Cuentos y poess populares andaluces

Sin ella rio puedo salir; conque cósemela tú,
dijo el hijo á su hermanu. — Su hermana se echó
á llorar y le dijo á su abuela.— Mi hermano dice
que José le habla á Petrulaü — siempre pensé
que ese mal nacido nos hacia cara á las dos.
^Conque al fin se ha sabido que fué el monacillo
quien le robaba las velas á San Pancracio? me lo
sospeché y se lo dijo al Sacristán, contestó la
abuela.
El lector.— /,Eslo es lo que llaman los An-
daluces un chascarrillo? confieso que no le hallo
ni chispa, ni sentido.
Tío Romance. — Lo poco nunca dio mucho,
Señor; pero no deja de ser este chascarrillo un
proverbio puesto en acción, y es el de: Cada
tino trata de lo que mata, y suele ser sordo á apu-
ros ágenos.
Habia en Sanlúcar de Barrameda una her-
mandad de San Pedro, que pensó en hacerle al
santo en su dia una función de las buenas.
Aviaron de un todo la iglesia, que pusieron como
nueva; compraron la cera y apalabraron al
predicador, á los cantores y á los músicos.
Estando la víspera vistiendo al santo, cate
V. que se les cae de las manos y se hace peda-