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Aerosoles bucales de Cannalivio. Foto gentileza Cannalivio.<br />
Inés y Luna entre el cannabis, la mata que no mata.<br />
hijo de Luis Carlos Galán, candidato<br />
presidencial asesinado por orden de<br />
Pablo Escobar en agosto de 1989. Hoy,<br />
Galán hijo, defiende la legalización.<br />
Supo de la doctora Pineda y de sus<br />
1.000 pacientes a quienes continúa<br />
formulándoles cannabis según sus<br />
necesidades. El senador la invitó al<br />
congreso para explicar por qué, en<br />
algunos casos, era no sólo necesario<br />
—sino urgente— consumir marihuana<br />
para sobrellevar varias enfermedades<br />
como cáncer, artritis, esclerosis múltiple,<br />
epilepsia y VIH.<br />
—¡Pero imagínese! Yo formulo. ¿Pero<br />
dónde les digo que la compren? Acá<br />
transitamos una línea muy delgada con<br />
lo ilegal. Eso me llevó a buscar a los<br />
productores, me hablaron de Cannalivio<br />
y me fui a Medellín a buscarlos.<br />
Susana, amiga de Inés Cano, supo que<br />
Pineda visitaba Medellín para tratar<br />
pacientes con marihuana. La buscó,<br />
le contó que la hija de su amiga tenía<br />
epilepsia refractaria y que temían por<br />
su vida. Pineda revisó a la niña y se<br />
fue donde Jorge Montoya y Mauricio<br />
García, fundadores de Cannalivio.<br />
Tenía el caso clínico en su carpeta y en<br />
conjunto desarrollaron una fórmula de<br />
aceite cannábico exclusiva para Luna.<br />
—¡¿Marihuana?! Pero cómo le voy a<br />
dar marihuana a Luna, doctora. No<br />
soy capaz.<br />
Fue lo que dijo Inés cuando supo cuál<br />
era el tratamiento recomendado,<br />
pero luego de una extensa explicación,<br />
accedió. La primera noche, ya en<br />
cama y a punto de dormir, Luna abrió<br />
su boca, levantó la lengua y recibió<br />
sólo una gota. Veinte minutos después,<br />
Inés, asustada, llamó a Pineda.<br />
— Doctora, Luna se me va a morir.<br />
—Cálmate, Inés. ¿Qué tiene Luna?<br />
—Está pálida, tiene mucho frío, está<br />
helada, no deja de temblar.<br />
—Le bajó la presión. Acuéstate junto a<br />
ella y abrígala.<br />
El diálogo y la preocupación se repitieron<br />
hasta el noveno día cuando las<br />
cosas cambiaron.<br />
—Doctora, Luna no convulsionó hoy.<br />
No sé qué es esto. Estoy asustada.<br />
Luna no convulsionó por primera vez<br />
en su vida. Usted es un ángel. Esas<br />
gotas son un milagro.<br />
Pero no era un milagro, era ciencia.<br />
Los cannabinoides ayudan como ningún<br />
otro medicamento ante las epilepsias<br />
refractarias.<br />
Cannalivio surte pacientes medicinales,<br />
como Luna, con ungüento, linimento,<br />
barra hidratante o aceites.<br />
No venden flores para fumar, pero la<br />
policía todavía no entiende eso, dice<br />
Jorge Montoya.<br />
—Llevamos nueve años con Cannalivio<br />
y cada vez que sale nuestro nombre, o<br />
se nos menciona en cualquier medio,<br />
la policía o la fiscalía nos vienen a visitar.<br />
Piensan quién sabe en qué negocio<br />
de tráfico estamos metidos. Por eso no<br />
nos gusta dar entrevistas, nos molestan<br />
menos si pasamos desapercibidos.<br />
—¿Y cuando eso pasa, qué los ha salvado?<br />
—Los medios. Las entrevistas.<br />
Paola Pineda y Cannalivio estandarizaron<br />
10 fórmulas para pacientes<br />
epilépticos de 40 genéticas distintas<br />
de marihuana. Hace una década Jorge<br />
Montoya y Mauricio García que viene<br />
estandarizando no sólo fórmulas de<br />
aceites sino plantas. De una de esas<br />
plantas salió la medicina de Luna.<br />
“Inés, te vi en la marcha cannábica con<br />
“PAOLA PINEDA<br />
Y CANNALIVIO<br />
ESTANDARIZARON<br />
10 FÓRMULAS<br />
PARA PACIENTES<br />
EPILÉPTICOS DE<br />
40 GENÉTICAS<br />
DISTINTAS DE<br />
MARIHUANA”<br />
Luna. Hay unos locos que me gustaría<br />
presentarte”, le dijo David Ponce, uno<br />
de los organizadores de la marcha. A<br />
los pocos días, madre e hija tomaron<br />
un carro y desembarcaron en los predios<br />
de Cannalivio, la pequeña empresa<br />
de Jorge y Mauricio que, alquimia<br />
mediante, hace de la marihuana una<br />
medicina. Cuando Luna vio la marihuana<br />
corrió hacia las plantas con el<br />
mismo frenesí de un caballo desbocado.<br />
Inés, con ojos vidriosos, esperó a<br />
que David hiciera las presentaciones.<br />
La madre contó el caso de su hija y<br />
dijo que se salvó gracias a una doctora<br />
y sus gotas. Cuando mencionó a Paola<br />
Pineda, Jorge le preguntó por el nombre<br />
de la niña. Al escucharlo dijo:<br />
—Inés, nosotros somos los que fabricamos<br />
la medicina de Luna.<br />
Las lágrimas por fin se soltaron.<br />
—Esto no es un negocio, es una sinergia.<br />
Nosotros nos debemos a los<br />
pacientes, los pacientes saben qué<br />
necesitan gracias a la doctora, la doctora<br />
formula tranquila porque sabe<br />
que acá cultivamos porque sabemos<br />
que alguien va a rescatar su vida.<br />
Víctor Villa, químico del Grupo<br />
Interdisciplinario de Estudios<br />
Moleculares (Giem) de la Universidad<br />
de Antioquia, va a cumplir dos años<br />
acompañando la tecnificación del cultivo<br />
de Cannalivio, un cultivo libre de<br />
toxinas. El grupo decidió hacer una<br />
sociedad con los cultivadores para<br />
demostrar la solvencia de 100 mil<br />
dólares anuales que pide el gobierno.<br />
Son algo así como los fiadores de<br />
Cannalivio y además una contraparte<br />
científica y académica.<br />
El cuerpo de Inés reúne trece mariposas,<br />
con las últimas dos Luna jamás<br />
volvió a convulsionar. En mayo de<br />
este año las invitaron para abrir la<br />
marcha cannábica. Madre e hija caminaron<br />
al frente sosteniendo una mata<br />
de marihuana. Esta vez nadie les<br />
gritó. El caso se hizo famoso y hoy<br />
las chicas abanderan la causa. Los<br />
censuradores no gritan, ahora callan.<br />
Saben que junto a Luna hay 29 chicos<br />
que ya no convulsionan y, aunque<br />
mueren de ganas, ninguno es capaz<br />
de decirles que no cultiven la mata<br />
que los salva.<br />
Este artículo se reproduce<br />
gentileza del blog Fármakon.<br />
Un blog con periodistas de toda<br />
América reporteando sobre<br />
drogas:<br />
farmakon.ladiaria.com.uy