mas en <strong>el</strong> servicio de Elohim hay gozo y satisfacción; Elohim no abandona alseguidor d<strong>el</strong> Mesías en caminos inciertos; no lo abandona a pesares vanos ycontratiempos. Si no tenemos los placeres de esta vida, podemos aun gozarnosmirando a la vida venidera.Pero aún aquí los seguidores d<strong>el</strong> Mesías pueden tener <strong>el</strong> gozo de la comunióncon <strong>el</strong> Mesías; pueden tener la luz de su amor, <strong>el</strong> perpetuo consu<strong>el</strong>o de supresencia. Cada paso de la vida puede acercarnos más a Yahshúa, puededarnos una experiencia más profunda de su amor y acercarnos más al benditohogar de paz. No perdáis pues vuestra confianza, sino tened firme seguridad,más firme que nunca antes. "¡Hasta aquí nos ha ayudado Yahweh!" (1 Samu<strong>el</strong>7: 12), y nos ayudará hasta <strong>el</strong> fin. Miremos los monumentos conmemorativosde lo que Elohim ha hecho para confortarnos y salvarnos de la mano d<strong>el</strong>destructor. Tengamos siempre presentes todas las tiernas misericordias queElohim nos ha mostrado: las lágrimas que ha enjugado, las penas que haquitado, las ansiedades que ha alejado, los temores que ha disipado, lasnecesidades que ha suplido, las bendiciones que ha derramado,fortificándonos así a nosotros mismos, para todo lo que está d<strong>el</strong>ante denosotros en <strong>el</strong> resto de nuestra peregrinación.No podemos menos que prever nuevas perplejidades en <strong>el</strong> conflicto venidero,pero podemos mirar hacia lo pasado, tanto como hacia lo futuro, y decir:"¡Hasta aquí nos ha ayudado Yahweh!" "Según tus días, serán tus fuerzas."(Deuteronomio 33: 25). La prueba no excederá a la fuerza que se nos dé parasoportarla. Así que sigamos con nuestro trabajo dondequiera lo hallemos,sabiendo que para cualquier cosa que venga, él nos dará fuerza proporcionadaa la prueba.Y luego las puertas d<strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o se abrirán para recibir a los hijos de Elohim y d<strong>el</strong>os labios d<strong>el</strong> Rey de gloria resonará en sus oídos, como la más rica música, labendición: "¡Venid, benditos de mi Padre, poseed <strong>el</strong> reino destinado paravosotros desde la fundación d<strong>el</strong> mundo!" (Mateo 25: 34). Entonces losredimidos serán recibidos con gozo en <strong>el</strong> lugar que Yahshúa les estápreparando. Allí su compañía no será la de los viles de la tierra, mentirosos,idólatras, impuros e incrédulos, sino la de los que hayan vencido a Satanás yque por la gracia divina hayan adquirido caracteres perfectos. Toda tendenciapecaminosa, toda imperfección que los aflige aquí, habrá sido quitada por lasangre d<strong>el</strong> Mesías y se les concede la exc<strong>el</strong>encia y brillantez de su gloria, que90
excede en mucho a la d<strong>el</strong> sol. Y la b<strong>el</strong>leza moral, la perfección de su carácterresplandecen con exc<strong>el</strong>encia mucho mayor que este resplandor exterior. Estánsin mancha d<strong>el</strong>ante d<strong>el</strong> trono de Elohim y participan de la dignidad y de losprivilegios de los áng<strong>el</strong>es.En vista de la herencia gloriosa que puede ser suya, "¿qué rescate dará <strong>el</strong>hombre por su alma?" (Mateo 16: 26). Puede ser pobre; con todo, posee en símismo una riqueza y dignidad que <strong>el</strong> mundo jamás podría haberle dado. Elalma redimida y limpiada de pecado, con todas sus nobles facultadesdedicadas al servicio de Elohim, es de un valor incomparable; y hay gozo en <strong>el</strong>ci<strong>el</strong>o d<strong>el</strong>ante de Elohim y de los santos áng<strong>el</strong>es por cada alma redimida, gozoque se expresa con cánticos de santo triunfo."Porque por las obras de la ley ninguna carne se justificará d<strong>el</strong>ante de él;porque por la ley es <strong>el</strong> conocimiento d<strong>el</strong> pecado." —Romanos 3:20"Al que no conoció pecado, hizo pecado por nosotros, para que nosotrosfuésemos hechos justicia de Elohim en él." —2 Corintios 5:21"Si confesamos nuestros pecados, él es fi<strong>el</strong> y justo para que nos perdonenuestros pecados, y nos limpie de toda maldad." —1 Juan 1:9Para mayor información:www.<strong>infonom</strong>.com.arwww.verdadpresente.com.arDescargue este libro en formato digital en: www.<strong>infonom</strong>.com.ar/pasos91