Ea 2 – DOCUMENTO 12. Historia de la Psicología Pastoral ... - icergua
Ea 2 – DOCUMENTO 12. Historia de la Psicología Pastoral ... - icergua
Ea 2 – DOCUMENTO 12. Historia de la Psicología Pastoral ... - icergua
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
En los días en que vivimos necesitamos reavivar <strong>la</strong>s activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> pequeños grupos para <strong>la</strong> edificación <strong>de</strong> los creyentes<br />
y el cumplimiento <strong>de</strong> <strong>la</strong> misión al mundo. Entre éstos se necesitan los grupos <strong>de</strong> asesoramiento pastoral <strong>de</strong> grupo.<br />
Capítulo 4: Conclusiones<br />
Sobre el título <strong>de</strong> esta obra<br />
Después <strong>de</strong> haber leído este libro, usted se encuentra en mejores condiciones <strong>de</strong> compren<strong>de</strong>r el significado <strong>de</strong> su título.<br />
La Iglesia necesita una comprensión sicológica <strong>de</strong> sus errores y una buena pastoral que muestre a sus miembros que<br />
esos errores son pecados y que sólo a través <strong>de</strong>l arrepentimiento y el cambio <strong>de</strong> actitud se podrá salir <strong>de</strong>l conflicto en<br />
forma a<strong>de</strong>cuada.<br />
Para nuestro Señor, <strong>la</strong> pastoral con su familia no <strong>de</strong>bió resultar fácil. Lo hemos visto. Si bien no estudió <strong>Psicología</strong> en<br />
una universidad, Juan 2:25 lo <strong>de</strong>scribe como un profundo conocedor <strong>de</strong> <strong>la</strong> personalidad humana. Es necesario tener en<br />
cuenta elementos sicológicos y pastorales para compren<strong>de</strong>r cómo Jacobo llegó a ser el lí<strong>de</strong>r máximo <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />
congregación <strong>de</strong> Jerusalén. Jesús fue un extraordinario psicólogo pastoral.<br />
La posición social y el papel que se <strong>de</strong>sempeña son inseparables, y <strong>de</strong> igual manera lo son <strong>la</strong> psicología y <strong>la</strong> pastoral.<br />
Hemos visto <strong>la</strong> necesidad <strong>de</strong> un sano equilibrio entre el status y el rol, e igualmente necesitamos una psicología<br />
pastoral equilibrada en sus elementos componentes. Se <strong>de</strong>sempeña mejor un papel cuando se goza <strong>de</strong> cierto status<br />
porque ésta ofrece <strong>la</strong> seguridad que ayuda a <strong>de</strong>sempeñar el papel. La misma función cumple <strong>la</strong> psicología con <strong>la</strong> pastoral.<br />
Un análisis psicológico-pastoral <strong>de</strong> <strong>la</strong> congregación y sus lí<strong>de</strong>res, <strong>de</strong> <strong>la</strong> disciplina comunitaria y <strong>de</strong> todos los elementos<br />
<strong>de</strong>l culto es una necesidad ineludible para que ésta pueda cumplir cabalmente su función terapéutica.<br />
La necesidad <strong>de</strong> tomar conciencia<br />
Debemos tomar conciencia <strong>de</strong> <strong>la</strong>s motivaciones inconscientes <strong>de</strong> <strong>la</strong>s divisiones que suelen surgir en el seno <strong>de</strong> <strong>la</strong>s<br />
congregaciones. Por lo general éstas son el fiel reflejo <strong>de</strong> <strong>la</strong>s divisiones que existieron en los propios hogares <strong>de</strong> los<br />
creadores <strong>de</strong> <strong>la</strong> tensión congregacional. Cuando <strong>la</strong>s personas se convierten, o no, y se integran a <strong>la</strong> Iglesia, con mucha<br />
frecuencia transfieren los problemas <strong>de</strong> su vieja familia a <strong>la</strong> nueva, a <strong>la</strong> <strong>de</strong> Dios. Estas personas suelen i<strong>de</strong>alizar a <strong>la</strong><br />
Iglesia como <strong>la</strong> familia perfecta que no tuvieron y, paradójicamente, a nivel inconsciente hacen todo lo posible para que<br />
<strong>la</strong> familia i<strong>de</strong>al no se concrete en <strong>la</strong> Iglesia.<br />
Debemos reconocer <strong>la</strong>s gran<strong>de</strong>s necesida<strong>de</strong>s pastorales en el mundo y en <strong>la</strong> Iglesia. Existe un submundo que suele<br />
ser <strong>de</strong>sconocido para <strong>la</strong> Iglesia. No es posible realizar una pastoral a<strong>de</strong>cuada a nuestros tiempos sin una cabal<br />
comprensión <strong>de</strong> <strong>la</strong> realidad en que actuamos. En el capítulo II presento <strong>la</strong> mayor gravedad <strong>de</strong> los problemas <strong>de</strong>l<br />
mundo. Si bien <strong>la</strong> Iglesia es <strong>la</strong> "enfermera <strong>de</strong> un mundo moribundo" <strong>de</strong>bemos abrir bien los ojos para darnos cuenta <strong>de</strong><br />
que <strong>la</strong> Iglesia también tiene su submundo. Por eso, al referirme a <strong>la</strong> psicología pastoral <strong>de</strong> grupos, en el capítulo III,<br />
escogí justo un grupo que pone <strong>de</strong> manifiesto <strong>la</strong> existencia <strong>de</strong> grupos marginales <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> <strong>la</strong>s congregaciones. Al<br />
realizar una psicología pastoral ecuménica (cuatro <strong>de</strong>nominaciones y cinco homosexuales), nos dimos cuenta <strong>de</strong> que<br />
no hay <strong>de</strong>nominaciones mejores que otras; lo que importa es <strong>la</strong> calidad humana, <strong>la</strong> profundidad <strong>de</strong> <strong>la</strong> fe y <strong>la</strong> disposición<br />
a abrirse a <strong>la</strong> acción <strong>de</strong>l Espíritu Santo.<br />
Tenemos que aprovechar mejor <strong>la</strong>s estructuras grupales <strong>de</strong> nuestras congregaciones para el crecimiento personal <strong>de</strong><br />
sus integrantes. Es necesario conocer cómo interactúan entre sí los componentes <strong>de</strong> un grupo para ayudarlos a<br />
aprovechar <strong>la</strong>s energías <strong>de</strong>l grupo para <strong>la</strong> edificación <strong>de</strong> todos. La imagen <strong>de</strong>l reloj, que implica que el pastor no <strong>de</strong>be<br />
ser un aprendiz <strong>de</strong> relojero, nos sirve muy bien para explicar <strong>la</strong> necesidad <strong>de</strong> un mayor cuidado pastoral <strong>de</strong> los grupos<br />
que funcionan en <strong>la</strong> iglesia. A veces éstos realizan una terapia negativa, con lo que <strong>de</strong>silusionan a muchos que se<br />
acercan a <strong>la</strong> congregación.<br />
Necesitamos un mayor número <strong>de</strong> pastores <strong>de</strong> alto nivel, <strong>de</strong> li<strong>de</strong>rato altamente calificado, en forma integral, para<br />
cumplir el <strong>de</strong>safiante ministerio que nos p<strong>la</strong>ntea <strong>la</strong> América Latina hoy. La congregación que Jesús organizó en<br />
Palestina tenía lí<strong>de</strong>res mediocres, lo hemos visto, pero <strong>la</strong> calidad <strong>de</strong>l lí<strong>de</strong>r transformó a hombres comunes en<br />
<strong>de</strong>stacados lí<strong>de</strong>res. Es el sentido <strong>de</strong> <strong>la</strong> presencia <strong>de</strong> Dios lo que hace <strong>de</strong> un hombre común un lí<strong>de</strong>r religioso.<br />
Necesitamos más pastores que honestamente procuren el perfeccionar su condición humana según el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> Jesucristo.<br />
Necesitamos menos pastores <strong>de</strong> <strong>de</strong>dicación exclusiva si <strong>la</strong> exclusividad trae como consecuencia congregaciones cuyos<br />
miembros actúan como accionistas <strong>de</strong> una empresa. Es necesario tomar conciencia <strong>de</strong> <strong>la</strong> necesidad <strong>de</strong> que todos los<br />
cristianos asuman actitu<strong>de</strong>s pastorales. Que no busquen sólo recibir, sino que estén siempre dispuestos a compartir <strong>la</strong>s<br />
bendiciones que reciben <strong>de</strong> Dios.<br />
Es necesario <strong>de</strong>sterrar <strong>la</strong> i<strong>de</strong>alización <strong>de</strong>l pastor como si fuera un superhombre. La aceptación <strong>de</strong>l pastor como un<br />
compañero en el peregrinar hacia <strong>la</strong> plena realización según el mo<strong>de</strong>lo que Dios nos ha dado en <strong>la</strong> persona <strong>de</strong> Jesucristo.<br />
La finalidad terapéutica <strong>de</strong> <strong>la</strong> Iglesia no es un fin en si misma. La Iglesia necesita salud para cumplir su misión en el<br />
mundo por el cual Jesucristo dio su vida en <strong>la</strong> cruz.<br />
Los pastores <strong>de</strong>bemos tomar conciencia <strong>de</strong> que <strong>la</strong> función terapéutica <strong>de</strong> <strong>la</strong> Iglesia <strong>de</strong>be ser aprovechada por nosotros<br />
en primer lugar. No porque seamos mejores, sino porque somos l<strong>la</strong>mados a servir más por nuestra vocación,<br />
capacitación y <strong>de</strong>dicación. Dicho <strong>de</strong> otra manera, porque nosotros po<strong>de</strong>mos hacer más daño a <strong>la</strong> congregación que un<br />
miembro común enfermo. No es que yo haya inventado los conceptos <strong>de</strong> complejo <strong>de</strong> alfa y omega y complejo<br />
heliocéntrico; sencil<strong>la</strong>mente he hecho una <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong> una realidad palpable, que percibo como enfermedad<br />
pastoral, generadora <strong>de</strong> surmenage y otros estados <strong>de</strong>presivos. Ningún ministro ha sufrido más que Pablo; sin<br />
embargo su vida estaba llena <strong>de</strong> gozo, aun tras <strong>la</strong>s rejas <strong>de</strong> <strong>la</strong> cárcel. Dos elementos básicos impidieron a Pablo caer<br />
<strong>Ea</strong> 2 <strong>–</strong> <strong>DOCUMENTO</strong> <strong>12.</strong> 42