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TEMPLANZA E INTEMPERANCIA

SAPERE AUDE: aventura con sentido.

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Música y matemáticas, arte y ciencia al compás<br />

(viene de la página anterior y finaliza)<br />

En la actualidad se está trabajando en establecer un marco científico para la Musicología.<br />

La denominada “Teoría matemática de la música”, tiene como máximo exponente al profesor<br />

Guerino Mazzola, matemático y pianista suizo. En su libro “The Topos of Music”, publicado en<br />

2002, intenta aunar los enfoques filosófico y matemático en la explicación científica de la música.<br />

El arte y la ciencia no están tan separados como cabría imaginar. A medida que se<br />

profundiza en la esencia de la música y de las matemáticas, aparecen nexos de diversos tipos<br />

entre ellas. Todavía queda mucho por descubrir en cuanto a las relaciones que hay entre estos<br />

dos lenguajes universales.<br />

SI YO FUERA ANIMAL<br />

Si yo pudiera ser un animal, sería un tigrarto.<br />

Sería tan grande como un tigre y podría<br />

esconderme tan bien y tan rápido como los lagartos.<br />

Sería verde con rayas naranjas. Mis garras serían<br />

afiladas y letales, y mis dientes, enormes. Me<br />

alimentaría de carne y sería uno de los mejores<br />

depredadores del mundo. Tendría una gran fuerza y<br />

nadie se metería con alguien como yo. El león ya no<br />

sería el rey de la selva. El nuevo rey sería el tigrarto.<br />

Loreto Sánchez, 3º E.S.O. B<br />

Si yo fuese un animal, sería un gato; pero como<br />

el gato de mi vecino; esa bola de algodón de pelo<br />

simplemente manchado en la espalda con un negro tan<br />

negro como la noche cerrada. Las patitas, como las de<br />

un conejo; cualquiera podría confundirlas. Lo único que<br />

no me gustaría tener serían esos bigotes tan feos y<br />

retorcidos como las ramas del árbol seco,<br />

desfavorecido, en medio del parque. Pero, si lo piensas<br />

bien, la nariz triangular y la boquita simple y bicolor no<br />

darían gran aprecio a los bigotes. El gato de mi vecino<br />

no tiene las orejas felinas ni puntiagudas. Tiene una<br />

orejita blanca y otra negra; grandes las dos y redonditas,<br />

como las del ratón aquel,... Miguelito, creo que se<br />

llamaba. Así que, si yo fuese un animal, me gustaría ser<br />

esa bolita de algodón bicolor, con aires de ratón famoso.<br />

Raúl Vaquero, 3º E.S.O. A<br />

Si yo fuera un animal, creo que sería un cisne,<br />

para pacer en brillantes lagunas, y nadar eternamente<br />

en aguas cristalinas; dedicado a ver el paisaje del<br />

campo y a conocer a sus animales. Creo que siendo un<br />

cisne, podría volar y sentir las nubes tocando mi cuerpo;<br />

creo que sería maravilloso admirar desde arriba el<br />

bosque, el río, las montañas. Así que podría estar en el<br />

agua, en el cielo y en la tierra, y sería un animal<br />

afortunado. En conclusión: quiero ser un cisne, quiero<br />

ser un animal afortunado.<br />

Clara Sánchez García. 3º E.S.O. A<br />

Si yo fuera un animal, sería un pegaso; un<br />

pegaso con pelaje lila suave como la seda, con grandes<br />

ojos azules de relieve semejante al de la fría luna;<br />

tendría alas de algodón, como corresponde. Recorrería<br />

el mundo volando; contemplaría la estremecedora faz<br />

de la tierra, y conocería gente; quién sabe, quizá gente<br />

como yo; gente como yo, extrovertida, sociable y<br />

divertida; gente tan cabezona como yo.<br />

Esto es lo que haría, sí, ser un pegaso feliz.<br />

Lucía Santos 3º E.S.O. A<br />

Si yo fuera un animal, sería una yegua de pelaje<br />

negro brillante, con crines largas y grisáceas, el cuerpo<br />

musculoso y grande, y los zapatos bien puestos. Me<br />

encantaría que cada mañana me sacasen del establo para<br />

poder estar libre por los campos verdes, pastar a mis<br />

anchas y estar con otros caballos. Mi jinete tendría que ser<br />

una persona ligera, que me tratase como a una reina, y que<br />

me dejara galopar, trotar o caminar según mi gusto por los<br />

caminos; de regreso, una buena ducha, y que me peinara.<br />

Y para terminar el día, de vuelta al establo, preparada mi<br />

cama de paja bien blandita, y una buena comida. Qué más<br />

se puede pedir.<br />

Nerea Martín Olaya, de 3º E.S.O. B<br />

Página 9

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