
Ho<br />
--<br />
66<br />
Dy<br />
6.8<br />
65<br />
Tb<br />
6.7<br />
64<br />
Gd<br />
6.2<br />
63<br />
Eu<br />
5.7<br />
62<br />
Sm<br />
5.6<br />
61<br />
Pm<br />
--<br />
--<br />
60<br />
Nd<br />
6.3<br />
59<br />
Pr<br />
5.8<br />
58<br />
Ce<br />
6.9<br />
57<br />
La<br />
Cuadro 9-15. Tabla periódica: primera energía de ionización de varios elementos. El número inferior es la primera energía de ionización<br />
(en electrón-voltios)
186 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-16. Energías de ionización (eV)<br />
Número atómico Símbolo 1er. e- 2o. e- 3er. e- 4o. e- 5o. e-<br />
1 H 13.595<br />
2 He 24.580 54.40<br />
3 L¡ 5.390 75.6193 122.420<br />
4 Be 9.320 18.206 153.850 217.657<br />
5 B 8.296 25.149 37.920 259.298 340.986<br />
6 C 11.264 24.376 47.864 64.476 391.986<br />
7 N 14.54 29.605 47.426 77.450 97.863<br />
8 0 13.614 35.146 54.934 77.394 113.873<br />
9 F 17.42 34.98 62.646 87.23 114.214<br />
10 Ne 21.559 41.07 64 97.16 126.4<br />
11 Na 5.138 47.29 71.65 98.88 138.60<br />
12 Mg 7.644 15.03 80.12 109.29 141.23<br />
13 Al 5.984 18.823 28.44 119.96 153.77<br />
14 Si 8.149 16.34 33.46 45.13 166.73<br />
15 P 11.0 19.65 30.156 51.354 65.007<br />
16 S 10.357 23.4 35.0 47.29 72.5<br />
17 Cl 13.01 23.80 39.90 53.5 67.80<br />
18 Ar 15.755 27.62 40.90 59.79 75.0<br />
19 K 4.339 31.81 46 60.90 –<br />
20 Ca 6.111 11.87 51.21 67 84.39<br />
21 Sc 6.56 12.89 24.75 73.9 92<br />
22 Ti 6.83 13.63 28.14 43.24 99.8<br />
Black, concluyeron que esas personas ingerían agua<br />
con las mismas características. MacKay y O. Martin<br />
z<br />
gF: 1s 2 2s 2 2ps 2 2ps 2 2ps 1<br />
Figura 9-20. Modelo de Dirac para el átomo de flúor.<br />
y<br />
x<br />
comprobaron que el agua de consumo era la causa del<br />
esmal te veteado luego de realizar estudios en la población<br />
de Britton, Dakota del Sur.<br />
Posteriormente, los habitantes de Bauxita, Arkansas,<br />
en Estados Unidos, se quejaron de presentar<br />
manchas en los dientes, por lo cual se analizó el agua<br />
de los abastecimientos públicos, y Churchill, en 1931,<br />
encontró que la concentra ción de flúor era alta.<br />
En 1938, H. Trendley Dean y colaboradores presentaron<br />
los resultados de una investigación en 21<br />
ciudades de Estados Unidos. De ese modo, en 1945<br />
aportaron bases para estudiar dos po blaciones cercanas<br />
al lago Michigan (Grand Rapids, como población<br />
de estudio, y Muskegon, como población testigo). Se<br />
examinó a cerca de 20 000 niños y ocho años después<br />
se observó disminución de caries en más de 50% de<br />
los ni ños de tres a ocho años de edad en Grand Rapids.<br />
Estos mismos datos se obtuvieron en las ciudades<br />
de Newburg y Kingston, y más tarde en Evanston<br />
y Oak Park.<br />
Con base en los estudios mencionados y en los de<br />
otros países, el agua empezó a someterse a fluoruración.<br />
En México también se llevó a cabo ese procedimiento<br />
pero luego se sus pendió.
Medidas preventivas en odontología 187<br />
He<br />
2<br />
1.5<br />
Be<br />
4<br />
1.2<br />
Mg<br />
12<br />
1.0<br />
Ca<br />
20<br />
1.0<br />
Sr<br />
38<br />
0.9<br />
Ba<br />
56<br />
0.9<br />
Ra<br />
88<br />
2.1<br />
H<br />
1<br />
1.0<br />
Li<br />
3<br />
0.9<br />
Na<br />
11<br />
0.8<br />
K<br />
19<br />
0.8<br />
Rb<br />
37<br />
0.7<br />
Cs<br />
55<br />
0.7<br />
Fr<br />
87<br />
Ne<br />
10<br />
Ar<br />
18<br />
3.0<br />
Kr<br />
36<br />
2.6<br />
Xe<br />
54<br />
2.4<br />
Rn<br />
86<br />
4.0<br />
F<br />
9<br />
3.0<br />
Cl<br />
17<br />
2.8<br />
Br<br />
35<br />
2.5<br />
I<br />
53<br />
2.2<br />
At<br />
85<br />
3.5<br />
O<br />
8<br />
2.5<br />
S<br />
16<br />
2.4<br />
Se<br />
34<br />
2.1<br />
Te<br />
52<br />
2.0<br />
Po<br />
84<br />
3.0<br />
N<br />
7<br />
2.1<br />
P<br />
15<br />
2.0<br />
As<br />
33<br />
1.9<br />
Sb<br />
51<br />
1.9<br />
Bi<br />
83<br />
2.5<br />
C<br />
6<br />
1.8<br />
Si<br />
14<br />
1.8<br />
Ge<br />
32<br />
1.8<br />
Sn<br />
50<br />
1.8<br />
Pb<br />
82<br />
2.0<br />
B<br />
5<br />
1.5<br />
Al<br />
13<br />
1.5<br />
Ga<br />
31<br />
1.7<br />
In<br />
49<br />
1.8<br />
Ti<br />
81<br />
1.6<br />
Zn<br />
30<br />
1.7<br />
Cd<br />
48<br />
1.9<br />
Hg<br />
80<br />
1.9<br />
Cu<br />
29<br />
1.9<br />
Ag<br />
47<br />
2.4<br />
Au<br />
79<br />
1.8<br />
Ni<br />
28<br />
2.2<br />
Pd<br />
46<br />
2.2<br />
Pt<br />
78<br />
1.8<br />
Co<br />
27<br />
2.2<br />
Rh<br />
45<br />
2.2<br />
Ir<br />
77<br />
1.8<br />
Fe<br />
26<br />
2.2<br />
Ru<br />
44<br />
2.2<br />
Os<br />
76<br />
1.5<br />
Mn<br />
25<br />
1.9<br />
Tc<br />
43<br />
1.9<br />
Re<br />
75<br />
1.6<br />
Cr<br />
24<br />
1.8<br />
Mo<br />
42<br />
1.7<br />
W<br />
74<br />
1.6<br />
V<br />
23<br />
1.6<br />
Nb<br />
41<br />
1.5<br />
Ta<br />
73<br />
1.5<br />
Ti<br />
22<br />
1.4<br />
Zr<br />
40<br />
1.3<br />
Hf<br />
72<br />
1.3<br />
Sc<br />
21<br />
1.2<br />
Y<br />
39<br />
1.2<br />
Lu<br />
71<br />
1.1<br />
Yb<br />
70<br />
1.2<br />
Tm<br />
69<br />
1.2<br />
Er<br />
68<br />
1.2<br />
Ho<br />
67<br />
1.1<br />
Dy<br />
66<br />
1.2<br />
Tb<br />
65<br />
1.1<br />
Gd<br />
64<br />
1.1<br />
Eu<br />
63<br />
1.2<br />
Sm<br />
62<br />
1.1<br />
Pm<br />
61<br />
1.2<br />
Nd<br />
60<br />
1.1<br />
Pr<br />
59<br />
1.1<br />
Ce<br />
58<br />
1.1<br />
La<br />
57<br />
1.2<br />
No<br />
102<br />
1.2<br />
Md<br />
101<br />
1.2<br />
Fm<br />
100<br />
1.2<br />
Es<br />
99<br />
1.2<br />
Cf<br />
98<br />
1.2<br />
Bk<br />
97<br />
1.3<br />
Cm<br />
96<br />
1.3<br />
Am<br />
95<br />
1.3<br />
Pu<br />
94<br />
1.3<br />
Np<br />
93<br />
1.7<br />
U<br />
92<br />
1.5<br />
Pa<br />
91<br />
1.3<br />
Th<br />
90<br />
1.1<br />
Ac<br />
89<br />
Lw<br />
103 104 105 106 107 108 109<br />
1.6<br />
Zn<br />
21<br />
Símbolo<br />
Número<br />
atómico<br />
Electronegatividad<br />
Cuadro 9-17. Tabla periódica de los elementos: electronegatividad
188 Capítulo 9<br />
Por otro lado, se han realizado estudios re lacionados<br />
con la adición de flúor en la sal, la leche y el jugo de<br />
naranja. También se han elaborado productos para la<br />
superficie del diente; algunos de ellos requieren de<br />
aplicación profe sional y otros son de autoaplicación,<br />
es decir, de uso personal como las pastas dentales<br />
con fluoruro y los colutorios o enjuagatorios. El uso<br />
de gotas y tabletas con fluoruro se determina por el<br />
odontólogo, según la cantidad de flúor en el agua de<br />
consumo, la edad y la susceptibi lidad individual a la<br />
caries.<br />
Principales fuentes de flúor<br />
Son las siguientes:<br />
1. Agua de ríos o pozos. La concentración de fluoruro<br />
varía de 0.01 a 10 o más ppm.<br />
2. Agua entubada fluorurada. Contiene 0.8 a 1.4<br />
ppm.<br />
3. Atmósfera. El fluoruro se obtiene principal mente<br />
de procesos industriales como la fundi ción de<br />
aluminio (se utiliza criolita), la fabri cación de<br />
ladrillos y la explotación minera de rocas de fosfato<br />
(en forma importante de fluorapatita).<br />
4. Alimentos. El pescado contiene 0.1 a 20 ppm de<br />
fluoruro, principalmente en los huesos.<br />
5. Bebidas. El té verde contiene 100 a 300 ppm de<br />
fluoruro en la hoja seca.<br />
6. Profiláctica:<br />
A. Tabletas de fluoruro de sodio (0.25 a 1 mg).<br />
B. Sal de mesa con fluoruro de sodio.<br />
C. Dentífricos con fluoruro de estaño (SnF 2<br />
).<br />
D. Dentífricos con fluorofosfato (PO 3<br />
F 2<br />
).<br />
E. Enjuagues bucales con fluoruro de sodio.<br />
F. Solución de NaF de 1 a 2%.<br />
G. Solución de SnF 2<br />
.<br />
H. Solución de monofluorofosfato de sodio.<br />
7. Terapéuticas: tabletas de fluoruro de sodio.<br />
Metabolismo del flúor<br />
El flúor en el organismo proviene básicamente de los<br />
alimentos y el agua (0.3 a 0.5 mg diarios). Un pequeño<br />
porcentaje se introduce al organismo a través de la<br />
respiración (flúor atmosféri co), a menos que se trabaje<br />
en sitios donde abun da, como sucede en la fundición<br />
de aluminio. En ocasiones penetra por la piel, por<br />
ejemplo, al estar en contacto con ácido fluorhídrico.<br />
Cuando se ingiere, el ion se absorbe con gran rapidez<br />
en el estómago y el intestino delgado, al grado de<br />
que en 30 min ya se está distribuyendo por difusión<br />
en los tejidos (fig. 9-21). El flúor absor bido se elimina<br />
a través de la orina y el sudor, a diferencia del que no<br />
se absorbe, el cual se eli mina en la materia fecal (fig.<br />
9-22).<br />
La cantidad de flúor en el organismo es variable<br />
y depende de la ingestión, la inhala ción (en algunos<br />
casos), la absorción y la eliminación, así como de<br />
las características de los compuestos; por ejemplo, el<br />
fluoruro de sodio se absorbe en gran cantidad, a diferencia<br />
de F 2<br />
Ca, F 2<br />
Mg y F 3<br />
Al, los cuales tienen menor<br />
grado de solubilidad. Sin embargo, en térmi nos generales<br />
el organismo contiene alrededor de 2.6 g de flúor,<br />
el cual se concentra en algu nos tejidos (figs. 9-23 a<br />
9-25): huesos, 500 ppm (20 ppm en el feto); cartílago,<br />
30 ppm; esmal te, 100 ppm; dentina, 300 ppm; cemento,<br />
1 000 ppm; pulpa, 680 ppm, y placa dentobacteriana,<br />
67 ppm.<br />
El depósito de flúor varía con la edad: en los niños,<br />
50% se fija en huesos y dientes en forma ción; en los<br />
adultos, se deposita básicamente en los huesos. Por<br />
consiguiente, también la excre ción varía con la edad<br />
y es más o menos de 50% en los niños y de 70% o más<br />
en los ancianos.<br />
Excreción urinaria de flúor<br />
(mg)<br />
0.7<br />
0.6<br />
0.5<br />
0.4<br />
0.3<br />
0.2<br />
0.1<br />
1 ppm F<br />
1 ppm F + 5 mg F<br />
0 6 12 18 24<br />
Tiempo en horas<br />
Figura 9-21. Estudio realizado por McClure y Kinser,<br />
don de se observa la excreción renal. Ésta se<br />
relaciona con la cantidad de flúor, el estado<br />
funcional del riñón, la cantidad de orina y el<br />
pH urinario. La dieta vegetariana aumenta<br />
el pH y la dieta rica en carne lo disminuye.
Medidas preventivas en odontología 189<br />
Inhalación<br />
Ingestión<br />
(agua y alimentos)<br />
Absorción<br />
(pulmonar)<br />
Absorción<br />
No absorción<br />
Estómago<br />
e intestino<br />
Tejidos<br />
blandos<br />
Líquidos circulantes<br />
Hueso, diente<br />
o ambos<br />
Secreciones<br />
corporales<br />
(leche, saliva)<br />
Excreción<br />
Excreción<br />
Piel<br />
(sudor)<br />
Riñón<br />
(orina)<br />
Materia fecal<br />
Figura 9-22. Metabolismo del flúor.<br />
Efectos del flúor<br />
En los dientes<br />
La adición de flúor a los líquidos que rodean el esmalte<br />
aumenta la concentración de ese ion y produce<br />
la precipitación de sales de CaF 2<br />
o cre cimiento de<br />
cristales de fluorapatita (FAP). En ambos procesos se<br />
consumen iones calcio y fos fato, con lo cual disminuye<br />
la concentración de iones del medio y se produce<br />
disolución de la hidroxiapatita.<br />
El flúor desplaza al ion hidroxilo de la molé cula<br />
de apatita y ocupa su lugar. Como resulta do, hay mayor<br />
riqueza del esmalte en cristales fluorados, ya que<br />
se han disuelto cristales de hi droxiapatita y se han<br />
formado cristales de fluo rapatita. También se forma<br />
fluorhidroxiapatita (FHAP).<br />
El flúor actúa contra la desmineralización del esmalte<br />
a través de dos procesos: el esmalte con proporción<br />
alta de fluorapatita o fluorhidro xiapatita es<br />
menos soluble en ácido que cuan do contiene sólo hidroxiapatita;<br />
la concentra ción alta de flúor en los flui-
190 Capítulo 9<br />
1 000–<br />
800–<br />
600–<br />
4 000–<br />
400–<br />
200–<br />
0–<br />
3 000–<br />
2 000–<br />
1 000–<br />
0–<br />
A<br />
B<br />
300–<br />
200–<br />
100–<br />
0–<br />
C<br />
Figura 9-23. Distribu ción de flúor (partes por millón) en teji dos calcificados. A, Fémur humano. B, Dentina molar.<br />
C, Esmalte molar (ter cer molar inferior) sin brotar de una mujer de 51 años; los valores de superficie aquí<br />
son muy bajos.<br />
dos orales hace más difícil la disolución de las apatitas<br />
del esmalte. Si a pesar de todo se produce desmineralización<br />
del esmalte por caída del pH en presencia<br />
de flúor, los iones que se difunden a partir de la disolución<br />
de hidroxiapatita se combinan con el flúor<br />
y forman una capa su perficial mineralizada de fluor-
Medidas preventivas en odontología 191<br />
Concentración de iones flúor<br />
(partes por millón)<br />
4 000<br />
3 000<br />
2 000<br />
1 000<br />
5.0 ppm<br />
1.0 ppm<br />
0.1 ppm<br />
1 2 3 4 5 6<br />
Exterior Capa de esmalte<br />
Interior<br />
Figura 9-24. Variaciones en el contenido de flúor en el<br />
esmalte de personas menores de 20 años de<br />
edad en comunidades con 0.1, 1.0 y 5.0 ppm<br />
de flúor en el abas tecimiento de agua.<br />
apatita o de fluorhidroxiapatita, con lo cual ocurre la<br />
remineralización. Además, se origina precipitación de<br />
sales de CaF 2<br />
, y cuando el pH retorna a la normalidad,<br />
esas sales se disuelven y liberan calcio y flúor, que a su<br />
vez forman más fluorapatita y fluorhidroxiapatita; de<br />
ese modo continúa la remineralización.<br />
La aplicación directa del flúor en el esmalte produce<br />
efectos diferentes según la dosificación, la cual puede<br />
ser alta (aplicación profesional) o baja y continua<br />
(flúor en el agua de bebida, colutorios o enjuagatorios<br />
y dentífricos).<br />
Las dosis altas de flúor ocasionan gran ab sorción<br />
de ese elemento en las zonas desmi neralizadas por la<br />
gran afinidad de éstas con el flúor, y la consiguiente<br />
precipitación acelerada capta gran cantidad de iones<br />
calcio y fosfato libres del interior, con lo cual se hace<br />
lenta la remineralización.<br />
El flúor administrado en cantidades meno res pero<br />
continuas se vuelve disponible, lo mis mo que los iones<br />
calcio y fosfato; así, puede difundirse hacia el interior<br />
y precipita en forma de fluorapatita y fluorhidroxiapatita.<br />
En con centración baja reacciona con el esmalte y<br />
remplaza iones OH − de la hidroxiapatita:<br />
Ca 10<br />
(PO 4<br />
) 6<br />
(OH) 2<br />
+ 2F − → Ca 10<br />
(PO 4<br />
) 6<br />
F 2<br />
+ 2(OH)<br />
200<br />
Flúor (ppm)<br />
100<br />
0<br />
Labial<br />
Lingual<br />
Figura 9-25. Variación de la concentración de flúor en la super ficie del esmalte de un canino superior permanente en<br />
una mujer de 52 años de edad, donde el es malte se ha desgas tado por el uso; la concentración de flúor de la<br />
región ex terna es relativa mente baja.
192 Capítulo 9<br />
En grandes concentraciones, el flúor se cap ta de<br />
manera temporal:<br />
Ca 10<br />
(PO 4<br />
) 6<br />
(OH) 2<br />
+ 2OF – → 10CaF 2<br />
+ 6HPO – 4 + 2OH<br />
Según la última reacción, en la superficie del esmalte<br />
se forma un depósito de fluoruro de calcio<br />
(CaF 2<br />
), el cual aumenta conforme se incrementa el<br />
F – . El fluoruro de calcio se disuelve con lentitud y así<br />
libera flúor a la saliva, por lo cual actúa en lesiones incipientes<br />
de caries al reducir la disolución del esmalte<br />
y propiciar su remineralización; también reacciona<br />
con la hidroxiapatita del esmalte formando HAP<br />
y fluorhidroxiapatita. Al microscopio electróni co, el<br />
fluoruro de calcio formado se observa como glóbulos<br />
esféricos en la superficie del es malte, de preferencia<br />
en las depresiones de los prismas, los agujeros focales<br />
o las terminacio nes de las periquematíes.<br />
Se cree que la superficie del fluoruro de cal cio<br />
absorbe con rapidez los iones fosfato y las proteínas<br />
salivales (albúminas y glucoproteínas), y así éstos forman<br />
una cubierta que inhibe su disolución y hace en<br />
extremo lenta la libera ción de fluoruros en la interfase<br />
placa/esmalte (reservorio lábil de Mühlemann).<br />
La solubilidad del fluoruro de calcio aumen ta cuando<br />
el pH desciende a cinco. En concen traciones de<br />
30 ppm de F – , impide la adherencia de la película salival<br />
al depositarse en las superficies dentales y modificar<br />
la carga elec trostática de la capa externa del esmalte.<br />
En la placa dentobacteriana<br />
Según estudios in vitro y en condiciones áci das, parte<br />
del flúor de la placa se libera en for ma ionizada (F – ) y<br />
se combina con los iones H + del medio formando FH,<br />
el cual penetra a tra vés de la membrana celular de las<br />
bacterias. Al estar en el citoplasma, el FH se disocia<br />
en F – y H + y de ese modo acidifica el medio intracelular,<br />
con la consiguiente interferencia de las fun ciones<br />
de la célula, como la entrada de iones K y PO 4<br />
H – 2 , el<br />
transporte de glucosa y el metabo lismo energético. El<br />
resultado final es la dismi nución de la actividad celular,<br />
la alteración del metabolismo de los hidratos de<br />
carbono, el des censo de la producción de ácido, y por<br />
tanto la disminución de la actividad cariogénica.<br />
No obstante lo anterior, in vivo no se obser va lo<br />
mismo porque los microorganismos se adaptan a concentraciones<br />
altas de flúor, aun que degraden la sacarosa<br />
con más lentitud.<br />
Por otro lado, el flúor disminuye la acidi ficación<br />
durante la fermentación de los azúca res y con ello el<br />
desarrollo de microorganismos acidúricos.<br />
En las caries de dentina y cemento<br />
El flúor se encuentra en altas concentraciones en la<br />
dentina; por tanto, si se aplica de manera tópica en ese<br />
sitio, se difunde a través de los túbulos dentinarios.<br />
En la raíz dental expuesta ayuda a formar una capa de<br />
mineral de alta densidad.<br />
Efectos tóxicos<br />
El flúor en cantidades adecuadas ha adquirido gran<br />
importancia en la salud bucal; pero puede ser muy<br />
tóxico cuando se proporciona en cantidades excesivas.<br />
Dreisbach considera que la dosis letal para el ser<br />
humano es de 6 a 9 mg/kg; en cambio, según Lidbeck,<br />
es de 100 mg/kg en el adulto y de 5 a 15 mg/kg en los<br />
niños.<br />
La intoxicación aguda por flúor se caracteri za por<br />
náusea, vómito, dolor abdominal, ma reo, debilidad<br />
muscular, escalofrío, depresión del sistema nervioso,<br />
disnea, palidez, choque, bradicardia, midriasis, espasmos,<br />
convulsiones, co ma e incluso la muerte. Esto<br />
se debe a que el flúor produce inhibición de las enzimas<br />
depen dientes del magnesio y el hierro, con lo<br />
cual se bloquea el metabolismo celular; también origina<br />
formación de compuestos de calcio que con ducen<br />
a hipocalcemia, con la consiguiente alteración de la<br />
transmisión de impulsos nervio sos y alteraciones de<br />
la coagulación sanguínea.<br />
La exposición a largo plazo al flúor puede ocasionar<br />
fluorosis esquelética. Esta enferme dad es ocupacional<br />
cuando la padecen perso nas que trabajan<br />
en lugares donde abunda el flúor. Se caracteriza por<br />
aumento exagerado de la mineralización ósea, exostosis<br />
y calcificación de los ligamentos, y en otros casos<br />
estrecha miento de los agujeros de conjunción. Dichas<br />
alteraciones son más frecuentes en la columna vertebral,<br />
en donde pueden ocasionar xifosis. Cuando las<br />
articulaciones de la cadera y la ro dilla resultan afectadas,<br />
se produce deforma ción en ellas. Si se calcifican
Medidas preventivas en odontología 193<br />
los cartílagos se afecta el funcionamiento del tórax, y<br />
según sea el estrechamiento de los agujeros de conjunción,<br />
puede haber manifestaciones de compresión<br />
en las raíces de los nervios espinales o raquídeos (dolor,<br />
disminución de la sensibilidad y alteraciones en el<br />
movimiento).<br />
En estudios radiológicos, Roholm encontró las siguientes<br />
alteraciones:<br />
1. Al principio aumenta la densidad de las trabéculas<br />
del hueso y hay calcificación en las inserciones<br />
musculares.<br />
2. En grado mayor, aumenta la densidad de la estructura<br />
ósea y se pierde la definición del contorno<br />
de los huesos.<br />
3. Al avanzar la enfermedad, se pierden los de talles<br />
del tejido óseo, que se observa como una sombra<br />
difusa color blanco mármol.<br />
En otras personas se presentan alteraciones hepáticas<br />
y renales.<br />
Fluorosis dental<br />
Otro trastorno que ocurre cuando se consumen fluoruros<br />
en cantidades mayores a las óptimas durante<br />
largo tiempo, mientras se forma el es malte, es la fluorosis<br />
dental. Este padecimiento incluye desde la aparición<br />
de pequeñas áreas discrómicas e hipercrómicas<br />
hasta la hipoplasia grave, con un esmalte marrón y de<br />
consis tencia friable (fig. 9-26 y cuadro 9-18).<br />
El índice de fluorosis (IF) más utilizado desde 1935<br />
es el índice de Dean:<br />
Normal 0. Esmalte con translucidez habitual, y superficie<br />
lisa y pulida.<br />
Cuestionable 1. Esmalte con ligeras diferencias en<br />
cuanto a translucidez normal, en ocasio nes con<br />
pequeñas manchas blanquecinas.<br />
Muy leve 2. Esmalte con pequeñas áreas blanquecinas,<br />
opacas y distribuidas de manera irregular<br />
pero sin alcanzar 25% de toda la superficie<br />
del esmalte. Se incluyen en esta clasificación los<br />
dientes con manchas blan cas opacas menores de<br />
1 a 2 mm en los vértices de las cúspides de premolares<br />
o segun dos molares.<br />
Leve 3. Opacidades más extensas, pero sin al canzar<br />
más de 50% de la superficie del diente.<br />
Moderada 4. Esmalte dental afectado por com pleto,<br />
y desgaste de superficies sujetas a la atrición.<br />
Hay manchas color marrón.<br />
Cariados perdidos y obturados<br />
10<br />
9<br />
8<br />
7<br />
6<br />
5<br />
4<br />
3<br />
2<br />
1<br />
Grave<br />
Moderada<br />
Leve<br />
Muy leve<br />
(1)<br />
4<br />
3<br />
2<br />
1<br />
0<br />
Índice de fluorosis<br />
0<br />
0.1 1.0 10.0<br />
Figura 9-26. Relación entre la concentración de fluoruro en el agua de consumo y la prevalencia de fluorosis dental y<br />
caries dental.
194 Capítulo 9<br />
Cuadro 9-18. Efectos del aumento de fluoruros en el suministro de agua<br />
Concentración<br />
de F − (ppm)<br />
Efecto<br />
0.8 a 1 Reducción de la frecuencia de caries<br />
1.0 a 1.1 Valor del umbral en el cual ocurren cambios perceptibles en el esmalte en desarrollo de los dientes permanentes. Tales cambios<br />
consisten en manchas brillantes, como la madreperla, que pueden observarse en un cuidadoso examen de algunos de los dientes.<br />
La aparición de estas manchas es la primera etapa en la fluorosis del esmalte<br />
1.4 a 1.6 Fluorosis del esmalte más evidente. En algunos dientes de unos cuantos miembros de la comunidad pueden verse manchas de color<br />
amarillo claro a pardo<br />
2.0 La mayor parte de los dientes tienen manchas pardas<br />
2.5 La superficie del esmalte pierde su uniformidad. La decoloración oscura afecta extensas áreas del esmalte de muchos dientes<br />
4 Cambios detectables en la composición química del hueso. En el extremo superior del intervalo hay quizás aumento de alrededor de<br />
1 a 4% en las cenizas del hueso, alrededor de 10% de disminución de carbonato, y 15% de disminución de magnesio. No pueden<br />
observarse cambios radiológicos o histológicos en el hueso; sin embargo, las mediciones de difracción de rayos X muestran<br />
líneas de amplitud reducida del patrón de apatita, lo cual indica un incremento del tamaño del cristal o tensión no homogénea<br />
reducida, o ambas. Una disminución del tamaño del cristal podría explicar el decremento en el conteni do de carbonato y<br />
magnesio si estos iones se unen de manera parcial o total a la superficie del cristal<br />
8 Primeros cambios radiológicos en el hueso<br />
Fuente: Williams RAD, Elliot JC. Bioquímica dental básica y aplicada. México: El Manual Moderno, 1990.<br />
Severa 5. Superficie del esmalte afectada en su totalidad<br />
por la hipoplasia. Las señales más evidentes<br />
son las depresiones en el esmalte, el cual aparece<br />
corroído.<br />
Para valorar la fluorosis en un individuo o una comunidad,<br />
se considera: normal, 0; cuestionable, 0.5;<br />
muy leve, 1; leve, 2; moderada, 3; severa, 4.<br />
Tipos de fluoruros de uso más frecuente<br />
Fluoruro de sodio (NaF). Los primeros estu dios<br />
del flúor tópico se realizaron con el fluoruro de sodio<br />
(cuadro 9-19). Éste contiene 54% de sodio y 45% de<br />
ion flúor. Es soluble en agua y reacciona con cualquier<br />
impureza, por lo cual resulta necesario disolverlo en<br />
un recipiente de plástico y con agua bidestilada. Para<br />
aplicarlo, se utiliza la técnica de Knutson y una solución<br />
de NaF al 2% preparada con 2 g de polvo en 10<br />
ml de agua. La solución se aplica cuatro veces consecutivas<br />
con un intervalo de una semana entre cada<br />
una; esta serie se realiza a los 3, 7, 10 y 13 años de edad<br />
para coincidir con la erupción de grupos dentales.<br />
Fluoruro de estaño (SnF 2<br />
). Contiene 75% de estaño<br />
y 25% de ion flúor. Se usa una solución al 8%, preparada<br />
con 0.8 g de polvo en 10 ml de agua bidestilada.<br />
Como es muy ines table, es necesario prepararla en un<br />
recipiente de vidrio o plástico, agitarla con un instrumento<br />
de madera o cristal y usarla de inmediato por que se<br />
inactiva a los 25 o 30 minutos (cuadro 9-19).<br />
La solución se aplica en la superficie dental con un<br />
hisopo sin metal, y sólo una vez al año. Tiene la desventaja<br />
de ocasionar problemas estéticos cuando tiene<br />
contacto con el esmalte careado porque se forman fosfatos<br />
de estaño de color pardo. De igual manera, al tera<br />
el color de las restauraciones de silicato, deja un sabor<br />
metálico desagradable y puede irritar los tejidos gingivales.<br />
Por ello, el paciente y sus padres deben estar<br />
conscientes de esos efectos.<br />
Fluoruro acidulado (APF). El fluoruro de so dio acidificado<br />
con ácido fosfórico permite la adición de aromatizantes,<br />
no irrita, no tiene mal sabor y se conserva<br />
bien. Es posible adminis trarlo en solución o en gel y<br />
proporciona muy buenos resultados. Se aplica cada<br />
seis meses en una sola ocasión, ya sea en solución o en<br />
gel (cuadro 9-19).<br />
Diaminofluoruro de plata. Es un compuesto de<br />
fluoruro de alta concentración que empezó a usarse<br />
en 1976 para tratar lesiones activas de caries de esmalte.<br />
Se encuentra en diferentes concentraciones (del 10<br />
a 38%). Ayuda a for mar una película de fluoruro de<br />
calcio y fosfato de calcio en la superficie del esmalte<br />
para ha cerlo insoluble y resistente al ataque ácido.
Medidas preventivas en odontología 195<br />
Cuadro 9-19. Cuadro comparativo de técnicas, ventajas y desventajas de distintos tipos de fluoruros<br />
para uso en forma tópica en la prevención de la caries dental<br />
Característica Fluoruro de sodio Fluoruro de estaño Fluoruro de sodio acidulado<br />
Composición NaF en H 2<br />
O (destilada) SnF 2<br />
en H 2<br />
O (destilada) 2.78% de NaF en solución 0.1 M<br />
de H 2<br />
PO 2<br />
Concentración 2% 8 a 10% 1.23% del ion F −<br />
Prevención 60% 40% 70%<br />
Aplicación Tópica Tópica y en pasta dentífrica Tópica<br />
Número de aplicaciones tópicas Cuatro cada tres años Una al año Una cada seis meses<br />
Edad de aplicación 3, 7, 10 y 13 años Preescolares y escolares Preescolares, escolares y<br />
adolescentes<br />
Detiene la caries incipiente No Probablemente antes de la pérdida No<br />
de continuidad superficial<br />
Sabor de la solución Agradable Desagradable Agradable<br />
Irritante para la mucosa No Sí No<br />
Estabilidad de la solución Sí No Sí<br />
El ion de plata le proporciona acción bacte ricida.<br />
Al mismo tiempo, disminuye la adhe rencia de la placa<br />
bacteriana a la superficie del diente, ya que inhibe la<br />
aglutinación de dextranos.<br />
Se aplica con una torunda humedecida.<br />
Tiene la desventaja de pigmentar de negro las partes<br />
mineralizadas. Como es cáustico, requiere de mucho<br />
cuidado en su aplicación.<br />
Barnices fluorurados. El primer barniz fluorurado<br />
salió al mercado en 1964 y contenía fluo ruro de sodio<br />
a 5 o 2.26% del ion fluoruro, en una base neutra de colofonio<br />
(Duraphat). En 1975 se elaboró otro, a base de<br />
poliuretano, con 0.7% de fluoruro en forma de flúor<br />
silano, trans parente y con sabor ácido (Vivadent).<br />
Los barnices permiten mayor tiempo de con tacto<br />
entre el esmalte y el fluoruro e inhiben la desmineralización.<br />
Se utilizan con éxito para favorecer la maduración<br />
después de la erup ción dental. Pueden aplicarse<br />
sin profilaxia pre via, ya que no se inactivan por la<br />
presencia de placa bacteriana. Bruyin y Arends (1987)<br />
reco mendaron realizar el cepillado normal, secar las<br />
superficies dentales, aislar y aplicar el barniz con pincel<br />
o jeringa.<br />
El paciente no debe ingerir alimentos ni enjuagarse<br />
durante 30 minutos después de la aplicación; tampoco<br />
debe cepillarse los dien tes durante 12 horas para<br />
aumentar al máxi mo el tiempo de contacto del barniz<br />
con el es malte.<br />
Holm y colaboradores encontraron reduc ción de<br />
56% en caries de fisuras en primeros molares permanentes<br />
entre pacientes que usa ron Duraphat tres veces<br />
al año. Petersson reco mienda tres aplicaciones al año<br />
con intervalos de siete días.<br />
El Duraphat tiene muy alta concentración de fluoruro<br />
y aun así su uso adecuado no produce efectos<br />
tóxicos porque la base del barniz le per mite una fijación<br />
rápida, el flúor se libera con lentitud después de<br />
su aplicación y se utiliza una cantidad relativamente<br />
pequeña de barniz. Pero es necesario tener cuidado de<br />
no aplicarlo en tejidos gingivales sangrantes porque<br />
existe el riesgo de alergia.<br />
Vías de administración de flúor<br />
Consisten en la forma tópica y la sistémica.<br />
Aplicación tópica (local)<br />
La aplicación tópica de flúor tiene por funda mento<br />
intervenir en el proceso de desmineralización y remineralización,<br />
así como propiciar la maduración del esmalte<br />
después de la erup ción dental. Cuando el diente<br />
hace erupción, el esmalte capta flúor de la saliva, el
196 Capítulo 9<br />
agua y los alimentos, con lo cual continúa su proceso<br />
de maduración y se vuelve más resistente a la ca ries;<br />
por esta razón, en los primeros años de edad se indica<br />
la aplicación tópica de fluoruros en concentraciones<br />
más altas. Por otra parte, cuando hay lesión de caries<br />
inicial o mancha blanca, el esmalte se vuelve poroso y<br />
acumula más flúor que el esmalte sano.<br />
El flúor acidificado y adicionado con fosfatos tiene<br />
mejores resultados porque inhibe la pér dida de los<br />
mismos y la reacción se dirige hacia la formación de<br />
hidroxiapatita y fluorapatita. Asimismo, la administración<br />
constante de fluo ruros en bajas concentraciones<br />
inhibe la produc ción de ácido por los microorganismos<br />
de la placa dentobacteriana y promueve la<br />
remi neralización de las manchas blancas; por tanto,<br />
se recomienda su uso rutinario en dentífricos y colutorios.<br />
Aplicación tópica profesional<br />
La aplicación tópica profesional tiene la venta ja de incluir<br />
el examen periódico del paciente y así es posible<br />
diagnosticar las enfermedades de manera temprana.<br />
Se realiza en instituciones públicas de manera gratuita<br />
o en instituciones privadas, y durante el procedimiento<br />
se utili zan soluciones, geles y barnices.<br />
Los pasos para la aplicación son los siguien tes:<br />
1. Profilaxis cuidadosa en la superficie de los dientes<br />
mediante pasta abrasiva y cepi llos o discos de<br />
hule. Se eliminan restos de materia alba, mucina<br />
o placa bacteriana.<br />
2. Las piezas dentales se aíslan para evitar la humedad,<br />
y para ello se utilizan rollos de al godón<br />
fijados por un portarrollos. El rollo debe proteger<br />
también la mucosa gingival. En la arcada<br />
inferior, los rollos se colocan en las superficies<br />
vestibular y lingual; en la arcada superior, sólo se<br />
aplican en la superfi cie vestibular.<br />
3. Una vez aislado el diente, se seca su superfi cie<br />
con la jeringa de aire de la unidad de tra bajo. De<br />
este modo se deshidrata ligeramen te la superficie<br />
adamantina y se facilita la absorción del fluoruro.<br />
4. La corona dental se cubre con una torunda de<br />
algodón impregnada de la solución de fluoruro.<br />
No deben utilizarse instrumentos metálicos.<br />
5. Si se utiliza gel, éste se coloca en cucharillas individuales,<br />
las cuales se llenan aproxima damente<br />
hasta la mitad y luego se colocan en la arcada correspondiente,<br />
reteniéndolas ahí durante cuatro<br />
minutos (figs. 9-27 y 9-28). En el caso de niños<br />
pequeños, el gel puede aplicarse de manera directa<br />
con un hi sopo (fig. 9-29).<br />
6. Después de aplicar soluciones con fluoruro, es<br />
necesario esperar por lo menos 30 segun dos antes<br />
de quitar los rollos de algodón, para evitar<br />
que la saliva se ponga en contacto con la superficie<br />
dental.<br />
7. Por último, es indispensable no enjuagarse la<br />
boca, ni ingerir líquidos o alimentos du rante<br />
la hora siguiente a la aplicación.<br />
Fluoruros de autoaplicación<br />
Tienen baja concentración de fluoruro y son de uso<br />
frecuente, aunque en los niños se requiere supervisión<br />
porque existe riesgo de ingestión o la posibilidad de<br />
uso inadecuado.<br />
Dentífricos fluorurados. Constituyen el vehícu lo de<br />
administración de fluoruros de mayor uso en el mundo.<br />
Su eficacia se debe a: facilidad de uso, bajo costo y<br />
promoción de sus ventajas por los fabricantes a través<br />
de los medios de difusión.<br />
Las fórmulas más utilizadas para dentífricos contienen<br />
fluoruro de sodio, monofluorofosfato o ambos.<br />
El fluoruro de sodio es altamente ionizable y por ello<br />
Figura 9-27. Aplicación tópica profesional de fluoruro<br />
en gel, el cual se coloca en cucharillas<br />
individuales.
Medidas preventivas en odontología 197<br />
Figura 9-28. Se colocan las cucharillas en la arcada correspondiente con fluoruro en gel.<br />
Figura 9-29. En el caso de niños pequeños, el fluoruro en gel puede aplicarse directo mediante un hisopo.
198 Capítulo 9<br />
se vuelve activo tan pronto como se introduce en la<br />
boca; en cambio, el fluoruro del monofluorofosfato se<br />
libera por hidrólisis enzimática de la molécula durante<br />
el cepillado, al actuar las fosfatasas presentes en la<br />
placa bacteriana y la saliva.<br />
Los diversos fluoruros, de acuerdo con nu merosos<br />
estudios, son igual de eficaces para disminuir la incidencia<br />
de caries, aunque el me canismo de acción es<br />
diferente.<br />
El monofluorofosfato es más útil para dis minuir o<br />
frenar la desmineralización durante periodos prolongados<br />
de exposición a pH bajo. El fluoruro de sodio es<br />
más eficaz en la remineralización de las lesiones.<br />
Las lesiones tratadas con monofluorofosfato son<br />
superficiales, planas y más mineralizadas, en tanto<br />
que las tratadas con fluoruro de sodio son más profundas<br />
y presentan una gruesa capa superficial de mayor<br />
mineralización.<br />
La combinación de monofluorofosfato con fosfato<br />
de calcio dibásico (DCPD) tiene la ven taja de prevenir<br />
la disminución del pH en la placa bacteriana, así<br />
como de permitir mayor incorporación de flúor en el<br />
esmalte al aumen tar la concentración de Ca ++ y F − en<br />
la saliva.<br />
El xilitol tiene efecto anticaries por los si guientes<br />
mecanismos: inhibe la producción de ácidos por los<br />
microorganismos; inhibe el crecimiento de Streptococcus<br />
mutans y Streptococcus sobrinus, y estimula la<br />
secreción salival, con lo cual promueve la remineralización.<br />
El triclosán es un agente antibacteriano com patible<br />
con los otros ingredientes de los dentífri cos y enjuagues<br />
fluorurados. Si se combina con un copolímero,<br />
como PVM/MA, mejora su efecto anticaries.<br />
La cantidad de dentífrico a utilizar en los niños<br />
debe ser muy pequeña (igual al tamaño de la uña del<br />
dedo meñique), ya que los niños de dos a cuatro años<br />
ingieren más o menos 35% del dentífrico y los de cinco<br />
a siete años el 14%.<br />
Si después del cepillado se hacen enjuagues bucales<br />
abundantes o con mucha agua, se dis minuye la eficacia<br />
del fluoruro, por lo cual debe disminuirse al mínimo<br />
el enjuague.<br />
Enjuagues fluorurados. Hay enjuagues con fluoruro<br />
de sodio a 0.05% (225 ppm F − ) para uso diario.<br />
Después del cepillado noctur no se hace un enjuague<br />
bucal con 10 ml del enjuague (6 a 7 ml para niños)<br />
durante 30 a 60 segundos y luego se escupe. No deben<br />
deglutirse; por esta razón no se recomiendan en niños<br />
menores de seis años. De los seis a 12 años de edad, los<br />
adultos deben supervisar su uso.<br />
Se recomiendan en:<br />
• Pacientes con disminución de la salivación y aumento<br />
de la formación de caries.<br />
• Pacientes con aplicaciones de ortodoncia o prótesis<br />
movibles.<br />
• Pacientes incapaces de lograr una higiene oral aceptable.<br />
• Pacientes con recesión gingival y susceptibles a la<br />
ca ries radicular.<br />
• Pacientes con rehabilitación oral extensa y múltiples<br />
márgenes restaurados.<br />
• Pacientes con caries irrestricta o rampante. El enjuague<br />
debe ser diario.<br />
Hilo dental fluorurado. En los últimos años se ha<br />
promovido el uso de hilo dental impregna do con fluoruro,<br />
por su eficacia para disminuir Streptococcus mutans.<br />
Los pacientes con alto riesgo de caries pue den utilizar<br />
geles con fluoruro mediante cepillo o cubetas.<br />
Toxicología del fluoruro<br />
La dosis mortal promedio es de 4 a 5 g, pero se prefiere<br />
considerar 5 mg/kg de fluoruro ingerido.<br />
Si la cantidad ingerida es menor, en el consultorio<br />
se administra calcio, aluminio o magnesio.<br />
La toxicidad del fluoruro es la siguiente:<br />
•<br />
Cuando una sal de fluoruro concentrada entra en<br />
contacto con la piel húmeda o mucosa se forma<br />
ácido fluorhídrico que produce quemaduras. Las<br />
lesiones son rojizas al principio pero después se tornan<br />
tumefactas y pálidas, seguidas por ulceración y<br />
necrosis.<br />
Si se ingiere en forma excesiva, el ácido fluorhídrico<br />
que se forma en el estómago provoca náusea y<br />
vómito.<br />
Inhibe los sistemas enzimáticos.<br />
Enlaza el calcio necesario para la actividad del sistema<br />
nervioso y hay tetania.<br />
Produce hiperpotasemia, la cual afecta al corazón.<br />
•<br />
•<br />
•<br />
•
Medidas preventivas en odontología 199<br />
Tratamiento<br />
J.M. Payless y N.C. Tinanolf (Diagnosis and treatment<br />
of acute fluoride toxicity, J Am Dent Assoc, 1985,<br />
110:209-211) recomiendan lo siguiente:<br />
• Menos de 5 mg/kg:<br />
Administrar calcio por vía oral (leche) y observar<br />
durante algunas horas.<br />
• Más de 5 mg/kg:<br />
1. Vaciar el estómago por inducción del vómito con<br />
eméti cos. Si hay depresión del reflejo nauseoso<br />
por la edad, síndrome de Down o retraso mental<br />
severo, entre otros, en vez de inducir la emesis se<br />
debe practicar lavado gástrico previa intubación<br />
endotraqueal.<br />
2. Administrar por vía oral calcio soluble (leche,<br />
gluconato de calcio a 5% o solución de lactato de<br />
calcio.<br />
3. Mantener en observación hospitalaria durante<br />
algunas ho ras.<br />
• Más de 15 mg/kg:<br />
1. Hospitalizar de inmediato.<br />
2. Inducir el vómito.<br />
3. Vigilar las ondas T, así como los intervalos QT<br />
(en el electrocardiograma).<br />
4. Administrar por vía intravenosa 10 ml de solución<br />
de gluconato de calcio a 10%. Si aparece<br />
tetania o se prolonga el intervalo QT se administran<br />
dosis adicionales.<br />
5. En caso necesario, se administran diuréticos.<br />
6. Si se presenta estado de choque (shock), tratarlo.<br />
Suministro sistémico de flúor<br />
Durante el proceso de formación y maduración del<br />
diente, parte del flúor de los líquidos tisulares se incorpora<br />
en la estructura cristalina del esmalte y da<br />
lugar a la formación de fluorapatita y fluorhidroxiapatita<br />
en pequeñas cantidades. Esto sucede cuando<br />
las personas beben agua con flúor. Por esa razón, la<br />
fluoruración del agua se considera la medida más eficaz<br />
y económica para prevenir la caries.<br />
La concentración óptima de fluoruro varía según<br />
la temperatura. En zonas con altas tem peraturas se<br />
bebe más agua, y por consiguien te el agua debe tener<br />
menor cantidad que en regiones con temperaturas<br />
más bajas. Por ejem plo: a 10.9°C, el contenido óptimo<br />
es de 1.22 ppm, y a 28°C, de 0.7 ppm.<br />
Por lo general se utilizan fluoruro de so dio y silicofluoruro<br />
de sodio, que se agregan en las plantas potabilizadoras<br />
que abastecen de agua a las poblaciones;<br />
para ello se usan equi pos automáticos que logran una<br />
concentración de 1 mg/L de agua, es decir, 1 ppm.<br />
Las ventajas de la administración sistémica de flúor<br />
son las siguientes:<br />
1. No requiere participación activa del paciente.<br />
2. Toda la comunidad se beneficia, sin impor tar el<br />
estrato socioeconómico y educacional, la motivación<br />
individual ni la presencia o au sencia del<br />
especialista.<br />
3. Mientras se consuma el agua, mejora la sa lud<br />
bucal al disminuir la prevalencia de ca ries dental.<br />
4. Los tratamientos dentales (por caries) son más<br />
sencillos.<br />
5. Disminuye la osteoporosis en mujeres ma duras.<br />
Igual que la aplicación tópica, la adminis tración<br />
sistémica de flúor también tiene desven tajas, pues no<br />
toda el agua de consumo es fluorurada; sin embargo,<br />
existen otras alternativas:<br />
1. Adición de flúor a la sal.<br />
2. Adición de flúor a la leche, aunque no todos los<br />
niños la consumen.<br />
3. Fluoruración del agua de consumo en las escuelas.<br />
4. Tabletas y soluciones con flúor, las cuales de ben<br />
ser indicadas por el odontólogo.<br />
En 1977, durante el Primer Simposium In ternacional<br />
sobre Fluoruración de la Sal, y como resultado<br />
de los estudios realizados en Suiza, Hungría, España y<br />
Colombia, se llegó a la con clusión de que esta medida<br />
es eficaz y segura. Por tanto, en 1979, la Organización<br />
Panameri cana de la Salud y la Organización Mundial<br />
de la Salud recomendaron, en la resolución 39, el desarrollo<br />
de programas encaminados a la fluoruración<br />
de la sal de mesa. En México, en 1981 se decretó la<br />
fluoruración de la sal y en 1985 se determinó como<br />
acción prioritaria. Conside rando que el consumo diario<br />
de sal por cada persona es de 8 g, se adicionan 250
200 Capítulo 9<br />
partes de fluoruro de sodio por un millón de partes de<br />
sal.<br />
En México, la Ley General de Salud estable ce en el<br />
título XVII, en el artículo 943, que para coadyuvar a la<br />
prevención de la caries dental, la sal refinada yodatada<br />
para consumo domés tico contendrá, con la excepción<br />
que señale la Secretaría, 250 mg de flúor en la forma<br />
de fluoruro de sodio (NaF) por kilogramo; permitiéndose<br />
sólo una tolerancia de 50 mg, ya sea de más o de<br />
menos. En el artículo 949 dice:<br />
se exceptúa de fluorurar la sal refinada yoda tada<br />
que se destina para consumo de poblacio nes cuyo<br />
abasto de agua contenga 0.07 mg o más de flúor<br />
por litro. Al efecto, el gobierno de la entidad federativa<br />
correspondiente cuidará que exista esta correlación<br />
en el territorio res pectivo.<br />
Selladores de fosetas y fisuras<br />
La morfología de las fosetas y las fisuras, según se cree,<br />
favorece el depósito de residuos de ali mentos con el<br />
consiguiente desarrollo de bacterias, ya que las superficies<br />
afectadas no pue den cepillarse porque son más<br />
angostas que las cerdas más delgadas de los cepillos<br />
dentales. Al parecer, por esas razones las caries más<br />
fre cuentes en los niños son las oclusales, en fosetas<br />
y fisuras, la fluoruración del agua es menos efi caz en<br />
molares, y la aplicación tópica de flúor tiene menos<br />
efecto en fosetas y fisuras.<br />
Con base en los datos previos, Hyatt (1936) consideró<br />
que debería anticiparse a la caries preparando<br />
cavidades poco profundas en las superficies sanas susceptibles<br />
y obturándolas con amalgama.<br />
Otros investigadores han intentado propor cionar<br />
tratamiento mediante aplicación de diferentes sustancias<br />
tópicas en surcos y fosetas para aislarlos del<br />
ambiente. Las sustan cias más adecuadas fueron las<br />
resinas plásticas; sin embargo, se retenían por poco<br />
tiempo, y en consecuencia se consideró necesario recurrir<br />
al grabado ácido. Esta técnica consiste en aplicar<br />
ácido fosfórico para crear multiporosidades en el<br />
esmalte, ensanchar las estrías de Retzius y crear pequeñas<br />
penetraciones digitiformes en los prismas del<br />
esmalte; de ese modo, al aplicar posteriormente el sellador,<br />
éste puede penetrar en el esmalte.<br />
Algunos autores afirman que el sellador de fisuras<br />
es una de las técnicas de prevención más eficaces en la<br />
odontología moderna, ya que constituye una barrera<br />
de acción inmediata para proteger las zonas más susceptibles<br />
a la caries du rante la infancia.<br />
Características de un buen sellador<br />
Consisten en lo siguiente:<br />
1. Biocompatibilidad.<br />
2. Capacidad de retención sin necesidad de rea lizar<br />
manipulaciones irreversibles en el es malte.<br />
3. Dureza suficiente para resistir las fuerzas de la<br />
abrasión.<br />
4. Resistencia a la acción de las enzimas sali vales.<br />
Los selladores de glicidilo o bisfenol A y metacrilato<br />
de glicidilo (bis-GMA) se refuerzan con vidrio,<br />
porcelana o cuarzo; son autopolimerizables los que<br />
polimerizan por la adición de un catalizador justo<br />
antes de su aplicación, o fotopolimerizables los que<br />
están premezclados y polimerizan hasta que el catalizador<br />
se expone a un haz de luz ultravioleta (UV) o<br />
luz halógena a una distancia de dos a tres milímetros.<br />
El sellador endurece después de 30 a 90 segundos.<br />
Hay selladores translúcidos, blancos, amari llos y<br />
rosas. Por lo general, el sellador translú cido se selecciona<br />
por motivos estéticos, aun que los de color facilitan<br />
la revisión.<br />
Técnica de aplicación<br />
Los pasos a seguir para aplicar el sellador son los siguientes:<br />
1. Limpieza de los dientes. Los dientes seleccionados<br />
se limpian de manera minuciosa (molares<br />
permanentes y primarios, premo lares con puntos<br />
y fisuras o fosetas oclusales profundas) para<br />
permitir un mejor contacto con los materiales.<br />
Se utilizan cepillos para profilaxis y pasta con<br />
abrasivo, pero sin fluoruro porque éste puede<br />
hacer la superfi cie más resistente al grabado.<br />
2. Aislamiento de las superficies a sellar. Las caras<br />
destinadas al tratamiento deben aislarse con el<br />
fin de mantenerlas secas, pues la presen cia de<br />
humedad impide la adhesión del ma terial. Para
Medidas preventivas en odontología 201<br />
ello se utilizan rollos de algodón, los cuales tienen<br />
que remplazarse después de hacer el grabado.<br />
3. Grabado o acondicionamiento del esmalte. Se<br />
aplica por lo general ácido ortofosfórico al 37 a<br />
50% por medio de una torunda pequeña de algodón<br />
saturada o un pincel, y se es pera 60 segundos<br />
a que ejerza su acción; si el grabado se<br />
realiza en una pieza de primera dentición, es necesario<br />
aguardar dos minu tos. La superficie dental<br />
se enjuaga con una corriente de agua directa<br />
durante 15 segun dos y se vigila que el aspirador<br />
recoja toda el agua utilizada; es necesario secar<br />
con aire para comprobar si el grabado está completo,<br />
en cuyo caso la superficie se observa de<br />
co lor blanco opaco. Si el grabado es insuficien te,<br />
debe repetirse.<br />
4. Aplicación del sellador. Después de verificar el<br />
grabado y secado de la superficie, se colo ca el sellador<br />
elaborado con bisfenol y metacrilato de<br />
glicidilo (bis-GMA). Para ello se utiliza un pincel<br />
o un dispensador; téngase cuidado de que no<br />
haya burbujas de aire en el interior. El proceso<br />
de autopolimerización se activa mediante una<br />
fuente de luz ul travioleta.<br />
5. Verificación. Con un explorador se revisa que<br />
la superficie quede perfectamente cubierta y no<br />
dificulte la oclusión. De lo contrario, debe rebajarse<br />
con una fresa esférica.<br />
Eficacia del sellador<br />
Hay retención de 80 a 90% de los selladores durante<br />
el primer año, y 40 a 60% durante los siguientes seis<br />
años. El sellador por sí solo tie ne efecto complementario;<br />
por tanto, deben se guirse además las otras medidas<br />
preventivas.<br />
Indicaciones<br />
El mayor riesgo de caries se encuentra en pri meros y<br />
segundos molares, por lo cual se reco mienda aplicar<br />
el sellador cuando esos dientes ya han hecho erupción:<br />
entre los seis y siete años, y a los 12 a 13 años. El<br />
sellado se indica en pa cientes con desmineralización<br />
subsuperficial o con hipoplasia leve del esmalte. También<br />
pue den sellarse premolares cuando existe alta susceptibilidad<br />
a la caries.<br />
Contraindicaciones<br />
El sellador no debe aplicarse en áreas oclusales sin<br />
irregularidades marcadas ni en dientes con caries o<br />
con obturaciones.
Capítulo 10<br />
Introducción al método científico 203<br />
Introducción<br />
al método científico<br />
Conceptos generales<br />
La práctica odontológica actual requiere de la formación<br />
científica, ya que el profesional debe participar<br />
activamente en la búsqueda y re flexión del conocimiento<br />
científico.<br />
El conocimiento es la posesión de datos refe rentes<br />
a fenómenos materiales y espirituales, y puede ser<br />
de tres tipos básicos: popular, de di vulgación y científico.<br />
Los conocimientos populares son informacio nes<br />
como las de periódicos y revistas, las cua les tienen validez<br />
relativa.<br />
Los conocimientos de divulgación tienen tres características:<br />
1) incluyen las fuentes de informa ción; 2)<br />
las afirmaciones están sujetas a una críti ca razonada,<br />
y 3) no contienen informaciones ori ginales, ya que se<br />
recopilan de otras fuentes.<br />
Los conocimientos científicos constituyen ex plicaciones<br />
objetivas y confirmadas, pero en cualquier<br />
caso siem pre verificables, de los procesos existentes<br />
en el universo. Son informaciones nuevas, origina les y<br />
surgen de la observación directa; explican o predican<br />
un fenómeno concre to, siempre como resultado del<br />
razonamiento, el cual puede ser analógico, deductivo<br />
o induc tivo.<br />
El pensamiento analógico implica reconocer características<br />
o semejanzas comunes para lo grar otras<br />
proposiciones; el inductivo incluye generalizaciones<br />
de diversos puntos de datos específicos, y el deductivo<br />
requiere de la aplica ción de una o más generalizaciones<br />
de casos específicos.<br />
Conceptos de ciencia<br />
Eli de Gortari define la ciencia como la explica ción<br />
objetiva y racional del universo:<br />
Como explicación, la ciencia describe las di versas<br />
formas en que se manifiestan los proce sos existentes,<br />
distingue las fases sucesivas y coexistentes observadas<br />
en el desarrollo de los mismos procesos,<br />
desentraña sus enlaces in ternos y sus conexiones<br />
con otros procesos, pone al descubierto las acciones<br />
recíprocas en tre los procesos y encuentra las condiciones<br />
y los medios necesarios para permitir la intervención<br />
humana en el curso de los propios pro cesos.<br />
La ciencia, según el concepto de Bunge, es “el conocimiento<br />
racional, sistemático, exacto, verificable y<br />
por consiguiente falible” que permite al ser humano<br />
la reconstrucción conceptual del mundo; existen dos<br />
tipos de ciencias: tipo formal o ideal o bien fáctica o<br />
material.<br />
Las ciencias formales o ideales (p. ej., la lógica y la matemática)<br />
son racionales, sistemáticas y ve rificables;<br />
pero no son objetivas porque no dan información<br />
acerca de la realidad. Construyen sus propios objetos<br />
de estudio, los cuales no son cosas ni procesos. Sus<br />
enunciados consisten en relaciones entre signos y<br />
demuestran sus teore mas por medio de la lógica; sin<br />
embargo, ayu dan a la física, la química, la fisiología, la<br />
psico logía y la economía, entre otras.<br />
Las ciencias fácticas o materiales tienen enun ciados<br />
relativos a sucesos y procesos. Requie ren de la obser-
204 Capítulo 10<br />
vación, de la experimentación, o de ambas, para confirmar<br />
conjeturas; propor cionan conocimiento de la<br />
naturaleza y de la sociedad, y sus rasgos esenciales son<br />
la racionalidad y la objetividad.<br />
El conocimiento racional tiene las siguientes características:<br />
está constituido por conceptos, juicios<br />
y raciocinios; las ideas se combinan con forme algún<br />
conjunto de reglas lógicas, con el fin de producir nuevas<br />
ideas (inferencia deduc tiva), y por último las ideas<br />
se organizan en conjuntos ordenados de proposiciones<br />
o teorías.<br />
La objetividad de las ciencias fácticas o mate riales<br />
se debe a que éstas buscan alcanzar la verdad fáctica<br />
y verifican la adaptación de las ideas a los hechos por<br />
medio de la observación y la ex perimentación, lo cual<br />
les permite controlar y de esta manera reproducir los<br />
hechos.<br />
En términos generales, la ciencia fáctica es:<br />
1. Fáctica. Se construye a partir de los hechos e intenta<br />
describirlos.<br />
2. Trascendente. Es decir, trasciende los hechos, los<br />
descarta, produce nuevos y los explica. Esto significa<br />
que el científico selecciona hechos importantes<br />
según su criterio, los controla y reproduce<br />
e incluso produce co sas nuevas, como compuestos<br />
químicos, variedades animales y vegetales o<br />
pautas de conducta individual y social.<br />
3. Analítica. Al abordar un problema trata de descomponerlo<br />
en todas sus partes para descubrir<br />
las relaciones que existen entre ellas.<br />
4. Especializada, aunque existen campos interdisciplinarios,<br />
como la biofísica, la bioquí mica,<br />
la psicología social, etcétera.<br />
5. Clara y precisa, por las siguientes razones:<br />
A. Los problemas se formulan con claridad.<br />
B. Parte de nociones claras.<br />
C. Define la mayoría de sus conceptos.<br />
D. Crea lenguajes especiales, por ejemplo, palabras,<br />
signos matemáticos y símbo los químicos.<br />
E. Procura medir y registrar los fenómenos.<br />
6. Comunicable. Esto a su vez constituye una condición<br />
necesaria para la verificación de los datos.<br />
7. Verificable.<br />
8. Metódica, porque requiere un planteamiento.<br />
9. Sistemática. Es un sistema de ideas conecta das<br />
lógicamente entre sí.<br />
10. General. Ubica los enunciados particulares en<br />
esquemas amplios.<br />
11. Legal. Busca las leyes de la naturaleza y de la cultura<br />
y las aplica.<br />
12. Explicativa. Intenta explicar los hechos en términos<br />
de leyes y las leyes en términos de principios.<br />
13. Predictiva. Pone a prueba las hipótesis. Se imagina<br />
cómo pudo haber sido el pasado y cómo<br />
podrá ser el futuro.<br />
14. Abierta. No conoce barreras que limiten el conocimiento;<br />
se sabe que los postulados pueden<br />
corregirse o remplazarse.<br />
15. Útil, porque busca la verdad.<br />
Método científico<br />
La ciencia posee un método para descubrir la verdad.<br />
El método es la manera razonada de conducir los procesos<br />
del pensamiento con ob jeto de llegar a un resultado<br />
determinado, y preferentemente descubrir la<br />
verdad.<br />
El método científico es un procedimiento for mado<br />
por una secuencia lógica de actividades, que mediante<br />
el raciocinio y la comprobación procura descubrir las<br />
características de los fe nómenos, las relaciones internas<br />
entre sus ele mentos y las conexiones de éstos con<br />
otros fenómenos. Aquí, los conocimientos previos<br />
son el punto de partida para llegar a conocimientos<br />
nuevos. Este método científico se utiliza en las ciencias<br />
formales cuyos conocimientos se refie ren a entes<br />
abstractos (p. ej., la lógica matemá tica), así como en<br />
las ciencias fácticas cuyos conocimientos se refieren<br />
a sucesos, procesos y objetos que existen fuera de la<br />
mente humana (p. ej., la biología y la física).<br />
Las etapas del método científico son la ob servación,<br />
el planteamiento del problema, el planteamiento de la<br />
hipótesis, la prueba de la hipótesis, y la introducción<br />
de las conclusiones en la teoría.<br />
Observación<br />
Ésta ha constituido el punto de partida de mu chas<br />
investigaciones; por ejemplo, Fleming ob servó que el<br />
hongo Penicillium notatum inhibía el crecimiento de
Introducción al método científico 205<br />
un cultivo de estafilococos. Su observación fue metódica<br />
y reflexiva, para lo cual requirió de dos elementos:<br />
1. La sensopercepción, es decir, la percepción mediante<br />
los órganos de los sentidos.<br />
2. El aspecto mental, porque se necesita razonar,<br />
comparar los hechos, seleccionar los datos que<br />
inciden de manera constante en el fenómeno y<br />
aparecen como absolutamente nece sarios.<br />
Planteamiento del problema<br />
Si el fenómeno percibido no puede explicarse a partir<br />
de los conocimientos particulares, surge una pregunta<br />
o un problema que consta de tres fases:<br />
1. Reconocimiento de los hechos. Es necesario ha cer<br />
un examen del grupo de hechos, clasifi carlos y<br />
seleccionar los relevantes.<br />
2. Descubrimiento del problema. Es decir, el ha llazgo<br />
de la laguna o de la incoherencia en el cuerpo del<br />
saber.<br />
3. Formulación del problema. Esto es el planteamiento<br />
de una pregunta que tiene probabili dad<br />
de ser la correcta.<br />
Planteamiento de la hipótesis<br />
La hipótesis es la suposición que permite es tablecer<br />
relaciones entre hechos. En otras pa labras, es un sistema<br />
de juicios, conceptos y razonamientos sintetizados<br />
y ordenados con el propósito de explicar el fenómeno<br />
a investigar. Para ello se requiere:<br />
1. Seleccionar los factores teóricos relativos al problema.<br />
Siempre se debe partir del cono cimiento<br />
de los fenómenos de la naturaleza y de la sociedad<br />
y del conocimiento ordena do en forma de<br />
leyes y teorías.<br />
2. Formulación de las hipótesis, es decir, pro puesta<br />
de las suposiciones que estén de acuerdo con los<br />
hechos observados.<br />
3. Traducción matemática, cuando sea posible.<br />
4. Deducción de consecuencias particulares, que<br />
pueden ser racionales, cuando se han probado<br />
en otros estudios, y empíricas, cuan do no se han<br />
verificado.<br />
Prueba de la hipótesis<br />
La comprobación de las hipótesis incluye las siguientes<br />
fases:<br />
1. Diseño de la prueba. Planteamiento de los medios<br />
para poner a prueba las predicciones, diseño<br />
de observaciones, mediciones, experimentos<br />
y demás operaciones instrumen tales.<br />
2. Ejecución de la prueba. Implica realizar operaciones<br />
y recolectar datos.<br />
3. Elaboración de los datos. Esto comprende clasificación,<br />
análisis, evaluación, etcétera.<br />
4. Inferencia de la conclusión. Interpretación de los<br />
datos elaborados a la luz del modelo teó rico.<br />
Introducción de las conclusiones<br />
a la teoría<br />
Al aplicar el método científico se pretende no sólo<br />
estudiar y encontrar respuesta al problema, sino también<br />
lograr que las hipótesis o postula dos teóricos se<br />
incorporen a los conocimientos existentes en el área<br />
de estudio. Aquí se inclu yen las siguientes fases:<br />
1. Comparación de las conclusiones con las predicciones.<br />
Los resultados de la prueba se con trastan<br />
con las consecuencias del modelo teó rico, por lo<br />
que se precisa en qué medida puede confirmarse<br />
o negarse dicho modelo teórico.<br />
2. Reajuste del modelo.<br />
3. Sugerencias acerca del trabajo ulterior. Si el mo delo<br />
ha sido rechazado, se buscan lagunas o errores<br />
en la teoría, en los procedimientos empíricos<br />
o en ambos; si se ha confirma do, se examinan<br />
las posibles extensiones y consecuencias en el<br />
saber.<br />
El conocimiento nuevo determina transfor maciones<br />
en la concepción del ser humano res pecto del universo,<br />
lo cual a su vez trae consigo cambios en las relaciones<br />
sociales que llevan al planteamiento de nuevos<br />
problemas. Por ejem plo, Semmelweiss, un médico<br />
vienés, demos tró por primera vez la eficacia de lavarse<br />
las manos con una solución antiséptica. Al trabajar<br />
en el Hospital General de Viena, observó que en<br />
el transcurso de un año hubo 451 muertes por fiebre<br />
puerperal (infección posterior al par to) en una sec-
206 Capítulo 10<br />
ción de maternidad y 90 en otra. Empezó a estudiar<br />
las posibles causas del aumento de mortalidad en la<br />
primera sección, la cual era atendida por alumnos que<br />
prac ticaban disecciones en cadáveres el día anterior a<br />
la asistencia de partos. Cuando un ayudante de Semmelweiss<br />
se hirió una mano en la sala de disección y<br />
murió con síntomas de fiebre puerperal, el médico se<br />
convenció de que las muertes mencionadas se debían<br />
a falta de limpieza. Así, en 1847, or denó a los estudiantes<br />
lavarse las manos muy bien y desinfectarlas<br />
con cloro antes de exami nar a las pacientes o atender<br />
un parto. Con esta medida el número de muertes de la<br />
sala de ma ternidad atendida por alumnos disminuyó<br />
de manera notable; en cambio, la mortalidad en la sala<br />
atendida por parteras se mantuvo inva riable.<br />
En conclusión, Semmelweiss, ante un proble ma,<br />
elaboró una hipótesis, la comprobó e inició los trabajos<br />
de asepsia y antisepsia, los cuales han experimentado<br />
modificaciones con el paso del tiempo.<br />
Relación del método científico<br />
con otros métodos<br />
Método clínico<br />
El método clínico es una forma de pensamiento aplicada<br />
al individuo sano o enfermo, con el propósito<br />
de establecer un diagnóstico y en caso de enfermedad<br />
fundamentar un pronóstico e instituir un tratamiento<br />
para que el individuo recupere la salud.<br />
El diagnóstico es la identificación de la enfer medad<br />
con base en los signos y los síntomas. El signo es una<br />
manifestación objetiva y el odontólogo puede reconocerlo<br />
(p. ej., el cambio de coloración del diente); por lo<br />
contrario, el síntoma es subjetivo (p. ej., el dolor).<br />
El odontólogo necesita conocer la anatomía y la fisiología<br />
normales para formular el diagnóstico, pues<br />
de lo contrario es imposible saber cuándo está alterado<br />
algún órgano. Tam bién debe conocer la etiología,<br />
es decir, las causas de la enfermedad, así como la patogenia<br />
o sea la manera en que dichas causas actúan<br />
para alte rar la salud.<br />
Los métodos, los procedimientos, las técni cas o los<br />
recursos del método clínico son bási camente el interrogatorio,<br />
la inspección, la palpación, la percusión y<br />
la auscultación; en caso necesario, se complementa<br />
con exámenes de laboratorio y gabinete (como los rayos<br />
X; cua dro 10-1).<br />
Interrogatorio<br />
El interrogatorio o anamnesis es la primera parte del<br />
método clínico. Consiste en formular al pa ciente o<br />
a terceras personas una serie de preguntas lógicas y<br />
ordenadas con el fin de inves tigar hechos, circunstancias<br />
y datos referentes al presente y pasado de la salud<br />
o de la enfer medad, tanto del individuo como de sus<br />
fami liares.<br />
Este método es difícil de llevar a cabo por que implica<br />
no sólo la habilidad mental para formular la<br />
pregunta, sino conocimientos fundamentales de patología,<br />
clínica y terapéutica. Quien lleva a cabo el interrogatorio<br />
debe utili zar la inteligencia, el raciocinio<br />
y la palabra.<br />
El interrogatorio puede ser directo cuando las preguntas<br />
se dirigen al paciente, o indirecto, cuando se<br />
interroga a terceras personas debido a las condiciones<br />
muy especiales del paciente, por ejemplo, muy corta<br />
edad, senilidad, demen cia, heridas graves, sordera<br />
o mudez. El interrogatorio indirecto es incompleto<br />
y muchas veces inexacto, porque las terceras personas<br />
modifican los datos al aumentarlos, disminuir los<br />
o deformarlos.<br />
En general, el interrogatorio enfoca primero el padecimiento<br />
actual y el estado de los demás órganos y<br />
sistemas, y luego los antecedentes individuales y familiares<br />
del paciente.<br />
Respecto del estado actual es indispensable averiguar:<br />
1. Padecimiento actual. Lo primero que se inte rroga<br />
es el padecimiento actual, esto es, los síntomas<br />
del paciente:<br />
A. Noción del tiempo. Es importante conocer la<br />
fecha de inicio de la enfermedad, para saber<br />
si se trata de una enfermedad aguda o crónica.<br />
B. Noción de sitio. La localización del síntoma<br />
puede orientar respecto al órgano o estructura<br />
afectados.<br />
C. Noción de causa, cuando es posible. Si se trata<br />
de un traumatismo, se investiga cuál fue el<br />
agente traumático y el mecanismo.
Introducción al método científico 207<br />
Cuadro 10-1. Paralelismo entre el método clínico y el método epidemiológico.<br />
En ambos métodos se siguen los mismos pasos<br />
Parámetros de comparación Método clínico Método epidemiológico<br />
Sustrato Individuo sano o enfermo Comunidad sana o enferma<br />
Antecedentes<br />
Interrogatorio del padecimiento actual, y<br />
Antecedentes del área a partir de varias fuentes<br />
antecedentes individuales y familiares<br />
Examen<br />
Exploración física (inspección, palpación,<br />
percusión, auscultación). Pruebas de laboratorio<br />
Inspección del área en general y en particular<br />
respecto de determinados servicios<br />
y gabinete<br />
Laboratorio Pruebas de sangre, orina, etc. Pruebas de agua, alimentos, etc.<br />
Hipótesis Diagnóstico clínico Hipótesis epidemiológica<br />
Conclusión diagnóstica Diagnóstico definitivo Diagnóstico epidemiológico<br />
Medidas<br />
Tratamiento (medicamentos, dieta, intervención Medidas de control<br />
quirúrgica, etc.)<br />
Alta Clínica, por mejoría del enfermo Epidemiológica, por eliminación de la causa<br />
Registro de la acción efectuada Historia clínica y evolución Ficha epidemiológica e informe<br />
Compensación económica Honorarios cobrados al paciente Sueldo cobrado a la comunidad<br />
D. Tribuna libre. En ésta el paciente relata con sus<br />
propias palabras las características y evolución<br />
de la enfermedad.<br />
E. Síntomas y signos no mencionados por el<br />
paciente, pero que pueden ayudar al diagnóstico.<br />
F. Semiología de los síntomas y signos. Es de cir, estudio<br />
detallado de cada signo y sín toma para<br />
darle categoría diagnóstica; por ejemplo, el dolor<br />
es constante, o se pre senta al estar en contacto<br />
con sustancias frías o calientes, etcétera.<br />
2. Estado de los demás órganos y sistemas:<br />
A. Sistema digestivo.<br />
B. Sistema respiratorio.<br />
C. Sistema angiológico o circulatorio.<br />
D. Sistema genitourinario.<br />
E. Sistema óseo, muscular y articular.<br />
F. Sistema nervioso.<br />
G. Órganos de los sentidos.<br />
H. Función psicointelectual y sexual.<br />
I. Sistema endocrino.<br />
3. Síntomas generales. Como pérdida de peso, fiebre,<br />
debilidad, etcétera.<br />
4. Terapéutica empleada. Es necesario interrogar<br />
acerca del tratamiento que ha recibido el paciente.<br />
5. Antecedentes:<br />
A. Personales no patológicos. Son todas las circunstancias<br />
o los hechos comunes en to dos los<br />
individuos, pero al mismo tiempo diferentes<br />
entre ellos. Por esa razón, ac túan de modo especial<br />
para preparar o modificar al organismo<br />
hacia ciertas enfermedades. Algunos factores<br />
determi nan la tendencia hacia ciertas enfermedades;<br />
entre ellos, edad, ocupación y lugar<br />
de nacimiento, así como lugares de residencia.<br />
También es necesa rio interrogar acerca de los<br />
hábitos y las condiciones de higiene.<br />
B. Personales patológicos. Se incluye información<br />
de las enfermedades sufridas por el paciente<br />
desde la etapa prenatal (p. ej., enfermedades<br />
de la madre durante el embarazo)<br />
hasta la actualidad.<br />
C. Hereditarios y familiares. Se refieren a las enfermedades<br />
o estados desfavorables en los<br />
progenitores que pueden transmitirse a la<br />
descendencia. Algunos padecimientos, aunque<br />
no son hereditarios, se presentan con más<br />
frecuencia; por ejemplo, la hipertensión arterial<br />
y algunos tipos de cáncer, entre otros.<br />
Examen físico<br />
Comprende el conjunto de procedimientos o métodos<br />
de exploración clínica que se aplican al paciente una
208 Capítulo 10<br />
vez interrogado. Se realiza con el propósito de obtener<br />
mayor información o confirmar la obtenida en<br />
el interrogatorio, y consta de: inspección, palpación,<br />
percusión y auscultación.<br />
Inspección<br />
Es el método de exploración clínica que se prac tica en<br />
primer lugar. Se lleva a cabo por medio de la vista con<br />
objeto de detectar signos.<br />
Palpación<br />
Es el método del examen físico posterior a la inspección.<br />
Consiste en explorar por medio del tacto las<br />
partes externas del cuerpo y las cavidades accesibles<br />
para apreciar las cualidades físicas, así como la sensibilidad<br />
de los tejidos. Corrobora los datos obtenidos<br />
por medio del interrogatorio y la inspección; además,<br />
puede oca sionar fenómenos nuevos que de otro modo<br />
no serían aparentes, como el dolor y los movimien tos<br />
anormales.<br />
Percusión<br />
La percusión es un método de exploración clí nica que<br />
se practica mediante golpes leves en una región determinada<br />
del cuerpo para obtener sonidos o ruidos,<br />
investigar dolor o producir movimientos.<br />
Auscultación<br />
Consiste en estudiar los ruidos normales o anormales<br />
que se producen en los diferentes órganos.<br />
Con base en los datos obtenidos por el méto do clínico,<br />
el odontólogo elabora una hipótesis, la cual es el<br />
diagnóstico clínico, de salud o de enfermedad de un<br />
individuo (para obtener ma yores detalles acerca del<br />
método clínico, con súltese: Higashida BYH. Ciencias<br />
de la salud. 6a. ed. México: McGraw-Hill Interamericana,<br />
2008).<br />
Método epidemiológico<br />
El método epidemiológico estudia de manera in tegral<br />
la distribución del proceso salud-enfer medad en la<br />
población, así como los factores que determinan o<br />
intervienen en ello (cuadro 10-1), con el fin de encontrar<br />
conocimientos téc nicos para eliminar o controlar<br />
las enfermeda des en una comunidad.<br />
Las etapas del método epidemiológico son la identificación<br />
del problema, la observación, el planteamiento<br />
de la hipótesis, la prueba de la hipótesis y la<br />
introducción de las conclusio nes en la teoría.<br />
Identificación del problema<br />
La frecuencia del proceso salud-enfermedad se estudia<br />
y compara en diferentes poblaciones de acuerdo<br />
con la epidemiología descriptiva. Ésta relata hechos o<br />
fenómenos sin explicar sus causas:<br />
1. Distribución en el lugar. Es decir, zonas o paí ses<br />
donde se presenta el proceso salud-en fermedad,<br />
así como las diferencias entre zo nas urbanas y<br />
rurales y entre pequeñas áreas.<br />
2. Distribución en el tiempo. Se toma en cuenta la<br />
estación del año, los días de la semana, las horas.<br />
3. Distribución en las personas de acuerdo con edad,<br />
sexo, raza, estado civil, ocu pación, escolaridad,<br />
estrato socioeconó mico, antecedentes, religión,<br />
hábi tos de vida, grado de nutrición, tiempo de<br />
exposición al riesgo, etcétera.<br />
Observación<br />
La observación puede ser: directa, según se va yan presentando<br />
los casos, o indirecta, cuando se utiliza información<br />
registrada u obtenida por bibliografía.<br />
Planteamiento de la hipótesis<br />
Las hipótesis existentes se examinan antes de formular<br />
otras nuevas, con el propósito de estable cer relaciones<br />
entre los posibles factores causales.<br />
La hipótesis epidemiológica implica especificar:<br />
1. Características de la población.<br />
2. Causa o factor causal de estudio.<br />
3. Efecto esperado.<br />
4. Relación entre la causa y el efecto.<br />
5. Tiempo para que la causa produz ca el efecto.<br />
En caso de desconocer las causas de la enfer medad<br />
es necesario investigar todas las altera ciones que ésta<br />
produce, así como las circunstancias en que ocurre.<br />
Prueba de la hipótesis<br />
La comprobación de la hipótesis puede hacer se a través<br />
de la experimentación, cuando es posible, y por
Introducción al método científico 209<br />
A<br />
B<br />
C<br />
E<br />
Conocimiento Problema Hipótesis Conocimiento<br />
C<br />
Consecuencia<br />
verificable<br />
D<br />
Diseño<br />
Método<br />
estadístico<br />
1. Recolección<br />
(medición)<br />
2. Recuento<br />
3. Presentación<br />
estadística<br />
4. Descripción<br />
estadística<br />
5. Análisis<br />
estadístico<br />
Parte<br />
de la<br />
realidad<br />
Figura 10-1. Etapas del método científico y su relación con el método estadístico.<br />
medio de la observación comparativa (epidemiología<br />
analítica) cuando la ex perimentación es imposible.<br />
Introducción de las conclusiones en la teoría<br />
Las hipótesis no eliminables y las verificadas se incorporan<br />
al cuerpo de conocimientos.<br />
Relación con el método estadístico<br />
Croxton y Cowden definieron la estadística como el<br />
método científico que se utiliza para recolectar, elaborar,<br />
analizar e interpretar datos relacionados con<br />
las características susceptibles de ser expresadas, numéricamente,<br />
de un conjunto de hechos, personas o<br />
cosas.<br />
El método estadístico es el conjunto de procedimientos<br />
desarrollados para ordenar y anali zar los<br />
datos numéricos afectados por una o múltiples causas.<br />
Asimismo, proporciona las técnicas para llevar a<br />
la práctica aquellas etapas del método científico que<br />
necesitan re colección y análisis de información (cap.<br />
12) (fig. 10-1).
Capítulo 11<br />
Epidemiología 211<br />
Epidemiología<br />
Definiciones<br />
El término epidemiología proviene de las vo ces griegas<br />
epi (sobre), demos (pueblo) y logos (tratado o estudio).<br />
MacMahon la definió como “el estudio de la<br />
distribución de la enfermedad y de las determinantes<br />
de su prevalencia en el hombre”.<br />
Según Frost, la epidemiología es<br />
…la ciencia que estudia los fenómenos que la enfermedad<br />
ocasiona en una gran masa de po blación,<br />
tanto en sus formas usuales o endé micas como en<br />
su carácter epidémico…<br />
Por otro lado, Gordon señaló que la epide miología<br />
es “el estudio de la enfermedad como fenómeno colectivo<br />
o de la masa” y “un amplio método biológico aplicable<br />
a toda enfermedad que envuelva a grupos humanos”.<br />
También Maxcy se ocupó de definirla como:<br />
…la rama de la ciencia médica que estudia las relaciones<br />
entre los diversos factores y condi ciones que<br />
determinan la frecuencia y distribución de un proceso<br />
infeccioso, enfermedad o estado fisiológico en<br />
una comunidad humana…<br />
Durante muchos años, la epidemiología se enfocó<br />
básicamente al estudio de las enferme dades infecciosas,<br />
aunque también se hicieron investigaciones acerca<br />
de enfermedades no in fecciosas como el escorbuto.<br />
Este padecimiento es ocasionado por falta de vitamina<br />
C, como lo comprobó Lind en 1753, y afectó a<br />
marinos que hacían viajes prolongados. Por su parte,<br />
Baker (1767) demostró que el cólico de los bebedores<br />
de sidra en Devonshire, Inglaterra, se debía a la acidez<br />
de la sidra y al plomo de los recipien tes en que dicha<br />
bebida se elaboraba y transportaba; la sidra se contaminaba<br />
con plomo y esto se manifestaba por vómito.<br />
En la actualidad, la epidemiología estudia todo tipo<br />
de enfermedades, incluso las degene rativas, como cáncer,<br />
diabetes, cirrosis hepática e infarto del miocardio,<br />
trastor nos mentales, padecimientos por traumatismos,<br />
consumo de fármacos o drogas, aborto, etcétera.<br />
Tipos<br />
La epidemiología puede ser descriptiva, analí tica o experimental,<br />
pero en realidad las tres constituyen fases<br />
del método epidemiológico (cap. 10).<br />
Descriptiva<br />
La epidemiología descriptiva recoge y relata he chos o<br />
fenómenos sin explicar sus causas. Como su nombre<br />
lo indica, describe las características de la enfermedad<br />
en la comunidad, es de cir, la manera en que se<br />
distribuye.<br />
Analítica<br />
La epidemiología analítica, además de describir los datos,<br />
trata de explicar su frecuencia y dis tribución, así<br />
como las condiciones que permi tieron su presencia.<br />
La explicación del fenómeno puede hacerse a partir<br />
de estudios comparati vos o combinando el método<br />
experimental.<br />
Si se desea comparar el fenómeno, se puede hacer<br />
a partir de un hecho ocurrido y con la in vestigación
212 Capítulo 11<br />
de los antecedentes de dicho fenó meno; a este estudio<br />
se le llama retrospectivo. También es posible hacer<br />
la comparación mediante un estudio prospectivo o<br />
longitudinal, el cual se realiza a medida que ocurre el<br />
fenóme no; es decir, se sigue la evolución de los casos<br />
expuestos a determinado acontecimiento, por ejemplo,<br />
la frecuencia de cáncer pulmonar en los fumadores.<br />
Experimental<br />
La epidemiología experimental puede ser planea da o<br />
accidental, ya sea en seres humanos o en animales.<br />
Al planearse la observación de un hecho, ya sea<br />
reproduciéndolo o modificándolo, es indis pensable<br />
plantear una hipótesis respecto de la causa y el efecto.<br />
Para ello es necesario tener un grupo “testigo” y un<br />
grupo de observación re presentativo.<br />
El estudio experimental no siempre puede realizarse<br />
en seres humanos porque es indis pensable considerar<br />
la ética profesional y con tar con gran número<br />
de individuos dispuestos a cooperar; sin embargo, la<br />
hipótesis puede ser válida para evaluar algunas medidas<br />
de pre vención (como las vacunas) o de control.<br />
Aplicaciones<br />
La epidemiología es de gran utilidad por las si guientes<br />
razones:<br />
1. Lleva a conocer los antecedentes de deter minada<br />
enfermedad en una comunidad y con ello es posible<br />
predecir el comportamien to futuro de dicha<br />
enfermedad.<br />
2. Permite investigar enfermedades en la población,<br />
sobre todo de los grupos más ex puestos,<br />
por ejemplo, mediante radiografías de tórax a<br />
personas que trabajan con gases tóxicos.<br />
3. El diagnóstico epidemiológico indica la presencia<br />
de salud o enfermedad en la comuni dad.<br />
En caso de enfermedad, es posible sa ber el número<br />
de personas afectadas, así como el origen<br />
del padecimiento, el modo de transmisión y su<br />
repercusión en la comunidad (los grupos más<br />
afectados y las carac terísticas de éstos).<br />
4. Permite estimar las probabilidades de cada individuo<br />
para enfermarse.<br />
5. Ayuda a completar o modificar el conoci miento<br />
de las características de las entida des patológicas.<br />
6. Permite investigar las causas que llevan a la salud<br />
o la enfermedad con el fin de planear medidas<br />
preventivas.<br />
7. Hace posible evaluar los resultados de algún tratamiento,<br />
o bien alguna campaña de vacunación<br />
o cualquier actividad correspondiente a los<br />
programas de salud pública que se estén realizando.<br />
8. En estudios experimentales permite investi gar la<br />
eficacia de algunos tratamientos.<br />
Estudio de la ocurrencia<br />
de enfermedades<br />
Variables epidemiológicas<br />
Se refieren a la persona, el lugar y el tiempo.<br />
Persona<br />
Edad<br />
En cada grupo de edad son más frecuentes de terminadas<br />
enfermedades; por ejemplo, las in fecciones respiratorias<br />
agudas en niños pequeños.<br />
Sexo<br />
El estudio comparativo de las causas de morta lidad<br />
por sexo permite observar diferencias. Los accidentes<br />
y el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida)<br />
son más frecuentes entre los varones. Asimismo, la<br />
depresión y los intentos de suicidio son más comunes<br />
entre muje res que entre varones; pero éstos, en particular<br />
los de edad avanzada, consuman más el suicidio.<br />
Raza<br />
Muchas enfermedades difieren en frecuencia, gravedad,<br />
o ambas, entre los diferentes grupos raciales.
Epidemiología 213<br />
Clase social<br />
La clase social se relaciona con ocupación, educación,<br />
lugar de residencia, ingresos económicos y, de hecho,<br />
estilo total de vida. A su vez, esto tiene que ver con la<br />
susceptibili dad a determinada enfermedad.<br />
Ocupación<br />
La fibrosis pulmonar es más frecuente entre los trabajadores<br />
expuestos al sílice. También se ha observado<br />
más cáncer de vejiga en trabajadores que están<br />
en contacto con colorantes de anilina. Asimismo, hay<br />
ocupaciones gene radoras de mucha tensión.<br />
Lugar<br />
La frecuencia de enfermedades puede tener relación<br />
con el lugar, debido a la existencia de condiciones ambientales<br />
particulares, como temperatura, humedad,<br />
precipitaciones pluviales, altitud, contenido de minerales<br />
del suelo, agua, etc. Por ejemplo, el esmalte de los<br />
dientes adquiere un color moteado cuan do el agua de<br />
consumo contiene mucho fluoruro.<br />
Las zonas rurales y urbanas mantienen diferencias<br />
en el tipo de enfermedades predomi nantes, dadas sus<br />
características. Por ejemplo, las zonas rurales tienen<br />
menos acceso a la edu cación, principalmente para<br />
la salud, y por esa razón hay mayor cantidad de enfermedades<br />
infecciosas y parasitarias; en cambio, las<br />
ciuda des presentan con más frecuencia problemas de<br />
salud ocasionados por la contaminación am biental,<br />
sobre todo por automóviles e in dustrias. Hay mayor<br />
número de casos con el síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida (sida) en las zonas urbanas, aunque ya<br />
empie za a expandirse a zonas rurales.<br />
Tiempo<br />
La frecuencia de las enfermedades registra va riaciones<br />
entre décadas, años, meses, semanas e incluso durante<br />
el día.<br />
Los cambios durante un largo periodo se lla man<br />
tendencias seculares. Por ejemplo, en Méxi co se han<br />
modificado las causas principales de mortalidad: en<br />
1922 predominaron las gastroen teritis, las neumonías<br />
y el paludismo, y también causó muchos estragos la<br />
viruela; en la actuali dad, los primeros lugares están<br />
ocupados por enfermedades del corazón, tumores<br />
malignos, diabetes mellitus y accidentes. Asimismo,<br />
el síndro me de inmunodeficiencia adquirida está tomando<br />
mayor importancia.<br />
Otras enfermedades se presentan por ciclos, ya sea<br />
anuales o incluso estacionales. De ese modo, en invierno<br />
predominan las enfermeda des respiratorias y<br />
en verano las gastrointesti nales.<br />
Indicadores de frecuencia<br />
de enfermedades<br />
La ocurrencia de enfermedades se conoce por medio<br />
de tasas (cap. 12), como la tasa de prevalencia y la de<br />
incidencia.<br />
Tasa de prevalencia<br />
La tasa de prevalencia se obtiene de la siguien te manera:<br />
Número de enfermos por una<br />
afección X, en una fecha dada,<br />
en un área determinada 100<br />
Prevalencia = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Cifra estimada de la población<br />
10 000<br />
para la misma fecha y la<br />
100 000<br />
misma área<br />
Tasa de incidencia o frecuencia<br />
Es el número de enfermos nuevos por una afec ción X<br />
en un tiempo dado y en un área deter minada. El valor<br />
correspondiente se obtiene de la siguiente manera:<br />
Número de enfermos nuevos<br />
por una afección X en un tiempo<br />
dado, en un área determinada<br />
100<br />
Incidencia = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Cifra estimada de la población<br />
10 000<br />
de la misma área para la mitad<br />
100 000<br />
del periodo considerado<br />
Existen términos que indican la repercusión de las<br />
enfermedades en una población y que todo el personal<br />
de salud debe conocer:<br />
Epidemia o brote epidémico. Es el aumento, fue ra de<br />
lo acostumbrado, del número de afecta dos por una
214 Capítulo 11<br />
enfermedad, en un tiempo preciso y una región determinada.<br />
Durante un brote epidémico conviene conocer la<br />
tasa de ataque, que se obtiene al divi dir el número de<br />
pacientes afectados por deter minada enfermedad en<br />
un lapso entre la canti dad de población expuesta a la<br />
enfermedad. Mientras la tasa de morbilidad se mide<br />
por un año, la tasa de ataque se refiere a la duración<br />
del brote epidémico.<br />
Pandemia. Es una epidemia que casi al mis mo<br />
tiempo alcanza grandes extensiones geográ ficas, por<br />
ejemplo, el síndrome de inmunodeficiencia adquirida.<br />
Endemia. Se refiere al número más o menos constante<br />
de afectados por determinada enfer medad en el<br />
transcurso de los años; por ejem plo, la tifoidea y las<br />
enfermedades diarreicas son enfermedades endémicas<br />
en México.<br />
Medidas de control<br />
En términos generales, las medidas de control se dirigen<br />
hacia las enfermedades transmisibles y se aplican<br />
en cualquier punto de la cadena epidemiológica<br />
(fig. 11-1).<br />
Enfermedades transmisibles<br />
Una enfermedad transmisible es cualquier pa decimiento<br />
causado por un agente infeccioso o sus productos<br />
tóxicos, que se transmite directa o indirectamente<br />
a una persona sana por una persona o animal<br />
enfermo o portador, o por con ducto de un huésped<br />
intermediario, de un vec tor o del medio ambiente.<br />
La enfermedad se transmite ante la existen cia<br />
obligada de diferentes condiciones: agen te causal,<br />
reservorio satisfactorio o foco de infección, huésped<br />
1. Agente causal<br />
específico<br />
2. Reservorio<br />
6. Susceptibilidad<br />
del huésped<br />
3. Puerta de salida<br />
del agente<br />
5. Puerta de<br />
entrada en el<br />
nuevo huésped<br />
4. Modo de<br />
transmisión<br />
del agente<br />
Figura 11-1. Cadena epidemiológica.
Epidemiología 215<br />
susceptible con puertas de entrada y salida accesibles<br />
para el pará sito (agente causal) y los medios apropiados<br />
para la transmisión del agente a otros hués pedes.<br />
Agente causal<br />
Los agentes causales de enfermedades transmi sibles<br />
son biológicos: bacterias, virus, hongos, parásitos o<br />
toxinas, o ambos.<br />
Reservorio o foco de infección<br />
Los reservorios de la infección son los seres humanos,<br />
los animales, las plantas, el suelo o la materia orgánica<br />
inanimada, donde el agente causal vive y se multiplica.<br />
El reservorio humano puede ser un caso clínico,<br />
un caso subclínico o un portador asintomático. Este<br />
último alberga agentes causales en su organismo y<br />
los disemi na sin presentar síntomas de enfermedad.<br />
El es tado de portador puede existir también durante<br />
el periodo de incubación (portador en incuba ción) o<br />
de convalecencia (portador convale ciente). En ambos<br />
casos, este estado puede ser breve (portador temporal<br />
o transitorio) o pro longado (portador crónico).<br />
Huésped susceptible<br />
El huésped susceptible es el organismo que no tiene<br />
defensas específicas contra determinado agente causal<br />
porque no ha estado en contacto con él o se encuentra<br />
debilitado por alguna cau sa o carece de inmunidad<br />
(cap. 5).<br />
Para que un agente biológico pueda pasar de un reservorio<br />
a otro huésped susceptible, di cho agente necesita<br />
encontrar la forma de salir, es decir, una vía de<br />
salida adecuada del reser vorio y una puerta accesible<br />
o vía de entrada en el huésped. Por lo general, las vías<br />
de salida y de entrada que se presentan a continuación<br />
son similares:<br />
1. Tracto gastrointestinal. Al ingerir alimentos contaminados<br />
con materia fecal que contie ne agentes<br />
biológicos se pueden adquirir enfermedades<br />
como disentería, cólera y helmintiasis, entre<br />
otras.<br />
2. Tracto respiratorio. Al hablar, toser o estornu dar,<br />
todas las personas diseminan gotas pequeñísimas<br />
de saliva llamadas gotas de Flügge; si éstas<br />
proceden de un reservorio con alguna enfermedad<br />
respiratoria (como la dif teria y la tuberculosis),<br />
al caer en la cara del huésped, los agentes<br />
causales pueden pe netrar en él a través del tracto<br />
respiratorio.<br />
3. Piel y mucosas. El contacto directo de piel y mucosas<br />
(como al tocar, morder, besar o tener relaciones<br />
sexuales) puede transmi tir infecciones<br />
de transmisión sexual y padecimientos de la piel,<br />
como la sarna y la tiña.<br />
4. La sangre. El paludismo se transmite por la picadura<br />
del mosquito Anopheles; la sífilis y el<br />
síndrome de inmunodeficiencia adquiri da, por<br />
transfusión de sangre contaminada, entre otros<br />
modos de transmisión.<br />
Los agentes causales biológicos que se eli minan<br />
por los tractos gastrointestinal y urinario entran por<br />
lo general por la boca, como en el caso de la fiebre<br />
tifoidea.<br />
Las vías de entrada y de salida no siempre corresponden<br />
al órgano afectado. Por ejem plo, el virus de<br />
la poliomielitis entra por la boca al ingerir agua o<br />
alimentos contaminados con materia fecal de algún<br />
enfermo, pero daña la médula espinal.<br />
Medios apropiados para la transmisión<br />
del agente a otros huéspedes<br />
Existen factores ambientales que favorecen la propagación<br />
de las enfermedades.<br />
Factores físicos<br />
La enfermedad puede transmitirse por contac to directo<br />
con la persona o indirectamente a tra vés de vehículos<br />
de transmisión, como el agua, la leche y otros<br />
alimentos.<br />
El vehículo de transmisión es cualquier sustan cia u<br />
objeto que sirve de intermediario entre un reservorio<br />
y un huésped susceptible.<br />
El agua contaminada puede transmitir diversas enfermedades<br />
como: fiebre tifoidea, paratifoidea, disentería<br />
y cólera. Algunos padecimientos, como la fiebre<br />
tifoidea, la paratifoidea, la tuberculosis y la brucelosis,<br />
pueden adquirirse por ingestión de leche contaminada<br />
durante el transporte o el almacenamiento, o por
216 Capítulo 11<br />
infección de mama en la mujer o en el animal que<br />
produce dicha leche.<br />
Otros alimentos transmisores son los vege tales,<br />
sobre todo cuando se riegan con aguas negras, y los<br />
mariscos criados en aguas con taminadas. La carne<br />
proveniente de animales parasitados es un medio de<br />
propagación de en fermedades como la triquinosis<br />
(cerdo) y la tularemia (conejo).<br />
Los objetos como la ropa, los utensilios y los juguetes<br />
pueden ser vehículos de transmisión (fómites).<br />
El aire puede servir para la transmisión de enfermedades<br />
infecciosas mediante la di seminación de aerosoles<br />
microbianos transportados hacia una puerta<br />
de entrada, por lo gene ral el tracto respiratorio.<br />
Los aerosoles microbianos son suspensiones aéreas<br />
de partículas constituidas en parte o en su totalidad<br />
por microorganismos. Algunas partículas permanecen<br />
suspendidas en el aire durante largos periodos;<br />
unas conservan su vi rulencia y otras la pierden; las de<br />
1 a 5 micras de diámetro penetran con facilidad en los<br />
alvéolos pulmonares y pueden permanecer en ellos.<br />
Por otro lado, el polvo y la tierra pueden te ner agentes<br />
causales como Clostridium tetani que produce tétanos,<br />
o larvas de Ancylostoma que pe netran por la piel<br />
de las personas descalzas y produce la uncinariasis.<br />
Factores biológicos<br />
Los insectos pueden actuar como vectores. Son los<br />
animales capaces de transportar y por consiguiente<br />
transmitir la enfermedad. La mayor parte de los vectores<br />
comprende insectos y artrópodos (como el piojo,<br />
la pulga, la chinche o la garrapata); transmiten agentes<br />
infecciosos al huésped, a partir de un caso clínico, un<br />
por tador asintomático o un reservorio. Pueden ac tuar<br />
de dos maneras:<br />
1. Mecánica. El agente infeccioso se traslada de manera<br />
mecánica al huésped por medio de un insecto<br />
reptante o volador, ya sea por contaminación<br />
con sus patas o su trompa con la suciedad,<br />
o porque pasa a través de su trac to gastrointestinal.<br />
Un ejemplo es la mosca.<br />
2. Biológica. Cuando los vectores actúan como<br />
huéspedes intermediarios; es decir, el mi croorganismo<br />
tiene parte del ciclo de su de sarrollo<br />
dentro del cuerpo del insecto y éste lo inocula<br />
al huésped, como sucede con el paludismo y la<br />
fiebre amarilla.<br />
Otros ejemplos de huéspedes intermediarios<br />
son el piojo, el pez y el cerdo. El piojo, al ser<br />
aplastado o al excretar, puede liberar la rickettsia<br />
capaz de penetrar en el huésped por alguna<br />
herida pequeña y transmite el tifus; el pez contaminado<br />
transporta la tenia del pescado (Dibothriocephalus<br />
latus), y el cerdo puede convertirse<br />
en huésped intermediario de Trichinella spiralis<br />
(agente causal de la tri quinosis).<br />
Factores sociales<br />
La pobreza, la falta de higiene personal, la vi vienda inadecuada,<br />
la ignorancia y la falta de atención médica<br />
favorecen la transmisión de enfermedades.<br />
Entre los factores accesorios se encuentran:<br />
1. Densidad de población. Cuando aumenta, también<br />
se incrementan las posibilidades de exponerse<br />
al agente causal.<br />
2. Algunas costumbres aumentan las posibilida des<br />
de adquirir enfermedades (p. ej., comer en sitios<br />
con poca higiene favorece el desa rrollo de infección<br />
gastrointestinal o parasitosis).<br />
3. Zona geográfica, estación del año y clima pue den favorecer<br />
la transmisión de ciertas en fermedades.<br />
Modos de transmisión<br />
Son los mecanismos por los cuales un agente infeccioso<br />
es transportado de un reservorio a un huésped<br />
susceptible. Éstos pueden ser:<br />
1. Contacto directo (excreciones o secreciones)<br />
o indirecto (al hablar, toser o estornudar). Por<br />
ejemplo, infecciones de transmisión se xual, infecciones<br />
respiratorias, meningitis, parotiditis,<br />
rabia, sarampión, tiña, tos ferina, varicela, tuberculosis,<br />
etcétera.<br />
2. Vehículo de transmisión como agua, alimentos, leche<br />
y sangre. Así sucede en amebiasis, dia rreas<br />
infecciosas, hepatitis infecciosa, parasitosis, salmonelosis,<br />
tuberculosis, triquino sis, etcétera.<br />
3. Vector. Por ejemplo, en fiebre amarilla, paludismo<br />
y rickettsiosis.<br />
4. Aire. Por ejemplo, en infecciones respiratorias,<br />
sarampión, varicela, tubercu losis, parasitosis.
Epidemiología 217<br />
Riesgo<br />
Riesgo y factores de riesgo<br />
El riesgo es la probabilidad de que un hecho ocurra.<br />
En otras palabras, es la medida de una probabilidad<br />
estadística de un suceso futuro. Por tanto, la probabilidad<br />
de consecuencias adversas aumenta en presencia<br />
de una o más características o factores determinantes<br />
de di chas consecuencias. El riesgo se enfoca con<br />
fi nes preventivos cuando se emprenden acciones para<br />
evitar o reducir una probabilidad cono cida, como la<br />
enfermedad, el accidente o la muerte.<br />
Con frecuencia, el riesgo se expresa como una tasa<br />
(cap. 12). Por ejemplo, si el riesgo de muer te perinatal<br />
fuera de 100 por cada 1 000 nacidos vivos, la tasa de<br />
mortalidad perinatal sería de 100 por cada 1 000 nacidos<br />
vivos. Con estos datos puede predecirse cuántos<br />
niños morirán entre las 28 semanas de gestación y los<br />
prime ros siete días posteriores al nacimiento, pero es<br />
imposible pronosticar quiénes morirán. Sin embargo,<br />
es posible revisar las características de las personas<br />
fallecidas y compararlas con las de los sobrevivientes<br />
para establecer diferen cias. Las características de los<br />
primeros son los factores de riesgo. Por lo anterior y<br />
de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud,<br />
el factor de riesgo (fig. 11-2):<br />
…es cualquier característica o circunstancia detectable<br />
en una persona o grupo de personas que se sabe<br />
asociada con aumento en la pro babilidad de padecer,<br />
desarrollar o estar espe cialmente expuesto a un proceso<br />
mórbido.<br />
Por otra parte, John M. Last considera que el término<br />
“factor de riesgo” se usa con tres con notaciones<br />
distintas:<br />
Un atributo o exposición que se asocia a una probabilidad<br />
mayor de desarrollar un resulta do específico,<br />
como la ocurrencia de una enfermedad; este atributo<br />
no necesariamente constituye un factor causal.<br />
Un atributo o exposición que aumenta la probabilidad<br />
de ocurrencia de una enfermedad u<br />
otro resultado específico.<br />
Un determinante que puede ser modificado por<br />
alguna forma de intervención, logrando dis minuir<br />
la probabilidad de ocurrencia de una enfermedad u<br />
otro daño específico a la salud; para evitar confusión,<br />
esta connotación debe ser referida como factor<br />
de riesgo modificable.<br />
Por tanto, los factores de riesgo pueden ser causas<br />
o indicadores, pero su importancia radi ca en que son<br />
observables o identificables antes de la ocurrencia del<br />
hecho que predicen.<br />
Proporción<br />
de la<br />
población<br />
Distribución<br />
de riesgo en<br />
una población<br />
A B C D E F<br />
1 2 3 4 5<br />
Bajo<br />
Escala de riesgo<br />
Alto<br />
Figura 11-2. Distribución de riesgo. Fuente: Oficina Regional de la OMS para Europa. Simposio sobre la Identificación de<br />
Personas de Alto Riesgo y Grupos de Población. Windsut. 1972. Copenhague: OMS, 1972 (EURO 4911).
218 Capítulo 11<br />
Los factores de riesgo pueden ser aquellos que<br />
caracterizan al individuo, la familia, el gru po, la comunidad<br />
o el ambiente. Por ejemplo, existen estudios<br />
que han demostrado que el primer embarazo, la alta<br />
paridad, un embara zo a edad reproductiva temprana<br />
o tardía, los abortos previos y la desnutrición son<br />
factores de riesgo universales, y estas características<br />
aumentan la probabilidad de patología perinatal. La<br />
combinación de estos y otros factores de riesgo en los<br />
mismos individuos incrementan aún más la probabilidad<br />
de experimentar daño a la salud, y pueden ser:<br />
1. Biológicos. Por ejemplo, ciertos grupos de edad,<br />
entre otros.<br />
2. Ambientales. Incluyen abastecimiento deficiente<br />
de agua potable, falta de adecuado siste ma de<br />
disposición de excretas, entre otros.<br />
3. De comportamiento. Por ejemplo, fumar.<br />
4. Relacionados con la atención a la salud. Entre ellos,<br />
calidad deficiente de la atención y co bertura insuficiente.<br />
5. Socioculturales. Por ejemplo, mala educación.<br />
6. Económicos. Aquí se incluyen bajos ingresos.<br />
La interacción de los factores de riesgo bio lógico,<br />
sumados a otros sociales y ambientales, aumenta el<br />
efecto aislado de cada uno de ellos. Por ejemplo, la<br />
multiparidad en mujeres que viven en extrema pobreza<br />
se relaciona con ries go de muerte perinatal mayor<br />
al esperado si se suman los efectos de la multiparidad<br />
y la po breza por sí solos.<br />
Factores de riesgo y daños a la salud<br />
La diferencia entre factores de riesgo y daños a la salud<br />
no necesariamente es clara, por ejem plo, en algunas<br />
ocasiones, la misma circunstan cia se califica<br />
como factor de riesgo por unos autores y como daño<br />
por otros, según la hipó tesis en exploración. Así sucede<br />
en el caso de desnutrición y bajo peso al nacer; este<br />
último es un daño a la salud si se estudia un embarazo<br />
patológico, pero constituye un factor de riesgo si se<br />
estudian la morbilidad y la mortalidad peri natal e infantil<br />
(OPS, 1986) (fig. 11-3).<br />
Por otro lado, Beaglehole y Bonita (Organi zación<br />
Panamericana de la Salud, OPS, 1994) clasifican los<br />
factores de riesgo en:<br />
1. Factores predisponentes. Entre otros se hallan<br />
edad, sexo o el padecimiento previo de un trastorno<br />
de salud, los cuales pueden crear un estado<br />
de sensibilidad hacia un agente causal de<br />
enfermedad.<br />
2. Factores facilitadores. Aquí se incluyen los ingresos<br />
económicos reducidos, el tipo de alimentación,<br />
la vivienda inadecuada y la asistencia<br />
médica insuficiente, que pueden fa vorecer el desarrollo<br />
de la enfermedad.<br />
3. Factores desencadenantes. Incluyen, por ejem plo,<br />
la exposición a un agente patógeno o nocivo específico,<br />
los cuales pueden relacio narse con la<br />
aparición de una enfermedad o estado patológico<br />
determinado.<br />
4. Factores potenciadores. Entre ellos se encuen tra<br />
la exposición repetida, la cual puede agra var una<br />
enfermedad ya establecida.<br />
Valoración del riesgo de caries<br />
y enfermedades periodontales<br />
Factores de riesgo<br />
Existen factores generales y locales para valo rar si<br />
existe o no riesgo de caries y de enferme dad periodontal.<br />
Los factores generales son:<br />
1. Socioeconómicos. Calidad de vida: vivienda, estabilidad<br />
laboral, ingresos, cobertura asistencial.<br />
2. Ambientales. El abastecimiento inadecuado de<br />
agua potable es factor de riesgo. Si la madre es<br />
reservorio de Streptococcus mutans influye en la<br />
infección temprana de los hijos.<br />
3. Culturales. Escolaridad, valoración de la salud<br />
bucal, creencias y costumbres (uso de biberón y<br />
chupones con miel, ingestión de azúcares, etc.).<br />
4. Biológicos. Rasgos genéticos (discapacidades),<br />
radioterapia, enfermedades sistémicas trata das<br />
con medicamentos que alteran el flujo salival (p.<br />
ej., xerostomía) o los tejidos pe riodontales (p. ej.,<br />
dilantina), estado nutricio, estado inmunitario,<br />
estrés, enfermedades intercurrentes. Con respecto<br />
a la edad, la ca ries es más frecuente durante<br />
la niñez y la adolescencia, y la enfermedad
Epidemiología 219<br />
A. Pobreza<br />
B. Analfabetismo de la<br />
madre<br />
C. Nutrición defi ciente<br />
D. Enfermedades<br />
recurrentes<br />
Bajo peso<br />
al nacer<br />
El niño desarrolla gastroenteritis<br />
A. Pobreza<br />
B. Bajo peso al nacer<br />
C. Analfabetismo de la<br />
madre<br />
D. Destete prematuro<br />
E. Agua contaminada<br />
Gastroenteritis<br />
El niño enfermo muere<br />
A. Pobreza<br />
B. Bajo peso al nacer<br />
C. Gastroenteritis<br />
D. Analfabetismo de la<br />
madre<br />
E. Rehidratación tardía<br />
Muerte<br />
Factores de riesgo<br />
Daños<br />
Figura 11-3. Factores de riesgo y daños para la salud relacionados. El feto se convierte en un recién nacido de bajo peso.<br />
periodontal es más peligrosa durante la erupción<br />
dental y la adolescencia.<br />
Los factores locales son:<br />
1. Hábitos de higiene bucal. Cepillado y uso del hilo<br />
dental, eficacia en el control de la placa dentobacteriana<br />
(índice de higiene oral sim plificado,<br />
IHOS) y frecuencia en las medidas de higiene.<br />
2. Motivación del paciente y su medio familiar. El<br />
apoyo de la familia para el cumplimiento de medidas<br />
propuestas es muy importante.<br />
3. Experiencia anterior. Si bien no siempre es un<br />
indicador satisfactorio, debido al carácter multifactorial<br />
de la etiología, de no mediar el establecimiento<br />
de medidas para su control, sí es un<br />
poderoso elemento de predicción del desarrollo<br />
futuro de la enfermedad.<br />
4. Dieta. “Momentos de azúcar”, “tiempo de aclaramiento<br />
o despeje” de los alimentos, fár macos<br />
en jarabe (viscosos y azucarados), re lación entre<br />
ingestión e higiene.<br />
5. Características dentales. Rasgos anatómicos (surcos<br />
profundos), malformaciones (hipoplasias),<br />
malposiciones, cavitaciones o reconstrucciones<br />
inadecuadas que favorecen la retención de placa<br />
dentobacteriana y restos alimentarios, etcétera.<br />
6. Tiempo de erupción. De 0 hasta 24 me ses poserupción<br />
dental se considera que hay mayor<br />
riesgo de caries por la importancia de la maduración<br />
poseruptiva, por la mayor acumulación
220 Capítulo 11<br />
de placa dentobacteriana y por la presencia de<br />
seudobolsas.<br />
7. Características salivales. Flujo y viscosidad son<br />
elementos de defensa.<br />
8. Aparatos. Pueden ocasionar retención de placa<br />
dentobacteriana y pueden interferir en la higiene<br />
correcta.<br />
9. Controles periódicos. Control de la evolución,<br />
evaluación del riesgo actual y determinación de<br />
medidas de mantenimiento.<br />
Pruebas de laboratorio<br />
Medición de la velocidad del flujo salival<br />
La velocidad del flujo salival influye en el tiem po de<br />
depuración o aclaramiento de los alimen tos, así como<br />
en la acción de los elementos sali vales de defensa. El<br />
valor normal es de 1 a 2 ml/min y el de riesgo es menor<br />
de 0.7 ml/mi n.<br />
Los medicamentos que disminuyen el flujo salival<br />
son, entre otros: anticolinérgicos (tras tornos gastrointestinales),<br />
sedantes, antihistamínicos (afecciones<br />
alérgicas), neurolépticos (alteraciones neurológicas)<br />
antihipertensores y diuréticos.<br />
Capacidad amortiguadora<br />
El pH final de la saliva entre 5 y 7 se considera normal.<br />
En cambio, el pH menor de 4.8 se con sidera de riesgo.<br />
Algunos sistemas amortigua dores tienden a contrarrestar<br />
las alteraciones del pH, entre ellos: carbonatos,<br />
fosfatos y proteí nas de la saliva; material orgánico de<br />
la placa dentobacteriana y material orgánico del tártaro<br />
o sarro dental.<br />
Exámenes microbiológicos<br />
Cuando el recuento de Streptococcus mutans es menor<br />
de 100 000 ufc/ml de saliva se considera bajo, y mayor<br />
a esa cifra se califica de riesgo. Los estudios cualitativo<br />
y de adherencia en relación con este microorganismo<br />
también son importantes.<br />
El recuento de Lactobacillus menor de 1 000 ufc/ml<br />
de saliva se valora como bajo, y el re cuento con un<br />
valor mayor se interpreta como de riesgo. Las pruebas<br />
microbiológicas también incluyen el estudio cualitativo<br />
y la colorimetría.<br />
Hay exámenes que permiten identificar mi croorganismos<br />
específicos relacionados con de terminadas<br />
enfermedades periodontales, como Actinobacillus actinomicetemcomitans<br />
y Porphyromonas (bacteroides)<br />
gingivalis.<br />
Examen de líquido gingival<br />
La enfermedad periodontal se acompaña de anticuerpos<br />
en el fluido gingival relacionados con microorganismos<br />
como Capnocytophaga sputigena.<br />
Indicadores de salud<br />
Hay dos tipos de indicadores que permiten de terminar<br />
el estado de salud o enfermedad en una población:<br />
1. Directos. Entre ellos, la morbilidad y la mortalidad<br />
(cuadros 11-1 y 11-2).<br />
2. Indirectos. No proporcionan nombres o da tos<br />
de las enfermedades pero permiten inferirlas;<br />
por ejemplo, las condiciones de higiene y saneamiento,<br />
y las características socioeconómicas.<br />
Indicadores de salud bucal<br />
Para referirse a los índices de salud bucal es necesario<br />
revisar antes los conceptos acerca de los odontogramas<br />
y diagramas dentales.<br />
Odontogramas o diagramas dentales<br />
Los dientes son unidades pares. Según su lu gar en la<br />
arcada pueden denominarse anterio res o posteriores.<br />
A su vez, los anteriores se di viden en incisivos y caninos,<br />
y los posteriores en premolares y molares.<br />
Los incisivos son ocho (cuatro superiores y cuatro<br />
inferiores), por lo cual hay un diente cen tral y uno lateral<br />
en cada cuadrante. Los caninos son cuatro, uno en<br />
cada cuadrante. Los premolares sólo se encuentran<br />
en el adulto y son ocho; es decir, en cada cuadrante<br />
hay dos y se denominan primero y segundo premolares.<br />
Por último, la dentadura infantil tiene ocho molares,<br />
los cuales se localizan por pares en cada cua drante<br />
y se llaman primero y segundo molares; en cambio,<br />
la dentadura del adulto se compone de 12, por lo que<br />
cada cuadrante consta de un primer molar, un segundo<br />
molar y un tercer molar.
Epidemiología 221<br />
Cuadro 11-1. Casos nuevos de enfermedades del Sistema Nacional de Salud (2001)<br />
Padecimiento Código 10a. ed. Total<br />
Total 47 055 196<br />
Absceso hepático amebiano A 06.4 3 748<br />
Accidentes de transporte en vehículos con motor V 20-V 29; V 40-V 79 55 765<br />
Amebiasis intestinal A 0.61-A 0.63, A 0.69 1 151 507<br />
Anencefalia Q 00.0 481<br />
Angina estreptocócica J 02.0, J 03.0 180 402<br />
Ascariasis B 77 264 845<br />
Asma J 45, J 46 281 098<br />
Bocio endémico E 01 1 391<br />
Brucelosis A 23 2 851<br />
Candidiasis urogenital B 37.3, B 37.4 363 196<br />
Chancro blando A 57 813<br />
Cirrosis hepática no alcohólica K 74.6 13 656<br />
Cisticercosis B 69 570<br />
Conjuntivitis hemorrágica epidémica B 30.3 57<br />
Conjuntivitis mucopurulenta H 10.0 203 811<br />
Defectos del tubo neural Q 00.0, Q 01, Q 05 728<br />
Dengue clásico A 90 13 254<br />
Dengue hemorrágico A 91, A 92 2 159<br />
Desnutrición leve E 44.1 178 845<br />
Desnutrición moderada E 44.0 41 458<br />
Desnutrición severa E 40, E 43 10 718<br />
Diabetes mellitus insulinodependiente (tipo 1) E 10 6 337<br />
Diabetes mellitus (tipo 2) E 11, E 14 315 948<br />
Displasia cervical intensa y Cacu in situ N 87.2, D 06 7 603<br />
Displasia cervical leve y moderada N 87.0, N 87.1 36 254<br />
Edema, proteinuria y trastornos hipertensivos del embarazo,<br />
0.10-0.16 excepto 0.12 34 228<br />
parto y puerperio<br />
Efectos indeseables de las vacunas y sustancias biológicas T 88.1, T 80.5, M 02.2, T 78.0, G 04.0, T 80.6 38<br />
Enfermedad alcohólica del hígado K 70 10 260<br />
Enfermedad febril exantemática I 33.0 1 704<br />
Enfermedades cerebrovasculares I 60, I 67, I 69 37 156<br />
Enfermedades isquémicas del corazón I 20-I 25 65 425<br />
Erisipela A 46 26 786<br />
Escabiosis B 86 93 274<br />
Escarlatina A 38 10 865<br />
Fiebre reumática aguda I 00-I 02 1 971<br />
Fiebre tifoidea A 01.0 7 889<br />
Giardiasis A 07.1 54 236<br />
Hepatitis vírica A B 15 16 807<br />
Hepatitis vírica B B 16 776<br />
Hepatitis vírica C B 17.1, B 18.2 1 345<br />
Hepatitis víricas, otras B 17-B 19, excepto B 17.1, B 18.2 2 376<br />
Herpes genital A 60.0 7 596<br />
Hipertensión arterial I 10-I 15 428 730<br />
Infecciones intestinales por otros organismos y las mal definidas A 04, A 08, A 09 5 374 980<br />
Infecciones invasivas por Haemophilus influenzae G 00.0, J 14, M 00.8 65<br />
Infecciones respiratorias agudas J 00-J 01, J 02.8, J 02.9, J 03.8-J 06, J 20, J 21 29 560 794<br />
Infección de vías urinarias N 30, N 34, N 39.0 3 353 912<br />
Infecciones gonocócicas genitourinarias A 54.0-A 54.2 2 414<br />
Influenza J 10, J 11 102<br />
Insuficiencia venosa periférica I 80, I 82, I 84 263 079<br />
Intoxicación aguda por alcohol F 10.1 41 810<br />
Intoxicación alimentaria bacteriana A 05 21 659<br />
Intoxicación por clenbuterol T 48.6 133<br />
Intoxicación por picadura de alacrán X 22, T 63.2 287 176<br />
(Continúa)
222 Capítulo 11<br />
Cuadro 11-1. Casos nuevos de enfermedades del Sistema Nacional de Salud (2001) (continuación)<br />
Padecimiento Código 10a. ed. Total<br />
Intoxicación por plaguicidas T 60.0-T 60.9 2 802<br />
Intoxicación por ponzoña de animales X 20, X 21, X 23, X 27, T 63 excepto T 63.2 55 301<br />
Leishmaniasis cutánea americana B 55 1 228<br />
Lepra A 30 309<br />
Leptospirosis A 27 58<br />
Linfogranuloma venéreo A 55 386<br />
Meningitis G 00-G 03 907<br />
Meningitis meningocócica A 39.0 24<br />
Meningoencefalitis por Haemophilus influenzae G 00.0 26<br />
Meningoencefalitis amebiana primaria B 60.2-G 05.2 6<br />
Mordeduras W 53-W 55-I 54 463<br />
Neumonías y bronconeumonías J.12, J 18 excepto J 18.2 214 040<br />
Oncocercosis B 73 125<br />
Otitis media aguda H 65.0, H 65.1 710 416<br />
Otras helmintiasis B 65, B 67, B 70, B 76, B 78, B 79, B 81, B 83 594 412<br />
Otras infecciones intestinales debidas a protozoarios A 07.0, A 07.2, A 07.9 109 392<br />
Oxiuriasis B 80 83 773<br />
Paludismo por P. falciparum B 50 19<br />
Paludismo por P. vivax B 51 4 605<br />
Parálisis flácida aguda — 383<br />
Paratifoidea y otras salmonelosis A 01.1-A 02 80 494<br />
Parotiditis infecciosa B 26 15 827<br />
Peatón lesionado por accidente de transporte V 01-V 09 31 421<br />
Quemaduras L 55, L56, T 20, T 32 153 115<br />
Rabia A 82 3<br />
Rubéola B 06 3 685<br />
Rubéola congénita P 35.0 1<br />
Seropositivos a VIH Z 21 3 401<br />
Shigelosis A 03 31 473<br />
Sífilis adquirida A 51-A 53 2 256<br />
Sífilis congénita A 50 103<br />
Síndrome coqueluchoide — 942<br />
Síndrome de inmunodeficiencia adquirida B 20-B 24 1 348<br />
Teniasis B 68 618<br />
Tétanos A 34, A 35 101<br />
Tétanos neonatal A 33 11<br />
Tos ferina A 37 214<br />
Toxoplasmosis B 58 170<br />
Tricomoniasis urogenital A 59.0 210 091<br />
Tripanosomiasis americana B 57 193<br />
Triquinosis B 75 38<br />
Tuberculosis del sistema respiratorio A 15, A 16 15 432<br />
Tuberculosis meníngea A 17.0 128<br />
Tuberculosis todas las formas A 17.1, A 17.8 A 17.9, A 18, A 19 2 230<br />
Tumor maligno de bron quios y pulmón C 34 1 521<br />
Tumor maligno de la mama C 50 4 728<br />
Tumor maligno del cuello del útero C 53 3 815<br />
Tumor maligno del estómago C 16 1 285<br />
Úlceras, gastritis y duodenitis K 25, K 29 1 447 260<br />
Varicela B 01 289 374<br />
Violencia intrafamiliar Y 07 9 614<br />
Virus del papiloma humano B 9.7 16 548<br />
—, No cuenta con código CIE.<br />
Nota: El Sistema Nacional de Salud incluye a las siguientes ins tituciones: Secretaría de Salud (SSA), Instituto Mexicano del Seguro Social<br />
(IMSS), Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Sistema Nacional para el Desarrollo Integral<br />
de la Familia (DIF), Secretaría de la De fensa Nacional (SDN), Secretaría de Marina (SM), Instituto Nacional de Estadística, Geografía e<br />
Informática (INEGI) y Petró leos Mexicanos (PEMEX).<br />
Fuente: SSA. Dirección General de Epidemiología. Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica.
Epidemiología 223<br />
Cuadro 11-2. Morbilidad hospitalaria por diagnóstico principal de egreso (lista condensada), por sexo y días de estancia.<br />
Sistema Nacional de Salud, 2001<br />
Diagnóstico Código 10a. CIE Total Varones Mujeres<br />
Todas las causas — 4 127 060 1 289 909 2 837 605<br />
Enfermedades infec ciosas intestinales 01 76 019 39 217 36 801<br />
Tuberculosis 02 7 144 4 337 2 807<br />
Infección meningocócica 03 G 22 10 12<br />
Sífilis 04 A-04 C 193 119 74<br />
Infección gonocócica 04 D 64 19 45<br />
Fiebre del dengue 06 F 948 543 441<br />
Fiebre del dengue hemorrágico 06 G 359 165 194<br />
Paludismo 07 D 237 147 90<br />
Tumor maligno del estómago 09 B 4 484 2 537 1 947<br />
Tumor maligno del colon 09 D 3 446 1 727 1 719<br />
Tumor maligno de rectosigmoides, recto y ano 09 E 2 089 1 307 1 052<br />
Tumor maligno de tráquea, bronquios y pulmón 10 B 7 271 4 888 2 383<br />
Tumor maligno de la mama 11 D 12 886 169 12 717<br />
Tumor maligno del cuello del útero 12 A 12 367 0 12 367<br />
Leucemias 14 D 13 558 7 574 5 984<br />
Leiomioma uterino 17 C 50 827 0 50 827<br />
Enfermedades de la glándula tiroidea 20 A-20 C 5 651 877 4 774<br />
Diabetes mellitus 20 D 118 786 51 761 67 025<br />
Desnutrición y otras deficiencias nutricias 21 4 591 2 351 2 240<br />
Trastornos mentales 22 39 628 23 204 16 423<br />
Esclerosis múltiple 23 E 1 435 449 986<br />
Enfermedad del ojo y sus órganos accesorios 24 38 417 18 560 19 857<br />
Enfermedades del oído 25 11 665 4 964 6 701<br />
Enfermedades del sistema circulatorio 26-31 208 525 101 999 106 526<br />
Enfermedades reumáticas crónicas del corazón 26 B 4 800 1 811 2 989<br />
Enfermedades hipertensivas 27 32 232 13 459 18 773<br />
Infarto agudo del miocardio 28 A 12 444 8 474 3 970<br />
Enfermedades cerebrovasculares 30 37 220 18 551 18 669<br />
Varices de los miem bros inferiores 31 F 6 216 1 570 4 646<br />
Infecciones respirato rias agudas<br />
32A-32D,<br />
22 800 12 986 9 814<br />
33A, 33K<br />
Neumonía 33 B 65 892 35 689 30 203<br />
Influenza 33 C 71 38 33<br />
Enfermedades crónicas de las tonsilas (amígdalas)<br />
32 H 14 355 7 615 6 740<br />
y adenoides<br />
Bronquitis crónica, enfisema y asma 33D-33E 38 120 17 973 20 147<br />
Enfermedades de los dientes y estructuras de sostén 34A-34B 3 466 1 684 1 782<br />
Úlceras gástrica y duodenal 35 D 5 798 3 374 2 424<br />
Enfermedades del apéndice 35 E 81 110 42 789 38 321<br />
Hernia de la cavidad abdominal 35 F-35 G 84 183 44 117 40 066<br />
Enfermedades del hígado 35 L-35 M 35 296 21 086 14 210<br />
Colelitiasis y colecistitis 35 N 110 766 20 961 89 804<br />
Enfermedades del sistema osteomuscular y del tejido<br />
37 100 851 47 373 53 478<br />
conectivo<br />
Enfermedades del sistema urinario 38 176 419 82 916 95 503<br />
Hiperplasia de la próstata 39 A 20 258 20 258 0<br />
Prolapso genital femenino 41 F 23 082 0 23 082<br />
Embarazo, parto y puerperio 43-45 1 400 718 0 1 400 718<br />
Aborto 43A-43C 126 461 0 126 461<br />
(Continúa)
224 Capítulo 11<br />
Cuadro 11-2. Morbilidad hospitalaria por diagnóstico principal de egreso (lista condensada), por sexo y días de estancia.<br />
Sistema Nacional de Salud, 2001 (continuación)<br />
Diagnóstico Código 10a. CIE Total Varones Mujeres<br />
Parto único espontáneo 44A 514 994 0 514 994<br />
Las demás afecciones obstétricas 43E-43S, 44B 573 060 0 573 060<br />
Ciertas afecciones originadas en el periodo perinatal 46 183 644 102 075 81 555<br />
Malformaciones congénitas 47 59 133 32 331 26 776<br />
Signos y síntomas no clasificados en otra 48 60 630 29 233 31 397<br />
Traumatismos y enve nenamientos 49-60 306 703 196 082 110 621<br />
Fracturas 49 138 006 85 964 52 042<br />
Luxaciones y esguinces 50 11 364 7 486 3 378<br />
Traumatismos y heri das 51-52 103 039 74 590 28 449<br />
Quemaduras 54 12 536 8 083 4 455<br />
Atención para la anticoncepción VOE 33 425 1 898 31 527<br />
Las demás causas — 590 172 265 405 324 764<br />
Fuente: Sistema Nacional de Salud. Boletín de Información Esta dística. Núm. 21, Vol. 2, 2001.<br />
La especificación de cada diente hace nece sario<br />
mencionar su nombre, la arcada que le corresponde<br />
(superior o inferior), el cuadrante en que se localiza<br />
(derecho o izquierdo) y si pertenece a una dentadura<br />
infantil o adulta. Por ejemplo, se diría “incisivo central<br />
superior de recho de la dentadura infantil…” La<br />
repetición de estos datos por cada diente hace muy<br />
labo riosa la historia clínica, aunque se utilicen iniciales.<br />
Por esa razón y con el propósito de simplificar<br />
la descripción de los dientes, se idea ron diagramas<br />
dentales u odontogramas.<br />
Diagrama de Zsigmondi o de cuadrante<br />
Este diagrama se utiliza desde 1861 y se usan números<br />
arábigos, desde el uno hasta el ocho para la dentadura<br />
adulta:<br />
Arcada superior derecha Arcada superior izquierda<br />
8 7 6 5 4 3 2 1 1 2 3 4 5 6 7 8<br />
8 7 6 5 4 3 2 1 1 2 3 4 5 6 7 8<br />
Arcada inferior derecha<br />
Arcada inferior izquierda<br />
La dentadura infantil se designa con núme ros romanos:<br />
V IV III II I I II III IV V<br />
V IV III II I I II III IV V<br />
Para señalar un diente, se marca un ángulo:<br />
1. Superior derecho<br />
2. Superior izquierdo<br />
3. Inferior derecho<br />
4. Inferior izquierdo<br />
Diagrama numérico o sistema universal<br />
La dentadura del adulto se numera desde uno a partir<br />
del tercer molar superior derecho y hacia la izquierda<br />
hasta el tercer molar superior izquierdo (número 16).<br />
La numeración conti núa con el tercer molar inferior<br />
izquierdo para finalizar en el tercer molar inferior derecho.<br />
El diagrama se observa así:<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16<br />
32 31 30 29 28 27 26 25 24 23 22 21 20 19 18 17<br />
Para numerar las piezas dentales correspon dientes<br />
a la dentadura infantil, se sigue el or den anterior y se<br />
usan números arábigos con primas:<br />
1' 2' 3' 4' 5' 6' 7' 8' 9' 10'<br />
20' 19' 18' 17' 16' 15' 14' 13' 12' 11'<br />
o números romanos:<br />
I II III IV V VI VII VIII IX X<br />
XX XIX XVIII XVII XVI XV XIV XIII XII XI
Epidemiología 225<br />
Diagrama de la Federación<br />
Dental Internacional (FDI)<br />
En comparación con los anteriores, este odontograma<br />
es más fácil de entender, dictar a una tercera persona,<br />
transmitir por teléfono, mane jar en la computadora y<br />
de anotar en la historia clínica.<br />
Los cuadrantes de la dentadura se identifi can con<br />
un número. Los números correspon dientes a la dentadura<br />
del adulto son:<br />
1 2<br />
4 3<br />
El número del cuadrante se antepone al nú mero<br />
del diente y se representa de la siguiente manera:<br />
18 17 16 15 14 13 12 11 21 22 23 24 25 26 27 28<br />
48 47 46 45 44 43 42 41 31 32 33 34 35 36 37 38<br />
Los números correspondientes a cada cua drante<br />
de la dentadura infantil son:<br />
5 6<br />
8 7<br />
La dentadura infantil se representa:<br />
55 54 53 52 51 61 62 63 64 65<br />
85 84 83 82 81 71 72 73 74 75<br />
Otra modalidad consiste en usar el signo más (+)<br />
para los dientes superiores y el signo menos (–) para<br />
los inferiores. Esto es en la dentadura del adulto:<br />
8+ 7+ 6+ 5+ 4+ 3+ 2+ 1+ +1 +2 +3 +4 +5 +6 +7 +8<br />
8– 7– 6– 5– 4– 3– 2– 1– –1 –2 –3 –4 –5 –6 –7 –8<br />
Para la dentadura infantil, se utili za el cero (0):<br />
05+ 04+ 03+ 02+ 01+ +10 +20 +30 +40 +50<br />
05– 04– 03– 02– 01– –10 –20 –30 –40 –50<br />
En la figura 11-4 se muestran los odontogramas<br />
del sistema universal y de la Federa ción Dental Internacional.<br />
Parámetros internacionales<br />
de los indicadores de uso<br />
bucal más frecuentes<br />
Índices de salud bucal<br />
Los problemas de salud o enfermedad en una comunidad<br />
pueden medirse con ins trumentos de medida<br />
que reciben el nombre de indicadores e índices de salud<br />
o enfermedad.<br />
Russell define el índice como un valor numé rico<br />
que describe una situación relativa de salud o enfermedad<br />
en determinada población a través de una escala<br />
graduada con límites su perior e inferior definidos.<br />
Éstos per miten comparar los resultados con los<br />
de otras poblaciones clasificadas según los mismos<br />
mé todos y criterios.<br />
Por lo general, los índices son proporciones o coeficientes<br />
que sirven como indicadores de la prevalencia<br />
de determinadas enfermedades o condiciones en<br />
una comunidad; también pue den indicar el punto de<br />
gravedad en que se en cuentran esas enfermedades.<br />
Un buen índice reúne las siguientes caracte rísticas:<br />
1. Validez. Que sirva para medir lo que se pre tende<br />
y que se adapte a las características del problema<br />
en estudio.<br />
2. Claridad. Porque el examinador debe enten der<br />
con facilidad las reglas y criterios por apli car en<br />
el estudio.<br />
3. Fiabilidad. Los resultados deben ser consis tentes<br />
y reproducibles por distintos exami nadores.<br />
4. Sensibilidad, porque debe permitir la detec ción<br />
razonable, incluso de pequeñas varia ciones.<br />
5. Aceptabilidad de los individuos examinados. Es decir,<br />
no ocasionar molestias en los exami nados.<br />
6. Manejabilidad estadística. Esto significa que sea<br />
fácil de expresar y de manejo estadístico.<br />
El estudio epidemiológico fiable o confiable requiere<br />
de consistencia diagnóstica por parte del examinador;<br />
es decir, éste debe ser capaz de diagnosticar<br />
la misma condición en situacio nes distintas. Asimismo,<br />
durante el trabajo con junto de varios examinadores<br />
es indispensable la unificación de criterios para
226 Capítulo 11<br />
Derecho<br />
55 54 53<br />
52 51 61<br />
62<br />
Izquierdo<br />
63 64 65<br />
FDI<br />
1' 2' 3' 4' 5' 6' 7' 8' 9' 10'<br />
20' 19' 18' 17' 16' 15' 14' 13' 12' 11'<br />
Sistema<br />
universal<br />
A<br />
85 84 83<br />
82 81<br />
71 72<br />
73 74 75<br />
FDI<br />
18<br />
17<br />
Derecho<br />
16 15 14<br />
13<br />
12 11 21 22<br />
23<br />
Izquierdo<br />
24 25 26 27<br />
28<br />
FDI<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16<br />
32 31 30 29 28 27 26 25 24 23 22 21 20 19 18 17<br />
Sistema<br />
universal<br />
B<br />
48<br />
47<br />
46 45 44<br />
43<br />
42 41<br />
31 32 33<br />
34 35<br />
36 37<br />
38<br />
FDI<br />
Figura 11-4. Odontogramas del sistema universal y de la Federación Dental Internacional (FDI). A, Dentadura infantil. B,<br />
Dentadura de adulto.<br />
lograr un grado de consistencia diagnóstica aceptable,<br />
el cual es mayor de 90 por ciento.<br />
En el caso de la salud bucal, la unidad de medida<br />
puede ser un individuo, un diente, una superficie o<br />
una lesión. Sin embargo, el tamaño de la unidad mantiene<br />
una relación directa con la fiabilidad y una relación<br />
inversa con la sen sibilidad; es decir, a mayor<br />
tamaño de la unidad es mayor la fiabilidad, pero la<br />
sensibilidad es menor y viceversa.<br />
Índices con el individuo como unidad de medida<br />
La frecuencia de una enfermedad se expresa con base<br />
en la proporción de personas afectadas y en relación<br />
con la totalidad de la población estudiada, por ejemplo,<br />
mediante tasas. Pero en un estudio de caries, lo<br />
cual es muy común, no resulta de utilidad y además<br />
tampoco per mite determinar el grado de intensidad<br />
del ata que de caries en un grupo de población.
Epidemiología 227<br />
Índice con la pieza dental como unidad<br />
de medida (ICAO o CPO)<br />
Klein y Palmer (1930) establecieron el ICAO o CPO<br />
y así tomaron la pieza dental como unidad de medida.<br />
El ICAO es el índice odontológico más utilizado<br />
y tiene la ventaja de medir el nivel de prevalencia de<br />
caries en un grupo amplio de población, por lo cual se<br />
usa en estudios transversales. Sin embargo, sólo sirve<br />
para evaluar la caries y, por tanto, su valor disminuye<br />
conforme aumenta la edad de la población estudiada,<br />
ya que no considera la pérdida de dientes por enfermedades<br />
periodontales.<br />
Las iniciales de las siglas ICAO o CPO signi fican:<br />
C, número de dientes permanentes Caria dos no tratados;<br />
A o P, número de dientes permanentes Ausentes<br />
o Perdidos; O, número de dientes permanentes Obturados<br />
o restaurados.<br />
El índice CEO se utiliza para conocer la sa lud dental<br />
en niños con dentición temporal o mixta, y significa:<br />
C, número de dientes tempo rales Cariados y no<br />
restaurados; E, número de dientes temporales indicados<br />
para Extraer; O, nú mero de dientes temporales<br />
Obturados. La me dia se calcula por separado, según<br />
edad y sexo, en grupos de niños menores de 12 años.<br />
Los indicadores se formulan mediante un valor o<br />
código que corresponde a las condicio nes del diente:<br />
0 = Espacio vacío (ausencia del diente por causas ajenas<br />
a caries).<br />
1 = Diente permanente cariado.<br />
2 = Diente permanente obturado.<br />
3 = Diente permanente extraído.<br />
4 = Diente permanente con extracción indicada.<br />
5 = Diente permanente normal.<br />
6 = Diente temporal cariado.<br />
7 = Diente temporal obturado.<br />
8 = Diente temporal con extracción indicada.<br />
9 = Diente temporal normal.<br />
Los resultados proporcionan información acerca<br />
de: número de personas con caries den tal, cantidad<br />
de dientes que necesitan tratamien to, proporción de<br />
dientes ya tratados, total de dientes que ya hicieron<br />
erupción, número de dientes “CPO” por persona o<br />
población y com posición porcentual del “CPO” por<br />
persona o comunidad.<br />
La Organización Mundial de la Salud utili za el<br />
ICAO(D) como indicador para la compa ración del<br />
estado de salud dental entre pobla ciones distintas y<br />
definió el valor
228 Capítulo 11<br />
3 = Cálculo supragingival que cubre más de las dos<br />
terceras partes del diente.<br />
Los datos de cada persona o de una comuni dad<br />
pueden obtenerse al calcular las medias aritméticas<br />
del índice de residuos y del índice del cálculo dental y<br />
después la media.<br />
Los resultados se valoran según la siguiente escala:<br />
0.0 a 1.2 = Buena higiene bucal.<br />
1.3 a 3.0 = Higiene bucal regular.<br />
3.1 a 6.0 = Mala higiene bucal.<br />
El índice de higiene bucal simplificado se usa mucho<br />
para valorar programas educativos re ferentes a<br />
control de placa dentobacteriana.<br />
Índice gingival (IG)<br />
Löe y Sillness crearon el índice gingival, que consiste<br />
en revisar las superficies vestibular, lin gual, mesial y<br />
distal de todos los dientes des pués de secar la encía<br />
con aire. A cada superfi cie se le atribuye un valor:<br />
0 = Encía normal o sana.<br />
1 = Inflamación leve, que se manifiesta por ligero<br />
cambio de color y ligero edema, pero no hay<br />
sangrado al sondeo.<br />
2 = Inflamación moderada con sangrado al sondeo.<br />
3 = Inflamación intensa, con enrojecimiento, edema,<br />
ulceración y tendencia a la hemo rragia espontánea.<br />
Los puntajes de cada superficie se suman y el resultado<br />
se divide entre cuatro para obte ner el índice<br />
gingival de cada diente.<br />
Los valores de los índices de todos los dien tes se<br />
suman y el resultado se divide entre el número de<br />
dientes, y así se obtiene el índice gingival. También<br />
puede obtenerse al sumar los datos de seis dientes (16,<br />
12, 24, 36, 32 y 44) y dividir el resultado en tre seis<br />
(índice gingival de Löe).<br />
Índice de placa (IPI)<br />
Sillness y Löe desarrollaron el índice de placa, el cual<br />
se aplica en los mismos dientes y super ficies que el<br />
índice gingival, pero se mide la cantidad de placa con<br />
base en su grosor. El puntaje es el siguiente:<br />
0 = No hay placa en la zona gingival.<br />
1 = Placa no visible en el margen gingival libre, que<br />
se reconoce al pasar el explorador.<br />
2 = Placa visible pero moderada.<br />
3 = Placa abundante.<br />
Índice de O’Leary<br />
Los dientes se tiñen con sustancia reveladora y las<br />
superficies teñidas se cuentan consideran do las caras<br />
mesial, vestibular, distal y lingual.<br />
La cifra obtenida se divide entre el número de caras<br />
presentes en la boca y se multiplica por 100. Un índice<br />
mayor de 10 implica la necesi dad de tratamiento de<br />
eliminación.<br />
Índice periodontal (IP) o de Russell<br />
Este indicador proporciona información del número<br />
de personas con enfermedad perio dontal, la cantidad<br />
de dientes con estructuras de soporte sanas, y también<br />
el total de dientes con estruc turas de soporte alteradas,<br />
etc. El índice se re presenta con la media aritmética de<br />
los resulta dos obtenidos de cada pieza dental.<br />
Los criterios se aplican a todos los dientes y el puntaje<br />
es el siguiente:<br />
0 = Diente con periodoncio sano.<br />
2 = Gingivitis alrededor de sólo una parte del diente.<br />
6 = Formación de bolsa.<br />
8 = Pérdida de función por movilidad excesiva.<br />
Índice CPITN<br />
Es el índice de necesidades de tratamiento periodontal<br />
de la comunidad. Se divide la boca en seis sextantes,<br />
limita dos por los caninos. Se excluyen los terceros<br />
molares. Pa ra que un sextante se pueda medir debe<br />
contar al menos con dos piezas no indicadas para extracción.<br />
En personas mayo res se examinan sólo los<br />
dientes índice: 17, 16, 11, 26, 27, 47, 46, 31, 36 y 37.<br />
En menores de 20 años se eliminan los segundos<br />
molares. En cada sextante se anota lo peor de las puntuaciones<br />
obtenidas en los dientes índice. Si faltan los<br />
dientes índi ce se examinan todos los demás dientes del<br />
sextante. Los có digos que se utilizan en este índice son:
Epidemiología 229<br />
Código 4: bolsa igual o mayor de 6 mm.<br />
Código 3: bolsa de 4 a 5 mm.<br />
Código 2: cálculo supragingival o subgingival.<br />
Código 1: hemorragia al sondaje suave.<br />
Código 0: sano.<br />
En menores de 15 años sólo se mide la presencia de<br />
cál culo y hemorragia.<br />
Según el código:<br />
Código 4: NT3 (necesita tratamiento complejo).<br />
Códigos 2 y 3: NT2 (requiere eliminación del cálculo,<br />
obturaciones desbordantes, o ambas).<br />
Código 1: necesita instrucción en higiene oral.<br />
Índice periodontal comunitario (CPI)<br />
Sustituye al CPITN. Se debe examinar un sextante si<br />
con tiene al menos dos o más dientes que no estén indicados<br />
para extracción. Se evalúa igual que el anterior,<br />
pero se añade la medición de pérdida de inserción.<br />
El registro de la pérdida de inserción se lleva a cabo<br />
de la siguiente manera:<br />
Código 0: pérdida de inserción de 0 a 3 mm.<br />
Código 1: pérdida de inserción de 4 a 5 mm.<br />
Código 2: pérdida de inserción de 6 a 8 mm.<br />
Código 3: pérdida de inserción de 9 a 11 mm.<br />
Código X: sextante excluido (menos de dos dientes<br />
presentes).<br />
Código 9: no registrable (línea amelocementaria no<br />
visible o identificable).<br />
Vigilancia epidemiológica<br />
Fossaert la definió como el conjunto de activida des<br />
que permiten reunir información indispen sable para<br />
conocer en todo momento la historia natural de la enfermedad<br />
y detectar o prever cualquier cambio por alteraciones<br />
en los factores condicionantes. Tiene como<br />
propósito recomen dar con bases firmes las medidas<br />
eficientes de prevención y control de la enfermedad.<br />
En la XXI Asamblea de la Organización Mundial de la<br />
Salud se definió como:<br />
el ejercicio de un continuo escrutinio y obser vación<br />
sobre la difusión de la enfermedad, y los factores<br />
que determinan el grado de sufi ciencia para llevar a<br />
cabo un pertinente y efec tivo control.<br />
Como es posible notar, la vigilancia epi demiológica<br />
consiste en la observación y el análisis de la ocurrencia<br />
y distribución de enfermedades, así como de los<br />
factores participan tes para que las medidas de prevención<br />
y con trol resulten oportunas y eficaces.<br />
Los objetivos de la vigilancia epidemiológica son:<br />
1. Mantener actualizado el conocimiento de determinado<br />
tipo de enfermedades (infecciosas o<br />
crónicas) en la clínica, la comunidad, etcétera.<br />
2. Establecer el riesgo de la población expuesta.<br />
3. Formular medidas adecuadas para el control de<br />
enfermedades.<br />
4. Evaluar las medidas adoptadas.<br />
Actividades básicas de la vigilancia<br />
epidemiológica<br />
Consisten en lo siguiente:<br />
1. Recolección de datos.<br />
2. Procesamiento de los datos para el análisis y la<br />
interpretación de los mismos.<br />
3. Acciones de control.<br />
4. Difusión de la información relativa a la enfermedad<br />
y de los resultados obtenidos de las<br />
medidas aplicadas.<br />
Recolección de datos<br />
Se deben seleccionar las enfermedades que se rán objeto<br />
de vigilancia epidemiológica, los datos por recolectar,<br />
así como el mecanismo de recolección y su<br />
frecuencia para:<br />
1. Identificar personas o servicios (médicos, odontólogos,<br />
registro civil, líderes de la comunidad)<br />
que puedan proporcionar datos.<br />
2. Establecer los instrumentos adecuados para que<br />
las personas o servicios notifiquen a los servicios<br />
de salud, así como la frecuencia con la que<br />
se debe notificar.<br />
3. Organizar registros de datos en el servicio de salud;<br />
por ejemplo, tarjetas, libros, fiche ros, etcétera.<br />
Los mecanismos para recolectar datos son la notificación,<br />
los registros, los rumores, la inves tigación<br />
epidemiológica y las encuestas.
230 Capítulo 11<br />
La notificación es el procedimiento a través del cual<br />
el personal de salud informa de los ca sos de enfermedades.<br />
Los registros son las anotaciones regulares de determinados<br />
sucesos (como nacimientos, muertes o<br />
vacunaciones) que realizan los servicios de salud y<br />
otras instituciones.<br />
Los rumores se refieren a opiniones popula res de<br />
aumento de enfermos o muertes.<br />
Las encuestas se utilizan cuando los datos disponibles<br />
son poco confiables, incompletos o cuando<br />
no existe registro.<br />
La investigación epidemiológica es el procedi miento<br />
que permite obtener datos acerca de las enfermedades,<br />
entre ellos: fuentes, mecanismo de acción, modos<br />
de transmisión y medidas de control. Esto tiene como<br />
finalidad garantizar la aplicación oportuna de esas<br />
medidas de control.<br />
El sistema de notificación debe abarcar toda la población.<br />
Los datos mínimos a recabar son: nombre del<br />
paciente, edad, domicilio, fecha de inicio de los síntomas<br />
y, en caso necesario, an tecedentes de vacunación.<br />
La notificación pue de ser inexacta por los motivos siguientes:<br />
1. Existencia de enfermos sin los síntomas específicos.<br />
2. Pacientes que no solicitan atención profe sional.<br />
3. Falta de elaboración del diagnóstico.<br />
4. Falta de notificación del caso, por olvido, indiferencia,<br />
etcétera.<br />
Cuando una persona se infecta en una zona y la<br />
notificación proviene de otra, la autoridad que recibe<br />
el informe debe comunicar a la pri mera de lo ocurrido,<br />
sobre todo si la enferme dad exige el examen<br />
de los contactos para des cubrir la fuente de infección<br />
o la investigación de abastecimientos de agua,<br />
alimentos, vecto res o reservorios como posibles vehículos.<br />
Ade más de la notificación sistemática de<br />
determi nadas enfermedades, por lo regular se exige<br />
la notificación especial acerca de todas las epi demias<br />
o brotes de enfermedades, incluso de aquellas que<br />
no aparecen en las listas de notifi cación obligatoria.<br />
Asimismo, la notificación puede tener limitaciones<br />
(fig. 11-5).<br />
Análisis e interpretación de los datos<br />
La consolidación y la presentación consisten en agrupar<br />
y ordenar los datos mediante cua dros o mapas que<br />
faciliten el análisis y la interpretación.<br />
El análisis consiste en comparar los datos en relación<br />
con características y atributos de tiem po, persona<br />
y lugar. Los propósitos del análisis son:<br />
1. Establecer las tendencias de la enfermedad para<br />
detectar los posibles incrementos, des censos,<br />
cambios, o ambos, en su comporta miento.<br />
2. Identificar los factores vinculados con el posible<br />
incremento o descenso de casos y defunciones.<br />
También identificar los grupos con mayor riesgo.<br />
3. Identificar las áreas en que puedan aplicarse las<br />
medidas de control.<br />
Las distribuciones de tiempo permiten com parar<br />
el comportamiento de la enfermedad por periodos inmediatos<br />
anteriores en la misma re gión, por periodos<br />
iguales, por ejemplo, en el mismo mes, de años anteriores<br />
en la misma localidad, y por periodos iguales<br />
en distintos lugares.<br />
Los datos de casos o defunciones pueden considerar<br />
diferentes atributos como sexo, edad, situación<br />
socioeconómica, lugar de residencia, grupo étnico y<br />
ocupación.<br />
Los datos obtenidos en diferentes lugares pueden<br />
compararse en el mismo periodo.<br />
Los números absolutos sirven para estable cer comparaciones,<br />
pero el número de habitan tes varía y por<br />
ello se recomienda convertir esos números en tasas.<br />
Acciones de prevención y control<br />
Éstas deben aplicarse lo más pronto posible, después<br />
de analizar e interpretar los datos.<br />
Difusión de la información relativa<br />
a la enfermedad y de los resultados<br />
obtenidos con las medidas aplicadas<br />
La difusión periódica de la información es una etapa<br />
de gran valor, pues motiva a los parti cipantes a evaluar<br />
su propia contribución en el desarrollo de programas<br />
de prevención y control.
Epidemiología 231<br />
Población<br />
Individuos sin<br />
síntomas<br />
específicos<br />
Sin quejas<br />
Sujetos con<br />
síntomas<br />
específicos<br />
Con quejas<br />
Figura 11-5. Limitaciones de la notificación.<br />
No se solicita atención<br />
médica (carencia de<br />
recursos, indiferencia, no<br />
se confía en los médicos)<br />
Solicita atención<br />
médica<br />
No se establece<br />
diagnóstico<br />
Se establece<br />
diagnóstico de<br />
sospecha<br />
No se confirma el<br />
diagnóstico (demasiado<br />
temprano o tarde)<br />
Se confirma diagnóstico<br />
Caso sospechoso<br />
notificado<br />
Caso no notificado<br />
(olvido, indiferencia,<br />
etc.)<br />
Caso confirmado<br />
notificado
232 Capítulo 11<br />
Elementos para la vigilancia<br />
epidemiológica<br />
La información utilizada para la vigilancia epidemiológica<br />
incluye básicamente:<br />
1. Casos y muertes. Es decir, número de casos y<br />
fallecimientos; también la fecha, el lugar don de<br />
ocurrieron y las características de las personas,<br />
como edad, sexo, ocupación, etcétera.<br />
2. Resultados de laboratorio. Permiten confirmar las<br />
enfermedades, detectar resistencia bac teriana a<br />
antibióticos y productos quimioterapéuticos, determinar<br />
grados de inmunidad en la población,<br />
así como determinar niveles de contaminación<br />
ambiental.<br />
3. Medidas de control. Estos datos se obtienen de los<br />
programas y se refieren al número de en fermos<br />
tratados, vacunas aplicadas, etc. En el cuadro<br />
11-3 se presentan algunas medi das de prevención<br />
y control de uso frecuen te y en el cuadro<br />
11-4 la posible manera de llevar el registro.<br />
4. Ambiente. Los datos proporcionan infor mación<br />
acerca de las condiciones ambienta les, la cobertura<br />
y calidad de los servicios de agua, y también<br />
de la población con servicios de eliminación de<br />
excreta y basu ra, niveles de contaminación del<br />
aire, etcé tera.<br />
5. Vectores. Tipos de vectores existentes en el área,<br />
distribución geográfica, hábitos y nivel de resistencia<br />
o susceptibilidad a los insecticidas.<br />
6. Reservorios. Identificación y tipo de portado res<br />
humanos, así como tipos y distribución de los<br />
reservorios animales.<br />
7. Población. Se refiere a tamaño de la población,<br />
su composición por edad, sexo, ocupa ción, escolaridad,<br />
etc., distribución geográfica, movimientos<br />
migratorios, así como susceptibilidad o<br />
resistencia a determina das enfermedades.<br />
La selección de los datos a utilizar para la vi gilancia<br />
depende de las características de la enfermedad (p. ej.,<br />
el modo de transmisión o la letalidad), así como de la<br />
estructura y desa rrollo de servicios de salud.<br />
La investigación epidemiológica es necesa ria en<br />
caso de que la enfermedad exceda la fre cuencia habitual<br />
(epidemia o brote epidémico), sea más grave de<br />
Cuadro 11-3. Algunas medidas de prevención y control<br />
de uso frecuente<br />
Aislamiento<br />
Cuarentena<br />
Vacunación<br />
Tratamiento de casos<br />
Búsqueda y tratamiento de portadores<br />
Quimioprofilaxis<br />
Aplicación de gammaglobulina y sueros específicos<br />
Vacunación de contactos<br />
Pruebas de los donadores de sangre<br />
Eliminación sanitaria de heces humanas<br />
Protección de los abastos de agua<br />
Control o eliminación de vectores<br />
Control de reservorios extrahumanos (p. ej., vacuna ción de perros)<br />
Cocción adecuada de los alimentos<br />
Pasteurización de la leche<br />
Desinfestación<br />
Desinfección concurrente<br />
Esterilización de agujas y jeringas<br />
Clorinación del agua<br />
Rociamiento de viviendas<br />
Fumigación<br />
Cambios en hábitos personales<br />
Eliminación sanitaria de la basura<br />
Mejoramiento de la vivienda<br />
Mejoramiento del estado nutricio<br />
Control sanitario de mataderos<br />
Control del almacenamiento, la manipulación y la comercialización<br />
de alimentos<br />
lo habitual, se desconozca en el área o sea infecciosa y<br />
exista una fuente común.<br />
Enfermedades de notificación<br />
obligatoria<br />
Como ya se mencionó, la notificación de una enfermedad<br />
es la comunicación oficial a la au toridad correspondiente<br />
de la existencia de en fermedad transmisible o de<br />
otra naturaleza en el ser humano o en los animales.<br />
Las enfermedades del ser humano se notifi can a la<br />
autoridad local de salud y las de los animales se comunican<br />
al servicio veterinario, agrícola o de sanidad<br />
agropecuario. Algunos padecimientos de los animales<br />
también son transmisibles al ser humano y por ello se<br />
notifi can a ambas autoridades.<br />
Cada jurisdicción elabora una lista de enfer medades,<br />
cuya notificación cumple con sus re quisitos
Epidemiología 233<br />
Cuadro 11-4. Registro de las medidas de control<br />
Enfermedad: _________________________________<br />
Costo de recursos necesarios<br />
Materiales<br />
Humanos<br />
Medidas seleccionadas<br />
1.<br />
2.<br />
3.<br />
4.<br />
5.<br />
6.<br />
7.<br />
8.<br />
9.<br />
10.<br />
Eficacia<br />
Aceptabilidad<br />
particulares. También es obligatorio notificar los casos<br />
sospechosos relacionados con enfermedades de<br />
importancia particular para la salud pública; por lo<br />
general, los padecimien tos que requieren investigación<br />
epidemiológica o el inicio de medidas especiales<br />
de control.<br />
La notificación se realiza en cuatro fases:<br />
Primera: recopilación en la localidad.<br />
Segunda: recopilación en el distrito, estado o provincia.<br />
Tercera: recopilación a nivel nacional.<br />
Cuarta: información a la Organización Mundial de<br />
la Salud.<br />
La Organización Panamericana de la Salud (OPS)<br />
y Organización Mundial de la Salud elaboraron la siguiente<br />
clasificación de enferme dades:<br />
1. Clase 1. Enfermedades cuyos casos se consi deran<br />
de notificación obligatoria, según el Reglamento<br />
Sanitario Internacional, o que son objeto de vigilancia<br />
por la Organización Mundial de la Salud:<br />
1. Enfermedades sujetas al Reglamento Sa nitario<br />
Internacional (1969), es decir, en fermedades<br />
objeto de cuarentena en el ám bito internacional:<br />
peste, cólera, fiebre amarilla y viruela. La cuarentena<br />
se refiere a la restricción de las actividades<br />
de personas o animales sanos que han estado<br />
expuestos a un individuo con enfermedad<br />
transmisible durante el periodo de incu bación<br />
o contagio (como los contactos); tiene el propósito<br />
de evitar la transmisión de la enfermedad<br />
durante un periodo, en caso de manifestarse la<br />
infección.<br />
1.A. Enfermedades objeto de vigilancia por la Organización<br />
Mundial de la Salud, de acuerdo<br />
con la XXII Asam blea Mundial de la Salud:<br />
tifus y fiebre recurrente transmisibles por<br />
piojos, poliomielitis paralítica, paludismo e<br />
influenza vírica. En esta clase de enfermedades<br />
es obligatorio notificar los casos individuales<br />
a la autoridad de salud, ya sea por<br />
teléfono, telégra fo u otro medio rápido de<br />
comunicación. En una epidemia, la jurisdicción<br />
superior inmediata puede solicitar informes<br />
colectivos de casos subsi guientes en<br />
una zona local, ya sea diarios o semanales,<br />
como en el caso de una epidemia de cólera.<br />
2. Clase 2. Enfermedades de las que se exige notificación<br />
de casos dondequiera que tengan lugar. Según<br />
sea la urgencia relativa para investigar contactos y<br />
la fuente de infección, o para iniciar las medidas de<br />
control, se consideran dos subclases:<br />
2.A. Enfermedades en que la notificación de casos<br />
individuales se hace por teléfono, telégrafo o<br />
cualquier otro medio rápido de comunicación,<br />
y se envía a la juris dicción superior inmediata<br />
semanalmente por correo, o se utiliza el teléfono<br />
o el telégrafo si se trata del primer caso iden-
234 Capítulo 11<br />
tificado en una zona o del pri mer caso fuera de<br />
los límites de una zona ya afectada, por ejemplo<br />
en caso de fiebre tifoidea y difteria.<br />
2.B. Enfermedades cuya notificación de ca sos individuales<br />
se hace por los medios más asequibles,<br />
y se envía por correo a la jurisdicción superior<br />
inmediata un informe colectivo semanal, como<br />
suce de con la brucelosis y la lepra.<br />
3. Clase 3. Enfermedades cuya notificación en zonas<br />
consideradas endémicas se hace de manera selectiva.<br />
Las enfermedades de esta categoría no tienen<br />
que notificarse en mu chos países; por ejemplo,<br />
tifus de las malezas, fiebre hemorrágica argentina<br />
y boliviana, bartonelosis, coccidioidomicosis, esquistosomiasis<br />
y fasciolopsiasis, entre otras.<br />
4. Clase 4. Notificación obligatoria de epide mias. No<br />
se exige la notificación en casos in dividuales. La<br />
notificación de brotes epidémicos se hace por teléfono,<br />
telégrafo o algún otro medio rápido. El informe<br />
debe especi ficar el número aproximado de<br />
personas afectadas y el modo aparente de diseminación;<br />
por ejemplo, intoxicación alimentaria por estafilococos,<br />
queratoconjuntivitis por adenovirus y<br />
síndromes sin identificar.<br />
5. Clase 5. Enfermedades cuya notificación ofi cial<br />
por lo regular no se considera justifica da. Las enfermedades<br />
de esta clase son poco frecuentes o no<br />
requieren medidas de control.<br />
En México, el Título Octavo (Prevención y control<br />
de enfermedades y accidentes) de la Ley General<br />
de Salud, se refiere en el capítulo II a enfermedades<br />
transmisibles respecto de las cua les es necesario realizar<br />
actividades de vigilan cia epidemiológica:<br />
I. Cólera, fiebre tifoidea, paratifoidea, shigelosis,<br />
amebiasis, hepatitis virales y otras enfermedades<br />
del sistema digestivo.<br />
II. Influenza epidémica, otras infecciones agudas<br />
respiratorias, infecciones meningocócicas y enfermedades<br />
ocasionadas por estreptococos.<br />
III. Tuberculosis.<br />
IV. Difteria, tos ferina, tétanos, sarampión, poliomielitis,<br />
rubéola y parotiditis infecciosa.<br />
V. Rabia, peste, brucelosis y otras zoonosis.<br />
VI. Fiebre amarilla, dengue y otras enferme dades<br />
virales, traumatismos por artrópodos.<br />
VII. Paludismo, tifus, fiebre recurrente trans mitida<br />
por piojo, otras rickettsiosis, leishmaniasis, tripanosomiasis<br />
y oncocercosis.<br />
VIII. Sífilis, infecciones gonocócicas y otras enfermedades<br />
de transmisión sexual.<br />
IX. Lepra y mal del pinto.<br />
X. Micosis profundas.<br />
XI. Helmintiasis intestinales y extraintestinales.<br />
XII. Toxoplasmosis.<br />
XIII. Síndrome de inmunodeficiencia adqui rida<br />
(sida).<br />
XIV. Las demás que determinen el Consejo de<br />
Salubridad General y los tratados y convenciones<br />
internacionales en los que los Estados<br />
Unidos Mexicanos sean parte y que se hubiesen<br />
elaborado con arreglo a las disposiciones<br />
de la Constitución Política de los Estados<br />
Unidos Mexicanos.<br />
El artículo 136 de la Ley General de Salud menciona:<br />
Es obligatoria la notificación a la Secretaría de Salud,<br />
o en su defecto, a la autoridad sani taria más<br />
cercana, de las siguientes enferme dades y en los términos<br />
que a continuación se especifican:<br />
I. Inmediatamente, en los casos individuales de<br />
enfermedades objeto del Reglamento Sani tario<br />
Internacional: fiebre amarilla, peste y cólera.<br />
II. Inmediatamente, en los casos de cualquier enfermedad<br />
que se presente en forma de brote o<br />
epidemia.<br />
III. En un plazo no mayor de 24 horas en los casos<br />
individuales objeto de vigilancia inter nacional:<br />
poliomielitis, meningitis meningocócica, tifus<br />
epidémico, fiebre recurrente trans mitida por<br />
piojo, influenza viral, paludismo, sarampión,<br />
tos ferina, así como los de difteria y los casos<br />
humanos de encefalitis equina ve nezolana.<br />
IV. En un plazo no mayor de 24 horas, de los<br />
primeros casos individuales de las demás enfermedades<br />
transmisibles que se presenten en<br />
un área no infectada. Asimismo, será obligatoria<br />
la notificación inmediata, a la autoridad<br />
más cercana, de los casos en que se detecte la<br />
presencia del virus de la inmunodeficiencia humana<br />
(VIH) o de anticuerpos a dicho virus, en<br />
alguna persona.
Capítulo 12<br />
Bioestadística 235<br />
Bioestadística<br />
Definición<br />
La estadística es el método científico que se usa para<br />
recolectar, elaborar, analizar e interpretar datos de<br />
características susceptibles de ser ex presadas numéricamente<br />
acerca de un conjunto de hechos, personas<br />
o cosas (Croxton y Cowden). Es indispensable para<br />
cuantificar e interpretar los fenómenos de salud-enfermedad;<br />
en estos ca sos, como los datos proceden de<br />
aspectos bio lógicos, es preferible utilizar el término<br />
bioestadística.<br />
Fuentes de obtención<br />
de información<br />
Los datos se obtienen por lo general a partir de registros,<br />
censo y encuesta.<br />
Las estadísticas usadas en salud pública son demográficas,<br />
vitales, de morbilidad, así como de recursos y<br />
medios para proteger, fomentar y recuperar la salud.<br />
Estadísticas demográficas<br />
Proporcionan información numérica acerca de diversos<br />
acontecimientos en una población (véase Demografía<br />
y salud en el capítulo 7).<br />
Estadísticas vitales<br />
Constituyen el registro de acontecimien tos biológicos<br />
que están ocurriendo en la po blación, por ejemplo,<br />
nacimientos, defunciones y matrimonios, entre otros.<br />
Los nacimientos deben declararse ante el Re gistro<br />
civil, ya sea por el jefe de la familia, el médico o la<br />
partera que atendió el parto. Si un niño nace sin haber<br />
respirado después del par to o cesárea se considera<br />
nacido muerto o mortinato, y las pérdidas de vida potenciales<br />
antes del nacimiento se miden por la mortinatalidad.<br />
El registro de un nacimiento indica la existencia<br />
previa de un embarazo y cada nacimiento influye en<br />
el crecimiento de la población. A su vez, los certificados<br />
de nacimiento permiten establecer la paternidad,<br />
el derecho a la heren cia, la edad y la ciudadanía.<br />
Los datos de mortalidad también se asien tan y conservan<br />
en el Registro Civil. Cuando una persona muere<br />
es obligatorio extender un certificado de defunción<br />
para que pueda ser ente rrada o incinerada. Este certificado<br />
especifica nombre, sexo, edad, domicilio, ocupación,<br />
lu gar y fecha del sepelio; es de suma importancia<br />
porque también señala la causa de la muerte,<br />
duración del padecimien to, duración de la atención<br />
médica, nombre de la enfermedad que produjo la<br />
muerte y otras enfermedades que tenía la persona.<br />
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció<br />
una Clasificación Internacional de Enfermedades<br />
para uniformar diagnósticos y darles carácter<br />
integral. La especificación del tipo de enfermedad,<br />
localización, grado de evo lución, entre otros aspectos<br />
relacionados con ella, permite utilizar los datos para<br />
planear pro gramas de salud y evaluar sus resultados.<br />
Por desgracia, en muchos casos es imposi ble elaborar<br />
un diagnóstico adecuado, sobre todo cuando el sujeto<br />
fallecido no recibió aten ción médica y fue sepultado<br />
sin haberse practi cado necropsia.<br />
Los certificados de defunción pueden servir además<br />
para cobrar pólizas de seguros o para orientar a
236 Capítulo 12<br />
la familia en casos de enfermedades hereditarias o en<br />
las que hay cierta predisposi ción para adquirirlas, así<br />
como para tratar de detectar las de manera oportuna.<br />
En los casos de defunción fetal, es necesario conocer<br />
la duración del embarazo, edad y esta do civil de la<br />
madre.<br />
Estadísticas de morbilidad<br />
Se refieren a las enfermedades que padecen los individuos.<br />
Los datos se pueden obtener mediante el sistema<br />
de notificación obligatorio para los servicios de<br />
atención externa y los ser vicios de atención interna<br />
u hospitalaria, y tam bién a través de las encuestas de<br />
morbilidad.<br />
Los datos recabados no son muy fidedignos porque<br />
en algunos casos no se anota el nombre verdadero<br />
de la enfermedad en los certifica dos médicos, no se<br />
llevan a cabo los registros de todos los pacientes que<br />
visitan al médico y muchos enfermos no reciben atención<br />
médica; sin embargo, con ayuda de esa información<br />
es posi ble determinar la magnitud y la naturaleza<br />
de los problemas de salud.<br />
Las enfermedades de notificación obligato ria a nivel<br />
internacional se mencionan en el ca pítulo 11.<br />
Estadísticas de recursos<br />
y atenciones para proteger,<br />
fomentar y recuperar la salud<br />
Se refieren a los datos numéricos de recursos o medios<br />
disponibles en la comunidad para re solver sus<br />
problemas de salud. Esos datos pue den ser: inespecíficos,<br />
como las características so cioeconómicas de la<br />
población y la familia, la vivienda, etcétera, o específicos,<br />
como:<br />
1. Recursos materiales: servicios médicos, centros<br />
de salud, hospitales, clínicas, servicios mé dicos de<br />
urgencia, laboratorios médicos, ban cos de sangre,<br />
gabinetes de rayos X, etcétera.<br />
2. Recursos humanos: médicos, odontólogos, enfermeras,<br />
veterinarios, químicos, trabajadores<br />
sociales, técnicos de saneamiento, auxiliares de<br />
diagnóstico y tratamiento, etcétera.<br />
3. Recursos presupuestarios.<br />
Las estadísticas de este tipo sirven para pla nificar y<br />
evaluar los programas de salud.<br />
Las atenciones son prestaciones establecidas para<br />
promover, proteger, recuperar o rehabili tar la salud.<br />
Asimismo, pueden investigarse en servicios de estadística<br />
y archivo clínico de las instituciones.<br />
Método estadístico<br />
Es una secuencia de procedimientos para el manejo<br />
de los datos de la investigación y abar ca las etapas de<br />
planificación y ejecución.<br />
Planificación<br />
La planificación consiste en establecer un plan de investigación<br />
y por ello es necesario pensar de manera<br />
ordenada las actividades por realizar:<br />
1. Plantear objetivos que se pretenden alcanzar. Por<br />
lo general, el planteamiento se hace mediante<br />
preguntas basadas en el problema por resolver.<br />
2. Definir la población de estudio, es decir, el conjunto<br />
de individuos (personas, animales o cosas)<br />
que son objeto de la investigación y que también<br />
se conocen como unidades de observación.<br />
3. Establecer procedimientos para recolectar la información.<br />
4. Determinar el procedimiento que se va a utilizar<br />
para el registro de los datos.<br />
5. Determinar con qué van a compararse los resultados.<br />
En salud y enfermedad es impor tante<br />
comparar los resultados experimenta les, ya sea<br />
de tratamiento, vacunas, caracte rísticas de las<br />
enfermedades, y precisar si hay relación entre<br />
causa y efecto. Es necesario contar con un grupo<br />
de individuos cuyas peculiaridades sean similares<br />
a las del grupo en estudio, por ejemplo edad,<br />
sexo, con diciones ambientales, características y<br />
evo lución de la enfermedad, etc. Es decir, se requiere<br />
de un grupo control para comparar los<br />
resultados obtenidos en el grupo de es tudio.<br />
6. Especificar recursos y tiempo disponibles.<br />
Ejecución<br />
Consta de los siguientes pasos: 1) recolección o medición;<br />
2) recuento o elaboración de los datos; 3) pre-
Bioestadística 237<br />
sentación de los datos; 4) descripción de los datos, y<br />
5) análisis.<br />
Recolección o medición<br />
Las técnicas de recolección de la información son el<br />
conjunto de acciones que permiten dis poner de los<br />
datos necesarios para comprobar las consecuencias<br />
verificables relativas a la hi pótesis, y por consiguiente<br />
son múltiples y va riadas. Esta etapa del método científico<br />
es fundamental, pues de ella depende obtener<br />
datos exactos y confiables en los cuales se basen las<br />
conclusiones de la investigación.<br />
Los componentes de la recolección son el observador,<br />
las variables y el procedimiento de medición<br />
o recolección.<br />
Observador<br />
El observador o responsable de la medición por lo<br />
general es el mismo investigador; pero si exis ten varios,<br />
se designa a uno. En algunos casos, el investigador<br />
necesita tener capacitación es pecial; por ejemplo,<br />
cuando deben medirse ca racterísticas microscópicas<br />
del esmalte de los dientes.<br />
Variables<br />
Las variables son características, propiedades o atributos<br />
cuya magnitud, intensidad o valor se miden,<br />
puesto que son diferentes en cada persona del grupo<br />
que se estudiará.<br />
De acuerdo con la forma en que se pueden observar,<br />
medir o captar, las variables pueden ser cualitativas<br />
y cuantitativas.<br />
Las variables cualitativas se refieren a características<br />
o atributos que sólo se describen con pa labras,<br />
por ejemplo el sexo (masculino o feme nino) y la presencia<br />
de enfermedad (sí o no). A su vez, pueden ser<br />
nominales y ordinales; ejem plos respectivos de ellas<br />
son el tipo de enfer medad (gingivitis, periodontitis,<br />
etc.) y el lugar que ocupan los hijos al nacer (primero,<br />
segundo, etc.).<br />
Las variables cuantitativas se describen en tér minos<br />
numéricos y son continuas o discontinuas (discretas).<br />
Las continuas pueden tomar cualquier valor de un intervalo<br />
especificado de valores; por ejemplo, el tiempo<br />
de evolución de una enfermedad, y la estatura, que<br />
puede expresarse en fracciones (1.50, 1.51, 1.52 o incluso<br />
1.505 m, entre otras). Las variables discontinuas<br />
o discretas tienen separaciones o interrupciones en la<br />
escala de valores que pueden tomar; se ex presan en<br />
números completos como el total de hijos y el número<br />
de caries o dientes perdidos.<br />
Otra clasificación general de variables depende de<br />
la metodología, y se señalan dos ti pos de ellas: independientes<br />
o dependientes. Las variables independientes<br />
son antecedentes de las dependientes y éstas<br />
a su vez son conse cuentes de las independientes. Por<br />
ejemplo, cau sa y origen son variables independientes;<br />
en cambio, efecto y resultado son dependientes.<br />
Procedimientos de medición o recolección<br />
Las fuentes de la recolección o medición pue den ser<br />
primarias o secundarias. Estas últimas son los registros<br />
o las publicaciones.<br />
Las fuentes primarias son los experimentos, la observación<br />
directa y las encuestas.<br />
La observación puede ser simple, como el ce pillado<br />
de los dientes, o muy especializada, como en el análisis<br />
microscópico del esmalte. Asimismo, el número de<br />
mediciones varía se gún el tipo de estudio: en el transversal<br />
se mide una sola vez, por ejemplo para determinar<br />
el peso y la estatura de niños en cierta edad; en<br />
cambio, en el estudio longitudinal es necesario hacer<br />
una serie de mediciones durante amplios periodos.<br />
Las encuestas se llevan a cabo mediante cuestionarios<br />
y entrevistas personales; el censo de población<br />
y vivienda y las encuestas de sa lud, discapacidad y<br />
sexualidad constituyen al gunos ejemplos de ellas.<br />
Si la población es muy grande, los datos se pueden<br />
obtener utilizando muestras, es decir, una parte de la<br />
población total elegida de ma nera que cada elemento<br />
tenga una probabili dad conocida de estar incluido en<br />
ella. El tama ño de la muestra varía en relación con el<br />
objeto de estudio, para lo cual existen fórmulas matemáticas.<br />
En este sentido es necesario determi nar la<br />
cantidad de unidades de observación y la manera de<br />
elegirlas, que por lo general es alea toria o al azar; entonces<br />
se enumeran todos los elementos y se utiliza un<br />
cuadro especial (ver cuadro 12-1) o una computadora<br />
para generar núme ros aleatorios. Más adelante se
238 Capítulo 12<br />
Cuadro 12-1. Números aleatorios para hallar la cantidad de unidades de observación en el estudio estadístico<br />
00000 00001 11111 11112 22222 22223 33333 33334 44444 44445<br />
12345 67890 12345 67890 12345 67890 12345 67890 12345 67890<br />
01<br />
02<br />
03<br />
04<br />
05<br />
06<br />
07<br />
08<br />
09<br />
10<br />
11<br />
12<br />
13<br />
14<br />
15<br />
16<br />
17<br />
18<br />
19<br />
20<br />
21<br />
22<br />
23<br />
24<br />
25<br />
26<br />
27<br />
28<br />
29<br />
30<br />
31<br />
32<br />
33<br />
34<br />
35<br />
36<br />
37<br />
38<br />
39<br />
40<br />
41<br />
42<br />
43<br />
44<br />
45<br />
46<br />
47<br />
48<br />
49<br />
50<br />
85967<br />
07483<br />
96283<br />
49174<br />
97366<br />
90474<br />
28599<br />
25254<br />
28785<br />
84725<br />
41059<br />
67434<br />
72766<br />
92079<br />
29187<br />
74220<br />
03786<br />
75085<br />
09161<br />
75707<br />
21333<br />
65626<br />
84380<br />
46479<br />
59847<br />
31416<br />
82066<br />
01850<br />
32315<br />
59388<br />
58089<br />
61705<br />
18914<br />
11965<br />
85251<br />
66121<br />
53972<br />
14509<br />
37700<br />
85466<br />
52969<br />
42744<br />
26140<br />
95589<br />
39113<br />
41392<br />
54684<br />
89442<br />
36751<br />
98159<br />
73152<br />
51453<br />
01898<br />
12074<br />
39941<br />
41469<br />
64109<br />
16210<br />
02760<br />
86576<br />
66456<br />
41045<br />
68816<br />
46784<br />
40350<br />
17612<br />
02407<br />
55558<br />
33015<br />
48992<br />
48660<br />
50061<br />
07389<br />
32072<br />
97197<br />
11231<br />
83436<br />
42782<br />
89276<br />
42703<br />
27632<br />
57285<br />
98982<br />
94089<br />
48111<br />
96986<br />
96642<br />
16594<br />
07688<br />
59392<br />
55863<br />
68315<br />
13336<br />
56319<br />
13217<br />
17622<br />
53645<br />
61001<br />
16778<br />
02564<br />
14511<br />
11649<br />
61414<br />
98551<br />
21225<br />
16812<br />
09497<br />
89717<br />
24359<br />
86944<br />
47679<br />
82830<br />
37643<br />
66125<br />
62533<br />
65522<br />
06098<br />
15520<br />
19155<br />
64998<br />
31288<br />
42539<br />
87891<br />
80083<br />
55147<br />
27904<br />
67914<br />
39202<br />
89582<br />
55198<br />
50987<br />
30392<br />
60199<br />
31803<br />
80936<br />
84844<br />
24199<br />
78883<br />
65533<br />
72722<br />
42312<br />
17514<br />
67726<br />
14563<br />
59999<br />
18994<br />
79246<br />
36658<br />
54888<br />
21416<br />
85285<br />
86348<br />
83525<br />
37895<br />
93629<br />
81542<br />
76235<br />
65997<br />
99410<br />
93296<br />
66810<br />
47617<br />
19959<br />
94932<br />
73603<br />
80607<br />
92917<br />
27038<br />
11715<br />
87080<br />
00086<br />
14812<br />
76255<br />
63868<br />
76639<br />
57383<br />
21465<br />
18582<br />
87138<br />
80380<br />
91373<br />
23660<br />
99275<br />
48941<br />
81781<br />
93873<br />
58080<br />
43222<br />
72126<br />
15473<br />
67842<br />
02878<br />
61876<br />
24071<br />
49952<br />
98283<br />
70183<br />
57444<br />
15357<br />
74944<br />
36009<br />
76431<br />
04231<br />
93547<br />
19574<br />
81652<br />
41383<br />
82667<br />
77319<br />
10081<br />
15941<br />
36932<br />
57550<br />
64451<br />
34075<br />
19184<br />
40434<br />
25471<br />
00551<br />
39333<br />
79889<br />
48895<br />
89604<br />
70930<br />
76971<br />
31852<br />
99605<br />
46214<br />
16165<br />
67067<br />
07736<br />
75841<br />
41967<br />
69709<br />
93248<br />
46352<br />
35450<br />
23093<br />
23611<br />
73295<br />
05673<br />
97291<br />
29971<br />
06916<br />
83021<br />
07249<br />
87731<br />
95388<br />
68003<br />
53049<br />
95892<br />
81594<br />
13604<br />
24769<br />
71565<br />
45554<br />
31555<br />
74624<br />
73408<br />
82454<br />
84602<br />
46728<br />
49620<br />
29275<br />
16451<br />
64164<br />
60602<br />
76107<br />
24909<br />
00767<br />
75532<br />
11196<br />
41372<br />
89654<br />
55928<br />
69137<br />
83114<br />
99228<br />
15984<br />
97155<br />
20436<br />
21931<br />
35208<br />
16784<br />
67877<br />
92183<br />
03482<br />
58645<br />
93993<br />
49759<br />
91878<br />
74851<br />
99294<br />
59555<br />
47709<br />
52289<br />
19185<br />
36682<br />
43564<br />
88749<br />
36962<br />
95848<br />
75339<br />
09404<br />
33413<br />
27931<br />
12639<br />
36348<br />
58993<br />
76810<br />
14493<br />
71183<br />
98480<br />
57669<br />
42885<br />
66962<br />
82175<br />
90832<br />
31894<br />
45637<br />
28704<br />
34335<br />
10837<br />
05359<br />
36441<br />
96667<br />
97885<br />
79541<br />
21466<br />
34160<br />
96130<br />
04295<br />
30357<br />
44642<br />
16498<br />
51152<br />
66953<br />
60257<br />
01848<br />
56157<br />
82738<br />
42725<br />
96664<br />
18195<br />
53105<br />
24209<br />
08541<br />
38052<br />
90976<br />
02865<br />
67835<br />
36738<br />
11730<br />
76548<br />
56087<br />
93994<br />
00619<br />
44018<br />
61098<br />
52975<br />
65515<br />
36345<br />
25640<br />
66658<br />
03448<br />
82310<br />
04470<br />
10819<br />
37774<br />
12538<br />
62844<br />
60492<br />
66992<br />
47196<br />
95141<br />
14315<br />
74440<br />
78298<br />
63830<br />
85019<br />
73483<br />
00875<br />
76772<br />
89761<br />
31924<br />
85878<br />
49521<br />
89250<br />
03910<br />
60477<br />
36563<br />
57894<br />
52817<br />
32280<br />
19295<br />
91139<br />
33519<br />
46719<br />
58904<br />
25772<br />
63314<br />
25014<br />
85423<br />
05393<br />
40875<br />
22375<br />
22909<br />
64732<br />
04393<br />
10324<br />
19251<br />
41404<br />
67257<br />
30818<br />
37390<br />
18163<br />
78754<br />
56797<br />
37953<br />
67439<br />
92337<br />
70650<br />
93183<br />
12452<br />
42333<br />
01007<br />
99622<br />
75404<br />
30475<br />
03527<br />
85332<br />
09114<br />
92656<br />
66864<br />
51315<br />
30490<br />
63719<br />
63266<br />
38552<br />
83284<br />
79540<br />
81434<br />
90039<br />
79357<br />
88318<br />
30715<br />
07223<br />
09428<br />
40512<br />
89853<br />
50162<br />
15460<br />
60698<br />
96770<br />
13351<br />
00953<br />
29563<br />
93589<br />
48245<br />
15457<br />
41642<br />
81110<br />
18671<br />
58353<br />
96328<br />
63495<br />
90775<br />
33751<br />
78837<br />
94914<br />
99695<br />
51108<br />
56920<br />
38234<br />
67483<br />
31929<br />
87912<br />
63648<br />
74729<br />
78140<br />
24384<br />
32101<br />
62318<br />
62803<br />
79921<br />
15974<br />
57615<br />
90858<br />
17472<br />
56367<br />
61935<br />
62041<br />
53211<br />
04224<br />
41626<br />
06604<br />
97413<br />
94012<br />
07725<br />
88714
Bioestadística 239<br />
hace una infe rencia estadística, es decir, estimaciones<br />
acerca de la población a partir de los resultados de la<br />
muestra.<br />
Ahora bien, antes de proceder a la recolec ción de<br />
datos, es necesario definir el tipo de es cala por utilizar:<br />
1. Escala de modalidades. Sirve para medir una característica<br />
de tipo cualitativo; por ejem plo, el<br />
estado civil cuyas opciones son: soltero, casado,<br />
viudo, divorciado y unión libre. Otro ejemplo es<br />
la higiene bucal con tres mo dalidades: buena, regular<br />
y mala.<br />
2. Escala de clases o intervalos. Clasifica la fre cuencia<br />
de una característica o atributo de ti po cuantitativo.<br />
Por ejemplo, la estatura: de 100 a 109 cm; de<br />
110 a 119 cm; de 120 a 129 cm, etcétera.<br />
Por lo tanto, la recolección de la información puede<br />
ser cuantitativa (duración de las consul tas otorgadas<br />
por un grupo de odontólogos), y cualitativa (aceptación<br />
de la aplicación tópica de fluoruros en los niños).<br />
Pero sin importar su tipo, todas las escalas deben tener<br />
las siguien tes características:<br />
1. Ser exhaustivas. Es decir, contar con todos los<br />
tipos posibles de mediciones.<br />
2. Ser excluyentes. Esto significa que las opcio nes<br />
no dejen lugar a dudas o confusiones, como al<br />
poner en un mismo tema las opciones “excelente”<br />
y “estupendo”.<br />
3. Las modalidades deben comprender una sola<br />
variable.<br />
Recuento o elaboración de los datos<br />
Consiste en revisar y clasificar los datos reco lectados<br />
con objeto de cuantificar la frecuen cia de aparición de<br />
las características medidas.<br />
Cuando el investigador o el estadístico reci be los<br />
datos de una investigación puede ser que éstos se encuentren<br />
desordenados; por ello, el primer paso para<br />
organizarse es el arreglo or denado, es decir, es preciso<br />
elaborar una lista de los valores siguiendo un orden,<br />
por ejemplo, de mayor a menor y viceversa, en caso de<br />
que el procesamiento sea manual. El uso de la computadora<br />
hace innecesario el ordena miento previo porque<br />
ésta facilita y agiliza los procesos.<br />
El recuento de los datos puede hacerse mediante<br />
palotes: uno por cada caso y el quinto cruza a los cuatro<br />
primeros (| | | | ).<br />
Ejemplo:<br />
Variable Modalidad Número de casos Total<br />
Sexo Femenino | | | | | | | | | | | 13<br />
Masculino | | | | | | | | | 11<br />
Este procedimiento se dificulta cuando se estudian<br />
poblaciones muy grandes. El investi gador puede distraerse<br />
y no recordar si anotó un palote y debe empezar<br />
de nuevo, por lo cual sólo se utiliza en investigaciones<br />
con menos de 100 casos y con cinco variables<br />
como máximo.<br />
El sistema de recolección por medio de tarjetas<br />
simples consiste en anotar las variables con su código<br />
respectivo en tarjetas de cartulina, las cuales miden<br />
12.5 cm de longitud por 7.5 cm de altura. Este procedimiento<br />
manual sirve para estudios menores de 500<br />
casos y con un máxi mo de ocho variables colocadas<br />
una en cada esquina y el resto en los puntos intermedios<br />
(fig. 12-1).<br />
El método más práctico es el uso de la computadora.<br />
Presentación de los datos<br />
Los datos deben presentarse de manera adecua da con<br />
el propósito de facilitar la comprensión rápida, precisa<br />
y práctica de la información. Para ello, pueden<br />
utilizarse cuadros o tablas y gráficas cuyos títulos sean<br />
completos y respon dan a las siguientes preguntas:<br />
¿qué se presen ta?, ¿cómo se presenta?, ¿de dónde provienen<br />
los datos?, y ¿de qué fecha son los datos?<br />
Casi siempre a cada cuadro o tabla le corres ponde<br />
una gráfica. A su vez, ésta debe tener una relación de 1<br />
a 1.5 entre el eje vertical (ordena da) y el eje horizontal<br />
(abscisa).<br />
La presentación de una sola variable cuanti tativa<br />
discreta es más recomendable por medio de un histograma.<br />
Los valores de la variable se ponen en el eje<br />
horizontal y las frecuencias en el eje vertical.<br />
En cada intervalo se levanta una barra rec tangular<br />
o celda hasta la altura de la frecuencia respectiva. Las<br />
barras son adyacentes, como se observa en la figura<br />
12-2.
240 Capítulo 12<br />
C<br />
C<br />
C<br />
C<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
M<br />
C<br />
C<br />
V<br />
V<br />
C<br />
C<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
V<br />
F<br />
V<br />
V<br />
M<br />
Figura 12-1. Sistema de recolección por medio de tarjetas simples.<br />
La exposición de una sola variable cuantitati va<br />
continua puede hacerse con el polígono de fre cuencia:<br />
se traza un punto arriba del punto medio del valor, a<br />
la altura de la frecuencia (fig. 12-3).<br />
Las barras separadas y la circular (de pastel) resultan<br />
útiles para presentar una sola variable cualitativa<br />
(figs. 12-4 y 12-5), y las barras segmen tadas (fig. 12-6)<br />
para mostrar dos variables, tam bién cualitativas.<br />
Si se trata de dos variables cuantitativas, por ejemplo<br />
antigüedad y sueldo de profesores de odontología en<br />
determinado plantel, se utiliza la correlación (fig. 12-7).<br />
Descripción de los datos<br />
En esta etapa se condensan o resumen los da tos con<br />
el fin de facilitar la comprensión global de sus características.<br />
Para ello se utilizan las medidas estadísticas<br />
descritas más adelante.<br />
En las variables de tipo cualitativo se utili zan tres<br />
medidas de resumen: razones, proporcio nes y tasas.<br />
Razón<br />
Es una medida de resumen para variables cua litativas<br />
que consiste en comparar, mediante una división,<br />
dos conjuntos o grupos de elemen tos con diferente o<br />
igual naturaleza. Por ejem plo: en una zona rural ocho<br />
odontólogos atien den a 32 pacientes, y en una zona<br />
urbana 18 atienden a 126 individuos; para saber quién<br />
atiende más pacientes es necesario comparar mediante<br />
la siguiente división:<br />
32<br />
razón pacientes/odontólogos en zona rural −−− = 4<br />
8<br />
Figura 12-2. Histograma.<br />
Figura 12-3. Polígono de frecuencia.
Bioestadística 241<br />
Número<br />
600<br />
Frecuencias absolutas<br />
(pueden sustituirse<br />
por las relativas)<br />
400<br />
200<br />
Modalidades mutuamente<br />
excluyentes y exhaustivas<br />
Casados<br />
Solteros<br />
Divorciados<br />
Viudos<br />
En unión<br />
libre<br />
Estado civil<br />
Nombre exacto<br />
de la variable<br />
Figura 12-4. Barras separadas.<br />
126<br />
razón pacientes/odontólogos en zona urbana −−−−− = 7<br />
18<br />
En la zona rural cada odontólogo atiende a cuatro pacientes,<br />
y en la zona urbana a siete.<br />
Proporción<br />
Es una medida de resumen para variables cua litativas;<br />
consiste en comparar, mediante una división, un subconjunto<br />
y el conjunto al que pertenece. Por ejemplo:<br />
en un país subdesarro llado ocurrieron 422 350 defunciones<br />
en total, de las cuales 124 352 correspondieron<br />
a niños menores de un año:<br />
Proporción de menores<br />
124 352<br />
de un año fallecidos en = −−−−−− = 0.29<br />
422 350<br />
un país subdesarrollado<br />
Otro ejemplo: en un país industrializado ocu rrieron<br />
1 721 215 defunciones en to tal, de las cuales 206 876<br />
correspondieron a menores de un año. Entonces:<br />
Proporción de menores<br />
206 876<br />
de un año fallecidos en = −−−−−−− = 0.12<br />
1 721 215<br />
un país industrializado<br />
Figura 12-5. Gráfica circular.<br />
La comparación de ambos ejemplos permite concluir<br />
que el número de defunciones co rrespondientes<br />
a niños menores de un año es mayor en el país subdesarrollado.
242 Capítulo 12<br />
%<br />
100<br />
Frecuencias<br />
relativas<br />
(convienen más<br />
que las absolutas)<br />
75<br />
50<br />
25<br />
Área<br />
Básica<br />
Clínica<br />
Nombre exacto<br />
de la segunda<br />
variable<br />
Modalidades de<br />
la segunda<br />
variable<br />
Modalidades<br />
de la primera<br />
variable<br />
Nombre exacto<br />
de la primera<br />
variable<br />
Femenino<br />
Sexo<br />
Masculino<br />
Figura 12-6. Barras segmentadas.<br />
Título completo<br />
Qué<br />
Cómo<br />
Dónde<br />
Cuándo<br />
Nombre exacto<br />
de la segunda<br />
variable<br />
Sueldo<br />
Valores de cada<br />
elemento en la<br />
primera variable<br />
Valores de cada<br />
elemento en la<br />
primera variable<br />
2 500<br />
2 000<br />
1 500<br />
1 000<br />
500<br />
Nombre exacto de la primera<br />
variable<br />
Figura 12-7. Gráfica de correlación.<br />
Siete profesores según<br />
antigüedad y sueldo<br />
Universidad del Nuevo<br />
Mundo 1986<br />
2 4 6 8 10 12<br />
Antigüedad<br />
Tasa<br />
Es una medida de resumen para variables cua litativas.<br />
Consiste en comparar, mediante una división, el número<br />
de veces que se presenta un evento y la población<br />
en donde puede ocu rrir dicho evento. El resultado<br />
casi siempre es una cifra fraccionaria menor a uno,<br />
así que éste se multiplica por un múltiplo de 10 (100,<br />
1 000, 10 000, etc.). Los resultados obtenidos corresponden<br />
a un periodo completo y concluido (por lo<br />
general de un año), por lo cual permiten anticiparse a<br />
la probabilidad o al riesgo de que ocurran en periodos<br />
posteriores.<br />
Las tasas se denominan crudas, brutas o generales<br />
cuando incluyen a toda la población, sin tomar en<br />
cuenta características específicas como sexo, raza,<br />
etc.; por ello, los resultados no son tan exactos como<br />
los de las tasas específicas.<br />
Éstas a su vez se definen en términos de una característica<br />
en especial, ya sea determinado grupo de<br />
edad, sexo, etc. Las tasas principales se presentan en el<br />
cuadro 12-2.<br />
Medidas de tendencia central<br />
Son útiles para sintetizar datos cuantitati vos, y como<br />
su nombre lo indica, dan a conocer el valor central
Bioestadística 243<br />
Cuadro 12-2. Tasas principales que se utilizan en estadística. En las siguientes fórmulas los datos se refieren a un año<br />
Número de nacidos vivos<br />
Natalidad general = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Población total<br />
Defunciones en un área dada en un año<br />
Mortalidad general = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Población en dicho lugar a mediados de año<br />
Defunciones de menores de un año<br />
en un área dada en un año<br />
Mortalidad infantil = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Nacidos vivos en un año en dicho lugar<br />
Muertes fetales (de 28 semanas o más),<br />
defunciones de menores de siete días en un<br />
área dada en un año<br />
Mortalidad perinatal = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Nacidos vivos en un año en dicho lugar<br />
Defunciones de menores de 28 días en<br />
un área dada en un año<br />
Mortalidad neonatal = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Nacidos vivos en un año en dicho lugar<br />
Defunciones de un grupo de determinada<br />
edad en un año<br />
Mortalidad por edades = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Población de esa edad a mediados del año<br />
Defunciones por causa de la maternidad<br />
en un área durante un año<br />
Mortalidad materna = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Nacidos vivos durante el mismo año<br />
Número de defunciones por una enfermedad<br />
X en una zona dada, en un año<br />
Letalidad = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 100<br />
Número de casos de la misma enfermedad<br />
de la misma zona, en un año<br />
Número de nacidos vivos en un año<br />
Fertilidad general = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Número de mujeres de 15 a 49 años<br />
Número de enfermos de una afección X en una<br />
fecha dada, en un área determinada 100<br />
Prevalencia = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Cálculo de la población para la misma 10 000<br />
fecha, en la misma área 100 000<br />
Número de enfermos nuevos de una afección X<br />
aparecidos en un tiempo dado, en un área<br />
determinada 100<br />
Frecuencia o incidencia = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 1 000<br />
Cálculo de la población de la misma área 10 000<br />
para la mitad del periodo considerado 100 000<br />
Número de enfermos de un área determinada 1 000<br />
Morbilidad = ⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ × 10 000<br />
Población total 100 000
244 Capítulo 12<br />
de una serie de datos, y son moda o modo (Mo), mediana<br />
(Md) y promedio o media aritmética – x . No determinan<br />
los valo res reales y sus resultados son sólo<br />
aproxima ciones, pero tienen gran utilidad.<br />
1. Moda (Mo). Es el valor que se presenta con más<br />
frecuencia en una serie de datos, por lo cual una<br />
serie no tiene moda cuando los valores no se repiten.<br />
Esa serie de datos puede ser unimodal si tiene<br />
una moda y multimodal si tiene más de una. Por<br />
ejemplo, si se estu dia el peso en kilogramos de un<br />
grupo inte grado por 20 niños de un año de edad:<br />
9.1, 9.0, 8.9, 8.6, 10.5, 8.8, 9.0, 9.2, 9.0, 8.0<br />
9.3, 8.8, 9.6, 9.7, 9.2, 9.0, 9.6, 9.0, 9.0, 9.8<br />
El valor que más se repite es el 9.0 (en seis niños)<br />
y se interpreta de la siguiente mane ra: el peso más<br />
frecuente en ese grupo de ni ños es de 9.0 kg.<br />
La moda también puede utilizarse para des cribir<br />
datos cualitativos. Por ejemplo, si se utilizan diagnósticos,<br />
el más repetitivo en un grupo de pacientes<br />
se denomina diagnóstico modal.<br />
2. Mediana o porcentil 50 (Md). Es el valor que divide<br />
un conjunto de valores en dos partes iguales<br />
de manera que el número de valores igual o mayor<br />
a la mediana es equivalente al número de valores<br />
menores o iguales a ésta. Si el número de valores<br />
es par, resultan dos valores medios y es necesario<br />
obtener su me dia o promedio. La fórmula para<br />
obtener la mediana es:<br />
n + 1<br />
Md = ⎯⎯ 2<br />
La n significa número de datos. Entonces, la<br />
fórmula correspondiente al estudio de los 20 niños<br />
mencionados sería:<br />
20 + 1 21<br />
Md = ⎯⎯⎯ = ⎯ = 10.5<br />
2 2<br />
Y los datos relativos al peso de los 20 niños en orden<br />
de mayor a menor son:<br />
10.5<br />
9.8<br />
9.7<br />
9.6<br />
9.6<br />
9.3<br />
9.2<br />
9.2<br />
9.1<br />
9.0<br />
9.0 ←<br />
9.0<br />
9.0<br />
9.0<br />
9.0<br />
8.9<br />
8.8<br />
8.8<br />
8.6<br />
8.0<br />
El valor correspondiente a la mitad del ordenamiento<br />
se encuentra entre los sitios 10 y 11, es decir,<br />
entre dos valores de 9.0 kg, y por lo tanto la<br />
mediana es de 9.0 kg; esto significa que la mitad de<br />
los niños tiene un peso igual o mayor a 9.0 kg, y la<br />
otra mitad tiene un peso igual o menor a 9.0 kg.<br />
En este tipo de medida, los valores extre mos no<br />
son importantes.<br />
3. Promedio o media aritmética (x – ). Es el valor que<br />
tendrían todos los datos de una serie numé rica si<br />
fueran de igual valor. La fórmula para obtener el<br />
promedio es la siguiente:<br />
– Σx<br />
x = ⎯n<br />
La x – significa promedio o media aritméti ca; Σ, sumatoria<br />
(suma); x, valores; n, núme ro de valores.<br />
De acuerdo con el ejemplo de los 20 niños, se<br />
suman los valores correspondientes al peso de cada<br />
uno de ellos y el resultado es 183.1 kg:<br />
10.5<br />
9.8<br />
9.7<br />
9.6<br />
9.6<br />
9.3<br />
9.2<br />
9.2<br />
+<br />
9.1
Bioestadística 245<br />
9.0<br />
9.0<br />
9.0<br />
9.0<br />
9.0<br />
9.0<br />
8.9<br />
8.8<br />
8.8<br />
8.6<br />
8.0<br />
⎯⎯ 9.1<br />
183.1 20 183.1<br />
Se divide este resultado entre 20 (número de niños),<br />
lo cual en este ejemplo es igual a 9.1 kg. En<br />
este caso, el promedio o media arit mética es de 9.1<br />
kg.<br />
La media aritmética tiene las ventajas de ser única<br />
para un conjunto de datos y es sim ple para realizar<br />
el cálculo. Sin embargo, los valores extremos<br />
pueden distorsionarla. Por ejemplo, si se quisiera<br />
conocer el número de pacientes por día en cinco<br />
consultorios y se tienen los siguientes datos:<br />
Consultorio Pacientes por día<br />
1 2<br />
2 5<br />
3 6<br />
4 7<br />
5 15<br />
Entonces:<br />
2 + 5 + 6 + 7 + 15 = 35 y 35 entre 5 = 7<br />
De acuerdo con la fórmula, el promedio de pacientes<br />
por día en los cinco consulto rios resulta ser<br />
de 7, pero es muy diferente hablar de siete que de 2<br />
o 15 pacientes.<br />
Los valores extremos son los que se desvían<br />
conside rablemente de muchas mediciones en un<br />
con junto de datos y se denominan sesgos.<br />
Medidas de dispersión<br />
A diferencia de las anteriores, las medidas de dispersión<br />
de un conjunto de observaciones se refieren a<br />
la variedad que muestran dichas observaciones alrededor<br />
de su valor central co rrespondiente. Proporcionan<br />
información de la variabilidad total existente<br />
en el conjunto de datos. Si los valores son cercanos<br />
entre sí, la dispersión es pequeña; pero si están muy<br />
es parcidos, la dispersión es mayor.<br />
A cada medida de tendencia central le co rresponde<br />
una de dispersión: moda-amplitud; mediana-percentiles;<br />
media-desviación es tándar.<br />
1. Amplitud o rango (r, de rango). Es la diferen cia entre<br />
los valores mayor y menor de una serie, por lo<br />
cual se obtiene al restar el valor más pequeño del<br />
más grande.<br />
En el ejemplo del peso de 20 niños de un año de<br />
edad, el valor mayor fue de 10.5 y el menor de 8.0<br />
kg, por lo cual se hace una resta: 10.5 kg – 8.0 kg =<br />
1.5 kg.<br />
Esta cifra indica que la diferencia entre el niño<br />
más pesado y el menos pesado es de 1.5 kg.<br />
Esta medida tiene la ventaja de ser muy fácil de<br />
calcular, pero no proporciona mu chos datos.<br />
2. Percentiles (Pp). En una serie de valores or denados<br />
de mayor a menor o viceversa, es el valor que divide<br />
en dos partes porcentualmente complementarias<br />
a toda la serie. El valor del percentil se conoce<br />
mediante la siguiente fórmula:<br />
n × p<br />
Pp = ⎯⎯ 100<br />
La n significa el número de casos y la p representa<br />
el valor del percentil que se de sea investigar.<br />
En el ejemplo ya mencionado la n corresponde a<br />
20 niños, si se desea cono cer el percentil 25, entonces:<br />
20 × 25<br />
Pp = ⎯⎯⎯ = 5<br />
100<br />
El resultado se anota como ordinal (quin to, en<br />
este caso). En la lista de los 20 niños, el quinto lugar<br />
corresponde a 9.6 kg; por tanto, es posible afirmar<br />
que 25% de los niños es tudiados tiene un peso<br />
de 9.6 kg o mayor, y 75% pesa menos de 9.6 kg.<br />
3. Varianza o variancia y desviación estándar. La varianza<br />
o variancia (σ) es la medición de los valores<br />
esparcidos cerca de su media. Se obtiene al restarle<br />
la media a cada uno de los valores individuales;<br />
luego, las diferencias resultantes se elevan al cua-
246 Capítulo 12<br />
drado, se suman entre sí y este último resultado se<br />
divide en tre el tamaño de la muestra:<br />
Σ (x – x – ) 2<br />
s 2 = ⎯⎯⎯⎯<br />
n<br />
La s 2 significa varianza; x, valor individual;<br />
–<br />
x , media aritmética; n, tamaño de la mues tra; Σ,<br />
suma.<br />
Para que las unidades no resulten al cua drado,<br />
si se desea obtener la medida de dis persión en términos<br />
de las unidades es nece sario sacar la raíz<br />
cuadrada de la varianza. El resultado se denomina<br />
desviación estándar; en otras palabras, la desviación<br />
estándar es la raíz cuadrada de la varianza:<br />
s = √s 2 = √Σ (x – x – ) 2<br />
⎯⎯⎯⎯<br />
n<br />
El procedimiento para encontrar la desvia ción<br />
estándar es el siguiente:<br />
1. Obtener el promedio de la serie de valores.<br />
–<br />
x = ⎯n<br />
Σ x<br />
2. Calcular la desviación o diferencia de cada valor en<br />
relación con el promedio de la serie.<br />
(x − x – )<br />
3. Elevar al cuadrado cada desviación.<br />
(x − x – ) 2<br />
4. Sumar las desviaciones cuadráticas, es de cir, el valor.<br />
Σ (x − x – ) 2<br />
5. Dividir la suma anterior entre el número de valores.<br />
Σ (x − – x ) 2<br />
⎯⎯⎯⎯<br />
n<br />
6. Obtener la raíz cuadrada del promedio an terior.<br />
S = √ Σ (x − x – ) 2<br />
⎯⎯⎯⎯⎯⎯<br />
n<br />
Curva de distribución normal y desviación estándar<br />
Con una serie de datos cuantitativos continuos, ordenados<br />
de menor a mayor o viceversa, se obtiene un<br />
polígono de frecuencias con forma de campana, pero<br />
asintótica; es decir, sus ex tremos no llegan a tocar la<br />
abscisa (curva de Gauss) (fig. 12-8).<br />
Los valores colocados en la abscisa se deno minan<br />
valores z y pueden variar desde menos infinito (–∞)<br />
hasta más infinito (+∞).<br />
El promedio de los valores resulta ser 0 por que una<br />
mitad es positiva y la otra es negativa. La parte más<br />
alta de la curva también corresponde al cero y a su vez<br />
a la mediana, pues 50% está antes y 50% después. En<br />
este tipo de cur va, la moda, la mediana y la media son<br />
iguales.<br />
El área bajo la curva total tiene valor de 1, por lo<br />
cual cada mitad vale 0.5 (fig. 12-9). Si de cada mitad<br />
(con valor de 0.5) se toma un área que abarque desde<br />
el promedio (0) hasta el va lor z de +1, que es de 0.3413<br />
en cada lado y se hace lo mismo en la otra mitad que<br />
va desde el promedio hasta el valor z –1, resulta una<br />
cifra de 0.6826 y al levantar perpendiculares se abar ca<br />
68% del área total que equivale a una desviación estándar<br />
de cada lado (fig. 12-10). Si de nue vo se trazan<br />
perpendiculares, pero ahora a la distancia de dos desviaciones<br />
estándar en cada lado, entonces se incluye<br />
95% del área. La re petición de ese procedimiento a la<br />
distancia de tres desviaciones estándar permite abarcar<br />
99.7% del área (fig. 12-11).<br />
La desviación estándar es útil para medir la variación<br />
en un conjunto de datos, pero si se desea comparar<br />
dos desviaciones estándar me didas en diferentes unidades<br />
o en dos grupos con características muy diferentes,<br />
por ejemplo, el peso de niños y el peso de adultos,<br />
es necesa rio medir el coeficiente de variación (cv).<br />
=0<br />
σ = 1<br />
Figura 12-8. Distribución normal estándar (curva de<br />
Gauss).
Bioestadística 247<br />
A<br />
B<br />
0.5 0.5<br />
–1 0 +1<br />
0.3413 0.3413<br />
0.1507 0.1507<br />
–1 0 +1<br />
z<br />
Mo = d<br />
L + ⎧ ⎛ ⎝ ⎜ 1 ⎞<br />
⎨<br />
d + d⎠<br />
⎟<br />
⎩<br />
W ⎫<br />
. inf.<br />
⎬<br />
1 2 ⎭<br />
Donde L. inf. significa límite inferior de la clase<br />
modal; d 1<br />
, diferencia entre la frecuencia de la clase<br />
modal y la clase anterior; d 2<br />
, diferen cia entre la frecuencia<br />
de la clase modal y la clase posterior; W, amplitud<br />
de la clase modal.<br />
Amplitud. Es la diferencia entre el mayor cen tro de<br />
clase y el menor centro de clase de una serie agrupada:<br />
Am = x máx – x mín<br />
Am significa amplitud; x máx, mayor cen tro de<br />
clase; x mín, menor centro de clase.<br />
Mediana. En una serie de valores agrupados en clases<br />
o intervalos, es el valor que divide en dos partes de<br />
igual tamaño a toda la serie; di cho de otra manera, es<br />
el valor por detrás del cual queda un 50% de los valores<br />
y por delante del cual queda el 50% restante.<br />
En una columna con porcentajes acumula dos se<br />
identifica la clase en que se acumula 50% de las observaciones.<br />
Posteriormente, se aplica la siguiente<br />
fórmula, válida para cualquier percentil:<br />
Figura 12-9. A y B. Cada mitad de la curva vale 0.5 en la<br />
cur va de Gauss.<br />
El coeficiente de variación se obtiene para cada grupo<br />
y se calcula mediante la siguiente fórmula:<br />
s<br />
cv = ⎯ (100)<br />
x–<br />
La s significa desviación estándar y la – x re presenta<br />
la media.<br />
Series agrupadas<br />
Cuando se tienen muchos datos en un estudio conviene<br />
agruparlos con base en sus dife rencias y semejanzas.<br />
Cada grupo recibe el nom bre de categoría, intervalo<br />
de clase, intervalo o clase; se recomienda que los<br />
intervalos no sean menores de 5 ni mayores de 15.<br />
Moda. Permite identificar la clase o el inter valo<br />
con mayor frecuencia, y para ello se utili za la siguiente<br />
fórmula:<br />
⎧⎛<br />
np ( ) ⎞ ⎫<br />
⎪<br />
⎜<br />
− FA<br />
⎟<br />
⎪<br />
Pp = L. inf. +<br />
⎨ 100<br />
⎜ ⎟ W<br />
⎬<br />
⎪<br />
⎩⎝<br />
fp ⎠ ⎪<br />
⎭<br />
Donde el símbolo Pp significa percentil a cal cular;<br />
L. inf, límite inferior de la clase que con tiene a la me-<br />
0.6826<br />
0.3413 0.3413<br />
–1 0 +1<br />
z<br />
Figura 12-10. Desviación estándar (véase el texto).
248 Capítulo 12<br />
0.68<br />
0.16 1σ<br />
1σ 0.16<br />
A<br />
x<br />
0.95<br />
0.025<br />
2σ<br />
2σ<br />
0.025<br />
B<br />
x<br />
0.0015 0.997<br />
0.0015<br />
3σ<br />
3σ<br />
C<br />
x<br />
Figura 12-11. Tres desviaciones estándar. A, una; B, dos; C, tres (véase el texto).<br />
diana; n, total de valores de la se rie; p, percentil buscado<br />
(en este caso 50); FA, frecuencia acumulada hasta<br />
la clase anterior a la que contiene a la mediana; fp, frecuencia<br />
sim ple de la clase que contiene a la mediana;<br />
W, ancho de la clase que contiene a la mediana.<br />
Promedio<br />
x = fx ′<br />
n<br />
Para obtener el promedio se suman todos los puntos<br />
de la multiplicación de cada frecuencia por su<br />
correspondiente centro de clase y se di viden entre el<br />
número de valores que compo nen a la serie agrupada.<br />
Sustituyendo:<br />
x =<br />
Σ fx′<br />
n
Bioestadística 249<br />
Donde x – significa promedio; f, frecuencia; x, centro<br />
de clase; Σ , sumar; n, número de valores.<br />
Desviación estándar. Es la raíz cuadrada de la varianza.<br />
A su vez, la varianza equivale a la di visión de<br />
una suma de productos entre el nú mero de valores<br />
de la serie. La fórmula de la desviación estándar es:<br />
S =<br />
f(<br />
x ′ − x )<br />
n<br />
El procedimiento es el siguiente:<br />
Σ<br />
1. Obtener el promedio de la serie agrupada de valores<br />
mediante la fórmula del prome dio en series<br />
agrupadas.<br />
2. Calcular la desviación o diferencia de cada centro<br />
de clase en relación con el promedio de la serie.<br />
3. Elevar al cuadrado cada una de las desvia ciones<br />
anteriores.<br />
4. Multiplicar la frecuencia de cada clase con su<br />
correspondiente diferencia cuadrática; es decir,<br />
obtener productos.<br />
5. Sumar los productos anteriores.<br />
6. Dividir la suma de productos entre el núme ro de<br />
valores; es decir, obtener el promedio de desviaciones<br />
cuadráticas o varianza.<br />
Criterios para seleccionar medidas de resumen<br />
con que se describen las variables cuantitativas<br />
El promedio y la desviación estándar no pue den utilizarse<br />
en el caso de variables discretas, como el número<br />
de hijos o pacientes, porque el cálculo da por resultado<br />
cifras con fracciones y es imposible hablar de una<br />
fracción de hijo o paciente. Por ello, en estos casos se<br />
recomienda calcular por un lado la moda y la amplitud,<br />
y por otro la mediana y algunos percentiles.<br />
La moda y la amplitud son recomendables si se<br />
pretende expresar el valor más frecuente y mencionar<br />
la diferencia entre los valores ma yor y menor. La<br />
mediana y los percentiles son útiles cuando se desea<br />
identificar más valores.<br />
Cuando se estudian variables cuantitativas continuas<br />
de origen biológico, como las concen traciones<br />
de glucosa y colesterol, por lo general se obtiene una<br />
curva normal y en consecuencia es posible usar el<br />
promedio y la desviación es tándar.<br />
2<br />
Si las variables cuantitativas continuas son de origen<br />
social o económico, el polígono de frecuencias<br />
produce una curva diferente a la normal. Por esta razón<br />
se recomienda el uso del promedio y la desviación<br />
estándar.<br />
Medidas de resumen para cuantificar la relación<br />
entre dos variables cualitativas<br />
Para resumir la magnitud de la asociación en tre dos<br />
variables cualitativas se utiliza la χ 2<br />
(chi cuadrada) en<br />
tablas de 2 × 2.<br />
Análisis<br />
En esta fase correspondiente a la ejecución del método<br />
científico, el análisis de las variables se realiza mediante<br />
fórmulas especiales seleccionadas que dependen<br />
del tipo de variable y lo que se desea conocer:<br />
1. Grupo único con dos variables cuantitativas continuas<br />
de distribución normal. Por ejem plo, las<br />
calificaciones de dos asignaturas de los alumnos<br />
de un grupo. Aquí se utiliza la prueba de significancia<br />
del coeficiente de correlación de Pearson.<br />
2. Variables sin distribución normal o variables<br />
discretas. Se usa la prueba de Spearman.<br />
3. Dos variables cualitativas en un solo grupo. Si se<br />
desea correlacionar las dos variables se aplican<br />
las pruebas como chi cuadrada o la prueba de<br />
Fisher.<br />
4. Dos grupos diferentes (grupo A y grupo B), con<br />
una variable independiente de tipo cualitativo.<br />
Por ejemplo, el método de enseñanza tradicional<br />
para un grupo y el método de enseñanza<br />
constructivista para el otro. Exis ten dos tipos de<br />
pruebas:<br />
A. Para variable dependiente con distribu ción<br />
normal, que en el ejemplo anterior serían las<br />
calificaciones obtenidas, se usa la distribución<br />
t de Student.<br />
B. Para variable dependiente sin distribución<br />
normal o para variable discreta se aplica la<br />
prueba de Mann-Whitney.<br />
5. Comparación de un grupo antes y después, por<br />
ejemplo las calificaciones que constitu yen variables<br />
dependientes cuantitativas.
250 Capítulo 12<br />
A. Variable dependiente con distribución normal.<br />
Se utiliza la distribución t de Stu dent.<br />
B. Variable dependiente sin distribución nor mal<br />
o variable discreta. Se aplica la prue ba de Wilcoxon.<br />
6. Cuando hay tres o más grupos diferentes y las<br />
variables dependientes son de tipo cuan titativo,<br />
existen dos pruebas:<br />
A. Variable dependiente con distribución normal.<br />
Se utiliza el análisis de varianza (ANOVA).<br />
B. Variable dependiente sin distribución nor mal<br />
o variable discreta. Se usa la prueba de Kruskal-Wallis.<br />
7. Tres o más grupos apareados o un solo gru po en<br />
tres o más situaciones diferentes. Por ejemplo, la<br />
determinación de glucosa en tres laboratorios<br />
diferentes:<br />
A. Variable dependiente con una distribución<br />
normal. Se diseña el análisis de varianza<br />
(ANOVA) en bloques simples.<br />
B. Variable dependiente sin distribución nor mal<br />
o variable discreta. Se recomienda la prueba<br />
de Friedman.<br />
Para mayores detalles, consúltese un libro de estadística.
Capítulo 13<br />
Historia clínica 251<br />
Historia clínica<br />
Conceptos generales<br />
Para el odontólogo es muy importante conocer al paciente<br />
como una unidad biopsicosocial; es decir, al<br />
elaborar una historia clínica, el profesional conocerá<br />
el estado de salud o enferme dad del paciente y ello le<br />
permitirá brindar una atención integral.<br />
Se sabe que hay medicamentos que produ cen modificaciones<br />
en la encía y los dientes, que no es lo mismo<br />
atender a una persona sana que a una con diabetes,<br />
hipertensión o síndrome de inmunodeficiencia<br />
adquirida (sida), etc. En otra circunstancia, si se desconoce<br />
que el pa ciente es alérgico al anestésico local<br />
por utilizar, tal vez se induzca una reacción anafiláctica<br />
gra ve e incluso mortal.<br />
La historia clínica es un documento escrito que<br />
contiene todos los datos investigados acerca de la enfermedad<br />
de una persona. Constituye una narración<br />
y exposición verdadera de aconteci mientos pasados y<br />
presentes del individuo, a partir de los cuales es posible<br />
elaborar un diagnóstico, deducir un pronóstico e<br />
instituir un tra tamiento.<br />
La elaboración cuidadosa de la historia clí nica permite<br />
obtener información muy impor tante del aspecto<br />
emocional, psicológico y sociocultural del paciente,<br />
independientemente de que constituye la base para<br />
establecer una rela ción satisfactoria entre el paciente<br />
y el odontólogo.<br />
Aunque el método clínico comienza con el interrogatorio<br />
acerca del padecimiento actual, para lograr<br />
que el paciente se sienta mejor la historia clínica se<br />
elabora en otro orden.<br />
Interrogatorio<br />
Ficha de identificación<br />
Comprende los datos generales del paciente (nombre,<br />
domicilio, edad, sexo, estado civil, ocupación, escolaridad<br />
y lugar de nacimiento), fecha de elaboración de<br />
la historia clínica y, cuando el paciente padezca alguna<br />
enfermedad que requiera atención médica, el nombre<br />
y te léfono del médico.<br />
Antecedentes hereditarios<br />
y familiares<br />
Se refieren a los antecedentes y estado de salud actual<br />
de padres, abuelos, hermanos, tíos, pri mos e hijos, así<br />
como del cónyuge, si lo hubiera.<br />
Antecedentes personales<br />
no patológicos<br />
Se interroga acerca de las ocupaciones anterio res,<br />
raza, lugar de nacimiento, lugares de residencia previos,<br />
y hábitos y costumbres. Entre estos últimos también<br />
es importante ano tar aspectos relacionados con<br />
la limpieza gene ral, la higiene bucal (frecuencia del<br />
cepillado de los dientes, tipo de cepillo utilizado y uso<br />
del hilo dental), tabaquismo, alcoholismo o con sumo<br />
de otras drogas, inmunizaciones recibidas y hábitos<br />
alimentarios.
252 Capítulo 13<br />
Antecedentes personales<br />
patológicos<br />
Se anotan las enfermedades prenatales, de la infancia,<br />
juventud y edad adulta. Se investigan antecedentes<br />
traumáticos, quirúrgicos y transfusionales. En caso<br />
de enfermedades bucales conviene incluir el tipo de<br />
atención o tra tamiento recibido, experiencia previa<br />
en el uso de anestesia y, si los hubiera, antecedentes<br />
de fiebre reumática, enfermedades de las arterias coronarias,<br />
insuficiencia cardiaca, arritmias car diacas,<br />
hipertensión arterial, diabetes, epilep sia y trastornos<br />
hemorragíparos. Cuando el paciente padece de alergias<br />
es necesario seña larlas, incluso remarcarlas con<br />
letra grande.<br />
Estado actual<br />
Padecimiento actual<br />
En este apartado se anotan las características de los<br />
síntomas y signos referidos por el pacien te: fecha de<br />
inicio, localización, causa a la que se atribuye la enfermedad;<br />
en caso de dolor, si es agudo, sordo, lancinante<br />
o pulsátil, con qué se provoca, con qué se exacerba,<br />
etc. En caso de traumatismo es necesario investigar:<br />
¿cuán do?, ¿cómo?, ¿dónde?, ¿repercusión?<br />
Estado de órganos y sistemas<br />
El estado de órganos y sistemas puede cono cerse mediante<br />
el interrogatorio enfocado a detectar otros trastornos<br />
en ellos:<br />
1. Cabeza, incluyendo ojos, oídos, nariz y faringe. Se<br />
investiga si el paciente tiene cefalea, ma reo, trastornos<br />
de la visión, pérdida de la agudeza auditiva,<br />
zumbido de oídos, pér dida del equilibrio,<br />
trastornos del olfato, secreciones anormales, síntomas<br />
de obs trucción nasal, ronquera, dificultad<br />
para deglutir, etcétera.<br />
2. Sistema respiratorio. Se interroga al paciente si<br />
tiene dificultad para respirar (disnea) y, de ser<br />
así, las circunstancias en que se pre senta esa dificultad<br />
(pudiera ser que al ha cer ejercicio). También<br />
es necesario saber si sufre dolor en el tórax<br />
y, en caso afirmati vo, anotar sus características.<br />
Cuando pa dece tos debe averiguarse si expulsa<br />
san gre o alguna secreción.<br />
3. Sistema angiológico, circulatorio o cardiovas cular.<br />
Algunas preguntas en este sentido son: ¿experimenta<br />
dolor o sensación de opresión en el tórax,<br />
palpitaciones o dificultad para respirar al estar<br />
acostado?; ¿se hincha el cuerpo (hay edema)?;<br />
¿amanece con dolor de cabeza?; ¿siente zumbido<br />
de oídos?; ¿ve lucecitas?; ¿padece mareos?;<br />
¿pierde el conocimiento de manera súbita (lipotimias)?<br />
4. Sistema digestivo. Es necesario preguntar, en tre<br />
otras cosas: ¿tiene dificultad para deglu tir (disfagia),<br />
náusea o vómito?, y de ser así, ¿con qué características?;<br />
¿padece indiges tión, ardor de estómago<br />
y acidez (pirosis)?; ¿tiene intolerancia a<br />
los alimentos?; ¿cam bios en la defecación?; ¿diarrea?;<br />
¿estreñi miento?; ¿gases (meteorismo)?<br />
5. Sistema genitourinario. Cabe averiguar: ¿cuántas<br />
veces orina al día?; ¿siente moles tias al orinar?;<br />
¿observa sangre o pus en la orina?; ¿se hincha<br />
de la cara o los párpa dos?; ¿experimenta incontinencia<br />
urinaria?; ¿nicturia? En las mujeres se<br />
investigan características de la menstruación<br />
(menar quia, ciclo menstrual y, en su caso, amenorrea,<br />
dismenorrea y menopausia), número de<br />
embarazos, total de partos (si fueron eutócicos<br />
o distócicos), número de abortos (espontáneos o<br />
provocados), cesáreas, nú mero de hijos y peso al<br />
nacer de cada uno.<br />
6. Sistema osteomusculoarticular (musculoesquelético).<br />
Para conocer el estado de estos siste mas puede<br />
preguntarse: ¿hay dolor, rigidez o dificultad<br />
en los movimientos?; ¿defor midad articular?;<br />
¿problemas con la fuerza muscular?<br />
7. Sistema nervioso. Entre las interrogantes por formular<br />
se encuentran: ¿sufre desmayos, ataques<br />
o convulsiones?; ¿tiene alguna pa rálisis?; ¿padece<br />
trastornos de la sensibili dad?; ¿experimenta<br />
temblores, cefalea o vértigo?<br />
8. Función psicointelectual y sexual. Es necesario saber<br />
si el paciente tiene buena memoria: ¿recuerda<br />
sucesos de la infancia?; ¿sabe la fecha de hoy: el<br />
día, el mes y el año?; ¿sabe en dónde está?; ¿hace<br />
lo que se propone?; ¿experimenta indiferencia<br />
o demasiada afectación ante el dolor o el sufri-
Historia clínica 253<br />
miento de los demás?; ¿entiende lo que le dicen<br />
los demás? En caso de un adolescente, adulto o<br />
anciano es importante conocer si sus funciones<br />
sexuales son normales y si tiene mu chas parejas<br />
sexuales.<br />
9. Sistema endocrino. En relación con este as pecto<br />
cabe preguntar al paciente: ¿orina mucho (poliuria)?;<br />
¿tiene demasiada sed (polidipsia)?; ¿siente<br />
demasiado apetito (polifagia)?; ¿está adelgazando<br />
con rapi dez?; ¿ha notado si sus pulsaciones<br />
son más rápidas que antes?; ¿nota que sus ojos<br />
se han ido saltando?; ¿le ha crecido el cuello por<br />
delante?; ¿ha aumentado de peso?; ¿tie ne frío<br />
constantemente?; ¿su piel está muy seca o muy<br />
húmeda?; ¿ha observado au mento en el tamaño<br />
de sus manos o sus pies?; ¿ve medias figuras?<br />
10. Sistema hematopoyético. Para conocer el es tado<br />
de este sistema es necesario averiguar si el paciente<br />
sangra con facilidad y en ex ceso cuando<br />
sufre algún traumatismo y también si tiene petequias,<br />
equimosis, epis taxis, hematuria, hematemesis<br />
o adenopatías.<br />
Síntomas generales<br />
Es necesario anotar si se padece fiebre, escalofrío y<br />
cansancio.<br />
Terapéutica empleada<br />
Aquí se anotan los tratamientos a que ha sido sometido<br />
el paciente y los medicamentos que está tomando.<br />
Examen físico<br />
La percepción del dolor varía en cada persona. Por<br />
ello es muy importante hacer un examen físico completo,<br />
sobre todo en niños, ancianos y personas con<br />
problemas mentales. Antes de iniciar con el examen<br />
físico es necesario anotar los datos generales del paciente,<br />
entre ellos peso y estatura.<br />
Inspección<br />
General<br />
Es la exploración de conjunto por medio de la vista y<br />
sin ninguna preparación previa. Permi te conocer:<br />
1. Estado de salud o de enfermedad.<br />
2. Edad aparente. En ciertas enfermedades del sistema<br />
endocrino, la edad aparente puede ser mayor<br />
o menor; la falta de dientes da un aspecto de<br />
mayor edad.<br />
3. Sexo. Éste es fácil de identificar en la mayoría de<br />
los casos.<br />
4. Raza. Orienta respecto de la propensión a ciertas<br />
enfermedades en determinado gru po racial.<br />
5. Estado de conciencia. Este aspecto es im portante,<br />
sobre todo para emitir un pronós tico.<br />
6. Actitud o postura del individuo. Algunas actitudes<br />
son características en determina dos padecimientos;<br />
si el paciente tiene pro blemas de postura<br />
es necesario verificar si puede sentarse bien en<br />
el sillón dental.<br />
7. Facies. Es un elemento de gran valor diag nóstico,<br />
ya que constituye un sello del esta do de afectividad,<br />
carácter, inteligen cia y estado de salud. Así,<br />
por ejemplo, el paciente en estado de choque<br />
tiene pali dez intensa, mirada brillante, aumento<br />
de la hendidura palpebral. La facies dolorosa se<br />
caracteriza por pliegues de la cara acen tuados,<br />
frente arrugada, ojos empequeñe cidos, en ocasiones<br />
lágrimas, mandíbula apretada, cara ligeramente<br />
demacrada y mirada inestable. Por su<br />
parte, el respira dor bucal tiene la boca entreabierta,<br />
labios y encías secos, pómulos aplanados<br />
por la es casa neumatización de los senos paranasales<br />
y mandíbula retraída.<br />
8. Heridas exteriores, contusiones o deforma ciones.<br />
Éstas pueden indicar el sitio afectado.<br />
9. Conformación. Permite indicar si la persona<br />
está o no proporcionada, si hay abultamientos,<br />
etcétera.<br />
10. Constitución. Se refiere al estado de nutri ción o<br />
robustez. Si el paciente es obeso se debe investigar<br />
su alimentación o si tiene trastornos endocrinos.<br />
11. Respiración. Se modifica cuando hay ten sión<br />
emocional, dificultades para la entra da del aire<br />
hacia el sistema respiratorio o afección del tejido<br />
muscular o el tejido pul monar.<br />
12. Movimientos anormales, funciones mo trices o<br />
sensoriales, o ambas, deficientes. Pueden sugerir<br />
problemas en el aseo den tal.
254 Capítulo 13<br />
13. Tumoraciones o prominencias anormales. Deben<br />
ser motivo de estudio minucioso posteriormente.<br />
14. Cicatrices y alteraciones de la piel. Pueden contribuir<br />
al diagnóstico.<br />
15. Marcha. Determinado tipo de marcha pue de indicar<br />
antecedentes patológicos.<br />
Local<br />
La exploración de cabeza y cuello tiene que ser muy<br />
minuciosa. Para ello, el paciente debe sentarse en posición<br />
erguida o semisupina, no te ner anteojos puestos,<br />
y mantener el cuello des cubierto.<br />
El odontólogo se coloca frente al paciente para empezar<br />
la inspección en el cabello (textu ra, cantidad y<br />
distribución) y el cuero cabelludo, y verificar si hay<br />
parásitos.<br />
La exploración continúa con la cara en busca de<br />
simetría, la cual puede perderse por una paráli sis facial.<br />
También se examina para buscar máculas (áreas<br />
de diferente color) o lesiones como las siguientes:<br />
1. Pápulas. Zonas de tejido superficial lige ramente<br />
elevadas.<br />
2. Nódulos. Pápulas endurecidas.<br />
3. Vesículas. Elevaciones pequeñas con líqui do en<br />
su interior.<br />
4. Pústulas. Vesículas con pus.<br />
5. Úlceras. Defectos en la piel o mucosas con pérdida<br />
de tejido.<br />
6. Tumores.<br />
7. Queratosis. Engrosamiento anormal de las capas<br />
exteriores de la piel o las mucosas; se produce,<br />
por ejemplo, cuando el paciente se muerde los<br />
carrillos, fuma o padece leucoplasia (cap. 6).<br />
La revisión de los ojos incluye: color y posi bles signos<br />
de irritación de las escleróticas (escleras); tamaño<br />
de las pupilas y reacción de éstas ante estímulos luminosos;<br />
textura, forma y co lor de los párpados, frecuencia<br />
del parpadeo, y color y grado de humedad de las<br />
conjuntivas, para lo cual puede retraerse el párpado<br />
con la punta del dedo índice.<br />
De la nariz se estudian forma, simetría y si existen<br />
obstrucciones.<br />
En los labios se revisa simetría, forma, textu ra y<br />
color, así como signos de irritación, sequedad, grietas,<br />
especialmente en las comisuras, y si hay dificultad<br />
para cerrarlos. Por último, es importante revisar los<br />
oídos.<br />
Intrabucal<br />
Antes de iniciar la inspección intrabucal es preciso<br />
preparar una charola con todos los ins trumentos y<br />
materiales necesarios: espejo, explorador, sondas, pinzas<br />
para algodón, depresor lingual, rollos de algodón<br />
para el aislamiento de los dientes y gasas (fig. 13-1).<br />
Para llevarla a cabo se requiere:<br />
1. Posición cómoda, tanto del odontólogo como<br />
del paciente. Por esa razón, se recomienda bajar<br />
el respaldo del sillón hasta la posición supina.<br />
2. Retirar las prótesis dentales no permanen tes, si<br />
las hubiera.<br />
3. Buena iluminación, ya sea directa o indirec ta. La<br />
iluminación directa se proporciona al dirigir el<br />
rayo central de la lámpara hacia los diferentes sitios<br />
de la boca, sin las timar los ojos del paciente.<br />
En las porciones posteriores de la boca, donde es<br />
difícil usar el rayo directo, puede utilizarse iluminación<br />
indirecta adicional mediante el espejo<br />
bucal.<br />
4. Retracción, ya que es necesaria para obser var la<br />
superficie de las mucosas, así como el piso y los<br />
sitios ocultos de la boca (fig. 13-2).<br />
Se sugiere realizar la inspección en el siguien te orden:<br />
labios, mucosas labial y bucal, carri llos, piso de la<br />
boca, paladar duro y blando, len gua, zona retromolar,<br />
tuberosidades maxilares, rebordes alveolares y dientes.<br />
Los labios en condiciones normales presentan una<br />
piel intacta y textura firme, ligeramente húme da. Las<br />
anomalías más comunes son: labios partidos, grietas<br />
en las comisuras, lesiones por mordedura de los labios,<br />
vesículas, úlceras o lesiones aftosas.<br />
La mucosa labial se revisa hasta las comisuras y el<br />
frenillo; para ello, es necesario retraerla hacia afuera<br />
alejándola de los dientes y hasta la zona retromolar,<br />
incluyendo la desembocadu ra de las glándulas parotídeas<br />
(parótidas) (fig. 13-3).<br />
Para revisar el piso de la boca, se pide al pa ciente<br />
que levante la lengua hasta el paladar. Se observan las<br />
características de la vena lingual, el pliegue fimbriado,
Historia clínica 255<br />
Figura 13-1. Instrumentos y materiales para el examen bucal (de izquierda a derecha: espejo bucal, sonda, explorador,<br />
pinzas para algodón, depresor lingual, rollos de algodón para el aislamiento de los dientes y gasas).<br />
Figura 13-2. Inspección intrabucal. Puede<br />
usarse un depresor lingual para<br />
ayudar a la retracción de los<br />
tejidos durante esta inspección.
256 Capítulo 13<br />
Figura 13-3. Inspección de la mucosa labial.<br />
el frenillo lingual, la carúncula sublingual, los pliegues<br />
linguales y sublinguales, y los orificios de los conductos<br />
sa livales.<br />
El paladar duro en condiciones normales es rosa<br />
claro. Al inspeccionarlo es necesario exa minar su forma<br />
y también la papila incisal, el rafé palatino medio,<br />
las arrugas palatinas y las fóveas palatinas. En el paladar<br />
blando se revisan simetría y características de la<br />
úvula palatina, entre ellas motilidad; para esto, se pide<br />
al pa ciente que diga “aaaa…” de manera continua. Se<br />
puede ayudar con un depresor lingual que se coloca<br />
sobre el tercio anterior de la lengua. No debe olvidarse<br />
revisar el resto del istmo de las fauces: amígdalas (tonsilas)<br />
y pilares, por que puede haber manifestaciones<br />
de infección.<br />
El examen de la lengua empieza con la cara dorsal<br />
(superior) e incluye color, humedad, le siones, simetría<br />
y forma. Se estudian las carac terísticas de las papilas.<br />
También se revisan los bordes laterales en busca de<br />
lesiones, ya que son sitios frecuentes de cáncer bucal;<br />
para ob servarlos es necesario retraer la lengua, lo cual<br />
puede hacerse utilizando un trozo de gasa que se coloca<br />
en el tercio anterior. En otro momen to, se pide al<br />
paciente que saque la lengua con el fin de buscar desviaciones.<br />
Se inspecciona la cara ventral de la lengua<br />
después de pedir al paciente que levante la punta de la<br />
lengua has ta tocar el techo de la boca (fig. 13-4). No<br />
se deben pasar por alto la tube rosidad del maxilar y la<br />
zona retromolar.<br />
Los rebordes alveolares se examinan en busca de signos<br />
de enrojecimiento, cambios de coloración y aumento<br />
de volumen o lesiones; para esto, es necesario<br />
retraer la mucosa bucal y la lengua.<br />
Por último, se inspeccionan los dientes. Si es necesario,<br />
se utiliza un abatelenguas para se parar los carrillos<br />
y la lengua. Se revisa cada diente que ha hecho<br />
erupción, su posición, la distancia entre ellos y cada<br />
uno por separa do: tamaño, color, malformaciones,<br />
placa dentobacteriana, tártaro, lesiones y tumores, y<br />
la oclu sión de los dos maxilares.<br />
De las demás regiones corporales<br />
Se puede observar si la respiración es profun da o superficial,<br />
rápida o lenta o si existe difi cultad para respirar.
Historia clínica 257<br />
Figura 13-4. Inspección de la superficie ventral de la lengua.<br />
Las manos pueden tener manchas de nicoti na; dedos<br />
en palillo de tambor, los cuales son característicos<br />
en enfermedades cardiopulmonares; rigidez en articulaciones<br />
y movilidad dis minuida, las cuales sugieren<br />
artritis.<br />
Palpación<br />
La palpación puede ser de diferentes tipos:<br />
1. Digital. Se lleva a cabo con un dedo.<br />
2. Bidigital. El tejido se sujeta entre el pulgar y uno<br />
o más dedos.<br />
3. Manual. Se efectúa con más dedos.<br />
4. Bimanual. Se realiza con ambas manos.<br />
5. Circular. Consiste en desplazar con cierta presión<br />
las yemas de los dedos siguiendo un trayecto<br />
circular para palpar una estructura.<br />
Este procedimiento es secuencial por estruc turas.<br />
Por ello se ajusta al siguiente orden: músculo mentoniano;<br />
borde anterior de la mandíbula; ganglios<br />
linfáticos (linfonodos) occipita les; ganglios linfáticos<br />
(linfonodos) auriculares; articulación temporomandibular<br />
o temporomaxilar; glándula parotídea (parótida)<br />
y ganglios linfáticos (linfonodos) parotídeos; músculo<br />
masetero; músculo tempo ral; región mentoniana; región<br />
submandibular (submaxilar); músculo esternocleidomastoideo;<br />
ganglios linfáticos (linfonodos) cervicales<br />
superfi ciales, ganglios linfáticos (linfonodos)<br />
cervicales profundos; glándula tiroidea (tiroides); hueso<br />
hioideo (hioides) y estructuras bucales.<br />
Músculo mentoniano<br />
Se hace una ligera compresión digital, rodando el tejido<br />
sobre la mandíbula. Se da al paciente un vaso con<br />
agua y se observa la deglución para complementar el<br />
estudio.<br />
Borde anterior de la mandíbula<br />
El odontólogo se coloca detrás del paciente y realiza la<br />
compresión bidigital con movimien to circular sobre<br />
los tejidos blandos; comienza en la sínfisis de la mandíbula<br />
y recorre su bor de poco a poco hasta su ángulo.<br />
Se deben in cluir tejidos blandos y hueso (fig. 13-5).
258 Capítulo 13<br />
Figura 13-5. Palpación del borde anterior de la mandíbula.<br />
Ganglios (linfonodos) linfáticos occipitales<br />
El paciente debe inclinar la cabeza hacia ade lante para<br />
que el profesional realice la compre sión circular digital,<br />
utilizando únicamente las yemas de los dedos.<br />
Ganglios (linfonodos) linfáticos auriculares<br />
Primero se palpan los ganglios linfáticos (linfonodos)<br />
posteriores, luego los inferiores y por último los anteriores<br />
(fig. 13-6). Se hace compresión digital en ellos y<br />
movimientos circulares con las yemas de los dedos.<br />
Articulación temporomandibular<br />
o temporomaxilar<br />
Se palpan ambos lados al mismo tiempo: los dedos<br />
índices de cada mano se colocan delante del meato<br />
acústico externo (conducto auditivo externo) mientras<br />
el paciente abre y cierra lentamente la boca varias<br />
veces, y luego realiza mo vimientos laterales con los<br />
dientes separados y protruidos (figs. 13-7 y 13-8).<br />
Figura 13-6. Palpación de ganglios linfáticos (linfonodos)<br />
auriculares.
Historia clínica 259<br />
Figura 13-7. Palpación de la articulación<br />
temporomandibular sin movimientos<br />
por parte del pa ciente.<br />
Figura 13-8. Palpación de la articulación<br />
temporomandibular con movimientos<br />
que realiza el paciente.<br />
Glándulas parótidas y ganglios (linfonodos)<br />
linfáticos parotídeos<br />
Ambos lados se palpan de manera simultánea mediante<br />
compresión digital y movimien to circular. Se<br />
empieza adelante del trago del oído y se continúa hacia<br />
abajo hasta el ángulo de la mandíbula (fig. 13-9).<br />
Región submandibular (submaxilar)<br />
Se hace compresión bidigital con movimientos circulares<br />
tratando de proyectar los tejidos ha cia el lado<br />
Músculo masetero<br />
Se colocan los dedos de cada mano sobre el án gulo de<br />
la mandíbula y se pide al paciente que haga presión<br />
con los dientes en oclusión.<br />
Músculo temporal<br />
Se explora de manera similar a como se hace con el<br />
músculo masetero; pero ahora las manos se colocan<br />
en la región temporal.<br />
Región mentoniana<br />
Mediante compresión digital y movimien tos circulares<br />
atrás y abajo de la sínfisis de la mandíbula, se busca<br />
si existen alteraciones (fig. 13-10).<br />
Figura 13-9. Palpación de las glándulas parotídeas<br />
(parótidas).
260 Capítulo 13<br />
La exploración se facilita cuando el paciente gira la cabeza<br />
hacia la izquierda y baja el mentón. A continuación<br />
se palpa el músculo entre el pulgar y los demás<br />
dedos, yendo desde atrás del pabe llón de la oreja hasta<br />
la clavícula (fig. 13-12). Después se pide al paciente<br />
que gire la cabeza hacia la derecha y baje el mentón, y<br />
se repite la palpación.<br />
Ganglios linfáticos (linfonodos)<br />
cervicales superficiales<br />
Se realiza compresión digital y movimiento cir cular<br />
en las porciones anterior y posterior del músculo esternocleidomastoideo.<br />
Figura 13-10. Palpación de la región submentoniana.<br />
opuesto; se empieza en la línea me dia y se termina a la<br />
altura del ángulo de la man díbula (fig. 13-11).<br />
Músculo esternocleidomastoideo<br />
Ganglios linfáticos (linfonodos)<br />
cervicales profundos<br />
Se palpan a lo largo del esternocleidomastoi deo pero<br />
más profundamente (fig. 13-13).<br />
Glándula tiroidea (tiroides)<br />
Normalmente no se visualiza. Para palparla, hay que<br />
colocarse atrás del paciente; con una mano se desplazan<br />
los tejidos hacia un lado, mientras los dedos de<br />
la otra mano palpan compri miendo suavemente con<br />
movimientos circu lares (fig. 13-14).<br />
Figura 13-11. Palpación de la zona submaxilar<br />
(submandibular).<br />
Figura 13-12. Palpación del músculo<br />
esternocleidomastoideo.
Historia clínica 261<br />
Figura 13-15. Palpación de la laringe.<br />
Figura 13-13. Palpación de ganglios linfáticos (linfonodos)<br />
cervicales.<br />
Laringe<br />
La laringe se palpa con las yemas de los dedos de una<br />
mano, entre el pulgar y los demás de dos, y se aplica<br />
presión suave, alternada hacia un lado y hacia el otro.<br />
Ésta asciende y desciende cuando el paciente deglute<br />
(fig. 13-15).<br />
Figura 13-14. Palpación de la glándula tiroidea (tiroi des).<br />
Hueso hioideo (hioides)<br />
Las yemas de los dedos de una mano se colo can en<br />
la línea media del cuello, arriba del car tílago tiroideo<br />
(tiroides). El hueso hioideo (hioides) asciende y desciende<br />
con la deglución.<br />
Estructuras intrabucales<br />
Después de ponerse los guantes de látex, se colocan los<br />
tejidos de la mucosa labial entre el pulgar y los dedos,<br />
y entonces se hace compre sión bidigital (fig. 13-16).<br />
La mucosa bucal y el piso de la boca se exa minan<br />
por palpación bimanual. Los dedos de una mano se<br />
colocan dentro de la boca y contra los tejidos, mientras<br />
que con la otra mano se sostienen los tejidos fuera<br />
de la boca; de ese modo, el tejido queda entre las dos<br />
manos (fig. 13-17).<br />
El paladar duro se palpa por compresión di gital,<br />
con uno o dos dedos contra la superficie palatina (fig.<br />
13-18); la lengua también se palpa por compresión<br />
digital (figs. 13-19 y 13-20), y los rebor des alveolares<br />
por compresión bidigital con los dedos pulgar e índice<br />
en oposición (fig. 13-21).<br />
La palpación debe incluir revisión de la movi lidad<br />
de los dientes, sondeo y reconocimiento de cualquier<br />
sangrado gingival. Si hay caries dental, es indispensable<br />
apoyarse en el explorador clínico.
262 Capítulo 13<br />
articulación temporomandibular) y transiluminación.<br />
Los resultados de éstos deben anotarse.<br />
Si el paciente tiene maloclusión es necesario realizar<br />
valoración funcional (respiración, alimentación y<br />
lenguaje).<br />
Los resultados de la exploración bucodental se<br />
anotan en un apartado especial: labios, ca rrillos, piso<br />
de la boca, paladar blando, paladar duro, articulación<br />
temporomandibular, si exis ten disfunciones, estado<br />
de la encía, si el pa ciente tiene bolsas periodontales,<br />
anodoncia, dientes supernumerarios, microdoncia,<br />
macrodoncia, abrasiones, alteraciones pulpares, dientes<br />
ausentes, etcétera.<br />
Cuando el paciente tiene prótesis, se especi fica si<br />
éstas son totales, removibles o fijas, así como adecuadas<br />
o inadecuadas. También se anotan las características<br />
de la higiene bucal.<br />
Figura 13-16. Palpación de la mucosa labial.<br />
Otros procedimientos<br />
Otros procedimientos para el examen físico consisten<br />
en percusión de los dientes, auscultación (p. ej., de la<br />
Signos vitales<br />
El paciente debe estar sentado y cómodo mien tras se<br />
le toman los signos vitales: pulso, respi ración, temperatura<br />
y presión arterial.<br />
Por lo general, el pulso se mide presionando la arteria<br />
radial a la altura de la muñeca, con las puntas<br />
Figura 13-17. Palpación del piso de la boca.<br />
Figura 13-18. Palpación del paladar duro.
Historia clínica 263<br />
Figura 13-19. Palpación de la superficie dor sal de la<br />
lengua.<br />
Figura 13-20. Palpación de los bordes la terales de la<br />
lengua.<br />
de los dedos índice, medio y anular, pero nunca con<br />
el pulgar. Si resulta imposible, se puede tomar en la<br />
arteria braquial (humeral), la parte anterior del brazo,<br />
cerca del pliegue del codo, la carótida, la arteria temporal<br />
(arriba y adelante del oído) o la arteria facial. La<br />
frecuen cia normal del pulso varía en el adulto de 60 a<br />
80 por minuto y en los niños es mayor.<br />
La respiración se determina observando los movimientos<br />
respiratorios mientras se toma el pulso y sin<br />
comunicárselo al paciente. Su frecuencia normal es de<br />
16 a 20 por minuto en el adulto y aumenta en los niños.<br />
La temperatura se mide bajo la lengua mediante un<br />
termómetro bucal. En niños pequeños se utiliza el termómetro<br />
rectal. En con diciones normales es de 36.5 a<br />
37°C.<br />
La presión arterial se determina con un este toscopio<br />
y un esfigmomanómetro o baumanómetro, aunque<br />
hay esfigmomanómetros digi tales que no requieren el<br />
uso del estetoscopio.<br />
En el procedimiento tradicional, debe des cubrirse<br />
el brazo para permitir el acceso hasta la arteria braquial<br />
o humeral y descansar el antebrazo del paciente<br />
en posición ligeramente flexionada, con la palma de<br />
la mano hacia arriba y los dedos extendidos y relajados.<br />
Se enrolla el manguito del esfigmomanómetro<br />
por arriba del pliegue del codo, vigilando que no se<br />
Figura 13-21. Palpación de los rebor des alveolares.
264 Capítulo 13<br />
en cuentre ni muy suelto ni muy apretado. Se lo caliza<br />
el pulso radial en la muñeca o se coloca la cápsula del<br />
estetoscopio a la altura de la ar teria humeral, cerca<br />
del pliegue del codo. A con tinuación, se cierra la válvula<br />
y se aprieta la perilla varias veces hasta dejar de<br />
percibir el pulso, y se afloja ligeramente la válvula para<br />
liberar poco a poco el aire. La cifra en que se escucha<br />
el primer ruido del pulso corresponde a la presión sistólica<br />
y la cifra en que baja la intensidad corresponde<br />
a la presión diastólica. Las cifras se anotan separadas<br />
por una línea dia gonal, por ejemplo 120/70; si la persona<br />
tiene 140/90 está en el límite de la hipertensión<br />
arte rial (fig. 13-22).<br />
Pruebas especiales de laboratorio<br />
y gabinete<br />
La exploración física puede complementarse con exámenes<br />
especiales, entre ellos radiológi cos, de laboratorio,<br />
anatomopatológicos e intervenciones quirúrgicas<br />
exploradoras.<br />
Conclusiones diagnósticas,<br />
pronósticas y terapéuticas<br />
La historia clínica se completa con las conclusio nes<br />
diagnósticas, pronósticas (favorables, reserva das, fatales)<br />
y las terapéuticas (tipo de tratamiento).<br />
Las cédulas para presentar todos estos datos varían<br />
en cada institución, aunque comprenden los mismos<br />
aspectos. En la Facultad de Odon tología de la Universidad<br />
Nacional Autónoma de México (UNAM) se utiliza<br />
la que se presen ta en el cuadro 13-1.<br />
Por otra parte, la Unidad de Salud Oral de la Organización<br />
Mundial de la Salud (OMS) dise ñó una<br />
cédula para medir la salud bucal (cuadro 13-2), en la<br />
cual se incluyen las siguientes secciones:<br />
Información<br />
Núm. de casilla<br />
Identificación para la investigación 1 a 12<br />
Información general 13 a 23<br />
Maloclusiones 24<br />
Estado periodontal 25 a 30<br />
Figura 13-22. Medición de la presión arterial. Se coloca la cápsula del estetoscopio sobre un ramo de la arteria humeral<br />
(braquial). Esto es, aproximadamente a 3 cm del pliegue del brazo hacia la mano y cerca de la cara interna<br />
del antebrazo. Fuente: Bound SS, Reynolds NJ. Current concepts in dental hygiene. Vol 2. St. Louis: CV Mosby,<br />
1979.
Historia clínica 265<br />
Cuadro 13-1. Cédula para elaborar la historia clínica<br />
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO<br />
FACULTAD DE ODONTOLOGÍA<br />
FECHA<br />
Asignatura<br />
I. Ficha de identificación<br />
Día Mes Año<br />
Carnet núm. ______________________ Año lectivo __________<br />
Nombre alumno ____________________________________<br />
Grupo ___________ Periférica ___________ Turno ___________<br />
Nombre del paciente __________________________________________________________________ Edad______________<br />
Domicilio<br />
____________________________________________________________________________________<br />
Calle Número Colonia CP<br />
Sexo (F) (M) Estado civil _____________________________________<br />
Ocupación<br />
______________________________________________ Tel. domicilio _____________________________<br />
______________________________________________ Tel. oficina ______________________________<br />
Lugar de nacimiento ___________________________________ Interrogatorio directo ( ) Indirecto ( )<br />
Analfabeta Sí ( ) No ( ) Grado de escolaridad<br />
II. Antecedentes heredofamiliares<br />
Parentesco Enfermedad actual Edad Causa de defunción<br />
Padre<br />
Madre<br />
Hermanos<br />
Cónyuge<br />
Hijos<br />
Colaterales<br />
III. Antecedentes personales no patológicos<br />
Núm. de habitaciones ____________________________________________ Deportes ____________________________<br />
Núm. de habitantes ____________________________________________ Tabaquismo ____________________________<br />
Higiene personal ____________________________________________ Alcoholismo ____________________________<br />
Grupo sanguíneo ____________________________________________ Drogas ____________________________<br />
Inmunizaciones ____________________________________________ Hábitos ____________________________<br />
Alimentación ____________________________________________ Otros ____________________________<br />
Cantidad<br />
____________________________________________ Preferencias sexuales<br />
Calidad Hetero Bi Homo<br />
IV. Antecedentes personales patológicos<br />
Anamnesis por orden cronológico ____________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
Guía<br />
Enfermedades propias de la<br />
infancia<br />
Antecedentes:<br />
Traumáticos<br />
Quirúrgicos<br />
Alérgicos<br />
Transfusionales<br />
Experiencia previa en el uso de<br />
anestesia<br />
Otros<br />
(Continúa)
266 Capítulo 13<br />
Cuadro 13-1. Cédula para elaborar la historia clínica (continuación)<br />
V. Padecimiento actual (motivo de la consulta bucal)<br />
Anamnesis por orden cronológico ____________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
_______________________________________________________________<br />
Guía<br />
Fecha de inicio de la enfermedad<br />
Causa a la que atribuye la enfermedad<br />
Signos y síntomas observados por<br />
el paciente<br />
Mencione si se realizaron:<br />
Diagnóstico<br />
Pronóstico<br />
Tratamiento<br />
Así como resultado(s)<br />
Otros:<br />
VI. Interrogatorio por aparatos y sistemas<br />
A. Respiratorio _________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
B. Cardiovascular ________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
C. Digestivo _________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
_________________________________________________________________________<br />
Guía<br />
Obstrucción nasal<br />
Rinorrea<br />
Epistaxis<br />
Hemoptisis<br />
Tos<br />
Expectoración<br />
Disnea<br />
Cianosis<br />
Otros:<br />
Cefalea<br />
Mareos<br />
Disnea<br />
Dolor precordial<br />
Palpitaciones<br />
Lipotimia<br />
Edema<br />
Otros:<br />
Disfagia<br />
Náusea<br />
Vómito<br />
Hematemesis<br />
Diarrea<br />
Pirosis<br />
Meteorismo<br />
Melena<br />
Estreñimiento<br />
Otros:
Historia clínica 267<br />
Cuadro 13-1. Cédula para elaborar la historia clínica (continuación)<br />
D. Genitourinario ______________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
Mujeres (ficha ginecoobstétrica)<br />
Menarquia ______________________________________________________ Ciclo menstrual ________________<br />
Método anticonceptivo _________________________________________________________________________<br />
Amenorrea _______________________________________ Dismenorrea _________________________________<br />
Menopausia ______________________________________ Núm. de embarazos ( )<br />
Abortos ( ) Espontáneos ( ) Provocados ( )<br />
Partos ( ) Normales ( ) Cesáreas ( )<br />
Núm. de hijos ( )<br />
Peso de los hijos al nacer (en kilogramos)<br />
1o. 2o. 3o.<br />
4o. 5o. 6o.<br />
E. Endocrino ________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
F. Hematopoyético ______________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
________________________________________________________________________<br />
Guía<br />
Núm. de micciones<br />
Piuria<br />
Disuria<br />
Edema<br />
Incontinencia<br />
urinaria<br />
Dolor lumbar<br />
Poliuria<br />
Hematuria<br />
Nicturia<br />
Otros:<br />
Guía<br />
Poliuria<br />
Polidipsia<br />
Polifagia<br />
Pérdida o aumento<br />
de peso<br />
Intolerancia al<br />
calor o frío<br />
Otros:<br />
Hemorragia<br />
Adenopatías<br />
Epistaxis<br />
Hematuria<br />
Hematemesis<br />
Petequias<br />
Equimosis<br />
Otros:<br />
(Continúa)
268 Capítulo 13<br />
Cuadro 13-1. Cédula para elaborar la historia clínica (continuación)<br />
G. Nervioso _____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
H. Musculoesquelético ________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
I. Tegumentario ____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
VII. Exploración física<br />
1. Datos generales:<br />
Guía<br />
Cefaleas<br />
Lipotimia<br />
Parestesia<br />
Anestesia<br />
Vértigo<br />
Temblor<br />
Convulsiones<br />
Otros:<br />
Dolor articular<br />
Fuerza muscular<br />
Deformidad articular<br />
Limitación de<br />
movimientos<br />
Cambio de color en piel<br />
Erupciones<br />
Prurito<br />
Pérdida de pelo o vello<br />
Sequedad cutánea<br />
Hiperhidrosis<br />
Otros:<br />
Peso _______________________________ Estatura ________________________________<br />
Signos vitales<br />
Temperatura __________________________ Pulso __________________________________<br />
Presión arterial ________________________ Frecuencia respiratoria _______________________<br />
2. Inspección general (anote exclusivamente enfermedades)<br />
Guía<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
Cabeza<br />
Ojos<br />
Nariz<br />
Oídos<br />
Cuello<br />
Tronco<br />
Extremidades
Historia clínica 269<br />
Cuadro 13-1. Cédula para elaborar la historia clínica (continuación)<br />
3. Exploración bucal (anote exclusivamente enfermedades)<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
VIII. Auxiliares de diagnóstico<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
_____________________________________________________________________<br />
Guía<br />
Labios<br />
Carrillos<br />
Lengua<br />
Piso de boca<br />
Paladar blando<br />
Paladar duro<br />
Articulación<br />
temporomandibular<br />
(ATM)<br />
Disfunciones<br />
Dientes<br />
Anodoncia<br />
Supernumerarios<br />
Microdoncia<br />
Macrodoncia<br />
Etc.<br />
Otros:<br />
Radiografías<br />
Química sanguínea<br />
General de orina<br />
Pruebas de ELISA y VIH<br />
Biometría hemática<br />
Coprocultivo<br />
Citología exfoliativa<br />
VDRL<br />
Glucosa sanguínea<br />
Otros:<br />
Diagnóstico de presunción (sistémico) ______________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
Observación(es) _____________________________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
______________________________________________________________________________________<br />
Nombre y firma de conformidad y veracidad de los datos aportados<br />
Autorizó:<br />
Nombre y firma del docente
270 Capítulo 13<br />
Cuadro 13-2. Versiones completa y simplificada del formato de medición de salud de la Organización Mundial de la Salud<br />
(OMS) (1986)<br />
País<br />
Deje en blanco Año Mes Día<br />
Número de<br />
identificación<br />
Original/<br />
duplicado<br />
Examinador<br />
(1) (4) (5) (6) (7) (10) (11) (12)<br />
INFORMACIÓN GENERAL<br />
Edad en años<br />
Sexo (M = 1, F = 2)<br />
Grupo étnico<br />
Ocupación<br />
MALOCLUSIONES<br />
0 = ninguna<br />
1 = leve<br />
2 = moderada<br />
o grave<br />
Nombre . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . OTROS DATOS (especifique y proporcione códigos)<br />
(13) (14)<br />
Localización<br />
geográfica<br />
(18) (19)<br />
(21)<br />
(15)<br />
Tipo de localización:<br />
(22)<br />
(16)<br />
1 = urbana<br />
(17)<br />
2 = suburbana<br />
3 = rural<br />
(20) (23)<br />
(24)<br />
ESTADO PERIODONTAL (INTPC)<br />
17/16 11 26/27<br />
(25) (27)<br />
(28) (30)<br />
47/46 31 36/37<br />
0 = sano<br />
1 = sangrado<br />
2 = cálculo<br />
3 = bolsa de 4 a 5 mm (parcialmente<br />
visible la banda de la sonda)<br />
4 = bolsa de más de 6 mm (la<br />
banda de la sonda no se ve)<br />
X = sextante excluido<br />
CONDICIONES DENTALES Y NECESIDADES DE TRATAMIENTO<br />
55 54 53 52 51 61 62 63 64 65<br />
18 17 16 15 14 13 12 11 21 22 23 24 25 26 27 28<br />
Caries<br />
(31)<br />
(46)<br />
Tratamiento<br />
(47)<br />
(62)<br />
85 84 83 82 81 71 72 73 74 75<br />
48 47 46 45 44 43 42 41 31 32 33 34 35 36 37 38<br />
Caries<br />
(63)<br />
Tratamiento<br />
(79)<br />
0 = normal<br />
1 = dudosa<br />
2 = muy leve<br />
3 = leve<br />
4 = moderada<br />
5 = grave<br />
FLUOROSIS<br />
(95)<br />
MUCOSA ORAL Y LESIONES<br />
DEL HUESO<br />
(103) (107)<br />
(108) ICD-DA (112)<br />
Códigos<br />
Lesión no<br />
identificada<br />
(113)<br />
OPACIDADES Y OTRAS<br />
ALTERACIONES DEL ESMALTE<br />
(96)<br />
(97) (98)<br />
0 = ninguna<br />
Núm. de<br />
1 = opacidades<br />
dientes<br />
2 = hipoplasia<br />
afectados<br />
3 = tetraciclina<br />
4 = mutilación<br />
5 = atrición<br />
6 = más de una alteración (especifique)<br />
MEDICIÓN DE LA ARTICULACIÓN<br />
TEMPOROMANDIBULAR (ATM)<br />
0 = ATM normal<br />
1 = crepitación de la ATM<br />
2 = autocorrección de la<br />
luxación<br />
3 = luxación de la ATM<br />
4 = dolor relacionado con<br />
la ATM<br />
(114)<br />
(78)<br />
(94)<br />
ESTADO<br />
Dentición<br />
permanente<br />
0 = sano<br />
1 = caries<br />
2 = obturado y caries<br />
3 = obturado sin caries<br />
4 = perdido por caries<br />
5 = perdido por otra razón<br />
6 = sellador, barniz<br />
7 = pilar para un puente o<br />
una corona especial<br />
8 = diente no erupcionado<br />
9 = diente excluido<br />
USO DE DENTADURAS<br />
Sup.<br />
Inf.<br />
(99) (100)<br />
0 = no dentadura<br />
1 = dentadura parcial<br />
2 = dentadura total<br />
NECESITA ATENCIÓN INMEDIATA<br />
Alteración tratada<br />
toda la vida<br />
(115)<br />
Fractura de los<br />
maxilares<br />
Dolor o infección (116)<br />
Remitido a<br />
tratamiento<br />
(117)<br />
0 = ausente<br />
1 = presente<br />
(118)<br />
Dentición<br />
primaria<br />
A<br />
B<br />
C<br />
D<br />
E<br />
–<br />
F<br />
G<br />
–<br />
–<br />
TRATAMIENTO<br />
0 = ninguno<br />
1 = caries detenida o<br />
necesita un<br />
sellador<br />
2 = una superficie<br />
obturada<br />
3 = dos o más superficies<br />
obturadas<br />
4 = corona o pilar para<br />
un puente<br />
5 = puente<br />
6 = tratamiento pulpar<br />
7 = extracción<br />
8 = necesita otro<br />
tratamiento<br />
9 = (especifique)<br />
NECESIDADES DE DENTADURAS<br />
Sup.<br />
Inf.<br />
(101) (102)<br />
0 = no necesita dentadura<br />
1 = necesita reparación<br />
la dentadura<br />
2 = necesita dentadura parcial<br />
3 = necesita dentadura total<br />
OTRAS CONDICIONES<br />
(Especifique y proporcione códigos)<br />
(119)<br />
(120)
Historia clínica 271<br />
Cuadro 13-2. Versiones completa y simplificada del formato de medición de salud de la Organización Mundial de la Salud<br />
(OMS) (1986) (continuación)<br />
País<br />
Deje en blanco Año Mes Día<br />
Número de<br />
identificación<br />
Original/<br />
duplicado<br />
Examinador<br />
(1) (4) (5) (6) (7) (10) (11) (12)<br />
INFORMACIÓN GENERAL<br />
Edad en años<br />
Sexo (M = 1, F = 2)<br />
Grupo étnico<br />
Ocupación<br />
MALOCLUSIONES<br />
0 = ninguna<br />
1 = leve<br />
2 = moderada<br />
o grave<br />
Nombre . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . OTROS DATOS (especifique y proporcione códigos)<br />
Tipo de localización:<br />
(16)<br />
1 = urbana<br />
(13) (14)<br />
Localización<br />
geográfica<br />
(15)<br />
(18) (19)<br />
(21)<br />
(22)<br />
(17)<br />
2 = suburbana<br />
3 = rural<br />
(20)<br />
(23)<br />
ESTADO PERIODONTAL (INTPC)<br />
(24) (25) (27)<br />
(28) (30)<br />
0 = sano<br />
1 = sangrado<br />
2 = cálculo<br />
3 = bolsa de 4 a 5 mm (parcialmente<br />
visible la banda de la sonda)<br />
4 = bolsa de más de 6 mm (la<br />
banda de la sonda no se ve)<br />
X = sextante excluido<br />
Caries<br />
Tratamiento<br />
(47)<br />
Caries<br />
(31)<br />
(63)<br />
Tratamiento<br />
(79)<br />
CONDICIONES DENTALES Y NECESIDADES DE TRATAMIENTO<br />
55 54 53 52 51 61 62 63 64 65<br />
18 17 16 15 14 13 12 11 21 22 23 24 25 26 27 28<br />
85 84 83 82 81 71 72 73 74 75<br />
48 47 46 45 44 43 42 41 31 32 33 34 35 36 37 38<br />
(46)<br />
(62)<br />
(78)<br />
(94)<br />
ESTADO<br />
Dentición<br />
permanente<br />
0 = sano<br />
1 = caries<br />
2 = obturado y caries<br />
3 = obturado sin caries<br />
4 = perdido por caries<br />
5 = perdido por otra razón<br />
6 = sellador, barniz<br />
7 = pilar para un puente o<br />
una corona especial<br />
8 = diente no erupcionado<br />
9 = diente excluido<br />
Dentición<br />
primaria<br />
A<br />
B<br />
C<br />
D<br />
E<br />
–<br />
F<br />
G<br />
–<br />
–<br />
TRATAMIENTO<br />
0 = ninguno<br />
1 = caries detenida o<br />
necesita un<br />
sellador<br />
2 = una superficie<br />
obturada<br />
3 = dos o más superficies<br />
obturadas<br />
4 = corona o pilar para<br />
un puente<br />
5 = puente<br />
6 = tratamiento pulpar<br />
7 = extracción<br />
8 = necesita otro<br />
tratamiento<br />
9 = (especifique)<br />
FLUOROSIS<br />
(95)<br />
0 = normal<br />
1 = dudosa<br />
2 = muy leve<br />
3 = leve<br />
4 = moderada<br />
5 = grave
272 Capítulo 13<br />
Estado de la dentición y necesidades 31 a 94<br />
de tratamiento<br />
Fluorosis 95<br />
Opacidades y otras alteraciones del esmalte 96 a 98<br />
Uso de dentadura 99 a 100<br />
Necesidad de dentaduras 101 a 102<br />
Lesiones de la mucosa oral y del hueso 103 a 113<br />
Medición de la articulación 114<br />
temp oromandibular<br />
Necesidad de atención inmediata 115 a 118<br />
Otras condiciones 119 a 120<br />
Este formato se usa para investigaciones en las<br />
cuales se examinan tanto niños como adultos; si se<br />
examinan niños, se excluyen las secciones de uso y<br />
necesidad de dentaduras y la presencia de lesiones de<br />
la mucosa bucal; si sólo se van a estudiar adultos, se<br />
utilizan muy po co las secciones de fluorosis dental o<br />
anomalías.<br />
Enfermedades detectables con<br />
la historia clínica, de importancia<br />
para el odontólogo<br />
Fiebre reumática<br />
Esta enfermedad tiene el antecedente de que la persona<br />
sufrió amigdalitis (tonsilitis) por estreptococo beta<br />
hemolítico del grupo A de Lansfield. Posteriormente<br />
se inflaman las arti culaciones grandes (como tobillos,<br />
rodillas, co dos, cadera y muñecas), las cuales se vuelven<br />
rojas, calientes y dolorosas durante algunos días o<br />
semanas, al cabo de las cuales regresan a la normalidad;<br />
puede evolucionar con fiebre. En otros casos se<br />
presenta corea, la cual se caracteriza por movimientos<br />
involuntarios y sin coordina ción en las extremidades<br />
y la cara.<br />
El mayor peligro estriba en que en muchas ocasiones<br />
se afecta la valva (válvula) mitral del corazón, la<br />
cual puede sufrir estenosis (estrechamiento), o bien<br />
insuficiencia. En este último caso, el funcionamiento<br />
se restablece mediante una prótesis. El paciente con<br />
antecedentes de cirugía cardiaca, sea por fiebre reumática,<br />
malformación congénita u otro motivo, debe<br />
informar a su médico de ello y consultarle respecto<br />
del uso de antibióticos antes de algún tratamiento.<br />
Enfermedades de las arterias<br />
coronarias<br />
La consulta al médico es indispensable para el paciente<br />
con experiencias previas de infarto o con episodios<br />
de dolor retrosternal que irradia hacia el borde cubital<br />
(ulnar) del miembro su perior izquierdo, la mandíbula<br />
o ambos, y se desencadena al efectuar algún esfuerzo.<br />
En caso de tratamiento odontológico urgente, conviene<br />
tener a la mano algún medicamento dilatador de<br />
vasos coronarios; además, debe evitarse o minimizarse<br />
el uso de vasoconstrictores en el anestésico local.<br />
Hipertensión arterial y arritmias<br />
Las indicaciones anteriores también son váli das para<br />
pacientes con hipertensión arterial y arritmias.<br />
Otras enfermedades<br />
En pacientes con diabetes mellitus, epilepsia, enfermedades<br />
renales o trastornos hemorragíparos es imprescindible<br />
verificar que la enfer medad esté controlada.
ANEXO<br />
Norma Oficial Mexicana 273<br />
Norma Oficial Mexicana<br />
NOM-013-SSA 2-1994 para<br />
la Prevención y el Control<br />
de Enfermedades Bucales*<br />
Esta Norma Oficial Mexicana la elaboraron las siguientes instituciones:<br />
1. Secretaría de Salud.<br />
2. Secretaría de Servicios de Salud.<br />
3. Subsecretaría de Regulación y Fomento Sanitario.<br />
4. Oficialía Mayor.<br />
5. Dirección General de Medicina <strong>Preventiva</strong>.<br />
6. Dirección General de Control de Insumos para la<br />
Salud.<br />
7. Dirección General de Fomento a la Salud.<br />
8. Dirección General de Atención Materno-Infantil.<br />
9. Dirección General de Regulación de Servi cios de<br />
Salud.<br />
10. Dirección General de Salud Ambiental.<br />
11. Dirección General de Control Sanitario de Bienes<br />
y Servicios.<br />
12. Dirección General de Programación, Organización<br />
y Presupuesto.<br />
13. Consejo Nacional de Prevención y Control del<br />
SIDA.<br />
14. Secretaría de la Defensa Nacional (SDN).<br />
15. Hospital Central Militar.<br />
16. Secretaría de Comercio y Fomento Industrial<br />
(Secofi).<br />
17. Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).<br />
18. Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los<br />
Trabajadores del Estado (ISSSTE).<br />
19. Sistema Nacional para el Desarrollo Inte gral de la<br />
Familia (DIF).<br />
20. Petróleos Mexicanos (Pemex).<br />
21. Instituto de Salud del Estado de México.<br />
22. Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).<br />
23. Hospital Infantil de México “Federico Gó mez”.<br />
24. Hospital General “Dr. Manuel Gea Gon zález”.<br />
25. Facultad de Estudios Superiores Zaragoza, de<br />
la Universidad Nacional Autónoma de México<br />
(FESZ-UNAM).<br />
26. Escuela Nacional de Estudios Profesiona les Iztacala,<br />
de la Universidad Nacional Au tónoma de<br />
México (ENEP Iztacala-UNAM).<br />
27. Facultad de Odontología de la Universidad Nacional<br />
Autónoma de México.<br />
28. Facultad de Odontología de la Universidad Autónoma<br />
del Estado de México (UAEM).<br />
29. Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco<br />
(UAM Xochimilco).<br />
30. Facultad de Estomatología de la Universi dad Autónoma<br />
de San Luis Potosí (UASLP).<br />
31. Federación Mexicana de Facultades y Es cuelas de<br />
Odontología.<br />
32. Asociación Dental Mexicana (ADM).<br />
33. Colegio Nacional de Cirujanos Dentistas.<br />
34. Asociación Nacional de Odontología Infan til.<br />
35. Asociación Mexicana de Ortodoncia.<br />
36. Asociación Mexicana de Estudios para la Defensa<br />
del Consumidor.<br />
37. Asociación Dental del Distrito Federal.<br />
38. Asociación Mexicana de Periodontología.<br />
* Se aprobó el 28 de abril de 1994 por el Comité Consultivo Nacional de Normalización de Servicios de Salud.
274 Anexo<br />
39. Consejo Mexicano de Cirugía Bucal y Maxilofacial.<br />
40. Viarden, Sociedad Anónima.<br />
41. Abamana de México, S.A. de C.V.<br />
42. Laboratorio “Federico Pérez Gómez”.<br />
43. Procter & Gamble, Sociedad Anónima.<br />
Esta Norma Oficial Mexicana consta de los siguientes capítulos:<br />
0. Introducción.<br />
1. Objetivo.<br />
2. Campo de aplicación.<br />
3. Referencias.<br />
4. Definiciones y terminología.<br />
5. Disposiciones generales.<br />
6. Acciones para el fomento de la salud bucal.<br />
7. Prevención de enfermedades bucales.<br />
7.1 Prevención integral.<br />
7.2 Protección específica.<br />
7.2.2 Caries dental.<br />
7.2.3 Enfermedad periodontal.<br />
7.2.4 Lesiones de tejidos blandos y óseos.<br />
7.2.5 Maloclusiones.<br />
7.2.6 Fluorosis.<br />
7.2.7 Atención al paciente desdentado.<br />
7.3 Medidas básicas de prevención de riesgos en<br />
establecimientos y personal de salud.<br />
8. Diagnóstico.<br />
8.1 Diagnóstico de enfermedades bucales.<br />
8.2 Diagnóstico epidemiológico.<br />
8.3 Diagnóstico clínico.<br />
8.4 Caries dental.<br />
8.5 Enfermedad periodontal.<br />
8.6 Lesiones de tejidos blandos y óseos.<br />
8.7 Maloclusiones.<br />
8.8 Fluorosis dental.<br />
8.9 Atención a pacientes desdentados.<br />
9. Tratamiento y control de las enfermedades<br />
bucales.<br />
9.1 Caries dental.<br />
9.2 Enfermedad periodontal.<br />
9.3 Lesiones de tejidos blandos y óseos.<br />
9.4 Maloclusiones.<br />
9.5 Fluorosis dental.<br />
9.6 Atención al paciente desdentado.<br />
10. Observancia de la norma.<br />
11. Bibliografía.
Norma Oficial Mexicana 275<br />
0. Introducción<br />
La salud bucal de los individuos y de la pobla ción es<br />
resultado de un complejo y dinámico juego de factores,<br />
conocido como el proceso salud-enfermedad; por<br />
lo tanto, el modelo de atención para las enfermedades<br />
bucales debe rá estar basado en el reconocimiento<br />
de éste y en el manejo de la prevención integral para<br />
la correcta conservación de las estructuras y funcionamiento<br />
del aparato estomatognático que permitan,<br />
en el mediano y largo plazo, dismi nuir el nivel de<br />
prevalencia e incidencia de las enfermedades bucales<br />
más frecuentes en la po blación mexicana.<br />
Las enfermedades bucales de mayor preva lencia,<br />
de acuerdo con la Organización Mun dial de la Salud,<br />
son la caries dental y la enfer medad periodontal; las<br />
de frecuencia media son las anomalías dentofaciales y<br />
maloclusiones; las de frecuencia variable son el cáncer<br />
oral, los defectos de tejidos dentales, los traumatismos<br />
maxilofaciales y la fluorosis dental.<br />
Los Estados Unidos Mexicanos, de acuerdo con la<br />
clasificación internacional de la Organi zación Mundial<br />
de la Salud, se encuentra entre los países de alto<br />
rango de frecuencia en enfer medades bucales, entre<br />
ellas la caries den tal que afecta a más del 90% de la<br />
población mexicana.<br />
Por su alta mor bilidad, las enfermedades bucales<br />
se encuentran entre las cinco de mayor demanda de<br />
atención en los servicios de salud del país, situación<br />
que condiciona el incremen to de ausentismo escolar<br />
y laboral, así como la necesidad de grandes gastos<br />
económicos que rebasan la capacidad del sistema de<br />
salud y de la misma población.<br />
Como consecuencia de lo anterior, la socie dad<br />
mexicana y sus instituciones carecen de la capacidad<br />
económica para resolver las necesidades de atención<br />
odontológica de la población. Sin embargo, es importante<br />
señalar que la ma yor parte de las enfermedades<br />
bucales pueden ser controladas con actividades preventivas<br />
y de diagnóstico temprano para una disminución<br />
significativa de sus secuelas incapacitantes,<br />
como se ha demostrado en algunos países.<br />
Por esta razón, es indispensable unificar y establecer<br />
los criterios de atención a la salud bucal, con énfasis<br />
en la prevención integral en los sectores público,<br />
social y privado.<br />
La normatividad de la prevención integral para la<br />
práctica odontológica, pública, social y privada en el<br />
ámbito nacional es la estrategia de acción más efectiva<br />
para mejorar el estado actual de salud bucal de la población<br />
mexicana.<br />
Estas acciones tienen como propósito gene ral reforzar<br />
las medidas básicas más importan tes, como la<br />
higiene bucal, la alimentación ade cuada y la eliminación<br />
de hábitos nocivos, como parte del mejoramiento<br />
de los estilos de vida y de los patrones de consumo.<br />
Con la aplicación de esta Norma Oficial Mexicana<br />
de Prevención y Control de Enferme dades Bucales, se<br />
pretende modernizar los ser vicios odontológicos del<br />
país, elevar la calidad y equidad de los mismos, con énfasis<br />
en la pre vención integral, la disminución de costos<br />
y la reducción, en la mayor medida posible, de los<br />
problemas derivados de la mala práctica; todo esto<br />
con el propósito de mejorar el nivel de salud bucal de<br />
la población mexicana, y de crear una nueva cultura:<br />
la cultura de la salud.<br />
1. Objetivo<br />
Unificar los métodos, técnicas y criterios de operación<br />
del Sistema Nacional de Salud, con base en los<br />
principios de la prevención integral de la salud bucal,<br />
a través de la operación de las acciones para fomento<br />
de la salud, la pro tección específica, el tratamiento, la<br />
rehabilita ción y el control de las enfermedades bucales<br />
de mayor frecuencia en los Estados Unidos Mexicanos.<br />
2. Campo de aplicación<br />
Esta Norma es de observancia obligatoria en todos los<br />
establecimientos de salud de los sec tores público, social<br />
y privado que realicen ac ciones para fomento de<br />
la salud, protec ción específica, tratamiento, rehabilitación<br />
y control de las enfermedades bucales, así como<br />
para los productores y comercializadores de medicamentos,<br />
instrumental, material y equipo dental.<br />
3. Referencias<br />
NOM-EM-002-SSA 2-1993: Atención de la mu jer durante<br />
el embarazo, parto y puerperio y del recién<br />
nacido.
276 Anexo<br />
NOM-002-SSA 2-1993: Para el fomento de la salud<br />
del escolar.<br />
NOM-041-SSA 1-1993: Bienes y servicios, agua purificada<br />
y envasada.<br />
NOM-012-SSA 1-1993: Requisitos sanitarios que deben<br />
cumplir los sistemas de abastecimien to de agua<br />
para uso y consumo humano públicos y privados.<br />
NOM-040-SSA 1-1993: Bienes y servicios, sal yodada<br />
y sal yodafluorurada.<br />
NOM-010-SSA 2-1993: Norma Oficial Mexica na para<br />
la Prevención y Control de la Infec ción por el Virus<br />
de la Inmunodeficiencia Humana.<br />
NOM-CPR-001-ECOL-1993: Sobre el manejo de desechos<br />
peligrosos.<br />
NOM-08-SSA 2-1993: Para el control de la nu trición,<br />
crecimiento y desarrollo del niño y del adolescente.<br />
4. Definiciones y terminología<br />
Para los fines de esta Norma son aplicables las siguientes<br />
definiciones:<br />
4.1 Caries irrestricta (rampante): caries de aparición<br />
súbita, extendida y rápidamen te penetrante,<br />
con temprana afección de la pulpa; afecta<br />
aquellos órganos den tarios que se suelen contemplar<br />
como in munes a la caries común.<br />
4.2 Flúor: elemento químico electronegativo.<br />
4.3 Fluoruros: cuando el elemento flúor se encuentra<br />
combinado con otros minerales y otros<br />
compuestos químicos.<br />
4.4 P. p. m.: partes por millón.<br />
4.5 Fomento de la salud bucal: proceso social cuyo<br />
objetivo es lograr la autorresponsabilidad social<br />
en el cuidado de la salud bucal mediante acciones<br />
que involucren a los individuos y a la sociedad<br />
organi zada.<br />
4.6 Participación social: proceso mediante el cual<br />
se relacionan entre sí individuo, gru pos, instituciones<br />
y autoridades, para identificar problemas<br />
de salud, elaborar programas de trabajo y coordinarse<br />
para su ejecución, gestión de recursos,<br />
control y seguimiento de las acciones.<br />
4.7 Prevención integral: todas aquellas accio nes de<br />
fomento y educación para la salud, protección<br />
específica, diagnóstico, tratamiento, limitación<br />
del daño, rehabilitación y control, realizadas en<br />
beneficio de la sa lud bucal del individuo, la familia<br />
y la comunidad.<br />
4.8 Población escolar: de acuerdo con las dis posiciones<br />
educativas, se refiere a tres subgrupos,<br />
que son: preescolares, cuyas edades van de cuatro<br />
a cinco años; esco lares de primaria, de seis<br />
a 14 años, y es colares de secundaria, de 12 a 15<br />
años de edad.<br />
4.9 Población de alto riesgo: son los grupos de individuos<br />
que por sus características de edad,<br />
sexo, raza, problemas sistémicos, ocupación,<br />
condición económica u otras variables, se encuentran<br />
de gran manera ex puestos a contraer<br />
determinada patología. En relación con la caries<br />
dental, se pue de decir que la población de alto<br />
riesgo está principalmente representada por los<br />
menores de cero a 12 años.<br />
4.10 Potencial de deterioro: es la tendencia de una<br />
alteración a desarrollar su máxima ex presión de<br />
daño.<br />
4.11 Riesgo biológico-social: es la interacción dinámica<br />
que se establece entre los facto res de<br />
orden biológico (genéticos, hereditarios, edad,<br />
sexo, fisiopatológicos) y los de orden social (demográficos,<br />
económi cos, ambientales, políticos,<br />
culturales y educativos) en la producción y<br />
distribu ción del proceso de salud-enfermedad.<br />
4.12 Luxe: es una unidad de iluminación y es la cantidad<br />
de luz producida por una fuente luminosa.<br />
4.13 Suplementos de fluoruro: se consideran todos<br />
aquellos productos que proporcio nan flúor en<br />
forma de gotas o tabletas.<br />
4.14 Testigo biológico: son los medios biológi cos utilizados<br />
para el control de calidad de los ciclos de<br />
esterilización: hornos de calor seco, autoclaves,<br />
quemiclaves y cá maras de óxido de etileno.<br />
4.15 Vestimenta protectora: es aquella ropa y accesorios<br />
que no permiten que la sangre u otros materiales<br />
potencialmente infec ciosos traspasen la<br />
ropa de calle, la piel, los ojos, la boca del personal<br />
odontológico, y que deberán conservar su<br />
integridad como barrera protectora durante los<br />
pro cesos clínicos.
Norma Oficial Mexicana 277<br />
5. Disposiciones generales<br />
5.1 La atención a las necesidades de salud bu cal<br />
de la población mexicana se debe orientar, con<br />
base en la prevención inte gral, a través de acciones<br />
de fomento para la salud y de protección<br />
específica a nivel masivo, grupal e individual, de<br />
diagnós tico, de limitación de daño, de rehabilitación<br />
y de control de enfermedades buca les.<br />
5.2 En caso de aceptar el plan de tratamiento propuesto<br />
por el cirujano dentista, éste debe ser firmado<br />
por el paciente o por al gún familiar, tutor<br />
o representante legal, en pacientes menores de<br />
edad o personas discapacitadas, y se debe incluir<br />
en el ex pediente clínico del paciente.<br />
5.3 El cirujano dentista debe comunicar al pa ciente<br />
sus obligaciones respecto a las in dicaciones, fechas<br />
de citas, durante y des pués del tratamiento.<br />
5.4 El cirujano dentista es el único responsa ble y<br />
autorizado para realizar diagnósti co, pronóstico,<br />
plan de tratamiento, rehabilitación y control.<br />
5.5 Todos los pacientes deben considerarse como<br />
potencialmente infecciosos sin ex cepción.<br />
5.6 Se debe evitar la transmisión de micro organismos<br />
de una persona a otra; de paciente a paciente;<br />
del profesional de la salud al paciente, y<br />
del paciente al profe sional.<br />
5.7 El expediente clínico es de carácter legal y confidencial,<br />
y debe estar bajo custodia del cirujano<br />
dentista o de la institución.<br />
5.8 Será responsabilidad del profesional el manejo<br />
y aplicación de los anestésicos lo cales de uso<br />
odontológico.<br />
5.9 El cirujano dentista y el personal auxiliar deben<br />
capacitarse en el manejo de las ma niobras básicas<br />
de reanimación cardiopulmonar, y se deberá<br />
contar con un botiquín que incluya lo necesario<br />
para el control de las urgencias médicas que<br />
puedan presen tarse en el ejercicio odontológico.<br />
5.10 El equipo, instrumental, material, medi camentos<br />
y demás insumos para la atención de la salud<br />
bucal deben ser fabrica dos conforme lo establecido<br />
por las nor mas nacionales e internacionales,<br />
y de las asociaciones reconocidas internacionalmente,<br />
estando sujetas a la observancia y<br />
aprobación de registro, en su caso, por la Secretaría<br />
de Salud.<br />
5.11 En el área de trabajo no se deben ingerir alimentos<br />
ni bebidas, no se debe fumar, aplicar<br />
cos méticos ni manejar lentes de contacto.<br />
6. Acciones para el fomento<br />
de la salud bucal<br />
6.1 La educación para la salud debe orientar se a:<br />
a) Enseñar la importancia de la salud bu cal<br />
como parte de la salud integral del individuo.<br />
b) Informar sobre los padecimientos más frecuentes<br />
y sus secuelas.<br />
c) Desarrollar y formar, en su caso, hábi tos,<br />
conductas y prácticas que favorez can la salud<br />
bucal.<br />
d) Promover el cuidado de los tejidos blan dos y<br />
óseos de la cavidad bucal y estruc turas adyacentes,<br />
mediante la orientación para realizar<br />
el autoexamen bucal.<br />
6.2 La educación para la salud bucal se debe realizar<br />
mediante:<br />
6.2.1 Comunicación interpersonal e intermedia, que<br />
se debe realizar a través de mensajes en consulta,<br />
pláticas, demostraciones, vi deos, teatro guiñol<br />
y prácticas para el autocuidado de la salud<br />
bucal.<br />
6.2.2 Comunicación colectiva, que se lleva a cabo a<br />
través de medios masivos, como radio, prensa y<br />
televisión.<br />
6.3 La participación social debe desarrollar se a través<br />
de:<br />
a) La promoción para motivar la partici pación<br />
de la comunidad, instituciones y gobierno.<br />
b) La concertación y coordinación entre las instituciones<br />
del sector salud para determinar<br />
compromisos y responsa bilidades, así como<br />
el apoyo en recur sos humanos, materiales y<br />
financieros para el desarrollo de las acciones<br />
de salud bucal.<br />
c) La organización de grupos ya estable cidos o<br />
de nuevos grupos, para la parti cipación re-
278 Anexo<br />
presentativa de la sociedad en acciones de<br />
beneficio para la salud bucal.<br />
6.4. El personal de salud debe promover la capacitación<br />
para el manejo de las medidas preventivas<br />
que se realizan en el espacio escolar por<br />
los maestros, padres de fami lia y voluntarios de<br />
acuerdo con la NOM-009-SSA-2-1993 para el<br />
fomento de la sa lud del escolar.<br />
7. Prevención de enfermedades<br />
bucales<br />
7.1 La prevención integral de las enferme dades<br />
bucales a nivel masivo, grupal e individual<br />
debe orientarse al mejora miento de hábitos<br />
higiénico-alimentarios, eliminación de hábitos<br />
nocivos funcionales y parafuncionales, a<br />
la con servación de ambas denticiones sanas,<br />
a orientar la vigilancia en el consumo y uso<br />
adecuado de fluoruros sistémicos y tópicos;<br />
al empleo de las medidas de protección específica,<br />
al diagnóstico temprano, al tratamiento<br />
y control de estas enfermedades.<br />
7.2 Protección específica.<br />
7.2.1 La protección específica de las enfer medades<br />
bucales se debe orientar a la formación, instrucción<br />
y motivación de la población para<br />
realizar un adecuado control personal de la<br />
placa dentobacteriana mediante métodos y<br />
técni cas de uso doméstico con cepillo den tal,<br />
auxiliares para la higiene bucal y acudir con<br />
el dentista en forma perió dica para la revisión<br />
profesional.<br />
7.2.2 Caries dental.<br />
7.2.2.1 La protección específica masiva contra la caries<br />
dental debe realizarse median te la adición<br />
de fluoruro a la sal de con sumo humano,<br />
no debe adicionarse fluoruro a ningún otro<br />
condimento, ali mento, golosina, refresco,<br />
goma de mascar y agua (redes de suministro<br />
a la población o envasada).<br />
7.2.2.2 El control de la prevención masiva con tra<br />
la caries dental mediante la fluoruración de la<br />
sal se debe realizar de acuerdo con los lineamientos<br />
y procedi mientos establecidos por<br />
la Secretaría de Salud con este propósito,<br />
como son:<br />
a) Monitoreo periódico para evaluar la excreción<br />
de flúor en orina huma na o en<br />
saliva.<br />
b) Estudios epidemiológicos cada cinco años<br />
sobre incidencia de caries dental.<br />
c) Monitoreo periódico para evaluar el contenido<br />
de flúor en la sal, con forme a la<br />
dosificación señalada por la NOM de sal<br />
yodada y yodada-fluorurada vigente.<br />
d) Regulación permanente del abasto para<br />
evitar la venta de sal yodada-fluorurada en<br />
las localidades con concentraciones de ion<br />
flúor en el agua de consumo humano, por<br />
arri ba de 0.7 ppm.<br />
e) Estudios de concentración de ion flúor en<br />
agua de consumo humano como mínimo<br />
dos veces al año en di ferentes épocas de<br />
estación (lluvia y estiaje).<br />
7.2.2.3 La protección específica grupal contra la<br />
caries dental en población de riesgo biológico-social<br />
se debe realizar con enjuagatorios<br />
quincenales o semanales de fluoruro de sodio<br />
al 0.2% de mane ra directa en los centros<br />
escolares, en zonas donde la concentración<br />
natural de ion flúor en agua de consumo humano<br />
sea menor de 0.7 ppm.<br />
7.2.2.4 El personal de salud debe orientar a la población<br />
en general y de manera prioritaria a<br />
la población escolar para disminuir dentro y<br />
fuera del espacio es colar la frecuencia en el<br />
consumo inmo derado de dulces y refrescos,<br />
y sustituir su consumo por el de alimentos<br />
natu rales como frutas, verduras y azúcares<br />
poco refinados de baja acción cariogénica,<br />
como azúcar morena o moscabado.<br />
7.2.2.5 La protección específica individual con tra<br />
la caries dental debe promover el empleo de<br />
fluoruros de uso tópico y el control de placa<br />
dentobacteriana mediante el uso de cepillo e<br />
hilo dental.<br />
7.2.2.6 La protección específica individual con tra la<br />
caries dental por vía tópica debe realizarse<br />
por métodos de uso clínico y de uso doméstico.
Norma Oficial Mexicana 279<br />
7.2.2.7 Los métodos de uso clínico deben ser realizados<br />
por personal profesional o por personal<br />
auxiliar debidamente ca pacitado, e incluyen:<br />
• Aplicación tópica de fluoruros en gel, solución<br />
para enjuagues y bar niz, de acuerdo<br />
con la concentración y el caso, debiendo<br />
ser más frecuen tes en niños con mayor carioactividad<br />
o caries dental rampante.<br />
• Aplicación de selladores de fosetas y fisuras<br />
con fluoruro o sin éste en órga nos dentarios<br />
sanos susceptibles de caries dental.<br />
7.2.2.8 El cirujano dentista debe informar que los<br />
métodos de uso doméstico deben ser aplicados<br />
o supervisados por los pa dres o adultos<br />
a cargo de los menores de edad o de las personas<br />
discapa citadas, de acuerdo con las siguientes<br />
in dicaciones:<br />
• La higiene bucal en la población infan til<br />
menor de un año de edad se rea liza con un<br />
paño suave humedecido con agua una vez<br />
al día.<br />
• En los niños de uno a tres años, el aseo bucal<br />
se debe realizar con cepi llo de cerdas<br />
suaves humedecido después de cada alimento;<br />
en caso de usar pasta dental fluorurada<br />
se hará en cantidad mínima, y bajo<br />
la supervisión de un adulto para evi tar la<br />
ingesta de flúor residual.<br />
• En la población a partir de los cua tro años,<br />
el aseo bucal se debe reali zar con cepillo<br />
dental y pasta fluo rurada después de cada<br />
alimento.<br />
7.2.2.9 A nivel individual, de acuerdo con las tablas<br />
de dosificación internacio nales vigentes, los<br />
suplementos de fluoruro exclusivamente se<br />
prescribi rán bajo estricto control del cirujano<br />
dentista y médico cirujano a niños que<br />
por razo nes de salud no consuman sal fluorurada<br />
y que vivan en localidades con nivel<br />
de flúor en el agua de consumo humano por<br />
debajo de 0.7 ppm.<br />
7.2.2.10 Los suplementos de flúor deben contener en<br />
el marbete del empaque los si guientes datos:<br />
• Este producto contiene flúor y debe utilizarse<br />
bajo estricto control profesional: cirujano<br />
dentista o médi co pediatra.<br />
• No se consuma este producto en las áreas<br />
geográficas del país donde la concentración<br />
de ion flúor en agua de consumo humano<br />
sea igual o mayor que 0.7 ppm.<br />
• Si se está consumiendo sal fluo rurada no<br />
debe utilizarse este pro ducto.<br />
• Este producto no se debe comerciali zar libremente.<br />
7.2.3 Enfermedad periodontal.<br />
7.2.3.1 Los métodos y técnicas de protección específica<br />
individual de uso clínico se deben<br />
realizar por personal profesio nal o auxiliar<br />
capacitado en el área de la periodoncia e incluyen:<br />
• Información sobre la enfermedad periodontal.<br />
• Motivación para realizar el control personal<br />
de placa dentobacteriana.<br />
• Instrucción sobre los métodos y téc nicas<br />
de control de placa dentobac teriana.<br />
• Práctica y adecuación de acciones de seguimiento<br />
de control de placa dentobacteriana,<br />
según ni vel de atención.<br />
• Eliminación instrumentada de pla ca dental<br />
bacteriana supragingival y subgingival.<br />
7.2.4 Lesiones de tejidos blandos y óseos.<br />
7.2.4.1 La protección específica grupal de las alteraciones<br />
y enfermedades de tejidos blandos<br />
y óseos de la cavidad bucal y las estructuras<br />
adyacentes se debe rea lizar en población de<br />
riesgo biológico-social mediante el examen<br />
clínico perió dico de manera directa y la eliminación<br />
de hábitos nocivos.<br />
7.2.4.2 La protección específica individual de las alteraciones<br />
y enfermedades de te jidos blandos<br />
y óseos de la cavidad bucal y las estructuras<br />
adyacentes se realiza mediante:<br />
a) El examen clínico en forma periódi ca por<br />
parte del cirujano dentista.<br />
b) La detección y eliminación de agen tes nocivos<br />
de origen físico, quími co, biológico y<br />
psicológico.<br />
c) La orientación personalizada para la aplicación<br />
de las medidas de protec ción específica.<br />
7.2.5 Maloclusiones.
280 Anexo<br />
7.2.5.1 Es responsabilidad del cirujano dentis ta especialista<br />
que la protección espe cífica grupal<br />
se oriente a la vigilancia de la erupción y a<br />
la conservación de los primeros molares permanentes,<br />
así como a conservar la longitud,<br />
anchura y relación de las arcadas.<br />
7.2.5.2 La protección específica individual tie ne como<br />
objetivo principal conservar la integridad en<br />
tamaño, función, forma, estética y posición de<br />
las arcadas para una oclusión estable.<br />
7.2.6 Fluorosis.<br />
7.2.6.1 La protección específica a nivel masi vo, grupal<br />
e individual se basa en:<br />
a) La detección de fuentes de abasteci miento<br />
de agua de consumo huma no con concentraciones<br />
mayores de 0.7 ppm de flúor y la<br />
aplicación de métodos de defluoruración<br />
de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana<br />
vigente sobre calidad del agua de consumo<br />
humano.<br />
b) En localidades donde el contenido de ion<br />
flúor en agua de consumo hu mano sea mayor<br />
o igual a 0.7 ppm se debe evitar consumir<br />
sal fluorurada, suplementos de fluoruro<br />
por vía sistémica y la inges ta de pasta<br />
dental.<br />
7.2.7 Atención al paciente desdentado.<br />
7.2.7.1 La prevención específica individual de la patología<br />
bucal asociada al uso de prótesis dental<br />
se debe realizar mediante:<br />
a) Control personal de placa bacteria na.<br />
b) Higiene y mantenimiento de la pró tesis<br />
dental.<br />
c) Revisión periódica.<br />
7.3 Medidas básicas de prevención de ries gos<br />
en establecimientos y personal de salud. Las<br />
medidas básicas que de ben adoptarse para la<br />
prevención de riesgos son las siguientes:<br />
7.3.1 El personal de salud debe adoptar medidas<br />
para su protección y la de los pacientes para<br />
evitar riesgos a la salud de tipo:<br />
• Biológico.<br />
• Físico.<br />
• Químico.<br />
• Ergonómico.<br />
• Psicosocial.<br />
7.3.2 Para prevenir los riesgos de tipo bioló gico<br />
provocados por el contacto con sangre y secreciones<br />
corporales de pa cientes, el odontólogo,<br />
estudiante de odontología, técnico<br />
y personal auxiliar que labora en el área de<br />
salud bucal debe cumplir las siguientes medidas<br />
preventivas en su práctica clínica institucional<br />
y privada.<br />
7.3.2.1 El odontólogo y personal auxiliar de ben<br />
utilizar, para todo paciente y para todo procedimiento,<br />
medidas de barre ra como bata,<br />
guantes desechables, cubrebocas, anteojos<br />
o careta, y por par te del paciente, protector<br />
corporal.<br />
7.3.2.2 Para el control de la fuente, antes de iniciar<br />
el procedimiento clínico, el pa ciente debe<br />
emplear un enjuague bucal con antiséptico.<br />
El odontólogo debe utilizar eyector de alto<br />
volumen y di que de hule cuando lo permita<br />
el procedimiento.<br />
7.3.2.3 El odontólogo debe usar un par de guantes<br />
nuevos por cada paciente que explore o brinde<br />
atención clínica.<br />
7.3.2.4 Se deben usar guantes de látex no estéri les,<br />
desechables, durante la exploración clínica y<br />
acto operatorio no quirúrgico; guantes de látex<br />
estériles desechables para actos quirúrgicos,<br />
y guantes de hule grueso o nitrilo no desechables<br />
para lavar material o instrumental.<br />
7.3.2.5 Se debe usar una aguja desechable y cartuchos<br />
anestésicos nuevos por cada paciente.<br />
7.3.2.6 Todo material punzocortante se debe manipular<br />
con cuidado para reducir al mínimo la<br />
posibilidad de punciones accidentales.<br />
7.3.2.7 Todos los desechos punzocortantes, potencialmente<br />
contaminados con sangre o saliva,<br />
deben colocarse en recipientes desechables<br />
rígidos, irrompibles o im permeables que se<br />
cierren con seguri dad, con la leyenda “material<br />
potencialmente infectante”, y esterilizar<br />
antes de desecharlos.<br />
7.3.2.8 Los desechos sólidos punzocortantes deben<br />
ser separados en la clínica de acuerdo con su<br />
potencial infeccioso. Los desechos no contaminados<br />
se arro jan a la basura común; los<br />
materiales contaminados con sangre o con sa-
Norma Oficial Mexicana 281<br />
liva y los tejidos removidos del paciente deben<br />
ser puestos en bolsas de polipro pileno de alta<br />
densidad para esteri lización y desecho.<br />
7.3.2.9 Los desechos de material líquido, como sangre<br />
y secreciones, se arrojan directo al drenaje<br />
y después se lava y desinfecta la tarja, así<br />
como los frascos o recipientes del aspirador.<br />
7.3.2.10 Se debe realizar el lavado de manos con agua<br />
potable, jabón líquido, soluciones antisépticas<br />
y secar con toallas desechables o secador<br />
de aire, antes de colo carse los guantes e inmediatamente<br />
al retirarlos.<br />
7.3.2.11 El personal de salud debe utilizar las medidas<br />
de prevención para conta minación cruzada,<br />
como cubiertas desechables, para evitar<br />
la contamina ción de las áreas expuestas<br />
a los aerosoles y las salpicaduras, así como<br />
evitar el contacto durante el acto operatorio<br />
o exploratorio con objetos como teléfo no,<br />
agenda, lapiceros.<br />
7.3.3 Para prevenir la contaminación del equipo,<br />
instrumental y mobiliario:<br />
7.3.3.1 Se deben utilizar los métodos de des infección<br />
y esterilización de acuerdo con el equipo,<br />
material e instrumental, así como el tipo de<br />
agente y técnica.<br />
7.3.3.2 Se debe esterilizar todo instrumento, material<br />
o equipo que penetre tejidos blandos o<br />
duros que se contamine con sangre o cualquier<br />
otro fluido corporal.<br />
7.3.3.3 Se debe desinfectar con un germicida de alto<br />
nivel o de preferencia esterilizar todo instrumento,<br />
material o equi po que toca, pero no<br />
penetra, tejidos blandos y duros de cavidad<br />
bucal.<br />
7.3.3.4 Se debe realizar la esterilización de la pieza<br />
de mano, puntas de la jeringa tri ple y cureta<br />
ultrasónica después de cada paciente o utilizar<br />
pieza de mano y puntas de jeringa triple<br />
desechables.<br />
7.3.3.5 El instrumental se debe envolver para esterilizarlo<br />
por paquetes de acuerdo con las técnicas<br />
y equipo.<br />
7.3.3.6 Se deben utilizar testigos biológicos para<br />
control de calidad de los ciclos de esterilización,<br />
aplicándose una vez por semana. Los<br />
testigos biológicos deben aplicarse a los hornos<br />
de calor seco, las autoclaves, las quemiclaves<br />
y las cámaras de óxido de etileno.<br />
7.3.3.7 Se debe desinfectar entre cada pacien te, con<br />
soluciones de nivel medio: el si llón, lámpara,<br />
unidad dental y aparato de rayos X, o utilizar<br />
cubiertas desechables.<br />
7.3.3.8 Se deben purgar las mangueras de la pie za de<br />
mano y jeringa triple tres minu tos al inicio<br />
del día y 30 segundos entre cada paciente.<br />
7.3.3.9 Los materiales de laboratorio y otros elementos<br />
que hayan sido utilizados en el paciente,<br />
como impresiones, re gistro de mordida,<br />
aparatos protésicos u ortodónticos,<br />
deben limpiarse y des infectarse antes de ser<br />
manipulados por el personal de laboratorio<br />
dental, si guiendo las recomendaciones del<br />
fabricante en relación con el tipo de germicida<br />
apropiado para su desinfección.<br />
7.3.3.10 Todo equipo y mobiliario dental debe ser<br />
desinfectado o esterilizado antes de ser enviado<br />
a mantenimiento o repara ción.<br />
7.3.3.11 Es una obligación profesional aplicar se la vacuna<br />
contra la hepatitis B por: odontólogos,<br />
estudiantes de odontolo gía, técnicos y personal<br />
auxiliar que ten ga contacto con sangre,<br />
saliva o secre ciones de pacientes en su práctica<br />
clí nica institucional y privada.<br />
7.3.3.12 Para realizar la prueba de detección del VIH<br />
al personal de salud bucal y al paciente, se<br />
debe contar con el consenti miento del interesado<br />
siguiendo las re comendaciones establecidas<br />
en la Nor ma Oficial Mexicana para<br />
la Prevención y Control de la Infección por<br />
el Virus de la Inmunodeficiencia Humana.<br />
7.3.4 Riesgos profesionales.<br />
7.3.4.1 Para prevenir los efectos provocados por el<br />
ruido de la pieza de mano de alta velocidad,<br />
se debe considerar que el máximo de ruido<br />
que produzca sea de 87.3 decibeles.<br />
7.3.4.2 Se debe orientar al personal de salud sobre<br />
el uso de manguitos o tapones au ditivos, así<br />
como las ventajas de reali zarse audiometrías<br />
en forma periódica.<br />
7.3.4.3 Para prevenir los riesgos que afectan la vista<br />
del odontólogo y el personal auxi liar, se debe
282 Anexo<br />
mantener la iluminación entre 200 y 300<br />
luxes.<br />
7.3.4.4 Para prevenir los riesgos de tipo quí mico<br />
provocados por el uso de produc tos como<br />
mercurio, jabones, anestési cos locales, eugenol,<br />
alcoholes y otros, el personal de salud<br />
debe cumplir con las recomendaciones para<br />
su manejo se ñaladas por el fabricante.<br />
7.3.4.5 Para prevenir el riesgo provocado por el<br />
mercurio en sangre, el odontólogo debe pulir<br />
y retirar las obturaciones de amalgama<br />
bajo chorro de agua para evitar la aspiración<br />
de polvo y mercurio.<br />
7.3.4.6 El mercurio residual debe ser guarda do en<br />
frascos de plástico con agua, ce rrados herméticamente.<br />
7.3.4.7 Para prevenir los riesgos de fatiga, va rices y<br />
osteoarticulares provocados por problemas<br />
posturales, se deben aplicar los principios de<br />
la ergonomía para la correcta adaptación física,<br />
anatómica y fisiológica del personal odontológico<br />
con su equipo y área de trabajo.<br />
7.3.4.8 Para prevenir los riesgos de tipo psicosocial,<br />
el cirujano dentista y personal auxi liar deben<br />
realizar pausas para la salud, a fin de abatir el<br />
estrés y la ansiedad.<br />
8. Diagnóstico<br />
8.1 El diagnóstico de las enfermedades buca les<br />
debe establecerse mediante la aplicación del<br />
método epidemiológico, el méto do clínico y<br />
los auxiliares diagnósticos.<br />
8.1.2 El diagnóstico, la concentración y el informe<br />
de las patologías estomatológicas debe<br />
efectuarse conforme a la Clasificación Internacional<br />
de Enfermedades (OMS) vigente.<br />
8.2 Diagnóstico epidemiológico.<br />
8.2.1 El diagnóstico epidemiológico de las enfermedades<br />
bucales debe emplearse como<br />
base en los planes y programas institucionales<br />
de salud bucal a nivel nacional, es tatal<br />
y local (de servicio, docencia e inves tigación)<br />
tomando en cuenta los índices epidemiológicos<br />
de aplicación universal reconocidos<br />
por la Organización Mundial de la Salud.<br />
8.2.2 Los estudios epidemiológicos que apoyan al<br />
diagnóstico antes citado deberán cubrir los<br />
requerimientos metodológicos para la descripción<br />
de los factores de riesgo, así como la<br />
prevalencia e incidencia de las enfermedades<br />
bucales en los grupos poblacionales específicos.<br />
8.2.3 El informe y notificación de las enfermedades<br />
bucales deberá seguir los lineamien tos<br />
establecidos en la Norma Oficial Mexi cana<br />
para la Vigilancia Epidemiológica de acuerdo<br />
con los diferentes capítulos que la conforman.<br />
8.2.4 Los estudios epidemiológicos deben orientarse<br />
a la descripción y el análisis de las<br />
enfermedades bucales más importan tes,<br />
considerando factores de magnitud, trascendencia,<br />
vulnerabilidad y oportuni dad para<br />
su atención.<br />
8.2.5 Los estudios epidemiológicos deben in cluir<br />
las manifestaciones clínicas de la enfermedad<br />
en sus diferentes etapas y su repercusión<br />
a estructuras adyacentes a la cavidad bucal.<br />
8.3 Diagnóstico clínico.<br />
8.3.1 El diagnóstico clínico debe incluir los siguientes<br />
aspectos:<br />
• Ficha de identificación.<br />
• Interrogatorio (antecedentes persona les,<br />
patológicos y no patológicos, así como heredofamiliares).<br />
• Padecimiento actual.<br />
• Exploración visual, manual e instru mentada<br />
del aparato estomatognático en su<br />
conjunto.<br />
• Exploración, inspección, palpación, percusión,<br />
sondaje, movilidad y trans iluminación<br />
del órgano dentario, así como la<br />
valoración de signos y síntomas clínicos de<br />
la entidad patológica según sea el caso.<br />
• Auxiliares de diagnóstico, como estu dios<br />
de gabinete y de laboratorio, de acuerdo<br />
con las necesidades del caso.<br />
8.3.2 Los datos recabados durante el diagnós tico<br />
clínico deben quedar registrados en la historia<br />
clínica del paciente con la fir ma del cirujano<br />
dentista responsable de la elaboración.
Norma Oficial Mexicana 283<br />
8.3.3 La historia clínica debe actualizarse mediante<br />
las notas de evolución.<br />
8.3.4 El expediente clínico debe contar como mínimo<br />
con los siguientes documentos:<br />
• Historia clínica.<br />
• Historia personal y familiar de antecedentes<br />
patológicos y no patológicos.<br />
• Padecimiento actual.<br />
• Odontograma.<br />
• Diagnóstico y tratamiento.<br />
• Informes de estudios de gabinete y laboratorio.<br />
• Notas de evolución.<br />
8.3.5 En el diagnóstico clínico de las enfermedades<br />
bucales se debe incluir el análisis biológico-social<br />
de acuerdo con los siguientes<br />
criterios:<br />
Menores de cinco años.<br />
• Nivel socioeconómico.<br />
• Accesibilidad a los servicios de salud.<br />
• Hábitos de higiene.<br />
• Hábitos bucales.<br />
• Características de la alimentación.<br />
• Uso y abuso del biberón.<br />
Población escolar.<br />
• Nivel socioeconómico.<br />
• Escolaridad.<br />
• Accesibilidad a los servicios de salud.<br />
• Hábitos de higiene.<br />
• Características de la alimentación.<br />
• Cronología de la erupción.<br />
Población adolescente y adultos.<br />
• Nivel socioeconómico.<br />
• Escolaridad.<br />
• Accesibilidad a los servicios de salud.<br />
• Riesgo ocupacional.<br />
• Adicciones (tabaquismo, alcoholismo).<br />
• Enfermedades cronicodegenerativas.<br />
• Hábitos de higiene.<br />
8.4 Caries dental.<br />
8.4.1 En el diagnóstico clínico de la caries dental<br />
se deben utilizar métodos de exa men visual<br />
con el apoyo del explorador clínico.<br />
8.4.2 De manera complementaria se deben realizar<br />
estudios radiográficos para determinar<br />
la profundidad de las lesiones o la presen cia<br />
de caries dental en espacios interproximales.<br />
8.5 Enfermedad periodontal.<br />
8.5.1 En el diagnóstico clínico de la enferme dad<br />
periodontal se debe incluir la valoración de<br />
los factores asociados de origen:<br />
a) Sistémico.<br />
b) Fisiológico.<br />
c) Yatrogénico.<br />
d) Traumático.<br />
e) Farmacológico.<br />
8.5.2 El diagnóstico debe cumplir como míni mo<br />
con:<br />
• Interrogatorio.<br />
• Exploración física visual del individuo y<br />
de la boca.<br />
• Exploración física instrumentada, pal pación,<br />
sondaje, determinación de mo vilidad<br />
y transiluminación.<br />
• Auxiliares de diagnóstico.<br />
• Estudio radiográfico periapical com pleto.<br />
• Estudios de laboratorio de acuerdo con las<br />
necesidades del caso.<br />
8.5.3 En la exploración clínica del periodonto se<br />
debe considerar:<br />
a) Identificación de cambios como color, forma,<br />
textura y consistencia.<br />
b) Sangrado gingival al sondeo.<br />
c) Pérdida de la inserción.<br />
d) Movilidad dentaria.<br />
8.6 Lesiones de tejidos blandos y óseos.<br />
8.6.1 Los métodos de detección y diagnóstico<br />
clínico se deben realizar por personal profesional.<br />
8.6.2 Todo tejido o secreción retirado de la ca vidad<br />
bucal debe ser enviado para su aná lisis y<br />
diagnóstico al laboratorio correspondiente.<br />
8.6.3 En caso de no disponer o manejar los elementos<br />
de diagnóstico del punto 8.5.2 se hará<br />
la referencia al servicio correspon diente, evitando<br />
cualquier tratamiento.<br />
8.7 Maloclusiones.<br />
8.7.1 El diagnóstico clínico de las maloclusiones<br />
debe considerar los factores de riesgo biológicos,<br />
psicológicos, sociales y sus repercusiones<br />
funcionales y emocionales.
284 Anexo<br />
Factores de riesgo biológicos:<br />
• Características congénitas.<br />
• Estructuras esqueléticas.<br />
• Estructuras dentales.<br />
• Estructuras neuromusculares.<br />
• Evaluación funcional (respiración, alimentación,<br />
lenguaje y hábitos).<br />
Factores de riesgo psicológicos:<br />
• Autoimagen.<br />
• Imagen reflejada.<br />
Factores de riesgo sociales:<br />
• Nivel socioeconómico.<br />
• Escolaridad.<br />
• Accesibilidad a los servicios de salud.<br />
8.7.2 El diagnóstico debe cumplir como míni mo<br />
con:<br />
• Interrogatorio.<br />
• Exploración física visual del individuo y<br />
de la boca.<br />
• Exploración física instrumentada.<br />
• Auxiliares de diagnóstico.<br />
• Estudio radiográfico, de acuerdo con las<br />
necesidades del caso.<br />
• Modelo de estudio del paciente.<br />
• Resultados del análisis de los estudios radiográficos<br />
y modelos de estudio.<br />
8.7.3 En caso de no disponer o manejar los elementos<br />
de diagnóstico del punto anterior, se<br />
hará la referencia al servicio correspondiente,<br />
y se evitará el tratamiento.<br />
8.8 Fluorosis dental.<br />
8.8.1 En el diagnóstico clínico epidemiológico de<br />
la fluorosis dental, se deben considerar los<br />
siguientes factores de riesgo:<br />
a) Etapa de odontogénesis (de cero a 12 años<br />
de edad).<br />
b) Concentración del ion flúor en agua de<br />
consumo humano igual o mayor a 0.7<br />
ppm.<br />
c) Consumo de suplementos fluorurados en<br />
dosis mayores a las indicadas.<br />
d) Ingesta de productos fluorurados de uso<br />
tópico.<br />
e) Altitud y clima de la región.<br />
8.8.2 El diagnóstico de la fluorosis dental se debe<br />
realizar clínicamente.<br />
8.8.3 Para el diagnóstico de la fluorosis dental<br />
se debe utilizar auxiliares de diagnóstico<br />
como:<br />
• Cuantificación de ion flúor a través del<br />
método de potenciometría.<br />
• Rayos X.<br />
8.9 Atención a pacientes desdentados.<br />
8.9.1 El diagnóstico clínico de la patología bu cal<br />
asociada al uso de prótesis dental debe incluir<br />
el análisis biológico social asocia do a<br />
los criterios e indicaciones de próte sis fija y<br />
removible.<br />
8.9.2 Como base del diagnóstico clínico se de ben<br />
incluir los modelos de estudio del paciente.<br />
9. Tratamiento y control<br />
de las enfermedades bucales<br />
9.1 Caries dental.<br />
9.1.1 El tratamiento y control de la caries den tal<br />
comprende la limitación del daño, rehabilitación<br />
y mantenimiento de la salud, con<br />
base en la referencia y contrarreferencia de<br />
pacientes, de acuerdo con la complejidad del<br />
padecimiento y los recursos disponibles para<br />
su atención.<br />
9.1.2 El tratamiento de la caries dental se debe llevar<br />
a cabo con los materiales biocompatibles<br />
que devuelvan la salud al órga no dentario,<br />
restauren su anatomía, así como su estética,<br />
función masticatoria y autoclisis.<br />
9.1.3 En la restauración de los órganos denta rios<br />
debe cumplirse como mínimo con los siguientes<br />
requisitos básicos:<br />
a) Uso de dique de hule de acuerdo con el procedimiento.<br />
b) Eliminación completa del proceso carioso.<br />
c) Protección correcta de la cámara pulpar.<br />
d) Sellado completo de la cavidad en materiales<br />
que se apliquen mediante condensación<br />
(amalgama, resina, ionómero<br />
de vidrio).<br />
e) Cementación y ajuste correcto de la cavidad,<br />
en incrustaciones metálicas o de<br />
porcelana.
Norma Oficial Mexicana 285<br />
f) Devolución de la función masticatoria,<br />
correspondiente al órgano dental restaurado.<br />
g) Devolución de la morfología o forma anatómica<br />
al órgano dental restaurado.<br />
h) Devolución de la estética a los órganos<br />
dentarios.<br />
i) Permanencia de las restauraciones du rante<br />
un periodo, siempre que el pa ciente no<br />
haga uso indebido de sus ór ganos dentarios.<br />
9.1.4 Las coronas de acero cromocoladas de ben<br />
cumplir con los siguientes requisitos:<br />
• Ajuste al contorno gingival.<br />
• Correcta función masticatoria.<br />
9.1.5 El tratamiento de la caries dental de tercer<br />
grado se debe realizar mediante procedimientos<br />
de terapia pulpar y de acuerdo con<br />
el grado de avance de la patología pulpar:<br />
• Recubrimiento pulpar indirecto.<br />
• Recubrimiento pulpar directo.<br />
• Pulpotomía.<br />
• Pulpectomía.<br />
9.1.6 En la terapia pulpar de los órganos den tarios<br />
debe cumplirse con los siguientes requisitos<br />
básicos:<br />
a) Eliminación completa del proceso infeccioso<br />
de acuerdo con la extensión del<br />
mismo.<br />
b) Sellado correcto de la cámara y los conductos<br />
radiculares.<br />
c) Adecuación del órgano dentario para la<br />
restauración anatómico-funcional.<br />
9.1.7 La odontectomía se debe llevar a cabo:<br />
• En caso de destrucción coronaria am plia<br />
que impida la restauración del ór gano<br />
dentario.<br />
• Órganos dentarios incluidos que impi dan<br />
su función.<br />
• Por indicaciones ortodónticas, protési cas,<br />
periodontales.<br />
9.2 Enfermedad periodontal.<br />
9.2.1 El tratamiento de la enfermedad perio dontal<br />
se debe realizar con base en:<br />
• El reforzamiento de los hábitos de hi giene<br />
bucal.<br />
• La eliminación de los depósitos supragingivales<br />
y subgingivales.<br />
• El uso de fármacos bajo el estricto control<br />
del cirujano dentista.<br />
• La creación del ambiente bucal ideal adecuado,<br />
para evitar la acumulación de placa<br />
dentobacteriana.<br />
9.2.2 El tratamiento de la enfermedad perio dontal<br />
se debe llevar a cabo de acuerdo con las siguientes<br />
fases:<br />
Fase I<br />
Instrucción y motivación sobre el control<br />
personal de placa dentobacteriana, eliminación<br />
de depósitos como sarro y placa de<br />
la superficie dentaria (detartraje subgingival<br />
y supragingival, alisado radicular y curetaje),<br />
eliminación de yatrogenias, control de hábitos<br />
nocivos, control de factores sistémicos<br />
coadyuvantes, si exis tieran.<br />
Fase II<br />
Corresponde a la fase quirúrgica y se em plea<br />
únicamente en aquellos pacientes en los que<br />
las periodontopatías no se con trolaron con la<br />
aplicación de la fase an terior.<br />
Fase III<br />
Corresponde al control del manteni miento<br />
periódico de la salud perio dontal, con base<br />
en la referencia y contrarreferencia de pacientes,<br />
de acuerdo con la complejidad del padecimiento<br />
y los recursos disponibles para su<br />
atención.<br />
9.2.2.1 El cirujano dentista de práctica general debe<br />
realizar las fases I y III del trata miento periodontal<br />
y referir al paciente con el especialista<br />
para la fase II.<br />
9.2.3 Con periodicidad trimestral o con la frecuencia<br />
que se requiera, se deben realizar<br />
tratamientos de control y mantenimien to<br />
en aquellos individuos que fueron tra tados<br />
de periodontopatías avanzadas, así como en<br />
pacientes que se encuentran comprometidos<br />
sistémicamente.<br />
9.2.4 Con periodicidad semestral se debe rea lizar<br />
el tratamiento de control y mante nimiento<br />
rutinario para la prevención de las enfermedades<br />
periodontales.
286 Anexo<br />
9.3 Lesiones de tejidos blandos y óseos.<br />
9.3.1 El tratamiento debe aplicarse a la reso lución<br />
de agente(s) primario y secunda rio del proceso<br />
patológico del individuo y mediante:<br />
a) Terapia farmacológica.<br />
b) Radioterapia.<br />
c) Quimioterapia.<br />
d) Cirugía.<br />
e) Tipo paliativo.<br />
9.4 Maloclusiones.<br />
9.4.1 El tratamiento y control de las maloclu siones<br />
comprende la limitación del daño, la rehabilitación<br />
y el mantenimiento de la salud, con<br />
base en la referencia y contrar referencia de<br />
pacientes, de acuerdo con la complejidad del<br />
padecimiento y los re cursos disponibles para<br />
su atención.<br />
9.4.2 Para llevar a cabo el tratamiento se debe<br />
definir la relación causa-efecto primario o<br />
secundario que ocasiona la maloclusión a la<br />
salud física y emocional del in dividuo.<br />
9.4.2.1 Se debe determinar la prioridad de in validez<br />
de acuerdo con:<br />
a) Pacientes que presenten malformacio nes<br />
que impidan las funcio nes primarias (respiración,<br />
alimentación, masticación, deglución<br />
y fonación).<br />
b) Pacientes que presenten displasias esqueléticas<br />
severas y alteraciones en su perfil<br />
emocional.<br />
c) Pacientes que presenten traumatis mos o<br />
secuelas de traumatismos, que maduras y<br />
disfunciones de la articu lación temporomandibular.<br />
d) Pacientes que presenten alteraciones esqueléticas,<br />
dentoalveolares, de teji dos<br />
blandos y mínimas alteraciones en su perfil<br />
emocional.<br />
9.4.2.2 El tratamiento se debe realizar de acuer do<br />
con la gravedad de invalidez y el potencial de<br />
deterioro.<br />
9.4.3 El plan de tratamiento debe considerar las etapas<br />
de ejecución y sus limitacio nes, las cuales<br />
deben contar con la firma de autorización del<br />
paciente, padres, tu tores o representante legal<br />
en caso de personas discapacitadas.<br />
9.4.4 Una vez obtenido el propósito de cada etapa<br />
se debe considerar mantener el resultado a<br />
través de la cooperación cons tante del paciente.<br />
9.4.5 Al finalizar la etapa de tratamiento, se debe<br />
haber cumplido con los propósitos programados<br />
que permitan llevar al in dividuo a<br />
la recuperación inmediata o mediata de las<br />
funciones masticatorias y de fonación, así<br />
como el mejoramiento de los patrones de<br />
crecimiento y desa rrollo, y de armonía facial.<br />
9.5 Fluorosis dental.<br />
9.5.1 El tratamiento de las secuelas (defectos de<br />
color y estructura) de la fluorosis den tal debe<br />
estar encaminado a restablecer la estética de<br />
los órganos dentales sin afectar su vitalidad.<br />
9.5.2 El control de la fluorosis dental se debe realizar<br />
mediante vigilancia epidemio lógica, y<br />
monitoreo químico y biológico.<br />
9.6 Atención al paciente desdentado.<br />
9.6.1 El plan de tratamiento para la rehabili tación<br />
bucal se debe establecer con base en el análisis<br />
de los criterios técnicos vi gentes y las<br />
condiciones biopsicosociales del paciente.<br />
9.6.2 El tratamiento y control del paciente desdentado<br />
comprende la limitación del daño,<br />
la rehabilitación y el mantenimien to de la<br />
salud, con base en la referencia y contrareferencia<br />
de pacientes, de acuer do con la<br />
complejidad del padecimiento y los recursos<br />
disponibles para su aten ción.<br />
9.6.3 El tratamiento del paciente desdentado se<br />
debe llevar a cabo con el uso de:<br />
a) Prótesis fija.<br />
b) Prótesis removible.<br />
c) Prótesis total.<br />
d) Implantes osteointegrados.<br />
9.6.3.1 La prótesis dental debe cumplir como mínimo<br />
con los siguientes requisitos:<br />
a) Restaurar la anatomía, función masticatoria<br />
y autoclisis del aparato estomatognático.<br />
b) Ajuste y estética.<br />
9.6.3.2 Los implantes osteointegrados, fibrooseointegrados,<br />
subperiósticos deben reunir las
Norma Oficial Mexicana 287<br />
condiciones óptimas de biocompatibilidad,<br />
así como su aplicación con las técnicas quirúrgicas<br />
para restaurar la biofisiología del<br />
aparato mastica torio, en conjunto con las<br />
prótesis correspondientes.<br />
10. Observancia de la norma<br />
La vigilancia de la aplicación de esta Norma corresponde<br />
a la Secretaría de Salud y a los go biernos de<br />
las entidades federativas en los ámbitos de competencia.<br />
Publicada en el Dia rio Oficial de la Federación el<br />
6 de enero de 1995.<br />
Transitorio<br />
Primero. Esta Norma Oficial Mexicana entró en vigor<br />
al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial<br />
de la Federación.<br />
Segundo. A partir de la publicación de esta Norma<br />
Oficial Mexicana, todos los estableci mientos de salud<br />
de nueva creación, públicos y privados, deberán cumplir<br />
lo establecido en la misma.<br />
Tercero. Los servicios de salud privados ya es tablecidos<br />
oficialmente antes de la publicación de esta Norma<br />
gozarán de un plazo de 365 días naturales para dar<br />
cumplimiento al capítulo 7 en lo referente a piezas de<br />
mano esterilizables o desechables, así como a la obligación<br />
de con tar con equipo de esterilización (autoclave<br />
o quemiclave) en los servicios odontológicos.<br />
Cuarto. Los servicios de salud pública ya esta blecidos<br />
oficialmente, antes de la publicación de esta Norma,<br />
gozarán de un lapso no mayor de 730 días naturales,<br />
de acuerdo con su estruc tura y gestión administrativa,<br />
para renovación de equipo y mobiliario a fin de cumplir<br />
con el tran sitorio tercero.<br />
Reanimación cardiopulmonar<br />
y maniobra de Heimlich<br />
La Norma Oficial Mexicana NOM-013-SSA 2-1994<br />
para la Prevención y el Control de Enfermedades Bucales,<br />
en el punto 5.9 indica que el cirujano dentista y<br />
el personal auxiliar deben capacitarse en el manejo de<br />
las maniobras básicas de reanimación cardiopulmonar<br />
(RCP).<br />
Una persona puede haber dejado de respirar por<br />
diversas causas:<br />
1. Bloqueo del tracto respiratorio por líquido. Esto<br />
sucede en la inmersión en agua (ahogados); por<br />
obstrucción del tracto respiratorio por huesos,<br />
trozos de alimentos, chicles, dulces, juguetes,<br />
etc., porque se cierra el paso del aire comprimiendo<br />
el cuello, como en el caso de estrangulación;<br />
porque la mucosa respiratoria se inflama al<br />
grado de dificultar el paso del aire, como sucede<br />
al respirar gases tóxicos o cuando hay espasmo<br />
del tracto res piratorio, producido también por<br />
sustancias tóxicas.<br />
2. Concentración insuficiente de oxígeno en el aire.<br />
Esto se puede observar en los alpinistas, personas<br />
que están en espacios cerrados y muy pequeños,<br />
en los casos de incendio, etcétera.<br />
3. Deficiencia en el transporte de oxígeno por la<br />
sangre, por ejemplo, cuando hay gran cantidad<br />
de monóxido de carbo no (de los automóviles,<br />
procesos industriales, etc.).<br />
4. Parálisis del centro respiratorio por choque<br />
(shock) eléctrico, cantidades excesivas de alcohol,<br />
anestésicos o fármacos que depriman el<br />
centro respiratorio.<br />
5. Compresión del cuerpo. Cuando la persona queda<br />
enterrada en arena, lodo o cualquier material<br />
que le impida llevar a cabo los movimientos respiratorios.<br />
Si la persona está en algún lugar donde el oxígeno<br />
es insuficiente o están presentes gases y sustancias<br />
tóxicas, se le debe sacar de ese sitio; si esto es imposible<br />
por el momento, quien vaya a practicar la respiración<br />
artificial debe cerciorarse de que en ese lugar se pueda<br />
respi rar; esto se comprueba introduciendo una vela<br />
encen dida: si se apaga la flama y no hay corriente de<br />
aire, significa que primero se debe sacar a la víctima<br />
de ese sitio o que debe utilizarse un aparato especial<br />
(mascarilla co nectada a un tanque de oxígeno) para<br />
evitar que haya una víctima más.<br />
Cuando la persona tiene paro cardiaco, el corazón<br />
deja de funcionar súbitamente; en estos casos hay que<br />
ac tuar con mucha rapidez porque el tejido nervioso<br />
puede da ñarse en forma irreversible si tarda más de<br />
algunos minutos sin recibir el oxígeno que le llega a
288 Anexo<br />
través de la san gre. En estos casos se debe colocar a<br />
la víctima en posición horizontal, boca arriba y sobre<br />
una superficie dura (una tabla o el suelo), y entonces<br />
se procede a la reanimación.<br />
RCP son las iniciales de la reanimación cardiopulmonar,<br />
procedimiento que debe realizarse cuando la<br />
víctima tiene paro cardiaco y respiratorio. El ABC de<br />
la RCP permite re cordar los pasos a seguir: A (airway<br />
= vía aérea), B (breathing = respiración) y C (circulation<br />
= circulación).<br />
A. Para saber si la víctima tiene permeable el tracto<br />
respiratorio, se acerca la cara a la de la víctima con<br />
el propósito de sentir y oír el paso del aire, y simultáneamente<br />
observar si existen movimientos respiratorios.<br />
En una persona in consciente, la lengua<br />
tiende a irse hacia atrás, impidiendo el paso del aire,<br />
por lo que le debe extender la cabeza con mucho<br />
cuidado, apoyando la mano derecha (si es diestro)<br />
con fuerza sobre la frente y elevando la mandíbula<br />
con las puntas de los dedos índice y medio de la otra<br />
mano. Una vez que la lengua regresa a su posición<br />
normal, se abre la boca haciendo presión sobre el<br />
mentón para revisar si existe atorado algún objeto<br />
(chicle, dulce, juguete, etc.). Si es necesario, se extrae<br />
utilizando el dedo medio a manera de gan cho<br />
y deslizándolo por el interior de la mejilla hacia el<br />
exterior. En muchas ocasiones, con estas maniobras<br />
se restablece la respiración, pero si no es así, se procede<br />
al si guiente paso.<br />
B. Se aprieta la nariz, y una vez que se ha limpiado la<br />
bo ca de alimentos, moco o cualquier sustancia que<br />
pueda obs truir el paso del aire (si tiene prótesis dental,<br />
se debe quitar) se efectúa una inspiración profunda,<br />
y se colocan los labios sobre la boca abierta<br />
de la víctima, se sopla con fuerza hasta observar que<br />
se eleva el tórax, se deja de soplar y se escucha la salida<br />
del aire. Este procedimiento se realiza dos veces<br />
seguidas. Si no se observa que el tórax se eleve o se<br />
escucha un ruido de ronquido o “gorgoreo”, hay que<br />
revisar la posición de la cabeza, porque estos da tos<br />
indican que la maniobra no está permitiendo que el<br />
ai re llegue a los pulmones.<br />
Cuando no se desea dar la respiración boca a<br />
boca en forma directa, se puede colocar una gasa o<br />
cualquier trozo de tela limpia entre ambas bocas.<br />
C. Inmediatamente después de dar las dos insuflaciones<br />
seguidas, se toma el pulso de la arteria carotídea<br />
(carótida). Si no existe, la persona tiene además<br />
paro cardiaco, por lo que se debe dar masaje cardiaco<br />
externo. Se localiza el proceso xifoideo (apéndice<br />
xifoides) y se calcu la el grueso de dos dedos más<br />
arriba para marcar el sitio donde se debe ejercer la<br />
compresión. Ésta se realiza con la base de ambas<br />
manos, una sobre la otra, te niendo cuidado de no<br />
doblar los codos. Cada compresión debe comprimir<br />
el esternón una a dos pulgadas. Se deja de hacer presión<br />
y se repite esta secuencia de movimientos cada<br />
segundo.<br />
Si la persona que va a practicar la RCP está sola,<br />
debe efectuar dos insuflaciones y 15 compresiones,<br />
por lo que debe contar uno y, dos y, tres y, etc. Cada<br />
cuatro ci clos (un ciclo consta de dos insuflaciones y<br />
15 compre siones) debe verificar si existe pulso. Si hay<br />
dos personas que auxilien, una efectúa una insuflación<br />
cada cinco segundos y la otra lleva la cuenta y da<br />
las compresiones. Como deben sincronizarse, al contar<br />
“uno y” se da la insuflación (figs. A-1 y A-2).<br />
Cuando se debe aplicar RCP a un niño de uno a<br />
ocho años de edad, se utiliza únicamente una mano y<br />
la presión sobre el esternón es menor (de 1 a 2.5 cm).<br />
En el caso de bebés, la respiración se da sobre la<br />
boca y la nariz y la compresión se realiza con dos dedos,<br />
comprimiendo 0.5 a 1 cm. El pulso se toma en la<br />
arteria braquial (humeral).<br />
Obstrucción del tracto respiratorio<br />
por cuerpos ex traños<br />
Cuando se trata de un adulto y está consciente, se<br />
recomienda la maniobra de Heimlich. Ésta se lleva<br />
a cabo colocándose atrás de la persona, se rodea con<br />
los brazos la parte superior del abdomen y se hace<br />
presión hacia atrás y arriba, con objeto de que el aire<br />
que se encuentra en los pulmones salga y aumente la<br />
presión en la trá quea y la laringe para que expulse el<br />
objeto que está atorado.<br />
Si el adulto está inconsciente, se acuesta en el sue lo<br />
boca arriba, se extiende la cabeza y se revisa la bo ca.<br />
Se intenta extraer el objeto con el dedo medio haciendo<br />
el barrido hacia afuera de la boca y se dan dos<br />
insufla ciones seguidas. A continuación el auxiliador
Norma Oficial Mexicana 289<br />
Figura A-1. Paro cardiorrespiratorio. A, Lo primero que debe hacerse en un primer reconocimiento es asegurarse de que<br />
el tracto (vía) respiratorio no esté obstruido; B, el siguiente paso es comprobar si la respiración del paciente<br />
es adecuada; C, una rápida comprobación del pulso carotídeo confirma la circulación.<br />
A<br />
B<br />
C<br />
Figura A-2. Técnica del ABC para la reanimación cardiopulmonar (RCP): A, tracto (vía) respiratorio; B, respiración; C,<br />
circulación.
290 Anexo<br />
Figura A-3. Maniobra de Heimlich.<br />
Figura A-4. Obstrucción respiratoria en un lactante.<br />
se coloca a horcajadas sobre la víctima, de manera que<br />
sus regiones glúteas queden apoyadas en la pelvis, se<br />
colocan las manos co mo si se fuera a dar RCP, pero<br />
debajo del proceso xifoideo (apéndice xifoides) del esternón<br />
y se hace un movimiento hacia el tórax durante<br />
cinco veces seguidas. Se vuelve a revisar la boca y así<br />
sucesivamente hasta que se libere el objeto atorado.<br />
Si se trata de un bebé consciente, se coloca boca<br />
abajo sobre el antebrazo, con la cabeza más baja que el<br />
resto del cuerpo, y se le dan cuatro a cinco palmadas<br />
entre las escápulas (omóplatos). Si el objeto continúa<br />
atorado, se coloca al bebé boca arriba sobre el antebrazo<br />
(con la cabeza más baja) y se le dan las compresiones.<br />
Si el objeto continúa atorado, se repiten las<br />
insuflaciones-palmadas-compresiones cuantas veces<br />
sea necesario (figs. A-3 y A-4).<br />
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Índice alfabético 295<br />
Índice alfabético<br />
Nota: los números de página seguidos de c se refieren a cuadros, y los seguidos de f indican figuras.<br />
A<br />
Ablactación, 180<br />
reglas para, 180<br />
Acidulado, fluoruro de (APF), 194, 195c<br />
Adulto, periodontitis del, 79<br />
bacterias asociadas, 79<br />
Aguda, gingivitis ulceronecrosante (GUNA), 79, 81<br />
Alergia e hipersensibilidad, 59<br />
mediadores de anafilaxia, 59<br />
tipos de hipersensibilidad, 59<br />
Alimento, 165-174<br />
características, 165-170<br />
estímulo psicológico y emocional, 170<br />
integrador social, 170<br />
satisfactor de una necesidad, 170<br />
vehículo de nutrimentos, 165<br />
biodisponibilidad, 165<br />
inocuidad, 165<br />
grupos de, 170<br />
clasificación de la OMS y la FAO, 170, 170c<br />
evolución, 170, 171c<br />
objetivos de una dieta normal, 170<br />
“plato del bien comer”, 170, 171f<br />
principales alimentos, 172c<br />
requerimientos energéticos, 171-172<br />
actividades discrecionales, 172<br />
gasto energético, actividad física, 172, 174c<br />
basal, 171, 173c<br />
termogénesis alimentaria, 172<br />
unidades de referencia en nutriología, 172<br />
Ambientales, pigmentaciones, 83<br />
Amelogénesis imperfecta, 129<br />
hipomineralización del esmalte, 129<br />
hipoplasia<br />
dominante del esmalte ligada a X, 129, 130f<br />
esmalte autosómica dominante, 129, 130f<br />
Amplificadoras, células T, 52<br />
Analítica, epidemiología, 211<br />
Antihepatitis A, vacuna, 59<br />
Antihepatitis B, vacuna, 58<br />
Antineumocócica, vacuna, 58-59<br />
Antipoliomielítica, vacuna, 56<br />
Antirrubéola, vacuna, 58<br />
Antisarampionosa, vacuna, 56-58<br />
Antitoxinas, 56<br />
Antituberculosa, vacuna, 58<br />
Asepsia y antisepsia, 5-26<br />
conceptos, 5<br />
contaminación cruzada, 5<br />
exposición a microorganismos patógenos, 5<br />
infección, 5<br />
asintomática, inaparente u oculta, 5<br />
transmisión de la infección, 5<br />
desinfección, 6-8<br />
nivel biocida, 6<br />
procedimientos, 8<br />
agentes químicos, 15c, 16c<br />
eficacia del desinfectante, 8<br />
propiedades del desinfectante, 8<br />
efectos sistémicos de la enfermedad bucal, 25-26<br />
vías de infección, 25<br />
esterilización, 17<br />
clasificación de objetos, 6<br />
procedimientos, 7<br />
agentes químicos, 9, 16c<br />
calor seco, 8<br />
gas de etileno, 8<br />
recomendaciones para preparar instrumental, 14, 15c<br />
soluciones químicas, 8<br />
temperaturas y tiempos mínimos, 6c, 7<br />
vapor a presión, autoclave, 8<br />
vapor químico, 6, 8<br />
infecciones importantes en odontología, 18-20, 19c. Véase<br />
también tipo específico, p. ej., Neumonía<br />
precauciones universales, 9-18<br />
barreras protectoras, 10-13, 12f<br />
dique de hule, 13<br />
gorras, 11<br />
guantes, 10-11
296 Índice alfabético<br />
Asepsia y antisepsia (cont.),<br />
precauciones universales (cont.),<br />
barreras protectoras (cont.)<br />
máscaras, cubrebocas, pantallas y lentes, 11-12, 11f<br />
ropa (batas o uniformes), 11<br />
instrumental cortante o punzante, 10<br />
lavado y cuidado de manos, 10<br />
limpieza, desinfección y esterilización, 13-14<br />
aparatos radiológicos, 14<br />
conducciones internas, 13<br />
equipamientos dentales, 13<br />
fresas e instrumental manual, 14<br />
guía de métodos, 14, 15c<br />
instrumental rotatorio, 14-16<br />
jeringas y cavitrón, 14<br />
manejo de muestras de laboratorio, 16-17<br />
prótesis, modelos e impresiones dentales, 16<br />
limpieza de superficies contaminadas, 17<br />
recolección de residuos contaminados, 17, 17f<br />
recomendaciones finales, 17<br />
vacunación contra hepatitis B, 17<br />
Asociación Dental Americana (ADA), desinfectantes aceptados,<br />
9c, 13-14<br />
agentes clorados, 9<br />
glutaraldehídos, 9<br />
yodóforo, 6, 13, 16<br />
B<br />
Bacterias, 34-37<br />
ámbito odontológico, 37<br />
mecanismo de movimiento, 35<br />
espiroquetas, 35<br />
eubacterias, 35-36<br />
micoplasmas, 36<br />
mixobacterias, 35<br />
requerimientos y sensibilidad al oxígeno, 36<br />
anaerobias estrictas, 36<br />
anaerobias facultativas, 36<br />
microaerófilas, 36<br />
respuesta a tinción de Gram, 35<br />
gramnegativas, 35<br />
grampositivas, 35<br />
Barnices fluorurados, 195<br />
Duraphat, 195<br />
Vivadent, 195<br />
Barotrauma, 38<br />
Bioestadística, 235-250<br />
definición, 235<br />
fuentes de obtención de información, 235-236<br />
estadísticas de morbilidad, 236<br />
enfermedades de notificación obligatoria, 236. Véase<br />
también Vigilancia epidemiológica<br />
estadísticas demográficas, 235<br />
estadísticas vitales, 235<br />
datos de mortalidad, 235<br />
nacimientos, 235<br />
recursos y atención para proteger, fomentar y recuperar la<br />
salud, 236<br />
específicos, 236<br />
recursos humanos, 236<br />
recursos materiales, 236<br />
recursos presupuestarios, 236<br />
inespecíficos, 236<br />
características socioeconómicas, 236<br />
método estadístico. Véase Método estadístico<br />
Biomasa, 86<br />
Bucal, salud, 32<br />
Burton, ribete gingival de, 78<br />
C<br />
Cadena alimentaria, 85-86<br />
eslabón, 87<br />
leyes de la termodinámica, 85-86<br />
organismos involucrados, 86<br />
autótrofos, 86<br />
heterótrofos, 86<br />
Cadena epidemiológica, 214, 214f<br />
Candidiasis (moniliasis), 21-22<br />
manifestaciones clínicas, 21<br />
Caries dental, 121-143<br />
clasificaciones, 134<br />
causa dominante, 135-136<br />
caries por biberón, 135<br />
irrestricta o rampante, 135<br />
policaries, 135<br />
primer molar permanente, 136<br />
radicular, 136<br />
recidivante, secundaria o recurrente, 135<br />
grado de evolución, 134<br />
activas o agudas, 134<br />
cicatrizadas, 135<br />
crónicas, 134<br />
de Greene Vardiman Black, 134<br />
número de caras afectadas, 134<br />
tejido afectado, 134<br />
definiciones, 121-122<br />
dieta y caries, 136-139<br />
elementos en el proceso carioso, 124-127<br />
microorganismos, 126-127. Véase también Microorganismos<br />
en el proceso carioso<br />
proceso multifactorial, 124, 125f<br />
susceptibilidad del huésped, 127<br />
características de los dientes, 127<br />
disminución de la secreción salival, 127<br />
sustrato oral, 124<br />
alimentos, promedio de caries, 140<br />
características de los alimentos, 125<br />
composición química de alimentos, 125<br />
frecuencia de ingestión, 125<br />
tiempo de ingestión, 125<br />
tiempo, 127<br />
factores de riesgo, 128-129<br />
generales, 129-131<br />
enfermedades intercurrentes, 131<br />
estrés, 131<br />
factores culturales, 131<br />
factores socioeconómicos, 131<br />
funcionamiento endocrino, 130<br />
hormona paratiroidea, 130<br />
herencia biológica, 129-130
Índice alfabético 297<br />
nutrición, 129<br />
locales, 128-129<br />
abrasión, 128-129<br />
composición de la saliva, 129<br />
composición química del esmalte, 128<br />
disposición de los prismas, 128<br />
higiene bucal deficiente, 129<br />
malformaciones anatómicas, 128<br />
malposición dental, 129<br />
obturaciones mal adaptadas, 129<br />
historia natural. Véase Historia natural de la caries dental<br />
importancia, 121<br />
mecanismo de acción, 131-134<br />
caries, de dentina, 132-133<br />
capas de la caries dentinaria, 133, 133f<br />
zona de, defensa o esclerótica, 133<br />
invasión destructiva, 133<br />
reblandecimiento o necrótica, 133<br />
de esmalte, 131-132<br />
cuerpo de la lesión, 131, 132f<br />
lesiones de caries tempranas, 132f<br />
mancha blanca, 132<br />
de pulpa, 133<br />
dolor espontáneo o inducido, 133-134<br />
necrosis pulpar, 134<br />
monoartritis apical, 134<br />
naturaleza del proceso carioso, 127-128<br />
desmineralización del diente, 127<br />
remineralización, 127<br />
invasión microbiana, 127<br />
proteólisis, 127<br />
niveles de prevención, 140, 141c<br />
pruebas de detección, 142-143<br />
prueba de Snyder, 143<br />
recuento de Lactobacillus en saliva, 142<br />
recuento de Streptococcus mutans en saliva, 142<br />
teorías de producción, 122-124<br />
biofísica, 124<br />
endógena, 123<br />
glucógeno, 124<br />
organotrópica de Leimgruber, 124<br />
proteólisis-quelación, 123<br />
proteolítica, 123<br />
lisis o desintegración de proteínas, 123<br />
quimioparasitaria, 122-123<br />
capas por descalcificación ácida, 123<br />
captación de iones hidrógeno, 123<br />
microorganismos acidógenos, 122<br />
Caries y enfermedades periodontales, valoración del riesgo, 218-220<br />
factores generales, 129<br />
ambientales, 218<br />
biológicos, 218<br />
culturales, 218<br />
socioeconómicos, 218<br />
factores locales, 219<br />
características dentales, 219<br />
características salivales, 220<br />
controles periódicos, 220<br />
dieta, 219<br />
experiencia anterior, 219<br />
hábitos de higiene bucal, 219<br />
motivación del paciente y su medio familiar, 219<br />
tiempo de erupción, 219<br />
pruebas de laboratorio, 220<br />
capacidad amortiguadora, 220<br />
examen de líquido gingival, 220<br />
exámenes microbiológicos, 220<br />
medición de la velocidad del flujo salival, 220<br />
Celular, inmunidad, 52<br />
linfocitos T y B, 52<br />
Censo General de Población y Vivienda, 116c, 117<br />
Chlamydiae, infecciones por, 21<br />
Ciencia, conceptos, 203-204<br />
ciencias fácticas o materiales, 203-204<br />
conocimiento racional, características, 204<br />
objetividad, 204<br />
ciencias formales o ideales, 203<br />
definición, 203<br />
Citocinas, 79<br />
Citomegalovirus, infecciones por, 20<br />
Citotóxicas, células T, 52<br />
Clasificación Internacional de Enfermedades de la<br />
OMS, 325<br />
Clasificación Internacional de Enfermedades y Adaptación<br />
a la Odontoestomatología<br />
(CIE-AO), 122<br />
Clínico, método, 206-208<br />
diagnóstico, 206<br />
etiología, 206<br />
examen físico, 207-208<br />
auscultación, 208<br />
inspección, 208<br />
palpación, 208<br />
percusión, 208<br />
interrogatorio, 206-207<br />
antecedentes, 207<br />
estado de órganos y sistemas, 207<br />
padecimiento actual, 206<br />
paralelismo con el método epidemiológico, 206, 207c<br />
patogenia, 206<br />
signo, 206<br />
síntoma, 206<br />
Clorhexidina, 154<br />
efectos secundarios, 154<br />
sustantividad, 154<br />
Código de la Cruz Badiano, 161<br />
Complejo antígeno-anticuerpo, 50, 51f<br />
Congénitas, pigmentaciones, 83<br />
Cristales de fluorapatita (FAP), crecimiento de, 189<br />
Crónica, periodontitis, 82<br />
D<br />
Demografía, 95-99<br />
censo, 96-99<br />
características económicas, 97<br />
características educativas, 97<br />
estado civil, 97<br />
estructura por sexo y edad, 96<br />
fecundidad y mortalidad, 97<br />
lengua indígena, 97<br />
localidad, 96
298 Índice alfabético<br />
Demografía, censo (cont.)<br />
migración, 97<br />
vivienda, 98<br />
definiciones de población urbana, 95-96<br />
objetivos de la política de población, 119<br />
elevar bienestar y calidad de vida, 119<br />
grandes retos, 119<br />
y salud. Véase Salud y demografía<br />
Dentífricos fluorurados, 196<br />
Dentinogénesis imperfecta, 129<br />
Desarrollo o deformidades adquiridas, periodontitis y, 82<br />
Diabetes mellitus, 80<br />
asociada a periodontitis, 80<br />
clases clínicas, 80<br />
clases de riesgo estadístico, 80<br />
Diaminofluoruro de plata, 194<br />
Dieta, 174-176<br />
alimentación, 176<br />
factor biológico, 174<br />
adecuada, 175<br />
causas de contaminación de alimentos, 175<br />
completa, 174<br />
equilibrada, 174<br />
inocua, 174<br />
recomendaciones en preparación de alimentos, 176<br />
suficiente, 174<br />
factor psicológico, 175<br />
factor social, 176<br />
contenido de principales nutrimentos, 176, 176c<br />
valor nutritivo de alimentos, 176, 177c<br />
Dieta y caries, 136-139<br />
estudios de la relación, 136<br />
estudio de Turku, 136, 137f<br />
hallazgos en animales, 136<br />
investigación de Harris, 137<br />
resultados del estudio de Vipeholm, 136, 137f<br />
factores de la dieta, 137<br />
capacidad cariógena de los hidratos de carbono, 138c<br />
consistencia, 138<br />
frecuencia de consumo, 138<br />
ingestión durante las comidas, 138<br />
sacarosa, 138<br />
factores protectores, 138-139<br />
asesoramiento dietético, 138, 139c<br />
orientaciones dietéticas, 138, 139c<br />
tiempo de depuración, 138<br />
Dieta y formación de placa dentobacteriana, 73<br />
Dirección de Odontología, objetivos, 2<br />
DPT (difteria, tos ferina y tétanos), vacuna, 56<br />
E<br />
Ecología, 85-119<br />
niveles de organización, 85-87<br />
biosfera, 87<br />
comunidad, 85<br />
simbiosis, 85<br />
ecosistema, 85-87<br />
biocenosis, 85<br />
cadena alimentaria, 85<br />
factores biológicos, 85<br />
factores físicos, 85<br />
población, 85<br />
salud y, 92-119<br />
adaptaciones fisiológicas, 92<br />
contaminación ambiental, 95<br />
de agua y alimentos, 95c<br />
efectos de las radiaciones, 96c<br />
efectos en la salud, 96c<br />
crecimiento demográfico, 95<br />
cultura, 92, 93<br />
energías interna y externa, 93<br />
herencia biológica, 93<br />
vida social, 92<br />
Ecosistema bucal, 87-92<br />
características de microorganismos, 88-91<br />
microbiota, 88-89<br />
sucesión, 89<br />
alogénica, 89<br />
autogénica, 89<br />
características del huésped, 88<br />
integridad de la mucosa, 87<br />
líquido gingival, 90<br />
saliva y flujo salival, 87<br />
tejido linfoide, 87<br />
factores fisicoquímicos, 92<br />
humedad, 92<br />
pH de la cavidad bucal, 92<br />
potencial de oxirreducción, 92<br />
temperatura bucal, 92<br />
Educación para la salud, 42, 43<br />
Encuestas, 237<br />
números aleatorios, 237, 238c<br />
Endodónticas, lesiones, periodontitis asociada, 82<br />
Enfermedad, historia natural de la, 33-44<br />
definición, 33<br />
niveles de aplicación de métodos preventivos, 43-44, 44f<br />
niveles de prevención, 41-43, 42c<br />
primaria, 41<br />
promoción de la salud, 42-43<br />
protección específica, 43<br />
secundaria, 43<br />
diagnóstico temprano y tratamiento, 43<br />
limitación de la incapacidad, 43<br />
terciaria, rehabilitación, 43<br />
periodos, 40-41, 40f<br />
patogénico, 41<br />
prepatogénico, 40<br />
multicausalidad, 40, 40f<br />
tríada ecológica, 33<br />
Enfermedades periodontales, 76-84. Véase también tipo específico,<br />
p. ej., Ulcerativa necrosante, periodontitis<br />
causas de pérdida dental, 76<br />
clasificación, 78-79, 79f<br />
American Academy of Periodontology, 79<br />
citocinas, 79<br />
Classification of Periodontal Diseases and Conditions, 81<br />
mecanismos de defensa contra microorganismos, 76<br />
microorganismos periodontopatógenos, 76<br />
enzimas bacterianas, 77
Índice alfabético 299<br />
estructura antigénica, 77<br />
invasión tisular, 76<br />
producción de toxinas, 76<br />
pigmentaciones dentales frecuentes, 83-84<br />
clasificación, 83<br />
adherencia, 83<br />
manchas, alimentos, 84<br />
fármacos, 84<br />
forma de línea negra, 83-84<br />
metálicas, 84<br />
naranja, 84<br />
patológicas, 84<br />
tabaco, 84<br />
verde, 83<br />
relacionadas con VIH tipo 1, 24<br />
gingivitis ulceronecrosante, 24<br />
periodontitis, 24<br />
secuencia de colonización, 77<br />
factores del huésped, 77<br />
cambios hormonales, 78<br />
discrasias sanguíneas, 78<br />
exudado gingival, 78<br />
intoxicaciones, 78<br />
neutropenia cíclica, 78<br />
tabaquismo, 78<br />
tardíos, 77<br />
tempranos, 77<br />
Enjuagues fluorurados, 198<br />
recomendaciones, 198<br />
Epidemiología, 211-234<br />
aplicaciones, 212<br />
definiciones, 211<br />
estudio de todo tipo de enfermedades, 211<br />
estudio de la ocurrencia de enfermedades, 212-225<br />
factores de riesgo, 217-220<br />
clasificación, 218<br />
desencadenantes, 218<br />
facilitadores, 218<br />
potenciadores, 218<br />
predisponentes, 218<br />
connotaciones, 217<br />
distribución del riesgo, 217, 217f<br />
relación con daños a la salud, 218, 219f<br />
tipos, 218<br />
indicadores de salud bucal, 220-225<br />
odontogramas o diagramas dentales, 220<br />
indicadores de salud, 220<br />
directos, 220<br />
casos nuevos, 220, 221c-222c<br />
morbilidad hospitalaria, 220, 223c<br />
indirectos, 220<br />
parámetros internacionales de indicadores de uso bucal,<br />
225-229<br />
tipos, 211-212<br />
analítica, 211<br />
descriptiva, 211<br />
experimental, 212<br />
grupo “testigo”, 212<br />
valoración del riesgo de caries y enfermedades periodontales,<br />
218-220<br />
vigilancia epidemiológica. Véase Vigilancia epidemiológica<br />
Epidemiológico, método, 208-209<br />
conclusiones en la teoría, 209<br />
identificación del problema, 208<br />
observación, 208<br />
paralelismo entre el método clínico, 206, 207c<br />
planteamiento de la hipótesis, 208<br />
prueba de la hipótesis, 208<br />
Epiteliotoxinas, 72<br />
Escuela de Salerno, 1<br />
Esporas, 35<br />
Estadístico, método. Véase Método estadístico<br />
Estaño, fluoruro de, 194, 195c<br />
Estomatitis vesiculosa con exantema, 21<br />
Estudio de la ocurrencia de enfermedades, 212-216<br />
enfermedades transmisibles, 214-215<br />
indicadores de frecuencia de enfermedades, 213<br />
medidas de control, 214<br />
cadena epidemiológica, 214, 214f<br />
variables epidemiológicas, 212<br />
lugar, 213<br />
persona, 212<br />
clase social, 213<br />
edad, 212<br />
raza, 212<br />
sexo, 212<br />
tiempo, 213<br />
tendencias seculares, 213<br />
Eubacterias, 35<br />
formas, miceliales, 35<br />
unicelulares simples, 35<br />
F<br />
Factor de necrosis tumoral, 79<br />
Fagocitosis, 76, 80<br />
Faringitis aguda, 18<br />
Faringitis por virus Coxsackie, 21<br />
manifestaciones clínicas, 21<br />
Federación Dental Internacional (FDI) y sistema<br />
universal, odontogramas,<br />
225, 226f<br />
“Florilegio medicinal”, 1<br />
Flujo salival, medicamentos que lo disminuyen, 220<br />
Flúor y fluoruros, 182<br />
conceptos generales, 182<br />
modelo de Dirac para átomo de flúor, 186f<br />
tabla periódica de los elementos, 182, 187c<br />
electronegatividad, 183, 187c<br />
energías de ionización, 186c<br />
primera energía de ionización, 183, 185c<br />
efectos, 189<br />
caries de dentina y cemento, 192<br />
dientes, 183<br />
efectos tóxicos, 192<br />
placa dentobacteriana, 192<br />
fluorosis dental, 193, 193f, 194c<br />
metabolismo, 188, 189f<br />
distribución en tejidos calcificados, 188, 190f<br />
variaciones en el contenido de flúor, 188, 191f<br />
principales fuentes de flúor, 188
300 Índice alfabético<br />
Flúor y fluoruros (cont.)<br />
tipos de fluoruros de uso más frecuente, 194-195<br />
técnicas, ventajas y desventajas, 194, 195c<br />
usos, 183<br />
antecedentes del efecto en los dientes, 183<br />
fluoruración del agua, 200<br />
primeros informes, 183<br />
vías de administración, 195-200<br />
suministro sistémico, 199<br />
fluoruración del agua, 199<br />
ventajas, 199<br />
tópica, 195-196<br />
enjuagues fluorurados, 198<br />
fluoruros de autoaplicación, 196<br />
hilo dental fluorurado, 198<br />
toxicología del fluoruro, 198<br />
tratamiento, 199<br />
Fluorhidroxiapatita, 192<br />
Fluorosis dental, 193-194<br />
índice de Dean, 193<br />
Fuentes de flúor, 188<br />
agua de ríos o pozos, 188<br />
alimentos, 188<br />
profiláctica, 188<br />
terapéuticas, 188<br />
G<br />
Gammaglobulina, 56<br />
Gingivales, enfermedades, 81-82<br />
Gingivitis ulceronecrosante aguda (GUNA), 79, 81<br />
Glicocálix, 34<br />
Gonocócica, infección, 20<br />
Greene Vardiman Black, clasificación de, caries dental, 134<br />
H<br />
Hábitat, 100<br />
Haemophilus influenzae B, vacuna, 58<br />
Hammurabi, Códice de, 2<br />
Haptenos, 50<br />
Helmintos, 38<br />
Hepatitis A, 18, 19c, 22<br />
Hepatitis B, 10, 17, 19c, 22<br />
Hepatitis C, 19c<br />
Hepatitis D, 22<br />
Hepatitis E, 19c, 22<br />
Herencia biológica en malformación dental, 129<br />
amelogénesis imperfecta, 129<br />
dentinogénesis imperfecta, 129<br />
Herpes simple, 10, 20<br />
Heterótrofos, organismos, 86<br />
nutrición, holozoica, 86<br />
saprófita, 86<br />
parasitismo, 86<br />
Hidratos de carbono, 162-165, 163c, 172, 192<br />
disacáridos, 162<br />
lípidos o grasas, 163<br />
monosacáridos, 162<br />
polisacáridos, 162<br />
Hidrosolubles, vitaminas, 164<br />
Higiene bucodental, 145-201<br />
aceites esenciales, 145, 154<br />
cepillado, 145-150<br />
de lengua, 150<br />
frecuencia y duración, 150<br />
indicadores dicromáticos, 150<br />
método de Stillman, 149, 149f<br />
objetivos, 145<br />
tamaño de los cepillos, 145<br />
técnica circular o rotacional, 146, 146f<br />
división de la arcada, 146, 148f<br />
espacios interproximales, 146, 146f, 147f<br />
manera vertical, 146, 147f<br />
método de golpeteo, 146, 148f<br />
superficie oclusal, 146, 148f<br />
técnica de Bass, 146, 148f<br />
técnica de Charters, 147, 149f<br />
técnica horizontal, 149<br />
tipos de cepillos, 145<br />
clorhexidina, 145<br />
dentífrico o pasta dental, 145, 153-154<br />
componentes, 154<br />
fluoruro, 154<br />
sustancias desensibilizadoras, 154<br />
medios auxiliares, 150-153<br />
cepillo interdental, 152<br />
estimulador interdental, 153f<br />
hilo dental, 150-152<br />
cara proximal, 152f<br />
espacio interproximal, 151, 151f<br />
indicaciones, 150-151<br />
manera de dirigirlo, 152f<br />
preparación del, 150, 151f<br />
presentaciones, 150<br />
irrigador bucal, 153, 154f<br />
limpiador interdental, 152, 153f<br />
palillos, 152<br />
uso de auxiliares en higiene bucal, 161<br />
bicarbonato, 161<br />
carbón de tortilla, 161<br />
corteza de Spondias purpurea, 161<br />
hoja tostada de nicotiniana rústica (cutz), 161<br />
Hilo dental en la higiene bucal, 150<br />
Hipersensibilidad tipo I o inmediata, 59-60<br />
efectos, 60<br />
activación inflamatoria, 60<br />
espasmógeno, 60<br />
quimiotáctico, 60<br />
manifestaciones, 60<br />
anafilaxia, 60<br />
urticarias, 60<br />
Hipersensibilidad tipo II o citotóxica, 60<br />
antígenos, 60<br />
Hipersensibilidad tipo III o por complejos inmunitarios,<br />
61-62<br />
cuadros clínicos, 61<br />
Hipersensibilidad tipo IV o celular, 61<br />
Hipótesis, prueba de la, 208<br />
Historia clínica, 251-272<br />
conceptos generales, 251
Índice alfabético 301<br />
conclusiones diagnósticas, pronósticas y terapéuticas, 264<br />
cédula para elaborar historia clínica, 264-265c<br />
formato de medición de salud de la OMS, 264, 270c, 271c<br />
enfermedades detectables importantes para el odontólogo, 272<br />
diabetes mellitus, 272<br />
enfermedades de arterias coronarias, 272<br />
fiebre reumática, 272<br />
hipertensión arterial y arritmias, 272<br />
trastornos hemorragíparos, 272<br />
examen físico, 253-272<br />
inspección, 253-257<br />
demás regiones corporales, 256<br />
general, 253<br />
intrabucal, 254-256<br />
local, 254<br />
cabeza y cuello, 254<br />
máculas o lesiones, 254<br />
palpación, 257-262<br />
articulación temporomandibular, 258, 259f<br />
borde anterior de la mandíbula, 257, 258f<br />
estructuras intrabucales, 261<br />
bordes laterales de la lengua, 261, 263f<br />
mucosa labial, 261-262f<br />
paladar duro, 261-262f<br />
piso de la boca, 261-262f<br />
rebordes alveolares, 261-263f<br />
superficie dorsal de la lengua, 261, 263f<br />
ganglios linfáticos, auriculares, 258, 258f<br />
cervicales, 260, 261f<br />
occipitales, 258<br />
glándula tiroides, 260, 261f<br />
glándulas parótidas, 259, 259f<br />
hueso hioideo, 261<br />
laringe, 261, 261f<br />
músculo, esternocleidomastoideo, 260, 260f<br />
masetero, 259<br />
mentoniano, 257<br />
percusión de los dientes, 262<br />
región, mentoniana, 259, 259f<br />
submandibular, 259, 260f<br />
resultados de la exploración bucodental, 262<br />
transiluminación, 262<br />
pruebas de laboratorio y gabinete, 264<br />
signos vitales, 262<br />
presión arterial, 262, 263, 264f<br />
pulso, 262<br />
respiración, 262, 263<br />
temperatura, 262, 263<br />
interrogatorio. Véase Interrogatorio en la historia clínica<br />
Historia natural de la caries dental, 139-140<br />
periodo patogénico, 140<br />
enfermedad potencial, 140<br />
estado o periodo de latencia, 140<br />
lesiones tempranas reconocibles, 140<br />
secuelas de caries avanzada, 140<br />
periodo prepatogénico, 139-140<br />
factores del agente, 139-140<br />
factores del ambiente, 140<br />
factores del huésped, 139<br />
edad, 139<br />
estructuras genética e histológica, 139<br />
hábitos, 139<br />
integridad anatomofuncional, 139<br />
niveles de inmunidad, 139<br />
raza, 139<br />
sexo, 139<br />
Hongos, 37<br />
ulceraciones en la mucosa bucal, 37<br />
Humana, virus de la inmunodeficiencia (VIH), 5<br />
Humoral, inmunidad, 52<br />
Hutchinson, dientes de, 23<br />
I<br />
Indicadores de frecuencia de enfermedades, 213-214<br />
tasa de ataque, 214<br />
tasa de incidencia o frecuencia, 213<br />
endemia, 214<br />
epidemia o brote epidémico, 213<br />
pandemia, 214<br />
Inflamación, 48-50<br />
agentes causales físicos o químicos, 48-49<br />
aguda, 49, 49f,<br />
crónica, 50<br />
respuesta, celular, 49<br />
vascular, 49<br />
signos clásicos, 49<br />
Inflamatoria, enfermedad periodontal, 78, 79f<br />
citocinas, 79<br />
Inmunidad, formas, 52-54<br />
Inmunizaciones, 43<br />
Inmunodeficiencia adquirida, síndrome de (sida), 10, 16,<br />
23-24<br />
manifestaciones, 23<br />
Inmunodeficiencias, 61<br />
Inmunoglobulinas, 48, 53, 54, 61<br />
Inmunología, 45-61<br />
alergia e hipersensibilidad, 59<br />
antecedentes históricos, 45-46<br />
suero contra la tifoidea, 45<br />
vacuna antirrábica, 45<br />
viruela, 45<br />
erradicación mundial, 45<br />
vacuna, 45, 59c<br />
inmunodeficiencias, 61<br />
mecanismos de defensa e inmunidad, 54<br />
mecanismos específicos, 50-55<br />
anticuerpos, 50<br />
estructura, 50, 51f<br />
características de la respuesta inmunitaria,<br />
51, 52f<br />
complejo antígeno-anticuerpo, 50, 51f<br />
formas de inmunidad, 52-54<br />
inmunidad o susceptibilidad, 50<br />
resistencia inespecífica, 46-50<br />
inflamación, 48-50<br />
jugo gástrico, 46<br />
lágrimas, 47, 53<br />
leucocitos, 47-48<br />
macrófagos, 48<br />
mastocitos, 48
302 Índice alfabético<br />
Inmunología, mecanismos de defensa e inmunidad, resistencia<br />
inespecífica (cont.)<br />
mucosa del tracto respiratorio, 46<br />
piel, 46<br />
plasmocitos, 48<br />
mecanismos para obtener inmunidad, 54-56<br />
inmunidad adquirida, 55<br />
activa artificial, 55<br />
activa natural, 55<br />
pasiva artificial, 55<br />
pasiva natural, 55<br />
inmunidad natural, 54-55<br />
de especie, 54<br />
individual, 55<br />
raza y grupo, 54<br />
mecanismos de defensa de la cavidad bucal, 56<br />
saliva, 56<br />
productos para inmunización, 56-59<br />
esquema básico, 56, 57c<br />
vacunas y dosis, 59, 59c<br />
Inorgánicos, nutrimentos, 165<br />
características, 165, 168c<br />
clasificación, 165<br />
Interleucina 1 (IL-1), 79<br />
Interrogatorio en la historia clínica, 251-253<br />
antecedentes, hereditarios y familiares, 251<br />
personales, no patológicos, 251<br />
patológicos, 252<br />
estado actual, 252<br />
estado de órganos y sistemas, 252<br />
cabeza, 252<br />
función psicointelectual y sexual, 252<br />
sistema digestivo, 252<br />
sistema endocrino, 253<br />
sistema genitourinario, 252<br />
sistema respiratorio, 252<br />
padecimiento actual, 252<br />
síntomas generales, 253<br />
terapéutica empleada, 253<br />
ficha de identificación, 251<br />
Intrabucal, inspección, 254, 255f<br />
instrumentos y materiales, 254, 255f<br />
mucosa labial, 254, 256f<br />
paladar duro, 254<br />
piso de la boca, 254<br />
retracción de los tejidos, 255f<br />
superficie ventral de la lengua, 257f<br />
J<br />
Juvenil, periodontitis, 79, 80<br />
K<br />
Kaposi, sarcoma de, 25<br />
L<br />
Laboratorio, manejo de muestras, 16<br />
biopsias, 16<br />
citología exfoliativa, 16<br />
Leche materna, 216<br />
Leucocitos, 47-48<br />
clasificación, 47-48<br />
basófilos, 47<br />
eosinófilos, 47<br />
linfocitos tipos T y B, 47<br />
monocitos, 47<br />
neutrófilos, 47<br />
propiedades, 47<br />
diapédesis, 47<br />
fagocitosis, 47, 48f<br />
movimiento ameboideo, 47<br />
quimiotaxia, 47<br />
Leucotoxinas, 72<br />
Leyes de la termodinámica, 85<br />
Linfocitos, 47, 61<br />
Linfonodular, faringitis, 21<br />
Lípidos o grasas, 163<br />
ácidos grasos indispensables, 164<br />
insaturados, 164<br />
neutras, 164<br />
saturados, 164<br />
triglicéridos, 164<br />
Liposolubles, vitaminas, 164<br />
M<br />
Medidas preventivas en odontología, 145. Véase también tipo<br />
específico, p. ej., Higiene bucodental;<br />
Nutrición<br />
Meningitis, 19, 25<br />
Método científico, 203-209<br />
conceptos de ciencia, 203<br />
conceptos generales, 203<br />
conocimientos, científicos, 203<br />
de divulgación, 203<br />
populares, 203<br />
pensamiento analógico, 203<br />
conclusiones de la teoría, 205<br />
comparación con las predicciones, 205<br />
sugerencia del trabajo ulterior, 205<br />
observación, 204<br />
aspecto mental, 205<br />
sensopercepción, 205<br />
planteamiento, de hipótesis, 205<br />
del problema, 205<br />
prueba de la hipótesis, 205<br />
relación con otros métodos, 206-209<br />
clínico, 206<br />
epidemiológico, 208<br />
estadístico, 209, 209f<br />
secuencia lógica de actividades, 204<br />
Método estadístico, 236<br />
ejecución, 236<br />
análisis, 237<br />
criterios para seleccionar medidas de resumen,<br />
237<br />
variables cualitativas, 237<br />
variables cuantitativas, 237<br />
descripción de los datos, 240
Índice alfabético 303<br />
curva de distribución normal y desviación estándar,<br />
246, 246f<br />
coeficiente de variación, 246<br />
tres desviaciones estándar, 246, 248f<br />
medidas de dispersión, 245-246<br />
amplitud o rango, 245<br />
percentiles, 245<br />
varianza y desviación estándar, 245<br />
medidas de tendencia central, 242-245<br />
mediana o percentil (Md), 244<br />
moda (Mo), 244<br />
promedio o media aritmética, 244<br />
proporción, 241-242<br />
razón, 240<br />
series agrupadas, 247<br />
tasas principales, 242, 243c<br />
presentación de los datos, 239<br />
barras segmentadas, 240, 242f<br />
barras separadas, 240, 242f<br />
correlación, 240, 242f<br />
gráfica circular, 240, 241f<br />
histograma, 239, 240f<br />
polígono de frecuencia, 240, 241f<br />
recolección o medición, 237<br />
características de las escalas, 239<br />
escala de clases o intervalos, 239<br />
escala de modalidades, 239<br />
observador, 237<br />
procedimientos de medición o recolección,<br />
237<br />
encuestas, 237, 238c<br />
observación directa, 237<br />
variables, 237<br />
recuento o elaboración de datos, 239<br />
palotes, 239<br />
tarjetas simples, 239, 240f<br />
uso de la computadora, 239<br />
planificación, 236<br />
Microbiota de la cavidad bucal, 88-89<br />
encía y superficies dentales, 89<br />
factores que regulan la, 89-90<br />
adhesión, 90<br />
coagregación entre factores orales, 89, 89c<br />
factores nutricios, 90<br />
fuentes de nutrimentos, 90, 91f<br />
fisicoquímicos, 90<br />
labios, 88<br />
lengua, 88<br />
mejillas y paladar duro, 88<br />
mucosa, 88<br />
paladar blando, 88<br />
saliva, 89<br />
surco gingival, 89<br />
Microorganismos en el proceso carioso, 88<br />
Capnocytophaga, 88<br />
especies de Actinomyces, 88<br />
microorganismos patógenos predominantes, 126<br />
Streptococcus mutans, 88, 91f<br />
Veillonella, 127<br />
Monocitos, 49, 53, 60<br />
Monofluorofosfato con fosfato de calcio dibásico, 198<br />
Mononucleosis infecciosa, 22, 23<br />
Mühlemann, reservorio lábil de, 192<br />
N<br />
Necrosantes, enfermedades periodontales, 82<br />
Nematelmintos, 38<br />
Neumonía, 18<br />
microorganismos causales, 18<br />
Nicho ecológico, 85<br />
No Hodgkin, linfoma, 25<br />
Norma Oficial Mexicana para prevención y control de enfermedades<br />
bucales, 273-292<br />
acciones para el fomento de la salud bucal, 277-278<br />
campo de aplicación, 275<br />
definiciones y terminología, 276<br />
diagnóstico, 282-284<br />
disposiciones generales, 277<br />
instituciones participantes, 273-274<br />
introducción, 275<br />
modernización de servicios odontológicos, 275<br />
prevalencia de enfermedades bucales, 275<br />
objetivo, 275<br />
observancia, 287<br />
prevención de enfermedades bucales, 278-282<br />
reanimación cardiopulmonar, 287<br />
obstrucción del tracto respiratorio por cuerpos extraños,<br />
288-290<br />
obstrucción en un lactante, 289, 290f<br />
técnica del ABC, 288, 289f<br />
y maniobra de Heimlich, 287, 289f<br />
paro cardiorrespiratorio, 288, 289f<br />
referencias, 275-276<br />
tratamiento y control de enfermedades bucales, 284-287<br />
Nutrición, 161-182<br />
alimentación y salud oral, 181-182<br />
alimento, 176<br />
carácter integral de la nutrición, 176-181<br />
alimentación, digestión y transporte, 176<br />
antropometría infantil, 180, 181c<br />
factores socioculturales, 180-181<br />
desnutrición, 181<br />
distribución de los alimentos, 180<br />
obesidad, 181<br />
peso adecuado para adultos, 180, 182c<br />
definición, 161-162<br />
dieta, 174-176<br />
esquema de, 161, 161f<br />
nutrimento, 161-165<br />
platillos y derivados industriales, 161, 161f<br />
alimentos industrializados, 173<br />
funciones de la tecnología alimentaria, 173-174<br />
producto chatarra, 174<br />
Nutrimento, 161-165<br />
clasificaciones, 162<br />
dispensables o indispensables, 162, 163c<br />
grupos químicos, 162<br />
agua y oxígeno, 162<br />
función básica en el organismo, 162<br />
hidratos de carbono, 162
304 Índice alfabético<br />
Nutrimento, clasificaciones, grupos químicos (cont.)<br />
nutrimentos inorgánicos, 162, 163c<br />
proteínas, 162, 164<br />
vitaminas, 162, 163c, 164<br />
definiciones, 161<br />
Nutrimentos, fuentes de, 90<br />
endógenas, 90<br />
exógena, 90<br />
factores protectores del huésped, 90<br />
interbacterianas, 90<br />
interrelaciones nutricias, 91f<br />
O<br />
Occupational Safety and Health Administration, 13<br />
Odontogramas o diagramas dentales, 220-224<br />
de Zsigmondi o de cuadrante, 224<br />
Federación Dental Internacional (FDI), 225<br />
sistema universal y, 225, 226f<br />
numérico o sistema universal, 224<br />
Odontología preventiva, 1-4<br />
antecedentes históricos, 1<br />
aspectos preventivos, 2<br />
“nitrium”, 1<br />
primeros odontólogos, 2<br />
definición, 2<br />
distribución de la caries a nivel mundial, 4<br />
filosofía, 2<br />
necesidades del individuo según Maslow, 3<br />
autoestima, 4<br />
autorrealización, 4<br />
fisiológicas, 4<br />
niveles de prevención, 2<br />
medidas en el hogar, 3<br />
niveles de aprendizaje, 3-4<br />
programa en el consultorio, 3<br />
problemas de salud bucal en América, 4<br />
caries dental, 4<br />
enfermedades periodontales, 4<br />
problemas de salud pública, 4<br />
razones para evitar al odontólogo, 2<br />
Organización Mundial de la Salud, 43<br />
definición de salud, 43<br />
P<br />
Parámetros internacionales de indicadores de uso bucal, 225-234<br />
índice de necesidades de tratamiento periodontal de la comunidad,<br />
228<br />
códigos utilizados, 228-229<br />
índice periodontal comunitario, 229<br />
registro de pérdida de inserción, 229<br />
índices de salud bucal, 225<br />
características, 225<br />
índice de higiene oral simplificado, 227<br />
puntuación de índice de cálculo dental, 227<br />
valores de índices de residuos, 227<br />
índice de O’Leary, 228<br />
índice de placa, 228<br />
puntaje, 228<br />
índice gingival, 228<br />
valor de la superficie, 228<br />
índice periodontal o de Russell, 228<br />
individuo como unidad de medida, 226<br />
pieza dental como unidad de medida (ICAO o CPO), 227<br />
condiciones del diente, 227<br />
resultados de la información, 227<br />
Parotiditis infecciosa, 20<br />
manifestaciones clínicas, 20<br />
vacuna contra, 58<br />
Película adquirida, 66<br />
capas, 66<br />
funciones, 66<br />
interacciones de adherencia, 66, 67f<br />
Periodontales, enfermedades. Véase Enfermedades periodontales<br />
Periodontitis asociada a enfermedades sistémicas, 80<br />
diabetes mellitus, 80<br />
Pirámide alimentaria, 87<br />
Placa dentobacteriana, 63-84<br />
conceptos relacionados, 63-66<br />
colonización bacteriana, 63f<br />
materia alba, 66<br />
película adquirida, 66<br />
capas, 66<br />
funciones, 66, 67f<br />
saliva, 64-66, 64c<br />
consecuencias, 73-76<br />
cálculo, sarro o tártaro dental, 74-76<br />
cariogenicidad, 74<br />
respuesta del pH, 73, 73f<br />
características individuales, 74<br />
dieta y formación de la, 73<br />
enfermedades periodontales. Véase Enfermedades<br />
periodontales<br />
metabolismo, 72<br />
polisacáridos intracelulares, 72<br />
producción de ácido láctico, 72<br />
tipos de, 66-70<br />
fosas y fisuras, 66<br />
proximal, 66<br />
radicular, 66<br />
subgingival, 70-72, 71f<br />
afectación al epitelio, 71<br />
flotante, 71<br />
microorganismos grampositivos, 71<br />
supragingival, 67-69<br />
matriz orgánica intercelular, 69<br />
acumulaciones pilosas, 68<br />
características diferenciales, 70c<br />
curva evolutiva, 69, 70c<br />
hidratos de carbono, 69<br />
consecuencias, 70<br />
microorganismos, 69-70, 70c<br />
metabolismo aerobio, 68<br />
receptores para las bacterias, 67<br />
velocidad de crecimiento, 68<br />
Policaries, 135<br />
Polisacáridos, 162<br />
almidón, 162<br />
celulosa, 163<br />
glucógeno, 162
Índice alfabético 305<br />
Prevención de la caries dental, niveles, 140-142<br />
diagnóstico y tratamiento oportuno, 142<br />
limitación de la incapacidad, 142<br />
promoción de la salud, 140<br />
alimentación adecuada, 142<br />
educación sobre la higiene bucal, 140<br />
protección específica, 142<br />
rehabilitación, 142<br />
Primer Simposium Internacional sobre Fluoruración de la<br />
Sal, 199<br />
Proteínas, 164<br />
Protozoarios, 38<br />
ciliophora o ciliata, 38<br />
mastigophora, 38<br />
sarcodina, 38<br />
sporozoa, 38<br />
R<br />
Resfriado común, 19<br />
Retzius, estrías de, 132<br />
Rubéola, 19, 21<br />
S<br />
Saliva, 64-66<br />
estimulación, 64<br />
funciones, 64<br />
activación del sentido del gusto, 66<br />
digestiva, 65<br />
facilita el habla, 66<br />
lubrica y humedece mucosa y labios, 65<br />
medio protector para dientes y mucosa bucal, 65<br />
antibacterianos específicos, 65<br />
proteínas bacteriostáticas, 65<br />
glándulas salivales menores, 64<br />
procedencia glandular, 64<br />
valores medios de la composición de, 64, 64c<br />
xerostomía, 64<br />
Salud, bucal, indicadores, 220<br />
odontogramas o diagramas dentales, 220, 225f<br />
definiciones, 42-43<br />
Salud y demografía, 85-119<br />
características socioeconómicas y educacionales, 117<br />
actividad económica según sexo, 117c, 118c<br />
condición de actividad según sexo, 117c<br />
gran división de actividad económica, 117c<br />
nivel de ingreso según sexo, 118c<br />
participación económica femenina, 118c<br />
personal ocupado por entidad, 118c<br />
concentración de la población, 100<br />
densidad de población, 105, 105c<br />
zona metropolitana de, Guadalajara, 100, 106f<br />
la ciudad de México, 100, 107f<br />
Monterrey, 103, 106f<br />
crecimiento de la población, 107<br />
doce ciudades principales, 107, 110f<br />
tasa de crecimiento anual, 109f<br />
distribución de población rural y urbana, 107<br />
población urbana, semiurbana y rural, 107, 107c<br />
educación, 107<br />
principales indicadores educativos, 107, 110c<br />
esperanza o expectativa de vida, 99, 114-115<br />
fecundidad, 115-117<br />
distribución por grupos de edad, 116c<br />
población femenina con hijos nacidos vivos, 116c, 117<br />
promedio de hijos nacidos vivos por mujer, 115, 115f<br />
morbilidad, 111-114<br />
prevalencia de enfermedades, 114<br />
tasa de letalidad, 114<br />
movimientos migratorios, 107, 108c<br />
población de cinco o más años, 107, 108c<br />
pirámide poblacional, 100<br />
grupo de edad y sexo, 100, 100c, 101f<br />
natalidad, mortalidad y crecimiento natural, 100, 102f<br />
población urbana y rural, 100<br />
clasificación por grado de urbanización, 100, 104c<br />
distribución de localidades, 100, 103c<br />
jerarquía por tamaño de población, 102, 104c<br />
tamaño de localidad y número de habitantes, 100, 103c<br />
superficie, 99<br />
habitantes por entidad federativa, 99, 99c<br />
tasa de natalidad, 108<br />
tasas de mortalidad, 108<br />
distribución porcentual de defunciones, 114<br />
evolución de causas de defunción, 111c<br />
grupos de edad, 114c<br />
mortalidad materna, 110, 115c<br />
principales causas de mortalidad, 112c-113c<br />
Salud-enfermedad, 27-32<br />
conceptos, 29<br />
definición, enfermedad, 30<br />
salud, 29<br />
evolución histórica, 27-29<br />
concepción, biológica-social-histórica, 29<br />
racional, 28-29<br />
religiosa, 28<br />
sanitarista, 29<br />
concepto, mágico, 27<br />
naturista, 27-28<br />
proceso, 30<br />
salud, bucal, 32<br />
pública, 31-32<br />
actividades comunitarias, 31<br />
funciones de la rehabilitación, 31<br />
Sarampión, 20<br />
complicaciones, 20<br />
manifestaciones iniciales, 20<br />
Saturnismo, 78<br />
signos clínicos, 78<br />
Sellador(es) de fosetas y fisuras, 200-201<br />
amalgama, 200<br />
características de un buen, 200<br />
biocompatibilidad, 200<br />
dureza suficiente, 200<br />
translúcido, 200<br />
contraindicaciones, 201<br />
eficacia, 201<br />
grabado ácido, 200<br />
indicaciones, 201<br />
resinas plásticas, 200
306 Índice alfabético<br />
Sellador(es) de fosetas y fisuras (cont.)<br />
técnica de aplicación, 200-201<br />
grabado o acondicionamiento del esmalte, 201<br />
limpieza de los dientes, 200<br />
verificación, 201<br />
Sífilis, 22-23<br />
erupción secundaria, 22<br />
etapa tardía, 23<br />
lesión primaria, 23<br />
Sinusitis aguda o crónica, 18<br />
Sjögren, síndrome de, 64<br />
Snyder, prueba de, en detección de caries, 143<br />
Sodio, fluoruro de (NaF), 194, 195c, 200<br />
técnica de Knutson, 194<br />
Streptococcus mutans, 142<br />
T<br />
T, células, citotóxicas, 52<br />
Tártaro dental, 74-76<br />
composición y estructura, 74-75<br />
acreción de sarro sobre esmalte, 74, 75f<br />
cristales inorgánicos, 74<br />
sales inorgánicas, 74<br />
formación, 75<br />
relación con enfermedad periodontal, 76<br />
subgingival, 74<br />
supragingival, 74<br />
teorías de la mineralización, 75-76<br />
anhídrido carbónico, 75-76<br />
aumento del pH de la saliva, 76<br />
Toxoide tetánico, 58<br />
Tramas alimentarias, 87<br />
Transmisibles, enfermedades, 214-216<br />
agente causal, 215<br />
huésped susceptible, 215<br />
piel y mucosas, 215<br />
sangre, 215<br />
tracto gastrointestinal, 215<br />
tracto respiratorio, 215<br />
medios para transmisión del agente, 215<br />
factores, biológicos, 216<br />
físicos, 215<br />
sociales, 216<br />
modos de transmisión, 216<br />
aire, 216<br />
contacto directo o indirecto, 216<br />
vector, 216<br />
vehículo de transmisión, 216<br />
notificación obligatoria a la Secretaría de Salud, 234<br />
reservorio o foco de infección, 215<br />
Tríada ecológica, 33-40<br />
agentes causales, 34<br />
biológicos, 34<br />
bacterias, 34-37<br />
características, 33<br />
hongos, 37<br />
parásitos, 37-38<br />
patogenicidad, 34<br />
poder antigénico, 34<br />
virulencia, 34<br />
virus, 37<br />
físicos, 38-39<br />
cambios de temperatura, 38<br />
efecto mecánico de objetos o instrumentos, 39<br />
electricidad, 39<br />
presión de gases o líquidos, 38<br />
radiaciones, 39<br />
nutrimentos, 39<br />
químicos, 39<br />
ambiente, 39-40<br />
biológico, 40<br />
clima, 40<br />
factores sociales, 40<br />
huésped, 33-34<br />
edad, 33<br />
estado nutricio, 34<br />
estructura genética, 33<br />
hábitos, 34<br />
integridad anatomofuncional, 33<br />
nivel de inmunidad, 34<br />
raza, 33<br />
sexo, 33<br />
Triclosán, 154, 160<br />
Tricomoniasis, 21-22<br />
uretritis, 22<br />
vaginitis, 21<br />
Triglicéridos, 164, 170<br />
Tuberculosis, 18, 19c<br />
U<br />
Ulcerativa necrosante, periodontitis, 81<br />
factores predisponentes, 81<br />
V<br />
Vacunación, esquema básico, 56, 57c, 58<br />
Varicela, 20<br />
Vigilancia epidemiológica, 229-234<br />
actividades básicas, 229<br />
análisis e interpretación de los datos, 230<br />
acciones de prevención y control, 230<br />
difusión de la información, 230<br />
distribuciones de tiempo, 230<br />
propósitos, 230<br />
recolección de datos, 229<br />
encuestas, 230<br />
investigación epidemiológica, 230<br />
limitaciones de la notificación, 230, 231f<br />
notificación, 230<br />
registros, 230<br />
rumores, 230<br />
sistema de notificación, 230<br />
definición, 229<br />
elementos para, 232<br />
ambiente, 232<br />
casos y muertes, 232<br />
medidas de control, 232, 232c<br />
registro, 232, 233c<br />
población, 232<br />
reservorios, 232
Índice alfabético 307<br />
resultados de laboratorio, 232<br />
vectores, 232<br />
enfermedades de notificación obligatoria, 232-234<br />
clasificación de enfermedades, 233<br />
enfermedades transmisibles, 233-234<br />
fases de la notificación, 233<br />
objetivos, 229<br />
Víricas, hepatitis, 22<br />
Viruela, 45<br />
erradicación mundial, 45<br />
vacuna, 45<br />
Virus, 37<br />
clasificación, 37<br />
enfermedades relacionadas, 37<br />
Virus de inmunodeficiencia humana, infección por, 5,<br />
23-24<br />
manifestaciones bucales, 24-25<br />
candidiasis bucal, 24<br />
endocarditis, 25<br />
leucoplasia vellosa, 24<br />
linfoma no Hodgkin, 25<br />
meningitis, 25<br />
sarcoma de Kaposi, 25<br />
tos ferina, 25<br />
Vitaminas, 164-165<br />
características, 164, 166c<br />
Vivienda, 97-98<br />
características, 98<br />
colectiva, 97<br />
ocupantes, 97<br />
datos de cada persona, 98<br />
particular, 98<br />
X<br />
Xerostomía, 64<br />
Xifosis, 192<br />
Xilitol, efecto anticaries, 198<br />
Z<br />
Zsigmondi, diagrama de, 224