Breve reseña histórica - Estheticnet

muy dilatados), y esto se conoce como Rinofima (se trata
de una palabra derivada del griego y significa “tumefacción”,
“masa” o “bulbo”) y es exclusiva de los hombres.
Histológicamente, este estadio se caracteriza por infiltraciones
inflamatorias, hipertrofia del tejido conectivo
y de las glándulas sebáceas.
Rosácea ocular: muchas veces, la enfermedad puede
empezar en los ojos y agravarse, sin el reconocimiento
de la enfermedad, lo que motiva el uso de tratamientos
inapropiados.
Los signos oftalmológicos pueden ser: blefaritis (inflamación
de los párpados), conjuntivitis, iritis, iridociclitis
e incluso queratitis.
Como 30% de los pacientes que tienen rosácea centrofacial
presentan compromiso ocular, se debe realizar el tratamiento
en conjunto entre el dermatólogo y el oftalmólogo.
| Tratamientos:
Para evitar los factores desencadenantes al comienzo
del tratamiento, sugiero a mis pacientes llevar un
pequeño libro de comprobación para anotar en qué
momentos y después de realizar cuál acción se producen
los episodios de rubor.
En general, hay muchos factores que pueden provocar
esto, pero me referiré sólo a los más comunes, a modo
de ejemplo:
1- Tiempo: si lo afecta la exposición al sol, al calor, permanezca
en ambientes frescos, consuma bebidas frías;
en cambio, si lo afecta el frió o el viento cubra sus mejillas
con una bufanda y use cremas humectantes para
proteger su piel de la sequedad del frío y el viento.
2- Estrés: trate de relajarse, evite el café. Cuando esté
bajo presión, respire inhalando profundo y exhalando
en forma lenta.
3- Alimentos y bebidas: evite los consumos de líquidos
calientes, alimentos picantes, chocolate, embutidos y
bebidas alcohólicas.
4- Ejercicio: aunque éste es importante para la vida de
las personas, quienes sufren de rosácea deberán evitar
el esfuerzo intenso y las prácticas deportivas al aire
libre las tendrán que realizar a primera hora de la
mañana, con protectores solares y, cuando descansen,
colocarse una toalla húmeda en la cara.
5- Menopausia: si sufre de episodios de calores o sofoco,
tenga siempre a mano geles refrescantes.
6- Anticonceptivos: los estrógenos producen vasodilatación,
elija otras formas para cuidarse.
Deben evitarse las fuentes de irritación de la piel, como
son los jabones, limpiadores con alcohol, astringentes,
abrasivos, peelings y algunos cosméticos.
No se deberán exponer al sol sin altas protecciones, los
protectores solares químicos (pantallas solares) se tienen
que aplicar media hora antes de la probable exposición
al sol, inclusive durante días nublados. Siempre
conviene usar protección física (sombreros, gorras).
Cuando se logre controlar a la rosácea, se puede tratar
en forma directa a las telangiectasias con radiofrecuencia,
esclerosantes o láser. Este último siempre supervisado
dermatológicamente, ya que en una fase activa el
láser irrita, empeorando el cuadro, produciendo, en
algunos casos, secuelas permanentes.
Si se comprobara mediante test diagnóstico la presencia
del helicobacter pylori, el tratamiento gastroenterológico
debe realizarse por norma.
El rinofima se puede tratar con una combinación de
radiofrecuencia y criocirugía.
Los dermatólogos tenemos una amplia experiencia en
el manejo de esta técnica, que produce resultados estéticos
y funcionales notables. Cuando un paciente es tratado
en forma inadecuada con corticoides locales,
durante un lapso prolongado, pueden aparecer signos
de atrofia cutánea, como adelgazamiento de la piel,
aumento de las telangiectasias, rápidamente se perciben
pápulas y pústulas, descamación y un color rojo
intenso acompañado de malestar y dolor.
Un error frecuente es el del mal diagnóstico de esta
patología, en general realizado por personal auxiliar
dermatológico o médicos sin una verdadera formación
dermatológica, quienes confunden cualquier enrojecimiento
de la piel con la rosácea.
Ante cualquier enrojecimiento, se debe descartar la
presencia del Pityrosporum Ovale (este, en general,
afecta el cuero cabelludo y la zona centrofacial de la
cara, provocando eritema y escamas húmedas), y del
Demodex Foliculorum (parásito saprofito de la piel
que también genera eritema, piel áspera, y si están
asociados a estafilococos pueden dar pústulas).
| Consejos finales
El primer paso, es el de aceptar que usted padece de
rosácea (la evaluación tendrá que hacerla un dermatólogo,
ya que son frecuentes los errores diagnósticos),
debe saber que se trata de un trastorno crónico con episodios
de agudizaciones y remisiones. Usted tiene que
tomar personalmente el control de su condición,
sabiendo que un tratamiento eficaz mejorará su calidad
de vida.
Noviembre - Diciembre / 2007
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