El-romanismo-enemigo-de-la-Santa-Biblia
El-romanismo-enemigo-de-la-Santa-Biblia
El-romanismo-enemigo-de-la-Santa-Biblia
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
50"adorares" Y, rehusando nuestro Señor hacerlo y diciendoque solo Dios ha <strong>de</strong> ser servido, <strong>de</strong>termina que áninguna criatura <strong>de</strong>be dirijirse acto cualquiera <strong>de</strong> cultorelijioso.2a. Las Escrituras no reconocen semejantes distinciones.<strong>El</strong><strong>la</strong>s no hacen mención <strong>de</strong> un culto inferior, propio paraser ofrecido á Santos ó á Anjeles. Un Anjél' rehusóaceptar el culto que S. Juan le iba á hacer. "Y me" postré á sus pies para adorarle. Y me dijo : Mira no" lo hagas : yo soy siervo contigo, y con tus hermanos que" tienen el testimonio <strong>de</strong> Jesús. Adora á Dios. Porque"el testimonio <strong>de</strong> Jesús es espíritu <strong>de</strong> profecía." "Y" me dijo: Guárdate no lo hagas: porque yo siervo soy" contigo, y con tus hermanos los Profetas, y con aquellos" que guardan <strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>bras <strong>de</strong>, <strong>la</strong> profecía <strong>de</strong> este libro:"Adora á Dios."(l.) Mas es evi<strong>de</strong>nte que <strong>la</strong> Iglesia déRoma manda á sus miembros hacer ante los Santos lo queel ánjel prohibió á Juan. Besan, también, un pie <strong>de</strong>lPapa, sin reparar que, cuando Cornelio se arrojó á ¡lospies <strong>de</strong> Pedro para adorarle, el Santo Apóstol se ;lo.prohibió, diciéndole: Levántate, porque yo también soynombre."3a. <strong>El</strong> pueblo no entien<strong>de</strong> estas dist'mciones, ni <strong>la</strong>sguarda. ¡ Cuanto se confiesa por'un escritor suyo ! Este'dice que "<strong>El</strong> modo con que <strong>la</strong> Iglesia invoca á los Santos;" no pue<strong>de</strong> ser mirado como ido<strong>la</strong>tría, aunque el pueblo" haya cuasi llevado el abuso hasta ido<strong>la</strong>trar, teniendo á los" Santos por autores <strong>de</strong> los favores que pi<strong>de</strong>n, ó fiándose'" mas en su mediación que en <strong>la</strong> <strong>de</strong> Jesu-Cristo, 6, por fin,'"persuadiéndose <strong>de</strong> que, aun sin vivir Cristianamente, al-" canzarán <strong>la</strong> salvación por los méritos <strong>de</strong> los Santos."(2.)(1.) Apóc. xix. 10. y XXII. 9.(2.) Véase <strong>la</strong> Historia <strong>de</strong>l ConGÜio <strong>de</strong> Trento, traducida al Francéspor el Pese le Courayer, Livre vm. note 32.