Aquí hay dragones
Hinc-sunt-dracones_Aqu%C3%AD-hay-dragones
Hinc-sunt-dracones_Aqu%C3%AD-hay-dragones
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
H O N D U R A S<br />
hinc sunt dracones g <strong>Aquí</strong> <strong>hay</strong> <strong>dragones</strong><br />
Breve antología de minificción centroamericana contemporánea<br />
El santo<br />
—¿A dónde va María? —Pregunta el niño.<br />
—¡Quién sabe querido! —Responde su abuela.<br />
Y María ya no podía ir más a ningún lugar. Estática. Lenta<br />
si acaso algo podía moverla. Ella no iba a ningún lugar. El niño<br />
se acercó a la mujer, y vio su rostro entumecido. Su cuerpo ya<br />
no era más su cuerpo cubierto por la madera.<br />
—¡María está rara, abuela! —Dice el niño.<br />
La anciana no puede más, y rompe en llanto. La sala entera<br />
se le queda viendo. Ella se lleva las manos al rostro como<br />
queriendo tapar la vergüenza. Hay un santo que sonriendo<br />
nos ve con odio desde la mesa colocada frente a María.<br />
Martín Cálix