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Jorge Riechmann: UN APARTHEID PLANETARIO ... - Istas - CCOO

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<strong>Jorge</strong> <strong>Riechmann</strong> “Un apartheid planetario”<br />

mundo, acelerando inevitablemente su degradación. Los bosques de Malasia<br />

desaparecen para satisfacer el hambre de productos forestales por parte de Japón;<br />

el “desarrollo de Rusia abre sus reservas de bosques y combustibles fósiles a la<br />

explotación por parte de Occidente; las pesquerías de Canadá colapsan por la<br />

sobreexplotación para satisfacer la demanda global; el hemisferio Sur sufre un<br />

agujero en la capa de ozono causado mayoritariamente por las tecnologías del<br />

Norte.<br />

La cuestión es que para aumentar los estándares de vida, cada vez más<br />

gente vive “importando” capacidad de carga ecológica de algún otro sitio. La<br />

pregunta obvia es la siguiente: ¿cuánto tiempo pasará hasta que acabemos con ese<br />

“algún otro sitio”? La respuesta es: ¡ya lo hemos hecho!”. 43<br />

Erradicar la pobreza: ¿bajo la responsabilidad de quién?<br />

La pobreza, ha subrayado Zygmunt Bauman, no es una humillación más<br />

entre las muchas que tienen su origen social. “Su singularidad no se<br />

deriva simplemente del hecho de que sea la más dolorosa y la que<br />

produce mayor sufrimiento a sus víctimas, sino de su condición de<br />

‘meta-humillación’, un suelo en el que prosperan todo tipo de<br />

indignidades, un trampolín desde el que se lanza la ‘humillación<br />

múltiple’.” 44<br />

La visión convencional que hoy prevalece sostiene que hace falta más<br />

globalización neoliberal (integración en el mercado mundial, aumento<br />

de las exportaciones, etc.) para “mitigar la pobreza” 45 . Sin embargo, la<br />

historia muestra que la inserción en el mercado mundial de las<br />

economías más atrasadas a menudo redunda en daños para las<br />

poblaciones locales (o al menos sus segmentos más vulnerables). Así,<br />

por ejemplo, el monocultivo del cacahuete impulsado por la<br />

Administración colonial francesa en África Occidental y el Sahel, en los<br />

últimos decenios del siglo XIX y los primeros del XX, redujo la<br />

disponibilidad de alimentos para la población local. Censos de esa época<br />

indican que, entre finales del XIX y 1920, la población del África<br />

Ecuatorial francesa disminuyó de manera drástica, a consecuencia de la<br />

43 Mathis Wackernagel y William Rees: Nuestra huella ecológica –Reduciendo el impacto humano sobre la Tierra.<br />

LOM Ediciones /Instituto de Ecología Política, Santiago de Chile 2001, p. 123.<br />

44 Zygmunt Bauman, La ambivalencia de la modernidad y otras conversaciones, Paidos, Barcelona 2002, p. 206.<br />

45 Una crítica solvente de esta visión apologética se hallará en los diversos artículos reunidos en el cuaderno<br />

Desarrollo y sostenibilidad. Cuadernos Paz y Solidaridad 23, Fund. Paz y Solidaridad de CC.OO., marzo de 1995<br />

(especialmente en “Los peligros del libre comercio” de Herman E. Daly).<br />

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