Revista Aptus n° 32

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La aceleradora más grande del mundo
invertirá en un proyecto de un graduado
de la Universidad Austral
Lo que surgió como un simple encuentro en la
universidad un sábado a la mañana, hoy ha
llevado a Ricardo Cassini, reciente graduado
de administración de empresas de la Universidad
Austral en Rosario, a recibir casi 500 mil
dólares para emprender un proyecto de
colorantes naturales. Junto a un científico del
CONICET llevan unos pocos meses desarrollando
lo que podría ser un avance para la
industria alimenticia a lo largo del mundo.
Ricardo, de gran espíritu emprendedor, tuvo
la oportunidad de viajar a Silicon Valley gracias
a una idea de emprendimiento que fue premiada
por la facultad. “Durante el viaje sentí
que me había trasladado al futuro. Volví pensando
que tenía que emprender sí o sí”, cuenta
Ricardo. Luego de su regreso, supo capitalizar
las herramientas que la universidad le había
dado con ese viaje y nunca dejó de lado sus
ganas de emprender.
En noviembre de 2018, la Universidad Austral
de Rosario organizó un evento sobre biotecnología
aplicada en negocios, en conjunto con
Gridex, una company biulder que ayuda a
formar empresas y conseguir inversiones a
partir de una idea. Ese sábado a las ocho de la
mañana Ricardo se dirigió a la facultad como
tantas veces lo había hecho durante sus años
de carrera. Pero lo que no sabía era que esa
mañana iba a iniciarse un cambio en su vida.
En ese evento, Gridex convocó científicos de
Rosario y alrededores que estaban desarrollando
ideas originales para exponerlas ante
los alumnos de la Maestría en Agronegocios
de la Austral. “Ese día me sumé como graduado
de la facu, aunque no estaba haciendo la
maestría. Durante la actividad conversé con uno
de los desarrolladores que estaba trabajando
con colorantes naturales, así fue como conocí a
Mauricio”, recuerda Ricardo. Luego de algunos
meses, Mauricio se puso en contacto con
Ricardo para que se sumara a trabajar con él y
ambos empezaron a investigar sobre los
colorantes naturales.
Tiempo después, Gridex seleccionó veinte
proyectos de entre 800 competidores para
participar de un programa de cuatro meses en
Buenos Aires. Y allí estaba la idea de Mauricio
y Ricardo. Luego pasaron a la siguiente etapa:
la idea de los colorantes naturales viajó a San
Francisco a recorrer Silicon Valley y contactar
posibles inversionistas. El último día del viaje,
su propuesta fue escuchada por Arvind
Gupta, director de IndieBio, la aceleradora
científica más grande del mundo que se
dedica a brindar inversiones. A los pocos días
les daban la bienvenida, Ricardo y Mauricio
estaban recibiendo la inversión que nunca
habían imaginado: 250 mil dólares de
IndieBio, y otros 250 mil dólares de Gridex.
Actualmente ya están en Estados Unidos y
trabajarán en Silicon Valley durante 6 meses
para continuar con el desarrollo del negocio.
En enero, presentarán ante nuevos inversionistas
y aspiran a conseguir entre 3 y 5 millones
de dólares para continuar rodando la
génesis de una gran historia.
¿De qué se trata el proyecto?
Crear colorantes naturales a partir de hongos
que se pueden usar para alimentos, textiles,
papeles, cosméticos, industria farmacéutica,
agro, entre otros. Este tipo de colorantes es
mucho más simple de generar que otros que
se extraen a partir de vegetales o insectos, y
además, los pueden consumir los veganos.
El 70% de los colorantes que se usan hoy en
día se desarrollan a partir del petróleo, por lo
tanto son sintéticos y muchos de ellos,
tóxicos. Si bien son más baratos, en muchos
países están prohibidos. El objetivo del proyecto
es poder bajar los costos de la producción
y reemplazar los colorantes sintéticos por
los naturales.