Historia: Dr. Ramón Carrillo / Médicos argentinos ... - Revista Ambo
Historia: Dr. Ramón Carrillo / Médicos argentinos ... - Revista Ambo
Historia: Dr. Ramón Carrillo / Médicos argentinos ... - Revista Ambo
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
6<br />
Resisten<br />
Espacio de expresión médica<br />
7<br />
adaptarme al sacrificio que implica una residencia,<br />
estar menos tiempo en casa, y<br />
con pocas fuerzas para dedicarle a otras<br />
cosas que me gustan. En las guardias, a<br />
veces hay gente esperando durante horas<br />
para ser atendida, cansada de esperar. Y<br />
nosotros, yendo y viniendo, con los pies<br />
hinchados, y pidiendo a gritos una cama<br />
para dormir.<br />
Igualmente, aunque el ritmo es cansador,<br />
estoy muy contenta. En el hospital nos<br />
recibieron muy bien el primer día, y eso<br />
no cambió hasta hoy. Uno de mis miedos<br />
era que, por ser un hospital tan grande,<br />
se perdiera el trato personal entre todos.<br />
Pero, por suerte, encontramos personas<br />
que nos escuchan con atención, nos tratan<br />
de igual a igual, con predisposición<br />
para enseñarnos y acompañarnos, y para<br />
reírse con nosotros.<br />
Lo más lindo de todo es que lo que hay<br />
de fondo es el servicio. Cada uno, desde<br />
donde puede: trabajando en una reanimación<br />
o llevando una muestra al laboratorio;<br />
cada uno, con sus años de experiencia<br />
o recién empezando, trabaja para<br />
ayudar a alguien. En esa ayuda, se aprende<br />
a trabajar en equipo, a colaborar entre<br />
residentes, o a ver al paciente como<br />
una persona, en una familia que necesita<br />
no solamente intervención, sino también<br />
contención.<br />
Y los pacientes pediátricos son un mundo<br />
aparte. Tienen sus propios códigos,<br />
son transparentes a la hora de transmitir<br />
que están contentos o enojados. Tienen<br />
un lenguaje diferente, y es un trabajo<br />
llegar a ellos y ganarse su confianza. Un<br />
movimiento en falso mientras auscultás a<br />
un bebé, y puede ser el comienzo de un<br />
llanto que no te deja escuchar nada más.<br />
Pero, otras veces, pasa lo contrario: te<br />
sonríen, juegan con tu estetoscopio o te<br />
saludan con un beso.<br />
Todavía queda muchísimo por vivir, aprender<br />
y equivocarnos en estos cuatro años<br />
de sacrificio, de dejar muchas cosas de<br />
lado, pero de ganar en aprendizaje sobre<br />
Medicina y sobre relaciones humanas.