Sobre Las 7 Palabras Pronunciadas Por Cristo En La ... - OpenDrive
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San Roberto Belarmino LAS 7 PALABRAS DE JESUCRISTO EN LA CRUZ<br />
eterno, pues se funda en la Esencia Divina, y así dice nuestro<br />
Seńor: “Yo y el Padre somos uno”[167]; y por tanto no dijo<br />
<strong>Cristo</strong>: “Padre mío, żpor qué me has abandonado?”, sino “Dios<br />
mío, żpor qué me has abandonado?”. Pues el Padre es llamado<br />
el Dios del Hijo sólo después de la <strong>En</strong>carnación y por razón de<br />
la <strong>En</strong>carnación. El segundo tipo de unión no ha sido ni jamás<br />
puede ser disuelto, pues lo que Dios ha asumido una vez no<br />
puede jamás dejarlo de lado y por eso dice el Apóstol: “El que<br />
no se perdonó ni a su propio hijo, sino que lo entregó por todos<br />
nosotros”[168]; y, San Pedro, “<strong>Cristo</strong> padeció por nosotros”, y<br />
“Ya que <strong>Cristo</strong> padeció en la carne”[169]: todo lo cual prueba<br />
que no quien fue crucificado no fue meramente un hombre, sino<br />
el verdadero Hijo de Dios, y <strong>Cristo</strong> el Seńor. El tercer tipo de<br />
unión también existe aún y existirá siempre: “Pues también<br />
<strong>Cristo</strong> murió una sola vez por nuestros pecados, el justo por los<br />
injustos”[170], tal como lo expresa San Pedro; pues para ningún<br />
provecho nos habría sido la muerte de <strong>Cristo</strong> si esta unión de<br />
gracia se hubiese disuelto. <strong>La</strong> cuarta unión no pudo ser<br />
interrumpida, pues la beatitud del alma no puede perderse, ya<br />
que comprende el goce de todo bien, y la parte superior del alma<br />
de <strong>Cristo</strong> estaba verdaderamente feliz[171].<br />
Queda entonces solamente la unión de protección, que fue<br />
quebrada por un breve periodo, para dar tiempo a la oblación del<br />
sacrificio de sangre para la redención del mundo. <strong>En</strong> efecto,<br />
Dios Padre pudo en varias maneras haber protegido a <strong>Cristo</strong>, y<br />
haber impedido la Pasión, y por este motivo dice <strong>Cristo</strong> en su<br />
Oración en el Huerto: “Padre, todo es posible para ti; aparte de<br />
mí este cáliz, pero no sea lo que yo quiero, sino lo que quieras<br />
Tú”[172]: y nuevamente a San Pedro: “żO piensas que no puedo<br />
yo rogar a mi Padre, que pondría al punto a mi disposición más<br />
de doce legiones de ángeles?”[173]. Asimismo, <strong>Cristo</strong> como<br />
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