Nº 12 Alegraos Peques La santidad en los niños (abril 2022)
¿Se puede ser santo siendo un niño? "Las virtudes que se alcanzan desde niños tienen un brillo especial" (S. Juan de la Cruz).
¿Se puede ser santo siendo un niño?
"Las virtudes que se alcanzan desde niños tienen un brillo especial" (S. Juan de la Cruz).
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Abril 2022 Página 4
Santa María Goretti, mártir de la pureza
Por María Hualde
(11 años, Daganzo).
El 5 de julio de 1902 fue en busca de María
que estaba sola en la cocina, y la amenazó con un
cuchillo para que accediera a sus deseos impuros.
María se negó advirtiéndole que lo que pretendía era
pecado, por lo que éste la atacó, clavándole el cuchillo
catorce veces.
María no murió inmediatamente, sino que fue
trasladada al hospital, donde los médicos la operaron
sin anestesia (porque no había). Allí, durante todo un
día, la santa soportó heroicamente un gran
sufrimiento, orando, ofreciéndoselo a Dios y a la
Virgen de los Dolores. María pudo recibir la Comunión
y la Unción de los Enfermos. Antes de morir, dijo:
“Sí, perdono a mi asesino por el amor de Jesús, y
quiero que él también venga al paraíso. Que Dios lo
perdone, porque yo ya lo he perdonado”.
Santa María Goretti nació en Corinaldo (Italia),
en 1890. Fue la segunda de seis hijos en una familia
de campesinos. Perdió a su padre a los diez años por
causa del paludismo, y la madre de María Goretti tuvo
que trabajar. Dejaba la casa y los hermanos menores
a cargo de María, el ángel de la familia, quien
realizaba sus obligaciones con alegría, rezando
constantemente con el rosario que llevaba en la
muñeca y estudiando el catecismo. No había en ella
pizca de capricho, desobediencia o mentira. Se nutría
del Amor de Dios. A los once años hizo su primera
comunión haciéndose, desde entonces, el firme
propósito de morir antes que cometer un pecado.
Cuando María tenía 11 años, vivían en una casa
compartida con otra familia de no tan buenas
costumbres, y cuyo padre era bebedor. Tenían un hijo
llamado Alessandro de 19 años, que se enamoró de
María. Este chico, influenciado de lecturas impuras,
se dedicó a perseguir a María haciéndole propuestas
sexuales deshonestas. La santa las rechazaba.
Alessandro fue condenado a 30 años de
prisión, donde al principio no daba muestras de
arrepentimiento, a pesar de los esfuerzos del obispo
del lugar por su conversión. Una noche tuvo un sueño
donde María, vestida de blanco en la gloria, le dijo
que él también podía ir al Cielo. Alessandro cambió
completamente, volviéndose hacia Dios y ofreciendo
sus trabajos y sufrimientos en reparación de sus
pecados. Después de 27 años de cárcel fue liberado,
y acudió a pedir perdón a la madre de María, quien no
solo le perdonó, sino que lo defendió en público
alegando que, si Dios y su hija lo habían perdonado,
ella no tenía porque no perdonarlo. Alessandro acabó
trabajando en un convento de monjes capuchinos y
fue admitido en la orden tercera de San Francisco.
La fama de María Goretti se extendía cada
vez más y fueron apareciendo las muestras de
santidad. Se hicieron numerosos estudios donde
Alessandro testificó también, diciendo: “Toda la
culpa es mía. Me dejé llevar por la brutal pasión. Ella
es una santa, una verdadera mártir”.
Finalmente, fue canonizada en 1950. A la
ceremonia asistieron su madre y Alessandro. A esta
santa se le llama “Mártir de la pureza”. Sus
imágenes la representan como una campesina con un
lirio en la mano, que es el símbolo de la virginidad, y
con la corona del martirio.
Por Raquel Pascual (Daganzo).