NOVIEMBRE 2021 (1)

1.Agua mineral o Alcalina
Uno de los síntomas de la ansiedad es tener la boca
seca. Sólo con cuidar nuestra hidratación bebiendo
agua poco a poco conseguimos regular esa sensación
de agobio. La correcta hidratación es muy importante
para nuestro estado de ánimo porque cuando no
estamos correctamente hidratados, aumenta la
concentración de una hormona llamada cortisol en la
sangre, la cual es precisamente la responsable del
estrés. Por todo ello, el mejor consejo es que calmes tu
sed con agua.
Desgraciadamente, en la actualidad, el agua natural
que consumimos no es suficiente, ya que ésta ha
pasado por procesos de filtración, en los cuales, pierde
la mayor parte de sus minerales, como el magnesio,
que se ha descubierto, que reduce el estrés y la
ansiedad al estimular los receptores GABA del cerebro.
El GABA (ácido gamma-aminobutírico) es un
neurotransmisor que actúa como relajante de la
actividad cerebral. Si este compuesto tiene una
actividad baja, el cerebro queda como suspendido en
una “hiperactividad” constante. Cuando el GABA no
actúa como debe, aumenta nuestra preocupación,
tenemos pensamientos obsesivos, nos despertamos de
pronto en medio de la noche con el corazón acelerado
y, poco a poco, caemos en la desesperante espiral de la
ansiedad… procesos muy desgastantes que el
magnesio puede regular. Además, el magnesio reduce
la liberación de las hormonas del estrés y actúa como
neuroprotector evitando que llegue hasta el cerebro.
Por eso ¡hidrátate bien!
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