así- permitió una identificación y construcción mediáticasobre ellos y, a menudo con anterioridad a la evidencia de losilícitos, sobre su peligrosidad. Todo ello generó en la sociedad<strong>es</strong>pañola un auténtico episodio de pánico moral.Al ser el interés de <strong>es</strong>te texto el fenómeno de las bandaslatinas, la dimensión social de su pr<strong>es</strong>encia en la ciudad yde las r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>tas dadas, nos centraremos básicamenteen las dos sobre las que se ha construido, en España, elimaginario colectivo sobre <strong>es</strong>os grupos, y por extensiónsobre la juventud latina que “viste de ancho”: los LatinKings y los Ñetas. Estos dos grupos son los que tienen unrecorrido histórico amplio, una organización más consolidaday con cierta literatura que l<strong>es</strong> permite la definición de valor<strong>es</strong>,pautas de comportamiento y organización. El r<strong>es</strong>to de gruposparecen más réplicas de unos supu<strong>es</strong>tos comportamientos,a menudo conocidos por los jóven<strong>es</strong> a partir de la informaciónde los medios de comunicación, de Internet, de los chats alos que acuden, y, como no, de la información que ofrece elsistema de control, básicamente la policía.PROCESOS MIGRATORIOSLos proc<strong>es</strong>os migratorios son los que cobran fuerzaen la explicación de cómo cu<strong>es</strong>tion<strong>es</strong> tan <strong>es</strong>pecíficas deuna realidad cultural norteamericana, la segregación racial,territorial o social, han sido globalizadas. En <strong>es</strong>te sentido,la mayoría de las inv<strong>es</strong>tigacion<strong>es</strong> insisten en pr<strong>es</strong>entar losproc<strong>es</strong>os de consolidación y posterior globalización de <strong>es</strong>osdos colectivos como una de las consecuencias de proc<strong>es</strong>osmigratorios en diferent<strong>es</strong> direccion<strong>es</strong>.Así, los flujos migratorios en el interior de Estados Unidoshacia la ciudad de Nueva York, tanto de los primeros grupos deLatin Kings, como de puertorriqueños de la Ñeta, consolidanlas organizacion<strong>es</strong> y definen una primera personalidadcriminógena. También una segunda secuencia, ya a final<strong>es</strong> delos setenta y principalmente en los ochenta, del flujo haciaEstados Unidos d<strong>es</strong>de Centroamérica, como r<strong>es</strong>ultado de losconflictos armados, y d<strong>es</strong>de Sudamérica, por la inmigracióneconómica, influyen, junto a la ilegalidad de la mayoría delos d<strong>es</strong>plazamientos, en la aportación de efectivos a <strong>es</strong>asagrupacion<strong>es</strong>. De hecho, algunas inv<strong>es</strong>tigacion<strong>es</strong> ponen derelieve como el tránsito de excombatient<strong>es</strong> en los conflictoscentroamericanos, y <strong>es</strong>pecialmente de sus hijos a unarealidad, la norteamericana, en la que debían enfrentarse acondicion<strong>es</strong> de ilegalidad y pr<strong>es</strong>encia de pandillas juvenil<strong>es</strong>,abonaba, en un proc<strong>es</strong>o que podría considerarse “natural”, laadscripción a una u otra banda o pandilla.En <strong>es</strong>te sentido, la aportación de nuevos efectivos alas pandillas u organizacion<strong>es</strong> de calle, junto a la deriva queéstas venían teniendo hacia la actividad criminal, significóque en los años 80 las bandas latinas en Estados Unidosconstituyeran, para las autoridad<strong>es</strong> <strong>es</strong>tadounidens<strong>es</strong>, uno delos principal<strong>es</strong> problemas de seguridad pública, adoptándosefuert<strong>es</strong> medidas de control y repr<strong>es</strong>ión. Una de ellas tuvoun gran impacto en la transnacionalización del fenómeno:la deportación a sus país<strong>es</strong> de origen de los miembros debandas encarcelados. En multitud de casos, los deportados,hijos de inmigrant<strong>es</strong> ilegal<strong>es</strong> que habían realizado toda susocialización académica y social en Estados Unidos, llegabana los país<strong>es</strong> de sus padr<strong>es</strong> sin ningún tipo de red de soportey practicamente sin conocimiento de la lengua <strong>es</strong>pañola –de hecho <strong>es</strong> bastante habitual que las relacion<strong>es</strong> epistolar<strong>es</strong>entre miembros de los grupos se realice aún en inglés-. Asípu<strong>es</strong>, <strong>es</strong>a política criminal <strong>es</strong>tadounidense de deportaciónsupuso la extensión del fenómeno a país<strong>es</strong> como El Salvador,Nicaragua, Guatemala o República Dominicana, sin olvidar,por cierto, Ecuador.De hecho, no <strong>es</strong> hasta el año 1994 cuando, deportadod<strong>es</strong>de Nueva York a Guayaquil (Ecuador), el conocido comoKING MOS o BOY GEAN, coronado como Rey en el Bronxneoyorquino, funda el 4 de julio la organización Latin Kingen Ecuador. Una nueva etapa en el proc<strong>es</strong>o migratoriolatinoamericano, <strong>es</strong>ta vez hacia Europa y <strong>es</strong>pecialmente aEspaña, certifica la transnacionalización del fenómeno; dehecho, nos encontramos ante una evidencia empírica de losimpactos de la globalización en lo local.67
LAS MIGRACIONES LATINOAMERICANAS HACIAESPAÑALa conjunción en la <strong>es</strong>cena internacional de proc<strong>es</strong>oseconómicos, crisis políticas, perfil<strong>es</strong> demográficos del mundod<strong>es</strong>arrollado y nec<strong>es</strong>idad de mano de obra –a menudo encondicion<strong>es</strong> de precariedad- supuso, en el caso <strong>es</strong>pañol, quea 30 de junio de 2007 r<strong>es</strong>idieran en España más de 3.600.000extranjeros, frente a los aproximadamente 900.000r<strong>es</strong>ident<strong>es</strong> del año 2000. En el caso de los inmigrant<strong>es</strong>latinoamericanos, los flujos de llegada se concentraron en elperíodo 2003-2006; así, mientras en el año 2000 la poblaciónlatinoamericana repr<strong>es</strong>entaba el 20,6% de la poblaciónextranjera r<strong>es</strong>idente en España, en 2006 superaba el 30%,con más de 1.060.000 de personas. La llegada de los primeroscolectivos de inmigrant<strong>es</strong> latinoamericanos a Barcelona, seproducen en la segunda mitad de la década de los ochenta.No obstante, no <strong>es</strong> hasta el año 2000 que su pr<strong>es</strong>encia sehace significativa. Así, mientras en 1996 los latinoamericanoscensados en la ciudad no superaban los 10.000 nacional<strong>es</strong>de <strong>es</strong>os país<strong>es</strong>, cinco años d<strong>es</strong>pués, en 2001, eran cercade 35.000, y la última actualización del censo nos refiere lar<strong>es</strong>idencia en Barcelona de 117.221 latinoamericanos.CUADRO 1POBLACION EXTRANJERA <strong>EN</strong> <strong>BARCELONA</strong>1996 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007Total 29.354 74.019 113.809 163.046 202.489 230.942 260.058 250.789% s/población 1,9 4,9 7,6 1 0,7 12,8 14,2 15,9 15,6Europa 9.407 16.286 22.924 33.111 44.483 52.835 63.195 71.662Asia 5.576 12.175 17.934 26.412 30.954 36.810 42.507 39.552África 4.044 10.044 13.893 17.002 19.321 20.818 22.336 19.080América 10.213 35.378 58.944 86.364 107.517 120.197 131.694 120.232Centroamérica 2.113 6.985 9.003 11.978 15.168 17.447 19.462 17.253Sudamérica 7.276 27.223 48.528 72.456 89.718 99.482 108.486 99.968Oceanía 76 99 114 157 214 282 326 263Fuente: elaboración propia a partir de datos del Institut Municipal d’Estadística68