Textos: Efe Gómez - Universidad Nacional de Colombia

U.N. Sede Medellín / Departamento de Bibliotecas
tu destino y mi destino.
Yo, por los negros fanales
de tus ojos atraído
como un errante cocuyo
perenne hacia ti dirijo
mi libre vuelo. Tú, asceta,
a triste deber uncido
el corazón, recta enciendes
la estela de tu camino...
uno amante y otra austera...
es triste. ¡Pudo haber sido!
Hoy las hijas del Alcalde
¿las recuerdas? Hanme dicho
que en vestir santos empleas
tus treinta abriles divinos...
Pues me haré santo, ¡lo juro!
Por el despacho del síndico
saltaré a la sacristía
y con sigilo infinito
me deslizaré en la iglesia
hasta el altar. En el nicho
de la derecha está el santo
que vistes tú: San Francisco
de Asís. Como Amor me lleva
me perdonará el divino
y el seráfico. Y con maña
lo colocaré a un ladito
y de emoción tembloroso
en el hierático nicho
de nuestro amor asimptótico
tal vez cruce infinito
te esperase. Ya tus pasos
resuenan en el recinto,
ya llegas. Cierro los ojos,
el corazón se hace un lío
en mi garganta. Tus manos,
tus manos nácar y armiño
me palpan. Yo doy un brinco
y mi cuerpo tembloroso
en tu bello cuerpo ciño
como el árbol el bejuco.
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