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Ritos extremos
Alrededor del mundo
A la izquierda, un hombre de la tribu Hamar, en Etiopía; Al centro, un adolescente
del mismo grupo. A la derecha, una mujer junto a niños Matis, de Brasil.
una comida, sigue la música. Alas 14
horas, el lanzamiento bungee. De
acuerdo con la tradición, solo los hombres
pueden lanzarse, pero las mujeres
juegan una parte esencial, porque dan
apoyo emocional y espiritual.
Aunque algunos de los valientes
sufren heridas en el rostro ycabeza
—incluso hasta quedar inconscientes—,
el baile ylamúsica continúan.
No termina sino hasta que todos los
interesados lo hacen.
Al anochecer, se cocina un cerdo
para celebrar el éxito del Naghol.
Ceremonia africana
Entre colinas cubiertas de arbustos,
en Etiopía, viven los Hamar, una tribu
que tiene como tradición saltar encima
de su ganado.
En estas ceremonias, los niños deben
pasar sobre varias vacas, sin caer,
y de esa forma demostrar que están
listos para la siguiente etapa de la vida:
la adultez. Además, significa que están
preparados para tener su ganado, casarse
y, de esa forma, tener una familia.
Mientras, otros lo hacen para poner en
paz el alma de sus padres, cinco años
después de sus muertes.
Ese día, durante la tarde, las mujeres
piden que las azoten en la espalda,
como parte de la ceremonia. Por
eso, acuden con los Maza —un grupo
de hombres que ya han saltado el
ganado y que viven en una tribu diferente—.
Las mujeres no deben mostrar
dolor y dicen que estarán orgullosas
de sus cicatrices.
En cambio, a los hombres se les
corta en parte el cabello, se les frota el
cuerpo con arena para quitarles sus
pecados y, además, se les cubre con
estiércol para darles fuerza. Por último,
se les atan cortezas alrededor del cuerpo,
para darles protección espiritual.
En tanto, los Maza ylos ancianos
ponen en formación al ganado ycastran
alos machos, un acto que simboliza
a las mujeres y a los niños de la
tribu.
Los hombres deben saltar la línea
de ganado cuatro veces; si caen, es una
vergüenza, pero pueden repetir.
Una vez está autorizado para casarse,
pueden elegir a su esposa, con el
consentimiento de ambas familias.
Por último, el hombre debe hacer un
pago de 30 cabras y20 bueyes ala
familia de la mujer, para que el matrimonio
pueda realizarse.
Casi al final del ritual de los saltos
hay una celebración con danza. Pero
las cosas no terminan allí, pues las
mujeres de la tribu aceptan el compromiso
de que los azotes de sus
parejas son parte de la vida y, por lo
tanto, no deben pedir explicaciones de
por qué fueron golpeadas. Los azotes
solo terminarán si el matrimonio tiene
dos o tres hijos.
En la Amazonia
Los Matis son expertos cazadores.
Viven en el Valle de Javarí, en la
Amazonia brasileña. Son conocidos
como la “gente Jaguar”, pues admiran
y temen a este felino.
La tribu, durante la danza txawa
tanek, se pintan de rojo y emiten los
sonidos de un jabalí, mientras el líder
del baile golpea dos calaveras de ese
animal.
En el ritual mariwin, dos Matis
emergen de la selva para representar a
los espíritus ancestrales. Los cuerpos
se pintan de negro o amarillo y se
colocan máscaras de arcilla, las cuales
tiene un diseño bastante elaborado.
Los azotes que portan los emplean
para golpear a los niños desobedientes
o que son considerados perezosos. Los
niños Matis casi nunca son castigados,
y esta es de las pocas reprendas que
reciben. Además, los cazadores que
quieren incrementar su energía son
golpeados junto con mujeres embarazadas.
Estas últimas para que sus
hijos nazcan fuertes.
Otros ritos
Muchas ceremonias están dirigidas
a celebrar y enaltecer a los dioses, o
bien, para evitar las maldiciones en las
que creen. Gran cantidad de estas tradiciones
se llevan a cabo en regiones
alejadas de la civilización, donde viejas
costumbres perviven por siglos.
Las más extremas son tan peligrosas
que rozan con la muerte.
Fuentes: BBC y National Geographic.
3de mayo del 2009 : D-25