Altibajos, nº 1 - Gobierno de Canarias

Hoy hace un calor asfixiante
y pegajoso. Estoy sentada frente
a mi mesa de estudio y es tal la
luz que entra desde la única ventana
que se encuentra en la pequeña
habitación, que lo invade todo, resaltando
los recuerdos y momentos
inmortalizados que se hallan en el
lugar; supongo que por ello, estoy
pensando en eso, en el pasado, además
de por tener la intención de
buscar algo en él, que me permita
desarrollar una historia que pueda
narrar y ser de mi gusto y predilección.
La suma de lo que mi memoria
no quiere revivir y lo que,
desde mi punto de vista, no goza
de valor artístico o literario, me
han dejado sola, con un bolígrafo en
la mano al que se le ha agotado la
tinta y como si el día hoy hubiera
estado nublado y las fotografías,
dibujos y objetos del pasado, no me
hubiesen inspirado nada.
Pero, en un acto distraído y
casi pensando ya en otra cosa, la
vista se me ha perdido entre los
libros de la repisa, los cuales constituyen
mi más preciado tesoro, especialmente
llamando mi atención los
muchos que contienen jeroglíficos
antiguos por nombre; comienzo a
escribir:
“La vejez se apodera de mí,
mujer. Pronto me iré para ser juzgado
por los dioses y Egipto ha de
ser regido por el faraón para seguir
viviendo arropado bajo la felicidad,
para que el Nilo se desborde cada
año, para que nuestras tierras no
sean pasto de conquistadores,... Faraón
vela por ello cada día y los
dioses le ayudan para que la tierra
sobre la que el sol y el agua nacie-
Página 12
TÚ ESCRIBES
Seis horas y algunos relatos
Laura Dueñas, 2º C Bach.
ron, prospere. Llama a mi hija.
Así me habló el padre de
la que sería una gran reina, mientras
le colocaba su corona del bajo
y el alto Egipto y le ayudaba a vestirse.
Yo me encargaba de llevar a
cabo estas tareas desde hacía ya
unos veinte años, en los que vi nacer
y crecer a una mujer digna por
lo que le rendiría culto y honor
hasta mis últimos días de vida,
Hatshepsut. No presencié cómo su
padre, Tutmés I, le encomendó una
misión y un deber que trazaron las
líneas de su futuro con fuertes cimientos
basados en el anhelo paternal
de que se convirtiera en un dibujo
hermoso, que si bien no era el
que le correspondía, fuera porque su
madre y las concubinas nunca dieron
a luz un hijo varón. En cambió, fui
fiel testigo de cómo su padre le
enseñaba cada día los conocimientos
acumulados a lo largo de la historia
La reina Hatshepsut. 18ª Dinastía del gobierno
de Egipto
Publicamos aquí el relato ganador del concurso
literario organizado por el Departamento
de Lengua y Literatura el curso pasado
en la modalidad de Bachillerato.
El río Nilo
del antiguo Egipto: el poder de la
palabra de los sabios; el camino de
la rectitud; la historia de los dioses;
las leyes del universo; los deberes
para con el templo; los secretos
de la ciencia; las pautas y normas
de comportamiento y acción; la
sabiduría y el poder; las claves de
las relaciones humanas y sus cualidades;
los defectos que debían evitarse;
el respeto y cumplimiento de
los ritos; el someterse al sino; el
valorar la vida y la muerte; el cuidar
el porvenir en el Más Allá; ...
Pero llegó el día en el que
la desgracia arribó en el Nilo y su
progenitor murió. Al ser proclamada
reina, se mostró en el balcón de
palacio, resplandeciendo un áureo
color y, al escuchar la multitud que
aclamaba su nombre, se percató
realmente del peso de su cargo y la
responsabilidad que ello generaba.
Muchas veces tuvo miedo y
a punto estuvo la cobardía de poseerla,
mas Hatshepsut era una mujer
inteligente, hábil, dotada de capacidades
administrativas excepcionales
y, aunque siempre llevó con ella
un sentimiento de dolor provocado
por la pérdida de su padre, al que
(Continúa en la página 13)
I.E.S. Antonio González González (Tejina) Altibajos nº1
(Viene de la página 16) (se ve que les gustó la ley del botellón).
baños de los que dispone el centro pe-
ro no te puedes duchar porque las du-
chas están todas ocupadas (por cuca-
rachas, ratas, lagartos y una gran flora
y fauna con lo cual el instituto no ha
querido romper este ecosistema para
preservar el medio ambiente).
10:15 / 11:10- “Deus meus” tienes His-
toria de España. Prefieres fugarte pero
aun estando en Bachillerato esto pare-
ce el colegio y todavía ponen falta, con
lo cual te sientes con unas “ganas” de
atender increíbles. Entras y entre la
especial fragancia a sudor y desodo-
rante todo mezclado, se crea un
“ambiente exclusivo” ya que no se pue-
den abrir la ventanas porque empieza a
llover. Con todo esto casi consigues el
nirvana (o un coma profundo).
11:10 / 11:40- Por fin llega la hora más
importante después de la salida: el re-
creo. En este periodo de “tiempo” te
entretienes contando las goteras, vien-
do las últimas tablas del techo que han
caído, comprando el bocadillo “muy rá-
pidamente” en la amplia cafetería y
acordándote de la familia del que dise-
ñó las escaleras tras comprobar con tus
canillas, gracias al gracioso de turno
que te tropieza los pies cuando subes,
de que los bordillos no son acolchados
sino de puro hierro. También haces un
intento para que no te cojan comiendo
dentro de las instalaciones ya que este
año está terminantemente prohibido
Dentro de poco traficaremos con cho-
colatinas y batidos de fresa para pro-
pio consumo y para el próximo año ten-
dremos que pedir permiso para respi-
rar.
11:40 / 12:35- Tienes Física y Química.
Subes al laboratorio y empiezas a ser
decantaciones y experimentos con un
rabiche, tres lupas (el presupuesto no
llega para un microscopio), a hacer las
medidas gracias a un tarro de yogur y
una “miniprimer” donada gentilmente
por Isma.
12:35 / 13:30- Vas a Filosofía todo en-
tusiasmado porque hoy toca ver un vi-
deo. Llegas y te ves al profesor peleán-
dose con la tele. Después de quince mi-
nutos se consigue encender y meter la
cinta. Empezamos a ver la película to-
Entras y entre la especial fragancia a sudor y
desodorante todo mezclado, se crea un
“ambiente exclusivo”
dos (unos cuarenta) muy holgadamente.
De repente se traba y se estropea el
video porque la cinta adhesiva tiene un
límite. Se pasa la clase intentando
arreglarlo, volver a sintonizarlo, etc.
Hasta que toca el timbre.
13:30 / 14:25- Vuelves al estado de
ánimo de primera hora y entras a Len-
gua, a Inglés, Biología... da lo mismo
porque no te vas a dar cuenta de nada y
tu lo único que quieres es que toque el
timbre.
14:25- Toca el timbre. Todo el mundo
baja las escaleras por ambos lados has-
ta que llegan a la última y la inmensa
mayoría de la gente coge para la iz-
quierda, aunque no quepan y se tropie-
cen, todo da lo mismo con tal de salir
por el camino más corto.
Y “desgraciadamente” se termina el día
estudiantil, aunque afortunadamente
para cuando te levantes y respires otra
vez el polvo del suelo te des cuenta de
que queda un día menos para las vaca-
ciones.
TÚ ESCRIBES
Manipulando el vídeo de Filosofía
Altibajos nº1 Página 17