Revista CENTRAL 61

EL PODER DE SER MUJER
¿Cómo es tu rol como mujer en la Universidad
y en el Colegio de Abogados?
¿Cómo lo ves en la ciudad en general?
En los últimos años hubo avances.
Hemos trabajado para tenerlos. Si me
preguntas si por ser mujer me costó
llegar a donde llegué, te respondo que
no. Sé que hay mucho por hacer, pero
nunca tuve impedimentos por ser mujer.
Nunca, en mi familia o entorno, me
ocurrió nada que limitara mi crecimiento
profesional. Ahora bien, no desconozco
como realidad social que las mujeres
sí tienen límites. Hay ciertos ámbitos
donde tienen que seguir luchando para
insertare en determinados lugares. La
desigualdad entre el hombre y la mujer
económica frente a los mismos cargos
existe. En mi profesión, al tener los honorarios
regulados, todos cobramos lo
mismo. En la justicia está lleno de
mujeres juezas, en esta facultad de
derecho la Decana y Vicedecana son
mujeres y, sacando un cargo del gabinete,
el resto somos todas mujeres. En el
Colegio de Abogados soy vicepresidenta
y, del mismo modo, hay gran cantidad
de cargos ocupados por mujeres. Tenemos
que seguir trabajando para lograr la
igualdad de derechos y la paridad en
todos los ámbitos de nuestra sociedad.
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