13.05.2013 Views

La Sucesión Presidencial - secom sa de cv

La Sucesión Presidencial - secom sa de cv

La Sucesión Presidencial - secom sa de cv

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

En la noche continuaron las manifestaciones. Calles y plazas<br />

estaban invadidas por la multitud. En Plateros y en el Zócalo no<br />

se podía dar un solo paso. Aquel oleaje viviente lo arrastraba a uno<br />

con una furia grandísima. Fue una fiesta in<strong>de</strong>scriptible. El caudillo<br />

victorioso abandonó su ca<strong>sa</strong> <strong>de</strong> Tacubaya para venir al centro <strong>de</strong> la<br />

ciudad a co<strong>de</strong>arse con el pueblo. Nadie lo reconoció porque estaba<br />

<strong>de</strong> incógnito para po<strong>de</strong>r presenciar ese magnífico espectáculo. Y<br />

quedó sorprendido al contemplar aquella compacta muchedumbre<br />

entregada a un regocijo jamás visto.<br />

El señor Ma<strong>de</strong>ro contemplaba ese cuadro estupendo, y no lo podía<br />

creer. Le parecía que estaba soñando. Era Ma<strong>de</strong>ro bajo <strong>de</strong> cuerpo.<br />

Joven aún. Apenas si llegaría a los treinta y cinco años. De gran<strong>de</strong>s<br />

ojos color obscuro, bajo unas anchas y pobladas cejas. <strong>La</strong> frente <strong>de</strong>spejada<br />

y la nariz chata. Su barba a la france<strong>sa</strong>, bastante recortada. Se<br />

había educado en el egregio Colegio <strong>de</strong> San Juan, en Saltillo, y <strong>de</strong><br />

allí marchó a París para perfeccionar sus estudios. Culto, inteligente,<br />

dadivoso. <strong>La</strong> bondad era su cualidad sobre<strong>sa</strong>liente, revelada en sus<br />

actos, en la luz <strong>de</strong> su mirada, en la nobleza <strong>de</strong> su alma gran<strong>de</strong> y genero<strong>sa</strong>.<br />

De carácter afable, <strong>de</strong> modales finos. Nunca se <strong>de</strong>jaba arrebatar<br />

por el torbellino <strong>de</strong> la pasión. Sus labios jamás se abrieron para con<strong>de</strong>nar<br />

a sus adver<strong>sa</strong>rios, a pe<strong>sa</strong>r <strong>de</strong> que ellos lo cubrían <strong>de</strong> ultrajes y<br />

vilipendio. Justo, honrado, noble, capaz <strong>de</strong> acciones extraordinarias.<br />

No conocía el orgullo, ni la vanidad, ni la soberbia. Creía que todos<br />

los hombres obraban como él, con lealtad, con <strong>de</strong>coro, con patriotismo.<br />

Hablaba con sencillez, y <strong>de</strong>scubría su pecho para abrirlo a<br />

todas las gran<strong>de</strong>s manifestaciones <strong>de</strong>l bien. El valor <strong>de</strong> Obregón era<br />

arrogante; el <strong>de</strong> Carranza, olímpico; el <strong>de</strong> Ma<strong>de</strong>ro, natural, como<br />

el <strong>de</strong> un niño. Por eso lo seguían las turbas con sincero entusiasmo.<br />

Llevaba en sus sienes el halo misterioso y fascinador <strong>de</strong> un apóstol.<br />

MI g eN eracIóN y M I é P o c a<br />

61

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!