ESFUÉRZATE Y SE VALIENTE - Editorial Aldevara
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Esfuérzate y se Valiente<br />
Como muchos de los trabajos de clases eran grupales, armamos un conjunto interesante,<br />
además de la enseñanza compartíamos tiempo fuera de clases.<br />
El grupo de profesores, era bastante variado también. Pero hubo alguien en concreto<br />
que parece haberme condenado al paredón desde un primer momento.<br />
Propiedad<br />
Siempre fui un alumno bastante autodidacta, en mi vida personal y en lo que res-<br />
quedaba con lo que leía en los libros, sabía que siempre había una segunda opción,<br />
la mía.<br />
de<br />
Me gané la apatía de una profesora de conocimientos muy pero muy cuestionables.<br />
www.<br />
pecta a estudios. No me gustó jamás seguir las instrucciones al pie de la letra, siempre<br />
trataba de encontrar vías rápidas o alternativas diferentes para cada cosa. No me<br />
Claramente, esto a ciertas personas no les gusta, y menos aún cuando se les saca<br />
de su rutina o de sus propios ideales.<br />
Cuando empecé este curso, yo contaba con cierta preparación, una buena base.<br />
Hacia nueve años había aprendido a montar videos de forma autodidacta y al descubrir<br />
este mundo maravilloso, jamás dejé de practicarlo.<br />
Pero esta profesora se empeñaba en poner en duda mis conocimientos y en enseñarnos<br />
de formas extremadamente erróneas una asignatura que se le quedaba más<br />
aldevara.<br />
que grande.<br />
No nos cabía la más mínima duda de que esta profesora no estaba formada para<br />
dar esta asignatura, quedó más que demostrado que muchos de nosotros teníamos<br />
conocimientos previos al montaje que<br />
es<br />
nos avalaban a tener poder de cuestionar sus<br />
métodos.<br />
No solo no aprobé esta asignatura, la cual dominaba a la perfección desde hacía<br />
nueve años, sino que me quedó previa para el año siguiente.<br />
Enfrentar a un profesor frustrado e ignorante, puede tener sus consecuencias.<br />
Aunque debí callar muchas veces, no me arrepiento de nada de lo que pasó durante<br />
el curso lectivo. Ya no podía dejar que nos pisen la cabeza de esa forma y de que se<br />
nos ponga de vagos o irresponsables cuando nos dejábamos los cuernos en la sala de<br />
montaje.<br />
El agravante de la situación fue que teníamos un topo dentro del curso, una persona<br />
que se encargaba de hacer la pelota a dicha profesora y se contorneaba por los<br />
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