12.07.2015 Views

Descargar en pdf - Revista RIA - INTA

Descargar en pdf - Revista RIA - INTA

Descargar en pdf - Revista RIA - INTA

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

8 ACTUALIDAD EN I+D<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Descubrimi<strong>en</strong>to MundialCi<strong>en</strong>tíficos secu<strong>en</strong>cianel g<strong>en</strong>oma del tomateUn consorcio internacional, <strong>en</strong> el que participa el <strong>INTA</strong> y otras instituciones nacionales,logró id<strong>en</strong>tificar el código g<strong>en</strong>ético de este cultivo. El hallazgo permitirá implem<strong>en</strong>tarestrategias de mejorami<strong>en</strong>to para optimizar su sabor, nutrición y calidad.Fernando Carrari – fcarrari@cnia.inta.gov.arInvestigadores de diversos paíseslograron secu<strong>en</strong>ciar elg<strong>en</strong>oma del tomate, uno delos cultivos más importantesdel mundo y cuya producciónnacional supera el millón detoneladas. “Si bi<strong>en</strong> se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tradisponible públicam<strong>en</strong>te (<strong>en</strong> solg<strong>en</strong>omics.net),todavía se trabajapara liberar una versióncurada que se seguirá estudiandopara mejorar su precisión”, adelantael jefe del grupo de g<strong>en</strong>ómicaestructural y funcional de especiesde Solanáceas del Instituto deBiotecnología del <strong>INTA</strong> Castelar,Fernando Carrari.A partir del desciframi<strong>en</strong>to delg<strong>en</strong>oma de la especie domesticadaSolanum lycopersicum, se podránabrir innumerables oportunidadespara el estudio de mecanismosg<strong>en</strong>éticos y moleculares que determinanla nutrición, el sabor y la calidadde los frutos de este cultivomediante estrategias de mejorami<strong>en</strong>tog<strong>en</strong>ético.En la Arg<strong>en</strong>tina, las investigacionesse focalizan <strong>en</strong> “rutas metabólicasparticulares del fruto y de otrosórganos de la planta y <strong>en</strong> la id<strong>en</strong>tificaciónde secu<strong>en</strong>cias asociadas alcont<strong>en</strong>ido vitamínico y de sólidossolubles”, indica Carrari.“Conocer la estructurag<strong>en</strong>ómica de los propiosrecursos naturales es lainformación más valiosaque podamos t<strong>en</strong>er.Es necesario conservar lavariabilidad y utilizarla <strong>en</strong>b<strong>en</strong>eficio de la producciónlocal” (Fernando Carrari).El profesional lidera el grupo querepres<strong>en</strong>ta a la Arg<strong>en</strong>tina <strong>en</strong> elConsorcio Internacional delG<strong>en</strong>oma del Tomate, que <strong>en</strong> suprimera etapa estuvo <strong>en</strong>cargadode dilucidar el de la mitocondria,una molécula subg<strong>en</strong>ómicaque repres<strong>en</strong>ta aproximadam<strong>en</strong>teel 0,05 por ci<strong>en</strong>to del total dela especie (ver recuadro “Elg<strong>en</strong>oma”).Según el investigador, el g<strong>en</strong>omaestá “completam<strong>en</strong>te secu<strong>en</strong>ciado”,aunque advirtió que “eso no quieredecir que esté ord<strong>en</strong>ado”. Esto se<strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra relacionado con el porc<strong>en</strong>tajedel g<strong>en</strong>oma que <strong>en</strong> un principiose p<strong>en</strong>só secu<strong>en</strong>ciar y el queefectivam<strong>en</strong>te se secu<strong>en</strong>ció. “Seobtuvo mucho más información dela que originalm<strong>en</strong>te se planificó,por lo que probablem<strong>en</strong>te lleve mástiempo ord<strong>en</strong>arla”, considera Carrari,qui<strong>en</strong> a su vez destaca que el proyectodel “g<strong>en</strong>oma humano com<strong>en</strong>zó<strong>en</strong> la década del 90 y aún hoy sigu<strong>en</strong>liberándose versiones corregidas”.ESTUDIOS METABÓLICOSSi bi<strong>en</strong> el número de g<strong>en</strong>es deltomate aún no está claro, algunosestudios indican que podrían serunos 45 mil. El grupo arg<strong>en</strong>tino estu-Ci<strong>en</strong>tíficos secu<strong>en</strong>cian el g<strong>en</strong>oma del tomate


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 9A partir del desciframi<strong>en</strong>todel g<strong>en</strong>oma se podrán abrirnumerosas oportunidadespara el estudio de mecanismosg<strong>en</strong>éticos y molecularesque determin<strong>en</strong> lanutrición, el sabor y lacalidad de los frutos.dió algunos ci<strong>en</strong>tos de ellos relacionadoscon el metabolismo de la planta<strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral y del fruto <strong>en</strong> particular.“Nuestra int<strong>en</strong>ción es estudiaraquellos g<strong>en</strong>es que, por su funciónpredicha, ti<strong>en</strong><strong>en</strong> relación con elmetabolismo del fruto <strong>en</strong> términosde aplicar este conocimi<strong>en</strong>to al mejorami<strong>en</strong>tode la calidad, relacionadaal tiempo de vida <strong>en</strong> estantería delos frutos, al sabor y al aroma”, explicael jefe de g<strong>en</strong>ómica estructural.En el corto plazo, una vez que elgrupo conozca los g<strong>en</strong>es que codifican<strong>en</strong>zimas relacionadas con lossólidos solubles y el cont<strong>en</strong>ido vitamínico<strong>en</strong> el fruto, se podrían llegar aseleccionar materiales que port<strong>en</strong>alelos asociados a una mejora <strong>en</strong> lacalidad.El g<strong>en</strong>omaCada organismo está compuesto por un g<strong>en</strong>oma; un “manual de instrucciones”químico que índica a través de los g<strong>en</strong>es, qué proteínas seproduc<strong>en</strong>, cuándo y dónde (lo que determina cómo el tomate crece y sedesarrolla). Si fuera un libro t<strong>en</strong>dría millones de páginas y sólo cont<strong>en</strong>dríacuatro letras: A, C, G y T (Ad<strong>en</strong>ina, Citosina, Guanina y Timinason las bases nitrog<strong>en</strong>adas que compon<strong>en</strong> el ADN). La combinación deestas letras conforma las instrucciones (o g<strong>en</strong>es) que hac<strong>en</strong> que unorganismo funcione de una determinada manera.Secu<strong>en</strong>ciar el g<strong>en</strong>oma, <strong>en</strong>tonces, es descubrir la secu<strong>en</strong>cia exacta <strong>en</strong> laque están ord<strong>en</strong>adas esas letras.Previo al inicio de la secu<strong>en</strong>ciación se realizó una proyección de la cantidadde g<strong>en</strong>es que podría cont<strong>en</strong>er el g<strong>en</strong>oma del tomate para programarcuánto tiempo demoraría y cuántos recursos se necesitarían.Entonces, se predijo que con averiguar un 60/70 por ci<strong>en</strong>to se conseguiríalograr un panorama completo de lo que ocurría con este cultivo.No obstante, a medida que surgieron nuevas tecnologías bioinformáticas,el Consorcio consideró mejor y más económico secu<strong>en</strong>ciar todo.Actualm<strong>en</strong>te, el grupo de Carrariestudia la función y el rol de losg<strong>en</strong>es <strong>en</strong> la regulación de las víasmetabólicas de interés mediantetécnicas de manipulación <strong>en</strong> los cultivaresde experim<strong>en</strong>tación. Una vezresuelto, se podrán buscar variantesalélicas <strong>en</strong> los cultivares que seutilizan actualm<strong>en</strong>te. “Conocer estasvariantes le proveerá al mejoradorde herrami<strong>en</strong>tas para id<strong>en</strong>tificar uncultivar que pueda cumplir con losrequerimi<strong>en</strong>tos más altos de calidad”.En este s<strong>en</strong>tido, los investigadoresde Castelar trabajan <strong>en</strong> un proyectoconjunto con el <strong>INTA</strong> La Consulta, elInstituto de Biología Molecular deRosario (pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>te al CONICET) yla Universidad Nacional de Córdoba.En el Banco de Germoplasma ubicado<strong>en</strong> M<strong>en</strong>doza, se buscan alelos queestén relacionados con esos aspectos.Ci<strong>en</strong>tíficos secu<strong>en</strong>cian el g<strong>en</strong>oma del tomate


10 ACTUALIDAD EN I+D<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Ci<strong>en</strong>tíficos secu<strong>en</strong>cian el g<strong>en</strong>oma del tomate


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 11AL RESCATE DE VARIEDADESSILVESTRESSi bi<strong>en</strong> el g<strong>en</strong>oma que sesecu<strong>en</strong>ció no pert<strong>en</strong>ece a un cultivarque se utilice <strong>en</strong> la producción acampo, es considerado un modelode estudio. En la década del 60 estecultivar fue ampliam<strong>en</strong>te usado parala producción de híbridos comercialespero, años más tarde, se desarrollaronotros con mejor performanceagronómica y este cultivar sedejó de lado. No obstante, debido ala cantidad de información disponible,los miembros del consorcio decidieronutilizarlo como modelo.En este s<strong>en</strong>tido, existe la posibilidadde que se puedan rescatar cultivaresutilizados actualm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> distintasregiones del país que se destacanpor su sabor y contextura (unode los casos más conocidos es el deltomate Plat<strong>en</strong>se). De esta forma, el<strong>INTA</strong> com<strong>en</strong>zó a rescatar cultivareslocales para poder catalogarlos <strong>en</strong>colaboración con la Facultad deCi<strong>en</strong>cias Agrarias de la UniversidadNacional de Cuyo.Esto podría ocasionar un granimpacto tanto <strong>en</strong> términos de costosde producción (por ejemplo <strong>en</strong> elSi bi<strong>en</strong> el número de g<strong>en</strong>esdel tomate aún no estáclaro, algunos estudiosindican que podría contarcon unos 45 mil. El grupoarg<strong>en</strong>tino estudió ci<strong>en</strong>tosde ellos al secu<strong>en</strong>ciar lamitocondria.costo de la semilla que actualm<strong>en</strong>tese importa <strong>en</strong> su mayoría) como <strong>en</strong>la calidad del producto.“Nos dimos cu<strong>en</strong>ta que toda estainformación suministrada a partir delconsorcio del g<strong>en</strong>oma nos podía servirpara ir a buscar <strong>en</strong> esos cultivarestoda la variabilidad que existe <strong>en</strong>ellos y que permitiera explicar su altacalidad o la razón por la cual los productoreslocales los sigu<strong>en</strong> prefiri<strong>en</strong>do”,sosti<strong>en</strong>e Carrari.GENOMAS POR VENIRAdemás, el grupo lidera un proyectode secu<strong>en</strong>ciación del g<strong>en</strong>oma deuna especie de tomate silvestre(Solanum p<strong>en</strong>nelli) que no es comestibl<strong>en</strong>i utilizado para la producciónconv<strong>en</strong>cional, pero su desciframi<strong>en</strong>topermitiría contar con un importantereservorio de alelos exóticos.América del Sur posee la mayordiversidad de especies de tomate yaque este cultivo es originario de las tierrasaltas de las costas occid<strong>en</strong>tales yfue cultivado de manera continua porlas diversas culturas andinas 1 (verrecuadro “Un cultivo con historia”).De hecho, <strong>en</strong> la actualidad exist<strong>en</strong>más de 2.300 especies difer<strong>en</strong>tesde tomate <strong>en</strong> la región y sólo doslaboratorios latinoamericanos participande este consorcio: uno de laUniversidad de Sao Pablo, Brasil, yel otro pert<strong>en</strong>ece al <strong>INTA</strong>.Son muy pocos los cultivarescomerciales que portan alelos silvestres,pero si se lograran conoceréstos a nivel g<strong>en</strong>ómico, <strong>en</strong>tonces sepodrían seleccionar aquellos queaport<strong>en</strong> características b<strong>en</strong>éficas yutilizarlos como fu<strong>en</strong>te de diversi-El ConsorcioEl Consorcio Internacional de Secu<strong>en</strong>ciación del Tomate (SOL) está conformado por 13 países cuyos c<strong>en</strong>tros se<strong>en</strong>cargan de secu<strong>en</strong>ciar un porc<strong>en</strong>taje del g<strong>en</strong>oma total de ese cultivo. El Instituto de Biotecnología del <strong>INTA</strong>Castelar fue qui<strong>en</strong> secu<strong>en</strong>ció el g<strong>en</strong>oma de la mitocondria, debido a los pot<strong>en</strong>ciales usos que ese grupo le puedadar al aplicar esos conocimi<strong>en</strong>tos a las especies nativas de este país.El Consorcio se conformó <strong>en</strong> 2002 para aunar recursos humanos y materiales <strong>en</strong> el estudio de esta y otras especiesSolanáceas (<strong>en</strong>tre las que se incluye la papa, el pimi<strong>en</strong>to y el tabaco).A su vez, ese Instituto conforma un consorcio regional llamado LATSOL (cnia.inta.gov.ar/lat-SOL) del que participanlaboratorios latinoamericanos que trabajan <strong>en</strong> investigación con especies de Solanáceas que, a su vez,ti<strong>en</strong>e un homólogo europeo llamado EU-SOL (www.eusol.net).Si bi<strong>en</strong> trabajan <strong>en</strong> una plataforma común, “cada consorcio ti<strong>en</strong>e objetivos específicos que respond<strong>en</strong> a interesesestratégicos regionales”, afirma el jefe del grupo de g<strong>en</strong>ómica estructural y funcional de especies deSolanáceas del <strong>INTA</strong> Castelar, Fernando Carrari.“El armado de un consorcio como este lleva mucho tiempo y requiere una gran cantidad de g<strong>en</strong>te, esfuerzo ycoordinación”, concluye el investigador.Ci<strong>en</strong>tíficos secu<strong>en</strong>cian el g<strong>en</strong>oma del tomate


12 ACTUALIDAD EN I+D<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1En la actualidad exist<strong>en</strong>más de 2.300 especiesdifer<strong>en</strong>tes de tomate ysólo dos laboratorioslatinoamericanos participandel consorcio: uno <strong>en</strong>Brasil y otro <strong>en</strong> laArg<strong>en</strong>tina.Un cultivo con historiaNumerosas versionas indican que el tomate se cultivaba <strong>en</strong> Américadel Sur desde el Siglo VII a.C. La palabra “tomate” provi<strong>en</strong>e de la l<strong>en</strong>guaazteca náhuatl, “tomatl”.Investigaciones indican que ésta y otras hortalizas fueron cultivadasdesde hace más de 2.500 años por las culturas que vivieron próximasa la cordillera de Los Andes. De acuerdo a las cre<strong>en</strong>cias de algunos deesos pueblos, qui<strong>en</strong>es pres<strong>en</strong>ciaban la ingestión de semillas de tomateeran b<strong>en</strong>decidos con poderes adivinatorios.El tomate grande y grumoso, una mutación de una fruta más lisa ypequeña, se originó y distribuyó por América C<strong>en</strong>tral. Luego de la conquistaespañola, el cultivo fue trasladado a Europa, donde fue adaptadoa ciertas regiones de ese contin<strong>en</strong>te.dad para ser aprovechada <strong>en</strong> elmejorami<strong>en</strong>to de esta especie apartir de, por ejemplo, cruzami<strong>en</strong>toscon las especies cultivadas.Para ello, una de las maneras utilizadaspor los mejoradores es laintrogresión de g<strong>en</strong>es <strong>en</strong> las quepaulatinam<strong>en</strong>te se incorporan alelosde especies silvestres al acervog<strong>en</strong>ético de las cultivadas.“Conocer la estructura g<strong>en</strong>ómica delos propios recursos naturales es lainformación más valiosa que podamost<strong>en</strong>er. No sólo es necesarioconservar la variabilidad, sino tambiénutilizarla <strong>en</strong> b<strong>en</strong>eficio de laproducción local”, finaliza Carrari.1 Smith, Andrew F. (1994), The tomato inAmerica : early history, culture, and cookery.University of South Carolina Press, Columbia,S.C, USA.Ci<strong>en</strong>tíficos secu<strong>en</strong>cian el g<strong>en</strong>oma del tomate


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 13PATENTADA POR EL <strong>INTA</strong>Vacuna “marcadora”contra el HVB-1Investigadores del <strong>INTA</strong> trabajaron <strong>en</strong> el desarrollo de un producto que previ<strong>en</strong>e una<strong>en</strong>fermedad que provoca importantes pérdidas económicas y que permite difer<strong>en</strong>ciar<strong>en</strong>tre animales vacunados e infectados.Ana María Sadir - asadir@cnia.inta.gov.arEl <strong>INTA</strong> obtuvo la pat<strong>en</strong>tede inv<strong>en</strong>ción de unavacuna marcadora contrael Herpes Virus Bovinotipo 1 (HVB-1) que permitedifer<strong>en</strong>ciar los animales infectadosde los vacunados y, de estaforma, implem<strong>en</strong>tar campañas decontrol y erradicación de esa<strong>en</strong>fermedad que provoca pérdidasmillonarias <strong>en</strong> la producción decarne y leche.Esta vacuna se c<strong>en</strong>tra <strong>en</strong> la “modificacióndel g<strong>en</strong>oma viral” por laextracción de uno de los g<strong>en</strong>es quecodifica para la glicoproteína E (gE),explica una de las desarrolladorasde la vacuna, Mariana Puntel, exbecaria del <strong>INTA</strong> Castelar, qui<strong>en</strong>actualm<strong>en</strong>te trabaja <strong>en</strong> el InstitutoNacional de Salud de los EstadosUnidos e investiga la aplicación deterapias génicas <strong>en</strong> <strong>en</strong>fermedadeshumanas.La idea fue extraer la porción delácido nucleico que codifica paraesta proteína para lograr la at<strong>en</strong>uacióndel virus, por una parte, y, a suvez, difer<strong>en</strong>ciar un animal vacunadode uno que se infectó <strong>en</strong> algúnmom<strong>en</strong>to de su vida. Esto se lograya que el organismo no produce anticuerposcontra la glicoproteína qu<strong>en</strong>o esta pres<strong>en</strong>te <strong>en</strong> el virus quecompone la vacuna.“Se puede distinguir fácilm<strong>en</strong>te un animal vacunado de unoinfectado <strong>en</strong> función de la pres<strong>en</strong>cia o aus<strong>en</strong>cia de anticuerposcontra la glicoproteína E” (Ana María Sadir).De esta forma, “se puede distinguirfácilm<strong>en</strong>te un animal vacunadode uno infectado <strong>en</strong> función dela pres<strong>en</strong>cia o aus<strong>en</strong>cia de anticuerposcontra esta proteína”, explica laex directora del C<strong>en</strong>tro deInvestigación <strong>en</strong> Ci<strong>en</strong>cias Veterinariasy Agronómicas (CICVyA) y responsabledel logro, Ana María Sadir. Así,un simple análisis de suero (con unELISA específico para gE) permitemonitorear una campaña de controly erradicación de la <strong>en</strong>fermedad.INGENIERÍA Y VACUNASA partir de la ing<strong>en</strong>iería g<strong>en</strong>ética,originada <strong>en</strong> 1973 luego de que losinvestigadores norteamericanosStanley Coh<strong>en</strong> y Herbert Boyer produjeranel primer organismo recombinandopartes de su ADN, secom<strong>en</strong>zaron a extraer partes deg<strong>en</strong>omas virales para incorporar ung<strong>en</strong> foráneo y lograr, de esta forma,la at<strong>en</strong>uación del virus.En este caso, una vacuna marcadoraes de gran utilidad <strong>en</strong> los rodeosdebido a que la respuesta inmun<strong>en</strong>o puede ser <strong>en</strong>mascarada porla respuesta a la infección natural y,al mismo tiempo, disminuye la probabilidadde transmisión.Según sosti<strong>en</strong>e Sadir, “dado que eluso de vacunas marcadoras nog<strong>en</strong>era una respuesta inmune queinterfiera con el diagnóstico, posibilitaríael seguimi<strong>en</strong>to seroepidemiológicode la infección <strong>en</strong> una poblaciónvacunada y la evaluación de la eficaciade las vacunas <strong>en</strong> condicionesde campo”.La eliminación del g<strong>en</strong> gE permiteid<strong>en</strong>tificar a los animales vacunadosya que éstos carec<strong>en</strong> de anticuerposcontra esa proteína “marcadora”que, al no ser expresada por el virusVacuna “marcadora” contra el HVB-1


14 ACTUALIDAD EN I+D<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1El proceso de infeccióncon HVB compr<strong>en</strong>detres difer<strong>en</strong>tes estadios:<strong>en</strong>fermedad aguda,lat<strong>en</strong>cia y reactivación.Los virus son transmitidosdirecta o indirectam<strong>en</strong>te.SELECCIÓN Y PURIFICACIÓN DE CLONES VIRALES RECOMBINANTESa.ControlHVB-1salvajeb.controlHVBbgalc.Seleccióndel clon ad.segundopasajee.tercerpasajef.control decélulas noinfectadasvacunal, g<strong>en</strong>era una respuestainmune difer<strong>en</strong>cial que resulta <strong>en</strong>una herrami<strong>en</strong>ta práctica al id<strong>en</strong>tificaranimales infectados.Combatir esta <strong>en</strong>fermedad e id<strong>en</strong>tificara los bovinos portadores delBVH-1 permite evitar grandes pérdidaseconómicas y asegura el ingresode productos nacionales a mercadoseuropeos que exig<strong>en</strong> animales libresdel virus.En este s<strong>en</strong>tido, Puntel recalcaque “Europa había proyectado erradicarla <strong>en</strong>fermedad para el 2011,lo que se logró <strong>en</strong> algunos países,pero <strong>en</strong> un futuro probablem<strong>en</strong>te lapres<strong>en</strong>cia de esta infección se transforme<strong>en</strong> una restricción para el mercadode nuestros animales”.Hoy, Suecia, Finlandia, Noruega yAustria son considerados regioneslibres del herpesvirus bovino tipo 1,por lo que el ingreso de animalesinfectados podría ocasionar “la<strong>en</strong>fermedad severa, abortos y disminuciónde producción lechera, lo queresulta <strong>en</strong> cuantiosas pérdidas económicas”,afirmó Sadir.Así, la g<strong>en</strong>eración de esta vacuna<strong>en</strong> el país se transformó <strong>en</strong> una necesidady compitió directam<strong>en</strong>te conuna que ya había sido creada <strong>en</strong>Europa. “Los resultados de la vacunadesarrollada por el <strong>INTA</strong> fueron sorpr<strong>en</strong>d<strong>en</strong>tes;mucha g<strong>en</strong>te que trabaja<strong>en</strong> el tema aseguró que superó lasexpectativas”, manifiesta Puntel,qui<strong>en</strong> aclara que la clave del éxito se<strong>en</strong>contró <strong>en</strong> los grados de protecciónque posee y la seguridad <strong>en</strong>cuanto a la no reversión de la virul<strong>en</strong>ciade la cepa viral modificada. “Alvacunar a los animales y someterlosa la infección, la cantidad de especím<strong>en</strong>esprotegidos fue muy grande ysu duración muy ext<strong>en</strong>sa”, explica.LA ENFERMEDADEl primer aislami<strong>en</strong>to del HVB-1 serealizó <strong>en</strong> 1956 a partir de casos derinotraqueítis infecciosa <strong>en</strong> bovinos<strong>en</strong> los Estados Unidos. En este país,los primeros casos clínicos reportadosdatan del año 1980 y el primeraislami<strong>en</strong>to viral fue realizado <strong>en</strong> el<strong>INTA</strong> <strong>en</strong> 1982.Según diversos estudios, la distribuciónde la infección es mundial ysu incid<strong>en</strong>cia varía de un país a otro(7,4 por ci<strong>en</strong>to <strong>en</strong> China y 70 <strong>en</strong>Alemania Ori<strong>en</strong>tal), aunque <strong>en</strong> paísescon sistemas productivos comola Arg<strong>en</strong>tina oscilaban <strong>en</strong>tre el 30 yel 40 por ci<strong>en</strong>to <strong>en</strong> aquellos años.Datos más actuales de un relevami<strong>en</strong>torealizado por el <strong>INTA</strong> determi-Vacuna “marcadora” contra el HVB-1


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 15“Los resultados de la vacunadesarrollada por el <strong>INTA</strong>fueron sorpr<strong>en</strong>d<strong>en</strong>tes;mucha g<strong>en</strong>te que trabaja <strong>en</strong>el tema aseguró que superólas expectativas”,Mariana Puntelnaron una preval<strong>en</strong>cia del 21 al 56por ci<strong>en</strong>to <strong>en</strong> Corri<strong>en</strong>tes, del 17 al 65<strong>en</strong> La Rioja, del 7,6 <strong>en</strong> Pergamino, ydel 70 al 82 <strong>en</strong> Olavarría.El HVB-1 es un patóg<strong>en</strong>o viralneurotrópico de alta preval<strong>en</strong>cia <strong>en</strong>bovinos que provoca rinotraqueítis,conjuntivitis y abortos, <strong>en</strong>tre otrossíntomas, y que ocasiona principalm<strong>en</strong>teinfecciones respiratoriasdebido al sinergismo que puede provocarcon otros virus y bacteriascoinfectantes. Luego de la infección,el virus se replica int<strong>en</strong>sivam<strong>en</strong>te <strong>en</strong>células del tracto respiratorio superiory posee una muy alta probabilidadde contagio durante el períodoagudo de la infección.El proceso compr<strong>en</strong>de tres difer<strong>en</strong>tesestadios: <strong>en</strong>fermedadaguda, lat<strong>en</strong>cia y reactivación, y losvirus son transmitidos directa o indirectam<strong>en</strong>te.En el primer caso, a travésde aerosol o por contacto demucosas <strong>en</strong>tre animales infectadosy, <strong>en</strong> el segundo, por alim<strong>en</strong>to, agua,o sem<strong>en</strong> contaminados.Luego de unas semanas, el ganadose recupera, aunque el virus sealoja <strong>en</strong> las neuronas y se manti<strong>en</strong>elat<strong>en</strong>te de por vida. Una situación deestrés o una terapia con corticoidespodría reactivar la <strong>en</strong>fermedad quepuede ser altam<strong>en</strong>te contagiosa parael rodeo circundante.Sintomatología de la <strong>en</strong>fermedadEn bovinos, la sintomatología del Herpes Virus Bovino tipo 1 (HVB-1)comi<strong>en</strong>za luego de dos a seis días con fiebre, anorexia, aum<strong>en</strong>to de lafrecu<strong>en</strong>cia respiratoria, tos, descarga nasal bilateral, traqueítis ydepresión, a m<strong>en</strong>udo acompañados de conjuntivitis y secreción ocularmucopurul<strong>en</strong>ta.La infección provoca una fuerte constricción bronquial que ocasiona eltaponami<strong>en</strong>to de los conductos de las vías respiratorias inferiores consecreciones, lo que empeora de esta manera los mecanismos de def<strong>en</strong>say favorece el alojami<strong>en</strong>to de infecciones bacterianas. En g<strong>en</strong>eral, losanimales se recuperan d<strong>en</strong>tro de las dos semanas, excepto aquellos quehayan sufrido una superinfección bacteriana (lo que puede ocurrir <strong>en</strong>aproximadam<strong>en</strong>te el 10 por ci<strong>en</strong>to de los animales afectados).Las infecciones del tracto g<strong>en</strong>ital g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te son provocadasdurante la práctica de inseminación artificial. En machos, los signosde infección están asociados a una reducción <strong>en</strong> la calidad del sem<strong>en</strong>(baja movilidad y anormalidades morfológicas de los espermatozoides),mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> las hembras, la infección puede provocar disturbiosde la fertilidad. En este s<strong>en</strong>tido, cuando la infección ti<strong>en</strong>e lugar <strong>en</strong>un rebaño que incluye vacas preñadas, puede g<strong>en</strong>erar abortos <strong>en</strong>trelas tres y las seis semanas posteriores a la infección.A su vez, <strong>en</strong>tre el quinto y el octavo mes de gestación, el 25 por ci<strong>en</strong>tode ellas corre un alto riesgo de sufrirlos. Las madres suel<strong>en</strong> transmitirla infección durante o inmediatam<strong>en</strong>te después del parto, directam<strong>en</strong>te<strong>en</strong> el útero o bi<strong>en</strong> por secreciones nasales contaminadas durante lalimpieza de la cría. Además, <strong>en</strong> el mom<strong>en</strong>to del parto existe una inmunodepresióny, por lo tanto, altas probabilidades de reactivación delvirus lat<strong>en</strong>te.Vacuna “marcadora” contra el HVB-1


16 ACTUALIDAD EN I+D<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1NUEVA TECNOLOGÍAMicrocápsulas paracontrolar fertilidadEl desarrollo de la UNL y el CONICET será de utilidadpara controlar el celo de las vacas y favorecer, de estamanera, la efectividad de las inseminaciones artificiales.Así, el mejorami<strong>en</strong>to g<strong>en</strong>ético del ganado selograría a partir de tiempos y costos mínimos.Pr<strong>en</strong>sa UNL – pr<strong>en</strong>sa@unl.edu.arApartir de biomateriales, investigadoresde la UniversidadNacional del Litoral (UNL) y elCONICET desarrollan cápsulas de hormonasmuy pequeñas que pued<strong>en</strong>inyectarse <strong>en</strong> las vacas para controlarsu ciclo hormonal y favorecer así laefici<strong>en</strong>cia de las inseminaciones artificiales.La membrana de las cápsulas,diseñada a partir de un material biocompatible,permite controlar la velocidadde liberación de las hormonas.“Se trata de una tecnología innovadora<strong>en</strong> el país y que es acordea lo que se está empezando ahacer <strong>en</strong> el resto del mundo”,señala Ignacio Rintoul, doc<strong>en</strong>te einvestigador de la UNL y líder delproyecto.Según detalla, el mayor b<strong>en</strong>eficioque ofrece el sistema comparadocon otros métodos disponiblespara controlar los celos (como dispositivosintravaginales) es que, alinyectar las microcápsulas, el procedimi<strong>en</strong>toes ágil y requiere unsolo paso.Además se puede regular ladosis de acuerdo al tamaño decada vaca y no deja residuos <strong>en</strong> elanimal ya que se libera el 100 porci<strong>en</strong>to de la hormona.EL TRABAJOLa investigación, que se lleva adelante<strong>en</strong> el Instituto de DesarrolloTecnológico para la IndustriaQuímica (INTEC), fue premiada reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>tepor la Bolsa de Comercio deSanta Fe (BCSF) <strong>en</strong> el certam<strong>en</strong> “Unaapuesta al Tric<strong>en</strong>t<strong>en</strong>eario”.“Desde el principio p<strong>en</strong>samos <strong>en</strong>tecnología aplicada a veterinaria, loque significa que los costos que sepued<strong>en</strong> manejar son mucho m<strong>en</strong>oresque <strong>en</strong> salud humana”, puntualizael experto.Disponer de un material económicoy ampliam<strong>en</strong>te disponible era elprimer paso para <strong>en</strong>sayar la nuevatecnología.“Trabajamos con un compuestopolimérico que permite controlar laliberación de la hormona <strong>en</strong> elcuerpo”, detalla.Ahora, los investigadores sintetizaneste material <strong>en</strong> el laboratorio y produc<strong>en</strong>las cápsulas a pequeña escalaluego de haber evaluado su funcionami<strong>en</strong>to<strong>en</strong> tejidos y fluidos artificialesque simulan el organismo animal, conmuy bu<strong>en</strong>os resultados.“Es una tecnología innovadora<strong>en</strong> el país acorde a loque se está empezando ahacer <strong>en</strong> el resto delmundo” (Ignacio Rintoul).Microcápsulas para controlar fertilidad


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 17“Hasta el mom<strong>en</strong>to se hicieron pruebasin vitro. Lo que sigue ahora es diseñarcómo producir más cantidad decápsulas para luego probarlas <strong>en</strong> animales”,explica Rintoul.El trabajo se realiza con los aportesde la UNL, el CONICET, elInstituto de Promoción de la CarneVacuna Arg<strong>en</strong>tina (IPCVA), laFundación Nuevo Banco de SantaFe y la BCSF.REPRODUCCIÓN PROGRAMADASi bi<strong>en</strong> el 90 por ci<strong>en</strong>to de la reproducciónanimal <strong>en</strong> el país ocurre sininterv<strong>en</strong>ción humana, cada vez existeun mayor interés por estrategias y tecnologíasque ayud<strong>en</strong> a aum<strong>en</strong>tar laproducción de carne.En este s<strong>en</strong>tido, controlar el celoes una manera de sincronizar alganado y lograr mejorami<strong>en</strong>to g<strong>en</strong>ético(utilizando sem<strong>en</strong> seleccionado)mi<strong>en</strong>tras se minimizan los tiempos, ypor lo tanto los costos, de la interv<strong>en</strong>ciónde veterinarios.Naturalm<strong>en</strong>te, las vacas no sincronizansus celos. “Es una estrategiade la especie para garantizar lasuperviv<strong>en</strong>cia y lograr superar condicionesclimáticas desfavorables”,explica.El hecho de que las pariciones de losterneros se d<strong>en</strong> <strong>en</strong> distintos tiemposimplica que es muy costoso, y muchasveces imposible, darle la at<strong>en</strong>ción veterinariaóptima.“Si se sincronizan los celos es posiblehacer todas las inseminacionessimultáneam<strong>en</strong>te, vacunar a los ternerosy programar sus pasturas de maneramucho más efici<strong>en</strong>te”, destaca.Naturalm<strong>en</strong>te, las vacasno sincronizan sus celos.Controlarlo es una manerade sincronizar al ganadoy lograr el mejorami<strong>en</strong>tog<strong>en</strong>ético.Microcápsulas para controlar fertilidad


18 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Persist<strong>en</strong>cia del herbicida imazapir <strong>en</strong>el suelo y efectos fitotóxicos sobre cultivosde invierno y de veranoGIANELLI, V. 1 ; BEDMAR, F. 2 ; y MONTERUBBIANESI, M.G .2RESUMENImazapir es un herbicida de amplio espectro de control, pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>te al grupo químico de las imidazolinonas.En Arg<strong>en</strong>tina es aplicado a gran escala <strong>en</strong> los cultivos de girasol y maíz Clearfield. Debido a suacción residual <strong>en</strong> el suelo, resulta de gran importancia determinar su persist<strong>en</strong>cia fitotóxica. El objetivo deeste trabajo fue determinar la persist<strong>en</strong>cia fitotóxica sobre cultivos de invierno y de verano, de dos dosisde imazapir aplicado <strong>en</strong> un cultivo de girasol Clearfield. El <strong>en</strong>sayo se realizó <strong>en</strong> un suelo franco-arcillosode Balcarce (Pcia. de Bu<strong>en</strong>os Aires), sigui<strong>en</strong>do un diseño experim<strong>en</strong>tal <strong>en</strong> bloques completos aleatorizadoscon cuatro repeticiones. Los tratami<strong>en</strong>tos consistieron <strong>en</strong> la aplicación de imazapir <strong>en</strong> dosis de 80 y160 g de ingredi<strong>en</strong>te activo (i.a)/ha, incluyéndose un testigo sin tratar. Luego de la cosecha del girasol(marzo de 2003), se obtuvieron muestras de suelo m<strong>en</strong>sualm<strong>en</strong>te. Posteriorm<strong>en</strong>te, se efectúo un bio<strong>en</strong>sayo<strong>en</strong> cámara de crecimi<strong>en</strong>to con trigo, colza, girasol y maíz no tolerantes. Paralelam<strong>en</strong>te, se sembró acampo maíz y girasol no tolerantes a imidazolinonas y papa, determinándose el r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to. Los resultadosfueron analizados mediante un análisis de la varianza (p = 0.05). La persist<strong>en</strong>cia fitotóxica <strong>en</strong> el bio<strong>en</strong>sayosiguió el ord<strong>en</strong> trigo > colza > girasol = maíz. A campo, ninguno de los cultivos evaluados mostró efectosnegativos, indicando que no existió efecto residual sobre ellos.Palabras clave: imidazolinonas, bio<strong>en</strong>sayo, residualidad, clearfield.ABSTRACTImazapyr is an herbicide with broad-spectrum of control, belonging to the imidazolinone chemical family.In Arg<strong>en</strong>tine it is used on imidazolinone-tolerant corn and sunflower (Clearfield). Because of imazapyr possesshigh activity in soil, is very important to determine its persist<strong>en</strong>ce. The objective of this study was todetermine the phytotoxic persist<strong>en</strong>ce of two doses of imazapyr applied on Clearfield sunflower, through ofits phytotoxic effect on winter and summer crops. The experim<strong>en</strong>t was performed in a clay loam soil ofBalcarce (Bs.As. province). Treatm<strong>en</strong>ts were arranged in a completely randomized design with four replications.Treatm<strong>en</strong>ts consisted in spraying of imazapyr at 80 and 160 g of active ingredi<strong>en</strong>t (a.i)/ha, includinga non-treated control. After sunflower harvest (march 2003), monthly samples of soil were collected.At the <strong>en</strong>d of sampling, a bioassay with wheat, canola and non-tolerant sunflower and corn was done.Besides the bioassays, non-tolerant to imidazolinones corn, sunflower and potato were seeded on the field,and their yield was measured. Data were subjected to analysis of variance (p = 0.5). The phytotoxic persist<strong>en</strong>ceperiod followed the order wheat > canola > corn = sunflower. At field, no crop showed negativeeffect to the application of imazapyr, indicating no residual effect of imazapyr on them.Key words: imidazolinone, bioassay, carryover, Clearfield.1 Estación Experim<strong>en</strong>tal Agropecuaria, Balcarce. Ruta 226 Km 73,5. Balcarce. Correo electrónico: vgianelli@balcarce.inta.gov.ar2 Facultad de Ci<strong>en</strong>cias Agrarias, Universidad Nacional de Mar del Plata. Correo electrónico: fbedmar@balcarce.inta.gov.arRecibido 03 de septiembre// Aceptado 26 de noviembre// Publicado online 15 de diciembrePersist<strong>en</strong>cia del herbicida imazapir <strong>en</strong> el suelo y efectos fitotóxicos sobre cultivos de invierno y de verano


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 19INTRODUCCIÓNLa persist<strong>en</strong>cia de un herbicida <strong>en</strong> el suelo puededefinirse como el período de tiempo durante el cual permanece<strong>en</strong> forma activa <strong>en</strong> el mismo (Comfort et al.,1994). Este proceso es extremadam<strong>en</strong>te importantedebido a que determina la longitud de tiempo que se<strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra <strong>en</strong> el ambi<strong>en</strong>te, el período <strong>en</strong> que pued<strong>en</strong>esperarse efectos fitotóxicos sobre las malezas y eltiempo que debería esperarse para evitar daños a loscultivos subsecu<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> la rotación (Ashton y Mónaco,1991). La persist<strong>en</strong>cia de un herbicida <strong>en</strong> el suelo estáregulada por una serie de complejos procesos <strong>en</strong>tre losque se cu<strong>en</strong>tan la degradación (descomposición química,microbiana y fotodescomposción), la ret<strong>en</strong>ción(adsorción por los coloides del suelo) y el transporte(lixiviación, volatilización, escurrimi<strong>en</strong>to superficial yabsorción por las plantas) (Hance and Holly, 1990).Asimismo, la persist<strong>en</strong>cia es influ<strong>en</strong>ciada por las condicionesdel suelo (textura, cont<strong>en</strong>ido de materia orgánica,nutri<strong>en</strong>tes, cationes y pH), del ambi<strong>en</strong>te (temperatura,humedad y luz solar) y del plaguicida (solubilidad <strong>en</strong>agua, coefici<strong>en</strong>te de partición <strong>en</strong> adsorción, presión devapor y naturaleza química) (Ashton y Mónaco, 1991;Hager et al., 2000).Imazapir es un herbicida de amplio espectro de control,pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>te a la familia química de las imidazolinonas.Actualm<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> Arg<strong>en</strong>tina este herbicida se aplica agran escala <strong>en</strong> los cultivos de girasol y maíz, gracias aldesarrollo de la tecnología Clearfield, la cual introdujo laresist<strong>en</strong>cia g<strong>en</strong>ética de los híbridos de estos cultivos alos herbicidas imidazolinonas mediante un proceso deselección g<strong>en</strong>ética natural no transgénica. Según losanteced<strong>en</strong>tes, imazapir no es fácilm<strong>en</strong>te degradado <strong>en</strong> elsuelo y puede ser muy persist<strong>en</strong>te, dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do del tipode suelo, condiciones ambi<strong>en</strong>tales y de la dosis de aplicación(Mangels, 1991). Los rangos de vida media <strong>en</strong> elsuelo (tiempo requerido para que el 50% del plaguicidaoriginal aplicado se descomponga <strong>en</strong> otros productos)oscilan <strong>en</strong>tre 25 y 142 días, si<strong>en</strong>do más corta <strong>en</strong> suelosar<strong>en</strong>osos y con temperaturas elevadas (V<strong>en</strong>cill, 2002; Tuet al., 2004). La persist<strong>en</strong>cia de imazapir <strong>en</strong> el suelo esafectada principalm<strong>en</strong>te por la degradación microbiana,no habi<strong>en</strong>do sido reportados otros mecanismos dedegradación (Tu et al., 2004).Debido a que imazapir posee prolongada persist<strong>en</strong>cia<strong>en</strong> el suelo, podría ocasionar problemas de fitotoxicidad<strong>en</strong> la secu<strong>en</strong>cia de cultivos de la rotación, lo cual estárelacionado <strong>en</strong> gran medida a la ocurr<strong>en</strong>cia de lluvias<strong>en</strong>tre la aplicación y siembra del próximo cultivo y a laespecie sembrada (Istilart, 2002; Casafe, 2009).Por lo expuesto, el objetivo del pres<strong>en</strong>te trabajo fueestudiar el efecto de la residualidad post-cosecha deimazapir aplicado <strong>en</strong> un cultivo de girasol Clearfieldsobre algunos cultivos de invierno (trigo, colza) y de verano(girasol y maíz no Clearfield, y papa), sembrados <strong>en</strong>el ciclo sigui<strong>en</strong>te a campo y mediante el desarrollo de unbio<strong>en</strong>sayo <strong>en</strong> cámara de crecimi<strong>en</strong>to.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSEl <strong>en</strong>sayo se realizó <strong>en</strong> un suelo franco arcilloso (materiaorgánica 4.7%, arcilla 29.6%, limo 41.3%, ar<strong>en</strong>a 29.2% y pH 5.7) de Balcarce, Pcia. de Bu<strong>en</strong>os Aires,Arg<strong>en</strong>tina, 37o45'S, 58o18'O. El experim<strong>en</strong>to se establecióbajo un diseño <strong>en</strong> bloques completos al azar con cuatrorepeticiones. El 25 de noviembre de 2002 se realizóla siembra de girasol Clearfield, con sistema de siembraconv<strong>en</strong>cional. Los tratami<strong>en</strong>tos consistieron <strong>en</strong> la aplicaciónde imazapir, Ars<strong>en</strong>al, BASF Arg<strong>en</strong>tina, formulacióncomercial de Conc<strong>en</strong>trado Soluble (SL) al 25% de ingredi<strong>en</strong>te,<strong>en</strong> dosis simple y doble (80 y 160 g ia/ ha), incluyéndoseun testigo sin tratar. Los tratami<strong>en</strong>tos se aplicaronel 20 de diciembre de 2002 cuando el girasol pres<strong>en</strong>taba4 hojas desarrolladas (V4), utilizando una mochilamanual de presión constante (38 lb/pulg2), a base deCO2 provista de pastillas Teejet 110015 VS tipo abanicoplano desuniforme que arrojó un volum<strong>en</strong> de 162litros/ha. A continuación de la cosecha del girasol (marzode 2003), se realizaron un bio<strong>en</strong>sayo <strong>en</strong> cámara de crecimi<strong>en</strong>toy un <strong>en</strong>sayo a campo.1. Bio<strong>en</strong>sayo <strong>en</strong> cámara de crecimi<strong>en</strong>toLuego de la aplicación de los tratami<strong>en</strong>tos (dosis normal,dosis doble y testigo), se realizaron muestreos delsuelo previam<strong>en</strong>te caracterizado, a los 104, 138, 168,207, 235, 266 y 298 días desde la aplicación del herbicida(DDA), incluy<strong>en</strong>do los tres tratami<strong>en</strong>tos. Las condicionesclimáticas desde la aplicación y durante la extracciónde las muestras se pres<strong>en</strong>tan <strong>en</strong> la figura 1.Los muestreos se efectuaron con muestreador desuelo, a 12 cm de profundidad, realizándose 15 repiquespor parcela. Las muestras se condujeron a freezer hastasu procesami<strong>en</strong>to. Al finalizar, los muestreos se descongelarony se tamizaron con tamiz de 0.5 cm de malla. Elsuelo se ubicó <strong>en</strong> vasos de plástico (cantidad equival<strong>en</strong>tea aproximadam<strong>en</strong>te 200 g de suelo seco) y <strong>en</strong> noviembrede 2003, se realizó la siembra de girasol "Morgan MG 50",maíz, "Asgrow 160 MG" (Bt), trigo "Baguette 10" y colza"Eclipse", disponiéndose 2, 2, 3 y 5 semillas respectivam<strong>en</strong>te.Los vasos se condujeron a cámara de crecimi<strong>en</strong>tobajo condiciones controladas de temperatura (20ºCnoche y 25ºC día), humedad (50%) y luz (fotoperíodo 14h) y se realizó riego superficialm<strong>en</strong>te mant<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do elsuelo a 80% de capacidad de campo. Cuando las plantasalcanzaron un estado de crecimi<strong>en</strong>to establecido (tabla 1)se realizaron determinaciones de altura y peso seco de laparte aérea de las mismas. Para la determinación delpeso seco, previam<strong>en</strong>te se cortaron las plantas y se condujerona estufa a 60ºC durante 72 horas.GIANELLI, V. 1 ; BEDMAR, F. 2 ; y MONTERUBBIANESI, M.G. 2


20 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Figura 1. Precipitaciones, temperaturas máxima, media y mínima durante el período aplicación-extracción de muestras (Información agrometeorológicacorrespondi<strong>en</strong>te a la base de datos diarios de precipitaciones, temperatura máxima, mínima y media de la EEA <strong>INTA</strong> Balcarce).Tabla 1. Estado de crecimi<strong>en</strong>to para la determinación de la altura y el corte de las plantas de girasol, maíz, trigo y colza.Los datos se analizaron a través de un análisis de lavarianza, mediante el programa SAS, considerándoseun diseño <strong>en</strong> bloques completos al azar <strong>en</strong> parcelas divididasy 4 repeticiones. La parcela principal correspondióal factor tratami<strong>en</strong>to con tres niveles: dosis normal, dobley testigo. En la subparcela se consideraron las fechascorrespondi<strong>en</strong>tes a los DDA. Para cada cultivo se analizóla interacción <strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tos y los DDA. En loscasos <strong>en</strong> que no existió interacción se analizaron losefectos principales de los tratami<strong>en</strong>tos y de los DDA. Lascomparaciones <strong>en</strong>tre medias se realizaron <strong>en</strong> base aMínima Difer<strong>en</strong>cia Significativa (MDS) al 5%.2. Ensayo a campoEn el mismo lote referido al comi<strong>en</strong>zo, se realizó lasiembra de maíz y girasol no Clearfield y papa. Las fechasde siembra y cultivares se muestran <strong>en</strong> la tabla 2. En preemerg<strong>en</strong>ciade los cultivos se aplicaron herbicidas a fin deevitar que la compet<strong>en</strong>cia de las malezas <strong>en</strong>mascararalos posibles efectos de los residuos de imazapir <strong>en</strong> elsuelo. Los herbicidas y dosis aplicadas fueron: 1) girasol:acetoclor + flurocloridona (1.08 + 0.3 kg i.a./ha), 2) maíz:acetoclor + atrazina (2.25 + 1.25 kg i.a./ha), 3) papa: s-metolacloro + metribuzin (0.96 + 0.72 kg i.a./ha).Se realizaron observaciones de fitotoxicidad hasta lacosecha y posteriorm<strong>en</strong>te se determinó el número deplantas y de espigas, r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to y humedad <strong>en</strong> maíz;número de plantas, r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to y humedad <strong>en</strong> girasol ypeso de papa semilla (< 60 gr), recibo (> 60g) y total, <strong>en</strong>el cultivo de papa. Para el análisis de los datos se realizóun análisis de la varianza y se efectuó la comparación<strong>en</strong>tre medias <strong>en</strong> base a MDS al 5% <strong>en</strong> cada cultivo ypara cada una de las variables evaluadas.Tabla 2. Cultivos, cultivares, fecha de siembra y cosecha del <strong>en</strong>sayo a campo.Persist<strong>en</strong>cia del herbicida imazapir <strong>en</strong> el suelo y efectos fitotóxicos sobre cultivos de invierno y de verano


22 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À11.3. MaízNo se detectó interacción <strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tos y losDDA para la altura relativa (p=0,961) ni para el pesoseco relativo (p=0.274). Tampoco se detectó efecto delos tratami<strong>en</strong>tos ni de los DDA (p= 0,660), registrándose<strong>en</strong> todas las fechas de muestreo valores próximos al100% del testigo (figuras 6 y 7).Figura 6. Evolución de la altura relativa (promedio +/- error estándar)de maíz sembrado <strong>en</strong> suelo tratado con dosis dormal y doblede imazapir.Figura 8. Evolución de la altura relativa (promedio +/- error estándar)de trigo sembrando <strong>en</strong> suelo tratado previam<strong>en</strong>te con dosisnormal y doble de imzapir. D<strong>en</strong>tro de cada dosis letras minúsculasiguales indican difer<strong>en</strong>cias no significativas (MDS, P>0.05). D<strong>en</strong>trode cada fecha de muestreo letras mayúsculas iguales indican difer<strong>en</strong>ciasno significativas (MDS, P>0.05).Figura 7. Evolución del peso relativo (promedio +/- error estándar)de maíz sembrado <strong>en</strong> suelo tratado con dosis dormal y doble deimazapir.Figura 9. Evolución del peso relativo (promedio +/- error estándar)de trigo sembrado <strong>en</strong> suelo tratado con dosis dormal y doble deimazapir.1.4. TrigoPara la altura relativa se halló interacción significativa<strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tos y los DDA (p= 0,001). En ambasdosis se registró una reducción por un periodo de 266DDA <strong>en</strong> la dosis normal y de 138 DDA <strong>en</strong> la dosis doble.Se observó mayor reducción inicial de la altura con ladosis doble hasta los 168 DDA con respecto a la dosis normal(figura 8). Respecto al peso seco relativo no se detectóinteracción significativa <strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tos y los DDA(p=0.904). No se comprobó efecto de los tratami<strong>en</strong>tos,mi<strong>en</strong>tras que sí se <strong>en</strong>contró efecto de los DDA (p=0.059).En ambos tratami<strong>en</strong>tos se observó una reducción <strong>en</strong> elpeso seco del ord<strong>en</strong> del 25 y 53% con respecto al testigohasta los 138 DDA. En las fechas sigui<strong>en</strong>tes, el peso secorelativo se vio increm<strong>en</strong>tado significativam<strong>en</strong>te, sin embargo,<strong>en</strong> ninguna de ellas se lograron alcanzar valores equival<strong>en</strong>tesal 100% del testigo (figura 9).2. Experim<strong>en</strong>tos a campoNo se observaron efectos fitotóxicos de imazapir sobrelos cultivos a lo largo de su ciclo. Coincid<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te, elr<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to de los cultivos no fue afectado por ningunade las dosis evaluadas (p > 0.05), indicando que no existieronefectos residuales del herbicida sobre estos cultivos.En cuanto a las restantes variables analizadas, tampocose registraron difer<strong>en</strong>cias significativas (p > 0.05)<strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tos químicos y el testigo, excepto <strong>en</strong> lavariedad de papa K<strong>en</strong>nebec <strong>en</strong> la cual se hallaron difer<strong>en</strong>ciassignificativas <strong>en</strong> las tres variables evaluadasdebido a que las parcelas tratadas superaron al testigoEn la tabla 3 se pres<strong>en</strong>tan los valores medios obt<strong>en</strong>idospara las variables evaluadas <strong>en</strong> Girasol y Maíz y <strong>en</strong> latabla 4, el r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to promedio de semilla, recibo y total<strong>en</strong> papa variedades Innovator y K<strong>en</strong>nebec.Persist<strong>en</strong>cia del herbicida imazapir <strong>en</strong> el suelo y efectos fitotóxicos sobre cultivos de invierno y de verano


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 23Tabla 3. Valores medios abt<strong>en</strong>idos para las varieables evaluadas <strong>en</strong> Girasol y Maíz.Tabla 4. R<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to promedio de semilla, recibo y total <strong>en</strong> papa variedades Innovator y K<strong>en</strong>nebec (Kg/ha).DISCUSIÓNLos períodos de residualidad oscilaron <strong>en</strong>tre 138 y 266DDA para trigo y desde 138 hasta 207 DDA para colza,mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> girasol y maíz no se detectó efecto residual.Estos datos demuestran que el trigo fue la especiemás s<strong>en</strong>sible, seguido por la colza y ubicándose <strong>en</strong> últimolugar el girasol y el maíz. Ulbrich, Souza y Shaner (2005),determinaron que el maíz fue más s<strong>en</strong>sible que el trigo,mi<strong>en</strong>tras que Alister y Kogan (2004) reportaron una situacióninversa, manifestando que el maíz fue el cultivo mástolerante a imazapir. Los valores de residualidad determinados<strong>en</strong> este trabajo son muy superiores a lo <strong>en</strong>contradopor Ulbrich et al., (2005) <strong>en</strong> trigo, qui<strong>en</strong>es obtuvieronun período de 91 y 97 días <strong>en</strong> un <strong>en</strong>sayo a campo.Para girasol y maíz no se <strong>en</strong>contraron reducciones <strong>en</strong>el crecimi<strong>en</strong>to <strong>en</strong> ninguna de las fechas de muestreo, ytampoco se obtuvieron variaciones <strong>en</strong>tre dosis. Estosresultados concuerdan con lo señalado por Alister yKogan (2004), si bi<strong>en</strong> Bovey y S<strong>en</strong>seman (1998) <strong>en</strong>contraronque <strong>en</strong> maíz, imazapir fue fitotóxico doce mesesdespués de su aplicación.Larina et al., (2004) demostraron que la persist<strong>en</strong>ciadep<strong>en</strong>de del cont<strong>en</strong>ido de materia orgánica, pH y de lascondiciones hidrotermales. Varios investigadores (Wehtjeet al., 1987; Mangels, 1991; Tu et al., 2004) determinaronque la adsorción se increm<strong>en</strong>ta con un elevado cont<strong>en</strong>idode materia orgánica <strong>en</strong> el suelo y cuando el pH decrece.En el pres<strong>en</strong>te trabajo, los valores de materia orgánicarelativam<strong>en</strong>te elevada (4.7%) y de pH relativam<strong>en</strong>tebajo (5.7), explicarían los períodos de persist<strong>en</strong>ciam<strong>en</strong>os prolongados determinados. Sin embargo,Ulbrich et al. (2005) establecieron mayor vida media <strong>en</strong>un suelo con mayor cont<strong>en</strong>ido de arcilla y pH más bajoy El Azzouzi et al., (1998) al considerar un suelo lateríticoy un suelo orgánico reportaron mayor persist<strong>en</strong>cia<strong>en</strong> éste último.En el pres<strong>en</strong>te trabajo la aplicación de imazapir se realizó<strong>en</strong> época estival. Por este motivo, se esperaríanmayores tasas de degradación y por <strong>en</strong>de períodos residualesmás cortos por la ocurr<strong>en</strong>cia de mayores temperaturas<strong>en</strong> comparación a los períodos determinados previam<strong>en</strong>tepor otros autores.Otro factor a considerar son las precipitaciones, ya queun déficit hídrico no permitiría obt<strong>en</strong>er apropiadas condiciones<strong>en</strong> el suelo para la degradación microbiana(Alister y Kogan, 2004). Para los cultivos de trigo y colza,las precipitaciones tuvieron gran importancia <strong>en</strong> definir laresidualidad, si<strong>en</strong>do necesarios <strong>en</strong>tre 484,6 y 732,4 mmpara trigo y 484,6 y 635,2 mm para colza. Por tal motivo,las condiciones climáticas post-aplicación serían trasc<strong>en</strong>d<strong>en</strong>tesincrem<strong>en</strong>tando los períodos de residualidad <strong>en</strong>las especies s<strong>en</strong>sibles como trigo y colza, mi<strong>en</strong>tras queel maíz y el girasol no tolerantes no se vieron afectados,si<strong>en</strong>do las precipitaciones acumuladas al mom<strong>en</strong>to delprimer muestreo de 423,3 mm.GIANELLI, V. 1 ; BEDMAR, F. 2 ; y MONTERUBBIANESI, M.G. 2


24 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Por otra parte, la residualidad puede variar con la dosisde aplicación. No obstante, Wang et al., (2005) demostraronque el aum<strong>en</strong>to de la dosis no increm<strong>en</strong>taba lapersist<strong>en</strong>cia, <strong>en</strong> concordancia con Alister y Kogan (2004)y coincid<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te con este <strong>en</strong>sayo, donde los cultivosmás s<strong>en</strong>sibles (trigo y colza) fueron más afectados por ladosis normal <strong>en</strong> comparación con la doble.Un aspecto a considerar, es que <strong>en</strong> este trabajo seevaluaron los primeros 12 cm de profundidad del suelo,por lo que los resultados podrían diferir si se tuviera <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>ta un perfil más profundo. En tal s<strong>en</strong>tido, Mc Dowellet al., (1997) <strong>en</strong>contraron residuos a 25 cm de profundidaddespués de 3 meses desde la aplicación. Tal situaciónpodría ser riesgosa si se considera que las raíces decultivos s<strong>en</strong>sibles podrían alcanzar capas subsuperficialescon pres<strong>en</strong>cia de residuos de imazapir como productodel proceso de lixiviación.En los cultivos sembrados a campo los r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos delas parcelas aplicadas previam<strong>en</strong>te con imazapir fueronsuperiores al testigo, indicando que no existieron efectosresiduales del herbicida. Asimismo, ninguna de las variablesanalizadas <strong>en</strong> cada cultivo mostró efectos negativos.Estos resultados concuerdan con lo observado por Alistery Kogan (2004) <strong>en</strong> maíz, careciéndose de anteced<strong>en</strong>tescon respecto a los restantes cultivos. Las precipitacionesacumuladas desde la aplicación del herbicida hasta lasiembra de los cultivos oscilaron <strong>en</strong>tre 883 y 893 mm. Deesta forma se podría inferir que las condiciones climáticashabrían sido favorables para la degradación del herbicida<strong>en</strong> el suelo y que sería factible la siembra de estos cultivosal año sigui<strong>en</strong>te de la aplicación de imazapir bajo lascondiciones de este experim<strong>en</strong>to.CONCLUSIONESLa persist<strong>en</strong>cia fitotóxica de imazapir varió según el cultivo,dosis empleada y variable analizada. En el bio<strong>en</strong>sayo,los períodos de residualidad siguieron el ord<strong>en</strong> trigo >colza > girasol = maíz. No existió efecto de la dosis sobreel girasol y maíz, mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> trigo y colza se observaronalgunas difer<strong>en</strong>cias de s<strong>en</strong>sibilidad <strong>en</strong>tre la dosisnormal y la doble dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do de la variable evaluada yel mom<strong>en</strong>to de muestreo. Luego de la aplicación de imazapirsobre girasol tolerante, el trigo requirió un períodomínimo de aplicación-siembra de <strong>en</strong>tre 5 y 9 meses y de500 a 730 mm de lluvias distribuidos durante el período yla colza de 5 a 7 meses y de 500 a 635 mm de precipitaciones.El girasol y maíz no Clearfield no pres<strong>en</strong>taronperíodo de residualidad alguno. En el <strong>en</strong>sayo a campo, elgirasol y maíz no tolerantes a imidazolinonas, así como lapapa, no fueron afectados por la pres<strong>en</strong>cia de residuos deimazapir <strong>en</strong> el suelo. Sería recom<strong>en</strong>dable que los futurosestudios que abord<strong>en</strong> esta problemática, t<strong>en</strong>gan <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>tala posible pres<strong>en</strong>cia de residuos de imazapir <strong>en</strong> lascapas de suelo subsuperficiales, lo cual permitiría determinarefectos fitotóxicos que podrían producirse <strong>en</strong> etapasavanzadas de los cultivos.BIBLIOGRAFÍAALISTER, C. and KOGAN, M. 2004. Eficacy of imidazolinoneherbicides to imidazolinone-resist<strong>en</strong>t maize andtheir carryover effect on rotacional crops. Crop protection.24 (4): 375-379.ASHTON, F.M. and MONACO, T. 1991. Weed sci<strong>en</strong>ce.Principles and Practices. 3º ed. A Wiley-intersci<strong>en</strong>cePersist<strong>en</strong>cia del herbicida imazapir <strong>en</strong> el suelo y efectos fitotóxicos sobre cultivos de invierno y de verano


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 25publication. John Wiley & Sons, inc. New York.Chichester. Brisbane. Toronto. Singapure. 466 p.BOVEY, R.W. and SENSEMAN, S.A. 1998. Responseof food and forage crops to soil - applied imazapyr. Weedsci<strong>en</strong>ce. 46: 614-617.CASAFE, 2009. Guía de Productos Fitosanitarios parala República Arg<strong>en</strong>tina. Cámara de sanidad agropecuariay fertilizantes. 12º ed. 1600 p.COMFORT, S.D.; SHEA, P.J.; ROETH, F.W. 1994.Understanding pesticides and water quality in Nebraska.Nebraska Co-operative Ext<strong>en</strong>sion EC 94-135, USA. 16p.EL AZZOUZI, M., DACHOUR, A., BOUHAOUSS, A.and FERHAT, M. 1998. Study on the behaviour of imazapirin two Moroccan soils. Weed Research. 38: 217-220.HAGER, A., SPRAGUE, C. and MC GLAMERY, M.2000. Factors affecting herbicide persist<strong>en</strong>ce. Agriculturalpest managem<strong>en</strong>t handbook. Illinois. 323-326.HANCE, R.J. and HOLLY, K. 1990. Weed control handbookprinciples. 8º ed. Blackwell sci<strong>en</strong>tific publications.Oxford London Edinburh. Boston Melbourne. 582 p.Información agrometeorológica. Base de datos diariosde precipitaciones, temperatura máxima, mínima ymedia. <strong>INTA</strong> Balcarce, Arg<strong>en</strong>tina (http://www.intabalcarce.org/.Verificado: 07/08/2010).ISTILART, 2002. Residualidad de imidazolinonas sobrecereales de invierno. <strong>INTA</strong>, Arg<strong>en</strong>tina(http://www.inta.gov.ar. Verificado: 04/08/2010).LARINA, G.E. and SPIRIDOV, Y.Y. 2004. The effect ofphysicochemical propierties and the hidrotermal regimeof soil on the detoxification of imidazolinone herbicide.Russia research Institute of phytopathology, RussianAcademy of Agricultural Sci<strong>en</strong>ces.MANGELS, G. 1991. Behaviour of the imidazolinoneherbicides in soil-a review of the literature. In: Shaner,D.L. and O'Conner, S.L. eds. The ImidazolinoneHerbicides. Boca Raton, FL:CRC press. pp. 191-209.MC DOWELL, R.W., CONDRON, L.M., MAIN, B.E. andDASTGHEIB, F. 1997. Dissipation of imazapir, flumetsulamand thif<strong>en</strong>sulfuron in soil. Weed Research. 37: 381-389.TU, H. 2004. Weed Control Methods Handbook, theNature Conservancy. (http://tncweeds.ucdavis.edu .Verificado:11/07/2010).ULBRICH, A.V., SOUZA, R. and SHANER, D.L. 2005.Persist<strong>en</strong>ce and carryover effect of imazapic and imazapirin Brazilian cropping systems. Weed Technology. 19(4): 986-991.VENCILL, W.K. 2002. Herbicide Handbook. WSSA.Weed Sci<strong>en</strong>ce Society of America Champaingn. Ilinois.493p. 8.° ed. USA, Lauvi<strong>en</strong>ce.WANG, X., WANG, H. and FAN, D. 2005. Persist<strong>en</strong>ceand metabolismo of imazapyr in four typical soils ofZhejiang Province (China). Internacional Journal ofEnvironm<strong>en</strong>tal and Analitical chemistry. Taylor & Francis.85(2): 99-109.WEHTJE, G., DICKENS, R., WILCUT, J.W. andHAJEK, B.F. 1987. Sorption and mobility of sulfometuronand imazapir in five Alabama soils. Weed sci<strong>en</strong>ce.35: 858-864.GIANELLI, V. 1 ; BEDMAR, F. 2 ; y MONTERUBBIANESI, M.G. 2


26 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Incid<strong>en</strong>cia y control de los nematodesgastrointestinales bovinos <strong>en</strong> el este dela provincia de La Pampa, Arg<strong>en</strong>tinaSUÁREZ, V.H. 1 ; MIRANDA, A.O. 1 ; ARENAS, S.M. 1 ; SCHMIDT, E.E. 2 ; LAMBERT, J. 3 ; SCHIEDA, A. 3 ; FELICE, G. 1 ;IMAS, D. 3 ; SOLA, E. 3 ; PEPA, H. 3 ; BUGNONE, V. 3 ; CALANDRI, H. 3 ; LORDI, L.V. 3 .RESUMENSe efectuó una <strong>en</strong>cuesta transversal <strong>en</strong> 350 establecimi<strong>en</strong>tos de ciclo completo y cría (CC) e invernada(IN) bovina, ubicados el este de la provincia de La Pampa con la finalidad de registrar los casos de gastro<strong>en</strong>teritisverminosa (GEV) y las prácticas de control y manejo utilizadas por los ganaderos. Las muestrasfueron tomadas al azar a partir de 3 estratos de acuerdo al número de exist<strong>en</strong>cias bovinas: productorescon más de 900 (G), de <strong>en</strong>tre 900-500 (M) y de 500 a 300 (P) bovinos. El 33 % de los productores<strong>en</strong>cuestados declaró haber t<strong>en</strong>ido casos clínicos de GEV con una morbilidad y mortalidad del 11.2% y0.42% respectivam<strong>en</strong>te. Se registraron más casos de GEV (P


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 27ABSTRACTA survey were carried out to known the cattle gastrointestinal parasites (GIP) cases and anthelminticsand techniques utilized to control GIP on 350 fatt<strong>en</strong>ing (F) and cow-calf-fatt<strong>en</strong>ing (CF) productivesystems in the east of La Pampa Province. Farms were stratified into three categories on the basis ofherd size (more than 900 (G), betwe<strong>en</strong> 900-500 (M) and less than 500 (P) bovines) and a random sampleselected from each strata. The 33% of owners herds have be<strong>en</strong> GIP clinic cases and a morbidity andmortality of 11.2% y 0.42% respectively. CF (37%) farmers declare more (P


28 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1del 7 al 11% (15-23 kg) según datos previos de Suárezet al. (1999). Esta poca efici<strong>en</strong>cia de conversión de pastoa carne es el efecto más frecu<strong>en</strong>te y se debe a la depresióndel consumo, que puede alcanzar valores del 18 y25% (Parkins y Holmes, 1989; Rossanigo et al., 1988;Suárez et al., 1997), además, de acuerdo a la gravedaddel caso, de afectar el desarrollo óseo y muscular(Entrocasso, 1987; Suárez et al, 1991). También, <strong>en</strong>treotros problemas que provoca, se hallan aquellos relacionadoscon la salud que pued<strong>en</strong> terminar con casos demuerte. Estos casos, aunque impactantes, son poco frecu<strong>en</strong>tes,no pasando la mortandad del 3% por lo g<strong>en</strong>eral.También con m<strong>en</strong>or frecu<strong>en</strong>cia se pued<strong>en</strong> registrar signosclínicos <strong>en</strong> animales que pasan los 18 meses de edad alfinal del verano, causados por desinhibición de Ostertagia,sumados a infestaciones posteriores (Suárez, 1995).El conocimi<strong>en</strong>to y la estimación de casos ocurridosanualm<strong>en</strong>te serían de utilidad para poder evaluar la magnitudde esta afección a nivel regional y llevar a caboacciones t<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes a un mejor control que conduzcan auna mejor efici<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la producción de carne.Por otro lado, la competitividad de la producción decarne <strong>en</strong> base a pasto no podría ser concebida sin elcontrol de los PGI. Esta necesidad de los productoresde carne junto con la sucesiva disponibilidad, durantelos últimos 15 años, de antihelmínticos cada vez máseficaces, simples de dosificar y baratos, motivó casi conseguridad la adopción de éstos últimos como principalherrami<strong>en</strong>ta de los productores para controlar los vermes.Este uso masivo de drogas como casi único recursopara controlar los nematodes probablem<strong>en</strong>te aceleróla selección de poblaciones de nematodes resist<strong>en</strong>tes(Anziani et al., 2004). En el oeste de la región pampeanaha sido descripta una alta preval<strong>en</strong>cia (64%) deresist<strong>en</strong>cia antihelmíntica fr<strong>en</strong>te a las avermectinas yb<strong>en</strong>zimidazoles (Suárez y Cristel, 2006).El conocimi<strong>en</strong>to del manejo ganadero, el tipo de dosificación,los antihelmínticos u otras prácticas utilizadas<strong>en</strong> el control de la gastro<strong>en</strong>teritis verminosa de los bovinos<strong>en</strong> el este de La Pampa son necesarios, pues éstasprácticas, además de b<strong>en</strong>eficiar la productividad, pued<strong>en</strong>g<strong>en</strong>erar residuos <strong>en</strong> los productos vacunos y <strong>en</strong> elmedio ambi<strong>en</strong>te creando la posibilidad de g<strong>en</strong>erar futurasbarreras no arancelarias para el comercio exterior, opued<strong>en</strong> acelerar aún más la aparición de resist<strong>en</strong>ciaantihelmíntica. Además, estos conocimi<strong>en</strong>tos sonimportantes para los organismos oficiales <strong>en</strong> la formulaciónde proyectos de investigación y transfer<strong>en</strong>cia opara fijar políticas ganaderas para la industria <strong>en</strong> la formulaciónde productos, formas de dosificación y estimarlos alcances de mercado, etc.Debido a estos motivos se realizó una <strong>en</strong>cuesta dirigidaa los ganaderos del este de La Pampa para obt<strong>en</strong>erinformación básica respecto a la incid<strong>en</strong>cia y el controlde los nematodes gastrointestinales bovinos <strong>en</strong> laproducción de carne bovina.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSLa <strong>en</strong>cuesta fue realizada por personal de la EstaciónExperim<strong>en</strong>tal Agropecuaria del <strong>INTA</strong> Anguil y de laSubsecretaría de Asuntos Agrarios de la provincia de LaPampa <strong>en</strong>tre mayo y julio del 2004. Las <strong>en</strong>cuestas se realizaron<strong>en</strong> la zona este de La Pampa, <strong>en</strong> los departam<strong>en</strong>tosde Atreucó, Catriló, Capital, Quemú-Quemú, Conhelo,Maracó, Tr<strong>en</strong>el, Rancul, Realicó y Chapaleufú, cuya actividadganadera principal es ciclo completo, con establecimi<strong>en</strong>tosque realizan invernada y <strong>en</strong> m<strong>en</strong>or medida cría.Además de la respuesta de los productores, las explotacionesse dividieron <strong>en</strong> dos grupos, de acuerdo a la proporciónde animales adultos (vacas y toros) o jóv<strong>en</strong>es y el<strong>en</strong>gorde que poseían: <strong>en</strong> ciclo completo y cría (CC > 9%de adultos) o invernada (IN > 95% categorías jóv<strong>en</strong>es).Las explotaciones agropecuarias se agruparon de acuerdoa la cantidad de animales, conformándose 3 estratos:1. er estrato (P) productores con 300 a 500 cab., 2. doestrato (M) con aquellos productores que pose<strong>en</strong> de 500 a900 cab. y 3. er estrato (G) con aquellos de más de 900cabezas. La cantidad de establecimi<strong>en</strong>tos a <strong>en</strong>cuestar pordepartam<strong>en</strong>to y estrato será proporcional al tamaño deestos y se establecerá, para estimar la probabilidad deocurr<strong>en</strong>cia, un nivel de confianza del 5% (Cochran, 1997).La <strong>en</strong>cuesta relevó datos de la explotación tales comonúmero de bovinos, hectáreas ganaderas, actividadprincipal y datos sobre los nematodes gastrointestinales(NGI) <strong>en</strong> particular. Estos compr<strong>en</strong>dieron si tuvieroncasos de gastro<strong>en</strong>teritis verminosa, y las metodologíasde control y antihelmínticos utilizados.Para los casos de gastro<strong>en</strong>teritis verminosa, se registróla pres<strong>en</strong>cia o aus<strong>en</strong>cia de casos <strong>en</strong> los últimos dosaños, de ser positiva la respuesta la morbilidad, mortalidady gravedad de los casos, categoría, raza de losafectados y <strong>en</strong> que época del año y tipo de potrero <strong>en</strong>el que ocurrieron los casos.También se recabó información sobre la rutina <strong>en</strong>cuanto a frecu<strong>en</strong>cia de tratami<strong>en</strong>tos, época de trata-Incid<strong>en</strong>cia y control de los nematodes gastrointestinales bovinos <strong>en</strong> el Este de la provincia de La Pampa, Arg<strong>en</strong>tina


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 29mi<strong>en</strong>tos, categorías tratadas, vía de dosificación y tipode antihelmínticos usados. La vía de dosificación seclasificó <strong>en</strong> inyectable, oral o intrarruminal y/o sus combinacionesa lo largo del ciclo productivo. Los antihelmínticosse dividieron <strong>en</strong> avermectinas, b<strong>en</strong>zimidazolesy levamisol o sus combinaciones <strong>en</strong> el trascurso de larecría o <strong>en</strong>gorde. Al referirse al término "combinación"se dice que una práctica o droga se aplica <strong>en</strong> unmom<strong>en</strong>to y luego a lo largo del año se aplica otra <strong>en</strong>otro mom<strong>en</strong>to, siempre <strong>en</strong> formas separadas.Se pidió información acerca si consultaba al asesorveterinario, si realizaba diagnóstico a través del conteode huevos <strong>en</strong> materia fecal (hpg) y si t<strong>en</strong>ía un planestratégico de control de NGI y si llevaba a cabo unseguimi<strong>en</strong>to de los vermes a través de hpg.Se solicitó también información sobre la importanciaque le asignaba a los NGI y qué <strong>en</strong>fermedades considerabade mayor importancia <strong>en</strong> su explotación.Figura 1. Porc<strong>en</strong>taje de animales jóv<strong>en</strong>es (terneros/as, recría, novillosy vaquillonas) a partir de las <strong>en</strong>cuestas realizadas <strong>en</strong> los departam<strong>en</strong>tos:Atreucó, Catriló, Capital, Quemú-Quemú, Conhelo,Maracó, Tr<strong>en</strong>el, Rancul, Realicó y Chapaleufú.Para el análisis estadístico se utilizaron, <strong>en</strong> primerainstancia, técnicas descriptivas y medidas de asociacióncomo riesgo relativo (RR) de acuerdo a factorescomo número de ganado establecimi<strong>en</strong>tos con más (A)o m<strong>en</strong>os (B) de 610 bovinos, sistemas de producción(CC o IN) o carga animal. También se realizó un análisisfactorial de correspond<strong>en</strong>cia múltiple (Dagnelli,1975) utilizando el programa estadístico STAT-ITCF(1988) para compr<strong>en</strong>der con mayor precisión la relación<strong>en</strong>tre los factores docum<strong>en</strong>tados.RESULTADOSSe <strong>en</strong>cuestaron un total de 350 establecimi<strong>en</strong>tos ganaderosque sumaron <strong>en</strong> total 250.841 ha (promedio: 717ha) y una exist<strong>en</strong>cia de 327.920 vacunos (promedio: 937cabezas). El 63% de los sistemas bovinos estaba dedicadoal ciclo completo, el 33 % a la invernada y sólo el 4%a la cría. La figura 1 muestra la ubicación de los departam<strong>en</strong>tosy de los establecimi<strong>en</strong>tos muestreados de acuerdoal porc<strong>en</strong>taje de categorías bovinas jóv<strong>en</strong>es.Figura 2. Casos de gastro<strong>en</strong>teritis verminosa declarados <strong>en</strong> la<strong>en</strong>cuesta.Casos de gastro<strong>en</strong>teritis verminosa (GEV): 113 propietarios(33%) declararon haber t<strong>en</strong>ido casos clínicosde GEV de leves o moderados (28%) a graves (5%),estos se hallan posicionados <strong>en</strong> todos los departam<strong>en</strong>tosmuestreados (fig. 2). En los casos leves el promediode morbilidad alcanzó el 8.3% de la tropa afectada y <strong>en</strong>los graves el 27.9%, aunque <strong>en</strong> estos últimos además<strong>en</strong> promedio los productores declararon haber sufridoun 2.1% de mortalidad. Los casos involucran las categoríasjóv<strong>en</strong>es como terneros (59%) únicam<strong>en</strong>te o ternerosy novillitos o vaquillonas (35%). Sólo el 6% de los<strong>en</strong>cuestados declaró haber t<strong>en</strong>ido casos leves de GEV<strong>en</strong> animales como novillos o vacas, además de los másjóv<strong>en</strong>es. En la mayor parte de los casos se trata de bovinosde razas británicas o sus cruzas (95%), aunque <strong>en</strong>un 5% de los casos involucraban animales con sangrecebú. Los problemas se produjeron <strong>en</strong> el 87% de loscasos desde abril a principios de octubre, aunque deeste período el 40% se ubicó de junio a agosto. En elperíodo que va desde mediados de <strong>en</strong>ero a marzo un5% de propietarios declararon t<strong>en</strong>er problemas. El 66%de los casos se produjo sobre pasturas implantadas,SUÁREZ, V.H. 1 ; MIRANDA, A.O. 1 ; ARENAS, S.M. 1 ; SCHMIDT, E.E. 2 ; LAMBERT, J. 3 ; SCHIEDA, Y OTROS


30 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1implantadas, mi<strong>en</strong>tras que el 26% y 8% restante sobreverdeos o rastrojos y sobre pastizal natural respectivam<strong>en</strong>te.En estos casos declarados el 58% de los productoresusaba pastoreo rotativo. Al discriminar por sistemaproductivo, se registraron más casos de GEV(P


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 31Cuadro 2: Antihelmínticos aplicados, modo y frecu<strong>en</strong>cia de utilización de acuerdo a lo declarado por los productores <strong>en</strong>cuestados segúnnúmero de exist<strong>en</strong>cias (productores de más de 900 cabezas: G, de más de 500 cab.: M y de m<strong>en</strong>os de 500 cabezas: P) y tipo de sistemaproductivo (Invernada: IN y Ciclo completo y cría: CC)AVM: avermectina; BZD:b<strong>en</strong>zimidazol; LVM: levamisol; trat: tratami<strong>en</strong>toproductores pudo indicar qué antihelmíntico usaba.Entre éstos, el 94% utiliza avermectinas como drogaúnica (71%) o combinada con otros principios activosque son aplicados <strong>en</strong> alguna otra oportunidad a travésdel año. El 53% utiliza ivermectinas (IVM) solas y el12% doramectina g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te combinada a lo largodel año con AVM o BZD. Nadie declaró aplicar moxidectinao abamectina. Los BZD se utilizaron mayorm<strong>en</strong>tecombinados (20%) (principalm<strong>en</strong>te con AVM), aunqueun 6% de los propietarios los aplica <strong>en</strong> forma exclusiva.El ricob<strong>en</strong>dazol inyectable g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te combinado esaplicado <strong>en</strong> el 8% de los campos <strong>en</strong>cuestados. LVMinyectable es usado combinado con otros principiosactivos a lo largo del año <strong>en</strong> sólo el 3% de los rodeos.Se observaron difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong>tre productores de más (A)de 610 bovinos con respecto al resto de inferior númerode exist<strong>en</strong>cias (B), ya que los A (29%) combinaron <strong>en</strong>mayor porc<strong>en</strong>taje las AVM con otras drogas (BZD yLVM) que los productores B (15%). Al ver por estratos(cuadro 2) se observa que a mayor número de ganado,SUÁREZ, V.H. 1 ; MIRANDA, A.O. 1 ; ARENAS, S.M. 1 ; SCHMIDT, E.E. 2 ; LAMBERT, J. 3 ; SCHIEDA, Y OTROS


32 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1el uso de otras drogas además de AVM se increm<strong>en</strong>ta.El 32% de los productores de más de 900 cabezascombina las AVM con otras drogas.La forma de aplicación inyectable (95.2%) fue mayoritaria,aunque <strong>en</strong> forma difer<strong>en</strong>cial por tamaño derodeo (P


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 33Diagnóstico, asesorami<strong>en</strong>to profesional e importanciaasignada a los nematodes: En cuanto a las consultasal veterinario (cuadro 3), un 60% de los productores respondieronafirmativam<strong>en</strong>te, mi<strong>en</strong>tras que a pesar de esto,sólo el 29% (IN 33%; CC 27%) realiza al m<strong>en</strong>os una vez alaño un diagnóstico coprológico de conteo de huevos d<strong>en</strong>ematodes por gramo de heces (hpg), aunque <strong>en</strong>tre losproductores A (36%) el hpg es significativam<strong>en</strong>te (P


34 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Figura 5. Productores que utilizan el hpg como herrami<strong>en</strong>ta dediagnóstico.Figura 6. Problema sanitario más importante del rodeo de acuerdo ala opinión de los <strong>en</strong>cuestados: -Parásito gastrointestinales (PGI) - PGIjunto a uno o dos problemas mas (PGI+otra) - Otro problema sanitarioDISCUSIÓNLos casos declarados de GEV demuestran la importanciaque esta afección ti<strong>en</strong>e <strong>en</strong> esta región, que es la quemayorm<strong>en</strong>te convierte pasto <strong>en</strong> carne <strong>en</strong> la provincia deLa Pampa. Ya que si el 33% declaró haber t<strong>en</strong>ido, aunquemayorm<strong>en</strong>te leves (28%), casos clínicos de GEV, sepuede estimar una pérdida productiva <strong>en</strong> la ganancia depeso vivo del ord<strong>en</strong> de no m<strong>en</strong>os del 20% solam<strong>en</strong>te <strong>en</strong>esos rodeos, sin contar con las pérdidas <strong>en</strong> calidad de res(Suárez, 1995). Además, a esta pérdida se le podríansumar otras que seguram<strong>en</strong>te ocurr<strong>en</strong> <strong>en</strong> el resto de losrodeos (67%), donde los PGI han pasado desapercibidosal pres<strong>en</strong>tar un cuadro subclínico, que según observacionesrealizadas <strong>en</strong> la región (Suárez y Busetti, 2000) laspérdidas subclínicas <strong>en</strong> la ganancia de peso vivo sehallan <strong>en</strong> el ord<strong>en</strong> del 7-15%. De acuerdo a los resultadosobt<strong>en</strong>idos, <strong>en</strong> los sistemas de invernada hay m<strong>en</strong>os pres<strong>en</strong>taciónde casos, probablem<strong>en</strong>te relacionado a unamayor preocupación puesta <strong>en</strong> el control de los parásitosya sea a través de un mayor empleo de antihelmínticos ode estrategias de control. Esta t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia se observa también<strong>en</strong>tre productores con mayor número de exist<strong>en</strong>cias.Otra respuesta podría estar ligada a que <strong>en</strong> la invernadahay un mejor control al ingreso de la haci<strong>en</strong>da, que <strong>en</strong> loscampos de ciclo completo no siempre la invernada estátotalm<strong>en</strong>te separada de la recría y esto facilitaría la contaminaciónde potreros con categorías más susceptibles ocomplicaría las medidas de control. El increm<strong>en</strong>to de lapres<strong>en</strong>cia de resist<strong>en</strong>cia antihelmíntica <strong>en</strong> rodeos de laregión sería también una alarma <strong>en</strong> cuanto a pérdidasproductivas debido a una pérdida de eficacia de las drogascomo ha sido comunicado <strong>en</strong> algunos establecimi<strong>en</strong>tosde Córdoba y Bu<strong>en</strong>os Aires (Anziani y Fiel, 2004)donde hubo pres<strong>en</strong>tación de signos clínicos y muertes debovinos (3.7%) por infestaciones mixtas a pesar de la aplicaciónde avermectinas y b<strong>en</strong>zimidazoles.En cuanto a las prácticas de control, los pres<strong>en</strong>tesresultados muestran con precisión el elevado uso de lasavermectinas (96%) <strong>en</strong> la región, además de la frecu<strong>en</strong>cia<strong>en</strong> que son utilizados los antihelmínticos. Sólo seobserva una ligera baja <strong>en</strong> la utilización de AVM <strong>en</strong> formaúnica por parte de los establecimi<strong>en</strong>tos grandes a favorde combinarla con un mayor uso de BZD a lo largo delciclo de <strong>en</strong>gorde. Esta masiva administración de AVM(mayorm<strong>en</strong>te ivermectina) podría g<strong>en</strong>erar <strong>en</strong> el cortoplazo un problema de resist<strong>en</strong>cia no sólo fr<strong>en</strong>te aCooperia, sino también fr<strong>en</strong>te a otros géneros de nematodesy comprometer s<strong>en</strong>siblem<strong>en</strong>te la sust<strong>en</strong>tabilidaddel control de los vermes ya que las drogas no son insumosr<strong>en</strong>ovables y actualm<strong>en</strong>te la industria no ti<strong>en</strong>e <strong>en</strong>tresus metas invertir <strong>en</strong> desarrollo de nuevas drogas antihelmínticaspara el ganado. Una <strong>en</strong>cuesta sobre preval<strong>en</strong>ciade resist<strong>en</strong>cia antihelmíntica <strong>en</strong> bovinos <strong>en</strong> eloeste de la región pampeana mostró una asociación significativa<strong>en</strong>tre 3 o más aplicaciones de antihelmínticas yrodeos con resist<strong>en</strong>cia antihelmíntica (Suárez y Cristel,2006). Por otro lado, los estudios sobre el efecto prolongadode los residuos de las lactosas macrocíclicas sobrela fauna coprófila que participa <strong>en</strong> la degradación de lasexcretas bovinas <strong>en</strong> los sistemas pastoriles demuestranla toxicidad y el impacto negativo de estos residuos <strong>en</strong> elambi<strong>en</strong>te (Herd, 1995; Suárez, 2002). Esto además deincidir <strong>en</strong> el negativam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la sust<strong>en</strong>tabilidad delambi<strong>en</strong>te podría, sumado a los residuos <strong>en</strong> productoscomo la carne, incidir <strong>en</strong> un futuro no muy lejano <strong>en</strong> elcomercio exterior de los productos derivados. Es de considerarcomo <strong>en</strong> este s<strong>en</strong>tido, de los 350 productoresIncid<strong>en</strong>cia y control de los nematodes gastrointestinales bovinos <strong>en</strong> el este de la provincia de La Pampa, Arg<strong>en</strong>tina


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 35<strong>en</strong>cuestados, ninguno declaró usar moxidectina, la cualsegún estudios previos demuestra ser mucho más amigablecon el medio ambi<strong>en</strong>te (Doherty et al, 1994; Suárezet al., 2003).En cuanto a la forma de dosificación, los productoresusan <strong>en</strong> forma masiva (95.2%) la vía inyectable de fáciladministración, la cual involucra mayorm<strong>en</strong>te AVM, posiblem<strong>en</strong>tedebido a su amplio espectro, acción prolongada,inocuidad y además por los bajos costos que <strong>en</strong> losúltimos años han t<strong>en</strong>ido las formulaciones g<strong>en</strong>éricas.También los pres<strong>en</strong>tes resultados muestran a pesar desus formulaciones inyectables, el reducido empleo <strong>en</strong> losrodeos del ricob<strong>en</strong>dazole (8%) y del levamisol (3%). Encuanto a las otras formas de dosificación, los antihelmínticosorales (16.5%) son poco utilizados y aún m<strong>en</strong>os losintrarruminales (0.9%). Ningún productor aplica formulacionesa partir de derrame dorsal (pour on) a difer<strong>en</strong>ciade otros países como Nueva Zelanda donde es la formade aplicación de más utilización.En cuanto al régim<strong>en</strong> de tratami<strong>en</strong>tos, <strong>en</strong> la mayorparte (35%) de los rodeos se aplican 2 tratami<strong>en</strong>tos alaño (otoño y fines invierno o primavera), los cuales estánalejados de lograr un bu<strong>en</strong> control de los vermes, ya queuna eficaz reducción de las cargas parasitarias <strong>en</strong> los ternerosal inicio del otoño dep<strong>en</strong>derá del manejo forrajeroy de la contaminación de las pasturas (Suárez, 1994).G<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> los sistemas int<strong>en</strong>sivos hace falta másde un tratami<strong>en</strong>to durante el otoño. Por otro lado, el tratami<strong>en</strong>toal inicio de la primavera muchas veces noalcanza para prev<strong>en</strong>ir las pérdidas de peso por los nematodesy el desarrollo invernal de los terneros que no escomp<strong>en</strong>sable <strong>en</strong> el tiempo y conlleva un deterioro posterior<strong>en</strong> la conformación de las reses (Suárez, 1995). Enel s<strong>en</strong>tido inverso, un 17% de los productores (principalm<strong>en</strong>telos que pose<strong>en</strong> más ganado) desparasita suhaci<strong>en</strong>da 4 o más veces por año. Esta práctica de acuerdoal manejo de campo, tampoco siempre va <strong>en</strong> el s<strong>en</strong>tidode los patrones epidemiológicos y, <strong>en</strong> muchos casos,ese número de aplicaciones no sería necesario. El 18%de los productores (mayorm<strong>en</strong>te aquellos con mayornúmero de exist<strong>en</strong>cias) aplican un régim<strong>en</strong> de tratami<strong>en</strong>tosfijos, pero no todos pose<strong>en</strong> una estrategia racionalque plantee el control de acuerdo a los patrones epidemiológicos(Suárez, 1994) de los PGI <strong>en</strong> la región y asíprev<strong>en</strong>ir posibles pérdidas productivas.En cuanto a la participación del veterinario <strong>en</strong> el asesorami<strong>en</strong>toy el diagnóstico a pesar de que un porc<strong>en</strong>tajealto de productores respondió que consultaban al profesional,<strong>en</strong> los hechos sólo un 29% (<strong>en</strong> mayor proporciónproductores grandes: 41%) utilizaban sus servicios a travésdel hpg y aún <strong>en</strong> m<strong>en</strong>or medida (12%) a través deuna interv<strong>en</strong>ción <strong>en</strong> los rodeos mediante un monitoreodiagnóstico <strong>en</strong> base al hpg y tratando <strong>en</strong> base a resultados.Esto muestra cómo, a pesar de que los productoresle asignan una importancia alta a los PGI, el control delos mismos recae mayorm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la aplicación de fármacoscon poca participación profesional. Sin embargo, la<strong>en</strong>cuesta demuestra que los productores grandes y losinvernadores le otorgan más importancia a esta afección,planifican <strong>en</strong> mayor medida el control y utilizan más elapoyo veterinario. Probablem<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> parte esto sepodría explicar por una m<strong>en</strong>or incid<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> los costospor la escala productiva o por un mejor acceso a la informacióno cultura de este tipo de productores.CONCLUSIONESEl pres<strong>en</strong>te trabajo demuestra el peso económico delos PGI <strong>en</strong> la competitividad de los sistemas de laregión no sólo por los casos declarados y sus consecu<strong>en</strong>cias<strong>en</strong> la producción de carne, sino también por elgasto originado <strong>en</strong> el consumo de antihelmínticos yotras medidas t<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes al control.Por otro lado, se muestra el elevado uso de antihelmínticos,principalm<strong>en</strong>te avermectinas con el pot<strong>en</strong>cialriesgo de afectar la sust<strong>en</strong>tabilidad de los sistemas alacelerar, por un lado, la selección de poblaciones devermes resist<strong>en</strong>tes y de originar, por el otro, efectosnocivos <strong>en</strong> el ambi<strong>en</strong>te o posibilitar restricciones comercialespor residuos.Finalm<strong>en</strong>te, a pesar de la importancia que los productoresotorgan a los PGI, de la pres<strong>en</strong>te <strong>en</strong>cuesta no seextrae una participación importante del profesional <strong>en</strong> elcontrol de los PGI, y son escasas las estrategias de controlque toman <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta los patrones epidemiológicosde la <strong>en</strong>fermedad, surgi<strong>en</strong>do como necesidad la ext<strong>en</strong>siónde cómo planificar y poner <strong>en</strong> práctica las metodologíasde control más adecuadas para cada sistema orodeo. También se observa una t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia a medida quelas explotaciones son más grandes o <strong>en</strong> los planteos deinvernada a darle más importancia al control, al uso deantihelmínticos y a la participación profesional.AGRADECIMIENTOSSe agradece la desinteresada colaboración de los productoresy veterinarios por la información suministrada, y alMinisterio de la Producción del Gobierno de la provincia deLa Pampa y a la EEA Anguil por la financiación del estudio.REFERENCIASANZIANI, O.S., FIEL, C.A. 2004. Estado actual de laresist<strong>en</strong>cia antihelmíntica (nematodes gastrointestinales)<strong>en</strong> bovinos de la Arg<strong>en</strong>tina. Vet. Arg. XXI, 202: 122-133ANZIANI O.S, SUÁREZ V.H., GUGLIELMONE A.A.,WARNKE, O., GRANDE H., G.C. COLES, G.C. 2004.SUÁREZ, V.H. 1 ; MIRANDA, A.O. 1 ; ARENAS, S.M. 1 ; SCHMIDT, E.E. 2 ; LAMBERT, J. 3 ; SCHIEDA, Y OTROS


36 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Resistance to b<strong>en</strong>zimidazole and macrocyclic lactoneanthelmintics in cattle nematodes in Arg<strong>en</strong>tina. VetParasitol., 122: 303-306COCHRAN, W.G.1997. Técnicas de muestreo.CECSA, México DF.DAGNELLI, P. 1975. Analyse statistique a plusieurusvariables. Ed. Les presses Agronomiques de Gemblowx.A.S.B.L. Belgique 362 p.DOHERTY W.M., N.P. STEWART, R.M. COBB, ANDP.J. KEIRAN, 1994: In vitro comparison of the larvicidalactivity of moxidectin and abamectin againstOnthophagus gazella (F.) (Coleoptera: Scarabaeidae)and Haematobia irritans exigua De Meijere (Diptera:Muscidae). J. Aust. Entomol. Soc. 33, 71-74.ENTROCASSO, C.M., 1987. Economic impact of gastrointestinalverminosis in the temperate climate areas ofSouth America, with special refer<strong>en</strong>ce to Arg<strong>en</strong>tina. In:W.H.D. Leaning and J. Guerrero (Editors), The economicimpact of parasitism in cattle. Proceedings of the MSDAGVET Symposium, Montreal, Canada, pp. 53-58.HERD, R., 1995: Endectocidal drugs: Ecological risksand counter-measures. Int. J. Parasitol. 25, 875-885.PARKINS, J.J. AND HOLMES P.H., 1989. Effects ofgastrointestinal helminth parasites on ruminant nutrition.Nutrition Research Reviews, 2: 227-246.ROSSANIGO, C. E., AVILA, J. D., SAGER, R. L., VAS-QUEZ, R. AND POLI, M.A. 1988. Effecto de las cargas dehelmintos gastrointestinales sobre el consumo y digestibilidad<strong>en</strong> terneros de destete. Rev. Med. Vet. (Bs. As.),68, 4: 202-208.STAT-ITCF. 1988. Manuel d' utilisation. InstitutTechnique des Céréales et des Fourrages, Paris 238 p.SUÁREZ, V.H. 1990. Inhibition patterns and seasonalavailability of nematode for beef cattle grazing onArg<strong>en</strong>tina's Western Pampas. International JournalParasitology, 20, 1031 1036¿Como controlarlas? Boletín de Divulgación Técnica(<strong>INTA</strong>-Anguil), 47, 38 p.SUÁREZ, V.H. 1995. Las parasitosis internas delbovino <strong>en</strong> la región Semiárida y Subhúmeda Pampeana¿Cuáles son, qué produc<strong>en</strong>? Boletín de DivulgaciónTécnica (<strong>INTA</strong>-Anguil), 45, 27 p.SUÁREZ V.H 2002, Helminthic control on grazingruminants and <strong>en</strong>vironm<strong>en</strong>tal risks in South America,Vet. Res., 33: 563-573SUÁREZ V.H., BEDOTTI O.D., LARREA S., BUSETTIM.R, GARRIZ C.A 1991 Effect of an integrated controlprogramme with ivermectin on growth carcase andnematode infection on beef cattle in Arg<strong>en</strong>tina'sWestern Pampas. Research in Veterinary Sci<strong>en</strong>ce, 50:195 199SUÁREZ V.H., LORENZO R.M., BUSETTI M.R. yBABINEC F.J. 1997. Resist<strong>en</strong>cia y tolerancia de bovinosAberde<strong>en</strong> Angus, Santa Gertrudis y sus cruzas fr<strong>en</strong>tea los nematodes gastrointestinales. VeterinariaArg<strong>en</strong>tina, XIV, N.º139: 606-617.SUÁREZ, V.H., LORENZO, R.M., BUSETTI, M.R.,SANTUCHO G.M. 1999. Physiological and parasitologicalresponses to nematode infections of fatt<strong>en</strong>ing cattlein the western pampas of Arg<strong>en</strong>tina. Vet. Parasitol., 81:137-148SUÁREZ V.H. y BUSETTI M.R. 2000. Efecto de tratami<strong>en</strong>tosint<strong>en</strong>sivos previos <strong>en</strong> novillos expuestos naturalm<strong>en</strong>tea nematodes gastrointestinales <strong>en</strong> la segundaparte del <strong>en</strong>gorde. Rev. Med. Vet., 81, 2: 110-113.SUÁREZ, V.H , LIFSCHITZ, A.L., SALLOVITZ, J.M.,LANUSSE, C.E. 2003. Effects of ivermectin and doramectinfaecal residues on the invertebrate colonizationof cattle dung. J. App.Entomol.,127 (8), 481-488SUÁREZ V.H., CRISTEL, S.L., 2006. Anthelminticresistance in cattle nematode in the western PampeanaRegion of Arg<strong>en</strong>tina. Vet. Parasitol., <strong>en</strong> pr<strong>en</strong>saSUÁREZ, V.H. 1994. Las parasitosis internas delbovino <strong>en</strong> la región Semiárida y Subhúmeda PampeanaIncid<strong>en</strong>cia y control de los nematodes gastrointestinales bovinos <strong>en</strong> el este de la provincia de La Pampa, Arg<strong>en</strong>tina


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 37Cont<strong>en</strong>ido de catequinas <strong>en</strong> cultivaresarg<strong>en</strong>tinos de té (Camellia sin<strong>en</strong>sis),elaborados como té negroPRAT KRICUN, S. D. 1RESUMENEl pres<strong>en</strong>te proyecto tuvo como objetivo determinar el cont<strong>en</strong>ido de materia seca de las sigui<strong>en</strong>tes catequinas,epigalocatequina-3-galato (EGCG), epigalocatequina (EGC), epicatequina (EC), catequina (C) ycatequina galato (CG), <strong>en</strong> los cultivares de té CH 14 <strong>INTA</strong>, CH 112 <strong>INTA</strong>, CH 318 <strong>INTA</strong>, CH 410 <strong>INTA</strong> y CH732 <strong>INTA</strong> elaborados como té negro, durante tres épocas de zafra. Se empleó un sistema de extracciónacuosa y la determinación de los compuestos se efectuó por cromatografía líquida de alta resolución(HPLC), con elución isocrática.Los cont<strong>en</strong>idos de catequinas se analizaron por análisis de variancia (P


38 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1ABSTRACTThe pres<strong>en</strong>t project was conducted with the objective of evaluation the cont<strong>en</strong>t of the following catechins,epigallocatechin-3-gallate (EGCG), epigalocatechin (EGC), epicatechin (EC), catechin (C) and catechingallate (CG), in the tea cultivar CH 14 <strong>INTA</strong>, CH 112 <strong>INTA</strong>, CH 318 <strong>INTA</strong>, CH 410 <strong>INTA</strong> and CH 732 <strong>INTA</strong>elaborated as black tea, during three harvest times. A system of water extraction was used and the determinationwas made by high performance liquid chromatography (HPLC), with isocratic elution.The catechin cont<strong>en</strong>ts were analyzed by analisis of variance (P < 0.05), the differ<strong>en</strong>ces were studiedamong cultivars and the population control, times and interactions. The means were compared among cultivarsand the population control by Multiple Range Test (P < 0.05). The obtained results allow to establishthe following conclusions.The total average cont<strong>en</strong>t of all the analyzed catechins, reaching at 1.53 of dry matter (%). EGCG wasthe catechins with higher conc<strong>en</strong>tration, reaching at an average of 1.10% ± 0.13, not registering significantdiffer<strong>en</strong>ces among cultivars. EGC reached a second level with a conc<strong>en</strong>tration of 0.16%±0.03. For EC, Cand CG the conc<strong>en</strong>trations were 0.16% ± 0.06; 0.06%± 0.016 and 0.04%± 0.009, respectively.Among the cultivars they pres<strong>en</strong>ted significant differ<strong>en</strong>ces, cultivar CH 410 <strong>INTA</strong> pres<strong>en</strong>t the biggest cont<strong>en</strong>tsin EGCG, EGC, EC and C, with 1.30; 0.19; 0.29 and 0.11% respectively; for CG cultivar CH 318 <strong>INTA</strong>pres<strong>en</strong>ts the biggest cont<strong>en</strong>t with 0.068%.For the harvest times, they registered significant differ<strong>en</strong>ces, with the biggest cont<strong>en</strong>ts average to thebeginning for all the analyzed catechins. Their cont<strong>en</strong>ts for CGCG, EGC, EC, C and CG, were 1.47; 0.22;0.27; 0.13 and 0.063% respectively.Key words: Black tea, polyph<strong>en</strong>ols, catechins, HPLC.INTRODUCCIÓNLa región tealera arg<strong>en</strong>tina está compr<strong>en</strong>dida <strong>en</strong>tre los54° y 56° W, 26° y 28° S, constituyéndose <strong>en</strong> la más australdel mundo, con aproximadam<strong>en</strong>te 45.000 ha <strong>en</strong> sumom<strong>en</strong>to de máxima expansión (1976-77) de las cuales41.850 ha (93%), se <strong>en</strong>contraban <strong>en</strong> la provincia deMisiones y 3.150 ha (7%) <strong>en</strong> la provincia de Corri<strong>en</strong>tes(De Bernardi y Prat Kricun, 2002; International TeaCommittee, 2005).El clima es subtropical húmedo, isohídrico, las precipitacionesvan de los 1800 a 2200 mm anuales. Con estascondiciones el cultivo desarrolla su período de zafra<strong>en</strong>tre los meses de octubre a mayo. Durante el períodootoño-invernal, por disminución de las temperaturasmedias y la heliofanía diaria, inicia un periodo de recesofisiológico que se aprovecha para la realización de laspodas anuales, periódicas y de formación.El cultivo se realiza a altitudes de 150 a 550 m, <strong>en</strong> suelosde los ord<strong>en</strong>es alfisoles y ultisoles con bu<strong>en</strong>a aptitudproductiva, que si bi<strong>en</strong> <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral respond<strong>en</strong> a sus necesidades,pres<strong>en</strong>tan limitaciones nutricionales posteriores,que deb<strong>en</strong> ser corregidas por medio de la fertilización <strong>en</strong>función a su estado nutricional y nivel de extracción.Las modernas plantaciones se efectúan (Hampton,1992; Obanda et al., 1992; Prat Kricun y Belingheri,2003) empleando cultivares clonales, seleccionados porsu homog<strong>en</strong>eidad, r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to, calidad de taza y adaptabilidadambi<strong>en</strong>tal. El método de propagación por semillaes cada vez m<strong>en</strong>os empleado <strong>en</strong> el país, si bi<strong>en</strong> resultamás económico, su uniformidad productiva y cualitativason bajas debida a la alta heterog<strong>en</strong>eidad g<strong>en</strong>ética.La cosecha se exti<strong>en</strong>de <strong>en</strong> promedio <strong>en</strong>tre 7 a 8meses, su inicio y fin está estrecham<strong>en</strong>te ligado a lasheladas tardías y tempranas, respectivam<strong>en</strong>te. La recolecciónes mecanizada, con intervalos de 12 a 30 días. Elnivel de recolección coincide con el despunte o "tipping",según el tipo de poda que se haya realizado, parti<strong>en</strong>dode este nivel correspondi<strong>en</strong>te a la primera recoleccióndespués del despunte, se debe elevar el nivel de recolección1 a 3 cm, cada 2 a 4 recolecciones y así sucesivam<strong>en</strong>tehasta concluir la campaña con la poda liviana.Durante la recolección, la materia prima debe conservarsesana, <strong>en</strong>tera, no compactada y aireada. Debe conservarsu color verde y aroma típico, evitando la exposicióndirecta al sol, contacto con tierra, malezas o cualquierotro contaminante. Su transporte a la planta elaboradoradebe realizarse de forma rápida e higiénica <strong>en</strong> <strong>en</strong>vases ocont<strong>en</strong>edores adecuados (EEA Cerro Azul, 1996).Las podas anuales o de producción, ti<strong>en</strong><strong>en</strong> como objetivomant<strong>en</strong>er la altura de la planta <strong>en</strong>tre 50 a 100 cm ypromover el desarrollo de tallos productivos, a partir delas yemas adv<strong>en</strong>ticias pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> la ramazón. La podaCont<strong>en</strong>ido de catequinas <strong>en</strong> cultivares arg<strong>en</strong>tinos de té (Camellia sin<strong>en</strong>sis), elaborados como té negro


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 39de rebaje, fuerte o periódica se efectúa <strong>en</strong> ciclos de 4 a6 años, con los objetivos de reducir la altura de la planta,aum<strong>en</strong>tar la relación masa foliar/madera, reemplazarlas ramas muertas o dañadas y recuperar los r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos<strong>en</strong> un nuevo ciclo. La poda de r<strong>en</strong>ovación, rejuv<strong>en</strong>ecimi<strong>en</strong>too recepado se efectúa cada 30 a 35 años conun corte a nivel del suelo del eje o los ejes principales dela planta, con el objetivo r<strong>en</strong>ovar completam<strong>en</strong>te elesqueleto de la planta.La manufactura se efectúa como té negro sobre el98,5% de la materia prima, exportándose del total de téseco un 95% con destino principal a EEUU, Chile,Inglaterra, Holanda y Alemania (International TeaCommittee, 2005). El proceso compr<strong>en</strong>de las típicas etapasde marchitado, <strong>en</strong>rulado, ferm<strong>en</strong>tado, secado, clasificación,mezcla y <strong>en</strong>vasado; exist<strong>en</strong> diversidades <strong>en</strong>trelas difer<strong>en</strong>tes plantas <strong>en</strong> los sistemas de <strong>en</strong>rulado, secadoy clasificación (Werkhov<strong>en</strong>, 1974; EEA Cerro Azul,1996; Jose, 2001; Prat Kricun, 2003).Es importante conocer la composición química delbrote y de las hojas, por las reacciones que estos compuestossufr<strong>en</strong> durante sus difer<strong>en</strong>tes procesos demanufactura, así como la importante contribución de losmismos a las características de astring<strong>en</strong>cia, color, brillo,pung<strong>en</strong>cia, flavor y propiedades estimulantes propias delproducto (Herath et al., 1993). Además de los compon<strong>en</strong>tesnormales de cualquier tejido vegetal como hidratosde carbono, lípidos, proteínas y minerales, <strong>en</strong>contramosotros constituy<strong>en</strong>tes como los polif<strong>en</strong>oles <strong>en</strong> cantidadestales que distingu<strong>en</strong> al té de otros vegetales (EEA CerroAzul, 1996; Laur<strong>en</strong>s et al., 1998; Tocklai Exp. St., 2003b).Estos están pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> los jugos celulares y sufr<strong>en</strong> unaserie de cambios químicos cuando la hoja es desintegradadurante la manufactura. Son derivados del ácido gálicoy las catequinas. Los métodos de análisis químicostradicionales y la cromatografía, permit<strong>en</strong> separar másde una doc<strong>en</strong>a de difer<strong>en</strong>tes compuestos, con configuraciónquímica basada <strong>en</strong> la catequina y el ácido gálico. Notodos ellos están pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> forma natural <strong>en</strong> la hojade té; algunas de ellas son formas isoméricas producidasdurante el proceso de extracción y análisis. Las 6 que sereconoc<strong>en</strong> <strong>en</strong> los trabajos a campo son: epigalocatequina-3-galato(EGCG), epigalocatequina (EGC), epicacatequina-3-galato(ECG), epicatequina (EC), galocatequina(GC) y catequina(C). Si bi<strong>en</strong> el rol de los polif<strong>en</strong>oles <strong>en</strong>g<strong>en</strong>eral y las catequinas <strong>en</strong> particular está asociado a laresist<strong>en</strong>cia a plagas y <strong>en</strong>fermedades, su función <strong>en</strong> té esestudiada con det<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to <strong>en</strong> función a las tolerancias yresist<strong>en</strong>cias <strong>en</strong> nuevos cultivares (Punyasiri et al., 2000).Con respecto a sus propiedades biológicas cuando seconsum<strong>en</strong>, se absorb<strong>en</strong> intestinalm<strong>en</strong>te (Dashwood,1999, 2002) y rápidam<strong>en</strong>te se metabolizan, para formarcompuestos metilados, glucuronizados y sulfatados. Seha <strong>en</strong>contrado que puede ocurrir el metabolismo por bacterias,que normalm<strong>en</strong>te colonizan el colon. EGCG repres<strong>en</strong>tadel 10-50% de las catequinas totales y parece serla más poderosa de las catequinas; su actividad antioxidantees aproximadam<strong>en</strong>te 25-100 veces más pot<strong>en</strong>teque las vitaminas C y E. Los más importantes efectosbiomédicos son la protección contra el cáncer y las <strong>en</strong>fermedadescardiovasculares (Flores et al., 2003). En lostrabajos experim<strong>en</strong>tales, la actividad prev<strong>en</strong>tiva del té, sedocum<strong>en</strong>tó bi<strong>en</strong> para los tumores <strong>en</strong> difer<strong>en</strong>tes órganos.En los humanos, se informó que el té es protector contratumores <strong>en</strong> pulmón, tracto gastrointestinal e hígado, ademásprevi<strong>en</strong>e la salud bucal (Udagama et al., 2000).La investigación ha mostrado que el té es antiaterogénicoreduci<strong>en</strong>do colesterol y triglicéridos (Vinson et al.,1998); reduce coágulos sanguíneos, refuerza la funcióninmune, la pérdida de peso y es anticanceríg<strong>en</strong>o (Yang etal., 1997). Teóricam<strong>en</strong>te, la alta actividad antioxidante delté, lo hace b<strong>en</strong>eficioso protegi<strong>en</strong>do el cuerpo del daño oxidativo,debido a los radicales libres. Las <strong>en</strong>fermedadesque están asociadas con el daño por radicales libres incluy<strong>en</strong>cáncer, <strong>en</strong>fermedades cardíacas, función inmunesuprimida y el <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to acelerado.Una gran cantidad de evid<strong>en</strong>cia ci<strong>en</strong>tífica indica losb<strong>en</strong>eficios de beber té, por su amplia gama de propiedadesmedicinales (Tocklai Exp. St., 2003a). Así, el té se pres<strong>en</strong>tapor su esfera de acción, como el quimioprev<strong>en</strong>tivomás práctico, incluido <strong>en</strong> una dieta saludable para protecciónde los consumidores <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral, reduci<strong>en</strong>do el riesgode difer<strong>en</strong>tes tipos de cáncer. La Asociación deInvestigación de té (TRA), <strong>en</strong> Tocklai (India) <strong>en</strong> la colaboracióncon el Instituto Indio de Biología Química (IICB), <strong>en</strong>Kolkata ha llevado a cabo los estudios sobre difer<strong>en</strong>tesaspectos de salud y consumo de té negro. En estos estudios,se examinó la influ<strong>en</strong>cia de té <strong>en</strong> su conjunto y susdistintos compon<strong>en</strong>tes aislados. Los resultados indicaronlo sigui<strong>en</strong>te:*La administración regular de dosis bajas de extractode té negro (0.002-0.2%) reduce significativam<strong>en</strong>te losniveles de colesterol total <strong>en</strong> ratas.*Las proporciones normales de extracto de té negroreduc<strong>en</strong> significativam<strong>en</strong>te los niveles del triglicéridos.*El nivel de HDL (lípidos de alta d<strong>en</strong>sidad) aum<strong>en</strong>tó, sinembargo, su nivel no resulto significativo.*Los niveles de VHDL (lípidos de muy alta d<strong>en</strong>sidad) yLDL (lípidos de baja d<strong>en</strong>sidad) mostraron una disminuciónligera pero el efecto no era significativo.Así, los resultados indicaron que la administración perman<strong>en</strong>tede té negro <strong>en</strong> animales, es capaz de reducirel colesterol total y triglicéridos a niveles saludables. Losflavonoides del té previ<strong>en</strong><strong>en</strong> oxidación del colesterolLDL.La determinación del cont<strong>en</strong>ido de antioxidantes <strong>en</strong> té,constituy<strong>en</strong> parámetros con efectos sobre la salud de losconsumidores (Ch<strong>en</strong>g, 1999). Determinarlos <strong>en</strong> los cultivaresdifundidos, su relación con los tés comunes originados<strong>en</strong> plantaciones de semilla y su variación a lo largodel período de zafra tealera (Jose, 2001), permitirá a laactividad negociar su producto, con un conocimi<strong>en</strong>to másprofundo de sus cualidades.PRAT KRICUN, S.D. 1


40 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1La adopción rutinaria de la determinación de catequinas<strong>en</strong> té negro, permitirá mejorar las v<strong>en</strong>tajas competitivasdel té arg<strong>en</strong>tino como un producto de calidad no sólovalorado por su bu<strong>en</strong> color y adaptabilidad a las mezclas.El objetivo del pres<strong>en</strong>te proyecto es determinar el cont<strong>en</strong>idode catequinas de los cultivares comerciales másdifundidos <strong>en</strong> la región tealera arg<strong>en</strong>tina, elaboradoscomo té negro.MATE<strong>RIA</strong>LESSe emplearon los cultivares CH 14 <strong>INTA</strong>, CH 112<strong>INTA</strong>, CH 318 <strong>INTA</strong>, CH 410 <strong>INTA</strong>, CH 732 <strong>INTA</strong> y lapoblación Larraburu como control. El lote fue implantadoa campo <strong>en</strong> julio de 1966, con un distanciami<strong>en</strong>to de1,60 x 0,80m y una d<strong>en</strong>sidad de 7.810 pl ha -1 , se ubica<strong>en</strong> la EEA Cerro Azul del <strong>INTA</strong>, Cerro Azul, Misiones,27°39' S, 55°26' W y una altitud de 283 m. Su mant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>tose efectuó de acuerdo a las prácticas de manejorecom<strong>en</strong>dadas por la EEA Cerro Azul-<strong>INTA</strong>. Las recoleccionesse efectuaron con una cosechadora mecánicade tiro manual, estableci<strong>en</strong>do 3 épocas de recolecciónd<strong>en</strong>tro de la zafra. Inicio del 27/11 al 7/12, pl<strong>en</strong>azafra del 22/01 al 27/01 y fin de zafra del 3/04 al 10/04.Las recolecciones se efectuaron <strong>en</strong>tre las 11 a 14horas, por triplicado para cada uno de los 5 cultivares yla población control.PROCESAMIENTOLas muestras de brotes verdes sin clasificar, fueron <strong>en</strong>promedio de 500 g; su micromanufactura se inició con unmarchitado <strong>en</strong> forma natural hasta un porc<strong>en</strong>taje de marchitadodel 60 a 65% ( ec.1 ), por un período de 18 a 21horas posteriores a la recolección. ( ec.1 ) Porc<strong>en</strong>taje demarchitado = (Peso marchitado / Peso fresco) x 100.El brote marchito fue <strong>en</strong>rulado <strong>en</strong> 2 pasos sucesivos,por una micro <strong>en</strong>ruladora Rotorvane (6,5 cm diámetro x 22cm de longitud). Luego el material <strong>en</strong>rulado fue desagregado<strong>en</strong> forma manual para facilitar su "ferm<strong>en</strong>tación", pormedio de un tamiz de alambre y distribuido <strong>en</strong> una capade uniforme de 2 cm ± 0,5 sobre una bandeja de aluminio.Las bandejas con el material <strong>en</strong>rulado fueron llevadas asala de ferm<strong>en</strong>tado, con una humedad relativa de 95 a100% y una temperatura de 23,8 °C ± 1,6; por un tiempode 60 a 90 minutos hasta alcanzar un color marrón habanoy su aroma característico. Luego el material ferm<strong>en</strong>tadofue distribuido <strong>en</strong> una fina capa, sobre una bandeja demadera con fondo de alambre tejido de fina malla. Cadabandeja fue introducida a un microsecadero eléctrico conaire forzado, a una temperatura de 100 °C ± 2 por un tiempode 25 a 30 minutos, hasta alcanzar una humedad del 3al 5% y su típico color negro. Cada muestra fue <strong>en</strong>vasada<strong>en</strong> bolsas multipliegos de aluminio, etiquetada y conservada<strong>en</strong> cámara frigorífica a -18 °C ± 2.Determinación de catequinasSe procesa cada muestra <strong>en</strong> un molinillo de café, sedetermina su cont<strong>en</strong>ido de humedad (ISO 1572) y posteriorm<strong>en</strong>tese pesan 1,5 g de la misma. Se adicionan 90mL de agua destilada estéril apiróg<strong>en</strong>a <strong>en</strong> ebullición alos 1,5 g de la muestra, <strong>en</strong> un vaso de precipitado de250 mL. Se lleva a un baño de agua a 80 o C por 10 minutos,con agitación periódica. La solución se <strong>en</strong>fría <strong>en</strong>refrigerador a 4 o C, por 5 minutos. Se filtra luego consucción a través de un embudo buchner de 12 cm, conun papel de filtro Whatman N. o 1 y se recoge el filtrado<strong>en</strong> un kitasato de 250 mL (Obando et al., 1996). Setransfiere mediante una pipeta automática, 1 mL del filtradoobt<strong>en</strong>ido a un tubo de <strong>en</strong>sayo de 10 mL, se diluyecon agua apiróg<strong>en</strong>a 1:2. Estas soluciones se empleanpara la determinación por HPLC.Se utilizó un cromatógrafo líquido Shimadzu LC 6A,equipado con un integrador CR3 A y un detector UVShimadzu SPD-6A (195-350nm), calibrado a 280 nm(Shimadzu Corp., 2001). Se utilizó una columna fasereversa Lichrospher RP18 5 Micrón, de 250 mm x 4 mm.La fase móvil A fue 95,45: 4,5: 0,05 (H 2 O apiróg<strong>en</strong>a /acetonitrilo (HPLC)/ ácido fosfórico), la fase móvil B fue49,45: 50: 0,05 (H 2 O apiróg<strong>en</strong>a / acetonitrilo (HPLC)/ácido fosfórico) (Goto, T. et al, 1996). La fase móvil detrabajo fue A/B (70:30). Flujo 1.0 mL/minuto. Temperatura25 o C ± 1. Inyección 5 µL. Intervalo <strong>en</strong>tre muestras 5minutos. Para la curva de calibración se utilizaron lasmisma fase móvil A/B (70:30), con los estándares provistospor Sigma Chemical Co. (St.Louis, Mo) de epigalocatequina-3-galato(EGCG):(E-4143), epigalocatequina(EGC):(E-3768), epicatequina (EC): E-4018), catequina(C): C-0567), catequina galato (CG): C-0692) y cafeína:(C-8960). Estos fueron disueltos <strong>en</strong> una solución 95/5,agua/metanol (HPLC), <strong>en</strong> las sigui<strong>en</strong>tes conc<strong>en</strong>tracionesEGCG 300 mg L -1 , EGC 850 mg L -1 , EC 250 mg L -1 , C200 mg L -1 , CG 250 mg L -1 y cafeína 200 mg L -1 .Para la id<strong>en</strong>tificación de las catequinas se tomaron lostiempos de ret<strong>en</strong>ción de cada compuesto; para la determinaciónde su cantidad se tomó como refer<strong>en</strong>cia el áreade los picos obt<strong>en</strong>ida con la inyección de 5 µL de la solucióncon la mezcla de estándares. Se repetía la inyecciónde la mezcla de estándares a intervalos regulares, luegode la inyección de seis muestras.Los cont<strong>en</strong>idos de catequinas y cafeína se analizaronpor variancia (P


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 41Figura 3. Cultivar CH 112 <strong>INTA</strong>, inicio de zafra.Figura 1. Cromatograma de la mezcla de estándares.ord<strong>en</strong> de aparición de cada compuesto y tiempo deret<strong>en</strong>ción a los determinados por Goto, T. et al. (1996).No obstante, corresponder el cromatograma a una eluciónisocrática con fase móvil A/B (70:30), no pres<strong>en</strong>tamayores difer<strong>en</strong>cias con la elusión con gradi<strong>en</strong>te. Estaúltima para 8 catequinas y cafeína, se inició con A/B(90:10) por 5 minutos, mom<strong>en</strong>to <strong>en</strong> que la fase B seincrem<strong>en</strong>tó linealm<strong>en</strong>te a 30% <strong>en</strong> 3 minutos, luego semantuvo por 2 minutos, se increm<strong>en</strong>tó linealm<strong>en</strong>te lafase B a 80% por 5 minutos y se mantuvo la composiciónfinal A/B(20:80), por otros 5 minutos.Seis ejemplos de cromatogramas de catequinas ycafeína obt<strong>en</strong>idos de los difer<strong>en</strong>tes cultivares se observan<strong>en</strong> las figuras 2, 3, 4, 5, 6 y 7.Figura 4. Cultivar CH 318 <strong>INTA</strong>, pl<strong>en</strong>a zafra.Si bi<strong>en</strong> los cromatogramas permit<strong>en</strong> difer<strong>en</strong>ciar y determinarla conc<strong>en</strong>tración de cada uno de los compuestos,se observa cierto solapami<strong>en</strong>to <strong>en</strong>tre las áreas por tratarsede una elución isocrática. Dicho resultado, además deltipo de elución y las otras catequinas pres<strong>en</strong>tes, obedecea otros nuevos compuestos que se g<strong>en</strong>eran durante elFigura 2. Cultivar CH 14 <strong>INTA</strong>, inicio de zafra.Figura 5. Cultivar CH 410 <strong>INTA</strong>, pl<strong>en</strong>a zafra.PRAT KRICUN, S.D. 1


42 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Figura 6. Cultivar CH 732 <strong>INTA</strong>, fin de zafra.Figura 7. Población Larraburu, fin de zafra.proceso de "ferm<strong>en</strong>tación" o pardeami<strong>en</strong>to <strong>en</strong>zimático.Según Obanda et al. (1996) y Obanda y Owuor (1997),<strong>en</strong>tre las catequinas se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran epicatequina galato(ECG), epicatequina 3,5 digalato (ECGG), epigalocatequina3,5digalato (EGCGG), epicatequina-3-(3"-Ometil)galato(ECmetilG) y epigalocatequina-3-(3"-Ometil)galato(EGCmetilG), por efecto del proceso y posteriorsecado <strong>en</strong>contramos ácido gálico, ácido teaflávico,bis-flavonoles, teaflavinas (TF1, TF2, TF3 y TF4) responsablesde la viveza y brillo y las tearrubiginas responsablesdel color (Jose, M.S., 2001 y Saijo, et al., 2001).Los picos dominantes de las áreas correspond<strong>en</strong> acafeína y EGCG. La cafeína con una conc<strong>en</strong>tración levem<strong>en</strong>tesuperior, se destaca marcadam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> los cromatogramas(fig. 2 a 7). El EGC se ubica <strong>en</strong> un tercer nivel,<strong>en</strong> tanto que EC y C los picos y áreas son pequeños,incluso EC <strong>en</strong> algunas muestras no fue detectado. Entanto que la catequina CG g<strong>en</strong>erada por conversión térmica(Saijo y Takeda, 1999), fue detectada <strong>en</strong> muy bajosniveles e incluso no detectada. Las determinaciones promediopor triplicado del cont<strong>en</strong>ido de catequinas y cafeína,por cultivar <strong>en</strong> las difer<strong>en</strong>tes épocas de zafra seobservan <strong>en</strong> las tablas 1 y 2.Se observa una gran variabilidad <strong>en</strong> el cont<strong>en</strong>ido decatequinas no oxidadas pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>tre los distintos cultivares,alcanzado un valor total promedio de 1,53 demateria seca (%). Si se considera que <strong>en</strong> la pres<strong>en</strong>teevaluación se han considerado las catequinas másimportantes, este valor promedio resulta significativam<strong>en</strong>teinferior a los determinados <strong>en</strong> India y K<strong>en</strong>ia(Obanda et al., 1996; Obanda y Owuor, 1997 y TocklaiExp. St., 2003b), donde alcanzaba valores promedio deTabla 1. Cont<strong>en</strong>ido de catequinas y cafeína <strong>en</strong> cultivares y población Larraburu. Datos <strong>en</strong> materia seca (%).Cont<strong>en</strong>ido de catequinas <strong>en</strong> cultivares arg<strong>en</strong>tinos de té (Camellia sin<strong>en</strong>sis), elaborados como té negro


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 43Tabla 2. Cont<strong>en</strong>ido de catequinas y cafeína <strong>en</strong> té recolectado <strong>en</strong> difer<strong>en</strong>tes épocas de zafra. Datos <strong>en</strong> materia seca (%).3 a 6,67% y 1,6 a 10,8%, respectivam<strong>en</strong>te. Difer<strong>en</strong>ciasmotivadas posiblem<strong>en</strong>te por variables g<strong>en</strong>éticas yambi<strong>en</strong>tales, sistema de manejo, recolección y procesode elaboración.D<strong>en</strong>tro del proceso de la elaboración, se debe destacarla operación de <strong>en</strong>rulado de tipo continuo rotorvaneempleado <strong>en</strong> esta investigación, que se difer<strong>en</strong>cia delproceso discontinuo u ortodoxo, el continuo CTC o suscombinaciones por obt<strong>en</strong>er una mayor ruptura de células,consecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te una "ferm<strong>en</strong>tación" más completa,m<strong>en</strong>os catequinas no oxidadas y sus derivados comoteaflavinas y <strong>en</strong> particular tearrubiginas. Éstas son lasresponsables del color y se g<strong>en</strong>eran <strong>en</strong> un proceso depolimerización no <strong>en</strong>zimático, <strong>en</strong> función del tiempohasta llegar al secado. El color ha sido una de las característicasmás reconocidas de los tés arg<strong>en</strong>tinos, ya que<strong>en</strong> mezcla con otros tés de superior aroma y sabor, seobti<strong>en</strong>e un producto final de equilibradas características,con una materia prima de m<strong>en</strong>or costo. Además, estacaracterística es también muy apreciada para la preparaciónde té frío <strong>en</strong> máquinas exp<strong>en</strong>dedoras, obt<strong>en</strong>iéndosey producto final de bu<strong>en</strong> color sin depósitos. La transformaciónfinal <strong>en</strong> tearrubiginas por efecto del <strong>en</strong>érgico<strong>en</strong>rulado, el prolongado tiempo de "ferm<strong>en</strong>tación" ysumado al bajo nivel de catequinas no oxidadas detectadas<strong>en</strong> la pres<strong>en</strong>te investigación, explicaría <strong>en</strong> parte estaparticular característica del té negro arg<strong>en</strong>tino.Para EGCG la población Larraburu y el cultivar CH 410<strong>INTA</strong> pres<strong>en</strong>tan los mayores cont<strong>en</strong>idos (tabla 1), condifer<strong>en</strong>cias estadísticam<strong>en</strong>te significativas del resto delos cultivares, con la excepción del cultivar CH 318 <strong>INTA</strong>respecto de CH 410 <strong>INTA</strong>. El cont<strong>en</strong>ido promedio de1,10%, resulta inferior al registrado <strong>en</strong> K<strong>en</strong>ia (Obanda etal., 1996), con 1,67%. Para EGC la población Larraburuy el cultivar CH 410 <strong>INTA</strong> pres<strong>en</strong>tan los mayores cont<strong>en</strong>idosmedios, superiores estadísticam<strong>en</strong>te al resto de loscultivares para la población Larraburu; su cont<strong>en</strong>ido promediode 0,16%, resulta significativam<strong>en</strong>te m<strong>en</strong>or al ténegro de K<strong>en</strong>ia (Obanda et al., 1996), con 1,26%. ParaEC y C con valores promedio de 0,16 y 0,06% respectivam<strong>en</strong>te,resultan inferiores a los registrados <strong>en</strong> K<strong>en</strong>ia(Obanda et al., 1996), cuyos promedios alcanzan valoresmarcadam<strong>en</strong>te superiores con niveles de 2,17 y 0,55%,respectivam<strong>en</strong>te. El valor promedio de CG de 0,04%,indica la mínima relevancia de esta catequina. La cafeínapres<strong>en</strong>ta sus mayores niveles <strong>en</strong> el cultivar CH 318<strong>INTA</strong>, con difer<strong>en</strong>cias estadísticam<strong>en</strong>te significativas delresto de los cultivares. El valor promedio de 0,75%, considerandoel sistema de extracción acuosa, resulta muybajo respecto a los cont<strong>en</strong>idos totales de los tés negrosde India (Tocklai Exp. Station, 2003), que alcanzan valorespromedio de 3%.Se observa <strong>en</strong>tre las difer<strong>en</strong>tes épocas de zafra difer<strong>en</strong>ciasestadísticam<strong>en</strong>te significativas <strong>en</strong> el cont<strong>en</strong>idode todos los compuestos analizados, con su mayor nivel<strong>en</strong> el inicio de la zafra (tabla 2). Para todos las catequinasse observa para pl<strong>en</strong>a y fin de zafra, una reducciónconsiderable de su conc<strong>en</strong>tración, con la excepción deEGCG que sufre una fuerte declinación <strong>en</strong> pl<strong>en</strong>a zafra,para recuperarse a fin de la misma pero sin llegar a losniveles originales. La conc<strong>en</strong>tración de cafeína soluble,si bi<strong>en</strong> resulta significativam<strong>en</strong>te superior con el inicio dela zafra, su reducción alcanza para las otras épocas sólodel 12 al 15%.CONCLUSIONES:Se analizó el cont<strong>en</strong>ido de las sigui<strong>en</strong>tes catequinas,epigalocatequina-3-galato (EGCG), epigalocatequinaPRAT KRICUN, S.D. 1


44 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1(EGC), epicatequina (EC), catequina(C) y catequinagalato (CG), <strong>en</strong> los cultivares de té CH 14 <strong>INTA</strong>, CH 112<strong>INTA</strong>, CH 318 <strong>INTA</strong>, CH 410 <strong>INTA</strong> y CH 732 <strong>INTA</strong> elaboradoscomo té negro, durante tres épocas de zafra. Seempleó un sistema de extracción acuosa y la determinaciónse efectuó por cromatografía líquida de alta resolución(HPLC), con elución isocrática. Los resultados obt<strong>en</strong>idospermit<strong>en</strong> establecer las sigui<strong>en</strong>tes conclusiones.*El cont<strong>en</strong>ido total promedio de todas las catequinasanalizadas, alcanzó a 1,53 de materia seca (%).*EGCG fue la catequina con más alta conc<strong>en</strong>tración,alcanzado un promedio de 1,10% ± 0,13, no registrandodifer<strong>en</strong>cias significativas <strong>en</strong>tre cultivares.*EGC alcanzó un segundo nivel con una conc<strong>en</strong>traciónde 0,16%±0,03, sin difer<strong>en</strong>cias significativas por orig<strong>en</strong>varietal.*Para EC, C y CG las conc<strong>en</strong>traciones fueron de0,16%±0,06; 0,06%±0,016 y 0,04%±0,009, respectivam<strong>en</strong>te.*Entre los cultivares que pres<strong>en</strong>taron difer<strong>en</strong>cias significativasrespecto al resto, el cultivar CH 410 <strong>INTA</strong> pres<strong>en</strong>tólos mayores cont<strong>en</strong>idos de EGCG, EGC, EC y C, con 1,30;0,19; 0,29 y 0,11% respectivam<strong>en</strong>te; para CG el cultivarCH 318 <strong>INTA</strong> pres<strong>en</strong>ta el mayor cont<strong>en</strong>ido con 0,068%.*Para las épocas de zafra, se registraron difer<strong>en</strong>cias significativas<strong>en</strong> té negro, con los mayores cont<strong>en</strong>idos promedioal inicio de zafra para todas las catequinas analizadas.Sus cont<strong>en</strong>idos para CGCG, EGC, EC, C y CG, fueron1,47; 0,22; 0,27; 0,13 y 0,063% respectivam<strong>en</strong>te.AGRADECIMIENTOSAl personal técnico y de apoyo de la EEA Cerro Azuldel <strong>INTA</strong>, por su colaboración para la realización del pres<strong>en</strong>tetrabajo; <strong>en</strong> particular al Sr. Justo Díaz Fernández,por su aporte <strong>en</strong> todas las tareas de recolección y manufacturade las muestras y al Ing. Químico Darío Ferreira,integrante del Laboratorio C<strong>en</strong>tral de la FCEQyN(UNaM), por su apoyo, voluntad, paci<strong>en</strong>cia y profesionalidaddurante el desarrollo de los trabajos <strong>en</strong> laboratorio.A la Asociación Cooperadora de la EEA Misiones, por suapoyo financiero y a las autoridades de la Facultad deCi<strong>en</strong>cias Exactas, Químicas y Naturales (UNaM), porfacilitar sus instalaciones y equipami<strong>en</strong>tos.REFERENCIASCHENG, T.O. 1999. Antioxidants in wine and tea.Journal of the Royal Society of Medicine 92(3): pp. 157.DASHWOOD, R.H. 1999. Tea and cancer. The LinusPauling Institute, Estados Unidos(http://lpi.oregonstate.edu/sp-su99/tea.html , verificado14/02/04).DASHWOOD, R. H. 2002. Tea flavonoids. LinusPauling Institute, Estados Unidos. (http://lpi.oregonstate.edu/infoc<strong>en</strong>ter/phytochemicals/teaflav/,verificado14/02/04).DE BERNARDI, L. A.; PRAT KRICUN, S. D. 2002.Cad<strong>en</strong>a alim<strong>en</strong>taria del té "Camellia sin<strong>en</strong>sis".Diagnóstico de la región tealera. Secretaría edAgricultura. Ganadería, Pesca y Alim<strong>en</strong>tación, Arg<strong>en</strong>tina.(www.alim<strong>en</strong>tosarg<strong>en</strong>tinos.gov.ar/0-3/infusion/te/Diagnosticote-01.<strong>pdf</strong>, verificado 16/02/04).EEA CERRO AZUL 1996. 1.° Curso de capacitación <strong>en</strong>producción de té. EEA Cerro Azul-<strong>INTA</strong>, pp.125.FLORES, K. Z.; GÁLVEZ, A.; URBINA, C. A. 2003. ElConsumo de té negro revierte las disfunciones <strong>en</strong>doteliales<strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con insufici<strong>en</strong>cia arterial coronaria.Programa de Farmacología Molecular y Cínica - ICBM,Facultad de Medicina, Universidad de Chile, Chile(http://farmafitolab.med.uchile.cl/Obst/Download/Disert2003/Consumodeteydisfuncionvascular.ppt, verificadoCont<strong>en</strong>ido de catequinas <strong>en</strong> cultivares arg<strong>en</strong>tinos de té (Camellia sin<strong>en</strong>sis), elaborados como té negro


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 4525/02/2004).HAMPTON, M.G. 1992. Production of black tea. EnTea: cultivation to consumption. Willson, K.C. & Clifford,M.N. ed., Chapman & Hall, London, U.K., pp. 459-510.HERATH, N.L.; PUNYASIRI, P.A.N.; de SILVA, M.J.1993. Correlation of major flavanols of some tea cloneswith quality of Tea. Sri Lanka Journal of Tea Sci<strong>en</strong>ce62(1): 4-10, Sri Lanka.INTERNATIONAL TEA COMMITTEE. 2005. AnnualBulletin of Statistics 2004. Ed. International TeaCommittee, London, U.K., pp.158.JOSE, M. S. F. 2001. Made tea quality in relation to seasonalvariations of theflavin (TF). Tea Research Foundation(C<strong>en</strong>tral Africa) Quarterly Newsletter 144, 21-27.OBANDA, M.; OWUOR, P.O.; NJUGUNA, C.K. 1992.The impact of clonal variation of total polyph<strong>en</strong>ols cont<strong>en</strong>tand polyph<strong>en</strong>ol oxidase activity of fresh tea shoots on plainblack tea quality parameters. Tea 13(2): 129-133, K<strong>en</strong>ya.OBANDA, M.; OWUOR, P.O.; TAYLOR, S.J. 1996.Chemical composition of some k<strong>en</strong>yan black teas andtheir probable b<strong>en</strong>efits to human health. Tea 17(1): 20-26,K<strong>en</strong>ya.OBANDA, M.; OWUOR, P.O. 1997. Advances in theunderstanding of the formation of non-volatile qualityconstitu<strong>en</strong>ts during black tea ferm<strong>en</strong>tation process. Tea18(2): 194-204, K<strong>en</strong>ya.PRAT KRICUN, S. D. 2003. Té: Procesos deElaboración <strong>INTA</strong>, Arg<strong>en</strong>tina. (www.inta.gov.ar/cerroazul/investiga/yerba_mate/te_proc.htm,.verificado16/04/04).cuatro localidades del nordeste arg<strong>en</strong>tino. EEA CerroAzul, Informe Técnico 83, pp.16.PUNYASIRI, N.; JAYASUNDARA, J.; ABEYSINGHE,ISB. 2000 Role of poliph<strong>en</strong>ols in the tea plant. TeaResearch Institute Update 5(2), pp.1.SHIMADZU CORPORATION. 2001 Application to foodanalysis (N.°18). Analysis of tea. Shimadzu ApplicationNews. High Performance Liquid Chromatography N.°L212. pp.2.TOCKLAI EXP. ST. 2003. Tea and human healthy. TeaResearch Association, India.(Http://www.tocklai.org/about_tea/tea_health.htm , verificado14/02/04).TOCKLAI EXP. ST. 2003. Tea chemestry. TeaResearch Association,India. (http:www.tocklai.org/teachem/index.htm,verificado 14/02/04).UDAGAMA, U.R.N.; SENANAYAKA, M.R.D.M;PANAGODA, G.J.; AMARAKOON, AMT. 2000. Tea drinkingand oral health: Effect of black tea on oral Candidaalbicans isolates. Tea Research Institute Update 5(1),pp. 3.VINSON, J.A.; DABBAGH, Y.A. 1998. Tea ph<strong>en</strong>ols:antioxidant effectiv<strong>en</strong>ess of teas, Tea compon<strong>en</strong>ts, teafraccions and their binding with lipoproteins. NutritionResearch Newsletter 18(6): 1067-1075.WERKHOVEN, J. 1974. Tea processing. FAOAgricultural Services, Bulletin N°26, FAO, Rome. pp. 196.YANG, C. S.; LEE, M.; CHEN, L.; YANG, G. 1997.Polyph<strong>en</strong>ols as inhibitors of carcinog<strong>en</strong>esis. Environm<strong>en</strong>talHealth Perspectives 105 (Suppl 4): 971-976.PRAT KRICUN, S. D.; BELINGHERI, L. D. 2003.Comportami<strong>en</strong>to productivo y calidad de clones de té <strong>en</strong>PRAT KRICUN, S. D. 1


46 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Estimación de pot<strong>en</strong>cial hídrico <strong>en</strong> vidpor medio de medidas termográficas yespectralesVILA H1, 2 .; HUGALDE I 1 .; DI FILIPPO M 1 .RESUMENEl pot<strong>en</strong>cial hídrico foliar (Ψ L ) es una variable frecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te utilizada para medir el estado hídrico de loscultivos. Su medición con cámara de presión es l<strong>en</strong>ta, lo que impide tomar un gran número de muestras. Elobjetivo del trabajo fue evaluar métodos alternativos para estimar el Ψ L mediante s<strong>en</strong>sores remotos. Unode los métodos utilizados fue el de la reflectancia espectral. Esta técnica requiere de análisis estadísticospara poder estimar las variables de interés. Se probaron dos análisis, el cálculo de índices a partir de losvalores del espectro y el análisis de Mínimos Cuadrados Parciales (PLS). El otro método probado fue la termografíaque registra las Temperaturas de la Canopia (TC), que se relacionan con su estado hídrico. Losdatos termométricos sirvieron para construir dos modelos de regresión que estimaron Ψ L . Uno de los modelosfue una regresión simple con TC vs. Ψ L ; el otro fue una regresión múltiple construida junto con el "índic<strong>en</strong>ormalizado de vegetación" (NDVI = ((R 900 -R 680 )/( R 900 -R 680 ) y con el "índice hídrico" (WI = (R 900 /R 970 )).El <strong>en</strong>sayo se llevó a cabo <strong>en</strong> un viñedo de la variedad Malbec, <strong>en</strong> M<strong>en</strong>doza, Arg<strong>en</strong>tina. La reflectancia semidió durante la mañana y el Ψ L al mediodía, paralelam<strong>en</strong>te a la toma de imág<strong>en</strong>es termográficas. Por PLS,usando las reflectancias <strong>en</strong>tre 325 y 1075 nm, se pudo predecir el Ψ L . Por regresión se obtuvieron las ecuacionesΨ L = -1,21659 + 0,445078 * TC; R 2 =0,19, p = 0,0000 y Ψ L = 1,83399 - 0,613766 * NDVI + 0,0447517* TC -1,45787 * WI, R 2 = 0,36, p = 0,0000. Al mapear mediante krigeado los Ψ L observados y los estimadospor los tres procedimi<strong>en</strong>tos, para analizar las similitudes <strong>en</strong> distribución espacial se observó una apreciablesemejanza <strong>en</strong>tre ellos a pesar de los bajos coefici<strong>en</strong>tes de regresión <strong>en</strong>contrados. Esto es así porquelos planos incluy<strong>en</strong> información espacial aus<strong>en</strong>te <strong>en</strong> las regresiones. Se halló una mayor semejanza<strong>en</strong>tre el Ψ L observado y el estimado por PLS, comparado con los otros métodos.Palabras clave: reflectancia, termografía, PLS, viticultura de precisión.ABSTRACTLeaf water pot<strong>en</strong>tial (Ψ L ) is a useful variable for the water status assessm<strong>en</strong>t of crops. The pressurechamber is the curr<strong>en</strong>t method for its measurem<strong>en</strong>t, but has the disadvantage of being too slow andimpractical wh<strong>en</strong> to asses an important number of plants become necessary, as is required in PrecisionViticulture. The objective of this investigation was to evaluate alternative methods for estimating Ψ L , usingremote s<strong>en</strong>sors. One of these methods was based on spectral reflectance. This is a non destructive, quickand effici<strong>en</strong>t method. Nevertheless, this technique requires statistical analysis in order to estimate the neededvariables. In this study, two analyses were tested. On one side, we calculated indexes from spectralvalues, and on the other side, we tested the Partial Least Squares analysis (PLS). The other tested method1 Laboratorio de Viticultura, <strong>INTA</strong> EEA M<strong>en</strong>doza. San Martín 3853, 5505 Luján de Cuyo, M<strong>en</strong>doza, Arg<strong>en</strong>tina.2 hervila@m<strong>en</strong>doza.inta.gov.arRecibido 08 de octubre// Aceptado 02 de diciembre// Publicado online 15 de diciembreEstimación de pot<strong>en</strong>cial hídrico <strong>en</strong> vid por medio de medidas termográficas y espectrales


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 47was based on Thermography Canopy temperature (TC) is known to be related to water status. In this case,images of the canopy of the vineyard were tak<strong>en</strong>, and the temperatures of each point of the assessed areawere recorded. Two regression models derived from the thermographic data: one of these models was asimple regression with TC vs. Ψ L ; and the other was a multiple regression, including temperature, thereflectance indices NDVI (R 900 -R 680 /R 900 +R 680 ) and WI (R 900 /R 970 ). The assessm<strong>en</strong>t took place in aMalbec vineyard, in M<strong>en</strong>doza, Arg<strong>en</strong>tina. Reflectance was measured during the morning and Ψ L at noon,just at the same time as the images were tak<strong>en</strong>. By PLS, using reflectances from 325 to 1075 nm, Ψ L couldbe estimated. With simple and multiple regressions the following equations were obtained: Ψ L = -1.21659+ 0.445078 * Tº; R 2 =0,19 and Ψ L = 1,83399 - 0,613766 * NDVI + 0,0447517 * TC -1,45787 * WI, R 2 =0,36, p = 0,0000. Wh<strong>en</strong> the observed and estimated Ψ L obtained by the three procedures were mapped bykrigging in order to analyze the likelihood betwe<strong>en</strong> the spatial distributions, a high level of similarity wasfound, dispite the low regression coeffici<strong>en</strong>ts. Apar<strong>en</strong>tly, the maps include spacial information that is abs<strong>en</strong>tin the regressions. Higher likelihood was found betwe<strong>en</strong> the measured Ψ L and the estimated by PLS, wh<strong>en</strong>compared to the other methods.Key words: reflectance, thermography, PLS, Precision Viticulture.INTRODUCCIÓNEl pot<strong>en</strong>cial hídrico foliar (Ψ L ) es una variable comúnm<strong>en</strong>teutilizada para evaluar el estado hídrico de lasplantas de vid (Williams y Araujo, 2002; Schultz, 2003). Elmétodo estándar para realizar esta medición es el de lacámara de presión (Scholander et al., 1965) que brindavalores precisos del Ψ L , pero ti<strong>en</strong>e la desv<strong>en</strong>taja de serdestructivo y l<strong>en</strong>to. Por esto resulta poco práctico a lahora de medir grandes superficies como se requiere <strong>en</strong>la viticultura de precisión. Dada la variabilidad espacialque pres<strong>en</strong>tan los viñedos, la estimación remota delpot<strong>en</strong>cial hídrico se convierte <strong>en</strong> una herrami<strong>en</strong>ta fundam<strong>en</strong>talpara diseñar estrategias de riego sitio específicas,importantes para optimizar la producción y la calidad dela uva (Rodríguez-Pérez et al., 2007).En la viticultura de precisión se necesitan medicionesrápidas como las que brinda la medición espectral. Estatecnología es interesante ya que permite estimar,mediante mediciones de reflectancia, la proporción de la<strong>en</strong>ergía incid<strong>en</strong>te que es reflejada por un objeto (<strong>en</strong> estecaso la cubierta vegetal), pigm<strong>en</strong>tos fotosintéticos, biomasade cultivos y constituy<strong>en</strong>tes minerales del suelo(He et al., 2005; Raun et.al., 2001; Brown et al., 2006).Los tejidos vegetales fotosintéticos reflejan una baja proporciónde la <strong>en</strong>ergía incid<strong>en</strong>te <strong>en</strong> las longitudes de ondadel visible, si se compara con la que se produce <strong>en</strong> laslongitudes de onda no visibles del infrarrojo cercano(NIR). Una planta estresada o s<strong>en</strong>esc<strong>en</strong>te pres<strong>en</strong>ta unam<strong>en</strong>or reflectancia <strong>en</strong> el NIR que una planta no estresada(Pinter et al., 2003).La espectrometría es una técnica que también se usa<strong>en</strong> laboratorio, donde acorta tiempos y evita el uso dereactivos químicos para analizar distintos productos. Lasmuestras no se destruy<strong>en</strong> durante su análisis y variosconstituy<strong>en</strong>tes pued<strong>en</strong> determinarse simultáneam<strong>en</strong>te(Cozzolino et al., 2003; Batt<strong>en</strong>, 1998, Schmilovitch et al.,2000; He et al., 2005).Para su interpretación, las mediciones espectralesrequier<strong>en</strong> algún tipo de análisis o calibración.Clásicam<strong>en</strong>te, el uso de s<strong>en</strong>sores multiespectrales <strong>en</strong>teledetección se ha complem<strong>en</strong>tado con índices de vegetaciónque combinan los valores de reflectancia <strong>en</strong> dos omás longitudes de onda del espectro. Exist<strong>en</strong> diversosíndices calculados a partir de estos datos. Entre los máscomúnm<strong>en</strong>te utilizados se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra el índice normalizadode vegetación (NDVI) que permite estimar la biomasade cultivos (Lokupitiya et. al., 2010) . Este índice se calculaa partir de la difer<strong>en</strong>cia de las reflectancias <strong>en</strong> NIR(R 900 nm) y <strong>en</strong> rojo (R; R 680 ), dividido por la suma de lasmismas. Exist<strong>en</strong> otros índices que se utilizan para estimarel estado hídrico <strong>en</strong> difer<strong>en</strong>tes tejidos y plantas(Pinter et al., 2003). Uno de los más usados es el índicede estado hídrico (WI; Peñuelas et al., 1993; Pinter et al.,2003), que es el coci<strong>en</strong>te <strong>en</strong>tre la reflectancia a 900 nmy a 970 nm. Rodríguez-Pérez et al. (2007) probaronvarios índices para estado hídrico calculados a partir delespectro de reflectancia y obtuvieron correlaciones <strong>en</strong>tre0,477 y 0,619, con variables fisiológicas como Ψ L y cont<strong>en</strong>idorelativo de agua.Los s<strong>en</strong>sores hiperespectrales, por otro lado, pued<strong>en</strong>ser útiles para estimar el estado hídrico y se han utilizado<strong>en</strong> cultivos como trigo (Fitzgerald et al., 2006) y vid(Rodríguez-Pérez et al., 2007); pero para poder analizarun gran número de variables <strong>en</strong> forma conjunta seVILA H1, 2 .; HUGALDE I 1 .; DI FILIPPO M 1 .


48 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Entre éstas, una de las más usadas es la regresión deCuadrados Mínimos Parciales (PLS). Diversos autoreshan probado que este método de calibración puede estimar<strong>en</strong> el laboratorio compon<strong>en</strong>tes de calidad de frutos,como sólidos solubles, pH, color y propiedades físicascomo fuerza de compresión (He et al., 2005,Schmilovitch et al., 2000, Bureau et al., 2008).El análisis de PLS es un método de construcción deecuaciones de regresión que se utiliza cuando el númerode variables indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes es mucho mayor al númerode casos, si<strong>en</strong>do las variables no indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>tresí (Hoskuldsson, 1988). Para obt<strong>en</strong>er una relación <strong>en</strong>trela o las variables dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes y las variables explicativas,el análisis construye nuevas variables llamadaslat<strong>en</strong>tes o compon<strong>en</strong>tes, donde cada una es una combinaciónlineal de las variables explicativas originales.Luego, por regresión, se determinan ecuaciones querelacionan los compon<strong>en</strong>tes con las variables respuesta(Garthwaite, 1994; Abdi, 2007). Los compon<strong>en</strong>tes formadoscapturan la máxima información de las variablesindep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes para predecir con mayor precisión lasvariables dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes. El método ti<strong>en</strong>e la desv<strong>en</strong>taja deque la elección del número de compon<strong>en</strong>tes es subjetiva.Esta elección debe ser cuidadosa, ya que el ajuste puedellegar a ser muy explicativo de los datos de calibración,pero t<strong>en</strong>er bajo nivel predictivo. Esta desv<strong>en</strong>taja puedeminimizarse mediante la validación cruzada que permitecomprobar el poder predictivo de la calibración. En 2003Hans<strong>en</strong> et al. midieron la biomasa de un cultivo de trigoa través de índices normalizados de vegetación y utilizandoPLS.Otra alternativa para estimar el estado hídrico de loscultivos por teledetección es la termografía infrarroja.Esta técnica consiste <strong>en</strong> obt<strong>en</strong>er imág<strong>en</strong>es que registranlas temperaturas de cada punto de una superficie dada.La Temperatura de la Canopia (TC) está relacionada conel estado hídrico de las plantas (Reynolds et al., 2007).Esto es debido al aum<strong>en</strong>to de temperatura que sufre lahoja cuando disminuye la transpiración como consecu<strong>en</strong>ciadel cierre estomático (Gardner et al., 1992b; Pinter etal., 2003; Jones et al., 2003; Coh<strong>en</strong> et al., 2005;Fitzgerald et al., 2006; Jones y Schofield, 2008).El objetivo del trabajo fue evaluar métodos alternativosa la cámara de presión -rápidos y no destructivos- quepermitan estimar el Ψ L , y conocer su pot<strong>en</strong>cialidad <strong>en</strong>viticultura de precisión. Para esto se compararon, <strong>en</strong> unviñedo, las mediciones de Ψ L realizadas con cámara depresión, con las estimaciones a partir de espectroradiómetroy termografía. Estas últimas se complem<strong>en</strong>taroncon métodos de análisis y calibración tales como índicesde vegetación, regresión simple y PLS.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSEn el año 2009, durante el mes de <strong>en</strong>ero, se realizaronmedidas espectrales de reflectancia, imág<strong>en</strong>es termográficasy medidas de Ψ L <strong>en</strong> distintos puntos de un viñedo.El viñedo de 10 años era de la variedad Malbec y estabaubicado <strong>en</strong> la Estación Experim<strong>en</strong>tal AgropecuariaM<strong>en</strong>doza del <strong>INTA</strong>, <strong>en</strong> Luján de Cuyo. La conducción era<strong>en</strong> espaldero a 2,5 m <strong>en</strong>tre hileras y 1,5 m <strong>en</strong>tre plantas.El viñedo se regaba gravitacionalm<strong>en</strong>te cada 15 días ypres<strong>en</strong>taba una notoria heterog<strong>en</strong>eidad de expresiónvegetativa <strong>en</strong> el s<strong>en</strong>tido del riego. Las mediciones espectralesse tomaron <strong>en</strong>tre las 10:30 y las 12:00 h, <strong>en</strong> unaplanta cada 7,5 m, a lo largo de las 13 hileras (n = 210plantas). Se midió la reflectancia de las plantas <strong>en</strong>tre 350y 1075 nm (cada 1 nm) a 0,5 m de distancia del lateral delas canopias, <strong>en</strong> una superficie de 0,05 m 2 , con un espectroradiómetroFieldSpec UV/VNIR (Analytical and Spectraldevices Inc., Boulder, Colorado, USA). A continuación,<strong>en</strong>tre las 14:00 y las 16:00 h se midió el pot<strong>en</strong>cial hídricofoliar de mediodía (Ψmd) con cámara de presión(Biocontrol Inc., Arg<strong>en</strong>tina), y la TC con una cámara termográficaFluke TiR (Fluke Corporation, USA). Las 14:00h repres<strong>en</strong>taban, <strong>en</strong> M<strong>en</strong>doza, el medio día solar, ya queexistía un desfasaje <strong>en</strong>tre la hora legal y la solar. La TCse midió a 1 m de la canopia, obt<strong>en</strong>iéndose una imag<strong>en</strong>de 1 m 2 de canopia, con una resolución de 320 x 240pixeles. Estas últimas mediciones se tomaron <strong>en</strong> unaplanta cada 15 m <strong>en</strong> cada hilera (n=112). Las medicionesse hicieron <strong>en</strong> 2 días consecutivos y de característicasmuy similares <strong>en</strong> cuanto a luz, temperatura y humedad.Las imág<strong>en</strong>es termográficas se analizaron con el softwareSmart View 1.9 (Copyright © 2006-2007, Fluke corporation,USA) con el que se obtuvo el valor de TC mediade una superficie de alrededor de 40 x 20 cm, libre dehuecos de luz, repres<strong>en</strong>tativa de la canopia de cadaplanta. A partir de los espectros de reflectancia de lasplantas (figura 1) se calcularon los índices de vegetacióny de estado hídrico NDVI y WI. Previo a este cálculo, losespectros fueron sometidos a un método de suavizadopara eliminar picos anómalos que repres<strong>en</strong>taban ruidosinher<strong>en</strong>tes al equipo. Se consideraron picos anómalosaquellos cuyo valor de reflectancia era mayor a 3 desviacionesestándar de los 20 valores de reflectancia <strong>en</strong>torno al valor espectral dado. Cuando se detectaba unpico anómalo, su valor de reflectancia se reemplazabapor el promedio de las reflectancias de 20 valores <strong>en</strong>torno al valor espectral dado. Para el cálculo de regresionessimples y múltiples se utilizó el programaStatsGraphics plus para Windows 4.0 (StatisticalGraphics Corp., USA), utilizando como variables predictorasde Ψ L la TC y los índices espectrales (NDVI y WI).Por otra parte, los valores de reflectancia de las distintaslongitudes de onda se utilizaron como variables predictivaspara el análisis PLS. Se reservó fuera del análisisuna cantidad de 98 observaciones elegidas al azar,con el objeto de realizar una validación cruzada. Paraeste análisis se usó el programa Statistica 6.1 (StatSoft,Inc., 2003). Para seleccionar el número de compon<strong>en</strong>tesdel PLS se analizaron los valores de suma de cuadradosresiduales predichos (PRESS) que brindaron una medidade la confianza de la estimación. Se consideró que siEstimación de pot<strong>en</strong>cial hídrico <strong>en</strong> vid por medio de medidas termográficas y espectrales


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 49se obt<strong>en</strong>ía un bu<strong>en</strong> ajuste <strong>en</strong>tre los valores observadosreservados para validación cruzada y los predichos apartir del PLS, la función obt<strong>en</strong>ida era una bu<strong>en</strong>a predictorade casos futuros (Tobias, R.D., 1995). Por este motivose buscaron los valores más bajos de PRESS quemostraran una bu<strong>en</strong>a estimación de Ψ L <strong>en</strong> los casosreservados para la validación cruzada.Los Ψ L medidos a campo y estimados por espectrometríay termografía se modelizaron por krigeado con elsoftware VESPER v 1.62 (Australian C<strong>en</strong>tre for PrecisionAgriculture, University of Sydney, Australia). Se interpolóa 0,25 m, con ajuste esférico sobre el variograma y serealizó un krigeado puntual. Los valores interpolados deL observados y predichos por los distintos métodos segraficaron con el programa Surfer v 6.01 (God<strong>en</strong>Software, Colorado, USA) para su comparación visual.RESULTADOS Y DISCUSIÓNA partir de las medidas espectrales y mediante el análisisPLS se realizaron estimaciones de Ψ L extray<strong>en</strong>doFigura 1: Curvas de reflectancia de una planta estresada, (Ψ MD -1,2 MPa; -) y una planta no estresada, ((Ψ MD -0,7 MPa; ---) tomada conel espectroradiómetro FieldSpec UV/VNIR .Figura 2: Ψ L observados y predichos por espectrometría calibrada con PLS y 4 factores (R2 = 0,45; valor p= 0.000; error estándar de laestimación= 0,07265) <strong>en</strong> un viñedo de Malbec <strong>en</strong> el verano 2009, previo a cosecha.VILA H1, 2 .; HUGALDE I 1 .; DI FILIPPO M 1 .


50 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1<strong>en</strong>tre 3 y 12 compon<strong>en</strong>tes. Los valores de Ψ L predichosse compararon con los Ψ L observados a campomediante la correlación de Pearson. La mejor calibraciónse obtuvo eligi<strong>en</strong>do los primeros 4 compon<strong>en</strong>tes, con unR de 0,67, p = 0,000 y error estándar de la estimación de= 0,07265 <strong>en</strong>tre los Ψ L observados y predichos (figura 2),lo cual significó una correlación bastante baja como paraproponer a este método como alternativo al de la cámarade presión. A pesar de esto, los planos de interpolaciónde estas variables mostraron una apreciable similitudvisual (figura 3 a y b).por PLS (figura 3 c). Sin embargo, aún fue posible id<strong>en</strong>tificarlos sectores con mayores y m<strong>en</strong>ores nivel deestrés hídrico. (figura 4 y 5)Figura 4. Imág<strong>en</strong>es visible (izquierda) e infrarroja (derecha) tomadassobre el lateral de una canopia de vid Malbec. El polígono de laizquierda <strong>en</strong> cada imag<strong>en</strong> es un ejemplo de las porciones utilizadaspara calcular la temperatura media de la canopia desestimando loshuecos (polígonos de la derecha <strong>en</strong> cada imag<strong>en</strong>).Con el fin de aum<strong>en</strong>tar el grado de predicción del Ψ Lcon la termografía, se int<strong>en</strong>tó complem<strong>en</strong>tar esta variablecon los índices NDVI y WI obt<strong>en</strong>idos por espectrometríade reflectancia. Para ello, se calculó un modelo de regresiónmúltiple para predecir Ψ L . Esta regresión obtuvo uncoefici<strong>en</strong>te de determinación apreciablem<strong>en</strong>te mayor quecuando se usó la termografía sola (Ψ L = 1,83399 -0,613766 * NDVI + 0,0447517 * TC -1,45787 * WI, R 2 =0,36, p = 0,0000; error estándar de la estimación =0,128503; Figura 6). No obstante ello, este método nopudo superar a la espectrometría con calibración PLS.(figura 6).En la figura 3d puede observarse cómo <strong>en</strong> el plano deΨ L predichos aum<strong>en</strong>tó el nivel de predicción <strong>en</strong> formas<strong>en</strong>sible con respecto al método anterior.Figura 3 (a, b, c, d) Plano de Ψ L observados (A), Ψ L predichos porPLS con 4 factores (B), Ψ L predichos utilizando termografías decanopias (C) y Ψ L predichos por regresión múltiple a partir de NDVI,WI y TC (D); <strong>en</strong> un viñedo de Malbec <strong>en</strong> el mes de <strong>en</strong>ero de 2009.A partir de las TC obt<strong>en</strong>idas con las imág<strong>en</strong>es termográficas(figura 4) se predijeron los Ψ L mediante regresiónlineal. El nivel de asociación <strong>en</strong>tre ambas variablesresultó bajo aunque significativo (Ψ L = -1,2165 +0,445078 TC; R 2 = 0,19; R = 0,44; p=0,000; error estándarde la estimación de = 0,142989; figura 5). Una vezmapeados los valores de Ψ L predichos a partir del análisistermográfico se pudo observar que, <strong>en</strong> concordanciacon la m<strong>en</strong>or correlación observada, la predicción a partirde TC se ajustó <strong>en</strong> m<strong>en</strong>or medida que la predicciónCon ninguno de los métodos probados se <strong>en</strong>contraroncorrelaciones sufici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te altas <strong>en</strong>tre Ψ L observadosy predichos como para establecer a alguno de ellos comométodo alternativo al de la cámara de presión.Específicam<strong>en</strong>te no se hallaron correlaciones sufici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>teimportantes que permitan concluir que, a partir delconjunto de los valores de reflectancia de las plantas, sepueda llegar a medir indirectam<strong>en</strong>te Ψ L . Esto concuerdacon los resultados de Hunt et al. (1989) y Pierce et al.(1990), que concluyeron que, para distintas especiesforestales, los índices calculados a partir de reflectanciasNIR no pued<strong>en</strong> usarse para la estimación remota delestado hídrico de las plantas.Por otro lado, debe t<strong>en</strong>erse <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta que con la tecnologíadisponible <strong>en</strong> este estudio sólo pudo analizarseel espectro de reflectancia desde el UVA hasta el NIR,si<strong>en</strong>do que el cont<strong>en</strong>ido hídrico está más asociado (<strong>en</strong>forma negativa) con la reflectancia <strong>en</strong> el infrarrojo medio(MIR; <strong>en</strong>tre 1.500 y 1.900 nm; Chuvieco Salinero, 2002;Estimación de pot<strong>en</strong>cial hídrico <strong>en</strong> vid por medio de medidas termográficas y espectrales


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 51Figura 5. Relación <strong>en</strong>tre temperatura de la canopia (TC) y Ψ L observados a campo (R 2 = 0.19; p=0.000; error estándar de la estimaciónde = 0,142989) <strong>en</strong> un viñedo de Malbec <strong>en</strong> el verano 2009, previo a cosecha.Figura 6. Ψ L observados y predichos mediante la técnica de combinar termografía e índices de reflectancia NDVI y WI (R 2 = 0.33; valorp=0.000; error estándar de la estimación= 0,128503) <strong>en</strong> un viñedo de Malbec <strong>en</strong> el verano previo a cosecha.Lestander y Geladi, 2005). No obstante, la reflectancia <strong>en</strong>el NIR está asociada a diversas formas de estrés y nodebería descartarse. Es posible que utilizando espectroradiómetroscon una mayor amplitud de captación debandas que t<strong>en</strong>gan <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta el NIR y llegu<strong>en</strong> hasta elMIR la calibración PLS pueda resultar más pot<strong>en</strong>te parapredecir Ψ L .Por otro lado se observó que la estimación realizadacon TC no tuvo una exactitud sufici<strong>en</strong>te para estimarvalores de Ψ L <strong>en</strong> las zonas más estresadas (Ψ L pordebajo de -1,2 MPa), ocurri<strong>en</strong>do lo contrario <strong>en</strong> la estimaciónpor regresión múltiple a partir de NDVI, WI y TC. Deesta manera, podría ser interesante probar la utilizaciónde ambos planos para poder zonificar una parcela, si<strong>en</strong>doesto importante a la hora de efici<strong>en</strong>tizar el manejo delagua y economizar labores culturales. De esta manera,Rock et al (1986) usaron NIR y MIR (infrarrojo medio)para separar zonas estresadas de no estresadas <strong>en</strong> bosquesde coníferas.Es importante observar que, aunque los valores de correlaciónno resultaron sufici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te altos, los planos devalores estimados <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral mostraron sufici<strong>en</strong>tes semejanzascon los valores observados como para permitir unaaceptable zonificación de áreas sometidas a estrés hídrico.VILA H1, 2 .; HUGALDE I 1 .; DI FILIPPO M 1 .


52 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1CONCLUSIONESEl método de espectrometría UVA/VNIR calibrado conPLS y una extracción de 4 compon<strong>en</strong>tes brinda unaaceptable estimación del estado hídrico del viñedo,dadas las limitaciones de la técnica de teledetección.Estas estimaciones no pued<strong>en</strong> tomarse más que comoori<strong>en</strong>tativas, dada la baja asociación con los valores realesde Ψ L medidos <strong>en</strong> el campo. Sin embargo, los mapeosa partir de técnicas espectrométricas muestran unaapreciable semejanza con los mapeos de Ψ L observados.Si bi<strong>en</strong> esto parece contradictorio, los planos incluy<strong>en</strong>información espacial aus<strong>en</strong>te <strong>en</strong> las regresiones. Latécnica serviría para dividir la superficie cultivada <strong>en</strong>zonas con distinto estado hídrico, válido para zonificar elviñedo y conducir un manejo difer<strong>en</strong>cial del aguaEste estudio abre la puerta a futuras investigaciones,tales como la prueba de otros índices espectrales, otrasvariables fisiológicas y otras técnicas de teledetecciónque, sumadas a las técnicas de análisis y calibración,puedan explicar con mayor certeza la variabilidad querodea a la medición de Ψ L . Jones y Schofield (2008) concluyeronque el desarrollo de estudios por imág<strong>en</strong>es apartir de varios tipos de s<strong>en</strong>sores es necesario paralograr un bu<strong>en</strong> diagnóstico y monitoreo <strong>en</strong> plantas. Lasmetodologías podrían incluir simples combinaciones des<strong>en</strong>sores térmicos, de reflectancia y fluoresc<strong>en</strong>cia, <strong>en</strong>treotros.BIBLIOGRAFÍAABDI H. 2007. Encyclopedia of measurem<strong>en</strong>t and statistics.Program in Cognition and Neurosci<strong>en</strong>ces. ed NeilSakind, MS: Gr.4.1, University of Texas, Dallas.BATTEN, G. D. 1998. Plant analysis using near infraredreflectance spectroscopy: the pot<strong>en</strong>tial and the limitations.Australian Journal of Experim<strong>en</strong>tal Agriculture38(7), 697 - 706.BROWN, D. J.; SHEPHERD, K. D.; WALSH, M. G.;MAYS, M. D.; REINSCH, T. G. 2006. Global soil characterizationwith VNIR diffuse reflectance spectroscopy.Geoderma 132, 273-290.BUREAU, S.; RUIZ, D.; REICH, M.; GOUBLE, B.; BER-TRAND, D.; AUDERGON, J-M.; RENARD, C.M.G.C.;2009. Rapid and non-destructive analysis of apricot fruitquality using FT-near-infrared spectroscopy. FoodChemistry 113, 1323-1328.CHUVIECO SALINERO, E. 2002. Teledetecciónambi<strong>en</strong>tal, la observación de la tierra desde el espacio.ed Ariel Ci<strong>en</strong>cia. Barcelona, España. 57-60.COHEN, Y.; ALCHANATIS, V.; MERON, M.; SARAN-GA, Y.; TSIPRIS, J. 2005. Estimation of leaf water pot<strong>en</strong>tialby thermal imagery and spatial analysis. Journal ofexperim<strong>en</strong>tal botany. 56, (417), 1843-1852.COZZOLINO, D.; MORÓN, A. 2003. The pot<strong>en</strong>tial ofnear-infrared reflectance spectroscopy to analyze soilchemical and physical characteristics. Journal ofAgricultural Sci<strong>en</strong>ce, 140(1) 65-71.FITZGERALD, G.J.; RODRÍGUEZ, D.; CHRISTEN-SEN, L.K.; BELFORD, R.; SADRAS, V.O.; CLARKE, T.R. 2006. Spectral and thermal s<strong>en</strong>sing for nitrog<strong>en</strong> andwater status in rainfed and irrigated wheat <strong>en</strong>vironm<strong>en</strong>ts.Precision Agriculture 7, 233-248.GARDNER, B.R.; NEILSEN, D.C.; SHOCK, C.C. 1992.Infrared thermometry and the crop water stress index. II :sampling procedures and interpretation. Journal of productionagriculture. 5: 4, 466-475.GARTHWAITE, P.H. 1994. An Interpretation of PartialLeast Squares. Journal of the American StatisticalAssociation 89, (425). 122-127.HANSEN, P.M., SCHJOERRING, J.K. 2003.Reflectance measurem<strong>en</strong>t of canopy biomass and nitrog<strong>en</strong>status in wheat crops using normalized differ<strong>en</strong>cevegetation indices and partial least squares regression.Remote s<strong>en</strong>sing of <strong>en</strong>vironm<strong>en</strong>t. 86, 542-553.HE, Y; ZHANG, Y; PEREIRA, A.G.; GÓMEZ, A.H.;WANG, J. 2005. Nondestructive Determination of TomatoFruit Quality Characteristics Using Vis/NIR SpectroscopyEstimación de pot<strong>en</strong>cial hídrico <strong>en</strong> vid por medio de medidas termográficas y espectrales


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 53Technique. International Journal of InformationTechnology. 11 (11).HOSKULDSSON, P. 1988. "PLS Regression Methods",Journal of Chemometrics, 2, 211-228.HUNT, R., ROCK, B.N. 1989. Detection of changes inleaf water cont<strong>en</strong>t using near and middle-infrared reflectances,Remote S<strong>en</strong>sing of Environm<strong>en</strong>t, 30, 43-54.JONES, H.G.; LEINONEN, I. 2003. Thermal Imaging forthe study of plant water relations. Journal of Agruculturemeteorology, 59 (3), 205-217.JONES H. G. Y SCHOFIELD P. 2008. Thermal andother remote s<strong>en</strong>sing of plant stress. G<strong>en</strong>eral and appliedplant physiology, special issue, 34 (1-2), 19-32.LESTANDER, T A.; GELADI, P. 2005. NIR spectralinformation used to predict water cont<strong>en</strong>t of pine seedsfrom multivariate calibration Canadian Journal of ForestResearch 35(5) 1139-1148.LOKUPITIYA, E.; LEFSKY, M.; PAUSTIAN, K. 2010. Useof AVHRR NDVI time series and ground-based surveys forestimating county-level crop biomass. International Journalof Remote S<strong>en</strong>sing, 31, (1), 141 - 158.PEÑUELAS, J.; FILELLA, I.; BIEL, C.; SERRANO, L.;SAVE, R. 1993. The reflectance at 950-970 nm region asan indicator of plant water status. International journal ofremote s<strong>en</strong>sing 14, 1887-1905.PIERCE, L.; RUNNING, S; RIGGS, G. 1990. Remotedetection of canopy water stress in coniferous forestsusing the NS001 Thematic Mapper Simulator and thethermal infrared multispectral scanner.Photogrammetric Engineering and Remote S<strong>en</strong>sing.56, 579-586.PINTER, P.J.; HATFIELD, J.L.; SCHEPERS, J.S.;BARNES, E.M.; MORAN, M.S.; DAUGHTRY, C.S.T.;UPCHURCH, D.R. 2003. Remote s<strong>en</strong>sing for crop managem<strong>en</strong>t.Photogrammetric <strong>en</strong>gineering and remote s<strong>en</strong>sing,69 (6), 647-664.RAUN, W.; SOLIE, J. B.; JOHNSON, G. V.; STONE, M.L.; LUKINA, E. V.; THOMASON, W. E.; SCHEPERS J. S.2001. In-season prediction of pot<strong>en</strong>tial grain yield in winterwheat using canopy reflectance. Agronomy Journal93, 131-138.REYNOLDS, M.P.; DRECCER, F.; TRETHOWAN, R.2007. Drought adaptative traits derived from wheat wildrelatives and landraces. Journal of experim<strong>en</strong>tal botany58, 177-186.ROCK, B.N.; VOGELMANN, J.E.; WILLIAMS, D.L.;VOGELMANN, A.F.; HOSHIZAKI T. 1986. Remote detectionof forest damage. Biosci<strong>en</strong>ce 36(7) 439-445.RODRÍGUEZ-PÉREZ, J.R.; <strong>RIA</strong>ÑO, D.; CARLISLE, E.;USTIN, S.; SMART, D.R. 2007. Evaluation of hyperspectralreflectance indexes to detect grapevine water statusin vineyards. American Journal of Enology and Viticulture.58(3), 302-317.SCHMILOVITCH, Z.; MIZRACH, A.; HOFFMAN, A.;EGOZI, A H.; FUCHS, Y. 2000.Determination of mangophysiological indices by near-infrared spectrometry.Postharvest Biology and Technology 19, 245-252.SCHOLANDER, P. F.; BRADSTREET, E. D.; HEM-MINGSEN, E.A.; HAMMEL, H. T. 1965. Sap Pressure inVascular Plants, Negative hydrostatic pressure can bemeasured in plants. Sci<strong>en</strong>ce 148(3668), 339 - 346.SCHULTZ, H.R. 2003. Differ<strong>en</strong>ces in hydraulic architectureaccount for near-isohydric and anisohydric behaviourof two field-grown Vitis vinifera L. cultivars duringdrought. Plant, Cell & Environm<strong>en</strong>t, 26 (8), 1393-1405.TOBIAS, R. D. 1995. An Introduction to Partial LeastSquares Regression. SAS Institute Inc., Cary, NC.WILLIAMS, L.E.; ARAUJO, F.J. 2002. Correlationsamong predawn leaf, midday leaf and midday stemwater pot<strong>en</strong>tial and their correlations with other measuresof soil and plant water status in Vitis vinifera. Journalof American Society for Horticultural Sci<strong>en</strong>ce, 127 (3),448-454.VILA H1, 2 .; HUGALDE I 1 .; DI FILIPPO M 1 .


54 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Diseño y prestaciones de un prototipode siembra directa para intersiembrade pasturasPRINCIPI M.A. 1 ; MATTANA 1 R.R.; CARDINALI 1 O.P. y COLODRO 1 J.L.RESUMENEste trabajo compara, <strong>en</strong> siembras de festuca alta (Festuca arundinacea Schreb.) efectuadas <strong>en</strong> otoñosobre praderas de alfalfa (Medicago sativa sp.) degradadas, un prototipo de intersiembra de pasturas diseñadopor la Cátedra Maquinaria Agrícola de la Facultad de Agronomía y Veterinaria de la UniversidadNacional de Río Cuarto, cuyo tr<strong>en</strong> de siembra posee, además de las cuchillas circulares dura flute, un conjuntode timones con azadones cortos provistos de pequeñas aletas laterales <strong>en</strong> su parte inferior para laapertura de la faja de siembra, con una máquina para intersiembra de pasturas difundida <strong>en</strong> el mercado(testigo), con sistema de siembra y fertilización con abresurcos de discos. Se utilizó un diseño de parcelasdivididas que incluye al prototipo descrito, a éste con una variante constituida por un conjunto de siembraclásico similar a la intersembradora testigo, y a esta última máquina, las cuales se utilizaron con y sin fertilización<strong>en</strong> la siembra.El objetivo de efectuar la labranza de la línea de siembra con azadón corto provisto de aletas es eliminarla compactación superficial producida por el pisoteo de los animales, mejorar la preparación de la cama desiembra y colocar el fósforo a mayor profundidad (150 mm por debajo de la semilla).En los tres años de experim<strong>en</strong>tación se pudo constatar a los 30 días de las siembras que existieron difer<strong>en</strong>ciassignificativas <strong>en</strong> la efici<strong>en</strong>cia de implantación a favor del prototipo con azadón, con respecto al testigoy al prototipo con líneas de siembra similares a éste, lo cual es de relevancia dado que la velocidad degerminación es fundam<strong>en</strong>tal para el caso que después de la siembra no llueva hasta la primavera, retrasándosela germinación y el 1.º corte de forraje. Lo expuesto también se constató a los 180 días de la siembrapara el año 2003, <strong>en</strong> el cual no se registraron lluvias a posterior de la siembra y hasta fines de ese año,mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> el 2002 y 2004 los valores de plantas establecidas <strong>en</strong> todos los tratami<strong>en</strong>tos no arrojarondifer<strong>en</strong>cias significativas, posiblem<strong>en</strong>te por la ocurr<strong>en</strong>cia de lluvias tempranas de primavera.La compactación del suelo hasta 120 mm de profundidad (resist<strong>en</strong>cia mecánica a la p<strong>en</strong>etración medidabajo las huellas de las sembradoras) fue m<strong>en</strong>or con el nuevo prototipo que con la máquina testigo.Como conclusión, se considera que el prototipo dotado del conjunto de siembra y fertilización con azadóncorto ti<strong>en</strong>e un campo propicio de aplicación <strong>en</strong> la región puesto que provoca una mayor velocidad de emerg<strong>en</strong>ciae implantación del cultivo y m<strong>en</strong>or compactación del suelo con respecto a la máquina testigo.Palabras clave: conjunto de siembra, azadón corto con alas1. Doc<strong>en</strong>tes de la Cátedra Maquinaria Agrícola. Facultad de Agronomía y Veterinaria, UNRC Ruta 36, km 601, (5800) Río Cuarto, Córdoba,Arg<strong>en</strong>tinaRecibido 27 de julio// Aceptado 07 de diciembre// Publicado online 15 de diciembreDiseño y prestaciones de un prototipo de siembra directa para intersiembra de pasturas


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 55ABSTRACTThis study compares the use of a prototype diret drill for pasture r<strong>en</strong>ovation designed by this researchteam with a no tillage pasture r<strong>en</strong>ovation from a well-known trademark (control). The study was carried outin tall fescue (Festuca arundinacea Schreb.) sowings planted in the fall on brok<strong>en</strong> down alfalfa (Medicagosativa sp.) plains. The drill planting kit of the prototype has, a part from the circular fluted coulter, a set ofbeams with plantation hoes with small wing in its lower part. This hoe was first tried individually exhibiting agood performance. The experim<strong>en</strong>tal design was of divided plots including the prototype with a variant consistingof a drilling pasture r<strong>en</strong>ovation kit similar to the one available in the market, and also including it asthe control machine. All machines were used with and without fertilization at drilling.The aim of using the beam with plantation hoe with small blades in the tillage of the planting row is to improveseed bed preparation and to avoid surface packing due to cattle trampling and incorporating Phosphorto a higher depth (150 mm bellow the seed).In the three years of experim<strong>en</strong>tation, it was demonstrated that there were significant differ<strong>en</strong>ces in the effici<strong>en</strong>cyof implantation 30 days after planting in favor of the prototype with the plantation hoe with respect toboth machine available in the market and the prototype with planting rows similar to the one available in themarket. This is significant since the germination rate is fundam<strong>en</strong>tal if rainfall lacks after planting up untilspring, thus delaying germination and the first forage cutting. The same happ<strong>en</strong>ed 180 days after planting inthe year 2003, wh<strong>en</strong> there was no rainfall after planting and up until the <strong>en</strong>d of that year. In 2002 and 2004,however, the number of plants established in all the treatm<strong>en</strong>ts showed no significant differ<strong>en</strong>ces. This waspossibly due to early spring rainfalls.In forage production, there was higher production in the treatm<strong>en</strong>ts with the fertilization provided by theprototype with the plantation hoe and blades, compared to the other treatm<strong>en</strong>ts, however, not exhibiting significantdiffer<strong>en</strong>ces.There was less soil compaction, up to 120 mm deep (soil mecanical resistant under the planter tracks),with the new prototype than with the control machine.Summing up, the application of the prototype with a planting and fertilization kit with plantation hoe withsmall wing in the Rio Cuarto region could be a b<strong>en</strong>eficial application because it produces a higher germinationand crop implantation rate and less soil compaction compared to a diret drill for pasture r<strong>en</strong>ovation froma well-known trademark.Key words: drill planting kit, small hoe with wing.INTRODUCCIÓNEs importante destacar que <strong>en</strong> la revisión bibliográficase ha <strong>en</strong>contrado información muy escasa sobre laimplantación o intersiembra de pasturas con máquinasde siembra directa como los que se comparan <strong>en</strong> estetrabajo y m<strong>en</strong>os aún con el sistema de siembra y fertilizaciónsimilar al diseñado para el mismo, el cual se hayaincorporado a un prototipo cuyo peso, al trabajar portransfer<strong>en</strong>cia de éste, es sólo la mitad de una máquinasimilar de mercado para implantación de pasturas.Delafosse (1993), Delafosse y Onorato (1991) y Miñónet al (1996), analizan las técnicas y maquinaria para laintersiembra de pasturas. Baumer (1999), analiza variossistemas de intersiembra de pasturas y los factores a t<strong>en</strong>er<strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta para el éxito de las mismas, indicando que ést<strong>en</strong>o obedece únicam<strong>en</strong>te a la utilización de una determinadamaquinaria sino a la correcta interpretación de los factoresde manejo previo, durante y post siembra. El autorpres<strong>en</strong>ta un trabajo realizado <strong>en</strong> la Universidad de Ohio ypublicado <strong>en</strong> AAPRESID sobre la evaluación de 4 máquinasde intersiembra, <strong>en</strong> 4 tipos de suelos, analizando elstand de trébol blanco (Trifolium sp.) a las 8 semanas dela intersiembra, verificando que existieron difer<strong>en</strong>cias significativas<strong>en</strong>tre las máquinas <strong>en</strong> algunos suelos, pero, alanalizar la media obt<strong>en</strong>ida por todos los tratami<strong>en</strong>tos, nose aprecian difer<strong>en</strong>cias significativas. Estos autores expresan<strong>en</strong> sus conclusiones que es recom<strong>en</strong>dable efectuar laintersiembra <strong>en</strong> otoño; que la festuca y el agropiro(Thinopyrum ponticum) son las gramíneas de mejor comportami<strong>en</strong>to<strong>en</strong> la intersiembra, y que no existe un métodoúnico de implantación que asegure bu<strong>en</strong>os resultados,sino que hay que considerar el tipo de suelo, la pastura asembrar, la pot<strong>en</strong>cia del tractor, etc.Pottinger (1992) y Duarte (2000) analizaron, al igualque <strong>en</strong> la cita anterior, los factores que permit<strong>en</strong> el éxito<strong>en</strong> la intersiembra de pasturas.Chisholm et al. (1980) diseñaron y experim<strong>en</strong>taron <strong>en</strong>la Universidad de Dakota una máquina destinada especí-PRINCIPI M.A. 1 ; MATTANA 1 R.R.; CARDINALI 1 O.P. y COLODRO 1 J.L.


56 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1ficam<strong>en</strong>te a la intersiembra de pasturas. Esta ha sido<strong>en</strong>sayada exitosam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> más de 250 ha de pastizalesnaturales incluy<strong>en</strong>do sistemas rocosos.Seaney et al (1983) analizaron factores inher<strong>en</strong>tes almanejo adecuado para la intersiembra de pasturas yexpresaron respecto a los métodos de intersiembra, quela mayoría de las máquinas son diseñadas para cortar através de la pastura degradada, haci<strong>en</strong>do un estrechosurco donde es colocada la semilla, aplicando por log<strong>en</strong>eral el fertilizante y los pesticidas <strong>en</strong> el mom<strong>en</strong>to dela siembra. Expresaron que es importante colocar el fertilizante<strong>en</strong> banda debajo de la semilla (<strong>en</strong> forma similaral nuevo dispositivo de siembra y fertilización diseñadopara el pres<strong>en</strong>te trabajo), colocando ésta a una correctaprofundidad y afirmando el suelo sobre la misma.Wolf y Kirby (1984) compararon <strong>en</strong> su trabajo deimplantación de alfalfa equipos de siembra directa y sistemade labranza y siembra conv<strong>en</strong>cional <strong>en</strong> difer<strong>en</strong>tesfechas de siembra. En sus conclusiones, expresaron queel suelo firme y la colocación de la semilla profunda prove<strong>en</strong>mayor humedad para la germinación <strong>en</strong> formainmediata de efectuada la siembra (lo que se logra conequipos de siembra directa), <strong>en</strong> cambio la siembra consistema conv<strong>en</strong>cional se debe efectuar más tempranopara lograr el establecimi<strong>en</strong>to de la pastura con las lluviasque se produc<strong>en</strong> luego de la siembra. El número deplantas y producción de forraje de alfalfa es mayor consiembra directa que con el conv<strong>en</strong>cional. Estos autores,al igual que Bullied et al (1999) expresaron que la preparaciónconv<strong>en</strong>cional de la cama de siembra produceimportantes pérdidas de suelo y humedad del mismo.Kalmbacher (1984) analizó <strong>en</strong> su trabajo las máquinasde intersiembra de pasturas, comprobando que las sembradorasutilizadas no ti<strong>en</strong><strong>en</strong> mayores difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong> elestablecimi<strong>en</strong>to de las mismas.Lowther et al (1987) pres<strong>en</strong>taron <strong>en</strong> su trabajo el diseñode un prototipo de sembradora con remoción de lafaja donde se deposita la semilla más int<strong>en</strong>sa que <strong>en</strong>otras sembradoras de intersiembra. Compararon a estamáquina con otra intersembradora de 3 discos abresurcosy concluyeron que hay pocas difer<strong>en</strong>cias a las 7semanas después de la siembra <strong>en</strong> septiembre, variandosu efici<strong>en</strong>cia ante la aus<strong>en</strong>cia o pres<strong>en</strong>cia de herbicidaspara el control de malezas y logrando, con el prototipo,una superviv<strong>en</strong>cia de plantas del 80 a 85% con la aus<strong>en</strong>ciay el uso de herbicida, respectivam<strong>en</strong>te, y con el tripledisco del 74 y 40%, para el uso y aus<strong>en</strong>cia de herbicidas,respectivam<strong>en</strong>te. Al cabo de 5 meses de la siembra, elprototipo logró que el surco fuese cubierto con la especieimplantada <strong>en</strong> un 56 y 63% ante la aus<strong>en</strong>cia o el uso deherbicidas, comparada con sólo 6 y 35% al usar triple discosabresurcos. Por lo expuesto, al cabo de 3 años, elprototipo logró un mayor r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to de materia seca.Concluye el autor que los resultados demuestran la v<strong>en</strong>tajaagronómica de la labranza int<strong>en</strong>sa de la franja logradapor el prototipo para el establecimi<strong>en</strong>to de pasturassobre una pradera degradada.Los objetivos de este trabajo fueron:a) Determinar el desempeño individual del prototipo desiembra directa de granos finos-soja adaptado paraintersiembra <strong>en</strong> la preparación de la faja de siembra,colocación del fertilizante y la semilla y la efici<strong>en</strong>cia desiembra <strong>en</strong> intersiembras de festuca alta sobre praderasde alfalfa degradadas <strong>en</strong> suelos compactadas por elpisoteo de los animales, con un prototipo, para comprobarsu desempeño individualb) Comparar el nuevo prototipo y una máquina desiembra directa para intersiembra de pasturas difundiday reconocida <strong>en</strong> el país <strong>en</strong> la efici<strong>en</strong>cia de implantación,producción de forraje y compactación del suelo <strong>en</strong> intersiembrasde festuca alta sobre praderas de alfalfa degradadasy compactadas por el pisoteo de los animales.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOS1) Adaptación y experim<strong>en</strong>tación del prototipo parala intersiembra de pasturas.Sobre la base de un prototipo para siembra directa degranos finos (Principi et al, 2002 a y b), el cual por sudiseño ti<strong>en</strong>e un peso aproximadam<strong>en</strong>te 50% m<strong>en</strong>or queuna máquina similar exist<strong>en</strong>te <strong>en</strong> el mercado (testigo), secompletó la construcción y el montaje de un nuevo dispositivode fertilización y de remoción del suelo incorporado<strong>en</strong> el tr<strong>en</strong> de siembra para granos finos-soja, adoptándolopara la intersiembra de pasturas. El mismo difiere delconjunto anterior, <strong>en</strong> que incorpora un azadón corto ydelgado que abre el suelo verticalm<strong>en</strong>te y posee <strong>en</strong> suparte inferior una aleta plana <strong>en</strong> forma de “V” para realizarla labranza horizontal del suelo a una profundidadregulable hasta los 200 mm. Vista lateralm<strong>en</strong>te, estaaleta posee un ángulo de succión de 15º lo que facilita lap<strong>en</strong>etración <strong>en</strong> suelos compactados por el pisoteo de losanimales al pastorear la pradera. El ancho de la mismaes de 60 mm y el ángulo de la V de 85º (<strong>en</strong> las figuras 1y 2 se observa una vista <strong>en</strong> planta y <strong>en</strong> perspectiva delprototipo completo y del dispositivo de fertilización yremoción del suelo diseñado).De este modo, es posible labrar el suelo <strong>en</strong> profundidadpara facilitar el posterior desarrollo radicular de lapastura (esto <strong>en</strong> especial <strong>en</strong> suelos compactados por elpisoteo de animales o tránsito de maquinarias) y ademáscolocar el fertilizante por debajo de la semilla, con unaseparación de ésta que puede oscilar alrededor de los150 mm, a efectos de no dañar las plantas <strong>en</strong> su estadode crecimi<strong>en</strong>to inicial.El nuevo conjunto de siembra y fertilización, <strong>en</strong> definitiva,queda conformado por la cuchilla tipo dura flute paramicrolabranza del suelo, el dispositivo de fertilización yde remoción del suelo descrito, abresurcos para la conformaciónde la cama de siembra formado por discosdobles con tubos de bajada de la semilla <strong>en</strong> su parte posterior,con ruedas reguladoras de la profundidad de siem-Diseño y prestaciones de un prototipo de siembra directa para intersiembra de pasturas


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 57Figura 1 y 2. Vista <strong>en</strong> planta y <strong>en</strong> perspectiva del prototipo y el azadón corto diseñado e incorporado al mismo.bra y, finalm<strong>en</strong>te, sistema de cierre de la faja de siembray compresión de la semilla formado por doble rueda degoma <strong>en</strong> "V" con discos cóncavos d<strong>en</strong>tados.A efectos de comprobar las prestaciones de este nuevoconjunto de siembra y fertilización, se efectuaron experi<strong>en</strong>ciasconsist<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> siembra de festuca sobre praderascon distintos niveles de alfalfa, obt<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do el gradode cobertura exist<strong>en</strong>te al mom<strong>en</strong>to de la siembra pormedio de cortes efectuados a ras del suelo y posteriorsecado del material <strong>en</strong> estufa hasta peso constante paradeterminar kg m.s. x ha -1 y poder evaluar, de esta forma,el grado de efici<strong>en</strong>cia alcanzado por la nueva línea desiembra y fertilización.Para la determinación de la profundidad de la faja desiembra y colocación de la semillas y el fertilizante serealizaron muestreos repres<strong>en</strong>tativos, tomando las medicionesrespectivas desde la cota superficial del suelo,libre de cobertura vegetal, por medio de una regla graduada<strong>en</strong> mm, aplicando a los datos el análisis estadísticocorrespondi<strong>en</strong>te.2) Ensayos comparativos <strong>en</strong> intersiembra de festuca:Se efectuó el <strong>en</strong>sayo comparativo del prototipo (de unpeso total con tolvas vacías de 2500 kg) provisto de dossistemas difer<strong>en</strong>tes de siembra y fertilización (armandoel mismo con cada uno de ellos por separado sobre elmismo prototipo para conformar dos unidades de siembradistintas) con una máquina de siembra directa depasturas (de un peso de 4500 kg con tolvas vacías)difundida y reconocida <strong>en</strong> el país, ambas con el mismoancho de trabajo, <strong>en</strong> la intersiembra de festuca sobre unapradera de alfalfa degradada.2.1. Diseño experim<strong>en</strong>tal y tratami<strong>en</strong>tos: se utilizó undiseño de parcelas divididas con 6 tratami<strong>en</strong>tos (3 sembradorascon fertilización y sin ella) y 4 repeticiones, dondelas parcelas principales correspond<strong>en</strong> a los 2 niveles defertilización (con y sin ella) y las subparcelas, que requier<strong>en</strong>mayor precisión <strong>en</strong> sus mediciones, a los 3 tipos desembradoras. Los tratami<strong>en</strong>tos son: a) Intersiembra con elprototipo con el nuevo conjunto de siembra y fertilización,con fertilización; b) Idem al anterior, sin fertilización; c)Intersiembra con el prototipo con el dispositivo de siembrapara granos finos, con fertilización; d) Idem al anterior, sinfertilización; e) Intersiembra con sembradora testigo, confertilización; f) Idem al anterior, sin fertilización.Los conjuntos de siembra utilizados <strong>en</strong> cada caso son:a) Prototipo con nuevo sistema según lo descrito <strong>en</strong> ítem 1.b) Prototipo con conjunto para granos finos: cuchilla demicrolabranza tipo dura flute, abresurco de disco doblecon ruedas reguladoras de la profundidad y bajada de lasemilla <strong>en</strong> su parte posterior y sistema de cierre de la fajade siembra y compresión de la semilla formado por doblerueda de goma <strong>en</strong> "V" con discos cóncavos d<strong>en</strong>tados.PRINCIPI M.A. 1 ; MATTANA 1 R.R.; CARDINALI 1 O.P. y COLODRO 1 J.L.


58 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1c) Para sembradora testigo: cuchilla de microlabranzatipo dura flute, abresurco de disco doble con ruedas lateralesreguladoras de profundidad y bajada de la semilla<strong>en</strong> su parte posterior y dispositivo de cierre de surco ycompresión de la semilla formado por doble rueda degoma <strong>en</strong> "V" con discos cóncavos d<strong>en</strong>tados.Como se puede apreciar, <strong>en</strong>tre los dispositivos b yc descriptos no exist<strong>en</strong> difer<strong>en</strong>cias, variando solam<strong>en</strong>teaquí, como ya se m<strong>en</strong>cionó, el peso de ambasmáquinas.2.2. Material y condiciones de siembra: Los <strong>en</strong>sayosse realizaron <strong>en</strong> el campo experim<strong>en</strong>tal de la Fac.de Agronomía y Veterinaria de la UNRC, ubicado <strong>en</strong>La Agüada, Departam<strong>en</strong>to Río Cuarto, a 33º 57´ delat. Sur y 64º 50´ de long. Oeste, donde predominansuelos Hapludoles típicos de textura franco ar<strong>en</strong>osafina.Se sembró festuca alta sobre una pradera de alfalfadegradada y se calibraron los equipos de siembra directade modo de lograr idéntica d<strong>en</strong>sidad (1.500.000 semillasfértiles x ha -1 ) y profundidad teórica de siembra (0,8cm desde la cota superficial del suelo libre de coberturavegetal). En los tratami<strong>en</strong>tos correspondi<strong>en</strong>tes a lavari<strong>en</strong>te con fertilización se utilizó una dosis de 70 kg. xha -1 de fofato monoamónico. La superficie de las parcelascorrespondió al ancho de las sembradoras (12 líneasa 0,35 m) por una longitud de 30 m.En los 3 años se efectuó la siembra durante la primeraquinc<strong>en</strong>a de abril, utilizando semilla cuyo PG , VC y pesovariable, oscilando <strong>en</strong>tre 55 y 59% de PG y una purezafísico botánica del 99%.La velocidad de trabajo fue, <strong>en</strong> todos los casos, de 6 km/h.2.3. Determinación de las variables que se midieron:2.3.1. Efici<strong>en</strong>cia de implantación: se realizó el primerrecu<strong>en</strong>to a los 30 días de realizada la siembra y <strong>en</strong> elmes de octubre, aproximadam<strong>en</strong>te 180 días a posterior ala misma, según la experi<strong>en</strong>cia de implantación de la festuca<strong>en</strong> la zona de refer<strong>en</strong>cia. Se constató el número finalde plantas emergidas, sobre las cuatro líneas c<strong>en</strong>tralesde cada tratami<strong>en</strong>to, tomándose 1 muestra de 0,71 mlineales <strong>en</strong> cada una de ellas (1 m 2 <strong>en</strong> total). La efici<strong>en</strong>ciade implantación se obtuvo como el coci<strong>en</strong>te expresado<strong>en</strong> porc<strong>en</strong>tajes, <strong>en</strong>tre el número final de plantas logradasy el número de semillas útiles sembradas.2.3.2. Resist<strong>en</strong>cia mecánica a la p<strong>en</strong>etración (Mpa) yhumedad del suelo (%) <strong>en</strong> los niveles de profundidad de0 a 500 mm, <strong>en</strong> las huellas dejadas luego de la siembrapor las sembradoras de siembra directa comparadas,ambas con ruedas del mismo diámetro y ancho, y <strong>en</strong> parcelastestigos sin tránsito. La resist<strong>en</strong>cia a la p<strong>en</strong>etraciónse determinó mediante un p<strong>en</strong>etrómetro electrónico registradorASAE S313 y la humedad por método gravimétrico.2.3.3. Determinación de la producción de forraje: sedeterminó la producción de materia seca <strong>en</strong> un corteefectuado a ras del suelo aproximadam<strong>en</strong>te a los 360días de la siembra (material acumulado durante el cicloinvierno-primaveral y estival de desarrollo del cultivo).RESULTADOS Y CONSIDERACIONESEn las tablas 1 y 2 se indican los resultados de laspruebas individuales del prototipo efectuadas <strong>en</strong> el año2002. En siembras de festuca efectuadas sobre 3 nivelesdistintos (cantidad de m.s. x ha -1 ) de la pastura exist<strong>en</strong>teTabla 1. Profundidad de la faja de siembra y fertilización y efici<strong>en</strong>cia de implantaciónTabla 2. Ubicación de la semilla y el fertilizante.Diseño y prestaciones de un prototipo de siembra directa para intersiembra de pasturas


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 59Tabla 3. Número de plantas de festuca emergida (pl x ha -1 ) y efici<strong>en</strong>cia de implantación (%) a los 30 días de siembra, obt<strong>en</strong>idas con tressistemas de Intersiembra y dos niveles de fertilización, sobre una pradera de alfalfa degradada.Tabla 4. Número de plantas de festuca emergidas (pl x ha -1 ) y efici<strong>en</strong>cia de implantación (%) a los 180 días de siembra, obt<strong>en</strong>idas con tressistemas de Intersiembra y dos niveles de fertilización, sobre una pradera de alfalfa degradada.(alfalfa) se logró una adecuada p<strong>en</strong>etración del nuevosistema de siembra y fertilización, sin problemas de atorami<strong>en</strong>toy ubicando la semilla y el fertilizante a la profundidaddeseada.En los <strong>en</strong>sayos comparativos, <strong>en</strong> los tres años se pudoconstatar, a los 30 días de la siembra, que existieron difer<strong>en</strong>ciassignificativas <strong>en</strong> la efici<strong>en</strong>cia de implantación afavor del prototipo con azadón, con respecto al mismo sinazadón y a la máquina testigo (tabla 3), lo cual es deimportancia dado que la velocidad de germinación esfundam<strong>en</strong>tal, para el caso que después de la siembra nollueva hasta la primavera retrasándose la germinación yel 1.º corte de forraje. Lo expuesto se constató a los 180días de la siembra para el año 2003, <strong>en</strong> el cual no seregistraron lluvias a posterior de la siembra y hasta finesde ese año, mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> el 2002 y 2004 los valoresde plantas establecidas <strong>en</strong> todos los tratami<strong>en</strong>tos noarrojaron difer<strong>en</strong>cias significativas (tabla 4), ésto posiblem<strong>en</strong>tepor la ocurr<strong>en</strong>cia de lluvias tempranas de primaveraque facilitaron la germinación de semillas lat<strong>en</strong>tes.Con respecto a la producción de forrajes cabe acotarque <strong>en</strong> el año 2003 una int<strong>en</strong>sa sequía <strong>en</strong> el período posteriora la siembra, que duró prácticam<strong>en</strong>te hasta finalizarel año, impidió el establecimi<strong>en</strong>to del cultivo, secándoseincluso las plantas nacidas <strong>en</strong> otoño, por lo que no sepudo obt<strong>en</strong>er la producción de forraje. En los años res-PRINCIPI M.A. 1 ; MATTANA 1 R.R.; CARDINALI 1 O.P. y COLODRO 1 J.L.


60 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1años restantes, a pesar de equipararse <strong>en</strong> primavera,como ya se dijo, los valores de plantas establecidos(medidos a los 180 días de la siembra), la producción deforraje lograda por el prototipo con azadón corto y conaplicación de fertilizante fosforado <strong>en</strong> la siembra, por lamayor labranza de la faja de siembra y fertilización y unmayor aprovechami<strong>en</strong>to del fósforo colocado por los azadonesa 150 mm de profundidad, fue superior que elresto de los tratami<strong>en</strong>tos, aunque al realizar el análisisestadístico y debido a un CV elevado, no se evid<strong>en</strong>ciaronestas difer<strong>en</strong>cias de modo significativo (tabla 5).Se comprobó, <strong>en</strong> mediciones realizadas <strong>en</strong> el año2004, una m<strong>en</strong>or compactación del suelo hasta 120 mmde profundidad (resist<strong>en</strong>cia a la p<strong>en</strong>etración medida bajolas huellas de las sembradoras) con el nuevo prototipo alcompararlo con la máquina de siembra directa testigo(figura 3).CONCLUSIONESComo conclusión de la experim<strong>en</strong>tación individual delprototipo <strong>en</strong> la siembra de pasturas se despr<strong>en</strong>de que elnuevo sistema cumplió efici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te con la apertura dela faja de siembra, la ubicación del fertilizante y la semillaa la profundidad seleccionada y la efici<strong>en</strong>cia de siembrade festuca sobre praderas degradadas de alfalfa, condifer<strong>en</strong>tes niveles de cobertura de las mismas, mant<strong>en</strong>i<strong>en</strong>doefici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te las profundidades de siembra y laTabla 5. Producción de forrajes de festuca (kg m.s. x ha -1 ) logrados <strong>en</strong> un corte con tres sistemas de Intersiembra y dos niveles de fertilización,sobre una pradera de alfalfa degradada.Figura 3. Resist<strong>en</strong>cia mecánica a la p<strong>en</strong>etración del suelo (MPa) medida bajo las huellas de tres sistemas difer<strong>en</strong>tes de Intersiembra y untestigo sin tránsito <strong>en</strong> una pradera degradada.Diseño y prestaciones de un prototipo de siembra directa para intersiembra de pasturas


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 61del fertilizante al variar los niveles de cobertura de la praderaexist<strong>en</strong>te.Como conclusión g<strong>en</strong>eral, de acuerdo a lo analizado<strong>en</strong> los resultados de los <strong>en</strong>sayos comparativos, se apreciauna t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia del nuevo prototipo <strong>en</strong> mejorar la efici<strong>en</strong>ciade implantación y la producción de forraje, y unam<strong>en</strong>or compactación del suelo con respecto a la sembradoratestigo.AGRADECIMIENTOAl personal no doc<strong>en</strong>te de la Facultad de Agronomía yVeterinaria de la UNRC, Srs. Franco Cardetti, OsvaldoG<strong>en</strong>esio y Ricardo Ramírez, y al estudiante de Ing<strong>en</strong>ieríaAgronómica Esteban Ristorto, por la colaboración brindadapara la ejecución de este trabajo; al Ing. PedroStafolani y a los estudiantes de la Facultad de Ing<strong>en</strong>iería,Hernan Franchetti y Jhonatan Domínguez, por la confecciónde la vista espacial del prototipo <strong>en</strong> soporte informático,y a la Profesora Silvia C. Beck del Departam<strong>en</strong>to deL<strong>en</strong>guas de la Facultad de Ci<strong>en</strong>cias Humanas de laUNRC, por la traducción de textos al idioma inglés.Este trabajo fue subsidiado por la SECYT-UNRC(Secretaría de Ci<strong>en</strong>cia y Técnica de la UNRC)REFERENCIASBaumer C.R. 1999. Siembra directa de forrajeras ymáquinas para intersiembra de pasturas. EnSembradoras y fertilizadoras. AAPRESID. Serie SiembraDirecta N.º 2. Arg<strong>en</strong>tina. Pp 155-161.Bullied W.S., Entz M.H. and S.R. Smith. 1999. No-tillalfalfa stand termination strategies: Alfalfa control andwheat and barley production. Canadian Journal of Plantsci<strong>en</strong>ce. ISSN 0008-4220. 79 (1). Pp 71-83Chisholm T.S., Vigil F.R. Klosterman T.M. and G. Orcutt.1980. Interseeding and plans for SDSU'S new machinefor better pasture production. Pp 2-14.Delafosse R..M. 1993. Técnicas de aplicación mecanizadas<strong>en</strong> siembra de pasturas. Cuaderno N.º 5. Institutode ing<strong>en</strong>iería Rural CICA - <strong>INTA</strong> Castelar. Pp 40.Delafosse R.M. y A. Onorato. 1991. Máquinas para lasiembra e intersiembra de pasturas. Compon<strong>en</strong>tes y técnicasadecuadas de uso. Oficina Regional de la FAOpara América Latina y el Caribe. Santiago. Chile. Pp 39.Duarte, G. 2000. Base para el éxito <strong>en</strong> la implantaciónde pasturas con alfalfa. En Pasturas <strong>en</strong> siembra directa.Jornadas de intercambio técnico 2000. Cap. 2.Implantación. AAPRESID. Ed. Amalevi. Pp 17-32.Kalmbacher. 1984. Establishm<strong>en</strong>t of legumes in bahiagrasssod. Ona Agricultural Research C<strong>en</strong>ter, Ona,Florida. Pp 86-91.Lowther W.L., Horrel R..F and W.J. Fraser. 1987.Effectiv<strong>en</strong>es of strip seeder direct drill for pasture establishm<strong>en</strong>t.Soil and tillage Research :38(1-2). Pp 161-174.Miñon D.P., Enrique M.L. y R.A. Barbarossa. 1996.R<strong>en</strong>ovación e intersiembra de pasturas irrigadas.Información técnica IDEVI N.º 6. Conv<strong>en</strong>io IDEVI - <strong>INTA</strong>.Pp 1-23.Principi M.A., Mattana R.R. Cardinali O.P. y J.L.Colodro. 2002 a. "Diseño y experim<strong>en</strong>tación de un prototipopara siembra directa de granos finos". InvestigaciónAgraria. Producción y Protección Vegetales. InstitutoNacional de Investigación y Tecnología Agraria yAlim<strong>en</strong>taria (INIA) España. ISSN 0213-5000. Vol. 17 (2).2002. Pp 207-217.Principi M.A., Mattana R.R. Cardinali O.P. y J.L.Colodro. 2002 b. "Diseño y performance de un prototipopara siembra directa". <strong>RIA</strong>. <strong>INTA</strong>. Arg<strong>en</strong>tina. ISSN 0325-8718. Vol. 31 (2), 2002. Pp 135-148.Pottinger P. 1992. R<strong>en</strong>ovación de pastura: éxito o fracaso.Puntos importantes para el éxito. Primer CongresoMundial sobre producción, utilización y conservación deforrajes empleados <strong>en</strong> la alim<strong>en</strong>tación de la ganaderíavacuna - Forrajes '92. Bs.As. Confer<strong>en</strong>cia. Pp 463-493.Seaney R.R., Reid W.S. and G.C. Bergstrom. 1983.Minimum tillage establishm<strong>en</strong>t of forage. Field Crops.Cooperative Ext<strong>en</strong>sion. Cornell University.Wolf, D.D. and B..W. Kirby. 1984. Late season alfalfaplanting: Conv<strong>en</strong>tional versus No-Till. Virginia TechDepartm<strong>en</strong>t of Agronomy and Chevron ChemicalCompany. Pp 50-53.PRINCIPI M.A. 1 ; MATTANA 1 R.R.; CARDINALI 1 O.P. y COLODRO 1 J.L.


62 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Grupos funcionales de plantas, producciónde forraje y efici<strong>en</strong>cia de uso deradiación de pastizales naturales <strong>en</strong>condiciones pot<strong>en</strong>ciales y limitadas deagua y nitróg<strong>en</strong>oCOLABELLI, M.R. 1 , AGNUSDEI, M.G. 2 y DURAND J-L. 3RESUMENCon el objetivo de analizar el efecto de la disponibilidad hídrica y nitrog<strong>en</strong>ada sobre el crecimi<strong>en</strong>to primaveroestival de forraje, se condujo un experim<strong>en</strong>to <strong>en</strong> un pastizal natural de la Pampa Deprimida(Arg<strong>en</strong>tina) con adecuado suministro de fósforo (P). Se utilizó un diseño <strong>en</strong> parcela dividida, con el factoragua (A) <strong>en</strong> la parcela principal y nitróg<strong>en</strong>o (N) <strong>en</strong> la subparcela, con tres repeticiones. Los tratami<strong>en</strong>tosfueron: agua y nitróg<strong>en</strong>o no limitante (PNA); agua no limitante (PA); nitróg<strong>en</strong>o no limitante (PN) y condicionesnaturales de A y N (P). El período experim<strong>en</strong>tal incluyó dos rebrotes, el primero <strong>en</strong>tre el 24/11/1997 yel 23/01/1998 y el segundo, <strong>en</strong>tre el 23/01/1998 y el 26/03/1998. Se evaluaron: i) acumulación de forraje,a partir de cortes <strong>en</strong> secu<strong>en</strong>cia de parcelas homólogas completas; ii) composición botánica, por separaciónmanual de una sub-muestra de cada parcela <strong>en</strong> los grupos funcionales gramíneas C 3 , gramíneas C 4 ,leguminosas y malezas; iii) radiación solar interceptada (Ri) por mediciones con un radiómetro Delta-T; apartir de esta variable se calculó la radiación fotosintéticam<strong>en</strong>te activa interceptada (RFAi); y iv) efici<strong>en</strong>ciade uso de la radiación (EUR) estimada a partir de la p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te de la regresión lineal forzada por el orig<strong>en</strong><strong>en</strong>tre el forraje acumulado y la RFAi acumulada. Los tratami<strong>en</strong>tos con A y N modificaron la contribución delos grupos funcionales del pastizal. La acumulación pot<strong>en</strong>cial estival de forraje superó las 10 tn MS ha -1 ,y casi triplicó los valores del tratami<strong>en</strong>to P. La EUR explicó el 70% de las difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong> productividad <strong>en</strong>treel tratami<strong>en</strong>to PNA y P <strong>en</strong> el primer rebrote, mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> este mismo porc<strong>en</strong>taje la RFAi explicó talesvariaciones <strong>en</strong> el segundo rebrote. Los cambios <strong>en</strong> la productividad son discutidos <strong>en</strong> términos del impactodel suministro de agua y nitróg<strong>en</strong>o sobre la composición botánica, la radiación interceptada y la efici<strong>en</strong>ciade uso de la radiación.Palabras clave: pastizal natural, Pampa Deprimida, producción de forraje, efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación,nitróg<strong>en</strong>o, déficit hídrico.1. Facultad de Ci<strong>en</strong>cias Agrarias, UNMdP. CC 276, 7620 Balcarce. Arg<strong>en</strong>tina. Correo electrónico: mcolabelli@balcarce.inta.gov.ar.2. EEA Balcarce. <strong>INTA</strong>. CC 276, 7620 Balcarce. Arg<strong>en</strong>tina. Correo electrónico: magnusdei@balcarce.inta.gov.ar3. BP 6. INRA Lusignan. 86600 Lusignan, Francia. Correo electrónico: jldurand@lusignan.inra.frRecibido 12 de noviembre// Aceptado 10 de diciembre// Publicado online 15 de diciembreGrupos funcionales de plantas, producción de forraje y y efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación de pastizales naturales <strong>en</strong> condiciones...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 63ABSTRACTThe objective of this study was to compare the effect of soil water (A) and nitrog<strong>en</strong> (N) availability uponspring-summer forage growth under non-limiting soil phosphorus (P) availability in a natural grasslands ofthe Pampa region of Arg<strong>en</strong>tina. The treatm<strong>en</strong>ts were: non-limiting water and N (PNA); non-limiting water(PA); non-limiting N (PN) and natural conditions of N and water (P). The experim<strong>en</strong>tal design was split-plot,with water as main plot and N as subplot, with three replicates (blocks). The experim<strong>en</strong>tal period comprisedtwo successive regrowth periods, the first one betwe<strong>en</strong> November 24 th 1997 and January 23 rd 1998, and thesecond one betwe<strong>en</strong> January 23 rd and March 26 th 1998. The forage accumulation and botanical compositionwere evaluated by harvesting the whole plots (cutting height 25 mm) and separating a subsample of theharvested material into C 3 grasses, C 4 grasses, legumes and forbs. Intercepted photosynthetically activeradiation (RFAi) was calculated from measurem<strong>en</strong>ts of intercepted radiation (Ri). Radiation use effici<strong>en</strong>cy(EUR) was estimated as the slope of the linear regression forced through the origin betwe<strong>en</strong> accumulatedbiomass and accumulated RFAi. The treatm<strong>en</strong>ts with A and N significantly modified the grassland botanicalcomposition in comparison with P treatm<strong>en</strong>t. The forage accumulation was three-fold higher in PNA treatm<strong>en</strong>twith respect to the natural condition (P). The EUR explained the 70% of differ<strong>en</strong>ces in productivity betwe<strong>en</strong>PNA and P treatm<strong>en</strong>t in first regrowth, and the RFAi explained the 70% of differ<strong>en</strong>ces in productivitybetwe<strong>en</strong> PNA and P treatm<strong>en</strong>t in second regrowth. The changes in productivity are discussed in terms ofthe direct effect of N and water upon botanical composition, RFAi and EUR.Keywords: Flooding pampas, natural grasslands, herbage production, RUE, nitrog<strong>en</strong>, water deficit.INTRODUCCIÓNLos pastizales del Río de la Plata, conformados por lasecorregiones de las Pampas <strong>en</strong> Arg<strong>en</strong>tina y de lasSabanas <strong>en</strong> Uruguay, constituy<strong>en</strong> una de las regiones depastizales templados más grandes del mundo, con unasuperficie cercana a los 700.000 km 2 . La vegetación deestos pastizales pres<strong>en</strong>ta dominancia de especies degramíneas mesotérmicas (C 3 ) y megatérmicas (C 4 ), yuna baja proporción de leguminosas (Perelman et al.,2001). Una de las principales implicancias de la coexist<strong>en</strong>ciade los grupos funcionales m<strong>en</strong>cionados es la posibilidadde producir forraje a lo largo del año, aunque contasas de crecimi<strong>en</strong>to mínimas <strong>en</strong> invierno y máximas <strong>en</strong>primavera (Sala et al., 1981).Los cambios <strong>en</strong> la disponibilidad de los recursos delambi<strong>en</strong>te, como agua y nitróg<strong>en</strong>o, pued<strong>en</strong> alterar la composiciónbotánica de la comunidad de un pastizal, y por<strong>en</strong>de, la sust<strong>en</strong>tabilidad del sistema. Especies positivam<strong>en</strong>teafectadas pued<strong>en</strong> increm<strong>en</strong>tar su productividad eimportancia, mi<strong>en</strong>tras que otras negativam<strong>en</strong>te afectadaspued<strong>en</strong> disminuir su productividad y declinar <strong>en</strong>importancia d<strong>en</strong>tro de la comunidad (Niu et al., 2008).Resultados de estudios sobre los efectos del nitróg<strong>en</strong>o(Wedin y Tilman, 1996) o del agua suplem<strong>en</strong>taria(Skinner et al., 2002) <strong>en</strong> comunidades naturales mostraronuna marcada influ<strong>en</strong>cia sobre la riqueza de especiesy sobre la proporción de grupos funcionales. Estos cambiostambién podrían t<strong>en</strong>er efectos sobre la composiciónde la flora microbiana y consecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te afectar ladinámica de la materia orgánica del suelo (McGaig et al.,1999). Para delinear un manejo productivo y sust<strong>en</strong>tablede los pastizales, es relevante conocer cómo la disponibilidadde los factores m<strong>en</strong>cionados afectan su composiciónflorística.La productividad de los pastizales m<strong>en</strong>cionados <strong>en</strong> laépoca cálida está sujeta a condiciones frecu<strong>en</strong>tes y regularesde déficit hídrico (Sala et al., 1981). El efecto principalde la defici<strong>en</strong>cia hídrica sobre el crecimi<strong>en</strong>to aéreoes directo debido a que limita la expansión del área foliar(Durand et al., 1997). Adicionalm<strong>en</strong>te, ti<strong>en</strong>e efectos indirectosasociados a la defici<strong>en</strong>cia de nitróg<strong>en</strong>o debido aque limita la captura del mismo y afecta el estado nutricionalde las plantas (Lemaire y D<strong>en</strong>oix 1987; Onillon etal., 1995; Gastal y Durand, 2000; González Dugo et al.,2005).En aus<strong>en</strong>cia de limitación hídrica y de nutri<strong>en</strong>tes, la producciónde materia seca está directam<strong>en</strong>te relacionada ala radiación fotosintéticam<strong>en</strong>te activa interceptada y a laefici<strong>en</strong>cia con la cual la radiación interceptada es convertida<strong>en</strong> biomasa (Monteith, 1977). Ambas variables sonafectadas por las condiciones de crecimi<strong>en</strong>to (Sinclair yMuchow, 1999), por lo tanto, la comparación de la efici<strong>en</strong>ciade uso de la radiación (EUR) <strong>en</strong>tre condiciones pot<strong>en</strong>cialesy condiciones de estrés hídrico o nutricional proveeun <strong>en</strong>foque adecuado para compr<strong>en</strong>der el impacto de lalimitación de recursos ambi<strong>en</strong>tales sobre la productividad.Las restricciones de agua y nitróg<strong>en</strong>o son conspicuas <strong>en</strong>COLABELLI, M.R. 1 , AGNUSDEI, M.G. 2 y DURAND J-L. 3


64 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1ambi<strong>en</strong>tes de pastizales de distintas latitudes. Sinembargo, una adecuada cuantificación mediante protocolosde base ecofisiológica ha sido raram<strong>en</strong>te utilizada <strong>en</strong>la investigación sobre este tipo de recursos.La finalidad de este trabajo fue explicar cómo la disponibilidadde recursos del ambi<strong>en</strong>te afecta la capacidadproductiva de comunidades multiespecíficas <strong>en</strong> las quecoexist<strong>en</strong> difer<strong>en</strong>tes grupos funcionales, tales como gramíneasC 3 y C 4 y leguminosas. Nuestro objetivo fuecuantificar el impacto de la limitación hidro-nitrog<strong>en</strong>ada afines de primavera y verano sobre la composición de losgrupos funcionales de plantas, la productividad y la efici<strong>en</strong>ciade uso de la radiación de pastizales templadohúmedosde la Pampa Deprimida bonaer<strong>en</strong>se.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSSitio experim<strong>en</strong>talLa experim<strong>en</strong>tación fue conducida <strong>en</strong> un pastizal naturalubicado <strong>en</strong> un establecimi<strong>en</strong>to ganadero del partidode Ayacucho, Arg<strong>en</strong>tina (37° 45' S; 58° 18' W). El sitioexperim<strong>en</strong>tal estaba conformado por un complejo desuelos dominado por Natracuol típico. Se trabajó <strong>en</strong> unpastizal natural ubicado <strong>en</strong> una posición topográficaintermedia, similar a una comunidad tipo "B" definida porLeón (1975) para el área de Castelli-Pila.El pastizal bajo estudio fue previam<strong>en</strong>te manejadodurante dos años con adecuada disponibilidad de nitróg<strong>en</strong>oy fósforo, y bajo condiciones naturales de disponibilidadhídrica. Durante ese período, el estado del pastizalse controló estrictam<strong>en</strong>te mediante pastoreo de vacunos(Rodríguez Palma et al., 1999) de modo de evitarexced<strong>en</strong>tes de forraje, de mant<strong>en</strong>er un canopeo predominantem<strong>en</strong>tefoliar, y de lograr niveles razonables deefici<strong>en</strong>cia de utilización del crecimi<strong>en</strong>to aéreo, del ord<strong>en</strong>del 60% <strong>en</strong> los difer<strong>en</strong>tes grupos de especies de lacomunidad vegetal (Lemaire y Agnusdei, 2000), lo cualse asoció con la coexist<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el pastizal de gramíneasC 3 , C 4 y leguminosas (Lattanzi et al., 2006). En esteperíodo previo se realizaron aplicaciones de 100 kg ha -1año -1 de nitróg<strong>en</strong>o con urea, repartidas <strong>en</strong> un porc<strong>en</strong>tajede 40 y 60% <strong>en</strong>tre inicio de otoño y fin de invierno, respectivam<strong>en</strong>te,y de 20 kg ha -1 año -1 de fósforo consuperfosfato triple al inicio del otoño. Estas condicionesdeterminaron que la proporción de especies C 3 fueramayoritaria al inicio del pres<strong>en</strong>te experim<strong>en</strong>to. La tabla 1muestra la composición botánica del pastizal al inicio delestudio agrupada <strong>en</strong> los grupos funcionales gramíneasC 3 y C 4 , leguminosas y malezas. Adicionalm<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> latabla 2 se pres<strong>en</strong>tan las especies más importantes <strong>en</strong> sucontribución d<strong>en</strong>tro de cada grupo funcional.Los datos del análisis de suelo indicaron valores de 6,4de pH y 56 g kg- 1 de MO <strong>en</strong> el horizonte superficial. El nivelTabla 1. Composición florística (% de la biomasa aérea) del pastizal al inicio del estudio agrupada <strong>en</strong> los grupos funcionales gramíneas C 3y C 4 , otras especies minoritarias, leguminosas y malezas.Tabla 2. Especies más relevantes de los grupos funcionales gramíneas C3 y C4, leguminosas y malezas del pastizal natural bajo estudioGrupos funcionales de plantas, producción de forraje y y efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación de pastizales naturales <strong>en</strong> condiciones...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 65de fósforo al inicio de la experi<strong>en</strong>cia fue de 6 mg kg -1 defósforo asimilable. No obstante, al inicio del pres<strong>en</strong>te experim<strong>en</strong>totodas las parcelas recibieron 50 kg de P ha -1 paraasegurar que dicho elem<strong>en</strong>to no limite el crecimi<strong>en</strong>to.Tratami<strong>en</strong>tos y diseño experim<strong>en</strong>talSe evaluaron cuatro tratami<strong>en</strong>tos sobre parcelas no limitadas<strong>en</strong> P: agua (A) y nitróg<strong>en</strong>o (N) no limitante (PNA);agua no limitante (PA); nitróg<strong>en</strong>o no limitante (PN) y condicionesnaturales de A y N (P). Se incluye al P <strong>en</strong> la d<strong>en</strong>ominaciónde todos los tratami<strong>en</strong>tos para <strong>en</strong>fatizar aspectosconceptuales y metodológicos. Conceptualm<strong>en</strong>te, porquepara evaluar el efecto de un nutri<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> este caso el N,el resto de los nutri<strong>en</strong>tes no debe ser limitante.Metodológicam<strong>en</strong>te, <strong>en</strong>tonces, lo correcto es proveer decantidades no limitantes del o los nutri<strong>en</strong>tes deficitarios.Por lo tanto, dado que todas las d<strong>en</strong>ominaciones de lostratami<strong>en</strong>tos incluy<strong>en</strong> al P, el mismo no constituye un factorde variación sino de control.En los tratami<strong>en</strong>tos que recibieron agua adicional(PNA-PA), la misma se aplicó por goteo tres veces porsemana. La cantidad de agua aplicada fue variable <strong>en</strong>cada riego dado que se ajustó al objetivo de mant<strong>en</strong>er lasparcelas regadas con una humedad edáfica próxima a lacapacidad de campo. A los tratami<strong>en</strong>tos que recibieron N(PN y PNA) se les aplicó 200 kg ha -1 de N al inicio decada rebrote. La fu<strong>en</strong>te de nitróg<strong>en</strong>o utilizada fue urea.El experim<strong>en</strong>to se condujo bajo el diseño experim<strong>en</strong>talde Parcela Dividida con tres repeticiones. Se asignóel factor agua <strong>en</strong> la parcela principal y el factor nitróg<strong>en</strong>o<strong>en</strong> la sub-parcela al azar d<strong>en</strong>tro de cada parcela principal.El tamaño de las parcelas fue de 1,5 m de anchoy 4 m de largo.Período experim<strong>en</strong>talEl período experim<strong>en</strong>tal incluyó dos rebrotes; cadaperíodo se inició con un corte al ras del suelo y finalizó<strong>en</strong> el mom<strong>en</strong>to <strong>en</strong> que se alcanzó la máxima acumulaciónneta. Esto se logró a partir del ajuste de la frecu<strong>en</strong>ciade corte con el ritmo de s<strong>en</strong>esc<strong>en</strong>cia foliar de lasespecies mayoritarias del pastizal (Lemaire y Agnusdei,2000). El primer período de rebrote se ext<strong>en</strong>dió <strong>en</strong>tre el24/11/1997 y 23/01/1998. El segundo, evaluado sobre lasmismas parcelas experim<strong>en</strong>tales que el primero, <strong>en</strong>tre el23/01 y el 26/03/1998.Variables evaluadas-Acumulación de forraje y composición florística: la primeravariable se obtuvo a partir de cortes <strong>en</strong> secu<strong>en</strong>ciade parcelas homólogas completas a lo largo de cadaperíodo de rebrote, protocolo que es necesario aplicarpara poder estimar adecuadam<strong>en</strong>te la EUR (Sinclair yMuchow, 1999). En el primer y segundo rebrote lasfechas de corte fueron 22/12, 30/12, 7/01, 14/01 y 23/01(28, 36, 44, 51 y 60 días de rebrote) y 4, 12, 18 y 26/03(40, 48, 54 y 62 días de rebrote), respectivam<strong>en</strong>te. Lametodología descripta implicó la utilización de 60 parcelas(4 tratami<strong>en</strong>tos, 3 repeticiones, 5 fechas de corte) quecubrieron una superficie aproximada de 400 m 2 . Se usóuna motosegadora, cosechándose el metro c<strong>en</strong>tral decada parcela a una altura de 3 5 cm. Se registró el pesofresco del total de la parcela, y se tomaron dos submuestras.La primera fue secada a 60 O C hasta pesoconstante para determinar cont<strong>en</strong>ido de materia seca(MS) del material cosechado. La segunda sub-muestrafue separada por especies, y luego éstas reagrupadas <strong>en</strong>los grupos funcionales de plantas gramíneas C 3 , gramíneasC 4 , leguminosas y malezas (especies dicotiledóneasno leguminosas). La MS de cada compon<strong>en</strong>te fueobt<strong>en</strong>ida <strong>en</strong> forma similar a la primer sub-muestra.-Radiación solar interceptada (Ri): se registró radiacióninterceptada sobre (Ris) y debajo (Rid) del canopeo conun radiómetro (DeltaT-Devices Ltd., UK) <strong>en</strong>tre las 11:30 ylas 13:00 hs. <strong>en</strong> tres oportunidades durante cada rebrote.La proporción de la radiación interceptada por el canopeose calculó a partir de la difer<strong>en</strong>cia <strong>en</strong>tre Rid y Ris; los valoresdiarios de %Ri se calcularon a partir de la interpolación<strong>en</strong>tre dos medidas sucesivas.-Radiación fotosintéticam<strong>en</strong>te activa interceptada(RFAi): se calculó a partir del producto <strong>en</strong>tre el %Ri diariay la radiación solar incid<strong>en</strong>te diaria (Rg, MJ m -2 d -1 )afectada por el coefici<strong>en</strong>te 0,48 (Varlet Grancher et al.,1989). El coefici<strong>en</strong>te 0,48 se utiliza para obt<strong>en</strong>er la radiacióncapaz de ser absorbida por los pigm<strong>en</strong>tos fotosintéticos,o sea, radiación fotosintéticam<strong>en</strong>te activa (400 a700 nm de longitud de onda de la luz) a partir de valoresde Rg (300 a 3000 nm de longitud de onda de la luz). Rgse obtuvo <strong>en</strong> una casilla meteorológica ubicada <strong>en</strong> laEstación Experim<strong>en</strong>tal Agropecuaria Balcarce del <strong>INTA</strong>,a 20 km del sitio experim<strong>en</strong>tal.-Efici<strong>en</strong>cia de uso de la radiación (EUR): se estimó a partirde la p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te de la regresión lineal <strong>en</strong>tre biomasa acumuladay RFAi acumulada, metodología utilizada de maneracorri<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la literatura de ecofisiología de cultivos ypasturas (Monteith, 1977; Gosse et al., 1986; Bélanger etal., 1992). Sinclair y Muchow (1999) señalan que la únicaforma confiable de estimar la EUR es ajustando una rectaa una serie de puntos tomados secu<strong>en</strong>cialm<strong>en</strong>te d<strong>en</strong>tro dela fase lineal de acumulación de forraje. El método aplicado<strong>en</strong> este trabajo se ajusta estrictam<strong>en</strong>te al protocoloexperim<strong>en</strong>tal y al modo de cálculo requeridos.-Otras variables climáticas: se registraron la temperaturamedia del aire <strong>en</strong> la estación meteorológica de laEstación Experim<strong>en</strong>tal Agropecuaria Balcarce, situadaaproximadam<strong>en</strong>te a 20 km del pastizal bajo estudio, y lasprecipitaciones <strong>en</strong> el mismo sitio experim<strong>en</strong>tal.COLABELLI, M.R. 1 , AGNUSDEI, M.G. 2 y DURAND J-L. 3


66 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Análisis de la informaciónTodas las variables evaluadas fueron analizadas separadam<strong>en</strong>tepara cada periodo de rebrote. Los datos deacumulación de biomasa, grupos funcionales de plantas eintercepción de radiación se analizaron mediante análisisde varianza (procedimi<strong>en</strong>to GLM, SAS, 1988). Se usó las<strong>en</strong>t<strong>en</strong>cia LSMEANS con la opción PDIFF para la comparaciónde los pares de medias (p=0,05). La ord<strong>en</strong>ada alorig<strong>en</strong> y p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te (RUE) de las regresiones lineales<strong>en</strong>tre biomasa acumulada y RFAi acumulada fueron comparadasmediante variables Dummy. Cuando la ord<strong>en</strong>adaal orig<strong>en</strong> no difirió de cero, la ecuación de regresión pasópor el orig<strong>en</strong>. En caso contrario, dicha regresión no seforzó por el orig<strong>en</strong>.RESULTADOS Y DISCUSIÓNCondiciones ambi<strong>en</strong>talesLa temperatura media del aire fue estable y cercana alos 18 o C durante todo el período experim<strong>en</strong>tal (17,8 +3,2 o C y 18,4 + 3,4 o C para el primer y segundo períodode rebrote, respectivam<strong>en</strong>te). La radiación solar incid<strong>en</strong>tepromedio fue de 20,4 + 5,9 MJ m -2 d -1 para el primerrebrote y de 17,8 + 4,7 MJ m -2 d -1 para el segundo. Elpatrón de precipitaciones fue irregular, alcanzando valoresde 150 y de 79 mm <strong>en</strong> el primer y segundo rebrote,respectivam<strong>en</strong>te (figura 1).Efectos del agua y/o nitróg<strong>en</strong>o sobre la composiciónflorísticaEn ambos períodos de rebrote la proporción de gruposflorísticos se vio marcadam<strong>en</strong>te modificada por los tratami<strong>en</strong>tos(figura 2a y 2b.), mi<strong>en</strong>tras que la remoción simultáneade las defici<strong>en</strong>cias hídrica y fosfo nitrog<strong>en</strong>ada (PNA)determinó la disminución de la proporción de leguminosas<strong>en</strong> favor de las gramíneas C 3 , <strong>en</strong> el primer rebrote, y de lasC 4 , <strong>en</strong> el segundo- El agregado de P y N (PN) produjo elmejor balance gramínea leguminosa <strong>en</strong> ambos periodos.Los tratami<strong>en</strong>tos con P no limitante y sin N agregado (PAy P) pres<strong>en</strong>taron una alta dominancia de leguminosas.El tratami<strong>en</strong>to PNA alcanzó el IAF crítico y se mantuvobajo alta compet<strong>en</strong>cia lumínica <strong>en</strong> alrededor de las dosterceras partes del primer rebrote (figura 3). Este f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>opudo favorecer a las gramíneas de porte erecto ytamaño pot<strong>en</strong>cial grande, características de estos pastizales<strong>en</strong> detrim<strong>en</strong>to de las leguminosas, de m<strong>en</strong>or capacidadpara competir <strong>en</strong> este tipo de condiciones. La composiciónrelativam<strong>en</strong>te balanceada <strong>en</strong>tre ambos gruposde especies observada <strong>en</strong> el tratami<strong>en</strong>to PN <strong>en</strong> ambosrebrotes pudo estar relacionada a que <strong>en</strong> ambos períodoslos %Ri se mantuvieran por debajo del nivel crítico (95%)hasta avanzado el rebrote (figura 3a) o durante toda suduración (figura 3b). En tal s<strong>en</strong>tido, si bi<strong>en</strong> es esperableque el agregado de N g<strong>en</strong>ere un desplazami<strong>en</strong>to de lasleguminosas por parte de las gramíneas, hecho g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>teatribuido a una mayor capacidad de captura deFigura 1. Temperatura media diaria ( o C) y precipitaciones diarias (mm) durante el período experim<strong>en</strong>talGrupos funcionales de plantas, producción de forraje y y efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación de pastizales naturales <strong>en</strong> condiciones...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 67Figura 2a.Figura 2b.Figura 2a y 2b. Proporción <strong>en</strong> la biomasa aérea de los grupos funcionales leguminosas, gramíneas C4, gramíneas C3 y malezas de unpastizal natural bajo difer<strong>en</strong>te disponibilidad de agua y nitróg<strong>en</strong>o <strong>en</strong> dos rebrotes del período estivalCOLABELLI, M.R. 1 , AGNUSDEI, M.G. 2 y DURAND J-L. 3


68 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Figura 3a.Figura 3b.Figura 3a y 3b. Acumulación de forraje (kg MS.ha-1) de un pastizal natural con difer<strong>en</strong>te disponibilidad de agua y nitróg<strong>en</strong>o <strong>en</strong> dos períodosde rebrote estivalrecursos de las gramíneas bajo alta disponibilidad de N(Fisher y Wilman, 1995; Whitehead, 1995), nuestrosresultados sugier<strong>en</strong> que este desplazami<strong>en</strong>to de las leguminosasestaría asociado a que ocurran condiciones decubierta d<strong>en</strong>sa y, por <strong>en</strong>de, de alta compet<strong>en</strong>cia lumínica,típicas de las etapas finales de un rebrote.La remoción simultánea de las defici<strong>en</strong>cias hídrica yfosfo nitrog<strong>en</strong>ada también afectó la relación <strong>en</strong>tre gramíneasC 3 y C 4 , determinando una predominancia de las primerasal inicio de verano (primer rebrote, figura 2a) y delas segundas al final de la estación (figura 2b). En contraposición,lo que g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te se observa bajo condicionesnaturales es una complem<strong>en</strong>tación estacional marcada<strong>en</strong>tre gramíneas C 3 y C 4 , si<strong>en</strong>do las primeras dominantes<strong>en</strong> la época fría y las segundas <strong>en</strong> la época cálida(Sala et al., 1981). Nuestros resultados evid<strong>en</strong>cian que labaja contribución de gramíneas C 3 a la producción estivalde los pastizales no sería un comportami<strong>en</strong>to exclusivam<strong>en</strong>tef<strong>en</strong>ológico, sino que estaría <strong>en</strong> alto grado controladapor la disponibilidad de recursos ambi<strong>en</strong>tales. Esta respuestapodría atribuirse, <strong>en</strong> parte, a que las gramíneas C 4serían más competitivas <strong>en</strong> condiciones ambi<strong>en</strong>tales restrictivas,hecho asociado a su mayor efici<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el usodel agua y del N respecto de las especies C 3 (Vol<strong>en</strong>ec,2007). Sin embargo, el adelanto f<strong>en</strong>ológico de éstas últimasy su mant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to <strong>en</strong> la comunidad cuando las condicionesambi<strong>en</strong>tales no son limitantes, explicarían fuertem<strong>en</strong>teel desplazami<strong>en</strong>to competitivo observado debido alimpedim<strong>en</strong>to o restricción del inicio del rebrote primaveralde las especies C 4 . El hecho de que las gramíneas C 4Grupos funcionales de plantas, producción de forraje y y efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación de pastizales naturales <strong>en</strong> condiciones...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 69resultaron también subordinadas por las leguminosas <strong>en</strong>los tratami<strong>en</strong>tos sin agregado de N <strong>en</strong> ambos rebrotes (PAy P, figuras 2a y 2b) sugiere que estas gramíneas seríanaltam<strong>en</strong>te susceptibles de ser desplazadas de los pastizalesnaturales fr<strong>en</strong>te a condiciones favorables de disponibilidadde recursos ambi<strong>en</strong>tales.Finalm<strong>en</strong>te, los resultados sugier<strong>en</strong> que el increm<strong>en</strong>tode la contribución de gramíneas C 3 <strong>en</strong> el pastizalmediante la fertilización fosfo nitrog<strong>en</strong>ada invernal, situacióna la que fueron sometidos todos los tratami<strong>en</strong>tos <strong>en</strong>los dos años previos al pres<strong>en</strong>te <strong>en</strong>sayo (ver materialesy métodos), sólo at<strong>en</strong>taría con el equilibrio <strong>en</strong>tre especiesC 3 (gramíneas + leguminosas) y C 4 si las condicioneshídricas y de fertilidad edáfica fueran muy favorables<strong>en</strong>tre fines de primavera e inicio de verano, esc<strong>en</strong>arioambi<strong>en</strong>tal que es poco probable <strong>en</strong> la región.Efectos del agua y/o nitróg<strong>en</strong>o sobre la producciónde forrajeEn el primer rebrote, el tratami<strong>en</strong>to PNA mantuvo tasaspróximas a los 100 kg MS ha -1 d -1 , mi<strong>en</strong>tras que la tasade crecimi<strong>en</strong>to promedio del tratami<strong>en</strong>to P fue m<strong>en</strong>or a lamitad (figura 4a). De manera similar, <strong>en</strong> el segundorebrote las tasas de crecimi<strong>en</strong>to alcanzaron los nivelesmáximos hacia el final del período con valores del ord<strong>en</strong>de 90 y 30 kg MS ha -1 d -1 para PNA y P, respectivam<strong>en</strong>te(figura 4b). De manera consist<strong>en</strong>te, las tasas de crecimi<strong>en</strong>tode los tratami<strong>en</strong>tos PA y PN fueron intermedias<strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tos extremos. En el primer rebrote, lastasas máximas de PA y PN fueron próximas a los 80 kgMS ha -1 d -1 declinando hacia el final del rebrote a valoresde 70 y 55 kg MS ha -1 d -1 , respectivam<strong>en</strong>te (figuraFigura 4a.Figura 4b.Figura 4a y 4b. Evolución de las tasas de crecimi<strong>en</strong>to de un pastizal natural con difer<strong>en</strong>te disponibilidad de agua y nitróg<strong>en</strong>o <strong>en</strong> dos períodosde rebrote estival.COLABELLI, M.R. 1 , AGNUSDEI, M.G. 2 y DURAND J-L. 3


70 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À14a). En el segundo, el tratami<strong>en</strong>to PA superó las tasas decrecimi<strong>en</strong>to del tratami<strong>en</strong>to PN, alcanzando <strong>en</strong> la últimafecha valores de 60 y 50 kg MS ha -1 d -1 . En g<strong>en</strong>eral, ladisminución del crecimi<strong>en</strong>to de forraje asociada a restriccionesnutricionales e hídricas son consecu<strong>en</strong>cia, <strong>en</strong> altogrado, de una limitación a nivel de la expansión foliar delos individuos que conforman las poblaciones de unacubierta vegetal (Gastal y Nelson, 1994).Por último, se destaca la marcada superioridad productivadel tratami<strong>en</strong>to PN respecto del P (alrededor de 2 tnMS ha -1 , Tabla 3), la cual estuvo sust<strong>en</strong>tada <strong>en</strong> un equilibradobalance gramínea/leguminosa, tal como se señalópreviam<strong>en</strong>te (figura 2). La productividad observada <strong>en</strong> eltratami<strong>en</strong>to PN es similar a la productividad anual estimadabajo condiciones naturales por los autores referidos <strong>en</strong>el párrafo anterior. Estos resultados muestran que los pastizalesricos <strong>en</strong> leguminosas y manejados con adecuadadisponibilidad de P pued<strong>en</strong> alcanzar una producción primaveroestival de forraje que puede ser de alto valor paraestabilizar la oferta de forraje <strong>en</strong> cad<strong>en</strong>as forrajeras.Análisis del crecimi<strong>en</strong>toComparación <strong>en</strong>tre tratami<strong>en</strong>tos. Letras iguales indican que los tratami<strong>en</strong>tos no difier<strong>en</strong> (p 0,05)Tabla 3. Acumulación de forraje (kg MS.ha-1) de un pastizal natural con difer<strong>en</strong>te disponibilidad de agua y nitróg<strong>en</strong>o <strong>en</strong> dos períodos derebrote estival>En ambos períodos los tratami<strong>en</strong>tos extremos se difer<strong>en</strong>ciaron<strong>en</strong> forma neta, indicando una capacidad pot<strong>en</strong>cialde producción de forraje casi tres veces superior respectodel tratami<strong>en</strong>to P, desarrollado bajo condicionesnaturales de disponibilidad de A y N, no detectándose <strong>en</strong>ningún período difer<strong>en</strong>cias significativas <strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tosPA y PN (tabla 3). Los resultados indican unaproducción pot<strong>en</strong>cial estival total que superaría las 10 tnMS ha -1 (tabla 3). Hasta lo que se ha revisado, estosresultados constituy<strong>en</strong> la primera refer<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> cuanto alpot<strong>en</strong>cial productivo de estos pastizales.El tratami<strong>en</strong>to P, el cual pres<strong>en</strong>tó una elevada dominanciade leguminosas (figura 2), alcanzó una producciónestival de forraje superior a las 4 tn MS ha -1 (tabla3). Este valor puede considerarse elevado para una producciónestacional de forraje, t<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta que lasestimaciones de producción total anual para este tipo depastizales <strong>en</strong> condiciones naturales rondan las 5 6 tn MSha -1 (Sala et al., 1981; Hidalgo y Cahuépé, 1991). Losresultados son al<strong>en</strong>tadores <strong>en</strong> cuanto al pot<strong>en</strong>cial demejora productiva que es posible lograr mediante la promociónde leguminosas a través de manejos adecuadosde fertilidad edáfica y pastoreo.La evolución de la intercepción de radiación (%Ri) mostróque todos los tratami<strong>en</strong>tos alcanzaron los niveles máximosalrededor de 50 días desde el inicio del primer rebrotey de los 60 días del segundo (figura 3). El máximo %Ridel tratami<strong>en</strong>to PNA superó <strong>en</strong> un 30 y 35% al tratami<strong>en</strong>toP <strong>en</strong> el primer y segundo rebrote, respectivam<strong>en</strong>te. El tratami<strong>en</strong>toP no superó niveles subcríticos de %Ri, si<strong>en</strong>dom<strong>en</strong>ores al 70% <strong>en</strong> ambos períodos de rebrote.El tratami<strong>en</strong>to PNA acumuló 400 MJ m -2 de RFAi <strong>en</strong> elprimer rebrote, y aproximadam<strong>en</strong>te 25% m<strong>en</strong>os <strong>en</strong> elsegundo, mi<strong>en</strong>tras que el tratami<strong>en</strong>to P pres<strong>en</strong>tó muchom<strong>en</strong>or captura de radiación, con aproximadam<strong>en</strong>te 300MJ m-2 y m<strong>en</strong>os de 200 MJ m-2 <strong>en</strong> el primer y segundorebrote, respectivam<strong>en</strong>te (figura 5a y 5b). En comparacióncon el tratami<strong>en</strong>to P, la adición de N no mejoró lacaptura de radiación, mi<strong>en</strong>tras que la adición de aguaaum<strong>en</strong>tó significativam<strong>en</strong>te la RFAi, especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> elsegundo rebrote.La ord<strong>en</strong>ada al orig<strong>en</strong> de las regresiones lineales pres<strong>en</strong>tadas<strong>en</strong> la figura 5, no difirió de cero a excepción delos tratami<strong>en</strong>tos sin agua adicional <strong>en</strong> el primer rebrote.Ello pudo ocurrir debido a que, como fue m<strong>en</strong>cionado,ambos tratami<strong>en</strong>tos mostraron un ritmo inicial de acumulaciónde forraje (hasta los primeros días de <strong>en</strong>ero, figura4a) que posteriorm<strong>en</strong>te no pudieron sost<strong>en</strong>er debido,Grupos funcionales de plantas, producción de forraje y y efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación de pastizales naturales <strong>en</strong> condiciones...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 71probablem<strong>en</strong>te, a la disminución del cont<strong>en</strong>ido hídricodel suelo asociado a la aus<strong>en</strong>cia de lluvias (figura 1).La EUR del tratami<strong>en</strong>to PNA para el primer y segundorebrote alcanzó valores de 1,55 y 1,64 g MS MJ -1 , respectivam<strong>en</strong>te(figura 5a y 5b). Estos pued<strong>en</strong> considerarsem<strong>en</strong>ores a los esperables para pasturas puras de gramíneasC 3 o C 4 bajo condiciones ambi<strong>en</strong>tales no limitantes:del ord<strong>en</strong> de 1,7 a 2,2 g MS MJ -1 para las C 3 y 2,5 gMS MJ -1 para las C 4 (Gosse et al., 1986; Belanger,1990). En las leguminosas, <strong>en</strong> cambio, los valores pot<strong>en</strong>cialesesperables son m<strong>en</strong>ores, del ord<strong>en</strong> de 1,7 (Gosseet al., 1986; Collino et al., 2007; Teixeira et al., 2008)<strong>en</strong>contrándose valores aún m<strong>en</strong>ores, <strong>en</strong> el rango de 0,5a 1,0 g MS MJ -1 que son atribuidos a variaciones <strong>en</strong> lapartición de MS hacia raíces (Sinclair y Muchow, 1999;Brown et al., 2006). Así, los niveles de EUR <strong>en</strong>contradosbajo condiciones aproximadam<strong>en</strong>te no limitantes para elcrecimi<strong>en</strong>to son coher<strong>en</strong>tes con la combinación de losgrupos funcionales de especies que coexist<strong>en</strong> <strong>en</strong> el pastizalestudiado.El aum<strong>en</strong>to <strong>en</strong> la producción de forraje del tratami<strong>en</strong>toPNA <strong>en</strong> comparación con el tratami<strong>en</strong>to P puededeberse a un increm<strong>en</strong>to <strong>en</strong> la EUR, a un increm<strong>en</strong>to <strong>en</strong>la RFAi acumulada por el cultivo (dada por un mayordesarrollo del área foliar), o a un increm<strong>en</strong>to parcial deambos. En la figura 6 se pres<strong>en</strong>ta un esquema para elcálculo de tales proporciones para dos tratami<strong>en</strong>toscualquiera, A y B. La proporción explicada por la EURsurge del coci<strong>en</strong>te <strong>en</strong>tre difer<strong>en</strong>cias de biomasa acumuladaseñalada como [c-b]/[a-b], mi<strong>en</strong>tras que la proporciónque explica la RFAi se obti<strong>en</strong>e a partir del coci<strong>en</strong>te<strong>en</strong>tre difer<strong>en</strong>cias de biomasa acumulada señalada como[a-c]/[a-b] <strong>en</strong> la misma figura.En el primer rebrote, la caída <strong>en</strong> la EUR <strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tosextremos (PNA y P) explicó alrededor del 70%de las difer<strong>en</strong>cias productivas <strong>en</strong>tre ambos. Estas respuestasson g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te asociadas al efecto negativode las limitaciones ambi<strong>en</strong>tales sobre la efici<strong>en</strong>cia fotosintéticade las plantas (Belanger et al., 1992), sobre laspérdidas por respiración y/o sobre la partición de asimiladoshacia el sistema radical. El m<strong>en</strong>or efecto observado<strong>en</strong> la RFAi acumulada, la cual cayó sólo un 30%, indicaque las restricciones al crecimi<strong>en</strong>to habrían ocurrido posteriorm<strong>en</strong>tea que las cubiertas desarrollaran un IAF relativam<strong>en</strong>tealto, hecho que es consist<strong>en</strong>te con las lluviasocurridas al inicio del período (figura 1). Los tratami<strong>en</strong>tosPNA y PA fueron similares <strong>en</strong> cuanto a la EUR, difiri<strong>en</strong>dosólo <strong>en</strong> la cantidad de RFAi acumulada, indicando que larestricción nitrog<strong>en</strong>ada operó exclusivam<strong>en</strong>te a nivel dela expansión foliar. En cambio, <strong>en</strong> el tratami<strong>en</strong>to PN lalimitación fue más severa, afectándose no sólo la RFAiacumulada sino también la EUR. Esta mayor severidadg<strong>en</strong>erada por la falta de agua, aún <strong>en</strong> condiciones de altosuministro de P y N, reflejaría una situación de estrésmúltiple resultante del déficit hídrico per se, de un efectosecundario sobre la disponibilidad edáfica de ambosminerales y de su captura por parte de las plantas(González Dugo et al., 2005). Los tratami<strong>en</strong>tos PN y P nodifirieron <strong>en</strong> RFAi mi<strong>en</strong>tras que PN duplicó la EUR de P.Esta última información corrobora resultados <strong>en</strong>contrados<strong>en</strong> la literatura que señalan el marcado efecto de ladefici<strong>en</strong>cia de N sobre la EUR (Gastal y Lemaire, 2002).Figura 5a.COLABELLI, M.R. 1 , AGNUSDEI, M.G. 2 y DURAND J-L. 3


72 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Figura 5b.Figura 5. Efici<strong>en</strong>cia de uso de la radiación interceptada (EUR) <strong>en</strong> un pastizal natural bajo difer<strong>en</strong>tes niveles de disponibilidad hídrica y nitrog<strong>en</strong>ada.(a) Primer rebrote. Las ecuaciones de regresión lineal y r 2 para los distintos tratami<strong>en</strong>tos son: PNA: y= 1,55x; r 2 = 0,94; PA: y=1,38x; r 2 = 0,95; PN: y= 0,60x + 159; r 2 = 0,85; P: y= 0,34x + 133; r 2 = 0,93. (b) Segundo rebrote. Las ecuaciones de regresión lineal y r 2para los distintos tratami<strong>en</strong>tos son: PNA: y= 1,64x; r 2 = 0,83; PA: y= 1,33x; r 2 = 0,82; PN: y= 1,32x; r 2 = 0,74; P: y= 0,95x; r 2 = 0,96.Figura 6. Aum<strong>en</strong>to <strong>en</strong> la producción de forraje del tratami<strong>en</strong>to A <strong>en</strong> comparación con el tratami<strong>en</strong>to B explicado por un increm<strong>en</strong>to <strong>en</strong> laEUR y <strong>en</strong> la RFAi acumulada por el cultivo. (a) Acumulación máxima de biomasa del tratami<strong>en</strong>to A; (b) Acumulación máxima de biomasadel tratami<strong>en</strong>to B; (c) Acumulación de biomasa del tratami<strong>en</strong>to A cuando el tratami<strong>en</strong>to B llega a su acumulación máxima.Contrariam<strong>en</strong>te a lo ocurrido <strong>en</strong> el primer rebrote, lareducción <strong>en</strong> la cantidad de RFAi acumulada explicóaproximadam<strong>en</strong>te el 70% de las difer<strong>en</strong>cias productivas<strong>en</strong>tre los tratami<strong>en</strong>tos extremos durante el segundorebrote. La falta de lluvias (figura 1), sumada al agotami<strong>en</strong>todel agua disponible <strong>en</strong> el suelo durante el períodode crecimi<strong>en</strong>to previo, habrían g<strong>en</strong>erado condicionesde estrés hídrico mucho más severas que explicarían lareducida intercepción de radiación observada desde lasetapas iniciales del segundo rebrote (figura 5b). En el tratami<strong>en</strong>toregado (PA), el efecto negativo sobre la RFAi seredujo marcadam<strong>en</strong>te, explicando alrededor de un 40%de la reducción de producción de forraje respecto del tratami<strong>en</strong>toPNA. El mayor efecto de la EUR observado <strong>en</strong>Grupos funcionales de plantas, producción de forraje y y efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación de pastizales naturales <strong>en</strong> condiciones...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 73el tratami<strong>en</strong>to PA <strong>en</strong> este período respecto del primeropodría deberse a que la disponibilidad de N nativo (prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tede la mineralización de la MO) sería m<strong>en</strong>or que<strong>en</strong> el primer rebrote. La falta de agua (tratami<strong>en</strong>to PN)afectó muy fuertem<strong>en</strong>te la RFAi acumulada y, por <strong>en</strong>de,el desarrollo del IAF, explicando este compon<strong>en</strong>te prácticam<strong>en</strong>tetoda la difer<strong>en</strong>cia productiva observada con eltratami<strong>en</strong>to no restringido (PNA).En ambos rebrotes el efecto inher<strong>en</strong>te al agua fue consist<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>temayor que el del nitróg<strong>en</strong>o, indicando queeste habría sido el principal factor limitante del crecimi<strong>en</strong>todel pastizal <strong>en</strong> el período estival. Es sabido que el déficithídrico es un f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o que provoca, además, déficitnutricional (Garwood, 1967). Ello es así debido a que,particularm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> suelos no disturbados, los aportes d<strong>en</strong>utri<strong>en</strong>tes prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tes de la mineralización de la MO seconc<strong>en</strong>tran <strong>en</strong> los primeros c<strong>en</strong>tímetros del suelo, loscuales se secan más rápidam<strong>en</strong>te restringi<strong>en</strong>do la absorciónde N por las raíces inclusive antes que se restrinjala absorción del agua <strong>en</strong> sí misma (Lemaire y D<strong>en</strong>oix,1987; Durand et al., 1997). En este contexto, el uso delnitróg<strong>en</strong>o por las plantas habría resultado un procesosubordinado a la disponibilidad y distribución del agua <strong>en</strong>el suelo, lo cual es coher<strong>en</strong>te con el m<strong>en</strong>or efecto delagregado de nitróg<strong>en</strong>o <strong>en</strong> secano (tratami<strong>en</strong>to PN) sobreel crecimi<strong>en</strong>to estival del pastizal relativo al efecto delriego (PA). Similares resultados fueron <strong>en</strong>contrados porAkmal y Janss<strong>en</strong>s (2004), qui<strong>en</strong>es detectaron que la disponibilidadinsufici<strong>en</strong>te de agua fue el factor más críticopara el crecimi<strong>en</strong>to de raigrás per<strong>en</strong>ne que el suministroinsufici<strong>en</strong>te de nitróg<strong>en</strong>o.CONCLUSIONESLas defici<strong>en</strong>cias de agua y nitróg<strong>en</strong>o limitaron fuertem<strong>en</strong>tela acumulación de forraje del pastizal naturaldurante el período primavero-estival. Esta limitación fueel resultado de tres factores principales: (i) la baja contribuciónde gramíneas a la biomasa total <strong>en</strong> respuesta aambas defici<strong>en</strong>cias; (ii) la restricción de la cantidad deRFAi y consecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te, de RFA absorbida; y (iii) lareducción de la efici<strong>en</strong>cia de uso de la radiación porambos factores.Este último punto remarca el hecho de que la efici<strong>en</strong>ciade uso de la radiación de un pastizal natural es unavariable altam<strong>en</strong>te s<strong>en</strong>sible. Los resultados del pres<strong>en</strong>tetrabajo pusieron <strong>en</strong> evid<strong>en</strong>cia variaciones de significativamagnitud fr<strong>en</strong>te a cambios <strong>en</strong> la composición florística y<strong>en</strong> la disponibilidad de recursos para el crecimi<strong>en</strong>to, aún<strong>en</strong> cortos períodos de tiempo, tal como el período derebrote estival estudiado.BIBLIOGRAFÍAAKMAL, M.; JANSSENS, M.J. 2004. Productivity andlight use effici<strong>en</strong>cy of per<strong>en</strong>nial ryegrass with contrastingwater and nitrog<strong>en</strong> supplies. Field Crop Research 88,143-155.BELANGER, G. 1990. Incid<strong>en</strong>ce de la fertilization azotéeet la saison sur la croissance, l´assimilation et larepartition de carbone dans une couvert de fétuque élevée<strong>en</strong> conditions naturelles. Thesis D.Sc. Université deParis Sud, Paris. 164 p.BELANGER, G.; GASTAL, F.; LEMAIRE, G. 1992.Growth analysis of tall fescue sward fertilised with differ<strong>en</strong>trates of nitrog<strong>en</strong>. Crop Sci<strong>en</strong>ce 32, 1371-1376.BROWN, H.E.; MOOT, D.J.; TEIXEIRA, E.I. 2006.Radiation use effici<strong>en</strong>cy and biomass partitioning ofLucerne (Medicago sativa) in a temperate climate.European Journal of Agronomy 25, 319-327.COLLINO, D.; DARDANELLI, J.; DE LUCA, M.2007. Uso del agua y la radiación para la producción deforraje. En: BASIGALUP, D.H. (Ed.). El cultivo de alfalfa<strong>en</strong> la Arg<strong>en</strong>tina. Bu<strong>en</strong>os Aires, Ediciones <strong>INTA</strong>, pp.47-65.DURAND, J.L.; GASTAL, F.; ETCHEBEST, S.; BON-NET, A.C.; GHESQUIÈRE, M., 1997. Interspecific variabilityof plant water status and leaf morphog<strong>en</strong>esis in temperateforage grasses under summer water deficit.European Journal of Agronomy 7, 99-107.FISHER, A.; WILMAN, D. 1995. Effect of interval betwe<strong>en</strong>harvests and spring-applied fertilizer N on thegrowth of white clover in a mixed sward. Grass andForage Sci<strong>en</strong>ce 50, 162-171GARWOOD, E.A. 1967. Seasonal variation in appearanceand growth of grass roots. Grass and ForageSci<strong>en</strong>ce 22, 121-130.GASTAL F.; DURAND J.L. 2000. Effects of nitrog<strong>en</strong> andwater supply on N and C fluxes and partitioning in defoliatedswards. In: LEMAIRE, G.; HODGSON, J.; DEMORAES, A.; F. CARVALHO, P.C.; NABINGER., C.(Eds.). Grassland Ecophysiology and Grazing Ecology.CABI Publishing, Oxon (G.B.), pp. 15-39.GASTAL, F.; LEMAIRE, G. 2002. Nitrog<strong>en</strong> uptake anddistribution in crops: an agronomical and ecophysiologicalperspective. Journal Experim<strong>en</strong>tal Botany 53, 789-799.GASTAL, F.; NELSON, C.J. 1994. Nitrog<strong>en</strong> use withinthe growing leaf blade of tall fescue. Plant Physiology105, 191-197.GONZALEZ DUGO, V.; DURAND, J.L.; GASTAL, F.;PICON-COCHARA, C. 2005. Short-term response of th<strong>en</strong>itrog<strong>en</strong> nutrition status of tall fescue and Italian ryegrassswards under water deficit. Australian Journal ofAgricultural Research 56, 1269-1276.GOSSE, G.; VARLET-GRANCHER, C.; BONHOMME,R.; CHARTIER, M.; ALLIRAND, M.J.; LEMAIRE, G. 1986.Production maximale de matiere seche et rayonnem<strong>en</strong>tCOLABELLI, M.R. 1 , AGNUSDEI, M.G. 2 y DURAND J-L. 3


74 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1solaire intercepté par un couvert vegetal. Agronomie 6,47-56.HIDALGO, L.G.; CAHUEPÉ, M.A. 1991. Producción deforraje de comunidades forrajeras de la PampaDeprimida. <strong>Revista</strong> CREA 149, 58-62.LEMAIRE G.; DENOIX, A. 1987. Croissance estivale <strong>en</strong>matière sèche de peuplem<strong>en</strong>ts de fétuque élevée(Festuca arundinacea Schreb.) et de dactyle (Dactylisglomerata L.) dans l'Ouest de la France. II - Interaction<strong>en</strong>tre les niveaux d'alim<strong>en</strong>tation hydrique et de nutritionazotée. Agronomie 7, 381-389.LEMAIRE, G.; AGNUDEI, M. 2000. Leaf tissue turnoverand effici<strong>en</strong>cy herbage utilisation. In: LEMAIRE, G.;HODGSON, J.; DE MORAES, A.; F. CARVALHO, P.C.;NABINGER, C. (Eds.). Grassland Ecophysiology andGrazing Ecology., CABI Publishing, Oxon (G.B.).LATTANZI, F.A.; AGNUSDEI, M.G.; RODRÍGUEZPALMA, R.; SCHNYDER, H. 2006. Nitrog<strong>en</strong> loading andthe C3/C4 balance in grazed grasslands. GrasslandSci<strong>en</strong>ce in Europe 11, 820-822.LEÓN, R.J.C. (1975). Las comunidades herbáceas dela región Castelli-Pila. Comisión de InvestigacionesCi<strong>en</strong>tíficas, La Plata (Arg<strong>en</strong>tina). Monografía N.° 5. p. 75-107.McGAIG, A.E.; GLOVER, A.; PROSSER, J.I. 1999.Molecular analysis of bacterial community structure anddiversity in unimproved and improved upland grass pasture.Applied of Environm<strong>en</strong>tal Microbiology 65, 1721-1730MONTEITH, J.L. 1977. Climate and the effici<strong>en</strong>cy ofcrop production. In: Britain.Phil.Trans.Royal Society,London. 28, 277-294.NIU, S.; LIU, W.; WAN, S. 2008. Differ<strong>en</strong>t growth responsesof C3 and C4 grasses to seasonal water andnitrog<strong>en</strong> regimes and competition in a pot experim<strong>en</strong>t.Journal of Experim<strong>en</strong>tal Botany 59, 1431-1439.ONILLON B.; DURAND J.L.; GASTAL F.; TOURNEBI-ZE, R. 1995. Drought effects on growth and carbon partitioningin a tall fescue sward grown at differ<strong>en</strong>t nitrog<strong>en</strong>rates. European Journal of Agronomy 4, 91-100PERELMAN, S.B.; LEÓN, R.J.C; OESTERHELD, M.2001. Cross-Scale vegetation patterns of flooding Pampagrassland. Journal Ecology 89, 562-577.RODRÍGUEZ PALMA, R.; MAZZANTI, A.; AGNUSDEI,M.; FERNÁNDEZ GRECCO, R. 1999. Fertilización nitrog<strong>en</strong>aday productividad animal <strong>en</strong> pastizales bajo pastoreocontínuo. <strong>Revista</strong> Arg<strong>en</strong>tina de Producción Animal19, 301-310.SALA, O.; DEREGIBUS, V.A.; SCHLICHTER, T.; ALIP-PE, H. 1981. Productivity dynamics of a native temperategrassland in Arg<strong>en</strong>tina. Journal of Range Managem<strong>en</strong>t34, 48-51.SAS. 1988. SAS user's guide, release 6.03 edition.Statistical Analysis System Institute. Cary, North Caroline,USA.SINCLAIR, R.T.; MUCHOW, R.C. 1999. Radiation UseEffici<strong>en</strong>cy. Advances in Agronomy 65. Academic Press.pp 215-265.SKINNER, H.R.; HANSON, J.D.; HUTCHINSON, G.L.;SHUMAN, G.E. 2002. Response of C 3 and C 4 grasses tosupplem<strong>en</strong>tal summer precipitation. Journal of RangeManagem<strong>en</strong>t 55, 517-522.TEIXEIRA, E.I.; MOOT, D.J.; BROWN, H.E. 2008.Defoliation frequ<strong>en</strong>cy and season affected radiation useeffici<strong>en</strong>cy and dry matter partitioning to roots of lucerne(Medicago sativa L.) crops. European Journal ofAgronomy 28, 103-111.VARLET GRANCHER, C.; GOSSE, G.; CHARTIER, M.;SINOQUET, H.; BONHOMME, R.; ALLIRAND, J.M.1989. Mise au point: rayonnem<strong>en</strong>t solaire absorbé ouintercepté par un couvert végétal. Agronomie 9, 419-439VOLENEC, J.J. 2007. Physiology of forage plants. In:BARNES, R.F.; NELSON, C.J.; MOORE, K.J.; COLLINS,M. (Eds.), Chapter 3. Forages: The sci<strong>en</strong>ce of grasslandagriculture. 6th edition. Blackwell Publishing. pp. 37-54.WEDIN, D.A.; TILMAN, D. 1996. Influ<strong>en</strong>ce of nitrog<strong>en</strong>loading and species composition on the carbon balanceof grasslands. Sci<strong>en</strong>ce 274, 1720-1723.WHITEHEAD, D. C. 1995. Grassland nitrog<strong>en</strong>. CABINTERNATIONAL Wallingford, Oxon OX10 8DE, UK.Grupos funcionales de plantas, producción de forraje y y efici<strong>en</strong>cia de uso de radiación de pastizales naturales <strong>en</strong> condiciones...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 75Comparación <strong>en</strong>tre observaciones meteorológicasobt<strong>en</strong>idas de estaciones conv<strong>en</strong>cionalesy automáticas a partir de la estimaciónde parámetros estadísticosGATTINONI, N 1 ; BOCA, T 1 , 2 ; REBELLA, C 1 y DI BELLA, C 1RESUMENLa información meteorológica resulta de gran utilidad <strong>en</strong> distintas disciplinas como la agronomía y lahidrología, <strong>en</strong>tre otras. La observación de variables y f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os meteorológicos se lleva a cabo <strong>en</strong>Estaciones Meteorológicas Conv<strong>en</strong>cionales (EMC) asistidas por un observador capacitado. En los últimosaños, el uso de Estaciones Meteorológicas Automáticas (EMA) ha experim<strong>en</strong>tado un increm<strong>en</strong>to significativo.La Organización Mundial Meteorológica las define como "las estaciones <strong>en</strong> las cuales las observacionesson realizadas y transmitidas automáticam<strong>en</strong>te". El objetivo de este trabajo fue comparar la calidad delos datos prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tes de ambas estaciones a partir de la estimación de distintos parámetros estadísticos.El análisis compr<strong>en</strong>dió los datos de temperatura del aire y precipitación registrados durante el año 2007por tres estaciones meteorológicas (una conv<strong>en</strong>cional y dos automáticas) a escala diaria y m<strong>en</strong>sual. Losestimadores de parámetros estadísticos resultaron similares <strong>en</strong>tre las estaciones, especialm<strong>en</strong>te los calculadosa partir de los datos de temperatura. Los valores acumulados anuales y extremos de precipitaciónfueron los que mostraron mayores difer<strong>en</strong>cias. Se destaca la importancia del intervalo de medición de precipitaciónutilizado <strong>en</strong> cada tipo de estación y el <strong>en</strong>torno <strong>en</strong> el que se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran las mismas. Se proponecomo un objetivo a futuro, ext<strong>en</strong>der el periodo de análisis para evaluar la g<strong>en</strong>eralidad y la significancia delos resultados <strong>en</strong>contrados.Palabras clave: Estaciones Conv<strong>en</strong>cionales, Estaciones Automáticas, Comparación, Temperatura,Precipitación.ABSTRACTMeteorological information is useful in various disciplines such as agronomy or hydrology among others.The observation of meteorological variables and ph<strong>en</strong>om<strong>en</strong>a is carried in conv<strong>en</strong>tional meteorological stationsassisted by a trained observer. In rec<strong>en</strong>t years, the use of automatic meteorological stations has experi<strong>en</strong>ceda significant increase. The World Meteorological Organization defines as "the stations at which1 Inst. Clima y Agua. CIRN <strong>INTA</strong> Castelar, Las Cabañas y Los Reseros s/n (1712), Castelar, Bu<strong>en</strong>os Aires, Arg<strong>en</strong>tina. Correo: ngattinoni@cnia.inta.gov.ar2 Dto. de Métodos Cuantitativos y Sistemas de Información, FAUBA.Recibido 07 de septiembre de 2010// Aceptado 15 de diciembre de 2010// Publicado online 05 de <strong>en</strong>eroComparación <strong>en</strong>tre observaciones meteorológicas obt<strong>en</strong>idas de estaciones conv<strong>en</strong>cionales y automáticas a partir de...


76 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1observations are made and transmitted automatically." The aim of this study was to compare the quality ofdata gathered from both stations from the estimation of various statistical parameters. The analysis includeddata of air temperature and precipitation throughout the year 2007 by three weather stations simultaneously(one conv<strong>en</strong>tional and two automatic) at daily and monthly scales. The differ<strong>en</strong>t estimators weresimilar betwe<strong>en</strong> the stations. The annual cumulative values of precipitation and extremes were those whoshowed greater differ<strong>en</strong>ces. Is proposed as a future goal, ext<strong>en</strong>ding the period of analysis to assess theg<strong>en</strong>erality and significance of the results.Key words: Conv<strong>en</strong>tional Stations, Automatic Stations, Comparison, Temperature, Precipitation.INTRODUCCIÓNLa información meteorológica resulta de gran utilidadpara el análisis del estado del tiempo pres<strong>en</strong>te, preparaciónde pronósticos y alertas meteorológicas; estudiosagroclimatológicos; preparación de operaciones dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tesdel tiempo (e.g. trabajos <strong>en</strong> construcciones, aeródromos);aplicaciones <strong>en</strong> temáticas asociadas a la hidrologíao la agronomía (Magrin et.al. 1991, Rebellaet.al.1984, Rebella et.al. 1999), etc.Desde la fundación de la Oficina MeteorológicaArg<strong>en</strong>tina <strong>en</strong> el año 1872 hasta la actualidad, las observacionesde variables y f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os atmosféricos quecaracterizan el estado del tiempo (temperatura, precipitación,nubosidad, torm<strong>en</strong>tas, nieblas, etc.) se han llevadoa cabo <strong>en</strong> estaciones meteorológicas conv<strong>en</strong>cionales(EMC). Las mismas se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran asistidas por personalcapacitado (observador meteorológico) qui<strong>en</strong> realiza lasmediciones de: temperatura del aire, dirección y velocidaddel vi<strong>en</strong>to, presión, precipitación, humedad del aire yradiación, etc. El observador cumple varias funciones:realización de observaciones meteorológicas; mant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>tode los instrum<strong>en</strong>tos y del sitio de observación deforma tal que result<strong>en</strong> <strong>en</strong> bu<strong>en</strong> ord<strong>en</strong>, y cambio de fajasde los distintos instrum<strong>en</strong>tos, <strong>en</strong>tre otras (OMM, 2008).De acuerdo a los objetivos y fines para los que fueimplantada una estación meteorológica, exist<strong>en</strong> diversostipos de observaciones. Se pued<strong>en</strong> destacar aquellas quese efectúan para estudios climatológicos y para el análisisde la evolución meteorológica (sinópticas). Es importanteque las observaciones sean sincrónicas y continuadasdurante un lapso importante de tiempo de manera quepuedan utilizarse <strong>en</strong> cualquier estudio o investigación.La Organización Mundial Meteorológica (OMM) ha establecidohoras fijas <strong>en</strong> las cuales las estaciones meteorológicasclimáticas deb<strong>en</strong> realizar las observaciones. Estasson: 12:00, 18:00 y 24:00 UTC (tiempo universal coordinado)y se caracterizan por ser obligatorias para de estaforma mant<strong>en</strong>er la consist<strong>en</strong>cia y la calidad de los datosque se incorporan a las bases históricas.En los últimos años se aprecia un increm<strong>en</strong>to <strong>en</strong> el usode Estaciones Meteorológicas Automáticas (EMA), especialm<strong>en</strong>te<strong>en</strong> el ámbito agrícola e hidrológico, dondealgunas de las aplicaciones específicas son sistemas dealertas de heladas y de plagas; alerta temprana de crecida<strong>en</strong> distintos ríos, etc (Fernández et.al. 1987, Elinger1990). La OMM (1992) las define como "las estaciones<strong>en</strong> las cuales las observaciones son realizadas y transmitidasautomáticam<strong>en</strong>te". A pesar de su automatización,se requiere que las EMA sean asistidas por personalpara poder detectar, por ejemplo, fallas de comunicación,de instrum<strong>en</strong>tación y para poder actuar de forma ágil demanera tal que no se produzcan pérdidas de registrosext<strong>en</strong>sos. Este tipo de estación está formada por instrum<strong>en</strong>tosmeteorológicos y por una unidad c<strong>en</strong>tral deadquisición de datos, la cual permite realizar medicionesdurante las 24 horas. Las características que debe cumplirel sitio <strong>en</strong> el cual se emplazarán las EMA son semejantesa las que se aplican para la EMC, OMM (1993).Según la OMM (2008), las EMA pued<strong>en</strong> ser utilizadaspara increm<strong>en</strong>tar el número de observaciones meteorológicas,aum<strong>en</strong>tar la d<strong>en</strong>sidad de una red de estaciones yaexist<strong>en</strong>te para proveer datos ya sea desde nuevos sitios,como de lugares de difícil acceso; suplem<strong>en</strong>tar, <strong>en</strong> elcaso de estaciones asistidas, los datos fuera de las horasde trabajo normales; mejorar la fiabilidad de las medicionesutilizando sofisticada y moderna tecnología y medicionesdigitales; asegurar la homog<strong>en</strong>eidad de la red deestaciones, y satisfacer nuevas necesidades y requerimi<strong>en</strong>tosobservacionales y reportes con alta frecu<strong>en</strong>cia ycontinuidad (las 24 hs del día los 365 días del año).Para establecer el uso de una EMA como alternativaequival<strong>en</strong>te a una EC, es necesario realizar previam<strong>en</strong>teun estudio comparativo basado <strong>en</strong> una serie histórica deobservaciones meteorológicas. La OMM (1989) proponecomo intervalo mínimo de tres años <strong>en</strong> el cual funcion<strong>en</strong>los dos sistemas <strong>en</strong> paralelo. La sustitución de los instrum<strong>en</strong>tosdel tipo manual por los automáticos debería efectuarseuna vez que se haya realizado una evaluaciónsimultánea de ambas series de datos; para que los nuevosvalores registrados se acopl<strong>en</strong> a las series históricas.En función de lo antes expuesto y <strong>en</strong> virtud del creci<strong>en</strong>teincrem<strong>en</strong>to <strong>en</strong> el uso de EMA, se propuso como objetivode este trabajo comparar la calidad de la informaciónobt<strong>en</strong>ida <strong>en</strong> forma simultánea por EMC y EMA, a travésGATTINONI, N 1 ; BOCA, T 1 , 2 ; REBELLA, C 1 y DI BELLA, C 1


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 77de la estimación de distintos parámetros de posición, dispersiónde datos y confiabilidad.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSDatosPara la realización de este trabajo se contó con seriesde datos de una EMC (Banco de datos agrometeorológicosdel Instituto de Clima y Agua) y de dos EMA, debajodescriptas, que durante el año 2007 funcionaron simultáneam<strong>en</strong>te<strong>en</strong> el Instituto de Clima y Agua del <strong>INTA</strong>Castelar. Se seleccionaron para este estudio aquellasvariables de mayor demanda <strong>en</strong> las aplicaciones agrometeorológicastales como la temperatura del aire y laprecipitación. Se trabajó con valores medios, máximos ymínimos de temperatura y acumulados de precipitaciónmayores a 0 mm, <strong>en</strong> dos escalas temporales: diaria ym<strong>en</strong>sual. Se consideraron sólo los datos medidos durantetodo el año 2007 dado que <strong>en</strong> este periodo se solaparonlas mediciones de las tres estaciones. Se buscarondatos erróneos y se contabilizó la cantidad de datos faltantesque no superaron el 10% del total (Buishand,1982). Especialm<strong>en</strong>te, los datos aus<strong>en</strong>tes de las estacionesautomáticas se observaron durante los meses dediciembre y <strong>en</strong>ero y esto podría asociarse a la falta demant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to durante esa temporada.Características de las estaciones meteorológicas utilizadasEn el Observatorio de Castelar del <strong>INTA</strong> se realizanmediciones <strong>en</strong> tres horarios: 12:00, 18:00 y 24:00 horas.Se obti<strong>en</strong><strong>en</strong> datos diarios y horarios de distintas variables,éstos últimos a partir de instrum<strong>en</strong>tos registradorescomo Termohigrógrafo y Pluviógrafo. Los datos meteorológicosseleccionados para este estudio fueron: temperaturadel aire a 150 cm. y precipitación (precisión de lamedición de 0.1 mm). En este tipo de estación la precipitacióndiaria es obt<strong>en</strong>ida a partir de la acumulación deagua caída <strong>en</strong> el pluviómetro desde las 9 hs de un día ylas 9 hs del día sigui<strong>en</strong>te asignando el valor registrado alprimer día, a este lapso de tiempo se lo d<strong>en</strong>omina: díapluviométrico. La información de la precipitación horariase obti<strong>en</strong>e a partir de la faja del pluviógrafo permiti<strong>en</strong>doobt<strong>en</strong>er el valor acumulado durante el periodo de 0-24hs. Cabe destacar que <strong>en</strong> las EMC la principal medida deprecipitación se realiza durante el día pluviométrico yesta es una característica que hace la difer<strong>en</strong>cia con lasdemás estaciones, ya que las EMA efectúan los registrosde precipitación diaria desde las 0 hs hasta las 24 hs.Esto último se relaciona con los intervalos de muestreo yalmac<strong>en</strong>aje programados <strong>en</strong> cada EMA, permiti<strong>en</strong>do <strong>en</strong>algunos casos poder obt<strong>en</strong>er el valor de precipitaciónacumulada durante el día pluviométrico.La EMA marca Campbell fue puesta <strong>en</strong> funcionami<strong>en</strong>to<strong>en</strong> noviembre del año 2005 <strong>en</strong> un predio próximo alInstituto de Clima y Agua y <strong>en</strong> las inmediaciones delObservatorio, a través de un proyecto de investigaciónconjunta llevado a cabo por investigadores del <strong>INTA</strong> y dela FAUBA. Las variables son registradas cada segundo yalmac<strong>en</strong>adas <strong>en</strong> dos intervalos de tiempo: 15 minutos y24 hs. Pres<strong>en</strong>ta el valor promedio de la temperatura paraambos intervalos y <strong>en</strong> cuanto a la precipitación se almac<strong>en</strong>asólo el valor acumulado <strong>en</strong>tre las 0 hs y las 24 hsdel día (precisión de la medición de 0.254 mm).La EMA marca Davis funciona <strong>en</strong> el Instituto de Clima yAgua del <strong>INTA</strong> Castelar desde noviembre de 2006. Lasvariables son registradas cada segundo y pres<strong>en</strong>tadas <strong>en</strong>un intervalo de muestreo de 10 minutos, almac<strong>en</strong>ándoselos valores promedios de temperatura y el valor acumuladode la precipitación (precisión de la medición de 0.2 mm).Dado que la lluvia es medida <strong>en</strong> distintos lapsos detiempo, se tomó como criterio considerar sólo la lluviaacumulada durante el periodo de 0 a 24 hs, dado queeste valor era pres<strong>en</strong>tado por las tres estaciones.Análisis realizadosSe realizó un análisis descriptivo de las variables decada una de las estaciones a través de gráficos y de laestimación de distintos parámetros de posición, dispersióny asociación.Se incluyó también el cálculo del Coefici<strong>en</strong>te deInconsist<strong>en</strong>cia, definido por Colotti et.al (2003), qui<strong>en</strong>es<strong>en</strong>contraron que este índice puede ser adecuado para evaluarla calidad de las mediciones simultáneas (automáticasy conv<strong>en</strong>cionales) de distintas variables meteorológicas.El Coefici<strong>en</strong>te de Inconsist<strong>en</strong>cia se expresa mediantela sigui<strong>en</strong>te fórmula:donde “V” repres<strong>en</strong>ta el operador estadístico-matemáticode la varianza; X, el valor de la variable a partir de lamedición automática y X* el valor de la variable a partirde la medición conv<strong>en</strong>cional.Este coefici<strong>en</strong>te varía <strong>en</strong>tre 0 (muestras linealm<strong>en</strong>tedep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes o perfectam<strong>en</strong>te consist<strong>en</strong>tes) y 1 (muestrastotalm<strong>en</strong>te indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes), suponi<strong>en</strong>do que no existecorrelación lineal <strong>en</strong>tre los dos conjuntos de mediciones.Los autores exti<strong>en</strong>d<strong>en</strong> el concepto de inconsist<strong>en</strong>ciaincorporando el de consist<strong>en</strong>cia <strong>en</strong>tre los datos y paraello defin<strong>en</strong> el Coefici<strong>en</strong>te de Consist<strong>en</strong>cia como:A tal efecto se realizaron comparaciones para cadames del año de los registros prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tes de las EMA yde la EMC. En el caso de la precipitación, se consideraronaquellos días <strong>en</strong> los cuales ambas estaciones registraronvalores mayores a 0 mm.Comparación <strong>en</strong>tre observaciones meteorológicas obt<strong>en</strong>idas de estaciones conv<strong>en</strong>cionales y automáticas a partir de...


78 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1RESULTADOS Y DISCUSIÓNAnálisis de las series de precipitaciónEn cuanto a la precipitación diaria, la mayor difer<strong>en</strong>ciase apreció <strong>en</strong> la cantidad de días registrados por la EMADavis (figura 1) <strong>en</strong>tre los meses de abril y julio <strong>en</strong> los cualesla estación registró valores iguales a 0.2 mm y <strong>en</strong>cuyo caso las estaciones restantes pres<strong>en</strong>taron 0 mm.Tal discrepancia se la podría atribuir al vuelco del balancíndel pluviómetro luego de haber acumulado agua derocío y/o a la precisión del instrum<strong>en</strong>to.En los valores diarios de precipitación se observó unadifer<strong>en</strong>cia máxima <strong>en</strong>tre la EMC y la estación Campbellde 11.39 mm (5/10/2007) y de 17.3 mm (17/3/2007)<strong>en</strong>tre la EMC y Davis. Mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> lo que se refiereal valor máximo diario registrado durante el año 2007,las estaciones automáticas coincidieron <strong>en</strong> el día deocurr<strong>en</strong>cia del mismo, 9/10/2007, si<strong>en</strong>do los valores49.02 mm <strong>en</strong> la EMA Campbell y 47.2 mm <strong>en</strong> la EMADavis. El valor medido de precipitación <strong>en</strong> la EMC fuede 47.4 mm.En el figura 2 se observan los datos diarios de precipitación.En g<strong>en</strong>eral, los datos obt<strong>en</strong>idos <strong>en</strong> la estaciónDavis resultaron inferiores a los registrados <strong>en</strong> las estacionesrestantes, a excepción de los casos nombrados<strong>en</strong> el primer párrafo. Esta observación se puede apreciarcon detalle cuando se comparan las mediciones deambas EMA.Los estimadores de parámetros estadísticos para lavariable <strong>en</strong> estudio (tabla 1), calculados para la EMADavis resultaron m<strong>en</strong>ores que las estaciones restantes.El coefici<strong>en</strong>te de variación demostró una leve homog<strong>en</strong>eidad<strong>en</strong> los datos de las EMA comparado con el calculadopara la EMC.Figura 1: Cantidad de días con precipitación registrada <strong>en</strong> las tres estaciones para cada mes del año 2007.Figura 2: Datos de precipitación diaria durante el año 2007.GATTINONI, N 1 ; BOCA, T 1 , 2 ; REBELLA, C 1 y DI BELLA, C 1


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 79Los valores mínimos de las series se correspond<strong>en</strong>con la precisión de medición definido <strong>en</strong> cada estación apartir del instrum<strong>en</strong>tal utilizado. El valor máximo medido<strong>en</strong> la estación Davis se <strong>en</strong>contró <strong>en</strong> 2.8 mm por debajode la medición máxima registrada <strong>en</strong> la estación conv<strong>en</strong>cional(tabla 1).Las correlaciones <strong>en</strong>tre las series diarias de precipitaciónresultaron significativas al nivel del 5% (figura 3). Elvalor del coefici<strong>en</strong>te de correlación resultó levem<strong>en</strong>te inferiorpara la correlación <strong>en</strong>tre la estación automática Davisy la estación Conv<strong>en</strong>cional, <strong>en</strong>contrándose mayor dispersiónpara valores de precipitación mayores a 20 mm. Entrela estación marca Campbell y la conv<strong>en</strong>cional la mayordispersión se observó para valores mayores a 30 mm.El total anual de precipitación registrada por la EMCfue de 810.1 mm, mi<strong>en</strong>tras que las estaciones automáti-Tabla 1: Estimadores estadísticos de las series de precipitación diaria.Figura 3: Correlaciones <strong>en</strong>tre datos diarios de precipitación registrados por la estación conv<strong>en</strong>cional y las estaciones automáticas.Comparación <strong>en</strong>tre observaciones meteorológicas obt<strong>en</strong>idas de estaciones conv<strong>en</strong>cionales y automáticas a partir de...


80 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1cas Campbell y Davis acumularon 810.3 mm y 741.0mm, respectivam<strong>en</strong>te. Estos valores reflejaron la t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia,observada anteriorm<strong>en</strong>te, de la estación Davis <strong>en</strong>registrar datos inferiores a los registrados <strong>en</strong> las restantesestaciones.En cuanto a la precipitación m<strong>en</strong>sual (figura 4) seobserva una distribución similar <strong>en</strong>tre las tres estaciones.La ocurr<strong>en</strong>cia de los valores máximos y mínimos se aprecia<strong>en</strong> meses coincid<strong>en</strong>tes que concuerda con la distribuciónmedia anual de precipitación <strong>en</strong> la zona. A pesar deellos, los valores m<strong>en</strong>suales de la estación Davis resultaroninferiores y las mayores difer<strong>en</strong>cias con la estaciónconv<strong>en</strong>cional se <strong>en</strong>contraron durante los meses defebrero, marzo y abril. La mayor difer<strong>en</strong>cia observada<strong>en</strong>tre los valores registrados por la estación Campbell yla conv<strong>en</strong>cional fue <strong>en</strong> el mes de febrero.En la tabla 2 se muestran los estimadores de los parámetrosestadísticos de la precipitación m<strong>en</strong>sual. Encuanto a los extremos, la estación Campbell pres<strong>en</strong>tóvalores cercanos a los medidos por la estación conv<strong>en</strong>cional.No fue el caso de la estación Davis la cual registróvalores inferiores a las anteriores. El coefici<strong>en</strong>te devariación, al igual que <strong>en</strong> el caso de los datos diarios,reflejó una leve homog<strong>en</strong>eidad <strong>en</strong> los datos m<strong>en</strong>sualesde las estaciones automáticas.Finalm<strong>en</strong>te, se pres<strong>en</strong>tan los Coefici<strong>en</strong>tes deInconsist<strong>en</strong>cia y de Consist<strong>en</strong>cia que resultaron de lacomparación de la lluvia diaria <strong>en</strong>tre las estaciones automáticasy la estación conv<strong>en</strong>cional (tabla 3). Se observaque los valores de los Coefici<strong>en</strong>tes de Consist<strong>en</strong>cia fueronm<strong>en</strong>ores cuando se comparó la estación conv<strong>en</strong>cionalcon la Davis, salvo para los meses de agosto y octubre.Para la estación Campbell, los valores de dicho coefici<strong>en</strong>teoscilaron <strong>en</strong>tre 80,76% <strong>en</strong> el mes de agosto y99,54% <strong>en</strong> mayo, con lo cual, este coefici<strong>en</strong>te permitep<strong>en</strong>sar que existe una consist<strong>en</strong>cia medianam<strong>en</strong>te alta<strong>en</strong>tre las mediciones registradas simultáneam<strong>en</strong>te porambos equipos, <strong>en</strong> especial <strong>en</strong>tre la estación Campbell yla conv<strong>en</strong>cional. Sería necesario contar con series dedatos más largas para comprobar este comportami<strong>en</strong>to<strong>en</strong> todas las situaciones posibles.Figura 4: Precipitación Acumulada m<strong>en</strong>sual durante el año 2007.Tabla 2: Estimadores estadísticos de las distribuciones m<strong>en</strong>suales de precipitaciónGATTINONI, N 1 ; BOCA, T 1 , 2 ; REBELLA, C 1 y DI BELLA, C 1


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 81Tabla 3: Coefici<strong>en</strong>tes de Inconsist<strong>en</strong>cia y de Consist<strong>en</strong>cia resultantes de la comparación de la estación conv<strong>en</strong>cional y la estaciónCampbell (a) y la estación Davis (b)Análisis de las series de temperaturaEn segundo lugar, se analizaron las series datosdiarios y m<strong>en</strong>suales de temperatura media, máxima ymínima de las tres estaciones involucradas <strong>en</strong> elestudio.El comportami<strong>en</strong>to de los valores diarios de las EMAresultó consist<strong>en</strong>te con el observado <strong>en</strong> la EC (figura5). A pesar de ello, existieron algunos días <strong>en</strong> los cualeslas difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong>tre los valores de las EMA y la ECrondaron los 3,0°C.En lo que respecta a la variación m<strong>en</strong>sual, la estaciónautomática Campbell pres<strong>en</strong>tó una difer<strong>en</strong>cia de 0,6°Ccon respecto al valor registrado <strong>en</strong> la EC <strong>en</strong> el mes demarzo. En los meses restantes las difer<strong>en</strong>cias no excedieronlos 0,2°C. La mayor discrepancia <strong>en</strong>tre el valor detemperatura media registrada por la EMA Davis y la ECse observó <strong>en</strong> el mes de junio (0,7°C).Figura 5aComparación <strong>en</strong>tre observaciones meteorológicas obt<strong>en</strong>idas de estaciones conv<strong>en</strong>cionales y automáticas a partir de...


82 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Figura 5bFigura 5: a) Temperatura media diaria y b) Temperatura media m<strong>en</strong>sual para las estaciones. Est. Conv<strong>en</strong>cional (rombo), Est. Autom.Campbell (cuadrado) y Est. Autom. Davis (estrella).Los valores de los estimadores de los parámetros estadísticosde cada serie de temperatura diaria (tabla 4)resultaron semejantes <strong>en</strong>tre las tres estaciones.Para complem<strong>en</strong>tar el estudio se analizaron los valoresdel Coefici<strong>en</strong>te de Consist<strong>en</strong>cia m<strong>en</strong>suales (no se muestran),los mismos oscilaron <strong>en</strong>tre 91,961% y 98,624% parala estación Campbell y <strong>en</strong>tre 87,414% y 98,674% para laDavis, es decir, que existió una consist<strong>en</strong>cia medianam<strong>en</strong>tealta <strong>en</strong>tre las mediciones registradas simultáneam<strong>en</strong>tepor los instrum<strong>en</strong>tos conv<strong>en</strong>cionales y los automáticos.En las figuras 6 y 7 se observa que las series de temperaturamáxima como la mínima pres<strong>en</strong>tan similarcomportami<strong>en</strong>to.Esta característica se aprecia también <strong>en</strong> los estimadoresde los parámetros estadísticos (tabla 5). En cuanto alos datos de temperatura máxima m<strong>en</strong>sual, la estaciónCampbell pres<strong>en</strong>tó una difer<strong>en</strong>cia máxima de 0,8°C conrespecto al valor registrado <strong>en</strong> la EC.Al igual que con los datos de temperatura media se calcularonlos coefici<strong>en</strong>tes de consist<strong>en</strong>cia para cada mes, seobtuvieron valores mayores al 95%. Sin embargo, se hallaronalgunos valores m<strong>en</strong>ores a este porc<strong>en</strong>taje <strong>en</strong> algunosmeses especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> los Coefici<strong>en</strong>tes de consist<strong>en</strong>cia dela temperatura mínima. Por ejemplo, <strong>en</strong>tre los meses demayo y agosto <strong>en</strong> la estación Davis el Coefici<strong>en</strong>te calculadopres<strong>en</strong>tó valores <strong>en</strong>tre 82,587% y 93,481%.Tabla 4: Parámetros estadísticos de las series diarias de temperatura mediaGATTINONI, N 1 ; BOCA, T 1 , 2 ; REBELLA, C 1 y DI BELLA, C 1


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 83Figura 6: Idem Figura 5 para la Temperatura Máxima.Comparación <strong>en</strong>tre observaciones meteorológicas obt<strong>en</strong>idas de estaciones conv<strong>en</strong>cionales y automáticas a partir de...


84 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Figura 7: Idem Figura 5 para la Temperatura Mínima.Tabla 5aGATTINONI, N 1 ; BOCA, T 1 , 2 ; REBELLA, C 1 y DI BELLA, C 1


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 85Tabla 5bTabla 5: Parámetros estadísticos de las series de temperaturas máximas (a) y mínimas diarias (b).CONCLUSIONESEn este trabajo se compararon las series de temperaturay precipitación diaria y m<strong>en</strong>sual registradas por laestación meteorológica conv<strong>en</strong>cional y las estacionesautomáticas, prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tes de distintos fabricantes ysituadas <strong>en</strong> un predio del <strong>INTA</strong> Castelar.A partir de los difer<strong>en</strong>tes análisis estadísticos descriptivosse observaron similitudes <strong>en</strong> las series de precipitación,especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong>tre la estación conv<strong>en</strong>cional y lade marca Campbell. Los valores acumulados anuales yextremos fueron los que mostraron mayores difer<strong>en</strong>cias.Las difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong>contradas especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> los valoresde precipitación se las podría asociar al instrum<strong>en</strong>talutilizado y al <strong>en</strong>torno de cada estación. El análisis sólo serealizó <strong>en</strong> una serie acotada de información dado que lasestaciones automáticas son de instalación reci<strong>en</strong>te, conlo cual se mostraron las t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cias para este caso, si<strong>en</strong>donecesario contar con series más amplias para validarlas difer<strong>en</strong>cias y poder inferirlas al comportami<strong>en</strong>to g<strong>en</strong>eralde las estaciones <strong>en</strong> otras fechas y situaciones. Sedestaca la importancia del intervalo de medición utilizado<strong>en</strong> cada tipo de estación y que dicho intervalo debet<strong>en</strong>erse <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta para cualquier comparación simultáneade las series. De igual manera, es necesario prestarat<strong>en</strong>ción a la precisión de cada instrum<strong>en</strong>to dado quedicho valor puede originar difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong>tre las medicionesy remarcar la importancia del mant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to de lasestaciones automáticas que <strong>en</strong> algunos casos puedeproducir interrupción de las variables medidas.En cuanto a las series de temperatura diaria y m<strong>en</strong>sual,los valores del coefici<strong>en</strong>te de consist<strong>en</strong>cia junto con elanálisis estadístico realizado permitieron obt<strong>en</strong>er observacionessimilares <strong>en</strong> el comportami<strong>en</strong>to de dichas variables.BIBLIOGRAFÍABUISHAND, T.A, 1982. Some methods for testing the homog<strong>en</strong>eityof rainfall records. Journal of Hydrology, (58), 11-27.COLOTTI E., BLANCO A. Y RODRÍGUEZ J. 2003.Aplicación del coefici<strong>en</strong>te de inconsist<strong>en</strong>cia como criteriode comparación <strong>en</strong>tre mediciones de estaciones conv<strong>en</strong>cionalesy automáticas de lluvia diaria. Terra NuevaEtapa, XVIII-XIX (27-28), V<strong>en</strong>ezuela, 85-101.ELINGER, M. 1990. Sistema de información y alertahidrológico para la cu<strong>en</strong>ca del Río de la Plata: una experi<strong>en</strong>cia<strong>en</strong> cooperación regional. Bu<strong>en</strong>os Aires, C<strong>en</strong>tro deInvestigaciones Hidrológicas Ezeiza.FERNÁNDEZ, P; ROBY, H: FORNERO, L; MAZA,J.1987. Red hidrometeorológica telemétrica <strong>en</strong>M<strong>en</strong>doza-Arg<strong>en</strong>tina: un año de experi<strong>en</strong>cias e investigaciones.C<strong>en</strong>tro Regional Andino, M<strong>en</strong>doza.MAGRIN, G.O.; DÍAZ, R.A.; REBELLA, C.M.; DELSANTO, C. Y RODRÍGUEZ, R. 1991. Simulación delCrecimi<strong>en</strong>to y Desarrollo del trigo <strong>en</strong> la Arg<strong>en</strong>tina y lanecesidad de Información Meteorológica de Entrada.CONGREMET. Septiembre, Bu<strong>en</strong>os Aires, Arg<strong>en</strong>tina.REBELLA, C.M. Y DÍAZ, R. 1984. T<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia de lluviasy r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to de maíz <strong>en</strong> el área maicera típica arg<strong>en</strong>tina.III Congreso Nacional del Maíz, Pergamino.REBELLA, C., CARBALLO S., HARTMANN T., MER-CURI P. 1999. Ev<strong>en</strong>to NIÑO 1997-98. Utilización de informaciónsatelital <strong>en</strong> la evaluación del impacto de las inundacionessobre las producciones agropecuarias y forestales.Información espacial para la evaluación de lasinundaciones del Ev<strong>en</strong>to Niño 97/98, Fascículo #2 de laserie:"La CONAE y el aprovechami<strong>en</strong>to de la informaciónespacial"WORLD METEOROLOGICAL ORGANIZATION. 2008.Guide to meteorological instrum<strong>en</strong>ts and methods observations.(8) (7.º ed.), Génova.WORLD METEOROLOGICAL ORGANIZATION. 1993.Guide on the global data-processing system, (305), Génova.WORLD METEOROLOGICAL ORGANIZATION. 1992.International meteorological vocabulary, (182) (2.° ed.),Génova.WORLD METEOROLOGICAL ORGANIZATION. 1989.Guide on the global observing system. (488), Génova.Comparación <strong>en</strong>tre observaciones meteorológicas obt<strong>en</strong>idas de estaciones conv<strong>en</strong>cionales y automáticas a partir de...


86 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Evaluación morfológica del cultivar debuffelgrass “Lucero <strong>INTA</strong>-PEMAN”<strong>en</strong> condiciones de sequíaGRIFFA, S. 1 ; RIBOTTA, A. 1 ; LUNA, C. 1 ; BOLLATI, G. 2 ; LÓPEZ COLOMBA, E. 1 ; TOMMASINO, E. 1 ; CARLONI, E. 1 ;QUIROGA, M. 1 y GRUNBERG, K. 1RESUMENEn la búsqueda de nuevos cultivares nacionales mejor adaptados a las restricciones edafo-climáticaspres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> el noroeste arg<strong>en</strong>tino, principalm<strong>en</strong>te estrés por sequía y salinidad, un híbrido de buffelgrass(C<strong>en</strong>chrus ciliaris L.) d<strong>en</strong>ominado “Lucero <strong>INTA</strong>-PEMAN” fue obt<strong>en</strong>ido mediante cruzami<strong>en</strong>tos controlados<strong>en</strong> el Instituto de Fitopatología y Fisiología Vegetal (IFFIVE) del <strong>INTA</strong>. El objetivo fue evaluar morfológicam<strong>en</strong>teal cultivar Lucero <strong>en</strong> comparación con los cultivares Texas-4464, Biloela y Molopo, <strong>en</strong> Deán Funes(Norte de Córdoba, Arg<strong>en</strong>tina) a campo bajo condiciones de sequía, <strong>en</strong> un diseño <strong>en</strong> bloques completosaleatorizados con tres repeticiones y por dos ciclos de cultivo (2006/2007 y 2007/2008), considerándosecomo estados ontogénicos planta de un año y rebrote, respectivam<strong>en</strong>te. Se analizaron 13 caracteres morfológicosmediante ANAVA y test DGC (p


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 87Se evaluaron los cultivares Lucero <strong>INTA</strong> PEMAN(Lucero), Texas-4464 (Texas), Biloela y Molopo, a campo<strong>en</strong> la localidad de Deán Funes, departam<strong>en</strong>to Ischilín,provincia de Córdoba (Arg<strong>en</strong>tina) con manifestación deestrés por sequía durante el cultivo (promedio de precipitacionesde septiembre a abril =83,59 mm). El <strong>en</strong>sayo fueconducido bajo un diseño <strong>en</strong> bloques completos aleatoriwasthe least affected by low water availability and the highest values in both ontog<strong>en</strong>etic states, for compon<strong>en</strong>tcharacters seed production. It was superior in biomass production traits at Texas-4464 and most ofthem to Biloela cultivars and Molopo. Lucero showed a promising and considerable forage value fordrought-affected regions, such as northwestern Arg<strong>en</strong>tina.Key words: C<strong>en</strong>chrus ciliaris, morphologic characters, drought.INTRODUCCIÓNC<strong>en</strong>chrus ciliaris L. (buffelgrass) es una gramínea forrajerasubtropical originaria de África y ampliam<strong>en</strong>te utilizada<strong>en</strong> las regiones áridas, semiáridas e, inclusive, desérticasdel mundo (Mansoor et al., 2002) por su bu<strong>en</strong>a producciónforrajera (De León, 2004), fácil implantación, altapersist<strong>en</strong>cia (Alcalá-Galván, 1995), capacidad de mejorarlas condiciones físicas del suelo (Rossi, 2005) y toleranciaa la sequía. Esta característica varía según el cultivar,si<strong>en</strong>do Texas-4464 el más tolerante (Cook et al., 2005).En la región subtropical árida y semiárida del noroestearg<strong>en</strong>tino (NOA) el buffelgrass ha sido introducido y contribuyeal desarrollo de la actividad ganadera. Sin embargo,su semilla es abastecida mediante importación o multiplicacióndel germoplasma introducido. Esta situaciónpuso <strong>en</strong> evid<strong>en</strong>cia la importancia económica y estratégicapara la producción ganadera <strong>en</strong> dicha región, de obt<strong>en</strong>ercultivares mejor adaptados a las restricciones pres<strong>en</strong>tes<strong>en</strong> el NOA, particularm<strong>en</strong>te al estrés hídrico. En las plantas,el agua juega un rol importante <strong>en</strong> la acumulación demateria seca debido a que todos los nutri<strong>en</strong>tes son transportadosa través de ella (Mansoor et al., 2002). El crecimi<strong>en</strong>tode los cultivos y la producción de materia seca sereduc<strong>en</strong> con la disminución del cont<strong>en</strong>ido de agua delsuelo (Ashraf et al., 1998; Karst<strong>en</strong> y MacAdam, 2001) ycuando los estreses hídrico y térmico se increm<strong>en</strong>tan, lasgramíneas reaccionan concluy<strong>en</strong>do rápidam<strong>en</strong>te el procesoreproductivo y con una alta producción de semillasque favorece la resiembra (Mansoor et al., 2002). Lashojas se deshidratan por la partición de los asimiladoshacia las infloresc<strong>en</strong>cias (Seller, 1993). La baja disponibilidadde agua disminuye la expansión celular, lo que influyedirectam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la reducción de la longitud foliar (Ilhai,1982). Las dim<strong>en</strong>siones de la hoja, <strong>en</strong>tonces, ayudan alconocimi<strong>en</strong>to de las respuestas al estrés hídrico <strong>en</strong> condicionesde campo (Franca y Davies, 1998).Para la producción de forraje, la altura de planta es uncompon<strong>en</strong>te que influye directam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la producciónde materia seca (Daher et al., 2004). En condiciones desequía, los g<strong>en</strong>otipos con mayor altura produc<strong>en</strong> plantasde mayor tamaño que usan agua más rápidam<strong>en</strong>te parala transpiración, lo que disminuye el estado hídrico de laplanta más tempranam<strong>en</strong>te y, con ello, la producción debiomasa (Kamoshita et al., 2004).El diámetro de los macollos es otro compon<strong>en</strong>te deinflu<strong>en</strong>cia directa pero de efecto inverso <strong>en</strong> la producciónde biomasa. Junto a la altura de planta (Daher et al.,2004), al peso de mata (Ali et al., 2008) y al ancho delámina, es un carácter muy utilizado <strong>en</strong> el mejorami<strong>en</strong>tog<strong>en</strong>ético <strong>en</strong> C<strong>en</strong>chrus ciliaris (Griffa, 2002) y otras gramíneas(Kamoshita et al., 2004) por pres<strong>en</strong>tar alta heredabilidad,ser estable <strong>en</strong> difer<strong>en</strong>tes ambi<strong>en</strong>tes discriminantes<strong>en</strong>tre cultivares y de fácil medición.La producción de semillas <strong>en</strong> buffelgrass disminuyesignificativam<strong>en</strong>te bajo estrés hídrico (Sarroca et al.,1981) y, para evaluarla, el peso de la panoja y la longitudde la panoja (Griffa et al., 2010) mostraron ser los compon<strong>en</strong>tesde mayor influ<strong>en</strong>cia.El objetivo del pres<strong>en</strong>te trabajo fue caracterizar morfológicam<strong>en</strong>teel cultivar de buffelgrass, Lucero <strong>INTA</strong>-PEMAN, obt<strong>en</strong>ido mediante cruzami<strong>en</strong>tos controlados <strong>en</strong>el Instituto de Fitopatología y Fisiología Vegetal del <strong>INTA</strong>y reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te inscripto <strong>en</strong> el Registro Nacional de laPropiedad de Cultivares del INASE, <strong>en</strong> comparación conlos cultivares comerciales introducidos y más difundidos,Texas-4464, Biloela y Molopo, bajo condiciones desequía.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSGRIFFA, S. 1 ; RIBOTTA, A. 1 ; LUNA, C. 1 ; BOLLATI, G. 2 ; LÓPEZ COLOMBA, E. 1 y OTROS


88 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1zados con tres repeticiones, <strong>en</strong> parcelas de diez plantascada una y ubicadas <strong>en</strong> dos hileras por parcela, con unespaciami<strong>en</strong>to de 0,80 m <strong>en</strong>tre plantas y de 1 m <strong>en</strong>trelíneas. El <strong>en</strong>sayo se realizó con plantas espaciadas parapermitir la máxima expresión del f<strong>en</strong>otipo (Di Feo yBiderbost, 2009) y se efectuó un riego inmediatam<strong>en</strong>teposterior a la implantación para asegurar el establecimi<strong>en</strong>to.Las evaluaciones se realizaron durante dosciclos de crecimi<strong>en</strong>to (2006/2007 y 2007/2008), considerándosecomo estados ontogénicos planta de un año(P1A) y rebrote (R), respectivam<strong>en</strong>te. En ambos ciclosde crecimi<strong>en</strong>to, se realizaron dos cortes de plantas, elprimero al final del ciclo de crecimi<strong>en</strong>to de la pastura <strong>en</strong>el mes de abril y el segundo al final del período invernal<strong>en</strong> el mes de agosto, considerándolos como cortes nodiferido y diferido, respectivam<strong>en</strong>te. Se analizaron lossigui<strong>en</strong>tes caracteres morfológicos: altura de planta (Hpl)(medida desde el nivel del suelo al ápice de la panoja),longitud de lámina (Llb) y vaina de hoja bandera (Lvb),ancho de lámina de hoja bandera (Alb), número d<strong>en</strong>udos/macollo (Nud), peso fresco (Pf) y peso seco (Ps)de mata <strong>en</strong> corte no diferido, número de ejes secundariosfértiles (Ramfert), ancho de macollo (Anct), longitud delpedúnculo floral exerto (Exped) y su longitud total (Lped),longitud (Lp) y peso de panojas (Pp). Los datos fueronanalizados mediante ANAVA t<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta el efectog<strong>en</strong>otipo, estado ontogénico e interacción <strong>en</strong>treambos. Para comparar medias de g<strong>en</strong>otipos se utilizó laprueba de comparaciones múltiples DGC (p


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 89RESULTADOS Y DISCUSIÓNLos valores de medias de las 13 variables morfológicasevaluadas, se muestran <strong>en</strong> la tabla 1. Hubo difer<strong>en</strong>ciassignificativas <strong>en</strong>tre los g<strong>en</strong>otipos (p


90 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1condiciones de sequía <strong>en</strong> el norte de la provincia deCórdoba. Con respecto a la producción de semillas,Lucero fue superior a los tres cultivares comerciales,sugiri<strong>en</strong>do al nuevo cultivar de buffelgrass obt<strong>en</strong>ido <strong>en</strong>Arg<strong>en</strong>tina, Lucero <strong>INTA</strong>-PEMAN, de considerable valorforrajero <strong>en</strong> aquellas regiones afectadas por sequía, talescomo el NOA.AGRADECIMIENTOSEsta investigación fue financiada por los proyectos<strong>INTA</strong> N.º 1482 y 261821 y un Conv<strong>en</strong>io de VinculaciónTecnológica con la empresa O. Pemán y Asoc. S.A.BIBLIOGRAFÍAFigura 2: Comparación de panojas de los cultivares Texas-4464,Molopo, Biloela y Lucero <strong>INTA</strong>-PEMAN (de izquierda a derecha)de buffelgrass. Fu<strong>en</strong>te: elaboración para la pres<strong>en</strong>te edición.atributos y estados ontogénicos, inclusive increm<strong>en</strong>tó elPp <strong>en</strong> R, mant<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do su alta producción de semillas(Griffa et al., 2010) aún bajo estrés hídrico, contrariam<strong>en</strong>tea lo observado por Sarroca et al., (1981)CONCLUSIONESSegún la evaluación morfológica, Lucero <strong>INTA</strong>-PEMANes difer<strong>en</strong>te para la mayoría de los caracteres <strong>en</strong> comparacióna los cultivares introducidos más utilizados.Lucero <strong>INTA</strong>-PEMAN tuvo un desempeño superior al cultivarTexas-4464 <strong>en</strong> la totalidad de caracteres compon<strong>en</strong>tesde la producción de biomasa considerados, <strong>en</strong> la longitudde lámina y vaina a los cultivares Biloela y Molopo,y similar a éstos últimos, <strong>en</strong> el peso fresco de mata, bajoALCALÁ GALVÁN, C. H. 1995. Guía práctica para elestablecimi<strong>en</strong>to, manejo y utilización del Zácate Buffel.Capítulo I: Orig<strong>en</strong> geográfico y características biológicas.Sonora, México. http://www.patrocipes.org.mx/patrocipes/invpec/pastizales/P95009.html.ALI, Y.; MANSOOR, B.A.; AKHTER, J.; MONNEVEUX,P.; LATEEF, Z. 2008. G<strong>en</strong>etic variability, association anddiversity studies in wheat (Triticum aestivum L.) germplasm.Pakistan Journal of Botany 40 (5), 2087-2097.ASHRAF, M.Y.; ALA, S.A.; BHATTI, A.S. 1998.Nutritional imbalance in wheat g<strong>en</strong>otypes grown at soilwater stress. Acta Physiologiae Plantarum 20, 307-10.COOK, B.G.; PENGELLY, B.C.; BROWN, S.D.; DON-NELLY, J.L.; EAGLES, D.A.; FRANCO, M.A.; HANSON,J.; MULLEN, B.F.; PARTRIDGE, I.J.; PETERS, M.;SCHULTZE-KRAFT, R. 2005. Tropical Forages: an interactiveselection tool. [CD-ROM], CSIRO, DPI&F(Que<strong>en</strong>sland), CIAT and ILRI, Brisbane, Australia.DAHER, R.F.; VANDER PEREIRA, A.; GONZAGAPEREIRA, M.; DA SILVA LÉDO, F.J.; TEIXEIRA DO AMA-RAL JUNIOR, A.; ANDA ROCABADO, J.M.; FORTESFERREIRA, C.; DESSAUNE TARDIN, F. 2004. AnáliseEvaluación morfológica del cultivar de buffelgrass “Lucero <strong>INTA</strong>-PEMAN” <strong>en</strong> condiciones de sequía


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 91de trilha de caracteres forrageiros do capim-elefante(P<strong>en</strong>nisetum purpureum Schum.). Ciência Rural 34,1531-1535.DE LEÓN, M. 2004. Ampliando La Frontera Ganadera.Informe Técnico <strong>INTA</strong> N.º 1, 28 pp.DI FEO, L.; BIDERBOST, E. 2009. MEJORAMIENTOVEGETAL: Conceptos prácticos. Facultad de Ci<strong>en</strong>ciasAgropecuarias, Universidad Católica de Córdoba. 126 pp.DI RIENZO, J.A.; GUZMÁN, A.W.; CASANOVES, F.2002. A multiple comparisons method based on the distributionof the root node distance of a binary tree.Journal Agricultural Biological and Environm<strong>en</strong>talStatistics 7, 1-14.FRANCA, A.; LOI, A.; DAVIES, W.J. 1998. Selection ofannual ryegrass for adaptation to semi-arid conditions.European Journal of Agronomy 9, 71-78.GRIFFA, S. 2002. Caracterización de una estirpesexual y cultivares apomícticos de Buffel grass(C<strong>en</strong>chrus ciliaris L.). Tesis de Magister, UniversidadNacional de Córdoba, Arg<strong>en</strong>tina. pp.163.GRIFFA, S.M.; RIBOTTA, A.N.; BOLLATI, G.; TOM-MASINO, E.A.; LUNA, C.; LÓPEZ COLOMBA, E.; CAR-LONI, E.; PEMÁN, R.; ANDRÉS, A.; PÉREZ, H., GRUN-BERG, K. y BIDERBOST, E. 2008. Evaluación morfológicade un híbrido experim<strong>en</strong>tal de C<strong>en</strong>chrus ciliaris L.<strong>en</strong> estrés por sequía. 31.º Congreso SociedadArg<strong>en</strong>tina de Producción Animal. San Luis, Arg<strong>en</strong>tina,pp. 449-450.GRIFFA, S.; RIBOTTA, A.; LUNA, C.; LÓPEZ COLOM-BA, E.; TOMMASINO, E.; CARLONI, E.; QUIROGA, M.;GRUNBERG, K. 2010. Evaluación de compon<strong>en</strong>tes deproducción de semillas mediante análisis de coefici<strong>en</strong>tede s<strong>en</strong>dero <strong>en</strong> C<strong>en</strong>chrus spp. Jornadas de Mejorami<strong>en</strong>toG<strong>en</strong>ético de Forrajeras, Instituto Fitotécnico de SantaCatalina, Universidad Nacional de La Plata, Bu<strong>en</strong>osAires, pp.133.ILAHI, I. 1982. Plant behaviour under water stress.Pakistan Journal of Botany 14, 40-44.INFOSTAT, 2009. InfoStat/Profesional, Versión2009p.1. Software Estadístico. Grupo InfoStat/FCA.Universidad Nacional de Córdoba, Arg<strong>en</strong>tina.(http://www.infostat.com.ar).KAMOSHITA, A.; RODRÍGUEZ, R.; YAMAUCHI, A.;WADE, L. J. 2004. G<strong>en</strong>otypic variation in response ofrainfed lowland rice to prolonged drought and rewatering.Plant Production Sci<strong>en</strong>ce 4, 406-420.KARSTEN, H.D.; MACADAM, J.M. 2001. Effect ofdrought on growth, carbohydrates and soil water use byper<strong>en</strong>nial ryegrass, tall fescue and white clover. CropSci<strong>en</strong>ce 41, 156-166.MACHADO, R.C.; SOUZA, H.M.F.; MORENO, M.A.;ALVIM, P. De T. 1983. Variables associated with toleranceto water deficit in forage grasses. PesquisaAgropecuaria Brasileira 18, 603-608.MANSOOR, U.; MANSOOR, H.; WAHID, A.; RAO, A. R.2002. Ecotypic variability for drought resistance inC<strong>en</strong>chrus ciliaris L. germplasm from Cholistan Desert inPakistan. International Journal of Agriculture and Biology 4(3), 392-397.ROSSI, C. 2005. Utilización de "Buffelgrass"(C<strong>en</strong>chrus ciliaris L.) para la recuperación de pastizalesdegradados <strong>en</strong> la región árida subtropical. En:Producción bovina de carne. Sitio arg<strong>en</strong>tino de producciónanimal. (http://www.produccion-animal.com.ar/produccion_y_manejo_pasturas/pasturas_cultivada s _ m e g a t e r m i c a s / 3 4 -buffel_grass_<strong>en</strong>_chaco_arido_arg<strong>en</strong>tino.htm).SARROCA, J.; HERRERA, J., JAQUINET, P.; CON-CEPCION, O. 1981. Effect of soil humidity on seed productionin buffelgrass C<strong>en</strong>chrus ciliaris cv. Biloela.Ci<strong>en</strong>cia y Técnica <strong>en</strong> la Agricultura. Pastos y Forrajes 4,19-23.SELLER, P.1993. Assimilate allocation in response towater deficit stress, International Crop Sci<strong>en</strong>ce I, CropSociety of America, Madison, WI, pp. 733-738.GRIFFA, S. 1 ; RIBOTTA, A. 1 ; LUNA, C. 1 ; BOLLATI, G. 2 ; LÓPEZ COLOMBA, E. 1 y OTROS


92 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Efectos de la d<strong>en</strong>sidad de plantación y el sistemade conducción sobre el crecimi<strong>en</strong>to, laproductividad y el tamaño de los frutos de uncultivar de duraznero.VALENTINI, G. H. 1 ; ARROYO, L. E. 1RESUMENSe evaluaron los efectos sobre el crecimi<strong>en</strong>to y las características productivas de difer<strong>en</strong>tes sistemas deconducción y d<strong>en</strong>sidades de plantación <strong>en</strong> plantas del cultivar de duraznero “Limón Marelli” cultivadasdurante 12 temporadas. Los tratami<strong>en</strong>tos utilizados fueron “Semipalmeta” (SP) a 4,0m x 2.5m, “VasoD<strong>en</strong>so” (VD) a 5,0m x 3,0m y “Líder C<strong>en</strong>tral” (LC) a 4,0m x 2,0m. El crecimi<strong>en</strong>to de las plantas, evaluadoa través del diámetro de tronco, resultó afectado negativam<strong>en</strong>te por la d<strong>en</strong>sidad de plantación. La tasa deincrem<strong>en</strong>to del diámetro de tronco fue disminuy<strong>en</strong>do a través de las temporadas. Se obtuvo precocidad <strong>en</strong>la <strong>en</strong>trada <strong>en</strong> producción para los sistemas más d<strong>en</strong>sos, SP y LC, que a su vez alcanzaron su techo deproducción antes que VD que, por el contrario, mostró una curva de aum<strong>en</strong>to <strong>en</strong> los r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos másext<strong>en</strong>dida <strong>en</strong> el tiempo. SP y LC pres<strong>en</strong>taron una producción acumulada por hectárea que superó, <strong>en</strong>forma determinante, a la del VD. El aum<strong>en</strong>to de la d<strong>en</strong>sidad de plantación afectó relativam<strong>en</strong>te la efici<strong>en</strong>ciaproductiva. El peso promedio de los frutos resultó afectado por el tratami<strong>en</strong>to, el factor año y la interaccióntratami<strong>en</strong>to por año, al igual que lo ocurrido con todas las variables evaluadas.Palabras clave: frutales de carozo, d<strong>en</strong>sidad de plantación, sistemas de conducción, producción.ABSTRACTThe effects on growth and productivity of `Limón Marelli´ peach cultivar were evaluated, during 12 growingseasons, over trees trained to the Semipalmete (SP), High D<strong>en</strong>sity Vase (HDV) and C<strong>en</strong>tral Leader(CL) forms, at 4,0m x 2.5m, 5,0m x 3,0m and 4,0m x 2,0m, respectively. Trunk diameter was affected bytree d<strong>en</strong>sity, however, didn´t influ<strong>en</strong>ce the trunk diameter increm<strong>en</strong>t rate that decreased through the seasons.Early productivity was related to tree d<strong>en</strong>sity; SP and CL reached their maximun production earlierthan HDV which, on the other hand, showed a yield rate curve more ext<strong>en</strong>ded in the time. SP and CL hadthe highest cumulative yield per hectare. Production effici<strong>en</strong>cy was relatively affected by the tree d<strong>en</strong>sityincrease. Average fruit weight was influ<strong>en</strong>ced by treatm<strong>en</strong>t, the year and the treatm<strong>en</strong>t x year interaction;the same happ<strong>en</strong>ed to the rest of the variables.Key words: Stone fruit trees, planting d<strong>en</strong>sity, yield.1 Ings. Agrs. Grupo Fruticultura del <strong>INTA</strong> EEA San Pedro. Ruta Nac. 9, km 170 (2930) San Pedro, Bu<strong>en</strong>os Aires. E-mail de contacto:gval<strong>en</strong>tini@correo.inta.gov.arRecibido 23 de agosto de 2010 // Aceptado 08 de febrero de 2011 // Publicado online 09 de marzoEfectos de la d<strong>en</strong>sidad de plantación y el sistema de conducción sobre el crecimi<strong>en</strong>to, la productividad y el tamaño de los frutos de...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 93INTRODUCCIÓNLa necesidad de lograr una fruticultura más int<strong>en</strong>sivacon una efici<strong>en</strong>te utilización de los recursos hace que laconducción de montes frutales, especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> lorefer<strong>en</strong>te a sistemas de poda y distancias de plantación,cobre una importancia relevante. Los montes <strong>en</strong> altad<strong>en</strong>sidad se constituyeron <strong>en</strong> una herrami<strong>en</strong>ta válidapara aum<strong>en</strong>tar los r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos por unidad de superficiey adelantar la <strong>en</strong>trada <strong>en</strong> producción para una recuperaciónmás rápida del capital invertido, factores quecontribuy<strong>en</strong> a cubrir la necesidad arriba planteada(Loreti and Massai, 2002).Exist<strong>en</strong>, a nivel mundial, numerosas experi<strong>en</strong>ciasdestacándose las inicialm<strong>en</strong>te realizadas por Baldasarri(1963, 1975), qui<strong>en</strong> desarrolló un sistema de poda llamado“Nueva Palmeta” o “Palmeta Anticipada”, estableci<strong>en</strong>dolos principios básicos del sistema como fueron,<strong>en</strong>tre otros, no recortar las ramas del año, reducir almínimo la estructura esquelética de la planta, dar lajusta inclinación a las ramas para garantizar el equilibriovegetativo y nunca suprimir la prolongación del tronconi de las ramas laterales. Mediante la aplicación deestos principios sobre distintas especies frutales logrór<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos satisfactorios a un costo m<strong>en</strong>or con relacióna los sistemas tradicionales.Colella (1970) <strong>en</strong>sayó el sistema “Fuso” que permitióplantaciones más d<strong>en</strong>sas, logrando bu<strong>en</strong>os r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tosa partir del tercer año. Fisher (1969, 1971) <strong>en</strong>sayó el sistema“Palmeta de dos ramas oblícuas”, logrando bu<strong>en</strong>osr<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos por hectárea y una reducción de costos.Cellini (1973) desarrolló el sistema “Semipalmeta” conlas v<strong>en</strong>tajas de la “Palmeta” <strong>en</strong> cuanto a producción, perocon m<strong>en</strong>os costo debido a la no utilización de estructurasde soporte. Hayd<strong>en</strong> y Emerson (1973) compararon cincosistemas de poda: “Vaso de alta d<strong>en</strong>sidad”, “Eje c<strong>en</strong>tralmodificado”, “Vaso de dos andamios”, “Pilar” y “CercoBelga”. Estos sistemas lograron <strong>en</strong> poco tiempo muybu<strong>en</strong>a producción y, luego de siete años de plantados,los sistemas de alta d<strong>en</strong>sidad superaron <strong>en</strong> r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tospor hectárea a los sistemas clásicos. Bassols (1979)comparó distintas distancias de plantación y sistemas depoda <strong>en</strong> el cultivar `Princesa´, utilizando “Vaso” y forma<strong>en</strong> "V transversal”. Concluyó que los espaciami<strong>en</strong>tosultrad<strong>en</strong>sos eran promisorios pero que no debían serrecom<strong>en</strong>dados a los productores <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral debido a laexist<strong>en</strong>cia de una serie de puntos no sufici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>teesclarecidos <strong>en</strong> cuanto a las técnicas de conducción.En la Arg<strong>en</strong>tina, Frangi (1985) comparó el comportami<strong>en</strong>todel cultivar 'Red Globe' conducido <strong>en</strong>“Semipalmeta” y plantado a elevada d<strong>en</strong>sidad <strong>en</strong> filasdobles, utilizando 2133, 1280 y 853 plantas por hectárea;estableció una sustancial v<strong>en</strong>taja <strong>en</strong> los r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos porparte del sistema de mayor d<strong>en</strong>sidad ya <strong>en</strong> tercera hojapero que desapareció <strong>en</strong> quinta hoja.En adición a lo com<strong>en</strong>tado, <strong>en</strong> muchos otros estudios,los r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos de durazneros estuvieron positivam<strong>en</strong>terelacionados al número de árboles por hectárea(Grossman and DeJong, 1998; Robinson, et al., 2006).aunque el peso del fruto puede increm<strong>en</strong>tarse o disminuir(Grossman and DeJong, 1998).El objetivo de este trabajo fue conocer el comportami<strong>en</strong>tode plantas de duraznero del cultivar “Limón Marelli” conducidaspor difer<strong>en</strong>tes sistemas <strong>en</strong> d<strong>en</strong>sidades de plantaciónsuperiores a las tradicionalm<strong>en</strong>te empleadas <strong>en</strong> lazona, con refer<strong>en</strong>cia al crecimi<strong>en</strong>to vegetativo y a lascaracterísticas productivas.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSEl experim<strong>en</strong>to se realizó <strong>en</strong> la Estación Experim<strong>en</strong>talAgropecuaria (EEA) del <strong>INTA</strong> San Pedro del <strong>INTA</strong> (33°44´ 26,5´´ Lat S y 59° 47´43´´ Long O), <strong>en</strong> durazneros delcultivar local “Limón Marelli”, que produce frutos de pulpaamarilla pegada al carozo y madura durante la segundaquinc<strong>en</strong>a de <strong>en</strong>ero. El portainjerto utilizado fue“Cuaresmillo” y el cultivo se realizó <strong>en</strong> condiciones desecano durante toda la experi<strong>en</strong>cia.La plantación se efectuó sobre suelo pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>te a laSerie Ramallo, caracterizada por un horizonte A, de unos30 cm de espesor, franco, pardo oscuro, friable, permeable,humífero y un horizonte B, arcilloso, pardo claro, compacto,impermeable y difícil de p<strong>en</strong>etrar (<strong>INTA</strong>. Instituto deSuelos. Carta de Suelos de la República Arg<strong>en</strong>tina).Las prácticas culturales realizadas anualm<strong>en</strong>te sobrelos frutales no difirieron de las normalm<strong>en</strong>te empleadas<strong>en</strong> la zona, según las recom<strong>en</strong>daciones de la EEA SanPedro (Mitidieri, 2003; Segade, 2006).La cosecha se procesó mediante el uso de una calibradoraelectrónica.El diseño estadístico del experim<strong>en</strong>to fue <strong>en</strong> bloquescompletam<strong>en</strong>te aleatorizados con 4 repeticiones por tratami<strong>en</strong>toy 4 plantas útiles por parcela.Los tratami<strong>en</strong>tos fueron:Tratami<strong>en</strong>tosMarco de plantaciónSEMIPALMETA (SP) 4,0m x 2,5mVASO DENSO (VD) 5,0m x 3,0mLIDER CENTRAL (LC) 4,0m x 2,0mVALENTINI, G. H. 1 ; ARROYO, L. E. 1


94 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Variables evaluadas a través de 12 temporadas decrecimi<strong>en</strong>to:1. Variables medidasDiámetro de tronco (DT) medido a 30 cm del suelo yantes de la poda invernal. Se calculó a partir del perímetromedido con una cinta métrica flexible.R<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to (R) <strong>en</strong> kilogramos por planta.Peso promedio de los frutos (PPFR) expresado <strong>en</strong> gramospor fruto (g/fruto).2. Variables calculadas a partir de datos observadosEfici<strong>en</strong>cia productiva (EP), medida como la relación <strong>en</strong>treel r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to por planta y la sección de tronco, expresada<strong>en</strong> kilogramos por c<strong>en</strong>tímetro cuadrado (kg/cm2).3. Variables estimadasR<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to por unidad de superficie expresada <strong>en</strong> kg/ha.R<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to acumulado a través de las campañas,expresado <strong>en</strong> kg/ha.Todas las variables se com<strong>en</strong>zaron a evaluar a partirdel segundo verde al cual se d<strong>en</strong>ominó Temporada 1(Temp 1). Debido a factores climáticos que afectaron la producción,las temporadas 4 y 8 no fueron consideradas.El análisis estadístico de los datos registrados se efectuómediante el programa estadístico SAS (Statistical AnalysisSystem) utilizando el análisis de la variancia. La separaciónde medias se efectuó mediante el Test de Scheffe al 5% designificancia (a = 0,05). Se elaboraron las curvas de regresiónpara DT, R y R<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to por unidad de superficie.RESULTADOS1. Variables medidas1.1. Diámetro de tronco (DT): SP superó significativam<strong>en</strong>te(p< 0.05) a LC durante todas las temporadas,m<strong>en</strong>os <strong>en</strong> la última y a VD durante las 4 primeras campañas.A partir de la temporada 4, VD pres<strong>en</strong>tó los mayoresDT, si bi<strong>en</strong> sólo se difer<strong>en</strong>ciaron significativam<strong>en</strong>te(p< 0.05) <strong>en</strong> las Temp 4, 11 y 12 (tabla 1).DT aum<strong>en</strong>tó <strong>en</strong> todos los sistemas de conducción através de los años, notándose hacia el final del períodoconsiderado una disminución de la tasa de crecimi<strong>en</strong>tode esta variable. En todos los tratami<strong>en</strong>tos la evolucióndel diámetro de tronco <strong>en</strong> el tiempo, se ajustó a curvasde tipo logarítmicas (figura 1).Tratami<strong>en</strong>toTemporadasTemp 1 Temp 2 Temp 3 Temp 4 Temp 5 Temp 6 Temp 7 Temp 9 Temp 10 Temp 11 Temp 12SP 3,65 a 4,95 a 7,87 a 8,30 a 9,65 a 9,90 a 10,85 a 11,27 a 11,53 a 11,60 b 11,81 bVD 2,50 b 3,84 b 6,46 b 7,41 b 9,89 a 10,19 a 11,18 a 11,58 a 12,11 a 12,40 a 12,66 aLC 2,65 b 3,72 b 6,07 b 6,80 c 8,90 b 9,10 b 9,32 b 9,70 b 10,49 b 10,50 c 11,20 bTabla 1. Diámetro de tronco (cm) para los distintos tratami<strong>en</strong>tos <strong>en</strong> cada temporada (Temp). Elaboración propia. Los valores de las columnasseguidos de la misma letra, no difier<strong>en</strong> significativam<strong>en</strong>te (p


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 951.2. R<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to por planta (R): VD fue el tratami<strong>en</strong>tocon m<strong>en</strong>or R <strong>en</strong> la primera temporada evaluada,luego se igualó con LC <strong>en</strong> las temporadas 2 y 3 y, a partirde allí lo superó hasta el final del período evaluado.SP superó a LC durante todas las temporadas evaluadascon excepción de la Temp 1 y la Temp 7; por otrolado, no superó a VD a partir de la Temp 5 (tabla 2).R, <strong>en</strong> LC y VD, se ajustó a curvas de tipo cuadráticas,evolucionando <strong>en</strong> forma similar a través de lastemporadas, observándose un aum<strong>en</strong>to de los valoreshasta la sexta y séptima cosecha (Temp 6 y 7) a partirde las cuales com<strong>en</strong>zaron a decrecer. En el caso deSP, esta variable se ajustó a una curva de tipo cúbica(figura 2).Tratami<strong>en</strong>toTemporadasTemp 1 Temp 2 Temp 3 Temp 5 Temp 6 Temp 7 Temp 9 Temp 10 Temp 11 Temp 12SP 1,09 a 14,01 a 16,88 a 36,90 b 23,64 a 25,65 b 24,24 a 33,27 a 21,27 b 17,86 bVD 0,51 b 7,47 b 12,20 b 51,36 a 20,89 a 32.51 a 26,57 a 37.63 a 32,18 a 26,15 aLC 0,92 a 7,10 b 12,06 b 26,31 c 13,42 b 23,24 b 17,31 b 22,69 b 16,31 c 11,97 cTabla 2. R<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to por planta (kg) para los distintos tratami<strong>en</strong>tos <strong>en</strong> cada temporada (Temp). Elaboración propia. Los valores de lascolumnas seguidos de la misma letra, no difier<strong>en</strong> significativam<strong>en</strong>te (p


96 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À12- Variables estimadasEn el caso de los r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos por hectárea, SP y LCfueron los tratami<strong>en</strong>tos que, hasta la Temp 10 y conexcepción de la Temp 5, pres<strong>en</strong>taron mayores produccionespor ha, si bi<strong>en</strong> las difer<strong>en</strong>cias no fueron siempre significativas(p< 0.05) al comparar con VD. Por otro lado,alcanzaron rápidam<strong>en</strong>te valores interesantes durante losprimeros años de producción (Temp 1, 2 y 3) que los difer<strong>en</strong>ciarondel tratami<strong>en</strong>to m<strong>en</strong>os d<strong>en</strong>so (tabla 4).Al considerar el r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to acumulado por hectárea,a la tercera temporada LC y SP superaron ampliam<strong>en</strong>tea VD. Al final del período considerado las difer<strong>en</strong>ciasse redujeron notablem<strong>en</strong>te, LC superó a VD <strong>en</strong> alrededordel 13% mi<strong>en</strong>tras SP lo hizo <strong>en</strong> un 32% (tabla 5).Tratami<strong>en</strong>toTemporadasTemp 1 Temp 2 Temp 3 Temp 5 Temp 6 Temp 7 Temp 9 Temp 10 Temp 11 Temp 12SP 1095,0 a 14015,0 a 17876,0 a 36905,0 a 23640,0 a 25655,0 ab 24240,0 a 33274,0 a 21271,0 a 17857,0 aVD 339,6 b 4981,0 c 8140,0 c 34256,0 a 13932,0 b 21683,0 b 17723,0 b 25096,0 b 21462,0 a 17441,0 abLC 1156,3 a 8875,0 b 15081,0 b 32888,0 a 16781,0 b 29050,0 a 21644,0 ab 28359,0 b 20391,0 a 14969,0 bTabla 4. R<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to (kg/ha) para los distintos tratami<strong>en</strong>tos <strong>en</strong> cada temporada (Temp). Elaboración propia. Los valores de las columnasseguidos de la misma letra, no difier<strong>en</strong> significativam<strong>en</strong>te (p


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 97Tratami<strong>en</strong>toTemporadasTemp 1 Temp 2 Temp 3 Temp 5 Temp 6 Temp 7 Temp 9 Temp 10 Temp 11 Temp 12SP 0,10 b 0,72 a 0,36 a 0,52 b 0,31 a 0,29 a 0,25 a 0,32 a 0,21 b 0,16 bVD 0,13 a b 0,65 a 0,37 a 0,67 a 0,26 a b 0,33 a 0,25 a 0,32 a 0,26 a 0,21 aLC 0,18 a 0,71 a 0,43 a 0,42 c 0,20 b 0,34 a 0,23 a 0,26 b 0,20 b 0,12 cTabla 6. Efici<strong>en</strong>cia productiva (kg/cm2 de Área Sección de Tronco) para los distintos tratami<strong>en</strong>tos <strong>en</strong> cada temporada (Temp).Elaboración propia. Los valores de las columnas seguidos de la misma letra, no difier<strong>en</strong> significativam<strong>en</strong>te (p


98 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1et al. (1999) que, luego de una experi<strong>en</strong>cia de 5 añosdonde se comparó un sistema de conducción plantado<strong>en</strong> dos d<strong>en</strong>sidades difer<strong>en</strong>tes, el sistema más d<strong>en</strong>so tuvolos mayores r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos.Del experim<strong>en</strong>to se despr<strong>en</strong>de que, para la variedadutilizada, la mayor d<strong>en</strong>sidad de plantación permitió fundam<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te,un rápido e importante increm<strong>en</strong>to dela producción por ha. Este factor puede resultar relevantey <strong>en</strong> consecu<strong>en</strong>cia considerar a las alternativasevaluadas como herrami<strong>en</strong>tas útiles al mom<strong>en</strong>to de planificaruna plantación.REFERENCIASBALDASARRI, T.: 1963. Ferrara cuna della nuova palmetta.Frutticoltura Vol. 25 N.º 10, p. 709-722.BALDASARRI, T: 1975. Fruticultura Industrial con laNueva Palmeta. Ediciones Mundi Pr<strong>en</strong>sa. Madrid, España.BASSOLS, M.: 1979. D<strong>en</strong>sidade do plantio em pessegueiro.Anais do V Congreso Brasileiro do Fruticultura.Vol. III, p 10-15.BLACKBURN, B. AND C. R. ROM: 1998. Early performanceof six peach training systems. HortSci., Vol.33(4): 600.BRAZANTI, E.; D. COBIANCHI; L. RIVALTA: 1973.Confronte fra due metodi di potatura di due cultivar depercoche. XII Convegno Peschicola RomagnoloCes<strong>en</strong>a–Italia.CELLINI, D.: 1973. Palmeta + Bidone = Palbidone.Publicación semestral N.º 24. Zanzivivai. Ferrara. ItaliaCOLELLA, F.: 1970. Un nuevo sistema de conduccióndel duraznero "A Fuso". Frutticoltura, Vol. 32 Nº 1-2, p.35-37.CORELLI, L; G. BRIGHENTI,; U. PALARA: 1986.Esperi<strong>en</strong>ze su forme di allevam<strong>en</strong>to del pesco per mediee alte d<strong>en</strong>sita d´ímpianto. Frutticoltura, N.º 12, p.55 - 60.CORELLI, L; S. SANSAVINI: 1991. Forme di allevam<strong>en</strong>to,effici<strong>en</strong>za degli impianti e qualita delle pesche.Frutticoltura, N.º 6, p. 13 - 24.CRASSWELLER, R. M. AND D. E. SMITH: 1996.Influ<strong>en</strong>ce of training systems on tree size, yield and fruitquality of 15 peach cultivars. HortSci., Vol. 31(4): 666.DEJONG, T. M.; W. TSUJI; J. F. DOYLE AND Y. L.GROSSMAN: 1999. Comparative economic effici<strong>en</strong>cyof four peach production systems in California. HortSci.34: 73 - 78.FISHER, D.V.: 1969. High d<strong>en</strong>sity peach plantings.Proc. N. J. State HortSci<strong>en</strong>ce. Vol 114. p. 203-207.FISHER, D.V.: 1971. Why not a small peach tree?American Fruit Growers, p.15.FRANGI, H.: 1985. Filas dobles para plantación deduraznero <strong>en</strong> alta d<strong>en</strong>sidad. Carpeta "Día de Campo".EEA San Pedro (<strong>INTA</strong>).GROSSMAN, Y.L. AND Y.M. DEJONG: 1998. Trainingand pruning system effects on vegetative growth pot<strong>en</strong>tial,light interception, and cropping effici<strong>en</strong>cy in peachtrees. J. Amer. Soc. Hort. Sci. 123: 1058 - 1064.HAYDEN, R.; F. EMERSON: 1973. Close ranks for morepeach. American Fruit Growers, Vol. 193, N.º 12, p. 13-15.<strong>INTA</strong>. Instituto de Suelos. Carta de suelos de laRepublica Arg<strong>en</strong>tina. Hoja 3360-34 y 35. San Pedro,Baradero, Castelar, <strong>INTA</strong>: C<strong>en</strong>tro de Investigaciones <strong>en</strong>Recursos Naturales. s.f. s.n. p. + mapLEMUS S., G.; J. VALENZUELA B.: 1986. Producción ycrecimi<strong>en</strong>to de durazneros <strong>en</strong> alta d<strong>en</strong>sidad y conducidos<strong>en</strong> eje c<strong>en</strong>tral, con dos int<strong>en</strong>sidades de poda. AgriculturaTécnica (Chile) 46 (3): 361 - 364.LORETI, F. and R. MASSAI: 2002. The high-d<strong>en</strong>sitypeach planting system: Pres<strong>en</strong>t status and perspectives.Acta Hort. 592:377-390MARINI, R. P. AND D. S. SOWERS: 2000. Peach treegrowth, yield, and profitability as influ<strong>en</strong>ced by tree formand tree d<strong>en</strong>sity. HortSci, Vol. 35(5): 837 - 842.MITIDIERI, M.:2003. Enfermedades del duraznero.http://www.inta.gov.ar/sanpedro/info/doc/prv/mm_010.htm,<strong>INTA</strong> EEA San Pedro, Bs. As. Arg<strong>en</strong>tina (verificado marzode 2010).ROBINSON, T. L., R. L. ANDERSEN AND S. A.HOYING: 2006. Performance of Six High D<strong>en</strong>sity PeachTraining Systems in the Northeastern United States.Proceedings of the Sixth International PeachSymposium. Acta Horticulturae 713: 311-320SEGADE, G: 2006. Cal<strong>en</strong>dario de actividades para elmanejo de plagas del duraznero <strong>en</strong> producción conv<strong>en</strong>cional.http://www.inta.gov.ar/sanpedro/info/doc/2006/gs_001.htm <strong>INTA</strong> EEA San Pedro, Bs. As. Arg<strong>en</strong>tina (verificadomarzo de 2010).Efectos de la d<strong>en</strong>sidad de plantación y el sistema de conducción sobre el crecimi<strong>en</strong>to, la productividad y el tamaño de los frutos de...


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 99Líneas de girasol de la EEA PergaminoGONZÁLEZ, J. 1 ; MANCUSO, N. 1 ; LUDUEÑA, P. 1RESUMENSe analizaron tres grupos de líneas de girasol (Helianthus annuus) de la EEA Pergamino del <strong>INTA</strong>. Grupo 1:líneas derivadas de los compuestos P1, P2, P4, PGRK y KLM liberadas <strong>en</strong> la década del 90. Grupo 2: líneas GPlogradas de cruzas <strong>en</strong>tre las del grupo 1 con otras fu<strong>en</strong>tes, liberadas a partir del 2001. Grupo 3: líneas AO (cont<strong>en</strong>idode oleico > 80%) derivadas de materiales del North Dakota y de cruzas con materiales locales. Se analizaronlos sigui<strong>en</strong>tes caracteres: número de aqu<strong>en</strong>ios por capítulo, peso de 100 aqu<strong>en</strong>ios, porc<strong>en</strong>taje de pepita yaceite, altura de planta y número de días desde siembra a floración. El objetivo fue evaluar la variabilidad del germoplasma<strong>en</strong>tre grupos y las asociaciones <strong>en</strong>tre caracteres d<strong>en</strong>tro de cada grupo para id<strong>en</strong>tificar el idiotipo y lascaracterísticas difer<strong>en</strong>ciales. El efecto de la selección se manifestó claram<strong>en</strong>te al comparar los grupos. En elGrupo 1, la selección se efectuó principalm<strong>en</strong>te por r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to de semilla y, <strong>en</strong> los Grupos 2 y 3 se dirigió a lamejora del cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite y cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de oleico, respectivam<strong>en</strong>te. Las líneas del Grupo2 y Grupo 3 (AO) superaron <strong>en</strong> cont<strong>en</strong>ido de aceite a las del Grupo 1, las cuales fueron de mayor altura y pesode aqu<strong>en</strong>io. D<strong>en</strong>tro de cada grupo se id<strong>en</strong>tificaron de 4 a 6 subgrupos caracterizados por los objetivos del mejorami<strong>en</strong>toy difer<strong>en</strong>ciándose líneas indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes derivadas por objetivos de selección indirecta. El germoplasmaevaluado podría incorporarse a difer<strong>en</strong>tes “backgrounds” g<strong>en</strong>éticos según los objetivos del mejorami<strong>en</strong>to.Palabras clave: Helianthus annuus, líneas de girasol, mejorami<strong>en</strong>to.ABSTRACTThree groups of sunflower (Helianthus annuus) lines from Pergamino Experim<strong>en</strong>tal Station, <strong>INTA</strong> (NationalInstitute of Agricultural Technology) 33º 53’S, 60º 35’ O were evaluated. The lines composing the first group(Group 1) were selected from P1, P2, P4, PGRK and KLM populations, released in the decade of the 90´s.Thesecond group (Group 2) included lines GP, derived from the crosses betwe<strong>en</strong> Group 1 and other sources, releasedafter 2001. The third group (Group 3) consisted of lines AO (oleic cont<strong>en</strong>t >80%) derived from crosses betwe<strong>en</strong>North Dakota materials and local lines. Height, days to flowering, weight and number of ach<strong>en</strong>es, perc<strong>en</strong>tageof oil, oleic acid, and kernel were analyzed. The objective was to evaluate the variability of the germplasmbetwe<strong>en</strong> groups and the associations among characters within each group, to id<strong>en</strong>tify the idiotype and differ<strong>en</strong>tialcharacteristics. Selection effect was clearly shown wh<strong>en</strong> groups were compared. Group 1 was selectedbased on seed yield and in groups 2 and 3 by the oil and oleic acid perc<strong>en</strong>tage cont<strong>en</strong>t respectively. The oil cont<strong>en</strong>tof lines of the groups 2 and 3 was higher than group 1. On the other hand, derived from group 1 were higherand weighter ach<strong>en</strong>es. Four to six sub-groups were id<strong>en</strong>tified within each group characterized themselvesby the objectives of breeding. Individual lines, derived by indirect selection, were id<strong>en</strong>tified. The available germplasmcould be included in differ<strong>en</strong>t g<strong>en</strong>etic backgrounds according to the objectives of the breeding program.Key words: Helianthus annuus; Sunflower lines; Breeding.1 Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (<strong>INTA</strong>). Estación Experim<strong>en</strong>tal Agropecuaria Pergamino. C.C. 31 (2700) Pergamino, Arg<strong>en</strong>tina.Tel: +542477439023. E-mail: pergira@pergamino.inta.gov.arRecibido 14 de septiembre de 2010 // Aceptado 2 de febrero de 2011 // Publicado online 09 de marzoGONZÁLEZ, J. 1 ; MANCUSO, N. 1 ; LUDUEÑA, P. 1


100 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1INTRODUCCIÓNLa EEA Pergamino del <strong>INTA</strong> conduce un programa demejorami<strong>en</strong>to g<strong>en</strong>ético de Girasol con el objetivo g<strong>en</strong>eralde contribuir a increm<strong>en</strong>tar la competitividad del cultivomediante la mejora de atributos asociados con r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>toy calidad.Desde 1939, el programa de mejorami<strong>en</strong>to de girasol dela EEA Pergamino fue liberando germoplasma (compuestos,variedades, líneas, etc.) de difer<strong>en</strong>tes característicasf<strong>en</strong>ológicas, agronómicas, sanitarias y de calidad industrial.En sus inicios el programa tuvo por objetivo el desarrollode variedades de polinización abierta a partir de poblacionesintroducidas por los inmigrantes adaptadas a lascondiciones locales (Bertero de Romano y Vázquez, 2003)complem<strong>en</strong>tándose con las introducciones del Ministeriode Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación dirigidas aincrem<strong>en</strong>tar el t<strong>en</strong>or de aceite. Con la aparición de laandro-esterilidad citoplasmática <strong>en</strong> la década del 70, seori<strong>en</strong>tó a la obt<strong>en</strong>ción de líneas <strong>en</strong>docriadas para el desarrollode híbridos (González y Mancuso, 2004).La exist<strong>en</strong>cia de variabilidad es una condición indisp<strong>en</strong>sablepara el desarrollo de un programa de mejorami<strong>en</strong>tog<strong>en</strong>ético. La información prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te de la descripciónde cultivares de girasol, analizada a través demétodos adecuados, permite caracterizar la variabilidaddel germoplasma.Fernández Martínez y Domínguez Giménez (1985)<strong>en</strong>contraron gran variabilidad <strong>en</strong> cont<strong>en</strong>ido de aceite,peso de 100 semillas, porc<strong>en</strong>taje de cáscara, cont<strong>en</strong>idode aceite <strong>en</strong> pepita y composición de ácidos grasos, analizandomuestras de una colección mundial de girasol.Los autores <strong>en</strong>contraron correlación negativa <strong>en</strong>tre porc<strong>en</strong>tajede aceite y porc<strong>en</strong>taje de cáscara y no <strong>en</strong>contraronsignificación estadística <strong>en</strong> la correlación <strong>en</strong>tre pesode semilla y su cont<strong>en</strong>ido de aceite, mi<strong>en</strong>tras que Fick etal. (1974) <strong>en</strong>contraron correlación negativa <strong>en</strong>tre cont<strong>en</strong>idode aceite y peso de semilla.A su vez, Álvarez et al. (1991), <strong>en</strong> un estudio depoblaciones de girasol de difer<strong>en</strong>tes oríg<strong>en</strong>es, informaroncorrelación negativa <strong>en</strong>tre ciclo a floración y númerode granos, mi<strong>en</strong>tras que Arango et al. (1995), analizandomuestras del banco de germoplasma de girasol,<strong>en</strong>contraron correlación positiva <strong>en</strong>tre cont<strong>en</strong>ido deaceite y porc<strong>en</strong>taje de pepa, pero no <strong>en</strong>contraroncorrelación significativa <strong>en</strong>tre cont<strong>en</strong>ido de aceite ypeso de semilla.Por su parte, Chikkadevaiah et al. (2002), <strong>en</strong> un estudiosobre líneas de girasol <strong>en</strong>contraron, que el cont<strong>en</strong>idode aceite se correlacionaba positivam<strong>en</strong>te con altura ypeso de semilla y Joksimovick et al. (2004), <strong>en</strong> un estudiosobre líneas e híbridos de girasol, obtuvieron correlaciónpositiva <strong>en</strong>tre cont<strong>en</strong>ido de aceite y peso de semilla.Por último, González et al. (2004) <strong>en</strong>contraron correlaciónnegativa <strong>en</strong>tre cont<strong>en</strong>ido de aceite y peso de semillay positiva <strong>en</strong>tre cont<strong>en</strong>ido de aceite y cont<strong>en</strong>ido de pepa.En este trabajo se analizan caracteres productivos,f<strong>en</strong>ológicos y de calidad industrial de varios grupos delíneas. Grupo 1: obt<strong>en</strong>idas <strong>en</strong>te los años 1980 y 1990,derivadas de los compuestos Pergamino, PGRK, KLM yde cruzas BXC, etc. Grupo 2: liberadas a partir del año2001 producto de cruzas <strong>en</strong>tre los materiales antiguos yotros de más reci<strong>en</strong>te aparición. Grupo 3: líneas con altocont<strong>en</strong>ido de oleico.El objetivo fue comparar los caracteres productivos,f<strong>en</strong>ológicos y de calidad industrial, <strong>en</strong>tre y d<strong>en</strong>tro de losdistintos grupos; detectar la variabilidad y asociaciones<strong>en</strong>tre los mismos, y su pot<strong>en</strong>cialidad para el logro de idiotiposcon características difer<strong>en</strong>ciales.MATE<strong>RIA</strong>LES Y MÉTODOSSe analizó la información prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te de 75 líneasmant<strong>en</strong>edoras de girasol (Anexo: “Orig<strong>en</strong> de las líneas”)pert<strong>en</strong>eci<strong>en</strong>tes a los sigui<strong>en</strong>tes grupos: Grupo 1, líneasderivadas de los compuestos P1 (compuesto Pergamino1), P4 (compuesto Pergamino 4), P2 (compuestoPergamino 2), PGRK (Pozo G<strong>en</strong>ético Ruso por Klein) yKLM (Pozo G<strong>en</strong>ético Klein, Locales, Manfredi) obt<strong>en</strong>idas<strong>en</strong> la década del 90; Grupo 2, líneas GP (GirasolPergamino) prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tes de cruzas <strong>en</strong>tre las del Grupo 1con otras fu<strong>en</strong>tes obt<strong>en</strong>idas a partir del 2001; Grupo 3,líneas AO de cont<strong>en</strong>ido de oleico mayor al 80% derivadasde materiales del North Dakota y de cruzas conmateriales locales.El análisis de los caracteres de las líneas se efectuócomo parte de la descripción de cultivares para el INASE(Instituto Nacional de Semillas) d<strong>en</strong>tro del programa demejorami<strong>en</strong>to de girasol de la EEA Pergamino. Las líneasfueron descriptas <strong>en</strong> distintos años suponi<strong>en</strong>do un efectoaño no significativo (se comparan con los valores de líneastestigo que fueron sembradas todos los años para usarlascomo refer<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la descripción). Las fechas de siembrafueron durante el mes de octubre considerándose normalespara la zona por su baja incid<strong>en</strong>cia sobre caracteresrelacionados con r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to y calidad. La parcela experim<strong>en</strong>talfue de un surco de 6m de largo x 0.7m <strong>en</strong>tre líneas,empleándose un diseño estadístico de bloques al azar con4 repeticiones. Las evaluaciones se hicieron <strong>en</strong> las campañas2001/02, 2003/04 y 2007/08.Se midieron, <strong>en</strong> 4 plantas de cada línea los sigui<strong>en</strong>tescaracteres: número de aqu<strong>en</strong>ios por capítulo, peso de100 aqu<strong>en</strong>ios, porc<strong>en</strong>taje de pepita, de aceite y de ácidooleico, altura de planta y número de días desde siembraa floración. En los dos últimos se tomó el promedio de laparcela.Líneas de girasol de la EEA Pergamino


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 101Se efectuó el análisis de varianza ajustado por los valoresde las líneas y testigos comunes sembrados <strong>en</strong> todaslas campañas.Las observaciones obt<strong>en</strong>idas fueron analizadas portécnicas de análisis multivariado mediante el programaestadístico INFOGEN. Se empleó el análisis de conglomeradoscon criterio de agrupami<strong>en</strong>to jerárquico por elmétodo de <strong>en</strong>cad<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to promedio (UPGMA), paraagrupar las líneas con características comunes con base<strong>en</strong> número de aqu<strong>en</strong>ios por capítulo, peso de 100 aqu<strong>en</strong>ios,porc<strong>en</strong>taje de pepita y de aceite, altura y ciclo a floracióny cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de ácido oleico (sólo <strong>en</strong> laslíneas del grupo Alto Oleico. La estandarización de lasvariables se efectuó considerando media igual a cero yuna desviación media absoluta igual a uno, obt<strong>en</strong>i<strong>en</strong>dolos ”z scores” y la nueva matriz estandarizada. Las asociaciones<strong>en</strong>tre caracteres fueron estimadas por análisisde correlaciones.En la descripción de las líneas de cada grupo se señalantambién características agronómicas y sanitarias(comportami<strong>en</strong>to fr<strong>en</strong>te a Verticillium dahliae, Sclerotiniasclerotiorunm, etc.) por considerarse un aporte de interésdel cultivo.RESULTADOS Y DISCUSIONEn la tabla 1 se analiza la variabilidad de los sigui<strong>en</strong>tescaracteres: altura, número de aqu<strong>en</strong>ios, peso de 100aqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de pepa y cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tualde aceite.Los valores de P observados indican difer<strong>en</strong>cias estadísticam<strong>en</strong>tesignificativas, tanto para grupos como paralíneas <strong>en</strong> todos los caracteres. De acuerdo con estosresultados existirían difer<strong>en</strong>cias, tanto <strong>en</strong>tre las líneascomo <strong>en</strong>tre los grupos para los atributos estudiados.Este resultado sust<strong>en</strong>ta el análisis propuesto <strong>en</strong> base alos 3 grupos de líneas.Los utilizados para el análisis se conformaron segúnépoca de obt<strong>en</strong>ción y atributos específicos.En la tabla 2 se pres<strong>en</strong>tan los promedios de los caracteresanalizados. Las líneas del Grupo 2 y las de AltoOleico (Grupo 3) superaron <strong>en</strong> cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual deaceite a las del Grupo 1. Los valores de cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tualde aceite y pepa más altos se obtuvieron <strong>en</strong> laslíneas Alto Oleico y los más altos valores de peso deaqu<strong>en</strong>io y altura se obtuvieron <strong>en</strong> las líneas del Grupo 1.Comparando las líneas del Grupo 2 y las de Grupo 3 AltoOleico con las líneas del Grupo 1, se concluye que elmejorami<strong>en</strong>to logró aum<strong>en</strong>tar el cont<strong>en</strong>ido de aceite yreducir la altura de las líneas obt<strong>en</strong>idas a partir del 2001.En el d<strong>en</strong>drograma del Grupo 1 (figura 1) para peso ynúmero de aqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite,cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de pepa, altura y ciclo a floración delas líneas, se observan 5 subgrupos. El primer subgrupoestá integrado sólo por la línea KLM 295 prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te delPozo G<strong>en</strong>ético Klein Local Manfredi. El segundo lo formandos líneas: RK 456 y RK 426-11, de similar altura yciclo a floración, originadas <strong>en</strong> el compuesto PGRK(Pozo G<strong>en</strong>ético Ruso por Klein), que son altas, de ciclolargo y con bu<strong>en</strong> r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to <strong>en</strong> semilla.Fu<strong>en</strong>te de variación Repetición Grupo Líneagl 3 2 72AlturaNúmero de Aqu<strong>en</strong>iosPeso de ci<strong>en</strong> aqu<strong>en</strong>iosPepa (%)Aceite (%)CM 506,5 2432,84 464,61p-valor 0,0056 0,0001** 0,0027**CM 18450,6 416598,12 142420,7p-valor 0,5706


102 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1Floración (días) Altura (cm)Nº . deaqu<strong>en</strong>iosPeso deaqu<strong>en</strong>io(g)Pepa (%) Aceite (%) Oleico (%)Grupo 1 70 a 154 c 560 a 5,99 b 70,58 a 43,22 aGrupo 2 74 a 136 a 557 a 5,02 a 73,81 b 47,22 bGrupo 3 72 a 149 b 626 b 4,84 a 74,91 b 48,23 b 86,26Promedio 72 146 581 5,28 73,1 46,22 86,26LSD (5%) 5.07 4.22 58,2 0,27 1,11 0,85Letras distintas indican difer<strong>en</strong>cias estadisticam<strong>en</strong>te significativas (p


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 103ción de E (material de la Estanzuela)/KLM 280 (línea deEEA Pergamino)/HA 300 (línea americana) pres<strong>en</strong>taresist<strong>en</strong>cia a Downy mildew. Las líneas GP 07/15 y GP07/14 coincid<strong>en</strong> <strong>en</strong> ciclo a floración, número de aqu<strong>en</strong>iosy cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite y GP 07/10 y GP 03/01coincid<strong>en</strong> <strong>en</strong> ciclo a floración y cont<strong>en</strong>ido de aceite.El quinto subgrupo lo forman GP 07/08 y GP 07/07, desimilar ciclo a floración y cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de pepa;GP 08/07, GP 07/11, GP 03/03 y GP 02/03 de similarcont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite y de pepa y GP 02/04.Las líneas GP 03/03 y GP 02/03 provi<strong>en</strong><strong>en</strong> de AxB/BxCy pres<strong>en</strong>tan bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>to sanitario fr<strong>en</strong>te aVerticillium, Sclerotinia y Albugo. La línea GP 07/11 provi<strong>en</strong>ede AO 03/15x BZ ti<strong>en</strong>e alto cont<strong>en</strong>ido de aceite yGP 08/07 provi<strong>en</strong>e de materiales de North Dakota conresist<strong>en</strong>cia a Downy mildew.El sexto lo integran las líneas IMI 03/02, IMI 03/01y GP02/06 similares <strong>en</strong> cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de pepa; GP03/02, GP 03/07, GP 02/05 y GP 02/01 similares <strong>en</strong> cicloa floración, altura y cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite, y GP01/01. GP 02/06 deriva de HA 89/DxT con bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>tofr<strong>en</strong>te a Sclerotinia, Albugo y vuelco; GP 03/02deriva de MP 83/2/HA 89 con bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>to fr<strong>en</strong>tea Sclerotinia, Verticillium y Albugo; GP 03/07 provi<strong>en</strong>ede la cruza de HA 89/HA 300; GP 02/05 derivada deDXT/HA 89 con bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>to a Verticillium y GP02/01, derivada de MP 83/2/HA 89 con bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>toa Albugo. Por último, GP 01/01, provi<strong>en</strong>e de MP557/Negro Bellocq /Ha 89 con bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>tofr<strong>en</strong>e a Verticillium.Figura 2. Grupo 2. D<strong>en</strong>drograma(*) de clasificación de líneas GP <strong>en</strong>base a número y peso de aqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido de pepa y de aceite,altura y floración, prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tes de cruzas de líneas del Grupo 1 conotras fu<strong>en</strong>tes, obt<strong>en</strong>idas a partir del 2001. (*) Williams, W.T. 1976En el d<strong>en</strong>drograma del Grupo 3 líneas AO (figura 3)para peso y número de aqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tualde aceite, de pepa y de oleico, altura y ciclo a floración,se difer<strong>en</strong>cian 4 subgrupos. El primer subgrupo integradoAO 02/03 y AO 02/02 de igual ciclo a floración y similaraltura y cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite; originadas apartir de cruzami<strong>en</strong>tos de materiales locales con la líneade Alto Oleico HA 343, son materiales “mid oleico” conbu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>to a Sclerotinia y a Albugo. El segundoestá formado sólo por la línea AO 03/20.El tercero lo forman GP 06/04, AO 03/17, AO 03/19 yAO 03/12, de similar número de aqu<strong>en</strong>ios; GP 07/12, GP07/13, GP 06/03, AO 03/14, AO 03/15 y AO 03/03, similares<strong>en</strong> cont<strong>en</strong>ido de ácido oléico, y GP 06/01, GP 06/04y AO 02/01.GP 06/04 provi<strong>en</strong>e de Luch/AO 01/03, pres<strong>en</strong>ta bu<strong>en</strong>comportami<strong>en</strong>to fr<strong>en</strong>te a Verticillium; AO 03/17 y AO03/19 se originaron <strong>en</strong> cruzas con HA 343, t<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do AO03/19 bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>to fr<strong>en</strong>te a Albugo; GP 07/12 yGP 07/13 provi<strong>en</strong><strong>en</strong> de VN 02/01/ AO 02/01; GP 06/03deriva de AO 01/02/BXC/AXB y las líneas AO 03/12, AO03/15, AO 03/14 y AO 03/03 de ND 01 y AO 03/15 y AO03/03 se destacan por su alto cont<strong>en</strong>ido de aceite.Figura 3. Grupo 3. D<strong>en</strong>drograma(*) de clasificación de líneas AO(cont<strong>en</strong>ido de oleico mayor a 80%) <strong>en</strong> base a número y peso deaqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido de pepa, aceite y oleico, altura y floración,derivadas de cruzas <strong>en</strong>tre materiales del North Dakota y locales (*)Williams, W.T. 1976GONZÁLEZ, J. 1 ; MANCUSO, N. 1 ; LUDUEÑA, P. 1


104 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1El cuarto subgrupo lo integran AO 03/04 y AO 01/01 desimilar ciclo a floración y cont<strong>en</strong>ido de ácido oleico, y AO01/02, AO 01/03 y AO 01/04. Todas las líneas de estesubgrupo provi<strong>en</strong><strong>en</strong> de ND 01; AO 01/01 y AO 01/04 ti<strong>en</strong><strong>en</strong>bu<strong>en</strong> comportami<strong>en</strong>to fr<strong>en</strong>te a Sclerotinia.En el Grupo 1 (tabla 3) se <strong>en</strong>contró correlación positiva<strong>en</strong>tre número de aqu<strong>en</strong>ios-ciclo a floración y porc<strong>en</strong>taje deaceite–porc<strong>en</strong>taje de pepa y se correlacionaron <strong>en</strong> formanegativa: ciclo a floración-porc<strong>en</strong>taje de pepa, número deaqu<strong>en</strong>ios-peso de 100 aqu<strong>en</strong>ios, peso de 100 aqu<strong>en</strong>iosporc<strong>en</strong>tajede aceite y peso de 100 aqu<strong>en</strong>ios-porc<strong>en</strong>taje depepa. La correlación negativa <strong>en</strong>tre peso de aqu<strong>en</strong>ios yporc<strong>en</strong>taje de aceite coincidió con lo reportado por Fick etal. (1974) y discrepó con los resultados de Chikkadevaiahet al. (2002) y de Joksimovic et al. (2004).En el Grupo 2 (tabla 4) se <strong>en</strong>contró correlación positiva<strong>en</strong>tre número de aqu<strong>en</strong>ios-ciclo a floración, númerode aqu<strong>en</strong>ios-porc<strong>en</strong>taje de aceite y porc<strong>en</strong>taje de aceite–porc<strong>en</strong>tajede pepa. Álvarez et al. (1991) obtuvieroncorrelación negativa <strong>en</strong>tre número de aqu<strong>en</strong>ios-porc<strong>en</strong>tajede aceite. La correlación <strong>en</strong>tre peso de 100 aqu<strong>en</strong>ios-cicloa floración fue negativa.En el Grupo AO (tabla 5) se <strong>en</strong>contró correlación positiva<strong>en</strong>tre número de aqu<strong>en</strong>ios-ciclo a floración y porc<strong>en</strong>tajede oleico-ciclo a floración y se correlacionaron <strong>en</strong>forma negativa: ciclo a floración-altura y número deaqu<strong>en</strong>ios-altura.En los 3 grupos se <strong>en</strong>contró asociación positiva <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>úmero de aqu<strong>en</strong>ios-ciclo a floración y <strong>en</strong> los Grupos 1 y2 hubo correlación positiva también <strong>en</strong>tre porc<strong>en</strong>taje deaceite–porc<strong>en</strong>taje de pepa. Este último resultado fuecoincid<strong>en</strong>te con lo informado por Arango et al. (1995).Los ciclos a floración más largos favorecerían la difer<strong>en</strong>ciaciónde un mayor número de flores y, por lo tanto,aum<strong>en</strong>taría el número de aqu<strong>en</strong>ios.En los materiales de obt<strong>en</strong>ción más reci<strong>en</strong>te (Grupos 2y 3) no se dio la asociación negativa <strong>en</strong>tre peso y númerode aqu<strong>en</strong>ios observada <strong>en</strong> el Grupo 1.Altura N . ºAqu<strong>en</strong>ios Peso 100 Aceite(%) Pepa(%)Floración -010 NS 0.43 (*) -0.32 NS 0.05 NS - 0.33(*)Altura - 0.20 NS -0.21 NS -0.11 NS -0.07 NSNº Aqu<strong>en</strong>ios - - -0.43 (*) 0.15 NS -0.17 NSPeso 100 - - - -0.29 (*) -0.29(*)Aceite(%) - - - - 0.60 (*)(*) significativo estadísticam<strong>en</strong>te. NS no significativo estadísticam<strong>en</strong>teTabla 3. Correlaciones <strong>en</strong>tre floración, altura, número y peso de aqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido de aceite y pepa <strong>en</strong> líneas del Grupo 1.Altura Nº . Aqu<strong>en</strong>ios Peso 100 Aceite (%) Pepa (%)Floración 0.12 NS 0.37 (*) -0.47 (*) -0.31 NS -0.19 NSAltura - 0.20 NS 0.30 NS -0.15 NS -0.10 NSNºAqu<strong>en</strong>ios - - -0.11 NS 0.39 (*) 0.15 NSPeso 100 - - - -0.20 NS -0.07 NSAceite (%) - - - - 0.61 (*)Tabla 4. Correlaciones <strong>en</strong>tre floración, altura, número y peso de aqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido de aceite y pepa <strong>en</strong> líneas del Grupo 2.Altura Nº . Aqu<strong>en</strong>ios Peso 100 Aceite (%) Pepa (%) Oléico (%)Floración -0.64 (*) 0.67 (*) -0.02 NS 0.18 NS -0.30NS 0.58 (*)Altura - -0.50 (*) 0.14 NS -0.19 NS 0.37 NS -0.45 NSNºAqu<strong>en</strong>ios - - 0.16 NS 0.20 NS 0.12 NS 0.29 NSPeso 100 - - - 0.15 NS 0.16 NS 0.39 NSAceite (%) - - - - 0.26 NS 0.11 NSPepa (%) - - - - - 0.18 NSTabla 5. Correlaciones <strong>en</strong>tre floración, altura, número y peso de aqu<strong>en</strong>ios, cont<strong>en</strong>ido de aceite, pepa y oleico <strong>en</strong> líneas del Grupo 3 (AO).Líneas de girasol de la EEA Pergamino


Abril 2011, Arg<strong>en</strong>tina 105La correlación positiva <strong>en</strong>tre número de aqu<strong>en</strong>ios yciclo a floración podría explicarse por el orig<strong>en</strong> de losmateriales y por el proceso de selección al que fueronsometidos. El mejorami<strong>en</strong>to del cultivo tuvo originalm<strong>en</strong>teel objetivo de lograr materiales de alto r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to <strong>en</strong>semilla que superaran el de las primeras introducciones,precoces y de baja producción. Para tal fin, se buscabang<strong>en</strong>otipos de bu<strong>en</strong>a producción de semilla (alto númerode aqu<strong>en</strong>ios/capítulo), carácter asociado a ciclos largos afloración. En la actualidad, el mejorami<strong>en</strong>to busca revertirla t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia mediante el logro de cultivares de ciclointermedio-corto adaptados al sistema de cultivo, tomandocomo objetivo no sólo el r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to de semilla sinoel r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to de materia grasa/ha (producto del r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tode semilla por el cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite).La correlación negativa <strong>en</strong>tre peso y número de aqu<strong>en</strong>iosobservada <strong>en</strong> el Grupo 1, logró anularse por el mejorami<strong>en</strong>to<strong>en</strong> los materiales más nuevos (Grupos 2 y 3). De esta forma,podrían obt<strong>en</strong>erse altos r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>tos sin que la mejora deuno de los compon<strong>en</strong>tes incidiera negativam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> el otro.El mejorami<strong>en</strong>to del cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de aceite selogró por un aum<strong>en</strong>to del cont<strong>en</strong>ido de pepa <strong>en</strong> la semilla,tal como se observa <strong>en</strong> la correlación positiva obt<strong>en</strong>ida<strong>en</strong>tre estos dos caracteres (Grupos 1 y 2). Por lo tantoel mejorami<strong>en</strong>to se conc<strong>en</strong>tró <strong>en</strong> el logro del aum<strong>en</strong>todel r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to <strong>en</strong> materia grasa.Deberían continuarse analizando las asociaciones<strong>en</strong>tre caracteres <strong>en</strong> los difer<strong>en</strong>tes materiales resultantesdel proceso de mejorami<strong>en</strong>to para ori<strong>en</strong>tar la int<strong>en</strong>sidadde selección y mejorar la efici<strong>en</strong>cia de utilización de losrecursos ambi<strong>en</strong>tales y la competitividad del girasol <strong>en</strong>los sistemas de producción.CONCLUSIONESA través de los d<strong>en</strong>drogramas se id<strong>en</strong>tificaron <strong>en</strong> cadagrupo 4 a 6 sub-grupos, caracterizándose por los objetivosdel mejorami<strong>en</strong>to y difer<strong>en</strong>ciándose líneas indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tesderivadas por selección indirecta.La presión de la selección ori<strong>en</strong>tada se manifestó claram<strong>en</strong>teal comparar los grupos. En el Grupo 1 la selecciónse efectuó principalm<strong>en</strong>te por r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to de semillay <strong>en</strong> los Grupos 2 y 3 se dirigió a la mejora del cont<strong>en</strong>idoporc<strong>en</strong>tual de aceite y cont<strong>en</strong>ido porc<strong>en</strong>tual de oleicorespectivam<strong>en</strong>te. Las líneas del Grupo 2 y Grupo 3(Alto Oleico) superaron <strong>en</strong> cont<strong>en</strong>ido de aceite a las delGrupo 1; mi<strong>en</strong>tras que éstas se difer<strong>en</strong>ciaron por altura ypeso de aqu<strong>en</strong>ios.Dada la amplitud de líneas de difer<strong>en</strong>tes oríg<strong>en</strong>es quepres<strong>en</strong>taron correlaciones positivas con caracteres asociadosa la producción y calidad, el germoplasma evaluadopodría incorporarse a difer<strong>en</strong>tes programas según losobjetivos del mejorami<strong>en</strong>to g<strong>en</strong>ético.AGRADECIMIENTOSAl Grupo de trabajo Girasol de la EEA Pergamino del<strong>INTA</strong> por su colaboración <strong>en</strong> este trabajo.BIBLIOGRAFÍAARANGO, M., GONZÁLEZ, J., OLIVA, C., MANCUSO,N. y RE, S. 1995. Caracteres de semilla de girasol(Helianthus annuus L.) del Banco de Germoplasma dePergamino. Primer Congreso Nacional de Soja ySegunda Reunión Nacional de Oleaginosos. Tomo I.Cap. V: 1/7. Octubre 1995.ALVAREZ, D.; LUDUEÑA, P.; FRUTOS, E.; 1991.Correlaciones y causalidad <strong>en</strong>tre caracteres de girasol.Primera reunión nacional de Oleaginosos. Rosario,Arg<strong>en</strong>tina: 384-388.BALZARINI, M.; DI RIENZO, J. 2004. Info-G<strong>en</strong>:Software para análisis estadístico de datos g<strong>en</strong>éticos.Universidad Nacional de Córdoba. Córdoba. Arg<strong>en</strong>tina.BERTERO DE ROMANO, A.; VÁZQUEZ, A.N. 2003,Origin of the Arg<strong>en</strong>tine sunflower varieties. Helia,26:127-136.CHIKKADEVAHIAH; SUJATHAHA, H. L.; NANDINI2002. Correlation and path analysis in sunflower Helia 25N.º 37 : 109-118.FERNÁNDEZ MARTÍNEZ, J.; DOMÍNGUEZGIMÉNEZ, J. 1985. Evaluación de la variabilidad <strong>en</strong>caracteres de la semilla de una colección mundial degirasol. 11.º Confer<strong>en</strong>cia Internacional de Girasol, Mardel Plata, 1985. Actas. Bu<strong>en</strong>os Aires, AsociaciónArg<strong>en</strong>tina de Girasol. pp. 535-540.FICK, G.N.; ZIMMER, D.E.; ZIMMER, D.C. 1974.Correlation of seed oil cont<strong>en</strong>t in sunflower with other plantsand seed characteristics. Crop Sci<strong>en</strong>ce 14: 755-756.GABRIEL K.R. 1971. The biplot graphic display ofmatrices with application to principal compon<strong>en</strong>t analysis.Biometrika 58: 453-467.GONZÁLEZ, J., MANCUSO, N. 2004 Variabilidad <strong>en</strong>caracteres de planta y aqu<strong>en</strong>io de líneas de girasol dedifer<strong>en</strong>tes oríg<strong>en</strong>es. 25-29. <strong>Revista</strong> de TecnologíaAgropecuaria. Vol. IX, N.º 27.GONZÁLEZ, J.; MANCUSO, N; AMÉNDOLA, C. YLUDUEÑA, P. 2004. Production Characters and IndustrialQuality of Sunflower from Bu<strong>en</strong>os Aires Region(Arg<strong>en</strong>tina). 16.º International Sunflower Confer<strong>en</strong>ce.North Dakota, USA. Tomo I: 235-242, August 29-September 2, 2004.GONZÁLEZ, J. 1 ; MANCUSO, N. 1 ; LUDUEÑA, P. 1


106 ARTÍCULOS<strong>RIA</strong> / Vol. 37 N.À1JOKSIMOVIC, J; ATLAGIC, J; JOVANOVIC, D;MARINKOVIC, 2004. Path Coeffici<strong>en</strong>t analysis of somehead and seed characteristics in sunflower. 16.ºInternational Sunflower Confer<strong>en</strong>ce. North Dakota, USA.Tomo II: 525-530, August 29- September 2, 2004.WILLIAMS, W.T., 1976. Pattern Analysis in AgriculturalSci<strong>en</strong>ce. Elsevier Sci<strong>en</strong>tific Publishing Co., Amsterdam.ANEXOLíneas de EEA Pergamino <strong>INTA</strong>. Ref.: Línea | Orig<strong>en</strong>.AXB 00/01 | AxB 3479-2-2-1 (71/538 (de orig<strong>en</strong> similar a MP 555)por LC 20620b 632 | b-632 P4 S6 (Record, sintética Os2 y sintética Horizonte)b 821 | V 196 x 89 F8 de EEA Pergaminob 833 | V 196 x 89 F8BXC 00/02 | BXC 3495-2-1-1 (LC 206020 por MP 555)BXC 00/03 | BXC 3496-1-3-3 (LC 206020 por MP 555)BXC 97/01 | LC 206020 por MP 555 rusas X silvestres con resist<strong>en</strong>ciaa royaDXT 00/01 | DXT 3330-3-2-4 (MP 557/ Negro Bellocq)DXT 00/02 | DXT 3331-3-1-2 (MP 557/ Negro Bellocq)GP 762 | Viejas líneas del programa de la EEA Pergamino del <strong>INTA</strong>KLM 295 | compuesto Klein, Locales, Manfredi EEA PergaminoLXN 621 | Líneas locales estriadas / líneas de aqu<strong>en</strong>io negro de orig<strong>en</strong>rusoMP 83/2 | Mezcla Precoz de EEA Pergamino orig<strong>en</strong> ruso y silvestre.P1 00/01 | 60-10-5-1 (Compuesto P1), (cruzas ruso x silvestre).P1 00/02 | 2.° ciclo de selección recurr<strong>en</strong>te del Compuesto P1EEAPergaminoP1 01/01 | Compuesto P1 ciclo 2 de Pergamino (115) s2-11-1-1-3P1 02/01 | 60 (S2)-10-4-1 (Compuesto P1), ( cruzas ruso x silvestre)P2 556 | Compuesto P2 de EEA Pergamino (estriado), ( cruza de 6Bx I<strong>en</strong>issei)P4 01/01 | P4 C3-22-2-2-7 rumano (Record, Sintética Os2,Sintéticahorizonte)P4 01/02 | P4 C3-25-2-2-4 rumano (Record, Sintética Os2,Sintéticahorizonte)P4 02/01 | P4 C3-25-2-2-4 rumano (Record, Sintética Os2,Sintéticahorizonte)P4 04/01 | P-4-C-3-25-2-2-3 rumano (Record, SintéticaOs2,Sintética horizonte)RK 426-11 | PGRK (variedades rusas por la variedad arg<strong>en</strong>tinaKlein)RK 456 | PGRK (variedades rusas por la variedad arg<strong>en</strong>tina Klein)RK 489 | PGRK (variedades rusas por la variedad arg<strong>en</strong>tina Klein)S 74 | Sintética Os2 de orig<strong>en</strong> RumanoV 112 | MP-543 x (71-538 x H argophyllus).VN 02/01 | VN 1646-3-2-2-4 compuesto ruso VNNIMK 1646VN 02/02 | VN 1646-30-3-1-1 compuesto ruso VNNIMK 1646GP 01/01| DxT 3330-3-2-4/HA 89-1-3-3 (MP 557, Negro Bellocq; HA 89)GP 01/02 | E-1-1-2/DxT-3330-1-1-2-3-3-2 (E-1-1-2 -orig. LaEstanzuela-)GP 01/07 | R-K-416/ HA 89-3-2-4GP 02/01 | MP 83/2/HA 89-6-3-3GP 02/03 | AXB 3479-2-2-3/BXC 3495-2-1-1-2-3-3GP 02/04 | KLM 280/HA 300-1-2-3GP 02/05 | DxT 3330-3-2-4/HA 89-1-4-1GP 02/06 | HA-89/DxT 3330-3-2-4-1-1-1-3GP 02/08 | HA 822-RK 416-HA 300-GP 762-KLM 280-28-1GP 03/01 | GP-01/02 / GP-02/04-1 -1-2-1-4GP 03/02 | MP-83/2/HA-89-6-3-2GP 03/03 | AxB-3479-2-2-3/BxC-3495-2-1-1-1-3-3GP 03/07 | HA-89 /HA-300-4-3-3-1GP 06/01 | AO-01/02 / BxC-00/01-1-2-2-4GP 06/02 | AO-01/02 / BxC-00/01-1-2-4-1GP 06/03 | AO-01/02 / BxC-97/01/AxB-00/01-1-1-3-2-4-2-1-3GP 06/04 | LUCH-1-1-1-1-1/AO-01/03 -4-1-1GP 07/07 | BZ-3669-2-5-3/KLM-280/HA-300-1-2-3-2-2-2-2-3GP 07/08 | BZ-3669-2-5-3/KLM-280/HA-300-1-2-3-2-2-2-3-4GP 07/10 | SB-04/01/BZ-3669-2-5-3-2-2-1-1-3-1GP 07/11 | AO-03/15/BZ-3669-2-5-3-2-2-1-2-5-2GP 07/12 | VN-02/01/AO-02/01-2-3-1-4-2GP 07/13 | VN-02/01/AO-02/01-2-3-2-4-1GP 07/14 | SB-04/01/BZ-3669-2-5-3-2-2-1-1-2-3 ( SB (orig<strong>en</strong> francés)GP 07/15 | SB-04/01/BZ-3669-2-5-3-2-2-1-1-2-4 (BZ R.Rodriguez(Balcarce)GP 08/06 | 2341/27 North Dakota (Miller)GP 08/07 | 2341/28 North Dakota (Miller)AO 01/01 | ND-01-1394-1-1-1 compuesto ND 01AO 01/02 | ND 01-1394-1-1-2 compuesto ND 01AO 01/03 | ND 01-1396-3-1-1-2 compuesto ND 01AO 01/04 | ND-01-1397-3-1-3-4 compuesto ND 01AO 02/01 | 2872-1-6 (HA 343 x Hib.F1 N.° 2 de ND)AO 02/02 | 2881-2-4-1 (HA 343 x Hib.F1 N.° 2)AO 02/03 | 2872-2-4-3 ( HA 343 x Hib.F1 N.° 2)AO 03/03 | ND-01-1396-2-1-1-4 compuesto ND 01AO 03/04 | ND-01-1396-3-1-1-4 compuesto ND 01AO 03/12 | ND-01-1397-3-1-3-2 compuesto ND 01AO 03/14 | ND-01-1397-3-4-5-6 compuesto ND 01AO 03/15 | ND-01-1397-3-3-2 compuesto ND 01AO 03/17 | 2841-3-5-3 (HA 343 x Hib.F1 N.° 1)AO 03/19 | 2813- 1-4-4 (HA 343 x Hib.F1 N.° 2)AO 03/20 | 2875- 1-2-3 (HA 343 x Hib.F1 N.° 2)IMI 03/01 | 2329-5-34-4-1-1 silvestre (Miller, N.Dakota; BcrossRHA 376)IMI 03/02 | 2329-5-36-5-2-1silvestre (Miller, N.Dakota; BcrossRHA 376)IMI 04/04 | 2309-1-5-4-1-1 N .Dakota; B.cross HA 89IMI 05/01 | 2309-1-5-4-1-3 N.Dakota; B.cross HA 89Líneas de girasol de la EEA Pergamino

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!