03.03.2013 Views

Descargar pdf - ¡Cargad!

Descargar pdf - ¡Cargad!

Descargar pdf - ¡Cargad!

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Así que los dioses del caos, ante<br />

tal volatibilidad laboral (cuando en vez<br />

de explotar a tus empleados estos se<br />

hacen explotar unos a otros, ese termino<br />

adquiere un nuevo significado)<br />

necesitaban una fuente extra de<br />

adquisición de personal. Así que de<br />

repente en el Viejo Mundo, y sobretodo<br />

en el Imperio que se da mucho a este<br />

tipo de prácticas, empezaron a aparecer<br />

elegidos del caos a porrillo. Pero a<br />

montones. Y si pasaban el test de<br />

aptitud (que era llegar hasta el portal de<br />

norte), entonces eran convertidos de<br />

paladines del caos y se unían a la<br />

plantilla caótica.<br />

Esto tuvo ciertos problemas<br />

entre los bárbaros del caos que<br />

clamaban por la promoción interna, pero<br />

las voces disonantes fueron<br />

rápidamente silenciadas (con la<br />

garganta cortada no puedes gritar<br />

mucho) y así se quedaron las cosas.<br />

Además tenía sus ventajas: se<br />

aprendían idiomas. De un día para otro<br />

los barbaros del caos habían aprendido<br />

a insultar, amenazar y maldecir en<br />

imperial, bretoniano, tileano, toletano,<br />

enano, élfico y unas cuantas lenguas<br />

muertas más que guardaban en una<br />

bolsa para lanzárselas al enemigo (los<br />

guerreros del caos nunca han<br />

destacado por su manejo de las<br />

metáforas, cosa norma cuando hablar<br />

de moverse como el rayo, correr cómo<br />

el viento o duro cómo una piedra no son<br />

metáforas sino regalos del caos reales).<br />

Llega un momento en el que los<br />

paladines del caos acumulan más y más<br />

respeto, autoridad y puntos de<br />

experiencia. Lo curioso de este tema es<br />

que normalmente ni se les pasaría por la<br />

cabeza intentar hacerse con el control<br />

de la horda de su señor. ¿Para que? ¡Si<br />

es un dolor de cabeza (o cabezas)<br />

continuo! Pero acaba pasando. Ya sea<br />

por diferencias sobre la naturaleza del<br />

liderazgo del Señor del Caos o (lo más<br />

común) por que los dioses le envían<br />

sueños divinos en los que el paladín<br />

aparece como señor de la horda (justo<br />

después de que los dioses del caos<br />

hayan hecho zapping y no encuentren<br />

nada decente con lo que comer<br />

palomitas), los paladines del caos<br />

empiezan a pensar que ellos deberían<br />

ser los que lideraran la horda. Así que<br />

empiezan a maquinar, intrigar y planear<br />

el derrocamiento del Señor del Caos<br />

para nombrarse a sí mismos líderes de<br />

la horda. Esto tiene un problema que<br />

muchos ya se habrán olido (y es lo que<br />

lo hace interesante cómo complemento<br />

a las palomitas) y es que no hay que<br />

contar con derrocar al Señor del Caos<br />

(que por supuesto fue en su día paladín<br />

y se las sabe todas por que al fin y al<br />

cabo derrocó al Señor del Caos en su<br />

día) sino también con el resto de<br />

paladines que también quieren ser<br />

Señor del Caos. Y así empieza lo más<br />

parecido a un reality show decente que<br />

se pueda encontrar en el Viejo Mundo.<br />

Bueno. Eso y el circo de Gladiadores<br />

Druchii que montan los sábados por la<br />

noche. Y también está la Dwarf<br />

Wrestring Federation de los viernes...<br />

pero claro eso ya no son Realitys.<br />

La cuestión es que los paladines<br />

empiezan a tener un aire paranoide muy<br />

irritante para el resto de la horda.<br />

Comienzan a tener ciertas<br />

peculiaridades, cómo que permitir gente<br />

armada en las sombras de la tienda (por<br />

que un asesino los intentó matar antes<br />

de ayer) o a vivir en la oscuridad<br />

completa (por que el último rayo de luz<br />

activó una mina-disforme). Esto para el<br />

resto de la horda, es más una molestia<br />

que otra cosa, por que al fin y al cabo<br />

nada de todo eso va por ellos. Cada<br />

guerrero cree que sería un buen paladín<br />

y que lo haría mejor que su jefe. Pero<br />

esto lejos de ser una manipulación de<br />

los dioses del caos es un mal común a<br />

todos los mortales.<br />

De vez en cuando un Señor del<br />

Caos muere, ya sea en combate contra<br />

sus enemigos, o en combate contra sus<br />

paladines. La cuestión es que muere, su<br />

alma se reúne con su dios del caos y<br />

con un poco de suerte tras varios<br />

cientos de milenios se convierte en<br />

príncipe demonio. Tras su muerte y un<br />

17<br />

periodo de luto decretado en dos milmillonésimas<br />

de segundo, se nombra un<br />

nuevo Señor del Caos. Este<br />

nombramiento normalmente pasa por el<br />

ritual de haber matado al resto de<br />

paladines en combate, que al fin y al<br />

cabo creen que se merecen el puesto<br />

más que ningún otro.<br />

Una vez “nombrado” el nuevo<br />

Señor de la Horda se pasa por una<br />

reorganización de la jerarquía de la<br />

horda (se matan a todos los seguidores<br />

de los anteriores paladines y se<br />

sustituyen por guerreros leales al nuevo<br />

señor de la Horda). Pero el Señor de la<br />

horda empieza a tener ciertos síntomas<br />

de esquizofrenia paranoide. Si el<br />

guerrero del caos no se quita el casco<br />

así lo maten, y los paladines duermen<br />

con la armadura puesta, el Señor de la<br />

Horda directamente no duerme.<br />

Tampoco es que lo necesite con la<br />

cantidad de disformidad que fuma al día,<br />

pero lo hace para que sus paladines no<br />

lo pillen desprevenido. También<br />

empieza a mascullar cosas sin sentido<br />

de vez en cuando, aunque en realidad<br />

están manteniendo conversaciones con<br />

seres que nadie más ve ni oye y que le<br />

aconsejan en todo momento y lugar. Lo<br />

triste del tema es que estos seres son<br />

tomados como delirios o visiones, que<br />

son aceptadas por que quedan muy<br />

carismáticas en un líder, pero que nadie<br />

se cree. Pero claro, esos seres son<br />

reales y son enviados por los dioses del<br />

caos para orientar al Señor de la Horda<br />

y que esta edición del “Juego de la<br />

ascensión” sea mucho más interesante.<br />

Esta actitud, por supuesto vista cómo un<br />

sin sentido, hace que el resto de<br />

paladines crea... bueno, que todo iría<br />

mejor si ellos fueran los señores de la<br />

horda.<br />

En fin. Cómo podéis ver ser un<br />

guerrero del caos no es ningún chollo, y<br />

los dioses tienen muy bien montada su<br />

parrilla de programación. De ahí que<br />

tengan tantos seguidores y tanta<br />

audiéncia.Hasta otra aciaga noche.<br />

Señor Nehek.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!