12.04.2013 Views

Los caballos no compran periódicos - Asociación de la Prensa de ...

Los caballos no compran periódicos - Asociación de la Prensa de ...

Los caballos no compran periódicos - Asociación de la Prensa de ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

LOS CABALLOS NO COMPRAN PERIÓDICOS<br />

vencido, <strong>de</strong> vez en cuando l<strong>la</strong>maba a Don Eduardo el <strong>de</strong> Fuentes. “Tú tranquilo y espera”.<br />

Pero <strong>la</strong> competencia <strong>no</strong> se atrevía a secundarme y los días pasaban.<br />

Una mañana <strong>la</strong> prensa estadouni<strong>de</strong>nse se <strong>de</strong>spertó con <strong>la</strong> <strong>no</strong>ticia <strong>de</strong> que el portaaviones<br />

nuclear USS “Enterprise” iba a entrar en el Mediterráneo y al día siguiente ABC<br />

le <strong>de</strong>dicaba <strong>la</strong> portada. Habíamos hecho diana y teníamos una exclusiva mundial.<br />

Entonces me ocupé <strong>de</strong> recordar nuestra anticipación y publiqué toda <strong>la</strong> información<br />

técnica <strong>de</strong> <strong>la</strong> nave y su programa <strong>de</strong> visitas. En varias ciuda<strong>de</strong>s portuarias <strong>de</strong> Francia<br />

e Italia se registraron enfrentamientos, manifestaciones y protestas.<br />

La venta <strong>de</strong> nuestro periódico que había comenzado a experimentar un aumento sensible<br />

últimamente en ciertos distritos como los barrios portuarios, <strong>la</strong>s Ramb<strong>la</strong>s y el<br />

Distrito V, esto es el popu<strong>la</strong>r “Barrio Chi<strong>no</strong>”, se disparó. Era algo realmente ha<strong>la</strong>gador.<br />

Naturalmente, mi redactor jefe me <strong>de</strong>stituyó, me arrinconó, me quitó <strong>la</strong> sección <strong>de</strong><br />

manera fulminante para darse<strong>la</strong> a un co<strong>la</strong>borador <strong>de</strong> espectáculos l<strong>la</strong>mado Rodriguez<br />

Pare<strong>de</strong>s. Pero <strong>no</strong> podía arrebatarme “<strong>la</strong> gloria”. Todos co<strong>no</strong>cían mi esfuerzo y sabían<br />

que aquel<strong>la</strong> subida <strong>de</strong> <strong>la</strong>s ventas era obra mía. Y yo me sentía pagado porque veía<br />

recompensado mi trabajo. En u<strong>no</strong>s meses había logrado que se interesasen por <strong>la</strong>s<br />

activida<strong>de</strong>s portuarias todos los sectores económicos implicados, antes dispersos.<br />

Nada más falso. Quienes habían disparado <strong>la</strong>s ventas <strong>de</strong>l periódico eran <strong>la</strong>s prostitutas.<br />

Cada una llevaba en el bolso un ejemp<strong>la</strong>r, para saber cuando iba a tocar puerto<br />

cada barco importante y por dón<strong>de</strong> andaba <strong>la</strong> VI Flota <strong>de</strong> los Estados Unidos.<br />

En <strong>la</strong> agonía <strong>de</strong> Tele/eXpres<br />

Asistir a <strong>la</strong> <strong>de</strong>ca<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> algo o a <strong>la</strong> muerte <strong>de</strong> alguien es una experiencia más que dramática<br />

sobre todo cuando es algo nuestro. Y el diario Tele/eXpres era algo profundamente<br />

mío. Comencé a trabajar en él varios meses antes <strong>de</strong> que saliese a <strong>la</strong> calle y fuí el tercer<br />

contratado <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l director, Andrés Aveli<strong>no</strong> Artís Tomás “Sempronio” y <strong>de</strong> Josep<br />

Pernau Riu que era el redactor jefe.<br />

Ellos habían <strong>de</strong>jado hacía tiempo el periódico y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> muchos avatares y cambios<br />

<strong>de</strong> propiedad estaba hundiéndose sin remedio. No <strong>no</strong>s <strong>de</strong>jaban los lectores, que seguían<br />

fieles al proyecto, ni <strong>de</strong>caía nuestro entusiasmo que se sobreponía al hecho <strong>de</strong> que nuestro<br />

producto <strong>no</strong> llegase a <strong>la</strong> mayor parte <strong>de</strong> los quioscos, <strong>no</strong> sabíamos por qué. Y a <strong>la</strong> circunstancia<br />

<strong>de</strong> que <strong>no</strong> percibiésemos ya los sa<strong>la</strong>rios <strong>de</strong> Sebastián Auger.<br />

Continuábamos con una fi<strong>de</strong>lidad numantina aferrados a un proyecto en el que <strong>no</strong> creíamos<br />

ya mas que <strong>no</strong>sotros. Era una situación dramática como <strong>de</strong> sitio, <strong>de</strong> prensa <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

resistencia, <strong>de</strong> publicación c<strong>la</strong>n<strong>de</strong>stina. No teníamos más que dos líneas telefónicas, <strong>no</strong>s<br />

36

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!