Consejería Pastoral - Iglesia Cristiana Evangélica de Chamartín

La ética del consejero
(Hoff, pp. 22-24)
Ya se ha mencionado la confianza como una base importante para el éxito del ministerio
consejero (ver p. 4). Esta confianza se basa en la buena ética del que aconseja. El libro de texto nos da
varias indicaciones con relación a la ética que debe lucir el consejero cristiano.
“El pastor-consejero es responsable por lo que hace, primero ante Dios, luego ante el asesorado,
y finalmente ante la sociedad en que vive. Debe pensar siempre en el bien del aconsejado.” He aquí
algunos principios de la buena ética del consejero:
“a. Guardar confidencias. Lo que el asesorado revela al pastor debe ser considerado (41)___________
y no debe ser divulgado a nadie sin el permiso de la persona. El pastor no debe contar a un asesorado los
problemas de otro asesorado, ni debe usar sus experiencias habidas en una función de consejero, como
ilustraciones en sus sermones.”
El consejero no debe revelar los secretos ni a su propia esposa; sólo puede hablar de ellos con el
aconsejado y con Dios. Si llega la necesidad de descubrir algunas cosas, por ejemplo a las autoridades,
solamente se debe hacer con el permiso del aconsejado.
“b. Evitar el contacto físico. Aparte de saludar al asesorado con un apretón de manos o un
abrazo, conviene no (42)____________. Debe evitar todo lo que pueda producir una situación seductiva o
poner en marcha emociones malsanas. El hecho de que el asesor sea un hombre regenerado [o santificado
–SEH] y llamado al ministerio del Evangelio, no es salvaguardia de que no se sienta atraído por una
mujer a la cual aconseja, o viceversa.”
Después de hablar más acerca del cuidado que un consejero debe tener, sigue con algunas
sugerencias prácticas: “El pastor prudente tendrá mucho cuidado en las situaciones relacionadas con el
sexo opuesto . . . . No irá solo a la casa de una mujer. . . , no aconsejará a una mujer en su automóvil, y
dejará abierta la puerta de su oficina si ésta no tiene ventana. Por regla general, los pastores prudentes
asesoran a mujeres solamente cuando alguien está presente, y lógicamente es la (43)_______________ del
ministro la que le suele acompañar.”
“c. No usar al asesorado para satisfacer sus propios deseos.” Menciona la curiosidad, su propia
necesidad sexual, y un deseo de que el aconsejado dependa de él. “El escuchar chismes o detalles muy
íntimos de inmoralidad puede alimentar la curiosidad del asesor, pero no ayuda en absoluto en el proceso
de aconsejar.” Frente a tales tentaciones, dice que el consejero “debe conocer sus propias debilidades y
buscar la ayuda del Espíritu Santo” para resistirlas.
“d. No esconder sus convicciones cristianas. La fe o creencias del asesor deben influir sobre todo
lo que piense y haga, incluso en el aconsejar.” Entonces, al guiarle al aconsejado hacia una solución, el
consejero debe señalarle la verdad bíblica relacionada con su situación. “Naturalmente, no debe
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