Libro - Pensamiento universitario Centroamericano - Parte 2 de 3

del Canal y de las dos guerras mundiales, también por nuestra
posición geográfica y nuestro carácter de pueblo comerciante, ha
hecho, en efecto, surgir en nuestra sociedad un crudo sentido
materialista de la vida, que funda toda superioridad, toda ambición
y todo esfuerzo, en ganar dinero y adquirir poder económico Sin
idealidad, sin abnegación, en la frenética carrera por el placer y
el goce inmoderado de los sentidos, nuestra sociedad da el ejem
plo y la impresión de un vocerío de pregones y buhoneros de
adulación servil, de entrega gregaria sin cohesión, sin moral y
sin destino Y este materialismo en que predominan los apetitos
y la fiebre de lucro sobre las idealidades y ha desatado los Ins
tintos primitivos y las fuerzas inferiores, está minando todo sentimiento
de solidaridad social y amenazando con llevarse en la
corriente arrastradora de maleza, también a la juventud, única
esperanza de salvación de esta catástrofe
Para quien no creyera, con empecinamiento, como yo, que
la cualidad específica de ser joven consiste en la capacidad de
anteponer los valores del espíritu a los intereses materiales,
para quien no pensara con convicción de educador sincero, a
pesar de la corrupción y degradación generales en lo político,
en lo social, en lo económico, que por medio de la cultura puede
regenerarse un pueblo, el ambiente que acabo de pintar sería desconsolador
Nunca es tarde, pues, cuando se tienen estas con
vicciones y esta fe arraigadas, para Iluminar el alma de los jóvenes
Y es aquí, a la sombra de una ciudad como esta, acrópolis
del saber, donde tienen que elaborarse y definirse las normas
que orienten a nuestra sociedad para la renovación espiritual
Por eso yo he defendido a lo largo de mi vida la gratuidad
de la enseñanza superior, hasta donde podamos sostenerla, pues
sería absurdo pretender esta renovación y hablar de democracia
orgánica, mientras las universidades y centros superiores de educación
sigan constituyendo un privilegio y estén cerrados para
las ansias de superación del pobre, mientras todavía haya quia
nes por miedo a la luz, por ambición de dominio y separación de
clases sociales se opongan a que el Estado imparta cultura como
se distribuye el pan de cada día
Abrir para todos las puertas de la escuela en todos sus
grados es el único medio de llegar a formar hombres, de elevar
el nivel ético e ideal de la vida, de contribuir al progreso firme
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