Isis sin velo III - masoneria activa biblioteca
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La adoración de los ángeles y santos es actualmente en todos conceptos de igual índole que la adoración<br />
de los demonios en tiempos primitivos. El nombre difiere, pero la cosa es exactamente la misma, con los<br />
mismos templos y las mismas imágenes que en otro tiempo fueron de Júpiter y demás demonios y son de la<br />
Virgen y los santos. El paganismo se metamorfoseó en papismo.<br />
A fuer de imparciales, hemos de añadir a esto que las sectas protestantes han conservado también buena<br />
parte de ritos y ceremonias paganas.<br />
El apostólico nombre de Pedro deriva de los Misterios, cuyo hierofante llevaba el título caldeo de Peter (...),<br />
que significa intérprete (54). Jesús dijo:<br />
Sobre esta piedra edificaré mi Iglesia y las puertas del infierno (55) no prevalecerán contra ella.<br />
Con la palabra piedra o petra significaba metafóricamente los Misterios cristianos, cuyos oponentes eran<br />
los dioses del mundo inferior adorados en los misterios de <strong>Isis</strong>, Adonis, Atys, Sabazio, Dionisio y Eleusis. El<br />
apóstol Pedro no estuvo nunca en Roma; pero los papas cristianos tomaron el cetro del pontifex maximus, las<br />
llaves de Jano y Kubelé y la tiara de la Magna Mater (56), convirtiéndose de esta suerte en sucesores del sumo<br />
sacerdote pagano llamado Petroma o sea Pedro Roma.<br />
Enemigos más poderosos de la Iglesia romana que los “infieles” y “herejes” son la mitología y filología<br />
comparadas (57). El cúmulo de pruebas ha ido aumentando recientemente de tal modo que no da ocasión a<br />
nuevas controversias. El juicio de los críticos es demasiado concluyente para dudar de que la India es la cuna<br />
no sólo de la civilización, del arte y de la ciencia, <strong>sin</strong>o también de las principales religiones de la antigüedad,<br />
incluso el judaísmo y, por consiguiente, el cristianismo. Herder afirma que la India es la casa solariega del<br />
género humano y que Moisés fue un hábil y relativamente moderno compilador de las tradiciones brahmánicas.<br />
Dice a este propósito:<br />
El sagrado Ganges que baña la India es para Asia entera el río paradisíaco. También allí fluye el bíblico<br />
Gihon, que no es ni más ni menos que el Indo. Los árabes le llaman así en nuestros días; y los nombres de las<br />
comarcas regadas por sus aguas se conservan todavía entre los indos.<br />
LAS LLAVES DE SAN PEDRO<br />
Jacolliot tradujo los antiguos manuscritos de hojas de palmera que por fortuna le permitieron examinar los<br />
brahmanes de las pagodas; y una de dichas traducciones nos revela el indudable origen de las llaves de San<br />
Pedro y su simbólica adopción por los romanos pontífices. Apoyado en la autoridad del Agruchada Parikshai<br />
(Libro de los Pitris) demuestra Jacolliot que siglos antes de nuestra era los iniciados del templo elegían un<br />
Consejo Supremo presidido por el brahmâtma, cuya dignidad recaía tan sólo en los brahmanes mayores de<br />
ochenta años (58) y estaba encargado de custodiar la mística fórmula:<br />
en que se cifraba toda la ciencia y significaba<br />
A<br />
U M<br />
CREACIÓN<br />
CONSERVACIÓN TRANSFORMACIÓN<br />
Únicamente el brahmâtma podía revelar esta fórmula a los iniciados del tercero y superior grado, y si<br />
alguno de estos comunicaba a un profano el más insignificante secreto era condenado a muerte junto con<br />
quien había recibido la revelación.<br />
Por último dice Jacolliot:<br />
Coronaba tan hábil sistema una palabra todavía superior al misterioso monosílabo AUM, y quien poseía su<br />
clave llegaba casi a igualarse con el mismo Brahma. Pero esta clave sólo la conocía el brahmâtma, quien al<br />
morir la legaba en una caja sellada a su sucesor.<br />
Esta desconocida palabra, cuya revelación ningún poder humano fuera capaz de arrancar ni aun hoy día en<br />
que, a pesar de que la autoridad brahmánica padece bajo la dominación inglesa, cada pagoda tiene su<br />
brahmâtma (59), estaba grabada en un triángulo de oro y se conservaba en el sagrario del templo de Asgartha,<br />
cuyo brahmâtma tenía las llaves. Por esta razón este brahmâtma llevaba en la tiara dos llaves entrecruzadas,<br />
que de rodillas sostenían dos brahmanes, como símbolo del precioso depósito confiado a su custodia...<br />
Triángulo y palabra aparecían reproducidos en la piedra del anillo que el brahmâtma llevaba en insignia de su<br />
autoridad, y también estaban grabados en un sol de oro puesto sobre el altar donde todas las mañanas ofrecía<br />
el brahmâtma el sarvameda o sacrificio en honor de las fuerzas de la naturaleza (60).<br />
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