Manual del pescador 1879 .pdf - riograndedexuvia
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envolver con cintas las membranas de las branquias para que<br />
no se aflojen.<br />
«Llegada á este punto la operación, se cuelgan les peces<br />
por medio de ganchos atados á bramantes ó cor<strong>del</strong>es proporcionados<br />
al peso de los mismos. El animal ha de estar suspendido<br />
por la boca, que se mantendrá abierta lo más posil)le;<br />
entonces se tira la piel hacia abajo, ensanchándola con<br />
las manos; luego por la boca se va vertiendo arena bien seca<br />
y finísima que con su mismo peso alarga la piel, y una vez<br />
llena ésta se distribuye convenientemente. Está dotada do<br />
tal contractura la piel de los pescados, que el peso de la arena<br />
no la estira como cuando vivia el animal.<br />
"Rellenada la piel y sujeta la boca así como las branquias<br />
con cordones ó tiritas de lienzo, no queda sitio por donde salir<br />
la arena. Así pues, se coloca el animal donde plazca, por<br />
ejemplo sobre una tabla; extíéndense las espinas, reteniéndose<br />
por medio de ganchitos de alambre; se deja la piel expuesta<br />
al aire y al sol, y no tardará en disecarse: una vez seca,<br />
se desatan las tirillas de lienzo que mantienen cerrada la<br />
boca, se abre ésta bien, y la misma sequedad comienza á ponerla<br />
rígida: déjese colgado el animal cabeza abajo; la arena,<br />
gracias á su peso, se escapa, quedando únicamente una pequeñísima<br />
parte adherida á la piel, la cual, merced á su propia<br />
consistencia, se sostiene perfectamente bien y presenta al<br />
mismo tiempo un cuerpo voluminoso y ligero. Ya no falta<br />
más que dar un poco de vista al pez, lo que se consigue con<br />
una capa de barniz que le conserva y devuelve aquel brillo<br />
que pierde por la disección; pero en vano se tratarla de devolverle<br />
los preciosos colores que en vida constituían su ornamento.<br />
Las causas que los producían ya no existen, y con<br />
éstas desaparece su magnifico atavío.»<br />
El segundo método de Manduit no se diferencia <strong>del</strong> primero<br />
más que en el modo de descarnar. Se levanta un opérenlo<br />
de las branquias y se hace pasar el cuerpo por esta<br />
abertura volteando la piel. Si la abertura no es bastante<br />
grande, se corta la pequeña parte de piel que separa las dos<br />
branquias por debajo, y de-este modo el orificio es más que