Estudios Revista Ecléctica. Número 159 - Christie Books

que no poseo el incalculable
poder de nuestro gran
Demóstenes; pero queda
algo por considerar, a lo que
ningún hombre de esta ni
de otra civilización podrá
oponerse...
»Friné es una obra maestra
de la Naturaleza. Friné
representa la inspiración que
ha inducido a Praxiteles a
llenar nuestro templo con
trabajos inmortales —al decir
esto se dirigió al escultor,
que permanecía recostado
contra una columna—;
Friné ha sido el manantial
inspirador, no sólo de los
divinos cuadros de Apeles,
sino de los poetas, y su hermosura
quedará cuando nosotros
hayamos pasado. Hay
algo que está por encima de
la ley; algo que contiene
concentradas en un cuerpo
las gracias todas de los dioses;
algo que la fuerza del
mundo civilizado debe proteger,
aunque esa protección
se manifieste en contra
de la ley; algo que no tiene igual en la
tierra toda: ¡Mirad! —Tomó el extremo de la
túnica de Friné y, tirando de él, dejó visibles
las formas de la bella hasta su cintura, volviendo
a exclamar—: ¡Mirad! ¿Quién se atreve a
condenar este cuerpo?»
La escena cambió por completo. De cada pecho
brotó un estallido de entusiasmo y reacción. Las
más grandes autoridades de la ciudad señalaban
con el dedo a los jueces. Antes de que la tempestuosa
situación decayese, el primero de ellos
se retiró, siguiéndole los otros. Los aplausos resonaron
hasta hacer temblar los muros. Friné,
por su parte, lloraba y reía, apoyada sobre el
hombro de su defensor. Alguien exclamó: « ¡ Al
templo de Venus! ¡Llevemos a la diosa frente
a quien la protege! ¡Vayamos a decir a Venus
que Hiperides ha salvado a Friné!»
¡Algo (¡lie el mundo civilizado debe proteger, aun por encima
de la ley!...
© faximil edicions digitals 2006
Momentos más tarde, Friné aparecía a los
ojos del público, que estaba reunido afuera,
acompañada por los genios del siglo. Se la sentó
en una silla y fue elevada sobre el gentío.
Fue una procesión triunfal que, llegada al
templo de Venus, cobró el aspecto de una real
apoteosis. La escalinata del mismo estaba alfombrada
con flores y en el interior se quemaba
incienso. El improvisado trono fue depositado
en tierra. Friné trató de mantenerse en pie, pero
al darse cuenta de que no podía hacerlo, abrió
los brazos y los apoyó sobre los hombros de dos
sacerdotisas. La parte superior de la túnica volvió
a resbalar, y la pálida Friné desapareció en
el templo, medio desnuda, a postrarse a los pies
de la diosa, rival suya en belleza.
A NUESTROS
SUSCRIPTORES COMO EN AÑOS ANTERIORES, ADVERTIMOS A NUES-
TROS SUSCRIPTORES QUE TERMINAN SU SUSCRIPCIÓN
EN ESTE NUMERO, QUE ESPERAMOS LA RENUEVEN
ANTES DEL DÍA 20 DE ENERO.
DE NO HABER RECIBIDO EL IMPORTE EN DICHA FE-
CHA, DISPONDREMOS REEMBOLSO EN NUESTRO NU-
MERO EXTRAORDINARIO DEL PRÓXIMO MES DE
ENERO POR 6'50 PESETAS MAS 0'50 POR GASTOS DE
REEMBOLSO. EN TOTAL, 7 PESETAS, CON LO QUE
Z QUEDARA CUBIERTA LA SUSCRIPCIÓN DE 1937.