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El Rincón del Ninja
Dos duros sobre ruedas, “Harley Davidson and the Marlboro Man”.
Repasando en este 2021 películas que se estrenaron hace 30 años, no me podía dejar fuera esta subjoyita titulada originalmente “Harley
Davidson and the Marlboro Man”, traducida aquí con la habitual pericia de los dobladores españoles como “Dos duros sobre ruedas”.
La historia es sencilla: dos colegas que viven al
margen de casi todo se enteran de que el local
donde suelen pasar sus mejores momentos
va a ser embargado por un miserable (como
todos) banco, y a raíz de ello idean un plan que
consiste en robar un furgón de dicho banco
para saldar la deuda del bar. Pero claro, con
lo que no contaban es que en lugar de fajos
de billetes dentro del vehículo blindado iba un
cargamento de una nueva droga de diseño
llamada sueño de cristal, una droga liquida
que se inyecta en los ojos. Con esta premisa
tenemos la típica cinta de acción de primeros
de los 90, adornada con motos, chicas, frases
divertidas, escenas inverosímiles y, como no,
mucho rock.
La película está protagonizada por un dúo
llamativo: por un lado un Mickey Rourke que
estaba agotando sus días de bonanza en
Hollywood, a poco de perder el control de su
carrera y tirarla por el retrete; por otro lado,
teníamos a un Don Johnson que hacía poco
que había terminado la última temporada de
“Miami vice” y estaba intentando engancharse
al mundo del cine. El bueno de Rourke
comenzó a tomar una serie de decisiones
que le costaron muy caro, de hecho él mismo
afirma que esta película le hacía sentir mal,
ya que solo la rodó por cuestiones financieras,
como algunas posteriores tipo “Orquídea
salvaje” Poco después tomaría una decisión
traumática en su carrera, retomando su afición
juvenil por el boxeo y lanzándose de nuevo al
ring de forma pseudo profesional; recordemos
aquel grotesco combate entre Rourke y el Potro
de Vallecas patrocinado por la pantalla amiga.
También hay que destacar los enfrentamientos
continuos entre Rourke y el director Simon
Wincer. De hecho, el actor afirma que muchos
de los diálogos tuvieron que ser improvisados
y que Don Johnson fue el que terminó casi
dirigiendo la película; por cierto, entre Rourke
y Johnson se forjó una gran amistad. Otro
dato interesante es que inicialmente el papel
de Rourke lo iba a interpretar Bruce Willis,
pero el amigo Bruce estaba liado terminando
el rodaje de la segunda parte de “Jungla de
cristal” y otros proyectos como “El ultimo boy
scout” y “El gran halcón”. Un aspecto reseñable
que vemos justo al iniciar el film es que nos
aclaran que la película ni está patrocinada
por ninguna marca ni intentan hacer ningún
tipo de publicidad y es que además de Harley
Davidson y Marlboro tenemos otros personajes
llamados Virgina Slim (tabaco), Ol Grandad o
Jack Daniels.
Nominada en 1991 (aunque la historia nos
sitúa en 1996) como peor película del año
por los Stinkers Bad Movies Awards, tuvo un
presupuesto de 23 millones de dólares con
una recaudación solo en los Estados Unidos
de 7’5 millones, suponiendo un fracaso gordo,
aunque siempre estaba el mercado del vídeo
para compensar algo.
Aparte de los dos protagonistas teníamos
caras conocidas como la siempre sugerente,
al menos para mí, Chelsea Field, Daniel
Baldwin, Tia Carrere o el luchador Big
John Studd, quien falleció poco después. A
destacar también la presencia de la guapa
modelo y cantante Vanessa Williams, quien
además canta un par de temas en la cinta. Sin
olvidar al villano de turno interpretado por Tom
Sizemore, otro actor que trituró su carrera
debido a adicciones y maltratos varios. Y
como no a reseñar una banda sonora rockera
acorde con la historia y la época, con gente
como los Screaming Jets, Peter Frampton,
Kentucky Heads, L.A. Guns o Blackeyed
Susan, sin olvidar ese épico inicio del film
sonando el para mi glorioso “Wanted dead or
alive” de Bon Jovi.
En definitiva, otra cinta de acción de aquella
gloriosa etapa de finales de los 80 y primeros
de los 90, que los cinéfagos como yo
devoramos sin pedir nada a cambio.
Palabra del Ninja de Cumbres Verdes.
Rock Bottom Magazine 35