Rock To Rock Magazine - Escuchar Nª 20

nacionalizarlo o
internacionalizarlo. La vida del
músico en Chile, sobre todo
en el rock, es a veces ingrata,
en especial en regiones
o provincias lejanas a la
realidad de la capital o centro
del país. Ha sido un camino
empedrado, pero jamás un
impedimento para lograr
metas.
¿Cómo logran
compatibilizar sus vidas
diarias y sus trabajos
con los compromisos y el
trabajo de la banda?
Siempre hay tiempo.
Finalmente lo que sucede es
que te comprometes en una
relación con la banda y
terminas teniendo dos
vidas. Obviamente
amas a ambas,
pero de
distintas
formas. Es un desafío y
también una prueba de
qué tan bueno somos para
mantener algo vivo. Bueno,
creo que los resultados están
a la vista.
¿Cómo funciona su
proceso de composición?
Es rara y muy común esta
pregunta, pero no existe
una mecánica estándar para
componer. Generalmente la
música y las letras surgen en
el momento, y eso enriquece a
veces el proceso. Sin embargo,
lo más común en Cuna de
Barro es que o está la música
y sus arreglos, y se va creando
la letras en relación a lo que
queremos decir, o está la
idea de la letra y luego la
musicalizamos. Siempre todo
muta de maneras distintas, así
que el proceso de creación es
más bien un momento único.
¿Con quién
les gustaría
compartir
Entrevista a CDBi
escenario?
No hemos pensado en eso.
Pero no tenemos problema
con compartir con quien sea,
obviamente en el contexto en
que seamos idóneos.
¿Cómo han sido
sus conciertos? Me
gustaría saber tanto
de su experiencia en
Antofagasta, otras
ciudades de Chile
como Santiago y sus
presentaciones en el
extranjero también,
como la presentación
que tuvieron en Bolivia,
Buenos Aires o Colombia.
¡Uf! Debo decir a título
personal que el dicho “nadie
es profeta en su propia
tierra”, a veces se cumplen. En
nuestra ciudad ha sido buena
la experiencia de compartir
y crecer junto con el circuito,
la hemos pasado bien.
Hemos tenido la oportunidad
también de presentarnos
en Arica, Iquique, Tocopilla
y Santiago, y todas han sido
experiencias enriquecedoras
en las que la hemos pasado
muy bien y hemos
recibido ovaciones
y reconocimientos a
nuestro trabajo. Entre
grandes y pequeños
festivales, bares
emblemáticos como el
Bar de René en Santiago,
bares pequeños en
ciudades del norte, la
experiencia ha sido
maravillosa. Siempre hemos
disfrutado hacer música con
o sin estadio lleno. Ahora
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