Memoria de actividades 2010-2011
Memoria de actividades 2010-2011
Memoria de actividades 2010-2011
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
41<br />
<strong>Memoria</strong> <strong>de</strong> activida<strong>de</strong>s <strong>2010</strong>/<strong>2011</strong><br />
Todo era azul y blanco y esos colores ro<strong>de</strong>aban nuestros pasos procesionales,<br />
anunciando un importante acontecimiento como es la Estación <strong>de</strong> Penitencia a la<br />
Santa Iglesia Catedral.<br />
A las 14:30 horas, nuestro Hermano Mayor y el Director Espiritual,<br />
pronunciaban unas palabras a los hermanos. En esta ocasión la oración que se hizo<br />
tenía prevista las intenciones por las Jornadas Mundiales <strong>de</strong> la Juventud, a celebrar en<br />
agosto en Madrid, con asistencia <strong>de</strong> Su Santidad Benedicto XVI. El texto <strong>de</strong> la oración<br />
para la Estación <strong>de</strong> Penitencia queda recogido en el anexo tercero <strong>de</strong> esta memoria.<br />
Fueron numerosos los medios <strong>de</strong> comunicación, audiovisuales, escritos y<br />
digitales los que cubrieron la salida, recorrido y entrada <strong>de</strong> la Cofradía, acreditándose<br />
un total <strong>de</strong> ocho medios para po<strong>de</strong>r <strong>de</strong>sarrollar su trabajo en el interior <strong>de</strong>l templo y la<br />
Casa <strong>de</strong> Hermandad. A todos los medios <strong>de</strong> comunicación se les hizo entrega <strong>de</strong> una<br />
documentación completa sobre distintos aspectos históricos y artísticos <strong>de</strong> la Cofradía.<br />
A las tres <strong>de</strong> la tar<strong>de</strong> se abrían las puertas <strong>de</strong> San Julián, las puertas <strong>de</strong> la<br />
Gloria para todos los hermanos <strong>de</strong> la Hiniesta. Muchos <strong>de</strong>votos y fieles esperaban<br />
ansiosos y con emoción contenida el discurrir <strong>de</strong> nuestra Cofradía. Numerosas fueron<br />
las muestras <strong>de</strong> cariño <strong>de</strong>l barrio <strong>de</strong> San Julián, que como siempre estuvo entregado<br />
con su Hermandad <strong>de</strong> la Hiniesta. Las marchas procesionales <strong>de</strong> la Banda <strong>de</strong><br />
Cornetas y Tambores "Amor <strong>de</strong> Cristo" <strong>de</strong> San Juan <strong>de</strong> Aznalfarache (Sevilla), daban<br />
escolta a la Cruz <strong>de</strong> guía y a todo el reguero <strong>de</strong> nazarenos azules y blancos que<br />
recorrían las calles <strong>de</strong> San Julián. Un año más la emoción <strong>de</strong>sbordada se hizo patente<br />
al oír los primeros compases <strong>de</strong> “Hiniesta” <strong>de</strong> Peralto.<br />
No hay mayor emoción para un hermano <strong>de</strong> la Hiniesta que ver como camina<br />
lentamente el paso <strong>de</strong>l Santísimo Cristo <strong>de</strong> la Buena Muerte hacia su Madre Hiniesta.<br />
Todo en ese momento se <strong>de</strong>tiene y sólo hay una realidad, el Hijo hacia su Madre, la<br />
Madre esperando al Hijo.<br />
En las puertas, Sevilla, San Julián, los <strong>de</strong>votos <strong>de</strong>l Cristo <strong>de</strong> la Buena Muerte,<br />
que no saben cómo es posible esa complicada salida, pero que gracias a la maestría<br />
<strong>de</strong> la familia Ariza se consigue salvar. Veinticinco años <strong>de</strong>spués sonaba tras la marcha<br />
real “Cristo <strong>de</strong> San Julián”, todo un himno, un credo y una vocación. Y poco <strong>de</strong>spués la<br />
Madre, la Madre <strong>de</strong> Dios y Madre Nuestra, la que en sus manos recoge toda la ternura<br />
que un hijo pueda <strong>de</strong>sear, la que en su mirada eterna guarda los secretos y oraciones<br />
más íntimas y la que interce<strong>de</strong> por todos día a día. Lentamente, paso a paso, casi sin<br />
percepción al ojo humano, la Virgen <strong>de</strong> la Hiniesta abandona San Julián. Los muros se<br />
quedan huérfanos <strong>de</strong>l calor <strong>de</strong> la Madre. La Virgen se queda apenada por tanta<br />
soledad, y se consuela con el fervor <strong>de</strong> la calle, <strong>de</strong> su barrio <strong>de</strong> San Julián, que <strong>de</strong> una<br />
punta a otra, <strong>de</strong> una calle a otra respira a Hiniesta.<br />
Es importante que el barrio se reencuentre con su Virgen, porque en Ella<br />
encuentran comprensión, ayuda y salvación. Ella interce<strong>de</strong> por todos ante Dios<br />
Nuestro Señor.<br />
La Hermandad <strong>de</strong> la Hiniesta salió a la calle a evangelizar, esa palabra tan<br />
<strong>de</strong>nostada, tan olvidada en nuestros días. Salió a la calle para enseñar al pueblo <strong>de</strong><br />
Sevilla que la muerte <strong>de</strong> Cristo, es una Buena Muerte, que sirvió para redimir todos los<br />
pecados <strong>de</strong> la humanidad. Ante Santa María Magdalena enseñamos el valor <strong>de</strong>l<br />
perdón <strong>de</strong> los pecados, <strong>de</strong>l arrepentimiento y <strong>de</strong> la penitencia y para calmar el dolor <strong>de</strong><br />
una madre, mostramos a nuestra Virgen <strong>de</strong> la Hiniesta en un trono, en un palacio azul<br />
y plata, don<strong>de</strong> el dolor sobrecoge, pero don<strong>de</strong> la belleza <strong>de</strong> la Reina <strong>de</strong> San Julián nos<br />
consuela y reconforta.