integran
macetascambio
macetascambio
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
47<br />
células del tumor. En todo caso, por el<br />
tipo de ensayo desarrollado y el pequeño<br />
número de pacientes que se trataron,<br />
no se pudieron extraer conclusiones<br />
relacionadas con la supervivencia de los<br />
pacientes, aunque sí sentar las bases<br />
para el desarrollo de otros estudios<br />
posteriores. Por ejemplo, recientemente<br />
ha finalizado un ensayo clínico donde se<br />
ha analizado la acción combinada del<br />
fármaco Sativex (un fármaco que contiene<br />
THC y CBD en las mismas proporciones)<br />
y la temozolomida en pacientes<br />
con Glioblastoma multiforme recidivado,<br />
del que se espera que pronto se hagan<br />
públicos los resultados. Igualmente hay<br />
otros estudios que acaban de finalizar o<br />
que está previsto que empiecen en los<br />
próximos meses donde se analizará el<br />
efecto de distintos cannabinoides (de<br />
manera individual o en combinación con<br />
otros fármacos) en tumores cerebrales<br />
o tumores sólidos.<br />
SITUACIÓN ACTUAL<br />
Teniendo en cuenta todo lo anterior, lo<br />
cierto es que en ausencia de resultados<br />
de ensayos clínicos (que aún tardarán<br />
años en proporcionar datos concluyentes)<br />
en este momento no existen evidencias<br />
científicas suficientes como para<br />
poder afirmar de manera concluyente<br />
que el tratamiento con cannabinoides<br />
puede contribuir a mejorar las terapias<br />
actuales que se administran a pacientes<br />
con tumores cerebrales u otros tipos de<br />
tumores. Ello hace que no se encuentre<br />
autorizada (ni por tanto subvencionada)<br />
la administración de fármacos cannabinoides<br />
o cannabis medicinal como parte<br />
del tratamiento estándar para el tratamiento<br />
de esas enfermedades.<br />
La recomendación para aquellos pacientes<br />
que estén interesados en utilizar los<br />
cannabinoides como parte de un tratamiento<br />
antitumoral es que consulten<br />
con un médico que tenga experiencia en<br />
la utilización terapéutica de los cannabinoides<br />
(una forma de contactar con ellos<br />
podría ser a través de asociaciones de<br />
pacientes interesadas en la utilización<br />
terapéutica de los derivados del cannabis)<br />
y que, por tanto, pueda recomendar<br />
la utilización de fármacos cannabinoides<br />
(que en algunas ocasiones podrían<br />
ser prescritos por ejemplo, como terapia<br />
compasiva). Teóricamente también<br />
cabría la opción de utilizar extractos<br />
o aceites de cannabis de origen controlado<br />
que contengan concentraciones<br />
conocidas de THC y CBD y que permitan<br />
por tanto saber la cantidad de principio<br />
activo que está recibiendo el paciente.<br />
En todo caso en España y otros países<br />
de Europa la utilización de este tipo de<br />
extractos que contienen THC no es legal.<br />
La administración de aceites o extractos<br />
de cannabis de origen no controlado [en<br />
los que se desconoce la cantidad de THC<br />
y CBD que contienen, así como la posible<br />
presencia de agentes contaminantes<br />
(por ejemplo, pesticidas, herbicidas,<br />
metales pesados o compuestos orgánicos<br />
derivados del proceso de extracción)]<br />
puede significar un riesgo para<br />
el paciente. Igualmente, la sustitución<br />
de una terapia convencional por otra<br />
únicamente basada en la utilización de<br />
cannabinoides no está justificada desde<br />
el punto de vista de la investigación<br />
básica y preclínica, y además privaría al<br />
paciente de la posibilidad de beneficiarse<br />
de terapias que ya han demostrado<br />
al menos un cierto nivel de eficacia.<br />
Por ello, en aquellos casos en los que<br />
se tome la decisión de probar un tratamiento<br />
con cannabinoides en pacientes<br />
con cáncer, la situación de partida más<br />
lógica sería mantener la terapia que<br />
cada paciente esté recibiendo para el<br />
tratamiento de su enfermedad y añadir<br />
–siempre previa consulta con el oncólogo<br />
o al menos con un médico con<br />
conocimientos en la materia– de manera<br />
progresiva la cantidad apropiada de<br />
cannabinoides.<br />
RESUMEN / CONCLUSIONES<br />
Hasta que no haya datos derivados de<br />
ensayos clínicos no se podrá determinar<br />
si esa actividad antitumoral puede ser<br />
útil para el tratamiento del cáncer en<br />
humanos. En todo caso, la baja toxicidad<br />
de estos compuestos en comparación<br />
con otros fármacos antitumorales, hay<br />
un número creciente de pacientes que,<br />
dada la situación de urgencia en la que<br />
se encuentran, se plantean la posibilidad<br />
de incluirlos como parte de sus tratamientos<br />
sin esperar a los resultados<br />
de esos ensayos clínicos. En esos casos,<br />
y a la espera de que se regule de una<br />
manera clara la utilización del cannabis<br />
medicinal, las principales recomendaciones<br />
para evitar situaciones de riesgo<br />
para el paciente son: consultar siempre<br />
con un médico, si es posible con experiencia<br />
en la utilización terapéutica de<br />
cannabinoides y utilizar en los tratamientos<br />
o bien fármacos cannabinoides<br />
o bien extractos de origen controlado<br />
que contengan cantidades conocidas de<br />
THC y CBD .<br />
GUILLERMO VELASCO*<br />
Es profesor titular del<br />
Departamento de Bioquímica<br />
y Biología Molecular I de la<br />
Universidad Complutense de<br />
Madrid y miembro de la Junta<br />
Directiva del Observatorio<br />
Español de Cannabis Medicinal.