REVISTA BER ISi nosotros hubiéramos estado en unasbuenas condiciones naturales, ¿el covidpodía haber estado por ahí danzando yno habernos infectado?-Exacto. La ecuacióndel desastre tiene distintas variables.Una es la degradación de los ecosistemas,que cumplen esta función. Otra esla globalización, porque infecciones hahabido toda la vida, pero se han amplificadocon la globalización… La globalizaciónno es ni buena ni mala, depende. Lainformación de tu periódico pasa en segundosde Corea a Argentina, pero lomismo que pasa la información pasa unvirus. Hay que aprender a gestionarla. Dehecho, se dice que si la pandemia hubiesecomenzado en África el virus no hubierasaltado así porque está mucho menosconectada, menos globalizada, hay menosmovimientos de personas.-¿El cambio climático va a matar a muchagente?-El cambio climático estaba ahí yreacciona de una manera complicada. Nolo podemos olvidar, no es una broma y selleva por delante a mucha gente. Haceque la naturaleza no funcione y nos hacevulnerables. Es un círculo vicioso, un problemalleva a otro. El cambio climáticoacentúa pandemias, las pandemias otrascatástrofes, al final el origen del problemaes que la naturaleza no funciona bien.Estamos contaminando, explotando…Tenemos que cambiar el modelo socioeconómico.-¿Loharemos?-Yo no soyeconomista, no tengo la solución. Soyecólogo, pero en el fondo está el modelosocial que hemos adoptado todos decomprar mucho, consumir mucho comosi no hubiera un mañana, gastando losrecursos como si fueran infinitos; deforestamos,nos comemos las especies,gastamos agua. Todo esto en algún momentosalta. -Hay quien dice: «El propioplaneta se ha regulado, se ha enfadado».-Eso tiene que ver con nuestra tradiciónjudeocristiana, pensar que alguien va acuidar de nosotros nos ha hecho muchomal. ¿Alguien nos va a resolver esto?,pues no. Tendremos que solucionarlonosotros. No estamos hablando de‘ponme aquí unos espacios verdes’,‘ponme aquí esta especie’. No podemoscaer en los errores de estas décadas, dedar la espalda a la naturaleza. Muchasconsecuencias no las vamos a ver venir,nos vendrá una bofetada de golpe. Hayinformes de hace 30 años que son actualesy no les hemos hecho caso. No nosestamos inventando nada nuevo. Sabemoslo que pasa. -Es rumbo de colisión.-Yme sabe mal, hay gente que dice: «Bueno,ya me la pegaré y ya veré». Y como esverdad que hemos salido de varias, quehemos salido bien parados, como noshemos ido librando, no nos llegamos apreocupar del todo. Todo el mundo entróen la pandemia sonriendo o flipando.Luego, claro, si te muere un familiar yano te hace tanta gracia, pero todos estamospensando: ‘Saldremos de esta’. ¿Ycuál es la puerta? ¿Dónde está? Hay queaprender algo. Nos viene otra ¿y qué? ¿Aponer a todos los científicos a desarrollarvacunas a toda velocidad? ¿Qué hemospensado hacer? ¿Vamos a rescatar laeconomía como antes? ¿Vamos a anteponerla economía a las personas otravez? Como hacen Bolsonaro, Trump ycomo en el fondo hacemos todos tácitamente.Decimos: «Primero hay que reflotarla economía y queremos que muera lamenos gente posible». No, hombre no,que no me muera nadie. Si puedo evitarque alguien se muera, lo haré. Y si puedoevitar que te salga un herpes, también.Luego ya veremos quién se hace rico,pero primero salva vidas. ¿Qué queremos?-¿Eres optimista?-De corazón losoy. Científicamente las bazas no juegana nuestro favor. Pero en el fondo hay unfactor de azar que no podemos medirlo.El comportamiento humano tiene aspectosmuy predecibles, pero otros muyimpredecibles. Yo me agarro al azar parapoder creer, para empujar e inclinar lasfuerzas para que todos hagamos algo atiempo. Tenemos la información y posibilidades.La cosa no pinta bien, igual conun poco de suerte cambiamos. -Pandemias van a venir. ¿Puede haber unaque acabe con la especie?-Yo lo veo pocoprobable. Igual que es poco probable quecambiemos mucho y rápido. Imagínateun patógeno que fuera tan infectivo comoel coronavirus actual y tan letal comoel ébola, si sale una cosa así, vamos fritos.Pero eso no es probable, aunque noes imposible. Si vamos poniendo estosmecanismos en marcha y contamos conla ayuda activa de la naturaleza, si llegaraa surgir ese ‘cruce’, pues nos va a ir muchomejor y no será tan grave. No es unoptimismo salvaje. -Esto ha sido unshock.-Sí, ni aun sabiendo que podía sucedernos lo imaginábamos. Cuando hallegado la ola no te lo crees. Tú sabes quenuméricamente podía pasar, pero a míme ha impresionado muchísimo la cantidadde países a los que ha afectado. Lade hogares, la de culturas, sociedadesque están afectadas. Para mí era un escenariocientíficamente posible, peroficción. Y esto es ciencia y ficción, ahoraestamos viviendo la ficción. A veces medigo: «¿Esto está ocurriendo?» No me lopuedo creer. Eso me ha sorprendido. Yesa emoción no la quiero reprimir porquecreo que es la posible palanca para hacernosreaccionar. Con el covid nos hemosasustado, por eso quiero enfatizar lodel medio ambiente. -Tú dices: «La naturalezaestá de guardia todos los días 24horas».-Claro, esa naturaleza de guardianos hace una función fantástica. Y cuandono funciona hace unas cosas terribles.Ahora hemos sacado lo peor de la naturalezaen lugar de lo mejor. Parecemostontos, saquemos lo mejor: que nos protege,que sabemos que es una fuente debienestar para la especie biológica, hablode la piel, de la química, del metabolismo.Que estamos a gusto cuando la naturalezaestá bien, que disfrutamos viendo unpaisaje, y no lo digo solo por emoción. Nosaquemos los diablos. -Ni más desiertos,que van a agudizar el problema.-Claro, ladegradación ambiental nos va dejandolas cosas más difíciles para hacer algo. Yla solución era esa, la vacuna era esa.Estar compinchados con la naturalezapara hacer cosas grandes.www.boadillaenred.com I CORREO boadillaenred@boadillaenred.com I 8
www.boadillaenred.com I CORREO boadillaenred@boadillaenred.com I 9REVISTA BER I TU REVISTA