Trobairitz 9 - 2023 DIC

David Laverde
Yesica Flores
Adelina Gimeno N.
Silvia Stefani
Mara Aranda
Gloria Donato
Raúl Garcés R.
Fran González A.
Silvia Duarte
AÑO 1. Nº9.
DICIEMBRE de 2023
@trobairitmagazine

Contenido
Año 1. Nº9. Diciembre de 2023
Un texto es un producto cuya suerte
interpretativa debe formar parte de
su propio mecanismo
generativo.
Umberto Eco
Entonces, cada lector es parte
imprescindible en la construcción
de la novela que lee.
Andrea V. Luna
Prof. Andrea V. Luna
@andreavluna
www.andreavlunaescritora.com.ar
Alejandra Jonte
Francy de los Ríos
Mercedes Chimirri
"Navidad", detalle.
Martin Schongauer, 1480.
Trobairitzmagazine@gmail.com
IG @trobairitzmagazine
https://sites.google.com/view/
trobairitzmagazine
Maipú 359, EP, Of. 5, CABA
Editorial ........................................................................................ 3
Balance 2023 ............................................................................ 3
María Elena Walsh ........................................................................ 5
Tralalá de Nochebuena ............................................................. 5
Andrea V. Luna ............................................................................ 6
En estas Fiestas ......................................................................... 6
David Laverde .............................................................................. 7
Verdades ................................................................................... 7
Yesica Flores ................................................................................. 9
La vida soñada .......................................................................... 9
Mercedes Chimirri ....................................................................... 12
El día más loco de un revistero ................................................ 12
Adelina Gimeno Navarro ............................................................ 14
Momento azul ......................................................................... 14
Mabel Bernal: vida sana .............................................................. 16
Alimentación ayurvédica ......................................................... 16
Silvia Stefani ............................................................................... 18
Secreto .................................................................................... 18
Mara Aranda ............................................................................... 20
Trobairitz: Las voces olvidadas ................................................ 20
Por Andrea V. Luna ................................................................ 20
Alejandra Jonte ........................................................................... 26
El rescate ................................................................................. 26
Dibyajyoti Mukhopadhyay: India desconocida ............................ 27
Diosa Durga: un símbolo del empoderamiento de la mujer ..... 27
Gloria Donato ............................................................................. 29
Año Viejo, Año nuevo ............................................................. 29
Chaeros Arts ............................................................................... 31
Raúl Garcés Redondo ................................................................. 32
Anemoi ................................................................................... 32
Humorarte .................................................................................. 33
Fran González Amorós ................................................................ 34
El creador de mi amigo fiel: ¡Mendrito! .................................... 34
Por Francy de los Ríos ............................................................. 34
Sebastián Saavedra: cocina y algo más ...................................... 37
Inspiración en la Puna ............................................................. 37
Silvia Duarte ............................................................................... 39
Nochebuena a la vista ............................................................. 39
Reto Literario .............................................................................. 41
¿Iniciamos?.............................................................................. 41
Imágenes que inspiran ............................................................... 42
Andrea V. Luna
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DNDA#MJ
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Editorial
BALANCE 2023
Libres y sin máscaras
Andrea V. Luna
@andreavluna
¡Qué año tan extraño este 2023!
El mundo parece estar cada vez más conmocionado,
cada vez más falto de rumbo o, lo
que es peor, como si su GPS se hubiera quedado
sin batería y no supiera leer un mapa.
Todo está convulsionado, revuelto y amorfo.
Trastocado, escindido, borroso o enmascarado
como si la mismísima idea de los tópicos
carnavalescos
hubieran
salido de
la ficción
para cobrar
cuerpo
en la vida
real y ya
no pudieran
regresar
al
mundo real.
¿O, tal vez,
las máscaras
eran las otras,
las que usamos
hasta
aquí? Tal vez la
humanidad no
enloqueció, sino
que perdió la habilidad
de contener las
miserias que siempre estuvieron ahí, acechantes.
Y, sin embargo, todavía sobreviven grupos
de artistas utópicos que pugnan y creen
en un mundo mejor. Después de todo, se necesitan
personas capaces no solo de crear
mundos, sino también de observar este en el
que vivimos, de desmenuzarlo, tocarlo, deconstruirlo
y volverlo a construir con una perspectiva
tan intensa que no deje lugar a dudas
de su materia imprescindible, que no es otra
que la del espíritu humano. Se necesitan artistas
que nos dejen el alma temblando y la
mente despierta.
¡Cómo
deseamos que
Trobaritiz sea
esa esperanza!
En este
ejemplar, les
recomiendo
mucho leer lo
que Mara
Aranda tiene
para decirnos,
para
enseñarnos
y hacernos
vibrar
desde su
corazón y
su imponente
voz; y,
de la mano
de Fran González
Amorós, acercarnos al mundo de un
creador de sueños que ha dedicado su vida a
la literatura… tanto, que ya de adulto le dio
forma a un personaje bellísimo creado cuando
era niño. Recibimos también a escritores que
hace rato que caminan esta ruta de letras infinitas
y a otros que recién se inician y ven con
asombro y magia cómo uno de sus trabajos es
publicado por primera vez.
3

Queremos ser un ensamble en el que todos
tengan lugar por igual, en el que ningún
título sea más estridente o llamativo que otro,
sin lugares secundarios porque todos tienen
un sitio igualmente preferencial.
Este año nos enseñó que todo es posible
si se lo sueña con tanta fuerza como la del
mago borgeano que soñó a su hijo y lo impuso
a la realidad. Entonces, reviso el año y creo
que esta revista es eso: la materialización de
un sueño que cada vez cobra más fuerza cuantas
más alas le damos para que viva libre. Sí,
nace como un sueño utópico cuyo objetivo
primordial era colaborar con quienes recién se
inician en este andar y, ahora, es fuerza, coraje
y magia con sus más de 175000 lectores
que nos desbordan el alma y nos llenan de
nuevas ilusiones a la vez que refuerzan la idea
de que estamos haciendo bien.
Que este 2024 nos encuentre con los brazos
en alto, la pluma en la mano y el teclado
dispuesto para seguir adelante con este humilde
medio de ayudar a otros para que no
queden tapados ni escondidos del mundo.
Brindemos, entonces, por un año que lleve la
magia de la literatura a todos los rincones de
todas las almas.
¡Muy Felices Fiestas
para todos!
Si te gusta lo que hacemos, seguinos en
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Si querés ser parte con tus relatos o con
tus poemas (siempre de manera gratuita), envianos
tu mensaje a:
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¡Hasta la próxima!
4

María Elena Walsh
TRALALÁ DE NOCHEBUENA
En Belén ha nacido un niño
con tres pecas en la nariz.
Las campanas se despiertan,
todo el mundo está feliz.
Tralalá, qué felicidad
reír y cantar para Navidad.
Su mamá, la Virgen María,
se pasea por el jardín
con mantilla de rocío
y corona de jazmín.
San José en la carpintería
toca el bombo y el tamboril.
Tiene barba de viruta
y bigote de aserrín.
Una burra con tres burritos
de visita llegó hasta allí
y una vaca con cencerro
que hace tin tilín tilín.
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Andrea V. Luna
EN ESTAS FIESTAS
En estas fiestas…
Celebremos… no importan las desilusiones.
Celebremos… no importan los desalientos.
Celebremos… no importan las desesperanzas.
Celebremos… no importan los desamores.
Celebremos… no importan las peleas.
Celebremos, simplemente.
Celebremos, con ilusión.
Celebremos, con fuerza.
Celebremos, contra todo.
Celebremos, para no desfallecer.
Porque, más allá de los credos,
De los colores y de las ideas,
Celebrar es compromiso,
Celebrar es pasión,
Celebrar es compartir,
Celebrar es vida,
Celebrar es perdonar.
Es decirle «sí» al mundo…
Aquí estoy, y te espero;
Aquí estoy, y salgo a buscarte.
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David Laverde
VERDADES
¿Te gustan tanto
las cadenas en el cuello?
Dime si te gusta estar atado
y sin sueños.
¿O quieres ser, como aquellos
que venden su futuro e ideales
por solo tener en su frente un sello?
¿Que le digas que son buenos,
que mientan solo para sentirme parte
o acaso uno de ellos?
Me negaré a ser uno de ellos,
no venderé mis sueños,
primero va Cristo
y después los que yo quiero.
No estoy metido en la cueva,
siempre diré verdades
hasta que para arriba llueva…
Siempre diré verdades
por mí y mis familiares.
El mundo te vende mentira
a precio de verdades,
haciéndote caminar
por supuestas realidades
mientras, te vendan los ojos
con simples falsedades.
Te tienen atado por el cuello
con cadenas.
Te hacen caminar con libertad
hasta que ellos quieran.
¿Y después te quejas?
Preguntando por qué tiene que existir
en este tonto sistema.
Te rapeo con verdades
por qué mi abuelo, me enseñó
que las verdades siempre queman,
pero es mejor que la mentira
que solo corrompe y quiebra.
7

David Laverde, Kairos mc
David Enrique
Laverde Rodríguez,
nació en Palo Negro
estado Aragua,
Venezuela, en el
año 2004 un 7 de
noviembre. Su
nombre artístico es
KAIROS mc. El significado
de este
seudónimo es: “El
tiem-po oportuno,
el tiempo de Dios”.
Para él es un gran
significado ya que
aclara y hace honor
a sus creencias. Se
enamoró de este
movimiento cultural
llamado HIP
HOP desde los 11
años. A esa edad
comenzó viendo batallas de freestyle y mientras los años pasaban se apasionó mucho más
hasta conocer poco a poco la cultura y el R.A.P.
Su meta, es que los mensajes de sus letras y batallas sean diferentes al mundo y a lo
cotidiano que constantemente escuchamos. Sueña con llevar un mensaje de consciencia y
de autocrítica a nuestros pensamientos.
Instagram: @KAIROSmc_0711
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Yesica Flores
LA VIDA SOÑADA
Otra vez mirando el techo. En esta cama y
casi sin poder hacer nada. Me siento inútil y
frágil. He visto a mis seres queridos, ir y venir,
tomarme la mano y llorar a mi lado. Piensa
que no estoy lúcida, pero no soy tonta: los escucho
murmurar.
Mis pensamientos siempre han estado ahí.
Los escucho decir: “Pobre mujer, todo lo que
ha pasado en la vida y aun así la testaruda sigue
luchando”. “Aún no te vayas”.
Estoy cansada y entre cierro mis ojos un
rato. Pienso en todo lo que me mantuvo en
movimiento durante tantos años.
Recuerdo el aroma a jazmín y frutos dulces.
El aroma que te regala un campo verde,
el sol pegando en mi cara en un amanecer
inalcanzable y la suave brisa primaveral. El trinar
de un pájaro alimentando a sus bebés, los
atardeceres sin fin. Los abrazos de mamá y el
“yo te protejo en los sueños” de papá.
Recuerdo mis cortos años de edad, en los
que jugar con barro, a la comidita y a la mamá
eran la infancia perfecta: aunque hubiera raspones
y caídas siempre me levantaba para jugar.
Y pienso: la vida me preparaba para ello,
para levantarme y seguir.
La vida me regaló un hermano compañero.
Ese que me seguiría a dónde fuera sin
importar qué. Incluso en este momento, lo
siento sentado a mi lado sonriéndome.
Sin importar los momentos malos que
pase en la vida, creo que todo aquello me preparo
para encontrar la felicidad en los pequeños
momentos. Porque de eso está hecha la
felicidad, de momentos.
Las carcajadas con tus hijos, el abrazo de
quien amas, los mates y las charlas de quienes
te enseñaron la realidad.
Disfrutar del río o del mar, del viento y el
sol, incluso el momento de felicidad que te
puede brindar una noche enérgica de lluvia.
Ver a los ojos a tus hijos mientras crecen y
quedarse fascinada por el brillo que dan.
El fiel amigo peludo de cuatro patas que
te besa y te abraza
cuando llegas a tu hogar.
La vida me ha quitado
pero también me
ha dado. Recuerdo mi
época de rebeldía, en
la que todo se desmoronaba.
Con los años entendí
que hay personas
que solo aprenden a vivir
a través de su fanatismo,
porque es lo que
los mantiene con vida y
le da curso a su esperanza,
les da una razón
de ser.
Otros tan solo se
desviven trabajando,
algunos por opción y
otros no, de manera
9

que lo dan todo por los que aman.
Entendí que somos complejos, cómo interpretamos
lo que nos dicen y cómo accionamos,
cómo respondemos a ellos y decidimos
si hacerlo de una manera correcta o no. En definitiva,
somos dueños de nuestros actos. Y
ellos nos definen como personas. Podemos actuar
mal y disculparnos por ello, o simplemente
fingir que nunca pasó. Pero tengamos
presente que siempre todo tiene consecuencias,
aún con las mejores intenciones que se
tengan.
Somos seres humanos y cada uno hace lo
que puede con lo que tiene, pero es responsabilidad
de uno aprender de sus errores y reflexionar
para no volver a repetirlos. Y si los repetimos
ya no son equivocaciones, son elecciones.
Somos seres tan increíbles que tenemos el
poder de autonomía para elegir si hacer el bien
o el mal. Podemos nacer en el peor agujero del
mundo y sin embargo podemos elegir como
actuamos al respecto.
Pienso en lo importante que es el perdón.
El saber perdonar a los demás y
perdonarnos a nosotros mismos.
Amarnos y amar a los demás sanamente.
Pienso lo importante que son los
límites en la vida. Esos límites sanos
que determina en cómo queremos
vivir.
En mi partida, lo único que me
motiva en estos momentos es haber
querido hacer más, más por los demás.
Pero a veces no se tienen los
medios, una parte de mi quisiera
cambiar la hambruna del mundo,
los niños heridos por niños felices,
las guerras por paz, las divisiones
políticas por amabilidad y honestidad.
Porque sufro, sufrimos una
triste realidad. Pero soy feliz también
por aquellos que tienen los medios
para aportar un grano de arena en
la felicidad de otros, que pueden hacer
la diferencia de los grandes poderes
hipócritas que destruyen la humanidad.
No he tenido los medios para
hacer grandes cosas. Pero sé que
desde mi lugar pude ser un alma que
escucha, que escucha al afligido.
Pude estar cuando más me necesitaron.
O al menos eso intenté. Traté
de hacer las cosas bien.
Tuve un tiempo oscuro, en el que me
perdí. Y no hay peor cosa que perderse a uno
mismo. A su esencia.
Y fue duro aprender. Porque esa rebeldía
es la que te lleva a tomar malas decisiones, incluso
a hacer cosas sin un porqué.
A veces te hieren, sí, pero en medio de esa
rebeldía que te hace caer y golpearte también
te hacen crecer.
En estos momentos de mi vida creo firmemente
en que llevo conmigo un recuerdo de
cada lección de la vida, gracias por ello. Porque
aprendí a levantarme una y otra vez sin
importar qué. Porque la vida es tan solo un
instante, es un suspiro, una reflexión. He tocado
la paz, sin sentir incertidumbre, aprendí
a creer en mí, a enfrentar el miedo, a la esperanza
y la fe. Levante aquellos que me necesitaban,
y hoy solo pido su alegría y felicidad.
Y a mis hijos mi eterna devoción y gratitud
Ya puedo marchar feliz y en paz.
10

La Sole
La Sole da rosas a las espinas,
las espinas que penas dan..
No da más, ni lloro ni llanto por la soledad
que fría está,
Con pétalos de rosas llorando sin cesar...
Dulces recuerdos que guardados están.
Yesica Flores
Yesica Yanet Flores, Varelense, nacida el 12 de febrero de
1993, la Plata.
A los 7 años creó su primer poema. “La Sole”, y desde ahí
supo que amaba plasmar en letras las cosas pequeñas de la vida.
No se considera escritora, aun así, muchos han dicho que sus
letras llegan a tocar el alma.
En la adolescencia amaba escribir, gracias a una fuente inspiradora
que la alentaba. Con los años perdió mucho de sus escritos
y aspiraciones. Con 30 años de edad, después de 15 años,
se vuelve a sentir motivada a jugar, crear y a soñar. Se considera
una soñadora nata.
Ve lo hermoso en las cosas simples y sencillas de la vida.
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Mercedes Chimirri
EL DÍA MÁS LOCO
DE UN REVISTERO
¡Hola! ¡Hola! ¡Acá abajo! Sí, soy yo, el revistero
de la casa, me quiero presentar y contarles
mi historia. No es que hubiera mucho
para contar: me paso la vida en este lugar aburrido,
al lado del viejo cascarrabias del sillón,
que vive quejándose: que el dueño de casa ha
engordado demasiado y que él ya no está para
aguantar tanto peso, que los hijos son unos
mocosos insufribles, que le clavan las rodillas
sin contemplación o se suben a él sin quitarse
los zapatos, que la señora que hace la limpieza
le pasa un líquido que no deja su piel tan linda
como antes… ¡Uf! Les aseguro que estoy cansado
de escucharlo. Además, siempre viendo
las mismas paredes, la misma alfombra y la
misma rutina todos los días ¡Yo también tengo
derecho a quejarme!
Pero, el fin de semana algo pasó, fue
como si mis dueños me hubiesen leído la
mente, bueno, ¡creo que tengo una mente que
se puede leer! Lo cierto es que hubo muchos
preparativos desde la mañana temprano, estaban
muy atareados: el hombre había ido a
comprar carbón, así que comencé a pensar en
que, con seguridad, iban a hacer asado. Y sí,
en efecto, los movimientos que siguieron me
dieron la razón, iban a hacer un asado y sus
amigos venían a comer; los escuché hablar entre
ellos.
Los niños se despertaron bastante temprano,
la verdad es que son muy molestos y el
viejo sillón comenzó a quejarse ¡Ay, Dios! Un
poco lo entiendo, empezaron a tirarse con almohadones
y a pelearse arriba del pobre viejo
y yo que estoy tan cerca, estaba temiendo recibir
algo de rebote.
Entonces fue cuando el dueño de casa
vino a buscarme, me levantó con sus fuertes
brazos, como si no pesara nada y fuimos atravesando
lugares de la casa que no conocía,
nunca imaginé que era tan grande. ¡Claro,
siempre estoy olvidado en un rincón! Subimos
unas escaleras y de repente, la luz me dejó casi
ciego, comprendí que estábamos en la terraza.
¿Qué iban a hacer conmigo? Confieso que me
dio un poco de miedo, después de tanto quejarme
por estar aburrido, empecé a pensar que
al menos, hasta ese momento, había estado
seguro, esto era totalmente desconocido para
mí. ¡No les puedo explicar cómo me sentí! Me
apoyaron en el piso, yo estaba un poco atontado,
después de semejante viaje, tuve que
tranquilizarme y de a poco, empezar a tomar
12

conciencia, no solo de dónde estaba, sino de
lo que había a mi alrededor. Por primera vez
en mi vida pude sentir el calor del sol y deslumbrarme
con su luz. ¡Hacía calorcito ahí!
¡Qué bueno! Durante un rato estuve contemplando
lo que me rodeaba, debo decir que soy
un revistero bastante instruido, no solo por las
revistas y diarios que llevo dentro, sino porque
he visto de todo en la televisión que está frente
a mí y que se enciende a todas horas. A veces,
ponen el noticiero y me entero de que en algún
lugar lejano están en guerra, que, al parecer
hay muchos robos por todos lados y otras
malas noticias. Una vez, me pasé toda la noche
aterrorizado, pensando que podían entrar
a robar, llevarme con ellos y luego, venderme
al mejor postor o dejarme tirado por ahí, después
de todo, ya no soy tan joven ¿A quién le
serviría?
Bueno, creo que me fui de tema, como
decía, miro mucha televisión: documentales
muy entretenidos, novelas
lacrimosas y programas para chicos y
adolescentes. Lo cierto es que, gracias
a eso, sé lo que es un pájaro,
pero nunca lo había visto en vivo y
en directo ¡Qué grandes son! Lo peor
fue cuando una paloma vino a posarse
arriba mío, hubiese deseado
poder gritar y no contenta con aterrorizarme,
no saben lo que se le ocurrió
hacer: lo más fresca, se cagó en mí,
arruinando algunos diarios con su
pestilencia. ¡Nadie sabe el sufrimiento
que es no poder moverse por sí solo!
¡No poder hablar! Por suerte, apareció
el dueño de casa y la espantó, agitando
un repasador que llevaba en la
mano y al grito de: «¡Bicho de mierda!» Nunca
más apropiado.
Puedo decir que fue una jornada muy peculiar,
que sacudió mi vida sedentaria; antes
de que llegaran los invitados, se comenzó a
prender el fuego, para lo cual, el dueño de
casa eligió un par de diarios viejos y haciendo
bollitos con ellos los fue amontonando debajo
de la parrilla. Mientras estaba en esa tarea,
llegó la señora quien se agachó muy interesada
sobre mí, pensé que tenía tierra o alguna
suciedad de la paloma que no había sido limpiada,
pero ella tomó de mi interior un diario
deportivo y comenzó a hacer bollitos con él.
Casi enseguida, vi que su esposo, que nunca
me había parecido tan enorme, la miraba con
horror y gritaba: «¡Nooooo! ¡Ese diario,
noooo!»
Lo que siguió fue una tremenda discusión
entre ellos, si hubiese podido me hubiese escondido
en el lugar más apartado. A todo esto,
los chicos habían subido y estaban jugando
con una pelota, como solían hacerlo, a veces,
en el comedor. De pronto, todo se transformó
en una especie de loquero, con sus padres,
que habían dejado de pelearse para retarlos,
al tiempo que ellos pateaban la pelota por todos
lados, rompiendo plantas y espantando al
gato grandulón. Hasta yo ligué unos cuantos
pelotazos, preguntándome por qué no podía
volver a mi tranquilo rincón, al lado de mi
viejo amigo, el sillón.
Por la noche, cuando ya se habían retirado
los invitados, los niños habían ido a bañarse
y todo, poco a poco, recuperaba la tranquilidad,
me fueron a buscar para depositarme,
piadosamente, en mi lugar de siempre.
Lo más gracioso es que, a partir de ese momento,
el sillón se ha emperrado en no hablarme,
porque dice que soy el preferido de los
dueños, a él no lo sacan nunca a tomar aire y
yo, calladito, hago de cuenta que es verdad
¿Para qué contarle mis peripecias?
13

Adelina Gimeno Navarro
MOMENTO AZUL
Ahora que todo ha pasado, que los sentimientos
están calmados, que las sensaciones
ligeramente oprimen al corazón enamorado,
me atrevo a redactar lo que fue mi vida contigo.
Yo, Alex, simplemente diré mi nombre
pues desde que la conocí este estuvo acompañado
por el de ella, fue mi sombra enamorada,
la mujer que calmó mi ajetreada vida, aquella
que me enseñó a amar de verdad, a querer
con el alma, a dejar a un lado cualquier leyenda
urbana que eclipsara nuestra unión.
Ella la que me contó su problema aquella
tarde en la playa, la
que me habló de su
enfermedad con
tan-ta naturalidad
que conmovía escucharla.
Con pocos meses,
Alma, presentaba
claros síntomas
de “Cianosis”
una enfermedad
que pigmenta la piel
a causa de una ligera
interrupción en
el flujo sanguíneo,
pero aquello no
pudo con mi enamoramiento repentino, pues
continuó diciéndome que con la edad la afección
incrementa su peligro y el empeoramiento
es inminente, hasta poder causar la
muerte.
Siguió hablándome de ella de su peculiar
enfermedad, que la falta de oxigenación en la
sangre en cualquier momento la podría volver
azul.
Yo, la escuchaba, veía en ella a una joven,
entonces, acostumbrada a sufrir y que soportaba
su enfermedad sin querer complicar en
ella a nadie. Ya que Alma confesaba entonces,
no haber tenido a nadie a su lado por aquella
causa, su vida había sido tranquila en aquel
sentido, tan solo hacía unos años un joven vecino
quiso pretenderla a pesar de su problema,
pero en la primera crisis, se asustó y vio con
temor que aquello se sucediese más a menudo,
sobre todo cuando en los momentos
azules, como ella los llamaba, la urgencia era
evidente y la gravedad se hacía intensa. No
pareció importarle demasiado aquella ruptura,
ya que su testimonio carecía de lamento, todo
lo contrario, al hablar de aquel tema, una sonrisa
se dibujaba en su rostro.
No me importó toda aquella retahíla de
posibles contratiempos en nuestra vida y
aquella misma tarde le pedí salir con ella.
¡Qué relación
más bonita! Fue
como un cuento de
hadas, un amor
lleno de comprensión
y aceptación de
los hechos. Un querer
sin condiciones,
un cariño tierno que
se apreciaba en muchas
ocasiones infantiles,
por aquellas
circunstancias de la
enfermedad.
Nuestro amor
no tenía límites, solamente los que aquella malatía
nos ponía cada vez que nos amábamos.
Aquella otra tarde en la que Alma quiso
marchar, sus dedos y sus fosas nasales comenzaron
a cambiar de color, igual como en cualquier
“momento azul” que habíamos vivido.
Creímos y llegamos a pensar que era un momento
como tantos otros…
Pero el destino no permitió, que así fuese,
era una tarde cálida, llena de momentos azules,
pues la intimidad de aquel balcón, en el
apartamento de la playa, se prestaba a ello.
Los traumas y los sofocos eran una de las principales
causas para que Alma tuviese sus crisis,
y aquella mañana algo sucedió en la calle que,
14

unido a nuestro encuentro amoroso, facilitó
tan inesperado desenlace.
Me llamó por mi nombre…
—Alex tengo miedo.
—Tranquila querida.
Intenté tranquilizarla, pero fue inútil, su
piel por momentos se pigmentaba de azul y
tuve que reaccionar rápido llamando al servicio
de urgencias, era necesario su ingreso,
para que debidamente comenzasen a tratarla.
Pero desgraciadamente todo fue para
nada, allí mismo entre mis brazos y antes de
que los sanitarios llegasen mi amada Alma, se
fue, todo fue extraño, aquella tarde ella fue la
que me pidió que le hiciese el amor, yo no
quería, sabía las consecuencias que podía
traer, pero insistió, diciéndome que la amase
despacio, poco a poco, “como siempre lo haces
cariño”, dijo, en el momento en que su asfixia
iba en aumento y sus temblores no le permitían
acariciarme serenamente. Le dije que
no estaba en condiciones de continuar, pero
me rogó que lo hiciese, que continuase, que
quería llegar hasta el final aquella vez, añadiendo
que, aunque fuese aquella su última
vez, quería saber lo que era “el final de un momento
azul”.
La mujer de mi vida fue incinerada dos
días después; en la más discreta de las ceremonias
la despedimos, tan solo varios de
nuestros amigos asistieron, los familiares que
eran lejanos hicieron caso omiso a mi llamada,
aquel fue el adiós más triste al que jamás asistí.
Por tal motivo escribo estas palabras, para
lanzar un grito a la solidaridad, a la tolerancia,
nadie debería encontrarse solo en esta sociedad.
Padecer una enfermedad rara nunca debería
ser la causa y aún menos que los síntomas
se agraven por traumas respecto al amor
que se siente por otra persona. Nos queríamos
y creo que ella quiso esa tarde llegar hasta el
final y morir, porque nadie aceptaba que dos
iniciales iguales quedarán enlazadas entre sí.
Pero a pesar de todo, en la cajita azul
donde reposan sus cenizas, hasta que llegue
mi final, se leen entrelazados nuestros nombres…
Alma y Alexandra
Adelina Gimeno Navarro
Soy una mujer que comenzó justo en el momento
preciso en este maravilloso mundo de la Literatura, escribiendo
siempre al amanecer, en ese instante en que
comienza algo tan grande para cualquier ser humano,
como puede ser, el alba de un nuevo día en su vida.
El camino andado va viendo la luz. Una década
de escritos, de trabajo, y sigo en él, es duro, pero es
mi pasión. Nunca lo dejaré, sin mi pluma activa no me
es fácil vivir.
“Cada vez que me lees me proporcionas identidad”.
15

Mabel Bernal: vida sana
ALIMENTACIÓN
AYURVÉDICA
Una salud óptima y estable se logra por
medio de la prevención, tomando conciencia
del funcionamiento del sistema orgánico y
proporcionándole lo que necesita. Cuánto
más natural sea lo que el cuerpo ingiere, mejor
se encontrará.
Muchas enfermedades podrían evitarse
con una adecuada alimentación.
“Salud no es solo ausencia de enfermedad,
es una actitud inteligente, responsable y
positiva ante la vida”,
Según el sistema ayurvédico, (ciencia de
India) además de nutrir al cuerpo, tenemos
que también nutrir a la mente y a las emociones.
Esta ciencia divide a los alimentos en
sattvicos (puros), rajasicos (estimulantes) y tamasicos
(letárgicos). Los dos
primeros se los debería consumir
de manera variada y conteniendo
los seis sabores: salado,
picante, amargo, ácido,
dulce y astringente.
Los sattvicos son los que
más se aconsejan: calman la
mente y agudizan el intelecto.
Son sanos, nutritivos, fáciles
de digerir y naturalmente deliciosos.
Aportan el máximo de
energía, vitalidad, fuerza y resistencia.
Dentro de éstos se
encuentran las frutas de estación,
verduras, hortalizas, granos,
legumbres, frutos secos,
semillas, miel, hierbas, productos
integrales y el infaltable
ghee (manteca clarificada).
Los tamasicos deberían ser
evitados, pues desequilibran
los sistemas y perturban a los
estados mentales y emocionales.
El principal medio de auto
ayuda se encuentra en una
16

dieta adecuada. Según el ayurveda cada persona
posee una constitución (dosha), éstas son
vata, pitta y kapha. De acuerdo a ellas corresponde
una determinada alimentación en
forma equilibrada. Puedes consultar un test
para saber cuál es el tuyo.
Los alimentos también poseen dosha. En
una ingesta se debe considerar los tres y realizar
de manera inteligente las combinaciones
para una correcta asimilación.
Una alimentación sana, nutritiva y balanceada
es la base de la salud física, mental y
emocional. Es relevante evitar productos que
contengan: conservantes, aditivos, químicos y
colorantes artificiales.
El prestigioso médico griego Hipócrates
(460 a.C) basó su práctica de la medicina en
la observación y el estudio del cuerpo humano
de manera holística. Su principio era “primum
non nocere” (ante todo no hacer daño). Por lo
tanto, cuidemos nuestro cuerpo. También se
recuerda su famosa frase: “Que la medicina
sea tu alimento y el alimento tu medicina”.
Aquí toma relevancia la ciencia ayurvédica
que enseña a alimentarse de manera natural y
si hay algún desajuste en el organismo recurriremos
a lo que la naturaleza nos brinda.
¿Te animás?
Será una gran experiencia.
Profesora de Yoga
17

Silvia Stefani
SECRETO
Mi nombre es Natalia, porque
nací un veinticinco de diciembre, fui,
según me cuentan mis papás, el mejor
regalo de Navidad que tuvieron en sus
vidas, eso siempre me llena de alegría,
pero en estas fechas, en las que las
fiestas de fin de año están a la vuelta
de cualquier momento, me asaltan dudas
y temores.
—Sos pequeña, no debés preocuparte,
los papás estamos para eso, por
ahora sólo tenés que hacer las tareas
de la escuela, ordenar tu pieza y jugar
—me dicen, como un CD rayado
de los que ponen en el auto cada vez
que viajamos. Pero, ¿quién trae los regalos?
El Niñito Jesús no puede, porque
Él recién está naciendo. ¿Papá
Noel? En casa no hay chimenea,
¿cómo entrará? ¿Y si los Reyes Magos
se pierden? Si las cartitas quedan en
los arbolitos, ¿cómo llegarán a ellos?
Para tranquilizarme, mamá me
contó que es por la magia de Navidad
que suceden las cosas, que es Papá
Noel quien que viene a la noche
cuando los niños ya estamos dormidos,
que si no hay chimenea, entra
por la ventana, que en enero los Reyes
magos vienen desde Oriente, y papá
me dijo que hace muchos años, una
estrella brillante como ninguna, los
llevó hasta donde estaba el Niño Jesús
con su mamá, su papá y un montón
de animalitos como los que colocamos
en el pesebre, y que, desde entonces,
llevan regalos a todos los niños del
mundo.
Lejos de tranquilizarme, me entraron
más preguntas en mi cabecita
loca, como decía mi abuela. ¿Y si
Papá Noel, no entraba por la ventana?
La que daba a la calle no era
muy grande y estaba un poco alta. ¿Se
pararía sobre uno de sus renos? ¿Lo
18

aguantarían? Sin dudas, Papá Noel, estaba un
poco gordito, además con la ayuda de mi
amiga Inés, en un mapa vi que Oriente está
muy lejos y ellos, los Reyes, andaban con sus
camellos de noche, y por allá no había tantas
luces como acá. ¿Y si las luces de la ciudad no
dejaban ver el brillo de «la estrella»?
Por eso a mis oraciones para El Ángel de
la guarda, todas las noches agregaba: «Ayuda
a Papá Noel y a los Reyes Magos para que
puedan llegar hasta los niños, porque los estaremos
esperando». Inés prometió también hacer
la misma oración, a lo mejor entre las dos,
la oración tenía más fuerza.
Navidad cada vez estaba más cerca, el
ocho de diciembre como todos los años, armamos
y decoramos el arbolito, mamá compró
unos hermosos y brillantes globos rojos, porque
los de años anteriores ya estaban viejitos,
los abuelos armaron el pesebre.
—Dejaremos el espacio libre para colocar
más adelante «al Niñito que renovará las esperanzas
de todos» —dijo mi abuela.
¡Este año con mi propia letra, con ayuda
de papá, escribí la carta para colocar en el arbolito!
Él siempre me dice que debo poner distintas
opciones por si Papá Noel o Los Reyes,
no consiguen lo que yo pidiera, así que, desde
la bici hasta la muñequita, anotamos distintas
posibilidades. También pedí a papá que me
ayudara a agregar una notita explicándole a
Papá Noel que teníamos vecinos nuevos muy
muy humildes y no tenían arbolito, que no se
preocupara, que yo compartiría mi regalo con
la niñita de esa casa, si no le llegaba su cartita.
¡Ya es veinticuatro! Papá prepara el pollo
para la cena, mamá y la abuela las ensaladas,
el abuelo acomoda las luces del arbolito, porque
algunas se desacomodaron con el viento
del ventilador, pronto llegarán mis tíos, mientras,
Inés y yo jugamos en la vereda e invitamos
a la nueva vecinita.
—Esta noche descubriré los secretos de
Navidad— se lo prometí a mis amigas.
Cenamos, los adultos hicieron brindis: por
la salud, por la familia, por los amigos. Entre
todos quitamos la mesa, nos sentamos un rato
en la terraza, pero sólo después de los cohetes,
porque algunos todavía hacen disparos al aire
y mamá les tiene miedo a las balas perdidas,
luego nos despedimos con abrazos que supongo
que, porque son de Navidad, se sintieron
más dulces, con un calorcito especial.
— ¡A dormir! —dijo mamá. Sin embargo,
yo estaba resuelta, me quedé quietita, en silencio
en mi cama, hasta no escuchar más ruidos.
Entonces, me levanté con mucho cuidado, en
puntitas de pie, asomé la cabeza por la puerta
del comedor y vi como mis papas, también en
puntas de pie venían por la galería desde el
garaje con un paquete que colocaron al pie del
arbolito…
—No me quedó muy claro, qué sucedió
—expliqué a mis amigas con cierta tristeza.
Llegó el cinco de enero, otra vez la cartita,
el pastito, la comida para los camellos de los
Reyes y la oración al Ángel de la guarda.
Cuando todo quedó a oscuras y en silencio,
cuando el reloj marcó las doce, me levanté
otra vez en puntitas de pie y otra vez, mis papás,
por la galería desde el garaje, esta vez con
una bici con un gran moño lila, ni la cartita ni
los pastitos estaban ya.
Fue entonces que descubrí el secreto:
¡Eran ellos! Los papás, que entregaban, en el
garaje a Papá Noel y a los Reyes, las cartas y
demás, y recibían los regalos y los colocaban
junto al arbolito de Navidad, para que así,
ellos no descuidaran a los renos ni a los camellos.
¡Siempre fueron ellos los cómplices de
la «magia de Navidad»! Se lo conté a mis amigas
en cuanto pude…
Pero… ¡Shhhh! Que este sea nuestro secreto:
que no se enteren los niños más pequeños.
19

Mara Aranda
TROBAIRITZ:
LAS VOCES OLVIDADAS
Por Andrea V. Luna
“La escucha de música nos conecta
con realidades más allá de las inmediatas”.
Cuando pensamos en la posibilidad
de realizar una revista literaria, la pensamos
también como un espacio donde
sentir(nos) contenidas, en libertad y en
comunidad, por lo tanto, pensándonos
como mujeres escritoras cuyo lugar en el
mundo no se define por lo que otros dictan
como aquello que debe ser leído de
manera masiva. La búsqueda de un
nombre adecuado supuso, entonces,
una tarea ardua en tanto tenía que compendiar
de manera efectiva todos estos
aspectos, además de la dificultad para
posicionamos como mujeres de identidad
fuerte y con la capacidad agregada
de cobijar a otros que recién se inician
en el camino de la Literatura, de dar a
conocer su obra. La idea de Trobairitz
Magazine se hizo presente creo yo, casi
como influjo de las antiguas musas.
Mara Aranda, valenciana (investigadora
y directora del Centro Internacional
de Música Medieval), es considerada,
debido a su obra y a su copiosa y premiada
poformance, una moderna trobairitz.
De hecho, ese es el título que
lleva el disco con el que celebra sus
treinta años sobre los escenarios.
—Mara, es un placer para nosotras
escucharte y un honor que nos compartas
tu mundo.
—El placer es mío, y quiero especialmente
daros las gracias por la sensibilidad
que demostráis al aproximaros a
este tema tan fascinante y que ha suscitado
tanta controversia a lo largo de los
siglos. Y con ello me refiero al papel de
20

la mujer proactiva, generadora de actividades
que movilizan consciencias y con ellas al
mundo.
—¿Cuál fue el momento en que te diste
cuenta de que ibas a dedicarte a estudiar la
música medieval mediterránea? Porque imagino
que, previo a ese punto de inflexión en tu
vida, siempre fuiste una apasionada de la música.
—Siempre fui una niña rodeada de personas
que amaban el arte, la dramaturgia, la música,
la poesía. Pese a venir de una familia humilde
de labradores, llevaban una semilla fértil
que los empujaba a recorrer otras tierras, lo
que tuvieron que hacer de manera autodidacta,
puesto que sus recursos económicos limitados
no les permitieron nunca acceder a
una formación académica reglada. Pero ellos
buscaron la manera de vehiculizar todo ese
caudal de emoción y de la visión amplificada
de otros mundos que ellos vivenciaban y hacerlos
realidad tangible. Así que todo ese ambiente
que me circundaba fue posiblemente el
germen de la persona que soy hoy en día.
Todo aquel movimiento artístico que se producía
constantemente a mi alrededor hizo que
desde niña fuera muy activa y tocara todas las
disciplinas artísticas desde la fotografía, hasta
la música, pasando por la pintura o la literatura
y finalmente, tuve que dejar de subdividirme y
encontrar cómo poder aunar todas esas inquietudes
en una. Ahí es cuando claramente
supe que a través de la música podía canalizar
todas las demás artes además de mi tendencia
natural a la investigación y el estudio. Es por
eso que dedicada a los repertorios históricos
podía profundizar en el contexto de los mismos.
También, el hecho de tener que
autogestionar toda la producción musical
me vincula con otras experiencias
creativas: edición de vídeo, selección
de imágenes, diseño de textos y redacción,
sesiones fotográficas, además de
lo que es la gestión más cruda, el trabajo
de oficina, del cual no podemos
sustraernos, ya que es lo que posibilita
que todo ese trabajo pueda tener visibilidad,
sobre un escenario. Creo que la
gente no es suficientemente consciente
de la ingente cantidad de trabajo que
conlleva el montaje de un repertorio,
una producción artística o discográfica.
El trabajo del artista todavía se mide
por esa “hora de gloria” que llamo yo, que es
la del escenario, las luces… pero tras todo ello
hay un trabajo de gestión arduo, ensayos, investigación,
que son invisibles, pero muy
reales.
—Entonces… ¿Quién es Mara Aranda?
—Aranda es una persona cuyo destino la
llevó a asumir determinadas cargas, una especie
de penitencia. Si hubiera podido elegir, sin
duda, hubiera sido de aquellas personas que
van de los archivos, haciendo trabajo de investigación,
a casa para, seguramente, seguir estudiando
y probablemente escribiendo, componiendo
música.
Estudié Medicina Tradicional China. En
mi familia, hasta donde recuerdan mis mayores,
siempre hubo alguien que tenía gracia
para la sanación, cuyo conocimiento habría
pasado de generación en generación. Yo elegí
otra vía, esta vez académica y estudié durante
seis años. Nunca he dejado de formarme hasta
el día de hoy, en que sigo asistiendo a cursos
puntuales relacionados con el Arte de la Sanación.
Y, hay una conexión directa, entre estas
dos disciplinas: la música (el arte en general) y
la sanación. Desde hace milenios son conocidos
los beneficios psicológicos que aporta el
arte, no solo para el que lo ejecuta sino también
para el que lo observa o percibe. Al fin y
al cabo, el arte es comunicación y expresión,
dos elementos que en la sociedad que habitamos
están hondamente afectados en tanto que
el ser humano no es libre y sus expresiones están
condicionadas a un entorno laboral, familiar,
que sesgan e incluso impiden su flujo normal,
su autenticidad y eso es un sustrato increíblemente
fértil para las patologías mentales y
21

los somatismos de las mismas. Sigmund Freud
daba mucha importancia al arte, en su relación
con el simbolismo; Platón entendía que era la
música para el alma como el ejercicio físico al
cuerpo. Aristóteles consideraba la música
parte del elenco de cualquier educando,
afirma que los ritmos y melodías imitan las expresiones
del carácter y que a través de la escucha
o interpretación de melodías en determinados
modos también se influía sobre el carácter.
Sabemos hoy en día que la escucha de
música baja la presión arterial, disminuye el nivel
de estrés o hace que en una formación coral
los corazones físicamente latan al unísono y
nos conecta con realidades más allá de las inmediatas.
—Háblanos de las trobairitz, de su surgimiento
y esencia, de su carácter y de sus objetivos
como letradas, de su lucha.
—Las mujeres y sus cantos, en la Edad
Media, y en todas las Edades, desde los estratos
más altos de la sociedad: nobles o reinas,
monjas, elevando su espíritu a lo más alto en
sus coros, meretrices que trocaron el llanto del
malvivir en sonidos hilvanados, pastorcillas
con su ganado y jornaleras en los campos sometidas
por su trabajo al sol que hacía oscurecer
su blanca tez acompañándose con ellos en
su quehacer o madres que se durmieron antes
ellas, por cansancio, que sus hijos mientras los
acunaban, cuentan la historia de la humanidad.
Ahora bien, las trobairitz son cantautoras
del medievo, como cantautores eran los trovadores,
de alta cuna. Escribían en occitano y
mientras que se conserva la obra de unos casi
400 trovadores, apenas son 30 las canciones
de trovadoras. Pero, hay piezas de autoría
anónima, en las que no se descarta que fueran
mujeres las que las compusieran, viendo en el
anonimato una opción para dejar constancia,
librar a la historia y la sociedad venidera, una
crónica de sus sentires y los avatares del
tiempo que les tocó vivir. Y, realmente todo lo
que podemos ver expresado en sus textos, de
hace mil años, es asimilable a las situaciones
que presenta el ser humano al que siguen conmoviendo
las mismas cosas, sigue siendo sensible
a los mismos estímulos en el siglo XXI.
No creo que ellas se sintieran dentro de un
movimiento de lucha. Eran mujeres letradas,
que sabían leer y escribir, tañer incluso instrumentos
musicales, por su estatus, y que tenían
una educación privilegiada, lo cual les permitía
expresarse en esos términos y dar expresión a
sus emociones tal y como lo haría cualquier
persona, con sensibilidad y tiempo, hoy en día.
A pesar de su importantísimo testimonio,
estas compositoras, han sido despreciadas
hasta fechas recientes por los historiadores y
estudiosos, que han considerado su obra literariamente
menor y a ellas cortesanas o, lo que
es peor, promiscuas, llegando incluso a aseverar
que se trataría de textos de autoría masculina
puestos en boca de mujer, utilizado también
este recurso en la primitiva lírica hispánica
en las jarchas, cantigas de amigo o villancicos.
Pero hoy en día hay consenso entre los estudiosos
en convenir que fueron composiciones
de mujeres, valientes, en una época en que el
rol de las mismas era poco más que ser peones
en el tablero de juego de alianzas matrimoniales
orquestadas por los hombres de la familia
con finalidades concretas de ampliación o
mantenimiento de poder territorial, político o
estratégico en cualquier sentido y se las necesitaba
como moneda de cambio y como posibilidad
de engendrar vástagos para perpetuar
22

los linajes.
—¿Qué significa, desde nuestra contemporaneidad,
ser una trobairitz?
—Trobairitz es una denominación que
responde a una época determinada. Podemos
situar el término fuera de contexto temporal y
espacial y utilizarlo hoy en día, aunque tengamos
palabras para referirnos, de igual significado,
como ‘compositora’. La prensa ha tomado
para sus titulares la denominación, al
hacer referencia a mi trabajo, como el de “una
trobairitz del siglo XXI” en el sentido de ser
compositora, por un lado, y por otro, el haber
rescatado piezas que nunca antes han sido interpretadas.
Hay que tener en cuenta que, de
todo el corpus de canciones de trovadoras,
solo hay una canción que conserva tanto la
parte literaria como la notación musical, es “A
chantar” de la condesa de Día. Para el resto de
piezas, de las que solamente ha pervivido el
texto, hubo que hacer un trabajo de composición
musical, basado en
mi experiencia y en estudios
sobre las obras
de compositores medievales
de la misma
época, los patrones
melódicos, los modos,
etc. Realmente es un
milagro que haya sobrevivido
esta pieza,
única, de un valor incalculable
y un icono para los y las medievalistas
de todo el mundo.
—¿Cómo logras conciliar los diferentes aspectos
de tu persona: investigadora, intérprete
y promotora cultural?
—La fuerza de la convicción en que,
desde la humildad, todas podemos contribuir
a cambiar, cuanto menos el pequeño mundo
que nos rodea. Ya que todo se reduce a partícula
y onda, si pensamos en el pequeño guijarro
que cae en la superficie de un lago, y que
genera unas ondas que se expanden sobre la
superficie del mismo, asimismo nuestras acciones
tienen un efecto inmediato en nuestro entorno
más próximo. Este a su vez pone en resonancia,
asonancia, consonancia a otros cuerpos,
mentes, almas, creándose, una cadena de
pequeñas luces que alumbran la oscuridad en
la que parece que una importante parte de la
humanidad esté sumida.
Aquello que me da la fuerza no viene de
mí, yo también resueno a causa de las
acciones de otros, también soy parte de esa
cadena de portadores de pequeñas lucecitas,
que alumbran como diminutos faros la noche
oscura de las almas perdidas o del sueño de
aquellas que están dormidas.
Aquello que me da la fuerza no viene de
mí, yo también resueno a causa de las acciones
de otros, también soy parte de esa cadena de
portadores de pequeñas lucecitas, que alumbran
como diminutos faros la noche oscura de
las almas perdidas o del sueño de aquellas que
están dormidas.
—Entonces… ¡Necesitamos saber!
¿Cuánto de tu repertorio es recopilación de las
diferentes tradiciones y cuánto es tuyo?
—Mi carrera profesional es muy larga, el
año que viene serán ya 34 los años desde mi
primer concierto. He pasado por muchas fases
y etapas que, siendo de naturaleza sensible,
como música y poetisa, me han llevado a componer
letra y música de varios álbumes en los
que quería poner también de relieve mi conexión
con la tierra a la que me siento tan unida,
Valencia, donde están enterrados todos mis
muertos desde hace centurias. Al hacer mi árbol
genealógico, que ya se remonta a 1500
veo que mis ancestros
no se han movido
más allá de 50 kilómetros
de donde habito.
Mi lengua materna
y la de mis antepasados
también es importante
para mí
puesto que, con ella,
puedo describir cosas
desde las entrañas,
desde ese cordón umbilical que me conecta
a todas mis ancestras, que no podría hacer
de otra manera. Por un lado, está esa parte
visceral, conectada con mi esencia terrenal y,
por otra, mi parte intelectual me ha llevado a
involucrarme en la recuperación de repertorios
históricos desde mis primeros discos. Incluso
en los casos de esos repertorios, como es
el sefardí, hay una parte importante de composición.
Hay que tener en cuenta que este, es
eminentemente vocal, transmitido oralmente
por boca de mujer y que se hacía sin ningún
acompañamiento, cantado en la intimidad del
hogar. Esas grabaciones documentales que se
conservan, son de referencia, hechas para ser
interpretadas, cantadas en un entorno particular.
Pero en el siglo XXI, si quieres abordar un
repertorio de música histórica, en un escenario,
con iluminación, con amplificación muchas
veces, con un público sentado en butacas
que ha pagado una entrada, no puedes ofrecer
23

un artículo de museo, porque el público quiere
ver un espectáculo, otro formato. Así que para
vestir esos cantes desnudos generalmente
compongo la parte musical. Los puristas y estudiosos,
investigadores, ya tienen material suficiente
en las fonotecas, pero hay un público
que desea acercarse a estas músicas, a estos
repertorios, desde otra perspectiva, y lo considero
totalmente lícito. Probablemente entre el
público se encontrará alguien que escuchará
por primera vez
estos sonidos,
canciones que
son respetadas
íntegramente en
su pronunciación
y en su
parte literaria, y
sentirá algo especial.
Posiblemente,
tirando
del hilo, llegará
a estas fonotecas
que están esperando
a personas
como él o
como ella, Sin
esta actuación o
concierto adaptado
a los tiempos
en que vivimos,
posiblemente
nunca
hubieran podido
llegar al origen,
la fuente de
donde manan
estas composiciones
originales.
—¿Cuáles y
cómo son los
instrumentos
más increíbles
que has puesto en valor? Ya sea por su complejidad,
por su originalidad, por su sonoridad
única o por el espíritu que de ellos mana…
—Una de mis pasiones es el arte románico
y gótico, creo que son pocas las vacaciones
que ha-ya podido tener en las que no haya elegido
acercarme a conocer y profundizar en la
historia a través de la mirada del arte. En la
arquitectura edilicia religiosa sobre todo, aunque
también civil, podemos encontrar muchísimos
de los instrumentos utilizados en el medievo.
Por supuesto también a través de los códices
iluminados, verdaderas joyas, tesoros a
los que tenemos acceso hoy en día gracias al
auge de la digitalización de las entidades a las
que pertenecen o los custodian. El Centro Internacional
de la Música Medieval ha sido un
elemento activo de patrocinio de importantes
colecciones,
como la que está
asociada al
mismo centro o
la del medievalista
Jota Martínez.
Son instrumentos
construidos,
no para figurar
detrás de
vitrinas, sino
para cumplir la
función para la
que originalmente
fueron
creados, colecciones
vivas.
Hay algunos instrumentos
que
son hermosos no
solamente por su
parte mueble y
su sonido sino
también por su
función y el sentido
de unión
que subyace en
él. El organistrum
estaba hecho
para ser tocado
por dos
personas, por
sus dimensiones.
Una de esas personas
accionaba una manivela dando círculos
que podían perpetuarse infinitamente, que frotaba
una rueda de madera a la que estaba
unida la manivela y que soportaba sobre ella
unas cuerdas produciendo una nota pedal. El
otro miembro, hacía la melodía. Ambos tenían
que estar sincronizados, en armonía y unión,
para proveer de perfección una causa más alta.
—Para finalizar: ¿Qué consideras que es
lo más importante de tu trabajo, de tu arte,
24

aquello que deseas transmitir desde lo más
profundo de tu ser?
—Realmente resumir se me hace muy difícil,
especialmente este punto. Pero al hilo de
algo que leía esta misma mañana, una persona
se convierte en aquello que cree que es. Si seguimos
diciéndonos a nosotros mismos que no
somos capaces de hacer, o ser o cambiar algo
seguramente jamás podremos hacerlo. Pero si
invertimos la polaridad de esta primera sentencia,
si alguien tiene la creencia de que puede,
con seguridad adquirirá la capacitación para
realizarlo. Si lo crees lo creas. Aunque pases
por loco para aquellos que se consideran cuerdos,
sé sincero en lo que eres y no finjas por
conveniencia ni por amarga adaptación a la
realidad de otros, ni por intereses. Aunque
seas una minoría de uno solo, la verdad sigue
siendo la Verdad. Y la mentira, la falsedad,
pasa una factura que no podrás pagar ni en
toda la eternidad.
Debo decir que en estos años realicé muchas
entrevistas a muchas personas que son
parte del quehacer cultural de estos tiempos
que corren, la gran mayoría, siempre desde el
ámbito independiente, aunque he tenido también
la posibilidad de acercarme a quienes han
dejado huella en multitudes. De entre todos
ellos, considero que Mara emana una luz bellísima,
única y difícil de entender para aquellos
a quienes estos tiempos convulsionados han
logrado cegar y encoger.
Agradezco hasta lo indecible a Mara por
su paciencia y por su cercanía, por su empuje
y por su profesionalismo y encanto para que
podamos leer estas líneas imperdibles: es que
las tecnologías no nos ayudaron en nada para
poder concretar esta entrevista.
Espero, entonces, que estas palabras que
ella comparte con nosotros nos permitan a todos
rasgarnos las vendas que cubren nuestros
ojos y nuestros corazones y que no nos permiten
ver más allá de lo puramente material.
Creo de todo corazón que el Arte en todas sus
formas y en todos sus colores nos crecen y nos
mantienen humanos… sea pues, esta entrevista,
parte de este volver a pensarnos con una
mirada que nos abra el corazón, el alma y el
entendimiento en un todo bello que trascienda
las diferencias y nos recuerde el valor del todo
y de cada uno.
https://mara-aranda.com
25

Alejandra Jonte
EL RESCATE
Un sendero estrecho e intrincado, conectaba
el camino ancho con la casa, Una casa
que hacía tiempo no lo era.
Cómo podría serlo si las ventanas ni cortinas
tenían.
Si la puerta, que otrora lucia orgullosa una
aldaba dorada, ahora no era más que un trozo
de madera roída y atravesada
con un palo
Con un pozo de agua
del que solo se extraía
hiel.
Con tejas desprendidas
que se confabulaban
con la lluvia, para llorar
ausencias.
Con paredes desconchadas
en donde aún se
podían encontrar, solitarios
y oxidados, algunos
clavos.
Con una cocina sin
fuego ni aroma a romero,
y unos cuchillos sin filo,
negadores de sangre.
Con un espejo partido
en mil pedazos, sin
nada que reflejar.
Con un reloj convertido
en caja boba, con las
manecillas clavadas en el
número siete y el minutero colgando negando
al tiempo.
No crujían los escalones.
No chirriaban las puertas.
No goteaban las canillas.
Y hasta las arañas que obscenas colgaban
de los techos, se negaban a llorar caireles.
Una casa transformada en la prisión de un
hombre, que tenía un hacha, en donde la mayor
condena era la posibilidad de escapar de
ella. De un cuerpo sin alma ni fuerzas para derribar
la puerta y huir. Un despojo de piel y
huesos con un corazón cobarde, empecinado
a seguir latiendo.
A sus espaldas, lo que
fue una casa, sólo era una
mancha más en el horizonte.
Era tanto el dolor, que un día tuvo eco.
Y volvió a escuchar al
viento.
Y el aullido de los lobos.
Y el impacto de las
ramas sobre el tejado.
Y el choque de los
caireles de las arañas.
Y la puerta se abrió,
el filo del hacha dejó de
tener propósito.
El viento entró junto
a una luz enceguecedora
que lo envolvió.
Avanzó en su dirección
y sus piernas, ingobernables,
lo obligaron a
dar el primer paso y otro
y otro, y otro y otro y otro.
A llegar al claro del bosque, vencido, cayó
de rodillas sobre miles de hojas secas.
Agachó su cabeza, cerró los ojos y en un
último suspiro dijo su nombre.
Un calor abrazador lo cubrió como un
manto. Abrió los ojos.
Al fin, ella, había acudido a su rescate.
26

Dibyajyoti Mukhopadhyay:
India desconocida
DIOSA DURGA:
UN SÍMBOLO DEL EMPODERAMIENTO DE LA MUJER
El famoso cuento mitológico de la diosa
Durga contra el rey demonio Mahishasur dice
algo como esto. Había una vez un joven
demonio vicioso llamado Mahishasur que no
quería nada más que volverse inmortal y ser
el poder supremo en la tierra y el cielo. Oró sin
descanso a los dioses y, al ver su dedicación,
apareció el dios Bramha y le concedió un
deseo. ¡El astuto
demonio Mahishasur
pidió que lo
convirtieran en la
criatura más
poderosa del planeta,
haciéndolo invencible
ante cualquier
hombre o Dios!
Bramha, sin
sospechar nada, le
concedió su deseo.
Poco después,
Mahishasur obtuvo
una fuerza y poderes
inmensos y comenzó
a abusar de su
superioridad
causando estragos en
toda la tierra. Incluso
desalojó a la mayoría
de los dioses de sus
moradas celestiales, dejándolos corriendo
hacia Bramha en busca de ayuda.
Una reunión urgente entre los tres dioses
Bramha, Vishnu y Mahesh los vio crear a la
Diosa Durga para enfrentarse y vencer a
Mahishasur. Muchos dioses se reunieron y
otorgaron una gran cantidad de poderes y
armas a Durga. Shiva le dio un Trishul, el Dios
de los Himalayas le dio un León para montar,
y así sucesivamente. Durga se convirtió en un
ejército unipersonal, dotado de múltiples
habilidades especiales, lo que la convertía en
el único rival para
Mahishasur. Armado
con todos estos
poderes, Durga
descendió de los
cielos y, después de
una larga y ardua
batalla de diez días,
decapitó
a
Mahishasur,
restaurando la paz y
el orden.
Se necesitaba
una mujer con
muchos talentos y
poderes para triunfar
sobre el mal. Esta
historia de nuestra
propia mitología es
de particular
importancia
simplemente porque nos recuerda, como
sociedad, el vigor y la tenacidad ilimitados de
una mujer, siempre que sea capaz de
desarrollar y perfeccionar sus habilidades. Es
el primer aspecto de la declaración antes
27

mencionada el que es especialmente relevante
hoy; que una mujer cuyas habilidades y
poderes se desarrollan y cultivan es una fuerza
imparable. ESTO es lo que necesitamos
extraer y aprender de la historia de Durga, y
aplicarlo a la sociedad. La Diosa Durga no
sólo sirve como un ícono para empoderar a
las mujeres, sino que su vida presenta muchas
lecciones de las que
podemos aprender,
particularmente en
referencia a las
mujeres en la
sociedad actual.
Es bien sabido
que la Diosa Durga se
transformaba en
muchos avatares
diferentes
dependiendo de la
necesidad y situación
que se le presentaba.
Las mujeres reflejan
este rasgo en la vida
cotidiana, pasando
sin problemas de
esposa a madre, de
empleada a
hermana. Esta
destreza debería
atesorarse, celebrarse y apreciarse mucho más
de lo que tal vez sea.
Durga también muestra y demuestra que
era fuerte en mente y cuerpo. Ella no era sólo
una mujer que era una gran guerrera física
sino también una persona que tenía una
tremenda resolución psicológica.
Nuevamente, esta es una cualidad envidiable
que está presente en todas las mujeres, algo
que debe ser aplaudido y amplificado, y de
ello se deben aprender lecciones.
La razón por la que Durga pudo vencer a
Mahishur fue porque su esfuerzo por
conquistarlo fue la culminación de una
empresa colaborativa. Todos los diversos
dioses que pusieron su poder y confianza en
ella, la ayudaron a vencer al monstruo
demoníaco. También en la vida real, las
mujeres son naturalmente propensas a atraer
a las personas que las
rodean. Si una mujer
está rodeada de
personas positivas y
alentadoras,
prácticamente no hay
límite para las alturas
que una mujer puede
alcanzar.
Durga siempre se
mantuvo firme en su
propósito. Ella
también tenía miedos,
pero no se acobardó y
prefirió enfrentarlos,
de frente. ¡Ella
también domó a un
león salvaje! Aquí hay
otra gran lección para
las mujeres jóvenes y
las niñas de todo el
país: no dejar que el
miedo determine sus acciones, sino
empujarlas a enfrentar y triunfar.
Durga es uno de los mejores ejemplos de
una entidad única que encarna tanto la
ferocidad como la compasión. Destructora y
creadora a partes iguales, la vida y la historia
de Durga brindan un aprendizaje invaluable
para mujeres de todas las
edades, que dentro de
ellas reside la capacidad
de ser protectoras y
cuidadoras.
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Gloria Donato
AÑO VIEJO, AÑO NUEVO
Dedicado a A.V.L, M.A.A. y P.R con profundo agradecimiento,
por regalarme aprendizaje, sonrisas y compañía cada sábado del año,
el año más oscuro de mi existencia.
Recién entré a la cocina. Llevé mi taza
con la que bebí un té. No dejo vajilla sin lavar
pero hoy no es relevante y la dejo sucia en la
bacha. Mañana en algún momento, la lavaré.
Giro para salir y veo colgado de un clavito
en la pared, un calendario/almanaque. No
compro de esos, no compro
nunca, pero suelen regalarlo
en algún comercio del barrio
y por cortesía me lo
llevo. ¿Cuándo lo colgué? No
recuerdo. Lo miré y me sentí
espantada al reparar el
número del año que, a la
brevedad termina, que llega
imparable.
Para mí, el más horrible,
penoso, inimaginable año de
toda mi vida que comienza a
retirarse porque su tiempo
llega a su fin.
Sufrí el golpe emocional
que en algún lugar de mi
cabeza cuando hice mi primer
y humilde relato, sabía que
iba a suceder. Me acechaba
agazapado entre las sombras,
maligno, esperando el momento
para darme el golpe
magistral. Hace cuatro meses
y medio esa especie de
profecía que enrarecía el
ambiente y que yo no pude o
no quise ver, salió a la luz, se cumplió y
terminó de romperme en mil pedazos. Mi
voluntad, mi resilencia y mis ganas de vivir
fueron mancilladas por la circunstancias en
tan solo un momento.
Mi cuerpo grita de dolor desde hace veinte
años sin pausa: Se robó las últimas gotas de
fortaleza física junto con los diagnósticos
médicos que empeoraron mes tras mes, sin
ninguna compasión ni perdón.
Observo sin entender, que estoy aquí, por
lo menos, en este momento y en donde el
grueso de las personas que tienen el privilegio
29

de reunirse y renovar sus esperanzas porque
el último dígito de una cifra de cuatro dígitos
está por cambiar.
Entro en pánico, bajo mi cabeza y lloro en
silencio. Esta fecha viste el firmamento de
colores para quienes tienen esa dicha de
festejar y que para mí es una soledad sórdida
y hueca.
Cuando nadie en el mundo te manda una
mensajito deseándote Feliz Año Nuevo, solo
el vacío te rodea.
El no poder mandar un mensaje de
buenos augurios al ser que más amás y
amarás por siempre, ese, que salió de vos y
cuidaste como un tesoro invaluable, y que se
convirtió en un despiadado juez que
decidió no querer saber más de vos y cortó
sin explicación, una relación que aparentaba
que iba repuntando despacito y que me
llenaba de alegría e ilusión.
Volví a levantar mi cabeza y miré
nuevamente el calendario/almanaque del año
viejo que está a punto de fugarse y pasar,
como si hubiera sido un cometa, y desaparecer.
Me pregunté: “¿Por qué? Por qué la
vida no me compensó ni le dio sentido a mi
vida?”.
Hay personas que te rompen el
corazón. Sin embargo, la que más fuerte te
pega no es la que lo rompe, sino quien se
adueña por el amor incondicional e infinito
que sentís, y se lo lleva con absoluta
indiferencia, solamente para ponerlo, con
suerte, dentro de una bolsa de residuos y
desecharlo sin la más mínima vacilación.
Dejás de existir. Solo respirás. Solo sos
una sombra gris opaca que nadie ve y si te
perciben al igual que imanes opuestos, huyen.
Así pensando, vi que tal vez, estoy
errada. Hasta la estrellita más insignificante,
ocupa un lugarcito y con su lucecita
imperceptible, brilla tímida e insegura.
Entonces la pregunta y la respuesta que
me di hace un ratito, cambia: “¿Y si en vez de
que la vida le dé sentido a mi vida no es
así?”. ¿Y si soy yo la única, que aunque ese
órgano vital que late al compás de cada
emoción ya no esté porque se lo llevaron y
descartaron, y yo y solamente yo sea la que le
pueda dar, a pesar de no tener latidos, la que
pueda regalar la dosis de vida a mi vida,
porque, precisamente, mi vida es mía,
prestada y con fecha de vencimiento, pero
mía? Entonces... ¿es posible que de la única
persona que tengo que esperar algo por más
pequeño que sea y cuidar amorosamente a
partir de ahora, resulta que soy yo?.
Agarro un vaso limpio, lo lleno de agua
por la mitad, de la única bebida que me
parece que representa todo, porque sin agua
ningún ser vivo de ninguna especie podría
sobrevivir.
Dan las 12 y en esta soledad brindo con
la bolsa de huesos, músculos y dolores
aberrantes que me torturan. Me digo en voz
bajita: “Felíz Año Nuevo”. Alzo el vaso y
brindo bebiendo de esa poción mágica que
me pareció la más dulce que jamás he
probado y agradezco a todos. A los que
decidieron irse, a los que ríen, a los que
lloran y, principalmente, por aquellos que
están como yo medio perdidos en el Universo
solitario, les digo con mis pensamientos que
son su verdadera y única compañía desde que
nacen hasta que llega el ocaso y todo lo
terrenal termina.
Cambió el número del último dígito de un
número de cuatro dígitos y se escuchan vivas
y deseos. Una invisible pincelada de color
pinta traviesa la vida que intento reflotar, que
es la mía.
Me digo y les digo:
—No olviden estar con ustedes
mismos, aunque sean esa diminuta estrellita
de débil lucecita, que lucha desesperada y en
silencio pero... que aún, aunque nadie lo note,
escondida y quietita, desea fervientemente
brillar.
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Chaeros Arts
Seguimos trabajando caras y expresiones.
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Contacto por cursos y trabajos: chaerosarts@gmail.com
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Raúl Garcés Redondo
ANEMOI
Aconteció que aquel imponente
aerogenerador suscitó enseguida el amor de
los cuatro dioses del viento. Y con el deseo de
poseerlo, Boreas desde el norte, Noto desde el
sur, Euro desde el este y Céfiro desde el oeste
se abalanzaron sobre aquel elevado ingenio.
La violenta pugna obligó a intervenir al propio
Zeus, estableciendo que sería el invierno el
tiempo de Boreas, la primavera para Céfiro y
el Otoño para Noto. Olvidó a Euro quien,
agraviado, recurrió al antiguo titán Cronos. A
partir de entonces, sus tres aspas dejarían de
obedecer dirección alguna para convertirse en
manecillas, horario, minutero y segundero, de
un implacable reloj.
Raúl Garcés Redondo
Raúl Garcés Redondo nace el 21 de septiembre de
1976 a las doce menos cuarto de la noche sin, a día de
hoy, tener muy claro si es Virgo o Libra. Apasionado de la
Historia, obtuvo la Licenciatura en la Universidad de
Zaragoza (España) donde reside. Y como gran aficionado
de los microrrelatos, seguidor de la máxima de Baltasar
Gracián y Morales: “Lo bueno si breve, dos veces bueno.
Y aún lo malo, si poco, no tan malo”.
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33
Humorarte

Fran González Amorós
EL CREADOR DE
MI AMIGO FIEL: ¡MENDRITO!
Lo irreal que sostuvo lo real en tiempos oscuros,
a través de la imaginación de González Amorós.
Por Francy de los Ríos
En circunstancias bastante extremas de mi
nación en el 2017 y a través de Facebook, conocí
a un personaje de historia ─con solo verlo
te daba paz─ que me ayudó por su deslumbrante
personalidad a sobrellevar lo que socialmente
se estaba viviendo en mi país. Al
punto que lo recreeé en
un muñeco de manualidades
y acompañó mi
árbol de navidad de ese
año. Fue el adorno principal
en mi casa, como el
primer actor de una
obra, el invitado de honor.
Todos los niños y
adultos que llegaban se
enamoraban de él, me
preguntaban de dónde lo
había sacado y yo le contaba
que era un amiguito
de un cuento llamado
“Fantasía de Invierno”.
Cuando a mi hermana le
tocó emigrar hacia Colombia,
mi sobrina de 3
años me pidió que se lo
regalara y se fue con ella
a la aventura de otro
mundo (debo confesar
que no he leído el cuento
completo, por la razón
de que en Venezuela no
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estaba a la venta, yo conocí a mi amado Mendrito
por reseñas que subían a la web: seguía
muy de cerca todo lo que era Mendrito).
En una reseña encontré un párrafo narrado
de tal manera: “Mendrito era pequeñito,
risueño y suave como un algodón; pero él pretendía
ser grande, fuerte y veloz como el
viento…”, tal cual como en ese momento trataba
de ser yo.
Ni me imaginé que al pasar los años estaría
entrevistando a su autor, a la persona que,
sin saberlo, con su imaginación creó a uno de
mis mejores amigos: Mendrito. Así que sin más
preámbulo tengo el honor de presentarles en
esta edición al escritor español González Amorós
José Fran González Amorós es de Rojales,
Alicante, España. Es escritor, animador,
lector, guionista de cine y de teatro, y también
panadero-pastelero, esa tradición es de sus padres,
y se la enseñaron desde pequeño. Amorós
nos dice:
⸻Digamos que el delicioso aroma de los
dulces es lo que ha alimentado mi imaginación
desde una temprana edad, para seguir inventando,
ahora, historias
fantásticas.
Me muevo entre esa línea invisible que
divide la fantasía y el misterio. Me
gusta mezclarlos para atrapar al lector
en mundos mágicos, pero a la vez con
tramas misteriosas.
He intentado
mantenerme en todo
momento en esa
parte de la vida dedicada
a la creación de
sueños: creaba dulces
en la pastelería familiar,
a la vez que creaba historias para que
luego fueran leídas.
⸻¿Qué tipo de literatura creas?
—Literalmente me muevo entre esa línea
invisible que divide la fantasía y el misterio.
Me gusta mezclarlos para atrapar al lector en
mundos mágicos, pero a la vez con tramas
misteriosas.
⸻¿Cómo nace el escritor? ¿En qué momento
te das cuenta de que quiere crear mundos?
—Como bien preguntas, diría que nací escritor,
con la imaginación en mi cabeza. Luego
ya la fui desarrollando con los años. Al principio
únicamente sabía que me gustaba inventar
historias, luego ya sabría que todo eso era ser
escritor.
⸻¿Cómo fueron tus inicios en las letras?
—Primero, siendo un niño, descubriendo
a otros autores. Leer y leer: esa es la mejor enseñanza
para un escritor. Luego mezclando lo
leído con mi imaginación, y de ahí escribiendo
mis primeros relatos cortos que leían mis amigos.
⸻¿Cuántos libros has publicado?
—Hasta la fecha llevo siete libros y varios
premios literarios ganados. Escribo libros tanto
para niños como para adultos, siempre comento
que mis libros no tienen edad, según en
la etapa de la vida que se lean, se les puede
dar una interpretación diferente.
⸻¿De los libros publicados, cuál es tu favorito?
—Digamos que cada libro mío editado
tiene parte de mi corazón, porque a todos les
pongo mucho amor y dedicación. Pero si
tengo que nombrar uno solamente, me quedaría
con “Fantasía de invierno”, libro donde recreo
la vida de Mendrito.
⸻¿Cómo nace Mendrito y por qué creaste
a este personaje?
—Tal como he
contado al principio
de la entrevista, mis
padres tenían una
pastelería cuando yo
era pequeño. En navidades,
aquí en España,
hay un dulce típico
de estas fechas: los almendrados. Que básicamente
se componen de almendra. Para
que no les molestara mientras elaboraban ese
dulce, me daban un trocito de esa masa, una
masa que yo moldeaba como la plastilina, formando
un muñequito. Al que le puse Mendrito
por nacer de la almendra. Digamos que eso ya
era ser escritor, inventar personajes. Ese personaje
lo guardé en mi mente, hasta que lo recuperé
para darle forma al libro que ya es un
best-seller aquí en España: “Fantasía de invierno”.
⸻¿Cómo nace tu primera línea para crear
un relato? ¿Cómo es tu proceso creativo, para
crear un personaje?
35

—Esa primera línea va rondando en mi
cabeza durante un tiempo, moldeándola, dándole
vida a la trama, a los personajes. Hasta
que me pongo delante del teclado del ordenador.
No soy un escritor de mapa, no lo tengo
todo controlado y cerrado cuando me pongo a
escribir. Soy un escritor de brújula, mis historias
están vivas hasta el último momento de
poner el punto y final, me gusta que mi propia
historia me sorprenda con algún giro inesperado
que no tenía en mente.
⸻¿Qué método utilizas o te sirve para elegir:
¿el estilo, el tono y el cariz de los hechos
para narrar tus historias?
—Cuando escribo cuentos para niños utilizo
una voz omnisciente, narro la historia en
tercera persona, esa voz delicada que susurra
los cuentos de fantasía. Pero cuando narro historias
de misterio para adultos, suelo hacerlo
en primera persona. A mi parecer las noto más
creíbles.
⸻¿Tienes nuevos proyectos en la actualidad?
—Por supuesto, para estas navidades estará
en librerías la última entrega de la colección
Cuentos en el país de la fantasía: El reino
de las calabazas (hechizos asombrosos). Un libro
repleto de magia, y, como siempre digo,
tanto para niños como para adultos. Espero y
deseo que, si os tropezáis con alguno de mis
libros, los disfrutéis al máximo.
⸻No quiero despedir esta entrevista sin
darte públicamente las ¡GRACIAS! Mil gracias:
Fran González Amorós por crear a quien me
ayudó a sobrellevar momentos difíciles, no
tengo duda que, así como tu imaginación y
creación me sostuvo a mí, tus personajes ayudan
en el mundo a muchos, es maravilloso sumergirse
en un mundo irreal para poder sobrellevar
lo real que en algún momento nos sobrepasa.
Mil gracias por siempre.
—Muchas gracias por la entrevista, es un
placer haber contestado a vuestras preguntas.
Un abrazo desde Rojales, un pueblecito muy
cerca del mar Mediterráneo en España.
⸻Fran, el regalo de vida ha sido mío, es
un verdadero honor poder haber entrevistado
al creador de mi fiel amigo Mendrito y conocer
un poco más del hombre que tiene la imaginación
para crear tan maravillosas historias.
Así, llena de júbilo finalizo tan nutritiva
charla con quien de seguro por mucho tiempo
seguirá creando mundos extraordinarios y que
el Mediterráneo con sus olas los llevará en la
brisa a donde un ser humano lo necesite para
volver a creer en la fantasía de la vida y en la
inocencia de la niñez, la mente que nos invita
a ser niño y volver a creer en seres mágicos.
36

Sebastián Saavedra:
cocina y algo más
INSPIRACIÓN EN LA PUNA
Siempre que alguien me comentaba de
su viaje por el norte de Argentina me provocaba
poca curiosidad e intención de programar
uno hacia allí. Hasta que un día decidí
aventurarme junto con unos amigos, y mi
aversión y falta de interés quedó totalmente en
el pasado al recorrer las rutas
rodeadas de vegetación,
montañas, paisajes únicos e
inolvidables. Pero sin lugar a
dudas los broches de oro de
cada recorrido diario eran los
pueblitos característicos y sus
lugarcitos para comer los platos
con ingredientes locales.
Probar, sentir los aromas, las
texturas y los sabores de los
platos junto a las vistas hermosas
fue una de las cosas
que mas me enamoraron de
la zona.
Uno de los días del recorrido
visitamos un pueblito
llamado Purnamarca, cuyas
calles en subidas y bajadas
terminaban sobre el pie de
unas montañas de diferentes
colores haciendo una vista
única. Sus casas construidas
con estilo colonial y en sus
calles vendedores de los productos típicos coronando
el paisaje.
Una de las comidas tradicionales que
me encanto fue un arrollado de carne de llama
rellena de vegetales grillados y queso el cual
inspiro esta receta que luego recree con carne
de novillo. Recuerdo estar sentado en una
plaza frente a una iglesia de arquitectura colonial
que data de los años 1640 y algo, con paredes
blancas, puertas y ventanas en color verdes
musgo, muchos árboles que daban sombra
sobre unas callecitas y veredas de piedra y
finalizando con la vista al cerro de los 7 colores.
Hoy les comparto esta receta ideal para
los días de calor ya que es fácil, rica y diferente.
37

Arrollado de novillo
relleno de vegetales y queso reggianito
INGREDIENTES
Guisado
6 bifes grandes de novillo
2 cebollas
1 morrón rojo
1 morrón verde
2 zanahorias
1 zuchini
250 grs de queso reggianito
Para el acompañamiento:
3 cebollas
1 morrón rojo
1 morrón verde
2 zanahorias
2 papas
2 zucchinis
PROCEDIMIENTO
Con la ayuda de papel de aluminio disponer
los 6 bifes de novillo formando una especie
de matambre. Condimentar a gusto y
colocar con un sobre la mitad del arrollado el
relleno de vegetales rallado o picado bien chiquito
rehogados y mezclados una vez frio con
queso reggianito rallado. Envolver formando
un rollo y cerrar el papel de aluminio para reforzar
y mantener el
rollo durante la cocción.
Llevarlo al
horno alrededor de
unos 45 a 50 minutos
a una temperatura
muy fuerte y dejar reposar unos 15 minutos
antes de abrirlo y cortarlo.
Para el acompañamiento cortar cebollas,
morrones, zanahoria y zucchinis en tiras
gruesas, y saltearlos con aceite de oliva y manteca,
condimentar con sal, pimienta y ciboulette.
Se puede acompañar también con arroz
blanco. Esta receta
rinde para 4 a 5 personas.
¡Que lo disfruten!
chef
38

Silvia Duarte
NOCHEBUENA A LA VISTA
Hace mucho frío
y los negocios esperan
con impaciencia las ventas
Frente a las vidrieras
de una gran juguetería
hay chiquillos que suspiran
Sus narices echan
sueños de vapor
pero el vidrio va empañando
la ilusión
Se acercan las fiestas. Están a la vuelta
de la esquina y de pronto esa canción se
repite en bucle en su cabeza. Apura el
paso y entra a la primera cafetería que encuentra
a tomar algo caliente. Una moza
con una vincha de ciervo se acerca le deja
la cartilla sin darle tiempo a pedir un café
cortado. Se acomoda en la silla y mira a
su alrededor, mesas repletas de gente bulliciosa
con bolsas grandes, seguro con los
regalos para el árbol. Y regresan los recuerdos
de otras navidades en su tierra.
Allí es verano. Hubo fiestas con mucho calor,
pero se ve jugando con las estrellitas
que le compraban y compartía con sus
hermanos.
Una nochebuena en especial, le había
escrito a papá Noel pidiendo la muñeca
con el piano. Ya que no podían pagarle
los estudios, se conformaba con tocar el
piano de la muñeca y pensar que era uno
de verdad. Le gustaba tanto que ejercitaba
sus manos sobre cualquier superficie
y se imaginaba sentada frente a las teclas
blancas y negras.
Pero en esa casa el dinero no sobraba
y pensar en comprar un piano no era algo
importante, además ¿dónde lo iban a poner?
No había espacio suficiente, había
otras cosas prioritarias antes. Sin embargo,
sus padres pensaron que ya que le
gustaba la música bien podía aprender
guitarra, no era tan caro y sacando un crédito
la comprarían.
Para no desairar a sus padres fue al conservatorio.
Hizo su mejor esfuerzo, los años
pasaban y ella aprendía, pero no descartaba
que algún día tocaría el piano. En el conservatorio
había uno que los alumnos usaban para
39

practicar y ella acostumbraba a quedarse después
de su clase a escucharlos.
Una tarde volvía de la escuela cuando encontró
a su padre y a una de sus hermanas hablando
en la cocina. Notaba nerviosa a su madre,
retorcía las manos y preguntó qué pasaba.
Ya no vas a ir sola al conservatorio – dijo
su padre. Inscribimos a tu hermana, la semana
que viene comienza las clases de piano. Giró
la cabeza, buscó la mirada de su madre pidiendo
explicaciones que no llegaron, pero se
animó a preguntar:
—¿Van a comprar el piano?
—Claro que no: sabes que allí dejan practicar
a los alumnos que no tienen el instrumento
—contestó su padre.
—¡Qué bien!
Alcanzó a decir y se fue a la habitación
que compartían con un nudo en la garganta.
A su hermana no le interesaba aprender a tocar
un instrumento, solo quería salir de la casa
y dos veces por semana escapar del control de
su padre. Así fue como pudo sentarse y tocar
algunas veces cuando la acompañaba para
que practique.
Terminó sus estudios de música pera no
continuó con la guitarra. Asistía a cuánto concierto
gratuito podía, la economía no le permitía
pagar las entradas al teatro.
Los años fueron pasando y cuando por fin
se decidió a tomar clases que ella podría costear
con su trabajo, la profesora fue lapidaria:
a tu edad cuesta mucho aprender, la postura
del cuerpo, los brazos. Y salió de allí cabizbaja,
sintiéndose derrotada.
La situación del país donde vivía la expulsó
entonces cruzó el océano con la esperanza
de una vida mejor. Acá no le fue fácil
adaptarse a las costumbres, pero consiguió trabajo
después de dar las equivalencias de la carrera
de música. Irónicamente enseña teoría y
solfeo en una escuela del primer nivel y da clases
de guitarra.
40

Reto Literario
¿INICIAMOS?
Este mes arrancamos con ideas nuevas y…
¡Ahora les toca a ustedes!
Como habrán visto, todos los meses reservamos
la contratapa para fotos que nos desafían
y que, por sí solas, tienen una narrativa
particular, así que optamos por que sean más
interesantes todavía y ahora serán el eje de
nuestro reto literario.
Y es que este mes, además, estrenamos
fotógrafo: se trata de Auty Moleta, quien tendrá
a su cargo despertar nuestra creatividad
hacia narrativas que nos movilicen la imaginación,
la mente y el alma hasta hacernos estremecer.
¿Tienen ganas de ser parte de nuestro pequeño
gran mundo literario?
¿Cómo?
Acá les dejamos un instructivo:
1. Realizar un microrrelato de hasta 50 palabras
en base a la imagen de la contratapa
del ejemplar del mes en curso.
2. Escribirlo en los comentarios de la publicación
del reto mensual en nuestro Instagram:
@trobairitzmagazine.
3. Al final, anotar título y autor entre paréntesis.
4. Solo se admitirán trabajos en lengua castellana.
5. Los menores de edad podrán participar
con la autorización de sus padres expresa
por mensaje privado, de lo contrario,
de resultar ganador, será desestimado.
6. Habrá 2 ganadores por mes: el más votado
y el elegido por el equipo editorial.
7. Cierre del certamen: el 30 de cada mes.
8. Premios:
a. Publicación destacada en histories.
b. Publicación destacada en la revista.
c. Diploma acreditativo.
Sepan que siempre pueden preguntar lo que necesiten
en caso de surgir dudas o de querer comentarnos algo. ¡Nos encanta leerlos!
trobairitzmagazine@gmail.com
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¿Qué escribirías con ella?
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