03.09.2022 Views

crónicas gc. sept-oct 2022

  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

v<br />

MUNICIPIOS<br />

& TEROR<br />

Domingo J. Navarro, en sus “Recuerdos<br />

de un noventón”, a finales del siglo<br />

XIX destacaba “…la esmerada solemnidad<br />

del culto dentro del precioso y alegre<br />

templo…” de Ntra. Sra. del Pino en<br />

Teror, una fiesta que “…debía su fama<br />

a la enorme concurrencia de los pueblos<br />

atraídos por la muy arraigada<br />

devoción a la milagrosa imagen<br />

de la Virgen…”. Y no se equivocaba,<br />

pues si en los últimos<br />

años hemos recalcado que Teror,<br />

en los días del Pino, es el<br />

“corazón palpitante de la Gran<br />

Canaria”, ya Santiago Cazorla<br />

e Ignacio Quintana, en su libro<br />

“La Virgen del Pino en la historia<br />

de Gran Canaria” (1971),<br />

ya dejaban constancia de Teror<br />

como verdadera “…capital de<br />

la marianidad de Gran Canaria,<br />

que nadie le disputa, ciertamente,<br />

y que tiene ganada como una<br />

primacía. A la sombra del Pino sombroso<br />

y oloroso se alzó la primera manifestación<br />

cristiana de nuestro pueblo. Era<br />

cuando las gentes corrían por ver a la<br />

Madre de Dios arborescente, nidificada<br />

sobre el triángulo de los dragos de la<br />

tradición…”, al tiempo que recordaban<br />

que “…son también los poetas y escritores<br />

y periodistas, oradores e historiadores<br />

los que constantemente tratan de<br />

Teror que es hoy, con su indeclinable<br />

nomenclatura de capital espiritual de<br />

la Isla, fecunda matriz de romerías y<br />

peregrinaciones, venero abundante de<br />

la musa folclórica, anchurosa paleta del<br />

más variado y renovado paisaje…”<br />

Todo ello hace recordar cómo desde<br />

siempre -al menos en Vegueta así se<br />

entendía y se aceptaba- se reconocía<br />

que Teror en los “Días del Pino” era el<br />

centro espiritual de la isla, que en esos<br />

días el Templo de la Virgen era sede<br />

de la Catedral, pues allí concurrían el<br />

Sr. Obispo y el Cabildo catedralicio en<br />

pleno. En una mirada, quizá un tanto<br />

romántica, pero no por ello menos certera,<br />

podría entenderse el centro terorense<br />

casi como el centro veguetero, en<br />

especial el entorno de la Plaza Mayor de<br />

Santa Ana, con los edificios de los poderes<br />

espirituales y terrenales (Catedral,<br />

Casa Palacio Episcopal, Casas Consistoriales,<br />

Casa Regental, mansiones de<br />

autoridades y familias principales), que<br />

podemos entender reflejado esplendorosamente<br />

por unos días en la propia Basílica<br />

y la Plaza de Ntra. Sra. del Pino, el<br />

Palacio Episcopal, la Alameda, la Casa<br />

Consistorial, las Casa de los Patrones<br />

de la Virgen y las casas solariegas de<br />

aquellas mismas familias que vivían en<br />

el centro de Vegueta. Quizás algunas de<br />

aquellas tres cuya expedición a Teror<br />

para unas Fiestas del Pino siglos atrás<br />

rememoró Domingo J. Navarro; viaje<br />

duro y difícil entonces, a lomo de todos<br />

los burros que, con muchos días de antelación,<br />

habían podido comprometer,<br />

y cuyas “…damas lucieron en la iglesia<br />

sus esplendidos vestidos, sus joyas, sus<br />

artísticos peinados, su elegante calzado<br />

y sus preciosos abanicos; que tuvieron<br />

opíparas comidas; que la casa estuvo<br />

siempre llena de obsequiosos visitantes<br />

y que los ocho días de residencia en Teror<br />

los emplearon en deliciosos paseos,<br />

meriendas en sitios amenos y bailes<br />

interminables…”. Representación, reedición,<br />

reiteración, llámesele como se<br />

quiera, de solemnidades, ceremonias,<br />

hábitos y costumbres vegueteras en<br />

pleno Teror.<br />

Quizá uno de los símbolos claros,<br />

diría hasta totémico, de esa conexión<br />

entre estos dos centros históricos principales<br />

de la Isla, sea la denominada<br />

“torre amarilla”, esa atalaya que es “…<br />

un monumento vivo y emocionado de<br />

la fe mariana de Gran Canaria y una<br />

muestra de la influencia manuelina<br />

portuguesa en el arte canario…”, una<br />

torre-campanario levantada en 1708<br />

con la aportación del pueblo de Teror<br />

y la ayuda del propio Cabildo Catedral,<br />

LA CATEDRAL DE<br />

TEROR<br />

Y LOS DÍAS DEL<br />

PINO<br />

que sobrevivió acertadamente a la segunda<br />

iglesia, que siempre se ha tenido<br />

como réplica de las antiguas torres de<br />

la catedral, la “torre de caracoles”, pues<br />

quizá se consideró que templo de tanta<br />

consideración y trascendencia mariana<br />

SEP-OCT <strong>2022</strong><br />

5<br />

y espiritual debía tener al menos una<br />

torre como la de la catedral.<br />

Y en ese entorno de la Iglesia del Pino<br />

llama la atención la existencia de un<br />

“Palacio Episcopal”, “…construido en<br />

los mismos años que la Basílica, entre<br />

1760 y 1767, bajo la dirección de Antonio<br />

de la Rocha, aprovechando<br />

los materiales sobrantes de la<br />

fábrica de la Basílica…”, que,<br />

aunque hoy está cedido para<br />

centro socio-cultural, durante<br />

siglos fue residencia de los señores<br />

obispos en sus estancias<br />

terorenses, y en cuya fachada<br />

llama la atención el escudo del<br />

obispo Joaquín Lluch y Garriga,<br />

colocado sobre la puerta<br />

principal en un frontón curvilíneo.<br />

Ante el mismo, a modo<br />

de plaza principal, elegante y<br />

siempre concurrida, la Alameda,<br />

o Plaza de Pio XII, proyectada a mitad<br />

del siglo XIX, que, en la actualidad,<br />

tras su remodelación del año 1981, es<br />

uno de los lugares más frecuentados por<br />

el vecindario y por los visitantes, y en<br />

cuyo espacio se celebran todo tipo de actos<br />

culturales, recreativos y festivos. Un<br />

espacio y una diversidad de celebraciones<br />

que rememoran como también en la<br />

Plaza de Santa Ana, ante la Catedral y<br />

el Palacio Episcopal, por el Corpus, por<br />

Santa Ana y por otros acontecimientos<br />

y efemérides señaladas, se celebraron<br />

muchos actos solemnes y festivos no<br />

faltando en los siglos XVI a XVIII los<br />

consabidos “juegos de toros bravos”,<br />

algo que también se llegó a dar en Teror,<br />

pues “…los libros de fábrica de la<br />

parroquia, recogen como en el año 1647,<br />

se pagaron 3 reales a dos toreros que<br />

lidiaron los toros traídos para la ocasión.<br />

Dichas corridas formaban parte<br />

del programa de actos de las fiestas en<br />

honor a la Virgen del Pino, y se realizaban<br />

en la plaza del lugar, habilitando<br />

un coso provisional, con barras de madera<br />

o talanqueras…”, y lo recuerdan<br />

las páginas digitales municipales en la<br />

actualidad.<br />

Así, cada año, cuando llegan los “Días<br />

del Pino” son muchos los recuerdos que<br />

llevan a considerar la honda relación<br />

que siempre aunó a la Catedral de Canarias<br />

y a Nuestra Señora del Pino, que<br />

ha tenido siempre en ella su morada<br />

principal en todas las ocasiones en las<br />

que, a lo largo de los siglos, bajó a la<br />

capital grancanaria por muy diversos<br />

motivos. Y para muchas personas, quizá<br />

antes de salir hacia Teror, o por no poder<br />

subir en esa ocasión, es costumbre<br />

visitar en la Capilla de San Fernando el<br />

magnífico cuadro de Ntra. Sra. del Pino,<br />

obra del afamado pintor tinerfeño José<br />

Rodríguez de la Oliva, que fue allí colocado<br />

en el año 1775 gracias a la donación<br />

del mismo que hizo el canónigo Maestrescuela<br />

Fernando Monteverde. Teror<br />

es la Catedral en los días del Pino, y la<br />

Catedral es santo y seña de esta honda<br />

devoción mariana de la Gran Canaria<br />

que siglo tras siglo pilota Teror con pulso<br />

firme y leal. apple<br />

Juan José Laforet<br />

Cronista Oficial de Gran Canaria

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!