Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
REPORTAJE<br />
& TELEVISIÓN<br />
DIC 2023 - ENE <strong>2024</strong><br />
77<br />
Como es sabido, el tema OVNI<br />
<strong>en</strong> Canarias goza de una destacada<br />
popularidad, fruto de una<br />
rica casuística acumulada principalm<strong>en</strong>te<br />
<strong>en</strong> los últimos cincu<strong>en</strong>ta<br />
años. Hablamos de c<strong>en</strong>t<strong>en</strong>ares<br />
de casos conocidos, que<br />
posiblem<strong>en</strong>te rondan el medio<br />
millar y que <strong>en</strong> su mayor parte<br />
se compon<strong>en</strong> de observaciones<br />
lejanas, principalm<strong>en</strong>te de luces<br />
que mostraron ante los testigos<br />
un comportami<strong>en</strong>to que<br />
no dudaron <strong>en</strong> describir como<br />
anómalo. La ufología canaria<br />
también contempla casos de<br />
mayor proximidad física donde<br />
lo observado es un objeto con<br />
una forma bi<strong>en</strong> definida por los<br />
testigos , -l<strong>en</strong>ticular, triangular,<br />
ovalada, cilíndrica, circular e<br />
incluso cuadrada- “aparatos”<br />
que a veces han llegado a ser<br />
observados a escasa distancia.<br />
Finalm<strong>en</strong>te, y junto a otras<br />
manifestaciones anómalas que<br />
han sido <strong>en</strong>casilladas d<strong>en</strong>tro del<br />
tema OVNI, existe un puñado de<br />
casos especialm<strong>en</strong>te llamativos,<br />
pues incluye la pres<strong>en</strong>cia de humanoides<br />
vinculados al objeto<br />
o a las luces observadas. ¿Seres<br />
extraterrestres por Canarias?<br />
Yo no me atrevería a def<strong>en</strong>der<br />
a capa y espada esa explicación,<br />
pero desde luego, no parec<strong>en</strong><br />
responder a nuestra realidad.<br />
GIGANTES EN GÁLDAR, GUÍA Y<br />
LOS SILOS<br />
El caso OVNI canario más<br />
célebre <strong>en</strong> el que se informó de<br />
la pres<strong>en</strong>cia de tripulantes es,<br />
lejos de cualquier discusión, el<br />
de los Gigantes de Gáldar, ocurrido<br />
el 22 de junio de 1976. Se<br />
ha escrito muchísimo sobre este<br />
episodio, a favor y <strong>en</strong> contra de<br />
la literalidad de lo que algunos<br />
testigos declararon haber observado<br />
aquella noche, motivo por<br />
el que no nos ext<strong>en</strong>deremos. De<br />
hecho, al lector interesado lo<br />
remitimos a la web del Ejército<br />
del Aire, que <strong>en</strong> su mom<strong>en</strong>to investigó<br />
el caso y cuyo expedi<strong>en</strong>te<br />
está disponible online. Simplem<strong>en</strong>te<br />
recordaremos que el<br />
mé<strong>dic</strong>o Francisco Julio Padrón,<br />
secundado con mayor o m<strong>en</strong>or<br />
detalle por las dos personas que<br />
le acompañaban aquella noche,<br />
describió la pres<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la zona<br />
de Piso Firme de dos figuras<br />
humanoides d<strong>en</strong>tro de una estructura<br />
esférica transpar<strong>en</strong>te,<br />
situadas una fr<strong>en</strong>te a la otra,<br />
manipulando lo que parecían<br />
ser unas consolas. Llevaban una<br />
especie de mono rojo muy ajustado<br />
y estimó que podían medir<br />
unos 3 metros de alto, relato que<br />
sostuvo hasta el final de sus días<br />
a pesar de los cuestionami<strong>en</strong>tos<br />
a los que se vio sometido y a las<br />
am<strong>en</strong>azas militares que aseguró<br />
recibir.<br />
17 años antes, hacia 1959, una<br />
niña de 14 años y su tía abuela<br />
habían observado algo muy<br />
extraño y con cierta semejanza.<br />
Ocurrió <strong>en</strong> el vecino pueblo<br />
de Guía, <strong>en</strong> Montaña Alta,<br />
una noche de finales de agosto<br />
o principios de septiembre. A<br />
cinco metros de distancia, y tras<br />
observar un resplandor, ambas<br />
contemplaron atónitas una esfera<br />
luminosa traslúcida, con<br />
un humanoide de color rojo <strong>en</strong><br />
su interior, flotando inmóvil y<br />
de unos dos metros de altura.<br />
Corrieron hacia la casa. La adulta<br />
p<strong>en</strong>só <strong>en</strong> un alma <strong>en</strong> p<strong>en</strong>a y<br />
rezó cuanto supo, mi<strong>en</strong>tras la<br />
muchacha miraba desde la casa<br />
el extraño f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o hasta que<br />
desapareció del lugar.<br />
Un tercer caso OVNI con humanoides<br />
de gran talla ocurrió<br />
hacia 1972 <strong>en</strong> Los Silos, concretam<strong>en</strong>te<br />
<strong>en</strong> la playa de La Caleta.<br />
El testigo, Manuel, contaba<br />
unos 14 años y tras observar una<br />
<strong>en</strong>orme luminosidad, un haz de<br />
luz que emitió un llamativo fogonazo<br />
<strong>en</strong> una zona <strong>en</strong> la que<br />
debía gobernar la p<strong>en</strong>umbra,<br />
se tuvo que <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tar a lo inaudito.<br />
La int<strong>en</strong>sidad de la luz<br />
bajó y <strong>en</strong>tonces vio un objeto<br />
l<strong>en</strong>ticular, de color mercurio, a<br />
unos 25 metros de altura sobre<br />
la línea de playa, que desc<strong>en</strong>día<br />
l<strong>en</strong>tam<strong>en</strong>te. Al llegar al suelo<br />
se abrió una puerta que parecía<br />
formar parte del fuselaje y aparec<strong>en</strong><br />
tres figuras, con un traje<br />
plateado ajustado, de al m<strong>en</strong>os<br />
dos metros de altura, pronunciadam<strong>en</strong>te<br />
delgados. Los humanoides<br />
deambularon por la<br />
playa de callados, de manera<br />
torpe, como si estuvieran buscando<br />
algo. El testigo cambió de<br />
ubicación y avisó a sus hermanos,<br />
con los que contempló parte<br />
del f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o, incluido su des<strong>en</strong>lace:<br />
las tres figuras regresaron<br />
al interior del aparato, que se<br />
elevó l<strong>en</strong>tam<strong>en</strong>te más o m<strong>en</strong>os<br />
a la altura inicial, para después<br />
desaparecer.<br />
PEQUEÑOS, PELUDOS,<br />
VERDES…<br />
La tipología de estos humanoides<br />
<strong>en</strong> Canarias, sigui<strong>en</strong>do<br />
la pauta de la ufología internacional,<br />
es muy variada. Veamos<br />
más casos. Hacia las dos de la<br />
madrugada de un viernes de<br />
1978, a la altura de El Médano,<br />
<strong>en</strong> T<strong>en</strong>erife, una jov<strong>en</strong> contempla<br />
desde el interior de un vehículo<br />
<strong>en</strong> marcha una pot<strong>en</strong>te<br />
luz naranja, muy extraña. Está<br />
localizada a nivel de suelo junto<br />
a una pronunciada curva,<br />
dando la impresión de que tras<br />
la misma existe un objeto. Lo<br />
llamativo es que delante del<br />
ENCUENTROS CON<br />
HUMANOIDES EN<br />
CANARIAS<br />
“objeto” hay dos humanoides<br />
pequeños, del tamaño de niños,<br />
que apar<strong>en</strong>tan estar recogi<strong>en</strong>do<br />
cosa del suelo y depositándolas<br />
<strong>en</strong> recipi<strong>en</strong>tes. Mi<strong>en</strong>tras, a poca<br />
distancia, otro humanoide alto,<br />
delgado y esbelto, con unos brazos<br />
algo largos para lo esperable<br />
<strong>en</strong> su altura, parece supervisar<br />
<strong>dic</strong>ha actividad. El coche siguió<br />
su trayecto, sin que ninguno de<br />
los demás ocupantes pronunciara<br />
palabra alguna.<br />
Doce años después, el 4 de julio<br />
de 1990, una pareja de campistas<br />
y dos trabajadores de<br />
los invernaderos de Atogo, se<br />
toparon con un objeto luminoso<br />
esférico a m<strong>en</strong>os de 20 metros<br />
de distancia, con v<strong>en</strong>tanillas<br />
ovaladas y una franja roja tipo<br />
neón cruzando el aparato justo<br />
por debajo de esas v<strong>en</strong>tanas. Lo<br />
llamativo, tal y como docum<strong>en</strong>tó<br />
<strong>en</strong> su mom<strong>en</strong>to Paco Padrón,<br />
es que uno de los testigos vería,<br />
asociado al “cacharro”, nada<br />
m<strong>en</strong>os que a dos criaturas imposibles.<br />
Eran pequeñas y negras,<br />
de medio metro de estatura<br />
y ojos brillantes, con el cuerpo<br />
cubierto de pelo. El testigo las<br />
descubrió con su linterna, a m<strong>en</strong>os<br />
de tres metros de distancia,<br />
desapareci<strong>en</strong>do de su vista tras<br />
unos segundos.<br />
Un caso extraño, sin duda,<br />
pero quizá no tan raro como<br />
el sigui<strong>en</strong>te. Santi t<strong>en</strong>ía unos 9<br />
años o 10 años cuando, jugando<br />
<strong>en</strong> unas cuevas costeras del litoral<br />
Adeje, fue testigo de algo<br />
muy raro, rozando lo bizarro.<br />
Siempre lo asoció al f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o<br />
OVNI, aunque no hay luces ni<br />
aparatos <strong>en</strong> el episodio, pero<br />
el aspecto de las criaturas, por<br />
influ<strong>en</strong>cia cultural, le llevó<br />
a vincularlo a ese f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o.<br />
Ocurrió una tarde de verano<br />
de finales de la década de los<br />
nov<strong>en</strong>ta, hacia las 20:00 H. La<br />
esc<strong>en</strong>a que contempló fue la de<br />
una pareja. Una de las figuras,<br />
que interpretó como fem<strong>en</strong>ina,<br />
aparecía t<strong>en</strong>dida <strong>en</strong> el interior<br />
de la cueva, como si estuviera<br />
herida, tocándose la barriga. La<br />
otra andaba hacia el exterior,<br />
como queri<strong>en</strong>do salir al paso del<br />
testigo, que se detuvo y terminó<br />
por marcharse despavorido.<br />
¿El motivo? Pues que eran dos<br />
cuerpos pequeños de m<strong>en</strong>os de<br />
medio metro de altura, de color<br />
verde oscuro, con int<strong>en</strong>sos ojos<br />
negros sin pupilas y manos con<br />
tres dedos.<br />
ASIGNATURA PENDIENTE<br />
A los reseñados se pued<strong>en</strong><br />
añadir algunos casos más,<br />
aunque la falta de espacio nos<br />
impide <strong>en</strong>trar <strong>en</strong> detalle. Es lo<br />
que ocurre con la experi<strong>en</strong>cia<br />
de Judith, una madre de familia<br />
que, una mañana del verano<br />
de 1990, vivió <strong>en</strong> Telde un<br />
episodio de teletransportación<br />
y tiempo perdido. A través de<br />
sueños, recuerdos espontáneos<br />
y regresiones hipnóticas, se reconstruye<br />
una asombrosa experi<strong>en</strong>cia<br />
<strong>en</strong> la que la protagonista<br />
también contempla humanoides<br />
<strong>en</strong> el interior de una gran sala<br />
o hangar. Vio algunos de baja<br />
estatura y grandes cráneos, y<br />
uno más alto y extremadam<strong>en</strong>te<br />
delgado, tipologías que <strong>en</strong>cajan<br />
<strong>en</strong> los llamados “grises” por la<br />
ufología. Finalm<strong>en</strong>te se hace necesario<br />
m<strong>en</strong>cionar los humanoides<br />
vistos por Paco Padrón <strong>en</strong> su<br />
experi<strong>en</strong>cia de abducción <strong>en</strong> La<br />
Tejita, el 9 de junio de 1975. Bajo<br />
hipnosis describió como unos<br />
humanoides <strong>en</strong>fundados <strong>en</strong> un<br />
traje blanco, y dotados de un<br />
casco opaco con una especie de<br />
“coma” <strong>en</strong> un lateral, lo sometieron<br />
a una especie de análisis<br />
mé<strong>dic</strong>o. Parecían astronautas,<br />
máxime cuando vio como de<br />
la parte trasera de los cascos<br />
salían tubos que se internaban<br />
<strong>en</strong> la espalda. Sin duda, este<br />
es el aspecto más perturbador<br />
del f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o OVNI, una<br />
asignatura p<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te que<br />
intuimos, cu<strong>en</strong>ta con<br />
muchos más casos que<br />
los que han trasc<strong>en</strong>dido<br />
públicam<strong>en</strong>te. apple<br />
Jose Gregorio<br />
González