Libro - Pensamiento universitario Centroamericano - Parte 2 de 3

"Fui elegido por Cristo para ser sacerdote eternamente,
motivado por el deseo de entregarme de tiempo completo al
amor de mis semejantes "
"Como sociológico, he querido que ese amo se vuelva
eficaz, mediante la técnica y la ciencia, al analizar la sociedad
colombiana me he dado cuenta de la necesidad de una revo
lución para poder dar de comer al hambriento, de beber al sediento,
vestir al desnudo y realizar el bienestar de las mayorías
de nuestro pueblo "
"Estimo que la lucha revolucionaria es una lucha cristiana
y sacerdotal Solamente por ella, en las circunstancias concretas
de nuestra patria, podemos realizar el amor que los hombres
deben tener a sus prójimos "
"Desde que estoy ejerciendo mi ministerio sacerdotal, he
procurado por todas las formas que los laicos, católicos y no
católicos, se entreguen a la lucha revolucionaria Ante la ausen
cia de una respuesta masiva del pueblo a le acción de los laicos,
he resuelto entregarme yo, realizando así mi labor de llevar a
los hombres por el amor mutuo al amor de Dios "
"Las luchas emancipadores han llegado en algunos de nues
tros paises a las propias esferas sacerdotales, con puntos de
vista que exceden a muchos partidos La agudización es tal que,
como en otras épocas, los sacerdotes no han podido marginarse
Hay un retorno al espíritu de los evangelios El lema del segundo
Concilio Vaticano fue poner al día a la Iglesia Hidalgo y Morelos
son figuras insignes de tal estirpe "
"La iglesia católica acaba de presentar en Bogotá (16 de
Julio, 1968), un panorama trágico de nuestro Continente, empo
brecido por las oligarquías, analfabeto y famélico, y reclamó
"una forma urgente, global y profunda, de las estructuras", se
ñaló que "ha llegado la hora —dice el documento— de que la
iglesia Hispanoamericana se enfrente a la realidad continental,
sin compromisos y con le valentía de reconocer sus propios
errores "
En los movimientos hispanoamericanos participan juven
tudes universitarias, obreras y de las capas más desvalidas y
miserables, los campesinos esclavizados Esta juventud —con
ciencia de nuestros pueblos—, se halla enardecida por la frus
tración nacional, que también se torna frustración personal Ro
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