01.09.2022 Views

01.09-15.09_compressed

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

ENTRE TÚ Y YO<br />

40<br />

La RECONCIALIACIÓN<br />

Aun con las mejores intenciones y<br />

con todo el amor (y habilidades<br />

de relación) del mundo, a veces<br />

hacemos daños a las personas<br />

que más amamos.<br />

Es inevitable. Pero comprender a<br />

quien nos agravia, o que nos<br />

comprendan, no nos libra de la<br />

responsabilidad de nuestras<br />

acciones.<br />

Siempre podemos hacer algo<br />

para conseguir una<br />

reconciliación sana, sincera y lo<br />

más duradera posible. Tres pasos<br />

hacía la paz El primer paso es ser<br />

consciente, prestar atención a lo<br />

que haces, dices e incluso piensas<br />

respecto a tu pareja.<br />

El mero hecho de que te des<br />

cuenta de cuándo le has hecho<br />

daño es importante, porque<br />

significa que la tienes en cuenta,<br />

que sigues conectado con ella,<br />

que has percibido su dolor.<br />

A partir de ahí, puedes ayudar a<br />

sanar sus heridas (al menos, tu<br />

parte de responsabilidad en su<br />

dolor, ya que siempre hay otra<br />

parte de interpretación, historia<br />

previa y superación que sólo está<br />

en las manos de la otra persona).<br />

¿Cómo? Con un sencillo programa<br />

que se denomina «las tres R»:<br />

reconocimiento, remordimiento<br />

y reparación.<br />

1. Reconoce tu error: Decir «lo<br />

siento» no es un mero<br />

formulismo, sino que encierra un<br />

sentimiento sincero de conexión<br />

y empatia («he sentido tu dolor y<br />

quisiera repararlo, si pudiera»).<br />

Si tu pareja te ha hecho saber que<br />

alguna actitud tuya le ha<br />

molestado, no caigas en la<br />

tentación de justificarte, ni de<br />

buscar excusas, ni muchísimo<br />

menos de negar sus sentimientos<br />

o catalogarlos de «tontería».<br />

Lo importante es lo que ella está<br />

sintiendo: discúlpate por lo que<br />

tú hayas hecho para detonar ese<br />

dolor.<br />

Más tarde podréis dedicaros más<br />

fríamente a analizar tus motivos<br />

o los suyos, a «defender tu<br />

inocencia», si es lo que quieres.<br />

2. Siente el dolor compartido: El<br />

reconocimiento del error sin<br />

remordimiento es mero<br />

formulismo. Tu sentimiento de<br />

culpa no tiene por qué ser<br />

negativo, todo lo contrario:<br />

indica solidaridad por haber<br />

ofendido a la persona que amas.<br />

Hay reconocimiento en ello, y un<br />

deseo de no haberlo hecho que,<br />

mirando hacia el futuro, hace<br />

que te propongas evitar que<br />

vuelva a ocurrir. Cuando tu<br />

pareja escucha tus disculpas y<br />

detecta ese pesar, siente que sus<br />

heridas empiezan a cicatrizar<br />

aceleradamente y vuelve a<br />

confiar en ti.<br />

3. Solventa el daño causado: El<br />

dolor del remordimiento te<br />

emplaza a reparar tus errores.<br />

Sin duda, no podrás volver atrás<br />

en el tiempo y deshacer lo que<br />

has hecho, pero quizás puedas<br />

corregirlo de alguna manera. Si<br />

es así, hazlo. Si no, cambia el<br />

chip para que tu actitud sea<br />

diferente cuando surja una<br />

situación semejante.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!