Edicion 5 de febrero 2020
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Salud para todos
16 Miércoles 5 de febrero de 2020
Diario Co Latino
Un niño sano (Puericultura)
Doce recomendaciones y mandatos de la puericultura
Dr. Fredy Rosales Meyer
Médico Pediatra, Neonatólogo.
10. DÉCIMO MANDATO O RECOMENDACIÓN:
EVITARLES A LOS NIÑOS LA CONTAMINACIÓN
AMBIENTAL
A todos los niños debe de evitárseles el humo, el polvo o
el viento, los aerosoles y los insecticidas caseros.
10.1 ) EL HUMO
Debe evitárseles el humo de todo tipo por ser altamente
irritante para las vías respiratorias y los ojos.
1) Humo de cigarro.
2) Humo de leña.
3) Humo de cocina.
4) Humo de repelentes de insectos.
5) Humo de candelas/veladoras/ inciensos/candiles/
rajas de ocote.
6) Humo de hojas del jardín.
7) Humo de estiércol de animales.
8) Humo de vehículos.
Etc.
1) Humo de cigarro:
Desde el tiempo en que se diseñaron estas
recomendaciones se planteó que el humo de cigarro
era altamente dañino para los niños. A los niños
los convertimos en fumadores de segunda mano o
fumadores pasivos. En una familia siempre hay quien
fuma. Los abuelos son los que más frecuentemente lo
hacen junto con el padre del niño. Cuesta que entiendan
que dejar de fumar beneficiará a todos en la familia,
principalmente al bebé por ser el humo de cigarro más
dañino para él que huele el humo que para el fumador
mismo. Si no quieren evitar o dejar de fumar en presencia
de los demás es mejor pedirles que lo hagan lejos de los
niños. Hay que tener presente que en donde se siente
el olor del tabaco allí hay humo del tabaco también. Si
hay problemas oculares, auditivos o respiratorios en los
niños de una casa donde también hay un fumador, no se
puede descartar que el fumador sí afecta a los demás.
Mucho se ha dicho y escrito sobre los efectos dañinos
del tabaco que escribir más será algo inútil si no se evita.
Los niños tienen sus derechos y el más importante es que
no se le debe hacer daño deliberadamente exponiéndolos
al humo de cigarro y otros tóxicos ambientales.
2) Humo de leña y de cocinas:
Todos sabemos en este tiempo que el humo de leña es
dañino para las personas, especialmente para los niños.
En nuestro país se usa mucho la leña para cocinar, ya
sea dentro de la casa o al aire libre. Poco a poco se ha
sustituido la leña por el gas propano, butano o keroseno.
Estos son menos contaminantes, pero siempre son
perjudiciales. La mejor manera de cocinar es con la
energía eléctrica pero su alto costo no estimula su uso.
De modo que hay que poner en una balanza los riesgos
contra los beneficios. De tener que usarse la leña, debe
hacerse con la leña bien seca y no la leña verde por la
cantidad de humo que produce esta última.
En el uso de las cocinas de leña o de gas hay que tomar
en cuenta también las grasas que se evaporan al cocinar y
que igual afectan principalmente a la persona que cocina
al inhalarlas.
3) Humo de repelentes de insectos y los aromas
repelentes:
Estos productos son muy anunciados por la radio, TV,
periódicos y se presentan como inocuos, inofensivos,
efectivos, agradables, etc. ¿Cómo puede ser inofensivo
el humo de cualquier tipo que usted pase respirando
todo el día y noche? Siempre los insectos existirán y
nos molestarán con sus picadas y enfermedades, pero
es mejor evitarlos de otra manera. Es preferible utilizar
métodos dirigidos a su reproducción. No hay repelente
efectivo en su totalidad, siempre nos picarán; así que,
o nos enfermamos de las picadas de insectos o por el
humo que respiramos y también por ambos. Los aromas
repelentes, las plaquitas que se colocan en un artefacto
que se conecta a la energía eléctrica son presentados
como alternativas inocuas a la par del humo; pero
siempre son perjudiciales. Hay niños que adolecen de
una hiperactividad bronquial que a veces son llamados
niños asmáticos o niños con bronquitis, que con un
poco de humo o aroma que respira, se les desencadenan
una serie de crisis de bronco-espasmos con cansancio,
palidez, sudoración, angustia, jadeo y agotamiento con el
riesgo de fallecer. Es mejor prevenir su uso. La mayoría
de veces los inventos del ingenio del hombre pueden ser
más perjudiciales que beneficiosos. También pueden a
largo plazo producir cáncer de pulmón.
4) El humo de candelas, veladoras, inciensos, candiles,
lámparas, quinqués y de ocote en rajas:
Todos estos productos son de uso doméstico, religiosos,
ceremoniales y hasta románticos.
En el campo, donde la pobreza no les ha llevado el
desarrollo de los servicios públicos como la electricidad,
son usados estos productos para producir iluminación
hogareña o en ocasiones durante los apagones de energía
eléctrica que son tan frecuentes en los países con poco o
nulo desarrollo.
Es importante saber, a las familias
que tienen niños sensibles de las vías
respiratorias, que tanto el humo como el
aroma de los inciensos son perjudiciales
y que en cualquier rincón de una casa en
donde se sienta el olor del incienso también
lo acompaña el humo.
5) El humo de estiércol de ganado o de
hojas de árboles:
El humo que resulta del quemar hojas de
árboles de patio o jardín, lo mismo que el
humo producido con propósitos religiosos
o ceremoniales como el ciprés, alcanfor,
pino, copal, manzanilla, eucalipto y otros
hay que considerarlos también perjudiciales
para las personas ya sea a corto o a largo
plazo por las Enfermedades Pulmonares
Obstructivas Crónicas (EPOC).
El humo de burril o estiércol de ganado
es usado, con frecuencia en el campo,
como repelente de insectos. Lo queman a
la hora del crepúsculo. Se salen todos de
la casa y se asume que también salen los
insectos. Sí el humo se embolsa dentro de
la casa resultará perjudicial para todos. Su
efectividad también es dudosa, y es un gran
contaminante de otras enfermedades del
ganado que se manifiestan en el estiércol.
6) El humo de los vehículos de diésel o
gasolina
El humo de vehículos que funcionan con
estos combustibles también es altamente
irritante de las vías respiratorias. Llama la
atención que no se le ponga mucho cuidado
en nuestro país por pobreza económica.
Por ser el aceite diésel de bajo costo y alto
rendimiento es el que más se emplea para el
consumo, principalmente en los vehículos
de transporte y trabajo. En los vehículos
de uso doméstico se comete el error de
encender el motor dentro de la casa para
que “se caliente” llenando así de mugre
la casa y a los habitantes. Si usted posee
un vehículo que usa el aceite diésel y no
lo puede dejar de usar, entonces enciéndalo
y/o caliéntelo en la calle; se evitará muchos
problemas con los niños. Incluso si sale de
paseo con la familia y mantiene los vidrios
del carro abajo el poco humo que entra en
la cabina es perjudicial para su familia.
Hay que tomarlo en cuenta, pues a veces no
vemos lo que es evidente.
Artículo
Coleccionable